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Act.

1 Educación para la salud individual y colectiva

RESPONDE LAS SIGUIENTES PREGUNTAS:

¿Qué es la salud individual?


La salud, según la definición que la OMS hace del término, es un estado de completo bienestar
físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades. Por lo que el
concepto de que un individuo saludable es que éste se siente bien y esto pasa por alto una serie de
procesos donde el individuo interactúa con otra gente y el medioambiente.

¿Qué es la salud colectiva?


La Salud Colectiva se consolida como campo científico y ámbito de prácticas innovadoras en salud
y que puede ser comprendida como un conjunto articulado de técnicas, ideologías, políticas y
económicas desarrolladas en el ámbito académico, en las instituciones de salud, en las
organizaciones de la sociedad y en los institutos de investigación que actúan mediante a las
corrientes de pensamiento resultantes de la adhesión o crítica a los diversos proyectos de reforma en
salud. Al igual que la salud colectiva aborda las relaciones económicas y políticas de la sociedad
con repercusiones en la salud de la colectividad y de los individuos, convirtiéndose en una mirada
multidisciplinaria para el análisis de los problemas sanitarios con transversalidad

¿Qué entiendes por educación para la salud?


La Educación para la Salud es un proceso de educación y de participación del individuo, paciente
y/o familiar, con el fin de que adquiera los conocimientos, las actitudes y los hábitos básicos para la
promoción y defensa de la salud individual y colectiva.

¿Qué entiendes por educación para la salud física?


El conocimiento del propio cuerpo, práctica y valoración de la actividad física como elemento
indispensable para preservar la salud. Es una competencia clave para que las personas adquieran
hábitos saludables y mejoren su condición física.

¿Cuál es el campo de acción de la educación física en la salud del individuo?


Desde el área de Educación Física se intenta educar las capacidades motrices de los alumnos. La
enseñanza en esta área implica tanto mejorar las posibilidades de acción de los alumnos, como
propiciar la reflexión sobre la finalidad, sentido y efectos de la acción misma.

¿Qué relación tiene la salud con nuestra formación deportiva?


Los beneficios que le aporta el deporte son: Ayuda a la disminución de la presión arterial. Reduce el
número de coágulos en el interior de las arterias, previniendo infartos y trombosis cerebrales.
Aumenta la circulación en los músculos de todo el cuerpo.

¿Qué acciones puedes proponer para la conservación de la salud física y mental?


Nuestro bienestar se ha convertido en la máxima prioridad de nuestras vidas: en nuestro tiempo
libre, fuera del trabajo y lejos de las ocupaciones, nos gusta llenar nuestro tiempo con hábitos
saludables: salir con amigos, practicar deporte, socializar, participar de actividades culturales…etc.
Pero, ¿cómo conseguir ese bienestar mental y físico que nos permita vivir la vida intensamente cada
día y de forma plena? A menudo nos informamos acerca de nuevas formas de fomentar nuestra
salud física y anímica; sin embargo, es mucha la información disponible, y tal vez no dispongamos
de todo el tiempo que mereceríamos para informarnos acerca de nuestro bienestar. Por ello, a
continuación se presenta una compilación de los 7 mejores consejos para conseguir el bienestar
físico y mental.

1. Romper con el sedentarismo


Suena tópico, sin embargo, nuestra forma de vida es excesivamente sedentaria. La falta de
movimiento físico puede conducirnos, por increíble que parezca, a vivir en una sensación de
estancamiento que podría llevarnos a una depresión (o, sin ir tan lejos, a procrastinar y malgastar
nuestro tiempo libre, haciéndonos sentir que no rendimos ni aprovechamos el tiempo que se nos ha
dado). Una buena forma de romper con este círculo vicioso es salir al exterior. Un gesto tan sencillo
puede suponer un gran cambio a nivel anímico, aparte de poner en movimiento nuestro cuerpo (algo
que siempre produce una sensación de salud que sube nuestro estado anímico). Respirar aire puro,
alejarse de la ciudad, hacer largas caminatas, o sencillamente salir a pasear por la calle una hora al
día. Pasear es uno de los ejercicios más sanos que existen, y quema las mismas calorías que correr,
si caminamos a un paso acelerado. Lo importante es poner nuestro cuerpo en movimiento, así como
desentumecer los músculos y despejar la mente.

