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CRITICO UNIV >/1.JLj»

LU*

EN TODO GENERO DE MATERIAS;

PARA DESENGAÑO

DE ERRORES COMUNES;.
D E D I C A D O
3£ R-rao
P- M . F r . J O S E P H D E B A R N U E V C y
<3enerai de la Congregación de San Benito
de Efpaña , Inglaterra, /í.v">.
&c.

E S C R I T O
fOIl EL M.R.dop.M.Fr. BENITO GERÓNIMO FEIJ00±
Maeflro General de la Religión de San Benito y Cathedraíico
y

de Vi/peras de Theologia de la Univerjidaá


de Oviedo.

Ih
TOMO P R I M E R O .
CON LICENCIA,

Ç>I M A D & ¡ P : EQ la Imprenta de LORENZO FRANCISCO MOJADOS;


Año de M . DÇC. XXVI.
, ^éiSiñé&S&é&é&é&ibi&ibSs&p
9 &.

A N. RO
R. Padre
MO

E L M A E S T R O Fr. J O S E P H D E B A R N U E V O ¿
General de la Congregación de San Benito,
de Efpaña , Inglaterra , & c .

.R. M 0
Padre N . R O

A °loria de alper tenido fin tiempo en

¡«g5| ixfá^l^ y ta dicha de lograrle oy por Prelado^


determinan mi atención al ténuijsim
^ obfequio de dedicarle efte Libro, N¿ ex
mi pequefie^cabe haberle mayor : ni en la cel/itud de ani*
mo de /JR¿na, cabe recibir como corto Ion tributo, a quien
T

dh\ e¡limación el amor,y el refpeto. No puedo menos de


¡ifon je arme de el acierto de e/la elección: porque [i los*
Vínculos de Prelado, y Mae/lro téxen la cadena , qu&
blandamente me arraílra a e/la expre/sjon de mi cultó:¿
con no menor fuerca deben inclinar a V. %n\a. al patro-
cinio. Grande le ha mene/ler e/la Obra, por fer ella tan
jK'quma 5 y necef sitándole grande,, no pude bujcarie ma-
yor. Las excelfas. qualidades, qat ilu/lran d V. fynai
fiendo prendas dejaperjona^fe las apropria^para a/ian-
car fobre ellas la protección , mi ejperanca. Un eferito
dirigido a combatir errores comunes .¡pide de derecho por,
padáno ¿ttyi Sabio perfectamente infiruido de "tirillaerfales
noticias, Fero quanto a V, Q^raa. le habilita fu eminente
doctrina para defender fentencias no nalgares; tanto fu
efcogida nobleza le empeña a proteger dictámenes defva-,
luios, O fi no tupiera yo tan comprehendido , que a U
integridad de V. %¿na. ninguna Verdad ofende, fino aque-
llo, que le elogia, quanto pudiera decir -aqui de la llufirif-
Jima Afcendencia de V* tffyna. cuyo generofo Árbol dcf-
collando fus ramas fobre los mus altos capiteles de Soria¿
dexa las ratees efconiidas debaxo de las gloriofas ruinas
de 'Humancia ! 'Pero me fera precifo dexar de trasladar
la Hobilifsima Sangre de V. ^ma. de la memoria d la
prenfa , por no facarfela de el coraron al rofiro. El mif-
mo reparo me ataja al ir a celebrar et conjunto de per*
fecciones morales ¿y políticas > en que confite la nobleza
de el efpiritu. Qualqumarpcmbo que quiera tomar la plu-
ma , ti óptela en la mode/tia de V. %ma, y fus Virtudes
mifmas fon d Vn tiempo incentivo , y cftorVo de los elo-
gios. TSLuefíro Señor guarde, a V. fyna. muchos años,
(De efte fu Monafierk de Sm Martin de Madrid. Agofto
^5.^1726.

de V . R o í a .
pendido Hijo, y Siervo, que S. M . B<

Fr+BmitoFeijoo.
CEN-
'CENSURA DEL Rmo. P. M. Fr. ANTONIO SARMIENTO,
Maefiro General ele fu Religión, Abad que ha fíelo de el hifgne,
y Real Monafterio de San Julián de Samos, Difinidor Mayor,
y General déla Congregación de S.Benito deEfpamJ Inglaterra^
Tbeologo de fu Mageflad en la RealJunta de la Concepción,
y Examinador Synodal del Ar^obifpado
de Toledo , &c.

C
O N fingular atención he vifto el primer Tomo de eT
Tbeatro Critico Univerfal, por remifsion , y mandato
de N. Rmo. P . M . Fr. Jofeph de Barnuevo , dignifsi-
mo General de la Congregación de S. Benito de Ef-
paña , Inglaterra , &c. Su Autor es el M. R- P . M , Fr. Benito
Gerónimo Feijoo y Montenegro , Macftro General de la mifma¡
Congregación , Abad que fue de el Monafterio de San Vicen-
te de Oviedo , Graduado de aquella Univerfidad, Cathedrati-:
co de Santo Thomás, y de Efcriptura, y actualmente de Vifpe-f
ras de Theoiogía , &c.
Defde mi tierna edad fue objeto de mi admiración el Au-:
tor , y fue creciendo la admiración , al paífo que fue creciendo
la edad. Pudiera yo defeonfiar de el alto concepto que fiemprc
hize de fus peregrinas qualidades , atribuyéndole en .parte á
oculto in-fluxo de mi carino (fiendo cierto que muchas vezes los
dictámenes fe forman en la Oficina de los afectos) á no aver ob-
fervado en quantos le trataron el mifmo concepto. A todos les
oi celebrar, como prodigio ( y con razón) el ver , que fobre
las prendas de excelente Theologo,fubtUifsimo Methaphyfico,
confumado Philofofo , admirable Efcripturario , y Orador
eloquenrifsimo, que tantas vezes manifeftb en los públicos
thcatros , apenas ay facultad alguna foraftera á fu baña com-
prehenfion. En todas habita como domefíico, difeurriendo en
todas como peregrino. El que la primera vez le oye hablar eft
qualquiera materia , juzga que á aquella fola dio todo íu eílu-
. dio. En fus mifmas converfaciones familiares , parece que fue»
cefsivamente van hablando muchas librerías; aunque tan al
co.npás de la modeftia, que jamás fe mete en el Pais de la eru-
dición por proprio arbitrio. Nunca refpira efte órgano fonoro,'
fin > á. proporción que mueve los regiíiros, 6 toca las teclas
agetja « u n o . Se alexa tanto de lo jaclanciofo , que paíía mas.
¡allá de lo inodefio: por cuya razón ponen muchos á fu genio la
.racha de encogido. Y no negare yo que en fu circunfpeccion
tiene gran parce fu natural rubor , penfion ordinaria de los fu*-,
blimes ingenios, que fiendo naturaleza , parece virtud. A exi-
teiUiontanprodigioia.de noticias j.unta vn ingenio íutil, qué
nada tiene de quifquillofo: vn juicio folido , fin las afperezas dé
rígido : vna hicundia dulce, fin el menor refabio de afectada.
En fin yo no hallo elogio mas apropriado á efte fugeto , que el
que dio Sidonio Apolinar á otro femejante: Ob omniafoslicita-
tis, natur'caque dona monftrabiíis. ( Sid. Apolin. lib. 3 . Epifl .~¡:)
Sugeto efpectable por todos aquellos dones naturales, que pue-
den conílituir vn eípirituiluftre.
ilafca aquí de el Autor.Quedirede la Obra? Sidonio A p o -
linar , que me dio la difínicion de el Autor , me da en otra parte
la deicripcionde el libro. Habla de vno que avia compuefio fu
amigo Ciaudiano ( no es el P o e t a , fino Claudiano Mamerto,
Autor Catholico ) y exclama afsi : O líber multifariam pallens\
O eloquium non exilis ,fed fubtilis ingenij! Quodnec per fcatu-
rigines hyperbolicas intumefeit, nec per tapinomata deprejfa ex-
tenuatur. Ai hoc vnica fingulari/que doctrina , &" in diverfa-
t

rum rerum ajfertione monftrabiíis , cui morís eji de Jingulis ar~


tibus cam Jingulis artifícibus philafopbari. (ídem lib.^.Epift.^.)
En efta ciaufula hallo dicho , quanto de el Tbeatro Critico
Unluerfal tenia yo que decir. Es efte vn libro , ya por la gene-:
ralidad admirable de fus noticias , yá por la variedad hermo-
fa de fus materias, de muchos modos efpeciofo : O líber muU
tifuriam pollera! El eftilo es noble , caftizo , delicado , igual-,
mente diftante de la baxeza de exprefsiones humildes , que de
la pueril, y ridicula afectación de pompofas vozes fonantes:
Quod nec per fcaturigines hyperbolicas intumefeit, nec per tapi-
nomata deprejfa tenmtur. L o que mas celebro en el eftilo , es
aquel corriente natural, y fin tropiezo , con que fe encuentra
dicho , y dicho con el modo mas hermofo, todo quanto quie-
re. No va á buícar la pluma las frailes; ellas parece que vie-
nen á bufear la pluma. Y no es menos admirable aquella cla-
ridad en explicarfe, con que haze perceptibles , aun de ios mas
ruaos, las materias mas fublimes , y delicadas. L o mas efpí-
nofo de la Philofofia , lomas elevado déla T h e o l o g i a , fin
perder nada déla mageftadpropria, fe proporcionan en fupíu-
ina a l a Inteligencia mas humilde. N o es dudable, que !a clari-
dad en explicar es reflexo precifo de la claridad en concebir, y
que los eípiritus grandes , afsi como fon inteligencias para
penetrar las verdades, fon también Aftros, que para que puedan
penetrarlas los demás , bañan de luz los objetos. Efto es tener
eftilo proprio de ingenios fútiles : Eloquium non exi/is, fea
fubftlis ingenij.
Pero aun retta lo mas admirable de el L i b r o , que ès aquel
Complexo de docìrina à vn tiempo fingular, y vniverfal: Ad hoc
vnicafìngularifque dottrina, & in diverfarum rerum ajfertione
monjìrabilis.Es fingular; porque defviandofe en todas las mate--
ñas de los errores vulgares, camina por fendas ignoradas de el
común de los hombres.Es vniverfal por la multittid de aílump-
tos tan diferentes. Las gentes congregadas en Jerufálem fe ad-
miraban de oír hablar à los Apoftoles en las lenguas de todos
los Reynos. Y o me admiro de oír à vn hombre folo hablar los
idiomas proprios de todas fas facultades :Cui morís ejí de Jtn-
gulis artibus cum fingulis artificibus Philofophari. En eft'a obra
mueftra que la Theologia Dogmatica,y Efcolaftica,la Philofo-
fia antigua, y moderna, la Hiftoria Sagrada, y Profana , la M e -
dicina, la Aitrononiia, la Mufica,.le fon tan familiares,-como í i
folitariamente fe huvieífe dedicada à cada vna de e fias profef-;
fiones; porque aunque-no en todas habla de intento, en los raf-
'gos,que fuelta coníeguro magiftericf,fe ve que goza fob're todas
vn abfoluto dominio.No eferive con mano timida,como el que;
extemporáneamente mendiga las noticias de los libros; fino cor»',
aquella confianca,, de quien bizarramente expende vna breve;
pqrclon'd; fus proprios mentales teforos. Efta eftnpenda vni-¡
verfalidad fe hará mas vifible en los Tomos figuíentes ; pciv
que fegun las noticias, que me ha fiado el Autor de fu batto-
proye&o en la profecucion de el Theatro Critico , no avrà g e -
nero alguno de literatura, donde no entre la mano.
Y ciñendome al oficio de Cenfor, digo , que ette libro es
dignlfsimo de la prenfa , por no contener cofa ,. que difuene de
la armonia de nueftra Santa Fe, y buenas coftumbres;anres bie»
«UJcho que inttruya, y edifique. Ette es mi fentir : Salvo ,.©*f ¥

§àn Martin de Madrid 2. de Julio de 1 jzó.

MrOrFr-r Antonio Sarmiento'.


LÌ,
LICENCIA DE LA O R D E N .

N OS el Maeftro Fray Jofeph de Barnuevo,


General de la Congregación de San Be-
nito de Efpaña, Inglaterra , & c . Por la preíen-
te , y por lo que á Nos toca , damos licencia
para que pueda imprimirle vn Libro , intitula-
do : Tbeatro Critico Unfoerfal, que c ompufo el
Padre Maeftro Fray Benito Feijoo , Maeftro Ge-
neral de nueftra Congregación , y Cathedratico
de Vifperasen Theologia de la Univeríidad de
Oviedo : Atento, que aviendo remitido fu exa-
men á perfonas doctas, fomos informados no
tener cofa que fe oponga á nueftra Santa F e ,
y buenas cofturabres. Dada en nueftro Real
Monafterio de Nueftra Señora de Valbanera, a
ocho de Agofto de el año de 1 7 2 6 .

El General de San Benito;

gpir mandado de fu Rmá?


CENSURA DE EL REVERENDISSIMO PADRE
Vociar Juan de Campo-Verde , de la Compañía de Jesvs 9

Cattedratico de Prima de 'Thealogici Jubilado en la Uni-


verjidad de Alcalá , Theologo d* fu Magejlad en la Junta-,
de la Concepción , Examinador- Synodal de el
Ar^obifpado de 'Toledo^
&c.

E orden de ci feñorDo&or Don Chriftoval Dam.ifio^


Vicario de ella Villa de Madrid , y fu Partido , & c .
He villo con todo cuidado, y con no menor gufto vrt
L i b r o , intitulado : Tbeatro Critico Umverfal, o Dif~>.
eurfos Varis en todo genero de materias , para defengaño de
errores comunes. Cuyo Autor es el Rmo.P.M.Fr.Benito Feijoo,
Cachedratico de Vifperas de la Univerfidad de Oviedo , y,.
Maertro General de Li Religión de San Benito. Hafta aqui la
remifsion , que verdaderamente eftá diminuta en la exprefsiori
de fu magiílerio: pues fegun la grande erudición , multitud de
noticias, variedad deaffumptos , y cumplida fatisfaccion á to-í
dos , debiera darfele al Autor el titulo de Maejlro General de
todas las Artes , y las Ciencias. L a fabiduria de el Autor avia;
llegado días ha á mis oídos ; pero al prefente fe ha puefto de-:
íantc de los ojos. Con que me fucede lo que pocas vezes,qr.an-
do fe refiere vna cofa grande , que en llegando á verla fe hallo
mucho mayor , que avia publicado la fama. Mucho excede lo]
que conoce la experiencia , á quanto avia eftendido la fama
de tu fabiduria, decía la Reyna de Sabá al Rey Salomón. Y¡
•podre con razón de,cirdeel A u t o r : Verdaderamente mucho¡
me avian fignificado de tu copiofa erudición ; mas quando h£
leído efle Libro reconozco , que fe quedo muy diftante de 1 $
realidad , quien me refirió tu grande erudición.
El Libro conviene en vntodo conlainfcrípcion, que fe;
le pone en la frente; no fe lee vna materia en la exprefsion de el
aflumpto; y otra defeubre la curiofidad en fu lección; porque
a la verdad es vn conjunto de varios Difcurfos en todo genero!
de materias. Es vn ramillete coirtpuefto de diverfas ñores, ert
donde hallará el que le tomare en fus manos, variedad apacible:
£^ í& áiv^fion; ¿ £odrá efeoger lo que fuere mas de fu agras
d o , para, r e m ó l o de la ocíofidad. Sino que le demos a eft é"
Libro e! nombre de panal; porque afsi como las avejas oficiofas
repaífan todas las ñores, tomando de cada vna lo que mas pue-
de conducir para labrar fu panal, en el qual todos hallan la dul-
zura de la miel, afsi efte erudito Efcritor con lo agudo de fu in-
genio ha reparfado todas las facultades que oy fe hallan tan flo-
ridas , entrefacando de cada vna lo mas guftofo , y mas delica-
do que los Autores han difeurrido ; para que qualquiera hom-
bre curiofo halle en elle Libro el aflurapto, que fu curiofidad
apetece , y la materia á que fu ingenio le inclina.
Iflocvates daba efte confejo álos hombres fabios, y erudi-:
tos,que intencaílen componer vnLibro,que fueíTe para el gufto
de todos : Ut apes viáemus , decía , rmnihus quidem floj culis
injsdere, de Jingulis autem •Otilia capere , Jic eruditionis compás
randa ftudiofüs nihil int&Sium relinqiü Í , fed pro futura qu<s
7

funt, vndique colligen licet, (IJfocrat. ad Demon. apudSolora


de lar.Ind. temp.fol.zi^.) Las avejas, dice, de cada vna de las
flores que cuidadofas regiftran, toman la mas vtil para fabricar
la duicura de í'u miel. A eftas deben imitar los hombres defeof-:
fos de adquirir la verdadera erudición,quando la defean trasla-
dar al papel, pues para formar fus eferitos, deben con cuidadofa
atención regiítrar aun lo mas recóndito de cada facultad ; y eli-
giendo de cada vna lo mas feletSto Cacarán á la luz publica de el
Mundo vn eferko que fe merezca la vniverfal aprobación. Que
facultad no ha examinado efte Autor?Qué diligencia no ha puef-;
t o , para el examen de la verdad? Que difeurfos no ha formado
para covencer el encendimiento ? Qué exemplares refiere , para
perfuadir la razón ? De todas las facultades ha bufeado lo mas
oculto para fatisfacer !a curiofidad. L o s libros de todas las fa-
cultades , los tiene examinados ; fin que fe le efeondan los Ef-
trangeros por eftraños , ni defeftime los rmeftros por proprios.
N i la diveríidad de lenguas ha podido fer impedimento para
que no penetre el Autor fus fecretos. Efta alabanca es vna de
las muy ungulares que Glaudiano le dixo á Eítilicón: Tu legerís
libros cunólos qnas protulit orbis. (Claudian, di Laudi. Stilic.)
E s tanca tu do&rina, que no parece aora libro en el Orbe t o d o ,
que no aya regiftrado ta diligencia. Y aunque parezca averme
paííado de el oficio de Cenfor al de Panegirífb, de la Obra , fe
SSSS 4? pernajtinjss eftadígrefjjoa neceú"arja, por ¿Yerfe llevad
'¿o de fu inclinación la pluma. Y tomando el oficio que í*e me
manda execute , d i g o , que mi cuidado nada cieñe advertido etj
todo el L i b r o , que no fea conforme á la Doctrina Catholica, ó
"contrarío á las buenas coftumbres.Efte es mi parecer:Íj/í'o me-
lioriy 9*c- Enefte Colegio Imperial de la Compañía de Jesvs de
:

Madrid á 27. de Junio de 1 7 2 6 .

fuern de Campo-Verde»

LICENCIA D E EL ORDINARIO.

OS el Doci, D . Chriftoval Damaíto,Inquifidor Ordí-i


navio , y Vicario de ella Villa de Madrid, y fu Par-í
tido , &c. Por la prefente damos Licencia para que
fe pueda imprimir , é imprima el Libro, intitulado?
Theatro Critico Univerfal , 0 Difcurfos Varios en todo genera
de Materias, para defengaño de Errores Comunes ¿ compuerta
por el R m o . P . M . Fr. Benito Feijoo , Cathedratico de Vifpe-i
ras de la Univerfidad de O v i e d o , y Maeftro General de la RelL;
gion de S. Benito : Por quanto de nueftra orden , y mandado
eftá vino , y reconocido, y no contiene cofa que fe oponga á
tmeftra Santa Fé Catholica, y buenas coftumbres. Fecha ert
Madrid á cinco de J u l i o año de 1726.

Por fu mandado

Gregorio de Soto*
APROBACIÓN BE EL Rmo. P. M. Er. DOMINGO
de Lojfada , Leéior Jubilado Complutenfe , Examinado?
Synodal, Padre de la Provincia de Santiago, y Provincia
de la Provincia de Ca/lilla , de la Recular
Obfcrvancia de Nyeflro Padre
, San Franeifco.

M, P. S.

D
E mandado de V . A . he leído con todo cuidado v ñ
Libro , intitulado : Tbeairo Critico Ur,'ioerfal, &c*
compuefto por el R m o . P . M . E r . Denito Feijoo,
de la Orden de el Gran P . S. B e n i t o , y Cathedratico
de Vifperas de ia Univeriidad de Oviedo, &c, Y aunque la ele-
gancia de el Nazianzeno me dio de antemano hermofasiente
(dibujado el masproprio retrato del Autor en aquel celebrado
elogio del gran Athanaíío : Quod enim gemís-dije iplina ejl, in
ftüo -ver/itus non Jit, atque ¿ta eximié ver Catas , quod in eo fifo
elaborajjet ? Sic nimirhm omnia complexas, vt ne vnus quident
quifquam fingala: turf as ita ad fummum quajt nihil aliad pra-
y

tered didicíffet ( S. Gregor. Nazian. Orat.in laúd. Aihanajij.)


T o d a v í a no puede defembarazarfe el difeuríb de el alfombro,
fon que íe halla forprendido de 1a hermofa'variedad de tantos,
y tan diverfos aífumptos,. N o menos arrebata las mayores ad-
miraciones efte literario theatro por lo vniverlai en todo íínage
de materias , que por lo critico en la fentencioía jukiofa crifis
con que reflexiona encada vna de ellas con equidad tanta , que
fin declinar vn punco en el extremo de los Críticos Ari(larcos 2

dice con libertad , é ingenuidad de Sabio , el iufto v a l o r , y


aprecio, que merece-de. jufticia cada cola. Efta crifis en tan vni-
verfal materia, pide fin duda tanto hombre , que en la esfera
délos Sabios por peregrino fe aclamará muy rara Ave : pues
Aunque.algunos idearon aquel circular Orbe de las ciencias > o
el gran cuerpo Encyclion , que comprehendia todo genero de
..'¿¥sipüa&s-j.o.la' Encidopedia, que llamaron los Griegos vni-.
ferial acacia- fue íbio
2 imaginada, que prometiendo cía-:
' ' '•;"> ' ' ' ''• ". r.a¿
pastees á codos para todo , á todos en todo llenaron de áenv
fas obfcuridades >: porque no es lo mifmo coacervar en vn
¡Tomo varias materias » ó amontonar en vn Cuerpo variedad
de noticias, que faberlas, y Caberlas, cfcrivir para la común en-:
feñanca, dando á cada cofa fu juño valor , y pefo , que eñn
crifis pide fin duda, además de vn entendimiento peregr[po^
y na continua eftudiofa aplicación á los L i b r o s , que fin duda fe;
hallan muy pocos.
Aiinfiendotan fuperior la inteligencia de Salomón , «mh
fíeífa en el Libro de el Eclefiaftes , que entregó con la mayor,
aplicación todo fu corazón , para aquel vnlverfal tratado , que
no folo enfeñaba la prudencia, y doctrina, íi también defcubria
los errores, y necedades comunes '.Dedique cor' n:eum , vt /ci~
rem prttdentiam, atque doctrinara , errorefque , & fiultitiam¿
(Ecclef. cap.i. 1 7 . ) Y notó con delicadeza Hugo Cardenal 1$
íignificacion de el verbo Dedi, que pufo Salomón, y no el veri
bo Aceomodavi, porquc-aquel figninca vna continua aplicación);
al eftudio , cntregandofe á las letras con la mayor eficacia; y (

eñe folo diera á entender vna breve eftancia de tiempo á el eí-í


tudio , y vna como ojeada de paífo , y es mas que cierto , que
la comprehenííon, y penetración de las ciencias no fe'ferian 3
los que por quatro dias toman como preñado , ó alquilado el
quarto de los eftudios. Difcrctifsimamente el Gran P. S.. B e r -
nardo dixo ,que el-Doétor Maeftro avia de fer , no c a n a l , fino
concha: porque la canal todo fu caudal es preñado, y aun
quando mas llena vierte en los raudales toda broza, la concha
cogiendo blandamente el rocío, le abriga, y lentamente parece;
le dixiere ;-y afsi produce preciofas perlas.
Otra grave enfeñanca nos defeubre Salomón , muy necef-,
faria para el eftudio de la fabiduria,. enlazando prudencia, y
doctrina ; porque en la prudencia , dice Hugo , explica el eftu-
dio de fu propria inveftígacion: Prudentia propria invejtiga-
tionis , y en la doctrina la aplicación á la erudición a ge na , y¡
vna , y otra es neceífaria para confeguir la palma de verdadero
fabio, porque ni todo ha de fer dexarfe llevar fiempre de otros,;
como niños, ni todo fe ha de fiar á las fuercas de'fu propriq
ingenio. •• ;
Es la humana fabiduria tan achacofa , que mas merece el
jitulo de docta ignorancia, que de perfecta ciencia : Doclorum,
er
S°z
ergo , dice Alapíde , magna ticei refuta cognit'to „ tamtn non efí
tdm pkn.\ fcisütia, qu.it» doSia ignorantU, ( Aíap. Ecelef. c. i.)
T a n embueitas andan Us iuzes de la verdad con las tinieblas de.
el error, que aun ios mayores Philofofos, como dict mi Sutil
Maeítro, mezclaron muchas falsedades en las d'/monñr^cioneS)
que nos vendieron por evidentes. Por elfo dice el M-¡.ri-¡no
Doctor ; Scotus in prologo jententiarum^ fue necefiaria doc-
trina Sobrenatural para que gui;iífe á el entendimiento fus
error por la fegura fe .vida de la verdad. Y Salomón en nueftro
T e x t o , aunque can iluminado de iuperiores luzes, fe aplicó
con fumo eltuuio á la ciencia diferetiva de la verdad, y ei error:
Summo ¡ludio , comenta Alapide , incubui, vt per vejitgarem
fapientiam , & fcientiam , tura fpeculati-uam , tum praclicam,
eamque fecernerem ab erroribm, O" ¡luhltia. Y fué fin duda
neceífario tanto eftudio , porque hablaba de errores comunes,
"que eífo explica la voz P r o v e r b i o s , que dice otra letra en el
T e x t o ; porque como eftos no tanto fe difputan , como íe ve-
neran por oráculos, es neceffaria mucha luz con evidencias cla-
ras , paradefengañar de errores tan comunes , que paíTan plaza
<ie primeras verdades.
Efte es el gloriofo fin , que en tan lucido trabajo intenta
nueftro fapkntiísimo A u t o r , para vtilídad de el Común. Pero
acafo replicará alguno con lo que en el mifmo texto concluye
Salomón como arrepentido : Et agnovi, dice, quod in h>s quo-
que eJJ'ct labor , & afjlifíio fpiritus. Y aunque yo no le negare
á e l Autor el trabajo en tan vario eftudio, como fupone la in-
menfa erudición , que apunta en eftaObra, con todo le negare
i o penofo, y aflictivo de la Alma, pues afsi en efta Obra brinda
á los Eítudiofosel cáliz de las literarias tareas (que tanto amar r

gan ) que fobre pintarle gloriofo por el premio, le pone en co-


pa de oro tan guftofo, que á pechos fe le puede echar el mas
fiaufeado. Pero mucho mejor á nueftro intento refponde H u g o
Cardenal con Hugo Victorino : (¿uia vera curio/itas eum ad in-i
quijitionemhuiufmoii compellebat ,& fuperbia ad oftentatio~
nem ,dignumfnit ,vt huiufmodi labor pfemeret, O" curiofum
dif úparet, &c. Con que fiendo el motivo de nueftro Autor , e!
que exprefla fu mifmo titulo, para dejengañe de -".omunei Erro-
te* , convence por el opuefto el mifmo texto , que tan glorióte'
Sarea i no foto es acreedora, ¿eimnortajesglojciasj si también.
'de gozofas dilataciones en la Alma. Concluyo , pues, dicíeti-
do,que efta O b n Cobre no contener cofa alguna contra los can-
dores de nueftra Fe, y buenas coftumbres, es vtiiifsima, y muy;
comun;pues no menos conduce alravegante faber los efcollos,
que los rumbos, y Puertos; y fiendo el affumpto defengañaij,
errores comunes, precifo e s , que feavtilidad de el Común,-
que allá en la Torre celebrada de David , en que Doctos dibu-i
xan el vniverfaltheatro de todabuena enfeñanga , y difciplina,,
fe mira, como otroPharo, que íirva de farol á los que navegan
en tan dilatado mar , con que puede V . A . darle la Licencia que;
pide, y aun como tan folicito del bien común eftrecharle, á que?
con efta de á luz las otras Obras. Efte es mi fentír: Salvo melioA
ri, (¡fe. En efte Real Convento de N,P,S.Francifcq de Mad.n^
gn j . de Julio de 1 7 2 0 . años.

Fr .Domingo Lojfada:

SUMA-
SUMA' D E LA LICENCIA.

1 ) o n Balthaiar de San Pedro y Azevedo , Efcrávaño de


¡Cámara de el Rey nueftro Señor , y de; Govierno de el Con?
Tejo: Certifico , que por los Señores de el fe ha concedido L i -
cencia , por vria vez á el Rmo. P. M. Fr, Benico Feijao , de el
s

íOrderi de San Benito,para que pueda imprimir, e imprima el


L i b r o que ha. compueito, intitulado : Tbeatro Critico Univer-
fal, ó Difcurfos Vivios en todo genero de Materias, para def en-
gaño de Errores Comunas,. T o m o Primero. Con tal,que la di-.'
áchaimprefsion fe haga por el original que va rubricado , y fir-
mado al fin de mi mano. Y para que confie doy la prefente en
Madrid a Jéis de Julio de JJIG,

Don Baltbafar de San Pedro;


f r ¡ — — . . -« 3
FEE DE ERRATAS,

Í " ^ A g . $ . Yiú.z.próduzga , lee produzca. P . j 5. 1.2 ?. Linfon*


je ale, lee Lifonjeale. P . 1 0 2 . l.zp. cap.i. lee cap.3. P . 1 3 7 . 1 , 5 . :
irian, lee irán. P. 1 8 2 . I.29. el Franas Nojlradamus , lee el
Francés Noílradamo, P . 2 0 4 . 1 . 3 1. Burgo , Maejlre ,lee Burgo
Maefire. P.3 3 6.1. r 3. Loen, lee León. Lin. 1 4 . citábante eftaba. 1

Efte Libro , intitulado: Theatro Critico Univerfal, &c. con


¡sitas erratas corresponde con fu original. Madrid , y Agoftq
6.6. de xyzó,
Lic. Don Benito de el Rh
y Cordido.
Corredor General por S. M«

SUMA DE LA TASSA.

J . AíTaron los Señores de el Confejo Real de Cartilla eñe LI-?


t r o , intitulado : Theatro Critico Univerfal, &c. •. compueítof
por el R m o . P . M . F r . Benito Feijoo, de el Orden de S.Benito»
¿ feis maravedís cada pliego, cómo mas largamente confia de;
l a Certificación defpachaaa en el Oficio de Don Balthafar dé
fe» E e d j o Aísv^dp» Madrid, 1 Agqftg 2 ¿ . ¿e 1 7 2 6. ••

' ^ -.: CARTA;


; C A R T A " .

B E D. L U I S D E SAL A Z A R Y C A S T í l O r s

C o m e n d a d o r de Zurita ea ja Orden de
Calatrava 5d e , e l C o a í e j o de fu Magcftad
en el Reai de O r d e n e s , y C h t o n i f t a . " •
M a y o r d e C a í l i i l a y e Indias,
al Autor»

R,™, PADRE.
Énoa íaxo. Buelvo á V . Rma. los pliegos, que defuvtí-:
iifsima Obra fe íirvió fiarme, y me han divertido, y en-:
feñado mucho. Aquello por la hermofa variedad de los.
Difcuvfos , elección excelente de las materias, y folidea
admirable de las-objeciones. Y efto por la propriedad conques
fe dificulta , la eficacia con que fe refponde , y la dulcura cort
que fe perfuade. Pero todo con vna Angular facundia, con viía
nocible gracia, y con vna excelente pureza de idioma. En cadaj
Difcurfo-, fiendo tan difiintos, fe excede V . R m a . á si mifmo,
porque en todos avifa los efcollos de la peligrofa navegación,
de el Mundo enfeñael camino de la Eternidad , no folo coni
s

exemplos fagrados, fino con obfervaciones profanas, que , pa-í


va el efearmiento fuelen tener el tnifmo vigor , que las leyes,!
La erudiccion, fiendo mucha, y muy dieftramente reparti-i
da , tiene vna tan propria colocación , que mas que bufeadat
por el cuidado oficiofo , parece que nació para el cafo á que fé;
aplica.
Y o juftifico bien ei vulgar axioma, que afirma, que para!
ios hombres de bien , todo Pais es proprio, entendiendo porí
hombres de bien hombres fabios : pues V . Rma. convence ío$
t S 8 ¡ S ? E ° £ ^ a K S í como fi los huvieífc tratado, dj£n.e, y cam
J
~~ s i s M
" fe*íS
bate los vicios-, como íi los naviera padecido, y énfena á huir-:
l o s , con la mifma deítreza, que fi los conociefle por la expe-
riencia , Tiendo folo por la noticia, Dicefe, que los Parrochos
fe inítruyen en el Confefsionario de toda efpecie de delitos, y ¿

Üe fus cireunftancias: y de el doclifsimo Jefuita Thomas Sán-


chez fe dixo , que , fin embargo de aver muerto virgen , avia
fabido por aquel medio quanto en el matrimonio , y en fu vfo
fe puede averiguar , como teftifica la infigne obra fuya , que de
efta materia veneramos. Pero V . Rma. criado , y mantenido
en la eftrec'hezde los Clauftros , retirado en la continua tarea
de fus eítudiosTheologicos , y en la preciíafervidumbre'deias
C2thedras , y ceñido íiempre á la rigida aufteridad de fu Reli-
gión Sagrada, todavía parece en eftos Difcurfos hombre de
M u n d o , que materialmente trato todos fus engaños, para dar-
los al d>.-fprecio , y que ha tenido libertad entera , para adver-,
timos lo que fe debe repugnar , e l derecho camino , que debe-
mos feguir, y las eftablecidas vulgares aprehenfiones , que la
razón eftá obligada á defprecíar. Y como la labia adverten-:
cia de V . Rma. previene todo efto con tanto acierto , es pre-
d i o confeffar, que fon precíofos partos de fu entendimiento
inítruido , y laboriofo, y de fu meditación vigilante, y perfpi-
cáz. En V . Rma. fuplió vna efpeculacion clara , y penetrante
:el defecto de conocimiento practico de los achaques de el Si-
nglo. Muchos rayos de luz mental fon menefter para eílo. Cier-
tamente vn M o n g e , que con tanta claridad defcubre los erro-
i e s de el Mundo defde el retiro de fu Clauího , es vn Sol que
.regiñra toda la tierra fin falir de fu Cielo.
A cite noble fin de nueftro defuigaño , haze V . Rma. fer-
yir aquel Angular conocimiento , que con fus eftudios , fe ha
. adquirido de las Ciencias, y las A r t e s , délas Hiftorias An-
t i g u a s , y Modernas. Ininenfa es la erudiccion, que refplan-
-dece en elle pequeño volumen , que como preciofo diamante
. recoge mucha luz en poco cuerpo. Parece , que al entrar en
cada Difcurfo tenia V. Rma. á vna mano el dilatado campo
de la Naturaleza , á otra el amcrüfsimo jardín de la Kiíloria,
.para arrancar á ambas manos las mas efcogiuas flores de
' Vno , y otro : fiendo igualmente plaufiolc aquella futileza con
-que aunen aífumptos proranos, de eftas flores de.erudiccion fa?
' be V . Baña, facar al gun efpiricu de i«oraíidad, .
En fin la 'Obra e s , ,á mi .juicio admirable; en todas fus
:

partes; pero porque no aya hermofura fai lunar , efto es fa-


brica tan perfeda , que no padezca alguna nota, hallo, en. el
Difcurfo X V . pag. 3 0 2 . que la generofa inclinación de V .
Rma, ofrece mi memoria , en. términos fumamente diftsa?
tes de mipepueño mérito , aviendo otros muchifsimos, que,
como el do£to„ Vizconde de el Puerto , le tienen muy gigan-
te. Pero aviendo cometido efte exceffo la noble propenden
de V . Rma. á honrar , puede fer que firva en efta excelente
Obra piorno el lunar en la belleza , que en lugar de afearla^
l a agrada. Guarde Dios á V . Rma. l a r g o s , y felicifsimos
¿ños para honor de las buejaas. letras» Madrid 1 1 , de Agoft^
tic 1720'. •. ;

Í.L.M.cJcV.Rma:
fu mas afeito fetvidor.

Don Luis de Saladar¿


D E L O S DISCURSOS
DE ESTE TOMO.

II. V i r t u d , y Vicio. , 17.


III. H u m i l d e , y Alta Fortuna: 46%
IV. La Política mas Fina* 75»'
V. Medicina. »04»
Vi. Régimen para confervar la Salud. 1 4 2 .
•'¡Vil. Defagravio de la Profefsion Lite-
raria. 170^
yill. 4^ ^g'
r o
J u i i c i ^ r U 5 y Alojar
l a

'naques. 181;
IX; Ectypfcs, ~ - 2 0 7 .
X. Corrieíasv 214;
AñosClini&errcoí; 222.
. XII,- Senectud de el Mundo; 2 5 i.
rXÍÍL Confe&ario contra Philofofos Mo-
dernos. 1 50;
XIV. Múfica de los Templos. 275.
-XV. Paralelo de las Lenguas. - 297*
XVI. Dsfenfa de Us Mugeres» 313*

PRO-
R Ó L ( ) G Q

2ÍJ LECTOR.
E C T O R m í o , feas quienfueres ¿ no teefperomüy pró"$
piclo : porque fiendo verifimil, que enes preocupa^
do de muchas de lasopiniones comunes , que impug-s
no , y, no> debiendo-yo confiar tanto, ni en mi perfua-:
fivá , ni en tu docilidad, que pueda prometerme conquiftar
luego tu aífenfo , que fucederá, fino que firme en tus antiguos
; :

dictámenes condenes como iniquas-misdecifiones ? Dlxo b ien


el Padre^Maléb rattche ; que aquellos Autores, que efcriven pa.-
ra deílerrar preocupaciones comunes , no deben poner duda en
•que recib irá el pub lico con defagrado fus lib ros. En cafo que
llegue á triunfar la verdad i, camina con tan perezofos paífos la
Vitoria , que el Autor mientras vive folo goza el varro confue-:
l o y d e quede pondrán la corona de laurel en el túmulo. Buen
-

•exemplo es el de el famofo Gedeon Harv'eo; contra quien , par


el nob le defcub rimicnto de la circulación de la fangre , decla^
marón furiofamente los Médicos de fu'tiempo , y oy le veneran
• todos los proreffores de la medicina como oráculo. Mientras
{.vivió., le llenaron de injurias; yaamiefto,-noles f a l t a f i n o co'-
locarXuimagen en las'Aras» : :
• Áqui eraia oeaíion de difponer íuéfpiritü á admitir mis
i máximas, reprefenta-ndo'íe convarios exemplos, quan éxpuefias
viven al error las opiniones mas eftablectdas; Pero porque eñe
es todo el blanco de e'l- primer ©ifcurfo deb ite Tomo,que- á eífe
• fin como preliminar neceííarió'pufe al principia , a í l i ; puedes
'<leeido.rSi.nada'teMzlere-fiter^-A,y te ob ftiiíar'e-si-ferconfian-.
• tefectairio de la voz de el Pueb lo , figue norab uena fu riunfe».
' Si eres difcrcto , no tendré contigo querella -alguna"-, poro Hedie-
ras b enigno, y reprob arás eldiátamcii, fin maltratar a! A u t o r .
Pero fs Fueres necio, no puede faltarte la calidad dé'inexcráb le,
• Bien sc-.qqe no ay-ma^wigidQ :cenfor--áé V» lib ro,que aquel-q'u
: e

:
• ' '
c ;
- ' ' №
íió tiene habllUíad pan álñ'ár vfti£№£f%ñ^&$tfó?&,&%&
loque quifiergs. Tratarais opiniones dedefeaminadas, por pe»
regrinas : y convengámonos losdos eaiqw? tu me tengas i mi
(jpor extravagante , yo á ti por rudo. (• ; '? ~il .
Debo no ob ftante fatisfácer algunos reparos, -que natuwík
mente harás leyendo efte T o m o . El primero.es, que no van los
Diícurfos diftrib uidos por determinadas clafles,n'guiendo la fe-
rie de las facultadesjó materias á que pertenecen.K que refpon-
d o , que aunque al principio tuve efle intento, luego defcub ri
ímpofsible la execucion: porque aviendome propuefto tan b afto
.campo al Theatro Critico,yique muchos de los alTumptos,c|ue
¿e han de tocar en é l , fon mcomprehenfib les deb axo de facul-
tad determinada, ó porque no pertenecen á alguna j 6 porque
participan igualmente de muchas. Fuera de efíó-, ay muchos,
de los quales cada vno trata folitariamente.de,. alguna facultad,
fin que otro le haga conforcio en el aíTumpto. Solo,en materias
phyíicas (dentro de cuyo ámbito fon infinitos los errores de el
¡Vulgo) avrá tantos diícurfos, que fean capaces de hazer T o m o
á parte : fin embargo de que eftoymas inclinado á dividirlos
,en varios T o m o s , porque con efio tenga cada vno mas apael-i
. ble variedad,
De fuerte,que cada Tomo,bIen que en el defignio de ímpug^
fiar errores comunes vniforme, en quanto á las materias pare-,
cera vn rigurofó mifcelaneo. E l ob jeto formal íerá fiempre
y n o . Los materiales precifamente han de fer muy diverfos.
Culparafme acafo, porque doy el nombre de errores a. toj
da.s las opiniones que contradigo. Seria juña la quexa, fi yo.no
previnielte quitar defde aora á la voz el odio con la explica-i
cion. Digo,pues, que error como íiqui le tomo no fignifica otra
cofa , que vna opinión que tengo por faifa, prefcindiendo de^ íi
la j u z g o , 6 no prob ab le. :
Ni deb axo de el nombre de errores comunes quiero fígnifi-;
car, que ios que impugno, fean transcendentes á todos los hom-
_ b res. Baílame para darles eñe nomb re, que eftén admitidos
en el común de el V u l g o , 6 tengan entre los Literatos mas que
ordinario fequito. Efio fe deb e entender con la referva de n<>
introducirme jamás á juez en aquellas queftiones, que fe venti-
lan entre varias Eícueias , efpécialmente en materias Theologi-
c a s : porque, qué puedo yo adelantar en aifiímptos, que coa
lántá reflexión meditaron tantos homb res iñfignés"? O quien
foy y o , para prefumir capaces mis fuerzas de dirimir aquellas
lides, donde batallan tantos gigantes ? En las materias de rigu-
rofa Phyficano deb e detenerme efte reparo, porque fon muy
poíaslas que fe tratan ( y.eJfas.con poca, 6 ninguna reflexión)
en nueñras Efcuelas.
Haráfme tamb ién cargo , porqne aviendo de tocar muchas
fcofas facultativas , efcrivo en el Idioma Oiítellano. Baftariame
porrefpuefta el decir ,que para efciivir en elIdiomaNativo, no
fe ha menefter mas razón , que no tener alguna para hazer lo
contrario. N o niego'que ay verdades , que deb en oculttirfe al
V u l g o , cuya flaqueza mas peligra tal vez en la noticia, que en
la ignorancia; pero eífas,ni en-Latín deb en falir al pub lico,pues
harto Vulgq ay entre los que entienden eñe Idioma,y racilmen-
te paitan de eftos á los que no faben mas que el Cañellano.
Tan lexos voy de comunicar efpecies perniciofas al pub li-
tOjQ^ie mi defignio en eña Obra es defengañarle de muchas,que
por eñár admitidas como verdaderas, le fon perjudiciales , y,
no feria razón , quando puede fer vniverfal el provecho , que*
noalcancafie á todos «1 defengaño.
N o per eíTo pienfes, que eñoy muy aífegurado déla v t i l n
dad de la O'ora.Aunque mi intento folo es proponer la verdad, 5

poisible es que en algunos atfumptos me falte penetración parai


conocerla, y en los mas fuerca para perfuadirla. L o que puedo
asegurarte , es , que nada efcrivo , que no fea conforaie á lo
que (lento. Proponer , y prob ar opiniones Angulares, f -lo por
oftntár ingenio , rengólo por prurito pueril , y f.lfedad in-
digna de rodo hombre.de b ien. En vna converfacion fe puede
tolerar por paífatiempo ; en vn eferito es engañar al pub lico.
L a grandeza de el difeurfo eftá en penetrar , y perfuadir las
verdades ; la habilidad masb axade el ingenio es enredar á
otros con fophiñerias. Las arañas, que aun entre los b rutos
fon v i l e s , fabrican telas delicadas, pero fútiles ; fútiles, y fir-
mes aun entre los hombres no las huzen finólos Artífices exce-
lentes. En aquellas fe figuran los difcurfos agudos , pero fo-
<phiftk:o<; ; en eftas los ingeniólos, y folidos.
No íiempre los errores comunes que impugno , ocupan
4

todo Л difeurfo donde fe tratan. A vezes foncemprehendidos


niuchos en vnm'ííino-difeurfo 6 porque pertenecen derecha-
?

,. '- .men-
Siente á la materia de é l , ó porque fe hallaron al páflo', y co«<
roo por incidencia , figniendod alTumpto. principáis Efte me-
thodo p;ii,'¿ci6'mas oportuno:>parque de hazer Difcurfo á parteí
para cada opinión , que impugno, avierido en vnas mucho quer
decir, y enotras poco , refultariavn-todo-compueitodepartes
¡extremamentedefiguales. :
:
Eftoy efpcrando muchas impugnaciones , efpécialmente
febre dos , 6 tres Difcurfos de efte L i b r o : y aun: algunos me
previenen, que cargarán fobre mi-injurias , y dicterios; En elle
jeafo me aífeguraré mas de la verdad de lo que: eferivo q, 'p.uea
es cierto que defconfiads fus fuercas , quien contra mi fe apro-
vecha de armas vedadas. Si me opufieren razonéis 5-refponderé
a ellas i íi chocarrerias, y di&erios , defde luego rae doy por,
concluido , porque en elle genero de diÜDuta jaaiá?. íM lis
'ts?rc.tt%dQi ¡VALie
Pag, ¿,;

T VOZ. DE EL PUEBLO,
D I S C U R S O PRIMERO.

Q U E L L A mal entendida máxima, de qiifi


Dios fe explica en la voz de el Pueblo,
autorizó la Plebe para tyranizar el buen
juicio , y erigió en ella vna poteftad
tribunicia, capaz de oprimir la noble-:
za literaria. Es eñe vn error, de don-?
de nacen infinitos : porque aífentada la
, conclufion, de que la multitud fea regla
déla verdad, todos los defaciertos de el Vulgo , fe venerar*
como infpiraciones de el Ciclo. Efta confideracíon me mué-,
ve a combatir el primero eñe error, haziendome la quema;
dequevenco muchos enemigos en vno folo , ó á lómenos
de que fe ra mas fácil expugnar los demás errores , quitan^
doles primero el patrocinio , que les da la voz. común en 1$
íftimacion de los hombres menos cautos.

§. I.
jk^2$TlMES indicia, non numeres, decía Señecí
J\.jí ( Epift. í'p. ) el valor de las opiniones fe ha
de computar por e l p e f o , no por el numero de las Almas.
f

Los ignorantes , por fer muchos ,'no dexan de fer ignorantes*.


Que acierto , pues , fe puede efperar de fus refoluciones?
Antes es de creer , que la multitud añadirá eftorvos à la ver-:
d a d , creciendo los fufragios al ;rrer. Si fué funerñicion ex-i
% Voz DE EL PUEBLO,
travagantc de los Molofos , Pueblo antiguo de Epyro , conf-
tituir el tronco, de vna encina por órgano de A p o l o , no lo
feríamenos conceder efta prerrogativa á toda la felva Dodo-
% fxea. Y fi de vna piedra , fin que el Artifice la pula, no pue-
.'\dc rcfultar la imagen de Minerva, la mifma imposibilidad
'quedará en pié , aunque fe junten todos los peñafeos de h
montaña. Siempre alcanzará mas va difereto folo , que vna
gran turba de necios; como verá mejor al Sol vna Águila fola 5

«¡ue va exercito de Lechuzas.


a Preguntado alguna vez el Papa Juan X X I I I . qué
cofa era la que diftaba mas de la verdad ? Refpondió , que
el dictamen de el Vulgo, Tan perfuadido eftaba á lo mifmo
el íoveriL-imo Phocion que orando vna vez en Athenas*
como vieííé , que todo el Pueblo, de común confentimien-
rc , levantaba la voz en fu aplaufo , preguntó á los amigos,
«jue tenia cerca de s i : Que en qué avia errado f Pareciendo-:
le , que en la ceguera de el Pueblo no cabia aplaudir , finó-
los defaciercos. No apruebo fentencias tan rigurofas , ni pue-
do confiderar al Pueblo , como antypoda precifo de el emií-
pherio de la verdad. Algunas vezes acierta ; pero es por agena
l u z , ó porcafualidad. No me acuerdo, que Sabio compara
el Vulgo á la L u n a , á razón de fu inconftancia. También
tenia lugar la comparación , porque jamás refplandece con
Impropria : Non conjilium in Vulgo non ratio,non dif-
f

srimen, non diligentia. Decia Tulio: (Orat. pro plañe.) N o


s.y dentro de efte bailo cuerpo luz nativa , con que pueda
difeernir lo verdadero de lo falfo. Toda ha de fer preñada;,
y aun efia fe queda en la fuperficie : porque fu opacidad haze
impenetrable á los rayos el fondo.
3 Es el Pueblo vn inftrumento de varias vozes , qué
no por vn rarifsimo acafo, jamás fe pondrán por si mif-
jnas en el debido tono , hafta que alguna mano fabia las tem-
ple. Fué fueño de Epycuro , pe rifar que infinitos átomos,
3

-vagueando libremente por el ayrc al ímpetu de el acafo, fin


el goviernode alguna mente, pudieífen formar efte admira-,
ble íiñema de el Orbe. Pedro Gafendo , y los demás Refor-
madores Modernos de Epycuro , añadieron á efle confufo
?Vulgo, el régimen, de la fupjerru inteligencia. Y aun fupueíto
DISCURSO PRIMERO. . 3
•feffc,ao fe puede entender, como fia ^otm^ ,que pulan ht
rudeza de h materia , prGuuzga la tierra la mas humilde
planta. Poco fe diftingue el Vulgo de los hombres de el V u l -
go de los átomos. D é l a .concurrencia cafual de fus dicia* „.
•menes á penas podrá rcfultar jamás vna ordenada ferie de
verdades fixas. Será menefter, que la fuprema inteligencias
fea intendente de la obra : Pero como lo haze ? Ufando , co-
mo de Subalternos fuyos, de hombres fabios, que fon las for-
mas , que difponen, y organizan elfos materiales entes."
4 Los que dan tanta autoridad á la voz común , no
preveen vnapeligrofa confequencia , que eílá muy vecina á
fu dictamen. Si á la pluralidad de vozes fe huvieffe de fiar
la decifsion de las verdades, la fana doctrina fe avria de buf-
carenel Alcorán de Mahoma, no en el Evangelio de Chrif-
£0, No los Decretos de el Papa , íi no los de el Mufti avrian
de arreglar las coñumbres: íiendo cierto , que mas votos tic-;
ne á fu favor en el Mundo el Alcorán , que el Evangelio.'
Y o eíloy tan lexos de penfar, que el mayor numero deba
captar el alfenfo ; que antes pienfofe debe tomar el rumbo
contrario: porque la naturaleza delascofis lleva, que en el
Mundo ocupe mucho mayor País el error , que la verdad. El
¡Vulgo de los hombres, como la ínfima, y mas humilde por-
ción de el Orbe racional, fe parece al Elemento de la tierra, erí
gayos fenos fe produce poco oro ; pero muchifsimo hierro.

s. n.
ij." /""VUIEM confiderare , que para la verdad no zf
K^J mas que vna fenda , y para el error infinitas»,
noeftrañará, que caminando los hombres con
tan efeafa luz , fe defeaminen los mas. Los conceptos, que
el entendimiento forma de las cofas , fon como las figuras
quadrilateras, que foio de vn modo pueden fer regulares;
pero de innumerables modos pueden fer irregulares, 6 tra-;
pecias, como las llaman los Mathematicos. Cada cuerpo en
fu efpecie foio por vna medida puede falir rectamente or-
ganizado ; pero por otras infinitas puede falir monftruofo.
Solo de vn modo fe puede acertar; errar , de ¡nfinisos. Aun
A a ea
'4 Voz DE EL PUEBLO,
en el Cielo na ay mas que dos puntos fixos para dirigir los Na?
yegantes. Todo lo demás es Voluble. Otros dos puntos fixos
Hy en la efphera de el entendimiento : la revelación , y la de-:
tnonítracicn. Todo el reno eftá lleno de opiniones, que van
bolteando , y-fucediendofe vnas á otras , fegun el capri-
cho de inteligencias motrices inferiores. Quien no obfervare
diligente aquellos dos puntos , ó vno de ellos , fegun el :emi£»
pberio por donde navega : ello es , el primero en el emifpherio
de la Gracia , el fegundo en el emifpherio de la Naturaleza,-
jamás llegará al puerto de la verdad. Pero afsi como en muy
pocas parces de el Globo Terráqueo , miran derechameiv
te las agujas magnéticas á vno , ni a otro Polo , si que
las mas declinan de él , ya mas , ya menos grados : ni
¡mas, ni menos en muy pocas partes de el Mundo , atina
el entendimiento humano con vno , ni otro Polo de fu
govierno. Ai Polo de la revelación, folo fe mira derecha-
mente en dos partes pequeñas, vna de la Europa , otra de
la America. En todas las demás fe declina, ya mas , ya menos
grados. En les Paifes de los Hercges , ya tuerce bailante
la aguja ; nías aun en los de ios Mahometanos : muchifsimo
mas en los de los Idolatras. El Polo de la demonítracion,-
folo tiene infpectores en el corto Pueblo.de losMathematicosj-
y aun ai fe padecen á vezes algunas declinaciones.
5 Pero qué es meneñer girar el Mando , para ha.-.
llar en varias Regiones la fentencia de el común , divorcia-:
¿ a con la verdad ? Aun en aquel Pueblo, que fe llamó Pueblo
'de Dios , tan lexos eftuvíeron muchas vezes de fer vna mifma
ia voz de D i o s , y la de el Pueblo , que -ni aun confonan-
cia tuvieron entre si. Tan preño fe ponia la voz de el Pue-:
blo en harmonía con la Divina; tan preflo fe defviaba á la ma-j
yor diflonancia. Proponele Moyíeslas Leyes,que Dios le avia
dado ; y todo el Pueblo refponde á vna voz : Quanto Dios ha
dicho executarémos: Refponditque omnis populas vna vocei
omnia verba Oornini qu<s locutus eji faciemus. { Exod. 24.)
O qué confonancia tan hermofa, de vna voz con otra ! Apar-
tafe el Maeftro de Capilla Moyies que ponia en fono la voz
s

'¿e eí Pueblo; y al inflante el Pueblo mifmo congregado, def-


j?ues de obligar á Aaron á que le fabiiaífe 49^ i d o i o s , levan-;
a
DISCURSO PRIMERO; y
£a" íá voz , diciendo : Que aquellos fon los verdaderos Dlofes;
a quienes deben fu libertad: Dixeruntque: hi funt Di] tui
Ifra'él, qui te eduxerunt de térra Egypti. O qué difionancia,
tan horrible!
6 Afsi fucedió otras muchas vezes. Pero el cafo eíi
¡que pidieron Rey á Samuel , tiene algo de particular. L a
Voz de Dios, por el órgano de el Propheta, los diifuadia de la
elección de Rey. Pero qué diñante eftaba la voz de el Pue-
blo de ponerfe en confonancia con el órgano de Dios ! Inflan
yna, y otra vez que fe les dé Rey : Y en qué fe fundan ? En
que las demás Naciones le tienen: Erimus nos quoque Jtcuit
omnes gentes. Aqui fe notan dos cofas. La v n a , que fiendo
yoz de todo el Pueblo, fué errada. La otra , que no la eximio
de error, el ir calificada con la autoridad de todos los demás
Pueblos: Erimus nos quoque Jicut omnes gentes. La voz de
el Pueblo de Ifraél, fe pufo en confonancia con las vozes de;
todos los demás Pueblos ; y la confonancia con las vozes,
de todos los demás Pueblos , la hizo duTouante de la voz Di-;
Vina. Andaos aora á governaros por vozes comunes , fobre e|
fundamento de que la voz de el Pueblo es voz de Dios.

§. III.
¡y b ^ N vna materia determinada creí yo algún tíems
I ¿ po , que la voz de el Pueblo era infalible : con-
viene á faber en la aprobación , 6 reprobación de los fugetos;
Pareciame, que aquel que todo el Pueblo tiene por bueno,'
ciertamente es bueno : El que todos tienen por fabio , cierta-:
mente es ü b l o ; y al contrario. Pero haziendo mas reflexión,'
hallé , que también en ella materia claudica algunas vezes la
fentencia popular. Eftando vna vez Phocion reprehendien-
do con alguna afpcreza al Pueblo de Athenas., fu enemigo
Demoílenes le dixo : Mira que te matara el Pueblo ji er/.pk~.
t

za d enloquecer. Ta ti te-.untara( refpcndió Phociou) fi


empieza d tener juicio. Sentencia con que declaro íh mente, -

de que nunca haze el Pueblo concepto laño en ía califica-


ción de fugetos, El hado infeliz de el mifir-> Píi^-^on , conw
probo en parte íu feqtir: pues vino á, d furiofo
0
»e~
6 Voz dé el Pueblo,
Pueblo de Athenas, como delincuente contra la Patria , lien-
do el hombre mejor,que en aqueltiempo tenia la Grecia.
8 Ser reputado vn ignorante por fabio , ó vn fabio
por l o c o , no es cofa que no aya fucedido en algunos Pueblos.
. Y en orden á efto.es graciofo el fuceífo de los Abderitas con fu
compatriota Democrito, Efte Philofofo , defpues de vna lar-
ga meditación fobre las vanidades , y ridiculez.es de los hom-
bres, dio en el extremo de reirfe fiempre que qualquiera fu*
ceíTo le traía efte aífumpto á la memoria. Viendo efto los
'Abderitas , que antes le tienian por fapientifsimo , no duda-i
ban en que fe avia buelto loco. Y a Hypocrates, que florecía cti
¡aquel tiempo , eferivieron , pidiéndole encarecidamente , que
fuefle á curarle. Sofpecho el buen viejo lo que era : que la
enfermedad no eftaba en Democrito , fino en el Pueblo , el
¡qual i fuer de muy necio , juzgaba en el Philofofo logu-
jra, lo que era vna excelente fabiduria. Afsi le eferive á. fti
«migo Dionyfio , dándole noticia de efte llamamiento délos
Abderitas, ,y relación que le avian hecho de la locura de De»
tnocrito; Ego vero ñeque morbum ipfum ejfe puto ,fed im*
tnodícam doStririam, qu<e revera non efi immodica , fed ab
Idiotis putatur, Y eferiviendo á Philopemenes , dice : Cum
yion injaniam, fed quandam excellentem mentís finitatem
<vir Ule declaret. Fué, en fíu, Hypocrates á ver á Democrito;
y en vna larga conferencia , que tuvo con é l , hallo el funda-»
jriento de fu rifa en vna moralidad difereta , y folida, de que
quedo convencido, y admirado. Da puntual noticia Hypocra-
tes de efta conferencia , en carta eferita á Damageto , donde
fe leen ellos elogios de Democrito. Entre otras cofas le dice:
M i congetura, Damageto , falió cierta. No efta loco DemoJ
ciito ; antes es el hombre mas Libio que he vi fio. A mi con fu
converfacion me hizo mas fabio, y por mi á todos los demás
hombres : Hoc erat Ülud, Damagete , quod conieó'iabamus.
Non infanit Dsmocritus, fed fuper omnía fapit, & nos fa^
pientiores effecit, & per nos omnes bomínes*
9 Hallaafe eftas cartas en las obras de Hypocrates, dig*
«ifsimas cierto de fer leídas , efpécialmente la de Damageto.
Y de eftas fe colige, no falo qijanto puede errar el Pueblo en^
|gra ^eneiegneepeo que haze de algún individuo > mas tam*
biea
DISCURSO PRIMERO. 7
bien la ninguna razón con que tantos Autores pintan á D e -
¡nocrito, como vn hombre ridiculo, y femifatuo: pues na-
die le difputa el juicio , y la fabiduria á Hypocrates ; y eñe,
aviendole tratado muy de eípacio , da teftimonio tan opuefto,
que por fu dicho venia á fer Democrko el hombre mas fabio, •"
y cuerdo de el Mundo. Otra carta fe halla de Hypocrates a
Democrito , donde le reconoce por el mayor Philofofo
natural de el Orbe : Optimum natura , ac Mundi interpre-
ten te iudicavi. Era entonces Hypocrates baftantemente an-
ciano , pues en la mifma carta lo dice : Ego enim ad finem
medicinó non perveni, etiam jí iam ftnex Jim. Y por tan-*
to, capacifsimo de hazer redo juicio de la doétrína de Demo-í
crito : L o que á mi parecer haze veriíimil, la acufacion , que
algunos Autores oponen á Ariíloteles, de que no expufo fiel™,
mente las opiniones de efie, y otros Philofofos , que le pre-.
cedieron , á fin de eftablecer en el Mundo la monarquía de}
fu doctrina , defacreditando todas las demás , y haziendo.
(dice el gran Bacón de Verulamio ) con los demás Philofo^
fos , lo que hazen los'Emperadores Othomanos, que para
reynar feguros, matan á todos fus hermanos. Pero bolvamcsj
á nueftro propoíito.

§. IV.
So T 7 N quañto á la virtud , y el vicio ^ tomando
X_L vno por otro en fugetos determinados, fue-»
ion tantos los errores de los Pueblos , que fe tropieza cors
ellos á cada paífo en las Hifiorías. N o ay mas que ver , que
los mayores embulteros de el Mundo , pallaron por depofiw
tariosdelos fecretos de el Cielo. NumaPompiliointroduxq
en los Romanos h policía , y religión , que quifo , á favos*
de la ficción de que la Ninfa Egeria le diétaba todo quanto
él proponía. Debaxo délas Vanderas de Sertorio militaron
ciegos los Efpañoles, contra los Romanos, por averie creído,;
que en vna Cierva blanca , que avia criado á fu modo, y de
quien con aducía fe fervia , obftentando que labia por ella
todas las noticias, que por vias ocultas fe le adminiftraban,
k hablaba laUúdsd de D^ana. M 2 £ S ESEfeaáio á vw
ah a
8 Voz DE EL PUEBLO;
gran parte de la Alia , que el Archangel San Gabriel era Nuffc¡
ció , que avia depurado para él la Corte CJeftial, debaxo
de ia figura de vna Paloma , á quien avia enfeñado a arr¡-¡
marle eí pico á la oreja. Los mas de ios Hereíiarcas , aun-
que manchados de vicios baftantem ente defcubíercos, fueron
reputados en varios Pueblos, como Archivos venerables de
los Myfterios Divinos.
11 Dentro de el mifmo feno de la Iglefia Romana fe
produxeron femejantes monftruoíidades. Tanqueiino, hom-
bre fiagiciofifsimo, dado defeubiertamente á toda torpeza, ea
el Siglo vndecímo, fué venerado de todo el Pueblo de Ambe-;
res por Santo ; en tanto grado , que guardaban como reliquia
la agua en que fe Libaba, La República Florentina , que nun>;
ca pafsó por Pueblo rudo , refpetó muchos años , como hom-s
b r e S a n t o , y dotado de eípiritu profetico , á Fray Gerónimo
Sabanárola, hombre de prodigiofa facundia , y aun mayor
fagacidad , que les hizo creer, que eran Revelaciones fus cour;
geturas políticas , y los avifos ocultos que tenia de la Corte de
Francia ; fin embargo de que muchas de fus predicciones
íklieron faifas, como la de la fegunda venida de Carlos V I I Í .
á Italia; de ¡a mejoría de Juan Pico de la Mirandula , en la
enfermedad de que. dos días deípues murió , y otras. 3S¡í
averie quemado en la Plaza publica de Florencia , bailo para
defengañar á todos de fus ¡mpofturas : pues no foio los He-
teges le veneran como vn hombre Celcftial, y Precurfor de
•Luthero, por fus vehementes declamaciones contra la Corte
de R o m a ; mas aun algunos Catholicos hizieron íu panegy-:
rico, entre los quales fobrefalió Marco Antonio FlarainiOjj
con efte hermofo , aunque falfo Epygrama.

Dum fer a flamma tuos Weronyme pafcitur artut


Religio Sacras dilaniata comas
jFlevit, & O, dixií, cruieíes parche flamma i
Par cite, funt ijio vifeera no jira rogo»

la L o que ha ávido en ella materia mas monftruofo;


ffs, que algunas Iglefias particulares, celebraron , y dieron
SB!.CO , como a S j p t o s a h9.mbr.es perverfos, o que murta
DISCURSO - P r i m e r o . '
Pon feparaáos de la Comunión de la Iglefia Romana. L a
iglefia de Limoges celebro folemnemence mucho tiempo,'
con Rezo proprio, que aun oy exilie en el Breviario antiguo
de aquella Iglefia, á Eufebio Cefarienfe, que v i v i ó , y mu-;
rió en la Heregia Arriana , por equivocación, á lo que fe pue-
de difcurrir, que huvo al principio, de Eufebio Obifpo de
Cefarea en Capadocia, fuceflbr de San Bafiiio , con Eufebio»;
Obifpo de Cefarea en Paleftina, de quien hablamos. Bien sé,'
que vno , ü otro Autor dicen , que Eufebio fe reduxo en eí
Concilio Niceno á la creencia Catholica , y fué defpues
confiante en ella; pero contra tantos teftimonios en contra-i
rio , y contra fus niifmos efcritos, que al.parecer carece fu
idefenía de toda probabilidad. L a Iglefia de Turón veneró áí
yii Ladrón como M a r t y r , y le tenia erigido A l t a r , que def-
i m y ó , facando de fu error al Pueblo , San Martin comgj £

sfirraa Sulpicio Severo en fu Vida?

