La pena de muerte es una forma de castigo que se da en algunas naciones a aquellas
personas que han realizado actos delictivos considerados como graves o imperdonables. Aunque moralmente la vida es un derecho que no debería ser vulnerado a ningún ser viviente, hay circunstancias que son complejas, injustas y reprochables, por el hecho de que algunas personas actúan atentando contra la vida de otra persona y en ocasiones en circunstancias atroces, lo que conlleva a cuestionarse si esa persona que no tenía derecho a atentar contra la integridad de alguien lo hizo, ¿merece que se actúe en contra de su propia integridad? La pena de muerte, más allá de los asuntos morales y religiosos, trae para la sociedad ventajas en la medida en que permite disminuir conductas delictivas a través del miedo, puesto que muchas personas pueden abstenerse de delinquir por temor a ser ejecutados. Otras ventajas importantes, son que se evitaría un gasto público enorme. Hay que considerar que los delitos que responden a la pena de muerte y a la cadena perpetua suelen ser bastante similares. Por ejemplo, cuando un individuo es juzgado como un asesino en serie, las dos opciones más claras son las mencionadas, a no ser que una de ellas o ambas estén prohibidas por la legislación. Desde una perspectiva económica, es mejor aplicar la pena de muerte, ya que mantener toda la vida a una persona asesina, o en todo caso, a varias personas asesinas, es un coste bestial para la administración pública. Por otro lado, existe el temor de la sociedad de que un individuo con un historial de delitos graves, pueda en algún momento obtener legalmente su libertad o fugarse de prisión y volver a los mismos actos de delincuencia, por lo que, en este caso, también se sustenta la pena de muerte como una opción para tranquilidad de la sociedad y en particular, de la familia de las víctimas. Cabe agregar que sería muy interesante que este castigo no fuera necesario aplicarse, que las personas pudieran tomar conciencia y actuar conforme a las leyes y esto no tuviera que suceder, pero de no ser el caso, por desgracia la pena de muerte es algo necesario para luchar dentro de lo posible acerca de delitos funestos e imperdonables.