2. Probar cosas nuevas


Este punto puede sonar excesivamente amplio, sin embargo, esto es una ventaja: tenemos la
posibilidad de probar cosas nuevas cada día de nuestra vida. Existen muchas actividades culturales
en las diferentes ciudades en las que podemos participar, interactuar con el colectivo y disfrutar de
un ambiente festivo en el que aprender acerca de otras culturas, movimientos culturales de nuestro
propio país o acerca de arte e historia, así como descubrir nuevas formas de entretenimiento o lo
último en nuevas recetas.

3. Hacer deporte
Hacer deporte es la piedra angular del bienestar. Si bien existen formas específicas de mejorar el
bienestar anímico y mental, el deporte no sólo se trata de poner en forma nuestro cuerpo: tiene
grandes beneficios anímicos y mentales. Practicar ejercicio no sólo desentumece nuestro cuerpo
(podemos llegar a sufrir contracturas en las cervicales por causa del sedentarismo de la rutina, que
pueden provocarnos fuertes dolores de cabeza), sino que también lo ejercita, evitando que se atrofie.
Además, desarrollar nuestra musculatura mejora nuestro aspecto físico y la auto-percepción de los
individuos, dándoles mayor confianza en sí mismos. Además de esto, el deporte aporta un momento
de colectividad en la rutina semanal que es muy beneficioso para los individuos: el trabajo y el
disfrute lúdico en equipo fortifican nuestra interacción social de una forma muy positiva. De todas
formas, el ejercicio físico se puede practicar también en solitario (en un gimnasio)o en nuestro
mismo hogar, con rutinas de ejercicio diarias. Recordemos que el ejercicio físico produce
endorfinas, lo cual equivale a sentir felicidad mientras lo realizamos.

4. Experiencias nuevas (deportes extremos)


También existen nuevas modalidades de deporte que pueden aportar un punto de dinamismo a tu
rutina, a la vez que ayudan a descubrir una nueva habilidad en ti. Un ejemplo son las telas aéreas,
muy de moda actualmente (y que se pueden practicar en un centro de deporte o en casa) así como
también el túnel de viento, en el que podemos vivir una simulación de lo que supone practicar
paracaidismo. En esta línea tenemos los deportes de riesgo, que, además del paracaidismo, también
tenemos el puenting o cualquier forma de deporte extremo que saque toda nuestra adrenalina y nos
libere del estrés con nuevas experiencias emocionante e irrepetible.

5. Establecer rutinas
Las rutinas son la base de una vida saludable y satisfactoria. El caos horario no beneficia nuestra
plenitud, todo lo contrario: desestabiliza nuestro cuerpo, su horario para el hambre y acaba
perturbando el ciclo del sueño, pudiendo llegar a provocarnos insomnio (un problema muy serio
actualmente). Un esquema siempre ayuda a pensar de forma ordenada: no se trata sólo de organizar
las tareas diarias, sino de construir en nuestra mente una forma de pensamiento organizada y
ordenada, enfocada hacia una dirección concreta. Los horarios y las rutinas hacen entrar nuestras
vidas en una dinámica que facilita sacar adelante todos nuestros deberes en menor tiempo y de
forma mucho más satisfactoria, evitando el estrés.

6. Cultivar aficiones y tener hábitos


Las aficiones son un reflejo de nuestra personalidad, por lo tanto, explorar nuestras aficiones es una
forma de conocernos a nosotros mismos. Practicar regularmente nuestras aficiones, así como
explorar nuevas, es una forma excelente de comunicarnos a diario con nosotros mismos y recordar
quienes somos, así como un vínculo para estrechar lazos con las demás personas y forjar nuevas
amistades.

7. Alejarnos de malas compañías y consultar nuestras preocupaciones a un especialista


El punto más importante para cultivar nuestra salud anímica y mental. Nuestro cerebro es nuestro
motor, y cuando se sobre carga debemos darle un respiro o pedir ayuda si es necesario. Consultar
nuestras preocupaciones con un especialista (un psicólogo, por ejemplo) es una excelente forma de
preservar nuestra salud anímica y psicológica, como si de una revisión de salud periódica se tratara.
Por otro lado, apartarnos de compañías tóxicas que nos quiten las energías e influyan negativamente
en nuestra vida debemos dejarlas de lado para fortalecer nuestra positividad.

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