§.
ijt "13 ARA defconfiar de el todo de la Voz pópuíat ', 1

J_ ay fino hazer reflexión fobre los extra vagantif-í


j&mos errores, que en materias de religión , policía , y cofé
•cumbres fe vieron , y fe vén autorizados con ei común cor?*
fentimiento de varios Pueblos. Cicerón decía, que no ay diC;
párate alguno tan abfurdo, que no le aya afirmado algún,
Philoíofo : Nihil tam abfurdum diel potejl quod non di~
s

catur ab aliquo Philifopborum, ( Lib. z. de Dlvinat.} Coi»


mas razón diré y o , que no ay defatino alguno tan monftruo-
fo , que no eílé patrocinado de el confentimiento vniforme de
algún Pueblo.
14 Quantola luz de la razón natural reprefenta abo-*
minable , ya, en ella, ya en aquella Región pafsó , y aun pafiífl
por licito. L a mentira, el perjurio, el adulterio, el homla
c i d i o , el r o b o , en fin, todos los vicios, lograron, Ó lograré
la general aprobación de algunas Naciones. Entre los Antw
guos Germanos, el robo hazia ai vfurpador legitimo dueño?
de lo que hurtaba. Los Heridos, Pueblo antiguo , poco difo
S&nte de el Mar Mtifjo AUNQUE fu ficuacjqn, ag te fabe á¿
a
IO V O Z DE EL l^ÜEBLO,
pumo fr.iO , macaban todos los enfermos , y viejos: ni per-» 1

inician á ias mugeres íbbrevivir á fus maridos, Mas Barba-


ros aun j los Cafpianos Pueblos de la Scithia encarcelaban ,,-y
hazian morir de hambre á fus proprios padres, quando lle-
gaban á edad abantada. Qué deformidades no executarian
vnos Pueblos de Ethyopia, que íégun Eliano, tenían por Rey
á va Perro , fiendo efte bruto , con fus geftos, y movimien-
tos , regla de todas fus acciones ? Fuera de la Ethyopia feñala
Puniólos Thoembaros ,.queobedecian el mifmo dueño.
r5 Ni efta mejorado en eftos tiempos el corazón de
el Mundo. Son muchas las F^egiones donde fe alimentan de
carne humana , y andan á' caza de hombres",.como de fieras.
En el Palacio de el Rey de Macoco, dueño de vna grande
porción de la África , junto.á' Congo ,fe matan diariamente,
~ t lo que afirma"Thomás Cwrnelio, docientos hombres, entre
deliuqüentes , y efclavos de tributos para plato de el Rey , y
de fus Doraefticos , que fon muchifsimos. Los Yagos , Pue-
blos de el Reyno de Anficoenla mifma África , no folo fe
alimentan de los prifioneros", que hazen en la guerra, mas
también de ios que entre ellos mueren naturalmente ; de mo-
do , que en aquella Nación, los muertos no tienen otro fe-
pulcro , que el eftomago délos vivos. T o d o el Mundo fa-;:
b e , que en muchas partes de el Oriente ay la barbara cof-,
tumbre dequemarfe vivas las mugeres', quando mueren los
maridos ; y aunque efio no es abfoluta necefsidad, rarifsi-
ma , ó ninguna dexa de executarlo\ porque queda defpues
Infame , defpreciada , y aborrecida de todos. Entre los C a -
fres , todos los parientes de el que muere tienen la obligación
de cortarfe el dedo pequeño de la mano izquierda , y echarle
en el fepulcro de el d'funto¿
16 Qué diré de las licencias, que tiene la torpeza en
Varías Naciones ? EL| Malabar pueden las mugeres cafarle con
quantos maridos quifieren. En la isla de Ceylán en cafandofe
Ja m u g e r e s común á todos los hermanos de el marido ; y
pueden los dos confortes divorciarfe quando quieran , para
contraher nueva aliarica. En el Reyno de Cali<:ut, todas Jas
nuevas efpofas, fin excepción de la mifma Reyna , antes de
psrrukirfe al vio de fus jnandos, fon entregadas á la kf- ;

civia
DISCURSO P r i m e r o . ' ??
'avia 'de alguno de fus Bracmanes, ó Sacerdotes. En la Min-
grelia, Provincia de la Georgia , donde fon Ghríílianos Ctf-
•naticos con mezcla de varios errores, el adulterio paila por
acción indiferente; y afsi, rarifsima perfona ay , ni de vno,
ni de otro fexo, que guarde fidelidad á fu conforte ; bien es-
verdad , que el marido en el cafo de forprender á la muger
en el adulterio, tiene derecho para hazer pagar al adultero vn
cochino, que es muy buena fatisfaccion, y fuele fer combí-
dado á comer de él el mifmo reo. .

s. VI.
I7 O E c i a cofa immenfa , fí me pv.ñefle á referir ía¿
v3* extravagantifsimas fuperfticiones de varios Pue-
blos. Los Antiguos Gentiles, ya fe fabe que adoraron los
mas defpreciables , y viles brutos. Fué Deidad de vna 'Na-
ción la Cabra , de otra la Tortuga*, de otra el Efcarabaxo , de
otra la Mofea. Aun los Romanos, que paífaron por la Gen-
te mas hábil de el Orbe , fueron extremamente ridiculos -en
la religión , como San Aguftin en varias partes de fus Libros
de la Ciudad de Dios les echa en roftro ; en que lo mas ef~:
pecial fué aquella ¡numerable multitud de Diofes . que intro-
duxeron : pues foio para cuidar de las míeffcs, y granos te-:
nian repartidos entre doce Deidades, doce oficios diferentes;
Para guardar la puerta de la_cafa avia tres: El Dios Lorcuio
cuidaba de la tabla* la Diofa Cardea cuidaba de el quicio , y
ei DiosLimentino de el vmbral : en que con gracejólos re-
darguye San Aguftin , de que teniendo qualquiera por bailan-
te vn hombre foio para portero, nopudiendo vn Dios foio
hazer lo que haze vn hombre foio , pufieiTeu tres en aquel
minifterio. Plinio,que va por el extremo opuefto denegar
toda Deidad, ó por lo menos de dudar de la Deidad, y ne-
gar la providencia , haze la quenta de que era , fegnn la fu-
perfticiofa creencia de los Romanos, mayor el numero de las
Deidades , que el de los hombres : Quam ob rem tnaior
ccelitum popufas , etiam quam hominum intelligi pote]?,
(Lib. 1 . cap. 6.) El computo es fixo : porque cadavno fe
formaba vna Deidad Angular en fu proprb genio; y. febre
1-2 VOZ DE EL PüEBLO,
fe fío adoraba rodos los Diofes comunes : cuya multitud fá
puede colegir, no folo de lo que acaba de decirnos San'Agiif-j
tin , mas también de lo que dice el mifmo Plinio, que lie*
garon á erigirfe Templos , y Aras á las mifmas dolencias^
. e incomodidades , que. padecen los hombres : Morbis etiam
in genera defcriptis , & multis etiam pefibus , dum efe pla¿
catas trepido meta cupimus. Y es cierto que la Fiebre tenia
5

y.a Templo. cnRoma , y otro la mala Fortuna.


18 Los Idolatras Modernos no- fon menos ciegos , quS-
los Antiguos. El demonio, con nombre de t a l , es adorado de¡
muchas Naciones. En Pegn , R.eyna Oriental de la Peninfu-,
3

la de la India , aunque reverencian á Dios , como"Autor de


todo bien, mas cultos dan al demonio a quien- con- vna-
?

fefpecie de Manicheifmo creen Autor de todo mal. En la Em-t


baxada,que hizo á la China el difunto Zar de Mofcovia,avien-5-
clo encontrado los de la comitiva en. el camino á vn Sacer-j
dote Idolatra o r a n d o l e preguntaron : á quien adoraba ? A>
l o que él refpondib en tono- muy magiítraL To adoro a vn-
Dios , al qual el Dios qu? vofot robadorais- arrojo de el Cied-
lo ; pero paffado. algim tiempo , nw Dios bmdr precipitar de
7

el Cielo'al vueflro y entonces fe verán grandes mudancas»


y
1

m los hijos d¿ los hombres. Alguna noticia deben de tener en's


sqnella Región de la. calda/ de Lucifer ;.pero buen Redemptor,
pfperan , fi aguardan, á- que- buelva- al Cielo» eífa. Deidad fu^-
y a . Por motivo poco menos ridiculo-, nomaldicen jamás al ;

tdiablolos Jecides ( fe&a queay en Perfia,. y, en Turquía:) y


es que temen, que algún día fe reconcilie c o n - D i o s y fe ven-
'güe délas injurias, que aorafe le hazen„.
ip En el Rey-no de Sian- adoran: vn Elefante blanco^
'á cuyoobfequio continuo eílán deftínados quatro Mandari-i
2ies, y lefirven comida , y bebida enbaxilla de oro. Éra-
l a Isla de Ceylán adoraban vn Diente , que decían aver caí-
d o de la boca de Dios; pero aviendole cogido el Portugués
Conílantino deBerganca , le quemo, con grande oprobrio de
lus Sacerdotes, Autores de la Fábula. En el Cabo de Onduras
-adoraban los Indios á vn Efclavo; pero al pobre noledu-:
jraba, ni la Deidad, ni la v i d a , mas de vn año , paitado el
§B4 fe ^©ficaban ¿ ftbñitu^ndQ otj;o emfu r¿laza. Y es
DISCURSO PRIMERO. 1
i 3
gofa graclofa, que creían podia hazer á- otros f e l i c e s q u i e n
á si proprio no podia redimirfe de las prifiones, y guardas?
con que le tenían fiempre affeguradoi En la Tartaria Merí-:
dional adoran á vn Hombre , á quien tienen por eterno , de-/
xandofe perfuadir á ello*, con el rudo artificio délos Sacer-:
dotes, defiinados á fu culto , los quales foio le muefiran
en vn lugar fecreto de el Palacio', 6 T e m p l o , cercado de
nmchas Lamparas, y fiempre tienen de prevención efcon-;
¿ido otro hombre algo pareci do á el , para ponerle en fu
lugar , quando' aquel muera , como que es fiempre el mifmo¿
Llamanle L%mx que fignifica lomifmoque Padre Eterno,'
%

¡Y es de tal modo venerado , que los mayores Señores folici-


tan , con ricos prefentes, alguna parte de las inmundicias que
'excreta, para traerla en vna caxa de oro , pendiente al cuello^
tomo fingularifsima reliquia». Pero ninguna fuperfiicion pan
rece fer mas eftravagante, que la que fe practica en Balia , If-:
la de el Mar de la India ,. al Oriente de la de J a b a , donde nO
folo cada individuo tiene fu Deidad propria aquella que fe
le antoja á fu capricho-, ó" v n tronco-, 6- vna piedra , 6 vrí
bruto; pero muchos ( porque también tienen eífa libertad )
íe la mudan cada dia , adorando diariamente lo primero^
que cijcueutcaa al falir de cafa por la mañana».

, §* VIL
So / " " ^ ¡ U b diré de los difparates hiítoricóS, que éñ mus
tLJ chas Naciones fe veneran , como tradición
nes irrefragables? Los Arcades juzgaban fu
drigetv anterior á la creación de la Luna. Los de el Perú-
tenían á fus Reyes por legitimes defeendiéntes de el Sol.
Los Árabes creen , como articulo de Eé , la exiftencía de vna
!
A v e , que llaman Anca Megareb , de tan portentofo tamaño,
que fus huevos igualan la mole de los montes , la qual def-;
pues , que por-cierto infulto la maldixo fu Propbeta Han-
dala , vive retirada en vtla Isla inaccefsible. N o tiene menos
aííentado fu crédito , entre los Turcos vn Héroe imaginario,
llamado Chederles,' que dicen fué Capitán de Alexandro ; y¡
14 •• VOZ DE EL F ü E B L O ,
bebida de la agua de cierto Rio , an J a halla oy dlfctirrien-
do por el Mundo , y afsiftiendo a los Soldados que le invo-
can : íiendo tanca la fatistacciori con que afleguran cftos.
fueños, que cerca.de vna Mezquita, deílinada á fu culto, muef-
tran los fepulcros de vn fobrino , y va criado de elle Ca«:
vallero andante, por cuya ínterceís.ion , añaden , fe hazen
en aquel litio continuos milagros,
2r 'En fin , fi íé regiftra- País por P a i s , todo el M a - •
pa intelectual de el Orbe , exceptuando las tierras donde es
adorado el Nombre de Chrifto , en el refto de tan dilatada
tablá^ no fe hallarán fino borrones. T o d o Pais es África, para
engendrar monftruos. Toda Provincia es Yberia,para producir
venenos. En codas parces , como en Licia , fe fingen chime-',
ras. Quantas Naciones carecen de la luz de el Evangelio , ci-
tan cubiertas de tan efpefas forabras , como en otro tiempo
Egypto. No ay Pueblo alguno , que no tenga mucho de bar-:
baro. Qué fe ílgue de.aqui ? Que la voz de el Pueblo efiá en-
teramente defnada de autoridad , pues tan frequentemen-
te la vemos puefta de parte de el error. Cada vno tiene por
infalible la fentenpia, que reyna en fu Patria; y efto fobre el
principio, que todos lo dicen, y fienten afsi. Quienes fon
ellos todos ? Todos los de el Mundo.? No ; porque en otras
Regiones fe fíente, y dice lo contrario. Pues no es tan Pueblo
vno , como otro ? Por qué ha de eftár. mas vinculada la verdad
á la voz de eñe Pueblo, que á la de el otro ? No mas que por
<qué eñe es Pueblo m í o , y el otro ageno ? Es buena razón.

$. ' V I I I .
i's ' K . J O he vino, que alguno de aquellos Efcritorés
l\j Dogmáticos,que concluyentcmente han pro-
bado , por varios Capítulos, la evidente credibilidad de nuef-
tra Santa F e , lutroduzga por vno de ellos el confentimisu-
to de tantas Naciones en la .creencia de elfos myfterios ; pe-
ro si el confentimiento de hombres eminentifsimos en fan-
tidad , y iábiduria. Aquel argumento tendría evidente inf---
tanda en ia idolatría , y en la feéta Mahometana. Efte no
$iene refpugfta, ni ipfiancia, alguna. Porque fi fe no^'ppone
DISCURSO PRIMERO* I 5
el 'confentimientó de los Philofofos Antiguos en la idola-
tría , procede la objeccion fobre fupuefto falfo: coníbmdo
por teílimonios irrefragables , que aquellos Philofofos en ma-
teria de religión no lentian con el Pueblo. El mas fabio de
los Romanos Marco Varrón, diftinguió , éntrelos Antiguos,
tres géneros de Theologia; la Natural, la C i v i l , y la Poé-
tica. La primera , era la que'exiftia en la mente de los Sa-
bios. Lafegunda, regia la religión de los Pueblos, L a ter-
cera , era invención de los Poetas. Y de todas tres , fola la
primera tenían por verdadera los Philofofos. La diftincion
de.las dos primeras, ya Arilloteles la avia apuntado, en el L i -
bro 1 2 . ele los Metaphyíicos, cap. S. donde dice : Que en
las opiniones comunicadas de los Siglos antecedentes , en
orden á los Diofes , avia vnas cofas verdaderas ,-otras faifas;
pero inventadas para el vfo , y govierno Civil de los Pue-
blos : Gatera vero fabalóse ai •multitudinis perfuajionem,
&c. Es verdad , que aunque aquellos Philofofos no fen-
tianconel Pueblo, hablaban en lo común con el.Pueblo;
que lo contrario era muy arriefgado ; porque á" quien ne-
gaba la pluralidad de Diofes, le tenian , como le fucedió 3
Sócrates, por'ímpío. Con que en la voz de el Pueblo eftaba
todo el error; y en la mente de pocos Sabios, fe encarcelaba
lo poco, 6 mucho, que avia de verdad.
2_j' Menos aun fe puede oponer á la moral evidencia,
que preda á la credibilidad de nueñros myfterios el confenti-
mientó de tantos hombres á todas luzes grandes, el decir, que
también entre los Hereges ay, y ha ávido muchos Sabios: por-
que ellos padecen dos gravifsimas excepciones. La primera,es,
que la doctrina no fué acompañada de la virtud. Éntrelos
Herefíarcas apenas huvo vno , que no eftuvie'ífe manchado
con vicios muy patentes. Éntrelos que los figuieron , ni los
mifmos Parciales reconocen alguno de Santidad fobrefaliente,
Uno , ú otro, que fe quiíieron meter á -Profetas , fueron la
rifa de los Pueblos, al ver falfificadas fus profecías : como
fucediÓ en nueñros tiempos á Monf. j u r i e u , cuyas errada;;
predicciones, aun oyfon oprobriode losProteílantes, La fe-
gu'-ida excepción , es , que entre elfos mifmos Hereges docio5,
falta el coníentimiento : Umtf^ují jn viam fnarn declinavit^
, 16 Voz DE EL PUEBLO;
Tan lesos van de eftár vnos con otros de acuerdo , qtíe n|
íiyn lo eitá alguno de ellos configo tnifmo. Es materia de
jaftimá , y de rita, ver en fus proprios eferuos las frequentes
contradicciones de los mayores hombres que han tenido ; y
cito en los arciculos mas fubftanciales.í.íle fué el grande argu-i
mentó con que azoto terriblemente á todos los Hereges el
jnfigne Obifpo Meldenfe Jacobo Begnino Boífuet, en fu Hif-
Soria de las Variaciones de las Iglefias Pro te liantes. Duelome
mucho de que efta maravillofa obra no cfté traducida en todas
las lenguas Europeas : pues ni aun sé que aya falido nafta aor*
de el Idioma Francés al Latino.j qnando otros Libros invtiles^
y aun nocivos , hallan traductores en todas las Naciones»
24 No obftante todo lo dicho en eñe Capitulo, COIM
cluiréie feñalando dos fentidos , en los amales únicamente,'
y no en otro alguno , tiene verdad la máxima de que Is
iVoz de el Pueblo es Voz de Dios. El prhusro , es , to-(
mando por V o z de el Pueblo el vnanime confentimiento'
de todo el Pueblo de D i o s ; efto es » déla Iglefia Univer-;
íal : La qual es cierto no puede errar en las materias de Fe,;
c o por impofsibilidad antecedente j que fe figa á la natura-,
leza de las cofas, si por la promejía que Chriíio la hizo,;
'¡de fu continua afsiítencia, y de la de el Efpirjtru Santo en
ella. Dixe todo el Pueblo de Dios , porque vna gran parte
de la Iglefia puede errar, y de hecho erró en el gran cifma
'de el Occidente : pues los Reynos de Francia , Caftilla, Ara»
g o n , y Efcocia, tenían por legitimo Papa á Clemente V I L
gireftodela Chriíiiandad adoraba á, Urbano V I . y de los
'dos partidos es evidente que alguno erraba. Prueba conciua
yente de que dentro de la mifma Chriíiiandad puede errar ec¡
pofas muy fubíianciales , no folo algún Pueblo grande; perQ
íiun la colección de muchos Pueblos, y Coronas.
25 El fegundo fentido verdadero de aquella máxima,;
gs tomando por V o z de el Pueblo la de todo el Genero.
s

Rumano. Es por lo menos moralmente impofsíble, que todas


las Naciones de el Mundo convengan en algún error. Y afsi,
g.l confentimiento de toda la tierra, en creer la éxiftenciadej.
£?Í9S, fe tiene entre los Do&os por vna de las pruebas
goncluvences de eiie A.riiculo
g
íjr

VIRTUD , Y VICIO*
DISQURSO SEGUNDO.

§. I.
1 i l ^ ^ f e f A D A mortal ( decía Philoft, citado por
S. Ambrofio) (Lib. i.de Caín , & Abel?
cap. 4 . ) tiene dentro de el domicilio de
el Alma dos mugeres : L a vna honeítaj
pero afpera , y defabrida: La otra im-
púdica ; pero dulce , y amorofa. Aquella es la virtud , efts
la delicia mundana.
a Pintó el fabio Judio la Virtud , y el Vicio , fegun la
primera apariencia , ó fegun la opinión de el Mundo ; mas
no íegun la verdad. Es afsi, que comunmente fe concibe la
Virtud toda afperezas, el Vicio todo dulzuras ; la Virtud me-
tida entre efpinas , el Vicio repofando en lecho de flores. Pero
eñe es vn error, y el error mas nocivo entre q'uantas faifas
opiniones fuítenta la ceguera de el Mundo. Tentare en efte
Difcurfo fu defengaño m'oftrando, qiie aun en eña vida, pref-
}

cindiendo de el premio , y caftigo de la otra , es mucho mas


molefto , y trabajofo él abandono á los deleytes , que la
practica de las virtudes Morales , y Chriftianas. Para cito
me ferviré de aquellos argumentos , que ofrecen la razón
natural, y la experiencia, tomando poco , ó nada de las
fentencias de Padres , y dichos de Philofofos, de que fe pu-
diera amontonar infinito : porque á quien no perfuadieren
la experiencia , y la razón no ha de convencer la auto-;
?

Tomo h Q - Si
l8 VIRTUD , Y VICIO,
3 Si pudieííemos ver los corazones de los hofft;
bres entregados al vicio , prefio fe quitarla la duda. Mas
por reflexión podemos verlos en los efpejos de las Almas,
que fon femblantes, palabras, y acciones. Atiendafe bien
á ellos infelices , y fe hallará, que ningún otro iguálala tur-,
bacion de fus femblantes , la inquietud de fus acciones , la
defazon de fus palabras. No ay que eílrañar. Son muchos los
torcedores , que los eftán conturbando en el goze de fus ado-
rados placeres. Su propria conciencia , domeftico enemi-
g o , huefped inevitable ; pero ingrato , les eftá continuamen-
.te mezclando con el néctar que beben , el azibar que abo-i
minan.
4 Con enérgica propriedad dixo Tullo , que las culpaá
de los impíos, reprefentadas en fu imaginación , fon para ellos
continuas, y domeílicas furias : Ha funt impijs afsidua do-,
tneßicaque furia, (Orat. pro Roß. jeftas fon las Serpien-:
t e s , 6 los Buytres, que defpedazanlas entrañas de el malva»
d o Ticio : eñas las Águilas, que rafgan el corazón de el atre-
vido Prometheo. Coníidereníe los tormentos de vn Caín , fu-
gitivo de todos , y aun fi pudielfe , de si mifmo , errante por
montes, y felvas,fin poder jamás arrancar la flecha, que
le atravefaba el pecho; efto e s , la memoria de fu delito:
como la otra herida C i e r v a , en quien figuro el grau Poeta 1<|
üaortal inquietud de aquella Reyna enamorada,

— Silvas, faltufque peragrat


Diclaos, bar et Uteri latbalis arundoi

•j Contemplenfe las angufiias devnLamech , tanvío'a


lentamente acolado de la reprefentacion de el homicidio , o
homicidios que avia cometido , que faltándole tolerancia
para fer vnico depofitarío de el fecreto , le arroja por la
boca , como quien vomita la poncoña que le atofiga , anief-:
gandofe á la infamia , y al caftigo , folo por legrar al-
gún leve defeanfo. De vn cierto Apolodoro refiere Plutarco,
que no dexandole aun entre fueños la memoria de fus crí-
menes , todas las noches foñaba , q u e , d«.fpues de hazerló
guáreos 2 en agua hirviendo le Iban liquidando los mienw
DISCURSO SEGUNDO. I p
Jaros; y que mientras duraba eñe martyrio , le decía fu pro-
pino corazón á gritos : Ego tibí hormn fum atufa. Y o te
foy la caufa ¿ y motivo de eños tormentos. ( Lib. de Ser*
niiminis vindicta.)

$. 11.
6 TT^ S verdad,yo lo confieflo, que no todos fon tari feri¿
JL_j íibles á los remordimientos interiores: y autr
ay conciencias cauterizadas (vfando de la fraíTe de San Pablo)
que perdieron todo el fentimiento, porque la larga coftumbrff
de pecar, convirtió los corazones en pedernales.

Sic lathalis hiems paulatim in pefiora venit.

7 O hombres ios mas defdichados de todos ! Eña du-í


reza de pecho es fcirro de el Alma , para quien folo apelánd*
á milagros ay medicina. Pero por lo menos mientras durx
eña vicia mortal, lo paífarán con gufto, y alegria. O quan-
to fe engaña quien lo pienfa! Eños fonlos'que viven con
mas trabajo. Veamoslo , difeuriendo por los tres vicios, en
euyos quarteles fe diftribuyen caíi todos los malos ; Ambición,
Avaricia , y Luxuria.
8 El Ambiciofo es vn efelavo de todo el Mundo : de el
Principe , porque conceda el empleo : de el Valido , porque
interceda : de los demás , porque no éñorven. Tiene la
Alma , y el ¡«cuerpo en continuo movimiento , porque es
menefter no "perder inflante. A todos teme , porque nin-
guno ay , que con vna acufacion no pueda defvanecer toda
fu foücitud. O quanto forceja con fu femblante , porque
mueftre agrado á los mifmos á quienes profelTa mortal odio!
Quanto trabajo le cuefta reprimir todas aquellas inclinaciones
viciofas, que pueden dificultar fus medras ! De la pafsion
dominante , fon victimas todas las demás pafsiones : y el
vicio de la ambición ,como tyrano dueño , fobre atormentar-
le por si mifmo , le prohibe todos aquellos guftos á que le
lleva el defeo. Vé al que vá á la Comedia , al que logra el
paíléo honeftoj al que afsiftc al banquete, al que goza ei
~ " Sarao
ia VIRTUD ; Y VICIO;
Sarao. T o d o lo ve , y todo lo embidia ; pero los apetitos?
eftán en é l , aunque furiofos, aprifionados, como los Vientos
en la cárcel d e E o l o .

//// indignantes magno cum murmure montis


Circum claufira fremunt.

P Logrado el puefto no fe minora la aníia, folo moda


'de objeto, porque fe traslada la mira al afccnfo ¡inmediato,
añadiendo el cuidado de no perder el que ha confeguido.
Y a fe pufo en vna efcalera, donde ni puede fubir fin fatiga,
ni decenerfe fin moleftia , ni retroceder fin precipicio. Ya.
íe ataron ias inclinaciones viciofas con mas fuertes víncu-
los , creciendo la razónele tener la rienda tirante á fus de-
feos depravados. Solicítale la codicia , inltigale la gula,
abíafitle la incontinencia ; pero , aunque reluctante , obede-
ce á la pafsion , que defpotica le domina. Arde por oprimir,
con vna fentencia iniqua , á aquel hombre que aborrece:
Pero ay fi ello llega á Tribunal íuperior , 6 al Principe mif-í
c í o ! Ama el ocio ; pero fi fe nota fu inaplicación , vá todo
perdido. Siempre eftá temblando vna mudanca de govier«
no , que le dexe en la calle : y no lee alguna vez la Gazeta,
fin el fu fio de que le noticie eftár muerto el Patrono , que le
¿lá la mano. Ay vida mas mífera?
10 El Avaro , ya fe fabe que es vn Martyr de el de-
monio , 6 vn Anacoreta , que con fu abílinencia, y fu retií-'
ro, htize méritos para ir al infierno. El corazon,pamdo entre
los dos defeos deconfervar , y adquirir, padece vna conti-
nua fiebre , mezclada con vn mortal frío: pues fe abraía con-
la aníia de confeguir lo ageno , y tiembla con el Inflo de
perder lo proprio. Tiene hambre , y no come ; tiene fed, •
y no bebe ; tiene neccfsidad , y no vepofa. Jamás fe vé li-
bre deíbbrefakos. Ningún ratón fe mueve en el ííkncic de
la noche , que con el ruido no le dé efpec'ie de fer vn ladrón •
que le efcala. Ningún viento fopla , que en íu imaginación •'
no amenace naufragio al Navio, (pe tiene puefto en comer-
cio. Ninguna guerra fe fufeita, que no coníídcre yá á los
güv:aii§os tümdo fus tierras. Qualqaier rencilla departid!-'
t)íscünsb SEGUNDÓ.' al-
iares , dentro de fu idea, viene á parar en popular tumuU
to , que lleva á faco el caudal. No ay nubécula , que no
imagine tempeíluofa para fus viñas, y mieíles. No ay in-
temperie , que no amague corrupción á lo que tiene recogido
en las troxes. Qué anguillas tan graves , quando teniendo
muchos que vender , fe baxa el precio á los frutos !. Siempre
acofado de pavores, anda medicando nuevos efeondijos mas
feguros donde retirar el dinero; de m o d o , que ni los Ange-
les fupieífen de él , ni aun Dios , fi fueífe pofsible. Frequen*.
teniente leviíita aífuilado , y dndofode hallar el dinero en-
el efeondijo , aunque íiempre cierto de encontrar el cor.vzon
en el dinero. Con inquietud anfioía le mira: tal vez no fe.
atreve á tocarle , recelofo de que fe le haga ceniza entre las
manos. Afsi paila, fus dias , pingue de bienes , y mareyrizado
de temores , para llegar á la hora fatal , como el Rey Agag
alfuplicio: Pinguifsimus, O" treman* Ay vida masdeicü-
chada?
11 Acafo en el Lafcivo hallaremos mas defeanfo Nin-
5

guno carga con mayor fatiga. Si la baxeza de el penfamien-


t o , ó la villanía de el apetito, le determinan á delectes
venales: iuego£e¡viene á los ojos el detrimento en lastres
cofas mas apreciables de eüa v i d a , honra , falud , y ha •.ien-
da. De charco en charco va laclando fu fed , hafla que alguna
agua infecta le apeíta toda la ían.gre , poniéndole á rieígo la
vida , 6 ha lleudóle la reftauracion muy cortóla. Aunque
mejore en la falud., queda achacofa de por vida la reputa-
ción. Y (i es verdad que aquella medicina, á. quien debió
fu reftablecimiento , irrita mas el apetito , para caer por
medio de nuevos exceíTos en nueva enfermedad, y en nue-.
Va cura: qué defdicha es , que el fuego de la incontinencia , en
Vez de extinguirle , fe vaya avivando con la edad , para arder
violento aun en las cenizas de la vejez?
12 Mas fi el rcfplandor de fu fortuna, ó el mérito
de la perfona , levantaren fus defeos á objetos de otra ef-
fera , evitará parte de los inconvenientes apuntados , para
incurrir en otros mayores ; que es lo miímoquc caer en Scy-i
Ha, huyendo de Charíbdis. Semejantes empeñes eftán fem-i
fefsidoi de; fuños.^inquietudes ¡ y peligros. Qué aían ,m?en-;
• " . ~~ TRAS
i\ "VIRTUD , Y VICIO,
tras ciara la pretcnfion ! Bnfcart los ojos el fueño , y ftb íé
encuentran » porque ( como experimentaba Jacob , aunque
amante honeíto) anda de ellos fugitivo. Buíca el corazón
repofo, y no le halla. De éfte modo concibe primero dolor;
para producir defpues la maldad. Bacilante entre los medios
de lograr el defignio , todos fe aprueban , y todos fe repu-
dian : Ineertcs tanta e/i diftordia mentís. Tiembla al pea-
lar en la posibilidad de la repulfa. El amor le arraftra , el
temor le detiene. Todo el camino de la pretenfion ve lleno de
riefgos, los qualesen llegando á la poífefsion fe múltipla
can* El ofendido fuele fer mas de vno , los lances muchos;
y es moralmente impofsible, que en tantos palios no fe ha-:
ga algún ruido , con que defpierte la fofpecha , para que al
fin acierte con la verdad el cuidado. Lograda la empreíTay
no ay infulto que carezca de fobrefalto. Qué placer fincero
tendrá vn hombre, quando no puede prefeindir los guftos
de los riefgos ? No hará movimiento alguno ázia el delito, en
que no fe le reprefente el agraviado con vn puñal, 6 vna
piftola en la mano. Eñe peligro íiempre le va (iguiendo á qual-j
quiera parte que vaya. Y efte es puntualmente aquel infeliz
citado de tener, como pendiente, delante de los ojos la propria
v i d a , con vn continuado temor de perderla, que Dios inti-
mo á fu Pueblo,como vna maldición terrible : Eterit vita tua
quafi pendens ante te. Timebis no£ie, & di'e, Ú" non credes
vita tua.
13 Pero confieftto en que aya cireunftancias en qué
carezca de eftos temores. N o p o r e f l o l e faltarán gravifsimoá
difguiKiS. Si tras de el logro de el apetito entra el tedio , co^
mo fucedió á Amnon con Thamár,y corno fucede de ordina-:
rio , vé aquí contrahida vna obligación de por v i d a , por
vna delicia inftantanea. Si fe refuclve á romper el lazo , fe
expone á las iras de vna muger abandonada , á quien el
defprecio , o enfuerece el amor , 6 el odio : f i e n d o v n o , y
otro igualmente peligrofo.. Si permanece en fu criminal afee*
to , mucho mayor es la impaciencia de no gozar con liber-
tad lo que ama , que la complacencia en el deleyte , que fur-
tivamente víurpa : y efpecialmente íi el objeto es poíTeido
£ta legitimo dueño, no p_ae.de menos de roerle las entrañas
DISCURSO SEGUNDO. 23
vná émbidia rab iofa. Pues que, fi llega el cafo de vnos zelcs?
Bien fab en los que han experimentado el rigor de ellas fu*
r í a s , qtianto excede al placer de los mas Íntimos deleytess
y que contrapefa vndia folo de elle infierno , á años ente-
ros de aquella mentida gloria. Confiderefe todo lo dicho, y
refpondafeme defpues , fi le puede difcurrir efiado mas infet
llz. Auguftino, que tanto tiempo fe vio enredado en el lab er
rínto de los tres vicios expreflados , es buen teftigo, de que
el plato que prefentan al apetito , efiá. relleno de hieles.
Oyganfe fus palabras , hab lando con Dios , en el lib ro fexto
de fus Confefsiones : Inhiabam honoribus , lucris , coniugio,
& tu irrtdebas, patiebar in tijs cupiditatibus amarifsimas^
difficultates,

%. I IT.
[74 " ^ T I ay que penfar, que aun aquellos pocos horas
1 ^ b res , en quienes, refpe&o de los demás, es
ley el antojo , para cuya libertad no ay rienda alguna , ello est-
íos Sob eranos, furquen el piélago de el vicio fin tormenta
alguna. Tamb ién para ellos la agua de efle mar es fob rada-
mente amarga. Nerón fué Deidad de la Tierra ; conviene á
faber, dueño de todo el Imperio Romano. Soleó la rienda
con la mayor largueza imaginab le á todas fus perverfas in-«
ilinaciones : y fus inclinaciones eran decretos irrefragab lesá
№0 le afligía la carga de el govierno : porque b ien lexos de
tener el Principado fob re los omb ros , como para fcxemplo
de los demás, tuvo el mejor de todos los Principes , le pu-í
fo deb axo de los píes. T o d o el Mundo ob edecia al Cetro , y
el Cetro fervia al apetito. Poíleia quanto amab a ; matab a
quanto ab orrecía. El amor tenia en fus manos el logro;
y el odio en las fuyas el cuchillo. No pudo llegar á mas
horrible eftravagancia vno , y otro aféelo, que á complacer-
fe lu crueldad en el incenoiio de R e m a , y fu torpeza en las
indignidades de el otro fexo. Todo lo configuió, para opro»
brio de los hombres, aquel monftruo de maldades.
15 Quien creerá que eñe Principe , de cuyo alvedrio
(¡faefclavo d O r b e , n o gozaiíe vná.vida alegre\ Puts tan*.
tp
24 VIRTUD ¡ Y VICIO,
codillo de cieña dicha, q u e , como teítifica Tácito , fietíí*
pre efiaba poíiéido de terrores : Faeinorum recordatione nun~
quam timare vacuas. Y Suetonio añade, que no pudiendo
repoíar de noche, andaba dando buekas como aturdido por
los falon.es de fu Palacio.
16 Tiberio fue igual á Nerón en el dominio , y poed
inferior en la maldad. Con todo, vivía tan inquieto , y tur-i
bado , que no podia menos de explicar en gemidos , y pa-
labras fus dolores , para aliviar algo el corazón de la opref-
íion de las anguftias, Afsi lo afirma el mifmo Tácito : Ti-,
berium non fortuna non folitudines protegebant , qu'm
tormenta peñoris , fuafque ipfe panas fateretur. Y poco
¿uites , refiriendo vn dolorofo gemido fuyo en cierta car-i
t a , eferita ai Senado , dice : Que fus proprios delitos fe
avian transformado para atormentarle en verdugos : Aden
facinora atque ftagitia ipjf quoqne in fupliiium verte-
rant.
17 Efias anguíltas de los Principes malos , por la
mayor parte dependen de que viendofe aborrecidos de to-i
d o s , fiempre eflán con el fufto'de vna confpiracion. Con^f
íideran , que entre tantos como les defean la muerte , nQ
faltarán algunos que tengan oífadia para executarla ; y afsi,
no pueden en todas fus delicias lograr mas placer, que el
que tuviera, con. vna dulce mufica , el reo que efiá efpe«:
rando la fatal fentencia. Por eflb Dionyfio , Tyrano de Sici-:
lia , dsfengañó oportunamente al otro embidiofo de fu feli-
cidad , haziendole fentar á vn efplendido banquete, debaxo
de la punta de vna efpada, que pendía de frágil hilo fobre
fu cuello , y dándole á conocer, que eífe puntualmente era el
eftado en que le tenia fu fortuna,
18 Sobre ef¿a congoxa , que es tranfeendente á to-i
dos los Tyranos , á ningún Principe , por feliz que fea,
le falcan gravifsimos difguftos. Alexandro eftá lleno de glo-
ria , y fe aflige, porque falca vn Homero que le celebre.
Linfonjeale á Áugufto confiante la fortuna ; y porque fe
defeuida vna vez fola con las Legiones de Alemania , pafla
mucho tiempo dando gritos de dia , y de noche , como
y a lpco. Apacienta Caligula ¡Cu faúaen. tanta, fangre vertida;
DISCURSO SEGUNDO. 25
y fe laftima de que no cftén todas las Cabezas de el" Pue-
blo Romano fobre vn cuello , para echarlas á tierra de
'vn golpe. E l Ambiciofo gime , porque no puede hazcrfc
dueño de todo el Mundo : El Codiciofo , porque no pue-
de meter en fu herario los teforos de otros Reynos : Eí
.Vengativo , porque no puede deftruir al Principe confi-
nante , que le ha ofendido : El Lafcivo , porque no falta
en fu imaginación algún objeto éftraño , exempto de la ju-
rifdiccion de fu antojo. Afsife mezclan amarguifsimas afile-;
ejones en las mas efelarecidas fortunas.

§. IV.
íS> ' T ^ A N cierta es , y tan general aquella fentenciav
J_ que pone la Sabiduría en las bocas de todos
íos impíos , quando llegan á la región de el defengaño:
JLijfati fumus in via iníquítatís , & perditionis , & am-
bulavimus vías difíciles. O quanto nos hemos fatigado en
el camino de la perdición ! N o fué defeanfo el nueftro, fino
canfera : no delicia , fino congoxa. A y de nofotros , que
hemos continuado la carrera déla v i d a , no por'deliciólos
jardines, 6 amenas floreftas, si por afperas breñas, y féti-
das intrincadas ! Efto dicen rodos, los condenados : Talia
dixerunt in inferno hi qui peccaverunt. Todos ? Si. T o -
dos lo dicen, y dicen la verdad. Todos los pecadores tie-
nenfu infierno pequeño en eñe Mundo. Todos caminan por
. laafpereza, para el precipicio. Todos beben las hezes de
. aquel cáliz , que David pinta en la mano de el Señor:
Calix in mana Domini vini meri plenus mixto : & indi-
navit ex boc in hoc , vertmtamen fax eius non e/i exina*
ni ta, bibent omnes poce atores 'terree. Y es precifo que fea
afsi: porque fegun la mas recia inteligencia el vino puro
s

es para les Santos en la P a t r i a , donde es puro el gozo : el


mezclado es pava los Juftos en la tierra , donde fe les mez-
cla la tribulación con el deleyte : con que á los pecadores,
aun en efta vida no les quedan fino amargas , y petadas
hey.es. Efta.-- beben todos: Omnes. Todos , fifirefervar ningu-
no, ni aun de aquellos que parecen colmados de dichas.
¡Torno I. ', D Parí
lo VIRTUD , Y VICIÓ,
20 Para cuya clara inteligencia , y para apretar mas
el argumento que tratamos, fe debe advertir , que ay en
efta vida mortal vna aflicción gravifsima . la qua! ficñdo
propria de todos , y folos los pecadores , aun es mas pro-
pria de los que parecen mas felizes. Efta confifte en la con-
fideracion de ia muerte. N o ay duda , que todo viviente tie-
ne horror á aquel trance fatal. , y f contrifta naturalmen-
e

te , quando le ocurre , que es precito paitar por él ; pero


nVücho mas fin comparación aquel, que desfrutando todos
los regalos de la fortuna , tiene puefta en ellos tocia, fu di-
cha. Contémplete vn hombre r i c o , poderofo , refpetado,
• obedecido , à quien nada falta , ni para la conveniencia,
ni para el deieyte , y por mas vago que tenga el apetito,
nacía niega- la fortuna á fu defeo. Elie quando pienfa en
que ha de morir ( y pienfa muchas vezes , fin poder reme-
diarlo ) no puede menos de afligirte extremadamente. La
confideracion de la muerte^ à quien no aprovecha para la
enmienda, folo firve de tortura. Demos que fea vn refuel-
toAtheiíia , tan ciego , que ni aun duda le quede de la im-
mortalidad de la A l m a , y que por configuiente no le dé la
menor pena ia fuerte de la otra vida. P o r lo menos confi-
derà en la muerte vn defapiadado , y feroz tyrano , que le
ha de defpojar de quanto tiene, y de quanto ama. L a ha-
zienda que poítee , el banquete en que fe regala, la caza en
que fe entretiene, lamufica que le deleyta , la concubina à
quien adora , todo fe ha de perder de vn golpe., para no
recobrarlo jamás. Quanto mayores placeres goze , tanto^
fera mas trille efta confideracion. E l defdichado , vltraja-
d o de la fuerte, y aun el que eftá conílituido en mediana
fortuna , tienen, el leve confuelo de que la muerte les ha de
quitar muchos petares. Pero qué confuelo tendrá el que vé,
que folo le ha de robar delicias ? Para todos es la muerte
terrible; paraefte terribilifsima. Todos aman con inte níif-
fimo ardor la propria felicidad , y à proporción de el ar-
dor con que fe ama, es el dolor con que fe pierde. Efte
hombre, pues, que juzga aver llegado al colmo de la dicha,
fii conoce otra que la que poítee, con quanta anguilla eílaráí
friendo c|ue toda, fin referyar nada, la ha de perder vn dia!
.Discurso Segundo, 27
21 Efta inevitable melancolía en qualquicra hom-
bre , á quien alhaga la fortuna, fe aumenta mucho cuan-
do empieza á declinar algo la edad. L a vida verdadera-
mente defde la edad confidente en adelante , no es mas
'que vna enfermedad chronica ,• quevá difponiendo parala
muerte, 6 por decirlo mejor , es la mifma muerte inchoa-
da. En llegando aquí, el poderofo , en las fuerzas q u e v á
perdiendo , en las dolencias que va cobrando , tiene vn
continuado avifo, deque poco á poco fe le vá defmoro*
nando con el domicilio de la vida , el templo de la fortu-
na. A efto , repaífa vno por vno con el penfamiento todos
los deleytesque goza, todas las prendas que. ama , y ca-[
d a vna le arranca de el corazón vn gemido , con la refle-
xioa'd.equefe vá acercando el tiempo de la defpedida d o -
lorofa. Buelve á dar otra ojeada á la muerte, y cafí con
las palabras de aquel defdichado Rey , oprimido de dolor,
prorrumpe contra ella con vna fentida quexa , no tanto de-
que le aya de cortar el hilo de la vida , quanto de que le
,aya de feparar para vna eterna aufencia, de quanto eftima,
y adora : Siccine feparat amara mors ! O pecadores , a
quienes llama el Mundo felizes , efto es vivir ? Defengañefe
el Mundo , que vofotros fois los que cargáis con quanto
tiene de mas d u r o , y petado la mortalidad. T o d o vueílro
defeanfo es fatiga, todavueftra delicia es anguftia, todo
yueftro néctar es poncoña.
22 Y pues no podéis menos de conocerlo, oid aora,-
para vueftro confuelo , y vtilidad , la mas dulce , y fenora
voz , que por Órgano Divino fe efparció á todo el ámbito
de el Mundo. Oíd , que con vofotros habla. O i d , y apro-
vechaos : Venite ád me omnes, qui laboratis , & onerati
ejiis , & ego reficiam vos. Venid á mi los que trabajáis , y
eftais cargados de afanes, que yo os aliviaré. Eftas palabras
es cierto , que llaman á los pecadores, que fon los que eftán
diftantes deChrifto. Luego eftos for los que pallan vna vida
trabajofa. Combidalos á que fe acerquen á é l , efto es , que
abracen la virtud: luego los virtuofos fon los que gozan de
•defeanfo, y alivio. Veis aqui , que es fentencia Evangélica
yna, y otra parte de el aífumpto que voy probando.
28 VIRTUD , Y VICIÓj

§. V.
23 T\ / T A S pues he demoftrado la primera pafté Cófii
IVA l¿ razón natural, y con la experiencia, ha-
re lo miímo con la fegunda. Y lo primero debo confeíTar,
que los principios de la virtud fon trabajofos: Ardua pri-
ma <oia e/i. Efpecialmente en aquellos , que eíluvieron lar-
g o tiempo debaxo de el dominio de fus pafsicnes. L o s
hábitos viciofosfon vnos enemigos,que álos primeros com-
bates hazen cruelifsima guerra ; pero fus fuercasfe van de-
bilitando mas cada dia ; y aun tal vez , por vn milagro de
la gracia , fon poftrados enteramente al primer choque.
Lafalida , que haze el viciofo de el pecado , es en vn t o -
do femejante á la fuga , que executaron los Hebreos de
E g y p t o . Qué afligidos los pobres , quando con el M a r
[Vermejo á la frente , vieron el Exercito Gitano á la ef-
palda ! Qué orgullofos los Egypcios ! Qué débiles los He*,
breos ! Y a tratan ellos de rendirle , quando esforzando la
,Voz de Moyfes al Pueblo , e a l f r a é l , le dice , entra el pie
olfado en el golfo , que Dios eftá empeñado en tu defenfa.
Obedecen , y al tocar la arena , fe defvia la agua. D e tro-
pel fe arrojan á. ellos las Tropas de Faraón. O quanta fo-
bervia en los Gitanos ! Quanto miedo en los Hebreos!
C o n todo, temblando caminan hafta tocar la orilla opuefta,
y al llegar á ella , boiviendo atrás los ojos, vén fepulrarfe
;en las hondas fus enemigos. Conviertefe en placer el pefar,
y en cánticos los gemidos.
24 N o es de orro modo la fuga, que haze el peca-
d o r de el vicio. Egypto es el eftado de la culpa. L o s ene-
migos ,que liguen al pecador fugitivo , fon las inclinacio-
nes-viciofas, de quienes fué largo tiempo efciavo. Aquellas
eftán fuertes , efte débil. El primer aífalto es furioío. Moy-
fes es la virtud que anima. Rompe , en fin , el pecador por
vn piélago de dificultades ; y aunque en algunos es mas
larga la carrera, vltimamente logra ver ahogadas todas fus
pafsiones. Afsienta el pié en la-orilla opuefta : Y qué lefu-
gede ? f^o njjfmo que al Pueblo Hebreo, prorrumpir en
}

" " can-.


DISCURSO SEGUNDO. 29
tanticos de gozo. Siguiendo defpues el camino de la Tierra
tíe Promifsion , vna , u otra vez falen al paíTo algunos
enemigos, efto e s , algunas tentaciones ; pero fe vencen,
como Moyfes venció á los Amalecitas , levantando las ma-
nos al Cielo , en que fe fignifica la fuerca de la ora^on¿¡
Encueatranfe también tal vez vnas aguas amargas, convie-
ne á faber , las tribulaciones; pero vn leño milagrofamen-:
te las endulca: porque la Cruz ó Pafsion de ei Salvador
las fuaviza. Y de M a r á , ó Marath , lugar que fignifica
amargura á razón de eftas aguas, fe haze traníito á Elim,
litio deliciofo , y ameno.
25 Efto es lo que fucede al pecador, fugitivo de el v i -
cio , debaxo de el amparo de la Omnipotencia, que nun-
ca falta á. quien le foiicita; pero es mas de nueftro propo-
fito confiderar el eítado de la virtud mas cerca de la natu-
raleza , ó prefeindiendo de los extraordinarios auxiíio-s
¿ e la gracia,

§. VI. :

16 t j L monte excelfo de la virtud ,- eftá formado al


• : X_j rebés de todos los demás montes. En les
montes materiales fon amenas las faldas, y afperas las c l a -
mas : afsi corno fe vá í'ubiendo' por ellos , fe va diín-inu-
yendo la amenidad, y creciendo la afpereza. El monte de
la virtud tiene defabri da la falda, y graciofa la eminencia.
E l que quiere arribarle, á losprimeros paífos no encuen-
tra fino piedras, efpinas, y abrojo^ aísi como fe vá ade-
:

lantando el curio , fe vá difmipú'yeñdo la afpereza, y fe v á


defeubriendo la amenidad : nafta que .en fin en la c i m b r e
•no fe encuentran fino hermofas flores,y regaladas plantas., Vj
criftalinasfuentes. , • . . . -o:';;
27' El primer t'ranfií'o es' fumamente trabajofb , y
refvaladízo : Per injidias iter eft , forma/que 'ferarum. Lia-:
manle al recien convertido, defde el mar del M u n d o , los/
cantos de las Sirenas. Aterranle por la parte del monte;
los rugidos de los Leones. Mira con ternura la llanura
X#e-^ue,dex|. Contempla;COÜ pavor el ceño, de %
:
Virtud , y Vicio,
montaña a que afplra. Libre déla cárcel del pecado, áuE$
lleva en fus pafsiones las cadenas , cuya pefadumbre conf-
uirá con la arduidad de ei camino , para hazer tardo , y
congoxofo el movimiento.. Oye á las efpaldas los blan-
do? clamores de ios deieytes , que le dicen como á Auguf-
tino : Es pofsible , que nos abandonas ? Dimittis ne nos } E s
pofsible , que te deípides , y aufentas de nofotros para
fiémpre ? Et a momento ifio non erimus tpum vltra m
atemum ? N o obftante camina afligido vn poco , tal vez
interrumpiendo el paflo algún tropiezo. Y a vá hallando
menos afpera la fenda : yá los clamores de las delicias
terrenas hazen menos imprefsion , porque fe oyen demás
lexos, Afsi lo experimentaba el mifmo Auguftino: Et áu¿
diebameas iam longeminus quam dimidius, veluti adorfa
mufitantes. Adelantando algunos paífos mas , yá fe va
descubriendo algo llano el camino ; y aunque vna , u
otra vez reprefenta la coftumbre antigua , los gozados
placeres , y la dificultad de vivir fin ellos , es tan lán-
guidamente , y con tanta, tibieza , que no haze fueres
alguna: Cum diceret mihi conjuetudo violenta: putas ne jins
ijiis poter'is } S,ediam'tepidifsime hoc dicebat.
28 , Arriba , en fin ¿á la parte fuperior del monte~,¡
donde vé voa llanura. hermofa , y apacible. E l fudor , y t

lagrimas, con que regó la f a l d a , fructifican en la cum-


bre : y aqui logra en abundantes mieífes , .quanto acu-
llá cultivó en prolixos afanes. Efto eftá oculto á los ojos 1
de el Mundo ; el qual , antes bien al confiderarle retira-
do á lo alto de la "montaña , le. juzga metido en vna ar-,
duidad.inaccefsible. PienC^que aquel hombre no puede
tener infíante de repofo , imaginando que ei fitio que
habita es vri; campo , donde batallan, con la mayor furia
t

los Elementos , y á donde fe arroja con mayor fuerza


-el, rigor de las. tempeftades. Pero á él T e focede lo mif-
mo , que á el que efcaló la cumbre de el Olympo , don-
de fe goza fiempre íereno el C i e l o : donde no fe inquie-
ta con la. mas leve agitación eLAyre , en tanto grado,
íque fe cónfervan años enteros los caracferes impreífos en
l las cenizas > donde los. nublados Té mira», fi^mpte deba-
r " xo.
DISCURSO SEGUNDO; 31
SO, de m o d o , que fulminan en la falda, fin tocar jama?
en la eminencia ; y entre tanto , los que caminan por los
Valles vecinos , fi la noticia , ó la experiencia no los ha
defengáñado , pienfan que aquella cumb re eftá toda 'ob f-
curecida de nieb las , y ab raífada de rayos.
\ 29 N i m a s , ni menos las incomodidades de la vi-
da , las b órrafcas de la fortuna, llueven fob re los que
habitan los humildes Valles de el Mundo : no fob re aquel,
que ha afcendido al monte de Dios , y monte pingue,
como l e llama David. Pues qué ? L a enfermedad , el do-
lor , la pérdida de hazienda , la perfecucion, la ignomi-
nia , con otras calamidades , no fon comunes á los Juftos
con los demás hombres ? A efto no fe les agrega en parti-
cular el filencio , el retiro , la vigilia, la oración , la difcx-
plina , el ayuno , con otras penalidades ? T o d o es cierto.
Elfos fon los nub lados , que fe vén de la parte de á fuera;
pero que no fub en á la cumb re de el Olympo , efto e s , no
llegan á turb ar la parte fuperior de la Alma.
30 N o quiero, yo decir ,que el Jufto fea infeoíib le.-
EíTe fue exceflb de los Eftoycos, que en la oficina de la
virtud pretendían transformar los homb res en marmoles.
Padecen los virtuofos ; pero mucho menos que los delin-
quentes. A efta deíigualdad fe añade otra notab le : y es,
que las moleftias que v n o s , y otros padecen, á los delin-
quentes los comprehenden en el todo , á los virtuofos fo-
loen vna parte. Diftinguenfe el efpiritu de e l . J u f t o , y el
de el pecador , como el Elemento de el Ayre , y el de la
Tierra. L a Tierra , en todas fus Regiones, efiá expuefta á
las injurias de los'demás Elementos. El Ayre , íblo en fu
porción inferior , que es el teatro de vapores, y exhala-
ciones : pues á la que llaman Región fuperior de el A y r e ,
no alcanca alguna de las alteraciones fenfib les. Siempre fe
pbferva alli vn tenor i g u a l , fiempre fe defeub re fereno
el C i e l o , y fiempre fe goza vna aura
criftalina, y pura»

&*l №. («fe sP3 (%) M; sP) (1T) <*3*


VIRTUD ,* Vicío¿

§. VIL
§í T Q E R O expongamos con •mas efpecifícáclóñ las
_|_ conveniencias temporales de la virtud. L o
cfue es de mayor momento , fi no el todo , en efta parte,
es , que en todas aquellas cofas, que effencialmente compo-
nen la felicidad temporal, conviene á faber, v i d a , falud,
honra , y hazicnda , es muy mejorado el virtuofo , ref-
pectode el que no lo es. L a honra , nadie ignora que es
parto legitimo de la virtud. P o r eífo los Romanos edifi-
caron vnidos los Templos de ellas dos dichas , que ve-
neraban como Deidades, de modo , que folo por el Tem-
plo de la virtud , fe podia entrar al Templo de el ho-
nor. Los mifmos que huyen de la practica de la virtud,
la miran con eftimacion , y reverencia. L a falud , y lar-
g a v i d a , es mas natural, y pofsible en el virtuofo , por
la templanca con que vive , al paño que el viciólo con
fus exceflbs fe eftraga la falud , y fe acorta la vida. L a
fiazienda tiene vna gran maeftra de economía en la vir-:
tud , fieñdo cierto que fe conferva evitando toda fuper-
íliiidad. Todo lo comprehendib Salomón , quando dixo,'
que el obediente á los Divinos-Mandatos, tiene en vna mano
la larga v i d a , y en la otra la hazienda , y la honra: Longi*
tuda áÁerum in dextera eius, & in Ji ni jira illius divitia, &
gloria. (Prov.^,) Aun quando no goze otras ventajas el
Jufto fobre el viciofo, no mejora mucho de fuerte?
32 Pero otras tiene. L a fuavidad , y dulcura, que
al Alma ocafiona la buena conciencia , coloca en muy
eminente grado la fortuna de los Juftos , fobre la de los
pecadores. Es efta vna felicidad de poco bulto ; pero de
xnucha monta: vna piedra preciofa,que en breves dimen-
¿iones encierra grandes quilates. Es la conciencir. efpejo
de la Alma : y íucede al Jufto , y al. pecador. , quando
fe miran en efte efpejo , lo que á la hermofa „ y la fea,
al veris en el criftal : aquella fe complace, porque ve
perfecciones ; efta fe entriftece , porque no regiftra fino
iu^ajes. Y aun es de peor condición, el deUnquente, que
DISCURSO SEGUNDO, 33
ía fea: porque efta huye ele el efpejo , fi quiere; el pecador
no puede. Aunque.no fe ponga él delante de el efpejo.-.el
efpejo fe pone delante de é l : y no puede el entendimien-
to cerrar los ojos , quando la memoria le preíenta las imá-
genes de fus maldades. En aquel citado , el pecado hor-
roriza, y no-deleyta : porque-fe fué el güfío , y quedo
Cola la mancha. Añadcíele al pecador en efta coyuntura
la trille reflexión de que fe pueden defcubrír fus infa-
mias: en qus le allulla, ya la inevitable tortura de el r u -
b o r , ya la pena, que lepreferive la ley. El J u f t o , p o r
el contrario , nada tiene que temer. Si eíconde al Mundo
fus acciones , no es por el miedo de la nota; antes por
el riefgo de el aplaufo. A folas fe las contempla ; y fi es
tan dichofo, que todas las halle buenas , recibe aquel-pu-
rifsimo placer , que el Choronifta Sagrado aun en Dios
pintó como gloria accidental j: Viá-it Deas cuneta qu¡e
fecerat, & crant valde bona.
33 N o menor diferencia ay entre el Jufto , y el
pecador , quando , ó enojada la fortuna efgrime fus re-
befes , ó fevero el Cielo .reparte tribulaciones. Pierde
el pecador la hazienda , -muerefele la perfona amada,
•recibe vna injuria de fugeto con quien la venganca le es
impofsible. Qué confuelo tiene ? Ninguno. R a b i a , fe en-
furece , arde , no come , no bebe , no repofa : y fon
peores los íimptomas , que el mal : tan .crueles tal vez,
que le poítran en la c a m a , y quitan la vida •: y tal vez
tan rcroces , que para quitarfela vfan de fus proprias ma-
nos. Pero el jufto , conítituido en el mifmo accidente , lo
primero que haze es levantar los ojos al Cielo ; y ya con-
temple la tribulación corno eaftigo de la culpa , ya co-
mo excrcicío de la paciencia , fabe que de todos modos
es' beneficio. Sabe que el golpe viene de mano amante,-
y fabe que para fu bien proprio le hiere. N o folo fe
conforma , mas fe lo eltima. Y veis aqui con vna ad-
mirable metamorphofis , convertido el pefar en placer.
De efto modo , lo que para el impío es poncoña , para el
Jufto es'triaca : porque diligentibus Deum ornnia
•coogerzntur ta bonum,
tTomo I. .E V 1 1 í«
34 VIRTUD , Y VICIO,

§. VIII.
34 /~"\UIEM ya á viftadetodo lo que hemospoft-
1 / derado en eñe Capitulo , no fe dará por
convencido , de que aun en efta vida es in-
comparablemente mejor la fuerte de el J u ñ o , que la de
el viciofo ? Que aun el defeanfo , y conveniencia tem-
poral fe halla folo en el camino de la virtud f Y qué en
el campo de el vicio , debaxo de la apariencia de ñores,
folo fe producen efpinas?
35 Solo vn argumento tenemos que diíTolver. Eñe
fe toma de aquella fentencia de Chrifto en San Matheo,
en que el gran Maeftro nos aíTegura , qne es ancho, efto es
f á c i l , . e l camino que lleva á la perdición; y al contra-
rio eftrecha , efto es laboriofa, la fenda que conduce a
la vida inmortal.
l6 D i g o que eñe lugar es precifo concillarle con
el otro alegado arriba, en que el mifmo Salvador com-
bida á los pecadores á que ligan el camino de la vir-
tud , proponiéndoles el defeanfo , y fuponiendolos cor*-
goxados debaxo de el pefo de el vicio : Vvnite ai me om-
ines qui laboratis, &c. Es precifo componerle con la dul-
ce fentencia , que en otra parte nos intima : que el yu-
g o de fu ley es fuave , y fu pefo leve. También fe ha
de poner en harmonía , con lo que David nos enfeña , de
que es ancho el camino de los Divinos Preceptos , 6
los Preceptos mifmos: Latum mandatum tuum nimis. En
fin, de tal modo fe ha de entender aquel T e x t o , que no
«fté difeorde con la razón , y con la experiencia.
37 Fácil es la falida, diciendo, que la gracia fua-
viza lo que es afpero á la naturaleza : y que el mifmo
y u g o , que es pefado, coníideradas folo las fuercas natu-
rales , fe haze leve , concurriendo con ellas los auxilios
Divinos. Y afsi concilian los Padres comunmente aque-:
líos Textos.
38 También puede refponderfe, que el Redemptor
habla fplo de los primeros paflos de v n p , y otro cami-
no:
DISCURSO SEGUNDÓ. 3 ?
do : de modo , que el camino de la virtud en los prin-
cipios es trabajólo, deípues fácil ; al contrario, el de el.
vicio fácil al principio , y defpues trabajofo. E l contex-
to miíino da luz para efta inteligencia. Pues animando
Girino á los hombres á que figan el camino de la v i r -
tud , parece que toda la dificultad pone en la entrada:
Intrate pir angAÍlam portam , dice en San Matheo, Co«-
tendite intrare per anguflam portam , pronuncia en San
Lucas. Como fi dixera : En la puerta, ó entrada efta to-
da la renitencia ; y afsí , animaos , forcejad , batallad,
contendré, para vencer la arduidad, que hallareis en la
eítrechéz de la puerta.
39 Es afsi. Efta puerta es tan angofta, que fe eftru-
ja el recién convertido entre fus quicios , haíta exprimir
tantos embebidos afectos. N o folo fe rafga el cutís en
la eítrechura ; mas aun fe dexa en ella defpedazada la pro-
pria carne. Pero paíTado eñe tranfito difícil , fe va e*-
fanchando poco á poco el camino, haíta dilatarfe en flo-
rido , y efpaciofo Valle.

Largior hic campos ather , & tumine vefiit


Purpureo , folemque fuurñ fuA fydera norunt,

40 L a fenda de el vicío , eítá organizada muy de


Otro modo : y fe parece á vn conducho , que , fegun los
Naturaliftas , tiene para fu caverna el Ratón de la India*
Ette fagacifsimo animal, fabiendo la ojeriza que con él
tiene el D r a g ó n , y conociendo la defigualdad de fus fuer-,
cas parareíiftírle , fe defiende de él , y le vence con la
figuiente induftria. Fabrica dos entradas á fu cueba j la
vna angofta , y proporcionada á fu cuerpo ; la otra muy
ancha en la fuperficie de la tierra; pero que fe v a poco á
poco angoftando , de modo , que en la parte mas profun-
da no es mayor la concavidad , que la que correfponde al
cuerpo de el Ratón. El vfo es efte. Quando fe vé acofado
de aquella beftia voraz efte pequeño animalejo * huye á, fu
cueba , entrandofe por el condudo grande , y no dudan-
do el Dragón dé feguirle, fe arroja ai boquerón que ve
?

Ei " ca-_
VIRTUD \ Y VICIO;
'capaz de toda fu corpulencia ; pero como eñe infenfiblé'J
mente fe vá eítrechando , neceffariamente fe ligue , que la.
beftia quede cogida , y apriíionada en la eílrcchura, fin
poder retroceder : lo qual conocido muy bien por el R a -
tón , fale por la otra puerta, y fe venga en el Dragón muy
. á fu güito , haziendole pallo de fu apetito , y de fu
ira.
41, El eftratagema de efte animalejo , es-puntual-...
mente el mifmo , que praéticá con el hombre el demonio.
Ponele el camino de el vicio en la fuperficie muy ancho,
con que no recela el mifero entrarfe por él en feguimicnto de
la prefa de el deleyte. • Vafe eftrechando poco á poco el
camino. Deaqui aprieta vn. cuidado , .de allí. otro. Entre
la dolencia , y la edad ,.que eítan muy llegadas vna á otra,
fe van encogiendo los miembros , y perdiendo fu vfo;
E l miedo , la, folicitud, el d o l o r , la pefadumbre , apriej-
tan cada vez mas,. halla ponerle en tanto cftrecho , que ni
aun el A l m a , con fer efpiritual-, fe puede rebolver. P o r
efte camino llega , en fin , el pecador á lo fumo de la
anguilla, á. aquel,infeliz, citado , de donde es impofsible el.
retroceífo : Ubi nuilA efl redemplio , donde ferá eternamen-
te paito de aquella rabiofa fabandija, que nunca lacia , nii
la voracidad, ni la faña : Mors depafcet eos. Donde exr
gonc el Cardenal.Hugo : Diabolus-depafcetcos.
4Z Eíla notable diferencia, y opoficion, que ay en-
tre el camino de la virtud , y el,de. el vicio , no fe ocultó
aun á los mifmos Gentiles; .porque para efte conocimien-
to , baila la razón natural : y. afsi pintó hermofament^
5^irgilio la diftincion de vna , y otra.fenda eneítos Verfos..

Nam via virtutis dextrum- petit ardua collem,


Difficilemque additum primum fpeflantibus offerti-.
Sed réquiem prabet fe/sis in vértice fummo.
Molle ofientat iter via lata ; fed vi tima meta
T-racipitat captos voluitque per ardua faxa.
}

'43 Áviendo .yo , algún tiempo h a , diétadó la fu


guíente C a r t a , á vn Mqnge de mi R e l i g i ó n , para vna hei?
mana
DISCURSO SEGUNDO.: 37
Ssíána fuyá., perfuadicnclcla á que fe hizieíTe Religioía,.
con el motivo ele reprefentarle mas conveniencias tempo-
rales dentro de el Clauftro , que en el S i g l o , me pareció
conveniente ingerirla aqui, porque pertenece al argumento,
que feguimos en efte Capitulo , y, le esfuerca mucho.

CJi\TA № UN RELIGIOSO A UHA


hermana Juya , exh ortándola a que prefiriefjt
el eftado de ^eltgiofa al de
cafada.,,.

j ; • " ' V T R A v e z , hermana'mía , y con •diííinto modo,:.


„ I 1 b uelvo á comb atir tu renitencia , fob re el
„ aífumpto , que tantas vezes lo ha fido de
„ nueftras converfaciones: efto es , .perfuadirte á que ab ra-
ees el eftado Religiofo. Y a hazia quenta de que fe me-
,., avian-acab ado las armas para efta empreífa : pues no me-
„ fugirió razón alguna mi difeurfo , cuya eficacia no aya-
,, b urlado , ó tu agudeza , 6 tu indocilidad. Mas aora me
ha ocurrido vfar. de otras b ien diferentes , y aun b ien im-
„ proprias , ft fe confuirá la opinión común : pues dexan-
„ do á parte las importancias de aquel eftado , para lle-
„ gar á nueftro vltimo fin, he de tentar reducirte por el
camino de la-conveniencia temporal.
„ Y á me parece que te veo eftrañarel intento, y-aun
darle el nomb re de defvario : como que efto fea lo mif-
„ mo , que querer que hueles al Cielo , fin apartarte de la
„ T i e r r a , ó que navegues al otro Emifpherio , fin perder
„ de vifta la orilla. Dirás , que no deb en b üfcarfe couvt-
„ niencias temporales en la Religión ; y q u e , aunque fe
„ b ruquen , no fe hallan. - A lo primero fácil, y b revemen-
„ te fatisfago ,-con que las que te propondré , afsi como
„ licitamente pueden gozarfe , tamb ién fin delito pueden
„ apetecerfe ; .mayormente fiendo de tal calidad , que no
á, .perjudican , .antes conducen á la vida efpiritual. A lo
p l e g a n d o no niego , que afsi .fe pienfa comunmente. Mas
38 VIRTUD , Y Vicro,
„ á la verdad , el Mundo eirá tan ciego , que baña que fea.
el dictamen mas valido , parafer el mas errado.
>, No ignoro las efpinas de la Religión , y las flores
de el Siglo. El error eftá en juzgar , que aquellas fon ef-
„ pinas fin flores , y eftas flores íin efpinas. Quanto mayo-
,, res afperezas encuentra la experiencia en las amenidades de
el Mundo j que en los rigores de el G a u f t r o ! O fi vie-
„ ras las lagrimas de tantos infelices, que las lloran! N o
„ quiero que eoníideres aora á aquellas a quienes la ba-
s

,, xeza de el nacimiento , 6 la falta de induftria, pufo en el


„ miferable eitado de mendigar el fuítento, 6 en el peno-
„ fo afán de regar la tierra con fu fudor. Atiende folo á
„ las mugeres de tu calidad , y de tus medios. A qué par-
te bolverás los ojos , donde no veas alguna , que te los
rt 1 anime con fus tragedias ? Efta gimiendo debaxo de la
jj opreíion de vn tyrano > que transformó en efelava á fu
„ Conforte : aquella fugitiva de los furores de vn zelo»
,, fo , büfcando Vn rincón donde falvar la vida : la otra
fufriendo los diftrahimientos de' vn perdido , en cuya
Compañía folo ha hallado vn hombre , que la dcfpre-
„ cié , fin que el difeurfo le ofrezca remedio para no fen-í
3, tirio.
Dirás , que eftas fon pocas , y mas razón hallas pa¿
5 , ra contarte en lo venidero entre muchas dichofas , que
„ entre pocas infelices : efpecialmente , quando en las pren-
das que te adornan , tienes los inftrumentos para domef-
j , ticar vn genio indócil > en cafo que efle llegue á fer due-
ño de tu albedrio.
„ Muy engañada vives , y muy mal conoces la com-¿
plexion de el genio de los hombres , fi fias tanto en tuS
,j atractivos. No es fu condición apreciar lo preciofo , fino
lo raro. Solo eftiman lo que no poífeen : y fi les merec^
alguna atención la alhaja poñeida , es folo quando la pof-
„ feísion no es fegura. Mas llegando el cafo de no poder
„ enagenarla, como fucede en nueftro affumpto > no folo
la miran fin cuidado, pero aun con tedio. L a foberania
de el matrimonio , muy pocos dias confíente los privile-
í"gios de lahertriofurfc Es prenda efta , que con el tiempo
?
DISCURSO SEGUNDO. 39
fe pierde 5 pero refpedo de el dueño de ella , mucho antes
„ fe pierde fu cftimacion.
,, Ni ay que fiar mas en las prendas de el Alma. Son
„ ellas, á la verdad, de vn temperamento mas fuerte , y mas
„ proporcionado para conftrvar mucho tiempo fu valor.
„ Mas que importa, fi en aquel comercio de las Almas,
.„ es el antojo quien pone precio á las cofas ? T o d o lo con-
„ tinuado enfada. N o haze regalado al manjar lo dulce, íi-
„ no loexquifito. El plato mas fabrofo, muy repetido en-
„ gendra haftio. Aquel fiempre , que fe le atravieífa en la
„ imaginación , al que poífee de por v i d a , llena de mirra,
„ y azibar lo mifmo que goza. Nada tiene el hombre mas
„ inconftante , que el güito. En fu aprehenfion mejora, co-
„ mo mude, aunque mudando empeore, Refueltamcnte me
„ atreveré á decir , que para hazer mas durableTu compla-
„ cencia, le eítaria bien a l a difcreta , poder hazcrfe tonta,
„ y a l a hermofa transformarfe en fea. L a q u e tuvieífe j u -
j , rifdiccion fobre fus facciones de alma , y cuerpo, para
3 , mudarlas á fu gufto , erigiría vn tribunal executivo de
„ las deudas de el cariño. Si el marido fe tiene por dif-
„ creto , á ti , que lo eres , te mirará con ceño , como
„ á quien le litiga, 6 le vfurpala prerrogariva de oráculo
„ déla familia. Sino fe imagina tal , aun citas mas arrief-
3 , gada á fus defvios, confiderandote vn fifcal inevitable
? , de fus defaciertos.
„ Supueíto, pues, que tus gracias no te conceden
• , inmunidad contra los infortunios , tampoco debes lifon-
3

, gearte fobre el corto numero de las mugeres defdicha-i


3)

„ das. N o fon muchas á la verdad las que lo parecen. M e -


>, nos aun las que fe quexan. Pero efto confiíte en que los
„ finfabores de el matrímr.'.fio , en parte los oculta el
„ rubor , y en parte la razón de citado. Tiene el tala-
4» mo mil linages de difguftos , y muy agrios , para
„ quienes la modeftia aun no ha halado vozes. Créeme
j , fobre. mi palabra , ya que no permite defcender á mil-
o c h a individuación eíta materia.
„ Pero en lo que fe concede á las palabras , halla-
2> Ás harto moúvp á tus temores. Las aborrecidas , o
r

def-3
4-0 V i r t u d , y Vicio,
„ tíeípreciadas de -fus maridos fon infinitas : y cfto fin qug
„ nadie Lo entienda , porque fe intcreifa en ei filencio el
pundonor de vno , y otro conforte. En la mugcr es mas
fuerte la razón de el difsimuio ; porque aprehendiendo
„ eonio la mayor ignominia , fer objeto de el defprecio,
tiene por lo miím.o quex.iríé de eífa injuria , que pu-
.,, blicar fu propria afrenta. Ni aun en las mayores im-
„ paciencias'violará ei fecreto ; que para eftc intento tie-
ne muy prompta la verguenca , á cortar las marchas de
la ira,
Pero , 6 que horrendo martyrio es para vna mu-
.,, ger padecer vltrages , de quien defea adoraciones ! Eíto,
„ aun. fin la experiencia , lo conocerás en ti mifma , como
.,, te regiftres el Alma ; fino es que en tu fabrica aya omi-
tido la naturaleza vna propriedad, que 'es- cafi eífencia
s , de eífe iéxo.
„ Vés que tan fenfible es para vna mugcr verfe
-„ aborrecida ? Pues no lo es menos aborrecer. L a circunf-
rancia de aborrecido , en el que es precifo venerar como
dueño , haze la fugecion intolerable , efpecialmente et?
aquel genero de dominio. Es faltidioíifsimo, fobre quan-i
to fe puede explicar, el intimo comercio de aquel eftado,
para quien mira con defagrado al- acreedor de fus condef-
cencias. La muger en ella parte tiene mucho mas que
fufar: porque , mas aprifionado el alvedrio , no goza la
libertad de templar el tedio de tan moleíb. compañia , ha-
p , ziendo algunas breves aufencias de fu cafa.
.„ Pues , hermana mia, fi te líe decir abiertamente lo
•y, que liento , muy pocas mugeres confidero exemptas de
padecer por alguno de eftos dos caminos. Haz reflexión
fobre lo que arriba te llevo dicho , de la inílable condición
„ de el güilo „ de que en vna continuada poífefsi">n , aun lo
mas preciofo eftá expuefto al defprecia ; y ajuftada bien
• , la queata , hallarás , que en muy pocos c o l ó r e l o s fe
s

„ puede prouoftkar- fino vna cortifsima vida á las ternu-


5

ras. Las rencillas de los vulgares nos ofrecen vna prue-


.„ ba, fegura de efta verdad : pues fieudo afsi, que tienen me-
tt nos delfcado ei güilo y por tanto menos arriefgado el
Si
aféelo.
DISCURSO SEGUNDO. 41
5^ afedto à morir de el accidente de el faftidio ,fegunpue-
„ blan el Ayre de clamores, parece el vinculo, que los ü -
„ g a , cadena , que lo.s moleña. Son fáciles de contar fus
„ caricias, y no ay guarifmo para las quexas. N ò prefu-
„ mas menos dolores en los Nobles. Lloran mas , y tienen
,, mas que llorar ; pero fus lagrimas buelven à caer fobre
„ el corazón , porque varios refpe&os les cierran la falida
„ de los ojos.
N o me detendré en pintarte otras muchas defazo-'
ftes , de que pocos matrimonios fe efeapan ; porque co-'
„ mo mas perceptibles , á nadie fe efeonden. Pero no
„ dexc de repaflar tu memoria , la multitud de cuidados,
„ que tienen en continua tortura el corazón de vna madre
« de familias. Quanto defeonfuelo fi no ay hijos ! Y quan-
t , to afán íi los ay ! Que vigilancia baila para fu buena
„ educación ? Si falen malos , que difguftos no ocaíionan?
j j Si fon muchos , que congoxas, al penfar en el modo de
darles eftado à rodos ? Que dolor fi muere alguno?,
Trabajofa fecundidad la de las madres ! Pues los d o s
r , extremos opueftos de nacer , y morir los hijos , todo*
j , ha de fer à coila de fus dolores. Añade á efto la aten-
„ cion continua , que pide el govierno de la hazienda, y»
„ déla cafa, las inquietudes de los pleytos , los atraífos
, , domefticos. Y por decirlo en vna palabra, fi nos ma-.
uifiefta el corazón vna madre de familias , no avrà m o -
5, mento en que no le veamos atravefado de la efpina de
„ algún cuidado penetrante. Y efpecialmente en ellos
tiempos , en que el Mundo fe ha puefto de tan mal fem-
„ blante , que no puede mirarfe fin horror : y las lagrimas
„• -de effe Valle , yà hechas diluvio , crecieron halla inun-.
„ -dar el mas elevado monte : quiero decir -, que el naci-
„ miento mas a l t o , efià fujeto à varios rebefes déla for-:
„ tima , de cuyos infultos antes fe juzgaba privilegia-,
„ do.
„ Buelve aora al retiro de vna Religión los ojos, aun-?
" que no fea fino por defcanfarlos de la* fatiga de mirar
n

9 , tantos objetos funeílos. O que «diftinto theatro es eñe!


' Ay aqui ( no fe puede negar ) varias penalidades ; pero
tt

Imo. h ' ' I a


42 VIRTUD , Y VICIO,
„ "can proporcionadas á la flaqueza de el fexo , que á la
í ;mas débil le Cobran tuercas para el gravamen. El prin-
cipal conílile en algunas horas de C o r o , dlítribuidas de
modo , que no alteran las de el fue.ño. Y aun efto no sé
íi lo llame trabajo : porque íiendo la oración vocal de-
voción , como innata á las mugeres , parece que Dios
les ha colocado el mérito , en lo que para ellas es güito.
En todo lo demás , las leyes tan moderadas, como dicta-
das por la prudencia , y ádminiftradas por la caridad.
Efte es vn imperio, donde reyna el amor. Quantas com-
pañeras tuvieres , otras tantas hermanas tendrás , que
en la aflicción te coníuelen. L a tranquilidad de animo
con que fe v i v e , es eftimable fobre todos los teforos de la
tierra. Y qué precio a y , que pueda igualar aquella ocio-
íidad de cuidados? Pues la particular.no tiene que pen-
far , ni en la familia , ni en la hazienda, ni aun en el fuf-
tento proprio. T o d a la folicitud fe la llevan Dios , y ei.
Alma. De aquidepende aver Conventos, donde las mas
de las Religiofas , á porfía , huyen de fer Preladas , no
tanto por virtud, quanto por conveniencia; porque faben
que lo paitan mejor íiendo fubditas.
„ Acafo te horrorizará vna Claufura continua. A ef-
ta dificultad no tendria que decirte , fí confultaífe tolo
á mi difeurfo ; pero gracias á D i o s , que puedo vfar de
luzesmas fagradas , para difsipar efias fombras. Es caíi
increíble lo que voy á decirte. Aviendo frequentado
algún tiempo los Confefsionarios délas Religiofas , nin-
guna hafta aora en la manifeftacion de fu conciencia, me
toco la materia de Claufura. A ninguna jamás o i , ni el
menor defeonfuelo de padecerla , ni la mas leve tenta-
ción de violarla. Efto en lo natural parece que no ca-
be ; pero gafta Dios muy efpeciales atenciones con fus
Efpofas , fuavizandoles , aunque fea á cofta de milagros,
? glas prifiones en que le han facrificado fu libertad.
„ Caíi lo mifmoíucede en la obfervancia de otra
a, obligación , no menos eífencial, que en la apreheníion de
o, los efpiritus plebeyos , trahe achacofala quietud interior
Si Í£s ^SW9.^fh X i gue eñps , puefta fiempre la
mira
DISCURSO SEGUNDO, 43
mira en la villana condición de nueftra naturaleza , no
tienen ojos para las maravillas de la gracia. Notable
error, no diftinguirlo que pueden Dios , y el hombre,
de lo que puede el hombre folo. Y ' gran teme¡Ídad
aventurarfe à adivinar, que producirá la tierra de que
fomos formados , fin hazer quema de el beneficio de el
cultivo, y de los influxos de el Cielo. Qué importa lo
frágil de nueftro ser , fi quien hizo el todo de la nada,
mas fácilmente" podrá tranformar el barro en o r o , y fa-
bricar vn diamante de vn vidrio ? L a experiencia enfe-
ñ a , que en el Reyno de la gracia , no menos que en.
el imperio de la naturaleza , de materiales muy débiles,
forma Dios piedras preciólas muy duras,
• „ Fuera de que no es menefter recurrir à tan fagrado
afylo, para repeler la injuílicia de fofpechatan villana.
Dentro de lo natural fobran armas para la defenfa : por-
que no es el temperamento de las mugeres, por lo común,
qual eftos rudos le imaginan : ni han llegado á los vm-
brales de la verdadera Philofofia , los que juzgan fu
complexión tan vidriada. Si lo es en algunas , es porque
con fus proprios exceflbs la hizieron enfermiza. Áfsi, que
ay cierta efpecie de pafsiones , en quienes quien nunca ha
fido vencido , à penas tiene que vencer. Y aunque en lo
general , los vicios fon hijos de las pafsiones, fe puede
decir con alguna propriedad , que ay pafsiones , que fon
hijas de los mifmos vicios. Ociofamente he dexado cor-
rer en efte argumento la pluma : pues para ti es efeufada
la advertencia; y los ignorantes, à quienes reprehendo,
no fon capaces de entender lo que les digo.
„ Últimamente , para que acabes de formar concepto
de lo que te efta mejor , propondré à tu confideracion vna
notable diferencia , que ay entre vno , y otro eftado¿-
por lo que mira al placer de la vida; y e s , que en el" de
la Religion fiempre tu eftimacion ha de ir à mas : En el
de el Siglo fiempre ha de ir á menos. Pefa bien efta def.
igualdad en la balança de tu difeurfo. En el Mundo,
donde folo es refpetada la edad floreciente de tu fexo*
afsi como fueres contando d i a s , irás defeoncando ado-
44 VIRTUD , Y VICIO,
radones. O con.qué dolor verás , como fe va defpintan'
do tu belleza en el eípejo, y al mifmo paífo le và fai-
tando á effe idolo el culto 1 Créeme ,. que no ay muger
„ . que á. fus foias-no fe quexe amargamente de el tiempo, ...
fiempre que contempla ,. como le vá robando poco á poco
}J , e l merito , y el aplaufo. Experimentarás ,. que el mas
3 , obfequiofo , el mas fino, irá infenfiblemente haziendo
,,. traníito de el cariño á la tibieza ,. de aqui al olvido , y
„ vltimimente al defprecio : .que en aquella poftrimcra.
edad fe les efeafea á lasmugeres aun el tributo de las vr~
banidades. Son miradas de los domefticos , como emba-
razo de la cafa y de los eftraños ,.. como numero invtil
9 , de el Pueblo.
„ Al contrario en la Religión ,. Irá creciendo tu ve*-
, ner ación con la edad. En aquella República fe mira-
y

5 , con otros ojos el merito de las mugeres. L a hermofu-


„ ra , el donayre , el garbo , fon alhajas de que no fe
3, haze aprecio; toda la eftimacion fe guarda para la e x - •
3 . periencía la madurez. , y el. juicio. EL nombre de
„ anciana , que en el Siglo fe oye como- injuria en el y

•„ Clauftro fe efeucha como lifonja. A l favor de las le-:


3, yes , como fe fueren multiplicando tus años , fe irán
3, aumentando tus. prerrogativas. Y quando llegues à
„ aquella vltima pordon i'nvtil de la. v i d a , atenderá cui-
' „ dadofa la Religión á tu fervido , y confuelo , fia
a, fatigarte con el pefo de obligación alguna. D e eñe mo-
'p, do , con animo tranquilo, y fereno ,. fin la inquietud.
de el. ínas leve cuidado , irás difponiendo dulcemente
g, tu viage de el tiempo, á la Eternidad,
„ Efto es., hermana mia , lo que fe me ha ofreci-
do reprefentarte , para el efeélo de moverte á elegir
lo mejor , en lo que tanto importa, acertar. Ruegote,-
d[ue leas con atención efte. eferito : y bien que. te fea-
„ molefto por íu aífumpto ,. mirale con aféelo , fiquie-
y yra por fer vn menfagero mudo de quien te quiere
„ tanto. No- defeo íi no tu bien. T u feliz fuerte la.
„ quenro por vna de las partes eífenciales de mi dicha»-
Por eflg folicito, con tanto ardor , que la conozcas^
DISCURSO SEGUNDO. 45
£ , y l a elijas; pero fui emplear otro medio , que el de la
„ perfuaíion , efcufando aun el de el ruego. Tanta abf- '
„ tracción pide, el intento :'pues no es capaz dé otra fuer-
„ ca , que la que hizieren las razones. Son tan fobera-
•„ ños los fueros, que goza el albedrio en la elección de
eftado , que los ofende aun la fuplica. Solo acome-
„ tiendo á vencer el entendimiento , es licito empren*-
der la conquifta de la voluntad. Efte es vn empeño.
folo de mi razón con la tuya , quedandofe perfecta-.
mente neutral el cariño ; y a£si ,. en mi hallarás fiera-
„ pre el mifmo : que te rindas á mis fugeftiones , que
„ las reproches ; y aun á cafo mayor, fi vna errada elec-
y , cion tehrziere poco feliz : que vn fentimiento compaf-
„ fivo dá mas ternura al afecto. En fin , en todas fortu-
;„ ñas , y en todos acontecimientos foy tuyo.

BJi.i Carta hizo el efeclo que fe dtfeaba , y la feriara pa$


ra quien fe-efcrimd , es oy muy Obfervante Religiof*
en vn Convento Gijlercknfe*
HUMILDE, Y ALTA
FORTUNA,

DISCURSO TERCERO.

§. I.
;t ^ | ^ ^ ^ I E G O S fueron los que fingieron cícu
ga la fortuna , e injuftos los que la
figuraron iniqua. Efte error ya le cor-
rige la Religión , quando inftruye de
que el fignifícado de efte nombre
Fortuna no es otro , que la Divina Providencia, la qu'al
es toda ojos , v en todo procede con juftifsimos moti-
vos. Pero aunque el error en lo eífencial eftá corregido,
no llego el defengaño á defvanecer toda la apariencia de
el fundamento. Confutaran los quexofos de la fortuna,
defiguales las fuertes de los hombres , fegun la mayor,
ó menor reprefentacion que hazen entre los demás mor-
tales ; y viendo que en gran parte ella defigualdad no es
proporcionada al mérito , los impíos la atribuyen á la
chymerica fuerca de el acafo : los Idolatras, al capricho
de vna Deidad ciega ; y los verdaderos creyentes, al ar-
bitrio de vna providencia foberana.
2 Eftos vltimos concluyen bien ; pero fuponen
mal. Es afsi, que la voluble rueda de la fortuna es ma-
nejada por mano Divina , y todo movimiento fuyo , ya
elevando á vnos , ya precipitando á otros, es arreglado
con fapientifsimo defignio. También es cierto ( é impor-
ta
DISCURSO TERCERO. 47
ta .infinito eíia reflexión ) que refpeéto de muchos , no
vemos mas que la mitad de la bueka de la rueca: por-
que lo redante de el circulo fe abfuelve en el otro Mun-
do. Vemos que á vnos los fube la forcuna , y no les
baxa ; á otros los baxa , y no los fube. Qué es efto?
No es otra cofa , fino que en cfta vicia mortal no da la
providencia mas que media buelta á la rueda. En el otro
Emifpherio fe concluye el g i r o ; y afsi, los que aqui fuben,
allá baxan ; los que aqui baxan , allá fuben. Y efto es
lo mas común; aunque no es regla fin excepción.

II.
'3 TV JTAS aunfupueftaefta advertencia, queda apo-
J_VX derado de el Mundo vn grave , y perniciofo
tngaño; y es en lo que yo digo , que los mifmos que con-
cluyen bien , fuponenmal. En la diftribucion , que hazen;
de felices ,^ ó infelices, fuponen vna defigualdad , que ver-
daderamente no ay en la fortuna de los hombres. El que
ocúpala D i g n i d a d , el que habita el magnifico P a l a c i o , el
que goza grueífa hazienda , mucho mas el que tiene fobre
fus fienes la C o r o n a , es reputado por vn hombre felicifsi-;
mo. Al contrario , el que debaxo de humilde techo , igno-
rado de el M u n d o , tiene para paífar la vida no masque
lo precifo , es confiderado como infeliz. A lo menos fe juz-
ga la fortuna de efte tan inferior, á la de el otro , como lo es
yna pequeña fuente , á todo el caudal de el Nilo.
4 Muy diferente fué el fentir de el Oráculo de D e l -
phos , que preguntado por G i g e s , Rey de Lidia: Quien era
el hombre mas feliz de el Mundo i Le refpoadió : Que v a
tal Aglao Pfophidio , poffeedor de poquifsima tierra en vn
eftrecho ángulo de la Arcadia , era el mas dichofo habita-
dor de el Orbe : quedando igualmente burlado , y admira-
do aquel Principe , que efperaba á fu favor el voto.
5 Agatocles fué vn Monftruo de la Fortuna. Aviene
do nacido de. vn pobre Ollero de ia Ciudad de Regio , 1U-:
gó á fer Soberano de Sicilia, Con t e d - cv.e , quf: n co-
tejamos üi muum conte.de fu 'wdxi i'../:.vLo , b-'M'--:*
4.8 HUMILDE , Y ALTA FORTUNÍ,
rnos mas f.'liz à efte. Ciertamente no viviría en la. coiitírm*
inquietud , de que fué agitada toda la vida de A g . i r o c ! • • < ; ,
ni padecerla dolor alguno tan intenfo , ù de tanta dura-
ción , como el que à Agatocles le ocafionó la muerte de fus
hijos , degollados bárbaramente por fus proprios Solda-
dos.
6 P l i n i o , en el Libro feptimo difeurre en algunos
Capítulos por los R o m a n o s , que experimentaron mas ri-
fueña la fortuna , como fueron el Dictador Sylla , los dos
Metellos , y Octaviano Augufto ; y à todos les và feña-
lando tales contrapefos , que queda en duda , fi la balan-
ça de la fuerte propendió mas àzia la parte de la adver-
fidad.
7 Seria infinito , fi corriendo las Hiftorias , quifieíTc
facar al theatro todos aquellos , en quienes la mano de la
fortuna alterno cruelifsimos golpes , con los mas tiernos
alhagos Ni efio es muy importante à nueftro propofito: pues
todos me concederán dcfde luego, que no ay en el Mundo
afylo contra los rigores de el hado : ni à la mayor altura
fe le concedió algún privilegio, que la exceptué de la ju-:
rifdiccion de la defgracia. L o que conviene, es , pefar vna,
y otra fortuna , la eíclarecida , y la humilde, fegun loque
en fu regular , y común eftado tienen por si mifmas , pref-
.cindiendo de extraordinarios accidentes, ó favorables, o
gdveríos.

§. IIL
& T ^ Í G O , pues, que la fortuna humilde, en fu valor
intrinfeco , fi no excede , por lo menos iguala
í a foberana. Y porque demos defde luego vna prueba
c l a r a , y folida de efta que parece paradoxa , fe debe fu-
poner , como vna verdad cierta, que las riqueías no confti-
tuyen á los hombres felices á proporción de la magnitud
material que tienen -, si folo á proporción de lo que fe go-
zan , ù de la conveniencia , y deleyte que caufan. Que im-
portará , qucel poderofo tenga prefentes v a r i o s , y precio-
fe? ©alijares eg la mefa^ fi tiene perdido, el apetito ? N o
DISCURSO TERCERO. 4p
por eflo fe podrá decir, que fe regala: y mucho mejor lo
palla en quanto al güilo, el que goza de grolfero p l a t o , íi
el paladar le abraza con cariño.
P L o que en el güito , refpeébo úe los manjares»
fucede en todos los demás fentidos , y potencias , ref-;
pecio de fus objetos. Sean eftos , quanto fe quiíiere, de-
leitables : la delectación , que producirán en cada indivi-
duo , fe conmenfurarà á la difpoñcion de el organo. Y]
afsimifmo la mayor , ò menor felicidad de el fugeto, en
el vfo de eftos objetos fe debe medir, no por la magni-;,
tud enticativa , que ellos en si tienen ; si por la deleita-
ción que cantan. Siendo efto afsi : Si fe hallare que fus
grandes riquezas no les ocafionan á los poderofos mayo-
res güitos , ni les defvian mas petares ., que á los de hu-
milde fortuna fus cortos medios , fe .concluirá que no foa
mas felices aquellos que eftos., y que por configuiente las
dos fortunas fon iguales.
io Pero como hemos de faber lo que paila en los
corazones de vnos , y otros ? N o ay cofa mas fácil. Nerón
edificó vn Templo á la Fortuna de piedras tranfparentes,'
halladas en fu tiempo en la Capadocia ; de modo , que de
á fuera, aun cerradas las puertas , fe veía todo loque paf-
faba dentro de el Templo. Y la naturaleza fabricó Ios-
hombres de modo , que de á fuera fe vé fu buena , -ó mala
fortuna interior , tranfparentandofe por los temblantes , y,
por los labios , fus güitos , y fus petares. M i r a , pues ( di-
ce Seneca Epifl. 8o. j á ricos , y à pobres por el criftal
de el roítro los fenos de el pecho : Compara inter fe
p.xiíperum , & dìvitum vultus. Mas frequentemente veráá
alegres á eftos, que á aquellos •• Sapius pauper , & fide~.
Mus ridet. Aqui fupone de mejor condición á los pobres.'
En otra parte los dexa iguales. Obferva ( dice ) la mayois
parte de los pobres , y verás como nada andan mas triftes*
y congoxados., que los ricos : Primum afpice quanto ¡na*,
ior pars fit pauperum, quos nihilo notabis trifliofes, foli~,
cìtiorefqae dwitibus. ( in confolat, ad Heiviam. )
TI A San Auguftin le aprovechó en gran manera l s
reflexión que hizo ai vèr traníkando por vna Aldea de
4
50 HUMILDE } Y ALTA FORTUNA , 1

el Eftado de Milán , á vn mendigo fumamente alegre , y",


feílivo. Comparó fu fortuna con la de aquel pobre. VIOLE
À èb g o z o f o , á sì proprio ccngoxado ; á el fin fufto al-
guno , á sì proprio lleno de temores : Et certe Ule Uta-
batur , ego anxius eram ; fecurus Ule , ego trepidas. Y de
aquí concluyó , que la fortuna de aquel mendigo era har-
to mejor, que la fuya : Nimirum quippe Ule felicior erat.
{ Confejf. lib.6. cap.6. )
12 Efto e s , mirar las cofas como ellas fon en si. P a -
ra computar la'felicidad de cada vno , no fe han de confi-
derar los bienes que poffee , fi no el gozo que de fu poííef-
fion recibe. Aunque el rico tenga fiempre efplendido ban-
quete , mas fe regala el pobre , que èl , LI, como es lo co-
mún , le fabe mejor lo que come. L a entidad délas rique-
zas fin el vfo , nadie dirá que firve de cofa alguna. Es me-
íiefter expenderlas -, para guftarlas. Es vn bien efte de tal
condición, que folo fe goza quando fe pierde. El que guar-
da en la arca el o r o , podrá lograr alguna complacencia
en la contemplación de que le tiene à fu alveario ; pero
muy inferior á la fatiga inevitable de vn continuo cuidado.
Difcretamente cantó Horacio , que tenia por mas conve-
niencia carecer de tales bienes , cuya poííeísion eftá acom-
pañada noche , y dia de el fobrefalto , de que vn ladrón los
r o b e , de que vn criado infiel los l l e v e , ù de que vn in-
cendio los confuma.

An vigilare metu exanimem, noBefque diefque


LIB.'T. Formtdare malos fures , incendia , fe rvos
$AC. i . Ne te compìlent fugientes, hoc lavati Horum
Semper ego optarim paupérrimas effe honorum»

13 E l azogue caiifa continuos temblores al que le


maneja en la Mina ; el oro , y la plata al que los tiene en
la arca. No ay duda , que en el Avaro es mayor el gufto,
de verfe rico -, pero también excede á proporción el cuida-
do. Fuera de que no le fatisfacen tanto los bienes que go-
za , como le congoxan aquellos de que carece. Siempre
le queda enei corazón vn vacio Inmenfo, tan violento a
DISCURSO TERCERO. 51
fu codicia, como lo es el vacio de todo cuerpo á la na-
turaleza : y es fed hydropica la fu ya , que quanto rúas
bebe, mas arde.

§. IV.
14 O U P U E S T O , pues > que no ay conveniencia, fine-
v3 gravamen en la precífa poífefsion de las ri-*
quezas '• veamos quanto puedan fer conmodas con el v f b .
L o primero : fi las riquezas fon muy grandes , para la cori-
modidad de la vida, eftá por demás la mayor parte de ellas:
Si á quanto racionalmente fe puede defear , fe ocurre con
pocos millares de efcudos , de qué fervirán los millones?
El que para fu fed tiene la agua que baila en vna pequeña
fuentecilla , para qué fe meterá v n R i o dentro de cafa? N o
logrará otra cofa , que concitarfe el odio , b la ira de los
que vén ínvtilmente eftancado en vn individuo , el caudal
que pudiera, faciar la fed de todo vn Pueblo , y exponerfc
á las aífechancas, que puede formar contra fu vida qual-
quiera perverfo , que de otro modo no pueda hacerfe due-
ño de fu hazienda : fiendo cierto , que muchos r i c o s , por
efte motivo folo , fueron victimas, yá de el cuchillo , ya de
el veneno. Afsi que los demaíiados doblones fon de pefo,
y no de valor para fu dueño : quiero decir, que no fon
conveniencia , fi no peligro, y gravamen de la vida.
1y Pero yá que no á la conmodidad , fervirán al
cteleyte. Sobre efto ay mucho que hablar. L o s mas d é l o s
hombres tienen determinado el apetito á tales objetos, que
con corto caudal pueden fatisfacer todas fus anfias. L a co-*
mida, y la bebida con r e g a l o , la caza , y el juego con
frequcncia , no han menefter muchas millaradas. E l que
tiene puefta toda fu delicia en la copa , y en el plato , qué
logra con el inmenfo dinero , fi no puede comer , y beber
mas que como vn hombre folo ? Y fi por fu glotonería quie-
re comer como d o s , prefto perderá la falud , y no podrá
comer aun como medio. Expender el caudal en díverfio-
iies, que no lo fon refpectivamente á fu g e n i o , es perder-
le en. vn todo* La, dulcurade la mufica, es el ynico. hechiza
fia " per-.
52 HUMILDE, Y ALTA FORTUNA,
permitido , qae ay en el Mundo. Pero de que íirve , á quiefr
no-guita de ella? A Anteo, Rey antiguo déla S a t i n a , le-
prdentaron fas VaíTallos, como vna gran cofa , á Yfme-
«ias , famofiísimo Mullco T h c b a n o , á quien avian cogido
prifionero en la guerra : y defpuesde oírle vn rato , dixo,.
que mejor le fonaban los relinchos de fu cavallo,que to-
dos los tañidos de Yimenias. Ni fe entienda ,. que elfo folo
cabe en vn genio bárbaro. No folo los Tigres huyen déla
lyra. Aun muy cultivados efpiritus cierran los oídos á cite
encanto , como los Afpides¡ De Jufto-Lypfio fe quenta , que
aborrecía la muíica , y tenia puefta toda fu recreación en
flores , y perros. Muchifsimos hombres fon infenfibles al
alhago de la harmonía : y de los que reftan , los mas fe.
complacen en vna mufica groflera , que fe encuentra de val-
d e , ó muy barata. L o que fe dice déla Muíica , es gene--
ral á otras diverfiones.'Quantos a y , que no pueden fufrir-
aun el trato común con la mugeres ! Las flores , que fon el
inashermofo parto de la naturaleza en lo infenfible , y que-
yiíten al campo con mas g a l a , que á Salomón toda fu glo-
r i a , á algunos-fon no folo ingratas , pero nocivas, H u v o
fugetos, á quienes hazia caer en deliquio la fragrancia de
la rofa : Y el Cardenal Esfrondati, en fu Cutfo Philofophi-
co refiere de otro Cardenal, que todo el tiempo de la P r i -
mavera tenia guardas á la puerta de fu cafa , para atajar
que entrafie ni vna rofa en ella. Los efpaciofos jardines,,
fon bien tibio deleyte para los mas de los hombres , y pa-
ra muchos ni aun tibio ; fuera deque efle deleyte fe des-
fruta en el jardin age no ; no en el proprio , que eftando-
fiempre á- la vifía , ya fe mira con tedio.

§V V..
\6 ~ | " " \ E fuerte , que refpe¿to de muchos Individuos,'
\J todo el atractivo fe incluye en objetos de
corto precio. Es verdad, que no por eífo dexan effos mif-
arios de amontonar, fi pueden teforos fobre reforos. P e -
ro para qué? Ni yo lo sé, ni ellos mifmos tal vez lo fa-
feen, E_s gr&cioío a-efte progqfixo lo que p.afsq entre Pyr-;
DISCURSO TERCERO, - 53
(o , Rey 'de la Albania, y fu difcretifsimo Co'hfcjéró, y
amigo Cineas. Tratando aquel guerrero Principe de inva-
dir á los Romanos', le dixo Cineas: Verdaderamente, Se-
ñ o r , la empreífa es difícil; porque las hemos de aver con
,vna gente marcial, y poderofa. Mas fi fueren tan profpe-
ras-nueítras armas , que vencamos á los Romanos , que
fruto facarémos de eífa victoria ? En elfo te detienes ? Ref-
pondió el R e y . Nos haremos dueños de toda la Italia. Y
defpues , replicó Cineas , qué haremos? Conquiítarémos,-
refpondió P y r r o l a Sicilia , que eítá vecina , y es f.icil fu
expugnación. Gran cofa feria elfo , añadió el aítuto C i -
neas ; pero ganada Sicilia ,-d.írémos fin á la guerra ? No por
cierto , refpondió Pyrro ( que aun no avia penetrado el ter-
mino donde iban á parar eítas preguntas : ) defpues de con-,
quiítada Sicilia,.nos entraremos en la África, y poífeere-
mos á Carthago, con los Reynos adjacentes. Los D i o -
fes quieran , proíiguió Cineas , concederte tanta dicha:
Y defpues en qué nos hemos de ocupar ? Solveremos-,*
dixo Pyrro , con inmenfo poder á nueítra P a t r i a , y con-
quiítarémos todo el Imperio de la Grecia. Y conquiítada
toda la G r e c i a , replicó Cineas -,-qué hemos.de hazer ? Lie-,
gando cífe cafo, refpondió P y r r o , paífarémos el reíto de nuef-
tra vida en dulce,-y airo ocio ,ím penfar en otra cofa, que en
banquetes , y converfaciones feftivas. Aqui Cineas, que ya
avia , fin fcntirlo él , metido al Rey en la red ,-riendofe le
dixo. Pues , Señor , quien KOS quita gozar defde aora de
toda eífa felicidad ? Para lograr banquetes, y todo genero
de regalos, no baíta el Reyno que oy pofleeis ? A qué fin fe
lian de conquiltar Provincias, furcar los Mares, ganando la
faluden las fatigas , y exponiendo la vida en las ondas, y en
las batallas?
17 Eíte razonamiento', que es facado cafi á la' le-
tra de Plutarco , viene bien, no folamente á aquel Prin-:
cipe ambiciólo ma» también á otros hombres infinitos,
que juntando mas , y mas riquezas, á cofia de peligros , y¡
afanes , ó no faben á que afpiran , ó por- vn viciofo,
y errado circulo , afpiran á lo mifmo que ya poífecn. Dif-,
c«tamente rebatió, el orgullo de P h i l i p o , %cy de Mace-
54 HUMILDE . Y ALTA FORTUNA,
donia , Archidamo III. Rey de Efparta. Avietidole vencida
aquel á efte en vna Batalla , le eícrlvíó vna carta., llena
de arrogancia, y fiereza. Refpondióle Archidamo , que
fe pufieíle al S o l , y vería, como fu fombra no era ma-
yor defpues,que antes de la vi.6t.oria. Es a f s i , que fe en-
grandece la fortuna , íin añadir nada al fugeto.

§. Vi.
iS A CUELLOS , á quienes domina la ambición , y"
a
I codicia , traft ornan la naturaleza de las
'fofas, colocando el fin en el mifmo medio. Quieren te-
ner mas , folo por tener mas ., y dominar m a s , folopor
dominar mas. Pero qué fueede á eftos ? Que íiempre fon
defdichados : porque la hambre, y fed, que padece fu genio,
íiempre eftá en el mifmo eílado , b va cogiendo nuevo au-
mento. La carga de honores , y riquezas en el corazón hu-
mano i hazen lo que las pefas en el Relox , que quanto ma-
yores fon , tanto aquella maquina fe mueve con mas v i o -
lenta inquietud. Succefsivamente va defplegando la paf-
fioíi mayores fenos , afsi cómo va llenando los primeros
vacíos. Al principio fe contenta fu fed con la fuente : def-
pues hydropíca bufea el R i o , y tras de el R i o el Occea-
no : Ecce abforbebtt fluvium , & non mirabitur. Alexaíi-
d r o , en fus primeros deíignios, no miraba mas que á def-
truir á Thebas , y conquiftar la Tracia , y el Ylirico : y a
que lo logró , fe le pone en la cabeza el Imperio de la
Á í i á : y quando tuvo efte en buen eftado , llora afligido,
oyendo decir á vn Philofofo , que ay muchos Mundos,
porque ya no fe fatisface fu ambición con laconquiftade
l » o folo. L o que hizo cantar á Juvenal.

XJnus Ptileeo iuveni non fufficit orbis¿

19 Los que bufean las riquezas para el vfo , f


las aprovechan en el deleyte , parece que fon de mejor con-
dición , en quanto á la conveniencia temporal. Como fe
le puede difputar la felicidad \ a quien üendo ducñ» de
gran*
DISCURSO TERCERO. ¿<¡
grandes teforos, los haze tributarios de fus apetitos ? Afsi
lo juzga el Mundo ; y el Mundo fe engaña, Hable en la
materia el hombre mas capaz, que jamás huvo en el Mun-
do , para dar la fentencia por fu experiencia propria. N o
huvo en la tierra hombre mas rico , ni aun tanto como Sa-
lomón. Ninguno expendió mas pródigamente las riquezas en
las delicias : cení la eircunftancia de que fu gran fabiduria,
y compreheníion de la naturaleza, le advertía de los modos
mas oportunos , con que podían halagar , y fervir los o b -
jetos á los fentidos. El mifmo confieífa, que lifonjeó fus
pafsiones , dándoles quanto fu voracidad pedia : Gmnia
qua dejideraverunt ocull mei non negavi eis : nec prohu
bui cor meum, quin omni voluptate frueretur. Y qué halló
en eíTe piélago de delicias ? N o mas que aguas amargas.
En todo encontró vanidad , y aflicción de el animo: Vi-
di in ómnibus vanitatem , & afflittionem anirni. En tanto
grado , que llegó á tener tedio de vivir : Id .circo taduit
mi vita mea.
20 Efta es la alta , y efelarecida fortuna , y tan
alta , que ningún hombre la logró mas fublime. Pregun-
to aora : Si el hombre mas mifero de el Mundo puede
ver puefto fu corazón en mayor congoxa , que quando lle-
ga á padecer tedio de fu propria vida ? Sabemos que ] c b
no vsó de otra exprefsion , para manifeftar la profunda ago-
nía , que le ocaíionaba fu fmgularifsima calamidad : Tadet
animara meam vita mea.
21 L o que dice Salomón es infalible : pues tiene re-
cibido aquel Libro por Canónico la Igleíia. Pero fe debe
confeífar, que afsi como es verdad de f e , también parece
myfterio : porque, como cabe tanta amargura en la mayor
delicia ? Eíte enigma no quifo defcifrarle Salomón, aun-
que tenia tanta facilidac£en defcifrarlos. Veamos fi
acierto yo con ello : y pienfo
que íi.

#'% **#
*£* *** ***
5ó HUMILDE , Y ALTA ' F o r t u n a

V11.
22' T O primero afsiento, que el que goza mas dej
| ¡ leytes , es el que goza menos ; y aun fe pue-
de decir , que ninguno goza. Mas efte es otro enigma mas
difícil. Yáíaldréde vno , y otro. Pregunto: Tienen deley-
te el que come fin hambre , y el que bebe fin fed ? T o d o s
me confeííarán , que poco, 6 ninguno. Pues de efte modo
gozan los objetos d.leclables aquellos poderofos, que tienen
la rienda iiempre fioxa á todos fus apetitos. Anticipan á los
'apetitos los objetos. Noefperael manjar á la hambre , ni
la bebida.á la f e d , ni aun la torpeza á la concupifcencia.
Pues qué ? Ufan de aquello mifmo , que no apetecen ? A los
principios, no ; .en los progreííos , y en los fines, si. El po-
derofo , que fe entrega á los deleytes , muy luego empieza
á adquirir vn habito de glotonería en todas fus pafsiones : ;

pq; el qual, dentro de poco tiempo, fe tira al objeto, al


-

J p í í n i e r aífomar de el apetito. Aun no efpiró de el- todo la


íaciedad antecedente , ni empezó á vivir fino en embrión el
inievo defeo, quando fe entrega á nueva hartura : y como
en aquel punto eílá muy tibia la concupifcencia, no pue-
.de menos de fer muy remida la delicia. Efte habito , con
la inmenfa repetición de aítos , va cobrando cada dia mas,
:y mas tuercas , hafta que ya impele á beber el vedado licor,
aun quando no ay alguna fed. Y veis a q u i , que en llegan-
d o á efte eftado , fin ningún deleyte la falud fe eftraga, y la
l a vida fe abrevia.
21 Aun no he explicado todo el mal. L o peor es,
que fe junta la faciedad con la hambre. Si digo , que tanta
hambre tiene el poderofe h a r t o , como el pobre hambrien-
to : fe creerá que propongo nueva pa-radoxa, ó por l o me?
nos nuevo enigma. Y con todo diré la verdad. El pobre
hambriento, tiene hambre de el manjar; el poderofo harto,
•tiene hambréele lamifma hambre. Elmenefterofo , á quien
falta lo .precito , apetece ei alimento. E l g u l o f p q u e def*
pues de lleno el vientre , ye cubierta de regalos la mefa,
apetece el mlíiuo apetito. Aquel fe congoxa, porque le falta
DISCURSO TERCERO. £7
ío qite ñecefsita; efte, porque no puede gozar lo mifmo que
tiene. Y poca diferencia ay para el dolor , entre eftár fe-
diento de agua , ó eftár hydropico de fed.
24. Efta anfia depravada , llama que fe levanta fob re
las cenizas de otro fuego, vltimo deforden déla concupif-
cencia, b concupifcencia de la parte fuperior de la Alma, tra-
bajo mucho á aquellos,,que logrando lo mas alto de el poder,
llegaron á la cumb re de la perverfidad. T o d o era difeurrir
irritativos al apetito, condimentos á la torpeza, extravagan-
cias al güito. Bufcando lo exquiíito, topaban con lo monf-
truofo. Eliogab alo llega á hazer banquete de creftas de G a -
llos. Nerón exerce fu lafeivia, cub ierto de pieles de Fierasj
bien que efte era ei habito mas proprio para aquel b ruto.Tan
extravagantes fueron las abominaciones de otros Emperado-
res, que ni el tranfeurfo de tantos Siglos, ni la fragrancia de
tantos Santos, á penas ha difsipado en Roma la hedion-
dez de los Principes de aquel tiempo. Pero con toda eftat
íblicitud, qué confeguian ? Nada , fino'aumentar la v i o -
lencia de el hab ito, para que fe exercitafle aun con faftidio.'
E l deleyte entre tanto andab a fugitivo, como la agua de
T á n t a l o , por mas que parecía, que fe tenia entre las ma-
nos; íiendo medio para no lograrle , la nimia anticipación
á cogerle. Solo fe ganab an inquietudes para el efpiritu,;
enfermedades , y dolores para el cuerpo. Y es b ien de no-
tar , que todos aquellos , que fe dieron á la glotonería, y
á la lafeivia, fe hizieron melancólicos , defab ridos , y té-
tricos : por donde raro Principe fe encuentra en la Hiftoria
glotón , y lafeivo , que no fuelle juntamente cruel, Algu-,
nos llegaron á enfadarfe de si mifmos, como el Segundo
Apicio , qucdefpues de ingurgitar dos millones y medio,
fe quito la vida con el lazo. Qué fué efto , fino hallar va-
nidad , y aflicción de el efpiritu entre los mayores alhagos
ele la fortuna ? Por ventura andan tan defazonados,
y enfadadizos los mifmos
pordioferos?

i*) te*- '•&): (f) № a* (m («3


58 HUMILDE , Y ALTA FORTUNA";

§. VIII.
35 "T TERDADER'AMENTE yo he feguído hafta áorá ti
y cotejo de vna , y otra fortuna , por la par-
te mas difícil; efto e s , trayendo al paralelo la mas elevada
con la mas abatida , la foberauia con la mendiguez. N o
intentaba tanto quando empecé á efcrivir elle Capitulo;
pero voló la pluma , fin fentirlo yo , ázia el extremo de
los dos extremos. N o era menefter tanto. Mas ya que eftá
h e c h o , tenemos de el primer encuentro toda la dificultad
vencida : porque fi el que eftá debaxo de los pies de la for-
tuna , iguala al que pifa lo mas alto dé fu rueda ; con mas
razón igualará el que con eftrechez tiene lo p r e d i o , al que'
con opulencia goza lofobrado. •
26 El cafo es , f i lo hemos de decir todo , que fid;'
folo iguala, pero excede. Si fe mira la fuperficie de l a s c o - -
fas, goza el rico mas comodidades, y padece menos inco-i
fnodidades ,.que el pobre ; pero fi fe regiftra el fondo , fu-
cede muy al rebés. Tiene el rico , vario , preciofo , y
abundante plato. Pero faboreafe en él mas que el pobre
con el común, y tofco ? N i aun tanto: porque en efte la
apetencia , con que fe lienta á lá mefa', recompenfa con
ventajas aquel exceflo.' Qué les importa á las abejas de la
Lithuania, País rudo, y defabrido, no tener tan hermo-
fas, y odoríferas flores , como las abejas de otros Paifes,
0 de eífas mifmas ingratas flores , facanlamas hermofa , y
dulce miel, que ay en Europa ? Yaze el rico en colchones
de pluma ; pero duerme mas , ó mejor qué el pobre fobre
y n poco de paja? Verás , que efte fiempre fe levanta alegre,.
y gozofo ; y aquel muchas vezesfe quexade que pausóla
noche con inquietud. Quantos pobres repofaron con dul-
cura en el duro fuelo aquella mifma noche , que el Rey
Aífuero , por no poder dormir, fe divirtió con los Annales
de fu Reyno '. Defiendefe el rico con tapices•,• afelpados
yeftidos , y grueífas paredes, délos rigores de el frió; pero
obferva que con todo fequexa mas de la deftenrplanca de
s

^eftacion dentro de fu Palacio ? que el Paftor cubierto de,


DISCURSO TERCERO. 5p
;pieleseñ el Monte. D a v i d , fiendo anciano , no podiapa-
rar de frió , por mas que fe cubrieífe de ropa ; y con mu-
cho menos abrigo , algunos ancianos Labradores, hazcn
burla de los yelos. Verás á cada paífo al poderofo tem-
, blando, con vivo refentimiento, de el frío , fiempre que
fe vé precifado á dexar la chimenea ; y al mifmo tiempo
ándala gente.comun alegre por la calle. L o mifmofucede
en el Eftio. Eílá el rico.con defconfolada lafsitud, fin atre-
verfe á falir de vn quarto baxo ; quando el común de el
Pueblo., con intrépida defemboltura , acude á quanto fe le
.ofrece. A f s i , que fe puede decir de fus riquezas, lo que
Dionyfio de Sicilia dixo de la capa de o r o . , que tenia la Ef-
. fatua de Júpiter , como motivo para defpojarle de ella :quc
mejor era vna capa de paño, porque la de oro en Invier-
no no quitaba el frió , y en el Verano agoviaba con el pe-
í b . Habita el rico en anchurofo, y aliñado Palacio , y nun-
ca contentopienfa en eftenderle., ó.mejorarle; pero al po-
bre ni fi quiera le ocurre en to.do el año , que fu habita-
ción es eftrecha. Y yo.creo, que.las mejores cafas, queay
en el Mundo , fon las de Madagafcar , Isla de el Mar de
Etyopia , que fon las mas pequeñas. Forman aquellos Bar-
baros fus habitaciones tan eftrechas, y aliviadas de pefo,
.que entre quatro hombres toman vna cafa á cueftas, y la
mudan á donde quieren : por lo qual tienen la convenien-
cia de mudar las poblaciones,fegun les eílá mejor., áellos,
ó aquellos Sitios. Y por la mifma razón me parecen los
mejores Baxelesdeel Mundo , los barcos de losPefcado-
res de la Nueva Zembla , que forman de coftillas, y pieles
de pezes , tan ligeros , que quando fe vén perfeguidos en
el M a r , huyendo á t i e r r a , no folo efcapan la perfona,
mas también el barco , llevándole fobre fus efpaldas, fia
mucha fatiga.
27 yifte el rico delicada olanda, y el pobregrueífa
eítopa ; pero dime fi hafta aora oifte quexarfe algún pobre,
.de que Ja afpereza de la eftopale ocafione al cuerpo algu-
na moleftia. Eftá ociofo ei rico , y el pobre trabajando
todo el dia ; pero no obfervarás mas trille al pobre en el
jttabajo, que al rico en el ocio • antes, efpecialmente fi'
é'o HUMILDE s Y ALTA FORTUNA;
trabaja en compañía , paila feftivo , cantando , y chancearía
d o , fu tarea Acabada efta , el defcanfonoes vnocío iníi-
píelo , como ei de el rico, íí. no v a dulce repelo ; y defpues
con blando ,. y continuado fueño- ,- recompenfa el trabajó,
diurno. El-rico al c o n t r a r i a , como fobre miembros no
exereitados afsienta. mal el fueño , con inquietud impa-
ciente da mil bueltas en la cama. De modo , que fe puede
decir,, que el pobre trabaja de d i a , y el rico de noche. Si
fe ofrece vna jornada, el rico es verdad que la haze enea-
vallo , ó en carroza , y el- pobre á pié. Sin embargo el
rico tiene: mucho mas que fentir en ella : ya la inclemen-
cia de el tiempo , ya la incomodidad de l a pollada , ya lá
dureza de el. lecho , ya la falta de regalo. El pobre , hecho,
á todo , nada eíl-raña; y a f s i , de nada fe duele. Y o en mis
viages he notado , que fiempre el mozo de á pié , que me
afsiítia, fentia mucho menos que yo las incomodidades de
el camino. Pues añadafe á efto el fulla de los Ladrones, á
quienes el pobre no tiene por que temer ; quando al rico,
tras de cada tronco que ay en el. camino , fe le reprefenta
y a Salteador.
28 Si fe quieren pefar los placeres de vno , y ,otró
eftado , no-ay mas que atender á la advertencia de Séneca,
citado arriba: Infpice pmperum , & díuitum vultus. V e -
rás á los pobres en fus converfaciones feítivas , enfus-ruf-
ticos bayles , qué francamente rifueños , qué íinceramente
gozofos ! Sapius pauper & fidelius- ridet. A l contrario
á los ricos. verás en los mifmos feílejos , no pocas vezes
f

faftidiofos. A lo menos no brilla tan puro el placer en fus


íémblantes.
29 Todas eftas defígualdades nacen de vn principio
general. Y es , que la naturaleza dexada á fu genio fe con-
tenta con poco ; pero fila hazen al melindre, fe forma en
ella vna dama defeontentadiza, que todo-lo apetece , y t o -
do 1q defdeña. Un corazón humano'con tres ventrículos,
es monílruolidad que ya fe ha viilo y fué prefentado en
i

la Academia Real de las Ciencias de París el año de lópp*


Pero habla 'do en fentido m o r a l , y político , es ella vna
1

m o r i f t m o í i d a d q u e ca¿a dia fe v e . E l coraron tfe el hom-r


DISCURSO TERCERO. 6 Í
trrc, por fu naturaleza, no tiene mas que dos fe nos ; pero íi
llena eftos de bienes temporales , fuccefsivamente fe vàn
abriendo o t r o s , y o t r o s , fin termino a juno. Para nadie
1

es deleyte, ò regalo , aquello que no confiderà tal : y na-


die confiderà como regalo , aquello que acoftumbra, ò que
es proporcionado i fu propria esfera. Por efto el manjar de-
licado , es delicado para el que vfa alimentos comunes;
mas para el que eftà hecho à manjares delicados , es lo
delicado común ; y afsi apetece yá cofa mas exquifita. Aun
la mifma variedad, para quien acoftumbra variar cada dia
los objetos á fus antojos >.-pierde todo el hechizo , que al
principio tenia. Mucho mas fe deleyta el pobre , viendo en
íii mefa vn pez de los comunes , que el Romano Cayo H i -
rió , comiendo fus regaladifsimas murenas ; y mas gozo-
fo eftà quando agrega à fu heredad vn palmo de tierra,
que Alexandro quando añadió à fus conquiftas la Ciudad,
de T y r ó r

"30 O í Cotejamos los pefares de vño , y otro eítado*;


v^3 como hemos cotejado los placeres , hallare-
mos, que el mayor pefo de ellos carga fobre los poderofos:
yà por la mayor fenfibilidad de los fugetos , yà por la ma-
yor magnitud,. ò multitud de los trabajos. Son los ricos
de vn temperamento d e l i c a d o q u e de qualquier Ayre fe
ofende mucho : ò como formados de vn metal fonoro , que
á qualquiera leve golpe dà gran quexido, Parecenfe á vn
p o z o , que ay en C h i a p a , Provincia de la Nueva-Efpaña,'
donde arrojando vna pequeña piedra , levanta horrible tem-
peftad. De aqui fon aquellos furores de los poderofos , por
levifsimas caufas. El Sultán Mahometo Segundo , t o -
mó tan barbara-rabia, viendo que le faltaba, vn melón de
fu jardín ,.. que hizo abrir el cuerpo á catorze Pages , pa-:
ra iaber quien le avia comido. Y Othón Antonio , Du-;
que de Urbino , mandó quemar vivo vn criado fuyo , fo-i
lo por averie defciiidado en desertarle à la hora íeñap
feda, .. ~
éz HUMILDE , Y ALTA FORTUNA,
31 So:i mas también en el numero los trabajos df¡
los poáerolos. Quanto mas abulta el cuerpo de vn hom-
bre , tanto mas tiene donde le hiera el enemigo : y quanto
mayor es la amplitud de la fortuna, tanto mas ay donde
hiera la adverfidad. Son los ricos torres elevadas , y los
pobres chozas humildes.; y el rayo mas vezes defcarga en
la torre fu furia , que en la choza. .Uno de ios mayores ma„
les que ay en lo temporal, fino el mayor.de todos, es la fa-
llid quebrada ; como el mayor bien la falud robufta. Y no
tiene duda , que en igualdad de temperamenro , mucho mas
fano es el pobre, que el rico : porque efte con los exceífos fe
eftraga la falud, y aquel fe la conferva con fu fobriedad. Que
le valdrán ai poderofo doliente de la gota (enfermedad que
rara vez acomete á los pobres) todos fusteforos , fino pue-
de con ellos remediar el mal, ni aun confeguirfe algún fin-
cero placer? ;Pues mientras dura el infulto padece los dolo-
res , y en paífando , l o s fuftos de nuevos acometimientos.
Aunque por todos los ricos , pronunció Salomón aquella
fentencia : Quid prodeji pojfejfori , niji quod cernat di-,
vis/as oculis fuis ? Que otra vtilidad faca el poderofo de
fus riquezas , fi no poder regiftrarlas con fus ojos ? Pero a
vn poderofo , habitualmente enfermo , fe apropria con mas
rigor,
32 Tiene el poderofo mas cuidados , y por confia
guiente mas moleftias. Tiene mas embidiofos , y por con-
figúrente mas enemigos. Quiere engrandecer mas fu fortu-
na , y cada eftorvo que encuentra es vn efcollo donde fe laf-
tirna. £>e el que eftá debaxo, pretende mas adoraciones;
y vno fojo, que , como Mardocheo á Aman , rehufe do-»
blarle la rodilla , bafta a turbarle el repofo. Con el que
eftá arriba , folicita igualdades ; y quando y e que el que
. confideraba inferior, ó i g u a l , fe le pone delante , á penas
ay confuelo. Eftabavn Pintor famofo, llamado £rancifco de
Francia , lleno de bienes , y 4 e aplaufos , en Bolonia , quan?
do viendo vna Imagen de Santa Cecilia , que avia hecho R a -
fael de Urbiiio, de encargo, para vna Iglefia de aquella Ciu-
dad , y conociendo las ventajas que le hazia en el Pincel
.a^uel Artífice incomparable, fui? tanta la pena que tomó,
DISCURSO TERCERO. ¿3
que tardó pocos días en morir. En verdad que no muere de
elle achaque ningún pob re.
33 Los temores, que contienen elmartyrio mas du-
radero de la v i d a , porque con ellos fe padecen los males fu-
turos , y aun los pofsibles,- tienen fu proprio nido en el c o -
razón de el poderofo. El que tiene males , íiempre fe duele;
el que tiene bienes , íiempre teme. Y q u é mayor dolor que
!

yn temor continuo ? Tantos riefgos amenazan al poderoío,


;

quántos fon los cafos pofsib les de enriquecerfe otros, def-


pojandolé , ó matándole á él : y fiendo eftos m u c h o s , en
fu imaginación aun fon mas. Afsi-, que las riquezas con
trabajo fe adquieren, y con trab ajo fe confervan. Los ha-
bitadores de Maca zar , Isla- de el Mar de la India , fuelen
quitarfe algunos dientes, y poner en fu lugar otros de piar
ta , y oro , cuyo vfo no puede menos de fer trab ajofo, y
inolefto. Puede aver mayor b arb arie • qué padecer volun-
3

tariamente vn dolor , folo para ganar vna incomodidad?


Pues en la mifma incurren, los que folicitos anhelan las r i -
quezas. Los dientes fe quitan , efto es , padecen muchos do-
lores , por lograrlas'; y en ellas adquieren otros dientes,
de o r o , y de plata, f i ; pero al fin dientes, que les han de co-
mer,, y roer el corazón á ellos mifmos. Es cofa b ien no-
table , que en el Siglo «de o r o , y plata , fegun la divificn
que hazen los Poetas de las quatro Edades , no avia plata,
nloro : y parecieron eftos dos metales en el Siglo de hierro,,
Af§i Ovidio hab lando de elle Siglo.-

~ Itum ejl in vi/cera térra,


Quafqué recondidtrat, ftygijfque admover At vmbris
Effbdiuntur opes irritamenta malorum.
lamque nocens ferrum, ferroque nocentius aurum
Prodierat, prodit bellum quod pugnat vtroque.

3 4 ' E l Siglo de oro pafsó fin oro ; y por elfo mif-


ñit> fué de oro , efto e s , feliz , y b ienaventurado, El Siglo
de hierro tiene o r o ; y por elfo es de hierro , efto e s , duro,
y trab ajofo.
ií hv&W. № el lib . ¿* de la Guerra C i v i l , haze.
6a. HUMILDE, Y ALTA FORTUNA.
Vna- bella digrefsion fobre la felicidad de el pobre barque-
ro Ándelas, quando pinta á Celar en el íilencio de la .no-
che piulanio la puerta de fu choza, para que le conduzga
promptamentc a l a Calabria. T o d o el Mundo ella conmovi-
do , y temblando con loVrnovimientos de la Guerra Civil;
y dentro de la mifma Grecia, que es'el theatro de la Guerra,
Vecino á los mifmos Exercitos , duerme, fin temor alguno,
y a pobre Barquero fobre enjutas ovas. Defpiertanle los
golpes que da á fu puerta el generofo Caudillo , fin introdu-
cir en fu pecho el menor fuño : porque , aunque no ignora
que eftá toda la Campaña cubierta de Tropas , fabe tam-
bién, que no ay eníii choza cofa que pueda brindar los
militares infultos. O vida de el pobre • ( exclama el Poeta )
que tienes la felicidad de eftár exempta de las violen-,
cías ! O pobreza , beneficio grande d- los Diofes , aun-
que no reconocido de los hombres ! Qué Muros , ó qué
í e m p l o s gozaron el privilegio que tiene Amidas , y fu
choza, de no temblar á los golpes de la robufta mano de
<Cefar!

:
—0 vita tata facultas
Pauperis , angujiique lares ! 0 muñera non dum
Inteilecia Divum 1 Quibus hoc contingere templis,
Aut potuit muris , nulla trepidare tumultu
Ccefarea pulfante rnanui

'^6 N o ay que admirar. L o s Templos , y .'os Mu- 1

ros fon los que tiemblan ; no las chozas : porque en los


Templos, y en los Muros fe guardan las riquezas, y don-
de eftán las riquezas , no pueden faltar los fuños. Si cote-
jamos la fortuna de Amidas con la de Cefar, y' Pompe-
yo , que florecían en el mífmo tiempo : qué brillante la
de eftos ! Qué obfeura la de aquel! Pero íi fe mira bien,
quanto mejor es la de A m i d a s ! Eífos dos Héroes ambi-
ciólos , cuyo elevado refplandor haze que el Orbe los ten-
ga por dos Soles, no fon en la verdad mas que dos par-
helias, 6 folís aparentes , falfos reflexos eftampados en
h ífispuñancia de volantes nubes. Que lexosde fer felices,;
Discurso T e r c e r o , éf
quando ca'Iavno cita gravifsiinamente atormentado con los
jelos de la potencia de el otro! •

Et iárn ricino fsrre potefí , C<ejar ve prior em^


Pompeius ve parer».

37 Contienden íobre el Imperio , arriefgando en Iaí


competencia la v i d a , y la libertad. Qué'temores encada
v n o , d e que el otro venca ! A qué milero deívalido pufo
halla aora la fortuna en tanto aprieto, que fe refolvicfíe , co-
mo Cefar, para mejorarla , á arrojarfe ávn Mar tcmpeíluoíb»
de noche? Amidas entre tanto no tiene otros cuidados ,que
defplegar al Mar,y tender al Sol fus redes.Flu&uan los otros
en los campos , y él eíláfeguro en las ondas. Coge en el Mar;
pezes, quando los otros en la Tierra pefean borrafcas, A
coila de poco trabajo le miniítran las aguas quanto ha menef-
ter para fuítentar la vida ; quando afsi á Cefar , como 3
Pompeyo , fus grandes fatigas no les firven , fino de acele-
rarles violenta muerte. No le turba el fueño tanto eftrepito
marcial; quando cada vno de los dos Caudillos tiene vn def-
pertadqr continuo dentro de fu proprio corazón. A nadie
teme , porque nadie codicia fu fortuna ; y fi alguno es tan
cuerdo , que la codicie , puede gozar de la mifma , fin def-
pojar á Amidas. Cefar , y Pompeyo , por aora fe temen
mutuamente ; defpues el vencido temerá á todo ei Mun-
do , y el vencedor deberá temer, á quantos le pudieren
embidiar.
38 Los Poetas Gentiles fingieron divinidad la po-;
breza ; debieron de atender á los males de que preferva,'
y á los bienes que produce : puesLucano la llama madre
délos hombres grandes. Y Horacio dice , que á efta Dei-
dad debió Roma las virtudes de C u r i o , y de Camila. Pero
el Griego Ariftophanes erró mucho la pintura, figurando-
la como vna furia , feroz, y prompta á defefperarfe: pues
ellos extraordinarios furores, mas fe hallan en los ricos,
que en los pobres. Aunque es verdad, que adonde fe enfan-i
grientan mas, es en los pobres que fueron antes ricos: por lo>
menos durante el noviciado de la, miferia.
65 HUMILDE, Y ALTA FORTUNA,.

§. X.
39 l y i O fe entienda , que én ei elogio que acabo de
hazer de la pobreza , hablo de la pobreza,
ítbfoluta ; si. de la refpectiva.. No de el eftado de mendici-
dad , en que falca lo precifo; si de aquella eftrecha mode-
ración , que miniftra á la naturaleza folo lo neceflario, y
elfo á cofta de las fatigas de el cuerpo, Verdaderamente
de los mendigos , yo no sé que me diga. Por vna parte
parece , que paífan grandes incomodidades y por otra
v e o , que fon muchifsimos los que voluntariamente toman
eífe genero de v i d a , pudiendo vivir de fu trabajo : y fe
hallan harto mejor andando de puerta en puerta, que tra-
bajando en el campo, ni aun ociofos en el Hofpieio. D e
los vagabundos , con capa de Peregrinos , dice Enrico
Cornelio Agrippa , en fu Libro, de la Vanidad de las Cien-
cias , que no trocarían fu vida por la de los Magnates. Y
creo que dice bien.
40 Todos eftos voluntarios pobres, que no lo fon
conforme al Evangelio, ni cae fobre ellos la beatificación
de Chrifto , fon pcftileneia de las Repúblicas donde habitan,,
ó por donde circulan. Tienen muy buena, v i d a , fin fervir
de cofa alguna , y aun haziendodaño al común-..femejan-
tes á las Hormigas, que vtiles para si folas fon nocivas
al huerto , donde fe anidan , y por donde difairren. Por
- efto ninguna República de exacta policía los confíente.
41 Los mendigos inválidos , fon los legítimos acree-
dores á nueftra compafsion. Ay no obftante entre eftos
mucha diferencia. Los que lo fon por enfermedades habi-
tuales , no fe puede negar , que fon bien miferos, fi no en-
dulcan.fu trabajo con la devida reíignaeion en la voluntad
divina : que en eífe cafo fon los mas dichofos , y á quienes
llamo nueftro Redemptor bienaventurados. Los que lo
fon por falta de algún miembro , ó defecto en la organiza-
ción , fi tienen mediana habilidad , y gracia en pedir, lo
paífan admirablemente ; y fe han viíbo de eftos no pocos,
Qucdexaron en fu muerte muy buenos dineros. Los que
fon.
- DISCURSO TERCERO. 67
fon defgraciados , y torpes , viven con bailante afán , ef»
pecíaiaiente íi concurre la fuciedad de el cuerpo , y de-
formidad de el femblante. Es grande el y e r r o , que en efta
parte incurre la piedad común, díílribuyendo con nota-
ble den »ualdad. Al pobre, que pinta con v i v e z a , y gracia
fu propria calamidad , á penas ay quien no le focorraj
mucho mas íi tiene alguna limpieza en fus andrajos , y de-
cencia en las faccio íes. De el f e o , inmundo, balbucien-
te , y medio eftupido , á penas ay quien haga cafo , o quien
no huya de el con tedio. Debiera advertirfe , que Chríílo
nueftro Bien , tanto fe reprefenta en vno , como en otro:
y en quanto Rede.nptor , aun mas en el de mas feo , y def~-
preciable roftro : pues afsi le pintó en fu Sacratifsima Pafí
íion Ifaias : Non e/i fpecies ei , ñeque decor. Y poco mas
abaxo : Quid abfconiitíís vrdtus eius , & defpecius. Y
porque no-afquee la Chriíliana piedad , aunlospoores que
padecen enfermedades afquerofas , vean en el mifmoPro-
pheta comparado nueftro Redemptor á los leprofos : Nos
putavimus eum quafi leprofum.
42 Pero fin recurrir á tan alto motivo , dentro de
la razón natural ay el que baila para atender, no folo con
igualdad, mas aun con exceífo á eífos pobres deformes , y
defgraclados: y e s , que ellos padecen mayor necefsidad.
A los otros , como he dicho , nunca faltará quien los fo-
corra, tal vez con demasía. Eftos fon los que necefsitan de
que la piedad fe esfuerce , por mas que fu ingrato aípeclo
horrorize. Y o por mi protefto , que por elle motivo de las
limofnas , que me permite diftribuir la eftrechéz de mi efta-
d o , mucho mas toca á los pobres afquerofos , y deígra-
ciados , que á los de buena perfuafiva , y de exterior
grato.
4 ?, Buelvo á decir, que no he hablado en la compa-
ración de efte genero de pobres, fin embargo de que á mu-
chiísimos los juzgo mas felices , que los mifmos Soberanos;
si de aquellos , que con fu fudor grangean el luftento , el
techo, y el v e l l i d o , arreglado todo á la necefsidad de la
naturaleza , fin fobra alguna. E f t a , que llamo fortuna hu-
milde, juzgo por lómenos igual a l a alta , y efclarecidat
¡68 HUMILDE, Y ALTA FORTUNA",
que gozan los opulentos, y- pcderoíbs : y me parece, qitig
lo he probado baít antemente. Pero también juzgo , que fon
de mejor, condición , que vnos , y otros , aquellos que,
colocados en vn medio razonable , gozan mediana hazien-
da , y pueden pallar la vida fin tanta eítrechez, y fin m u ,
cho afán.

§. XI.
44 I ; S T O es en quanto á la felicidad de los hom-
£fj D r e s
•> midiéndola por la condición de fus
eftados , y prefeindiendo de los particulares accidentes,
que pueden fobrevenir á ellos , b los otros individuos:
no íiendo dudable, que también la fortuna humilde eftá ex-
puefta á terribles rebefes , y moleftifsimos finfabores ; aun-:
que no con tanta frequencia , como la foberana.
45 Pero fi fe me pregunta , á quienes reputo ab-
folutamente felices , b infelices entre los mortales : en quan-
to á los felices , refpondo con vna fentencia de el gran
Chanciller Bacón en fu libro , intitulado , Interiora Rerum.
Felices ( d i c e ) juzgo aquellos, cuyo genero de vida es pro-
porcionado al proprio genio : Felices dixerim , quorum Ín-
doles naturalis curn vita fuá genere congruit. Decifioíi
digna de el fuperior talento de aquel incomparable Inglés.
N o obftante pienfo , que fe le debe añadir alguna limitación:
y e s , que no fea el genio viciofo: porque filo fuere, íiem-
pre ferá infeliz. El ambiciofó, pongo por exemplo , aun-
que fe vea colocado en altos pueftos, fietnpre citará inquie-
to por fubir á otros mayores. El codiciofo,aun quando mas
colmado de riquezas , fe afanará por añadirfe nuevos tefo-
ros. El glotón opulento , fe llenará de comida , y bebida; 1

pero también fe llenará de males, que dcfpues le hagan


amargar quanto c o m a , y beba.
4.6 Supueíla la limitación dicha , tengo por muy
verdadera la fentencia. Las conveniencias temporales to-
adas fonrefpeebivas, y varia tanto el genio de los hombres
tn la proporción con ellas , como el güito en la inclinación á
ios manjares» L o que es bueno para v n o , es malo para otro,
DISCURSO TERCERO. 69
Solo Dios es bueno , y dulce para rodos. Eñe defdeña la
fortuna, que aquel adora: y vno abraza lo que otro des-
precia. Paitando Cefar á Efpaña por las afperezas de los
Alpes , llego á vna pob'rifsima , y corta Aldea , donde
advirtiendo fus compañeros la miferia de los habitadores,
pregunto alguno de ellos , con irriíion : Si también aque-'
líos barbaros tendrían fus queftiones fobre quien avia de
mandar entre ellos ? A que ocurrió Cefar prompto , dicien-
do : Pues yo os certifico, que mas quifiera fer en i fia Aldea el
•primero , que en Roma el pegando. Aviendo paflado á la'
África.el fabio Flamenco Nicolás Clenardo,con el motivo;
de aprender la lengua Arabiga,fe detuvo dos años en el Rey-
no de Fez, de donde eferivió varias vezes á fus amigos, que
nunca avia hallado eftancia tan grata para fu genio : y efto
folo , porque en aquel Reyno no avia la multitud de leyes,;
y proligidad de litigios , que en Europa : termrnandofe en
vn momento , y verbalmente qualquiera diferencia por el
Magiftrado : L o que era muy de el gufto de Clenardo, que
aborrecia con extremo los can interminables circuitos de
los proceífos , que ay en nueftros Tribunales. Quentalo
George Pafchio en fu libro de Novis Inventis. Aunque no
es verdad lo que dice , de que folo por eífe motivo fe def-
terró de fu Patria , y pafsó á Fez : pues por otros mu-
chos Autores confia, que vino á Efpaña de intento, don-
de defpues de enfeñar algún tiempo las lenguas en la Uni-
veríidad de Salamanca , pafsó á la Corte de Lisboa por
Ayo de el Principe de Portugal, hermano de el R e y D o n
Juan el I I I .
47 Efta grande variedad, que ay en genios , y tem-
peramentos de los hombres, y no el amor platónico "de-
la Patria , es la verdadera caufa de que muchos fe hallen
bien en Regiones miferas , y defdichadas , rehufando paf-
far á otras felices. Ovidio aviendo obfervado , que algu-*;
nos Scithas , conducidos á Roma , no perdían ocaíion al-
guna de bolverfe fmntivos al afpero Clima donde avian
nacido , atribuye ello á vna dulcura oculta ( que él mif-;
mo, con tener tan ouenas explicaderas , no acierta á ex-:
. pilcar^ ó como, facuitad fimpatica, , y virtud magnética^
'" - ' " ' con.
yo HUMILDE , Y ALTA FORTUNA,
Con que atrahe á cada vno fu propria Patria : y afsí 1<>
dexa eu vn no Je qué.

Nefcio qua natale fdum dulce Une vunBos


Trabit & immemores non fimt e¡fe fui.
Quid m:lius Rom:. ? Scithico quid frigore peiusf
Huc tamen ex illa barbarus vrbe fugít,

48 Nada de eífo es. N o confifte en v n myíleriofo


jhechizo , con que encante á los hombres fu propria Pa-
tria , el dexar los Sckhas la dulce habitación de Roma,
por los yelos de la Scithia,: pues cada dia vemos hom*.
b r e s , que por mejorar de fortuna , dexan la Patria , tal
vez <>ara no bolver jamás á ella , fin que por eífo dexen
de amarla E P a i s , donóle efcrivo efto, efta lleno de fe-
1

tnejantes exentólos. L a razón verdadera de efte Phenome-


tto Politieo, e s , fer proporcionado el modo de v i d a , que
los Sckhas tienen en el patrio fuelo , al genio , y tem-
peramento proprío. L o mifmo fucede oy á los Lapones,
Nación Septentrional, colocada entre la Noruega , Sue-
c i a , y M o f c o v i a , á las orillas de el Mar Glacial. Viven
aquellos Baibaros lidiando continuamente con inmenfí
multitud de O f o s , y Lobos , en vn Pais lleno de Lagu-
nas , y cafi fiempre cubierto de nieves. Algunos fueron
trahidos en diverfas ocafiones á Alemania; pero por con-
modidades que les ayan ofrecido , 6 renta que les ayan
feñalado, ninguno, huvo que logrando oportunidad no fe
bolvieífe á fu Pais.
49 Efta es la verdadera felicidad temporal: lograr
aquel eftado , y modo de vida, que pide el genio. Las con-
veniencias fe harv, refpe¿to de la Alma , poco mas , ó menos,
. como los venidos, refpeíto de el cuerpo , que no el que a la
vifta efta mejor hecho, dice bien á todo talle.
50 A y , empero , algunos genios flexibles , que fe
acomodan á toda fortuna, legun la capacidad de ella : vnas
Índoles de cera, que á fu arbitrio fe configuran de modo,
que todo les afsienta bien. Nada los quebranta: porque íü
jblandura cede á todo impulÍQ. Se alargan, ó fe encogen.
uiscimso Tt£C"iw.
fegun el ámb ito que les dexan. Sub en fin fatiga, y b axan
fin violencia. En fu propria docilidad tienen la m i e l , que
endulca qualquier azib ar. Son de tan buena condición , que
como no les falte lo precifo , eftán conteneos en qualquiera
eítado. Tienen la rueda de el animo concéntrica á la rue-
da de la Fortuna. Voltee efta como quifiere, con la mif-
ma facilidad voltean ellos. Configo llevan la fortuna, de
qualquier modo que rueden. N o puede negarfe, quede ef-
tos genios ay pocos ;, pero fe deb e confeífar , que ellos
fon los verdaderamente felices, Y folo pueden ferio mas
los Santos :. porque eftos , 6 eftán fuera de la rueda , ó
colocados en el centro de ella, de modo, que fus b ueltas, n |
los levantan al o r g u l l o , ni los precipitan al defpecho.

§.. X11.
51 I ^ I X I M O S quales fon los ab folutamente felices.-
\.~J Pero quienes fon los abfolutamente infelices?
Aquellos,, cuyo defiino los conduxo á vn linage de vida con-
trario á fu genio. La violencia que fe haze á la inclinación
es continua., y afsi es continuo el difgufto. L o que para
otros fuera dulce, para ellos es amargo. Es cierto que la for-
tuna, fin añadir bienes , pudiera hazer los homb res mas di-
chofos. No tenia ello mas colla , que permitirles permutas
de empleos , y eftados. D e aqui dependen las embidias reci-
procas de muchos", fin tener nada que embidiar. Mira el P a -
xarillo defde la jaula, conemb ida, á la piedra que vá Hab ien-
do lib repor el Ayre ; у а la piedra le es mas violento eífe
a f c e n f o q u e al Paxaro fu claufura.. Mira con-emb idia el
humilde al que ve adorado en el Solio ; y efte fe eftá con-,
fumiendo, porque no goza la libertadle el'humilde,
52 A eftos los haze infelices la fortuna. Otros ay que
lo fon por fu propria naturaleza. Aquellos d i g o , que en
fu p гор rio genio tienen fu mayor' enemigo : vnos homb res
defeontentadizos , que con nada eftán fatisfechos : que fiem-
pre fe faítidian con lo que de prefente poífeen : que aunque
Vayan mudando fortunas , les fucede lo mifmo, que fi m u -
daran. Camilas , que cada vna á di.ez,.u doze días de vfq
7 1 K U l v u L D S , Y/ A L T A F O R T I W Í ,
los aoefta. Eftos yiven en continúe, contrariedad al movi-
miento de la fortuna; y aunque no por e'fo dexan de fer
arraftrados de el impulfo de la rueda , le obedecen vio-
lentos , como los Aftros el giro de la Es?'ra á que eftáu
ligados, esforcandofe fiempre á vn movimiento encontra-
d o con el de el Orbe, que los agita Son Almas enfi rmas,
cuyo paladar fe difgufta con todos IQS manjares,
y ay no pocos de eftos hombres
en el Mundo,
73
-# & & &• & & &
*35J « • *'* ** f,»SJ? é!» .
f 1

LA POLITICA
M A S FINA,

DISCURSO. QUARTO.

§. I.
S . % ^ i ^ f l ¿ g L centro de toda la doctrina politica de
Machiabelo , viene à eftàr colocado
en aquella maldita maxima fuya , de
que para las medras tempotales , la
nodación de la virtud aprovecha ; lx
'íHtfma virtud eflorva. De,eñe punto fale, por lineas rectas*'
el veneno á toda la circunferencia de aquel dañado Siftema^
Todo el Mundo abomina el nombre de Machiabelo , y cali
todo el Mundo le figue. Aunque,por decir la verdad,la prac-^.
tica de el Mundo no fe tomo de la doctrina de Machiabelo;-'
antes la doctrina de Machiabelo fe tomo de la practica dei
èl Mundo. Aquel depravado Ingenio enfeño en fus eferitos
lo mifmo, que él avia eftudiado en los hombres. El Mundo
era el mifmo , antes de Machiabelo , que es aora y fe en-
gañan mucho los que pienfan , que los ligios fe fueron ma-
leando , afsi como fe fueron fucediendo. L a edad de oro no
exiftiò lino en la idèa de los Poetas : la felicidad que fingen
en ella, folo la gozaron vn hombre, y vna muger, Adán,;
y Eva; y elfo con tanta limitación de tiempo , que bien
lexos de llegar á vn figlo ( fegun muchos Padres ) no durq
i'n día entero.
a N o ay Cxm¡reboWer las Hjftorías ? afsl «.Sagradas^
74 L A POLITICA MAS FINA,
como Profanas, para vèr, que la politica de los Antiguos no
fué m e j o r , que la de los Modernos. Y o creo que fué peor.
A penas fe labia otro camino para el Templo de la Fortuna,
que el que rompía la violencia, ó fabricaba el engaño. D u -
raban la f è , y la amiftad , lo que duraba el interés. L a Reli-
gión , y la Jufticia fervian de pedeftal al ídolo de la conve-
niencia. O v i d i o , y .Aido Gelio refieren , que quando T a r -
quino quifo fabricar, en honor de Júpiter , el gran Templo
de el Capitolio, arruinó , para hazerle campo , los Templos
pequeños de otros muchos Diofes , los quales cedieron á
Júpiter, exceptuando el Diosllamado Termino, que no quifo
ceder ; y afsi fe mantuvo fu Eftatua , juntamente con la de
Júpiter, en el Templo Capitolino.

Tirmtnus , vt veteres memorant, convenías in vrbe


Refiitit, O" Magno cum love templa tenet.

3 Efta ficción , nos defcubre vna verdad. E l termi-


ño à donde los hombres caminan , es la conveniencia
que pretenden. Y es efta vna Deidad, que nunca quifo ce-
der al miímo Júpiter ; porque yà defde'los tiempos anti-
quifsimos , vt veteres memorant, el interés difputó prefe-
rencias à la Religión.
4 Bien antiguo fué P o l i b i o , y yà en fu tiempo avia,
no vno , íi no muchos Machiabelos , que enfeñaban , que el
manejo de las cofas publicas era impofsiblé, fin dolos , y
alevofias : Non defunt qui in tam crebro vfu doli mali ne~
ceffarium eum efe dicant ad publìcarum rerum adminijìra-
tionem. (lib.i$.tíifior.) Aun con mas exprefsion fe oye en
Lucano la maxima fundamental de Machiabelo , al malvado
•Photino,en la oración que hizo al R e y deEgypto Ptolo-
meo , para que contra los vinculos de el agradecimiento, f
de la palabra d a d a , quitaífe la vida al gran Pompeyo.

— Sydera terra
Ut dijìant, & fiama mari, fie vtile rec~lo¿

g* Eílo é$ puntualmente decir, que la virtud efìà ré-:


' " " " ' pida
DISCURSO QUARTO. 7 ?
ñkía con la propria vtlltdacl, y que es menefter abandonar
la JuLticía , para negociar la conveniencia. Poco dcípues
añade, que el que fe refolvíere á fer piadofo, y juílo , fe
deítierre voluntariamente de la C o r t e , porque e n e í l a f o ^
lo es patrocinado el vicio.

» Bxéataula
Qui vult effe pius¿

6 Efta es la creencia de el Mundo , tló folo de aígu-i


ños pocos,—y lo fué en todo tiempo. L o que eftamparóit
en íus libros Machiabelo , Hobbes , y otros Políticos in-
fames , e s l o m i f m o , que á Cada paífo fe oye en ios corri-
l l o s : que la virtud es defatendída, que ti vicio fe halla fu-
blímado , que la verdad , y la jufticia viven deserradas de
las Aulas , que la adulación , y la mentira fon las dos alas
con que fe buela á las alturas. Suponiendo , pues, que efte
fea error , debe colocarfe en el Catalogo délos errores co-
munes : y el demonftrar que lo e s , feráel aflumpto de efte
Capitulo, dando a. conocer contraía opinión de el Mun-
d o , que la política mas fina , y masfegura , aun para lo-
grar las conveniencias de efta vida , es la que eftriva en
j u f t i d a , y verdad^

J. II.
•Jf / ^ O N F E S S A i i é lo primero, que los que áfpiran á
V_j vfurpadores , no pueden ferio, fino por m e -
dio de maldades *. porque para el termino de la infolenciav
110 ay camino por el País de la virtud, Pero quien dirá*
que eftoá fon políticos fútiles ? Son los mas c i e g o s , y erra-
dos de todos : pues liguen Vna fenda , que efta toda bañada
en fangre. Poquifsimos caminaron por ella, que noperdief-
fen ígnominiofa , y violentamente la vida ,~ antes de llegar
al termino feñalado. A penas fe v é n en toda efta carrera,
fitio hombres colgados de. patíbulos , troncos tendidos en

cadahalfos , miembros defpedazados de fieras victimas fa-»


}

trincadas á la vengan cade el ofendido cu cenizas. Allá fe.


LA POLITICA MAS FINA,
vé á lo vltímo de la carrera , tal q u a l , que llegó á la do-
minación por eíle camino, Pero vno , ú otro feliz acafo,-
contrapefa 'á tanto efpectaculo faugriento ? Quien fe fia a
vn piélago fembrado. de efcollos , cubierto de cadáveres,
y tablas, folo porque en el efpacia de muchos ligios llega-.'
ron por él al puerto defeado tres , ó quatro baxeíes?
Afiadenfe á los riefgos de el naufragio , los trabajos , y fuf-
tos de la navegación ; pues -es cierto , que los"que navegan
por vn mar procelofo l aun antes de padecer la tormenta,
llevan otra tempeítad dentro de el Alma. Los que de parti-
culares afpiran á Soberanos, viven con afán ,. y»fobrefalto
perpetuo , para morir . défp-ues con ignominia. Y afsi,
aquella fatiga , como eñe riefgo, fe los llevan pegados á íu
•fortuna , aun qua-ndo logren la emprcífa : porque todos
los tyranoo viven con fufto, y rarifsimo muere en fu lecho.
Pues como pueden coníiderarfe eílos ni aun medianos po-
líticos ? L a política, en el fentido que aquí la tomamos,
es vn arte, de negociar la conveniencia propria. Pues qué
conveniencia ay en caminar por vna vida trabajofa. á vna
muerte violenta ? Digo , que á fugetos de tan defordenada
ambición, bien lexos-de contemplarlos, políticos hábiles,
los debemos tener por confumados necios.-
8 A y , empero, entre eílos algunos.:,, que es poco
llamarlos necios ; porque es'razón declararlos locos rema-
tados. Y fon aquellos, que aun con conocimiento de que
ván al precipicio, fe empeñan en efcalar la cumbre: ge-
;

nios émulos de las vanas exalá'cionés , que por brillar en


la altura , confienten en-fer reducidas á ceniza : y mas
quieren vna brevifsima vida en la elevación de el Ayre,.
que larga duración en la humildad de la tierra. Efíos toman,
por divifa aquella empreífa de Saavedra : Dum luceam pe-
ream. Como refplandezcaí,. mas .que perezca. Tal fué la
ainbiciofa Agripina, que quando los Chaldeos la dixeron,
quefir hijo Nerón lograría el dmperio ; pero la avia de qui-,
tal- -á--élla la vida ; refpondió auimofa.: Oicidat..dmn impe~,,
!

reí. Como reyne , no importa que rne mate. Tal fué la'In-
g-lefa Ana-Bolena, que viendofe , por fus adulterios , con-,
¿enadj a muerte, dixo conprguílq.,:, Q^ej.liizieífen lo.que.
DISCURSO QUARTO. 77
quifieífen con ella , no podían quitarla aver fido R e m a de
Inglaterra : como que tenía por mas dicha aver fido Rcyna,
aunque murielíe en la flor de fu edad con afrenta, que lo-
grar de particular vna vida larga con honra. En genios de
efte carácter / debemos mirar con laftima, no folo la def-,
gracia , mas también 4a_ demencia. Y cómoda los que no
conocen él riefgo de fu ambición , les degradamos de p o -
líticos por necios, á los que conociéndole fe meten en él,'
con mas razón dcbemos-degradarlos por locos.

§. III.
o !
' " T ~ A M B I E N confeflaré, que algunos de los polítí-
f eos iniquos , y dolofos, lograron favorable
el ayre de la fortuna halla la muerte. Philipo , Rey de Ma-,
cedonia , y padre de Alexandro , fué feliz en cali todas fus
empreñas , debiendo en ellas otro tanto á fus dolos , que
á fus a r m i s : igualmente favorecido de Mercurio , que ele
M a r t e , en fus coaquiftas., Y fi la injufticia , que hizo a¡
Paufanias en- no querer caíligar la abominable torpeza, que:;
en el violentamente avia executado Attalo , Capitán de,
Philipo , no hirviera irritado á aquel generofo Mancebo,;
de modo , que mato á puñaladas al Principe injurio , fe,
pudiera decir, que ninguna maldad avia perjudicado á fií
ib . Y ' . : ; : , Cornelio Sylla , dio á conocer, que no profeífa-:
ba Religión alguna , en el defpojo , que hizo de. los Tem-:
píos de Grecia , haziendo juntamente con picantes motes,
irrifion (que bien la merecían) de fus Deidades. Y aun-
que fué oífado, y hábil por extremo en la conduda de las
armas, no lo fué menos en políticas zancadillas : de modo,
que fu enemigo Carbón , decía por él , que en la períona
de va hombre folo , fe veía combatido de vn León , y de
,V-iu Zorra y pero quemas temía á la Zorra , que al León.-
Su crueldad pafso los términos de la barbarie. Sin embargo
fu felicidad fué fumma. Triunfo primero de los enemigos
déla República , y def pues de los de fu perfona. Ni tan-
tos miliares de muertes violentas , como de orden luya, fien-:
{|o á l ^ d o r , fe avian executado, impelieron al odio publico,;
78 LA POLÍTICA MAS FINA,
ó privado» pata hazer con el otro tanto. Aun que fu irmef*
te natural fué peor que ninguna de las violentas : puest rin-
dióla v i d a , convirtiendofele fucefsivamente todas las car-
nes en vna copia increíble de piojos.
lo LÍ Inglaterra nos ofrece, en los tiempos próxi-
m o s , dos poiiticos malvados i pero felices. El primero fué
Roberto D u d i e i , Cofide de Leiceílre, valido de la Reyna
Jfabela ; y tan v a l i d o q u e eíperó darle la mano de efpofo;
lo que fué ocaíion de vna de fus mayores maldades: pues
mató á fu propria muger, para remover eíle eítorvo , y ha-
bilitarle á aquella dicha. Alhagóle fiempre fiel la fortuna,
haziendole, halla fu muerte, dueño de la inclinación de
aquella Reyna , á quien avia puefto en cadenas con la fefti-
vidad de fu domeftica facundia , y con la gentileza
de la perfona : de modo , que aun dura la prefumpcion , de
que ya qué no coníigüió la propriedad de efpofo , logró el
vfufrüclo. El feguudo fué Oib/erio Cromuel , tyrano de
Inglaterra, debaxode el nombre de Protector, y Agente
principal en la muerte de fu R e y Carlos Primero : Atentado
tan horrible , por la circunfta-ncia de averfe erigido en Jue-
zes fuyos fus proprios Vaífallos , inftruyendo proceífo , y
daodo'fentencia, con todas aquellas formalidades , que fe
eftüan con qualefquiera R e o s , que no tuvo exemplo halla
áora en el Mundo. Hizofe el infulto mucho mayor , por
queríf facarle , con preteílo de las leyes , de la esfera de
infulto. Y tanto fe infamó en aquel lance la Nación tn-
glefa , que el mas Noble de todos , fué entonces el Verdu-
go de Londres , á quien , ni con promeífas , ni con amena-;
zas pudieron reducir á fer executor déla fentencia. Autor
de maldad tan enorme Cromuel, y de otras muchas , aun-
que inferiores , no foio reynó defpues abfoluto , todo el
reílo de fu v i d a , en la gran Bretaña ; pero en fuerza de fu
incomparable fagacidadj vino á fer como arbitro de toda
la Europa.
ir Eftos exemplos ay , y bien pocos mas fe halla-
r á n , de políticos perverfos , que fueron cónftantemente
felices. Pero deque íirventales exemplos ? Tendremos por
«fío por-políticos finos los que íiguierénel mifm© rumbo? •
•DISCURSO QUARTÓ, -70
No fino por infen Tatos. Es fuau falta de juicio, fundarlas
eíperancas fobre vno , íi otro fuccílo íingularifsimo , y no
fobre lo que comunmente acaece. Porque alguno hallo
alguna vena de oro , cabando la tierra , no ferá en mi locu-
ra ocuparme en abrir pozos por los cerros ? Efta es la lo-
cura de los Alquimiftas. Porque d o s , 6 tres hallaron la
piedra Philofofal ( fi todavia alguno la halló) fon infinitos
los que por bufcarla confumieron la hazienda , y la vida.
En effas rarifsimas dichas , en que eftriva la efperanca de in-
diferetos ambiciofos , intervinieron también rarifsimos ac-
cidentes , cuyo concurfo ninguno, en particular, puede pru-
dentemente efperar á fu favor. Fueron también eiíos po-
cos felices , ayudados de vnas rarifsimas prendas , en fuerca
de las quales , fi fueran por el camino de la virtud , con
ñus fofsiego huvieran arribado á la felicidad: que fué lo
que dixo Titolivio de Catón el M a y o r : In illo viro tantttm
robur corporis, & animi fuit , vt quocumque loco natus^
sjfet, fortunam Jibi facJurus videretur.

§. IV.
r
ii A UN prefeindiendo de los inumerables efeo-
_/V H°
s e n
tropieza la ambición , quando ca-
mina al fin por medios infames , efpecialmente fi pone muy
általa m i r a , fiempre es política masfegura llevar la pre-
tenfion por el camino de la jufticia , y de la verdad. EJ
Chanciller Balón , que fué tan gran Político , como Phi,.
lofofo , dividió la politica en a l t a , y baxa. L a política
a l t a , e s , la que fabe difponer los medios para los fines , fin
faltar, ni á la veracidad , ni á la equidad , ni al honor.
L a Politica baxa , aquella cuyo arte eftriva en ficciones;,
adulaciones , y enredos. L a primera es propria de hombres,
en quienes fe junta vn corazón generofo , y reíto , con
vn entendimiento c l a r o , y juicio folido. De hecho ( dice
ti Autor citado ) cafi quantos políticos eminentes ha ávido,
fueron de efte caraélér : Sane vbique reperias homines r.erum
tracíandarum per i i-ifi irnos , omnes firé canaorem , ingc¿
mitatem , & veraeic ateta in negotijs pra fe tulijf ?. L a fe-
~ - — - ... - • - - g u^_
8o LA POLÍTICA MÁS FINA,
guacía es de fugetos , en quienes baftardéa , ó el enten-,
dimietltó , ó la voluntad. O el entendimiento es de tan
efcaíá luz , que fio mucura otra fenela para el fin defea-
d o , fino la de la trampa; ó la voluntad eftá tan deftem-
plada , que fin repugnancia echa mano, de lo inhonefto,
como lo confidere vtil : ó lo que mas creo , en vna , y
otra potencia eftá el vicio.
i¡ Una , y otra política fe vén, como en dos efpejos,
en dos Emperadores , que fe fucedieron inmediatamente
v e o á oteo , Augufto , y Tiberio. • Augufto fué abierto,
canaido , generofo , confiante en fus'amiftades , fiel en fus
promeíías, ageno de todo engaño. En vna vida tan larga co-
mo la fu ya , no fe encuentra la menor alevofia. Qué digo
alcvoíia ? Ni aun la mas leve falacia. Tiberio, al contrario,
fué engañólo , falfo, fombrio , difsimulado. Jamás en él
eftuvieron de acuerdo, el pecho , y elfemblante : fiempre
ílts palabras anduvieron encontradas con fus defignios. Qual
de eftos dos fué mayor político ? Tácito lo decide , quando
en Augufto engrandece la perfpicacia; en Tiberio la cau-
tela. En efte reconoce alta difsimulacion ; en aquel fuprc-'
ma capacidad. Aísi induce á Muciano , animando á Vef-:
panano contra Viteiio : Non adverfus Attgujii acerrimam
inenlsm , ñeque adverfus Tiberij cautifsimam feneclutem
infurgimus.
; • 14 Y o fiempre tendría por el mejor político de'
Rectos aquel , que contento con la mucha , 6 poca fortuna, 7

jcjüc* le dio el C i e l o , üo quiere meterfe en los tráfagos de


•el-Mundo : en el mifmo fentido que fe dice , que lo mejor
de los dados es no jugarlos ; falvo que por fu oficio le toque
el manejo publico. Con todos los particulares habla aquel
admirable difticho de no sé quePoeta antiguo:

Mítt'é fuperba pattfajlidia, fpemque caducam


Defpice, vive tibi cum mortare tibí»

15 N o por elfo fon de mi gufto aquellos , que lla-


man buenos-hombres , invtiles para todo , por quienes
% dfeo. el Adagio Italiano t Twto hmn che val niente. Yes.
comq
DISCURSO QÜARTO. El
como fi dixéramos en Efpañol: Es tan bueno , que para na-
da es busno. Mucho menos apruebo aquellos genios aisla-
dos , que folo fon para si mifmos. Es baxeza de animo (di-
ce excelentemente Bacbn) dirigir todas las acciones á la
conveniencia propria, como á centro fuyo : Centrwn pía-,
yie ignobile e/i atllonum bominis cuiufquarn commodum pro-
prium. El hombre es animal fociable, y no folo por las le-;
y e s , mas aun por deuda de fu propria naturaleza , eftá obli-
gado á ayudar en lo que pudiere á los demás hombres:
efpecialmente al compañero , al vecino ; mas que á todos, á
fu Superior , y á fu República. Decía P l i n i o , que los g e -
nios , inclinados al beneficio, y alivio de los demás hom-,
bres , tienen no sé qué de divinos : Deus eji mortali itiva-
re mortaiem. Los que fe atienden folo á si mifmos , ni aua
£e pueden llamar humanos.

§. v.
l
iS T O qué diíta la r a z ó n , e s , ni métérfe en los
1 / negocios , ni negarfe obftinadamente á ellos,'
cñ cafo de reconocerfe con aptitud. Si por efte lado fe pu-
diere hazer fortuna : ni bufcarla, ni refiftirla ; y efto ef-
pecialmente , porque fe intíiefla mucho el publico , en que
fe coloquen en los empleos hombres bien intencionados.
Pero fuponiendo , que la doctrina , que damos en efte C a -
pitulo , no es para hombres tan moderados , antes para
aquellos, que adolecen algo de el achaque de ambiciofos,
y que eftos no quieren leer documentos morales , fino p o -
líticos : profigamos en el paralelo de los dos rumbos , por
donde fe puede hazer fortuna , ó manejar la que ya fe
poíTee.
17 T o d o quanto puede defearfe con racionalidad,'
fe puede confeguir fin difpendio de el honor. Una Índole
dcfpejada , acompañada de perfpicacia , y cordura, íiem-
pre halla camino pot donde arribar ai termino que preten-
de , fin torcer de la rectitud de lo honefto ázia el rodeo de
lo dolofo. Elíer fiel en la amiftad, íincero en el trato , tan
iexos eftá de ¡v.;r; acucar, que Ayuda mucho ; porque con
Jowí 1 " "' L elfos
8 % L A POLÍTICA MAS FINA,
elfos partidas fe gana la confianga , y el cariño de quien
puede darle la mano , ó fervirle de i.iftrumento. El d.'fin-.
teres, y el amor de la jufticia negocian el amor de IJHI-í
chos , y la veneración de todos. Franquear con modefta
oífadiael corazón en todas aquellas materias , que no fian
á fu cuílodia, ó el dictamen de la prudencia, 6 la ley de
el íigilo , tiene , reípecto de los fugetos con quienes fe trata;
vn atractivo muypoderofo. Aunque efto tal vez ocafione
á cite , ó á aquef, que es de opueíto dictamen , algún dif-
guíto , fe recompenfa con grandes ventajas con el concep-
to , que imprime de vn pecho noble , y íincero. El dif-
guíto pafla, y el concepto queda. De hecho eítas Almas
tranfparentes , quando á la claridad de el genio fe agrega
la de el difeurfo, fon las que fm fatiga fuben á la mayor
altura, £ 1 theatro de la naturaleza apunta en eíta parte lo'
que paífa en el theatro de la fortuna. Los cuerpos diafa-
n o s , y brillantes, fon los que ocupan lugar mas elevado
en la eítructura de ei Orbe : Los f o m b n o s , opacos , y obf-
Ctiros , el mas humilde.
iS El que fe halla afsiítido de víia prudencia promp-
ta-, de vna intención recta , de vna lealtad confiante , con
las demás dotes , que hemos feñalado , no ha menefter ef-
tár penfando fiempre en los medios con que puede mejo-
rar fus cofas. Apeles, que en todo lo demás celebraba al
famofo pintor Protogenes,le ponía el defecto de que no acer-
taba á levantar la mano de la tabla: lo que mueítra, dice
P i i n i o , que muchas vezes la nimia diligencia daña: Doeu-
mentó memorabili nocere fcepe nimiam diligent'am. Como
fe halle nueftro Político en theatro, donde fe vean fus pren-
das , finpenfar en ello fe le vendrán á la mano las opor-
tunidades. Puede fer, que llegue á emparejar con él en el
afcenfo el pretendiente torcido , y oficiofo ; pero ferá a
cofia de mucho mayor trabajo. A la mifma eminencia,,
donde fe anida la generofa Águila , puede arribar la aftuta-
Culebra. Pero con quanta fatiga! N o ay figura mas pro-
pria de vn político baxo. E l movimiento ladeado , y o b l i -
quo con que camina , feñalacl dolo con que procede: el
pecho pegado a la t i e r r a l a adherencia al interés proprío?
Disctmso QUARTO. 83
él cuerpo con varias inflexiones doblado-, el animo torcido:
y el veneno que effonde , la mala intención que oculta. O
íabandija ! Quanto te cuefta mejorar de puefto , folo por-
que eresfabandija I Entre tanto la Á g u i l a , con defeaníad»
]?uelo, fe fuele poner en la cima de el Olympo.

§. VI.
19 [O es eftala mayor defigualdad, qué ay. L a
mas feñalada confifte en la diferente fegu-
ridad de v n a , y otra fortuna. El politico torcido , ais i i
mientras bufea la dicha , como, defpues que la coníigue, ef-
tá fumamente arriefgado. Es impofsible , o cafi impofsi-
ble , que no fe defeubran fus marañas , quando le acechan •
tantos Émulos. Y defeubiertas , como eífe es el cimien-
to de toda la fabrica, no tarda vn inflante la ruina. E s
muy difícil (dice el Padre Famiano Eftrada) dexar de caer
luego , el que eftrivando en fuelo refvaladizo , es impelido
de el movimiento de otros muchos : Difjicile e/i in lubri-
co fiare din quem plures imbellunt, Efte es el eftadodevn
politico dolofo. Camina por vna. fenda muy reívaladiza,
y que eftá toda fobrefalfo. Los que trabajan por derri-
barle , fon todos aquellos , que , 6 embidian fu fortú^
na , ó aborrecen fu malicia : que es lo mifmo que decir,
que tiene por enemigos á los malos , y á los buenos. C o -
mo puede mantenerle mucho tiempo ? Caerá fin duda, Y
lo co'.nun es hazerfe pedazos en la caída: que es lo que
cautp con energía Claudiano.

i Tam non ad culmina rerum


Intujlos crevijfe qut&ror : toüuntur in aítum
Ut Lijjfu graviore ruant.¿-—>—•

20 El politico recto nada fe arriefga en el camiro,'


y tiene poco que temer enei termino. Quanto mas defeu-
bran fus fondos , eftá mas fes-uro. Tiene menos enemiros
que el otro : porque folo pueden ferio los malos. En c:.lo
que le derriben , uo es precipicio violento, fiu< •,:.!%
$4 L A POLITICA MAS FINA.
-blanda. Su inocencia , por lo menos , le affé gura la vida;
Y lo mas que le puede fu ceder ,. es reducirfe à fu antiguo
eludo.. L o c o m u n , es., que ni elfo logran los mal inten-i
clonados : y vienen a herir en eilos por reflexión todos fus
tiros , ocafionando tal vez mayor gloria al aculado. A cu-
y o propofito me ocurre la hiftoria de vn Politico recto,
( aunque Infiel en quanto à la Religión ) que trahe Taber-
'nier en fus Vi.ages ; y por fer reciente , y dulce referiré
>

aqui brevemente,
21 Mahomet Alibeg , Mayordomo Mayor de el R e y
¡dePerfía , al principio de el Siglo paliado, fubiò à tan ele>
vado.puefto deíde el humilde eftado. de pobre Paftorcillo^
,Un dia , que aquel Rey andaba, à caza, le encontró tañen-,
do la flauta, y guardando Cabras en el monte.. Pordiver-
fion le hizo algunas preguntas ; y prendado de la v i v a c e
dad, y agudeza con que refpondió el niño ,. fe le llevo
configo à Palacio:' donde aviendo mandado Ínftruirle. : la,
rectitud de fia corazón , y claridad de fu ingenio ,, ganaron
la inclinación de el Rey de modo , que elevandole promp-
tamentede cargo encargo ,. vino à colocarle en el ,.que y i
d i x i m o s , de Mayordomo Mayor. Su integridad inflexible
al atractivo de los prefentes ( cofa muy rara entre l o -
Mahometanos ) concitaron contra el poderofos enemigos;-,
pero fin atreverfe à intentar hoftilidad alguna por verle
tan dueño de el animo- de el Soberano :. haftaque muerto - 1

eíte , y entrando el fuccefíbr , que era joven., le fugirie-


ron , que Mahomet avia, vfurpado- at erario Real grandes
teforos. Ordenóle el Principe, que dentro de quince dias,
'dieffe quentas. A que M a h o m e t , intrepido , refpondió,,
que no era menefter efia dilación ;. y que fi fu. Mageítad
íuefle fervido de ir inmediatamente con. èl à cafa de e l ' T e -
forero , alli fe las daría. Fué el R e y ,.feguido dedos a c u -
factores ; pero fe halló todo en tan bello orden , y con t a n -
t a exaftitud ajuítada. la quenta de los caudales en los L i - •
feros , que nadie tuvo que decir» De alli fe pafsò à la cafa '
'de el mifmo Mahomet „ donde el, Rey admiró la. mode-
lación , que avia en alhajas, y adornos. Pero obfervanda» •
¡ntp d& los enemigos deel Yjdidq la puerta, de y.n, quarte?
DISCURSO QITÁRTO, 8f
.cerrada , y guarnecida con tres cadenas fuertes , fe lo ad-
virtió al Rey , el qual le preguntó : Qué tenia cerrado en
aquel quarto ? Señor (refpondió Mahomct) aqui guardo
lo que es mió. T o d o lo que haíta aora fe ha vifto, es de
y . Mag. diciendo efto abrió la puerta. Entró el Rey en el
quarto , y bolviendo á todas partes los ojos , no vio otra
cofa , fino las alhajas figuientes, pendiente cada vnade vn
clavo en las paredes : vna zamarra, vna alforja, vn ca-
yado paftoril , y vna flauta. Atónito las miraba el R e y ,
quando poniendofe de rodillas delante de él Mahomet, le
dixo : Señor , efte es el habito, y eftos los bienes , que yo.
tenia , quando el padre de V . Mag.. me traxo á la Corte.
Efto es lo que entonces tenia , y efto lo que aora tengo.
Solo efto conozco por mío. Y pues lo es , fuplieo con el
mayor rendimiento á V . Mag. me permita gozarlo , bol-
viendome al monte , de donde me extraxo mi fortuna. Aqui
no pudieudo contener el Rey las lagrimas , le echó los
brazos al generólo Valido y no contento con efta de-
tnonftracion ,. defpojandofe pronjptamente de fus Reales
hábitos , fe los hizo veftir á Mahomet : lo- que en Pe; fia-
fe eftima por la fuprema honra,, que el Rey puede hazer
á vn VaflaÜo. De efte fuceífo refultó, que Mahomet logro
defpues. confiantes- la. confianca , y cariño de el Principe
toda fu vida. Quélaftima , que efte deíinterés , efta eleva-
ción de animo , efta rectitud , efta moderación eftuvieíW
r

íen depoíkadas en vn Infiel!.

VIL
• si | .''L efcollo común,, que ocurre á los políticos-
. reatos , es la dificultad de tratar con verdad^
J defengaño a los poderofos. La adulación es v r a puer-,
ía tijuy ancha para el favor ; pero ningún animo noble pue-
de enerar por elía , porque es muy baxa, A todos ovgo
decir, que: aborrecen á los aduladores ; y no sé fi he vif-
íoalguno, que no-Ios ame. Efto coníifte enque cadavno
seguía el valor de fus prendas mas-allá de el precio- jufto#
r

t S ° w o e l dicho de §1 adulador eragar-é^a con ÍÍI concepto^.


26 L A POLITICA MAS FINA,
no letle-ic por adulador, fino por vn homb re de talento»
que hai'C juicio cab al de las cofas. Mas fi íuere tan cuer-
do , que no fe tenga en mas de lo que e s , ò tan humilde,
que fe tenga ' en menos : no por elfo dexa el adulador de ha-
zer fu negocio. Entonces el adulado atrib uye el excelfo de
fu opinion , à exceflo de cariño : porque todo lo que fe
mira con el mkrofcopio de el a m o r , engrandece mucho
fu reprefentacion en la idèa : y en effe cafo , aunque noie
cree el aplaufo , le eftima el afecto. Con que viene à fec
la adulación vna red vniverfal, donde cae todo genero dtf
pezes,
23 Es, pues, efte vn medio , manejado con arte, (que
también ay aduladores faítidiofos) b aftanteaiente fegur»
para negociar ; p~ro vilifsimo. Y níst, ni fe ha de ech r
mano de e l , ni faltar jamás à la verdad. O , quehverdad
es defa.b r i da ! No importa. Condimentos tiene la pruden-
cia-para fazo n arla. Y como fe vfe de ellos, es v.-rd d qns
tardará mas tiempo en iníinuarfe el politico recto en ci
animo ds el poderofo, que el fordido lifongero ; pero al
fin logrará mas folíela, y mas alta eftimacion. L o primero,"
debe proferir fu dictamen fi¡¡ afpereza , y no hazerlo fino
quando es precifo. L a rigidez de el defengaño, fe \y: de
ablandar coala fuavidad deelrefpeto. Sirvan de vehículos
la reverencia, y la dulcura , para hazer b ien admitida la
propuefta. Ni ella fe deb e hazer, fino quando decorofa-
mence no puede efeufarfe de decir fu fentir. Eítas parti-
das celeb rab a el Rey Theodor!co en vn favorecido luyo
Sub geni) mjlri luce intrépidas qatdem ; pel reverente*
adfíabat , oportune tacitas , nece (Jarte copio fus. ( Cajiodi
¡ib. 5. Epijt. \.) Si la materia permite elegir tiempos , b uf-:
quenfe aquellos en que el genio de el poderofo eítá mas b ieii
templado para recib ir ios defengaños ; encomendando eítfi
cuidado á la diferecion, que es la que entiende efta №
teria.
Sola viri 'molle s ad ¿tus, &• tempora ñoras,

24 L o fegundo, nunca fe defienda con protervia eí


píoprio dictamen, contea la opinion, de el poderofo : pof . J

qu«
DISCURSO QUARTO. 87
que eílo nunca puede fer fin ofenfa. Difcretamente reípon-
diò el Philofofo Faborino à algunos, que le culpaban de
aver cedido envna difputa al Emperador Adriano , dicien-
d o , que era julio ceder à vn hombre, que mandaba trein-
ta Legiones,
25 L o tercero, fe puede endulzar lo amargo de la
veracidad con vna eipecie de acmiaticn , que con filie , no
en palabras, fino en obras. Efte nombre doy al culto, al
obfequio, à la fumifsion , à la oficiofidad : y hazen vn no*:
table efe&o , para que lea bien efcuchadc el avilo : por quan-
to mueftran, que el defengaño nace ce vna fincerkLd gene-
r o í a , n o d e v n orgullo v-roter o. Entiéndele que el rendi-
miento no degenere en abiecckm de animo, Y citaba p .ra
decir , que refpefto de los Superiores, fiempre và la ltimif-
fion defendida de effe rieígo. Avier.dole negado Duu-.yúo,'
Tyrano de Sicilia, vna demanda à Ariftippo e.e Cirene , re
poftrò elle à fus pies , y configuiòlo que pretendía. -k.epr;.~
hendieron algunos aquella acción, como indigna de la g r a -
vedad de vn Philofofo. A querefpondiò Atiftippo : Ei m e
qulfiere fer oído de Dionyfio , ha de poner la boca a ius > j:s,j
:

porque tiene en ellos las orejas. E l dicho es gracioso,


fumifsion no se fi fué excefsiva.
26 Ufando de dichas precauciones ,- b u d v o à :.Ae~'
gurar , qjie ufcendera el politico r e d o á mache mas aito
grado en la eftimacion de el poderofo, que el peienn; cor;*
templativo En llegando à perfuadir de fu omdcr , a q.u ca :

yá .comprehendiò fu habilidad , eftafeguro. T a l vez por íu


integridad padecerá algún defvio : y ai mifmo tiempo cítara
gozando Jacontìanca. Como le fucediò al Duque de A Iva
eon Phclipe I I . quando le embiò à la conquifh de Po: ru-
gai , que le hizo el R e y el defayre de no admitir fu vifìta,
y al milino tiempo le efta.ba fiando vna empreña de tanta
monta. Ai contrario el adulador, aunque en la converfacion,
y trato común fera fiempre gracioío , no por efiV, fi el
Superior es algo advertido, le entrara muy adentro. Son
muchos los que vfan de los aduladores, como los febrici-
tantes de la agua, quando-les es nociva: qué fe enjuagan con
SÜa j pero ao la tragan.- Generalmente hablando :( y efta,
" * pam
88 LA POLÍTICA MAS FINA,
para mí es conclufion infalible) en igualdad de talentos , eí
hombre de bien, candido , leal , agradecido , amante de
la equidad , y jufticia, hará mayor fortuna , y mas fegura,
que el que eftuviere d.?fnudo de eftas Cualidades, ó tuyie?¡
je. las opueftas,

§. V i II.
»7 T ^ E R O aqui me atravieffan por objecclon la expé-:.
J_ rienda común. N o fe vé otra cofa en el Mun-
do fino perverfos exaltados, y virtuofos abatidos: la li-
fonja, y el engaño dominando ; la verdad , y el candor
gimiendo. Refpondo lo primero, que todo eflomas es voz
de la embidia, que obfervacion de la experiencia. Gon-
fieífo, que fe oyen eflas quexas á cada paífo. Pero quien las
articula? N o los que ocupan los pueftos: pues no hablarían
contra si proprios. Tampoco los virtuofos defatendidos:
pues elfos no andan fatigando al Mundo con quexidos , ni
mordiendo en la fama á los poderofos, ni haziendofe á si
proprios/la merced de fer ellos folos los beneméritos. Pues
quienes/?Solo los inhábiles, y m a l o s , que fe vén defpre-,
ciados, /Aquellos que , ya por fu ineptitud , ya por fu mal
proceder , fe hazen indignos de toda atención , aque-
llos aculan la iniquidad.de la fortuna. Y como fon tan-
tos , y todos mal acondicionados , hazen tanto ruido
con fus quexas , que las vozes que falen de fu dañado
pecho , parecen clamores de todo el Mundo». Añadefe á.
ello : que como ningún hombre , que llega á lograr algún
poder , puede hazer bien á todos los que mira en fortuna
inferior , lino á pocos : todos aquellos á quienes no alcanca
s

fu beneficencia , confideran injufta la diftributiva: Parecidos


á los Cifres , que foio adoran á D i o s , quando les da buen
tiempo, y fe irritan contra él, quando les falta. Los, míanos
favorecidos, porque no lo fon tanto como quifieran , fuelea
eftárquexofos«Loque yo*por mí experiencia puedo aífegurar;
es , que aviendo tratado á algunos de eftos , que fueron ar-
tífices de fu fortuna, los experimenté, fin comparación, me-i
j o t e s . , q u e ios piataba la, opinión, cqmua..
DISCURSO QÜARTQ. 8p
- 2$ Refpondo lo fegundo, que aun quando fuelle
Verdad , que fon pocos los virtuofos afortunados, nada fe
prueba de ai , contra lo que llevamos dicho. Si fon po-
cos los que por el camino de la virtud hazen fortuna , de-
penderá de que fon pocos los que bufcan la fortuna por
eíTe camino. Como han de llegar muchos al termino , fien-
do pocos los que fe poneu á la carrera f De los verdade-
ros virtuofos , ó Santos , es cierto que ninguno foliclta af-
éenlos, Ellos fon como los Aftros , que ninguno pretende
fubir de aquella Esfera , en que Dios le pone, á otra fu-
perior. Los de virtud no tan folida , que fon de quienes
vamos hablando, acompañadosde las prendas que hemos
dicho , en todas las Repúblicas fon pocos ; pero elfos pocos¿
íi fe aplican, aflegurare que todos negocian. Mueftrefeme vil
hombre folo de Índole excelfa, de entendimiento claro , de
intención reda , de corazón confiante, vrbano , fiel, veraz, y
piadofo, que no aya mejorado mucho fu fortuna , fi la bufeóv
coa diligencia. A muchos de eftos ( digo muchos respecti-
vamente á fu numero) la fortuna los bufea , aun quandoí
ellos la defdeúan. Intereífanfe mucho en fu elevación , losí
mifmos que les dan la mano. Y íi acafo me moftraren al-
gunos de eftos abatidos , por cada vno de ellos feñalare
yo ciento de los politicos torcidos , á quienes reduxeroft
á pobreza , y miferia fus trampas , zancadillas , y em-
bulles.
29 Aun no lo dixé todo. Eftoy firmemente perfua-.
¿ido á que es muy raro el hombre , á quien no le fir-
va algo la virtud , para la conveniencia temporal. Porqué
fi el fiftema de el govierno le es favorable , es elevado:
Si indiferente , es atendido : Si adverfo , por lo menos
no es odiado. Aun quando arde la República en facciones,
le mira la parcialidad opuefta , como excepción de fus iras,
ya que no le fie los cargos. N o fe vio en el Mundo furor
igual al de los Sicilianos, quando en aquellas famofas Vifpe-
ras degollaron á los Francefes; N i jamás alguna Nación
éfliivo tan irritada contra otra; pues llegaron á la barbarie de
romper el vientre á todas las mugeres Sicilianas, que en-
Seudian avian concebido de Francefes. En tan-horrible del*
pò L A POLITICA MÁS FINA,
t r o z o , ño fe falvò alguno de ella Nación, de quantos pudie'j
ron aver à las manos , lino Guillen de Porceleto, Gover-
nador de el Lugar de Calatafimi , à quien refguardò de la
ira comunlafama de fu bondad. T a n cierto e s , que para
la faña popular no ay otro afylo , que el Templo de la
virtud.
30 Elfo que tanto fe clamorea , .de que yazen ar-
rinconados hombres de grandes prendas, es mera fabula;
falvo , que ellos voluntariamente fe arrinconen , ò que
juntamente con las grandes prendas tengan grandes defec-
tos. Y o por el Mundo he andado, y halla aora no he vifto
hombre afsftido de dotes efeogidas, y fin defectos íbbre-
falientes , que no fuelle baftantemente atendido ; bien que no
fiempre ( que en todo fe ha de decir la vrerdad ) á propor-.
cion de la eftatura de el merito. Los que dicen lo contra-
rio , no fe quexan , fi fe mira bien , de el infortunio age-
no , fi no de el proprio. En la voz fe laftiman , de que ef-
'tàn defpreciados los hombres de prendas; enei corazón fo-
lo fe duelen , de que eftàn defpreciados ios que carecen de
ellas , que fon ellos mifmos. C o n capa-de el zelo de el pu-
blico , fe. defahoga el dolor privado. Es artificio vulgar de
la ineptitud vltrajada , cenfurar de iniqua la diftributiva.
Y fe v e , que fi alguno de ellos cenfores afeiende à aque-
llo à que afpira : luego aprueba todo el g o v i e r n o , que
antes reprobaba. De donde fe infiere , que todo el merito
que antes lamentaba p i f a d o , l e confider aba recogido dentro
de sì proprio. Indignos elevados algunos he vifto ; hombre
grande íín tacha grande abatido , ninguno conozco.

§. IX.
31 '~1~^IEMPO e s y à deque tratemos de los Incoñvé*
¿ nientes de la politica baxa. Efta -, dice el ce-
lebrado B a c o n , que es el afylo de aquellos , que por falta
de talentos no pueden fegiür la fenda fublime de la politica
heroyea : Quod fi quis.ad hunc indici] , & diferetionis gra-,
dum afcendere non valeat-, ei velinquitur taniquam$utifsi*
mum^ vtjít teífofí & 4¡¿^WhM- {de ínter, rer. cap.6.\
DISCURSO QUARTO. pi
Coincide efta máxima con la que cita Plutarco de el Gene-
ral Lifaíidro. Argüíanle los Lacedemonios , de que por fu
poca f e , y verdad degeneraba de Hercules, de cuya a s -
cendencia fe gloriaban los Lacedemonios t á que él ref-
pondió ( aludiendo íngeníofamente al vefticlo de que vfaba
Hercules) que á donde no alcancaba la piel de el León era y

precifo vfar de la piel de Zorra.


32 Tiene la política baxa diferentes grados , vnós
- peores , que otros, El primero es , el de la difsimulacion,
y cautela. El fegundo , el de la fimulacion, y mentira. E l
tercero , el de la maldad , é inlolencia. El primero , como
no llegue á tocar la raya de el fegundo , es en lo moral in-
diferente. Pero es muy difícil vna continua cautela, que no
fe roze mil vezes con la mentira : porque fi fe apura con
preguntas, elfilencio fuele equivaler á refpueftapofsitiva,
interpretándole ázia la parte que le eftá mal al preguntado:
y vna falída ingeniofa , y prompta en eftos aprietos , fin v i o -
lar la verdad , es para pocos.
33 L a difsimulacion habitual, en parte nace de de-:
Feíto de el entendimiento; en parte de vicio de el natural.
Aquellos que no diftinguen quando es conveniente el filen-
cio , ni quando es importante , 6 arriefgada la explicación,
fi fon vn poco reflexivos , toman el partido de el filencio,
ú de vna explicación diminuta en todas las materias : fe-
mejantes á los de corta viña,- que aun en camino llano,
por temer refvalar, fe van con tiento. Efto en algunos,
mas es fobra de pufilanimidad, que falta de advertencia;-
aunque fiempre fe mezclan vno , y otro. Como quiera,
viven con harto trabajo : pues lo mifmo es cerrar continua-
mente con vn candado los labios , que tener toda la vida
el corazón en prifiones. T o d o es temores de que les defcu-
bran el pecho , u de fi ya en las palabras que vfaron le han
defcubierto. Fáltales el confuelo de defahogarfe aun con vn
amigo : porque todos los pufilanimes fon defconfiados , y
fufpiciofos. A penas á algún hombre juzgan fincero en la
amiftad , ó feguro en la f é. Hazenfe también ingratos , y
faftidiofos en el trato : porque de todo hazen myfterio. Y
fiendo la c o m u l a c i ó n reciproca de Lis Almas , el mas
92, LA POLÍTICA MAS FINA,
dulce comercio, que ay entre los hombres , fon infelices^
-porque no gozan de eífe bien ; y fon defagradables : por-;
que , quanto es de fu parte , privan de el á los demás.
Añadefe á efto, q u e , de quien no fia de nadie , ningún
cuerdo fia, y con razón : porque fe haze iofpechofo de que
juzga los pechos ágenos por el fuyo. También fucede, que
por no revelar á nadie fus intentos, algunos que tendrían
motivo para ayudarlos, no lo hagan, porque los ignoran.
Afsi íucedió á Pompeyo , el qual, aunque guerrero oflado,
fue político tímido. Su animo era el mifmo que el de Celar,
dominar la República abfoluto, Cefar loconfiguió: por-
que lo intentó abiertamente. Pompeyo efcondiendo, aun
á fus aficionados , que eran muchos , el defignio , y pro-
curando turbar la República con artificios ocultos (Ocultior
non melior , dice de él Tácito , comparándole con Mario,
y Sylla ) para que ella efpontaneamente fe le cayeífe en las
manos, no logró el fin: porque ignorándole fus Aliados,
no aplicaron los iníluxos. Por todas eftas razones es muy
difícil, que hombres muy difsimulados adelanten en alguna
manera.íu fortuna. Por lo menos no lo deberán á fugenioj

§. x.
54 "I" OS- fimuladores , y embuftetos , fon el vnlgó
J , de las Aulas. Eftos hazen el mayor numero
Cilla población de el- Orbe político. Muy peligrofos van
los que liguen efte camino; aunque es el mas trillado. Es
como moralmente impofsible que por mas que el arte , y
la fortuna confpiren á cubrir fus trampas, íiendo tantas,
fio fe manifieften algunas. Un edificio , que eftá fobre fal-
l ó , por si mifmo fe c a e , fin que le derrive el viento. Ya
defcubierto vn genio mentírofo , el menor inconveniente^
que tiene , es no fer mas creído. A Tiberio , por averie
experimentado tantas vezes falfo-,, yá no le daban fé , aun
quando decía verdad; Vero quoque & bouefia fidemdemifsiti
"dice Tácito.
35 N o folo las mentiras defcubiertas fon infelices!
'¿ lezes t i b i e n lo fqa las_ creídas : porque producen vn,
ffeJÍS
DISCURSO QUXRTO. 93
éfeíto totalmente opuefto á aquel que fe pretende. QuifoJ
Nerón matar á fu madre A g r i p k i a , de modo que pare-i
cieífe la muerte cafual , y no intentada» Para efte efe£to[
difpufo,que vna nave , en que fe avia de embarcar Agri-;
p i n a , fe fabricaífe con tal artificio , que con facilidad fe fe-;
paraífe vna porción de ella de el refto, y cayeffe al Mar,
la infeliz Princefa. No fe logro el intento : porque el ba-,
x e l no padeció el deílrozo intentado, aunque fe defquader-
tib lo bailante, para introducir temor de el naufragio e n '
los que iban en la parte inclinada. En efto Axeronia, Da-,
made A g r i p i n a , para que acudieífen promptos á Socorrer-
la , fingió fer la mifma Agripina , dando vozes , que favo-;
recieffen en fu perfona la madre de el Emperador. Ofrecía
oportunidad, para efte engaño , la obfcuridadde l a noche*
Con que los que eran fabidores de el intento de Nerón , no
dudando que fu-'áfe la mifma Agripina, acudieron promp-
t o s ; pero para hazer pedazos á la defdichada AceronLtj por-
que Nerón quedafle férvido,
l6 L a mentira es propria de genios viles : y mezdrn-
dofe ,- como fe mezcla , con la adulación en los ambicio-
fos , los haze vilifsimos : porque los conftituye fiervos de
todos los demás hombres. A todos fe fometen , á todos fe
humillan , á todos tratan como a dueños ; á vnos , por-
que les hagan bien; á otros , porque no les hagan m a l :
parecidos á los falvages de la Virginia , que no folo ..do-
ran los Ai tros , porque los alumbren, y fertilicen ; mas
también adoran todo lo que temen, y paífan por Deidades
entre ellos , no folo el diablo , que es fu principal numen;
mas también el fuego, los nublados, los cavallos, y los
cañones bélicos. Harto trabajo fe tienen los que á tantos
dueños firven. Y fobre el trabajo que tienen los mentiro-
ÍOS en fervir á tantos dueños , fe les añade el peligro^
de que como á todos engañan, fiendo
defeubiertos , todos los
aborrezcan»

3Wa W ítl m ¿r?)


LA POLITICA MAS FINA,

§. XI.
'37 T ' LEGUEMOS yà á la quinta eiTencia de et venene*
J_j de la ambición , à los políticos malvados,
peftes de las Repúblicas, Atheiftas encubiertos , demonios
disfrazados > que fin embarazo fe fírven de los mas feos v i -
cios para el logro de fus intentos : que para a l c a u c í con
la mano las dichas, fe ponen de pies fobre las leyes : que
con las bellas prendas de el perjurio , la ingratitud , la ale-
v o í i a , galantean de noche , y dia à la fortuna. Ellos fon
los mas ciegos de todos los politicos : pues el camino por
donde pienfan llegar à la felicidad , y. á la honra , es el
que los lievaen derechura, à la defdicha, y á la afrenta.
Quien con eftos medios fe hizo dichofo ? El mifmo Machia-
belo , granMaeftro de efta infernal politica , pafsò los v i -
timos años de fu vida en fumamiferia. Y mucho antes hu-
viera perdido la vida en vna horca , fino huviera negado
en la tortura fu concurrencia en la confpiracion contra los
Mediéis. Si v i r o , ù otro fe levanto vn poco à fuerca de
maldades , fue fu elevación como la de Simon M a g o , para
deftrozarfe en la caída las piernas. Aun con los Principes
malos , fueron infelices los politicos depravados. L o g r ó
Seyano , por la fymbolizacion de coftumbres , la gracia de
T i b e r i o , en tanto grado, que vino à mandarle abfoluto.
Y en que paró el favor de la fortuna ? En que jamás mu-
rió ningún Reo con mayor ignominia. Petronio Arbitro
lifongeó el genio lafcivo de Nerón , halla fer intendente
de fus torpezas , ó regla de' fus brutalidades : de modo,
que en todo lo que miraba al deleyte , dio el Principe la
obediencia à elle Vaflallo, no guftando de otra cofa, que
de lo que Petronio prefcrivia. Sin embargo llegó el cafo
de deftinarle Nerón á la muerte , la qual Petronio fe an-
ticipó abriendofe las venas.- Y es muy de notar, que de quan-
tos Nerón aborrecía , el vltimo que de orden fuya murió,
fué Seneca. Deteníale al Principe el brazo la virtud de
el Philofofo ; aunque la virtud de el Philofofo era vn fif-
c£.l failidiofiísiiBO para la vida de el Principe. Y en fin, no
mu-
DISCURSO QUARTO. 95
murió fin delito: pues fué fabidorde la conjuración de P i -
fon. Si eftas inmunidades goza la virtud con los Principes
malos, qué ferá con los buenos?
38 Raro delirio efperar propicias las Eft'rellas á fus
intentos , quien eft'á haziendo guerra al Cielo con fusin-
fultos! Preguntóle con irrifiou vn Francés á vn Inglés-, ha-
ziendo memoria de aquel tiempo en que la Nación Inglefa,
debaxo de fu Rey Enrico V I . fe vio cafi abfoluta feñora de
la Francia: Quando bolvereis a fer j'mores áe nnefiro Reyw
no? Refpondió el Inglés admirablemente :. Quando vuef-
tros pecados f'ean mayores que los ñus¡iros'. Poco diferen-
te fué el dicho de Agefilao quando Tyfaphernes , por v e r -
fe fuperior en tuercas , rompió con él contra las Pazes, que
tenia juradas: Alegróme^ dixo Agefilao , porque Tyfaphernes
con fu perfidia ha pus fio a los Diofes de mi parte. E l fu-
ceflo fué , que triumphó Agefilao ; y Tyfaphirnes perdió la
batalla, y la vida.
39 Pero para reprefentar quanto pone á Dios de el
vando de fus enemigos , el que violando juramentos he-
chos por fu Santo Nombre , pienfa adelantar las empref-
fas , no fe halla en las Hiftorias exemplo mas memorable,-
que el que íe vio en Ladislao I V . R e y de Ungria. Aviaefte
Principe, defpues de algunas victorias, ajuftado treguas con
Amurates II. Pero poco defpues, initado de el indifereto ze-
lo de el Legado Pontificio , rompió de nuevo la guerra. L a
politica mundana perfuadia, que la ocafion era oportuna:
porque los Turcos eftaban confternados de las rotas ante-
cedentes. Ladislao tenia excelentes T r o p a s , y por Caudi-
llo fuyo Juan Huniades el mejor guerrero que conocía
3

el Mundo en aquel Siglo. Llegófe á batalla , en que los


principios fueron muy favorables á los Ungaros, Como'
vieífe Amurates ya inclinadas á la fuga fus Tropas , fa-
cando de.el pecho la eferkura en que le tenia juradas las
treguas L a d i s l a o , y levantando los ojos al Cielo , habló
de efta fuerte á aiueflxo Redcmpror en alto grito : Jcju-
Ghrifio , fl •eres Verdadero Dios, como pienfan los Chrifíia-t
vos, cajiiga la injuria, que ejios te han hecho en romper
fas treguas 3 que avian jurado por tu Santo Nombre. Co-;
LA POLITICA MAS FINA,
fa admirable ! A l punto torció el Ayre la fortuna ; y ios
Mahometanos hizieron en los Chriftianos vn fangriento
deftrozo, de que fué complemento la muerte del mifmx»
Rey Ladislao,

Difciíe iufiitiam móniti & non tstmare Divoti

§. X í I.
40 T T"^ de los. efe&os mas comunes de la política
\J infame , es torcerfe contra el Autor fus
proprias máximas. Geroboan , hecho dueño de las diez
Tribus , en la divifion de el Rfyno de I f r a é l , para con-
fervar en si , y en fus defcendientcs la C o r o n a , tiró vn
rafgo , á fu parecer , de política finifsima : porque ad-
•virtiendo, que el motivo de la Religion llamaba los cora-
ííones de fus Vaffallos al Templo de Jerufalem , y que
mientras no fe hizieífe divorcio en el Culto no podía fer
firme la division en el Imperio , levantando dos ídolos,
hizo que las diez Tribus los adoraiTen , olvidando al ver-
dadero Dios , que era adorado en el Templo de Jerufa-
lem. Pues efta política aguda fué la que le quitó á fu pof-
teridad, como fe expreíía en el Tercero de ios Reyes , la
fucefsion en la Corona , perdiendo fu hijo Nadab el R e y -
no , y la vida , á manos de el rebelde General BaaíTa. En la
muerte que dbron á Nueftro Redemptor los Judíos , in-
tervino la política de precaver, que los Romanos los deftru-
yeíTen , con el motivo de aver reconocido otro R e y , que
al Cef ir. Y por la execucion de efta maldita maxima, or-
denándolo afsi el Cielo paracaftigo fuyo , los deítruyerott
defpues los Romanos.
4r Afsi djfpone la Providencia , que los mifmos
iriedios,que aplican los políticos Machiabeliftas para fu EXAL-
tación , ó para fu feguriejad, fean infirumentos de fu per-:
dldom Aman es crucificado en el mifmo patíbulo , que
tenia preparado para Mardochéo. Perito es abrafado en
el Buey de bronce , que avia fabricado para linfogéarht
gfueldad de Phaiaris. Calipo,Tyranodj; SitUia, esdego*
DISCURSO QUARTO. 97
liado cóíi el mifmo cuchillo , con que el avia quitado la
vida al generólo Díon. Ifaac Aaron, Griego de Nación,
á quien por fus maldades avia quitado los ojos el Empe-
rador Emmanuel Coomeno , le dio defpues al vfurpador
Audronico el confejo de que á fus enemigos les quitaífe,
no folo los o j o s , mas también la lengua, porque con ella
le podian hazer daño , aun perdida la vifta. Sucedió á
Andronico el Emperador Ifaac Angelo, y al infame C o n -
fegero , que eftaba ya privado de la vifta, le cortó tam-
bién ¡a lengua, Perrin , Capitán General de Ginebra , gran
perfeguidor de los Carbólicos, luego que el año de 1 5 3 5 .
mudó de Religión aquella República , hizo tranfportar
la piedra de ei Altar Mayor de la Iglefia Cathedral á la
Plaza , para que firvieífe de cadahalfo á los delinquen-:
tes. Y fegun refiere el Padre Maimburgo en fu Hiftoris
de el Calvinifmo , el mifmo Perrin fue el primero , que en-
íangrentó aquella piedra, fiendo degollado por fus crimi-
nes. Thomas Cromuel , á quien Enrico V I I I . quando fe
erigió en Cabeza de la Iglefia Anglicana , conftituyó -Su-
premo Vicario fnyo en las cofas Eclefiafticas , hombre
extremamente falfo , cruel, y avaro, para tener mas oca-
íiones de perfeguir á los Eclefiafticos, y enriquecerfe cor»
fusdefpojos, induxo á Enrico á hazer la ley iniquifsima
de que fuelfen validas las fentencias de muertes , y confif-
caciones promulgadas contra los Reos de lefa Mageftad, aun-
que no fueííen oídos. Pues el mifmo Cromuel fué el prime-
ro con quien fe practicó efta ley ; fiendo degollado de ordett
«le Enrico, fin querer oírle, ni permitirle alguna defenfa.

—<Non eji ¡ex aquior vita


Quam nec'ís artifieem fraude psrire fuá»

4.Í Finalmente , por decirlo de vna vez , reglítrenfe'


las Hiftorias. Entre mil políticos de eftos, que por medio
de la maldad bufearon la exaltación, á penas fe hallará vno,
que no aya tenido defdichado fin. Afsi fué hafta aora : afsl
ferá de aqui á delante. Pues qué ceguera es efta de feguir
S[na fenda , donde folo por f n milagro de el acafo fepue-
?
o8 L A POLÍTICA MAS FINA,
de evitar el precipicio ? Qué ha de fer : fi no que es fímptho-
ma foreoíb en la fiebre de la ambición el delirio? Y en ninguno
arde violenta efta llama, que no padezca frenesí la cabeza»

§. X11L
43 ' ~ T " O D O quanto fe ha dicho de la política de
1

j[ los particulares , fe puede aplicar á Ios-


Príncipes , ó Superiores , que goviernan qualefquiera R e -
publicas. También en eftos tiene lugar la diviíion déla p o -
lítica en alta , y ba-xa : y de la mifma calidad en ellos es
fegura la primera, y arriefgada la fegunda. Qualquicra Su-
perior dotado de las tres virtudes , Prudencia , Jufticia;
y Fortaleza, ferá vn infigne político, fin leer libro algu-
no de los que tratan de razones de eftado. Las verdaderas
artes de mandar , fon elegir Miniftros labios , y reétos,
premiar méritos, y caftigar delitos, velar fobre los inte-
rcííes públicos, y fer fiel en las prometías.- De efte modo
fe aífegura el reípecto , el amor , y la obediencia de los
fnbetitos mucho mas eficazmente, que con todo el com-
plexo de eífotras futilezas políticas, 6 razones de eftado,.
•myfterio depofitado en las mentes de los Áulicos , que c o -
mo cofa facratifsiina jamás fe dexavér por entero, ni fa-
le á publico, fino cubierta de vn velo muy opaco ; fiendo
en la mayor parte folo vn Speftro ridiculo, 6 ídolo vano»
que con. nombre de Deidad fe da á adorar al ignorante
vulgo. L a razón de eftado es el vniverfal- motor de el
Imperio , y razón de t o d o ; fin ferio de nada. Si fe pregun-
ta : por qué fe hizo efto , fe dice-, que por razón de eftado;
f í : por qué fe omitió' lo o t r o , también por razón de eftado.
N o feria refpuefta masracional decir, que fe hizo,, porque
era jufticia hazerlo, ó porque afsi lo diétaba , ó la Reli-
gión , ó la clemencia , ú otra alguna virtud ? La. razón
porque manda el Miniftro á fus inferiores, e s q u e afsi lo
muida el Principe. L a razón porque manda el Principe,
debe fer vnica mente , que afsi fe lo manda Dios : pues aun
con mas rigor es Miniftro de Dios T que fus fubalterno§
lo fon de él.
DISCURSO QUARTO. pp
43 Si por razón de citado fe entiende la prudencia
política , por qué no fe nombra con efta voz , que es harto
mejor ? Pues ei nombre de prudencia política lignítica vna
virtud moral'; y ei nombré de razón de eftado no fabemos
qué íignifica. Eíta voz nació en Italia ; Ragioni di flato,
y no debe de tomarfe allá ázia buena parte quando el
;

Santo Pontífice Pío V . no tenia fufrimiento para oírla a r -


ticular;'y folia decir : que las razones de citado eran in-
venciones de hombres perverfos , opueítas á la Religión,
y á las virtudes morales. L o que fe vio fué, que Pió no
huvo mencñer ellas futilezas políticas para nada , y fin
ellas fué no folo vn gran Santo, mas también vn G o v e r -
nador iníigne. '
44 Fué advertencia de el celebre Bacón , que el go-
vierno mas píaufible , que en todos tiempos tuvo la Igle-
fia , fué el de aquellos Papas , que por aver pallado lo mas
de fu vida dentro de los Monafterios , eran reputados por
ignorantes de los negocios políticos : y que eítos excedie-
ron mucho , y quedaron mucho mas recomendables á la
poíteridad , por fu buen régimen , que aquellos que fe
.avian criado en las Aulas , y exercitadofe toda fu vida en
el manejo de las cofas publicas : poniendo por exemplo,
por fer de fu mifmo Siglo , á Pió V . y Sixto V . Imó con-
vertamus oculos ad régimen Pontijicium , ac nominatim
Pij V. vel Sixti V. nojiro /aculo , qui fub initijs habiti
funt pro fraterculis rerum imperitis , inveniemtifque aéJa
Paparum eius gencris magis ejfe folere memorabüia, quam.
torum qui in negotijs civilibus, & Principara Aulis enu-
triii ad Papatnm afcenderint, (Lib, i . de 'Augment. Scient.)
Eíte teftimonio dá á la verdad vn Herege Calviniíta, aun-
que de Religión á fuera , hombre á todas.luzes grande,
afsi por fu incomparable talento, c o m o p o r fu nobie inge-
nuidad , y candor.
45 L a razón que dá de exceder en el govierno los
Papas, que antes de fubir al Solio vivieron en fanto reti-
ro , i los exercitados en el manejo publico, es digna de
tal conclufion. L a falta, dice , de inítruccion c i v i l , que
huvo en aquellos Pontífices, fe fuplió con grandes ven-:
loo LA POLÍTICA MAS FINA,
tajas con fu virtud : porque los Principes , que íiguéfí
confiantes el camino llano , y fegurode la R e l i g i ó n , la
jufticia, y demás virtudes morales, prcmpta, y expedi-
tamente, fin el auxilio de y na política eftudiada, dan va-
do á todos los negocios ocurrentes. Son eftas vnas Almas
fanas , y robi.yft.as , que no han menefter las artes civiles;
afsicomo los cuerpos bien complexionados no necefsitan
de medicinas : ín eo tamen abundé fit compenfatio , quod
per tatum planumque iter Religionis , iujiitine honejlatis,
virt utumque moralium , prompté , atque expedita ince-
dant , quam viam qui conjianter tenuerint , illis alteris
remedijs non magis indigebunt quam corpus fanitm medi-
cina,
á.6 Cali me corro de que vn Herege aya hablado dé
efte modo ; quando entre los Catholicos tenemos tantos
políticos , que abundan en bien diferentes máximas. Ello
es afsi, que las futilezas , y artificios, de que fe compone
l o que fe llama política de el Mundo , vienen á fer vnos
remedios , de que foio necefsitan las Almas achacofas,
Un govierno viciofo , porque le tuerce á fu fin particular,
el que le maneja, no puede tencrfe en pié fin elfos medi-
camentos , que con tanta propriedad llamaremos drogas,'
como las que venden los Boticarios. Pero vn eípiritu bien
complexionado , dotado , en la temperie debida , de las
quatro qualidades elementales ,. prudencia , jufticia, for-
taleza , y templanca, folo con la afsiftencia.de eftas vir-
tudes fupera fin embarazo , y fin el focorro de otras ar-:
tes , quantas dificultades pueden ocurrir en el govier-;
no.
47 Pongamos los ojos en Sixto V . ya que Bacbti
le nombra. Efte efpiritu verdaderamente incomparable,
que parece que Dios le avia formado de intento para
governar todo el Mundo , en quien fe j u n t a r o n y fe mejo-
raron la magnanimidad de Cefar , la prudencia de Auguf-
to , y la jufticia de Trajano , á pocos mefes defpues que
fiibi'b al Solio , tenia ganado el refpecto de todos los
Principes de la Europa , y todo el Eftado Eclefiaftico
puefto en la mejor forma , que avia, tenido en muchos
DISCURSO QUARTO. Io r
Siglos antecedentes. Los hurtos , las falfedades , los homi-
cidios , los fobomos , las. ucencias infolentes 3 fe vieron,
tan de raiz defterradas de aquella grao Ciudad , que nun-
ca con mas razón fe Hamo Roma la Santa. Perdido el
miedo á toda extoríion injufta , nadie temía fino á Dios,-
y al 'Papa. Andaban , como dice Gregorio Leti en íu
Hiftoria de Sixto , las mugeres , ú otras perionas indc-
fenfas en qualquiera hora de la noche , tan feguras por
las calles , como pudieran por vn Clauftro de Capuchi-
nos. En cinco años que reynó , ennobleció á Roma con ex-
celentes edificios, y dexó enriquecido el Erario con algu-
nos millones. Pregunto aora: Con qué artes políticas, coa
qué tramas ingeniofas fe hizieron eftos milagros ? N o La-
vo mas artes , que vna vigilancia infatigable en el go-
vierno j vn zelo fervorofo de el bien publico, y vnajuf-
ticia, y rectitud inalterables. Y o no sé fies verdad ( y cr_o
que n o ) lo que tanto fe dice de las íimulaciones de Six-
t o , antes de lograr la Tyara. L o cierto e s , que defpues
que fe vio en la Silla , fué hombre ageno de toda íirnula-
cion: fiempre generofo , abierto , libre , veraz , franquea-
ba fus defignios , ' porque no eran para ocultos : y á na-
die efcondia el corazón, fino quando la virtud de la pru J-
dencia dictaba el recato , ó el carácter de Prelado obli-
gaba al figilo. Efta franqueza era natural en fu genio , y
afsi tuvo la milina , fien do Religiofo. Por donde yo no
•puedo affentir á las dobleces , que en el tiempo de Car-
denal fe refieren de é l , ordenadas á confeguir el Pontifi-
cado. Mas verifimil e s , que fuelle efecto real de fu virtud,
lo que fe atribuyó á íimulacion. Sufría qualefquiera inju-
rias , haziendo fuerca á ingenio , dicen, que por acredi-
tarle de manfo. Y por qué no feria por imitar á Chriito,
obedeciendo al Evangelio ? L a íéveridad que obíervó,
íiendoPapa, nada prueba contra efto : porque es muy di-
ferente cofa tolerar las ofenfas hechas á la perdona , ó díf-
íimular las que fe cometen contra la dignidad, Moítra-
bafe, dicen,- muy defincl.inado al manejo publico, y aurí
inepto, para el govierno , á fin de. que los Cardenales le
eligieflen , fobrs el fupuelto de que en fu Po-Btificjdq
102 LA POLÍTICA MAS FINA.
ellos lo avian de mandar todo, Mas creíble e s , que fuelle:
eñe vn defengañado , y cuerdo retiro de quien , por no to-
carle entonces la vigilancia íbbre el publico, cuidaba fo-;
lo de si proprio. Fingiafe , dicen, poftrado de los años,
y . de las dolencias , porque los Cardenales, adivinando vn
Pontificado breve, efperaíTcn preño otro Conclave. N o
creo efta politica ( por mas que me digan ) en los feñores
Cardenales, que tantas vezes eligieron Papas robuftos , y
aun no pocos mozos, quando en aquella edad hallaron la
madurez de la fenectud. Y por otra parte S i x t o , que avia
paflado vna vida trabajofa, y tenia fefenta y quatroaños,
quando fubió á la Silla , es verifimil que eftuvieíTe muy.
quebrantado. Si defpues moftró mas robuftéz , feria , por-
que cargandofe de la gravifsima obligación que tenia, fe
esforcaria extraordinariamente para cumplir con ella. Fue-
ra de que á eñe fin , dice el citado Le-ti, que tomaba mas
copiofo , y generofo alimento, afsi en la comida, como en
l a bebida , fiendo P a p a , que fiendo Cardenal.
48 Con gufto me he detenido en el elogio de eñe
hombre Angular , que fiempre fué objeto 'de mi admira-
ción , porque no todos le hazen la jufticia que deben. Y
de camino daré aquí vna cordialifsima norabuena á la R e -
ligión Seráfica , de aver. producido en la perfona de eñe
Pontífice , y en la de el Cardenal Cifneros dos políticos
tan grandes , que en,mi fentir no los tuvo mayores ja-
más el Mundo ; aunque ni á vno , ni á otro faltaron
émulos , que quifieffen deslucir parte de fus glorias. En
cuyo aíTumpto, lo que mas admiro es , que vn juicio tan
cabal como el de Don Antonio de Solis en el cap. jr. de
fu Hiftoria de México pintaífe defeftuofa la politica de
aquel gran Cardenal; bien que colmándole por otra parte
de altos elogios. Mas jufticia le hazen los Autores Eftran-
geros : fingularmente el feñor Flechier , Obifpo de Nimes,
que eferivió diferetifsimamente fu Vida , como de vn
Héroe fobrefaliente entre los políticos : y otro Francés
moderno , que aviendo inftituído vn paralelo entre los
dos Cardenales eñadiftas Cifneros , y Richelleu , dá la
fentenda á favor de ei de imeftraNación, contra el de la
DISCURSO QUARTO. 103
fuyá, concediendo al Efpañol igualdad en la politica, con
grande exceíTo ( en efto no hizo mucho ) en Religión , y,
virtud.
49 D e todo lo dicho en eíte C a p i t u l o , fale clarar
menee que en igualdad de talentos , con mas feguri-
dad', y facilidad logran fus fines los políticos fanos, que
yán por el camino de la reditud , y la verdad, que los¡
ínie figuen la fenda de el artificio , y el d o l o : que.
aquella es. la politica fina j y efta
h faifa»

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E DI C I N As
D I S C U R S O Q U I N T O .

§. I.
A. nimia confianca > que el vulgo haxe dá
la medicina, es molefta para los Mé-
dicos , y pernicioía para los enfer-
mos. Para los Médicos es molefta:
porque con la efperanca, que tienen
los dolientes de hallar en fu Arte prompto auxilio para
todo , los obligan á multiplicar vifitas , que por la ma-
yor parte pudieran efcufarfe: de que fe ligue también el
gravifsimo inconveniente de dexarles para eftudiar muy po-
co tiempo , y para obfervar con reflexión (que es el ef-
tudio principal) ninguno. Para los enfermos es pernicio-'
fa : porque de efta confianca nace el repetir remedios fobre
remedios^ cuya multitud íiempre es nociva , y muchas
yezes funefta : fiendo cierto, que como al Emperador Adria-
no fe pufo por infcripc'ron fepulchral : 'Turba Medicorum
perij, á infinitos fe pudiera poner con mas verdad alterada
de efte modo : Turba remediorum parij. Por, ello creo que
haría yo á vnos, y otros no pequeño fervicio , íi accrtafe
á enmendar lo que en efta parte yerra el vulgo.
2 Y para precaver defde luego toda equivocación,'
debemos diftinguír en la mediana tres eftados : eftado de
perfección , eftado de imperfección , y eftado de corrup-
ción. El eftado de perfección en la medicina es el de la
pofsiblíidad; y pofsibilidad, á lo. que yo entiendo, muy
' re-
DISCURSO QUINTO. 105
¡remota. Poca , ó ninguna efperanca a y , de que los hom-?
bres lleguen á comprehender , como fe necefsita , todas
las enfermedades ,. ni averiguar fus remedios efpecifícos;,
faivo que íea por via de revelación. Pero por lo menos
íiafta aora eitamos bien diílantes de elfa dicha. .El eftado
de imperfección, es el que tiene la medicina en el cono-;
cimiento , y practica de los Médicos fabios. Y el de cor-
rupción, el que tiene en el' error , y abufo de los idio-í
.tas.'
3 L a medicina en el primer eftado no es de mi ar^-
gumento , porque no h ay en el Mundo : y fi la huvieífe,'
merecerían fus promeífas toda 1;' fe de aquellos, que ef-.
cuchan á los Médicos como oráculos. Solo , pues , inten-
saré moftrar quan falible es en el eftado medio: de donde
£e inferirá quan faifa es en el vltimo.

$. II.
$ L o primero : para dar á conocer lo poco,'
X q u e
l ° pobres enfermos pueden fiar en la
s

medicina , bailaría verificar lo mifmo que acabamos de


decir : efto es , que el Arte Medico , en la forma que le
polfeen los Profeífores mas fabios , aun eftá muy imperfec-
to. Pero efto es cofa hecha: pues ellos mifmos lo con-;
fieffan. De poco ferviria para demonftrar efta verdad , ale-:
gar Autores de otros Siglos : porque acafo me refponde-;
rian , que defpues acá fe adelantó mucho la medicina;
y afsi, folo citaré algunos de mas alta opinión entre los.
Modernos.
5 El Doctifsimo Miguel Etmullero , á quien na-í
die niega las calidades de eminente T h e o r i c o , y admira-
ble Practico, en varias partes fe quexa de el poco cono-
cimiento , que hafta aora ay de los limpies , de la ambi-
güedad de los indicantes, de la ineficacia de los remedios,
que eftán en vfo. Pero fingularmente á nueftro propofito
en el Prologo General de el T o m o Segundo afslenta , que
rarifsima vez puede la medicina remediar mas que los
fjfjnpüomas ó producios morboíbs j pero que la efíenci»
&<Lm k ] " ' ' Q te
loó MEDICINA,
de la enfermedad fe queda intacta , baña que por si folaf
la vence la naturaleza: y ello por la ignorancia, que los
Médicos padecen, ó de la caufa de la enfermedad , u de
fu remedio apropriado; y añade , ture elle defecto de el Ar-
te bien ie comprehenden , y le lloran los Médicos labios;
al palfo que los ignorantes viven muy fatisfechos de que
hazen maravillas : Sané frequeniífslme in praxi oceurrit,
vt non riifi d pojteriori produáíis morbojis , ac fymptoma-
tis oceurratur ; d priori vero caufa , feu fpina intacta re-
linquatur : idque vel ob caufa genuina ignorantiem , vel
apropriati remedij defeclum : Mediéis ignorantibus optims
fe agere opinantibus; fcientibus vero tacité ingemifcenttbus^
& fuos defecius adhuc deplorantibus.

t
6 L a fublime reputación , que entre los ProfeíTores 1

e la medicina obtiene el Romano jorge Ballivio, fe evi-


encia de que en el efpacio de 30. años , "contados defde el
de, p j . que fe imprimió fu Practica Medícala primera vez
e:, Roma , hafta el proximé pallado de 7 2 5 . van hechas
diez impreísiones de fus- Obras ( en que fe debe advertir el
yerro de el Impreífor Antuerpiano , que llamó nona á la
Edición noviísima de el año de 2 5 . fiendo en la verdad
decima, acafo porque no tuvo prefente la que fe hizo en
"Venecia el año de 15. que fué la nona, aviendo fucedido
á la octava, que poco antes fe avia hecho en París.) Efte
grande hombre , Lib. 1. Prax. Medie, cap. 10. num. 4,
defpues de feñalar las caufas , que eftorvaron los adelanta-
mientos déla medicina, dice, que los libros Médicos, que
hafta aora fe han eferito, dan tan efeafa luz , que los Pro-
feíTores mas doctos andan como á ciegas , fin faber á
quien, han de creer, qué doctrina han de feguír, qué rum-
bo han de tomaren la curación délas enfermedades: que
la practica medica, que oy fe obferva, efta viciada con
mil axiomas falfos , ó invtiles ; y en fin , que la medicina,
bien lexos de aver crecido á vna eftatura proporcionada,
fe debe confiderar aun entre las faxas , ó en la cuna:
Ideo nemini mirum videri debet , quod libri Medici per id
temporis dupíicis iuris facli, '& vberrime conferipti 3 ni*
hil aliad revera fapiant , quam puratn , & abjlraóiant
DISCURSO QUINTO. 1 0 7
Vhllofophhm : natura interim indicia ¿acia iaceant , &
depreffa : ipfaque praxeos principia tantopere turbata fiint,
vt inter peritifisimos bodie non fucile con/iet, quid tenen-
dum , cui eredendum , qua demum vía progrediindwm fi¡£
in abfolvendis morborum curationibus. Si confideremus igi-
tur praxeos Medica fitatum, eundem profetlo commotum %

ac prorfus turbatum per inania axiomata , & faifas quafi*.


dam gene^alitates , aut d feclis Medicorum diverfis , aut
a prapofieris legibus met'¿ idorum, aut ab idolis quibufidam^
& praiudicijs cuilibet Medico familiaribus , producías ob-
ferbabirnus.Si vero illius atatem, Mam in ipfis adbuc puc-
ritia jimbas contineri.
7 Thomás Sydcnhan , que es reconocido en toda
Europa por el mas celebre practico , que tuvo el vltimo
S i g l o , defpuesdevn prolijo eftudio en los libros, dcfpues
de obforvar con vigilantifsima- atención , por muchos años,
los paños de la naturaleza en las dolencias, habla con mas
incertidumbre , y perplexidad que todos. A p ^ a s fe lee
precepto fuyo , .que no fe reconozca averie cftampado con
mano trémula. Con noble finceridad ( prenda, que hermo-
feafus efcritos , aun mas que la pureza L a t i n a , que ref-
plandece en ellos) expone frequentemente fus dudas , y.
fus ignorancias. Mueftra muy limitada confianca en fus
, propinas experiencias ; pero cali ninguna en las do£trinasde
los Autores. De elfos dice, que proponen fácilmente la cu-
ra de muchas enfermedades , las quales ni ellos mifmos,
ni otro algún hombre remedio halla aora : Morborum cu-
ratk-ws pro more facilli¡ne proponuntur ; atqui hoc ita pra-
• Jh.\\ vt verba infaSla trmfeant, atque eventus pro-mi'fi-
fis rfiponde.vtty mj.gts ardui molirninis illi indicabunty
q:ú videvit baberi apud Scriptores praclicos morbos comí
plira , oi.os nec illi ipfi feriptores , nec quifiquam baóíe-,
m¡ Hedic^rurri f¿na*e valuerttnt. (in prafaílione) Culpa
derrámente grave de los Efcritores , engañar al publico
con la orientación de remedios , que ellos mifmos expe-
rimentaron invtiles , y exponer á los pobres Médicos,
que eítulian fus Obras , á la c-.íración , y . al pronoftí-:
SO , para quedar burlados , defpues de gallar con va-
P. a nas
io8 \ MEDICINA,
rías medicinas el canda! , y la complexión de los énfer-:
naos,
8 El mifmo Sydenhan en otra parte confielía de si,'
que quando deípues de grande eftudio , y continua obfer-
v a c i o n , pensó confeguir vn methodo feguro para curar
todo genero de fiebres, halló que folo avia abierto los ojos
para llenarlos de polvo. Tan confufo , y perpiexo fe halló
defpues de tanto eftudio : Statim didici me ideo tantum
aperuiffe oculos, vt pulvere , haud qnaquam veré Olímpico,
ijdem complerentur. (in Epift. dedicat.)
<) Algunos años defpues de los Autores alegados,
y fué el de 1 7 1 4 . Monf. Le-Francois, Medico, y Doctor
Pariñenfc , dio á luz fus Reflexiones Criticas íbbre la me-
dicina : donde no llora menos, que los antecedentes, los
cortifsimos progreífos de efte A r t e ; y hablando de los Es-
critores , fon notables las palabras Siguientes , que tra-
duzgo fielmente de el Idioma Francés : La. dificultad que
ay en ha r nbferv.iciop.es con todo el cuidado , y toda ¡a
exatlitud nece/favia , la multitud de enfermedades diferen*
tes, que eflorva el que fe encuentren muchas femejantes en
fus circun/iancias ejfenciales , el poco cafo que el publico
hizo fiempre de los obfervadores ,la eflimacion que por el
contrario ha tevado de los inventores de fifiemas, y de los
•que L-s han feguid® , todo effo es caufa de que entre tan-,
to numero de Tratadlos cíe Medicina, de que e/lamos opri-
midos , fe hallen poquifsimos que fean muy vtiles. T aun
fe puede decir, que no ay ni vm folo, de quien fe pueda
hazsr entera confianca. Si efto es afsi, como Suena, los
Médicos en el exercicio de Su Arte andarán como á cie-
gas ; porque Sobre la dificultad que ay en difcernlr los
pocos Libros vtiles de tantos invtiles , para eftudiar por
aquellos, abandonando cftos { l o que-muchos no fon capa-
ces de hazer , y mas aviendo en efto tantas opiniones , co-
*no en todo lo demás , pues vnos celebran la practica de
vn A u t o r , y otros de otro ) refta el ardidísimo negocio
de Saber quando, y como Se ha de fiar á la doctrina de
elfos pocos Tratadós-'rtiles , y quando no : fupuefto que no,
puede fiarfe eiueramente de ellos.

II
ISCURSO QUINTO. iop
"ib Elmifmo Autor dio á luz el año icT» vn Proyecto
<2e reforma de la medicina, donde largamente mueítra la
Imperfección grande , conque oypoífeeel Mundo cite Ar-
te ; y exponiendo las caufas , quenta entre ellas la iii\tíli-:
dad de los libros Médicos, aun con mas fuerte exprcfsion-
que la antecedente , pues dice afsi : Los Tratados que fe
han efcrito tocante a ejle Arte, efldn llenos de obfcuridad±
de incertidumbres , y de falfedades, Y no oraitiré lo que*
antes avia propalado de el eftado prefente de la medicina
en Francia, porque conduce mucho para nuefiro defenga-,
ñ o : Aunque no ay (dice) País alguno, donde no fea me-
mefier hazer nuevos eftablecimientos , para perflcion.ir 1$
medicina ; efla reforma es mas necefaria en Francia, que
en .otras partes ; porque en ningún Pais ay tanto defor-
den en la practica de la medicina , como en Francia, A villa
de ello , es bien irriíible la candidez de los Efpañoles , que
en viendo acá vn Medico Francés „ de los que allá tienen
mediana reputación , pierdan que han logrado vn hombre,
capaz de revocar las Almas de el otro Mundo.
11 Novísimamente nueftro ingenioíifsimo Efpañof
Don Martin Martinez, en fus dos Tomos de Medicina Scep-
tica , dociifsimamente dio a conocer al Mundo la incer-
tidumbre déla medicina: donde impugnando muchas má-
ximas , muy eftablecidas entre los Profeífores , fi fus argu-
mentos no fon ficmpre concluyentes , para convencerlas de
faifas, lo fon por lo menos , para dexarlas en el grado de
dudofas , y á vezes de arriefgadas.
12 Finalmente es cofa tan común efi los Médicos
de mayor cftudio , y habilidad, confeífar la debilidad de
fu Arte para expugnar las enfermedades , como en los mas
inhábiles obftentar gran confianca en ella, para triunfar
de eflosenemigos. D e m o d o , que viene a fer efta como
feñal caracteriftica , para diftinguir los fabios de los igno-
rantes : lo que exprefso bien Etmullero en las palabras, -

que arriba citamos : Mediéis ignor&ntibm eptime f; agere


opinantibus :, fcientibus ver® tácito ingemfcentibus , &
fuos defectus adhuc deplorantibus. Y mucho antes.el Conci- .
iiadoi: en la definición que hizo de el Medico malo pufo
7
lio MEDICINA,
la infeparablc calidad de fer perpetao ínconfitente de fu
ignorancia propria : Propria igwrmtU con/ianti/simus in
confejfor.
13 Confideren aora los vulgares (que en vn Medi-
co ordinario contemplan la Deidad de A p o l o , y en la mas
invtil poción de la Botica la virtud de el oro potable )
qué conhanca pueden tener de vna facultad , de quien tief-
coníian tanto los que mas han eftudiado en ella? Si en los
preceptos diableados por los mejores Autores ay tanta
in certidumbre , con qué feguridad puede prometerles la fa-
llid vn Medico , que lo íummo que puede aver hecho es
tener muy bien eftudiados eíTbs mifmos preceptos ? Si los
ProfeíTores mas infignes fe hallan perplexos en el rumbo,
que deben feguir , para curar nueftras dolencias , qué acier-
tos fe pueden efperar de los Médicos comunes ? Si para
combatir ellos grandes enemigos de nueftra v i d a , fe íienten
fin fueteas los Gigantes,qué podrán hazer ios Pigmeos?

§. III.
14 ~\T Qué importaría que los Autores Médicos
jf no nos manifeftaííen la incertidumbre de
fu Arte , fi fus perpetuas contradicciones nos la hazen pa-
tente ? Todo en la medicina es difputado : luego todo
es dudofo. Las continuas guerras, de los Médicos, debie-
ron de dar fundamento á Pedro de Apono , para decir,
que la medicina no eftaba dedicada á Apolo , fino á Mar-
te ; aunque Enrico Cornelio Agripa , figuieudo fu genio
le da interpretación mas maligna ( l l b . d e Vanit-.it. Scient.
cap. S 3 . ) Eftán, y han efta do íiempre mas encontrados fus
dogmas , que las quatro qualioades de los humores que
feñalan en los cuerpos humanos, Defde fu concepción va
figuiendo a la medicina efta defdicha : Pues feñalan , 6
fingen por primer padre fuyo al Centauro Chiron, Maef-
tro de Eículapio , en quien el encuentro ¿le dos natura-
lezas, puede conftdcra-fe como confielacion , que influyo
en la.medicina , al nacer , tanta opoficion de doctrinas.
Fué criada defpues algún tiempo como niña expofita; por-
DISCURSO QUINTO, I I I
qué no avia otra regla para curar los {enfermos, que expo-
nerlos en las Plazas , y calles publicas , para que los que
traníitaban, les prefcrivieifen remedios ; en que precifa-
inente avrla infinita diverfidad de pareceres ; hafta que
Hypocrates la tomó por fu quenta , para darla leche en
la pequeña Isla de Coo , donde el perpetuo embate de
las Aguas , pudo fer nuevo prefagio de la interminable
lucha de opiniones.
15 Inmediatos en la fama á Hypocrates, y no muy
'diñantes en el tiempo , fueron Praxagoras , y Diocles
Cariñhio , que alteraron algo la doctrina de el prudcn-
tifsimo Viejo , reduciendo el primero todas las enferme-
dades al deforden de los liquido? , y eftendicndo tüe Lj
fnerca de el numero feptenario, á quien Hypocrates avin
dado jurifdiccion fobrc los dias criticos, á los años clima-
téricos. Sucedió Herophylo , reduciendo toda la medui •/
ai razonamiento , y á la difputa , defviandola de la ex-
periencia , y practica ; con pefimo defignio *. pues fu., lo
niifino que apartar el Arte de la naturaleza. Vino dciputs
Chryfippo traftornando quafito avian dicho fus a; te<..flo-
res : y no mucho mas fiel con el fu Diícipulo ErafiíU ato,
nieto de Ariftoteles , mudó mucho de lo qu- avia enfe-
fiado Chryfippo ; bien que Macftro, y Difcipuio fe con-
vinieron en defterrar de la medicina la fangria , y la
purga.
16 Confervabanfe entre tanto algunos reíios de la
antigua medicina ; halla que Afclepliades en la edad de el
gran Pompeyo , echó por tierra enteramente toda la doc-
trina hypocratica ( á la qual infuítaba llamándola medi-
tación ele la muerte, ) colocando vnicamente en la claífe
de remedios, lo que podia fer a l i v i o , y recreo.de los do--
lientes. Confpiró con efta lifonja de el güito , para ha-
^rle dentro de fu facultad dueño de el Orbe , el acciden-
te de aver obfervado feñas de vida en vn hombre , que con-
vidan al túmulo', y haziendole recobrar fácilmente , fe
Cre
y ó averie refucitado. También contribuiría mucho,
aver defafiado publicamente á los Hados ( digámoslo
$ú l con l a confiante promefla, de que jamás le verían en-
1 1 1 MEDICINA,
fe tino : como de hecho jamás io eftuvo, ni ailñ para' morirj
pues terminó la larga carrera de fu vida tropezando, %
cayendo en vna efeaiera. Themifon , Dlfcipulo de Aícíepia-
des , luego que eíle efplró, alteró toda ia doctrina de fu,
Maeftro , y fe hizo Caudillo de la fecta délos Methodi-:
_ eos , que no debió de grangearfe grande aplaufo en R o -
ma , quando Jubenal, hablando de los Sectarios debaxo de
el nombre de fu j e f e , cantó : QuotTliemifon agros autnm-i
no occiderit vno. Floreció luego Atheneo , que atribuyo
todas las enfermedades á la emanación de ciertos efpiri-
tus defprendidos, afsi de los cuerpos mixtos , como de los.
Elementos. Tras de él pareció Archigsnes, Fundador d é l a
íecta Ecléctica, ( cuyo aífumpto era recoger quanto hallaf-
fe/i de bueno en las demás fectas, ) tan fuperftkioíamen-;
te obíérvante de las reglas de fu Arte , que proteftaba
no abandonarla jamás alguna, aun quando de obíérva¿;la fe
huvieífe de feguir la ruina de vna Ciudad.
17 Pallamos por el, elegante Cornelio Celfo , que
no múc'Lraen fus Obras adherencia á fecta alguna, y ib-:
lo obfeuvamos , que íiguiendo á Afclepiades , fe rió de
la observación de los dias criticos por números impares,,
que avia eftablecido Fíypocrates : para llegar á Galeno,'
hombre de bafta compreheufion, y fútil ingenio fin duda,'
capaz de reponer en la poífefsion de el Mundo la doctrina
de Hypocrates , fi cífe hirviera fido fu delignio , y n o , zn-.
tes , el de introducir la naya propria, debaxo de el efpe-:
Ciofo pretexto de comentar, y defender la hypocratica; co-
mo lo logró con tan eftraña felicidad, que en muchos íi-;
glos no huvo quien le cotstradixeííé : porque en la deca-
dencia de el Imperio Romano con ias irrupciones de los'
¿Barbaros , fe extinguió la cultura de A r t e s , y Ciencias;
y los Médicos , que fe aplicaron á eferivir , no hizieronf
mas que copiar á los Antiguos, Por otra parte los Arabesj
que fe aprevecharon de efte defeuido de, la Eu opa , para
hazerfe dueños de la Philofophia, y Medicina, fueron fe-:
quaces de Galeno : contentándole los principales entre
ellos Rafis, Averroes, Alquilado , y Avicena t con aña-¡
i^íf djfcurfqs, íUpecfluos, jr íutilez^s invtües.
DISCURSO QUINTO. I I 3
1? Afsi fe confervó por largo tiempo el dominio de
G a l e n o , verdaderamente tyranico , por la mucha fangte
que derramo á todo el linage humano efte gran patrono
de la lanceta : hafta que , al principio de el Siglo décimo-
fexto de nueftra reftauracion , refucit.tndo Paraeelfo la an-
tiquifsima Hermética Philofophia, dio fobre Hypecrates,
y fobre G a l e n o , con tan eftraña furia, que no les dexó
principio , ni concluíion á vida : y al favor de algunas cu-
ras portentofas ( acafo no verdaderas : porque no sé que
tengamos nías teítimonio de ellas , que el que nos dcxo
fu Difcipuio Oporino ) de enfermedades , tenidas por in-
curables , fe hizo bañante fequito ; bien que él murió h
los 48. años de fu edad , falfificando en si mifmo la re-
petida jactancia , de que podia con la fuperior valentía
de fus remedios alargar la vida á vn hombre por algu-
nos ligios. Entre los fequaces de Paraeelfo , Helmoncio,
de quien también fe quentan curas prodigiofas , añadió á¡
las ideas de aquel, el fueño de fu A r c h e o , ó Alma de el
Mundo, efpiritu duende que en todo fe halla , y todo
3

lo mueve.
ip Formófe defpues la'Efcuela Chymica , ó fegun-
da fecia Hermética ( como algunos la llaman, ) que funda-
da en las experiencias adminiítradas por la violencia de el
fuego, no conoce otros principios , afsi d é l a conftitti-:
cion de los entes , como de la falud, y-de las enfermé-:
dades , que el fal , azufre , y mercurio. D e efta Efcuela'
folio Takenio , levantando nueva facción , ó esforcando
la que ya eftaba levantada , con los Á c i d o s , y Aíkalrsv
que vienen á fer ; & g u n fu planta , los V v i g t s , y Toris,
de la naturaleza. Efte partido hizo fortuna , y le quito
Provincias enteras á Galeno ; aunque fin '.declararle con-
tra Hypocrates , á quien antes- -bien , pretende tener por*
Patrono.
ÍO Como entre tanto fe fueífe cultivando la Ana--:
thomia , fobre fus obfervaciones concibieron S y l v i o , Y v i -
lis , y otros-, particulares defignios igualmente opueftos á
Chymicos, que á Galénicos. Por otra parte Sántoria pro-:
tluxo el plaufible fiftema, de U medicina Mathematica, eS
Jomo I. Pj que'
114 MEDICINA,
que ( fegati las reglas de la Statica , y Medianica ) fe: confi-
derà la alternativa fuerza de los folidos , y liquidos de
. nueftro cuerpo : y todo el cuidado de el Medico debe fer,
como el de Cathalina de Medicis en Francia , confervar el
equilibrio de los dos partidos opueftos, poniendofe yà de
parte de vno , yà de parte de otro : porque declarada de par-
re de qualquierade ellos la ventaja , amenaza ruina à ella
animada República.
21 Afsi fe iban variando los íiftemas, y deftruyen-
dofe vnos à otros : quando, ò el tedio de tantos, ò la
incertidumbre de ellos , hizo tomar à los Médicos mas
advertidos otro rumbo : que fue bufcar la naturaleza en
sì mifma , fiandofe à la experiencia fola. Es verdad, que
defde que el gran Bacon de Verulamio abrió los ojos á
Médicos , y Philofofos , dándoles à conocer , que folo
por efte camino podian adelantar algo en las dos faculta-
d e s , no faltaron algunos Médicos cuerdos , que dieron
ázia la experiencia algunas ojeadas, y con efte cuidado re-
cogieron algunas obfervaciones ; aunque por la mayor par-
re defectuofas , como apuntaremos adelante. En efecto ef-
£a facción tiene o y d e f u parte à los Médicos de mas iluf-
rre ingenio en toda Europa ; pero con la advertencia de
que los mas , aunque divorciados enteramente de Galeno,
no por elfo dexan de militar fielmente debaxo de las vande-
,ras de Hypocrates , .cuya doctrina , dicen , hallan fiempre
jen confiante alianca con fu experiencia propria.
•22 Ballivio , bien que gran promotor de las obfer-
yaciones , y declarado enemigo de los fiftemas , enamora-
do no obftante de el nuevo de la medicáis- Statica , no pudo
refolverfe à abandonarle : à là manera de el viciofo, que
ama à vna muger con reprehenfibls ternura , al mifmo
tiempo que habla mal generalmente de todo el fexo. Pero
en realidad., efte fiftema no goza mas privilegios que los
otros ; fino ( como recien nacido) el délos niños-hermo-
fos , en: quienes todo parece agudeza. En efecto Ballivio
intentando poner en harmonía tres v o z e s , la de Hypocra-
tes , la de fu fiftema , y la de la obfervacion , quifo efta-
fek^f ?n efte triunvirato el goyierno abfoluto de la prac r
DISCURSO QUINTÓ. I ï <r
TICA medica. Y en quanto à conciliar à Hypocrates con la
experiencia , es bien efcuchado de los mas Médicos , que
oy ay : aviendofe reftablecido altamente en elle tiempo la
eftimacion de aquel diíctetiísiino Anciano ; fí bien , que
otros mas cautos pretenden , que los mifmos preceptos de
Hypocrates fe examinen con cuidado à la luz de la obfer-.
yacion : y no falta vno , ù otro , que defconfien entera-;
mente de fu doctrina : como Miguel Luis Synapio , Medi-
co Ungaro , que pocos años ha imprimió vn Tratado con eí
titulo : De Vemítate , Faljttate , ¿7" incertitudine Apborifi
morum Hypjcratis.
23 Omitimos algunas cofas en elle Hiftorico refumeu'
de la Medicina , como es la diviíion de ella en las tres ef-
pecies de Empírica, Methodica , y R a c i o n a l , y los pro-
genitores , o protectores, que en varios tiempos tuvo cada
vna de ellas efpecies , por no hazer muy prolixa ella memo-
ria , y porque bailan tantas contradicciones , como- hemos
apuntado , para conocer la grande inçertidumbre de 1$
medicina.

§. IV.
R
Í4 ~\T P o r vltimo defpues de tantos debates fe harí
X convenido los Médicos ? Nada menos. A o r a
eftán mas que nunca difeordes ; porque fe han ido aumen-
tando las variaciones , afsi como fe fueron multiplicando
los libros. Eftán oy dividoslos Profeñores enHypocrati-
c o s , Galénicos , Chymicos , y Experimentales puros : por-
que los Paracelíiftas , y Helmoncianos cali de el todo fe
acabaron : y fegun ella diferencia de clanes , liguen tam-
bién en la curación diferentes rumbos : porque decir ( co-
mo algunos pretenden) que los Médicos, que liguen lifte-
ma diverfo , convienen en la practica , es trampa manifief-
ta. Vcafe á Etmullero ( Injiit. Medie.part. 3. cap. 2.) don-
de dice : Prout bypotefes Medicorum , feu iudicia variant ¿
1

etiam variât medendi metbodus : alia nempé e/i Galénica^


Paraceljica , Poteriana, &c. En los libros de los que figuie-
.wndtferetttes fiífemasj fe nota vn -grande, encuentro en los
jl6 MEDICINA, .
preceptos prácticos. Y no es menefter mas qué abrir- á JuáiS
Doleo , para ver , que deípues de exponer ei juicio de cada
enfermedad , fegun íiftemas diftintos , propone arreglada á
cada fiftema diferente cura. • .• ,
25 No folo fe oponen en la curación los Médicos^
que liguen fiftema diverfo ; mas también los que liguen
vno mifmo. Como fe ve e n E f p a ñ a , donde cafi todos los
Médicos fon Galénicos; y rarifsima vez, convienen en la
curación d o s , o t r e s , íi los confuirán fep arados : ele don-
de fe puede inferir, que en la conformidad, que mueítran
defpues de la concurrencia , no influye tanto el dictamen,'
como la política. Y aun no para aqui. N o folo fe advier-
te efta opoíicion entre los fequaces de el mifmo fiftema;
mas aun entre los que fe goviernan "enteramente por el mif-
mo Autor. L a practica de Lázaro Riverio es la abfoluta
norma de los Médicos ordinarios , ios quales íi leen otros
Autores , vían de ellos , no para curar , fine para hablar;
¡Y con todo , frequentifsimamente citan difeordes , como
todo el Mundo vé : pues íi el enfermo confuí ta á vn Me-í
d i c o , le dice vna cofa , y íi á otro , otra. Uno pone los
ojos en vn precepto de Riverio , y otro en otro t y aun
yno mifmo le entienden de diferente manera , como yo he
yifto mas de vna vez. Efte acufa la -plethora y ordena0

fangria ; aquel la cacochimia, y receta purga. Y íi liega


Vn tercero, fuele hallar contraindicado en la falta de fuer-
gas vno , y otro remedio.

§. V.
2 < ?
l - ^ N tanta difeordia de los M é d i c o s , ya por la
JLZI opoficion de los A u t o r e s , ya por la dife-
rente inteligencia de ellos , ya por la diverfa obfervacion,
y juicio de los indicantes , qué hará el pobre enfermo?
Llamará , íi tiene -en qué efeoger , el Medico mas labio?
Machas vezes no iabrá quien es efte. El-aplaufo- común
frequentemente engaña -: porque nielen tener mas parte en
él el artificio, y la política, que la ciencia. Una cafua-:
Edad pone.en.crédito_a.yn ignorante , y yna, defgracia,
DISCURSO QUINTO. J I y
Tola desautoriza á vn docto. Como íucedió á Andrés V e -
falío, que teniendo por muerto á vnCavallero Efpañol , a
quien él mifmo avia afsiñido, mando hazer difíeccion de
el-cuerpo ; pero no bien rompió el cuchillo Anathomico
el pecho , quando fe notaron feñales manüieftas de vida:
de m o d o , que el infeliz murió de la herida , y no de la
enfermedad. Mas acierte norabuena el enfermo con el M e -
dico mas docto ; no por elfo va mas feguro. Juan Argén-,
recio fué tenido por vn prodigio de faber : y cafi todos los
enfermos , que caían en fus manos , morían , ó eran pre-
cipitados en otras enfermedades peores : de modo , que Usr
gó el cafo de que nadie le bufeaba.
27 Sea quanto fe quifiere vn Medico docto i Siem-
pre fu dictamen curativo fera arriefgado , por quanto eftán
contra él otros Médicos también doctifsimos. T o d o s ale-
gan experiencias , y razones. Qué Ariadna le da el hilo,
ni al Medico , ni al enfermo , para penetrar efte laberinto?,
A penas ay máxima alguna perteneciente á la curación,
que no efté pnefta en controvertía ; empezando defde e l
famofo principio Contraria contrarias curando, junt. Y;
fin duda eñe principio tomado generalmente, ó es falfo,-
b invtil. Es invtil , fi p,or contrariedad de parte de el
medicamento fe entiende .{ como algunos entienden ) 1$
virtud expulfiva de la caufa morbifica : porque en efté
fentido.es vna verdad de Pedro Grullo : y-quiere decir
el axioma , que la caufa morbifica fe ha de expeler coii
aquello, que puede expelerla. Es falfo el principio , íi fe
entiende de la contrariedad de las qualidades. feníibles:
porque ni todos los contrarios de efte modo fon remedios;'
y ay infinitos remedios , que no fon contraríos de efte
modo. L o primero fe vé , en que no fe curan todas las fie-
bres con cofas frías ; antes fon defeonvenicntes muchifsi-;
mas vezes : en las quales antes bien fe debería aumentar el
calor febril5 que eftá lánguido para promover la fer-
0

mentación, y ayudar á la naturaleza en efte empeño, que


es el que entonces tiene entre manos , á fin de fegregar
por medio de ella , lo que la incomoda. L o fegundo fe
palpa en todos los efpecíficos j en los quales no fe p e r a -
• * " be
118 MEDICINA,
be alguna contrariedad de qualidades manifieftas ; con las
de la enfermedad que curan. Y fi quieren entender el axio-
ma de la contrariedad en qualidades ocultas , ó como otros
explican , opoficion d tota fubftantia , es también invtih
porque efta opoficion ñola defcubre la Philofophia , fino
la experiencia : y defpues que yo por experiencia palpo
que tal remedio tiene opoficion con tal enfermedad , no he
menefter el axioma para nada. También fe puede decir, que
aun en efte fentido el axioma es falfo : porque ay medica-;
mentos que obran, no por via de opoficion, antes bien
por via de concordia , y amiftad : como los abforven-;
tes, que embeben en si la caufa morbífica , por la con-
formidad de fus poros con la figura de las partículas
de ella.
28 Pero dexando a p a r t e efte principio (de el qual
ni aun los Médicos que le veneran fe firven para la practi-
ca ; antes si , por la practica fe goviernan para la aplica-
ción de el principio , fingiendo, defpues que la experiencia
ha moftrado el remedio , las calidades opueftas , que fe
les antoja , en el remedio, y en la caufa morbífica) def.
cendamos á particularizar las dudas, que fe ofrecen fobrc
los remedios mas comunes, para moftrar la p o c a , 6 niilí
guna feguridad , que puede aver en ellos»

§. VI.
| primero que fe ofrece á la confidefáciofi
es la fangria: remedio que fi creemos á Pli-
nto , y a Solino, aprendieron los hombres de el Hyppo-
potamo , bruto amphybio : el quai,quando fe fíente muy
grueífo , moviendofe fobre las puntas mas agudas de las
cañas quebradas, fe faca fangre de pies , y piernas , y def-
pues con lodo fe cierra las cicatrices *, bien que por Gefnero
no puede facarfe en linípio , que animal es efte , ni aúnfile
ay en el Mundo.
30 Hypocrates fué el primero que autorizo la fan-
gria. Defpues Galeno la pufo en mayor crédito , dando
mucho mayor eKteüfion ÁÍW. yfo : jr á, Galeno figuieroa
yna-
DISCURSO QUINTO. 119
VnaníiJies quantos Médicos le fucedieron , hafta Paracel-
f o , cuya opoficion no eftorvó, que reynafle defpues , y
reyne aora ( aunque con mucha diverfidad en quanto al
vfo) efte remedio. Ha tenido no obftante grandes contra-
dictores , que generalmente, y cali fin excepción alguna,
le reprobaron. Entre los Antiguos fe quenran Chryfipo,
Ariftogenes , Erafiftrato, y Stratón : Y desando a otros¿
creo que también 'fe debe contar Afclepiadcs. De lo - Si-
glos próximos, Paracelfo, Helmoncio , Pedro Severi: ~>,
Crollio, el Quercetano , P o t e r i o , Fabro , Crufio , Te?./:,.;
y otros muchos hombres iníignes.
31 Aora : íiguiendo las reglas comunes, no fe puede
negar , que tantos hombres , y tan grandes hazen opinión
probable : y como ellos no folo condenaron la fangria
por invtil , mas también por nociva:' fe figue que es pro-
bable , que la fangria íiempre es dañofa. Con que efte
riefgo fe lleva qualquiera , que fe fangre. Y aunque fe me
diga , que aquella opinión es de pequeña probabilidad,
rcfpe&o de la mucho mayor , que tiene la opuefta : no
me importa. L o vno , porque : Multa faifa funt probabi-
Hora veris. L o o t r o : porque aunque el r i e f g o , que tiene
la fangria , como fundado en efta probabilidad corta , haf-
ta aora fea pequeño ; ya le iremos abultando de modo,
que en la praética fuba á vna eftatura mas que mediana.
Pero conduce lo dicho para el intento : porque quantos
mas capitulos concurran á fundar la duda , tanto fera ma-
yor el peligro.
32 Pero íi fe me dixere , que aquella fentencia no
es probable poco , ni mucho , por fer contra la experien-
cia , que conftantemente mueftra fer la fangria en muchos
tafos faiudable : falgaHypocrates á mi defenfa , con la fen-
tencia experimentum fialax. En realidad, exceptuando po-
quifsimos accidentes , en que la experiencia parece eftá
^clarada á favor de la fangria, ( y aun elfos acafo fe
curarian mejor de otro modo ) en lo demás eftá muy dudo-
fa. Los A u t o r e s , que contradixeron la fangria , no ignora-
ron los experimentos. N o deben , pues., de fer tan claros,
«pando no los rindieron a,la opinión común. L o s que fi-
120 MEDICINA,
guiendo ciegamente á Galeno fangran en toda fiebre pit¿
trida , también protegen efta practica con la experiencia:
fin embargo de lo qital, la miran infinitos como barba-
rie , y el -Doctor Martínez dice , que efta máxima mato
mas hombres que la Artillería,
11 El fundamento de la experiencia, no- fiendo efta
muy confiante , y muy notoria , es- harto débil : porque
todos le alegan á fu favor, Y efto viene de que , de qual-
quiera modo que trate el Medico á los enfermos , fino
les da veneno , viven vnos, y mueren otros. El que efta
á favor de el remedio aplicado, atribuye la falud al re-
medio, íi el enfermo vive , y la muerte á la fuerca infupera-
-ble de la enfermedad, íi- muere. El que efta contra el re-
medio , atribuye al remedio la muerte , íi muere : y la fa-
lud á ia valencia de la naturaleza , fi vive. Por efta caufa
muchas vezes achacan injuftamente al Medico la muerte de
el doliente ; y muchas le agradecen fin razón la mejoría. Lo
cierto es , que muchas vezes vivirá, y mejorará el enfermo,
no folo ordenándole el Medico vna fangria fuera de propo-
íito ; mas también , aunque le dé vna puñalada : porque
con todo puede fu complexión. En las efemérides de la Acá-,
demia Leopoldina fe quenta de vna Religiofa , que con-
valeció de vna fiebre quotidiana , aviendola lacado de
las venas cerca de diez libras de fangreen el efpacio de dos
mefes.- Quiíiera yo faber de el feñor Vallifnieri ( que es
quien participó á la Academia eftefuceífo, á fin de hazer
mas animofos en la fangria á los de fu profefsion ) que
Ángel le reveló', que aquella Religiofa no fanaria , y aca-
fo mucho mas prefto , fi no fe huviera fangrado tanto?
También nos reftafaber , como quedó aquel temperamen-
to , defpues de vn combate tan rudo : pues no es dudable,
que algunos enfermos, que efcapan á pefar de el violento
proceder de el Medico , quedan defpues con vna comple-.
xión débil, capaz folamente de vna vida breve , y penofa,
(triumphando entre tanto el Medico , como ñ huviera
hecho otra cofa , que dilatar la mejoría , y arruinar el
temperamento : ) los quales fi fe huvieran fiado á iá natu-
raleza , o tratado conraa|benignidad, 119 folo lograría»
DISCURSO QUINTO.' I2X
ta falucl f pero 'también quedarian con mas róbuftéz, E í
mifmo Vallifnieri refiere de otro hombre , á quién fe le
quito cali quanta fangre tenia en las venas , que era muy.
acre y fe iba fuccefsivamente reparando por otra mas bien
condicionada. Dexo al juicio de los Médicos fabios la
yerdad de eft? fuceffo, entre tanto que me dicen los cuer-
dos , íi féra bien governarfe por efte excmplar. L o que a y
•de realidad en efto es , que Médicos tan defaforados nos
ponen delante vno , ú otro enfermo , cuya valiente com-
plexión pudo lidiar con la enfermedad, y con la furia de
el Dotor ; dexandofe en el tintero á infinitos , que pere-
cieron á fus manos. Tan falaces fon como todo efto mü-
ciiifsimas obfervaciones experimentales que fe hallan en
los libros , y con que los Médicos quieren autorizar fus
practicas. D e donde infiero , que aviendo tanta"falencia
en los experimentos , no parece que bafta la experien-
cia , con que fe protege la fangria , para hazer impro-¿
bable la fentcncia que absolutamente laieprueba.
3 4 .• Pero convengo ya en que fea verdadera la o p i -
nión común , deque en varios cafos es conveniente fangrar:
y afsi lo creo. Rellanos la dificultad de el quando , y eí
quanto.-En el quanto no cabe regla fixa : porque depende
déla magnitud.de el indicante, y de las fuercas de el d o -
liente , que vn. Medico juzga mayores , y otro menores,'
En el quando fon tantas, y tan opueftaslasfentencias, que
no pueden menos*' de ocafionar en el Medico vna fumma
confufion , y duda , afsi como vn pelrgto rnaninefto de eí
yerro. Lee en vnos Autores , que en tal enfermedad , y
en tales circunftancias es convenientlfsima, y neceflaria la
fangria : Lee en otros , que en aquella mifma enfermedad,
y circunftancias es perniciofa : y en vnos , y otros propuef-
tas razones , y citadas experiencias. Qué partido tomará?
El enfermo por lo común no duda en obedecer al Medico:
porque oyéndole hablar con confianca, pienfa que en lo
que ordena-no ayqueftion ; pero íi al mifmo tiempo que
le decrétala fangria , efeuchara veinte , ó treinta gravifsi-
mos, y expertifsimos Autores , que al Medico le eftángri-.
taudo dentro de fu encendimiento • 'Tente ño le fangres>
Tomo, J. S- í u s
122 MEDICINA,
que le ásfiruyes, aunque no faltan otros que le animan,-
que hiziera ? O , que elle Medico pefa la prob ab ilidad de
• vna , y otra fentencia. De que confía que la pela b ien,-
quando otros infinitos la pefan de otro modo?
j 5 Los Galénicos comunes verdaderamente yo no
sé quando lo aciertan en ia;¡grar ; pero seque infinitas ve-
zeslo yerran : pues tienen a la fieb re pútrida por indican-
te general ele la fangria ; fiendo confiante , como advier-
ten los mejores A u t o r e s , y la razón claramente lo dicta,
que en muchifsimas ocafiones la íangria es nociva : por
quanto eftorva, fufpende , 6 retarda la ob ra de la fermen-
tación ; la qual por fer remitía , antes debiera promoverfe,
para que la naturaleza lograífe la defpuneacion , á dónde
camina por medio de la fermentación. Es la fieb re inftru-j
mentó de la naturaleza , para exterminar lo que la agrava-,'
como dice el incomparab le practico, en materia de fieb res,
Sydenhan , y con éi los mas lab ios Médicos de ellos tien> '
pos : Cum , & febris natura inftrumentum fuérif acl h u-
ius fecreti-onis optts debita opera fabricatum. (fol.mihi ioo.)
' Y poco mas ab axo : Febris natura efl mach ina acl difflam
daea,qua fanguinem mati kabent. Lucas Tozzi ob íervó,
que las enfermedades , donde no fe fufeita fieb re , fon mu.
-cho mas prolixas. Y todo el Mundo fab e el poder de las
.fiebres ,. para refolver los catharros , comb ulíiones , inful-
tos de gota , y otros diferentes afectos. Por lo qual mu-
chos Siglos ha que Celfo , y antes que él Hypocrates,
recomendaron com% vtil la calentura en varios acciden-
tes. No ob ftante todo efto , los Médicos comunes coníi-
ileran liempre.en ella yn capital enemigo , contra quien
deben proceder con fangria, y purga , que es lo mifino
que á fangre , y fuego. Y o por mi-digo lo que Etmullero,
que defpues de referir las ob fervaciones de algunos Auto-
res , que hallaron en cadáveres de feb ricitantes toda la
fangre confumida por el • ardor de la fieb re, de donde in-
йеге quan iniquamente ayuda á evacuarla la lanceta,con-
cluye afsi : Itaque ego cum eiufmodi lanionibus, & fan-
guifugis non- faeio qui vita th efaurum tam inutiliter obli~.
r

gmiimt. ' . .
DISCURSO QUINTO, 123
"36 Y no omitiré a q u í , que Iras feñales , que toman
los Médicos de lamifma fángre, para conocer fu bondad,
o malicia , fon muy falaces : ya porque fe altera fcnfible-
niente, luego que Sde de fus vaíos : ya porque cada indivi-
duo tiene fagre diferente , y effa le conviene de tal modo, •
que no pudiera vivir fin aquella miíma fangre , que al M e -
dico le parece mala : por cuya razón probo tan mal la in-
vención de transfundir la fangre de vn hombre fano en las
venas de vn enfermo. Efte es el fentir de Etmullero (Inft.
Medie, cap, 4 ) i b i : ludicium quod altinet de fanguine ve-
na fe Si a emiffb, hoc non immerito reijeit Helmmtius^ cum.
vmifquifque homo peculiarem fuum habeat fanguinemt

& in fanitatis latitudine máxima fanguinis Jit varietau


Ya en fin , porque el vario color de la fangre fuele nacer de"
otros principios muy diferentes , ,de los que juzgan los
Médicos. El celebre Anathomico Philipo Verheien obfer-
vó ,' que mezclado el efpiritu de Vitriolo á la fangre , la'
ennegrece : luego no es la negrura de la fangre, fixa feñal'"
de aduftion. Y él mifmo también experimentó , que los
Alkalis la ponen mas rubicunda. En fin, quien fabe que
dos gotas de vn color rubicundo , qual es la Leche V i r g i -
nal, dan color de leche á vna efcudilla de agua , no hará
cafo alguno de lo que la Philofophia ordinaria difeurre en
orden á las caufas de la diverfidad de colores.

37 T^\E la fangria paífemos á la otra pierna de la


medicina ( por vfar de la methaphora de
Galeno ) que es la purga. Todos los Médicos vnanimes re-
conocen en los purgantes mas , ó menos de qualidad de-
lereria , ó maligna , por donde fiernpre tienen algo de noci-
vos. Si fon vriks en tales , ó tales enfermedades, en t a l , ó
tal tiempo de 1 lias , efiá en queftion. Con que el daño es
cierto , y el provecho dudofo,
38 L o s qíic fon amigos de medicinarfe , eftán en fe
aeque los purgantes folo arrancan de el cuerpo los humó-
les viciólos; error en que yo también eftuve algún tiém-¿.
• C-2 ' po.
"13,4 MEDICINA,
po , y de que me defengaño no menos mí experiencia
propria , que algunos buenos Autores , que.he leido. E s '
cierto, pues , que iudiicretamence fegregan lo vtil,. y lo-,
invtil , y que coliquan , inficionan , y precipitan em-
buelto con los humores excrementicios el mifmo jugo nu-.
tricio. .
jp También fe debe advertir , que no todo lo que"
fe llama humor excrementicio , por fer incapaz de nutrir,,
fe ha de coníiderar como invtil en el cuerpo : pues mucha
parte de él tiene fus oficios, y la naturaleza fe íirve de él
para algunos vfos : como de el humor biliofo , para 1a
precipitación quotidiana de las hezes grueífas ,' y de el aci-
do de el eftomago, para excitar el apetito.' Y afsi , los
purgantes de muchos modos dañan : ya con la mala, im-
prefsion de fu qualidad deleteria , yá arrancando de el
cuerpo mucha parte de el jugo nutricio , yá evacuando lo
que aunque incapaz de nutrir , es neceílario para a l g i a s
funcionas naturales. A que fe puede añadir el inconvenien-
te de conducir parte de los excrementos por las v í a s , que
la naturaleza no tiene deftinadas para fu expulíion. L o que
verifimilmente no puede fer fin algún daño de las mifmas
,vias : pues íi los humores acres fe encaminan violenta-
mente por conducios eftrechos , y que no tienen poros
acomodados a las partículas de los humores , no pueden'
¡menos de hazer alijan e'ítrazoen las fibras.
40 L a divifiqn de los purgantes , por el efecto qué
hazen en los humores , á que fon apropriados , de modo,
que vnos purgan la colera , otros la fiema , &c. aunque
muy recibida , es divifion imaginaria, en fentir de Auto-
res muy graves: los «quales aíTeguran ,. que no ay purgante,
que no evacué.indiferentemente todo genero de humores,
como efté dentro de la esfera de fu actividad ; efto e s , k
d'iít ancla donde él pueda obrar : y que el vario color de
los excrementos, fegun la variedad de los purgantes (que
es lo que en efta materia ha engañado,) procede de la tin-:
tura que el mi uno medicamento le dio al humor. L o que
y o puedo aífegurar , e s , que íi vn hombre el mas bien
templado repite el purgarle con epithimo (que k tiene por
DISCURSO QUTNT'O. 1 2 5
apropríado para la melancolía, por la negrura de las hezes
que fegrega) íiempre arrojará humores negros , 6 nigri-í
cantes. Eftolosé con toda certeza. Y e s impoísible hallar-;
fe tanto humor melancólico ; no digo yo en vn cuerpo fano,
mas ni aunenfeis hypocondriacos ; quando es el humor de
que ay menos copia en nueftros cuerpos.
41 Dirafeme acafo , que no obftante la conocida
lefion de los purgantes, y que eftos expelan lo vtil , con
lo viciófo , pueden convenir , quando fuceda ferie á la na-i
turaleza mas nociva la retención de lo viciofo , que la ex-¿
,pulíion de lo vtil.
42 Efto. es quanto puede decirfe á favor de los pur-:
gantes. A que refpondo lo primero;, que deberá aífegurar-;
fe bien el Medico de eftár- las cofas en eífa positura : por-
que íi n o , hará lo que los Othomanosen el Sitio de Rodas,
que eftando algunas Tropas fuyas empeñadas en el affaito,-
mezcladas ya con los Chriftianos de la guarnición , loa
Turcos de el campo con barbara furia, á vnos , y á otros
aífeftaron la Artillería ,.y hizieron en los fuyos, y en los ene-
migos igual eftrago.
45 Pero quando llega el cafo de tener éfla feguri-;
dad el Medico ? En las enfermedades comunes rarifsima vez,
y aun no sé íi alguna. Dudafe entre los Médicos, fien los
principios de las fiebres fe puede , ó debe purgar ? El fa-
üiofo aphorifmo de Hypocrates: Concocia medicar i opportet¿
lo prohibe, menos en cafo de turgencia : y manda efpe-,
rar á que la materia eñe cocida , para purgarla. Pero,
aqui de Dios. Quando la materia ella cocida , la natura-
leza la fegrega por sí mifma , como cada día fe experi-
menta : con que es efeufada la-purga: y adminiftrarla en-
tonces feria lo mifmo , que acudir las Tropas Auxiliares
á fus A l i a d o s , quando yá van de vencida los enemigos.
La RAZÓN , y la experiencia me han perfuadido firmemente,-
a que la naturaleza jamás dexa de perficionar EÍFA obra;-
falvo que en algún raro acontecimiento fea detenida por
Vnrebés extraordinario. Dicen, que es de temer la recaída,
fino fe purgan los enfermos «.fpucs de cocida la máte-
t e . Pero fobre que efto--nq.es yá curar la enfermedad,;
il 6 MEDICINA,
que fe tiene preferite, fino precaver la vcnidei*3*. Pregunto;
de donde fabe el Medico , que las recaídas, que fe ex-
perimentan , nacen de la falta de purga en aquella fa-
zon ? Recaen vnos que fe purgan, y. otros que no fe puri
gan : por donde y o fofpecho , que no viene de ai te
recaída; fino de alguna porción de-materia morbífica, no
folo incóela, pero que ni aun fe avia puefto en movimien-
to , para cocerfe , en todo el tiempo de la enfermedad
antecedente , y defpues fe pone con mayor peligro de el en-
fermo , porque encuentra fus fuercas quebrantadas de el
primer choque. N o fea efto cierto ; por lo menos es du-
dofo : y baila la duda para quitarle al Medico la feguri-
dad de fer entonces neceífaria;la purga.
44 Vamos à la turgencia , en que fe confiderà íá
purga inexcufable à los principios de la enfermedad. T a m -
bién en elle cafo hizo dudofa la necefsidad de la purga
el eruditifsímo Martínez. Porque fiendo la turgencia vn
movimiento inquieto , y defenfrenado de el h u m o r , que,
por la amenaza de echarfe fobre parte principe , pide ex-'
pelerfe porción de èl à toda cofia, elle movimiento fe ex-
perimenta en el principio de las viruelas ; y con todo no
purgan entonces los mejores prácticos. D e efta fuerte ol
vfo de los purgantes todo eftá lleno de dudas , y rief-

45 Advierto en fin , que aun prefeindiendo de los


peligros , que amenazan los purgantes , no tienen tam-
poco las fuercas que fe les atribuyen para exterminar de
el cuerpo la materia morbífica. En vn tiempo , que yo
tenia mas fè con ellos , los vfaba en vnas indlf policio -
nes , que de tiempos à tiempos padecía , y aun oy padez-
c o , cuyos ordinarios fymptomas fon pefadèz de los miem-
bros , decadencia de el apetito , y aun alguna oprefsion
de las facultades de el A l m a , y fuelen durar dos mofes,
y á mas , yà menos. Perfuadiame yo , confintiendo en
ello los Médicos , que tedo efto procedía de la carga
de humores excrementicios , y por configuiente que el
remedio citaba eri los pur.reates. Pero proteílo , que ja-
más experimenté algún' aiiyjg en e l l o s , aunque por elef-.*
DISCURSO QUINTO. 127
jjjácio deilete años, quando ocurrían femejantes indifpofi-
ciones , vsé de cafi todo genero de purgantes, variando
afsi la eípecie , - como la cantidad , de muchas maneras:
y lo mifmo digo de el modo de régimen. M a s a y en efto;-
.y e s , que comunmente todo efte mal aparato terminaba,
.prorrumpiendo, algunos, pocos granos, ya en efta, ya en
aquella parte de el, cuerpo. Cabilando fobre efta expeí-
riencia repetida-, vine, á dar en el penfamiento, de que
muchos de nuellros males vienen de y na pequeñifsima
.porción de materia , que fe ha como vn fermento de mala
calla , y por hallarfe . altamente intrincado en el cuerpo, ó
por otra razón que yo. no', aicanco , no. efta fujeto á la
acción de .los . purgantes , fino á ' l a naturaleza foia , la
qual tiene fus periodos eftablecidos paradifpo.ner fu expui-
lion , fin que pivédan-irazerle acelerar el curio todas las
efpuelas de la Botica:.' y en llegando el plazo , en vna pnf-
tula , ó. en vnos granillos defaloja aquel enemigo , de
grandes; fuercas. si..;;, peto, de.minima eftatura, Eíiuve a l -
gunos años en efta fofpecha, con la defeonfianea que me
ocafiona-la cortedadf.-de mi conocimiento haíia que leyen-
do alguna vez en Et-muller.o , tuve el coníuelo ele ha-
llar patrocinado por; efte grande Autor, puntuaiifsimamen-
te-mi penfamiento., aunque'de. paflo. Defpues de tiv.tar
(part. j . ín/íit. Medie, cap. 5. ) de el grande eftrago que ha-
« n en el cuerpo los purgantes , acufandolos tai:.bien de
ineficaces dice afsi¡: Sane fermenta mor boj a mínima iüa -non
(tttingunt, Hinc [iibinde poji. repeiitum ¡icet purgantium
vfum , nibiktnlnns morbi contumaces •pfvfífiunt. De ÍP.O-
d o , que venimos a -párar.,-eti-que los purgantes íbbre los
;

muchos daños, que .ocafibnan y. refpeeto;de.la materia mor-


tifica fe, andan por; las ramas ; exceptuando .quando efta
efta enlas primeras vias : que''en elle cafo no es dudable fu
Vtilidad ; pero es muy dudable no pocas vezes el caío: pues
entredós Médicos frecuentemente.fe..difputa-,. íi el vicio ef-.
ta en las'primeras vias;, ó • n.o,i i- '
:

45 En;.quanto k'. la; elección de purgantes cada Me-


dico tiene fu antojo.: y a penas ay purgante que no tenga f u s

^ P ^ ] ? s apafsionadps. Comunmente fe prefieren los q*i¿


ec
I i 8 ' -MEDICINA:, R

evacúan con quietud , y fin mover retortijones en los íff-


teftinos. Y o confieflb que tengo en eíte puntó mirecelo , de
que la elección es errada ; porque á cafo los retortijones
no vienen de el medicamento inmediatamente, fino, de-el
humor acre movido por él •: y fiendo afsi fe deberán prefe-
rir los purgantes , que inquietan losinteftinos , porque fon
los que expelenlos humores mas acres , y abandonar la hy-
pocrita blandura de los que evacúan'tranquilamente' : lo
qual podría provenir de que por fu malignidad oculta coli--
quan mayor porción de el jugo nutricio:, cuya dulcura em-
bótala acrimonia de los humores excrementicios', para que
al falir no exciten dolores. Si los purgantes fuelfen ele'&i-'s
v o s , fe podria difcurrir que'elfos .purgantes:.pacíficos fo^
lo evacúan los humores blandos , e'inocentes , que por
:

fer de tan buen genio no excitan tumulto alguno en los,


lugares por donde trantitan. Efto folo es penfamientoml'o;
el qual fujeto dócil ai examen de quaiquiera Madico do£to¿
como otro qualquiera en que no efté patrocinado de algún
Autor ciafico. - - -
47 Defpues de las purgas es-'natural decir alguna
cofa ele fus camaradas y-fubftitutas las ayudas : ele las
quales fe firven los Medico;',quando no ha lugar á'aque-
l l a s , para laxar el vientre , fiempre que él no eftá laxo por
si mifmo, en fupoficion de que el vfo de ayudas blandas
iiunca tiene riefgo. Pero el fupueíto no es tan cierto : por-
que el famofo Sydenhan prohibe feverifsimamente el vfo
de ellas , como de todas las demás evacuaciones , en todas
aquellas fiebres , donde.et:movimiento fermentativo fea
.algo remifo, porque le hazen mas lento. Y no folo elfo,
fino que generalifsimarne'nte en todas:las -fiebres , en el tiem-
po de la declinación; las condena ,' en'tanto grado , que. di-
ce de s i , que durante la declinación ponía eftudio én con-
servar el vientre de el febricitante :adftrido : Atque-mox ai
..aluttm aclflingeníam msmet accingov'•bien ifab.¿n.los Pro-
feíTores , que en el modo de tratar losfebricitantes Sydenhart
por si folo haze opinión probable;: Conciérteme , pues , ellas
medidas el que quifiere defender la coherencia, y feg.urida$
los preceptos Medico?.- .„• '- . '*
;
DISCURSO QUINTO. i2p

VIII.
4$ fin no ay cofa fegurá eii la medicina, Efte
I7> Medico detefta el remedio que el otro ado-
ra. Qué maldades no acufan vnos , y qué virtudes no pre-.
dican otros de el Kelleboro ? L o mifmo de el Antimonio^
La pedrería , que haze el principal fondo de los Boticarios - s

es reprobada no falo como invt.il ¿ mas aun como nociva,'


por excelentes Autores : Y yo por lo menos creo , que fir-i
ye mas la menos vircuofa yerva de el c a m p o , que todas
lasefmeraldas ,que vienen de el. Oriente. Qué diré de tan-
s

tos cordiales, que lo fon no mas que en el nombre ? E !


oro alegra el corazón guardado en el arca ^ m e t i d o eri
el eftomago. Y como ha de facar nada de él el calor riati-:
Vo , fi no puede alterarle poco ni mucho el mas activo
fuego ? L a virtud de la Piedra Bezoar , que entra en calí
todas las recetas cardiacas , es vna pura fábula, fi creemos,'
como parece Le debe creer, á Nicolao Bocangelino , M e -
dico de el Emperador Carlos V . y á Gerónimo Rúbeo»
Medico de Clemente V I I I . que aviendo vfado muchas ve-?
zes de Bezoares recomendadifsimas , que eftaban en podec
de Principes, y Magnates , jamás experimentaron en ellas
alguna virtud. L o mifmo afsientan otros muchifsimos.
49 Los remedios coftofos , y raros fon de el guita
de muchos M é d i c o s , y de el de todos los Boticarios. N o
les falta ya .á algunos mas que recetar , como dixo P l i n i o ,
las cenizas de el Phenix : Petitis etiam ex nido Pbeniais,
sinereque medieinis. L o mifmo digo de los remedios exóti-
cos, y que' vienen de lexas tierras. En ellos tienen fu quen-
co los Médicos para la obftentacion de fu Arte , y los
droguifias para aumento de fu caudal ; pero-como dice el.
mifmo' Plinio en otra p a r t e , y la experiencia enfeña , fon
mucho mas vtiics , y feguros los remedios baratos, y ca-
feros: Ulcera parvo- medicina a'.rubro mari imputaturi cum
remedia vera pauperrimus quifque eanet.
50 Monf. Duncan , Dotor de Mompeller , refiere'
fie otro famofo Medico Francés , que recetaba el Caphe

-Torna i , " *" R, fflHh


i ¿MEDICINA/- O
Vniverfalmente á todos fus enfermos. Cofi todo , los mas
eftán' oy perfuadidos.a que ni de el The , ni de el Caphé
fe puede efperar mucho provecho. Aun los efpecificos mas
notorios no eftán exemptos de fer' queftionados. L a Quina
ya íe fabe que tiene muchos enemigos : y lo que es mas
que t o d o , Fernelio declamó contra el Mercurio; aunque
contra toda razón : q'uando' todo el Mundo experiméntala
valentía ungular de efte generofifsimo remedio.. '
51 A efta inconftancia de la medicina por la opofi-
cion de dictámenes, fe añade lo que alteran las modas: las
quales no tienen menos imperio fobre el arte de curar\¡ que"
fobre el modo de veftir. AlpaíToque van cobrando credi-i
to vnos medicamentos, le van perdiendo otros. Y á la me-
dicina le fuc^de con los remedios que propone , lo que á
Alexandro con los Reynos que conquiftaba : que al paiTo'
que adelantaba fus empreífas , iba perdiendo"mucho de lo
que dexaba á las efpaldas. Todos los remedios en fu pri-
. mera compoíicion fueron celebradiísimos : de aqui vienen
aquellos epithetos magníficos , que eftablecieron como re-
nombres fuyos , Agua Angélica ,: jarave Áureo , y otros fe-
ínejantes. Y oy ni el Jarave Á u r e o , ni la Agua Angelicaj
ni las Pildoras fine qiúbus, ni todas las otras á quienes dio
eftimacion el recomendadifsimo A z l b a r , fe atreven ánnifi-
tar delante de la Sal d'e Inglaterra , que para mi es vn re-:
medio fofpechofo , por el mifmo cafo de purgar con tanta
fuavidad. Pero ya á efte , - y á otros que oy réynan, ven-
!

drán quienes los derriben-de'el Solio : porque;íiernpre fué'


efta la fuerte de la medicina'-: Mutatur ars quotidi» inte?-
pollis\Ú ingeniorum Gr¡eei¿e fiaiu impeliimun.
J
-\
52 Y qué diré de las virtudes , que falfamente fe-
atribuyen á muchos remedios ? Baílame en efte punto la-
1

autoridad de'Valles , que aífegura , que-en .ningunamate-;


ría hablan los Médicos con menos verdad ó fundamen-:
i

tp , que en efta : Facilé coñcejferim milla de re nugari


magis Médicos quánl de médicamentorum '
yiribus ( Pb.'lof. Sacr. '
;
DISCURSO QUINTO. 131

§. IX.
; /53 /""^ONCLUIRC el defengaño de los remedios con
, la importante advertencia , de que aun
éendo efcogidos , y apropriados , dañan quando fon mu-
chos : Impedititi* certe medicamina p'íura ¡alutem. En efto
yerran infinito los Médicos, vulgares : Tirones mñ ( excla-
ma Ballivio) quarn paucisremedijs curantur morbi \ Quarn
plures è vita, ioliii rcmediorum fárrago ! Sydenhan fe la-
menta de el mifmo deforden en varias partes , perfuadicn-
do á los Médicos , que fe vayan con pies mas perezofos en
ordenar remedios, y que fien mucho mas de la naturaleza,
porque es vn grande error penfar, que fiempre necefsita ef-
ta de los auxilios de el Arte : Et fané mihì nonnunquam fu~
kijt cogitare nos in morbis depdlendis band fatis ¡ente fe~
fiinare , tardius vero nobis efe procedendum , & plus faps
numero natura effe committendum quam mos bodie obtinuit;
efrat. namque fed ñeque errore erudito, qui naturam Ar~
lis adminiculo •vbique indigere exiftimat.
54 Es verdad , que en efta infame practica menos
influyen los-Médicos ,, que los mifmos enfermos : los
quales los eftán importunando , para que receten todos
los.uias , y cafi todas las horas. Efte acaso es el mayor
error de el vulgo en el vfo de la medicina. Tienen por
Medico fabio à a q u e l , que fin cellar amontona medicamen-
tos fobre medicamentos ; y aun defpues que con efte Cyra-
no , y homicida procedimiento llevo el enfermo á la fepul-
tura , dicen , que hizo quanto cabia en . el Arte de la mede-
cina ; fiondo afsi, que hizo quanto cabia en la mas eftupida
ignorancia, ò e n l a m a s criminal condefeendencia. Eftos.
Médicos oficiofif simos, que recetan fiempre que fe lo piden
los enfermos ( dice Leonardo Botalo, Medico de Enrico I I I .
de Francia) fon los mas perniciofos de todos : Cum of-
fiàojìfsimi effe voiunt , tune funt maxime noxij. '
55 Los que defienden el dogma de los dias decreto-
nos , no tienen que refponder otra cofa à la objeccion, que-
fe les haze de que la experiencia no los demuitra , antes
13-2 ' MEDICINA,
lo contrario , fino que elvfo intempeftivo de los remedio?
eítorva, y á vezes precipita á la naturaleza fu curfo, P e r

r o d é aqui fiden dos confequencias. L a primera es, que to-


dos los Médicos pecan en el abuío de los remedios : pues
ninguno ay , fi quiere confeífar ingenuamente la verdad^
(como aífeguraLucasTozzi )queobierve confiantes las cri-;
íes , fegun los periodos feñalados. L a fegunda e s , que de-
berá eftarfe el Medico tan quieto , por no turbarle á la na-
turaleza fia operación, que apenas le ordene remedio al-;
gunb : pues ninguno ay que no altere poco , 6 mucho/
P e r o fobre efto ya dixo harto el Dotor Bois : cuyas reglas
iio se fi fe deben feguir en todo. Solo sé , que la multitud
•de remedios , que aplican los Médicos vulgares , no puede
menos de debilitar mucho á la naturaleza , ( y efto pun-
tualmente en aquel tiempo en que ella - necefsita de mas vi-j ;

g o r , por hallarfe en actual combate con fu enemigo) y tur-;'


baria la operación, que tiene entre manos , de preparar la
materia morbífica , para la fegregacion. :

•jó A los Médicos incapaces , que por ignorancia'


pecan en efto , es ociofo perfuadirlos: porque fiempre la 1

necedad es indócil. L o mifmo digo fi ay vno , ü o t r o , que


aun con conocimiento de que daña , receta mucho , por fer
amigo de el Boticario, ó porque él también fe intereífa eu'
el confumo de los medicamentos : pues la Alma de eífe mas
deplorada eftá , que la falud de ningún doliente. Y digo, ,;

fi ay v n o , ú otro; porque penfar , que por lo común los


Médicos fon tan iniquos , folo cupo en la infolente maje- '
dicencia de Enrico Corneiio A g r i p a , { l i b . de Vanit. Scient.)
con fer él de la profefsion. Antes bien he obfervado fer por
ío común los Médicos hombres de honefto proceder: loque;
atribuyo á que en los quartos de los enfermos, efpecial-
mente íi eftán peligrofos , fe oyen cafi fiempre palabras de, •
edificación, y fe vén exemplos de Chriftiana piedad. .
57 Sé que ay algunos , y no pocos , que' recetan
mas de lo que les dicta la razón, á fin deconfervar fu cré-
dito : porque vén que los defeftiman, y aun los defechan,
y llaman á- otros , fi cada dia no ordenan algo de nue-
•3£0« A eftos ios reconyendré con Ja. gravifsj.ma obligación 1
DISCURSO- QUINTO. I 33
q"iié tíeñ'éfi ,eñ-conciencia, de no paífar , por refpedto algu-
no , ni de conveniencia , ni de honra , de aquella raya
que les feñala fu conocimiento : íiendo cierto, que ni ci
riefgo de fer menos bufeados de los enfermos , ni el de
que los defacrediíen los Boticarios, ni el de que los reli-
gan por ignorantes los necios , los efeufará de fer reos en
los ojos de Dios de qualquiera daño, que por fu exceíro cu
recetar, fobrevenga á los dolientes.
<;8 Muchos toman vn camino medio, que esrec'tar
para cumplir ; efto es , ordenar vnas cofillas leves , que
aunque no harán provecho , tampoco fe teme de ellas da-
ño alguno. Perofi lo que ordenan eftá dentro de la claíTs
de los medicamentos , no puede menos de alterar : y por
configuiente íi no aprovecha , forcofamente ha de dañar,
poco , ó mucho. Sobre efto , tampoco puede el Medico
hazer gaftar á los enfermos fu caudal en loque ño k s ha
de aprovechar , y quedará obligado á la reftitucion fin,
duda, y fin que le aproveche decir, que los enfermos lo
quieren afsi : pues' ciertamente los enfermos no quieren
gaftar "en lo que el Medico fabe, que no les ha de fervir : y
como él efté confiante endefengañarlos de la invalidad de
el medicamento, bien cierto es , que tío darán por él y ; i
quarto.

§. x.
* ¿9 T P \ E S P U B S que he feñalado tantos Capítulos, que
i ^ concurren á hazer incierta la medicina, v e o
que me dirán algunos : pues , qué han hecho la experien-
-

cia , y la obfervacion de tantos Siglos , que no han defen-


gañado , de lo que daña , y de lo que aprovecha ? Pero á
efto tengo refpondido con lo que dixe arriba de la falibi-
lidad de la experiencia : A que añado , que las obferva-
cioaes , que fe hallan recogidas en algunos Autores, tari
iexos eftán de defengañar, que engañan mas : porque.fon
tan defeófuofas , que ni merecen el nombre de obfervacio-
«es : yá porque muchas fe fundan "fobre vna experiencia'
íb.la, en que por infinitos Capítulos cabe falencia: yá por-:
que
13 4 MEDICINA,
que tal vez la infinceridad de el Medico obftenta Vh fu-¡
ceno , en que probó bien el remedio , y calla dos en que
.probo mal : ya'porque no fe feñalan exactamente las cir-
cunftancias ; tiendo muchifsimas las que pueden concurrir,
para que dentro de la mifma efpecie. de enfermedad, el
mifmo remedio vnavez aproveche, y otra dañe : ya por-
que en el cafo, quefeñala la obfervacion , fe'aplicaron di-
ferentes remedios inconexos , y no es fácil faber á qual
fe debe la cura , aunque el Medico quiere atribuirlo ál
que es de fu invención-, ú de fu cariño : y ti concurren
fuccefsivamenté diferentes Médicos-, cada vno atribuye
la falud al que el decretó , aunque la mejoría no fe lo-
graífe entonces , lino mucho defpues , lo qual bien podrías
fuceder : ya porque las mas enfermedades, cuya cura fe
propone en las obfervaciones , fon curables por la natura-
leza fola, y de hecho cada dia fe vén curar fin remedio
alguno : y afsi, no puede faber el Medico , fi á é l , ó á la
naturaleza fe le debe la mejoría.
óo T o d o el Mundo tiene prefentes las obfervacio-
nes de Riverio , qué no fon las que corren con menos nplau-
fo. Y fubiendo el numero á quatro centenares , a.penas
fe hallará vna , que no fea defectuofa por alguno de los ex-
presados Capítulos. Es cofa graciofá verle jactará efte. Au-
tor de que curo vna cólica biliofa ( Cent. 4. ob/erv.j 5.) con
quatro fangrias , y quatro purgas-, entreveradas con ayu-
das , emolientes , anodinos , y otros remedios : en que ne-
ceiTariamente fe avian de confumir. muchos dias ; quander
fe termina en menos tiempo, por lo .común , eífa enfer-
medad entregada á la naturaleza., ó manejada con mucho
menos medicina. Es muy creíble , que en aquel cafo mejo-«
raria mas prefto el enfermo , fino le huviera gaítado .tanto
las fuercas la fiereza de el Medico. Quantas vezes avien-
dofe interpolado varios remedios, atribuye la vitoria , no
mas que por qué quiere , á fu Agua Therlacal, ó á otro
medicamento de fu invención! Es mucho lo que podía de-
cir déla invalidad de eftas obfervaciones , que folo en el
nombre fon tales.' El hazer obfervaciones frnctuofas pide,
gran fabiduria , gran perfplcicia , y gran íinceridad ; y,
DISCURSO"' QUINTO. 135
¿ñas rffendas juntas no fe hallan á cada pallo. Es verdad,
que entre los Autores Modernos, algunos han trabajado
en ella materia con mucho mayor cuidado, y difcreckn,
que los Antiguos : y fi los demás que van luccdierdo los
fueren imitando , puede efperar muchos adelantamientos la
medicina , que halla aora eftá muy imperfecta.

§. XI.
61 X T O s é f i ferá muy grato á los Médicos cftc de" •
_.%J engaño, que doy al publico , de ¡a ir.-.,
tidumbre déla medicina. A l o q u e p u e d o aifcurrir, v...
:

gunos defde luego me puedo prometer el enojo. Suruí;R


declarados contra mi á los de corto eíludio , y ai., L
limitado entendimiento : porque eftos juzgan que xkiv;:.
teforo de infalible doctrina en aquel Autor á quien" c,
la obediencia. A que fe añadirá el temor de que í¡ >
en ahorrar de medicinas , también fe ahorrara de
y en eñe cafo ferán algunos de ellos defeartados. I-tro c ,
eñe punto pueden vivir fin cuidado : porque el Mimco
fiempre ferá ei'mlfmo que fué : ni ay Ingeniero CAPUZ c¿
torcer elcurfo á los impetuofos ríos de preocupaciones , y
coftumbres vniverfales. Qiianto declamaron contra Médi-
cos , y medicina, y paliando mucho á ía verdad la raya
de lo juño ,' en Efpaña Quevedo, en Italia el Petrarca , en
Francia primero Montaña , y defpres Moliere ! Sus cien-
tos fon leídos , y celebrados; pero las cofas le quedaron
como fe citaban. Y o me contentara con perfuadif á algu-
nos pocos , que fe acaban la vida con los mifmos medios
que bufean, para reftablecer la falud.
62 Entre los Médicos diferttos , y doctos, avrá de
todo. Porque algunos fon de candor tan generofo , que tilos
ñiifmos propalan la infuficiencia de la medicina, y lii perple-
jidad propria. Pero á otros, que no fon dotados de animo
tan noble , no les defagrada v e r , que fe confie en la me calcina
mucho mas de lo que íe debe : y como cfta eñimacion de
el Arte para por reflexionen los Profefiores , no los iifon-
geará mucho quien los litigue e-flapofieísion.- Ácafo.tíl'-' m o -
' tivo
i 3ó ME DÌ GIN?,
tivo , fué ei que enfangrentò algunas plumas contra él Dak,
t c r B o i s , cuya ímcetldad , y zelo de el bien publico mere-!
clan diferente tratamiento.
6\ Y que algunos Médicos doctos por pura politi-
ca , ocultan lo que íienten de la ninguna feguridad de fu
Arte , conila por experiencia. Ballivio , que largifsima-
mente fe íaftima de el infeliz eftado en que fe hállala me-
dicina , lia embargo fe buelve mas de vna vez contra algu-:
nos pocos Autores, que manifeílaron al Mundo fu faleu-,
c í a , tratándolos de imprudentes, porque con efte defenga-,
ño defautorizaron à los ProfeíTores. Gafpar de los Reyes
en fu Campo Elifio quafi, 20. pone en; tan alto puntólos
riefgos de fu profefsion , que no encuentra cafo alguno en
que el Medico obre con feguridad de el acierto. Afsi dice¿
hablando de s i , y de los demás : Quis enim efi, qui fetnei
non erret ? Aut quis fui J"etnei tantum erret ? Dubito an
femper non erremus. N o digo yo tanto. En otra parte
afsienta, que frequentemente yerran las curas los Médicos
mas fabios : Perfeclifstmi fapè Medici in varios rapiun-
tur errores. Sin embargo, efte defeogañado Medico no fue
defengañador en igual grado : porque defpues de advertir,,
que à los diferetos , y doctos pueden confeífar los Médi-
cos fus errores , como á gente que conoce la obfeuridad
fumma , y dificultad infuperable de la medicina : añade,'
que fe los oculten al ignorante , y rudo vulgo , el qual
imagina en el Medico mucho mayor conocimiento de el
que verdaderamente tiene, ni puede tener : Gaterum apud
rude , & indoSlum vulgus , & qit'od in Medico plus ere--
àie, quam habet;, aut haber e pote fi fi quando errare cori'.,
t

tingat, ego tacere potìus duxerim, quam peccatum fater'n


Concluyendo con la razón , de que efta confefsion de los
errores proprios no le firve de nada, ni al M e d i c o , ni al
enfermo : Prafertìm cum ex tali confefsione nihil •utilitatù,
agro, aut Medico accedere pofslt.
6\ Pero y o p o r el contrario , hallo grande vtilidad
de ios enfermos , y no poca de los Médicos, en efte defeii-i
gaño. De los enfermos : porqueinftruìdos de .lapoca fegu4
ridaci, queay. ea Um^ediciua, de que'a penas ay.remedio;
DISCURSO QUINTO. 137
quS carezca de peligro •. que los Médicos mas acreditados
de labios cometen varios errores , que muchas vezes que
convalecen de fus dolencias , folo á la naturaleza deben la,
mejoría, y al Medico no mas que la mala obra de retardar-
felá , con otras cofas á efte tono , fe irían mas poco ¿
poco en me'dicarfe : con que confervarán mas enteras fus
fuerzas ; no gallarán inv.tilmente, á vezes con notorio da-,
ño, en las Boticas , el dinero que necefsitan para otras co-
fas : dexarán á la naturaleza aquellos accidentillos de poca •
monta, que ella por si mifma cura , y en los cuales , dado
que la medicina pueda ayudar a l g o , mas es el daño que ha-
ze por otra parte : contentaranfe con arreglar el régimen,
y quando mas tomar v n a , ú otra vez alguna cofita muy
leve en las indifpoíiciones habituales , que vienen de el na-
cimiento , fabiendo que como infeparables de el tempera-
mento , no fe las podrá curar Medico alguno de el Mun-
do , por mas que les hablen de curas radicales , que no a y
in rerum natura. Con efte defengaño muchas Señoras deli-,
cadas dexarán de fer moleftas á fus maridos, y familias.'
Servirán vtilmente al publico muchos hombres, que fe ha-.
\z«n invtiles, por eftár medicándole á cada palio. E l l o s , y
otros muchos provechos, que traherá el conocimiento de
lo poco que fe puede efperar de la medicina, me movie-
ron á hazer efta advertencia al publico : y los Médicos
deben en conciencia, como dixe arriba, concurrir por fu;
parte al defengaño.
65 A los Médicos mifmos les eftá efto muy bien: ;

Por lo menos á los doctos , y acreditados de tales : pues


a ellos nunca les faltarán falar.ios , y empleos : imponien-
do , que nunca ha de llegar el cafo , ni es razón, de echac
i todos los Médicos de el M u n d o , como fe dice que en
Vu tiempo los echaron de Roma : y por otra parte no fe-
ránmoleftados fin propofito, y fin necefsidad de enfermos, y
aun de fanos impertinentes , y ridiculos. No \oi Üamará
a cada paífo , ni la melifendra, que todas las horas qui-
foa que le eftuvieífe tomando el Dotor el pulfo r ni el'
maniaco por naturaleza, enfermo imaginario, como el de
la Comedia de Moliere , que efta dando gritos quando no.
Tomo l¡, ' S ' lg
1^8 MEDICINA,
le duele nada : ni el Viejo Semi decrepito , qué juzga qué
pueden alexarle muchas leguas de la fepultura las drogas
de la Borica. Con efto tendrán mas tiempo para eftudiar,
y para reflexionar fobre lo que eíludian, y lo que expe^
rimentan , como también para afsiftir à las diflecciones
Anathomicas : Los mas eminentes eftaràn mas defocupados
paraeícrivir libros. De eíla fuerte los. Médicos fe harán
snas doctos, y la medicina irá dando cada dia ázia la per-
fección , de que es capaz , algunos patios.
66 Y o no eftoy mal con la medicina ; antes. la amo
mucho. Se que el Efpiritu Santo la recomienda ; aunque
alguno pudiera refponder, que la'medicina recomendada
en la Efcritura no es la que oy fe practica. Es cierro que
ay males, que no puede vencer la naturaleza por sì fola,
y los vence con el auxilio de la medicina , corno fe palpa
en la infección venerea» Confieífo , que en los males dema-
nifiefto peligro , es prudencia acudir á f u f o c o r r o , y que
muchas vezes la promptitud repentina de el efecto faluda-
ble , moitrò fer caufa fuya el remedio dado á tiempo:
porque ia naturaleza por sì fola no acoftumbra eífas mu- 1

cianeas repentinas : que han hecho muchos milagros , el


O p i o , la Quina , los Eméticos , y otros muchos medi- '
camentos de manifiefta actividad : Solo eftoy mal con que
las prometías de el Medico fe eftiendan à donde no llegan
fu ciencia , y fu poder, y que quando vá palpando fombras,
íc obliente coronado de rayos.
67 Si acafo en.vna , ti otra expréfsion he figurado
los riefgos de la curación algo mas abultados, de lo que
.dicta la ra'íon : elfo mifmo pudo fer prudencia , que tiene
en fu patrocìnio akifsimos exemplos : porque eftando el
vulgo tan torcido ázia el extremo de vn ciego aflenfo
á todos los preceptos de el Medico mas ignorante, es me-
nefter inclinarle algo al extremo opuefto, para que que-
de en ?rr rectitud debida. Y fi bien que yo en todo eíle
Difcurfo he habladodebaxo déla fombra de iluílres Autores
Médicos :pues lo que he dicho de mi propria advertencia,
lo he propuefto no como regla ,- fino como duda ; fi alguno
fe complaciere, en contradecirme, me darà ocafjon de añadir,
en
DISCURSO QUINTO. 130
en efcríto á parte mucho , que he omitido en eñe aiTumpto,
por no hazer el Difcurío demaíiadamente largo.
<58 Y concluyo exortando á todos , que en la elec-
ción de M e d i c o , tengan prefentes las figuientes circunf-
tancias. L a primera , que fea buen Chriftiano : porque te-
niendo prefente la eftrecha quenta , que ha de dar á D i o s ,
de fus defcuidos , atenderá con mas fericdad al cumpli-
miento de fu obligación , y fe aplicará con mas'conato a!
eñudio de fu facultad. Lafegunda , que fea juiciofo, y de
temperamento no muy igneo: porque aun en los mas de-
cretos , el fuego de el natural fuele llenar de humo, la ra-
zón. L a tercera , que no fea jactanciofo en obftentar el p o -
der, y íéguridad de fu Arte : porque íiendo cierto que no
ay tal feguridad en ella , es ñxo que el que la propone t a l , 6
es muy ignorante , ó muy engañador. L a quarta, que no
fea adicto á fiftema alguno philofofico , de m o d o , que re-
gle por él la practica : porque eñe eftá fin comparación
mas expuefto á errar , que el que fe govierna por la ex-
• periencia , afsi ftiya , como de los mejores Autores praíti-
cos. L a quinta, que no fea amontonador de remedios, cfpc-
cialmente mayores, falvo en cafo de vna vrgeiváa aprera-
diísima , que no conceda tregua alguna : teniendo por
cierto , que todo Medico que decreta , y receta mucho , es
ma'ifsimo Medico , aun quando fupieñe de memoria todo
quinto fe ha eferito déla medicina.
69 L a fexta, que obferve , y fe informe exactamen-
te de las fonales de las enfermedades , que fon muchas,
y fe tornan de muy varias fuentes. L o s Médicos comunes
en tocando el pulfo , y viendo la orina , y elfo bien de
pallo , al híñante toman la pluma para la roceta. E l pul-
fo es'vna final muy obfeura , y la orina muy falible; ni fe
puede hazer concepto algo feguro de la enfermedad , y de
fus caufas (falvo v n a , ü otra vez que eftán muy á la vif-
ta) fin atender al complexo de muchas circunñancias , yá
concomitantes , yá antecedentes. Por no detenerfe los Mé-
dicos en efto ,-fe ocafionan tan graves errores en la capi-
tulación de las enfermedades. Quantas vezts yn coftado fe
declara por flato, y al contrario!
l4 o
r MEDICINA,
70 ' L a fepr.ima , que correfpondan por lo comurí
los íucceffos á fus pronollicos. Digo , por lo común, por-
que acercar fiempre en efta materia, no es de hombres , fino
de Angeles. Cafi con efta advertencia, fe efeufaban todas
las antecedentes : Pues con ella fola puede conocer el hom-
bre mas rudo , qual Medico es fabio, y qual ignorantes
El que tiene acierto en pronofticar, es cierto que conoce
el efta do prefente de la enfermedad : pues folo por lo que
ay a o r a , fe puede conocer lo que ha de fuceder defpues.
Ai contrario el que comunmente yerra los pronofticos , es
fi.-co que no fabe palabra de medicina. Afsicomo el que en
ios Almanaques errafle los tiempos de las Lunaciones, y
de los Eciypfes, nadie dudarla de que no fabia palabra de
Aftronomia.
7r Algunos confideran el Arte de pronofticar como
Vna facultad feparable de la curativa)y afsi, fuelen cele-
brar á vn Medico para el pronoftico ¿~y á otro para la cu-
ra. Es notable error : pues, por lo que diximos , es im-
pofsible que acierte con la cura , el que yerra el pronofti-
co. Efte yerro depende de que no hizo recio juicio de la
enfermedad: y errando el concepto de la enfermedad, CO-Í
rno hade acertar con la curación , fino es que fea por me-
ra carnalidad ? Aun quando ,fucra pofsible curar mal el
que pronoftica bien , y curar bien el' que pronoftica mal,
fe debiera hazer mas eftimacion de el primero, que de el
fegundo. L a razón es fuerte , y grande : porque de errar
la cura folo fe arricfga la falud temporal de el cuerpo;
de errar el pronoftico fe • arriefga muchas vezes la fa-
lud eterna de el Alma. En vna enfermedad maligna , y
alevofa, dice el Medico ignorante, que no es nada , que
aquello es vna ligera crudeza de el cftomago , que fe
quitará el' dia figuiente con vn jaravillo.. Con efto def-
cuidan el enfermo , y los afsiftentes de las prevenciones
Chriftianas, conque fe debe efperar la muerte. Entretan-
to lá repentina efcaladadevn delirio, ocupa el alcázar de la
razón , y viene á morir el enfermo no folo como pudiera
morir vn pagano , mas aun como muere vn bruto. Ay Dios!
¡Y quantp de efto fucede ,-por pe|.nú_tirfe a muchos igno^
DISCURSO QUINTO, 141
ráñtes la pracYicade la medicina ! El mayor crimen, ó el
vnico que atribuyen á los Medicos'indoctos, es. fer homici-
das J e los cuerpos. No es eñe el mayor, fino que á- vezes
fon reos de la muerte eterna de las Almas.
72 Otros mas cautos , ó mas dolofos , por vn artifi-
cio vulgarizado liguen el partido opuefto. De qualquiera en-
fermo en quien encuentran algo de fiebre , dicen que tiene
vn grande aparato, que el accidente es peligrofo ; arrúgale
la frente , arqueanfe las cegas , danfe varios ordenes , po-
nefe en cuidado á toda la gente de cafa, al fin fe ofrece
vifitar con frequencia , y executar quanto cupiere en el
Arte. Hecha efta prevención, lo que fe figue e s , que fi el
enfermo muere , elogian la comprehenfion de el Medico,
que defde el principio penetró la efcondida malignidad de
la dolencia. Si fana, engrandecen la cura, y dan á Dios mil
gracias de que el enfermo aya caído en las manos de vn Mer
dico tan valiente , que pudo vencer la fuerza de vna enfer-
medad citante.'
73 Por la culpa de tales Médicos no fe morirán los
enfermos fin Sacramentos ; pero lo que fucede á vezes es,
morirfe fin tener enfermedad para tanto: porque cayendo
eftas amenazas en enfermos pufilanimes, fe entriftecen, y.
conturban , de modo , que el mal que era muy ligero , íe
haze grave. T o d o es harto m a l o ; aunque lo primero es
peor. Señores Médicos ( hablo con aquellos, q u e , ó con
poco cíhidio fe dan á cite rniniíferio, ó abarcan mas en-
fermos de aquellos que puede comprehender fu atención )
tengan prefente , que algún dia los Angeles á quienes ef-
tuvo encomendada la cuftodia de fus enfermos, los han
de acufar delante de D i o s , y ponerles prefentes , ya los
que murieron antes de tiempo por fu culpa , ya
( ó que cofa tan terrible!) los que fe
condenaron por fu ig-
norancia.
(?)
14 &
• i * * * *. * * * * ** X. >s*^ -

' RÉGIMEN
PARA CONSERVAR LA SALUD;

D I S C U R S O ' S E X T O .

§. I.
0 S Médicos faben poco de la curación'
de los enfermos ; pero nada faben , ni
aun pueden faber en particular de el
régimen de los fimos , por lo menos
en quanto á comida , y bebida. Efta
propoficion, que a Médicos, y no Médicos parece-rá ef-
candalofa, fe prueba con evidencia de la variedad de los
temperamentos , á quienes precitamente fe conmefura la
variedad de los manjares , tanto en la cantidad , quanto en
la calidad. El alimento que para vnoes provcchofo , para
otro es nocivo. L a cantidad que para vno es larga , para
otro es corta. Efta proporción de la cantidad , y calidad de
. el alimento con el temperamento de cada individuo, folo
fe puede faber por experiencia. L a experiencia cada vno
la tiene en si mifmo ; ni al Medicóle puede confiar , fino
por la relación que fe le haze. Pues qué he menefter yo
acudir al Medico á que me diga , qué , y quanto he de co-
mer , y beber, fi él no puede faber lo que me conviene,
finque yo primero le participe , qué es lo que me incomo-
da , qué es lo que me afsienta bien en el eftomago, qué es
io que digiero bien ? &c.
a Tiberio fe reia, de los que en llegando á la edad
~ ~ ~ de
DISCURSO ' SEXTO. 1 4 3
He treinta años confaltaban los Médicos : porque decía,
• que en efla edad cada vno podia faber por experiencia c o -
mo debia rcgirfe. D e hecho parece , que á él le fué bien
con efta máxima: pues fin embargo de fer muy deftem pia-
do , afsi en el lecho , como en la mefa, vivió fetenta y ocho
.años : y acafo hirviera vivido m a s , fi lo huviera permiti-
do Caligula : porque aunque eftaba muy enfermo , no qui-
fo el fucceífor fiar fu muerte á la violencia de la enfe-me-
dad : conviniendo los Hiftoriadores , en que de intento fe
la aceleraron, aunque difcrepan en el modo. En cafo que
la máxima de Tiberio , tomada generalmente no fea ver-
dadera , por lo menos en quanto al vfo de comida, y be-
bida es fegura.
I Ningún manjar fe puede decir abfolutamente que
es nocivo. N o es doctrina mia , fino deHypocrates, como
también la prueba, en el libro de Veten Medicina. Donde
hablando de el quefo , dice que fi abfolutamente fuera ma-
lo para el hombre , lo feria para todos los hombres ; y no
es afsi: pues algunos hartandofe de quefo fe hallan muy.
bien : Etenim cafetts non omnes homines l¡sd,it ; fed funt
qui ex ipfo repleti ne tantillum quidem' offendantur ::::
Si vero toti natura malus ejfet , omnes vtique laderet»
Si el quefo, que es tan terreo , indigefto, y duro, aun
tomado con hartura es buen alimento para algunos indi-:
viduos, de qué manjar fe podrá decir que es malo para
todos?
4- Las Codornices, y las Cabras , fe alimentan de
Venenos, dice Plinio : Venenis Caprece , & Coturnices pin-
gvefcunt, (lib. 1 0 . cap. 7 2 . ) De modo, que lo que á otros
animales m a t a , á eftos los engorda.. Diráfeme , que entre
diferentes efpecies ay mucha mayor diverfidad de tempe-
ramentos , que entre los individuos de vna mifma efpe-<
cié. Sea afsi norabuena. A mi me bafta para el intento fa-¡
.be'r , que es muy grande la que ay entre los individuos de
la eíptcie humana. En las obfervaciones de Efchenchio fe
. refiere de vn hombre, que comiendo vna onca de Efcamonea
no fe purgaba poco ni mucho; y en otros Autores M é -
dicos fe lee ¿e algunos, que fe purgaban fplo con el olor de
' • ' ~ ' r
"' ..' las
1 44 & E G I M E N P A R A CONSERVAR L A S A L U D , '
ías rofas. No es efta vna difcrepancia notable de tempe-;
ramentos?
5 . Es verdad que en lo común no ay tanta difsimi-
Htud entre los temperamentos de los hombres. Pero íiem-
pre ay alguna, y bailante. Afsi como no fe halla vna ca-
ra perfectamente parecida á otra , tampoco vn tempera-
mento á otro. En quantos accidentes eftan expueftos á nuef-
tros fentidos , obfervamós alguna defemejanca en todos
los hombres. Que cofa mas limpie que el fonido de la voz?,
Con todo no ay hombre , que en el metal de la voz fe pa-:
rezea perfectamente á otro. Y a f s i , en los que viven por,
mucho tiempo juntos en alguna Comunidad , nunca fu ce-:
de que no fe diftinga cada vno por la voz de todos los
demás quando no es vifto. Si efto fucede en vna cofa al
parecer tan limpie : queferá en el temperamento , que conf-
í a de tantas partes convinables de infinitos modos dife-;
rentes?
6 Si nueftros fentidos fueran mas perfpicáces , aun
en aquellas cofas en que fe nos reprefentan algunos hom-
bres muy parecidos , los hallaríamos muy defemejantes...
Algunos brutos nos dan eñe defengaño. Nofotros no per-
cibimos con el olfato los efluvios de los cuerpos humanos:;
6 fi los percibimos , no los diftinguimos vnos de otros.
E l Perro los percibe, y los diftingue en tóelos los hom-
bres. Por eífo á mucha diftancia figue al amo fin verle,
determinandofe en el enquentrode varios caminos por el
olor de los efluvios , que halla en el ambiente ': bufea , y
elige entre muchas la alhaja de el amo , aunque nunca la
yieífe. Y lo que es mas : atina con la piedra que falió de
Tu mano entre otras difparadas al mifmo tiempo por otros,
bailando aquel breve contacto para que con fu olfato fu-
tilifsimo perciba en ella olor diferente de el que tienen to->
das las demás. Efta. prueba bailaba para convencer la
¿iverfidad de temperamentos en todos los hombres: pues
ña diyerfidad de temperamentos , no puede ayer
divertid id er» ios efluvios.

2. ik
DISCURSO SEXTO. 145

$. II.
f XTO folo la variedad de los temperamentos dé
1 ^ los hombres impofsibilita faber , qué ali-n
ftiento es proporcionado á cada vno ; mas también la va-
riedad que ay en los manjares dentro de la mifma efpecie.
,Todo v i n o d e v b a s , pongo por exemplo , es de vna efpe-¡
cíe. Con todo va vino es dulce, otro acedo , otro acerbo»
Uno tiene vn olor , otro huele de otro modo. Uno es mas
tenue , otro mas craífo. L o mifmo fucede en las carnes , lo
mifmo en los «frutos de todas las plantas ; aunque no en t o -
dos fe percibe tanto la variedad, por la imperfección de¿-
nueflros fentidos. Por efto puede fuceder , y fucede á ca-
da patío , que aun mifmo individuo vn vino le fea prove-
chofo , y otro nocivo : que le preíte buen nutrimento el
carnero nutrido con tales yervas y nutrido con otras
}

malo,
8 Añadafe á efto ( y es también de mucha confide-:
tacion) que vn mifmo alimento,fin diftincion , 6 defeme-
janca alguna , puede fer refpecto de el mifmo individuo
provechofo en vn tiempo , nocivo en o t r o , ya por la dife-
rente citación de el año , yá por la diferente temperie de
el ambiente , yá por la diverfa región que habita , yá por
la diverfidad de edad. En fin , qualquiera mudanca que
acaezca en el cuerpo, ( y fon infinitas las que ocurren, co-
mo también las caufas que las ocafionan) precifará á va-
riar m a s , 6 menos el alimento , yá en quanto á la cali-i
dad , yá en quanto á la cantidad. Todas eftas razones ad^ '
virtió el grande Hypocrates en el lib. 3. de Diceta : donde;
aunque vnicamente habla de la impofsibilidad de conmen-
furar la cantidad de el alimento á la cantidad de el exercí-,
ció , las razones prueban abfolutamente, que.es impofsi-i
ble determinar , afsi la calidad , como la cantidad de el
alimento para ningún individuo. Dice afsi: De diata bu^ -
urna éxacle quid conferibere , vt ad ciborum copiam la-,
íorum comnienfuratio , ac jimmetria fiat , non efl pofsi-.
kile : multa enim fuñí impedimenta, Primutn quidem ho-i
14-6 RÉGIMEN PARA CONSERVAR LA SALUD,
minum natura diverfa exiftentes. Deinde atatcs non ijf*
dem indigentes. Infuper & regionum fitas, &' ventorum
mutaiion.es , & temporum alterationes 5 anni 'con/iHíitio.
nes. Efi ú" ínter ipfos cibos multa dijferentia : t.: ¿ticutn
enim atriiico differt, & vinum d vino. ...
P Si fe haze la reflexión debida fobre eftt lug^r dé
H i p ó c r a t e s , y fobre lo que llevamos dicho , fe hallará fer
harto dudofa, por no decir faifa, aquella máxima tan efta-.
blecida : de que pafa la confcrvaciou de la fallid conviene
vf.¿r íiempre de vna efpecie dejalimento. El gran BacóneíU
por la opinión contraria diciendo , que fe deben variar afsi
los medicamentos, como los alimentos: Tarn medicamen*
ti, qmm alimenti mutatio conducit meque perfeverandum
in frequentato viriufque vfiu. (Hifi, Natur. centi.r.i. n.6p.)
L a razón perfuade lo mifmo : porque íi el cuerpo no cftá
fiemnre de el mifmo m o d o , no convendrá alimentarle fiem-
pre de el mifmo modo. Si aora abunda mas de Sales Alka-
l i n o s , y defpues de ácidos , convendrá aora vfar de ali-
mentos , que tengan mas de ácidos , y defpues que decli-
nen mas á Alkalinos, para corregir el exceflb con fu con-:
trario. Afsimifmo : íi por la diferente conftitucion de el
a ñ o , ó porelíitio que habita , ó por la intemperie de el
ambiente fe halla yá mas húmedo , ya mas feco , ya mas
frió , yá mas caliente de lo que conviene , importará variar
á proporción el modo de alimentarfe , bufcando fuccefsiva-
mente encomíela , y bebida las calidades contrarias á aque-
llas que exceden en el cuerpo. Efto es hablando theorica-
mente» En la practica es muy difícil, ó impofsible averi-
guar el complexo de qualidades predominantes-, afsi en
nueftros cuerpos , como en los manjares, y mucho mas los
grados de ellas. Siendo a f s i , que las de los cuerpos en las
enfermedades fubcn á mayor inteníion , diferepan los Médi-
cos tanto en el juicio , que la mifma enfermedad la atribuye
vn Medica, á los Ácidos, otro á los Alkalis, vno á frió, otro
á calor. N o puede, pues, aver en la praftica-otra regla,quela
deobfervar cada vno experlméntalniente, qué es ¡o que 1§
ñicqiunoda, ó aprovecha, qué es lo que digiere
^ con facilidad, ó con moleítia. -
DISCURSO SEXTO. 1 4 7

§. III.
To \ U N quañdo vñ alimento mí fino pudieffe fe?
/ ~ \ . conveniente á todos los hombres , y en
todos tiempos , no podríamos averiguar por las inítruc-
dones que dan los Médicos en orden á dieta , qual ferá
eñe : porque eftán encontrados en los preceptos, Dafe co-
munmente la preferencia á las carnes fobre los pezes*,
yervas , y frutos de las plantas. Con todo no faltan gra-
ves Autores , que no contentándote con que fea la carne
enemigo de la Alma,la!*deciaran también enemigo de el cuer-
po. Plutarco en el libro de Sanitate Tttenda , d i c e , que la
comida de carnes engendra grandes crudezas , y dexa en
el cuerpo malignas reliquias , por lo qual fefia mejor ha-
zerfe á no comer carne alguna : Máxima cruditates mes
hienda funt ab ejfa carnium , narn ha & initio valdi pra-
gravAnt, & reliquias- pofi fe malignas relinquiini. Plinia
en algunas partes inclina á lo mlfmo. El famofo Medica
Sanciono borro elvulgarizadoAphorlf.no; Qmnis fatura*
tío mala , pañis vero pefsima. Subftituyendo por el pan la
carne, y pronunciandoafsi: Qmnis faturatio mala, earnis
vero psfsima. Galeno altamente fe declara á favor de los
pezes en varios lugares, aprobándolos cali generalmente
por de buen j u g o , é igual al de las aves montanas. Véate
Paulo Zaquias en fus Queflion. Medie. Legal, lib. 5. tit. r.
quee/i. 2. Donde á las autoridades de Galeno junta las de
Hypocrates, y otros iluftrcs Médicos por la mifina fen-
tr.n.M. El Doctor Luis Lcmeri , Regente de la facultad
Medica de París en fu Tratado de Alimentos , parece -FU-
mar , fobre t o d o s , los que fe tacan de las plantas , haziendo
b. reflexión de que quando los hombres vfaban folo de yer-
vos , y frutos de arboles, vivian mas tiempo , y mas r o - -
buftos. En efecto declara , que eftos alimentos fon mas ta-,
ciles de digerir , y producen humores mas templados. A l -
gunos atribuyen al vfode eftos manjares las largas vidas
de los Anachoretas. Ballivio c b f e r v ó , que á muchos DI-
FERÍAOS los hazeu daño las carnes, y mejoran con legum-
£z bies,
I 4 8 , B. EGIMEN PARA CONSERVAR LA SALUD;
bres , y pezes : Animadvertes in praxi aliquos agros fla±
ocionibus ,i& diuturms morbis obnoxios tcmpors quadra-,
gefsimdi convakfcere ; pafchate iterum ob ejfum carnium
languefcere.. Qbfervabis etiam quo/dam morbos ab obfolcto
efftt. cauiiutn , kgmninum olerum,. pifáum , aliorumque cu.
t

borum htiiufmodi cvanefcere ,cibis vero boni fucci- exacen


h/ri, & crefcere.- (de Morbor. Succejf. cap. 9.) Etmulero
tratando de las fiebres en común , condena la comida de
carne por nociva á todos los febricitantes ; Carnes Jicuti
ipfis ingrata funt, ita etiam noxia.
11 Finalmente en eftos tiempos fe formó vn gran 1

partido á favor de pezes, legumbres-, y frutas contraías car-;


n e s , con ocafion de el n u e v o , ó renovado fyftema de la.
trituración de ios alimentos en el eftomago. Aviendo re-;
fucitado.en ella edad la opinión de el antiguo Medico Era-:
fiftrato , 'de que los alimentes fe reducen- á chilo en el cf-:
tomago , no por cocción, como quieren víaos , ni por fer-
mentación , como pretenden otros , fino mechanicamente,.
mediante la acción de los miiículos , y fibras motrices,'
que con fu continuo, y reciprocado impulfo los muelen,"
deshazen , majan ,. ó triturara, ni mas, ni menos, que fi
fe batieran porfiadamente en vn almirez, de m o d o , que
vltimamentc fe reducen á vna paila , .0 natilla delica-
da : Configu3cntemente Monf¿Hecquet, Medico Parifieníe,
; con otros defenfores de e-fte fyftema deducen , que fiendo.
las carnes mas difíciles de triturarfe perfec>amente, k ra-
zón de la mas firme textura de fus fibras, que ios pezes,
frutas, y legumbres, es mejor víar de ellos alimentos , co-.
mo mas fáciles , que de las carnes. A la verdad la razón,
no me parece muy fuerte : porque para determinar la bon-
dad de vn alimento , nofolofe hade conüderar fu mayor
facilidad en reducirfe en el eftomago ; mas también fe ha de;
hazer quenta de la calidad de el nurrimentoque dá al cuer-
po : la qual puede no fer tan buena como la de otro de'
mas fácil tranfmutacion, Mas efto no quita la probabili-
dad que le dan á e.fta fentencia fus Autores : y juntos eftos-
con los demás que alegamos , de^an. -baftaeternente dudofo¿
cpegenfKo. de ajimento fea mejor jjor 10 común»
DISCURSO - SEXTO. 14p
fi Eftamos tan lexos de tener alguna doctrina red-,
blda ' de todos en efta materia , que aquellos mifmos all'-i
mentos , que comunmente eftàn reputados per los mas íu-
falubres, no faltan Autores graves que los canonicen por
los mas faludables. Bacon aprueba por los alimentos mas
oportuno? para alargar la vida , entre las- carnes , - la de>
Bacas , Cierbos, y Cabras , entre los pezes los faladoí»
y fecos : al quefoañejo también le califica. E n e l pan pre-
fiere el de Avena , Centeno , y Cebada al de T r i g o , y en e l
mifmo pan de T r i g o , el que eftá algo mas mezclado con fáí-
;

vados al mas puro ( in Hiß, Vit. & Mori.'fai. mihi 540. )


Su razón es , que eftos alimentos fon menos difsipabies, Y,
aunque folo Bacon favoreciefle eñe fentir,no dexaria de dar-:
le eftimacion fu autoridad, por aver fido el mas fútil, y
mas confiante obfervadorde' la naturaleza ,.que huvo jamás i
Herman Boerhaavc, celebre Medico oy en Heyden . para el
mifmo e f e ß o de prolongar la v i d a , prefiérelas carnes fia-,
cas, y fabadas , los peleados también filados , y añejos,;
generalmente los alimentos, fecos , duros , y tenazes. To-¡
do elfo por el mifmo principio de Bacon , de refiftir mas
à la diísipicion'j.y putrefacción, (de Ditetaad longavitatent_
nurn. 1 0 5 7 . )
- 1 _j El mayor error , qrie en efta parte padecen los-
Médicos, y mas común , es el de preferivir à l o s que los
confultan-'aquellos alimentos de que los mifmos Médicos;
guftan , ó con que fe hallan bien : como fi el temperamento
de el Medico-fueífe regla de todos ios demás. El vinofo ar-
rodos quiere hazer vinofos, el aguado à todos quiere hazerí
aguados. Dice diferetamente Monf. Duncan , Medico cíe:'
Mompelkr, quenoay Medico ,.que en fus ordenativas no-
rie á conocer fus inclinaciones. El mifmo refiere de dos Me-s
dicoSj entrambos celebérrimos en Francia, que el vno a
todos fus enfermos ha zia tomar Caphè , y el otro à todos fer
lo prohibía íeverifsimament'e.-
T4 Que- partido hemos de tomaren tanta opoficiofi'
de- opiniones ? Ño feguir ninguna : y atenerfe cada• vuoi*
à i a propria experiencia. Efta regla es fegúra-, y no a y
ttra...O-bíeivar con cuidado que. es l o q u e abraza bien eí '
;

dio..-..
i 5o RÉGIMENPÁRACÓNSÉRVAR'LASALUD,
eftomago, que es lo que digiere fin embarazo : en que tam-
bién fe ha de atender á que no fea muy precipitada la di-
geftion : porque efta folo en aquellos alimentos, que por
fu fimboíizacion con el chilo fon fácilmente reducibies, pue-
de dexar de fundar fofpecha de corrupción. Obfervefe, que
no induzgan alguna alteración molefta en el cuerpo ázia,
qualquiera de las qualidades fenfibles.

§. IV.
15 T ^ U e r a de el conocimiento qué la experiencia
Jl da por los efectos , el gufto , y el olfato
fon por lo común fieles exploradores de la conveniencia , o
defconveniencia de los alimentos : Noxij enim cibi innoxij-
'que exploratores funt odoratus , & gufius. Dice Francif-
co Bayle en fu Curfo Phylofofico. Muy rara vez engañaron
eftos dos porteros de el domicilio de la Alma en el infor-
me que hazcn de fi es a m i g o , ó enemigo el huefped que
llama á la puerta. Conformóme con el dictamen de el Pa-
dre Malebranche, de que es mejor governarnos por nueftros
fentidos para la confervacion de la falud , que por todas las
leyes de la medicina : Soli ¿taque fe"fus no ¡ir i vt ¡llores
funt ad cofifervationem •valetudinis no ¡Ira quam ornees leges
medicina. ( de Inquir. Verit. inConcl. tr' um prhn. libr.) Es-
:

pecialmente al fentido de el gufto la naturaleza le dcftinó


para efte efecto. Ecmulero. ínfiit. Medie. 1 . parí. cap. 3 .
Con fumma generalidad affegura, que fiempre fe digiere
bien aquello que fe apetece con v i v e z a , aun quando el ape-
tito nace de caufa morbofa , llegando á decir, que las.nm-
geres que adolecen de aquel apetito. depravado , que lla-
man Pica y fin incomodidad digieren barro , c a l , y ceniza,
fiendo tan preternaturales eftas cofias: porque las apetecen
conaníia ; y afsi, que el apetito vivo írmpre fe ha de te-
ner por feñal de que ay en el eftomago fermento apropia-
do para diflolver aquel alimento. El uúüno Autor ya vi-
mos arriba corno á los febricitantes da por nociva la co-
mida de carne, folo porque es ingrata á fu gufto ; Carnes^
Jícuti tpfii ingrato funt t ita eiiam noxia.
DISCURSO SEXTO. 151
16 N o chitante , no aprobaré efta regla dada con
tanta generalidad , fin algunas excepciones. L o primero:
fi el apetito nace de cauía morboía , podrá digerirle fácil-
mente el manjar , y con todo íer nocivo : porque por el
mifmo cafo,que el fermento que le íoiicitaes preternatural
el alimento , que es connatural á é l , ha de fer ptccifamente
prater natural'al cuerpo. L o fegundo : deben tencrfe fiempre
porfofpechofos, hafta tanto que la experiencia los juftifique
baftantemente , todos los alimentos de gufto muv alto,'
como los muy picantes, los muy agrios, los muy aulle-
ros , los muy dulces, &c. Afsimifmo : los que exceden mu-
cho en las dos qualidades elementales de frío , y calor ; íal-
vo en complexiones muy irregulares, cuya intemperie pue-
de pedir corregirfe con alguno de eftos extremos. Pero no
creo que aya complexiones , que neceísiten fiempre de ali-
mentos femejantes : y a f s i , Hypocrates los condena abfo-
lutamente por defconvenientes á la naturaleza. L o tercero,
fe ha de obfervar , fi el apetito nace de algún habito depra-
vado : que entonces no dexará de fer nocivo lo mifmo , que
fe apetece con demafia : como fucede en los que fe dan á la
embriaguez ; aunque es verdad que no haze tanto daño , ni
con mucho , como en lo s que np'eftán acoftumbrados, Y
t :

fiempre que el apetito fe vaya aumentando con la edad, de


modo, que fuccefsivamente pida aumentarfe' la cantidad,
de lo que fe apetece •. téngale por regla general , de que
nb fe, lía de creer ,eni complacer al apetito. Omito las ra-
zones nhyficas.ele.eftas excepciones,, por no alargarme ¿e-
mafiado , y porque la experiencia, que vale mas que t o -
das las razones phyficas,'.las .acredita.
17 Modificada la regla en efta forma , juzgo fe
puede , y. debe feguir la ley de el apetito en la eleccionde
comida, y bebida.. Y a porque es cierto, que la naturale-
za pufo en harmonía en quanto a l a temperie el paladar, y el
eftomago; y afsi., es conforme á efte lo que á aquel es gra-
to. Y á porque LHos nos dio. los fentidos como atalayas
para defeubrir los objetos,que .pueden conducir', ó d a *
fiar ánueftra confervacion : y el mentido de el gufto folo
puedeferyir, i . eíle!efedo,difcern^ el aumentoprovt^
152 RÉGIMEN PARA CONSERVAR LA SALUDV
chufe ele el nocivo. Ya porque la experiencia mueftra, qué;
jamas el eftomago abraza con cariño loque el paladar re-
cibe con tedio. Si á alguno no obftante, le pareciere que
s

la regla que damos aun queda muy ancha , figa la de Hy-


pocrates, que no difta mucho de ella, en los AplurUmos»
donde dice , que debemos preferir la comida , y bebida gra-
tas al gufto, aunque fean de algo peor fuftancia , á las que
fon .abiolutamente mejores ; pero no tan gratas: Paulo de*
terior , & potus , & cibus , verum iucundior , melioribus
quidem , fed iniucundioribus prafirendus aft. (Sed.z. Apho-¿.
vifm. Y yo me conftituyo reo, fi á alguno le faliere
mal feguir efta regla.
18 En todo cafo , ni en el eftado de falüd , ni en el
'de enfermedad fe forcege jamás por introducir en el efto-
mago lo que el paladar mira con poíitivo tedio. En ello
delinquen mucho algunos Médicos, y cali todos los afsif-
tenfes , efpecialmente íi fon mugeres , cuyo genio piadofo
las haze porfiadas en efta materia, juzgando le hazen vn gran
bien al doliente metiéndole dentf o de el cuerpo vn huefpe^
jdefabrido,

§. V.
ti8 TT^Nquanto ámudar, 6 ño mudar de comidij
kj y bebida , no apruebo vno ni otro extre-i
«lo , que entrambos tienen fus defenfores. La regla de
;Celfo, que es acoftumbrarfe á comer de todo lo que ef
Pueblo comunmente come : Nullum cibi genus fugere'quo
populas vtatur. (lib. i . cap. i. ) Me parece muy buena pa-
ra todos aquellos que no tienen yá muy radicado el habito,
ppuefto. Es vna parte fuftancial déla buena educación., en
¡que fe falta mucho entre ia gente acomodada , hazer á los
fiiños á comer de todo, de quando en quando : porque íi
defpues, 6 por decadencia en la fortuna , 6 por la elec-i
eion de eftado, b por mudanza de P a í s , ó por otro ac<
cidente fe vén precifados á vfar de otros alimentos, de.
¡aquellos con que fueron criados, no padezcan la alteración,'
fite ocagoju¡canta novedad^ fia los, ancianos es peligrofQ
%
DISCURSO SEXTO. 153
Variar el alimento de que han vfado toda la vida , aunque
ía mudanca fe haga á paño muy lento. En la mediana edad
yariefe, íierapre que el alimento de común vfo-engendra
haftio, y tal vez también , aunque no aya eífa circunftan-
cia, por evitar los inconvenientes, que trahe el atárfe efcru-:
pulofamente á vna efpecie de alimento.
ip No tiene mucho inconveniente, yacafo ninguno, 1

en temperamentos de alguna renitencia , el vfar vna , u


otra vez de comida , ó bebida de calidades fobrefalien-
t e s , ó güito a l t o , como luego, ó poco defpues fe corri-
ja eñe estremo con el opuefto : pongo por cafo, comer,;
ó beber cofas muy calientes , como en el paño inmediato
fe vfe de cofas frefeas ; ó al contrario. La mifma natura-
leza pedirá hazerlo afsi con la voz de el apetito : como fu-
cede en el que fe calienta alguna vez demafiado con el v i -
no de parte de noche , que apetece agua fria por la ma-
ñana : y el que fuera de fu coftumbre fe llena de frutas , o
enfiladas crudas, nopaflan muchas horas, que apetece vi-j
no generofo, y cofas calientes.

§. VI.
tío T TEMOS tratado hafta aora de el régimen éfí
JfX quanto á la calidad. Tratemos aora de la
cantidad. En efta materia hallo introducido vn error c o -
munifsimo , y es : que á penas fe puede pecar por defeca
to. D o ¿ t o s , é indo&os cali eftán de acuerdo, en que tan-
to mejor para la falud, quanto mas dentro de los térmi-
nos de lo pofsible, fe eftrechare la cantidad de comida,
y bebida: de m o d o , que muchos 3 penas entienden por
eña voz Dieta otra cofa, que c o m e r , y beber lo menos
que fe pueda. El noble Veneciano Luis Cornaro , que
aviendo fidoenfu juventud incomodado de varias indifpo-
liciones, reduciendofe defpues á la eftrechifsima dieta de
tomar diariamente doce oncas de comida , y catorce de
bebida , no folo convaleció perfectamente de fus achaques,
pero llegó á vivir mas de cien años , en edad muy abancada
efcrivió vn libro , perfuadiendo á iodos á la vida fobria
T o m o I. ,¡\£ * £03
I 54- RÉGIMEN PARA CONSERVAR LA SALUD,
con fu exemplo : y aunque á muy pocos reduxo fu ef-
crko á tanta aufteridad , á caí! todos hizo creer, que con-
venia para alargar la vida , y confervar la falud ; pero con-
tra toda razón : pues no crio Dios á Cornaro para regla
de todos los demás hombres, en materia de dieta : ni hu-
vo jamás otro en el M u n d o , que pudieífe ferio. El doc-
tifsimo ]efuita Leonardo Lefsio, que traduxo de Italiano
en Latin el Tratado de Cornaro , dexandofe perfuadir de
é l , fe eftrechó á la mifma dieta ; pero no vivió mas de
fefenta y nueve años , y elfos con hartas inconmodida-
des. A vnhombre , que comiendo, y bebiendo con tanta
efeafez vivió cien años, ó muy pocos mas , podríamos opo-
ner vn largo cathalogo de aquellos , que fin ellos eferupu-
losenel modo de tratarfe , vivieron muchos mas años. El
te mperamento de Luis Cornaro pedirla toda eíla eftrechéz,
y rarifsimo otro fe hallará , que pueda con ella. N i aun en
el mifmo Cornaro confta baftantemente, que á fu dieta fe
debieífe la convalefeenciade las indifpoíiciones de la juven-
tud : pues efta pudo nacer de la naturaleza de las mifmas
indifpoíiciones : íiendo cierto , que ay algunas , que fon
mas proprias de la juventud, y por si mifmas fe curan en-
trando en mayor edad. El temperamento de Cornaro haze
congeturar , que las fuyas fueron de efte carácter : pues
confieífa de s i , que era de natural fogofo, y muy propen-
fo á la colera. Naciendo de efte humor fus indifpoficio-
nes , era mucho mas natural, que fe cüraífen mitigándote
el fuego de fu temperamento con la edad , que no con vna
eftrecha dieta: pues efta , enfentir de todos los Médicos, no
conviene á los de temperamento biliofo.
21 Hypocrates , bien lexos de aprobar por vtil la
dieta muy eftrecha, • la reprueba por nociva. En el libro
de Veten Medicina, dice : Que no menos daña en efta par-
te el defecto , que el exceifo : Non minus ladit hominesn,
J¡ pauciora quam fatis eji ajfumantur : fames enim mag-
na m potentiam in naturam bominis habet, & fanandi, Ú"
debilitandi , & occidendi. Multa vero etiam alia mala,
diverja quidem ab bis qua ex repletibne funt, non minus'
wtetn gravta yacuationis funt. En los Aphorifmos no fe
•• ~ con-.
DISCURSO SEXTO, I5 5
contenta con efto : pues da por mas peligrofo el defecto,
que el exceíío, tanto en los enfermos, como en los fanos.
Son fus palabras : Mayores errores fe cometen en efirech.tr
la dieta , que en exceder algo de lo ju/io. Por lo qual aun
en los fanos es peligrofo el alimentarfe con efcafez : por-
que , como fe debilitan las fuercas , ay menos tolerancia,
para los accidentes, que pueden fobrevenir. T afsi, el conf-
tituirfe dieta muy e¡trecha es mas peligrofo , que el pzjfar
algo la raya de lo fuficiente. (feél.j. ??.5.)
22 Que fea nocivo el defecto , como el exceíío en l a
cantidad de el alimento , lo convence la razón , que el mif-
mo Hypocrates dá en otra parte: Ni la faciedad ( dice) ni
la hambre , ni otra qualquiera cofa , que exceda el modo
de la naturaleza puede fer bueno. (fe¿7. 2 . Apbor.q. ) E s
claro, que todo lo violento es enemigo de la naturaleza:
y es claro afsimifmo, que la hambre es violenta , como
también la fed. Quando la hambre , y la fed no traxeran
otro daño , que aquella agonía , y aflicción de animo que
©caíionan , era bañante : pues nadie ignora quanto impor-
ta la Serenidad , y quietud de el efpiritu para confervar
la fallid , y quanto la daña qualquiera aflicción , y dolor,
tanto m a s , quanto mas grave fuere. Como puede menos
de ocaíionar bailante d a ñ o , paflar todo el dia , ó todos
los dias en continua lucha con el proprio apetito ? Andar-
la imaginación discurriendo por las fuentes , quando eftán
fufpirando por vn poco de humedad las' fauces ? Tener las
túnicas de el eftomago entregadas como prefa á la acri-
monia de vn acido , que avia de emplear fu voracidad en
.el alimento?

§. V I L
23 T ^ E i i o que ? Decimos por elfo, que fe aya de cow
i. mer , y beber quanto dictare el apetito ? N o
por cierto. L a regla de Galeno , que es levantarfe Siempre
déla tabla con algo de apetencia, es muy ajuftada á la
razón. Debe quedar algún vacio , afsi en el eftomago,'
como en el apetito 3 no t a i , que induzga aflicción, y m o -
" ~ ~ ¡V>_ Lilia,
I- 5 6* ' & EGIMEN PARA CONSERVAR LA SALÜD,
leftia, si folo que dexe ágil el cuerpo , y el efpiritu, Eftá
puede fer la fcñade no aver excedido. El que deípues de
la refección fíente el vfo de fus miembros , potencias , y
fentidos, igualmente expedito ,.que antes de eMa , no pafsó
de la raya de lo jufto. Al contrario , el que padeciere algo de
torpeza en qual quiera délas facultades.
24 Celfo eftá mas indulgente : porque prefcrive ex-:,
ceder alguas vezes délo jufto; y no folo eflo , mas también
comer fíempre quanto pueda cocer el eftomago : ínter dura
in convivio ejfe, interdum ab eo fe retrahere : modo plus
iufio , .modo non amplius affumere : bis die potius quam
femel cibum capere : & femper quam plurimum , modo
bunc concoquat. (¡ib, 1, cap. 1 , ) L a regla de comer quanto
pueda cocerfe, es fofpechofa. Las fuercas de la facultad fi
fe apuran , fe debilitan. El eftomago , que cada día haze
quanto puede, cada dia podrá menos. Ningún cuerdo en
vn viage largo empeña á fu cavado en que camine cada
jornada todo aquello, que fu robuftéz tolera. Fuera de que
no es fácil faber á punro fixo á donde alean ca la fueres
de el eftomago : y en cafo de duda es mas féguro quedarfe
vn poco mas atrás. Si fuéramos tan feiices , que fe huvief-
fe continuado hafta nofotros el eftado de la inocencia , feria
afsi para la calidad , como para la cantidad de la refección,'
regla fin excepción el apetito , porque entonces nunca fal-
dria de el imperio de la razón. Las cofas aora eftán de otro
modo : y afsi es menefter que feñale algunas limitaciones la
prudencia.
25 El confejo de exceder vna , ú otra vez , me pare-;
ce razonable , por no ligar el cuerpo á vn methodo indefec-
tible, como en los paitos figuientes fe cercene lo que fe
avia excedido : y en todo cafo no fe proceda á nueva refec-
ción , fin tener el eftomago enteramente"aliviado , y exci-
tado baftanteraente el apetito. Quando fe efpera algún
exercicio inmoderado , 6 fe teme que falte deípues á la
hora regular el alimentoprecifo ¿ como acaece algunas ye-
-zes en los caminos, puede prcvenlrfe el eftomago cor» re-
.feccion mas copiofa cíe la acoftumbrada. Tengafe fiempfe
M H3| d? el exercicio, 6 trabajo corporal, el qual quan-i
uei
DISCURSO SEXTO. I 5y
co fea mayor , pedirá mas alimento , por lo mucho que
difsipa.
26 Las reglas dadas fe entienden refpedo de los
cuerpos bien complexionados. Pero los que abundan de hu-
mores excrementicios, especialmentepituitofos , 6 flemáti-
c o s , deben eftrecharfe mas. Es verdad , que por lo común
en eftos es lánguido el apetito ; y a f s i , cercenando de él vn
poco en conformidad de la regla , que hemos dado de G a -
leno , quedará la cantidad de el alimento en la proporción
debida con fu temperamento viciofo. Con todo ay algunos
de eftos mifmos, que fon algo glotones : lo que acafo pro-
viene deque la mifmaintemperie, deque adolecen, tur-
ba , ó deshaze la harmonia, que en el eftado natural ay en-
tre la necefsidad de la naturaleza , y la voz de el apetito.
En tal cafo deben tener muy tirante da rienda á fu def-
templanca , reduciendofe á padecer hambre , y fed for-
malmente : que no durará mucho tiempo eífe trabajo , pues
fe llegarán á confumir con la inedia , y con la fed los
mifmos humores que irritan el apetito.
27 En quanto á la divifion de los manjares entré
comida, y cena , ay divifion también entre los Médicos.'
Unos pretenden que fea mas larga la comida que la cena;
Otros al contrario. Unos , y otros alegan fus razones.'
La primera opinión eftá mas valida en el vfo común. L o
que tengo por mas feguro e s , que cada vno obferve como
leva mejor , y figa efle rnethodo. En fin recomendamos,
fiempre como capital, y pri.ncipalifsima, afsi para la calidad,
como para la cantidad de comida , y bebida , la regla de la,
experiencia : la qual nunca fe ha de perder de vifta..

§. VIII.
•28 T O que hemos dicho en quanto á comida ; yj
I i bebida , fe debe entender de todas las de-
más cofas , que componen el régimen de v i d a , fueño , exer-:
cicio , habitación, &c. En todo es error obedecer el dióta-
men de el Medico contra la experiencia propria. El exerci-^
elo debe fer moderado, Pero efta moderación ha de fer ref^¡
P.ec."
I 5 S R I-GIMEN P A R A CONSERVAR. L A S A L U D , -
pe d i v a á las tuercas , y al alimento. Quando fe exceda
en la comida , a proporción fe ha de exceder en el exer-
cicio. Al que por fus ocupaciones , ó fu profefsion pocas 1

vezes, o por poco tiempo puede exercítarfe , juzgo con-


venirle exercicio algo violento : porque el exceño en la in-
tenííon, fuplael defecto en la extenfion.
29 En el fueño á penas cabe error por exceííb. En-
tregada la naturaleza al defeanfo , por ss fola preferive
el tiempo , b la cantidad proporcionada al temperamen-
to de cada vno. Contra el fueño meridiano eítán declara-
dos muchos Médicos , confiderandole gran fomentador de
catharros , y fluxiones. Pero yo he.víftomuchifsimos ha-
llarfe muy bien durmiendo vna hora , b m a s , poco def-s
pues de la comida. Efta es la practica común de los Re-
ligiofos : y no por elfo fon mas incomodados que los feglá-
res. Varias vezes que he viajado por el Eítio , .fiempre
he madrugado mucho, con el motivo de huir de los c a l o r

r e s , con que me era precito alargar haíta dos , y tres ho-


ras el fueño meridiano , para fuplir la falta de el noctur-
no ; y no por eíío fenti daño alguno. Opondranme acá-:
fo muchos la experiencia que tienen , de que quando duer-
men denudado la íieíta , íienten defpues la cabeza muy
gravada, Refpondo, que en el juicio que fe haze de efta ex-
periencia ( afsimifmo como en el de otras muchas ) fe co-
mete el error de tomar por caufa lo que es efecto, y por
efecto lo que es caufa. N o nace entonces la peladez de la
cabeza de el fueño prolijo ; antes el fueño prolijo nace de
la peía.íéz déla cabeza. L a mucha carga de vapores influ-
ye vn fueño tenaz , y defpues de el fueño continúa la pefa-'
déz , de que la cabeza fe va defembarazando poco á poco
mediante la fluxión. Ser efto afsi fe prueba , lo primero:
Porque quando fe duerme mucho la delta, para fuplir el
defecto de fueño de la noche antecedente, no fe fie nte'def-
pues efla pefadéz; y d el fueño por razón de la hora oca-
donara ejfa incomodidad, también en efte cafo fe padecie-
ra. L o fegundo ; porque fiempre que ay gran inclinación
á dormir largamente la delta , aunque no fe condefeien-
da con ella, fe padece deelmifrao modo pefadez de cabe-.
za
DISCURSO SEXTO. I
za todo el refto de el d i a , como yo mil vezés he experi-
mentado : luego no es el fueño quien caufa la pefadéz ; an-
tes la pefadéz es la que caufa el fueño.

§.' IX.
3 o
I j ^ ambiente querefpiramos, 6 País en que vi-
X_L vimos tiene gran influxo en la confervacion,
ó detrimento de la falud. También en efta parte fe debe
el conocimiento á la experiencia: porque las reglas phy-
ficas, que ordinariamente fe dan , fon muy falibles. Cafi t o -
dos condenan por infalubres los Paifes húmedos ; pero fe
engañan. T o d o el Principado de Afturias es muy húmedo.
Con todo , no folo en las Montañas de él , mas también en
los Valles , vive mas la gente que en Canilla. Las Islas
fon mucho mas húmedas, que las Regiones Mediterráneas,
porque por todas partes carga el Mar fu atmofphera de
vapores. Sin embargo Bacón obfervo, que los Isleños por
lo común fon de mas larga v i d a , que los habitadores de el
continente. Afsi los habitadores de las Islas Orcades á la
parte feptentrional de Efcocia , fieñdo afsi que fon muy
deftemplados y no vfan de alguna medicina , viven mu-
cho mas que los de la Rufia , pueftos en la mifma altura de
Polo. En las Canarias, y Terceras viven los hombres mas
que en las Regiones de la África, colocadas debaxo de el
mifmo Paralelo. Mas también en el japón , que en la China,
noobftante la mucho mayor induftria, y aplicación de los
Chinosá la medicina. N o ay Provincia alguna, ni en Áfri-
ca, ni en America puefta debaxo de el mifmo Paralelo, que
Zeylán donde fe viva tanto , ni con tanta falud, como
y

en efta deliciofa Isla. Y aqui fe falfifica también la re-,


gla común de que los Paifes, que abundan mucho de arbo-
les , fon enfermizos : pues la Isla de Zeylán cafi toda efta
cubierta de floreftas.
De aqui fe colige, que ni lafequedadde el País,'
ni la aparente pureza de el ambiente , puede darnos total
feguridad de fer bueno el clima. El temple de Madrid es
muy aplaudido en toda Efpaña , por razón de la pureza-
de
16o RÉGIMEN PARA CONSERVAR LA SALUD;
de el ambiente , calificada con la prompta diísipaciorí
de todos los malos olores , aun de los proprios cadáveres:
pues los de los perros , y g a t o s , dexadosen las calles, fe
defecan fin moleftar á nadie con el hedor. Sin embargo
Francifco Bayle en fu Curfo Philofofico , tom. r. fol.mihi
502. infiere de eífa mifma experiencia , que el temple de
Madrid es m a l o , atribuyendo el efecto á los muchos fales
volátiles , acres , 6 Alkalinos , de que eftá impregnado
aquei ambiente , y de donde dice, que nacen las muchas
enfermedades , que ay en la Corte •. Unde originem ducunt
morbi, qui fape Madriti grajfantur d nimia fanguinis te-¡
nuitate , & folutione , quam inferí aer falibus túrgidas.
Añade , que la practica de dexar los cadáveres de los ani-;
males domefticos infepultos por los barrios , y campos
vecinos, aunque algunos Phyficos de por acá juzgan fer/
v t i l , para templar con la craficie de fus vapores la nimia
tenuidad de el A y r e , en realidad es muy nociva : porque
con las expiraciones de los cadáveres fe aumentan al ambien-,
te los fales acres. Como quiera que fe philofofe ( que efto
de philofofar , lo haze cada vno como quiere ) el he--
cho e s , que en Madrid no vive tanto la gente , como erí
algunos Paifes de Ayre mas grueffo , y nebulofo. Es cierto;
que ay en Madrid mas población , que en todo el Princi-
pado de Aíturias. Con todo afleguro , que fe hallan en
Alburias muchifsimos mas octogenarios, nonagenarios, y¡
centenarios, que en Madrid.
32 Es fixo, pues , que la aparente pureza de elam-í
biente, no prueba la falubridad de el clima. Y digo la pu-
reza aparente, que confine en la carencia de vapores , q
exhalaciones fenfibles : porque puede el Ayre fer impuro;
por la mezcla de otros corpufculos infenfibles , fin embar-
go de defcubrirfe el Cielo ferenifsimo , por medio de la
diafanidad de eñe Elemento. En las conftituciones epide-,
m i c a s , que dependen fin duda déla infección de el Ayre,
fe vé efto muchas vezes. Quando la pefte reyna todo vn«
a ñ o , y años enteros, efpecialmente en Paifes poco vapo-
rofos , no dexa de aver en el difcurfo de el año muchos
dias fereaifsimos j cott todo la infección de e¿ ambiente
" per-'
DISCURSO SEXTO. j-6i
perfevera"; y aun por lo común mas en el Eftio , que es
quando eftá mas defpejado. Sidenhan obfervo muchos años
epidémicos , fin alguna novedad en ellos en quanto á las
qualidades fenfibles : Obfervo afsimifmo algunos años muy
femejantes en las qualidades fenfibles, delosquales vnos
fueron epidémicos, y otros no. P o r lo quaí dice efte gran
..Medico en varias partes , que las conftituciones infalubres -
de los años, no dependen en alguna manera de las qualida-
des fenfibles , b elementales. Y tratando de la conftitucion
epidémica de Londres en los años de i56<j. y \666. afsien-
ta , que nadie fabe , que qualidad , b difpolicion es la que
haze á el ambiente enfermizo : haziendo irriíion de la locu-
ra , y arrogancia de los Philofofantes , que profumen ha-
llar las razones phyfícas de eíle , y otros muchos efectos
naturales Ai vero qud , qmllfque Jti illa aeris difpoji-
tio , d qua morbificus hic apparatus promanat, nos pariter t

es complura alia , arca qu¡e vecors, ac arroganspbilofoghan-


tium turba nugatur , plañe ignoramus.
3j D e aqui fe infiere , que folo la experiencia puede
manifefiar , qué País es faludable , y qual enfermizo. Y es
de advertir , que en los climas fucede lo mifmo que en los
manjares ; efto es , que ninguno ay que para todos los indi-
viduos fea bueno. N i á penas ay alguno tan malo , que fea
malo para todos. De los tirios, b habitaciones dentro de
el mifmo País , ó quartos déla mifma cafa, digo lo mif-í
mo ; aunque no por eíío niego , que por lo común los litios
donde ay aguas eftancadas , 6 donde eftán embebidas en
la tierra humedades permanentes , fon muy nocivos. L a o b -
fervacion me ha enfeñado , "que ay fuma diferencia entre
aquella humedad , que al ambiente fe le comunica perenne-;
mente , por las evaporaciones de el terreno húmedo , b pan-
tanofo , que eftá debaxo , b inmediato á él , y las otras
humedades errantes de nieblas , 6 nubes que fe han evapora-
do de litios algo cufiantes. L a primera humedad comunmente
es nociva. Lafegunda en muchifsimos Paifes vemos, que no
lo es. Acafo dependerá de que á poco trecho que fe agite por
el ayre,fe puriíica,depqnÍbn4o varios corpufculos que la infi-:
peonan. '. / .•

(Tomo I,'. - X - M
lól RÉGIMEN PARA CONSERVAR LA SALUD,
34 L a niebla es cierto , que no en todos los Paife$
grava las cabezas. Y á donde haze efte daño , eftoy per-
íuadido á que no le haze la mifma fubftancia , 6 cuerpo
fenfible de la niebla, fino algunos corpuiculos íutilifsi,
mos malignos , que fe le mezclan. La razón para mi es
clara : porque cerradas puertas, y ventanas bien ajuftadas,
de m o d o , que no entre humedad fenfible de la niebla en
el apofento , fe padece el mifmo daño , y en el miímo gra-
do , que eftando fuera de techo : lo que muchas vezes he
experimentado. Lo mifmo digo de los vientos , que inco-
modan en algunos P a i f e s , como el Oriental , y el Me-
ridiano : pues fiendo c i e r t o , que aun en vn quarto bien
cerrado, donde no entra el menor foplo , 6 es tan poco
l o q u e entra, que no lo percibe el fentido , fe fíente la mif-
ma indifpoficion , que íi fe caminara por vn paramo, fe
infiere , que lo que haze el daño es la mixtura de algunos
corpufculos futilissimos, acafo minerales, que en virtud de
fu tenuidad , fe introducen en todas partes, burlando qiUr
lefquiera precauciones.

§. X.
3$ /CONCLUIREMOS efte Capitulo con algunas ad-
vertencias , que miran á borrar ciertas erra-
das observaciones, populares en materia de régimen, tan
introducidas, que juftamente podremos llamarlas errores
comunes.
3<5 Algunos toman por regla de fu régimen á efte,
o á aquel individuo , que portandofe de tal , ó tal mo-
d o , vivió mucho tiempo con falud co liante. Es error.
1

L o primero : porque , como ya fe advirtió , el régimen que


para vno es muy bueno , para otro puede fer muy malo.
L o fegando : porque con qualquier genero de régimen fe
hallarán vnos que viven mucho , otros que viven poco.
Unos viven mucho , fin probar vino toda la v i d a ; otros
cali fin probar la agua. Unos comiendo folo vn genero de
manjar con templanca; otros comiendo de todo fin e'cru-
pulo. Unos vfando de cofas calientes otros de freícas»
•: 7 " ~ • . " -
" •..
DISCURSO SEXTO- Í6^
El difunto Marqués de Mancera , aviendo hecho toda !a
vida fu principal paito de el chocolate , tan adiíto á él, que
til aun en las fiebres le abandonaba , vivió ciento y ocho
años. Otros, que quieran feguir eííé r u m b o , no llegarán á
los quarenta. Ciertamente á los mas fe ra pernicioíb.
11 L a practica de colocar la alcoba donde fe duer-
me en la parte mas retirada de el edificio , á fin de defen-
derla de las injurias de el ambiente "externo , es errada,
fino fe toma la precaución de modo , que pueda ventilarfc
á menudo. El ambiente eftancado es nocivo, como la agua
enancada. Conocefe en el mal. olor que dcfpide , fiemprc
que fe abre alguna alacena , a r c a , ó apofento , que ayan
eftado mucho tiempo cerrados. Creefe,que de cite princi-
pio nació aquella piítiicncia, que defoló el Exercito de los
antiguos G a l o s , ocafionada de aver abierto en el Templo
de Delphos vna grande arca, cerrada de tiempo inmemorial,
donde penfaron hallar grandes riquezas. Atribuyeron los
Gentiles el eftrago , á venganca de Apolo contra los viola-
dores de fu Templo. L a razón perfuade, que el ayre encar-
celado por ligios enteros , fin refpiradero alguno , pudo ad-
quirir vn altifsimo grado de putrefacción, capaz de infi-
cionar todo el ambiente vecino con fu' maligno fermento.
Acafo á la mifma - caufa fe deben atribuir las muertes re-
pentinas de ios minadores , quando rompen en las entrañas
de la tierra algún hueco , antes que á los hálitos arfenica-
lcs , de cuyo mineral no fe han hallado veftigios en algunas
partes, donde han fucedido eftas defgracias. E s , pues, no-
civo el ayre detenido en los apofentos , y mucho mas ef-
tando imbuido de las impurezas , que continuamente fe eva-
poran de nueftros cuerpos. Y a f s i , fe deben dar á la alco-
ba dos entradas correfpondienr.es á dos ventanas , ó puer-
ta , y ventana opueftas, para que fiempré que eítá fereno
el Cielo, ó corre ayre puro , fe pueda ventilar ; cuidando
empero de que las puertas de la alcoba fean bien ajuftadas:
y en todo lo demás hagafe quanto fe pueda por el abrigo.
38 El cubrir promptamente la ropa de el lecho, lue-
go que fe fale de él por la mañana , fe tiene por affeo \ fien-
do eju realidad porquería , y porquería dañofa. Antes fe
X2 de*
I 6*4. B.EGIMEN PARA CONSERVAR L A S A L U D , '
deben exponer luego las fabanas al ambiente , para que ex-
piren los hálitos de el cuerpo, que embebieron toda la no-
che , antes que enfriandofe fe condenfen, impidiendofe de
¡effc modo la evaporación.
39 T o d o el Mundo eftá ya perfuadido á lo mucho
que importa la limpieza en la r o p a , efpecialmente en la
que eftá inmediata al cuerpo , aviendofe yá defterrado- la
barbara practica, ordenada comunmente por los vulgares
Médicos , de mantener los enfermos con la mifma camifa en
todo el difcurfo de la dolencia. Pero fe ha fubfiftiuido en efta
materia vna precaución , que fe tiene por conveniente , y es
nociva. Antes de poner la camifa limpia al enfermo, hazeta
que fe la vifta al*-un fano , aquel tiempo que es menefter
para que fe caliente , y defeque de qualquiera humedad re-
íidua: efto f o l o p o r e í difcurfo, de que el calor comuni-
cado de el cuerpo de otro hombre , es mas. connatural al
enfermo, que el que comunican el S o l , 6 el fuego. Raros
modos dephilofofar tienen algunos hombres. El calor to-
d o es de vna efpecie Ínfima en buena philofofia ;.y a f s i , de
qualefquiera agentes que fe comunique , produce los mif-
mos efectos á proporción de fu intenfion. De el mifmo
modo defeca, y enrarece el.calor de el S o l , que el de el
fuego. Algunas operaciones peculiares ,. que fe atribuyen al
calor nativo de los vivientes, dependen de la concurrencia
de otras facultades diftintas:. por lo qualcftá oy abando-
nada la.fentencia , de que la diflblucion de los alimentos
en el eftomago, fe haze folo en virtud de el calor nativo;
Ü no es que por la voz Nativo , fe. entienda otra alguna, co-
fa fobreañadida á la razón de calor. Mas aun en cafo que
fe diga , que el calor de. el eftomago por si. folo. pérfido-
na efta obra , no por efio fe prueba, que fea diftinto en ef-
pecie de el calor de el Sol , ni de él fuego. La razón es:
porque folo puede h.azer la diífolucion de el alimento , ex-
citando la fermentación ;. y la operación de. excitar h fer-
mentación , ,1 es común al calor 'de el Sol,, y al de el fuego;
N o folo en los mixtos inanimados, mas. también en ios v i -
vientes fe vé ,. que promueve el calos de el fuego la fermen?--
j a d p n : £«es/vfando de el fe anticipa, á los. vegetables, 1 »
?
DISCURSO SEXTO. I ¿5
madurez ele fus frutos , fupliendo la actividad de efte E l e -
mento la tibieza de aquel Aftro. Siendo, pues, el calor en
nueftros cuerpos vno mifmo en efpecie con el de el S o l , y
el de el f u e g o , ninguna vtilidad fe le procura al enfermo
en que lacamifafe le caliente con el contacto de otro hom-
bre. Y por otra parte fe le ocaíiona algún daño : pues fe l a
ponen defpues que ha embebido ya alguna porción de las
exhalaciones excrementicias de el otro cuerpo. Por eftoferá
mejor deiecatla al S o l , ó al fuego , dándole aquel grado de
calor, que en el eftado natural tiene el cuerpo humano.
40 Algunos liguen la máxima de vfar en rodas las
citaciones de el año la mifma cantidad de r o p a , afsi en el
lecho, como en el vellido. N o debe fer afsi; íi no quitar , 6
añadir i proporción de el frió- , y calor. L a cantidad de
ropa , que en el Invierno es menefter para abrigo , en el
Eftiofobra para ahogo. Bacón dice , que la demafiada r o -
pa diifuelve el cuerpo ; Vefies nimia , five in leclis , five
partata corpus folvunt, (in Hiß» vita & mortis ) Quan-
v

do á vezes- el calor de el Effio laxa dem aliadamente l o s


cuerpos , para qué fe ha de aumentar el daño con la oprefion
de los vellidos ? Es verdad ,. que el adagio Caftellano dice;
Si quieres vivir fano , ¡a- ropa que trabes por Invierno^
trábela por Verano, Pero yo nunca he aííentido'á que todos-'
los adagios fean evangelios breves : y quien fe pone de in-
tento á impugnar eiTores comunes-,, no debe'embarazarte
en refranes. A los que veneran rales textos , les daré la ex-
plicación de el preíénte ,.que me ocurrió tiendo Novicio, en
Gcafion , que mi Maeftro me arguyo con e l , viéndome vre
día ardiente muy aliviado de ropa. Padre Maeftro , le dixey
efle adagio favorece mi opinión : porque quiere decir ,• que
nos abriguemos mucho menos en Verano , que"en Invierno.'
Como ? Me reputó. Como ( refpondi) la ropa que fe ha vfa--
do todo el. Invierno , quando llegue el Eftio , es neceífario;
que yá. efté:algo.-raída y con mucho menos pelufa ,-es pres-
cito que entonces, abrigue , y cargue mucho menos: y afsi'
entiendo yo el conté jo de que la ropa,que fe trahe por Invier---
no fe.traygu por Verano. Nlniehaze faerca el exemplodee
algunos i- que fe hallan, bien- yíande* ht miíma cantidad de;
166 RÉGIMEN PARA CONSERVARLA SALUD,
ropa todo ei año. Comunmente eftos hombres adiólos á vtf
üiethodo inalterable, fin diftincion de tiempos , y circundan-;
c i a s , fon de vna complexión de bronce , á que fe figuen dic-
támenes de hierro. Qualquiera lección que tomen en orden,
á régimen, aunque no fea la mas oportuna, con ella tienen
falud, porque para todo les fobra robnftéz. Y como los hom-
bres de temperamento tan fuerte no fon por lo común los
mas reflexivos , nadie los vencerá con alguna razón , á que
por poco tiempo prueben , fi de otro modo les va mejor. Sin
embargo no me atrevo á condenarlos , íi en la practica que
figuen , no padecen alguna moleftia. Pero dudo que el car-
garfe de ropa en el mayor herbor del Eftio no les fea peuofo.
L o dicho en elle Articulo fe debe entender con alguna limi-
tación para aquellos Paifes donde por la vecindad de alguna
Montaña elevada', fuel n levantarle intempefliva mente , en
medio de los calo es, vientos frios , y penetrantes.
41 Dexar la ventana de el apofento abierta en las
noches ardientes de el Eftio, fe tiene por arrie'gado. Y o lo
executé muchas vezes , y vi algunos otros que lo executa-
ban , quando el calor era muy excefsivo , fin experimentar
jamás algún daño. Pero efto no podrá executarfe en los Pai-
fes donde fucede lo que diximos arriba, de levantarle in-
opinadamente , en medio de los calores, vientos frios , fila
ventana no efta al lado opuefto de la Montaña de donde
foplan. Tampoco en los Lugares , donde arrojan de no-»
che en las calles todas las inmundicias.
42' L a elección de agua para beber , es vno de los -
puntos confiderables en materia de régimen. Las feñas co-
munes , y probables de la buena, fon carecer de todo Sa-
bor , fer cryftalina, ligera, calentarfe , ó enfriarfe promp-
tamente , cocerfe prefto en ella las legumbres. Pero la de
nacer la fuente al Oriente, la he vifto falfificada mil ve-
zes. El Pais á donde efcrivo efto, abunda de fuentes , y¡
tres que a-y las mejores de todas, nacen al Poniente. Ni,'
íi fe confulta bien la razón natural, fe puede hazer mucho
aprecio de efta feña.
4? La experiencia de pefar las aguas , para cono-'
«er ia bondad de ellas , es engañofa. Puede la agua , que
es;-
DISCURSO SEXTO. \6j
estrías pefada que otra, fer para el eftomago mas ligera,
à razón de la mayor flexibilidad , ó mayor disolubilidad de
la textura de fus partículas, por la qual fe acomoda mejor,
y penetra mas fácilmente las vias. Puede tambkn tal vez
depender la mayor levidad de la agua de tener mayor mix-,
tura de ayre : en cuyo cafo no fera la mas ligera mas pro-
yechofa. En los alimentos fe vè , que no íiemore ios nías li-
geros en simifmos, fon los mas ligeros en el eftomaqc. £ 1 fe»
bo es.mucho mas ligero que la carne ; pero para el eftomago
mas pefado. Afsi las aguas fe han de pefar en el eftoma-
go ; no en la balança. Algunas experiencias que hize, me
confirmaron en efta máxima.
44 Otro error comunifsimo, que he hallado en quañ-
to à la agua , y otra qualquiera bebida , es , condenar
por perniciofa laque aviendofeenfriado con nieve , perdió
aquella frialdad intenfa. D i c e n , que eftà paliada ; y no se
lo que quieren fignificar con ello. Si por paliada, entienden
corrompida , fe engañan : porque la corrupción de qual-
quiera licor fe manifiefta en fus qualidades fenfibles ; y en
ninguna de eftas fe inmuta el agua , por enfriarfe : ó fi al-
guna vez fe inmuta, es porque la valija, en que fe enfrió,
k comunicó algún fabor , ü olor eftraño ; pero lo miímo
fucederia eftando en ella fin enfriarfe. Afsi fe veri,que en va-
fija de vidro limpia , aunque fe enfrie diez vezes, no fe inmu-
ta , ni en el color , ni en fabor , ni en olor. Acafo introduxo
efte error la experiencia de lo que paffa en las br-.bidas com-
pueftas. Pero eftas fe corrompen , ó inmutan fenfiblemente,
pallados vno, ù dos dias, que fe enfrien, que no, á-caufa de la
fermentación que ocafiona fu etherogencidad. Haga el que
quiíiere la experiencia con vn poco de Orchata , y l o v e r a .
La agua de los Rios de curfo dilatado , cien vezes fe enfria
con la deftemplança de la noche , y otras tantas fe calien-
ta con la pretenda de el Sol , fin perder nada de fu calidad.
Aun la que fe ha ciado fe dexa beber deípues de liquidada,
de el miímo m o d o , que antes. El vino , que fe tranfporta
por altifsimas Montañas , fe enfria mucho en ellas, y def-
pues fe calienta, ral vezdemafudo , en los V a l l e s , fin per-
der nada de fu valor. A efte argumento me han refpondido
I 6*8 R EGIMEN PARA CONSERVAR LA SALUD,'
algunos de aquellos , que' palian por Philofofos , íolo por-
que eftudiaron , fi la materia tiene propria exiftencia, íí la
vnion fe diftingue de las partes , 8cc. Que la frialdad en
los exempios que trabemos es natural , y la de el cafo ea
queftioíij violenta. Pero efto es hablar fin reflexión , y aca-f
fo fin inteligencia de las vozes.. Si á la agúale es violen-
ta la frialdad, que le comunica la nieve , lo fe ra afsimif-
mo la que le comunica el ambiente friifsimo de la noche,
quando llega á elarla ; pues v n a , y otra frialdad fon de
la mifma efpeeie Ínfima; y aun el agente es el mifmo eft
quanto á la efpeeie ; conviene á faber , el nitro incorpora-,
do en ia nieve , ó efparcido en el ayre. Quando el vino
es conducido por Montañas nevadas , la nieve es quien le
enfria mediatamente , enfriando inmediatamente al am-
biente vecino : como en la corchera le enfria mediatamente
enfriando inmediatamente la valija. Las fuentes , y Rios,
que baxande Montañas altifsimas , fe furten por la mayor
parte de la nieve derretida, penetrada en los fenos de- la tier-
ra ; fin quedefpueS "que en los Valles fe calientan fus aguas,
fe perciba en ellos alguna qualidad maligna. Decir que vna
frialdad es natural , y otra artificial, nada fignifica: por-
que lo que a.y artificial en el cafo en queftion, es vnicamente
la aplicación : y la aplicaciones folo condición para obrar
definida de todo influxo : por lo qual no puede inducir bue-
na , ni mala qualidad en la bebida. Aun quando concedié-
ramos fer algo violenta á la agua la frialdad de la nie-i
Ve , nada fe probaria de ay : Pues mucho mas violento le
es el calor que le dá el fuego , y por mas que hierba no fe
corrompe , fi fe cuece fola. En fin, yo en" mis menores años
bebi muchas vezes la a g u a , que fe avia enfriado en can-
timplora de v i d r i o , defpues de perder la frialdad , fin per-:
cibir jamás la menor lefion.
4J Omito otras advertencias en orden al régimen:
porque para decirlo t o d o , feria meuefter hazer libro entero
eje elle alfumpto. Y repito , que en todas las cofas de que
fe compone el régimen , cada vno fe govierne por fu expe-
riencia , eftaudo advertido de entenderla bien : porque mu-:
glias vezes fe yerra enormemeate en las conciuíiones, que fe
DISCURSO SEXTO. 169
deducen de la ob fer vacio n , ó tomando por efecto lo que
es caufa , corno dernonftré arriba tratando de el fueño me-
ridiano ; ó tomando por caula, lo que ni es caufa , ni efec-,
t o , fino cofa puramente concomitante. Y efte es el yerro
mas común. Muchos de qualquiera incomodidad que fien-
tan , echan la culpa á qualquiera novedad , que ayan hecho
en la comida , o en la bebida, 6 en otra cofa , por menu-
da que fea. Es inenefter ver , fi repitiendo eífa novedad,
refulta el mifmo efecto : porque fi n o , feria concurrencia
cafual, y no ocafionada, de la indifpoficion con la nove-
dad. Teniendo prefente eíia regla, es ociofo preguntar aí
Medico en cftado de .talud, aunque fea algo débil , que,'
y quanto fe ha de comer , ó beber , quanto , y quando
fe ha de hazer exercicio , & c . En que muchos fon tan fu-,
períliciofos, que no paliarán, aunque rabien de hambre^
ú de fed , de la raya que el Medico fcñala : y Médicos avo-
que todo lo determinan con tanta exactitud , como fi lo mi-:
dieííen con compás Mathematico. Acuerdóme de aver leidp
de vno , á quien el Medico confultado fobre el punto de ha-i
zer exercicio , feñaló el numero de paíteos , ó bueltas que,
avia de dar en el quarto : y defpues el confultante, ocurrien-,
dolé que no avia expreífado, fi los paíteos avian de fer ázia
lo largo , ó ázia lo ancho de el quarto , fe lo embió á pre-
guntar al Medico á fu cafa. N o por ello repruebo algunos
cohfejos generales , y aun algo particularizados , quando los^
Médicos con larga , y atenta experiencia han tantéadc»
la calidad de los alimentos de el P a i st

y el temperamento de el
confultante.
Q)
r
Aunque el examen de la común oplmoti, que la aplieachrí
d las letras es muy perjudicial d la [alud , pertenecía a)
ejíe Difcurfo, por fer materia que pide difcujion mas
(Macla, fe referva para colocarfe a parte en el fi guíente $

. *£* a i ***

(Torna li - g¡ Wfk
I

^ *K 4 ** * * ** * * * * «I ¿3* -

D E S AGR AVIO
DE LA PROFESSION. L I T E R A R I A ^

DISCURSO SÉPTIMO.

§. I.

§t ^^^I^ARÁ contrapelo de los hermofos atraca


tivos con que las letras encienden el
amor de los eftudiofos , fe introduxo la
perfuafion volverla!, de que los eílu-
dios abrevian á la vida los plazos;
Pendón terrible,, fi es verdadera ! Que importa que elfa-
bio exceda al Ignorante, loque el racional al bruto ? Que
el entendimiento inílruido fe diílinga de el inculto , co*
mo el diamante colocado en la joya de el que yaze eí'con-
dido e n j a m i n a ? Si quantos paitos fe dan en el progreflo
!

de la ciencia ,. fon tropiezos en la carrera de la vida. Igua-


ló Séneca los fabios á los Dlotes pero fi fon mas perece-
deros que los demás hombres ,. diftan mas que todos dé la
deidad , porque diftan mas que todos de la inmortalidad.
La virtud, fupremo ornamento de la Alma , es parto legi-
timo de la ciencia : Virtutem doctrina parat , que decia
Horacio. Pero:quantos exclamarán con Bruto al tiempo de
morir: 0 infeliz virtud !: SI eífa. mifma luz , que eorpna
al hombre de rayos-, es fuego que le reduce á cenizas ? La
h o n r a , compañera InfepaTable.de la fabiduiia, ferá corto
cftiiirmlo de la aplicación en quien juzgue , que los paflos
DISCURSO SÉPTIMO. 171
queda ázialos refplandores de el aplaufo, fon buelos ázia
las lobregueces de el fepulchro.
2 Buelvo á decir , que es efta vna peníion terrible,
fi es verdadera. Spe&ro formidable , que atravefado en el
vmbral de la cafa de la fabiduria, es capaz de detener á los
mas enamorados de fu hermofura. P o r t a n t o , es cierto
que haria á la República literaria vn feñalado fervicio,
quien defterraífe el miedo de efte phantafma de el Mundo.
Intentáronlo los Eftoicos , procurando perfuadir , que el v i -
v i r , ó el morir fon cofas indiferentes , ó igualmente eligi-
óles. Pero tan iexos eftuvieronde hazerfelo creer á los de-
más hombres, que pienfo , que ni aun lo creían los mifmos
Ph.iiofofos que lo predicaban: Nam muñere charlar omni
adflringit fita quemqite falus , decia Claudiano. Solo, pues,
refta otro medio de apartar efte eftorvo de el camino de
las letras : que es perfuadir , que fu honefta ocupación no
acorta los periodos á la edad. Conozco , que abrazar elle
empeño , es lidiar con todo el Mundo: pues todo ella por
el opuefto diclamen. Sin embargo , yo me animo á def-
agraviar las letras déla nota de eílár reñidas con la vida»
probando que eífe común dictamen es vn error común, ori-
ginado de falta de reflexión,

§. II.
3 | _ ? L fundamento grande de mi fentir , eslaexpe-s
A~V riencia: fobre la q u a l , fi fe huviera hecho
la reflexión debida , no huviera ganado tanta tierra la opi-
nión contraria. Ruego á qualqulera que elle por ella , que
obferve con atención , fi los fugetos , que conoce, ó cono-
ció dedicados á las letras, murieron mas en agraz por lo-
común , que los demás hombres. Para hazer con vna exac-
titud prudencial eíle cotejo, el medio es poner los ojos en
los congreifos de hombres literatos de Univerfidades , T r i -
bunales , y C o l e g i o s , y comparar el numero de ellos con
°tro igual de hombres dedicados á qualefquiera otras ocu-
paciones , y aun fin ocupación alguna. Y o afleguro , que
•S«el paralelo no fe hallará,-que ayan llegado á vna larga,
Iyz PROFESSION LITERARIA,
fenectud , mayor numero de eftos, quede aquellos. Y lo
affeguro , porque tengo hecha la quenta con la puntualidad
pofsible. Apenas ay Univeríidad, donde de treinta, 6 qua-í
renta individuos, no lleguen, ó pallen de la edad feptua-;
, genaria quatro , o feis. L o mifmo fe obferva en los que íi*
guen la carrera de las judicaturas. Pues en verdad, que no
hallamos mayor numero de Septuagenarios en los que paííaii
tranquilamente la vida , libres de todo cuidado. En las
Sagradas Religiones fe haze mas vifible , porfer la compa-,
ración mas faeil , la fuerca de efte argumento. A propor-
ción de el numero tantos, y aun creo que mas ancianos
fe encuentran délos que fe ocupan en el eftudio, que de
los que eftán deftinados al Choro , ó al manejo de la ha-,
zienda. Cotegefe en qualquiera Religión el numero de Sep-
tuagenarios , u oótuagenarios de vno- , y otro exercicio, y
fe hallará, que no me he engañado en la quenta.
4 Luciano tratando de los Macrobios , ó- hombres
'de larga vida , de intento fe pone á numerar los fugetos
dados á las letras en ios tiempos antiguos-,. que vivieron
mucho. Y folo de Phylofofos celebres quenta diez y nueve,
que todos paliaron de ochenta años, los mas paliaron tam-
bién de los noventa. Solón, Thales-Milefio „ y Pittaco,
contados entre los fíete Sabios de Grecia, vivieron á cien
años cada vno. Z e n ó n , Principe d é l a Secta Eíloyca , no-
venta y ocho. Democrito ciento y quatro. Xenophilo
Pithagorico ciento y cinco-. De Hi doradores , y Poetas
trahe el mifmo Luciano otra larga lifta. N o folo edo. En
el mifmo eferito afsienta efte Autor,. que en todas las Na-
ciones fe ha obfervado vivir mas por lo común , que los
demás los hombres de profefsion liseraria , por razón de ftl
mayor cuidada en el regimea de vida : citando por exem-
plares los Efcritores Sagrados entre los Egypcios , los In-
trepretes de Fábulas entre los Afyrios , y Árabes , loa
Bracmanes entre les I n d i o s , y generalmente todos les que
cultivaron con cuidado la Philofofia -.. Cuiuf'modi jut'ip-
v&gyptiorum facri Ser iba ,. & apud Afyrios, & Árabes
Tabularum Interpretes , & apud Indos Braíhrmnes ¡, ací
amíífsim Philüjophice Jludijs vacantes^
DISCURSO SÉPTIMO. 173"
-5 Y ñ o o b f t a á nueftro intento , el que Luciano atri-
buya á fu exaéto régimen la larga edad, de los literatos.
Porque fi los eftudios abreviaran la v i d a , como fe plen-
f a , parece que lo mas que fe podria deber al régimen, fe-
ria que los eftudiofos vivieffen tanto como los que no lo
fon. Pero no folo.fe nota igualdad , fino exceffo. Fuera de
que fiendo la templanza en la comida , en la bebida , en el
fueño , como también la abftineneia de otros exceíios , fe-
quela cafi neceífaria de el exercicio de las letras, fiempre
la larga vida de los literatos fe deberá como á caufa me?,
djata á, la ocupación de los eftudios.

§. III.
6 /^ONÍFruMASK efto con los exemplares de losHOTIIJ
bres mas eftudiofos que huvoen ellos tienl-i
pos. Por tales qliento al Cardenal Enrico de Noris A u -
guftiniano , de quien fe qnenta, que antes de veftirfe la Sa-
grada Purpura eftudiaba catorce horas cada día.' A l famo^
fo Caramuel, que de si mifmo dice en el Prologo de la T h e o -
logia fundamental, que daba diariamente el mifmo numero-
de horas ai trabajo literario. Al celebre Benedictino D o n
Juan de Mabilion, conocido , y venerado de todo el Mun-
do por tantas , y tan excelentes obras. Alinfatigable Fran-
cés Antonio Arnaldo cuya reprehenfible pafsion por la
r

doctrina janfeniana no vebaxa la admiración de aver íido.


Autor de mas deciento y treinta volúmenes, Al laborio-
fo Dominicano Natal Alexandro , en cuyas baftas obras
fiendo tanto elpefodela q'uantidad material, aun es ma-
yor el de la'erudiccion. A los dos grandes Escritores lefuita's
el Padre Athanafío Kirquér , y el Padre Daniel Papebro-
chio. Al doctifsimo hijo- de el gran B-alrlio nueftro Efpá-:
úol el Maeftro Fray Miguel Pérez , Biblioteca animada, y
Oráculo de la Academia Salmantina, Todos eftos hom-
bres , cuya vida fue vlr continuo eftudio, alargaron mas
allá de el tennino-común fu bien empleada edad. Enrico
de Noris .vivió fetenta y tres años. Ce,ramuel fetenta , y
ocho, M.ibiiiau fetenta y-cinco. Antonio Arnaldo ochen-
ta
174 PROFESSION LITERARIA,
ta y dos. Qé' Natal Alexaadro no sé puntualmente la edad;-
peto fi., que fué muy dilatada , porque nació el ano de'
treinta y nueve de el ligio pallado , y pocos anos ha oi
decir , que aun v i v i a , aunque caíi de el todo ciego. El Dic-'
cionario Hiílorico, impreíTo el año de diez y o c h o , aunque
habla largamente de N a t a l , nada dice de fu muerte , de
que infiero, que aun vivia entonces : porque en aquel eferi-
to íé obferva referir el año de la muerte de los fugetos efe
que trata. El Padre Kirquér vivió ochenta y dos años. Y
el Padre Papebroquio lo mifmo , ó algo m a s , fegun la ef-
pecie que tengo. El Maeílro Pérez hago juicio baflantemen-
te feguro , que paila ya de los noventa.
7 Pudiéramos añadir, por fer de muy efpecial no-
ta , aunque no tan moderno , el exemplar de Guillelmo Pof-
tél , natural de Normandia, gran Peregrinador , y de mu-
cho efludio , aunque infeliz , aviendo en fus dichos , obras,
y eferitos, dexado algunas feñas de que fe defvió no folo de.
la Religión Catholica, mas aun de el Chriílianifmo : afsi
algunos le miran como primer Caudillo de los Deiftas. De
eíledice el Verulamio, que vivió cerca de ciento y veinte
años. Pero otros Autores no quieren que aya llegado , ni
aun á ciento, y la vltima edición de el Diccionario de Mo-
reri no le da mas de fetentay cinco. Afsi la edad de elle
erudito fe quedará en la duda que tiene : bailando los exem-
plos alegados para prueba experimental de que el eftudio
efta bien avenido con la larga vida.

§. IV.
8 \ L a experiencia fufraga la razón. El exercicio:
j\_ literario fiendo conforme al genio , y no ex-
cediendo en el modo , tiene mucho mas de dulcura, qae de
fatiga. Luego no puede fer moleílo , u defapacible á la na-
turaleza , y por configuientc , ni perjudicial á la vida.
He puefto las dos limitaciones de fer conforme al genio,
y no exceder en el modo ; pero ellas fon tranfeendentes á
toda ocupación: pues ninguna ay que fiendo, ó enlacatv
tidad excefsiva, ó refpe&o de el genio violenta , no fea
no-.
DISCURSO SÉPTIMO. 175
j&ociva. Qué cofa mas dulce ay que eftár tratando todos los
días con los hombres mas racionales , y fabios que tuvie-
ron los figlos todos., como fe logra en el manejo de los li-
bros? Si vn hombre muy difcreto , y de algo ungulares
noticias nos da tanto placer con fu converfacion , quanto
mayor le darán tantos como fe encuentran en vnaBibliote-
ca ? Qué deleyte llega al de regiñrar en la Hiftoría todos
lps S i g l o s , en la Geografía todas las Reglones, en la Aítro-
nomia todos los Cielos ? El Philofofo fe complace en ir
dando alcance á la fugitiva naturaleza , el Theologo en
contemplar con el telefcopio de la revelación, los myfterios
de la gracia. Y aunque es cierto que en muchas materias
no fie puede defcubrir el fondo , ó apurar la verdad, en ef-
fas mifmasfe entretiene el entendimiento con la dulce g o -
loíina de ver los fútiles difcurfos con que la han bufcado*
tantas mentes fublimes. Ella ventaja tienen fobre todas
las demás Ciencias las Mathematicas, cuyo eftudio fiem-
pre va ganando tierra en el imperio de la verdad. De aquí
viene aquel como extático embelefo de los que con mas fe-
licidad liguen efta profefsiqn. Archimedes , ocupado en for-
mar lineas, geométricas en la arena ^eftaba ínfenfíble á la
fangrienta defolacion de fu propria Patria Siracufa. El Fran-
cés Francifco Yieta , inventor de la Algebra efpeciofa ,fe
ellaba á vezestres diascon fus noches fin comer, ni dor-
mir , arrebatado en fus efpeculaciones Mathematicas. Ref-
pondafeme con íinceridad íi ay algún otro placer en el Mun-
do capaz de embelefar tanto?
9 Los que en materias mas áridas eftndian para inf-
truir á otros con producciones p" oprias , tienen á vezes
la fatiga de llevar cuefta arriba el dileurfoper fendas efpi-
nofas;. Pero enefle mifmo campo deiabrido , al riego de fu
fudor les nacen hermofás flores. Cada penfamicnto nuevo
que aprueban, es objeto feftívo en que fe complacen. L a
fecundidad mental ligue opuefto orden á la phyfisa. L a
concepcioies trabajofa, y el parto dulce. Es felicidad de
los Efcrltores ,. que quanto dífeurren les parece bien , y
juzgan que afsi ha de parecer á los demás,que vean lus
difcurfos en el libro,, 6 los o y g a n e n la Cathedra, y en
ij6 PROFESSIÓN LITERARIA,
el Pulpito. Por efto en cada rafgo que dan con la pluq
rna , contemplan vn hermofo hijo de fu mente , que les ha-i
ze dar por feliz , y bien empleado el trabajo de la produc.;
cion.
10 Con razón , pues , el otro amigo de Ovidio le;
•'¡aconfejaba á efte Poeta , que aliviane fus males con el re-;
freo de el eftudio:

'elf'il'*' Seribis vt ohlettem Jludio lachrymabile tempus;

Porque es efta vna diverfion grande , y diverfíon que tiene


en fu mano qualquiera. Empero es precifo confeífar, que
ay gran diferencia entre el eftudio arbitrario , y el forca-
do. Aquel ñempre es guftofo. Efte íiempre tiene algo de fa-
tigante : y mucho mas en vno , ti otro apuro violento,
como de vna Lección de opoficion, u de vn Sermón quaíi
repentino. Mas eftos cafos fon raros. Y en el eftudio for-
jado fe logra el deleyte de adelantar, y aprender : lifonja
común de todo racional. Fuera de que todos los de venta-
jofo ingenio , eftán exemptos de la mayor-parte de aquella
fatiga , ftendo poco el tiempo que han menefter para cum-'
plir con la precifa tarea,

§. V.
r
n | ANALMENTE á la experiencia, y á la razón aña-?
£ de patrocinio con fu authoridad vn Phylo-;
fofo, el que entre todos con mas diligencia, y fagacidad;
eftendiendo fu atención á quanto ay animado en la naturale-
z a , obfervó quanto favorece , 6 eftorva la prolongación
de la vida. Por lo menos no puede negarfe que fué el que
mas de intento , y con mas extenfion eferivió íbbre efta ma-;
teria. Y á por eftas feñas conocen los Eruditos , que cito k
Francifco Bacbn en fu preciofo libro , intitulado : Hifto-i
ría Vita , & Mortis. Donde difeurriendo por todas las
profefsiones, ó eftados mas oportunos para vivir mucho,
tiempo , defpues de colocar en primer lugar la vida Reli-.
g í o f a , Eremítica , 6 contemplativa, pone inmediata á efta
LA
DISCURSO SÉPTIMO. '177
la prófefsion literaria , por ellas palabras : Huic próxima efe
vita in litteris pbilofopuorum, rbetorum, & grammatieo-}
rum* Da la razón: Degitur bk quoque in otio, & in bis
'cogitationibus , qu£ cum ai negotia vita nibil pertineant 3

non morclent , fed varietate , & impertinentia deieBantx


vhant etiam ai arbitrium fuum>in quibm máxime pla~
ceat horas., Ce> ttmpus tsrentes*
12 D e b o n o obftante confeflar ., que efta razoíi no
Cs generalifsima para todos los Literatos ; si folo limita-:
da á aquellos cuya fubfiitencia no depende de fu efíudlo»
Los Abogados , y los Médicos , pongo por exemplo , cu-:
yo mayor , b menor faber les grangea no folo mayor hon-:
{•a, mas también aumento de conveniencia , al paíTo que
en la letura., y la meditación ^encuentran efpecies, que los
deleytan, tropiezan también en cuidados, que los contur-
ban. En eftas dos profefsiones es vn gran contrapefo de la
dulcura de el cftudio , la emulación de otros de la mifma
facultad, con quienes en frequentes concurrencias fe difpu-:
ta la ventaja. Es efta vna guerra mas mental que feníible^
donde aunque no es mucho el eftruendo de las vozes , no po-
pas vezespor el eftallido délos labios fe conoce lapolvora^
ejue arde en los corazones,

§. VI.
\% "T^VEsruES de probar mi fentír con experiencia
\_Jp razón, y autoridad , es precifo bazerme car-
go de vna grande objeción , que fe me puede hazer, tomada
de las frequentes quexas , que á los Literatos fe oyen de fus
corporales indifpoficiones. Raro es el hombre dado á las le-:
tras, á quien no oygamos quexarfe de rheumas , y catarros,'
ámuchos de habidos, y jaquecas. D e a q u i e s , q u e algunos
Médicos célebres , compafsivos á fus dolores , eferivieroa
de intento íbbre ios medios , 6 auxilios para confervar la fa-
llid de los Literatos. Como Marfílio Reino de Studioforum
vdetudine tuend,a. Fortunato Pemplio de Togatorvm vale-,
indine tuenda.Y BernardinoRamazzini de Literatorum mor-i
tyh Siendo efto cierto, también lo es que toda indifpoficio.r»
'Lomo L g ha^
178 PROFESSION LITERARIA,
habitual, por leve que fea, efpecialmente íi en ella padece el
celebro ^ts vna lima, que intendiblemente va royendo lavi-
da.Luego es precifo que-efta tenga mas limitado plazo en los
Profeífores de las letras, que en los demás hombres.
14 Pero efte argumento no es tan fuerte, como*re¿
prefenta fu apariencia. Lo.primero : Las quexas di fluxiones
de la cabeza , oy fon tan vniverfales, que tanto caíi fuenan
y a en las bocas de los Gañanes , como en las de los Cathcdra-
ticos. Todos fe quexan de rheumas: no porque aya mas rheu-
mas en efte ligio , que en los antecedentes; fino porque ay
mas melindres. Mas fluyen á la boca , que al pecho : porque
mas es el clamor , que el daño.
15 L o fegundo : Es incierto que qualquíera leve in-
difpoficion habitual, ó como habitual abrevie la v i d a ; antes
bien ay algunas que conducen á prolongarla. Tales fon las
i

fluxiones,que de tiempo á tiempo repiten. L a razón es : porr


que por medio de ellas fe alivia el cuerpo de los humores ex-
crementicios, b impuros, que le gravan, y que retenidos mas
tiempo, y creciendo á mayor cantidad , ocafionarán alguna
enfermedad peligrofa. De aqui depende , que muchos fuge-
tos enfermizos viven largamente , y algunos robuftifsimos
mueren en la flor de fu edad: porque en aquellos , con varias
.fermentaciones ligeras fe vá fuccefsivamente defahogandoel
cuerpo de los humores nocivos ; y eftancandofe en ellos, no
prorrumpen , ni fe hazenfentir, hafta que la copia es tanta,
que no puede fuperarla la naturaleza.
16 L o tercero : Si el Aphorifmo en que Hypocrates
d i c e , que el habito robuftifsimo es peligrefo , y'amenaza
prompta decadencia, es verdadero, ferá mas fegura para
alargar la vida vna falud algo quebrada. Laconfequeucia
parece forcofa; efpecialmente añadiendo el mifmo Hypocra-
tes, que al que fe fíente perfectamente fano , fin dilación fe le
debe diífolver , ú deftruír el buen habito que goza : His de
caujis bonum babitum fiatim folvere expedit. Sin embargo
y o no me governaré jamás po$ efte Aphorifmo, fi fe entien-
de como fuena.
17 Finalmente: no padece la falud de los hombres de
letras sanio como vulgarmente fe dice .• Con ellos vivo >. y he.
DISCURSO SÉPTIMO. ijp
vivido íiempre , y no veo tantosmales, ni oygo tantos ge-
midos. Ramazzini con otros Médicos dice , que el eftudio
haze á los hombres melancholicos , tétricos, defabridos.
Nada de effco he experimentado , ni en m i , ni en otros que
cñudiaron mas que y o ; antes bien quanto mas fabios , los he
obfervado mas apacibles. Y en los efedros de los hombres
mas eminentes fe nota vn genero de dulcura fuperior á lo
común de la condición humana.

$. V I L
r
í3 T O que fe ha dicho en efte Difcurfo fe debe éñ¿
I i tender con algunas advertencias. L a prime-
ra e s , la apuntada arriba ; que no fe exceda en el eftudio.
El exceflo puede confiderarfe no folo en la cantidad, mas
también en las circunftancias. En la cantidad excede el que
eftudia hafta fatigarfe mucho. Deben dexarfe los libros an-
tes que engendren notable tedio , ó produzgan fenfible can-
fancio : porque en llegando á efte extremo , el eftudio
aprovecha p o c o , y daña mucho. En las circunftancias fe
peca, fi fe eftudia eftando la cabeza achacofa , ó quitando
fus horas al fue ño.
ip L a fegunda advertencia é s , que no fe exceda e»
comida , y bebida : cuya demasía ofenderá mas á los hom-
bres dados á las letras , que á los ocupados en otras co-
fas. La tercera, que fe interponga oportunamente el exerci-
cio corporal con el mental. Donde noto con Plutarco , que
el exercicio de la difputa es vnode loa mas vtiles que ay
para la f alud , y robuftéz de el cuerpo: porque en la con-
tención de la voz , y esfuercos de el pecho fe agitan no
los miembros externos, fino las entrañas mifmas, y par-
tes mas vitales. Oygafe el mifmo Plutarco : Ip/e quoti-
dianus di/putationis vfus , fi voce peragatuf , mira qu¡e-
dar» efi exercitatio , conducen* non fuium ad bonam valetu-
dinem , verum etiamad corporis robur. (lib. de Tuenda Bo-
na valetudine) Y poco mas á baxo : Cum vox fit agita-
tía /piritas non leuiler, nec in fuperficie ,fedveluti inipfo
fonte in ipfis vi/cerihus valen*, & calor em. auge t ,& fan*.
)
18o PROFESSION LITERARIA , 7

guinem fubtíiem reddit, & omnes purgat venas, & omnes


aberit arterias, humorem vero fuperjluum non finit erafefce-
re, ñeque concrefcere, qui fiecis in morem fubjidit in bis
eonceptaculis, quibus accipitur , & conficitur cibus. Grande
¡ventaja es de la proíefsion Efcholaftica, tener dentro de fu
(esfera vn exercicio tan vtil á la .fallid.
20 La quar.ta advertencia es , que alternen con el ef-
Studio algunas recreaciones honeftas : las quales conducen
510 folo á reparar las fuercas de el cuerpo, mas también,
l a s de el efpiritu : porque la.alegria.dá foltura ,,y vivacidad
al ingenio. Los Efcritores necefsitan mas de efte alivio ; y
¡entre eftos mucho mas los de genio melancólico.
21 L a vltima es , que íi fe puede, fe varíen los eilu-
elios en diferentes materias : Porque la variedad , aun mas
C n e f t o , que en las cofas materiales, deleyta el efpiritu, y
t o d o lo que le deleyta le conforta. Por cuya razón á vezes
l a letura de vn libro fuele fer alivio d é l a fatiga., que dio
la letura de otro. He dicho Si fe puede: porque el diver-
tir el entendimiento á materias diferentes ,. no es para to-'
d o s . Todos los efpiritus fon ya mas , ya menos limita-
d o s . Y algunos a y de tan eftrecha extenfion , que aunque
m u y hábiles para alguna determinada, facultad , íi quieb-
ren eftudiar d o s , les fucede lo que al otro de quien.
fe quenra , que olvidó la lengua Vizcayna , £

y no pudo aprender la
Caftellana...
A S T R O L O G I A JUDICIARIA;.

Y A L M A N A Q U E S ,

D I S C U R S O O C T A V O .

§»• L

P T ^ ^ € O pretendo defterrar de el- Mundo los


^ -Almanaques, h n o la vana emmacion'
$ L $ £ Í ^ § i de fus predicciones-: pues fin ellas tie--
^4'L%l\M n e
^
n u s
d i d a d e s , que valen por lo
vt 1

menos aquello poco que cueftan. L a de-'


vocion , y el culto fe interellan en la afsignacion de Fieftas, ;

y Santos en fus proprios dias : El comercio en la noticia


de las Ferias francas: L a Agricultura , y acafo también la-
Medicina, en la determinación délas Lunaciones. Efto es-
quante pueden fervir los Almanaques. Pero la parte judi-
ciaria queay en ellos, fin embargo de hazer fu principal'
fondo en la aprchenfion común, es vna apariencia oftcnto--
fc , fin fubftancia a l g u n a : - Y efto no folo en quanto predi-
ce los fuceílos humanos , que dependen de el libre alve-
drio ; mas aun en quanto feñala las mudancas de el tiempo,
ó varias imprefsiones de el Ayre.
2 Y a veo que en confideración'de efta propuefta , ef-
tán efperando los Aftrologos , que yo les condene al. pun-
to por faifas las predicciones de los futuros contingen-
tes, que trahen fus Reportónos. Pero eftoy tan lexos d e
elfo, que el capitulo por donde las juzgo mas defprecia-;-
felesesfer, ellas¡tan-verdaderas* .Cjue nos pro&oftican efj-
l8z ASTROLCGIA JuDTCIARIA,
tos judiciarlos, fi no vnos fuceflos comunes , fin determi-
nar lugares, ni perfonas , los quales coníiderados en ella
vaga indiferencia, feriamilagro que fakaifen en el Mundo?
Una íeñora que tiene en peligro fu fuña : L a mala nueva
que contrilla á vna Corte : Elfuílode los dependientes por
la enfermedad de vn gran Perfonage : El feliz arribo de
yn Navio al Puerto ; L a tormenta que padece otro : T r a -
tados de eafamientos, ya conducidos al fin, ya desbara-
tados •• y otros íucefíos de elle genero, tienen tan íegura
fu exiftencia , que qualquierapuede prom-fticarlos fin con-
fultar lasEftrdlas : porque tiendo los acaecimientos que fe
expreffan nada extraordinarios, y los individuos, fobre quie-
nes pueden caer , innumerables , es moralmente impofsi-
ble, que en qualquiera quarto de Luna no comprehendan á
algunos. A la verdad, con ellas. predicciones generales no
puede decirle , que fe pronostican futuros contingentes , fi-
no neceífarios ; porque aunque fea conti >gente que tal Na-
vio padezca naufragio , es moralmente neceílario, que entre
tantos millares , que fiempre eftan furcaiido las ondas, algu-
no peligre: y aunque fea contingente, que ta! P i n c i p e elle
enfermo , es moralmente impofsibie, que todos los Prin-
cipes de el Mundo en ningún tiempo de el año gozen en-
tera falud. Por efto vá feguro quien fin determinar indivi-
duos , ni circunftancias, al Navio.le pronoftica el naufragio,
al Principe la dolencia , y afsi de todo lo demás.
3 Si tal vez feñalan algunas circunftancias, obfcure-
cen el vaticinio en quanto á lo fubftanciai de eí acaeci-
miento , de modo, que es aplicable á mil f u á fía, diferen-
tes ; vfando en efto de el mifmo Arte, que practicaban en fus
refpucílas los Oráculos , y el mifmo de que fe valló el Fra-
nus Noftradamo en fus predicciones, como también eí que
fabricó las fupueftas profecías de Malachias. Afsitn site ge-
nero de Pronósticos halla cadavnolo que quiere : deque
tenemos vn reciente, y feñalado exemplo en la trille bor-
rafca , que poco ha padeció ella Monarchia, donde fegun la
diviíionde los afectos, en la mifma profecía de MaLchias,
correfpondieiite al prefente Reynado , vnos hallaban aílegu-
«ado el Cetro de Eípaña a Carlos V I . Emperador de Ale-
ma-
DISCURSO OCTAVO. 183
mania, y otros al Monarca, que por difpoficion de el Cielo
ya fin, contingencia alguna nos domina,

$. II.
•4 "O^
R0 m a
P d e n hazer los pobres AftroíóJ
s ue

X gos , fi todos los Aftros que examinan no les


dan luz para mas ? No me haré yo parcial de el incompara-
ble Juan Pico Mirandulano , en la opinion de negar á
los cuerpos Celeftcs toda virrud operativa fuera de la luz , y
el movimiento - pero conflantemente aflegnraré ,,que no es
y

tanta fu actividad quanta pretenden los Aítrologos. Y de-


biendo concederfe lo primero,que no rige el Cielo condomi-
nio defpotico nueftras acciones ; efto e s , necefsitandonos
á ellas, de modo,que no podamos refiftir fu influxo : pues
con tan violenta bateria iba por el fuelo el al vecino , y no
quedaba lugar al premio de las acciones buenas , ni al caf-
tigo de las malas : pues nadie merece premio , ni caítigo
con vna acción á que le precífa el C i e l o , fin que él pue-
da evitarlo : Digo, que concedido efto , como es tuerca con-
cederlo , ya no les queda á los Aftros para conducirnos á
los fuceaos , ó profperos, 6 adverfos, otra cadena, que la de
las inclinaciones. Pero fuera de que el impulioque por efta
parte fe le da al hombre, puede refiftirlo fu libertad : aun
quando no pudiera , es inconexo con el iuceífo que predice
el Aítrologo..
5 Pongamos el cafo , que á vn hombre,, examina-
do fu horoícopo , fe le pronoftica que ha de morir en la
guerra. Qué inclinaciones pueden fingirle en eñe hombre,
que le conduzgan á efta defdicha ? Imprimal'e norabuena
Marte vn ardiente defeo de militar, que es quanto Marte
puede hazer puede fer que no lo logre , porque á muchos
que lo defean fe lo eftorva , ó el imperio de quien ios d o -
mina , ó algún otro accidente. Pero vaya ya á la.guerra,,
no por elfo morirá en ella : pues no todos , ni aun ios mas
que militan ,, rinden la vida á los rigores de Marte. Ni aun
los riel gos que trahe configo aquel pelígrofo e m p l e o l e
firvende nada para fu predicción al Aftrologo : pues efte
P°5
184 ASTRO LOGIA JÜDICIA'RIA,
por lo común no iblo pronoftiea el genero de muerte dá
aquel infeliz, mas .también el tiempo en que ha de fuce-
.'der : y los peligros de el que milita no eftán limitados á
aquel tiempo., lino eftendidos á todo tiempo en que aya
combate.
6 Y veis aqui fobre efto vn terrible embarazo de
ía J u d i c i a r i a n o sé fi bien advertido hafta aora. Para que
el Aftrologo conozca por los Aftros que vn hombre por tal
tiempo ha de morir en la batalla , es menefter que por los
•mifmos Aílros conozca que ha de ayer batalla en aquel
tiempo ; y como efto los Aftros no pueden decirfelo , fin
moftrarle .como influyen en ella, ( pues es conocimiento de
.el efecto por la caufa) es coníiguiente , que efto lo vea
el Aftrologo. Aora : como el dar la batalla es acción libre
en los Gefes de ambos partidos , ó por lo menos en vno
de ellos , no pueden los Aftros influir en la batalla > lino in-
clinando á ella á los Gefes, Por otra parte efta inclinación
de los Gefes no puede conocerla el Aftrologo, pues no exa-
mino el orofeopo de ellos corno fuponemos , y de alli de-
pende en fu fentenciatoda la conftitucion de las inclinacio-
nes , y toda la ferie de los fuceflos.
7 Aun no para aqui el quento. Es cierto que el
Gefe , influyan coniOjquieran en él los Aftros , no determi-:
nará dar la batalla , lino en fupoficion de aver hecho ta-
les , ó tales movimientos el enemigo , y acafo de aver conf-;
pirado en lo mifmo algunos votos de fu confejo , de ha-
Uarfe con tuercas probablemente proporcionadas, y de otras
muchas circunítancias, cuya colección determina á femejats-
tes deciísiones : íiendo infalible , que el. Caudillo es induci-
do al combate por algún motivo , faltando el qual fe cftu-:
.viera quieto , ó fe retirara. Con que es menefter que to-
das- eftas difpoficiones previas , fin las quales no fe tomará
la refolucion de batallar por mas fogofo que le aya hecho
Marte al Caudillo , las tenga prefentes , y las k a en las Ef-
trellas el Aftrologo. Pafsémos adelante. Eftas mifmas cir-
cunftancias , que fe prerequieren para la refolucion de el
choque, dependen neceífaciamente de otras muchas accio-
nes anteriores todas libres. El, teaec §1 campo mas 6 menos
?
DISCURSO OCTAVO. ISJT
gente , depende de la voluntad de el Principe , y mas ,"0
menos cuidado de los Miniftros : Los movimientos de el
enemigo de mil cireunftancias previas , y noticias verda-
deras , ò faifas que le adminiíiran : Los votos de el Confe-
jode Guerra, nacen en gran parte de el genio délos que v o -
tan : Y retrocediendo m a s , el mifmo rompimiento de la
guerra entre los dos Principes , fin el qual no llegara el
cafo de darfe ella batalla , en quantos acaecimientos an-
teriores , todos contingentes, y libres, fe funda ? De modo,
qu; efta es vna cadena'de infinitos eslabones, donde el v l -
timo , que es la batalla, fe quedara en el citado de ia pof-
íibilidad , faltando qualquiera de los otros. De donde fe
colige, que el Aftrologo no podrá pronunciar nada en or-
den à ette fuceíío, fino es que lea en las Eftrellas vna dilata-
difsima Hiftoria. Y ni efta Hiftoria eftà eferita en los Aftros,
ni aun quando lo eftuviera, pudieran leerla los Aftrologos.
'No eftà eferita en los Aftros : porque ellos folo pueden in-
ferir tantas operaciones como fe reprefentan en ella, iuflu-;
yendo en las inclinaciones de los actores y efta ilación
precitamente hade flaquear : porque entre tanto numero de
fugetos, es totalmente inverifimil, que alguno , ò algunos
no obren contra la inclinación , que conduce para que fe dà
la batalla, ò por dictamen de conciencia , ò por razón de
•conveniencia, ò por el contrapefo de otra inclinación mas
poderofa ; como fucede en el avaro vengativo , que por,
mas que la ira le incite , dexa vivir à fu enemigo por no
arriefgar fu dinero : y vna operación fola que falte de tan-
tas à que los Aftros inclinan , y que fon precitamente ne-
celfarias para que llegue el cafo de darfe la batalla , no fe,
darà jamás.
8 Tampoco aunque toda aquella larga ferie de fu-
teflos , y acciones , que precitamente han de preceder el
combate, eftuviera eferita en las Eftrellas , fuera legible
por el Aftrologo. L a razón es clara : porque cafi todos
elfos íuceílos , y acciones dependen de otros fugetos,
cuyos horofeopos no ha vifto el Aftrologo ( pues fupone-
tnos que folo viò el horofeopo de aquel á quien pronof-
tjca la muerte en la batalla ) y no viendo el hoíofcopo
J o n i o l¿ ' "' ~ Aj de
ÁSTROLOGIA JuDICXARIÁ,
de los fugetos , no puede determinar nada la Judiciaría
de fus acciones.

§. III.
| ^SFUERCQ efto de otro modo. Quando el Aftro-
X_L l°g°j vifto g
l horofcopo de Juan le prono-ftica
muerte violenta, es cierto que los Aftros no pueden repre-.
fentarle. efta tragedia, fi. no porque la contienen en s i , co-
mo caufas fuyas. Pregunto aora : Como caufarán los Aftros
efta muerte ? No influyendo derechamente en la acción de
el homicidio : porque como fon caufas necefíarias, y no
libres , no feria la acción de el homicidio contingente , fino
neceñaria; y afsi , no podria evitarla el agreífor. Tam-
poco determinando la voluntad , y brazo de el homicida;'
porque fe feguiria el mifmo inconveniente de fer movidas
neceífariamente á la acción las potencias de efte : por cuya
razón afsientan los Theologos , que fi la primera caufa
obraífe neceflariamente , las fegundas no podrian obrar con
libertad. Luego folo refta , que los Aftros influyan en
•aquella muerte violenta , imprimiendo alguna inclinación
que conduzga á ella. Pero efta inclinación , en quien la han
de. imprimir ? N o en Juan : porque efte-nunca tendrá in-
clinación á fer muerto violentamente * ni el que le infpi-í
ren vn genio colérico , y provocativo haze al cafo : por-
que los mas de eftosefpiran de muerte natural, como afsi-
mifmo muchos pacificos mueren á golpe de cuchillo. Con
que quedamos en que efta inclinación fe la han de imprimir
al matador. Pero efte con toda fu inclinación á matar á
J u a n , es muy pofsible que no pueda executarlo. Es muy
pofsible también, qué el miedo de el caftlgo, qué el ritf-
gode fus bienes, qué el amor de fus hijos le detenga. Mas
concedámosle vna inclinación tan violenta , que aya de
fuperar todos elfos eftorvos, y aun facilitarle los medios.
Como puede el Aftrologo conocer eífa inclinación de el
matador, cuyo horofcopo no havifto , fino folo de el que
ha de fer muerto ? -Y por otra parte los Aftros, que folo
por eíTe medio han de caufar la muerte , folo pueden répren
fen.1
DISCURSO OCTAVO. 187
fetìtarfela al Aftrologo en quanto contienen la inclinación
de el matador en fu influxo.
10 Y que no depende , ni el genero, ni el tiempo
de la muerte de las hombres de la conftitucion de el Cielo,
que reyna quando nacen, fe vé claro en que mueren mu-
chifsimos á vn tiempo, y de vn mifmo m o d o , los quales
nacieron debaxo de afpecios muy diferentes. Por ventura
(como dice bien }uan Barciayo) quando la tormenta precipi-
ta al fondo del Mar vna grande nao , y perecen todos los que
iban en ella , fe ha de p¿ufar que todos aquellos infelices
nacieron debaxo de vn fyftema celefte, que amenazaba nau-
fragio , difponiendo los miímos Aífros , que folo fe juntaf-
fen en aquella nave , los que avian nacido debaxo de aquel
fyítema? Buenas creederas tendrá quien lo tragare. Antes
es cierto , que en los mifmos puntos de tiempo , en que
nacieron ellos hombres, nacieron otros muchilsimos en el
Mundo , que tuvieron muerte muy diferente. En la guerra,
llamada fervil, donde confpiraron á recobrar con el yerro
la libertad todos los Efclavos de los Romanos , murieron,
finque fe íalvaífc , ni v n o f o l o , quantos feguian las V a n -
deras de el Paítor Athenion , que eran algunos ño pocos
millares. Quien dirá , que todos eítos rebeldes nacieron
debaxo de tal conftitucion de A f t r c s , que los deítinaba á
eífa defdicha ? Y mas quando los mifmos Aftrologos afsien-
tan , que fon pocos los afpectos que pronoítica.n muerte
en la Quantos nacerianen el Mundo al mifmo tiemV
po qu- aquellos Efclavos , los quales murieron en fu pro-
prio lecho, y ni aun tomaron jamás las armas en la mano!

§. IV.
11 T A correfpondencia de los, fuccífos á algunas
predicciones , que fe alega á favor de los
Aftrologos, eftá tan lexos de cftablecer fu arte , que antes
fi fe mira bien , la arruina. Porque entre tantos millares de
predicciones determinadas , como formaron los Aftrologos
de mil y ochocientos años à eftà'parte, á penas fe tpen-
Un veinte , ò treinta que falieffcn verdaderas : L o que,
Aaz mucf-
I 88 AsTROLÓGiÁ JUDICÍARIÁ;
mueftra qite fué cafual, y no fundado en reglas el acierto";
Es feguro , que fi algunos hombres vendados los ojos vn
año entero , eftuvielfen fin ceñar difparando flechas al vien-
to j macarían algunos paxaros. Quien ay ( decia Tullo }
que flechando aun fin arte alguna todo.el dia , no dé ral
yez en el. blanco? Quis e/i qui totum diem iaculans , non
¿iliquando collimet ? Pues efto es lo que fucede á los Aftro-
logos. Hechan Pronoílicos á mentones, fin tino, y por
caiualidad vno , u otro entre miliares logra el acierto Ne-
ceíTarlo es ( decia con agudeza , y gracia Séneca en la per-
íbna de Mercurio , hablando con la parca ) que los Aíiro-
logos acierten con la muerte de el Emperador Claudio,
porque defde que le hizieron Emperador , todos ios años,
y todos los m;íes felá pronollican : y como uo es inmor-
tal , en algún año , y en algún mes ha de morir : Patere
M¿tbem,iticos aliqu.mdo vemm dicere qui illum poffquam
t

princeps faftiis eji ómnibus annis , ómnibus menjibus ejfe-


•rttnt. (in Ludo de Marte Claudij Cdtfnris )
12 Efie methodo , que es feguro para acertar algu-
na vez , defpues de errar muchas , no les aprovecho á los
Aftrologos, que quifieron determinar el tiempo en que avia
de rairir el Papa Alexandro V i . por no aver fido confian-
tes en él. Y fué el chifle harto graciofo. Refiere el Miran-
dulano, que formado el horofeopo de éfte Papa , de co-
mún acuerdo le pronofticaron la muerte para el año de
' 1 4 9 5 . fallo de aquel año Alexandro fin riefgo alguno : con
que los Aílrologos le alargaron la muerte al año íiguiente,
de el qual aviendo efeapado también el Papa , confecuti-
vam ente baila el año de 1 7 0 2 . cafi cada año le pronuncia-
ban la fatal fentencia. Finalmente viendofe burlados tantas
v e z e s , en el año de 1 7 0 ] . quifieron enmendar la plana , to-
'mando diftinto rumbo para formar el Pronoílico, en vir-
tud de el qual pronunciaron , que aun le reliaban al Papa
muchos años de vida. Pero con gran confufion de los
Añrologos, murió el mifmo año
i de 1 7 0 3 .

£• Vi
DISCURSO OCTAVO; iSp

§. V.
f jf. \ • HADO y que algunas famofas predicciones , qu^
J~\_ fe jactan por verdaderas , con gran funda-;
mentó fe pueden reputar inciertas , ó fabulofas. De Leon-i
ció Bizantino , Philofofo , y. Mathem.itico fe refiere , que
predixo á fu hija Athenais , que avia de fer Emperatriz , y¡
por eífoen el teftamento , repartiendo todos fus bienes en-:
tre dos hijos que tenia , á ella no le dexó cofa alguna. P e -
ro los mejores Autores nada dicen de el Pronoftico; si fo-
lo que L e o n c i o , en confideracion de la fingularifsima be-
lleza , peregrino entendimiento , y ajuftada virtud de
Athenais , conocía que no podia menos de fer codiciada
para efpofa de algunos hombres acomodados , teniendo
harto mejor dote en fus proprias prendas , que en toda
la hazienda de fu padre , y por efto fue olvidada en el
teftamento , lo que ocafiouó fu fortuna : porque yendo a,
quexarfe de el agravio á laPrincefa Pulcheria , hermana
deTheodofio el Segundo, enamoro tanto á los dos Prin-
cipes, que Pulch ria luego la adoptó por hija , y defpues
el Emperador la tomó por efpofa.
14 De el Aftrologo Afcletarion , dice Suetonio,
que predixo, que fu cadáver avia de fer comido de perrosr
Lo quallucedió, por mas que Domiciano, á quien el mif-
mo Afcletarion avia pronofticado fu funefto éxito , procu-
ró precaverlo , para defvanccer el pronoftico de fu muerte,
falfificando el .que Afcletarion avia hecho de aquella cir-
cu'nftancia de la fuya propria: porque aviendo , luego que
mataron al Aftrologo , arrojado de orden de el Emperador
el cadáver en vna grande hoguera , para que promptamen-
-tc fe deshiziefle en ceniza , fobrevino al punto vna abun-
dante lluvia, que apagó el fuego, y no con menos puntua-
lidad acudieron los perros á cebarle en aquella victima in-
vtilmente Sacrificada á la Seguridad de el Principe fmgrien-
to. Pero todo efte hecho , dice el jefuita Dechales , es muy
fofptchofo : porque no fe feñala en libro alguno de los
que tratan de la Judicaria conftelacion, afpecto, ó the'ma
LOO ASTRO LOGIA JUDICIARIA,
celeíle , á quien atribuyan los Aftrologos tal circunftaa-;
cia , 6 eípecie de. muerte.
15 De el célebre Lucas Gaurico cuentan algunos
Authores, que confultado de Maria Mediéis, Reyna de Fran-
cia, íbbre el hado de íii hijo Enrico II. pronofticó con har-
t a individuación fu muerte , diciendo, que morirla da la he-
rida que en vna juila avia de recibir en vn ojo. Pero el cita-
do Dechales , y Gabriel Naude , lo refieren muy al con-
trario , diciendo, que antes bien erró quanto pudo errar la
predicción , pronofticaudole á aquel Principe muerte na-
tural , y tranquila defpues de vna vida muy larga. Coma
erro afsimifmo pronofticando á Juan Bentiboilo la expul-
íion de Bolonia , y defignando á Francifco II. el año de fa
muerte.
i5 De otro Aftrologo fe dice averie vaticinado á
Maria de Mediéis, que avia de morir en San Germán : Lo,
qual fe cumplió , afsíftiendola en aquel trance vn Abad lla-
mado juliano de San Germán. Pero fuera de que efto no fué
verificarfe. la profecía , pues no aviafidoefla la mente de el
Aftrologo , fino que avia de morir en el Lugar , ó Monafte-
rio.de San Germán : ó no huvo tal vaticinio , ó fi le huvo
no fe fundó en las reglas de la Tudiciaria : pues en los libros
Aftrologicos no fe feñalan afpeóios fignificadores de los lu-
gares , que han de fer theatros de las tragedias , ni de los
nombres délas perfonas que han de intervenir en ellas: ni
cfto podría fer fin crecer á inmenfo volumen los preceptos
~de cfte Arte.
17 Acafo no ferian mas verdaderas , que las expref-
fadas, la predicción de Spúrina á Cefar, la de los Chaldeos
á Nerón , y otras femejantes , que por la mayor parte
recibieron los Autores que las eferiven de manos de el vul-
go. Y bien fe fabe que en el común délos hombres es bien
frequente, defpues de vifto el fucceífo, hallar alufion á él en
vna palabra que anteriormente fe dixo fin intento, y aun fin
.¡lignificación , y poco á poco mudando, y añadiendo llega?
á poneria en parage de que fea vn pronofticó perfecto.
De sito tenemos mil exemplos
cadadia,
£ VI.
DISCURSO OCTAVO. i pi

§. VI.
18 T J N A , ù otra vez puede deberfe el acierto de
las predicciones, no À las Eftrellas , fino
à politicas , Y naturales congeturas~, governandofe en ellas
los Aílrologos, no por los preceptos de fu arte, de que ellos
mifmos hazen bien poco aprecio , por mas que los quieren
obífentar al vulgo ; sì por otros principios, que aunque fa-
libles , no fon tan vanos. Por la fituacion de los negocios
de vna República , fe pueden congeturar las mudancas,
que arribarán en ella. Sabiendo por experiencia , que raro
.Valido ha logrado confiante la gracia de fu Principe , de
qualquiera Miniftro alto , cuya fortuna fe ponga en queftion,
fe puede pronunciar la caída con bailante probabilidad. Y;
con la mifma À vn hombre de genio intrepido, y furiofo,
fe le podrá amenazar muerte violenta. Por la fortuna, genio,
temperamento, è induílria délos padres , fe puede diieur-
rir la fortuna, falud , y genio de los hijos. Es cierto que por
elle principio fe dirigieron los Aílrologos deTtalia, con-
futados por el Duque de Mantua fobre la fortuna de vn re-
cien nacido, cuyo punto natalicio les avia comunicado. En
la noticia que les avia dado el Principe fe expreffaba, que el
reéfen nacido era vn baflardo de fu Cafa : cuya circunílan-
cia determinó á los Aílrologos à vaticinarle Dignidades
Ecleííaflicas : ííendo común, que los hijos naturales , y baf-
tardos de los Principes de Italia figan elle rumbo ; y aisi, en
eíla parte fueron concordes todas las predicciones , aunque
difeordes en todo lo demás. Pero el cafo era, que el tal bat-
tardo de la Cafa de Mantua era vn M u l o , que avia nacido
en el Palacio de el D u q u e , al qual con bailante proprie-
dad fe le DIO aquel nombre , para ocasionar "á los Aílro-
logos con la confulta la irrifsion , que ellos merecieron con
la refpuefta.
19 Algunas vezes las mifmas predicciones influyen
en los túcenos : de m o d o , que no fucede lo que el Astrolo-
go predixo , porque él lo leyó'en las Eftrellas; antes fin
aver villo el nada en las Eftrellas, fucede felo porque el
lo
I 02 ÁSTROLÓGIA JUDICIARIA,
lo predixo. El que fe vé lifongeado con vna predicción fa;
vorable , fe arroja cor» todas fus fuercas á los medios , yá
de la negociación, yá de el mérito para confeguir el jiro,
fetizado afcenío, y es natural lograrle de efle modo. Si á
vn hombre le pronoftica el Aftrologo la muerte en vn de-
fafio , fabicndoio fu enemigo le faca al campo , donde eñe
batalla con mas esfuerco, como feguro de el triunfo, y aquel
lánguidamente , como quien efpera la execucion de la fatal
fenteíicia : al modo que nos pinta Virgilio el defafio de
T u r n o , y Eneas. Creo que no huvicra logrado Nerón el
imperio , fi no J e huvicran dado effa cfpcranca á fu madre
Agripina los Aftrologos : pues fobre efie fundamento aplicó
aquella ardiente , y politica Princefa todos los medios.
A^cafo Cefar no muriera á puñaladas , fi los matadores no
tuvieran noticia de la predicción de Spurina , que les aífegu-'
raba aquel dia la empreffá. L o mifmo digo de Domiciano,
y otros. Últimamente puede también tener alguna parte en
eftas predicciones el demonio, el qual fi los futuros de-
penden precifamente de caufas neceifarias , ó naturales,
puede con la comprehenfion de ellas antever los efectos:
pongo por exemplo la ruina de vna cafa , porque penetra
mejor que todos los Arquitectos de el Mundo el defecto de
fu contextura , ó porque fabe que no bafta fu refiften-:
cia á contra-pefar la fuerca de algún viento impetuofo,
que en fus caufas tiene previfto : y de aquí con bailante
probabilidad puede por configuiente abancar la muerte de
el dueño , fi es por genio retirado á fu habitación. Aun en
las mifinas cofas que dependen de el Ifcre alvedrio , puede
lograr bailante acierto con la penetración grande que tie-
ne de inclinaciones, genios, y fuercas de los íugetos, y
deTo que él mifmo ha de concurrir al punto deftinado con
fus fugeftiones. Por efto fon muchos , y entre ellos San
Auguftin ( deCivit. Dei, ¡ib. 5. cap. 9.) de fentir , que algu-
nos que en el Mundo fueuan proíeífar la Judiciaria , no fon
dirigidos en fus predicciones por las Eftrellas , fino por el
oculto inftinto de los efpiritus malos, Y o convengo ea
que no fe deben diícurrir hombres de femejante carácter
& $ r e los Aftrologos Cja&ojteos,,, Sin e/nbargo de que'
,. DISCURSO OCTAVO.". 193
'Gerónimo Cirdano , que fué muy picado de la Judiciaria¿
tío dudó declarar , que era'infpirado muchas vezes de vn c£r
piririb q familiarmente le afsiftia.
i i e

§. V I L
zo " F 7 S T A B L E C I D O ya que no pueden determinar co-,
¿TL fa alguna los Aftrologos en orden á los fu-
ceífos humanos ., pafsémcs á defpojarlos de lo poco que
baila aoiv. les ha quedado á falvo : Ello es la eftimacion de,
que por lo menos pueden averiguar los genios , é inclina-
ciones de los hombres , y de aqui deducir con inficiente pro-
babilidad fus coftumbres'. El arrancarlos de cíla poííefsio.n
parece ardu > ; yfinembargo es facilifsimo.
21 E l argumento , que comunmente fe les haze en
cíla materia , e s , que no pocas vezes dos gemelos, que na-
cen á vn tiempo mifmo , defeubren defpues ingenios , Ín-
doles , y cofiumbres diferentes : como fucedib en J a c o b ,
y Efau. A que refponden , que moviendofe el Cielo con
tan eftraúa rapidez , aquel poco tiempo , que media
entre la falida de vno , y otro Infante á la luz , bafta
para que la pofitura, y convinacion de los Aftros fea dife-
rente. Pero fe les replica : Si es menerfter tomar con tanta
precifion el punto natalicio, nada podrán determinar los
Aftrologos por el horofeopo : porque no fe obferva , ni fe
puede obfervar con tanta exactitud el tiempo de el parto.
No ay relox de Sol tan grande , que moviendofe en él la
fombra por vn imperceptible efpacio , no abance el Sol
entre tanto vn gran pedazo de Cielo: y efto aun quando
fefupouga fer vn relox exactdfsimo , qual no ay ninguno.
Ni aun quando afsiftieran al nacer c! niño Aftronomos muy,
hábiles con quadrantes , y aftrolabios , pudieran deter-
minar á punto fixo el lugar que entonces tienen los Pía-"
netas ; ya por la imperfección de los inftrumentos , ya
por la inexactitud de las tablas Aftronomicas : pues, co-
mo conficífan los mifmos Aftronomos , hafta aora na¡
fe han compuefto tablas tan exactas en feñalar los lu-;
gires de los Planetas , que» tal vez no yerren hafta-chvi
., Jomo J , 13b» ' ~ CO a
if?4- ASTROLOGIA JÜDICIARIÁ,
co , ò feis grados , efpecialmente en Mercurio , у VÉJ
mis.
22 Masi Girando los Planetas con tanta rapidez, щ
que no ay duda , es cierto que en aquel poco tiempo que
tarda en nacer el Infante defde que empieza à falir de el
clauftro materno, hafta que acaba , camina el Sol muchos
millares de leguas, Marte mucho mas , mas aun Júpiter,
y mas que todos Saturno. Aora fe pregunta : Aun quando
el Aftrologo pudiera averiguar exaétifsimamente el pun-
to de tiempo que quiere , y el lugar que los Aftros ocu-
pan , que lugar ha de obfervar ? Porque efte fe varia fenft'
blemente , entretanto que acaba de nacer el Infante. Aten-
derá el lugar que ocupan quando faca la cab eza ? O quan-
d o defcubre el cuello? O quando faca el pecho ? O quan-
do yá fallò todo lo que fe llama el tronco de el cuerpo ? 0
quando yá hafta las plantas de los pies fe aparecieron?
"Voluntario ferá quanto á efto fe refponda. L o mas veriíi-
mil ( fi eflo fe pudiera lograr, y la Judiciaria tuviera alguh
fundamento ) e s , que fe debían formar fuccefsivamente di-
ferentes horofcopos ; vno para la cab eza, otro para el pe-
cho , y afsi de lo demás : porque fi lo que dicen los ]u-
.diciarios de losinfluxos de los Aftros enei punto natalicio
•fuera verdad , avian de ir fellando fuccefsivamente la
buena , ò mala difpoficion de inclinaciones, y facultades,
iafsi como fuellen faliendo á luz los miemb ros , que les fir-
ven de órganos : y a f s i , quando falielíe la cabeza, fe avia
de imprimir la b uena , ò mala difpoficion para difcurrir:
quando el pecho, la difpoficion para la ira , ò para la man-
fedumbre, para la fortaleza, Ò para la pusilanimidad. Y afsi
de las demás facultades á quienes firven los demás miem-,
bros. Pero ni eflfa e x a J a t u d , como fe ha dicho es pofsib le,
ni los Aftrologos cuidan de ella.
23 Y fi les preguntamos , por que los Aftros impri-
men eíTas difpoficiontís quando el Infante nace , y no anti-
-ciparon eíTa diligencia mientras eftab a en el clauftro mater-
n o , ò quando fe animò el f e t o , ò quando fe DIO principio
à la grande ob ra de la formación de el homb re, ( lo que
parece mas ftafaral} nada, refponden que fe pueda oír. Por'
""' ' ~ . v " . . . . . . . .. t ^ u ( .
..DISCURSO OCTAVO, ip?
<jíié decir, que aquella pequeña parte de el cuerpo de la,
madre, interpuefta entre el Infante , y los Aílros , les eftor-
va á ellos fus influxos , merece mil carcajadas : quando
muchas brazas de tierra interpuellas no les impiden la ge-
neración de los metales. Penfar , como algunos quieren
perfuadir ,. qué por el tiempo de el parto fe puede averi-
guar el de la .generación , es delirio : pues todos faben,
que la naturaleza en ello no guarda vnmethodo confiante:
y aun fuponiendo, que el parto fea regular, ó novimeftre,
yaria no folo horas , fi no dias enteros.
24 El cafo es , que aunque fe formauen fobre el tiem-
po de la generación las predicciones , no falieran mas ver-
daderas. Refiere Barclayo en fu Argenls , que vn Aílrolo-
go Alemán, anfiofode lograr hijos muy entendidos , y há-
biles , no llegaba jamás á fuefpofa, fino precitamente en
aquel tiempo en que veía los Planetas difpueílos á imprimir
en el feto aquellas bellas prendas de el efpiritu que defeaba.
Quéfucedió? T u v o elle Aílrologo algunos hijos, y todos
fueron locos.
25 Ni aun quando los Aílros huvieften de influir las
calidades , que los Genetliacos pretenden , en aquel tiempo
que ellos obfervan, podrían concluir cofa alguna. L o pri-
mero , porque fon muchos los Aílros , y puede vno corre-
gir , ó mitigar el influxo de otro , y aun traílornarle de
el todo. Aunque Mercurio quanto es de fu parte incline al
recien nacido al robó , de donde fabe el Aílrologo , que
no ay al mifmo tiempo en el Cielo otras Eftrellas convina-
das , de modo, que eftorven el mal influxo de Mercurio?.
Comprehende por ventura las virtudes de todos dos Aílros,
íegun las innumerables convinaciones , que pueden tener
entre sí ? L o fegundo , porque aun quando efto fuera com-
prehenfible , y de hecho lo comprehendierá el Aílrologo,
aun le reliaba mucho camino que andar; efto es , faber co-
mo influyen otras muchas caufas inferiores, que concur-
ren con los Aftros , y con harto mayor "irtud que ellos,
Á producir eífas difpoficiones. El temperamento de los pa-
dres , el régimen de la madre, y afeaos que padece mien-
tras confe/va el feto EN fus entrañas, los alimentos con que
I p¿> AstROLGGlA; JUDIGIARÍA,
defpues le crian, el clima, en que nace , y v i v e , fon prmel.} [
pios que concurren , con incomparablemente mayor ¡fueren
que todas las Enredas, á variar:el temperamento, y quaiida-
áes de el niño: dexando ;i parte lo que la ¡educación ,->y Jfco,
ene el vio recto, ¡ ó perverfo de las feis cofas ¡no naturales
pueden hazer. Si tal vez vna enfermedad baila á mudáis
yn temperamento , y defttuir el vfo de alguna .facultad ¡ dei
el Aím-a , como el de la memoria, por mas que fe empéñete
todos los Aftros en confervar fu hechura qué no harán
y

tantos principios juntos , como hemos expreííado ? Y pues-,


los Aftrologos no confideran nada de efto-\ y* por la mayo?
parte les es oculto , nada podrán deducir por el horof-i
copo en orden á coílumbres ,.. inclinaciones , y habilidad
des , aun quando les concedieñemos, todo lo demás qu$
pretenden, >
¡ .

§. VIII.
o¡6 K L a verdad quanto hafta aquí fe ha difcurrH
XJL. do contra los Genetliaeos , poco les impor-i
'ta á l o 5 c o m p o n e d o r e s . d e Almanaques: porque ellos, co»;
rao yá fe advirtió arriba, fe contentan con vnas prediccio*
•síes vagas de fuceífos comunes, que es moralmente impof-
fí-ble dexar de verificarfe en algunos individuos : Y quak
/ quiera, podrá formarlas igualmente feguras , aunque no
lepa , ni aun los nombres de los Planetas.' El año de diei
fué celebradifsima vna predicción de el Gt>tardo , que de-
cía no fe q u e d e vnos Períonages cogidos en ratonera,'
'Como muy adequada á vnfuceifo , que ocurrió en aquel
tiempo. Y o apollaré que qualquiera. que. fupieíTecon pun>
dualidad todas las tramas politkas de los Reynosde Euro*-
pa , en qualquiera Lunación hallar ia. varios Perfonages ce*
«idos en eftas ratoneras Metaplioricas .¿\.üendo> bien fre-
cuente ••hallarfe forprendido el golofodé mejorar fu fortu^
« a , cnel mifrno aétode arrojarse- ai cebo de fu ambición.
Y quando a-y guerras *, de qualquiera que es cogido-en- vna
embofeada, fe pued^.decir con-igual prúpriedad que cayo, 2

¿n Ja ratonera. : <y,, . .:

• • • i •
Disctóo ^OCTAVO. • fpj
'27 i; Pero i o s cofas»rto!Srefiáart • que examinar en los
¡Almanaques, que fon el¡ J tiicio'»©é-neraT cíe el a ñ o , y las
: !

predicciones particulares de las variar imprefsiones de el Ay-¡


1

re, por Lunaciones, y días,


?! 2 8 En quanto á lo primero , en'fabíendofe , quÉ
todo el fynema , e n que fe funda eíte PrOnoftico, es arbi-
trario , y todos los preceptos , de que confia , fundados eri
el antojo de los Aílrologos , efíá convencida fu vanidad»
Las doze Cafas en que dividen la esfera no fon m a s , ni me-
nos , porque ellos lo quieren afsi ; y fue harta efcafez fu-I
ya no aver fabricado en el Cielo mas que vna corta Aldea-j 1

quando , fin' cortarles mas , pudieron edificar vna gran


Ciudad, El orden de eftos domicilios, de modo, qué el pri-
ifiero fe coloca á la parte de el Oriente, debaxo de el Orizon-
te , y afsi van profiguiendo las demás debaxo de el Orizon-i'
te, hafta que lafeptima fe aparece fobre él en la parte Oc-:
cidental y las reliantes continúan el circulo hafta la parta
y

Oriental defcubierta, todo es antojadizo. Las lignificaciones


de ellas C a f a s , y de los Planetas en ellos fon puras, lignifica-
ciones ad placitum. Es cofa laítirnofa ver las ridiculas ana-;
logias de que fe valen para dar razón de eífa3 lignificaciones.;
De modo, que en todo ,, y por todo eftas Cafas fe conftruye-
ron fin fundamento alguno, ai fin como fabricas hechas en él
ayre. Qué diré de las Dignidades yá síFenciales, ya ac-
y

cidentales de los Planetas ? De los grados de fortaleza', ó


debilidad, que les atribuyen en diferentes pofituras ? B e
fus exaltaciones , fus triplicidades , fus afpecios ? De ios
dos domicilios diurno , y noíturno, que lesfeñalan , excep^-
ruando al Sol , y la Luna ( no valiéndole ál \Sol fer el
grande Alquimilla, que produce tanto oro para redimirle
de la pobreza de no tener masque vna Cafa ; y lo mifmo
digo de la Luna. , á quien atribuyen la producción de la
plata?) de la grande difsimiikud de in£üxós,fegun fe colocan
los Planetas- en diferente^ Signos , y fegun fe conlideran
,yá rectos , yá obliquos , directos , retrógrados , 6 elta-i
clónanos? Y toda la demás barahunda imaginaria de
f , Áupuefios eftablecidos por
capricho? ' '•
Ip 8 AsíROLOGlA JU'D'lClARlAf

§. IX. : A

2p A H Á D E S E fobre efto , que no concuerdan los Af-.'


J~\ trologos en el methodo de erigir los chemas
celeftes , de donde dependen en vn todo los Pronofticos,
Los Árabes, Hrmico , y Cardano , figuieron el mechodo
délos antiguos Chaldeos , que fe llama Equable; El Au-
tor de el Alcavitzio invento otro. Otro Campano. Y nin-
guno de eftos tres fe figue oy comunmente ; fino el que in-
vento Juan de Regiomonte, que fe llama Methodo Racio-
nal. En que fe debe advertir, que el Planeta mifmo , que
erigiendo el thema fegun vn methodo, fe halla en vna Cafa
donde promete buena fortuna , erigiendo el thema fegun
otro methodo, fucede encontrarfe en otra Cafa, donde fig.
niñea muy adverfa fuerte. Y por donde fabriamos , quai
methodo era el mas acertado , aun quando cupieffe acier-
to en efta materia ? Lo que fe colige evidentemente de
aqui, e s , que las reglas de la Judiciaria fon arbitrarias
•Codas.
¡o Mas: Los mifmos profeflores de elle Arte convie-
nen en que fus reglas folo fe fundan en la experiencia: por-
que no pudiendo aver razón alguna que demonftraffe á
priori, como dicen los Dialécticos , que influxos tiene efta,
o aquella convinacion de los Planetas, folo fe pudo facar
«fto por inducción experimental, defpues de ver muchas
vezes , que efectos fe figuieron á eflas diferentes convinacio-
nes. Y efte es otro atolladero terrible de la Judiciaria: por-
que defde el principio de el Mundo hafta aorano fe ha re-
petido adequadamente alguna convinacion de Aftros, y Sig-
nos : fiendo menefter para efto , fegun todos los Aftrono-
mos, mucho mayor trancurfo de tiempo , que algunos re-
ducen al efpacio de quarenta y nueve mil años. Los anti-
guos Chaldeos quifieron evacuar efta dificultad , procuran-
do perfuadir, que tenían recogidas las obfervaciones Aftro-
logicas de quatrocientos mil años : falfedad que , fobre opo-
aerfe á lo que la Fe nosenfeña de el principio deelMun-J
do, fue convencida por el grande Alexandro, ayiendo quan-
DISCURSO OCTAVÓ. ipp
do entro en Babilonia mandado á Calliftenes regiflrar fus
Archivos. Pero dado cafo que menos cantidad de Siglos
fueífe bañante para hazer las obfervaciones neceífarias, pre-
gunto : quando Juan de Regiomonte invento el methodo
racional, que es el que oy fe íigue, en qué experiencias fe
fundo para eftablecerle ? Es fixo que en ningunas : pues
no aviendofe vfado antes, no huvo lugar de experimentarle.
Y ni fu methodo , ni otro alguno le aprovecho á R e g i ó -
monte para preveer , que le avian de quitar alevofamente
la vida los hijcs de Jorge de Trevifonda , temerofos de
que la reputación de fu fabiduria avia de difminuir la de
fu padre. Defde que murió Regiomonte hafta aora paliaron
dos Siglos y medio cabales. Qué tiempo es eñe para que
quepan en él obfervaciones bañantes á autorizar el methodo
racional?
31 L o mifmo digo de Campano , que floreció qua-
tro Siglos antes que Regiomonte. En qué experiencias fon-,
do fu nuevo methodo ? Bien fe vé en efto,que los precepá
tos de la Judiciaria fe fundan folo en capricho, y no en ra-
zón , ni experiencia.
32 Y hago aora otra pregunta. O á los Pronofticos,
que fe hacian íiguiendo el methodo de los Chaldeos , cor-
refpondian los fuceflos, 6 no ? Si correfpondian , errólo
E.egiomonte en mudarle, y los modernos lo yerran en no
feguirle. Sino correfpondian , fon faifas , 6 fueron cafua-
les aquellas predicciones famofas de los Aftrologos anti-
guos , que los modernos alegan á favor de la Judiciaria:
pues es confiante , que los Aftrologos antiguos íiguieron
el methodo de los Chaldeos. L o que fe ha dicho en eñe
punto confpira igualmente á defeubrir la vanidad de el
thema natalicio, por donde pronoftican los Aftrologos la
fortuna de los particulares , que de los diferentes themas
celeftes, que erigen para hazer el Juicio General de el
año: porque v n o s , y otros dependen de los miímos prin-
cipios.
33 Y de los mifmos dependen también las predic-
ciones de las qualidades de el tiempo en diferentes Quar.tqs
de Luna-, y en cada d í a , aunque añadiendo n u e v o , y fin-
guiar
Z-p® AsTROLCGÍÁ ^JüDTCÍÁRíÁ, .
guiar thctna para cada-.Quarto de Luna , y atendiendo para-'
cada dia en particular diferentes convinacioncs de los Pía-,
netas-, ya entre si , ya con las Eftrellas fixas. Como quiera
que difcurr-m en eíh materia , es confiante que no yer-
ran ios Aílrologos en ella menos que en todo fo demás.
E l gran Mirandulano examino todo vn Inviernolos Alma-,-.;
q'ues , cae avian compuefto para aquel año los mas famo-
fos Aílrologos de Italia: Y folo en cinco , ó feis dias los
hallo conformes á las imprefsiones de el Ayre , que ob-
íervó en todo aquel efpacio de tiempo. El año de i r 8<?. pro-
noílicaron los Aílrologos furiofifsimos vientos, y horrendas
tempeílades, por razón de cierta conjunción de los fupe-
riores, é inferiores Planetas; pero lograron los mortales
en aquel tiempo quietos , y pacatifsimos los Elementos,
Refiere eíto Efcaligero -fobre la authoridad de Rigordo,-
Monge de San Dionis , y Medico de Phelipe Auguílo,
que floreció en aquel tiempo. El año de 1 5 2 4 . aviendo
obfervado los Aílrologos , grandes conjunciones de los
Planetas en los Signos que ellos llaman Aqueos , por el
*nes de Febrero , predixeron portentofas inundaciones , y
nunca vinas lluvias, lo que llenó de terror á Europa , de
imodo, que muchos fe previnieron de barcas , y otros de ha-
bitación en litios eminentes. Pero tan lexos eftuvo devenir
el efperado diluvio , que ni vna gota de agua cayó en to-:
do aquel Febrero. Afsi lo quenta Dureto, que vivió en el^
inifmo Siglo.
34 Ni pueden menos los Almanaquiílas de caer en
tan abultados errores. Porque es falfo , ó por lo menos
incierto , que los A í l r o s , ó conflelaciones , que ellos fe-:
«alan , produzcan frios , ó ardores , vientos, lluvias , ó
ferenidades. Si los ardores de el Eílio dependieran de ha-
zer entonces el Sol fu curfo por el Signo de León , calien- "
tes eíluvieran como nofotros en el Agoílo los que habitan
á quarenta , ó cinquenta grados de latitud auílral: pues no
tienen, ni influye en ellos en aquel tiempo otro Sol, que el
que camina por cite Signo ; mas los pobres padecen en
aquella fazon intenfifsimo frío, Y fi el quadrado de Marte
£ Venus ¡udu-xera lluvias, las avia de mgver en todo el .
Mundo
t'J
"DIICU-RXo OCTAVO/ 201
Mundo'',pues ninguna' Régídn"-¿le'el Mundo logra entonces
¿ellos-dos Planetas en diferente afpecto. Nueílro mifmo
emisferio, y la propria Región que habitamos ,'defnientirá
algún dia á los Aftrok>gós en efta parte , fi el Mundo dura
:

algunos mulares de años: pues es infalible que llegará tiem-


po en que el orto de l a C a n i c u l a , 6 conjunción de el Sol
Con ella, fuceda en los mefes de Diciembre, y E n e r o , y.
entonces ciertamente eiará en la Canícula.
j) Pero gratuitamente-permitido., que los Aftros
tengan la actividad , que para eftos efectos les atribuyen
los -Aftroiogos : por lo menos es innegable , que concurren
á los mifmos efectos otras cautas tanto mas podero.fas, que
los Aftros , que pueden no folo aifminuir , mas eílorvar de
el todo fus iufiuxos. En Egypto nunca llueve, 6 rarifsima
yez , y efto folo en los mefes de Noviembre, Diciembre,
y Enero : y es cierto , que giran fobre aquella Región los .
mifmos Aftros, que ib'ore otras muchas, donde caen llu-
vias copiofas. En el Valle de Lima fucede lo mifmo : don-
de toda la fertilidad de la tierra fe debe á vn blando rocío. 1

No folo entre Regiones diftantes ay efta opoficion ; mas


anilla corta diviíion, que haze en la-tierra la cima de vn
monte, bafta para inducir en las dos llanuras opueftas tem-
perie muy diferente. Como fucede en el que divide efte
Principado de Afturias de el-Reyíto de León : pues los Ím-
petus de el Norte , qua'ndp' fopla furiofo, llenan de llu-
vias , nieves , y borrafcas, todo efte P a i s ; hafta cubrir
aquella eminencia; y al mifmo tiempo es común lograr de
la otra parte perfecta ferenidad. Vayanfe aora los Aftro-
iogos á determinar , que dias ha • de llover , por las Ef-¿.-
tallas.
- jií El Padre Tofca j u z g o , que evacuaba en parte
efta dificultad, encargando, que en la formación de los_ A l -
manaques fe tengan muy préfentes las calidades de el Pais.'
Perofobré que para efto feria menefter poner encada Pais,
•y aún en cada Lugar vnAlmanaquiftayy hazer para cada vn©
difunto Repor torio-, pues en la corta diftanciá de tres, b qua-
tro leguas, íe varia á veze's el temple , y calidad déla tierra,
í Ayre't y no é-S:CQiiyj;nie^ dé
'' %9}m í«. "* Cg k>3
101 ASTROLOGIA JUDÍCIÁRIA,
los Aftrologos , quando fobran aun los pocos que ay : Díg<J
fobre efto , que feria también invtil ella diligencia. L o vno s

porque fon incomprehensibles las calidades de los Paites,


de modo, que por ellas fe puedan pronosticar las mudan-
• cas de los tiempos. L o o t r o , porque efias no dependen pre-
citamente de los Paifes donde fe exercitan , fino también de
©tros di fiantes , de donde vienen los vientos, humedades , y
exhalaciones", y no folo de los Paifes donde fe engendran,
mas también de aquellos por donde tranfitan. Las fermen-
taciones , que fe hazen en varias partes de las entrañas de
la tierra ocafionan los vientos , y contribuyen materia pa-
ra las tempeílades. Que entendimiento humano podrá apear
quando , y como fe hazen ? Aun defpues de elevarfe vapo-
r e s , y exhalaciones en la atmofphera , quien comprehenderá
las varias determinaciones de el rumbo de el viento, que las
ha de conducir á eíta , ó la otra R e g i ó n , ni las diSpoficiones
que ay en vna mas que en otra,para que fobre ellas fe liquiden
las nubes , ó fe enciendan las exhalaciones i Aun quando fu-
pieífc todo lo demás , como he de averiguar, Si la nube que
en tal dia ha de volar fobre el Orizonte fcníible, que habito,
vendrá en eflado de derretirte fobre eíte lugar en agua, ó lo
guardará para la montaña, 6 el V a l l e , que difta de aqui al-
gunas leguas?
37 Comoquiera,: L a consideración de el País folo
puede aprovecharle al Astrólogo para pronoítlcar á bulto,
fin determinación de tiempo , mas lluvia en eiPais mashu-
, m e d o , mas calores en el mas ardiente , mas yelos en el nías
frió: pues á todos confia por experiencia, que dentro de
vn mifrno P a i s , en quanto á lá determinación de tiempo,
no ay confequenciade vn año para otro , fticediendo en vn
año vna Primavera muy enjuta , y en otro muy mojada,
Aun mas .ay en efto; y es , que vn mifmo Pais por va ac-
cidente,.al parecer de poca importancia, Suele; variar fen-
íiblemente de temple. La.Isla de Irlanda , defpues que aba-
tieron los Naturales muchos bofques , que avía en ella, es
mucho, menos liuviofaque c-ra antes. Y me acuerdo de aver
. feído ( pienfo que en el P . Kirquer) que la tierra de Aviñon,
'. $ue era antes muy húmeda,.y nebulofa, g o z a b a hermoíp
DISCURSO OCTAVO. 203
Cielo , drfpues que fe enjugo vna laguna de bien poco am-
bito , que avia en ella.
38 Concurriendo, pues , à v a r i a r l a temperie de las
Regiones tancas caulas de acá a b a x o , que no folo alteran,
mas á vezes , como fe ha villo , eftorvan cafi de el todo la
operación de las conftelaciones , nada podrán averiguar en
la materia los Aftroiógos, por la precifa-infpeccion de los
Cielos : y P°'r o c r a
parte las demás caufas cooperantes no
cftán fujetas á ílí examen. Dirá acafo alguno , que les Af-
tros ponen en movimiento effas mifmas caufas con todos
los varias reípeclos , y convhiáciones que tienen àzia tales,
ò tales Paifes: y ais i de ellos defeiende primordialmente,
que en cita Región llueva , y en la otra no ; que a-yei haga
frió, y allí calor. Y o quiero paíTar por ello. Pero fiendo afsi,
el Aftrologo no leerá en el-Cielo lluvia, ni otro temporal
alguno abfolutamente para tal d í a , fìno con diftincion de
Regiones ; y como eftas fon tantas , es infinito lo que ten-
drá que leer enei Cielo. Pongo por exempio el dia quatto,
de Abril lluvia en Efpaña , en ' a N o r u e g a , en la Mefopo-
tamia. Sereno en Perfia , en la Tartaria , y en Chile. Vien-
to en Grecia., en la N a t ò l i a , en Sicilia, y en Marruecos.
Frió en la Noruega, en la Georgia, en el Mogol , y en l a
Isla de Borneo. Calor en Egypto , en los Abifsinos , en
Mexico, y Acapulco. Vario en Francia, en la China , y
el Brafil. Y afsi fe irán leyendo en los Aftros, truenos,
granizo , elada, nieve , afsignando cada diferencia de tem-
poral à mas de trecientas, ò quatrocientas partes difun-
tas de el globo terreftre. Verdaderamente, que para tanto,
es menefter fingir en cada Aftrologo el Tcaro Menippo de
el graciofifsimo Luciano , que arrebatado al C i e l o , oía de-
cretar à Júpiter lluvia en la Scithia , truenos en Libia,
nieve en G r e c i a , granizoen Capadocia, &c. Pues qué, fi
fe añade à efto la abundancia, ò penuria de tanta variedad
de frutos, en cuya copiofa mies , como fuya propria , en-
tran la hoz de el Pronoftico los Aftroiógos ? Y fiendo las
efpecies de frutos tantas , y muchas mas aun las Provin-
cias, donde fe puede variar la corta , ò larga cofecha , à
penas fe podrá cqmprehender èn vn gran l i b r o , lo que fo-
" ¡P.c a • bre
204 ASTROLOGIA JUDICIÁ^IA,
bre cae punto avrà menefter cftudiar. cnios Aftros ci A l i
trologo. J
19 Quien qulfiere , pues , fabe.r con alguna anticipa-
ción , aunque no t a n t a , las mudaneas de el tiempo , go-
viernefe por aquellas léñales naturales que las preceden, y
nbLolo .eítan efcritas en muchos libros , mas también fe
pueden aprender de. Marineros , Y Labradores , los quales
:

pronoflican harto mejor que todos los Aftrologos de el


Mundo. Por elfo Lucano en el lib. 5. de la Guerra Civil, na
introduce algún Aílrologo vaticinandole al Cefar la ten>
•pefbd que padeció en "el tranfito de Grecia à k Calabria^-
fino al pobre barquero.Amidas.
40 Y á elle propoíito es fazonado el chifle , que re-i
'fiere el Padre Dechales., fucedido a Luis X I . Rey de Fran-»
eia. Avia falido elle Principe à c a z a , aífegurado por el
'Aftrologo , que tenia aífiaiariado , de que avia de gozar vn
fereno,y apacible dia. Encontró en el camino, à vn po-
bre Carbonero , que Te avisó íe retiraífe , porque ame-
nazaba vna terrible ' l l u v h . Salió el Pronofcico dé el
Carbonero verdadero , Y el.de el Aftrologo fa'.fo. P o r l o
qual el Rev defpidiendo al. Almanaquifta , tomó por
Aftrologo fuyo , feñalandole falario como à t a l , al Car4
bonero.
41 . Añadiré vna reflexión de las mas eficaces para
'convencer de vanas todas las obfervaciones Aílrologicas,que
fe hizieron en todos los paffados Siglos. Y c$, que defdeque
fe inventaron l-os Telefcopios fe han defeubierto tantas
Eftrellas , YÁ fixas, YA errantes , que exceden en numero
à'.lasque obfervaban los Aflrologos anteriores, que-mira-
ban el Cielo con los ojos deínúdos. Solo - Juan Evelio-Bur-<
g o , Maeftre de Dantzich, Y famofo Aftronomo , defcubrió
de nuevo tantas Eftrellas fixás , que les pufo el nombre de
Firmamento .Sobieski, enbonor de el gloriofo Juan III. dé
cfte nombre , Rey de Polonia. Aarafe arguye aísi .La igno- ' 1

ranci* délos Aftrosnuevamentedefcubiertos,.-tf-ahia configo


neceífariarnent'e la ignorancia de fus influxos-; Y la Cjombi-
nációh de losdnfluxos de ellas, con los ele los demás ,.que ef-
taban;patentes, infería otros.efedos muy.diferentesde> l o |
; / * que
• 'DISCURSO OCTAVO; * . 205
íjfie tuvieran ellos , ñ obraran por si' folos. Luego todas
las obfervaciones Aftroíogicas , que fe .hizieron antes' de la
invención de el Telefcopio, fueron invtiles , y vanas , por-,
que iban íbbre el fupuefto falfo, de que no. influían otros ;

Aftros , que los que fe defcubrian entonces. É l Telefcopia


fué inventado el año de xóog. por el Glandes J a c o b o M e -
ció, y perficionado pocodefpues por el infígne Mathema-*
tico Florentin Galileo de Galileís. Todos los grandes
Maeftros de la judiciaria , por quienes fe goviernan los Af-
trologos modernos, fon anteriores. D e que fe infiere , que;
vaos ciegos guian á otros ciegos.

§. X,
41 ^ S M I T O muchos lugares de la Efcripturáj.
\ / como también muchas authoridades de
Padres contri los judiciarios : porque fe hallan en mu-
chos libros. Pero no difsimularé la Bula de.<el gran P o n - ,
tifice Sixto Quinto , contra ios profeflbres'ck eíie Arte,'
que empieza : Cosli', & Terree ereator Deas. Porque es
en eñe aífumpto lo mas concluyente , que fe halla en li-
nea de authorldad; Para lo qual.es de advertir , que a
todos los demís Textos;,,' ya de la Efcriturá, v a d e Con-
cilios , y a de Padres , Va de Bulas Pontificias , con que fe
les arguye a los judiciaríos , r'efponden eilos, que en cífos
Textos tolo fe coridena .aquella IpdicLrla , que pronoftica
como ciertos los futuros contingentes , dando por infa-
libles las amenazas de los Aftros. Pero efta interpretación
no tiene lugar en la Bula de Sixto. La razón es : porque :

manda á los Inquifidores , y a ios Ordinarios , que pro-


cedan contra Los Aftrologos que pronoftican ios futuros ;
eonci :gentes , aplicándoles las penas Canónicas, aunque
ellos'C<nfi..íTen , y pvoteften la incertidumbre, y falibili-,.
dad de lus vaticinios : Etiam fi id fe non certo ñf-pt-mam af •
fi-- r>it; ;:iu'-"p<-ote!lentur' : Permitiéndoles vnicamenre. el
:

proAoftiear aqu [los efectos naturales, que pertenecen a la


Navegación, Agricultura , y Medicina : Sta-tuimus , 6 "
wn^Wits yvt -t-^m contra 'hflf'QÜófco's'-'' Miitb'émaíícos 3 &,
v ;
v • a!ios
206 ASTROLOGIA JUDICTARIA,
alhs quojatmojie dìcix Aerologia art erti pratérqu'am
) etra
Agriculturas , Navigai ioner/t &.rem Medicam exerecnics;
t

&c. Y afsi, en partando de efta raya deben proceder con»


tra ellos los Superiores , por mas que en el principio de
fus libros , y Almanaques proteftem, que fu Arte es fali-
b l e , y en el fin de ellos pongan : Dios /obre todo,
por fanalo todo..
(?)

E C L Y P -
E C L Y P S E S,
D I S C U R S O N O N O .

§. I.
? ^ ^ j * / - ^ ^ ^ U N Q U E los Pronofticós, que haz'en
j^^^S^S los Aftrologos por la infpeccion de los
,M Eclypfes , parece debieran fer com-
prehendidos, e impugnados en el Dif-
eurfo pallado , por fer en parte mate-
ria de fus Almanaques; he juzgado mas oportuno hazerles
proceffo á parte : porque en realidad es la caufa diverfa:
ilendo cierto, que efte error no fe funda tanto en la va-
nidad Aftrologka j quanto en vná mal conliderada phy-
fica.
2 En aquellos tiempos rudos, quando fe ignoraba la
caufa natural de los Eclypfes, no es de efirañar, que fobre
ellos concibieiTen los hombres extravagantes ideas. Afsi
( fegun refiere Plinio ) Sterfichoro , y Pindaro , iluftrifsimos
Poetas, confintleron en el error vulgar de fu Siglo,atríbuyen-
do à hechicería, ò encanto la obfeuridad de los dos lumina-
res. Por filo era rito confiante entonces dar todos- grandes
vozes , y hazer eftrepito con tímpanos , vacias , y otros inf-
trumentos fonoros, à fin de turbar , ò impedir que Ile gaf-
fe n al Cielo las vozes de los Encantadores. A lo que alu-
dió juvenal, quando de vna muger muy loquaz, y voceadora
dixo:
Una laboranti poterit fuccurrsre Lunx*

Los.
20% , •• ' ECLYPSES,
L o s Turcos , y Perfas continúan oy la mifma fuperft!-:
c i e n , aunque con motivó-difunto , que es el de desbara-
tar , ó defvaiecer con el ruido las malignas imprefsíoii'es
de los Eclypfes : a que añaden el cubar cuidadofamcítte
las fuentes publicas , porque no les comunique algún in-
quinamento el ambiente viciado con el adverfoinfluxo. L o
mifmo hazeñ los Chinos en quanto al eftrepito , como tef-
tifi'ca el Padre Martin Martini, aunque afsiftidos y á d e M a -
thematicos, que les predicen el dia , y la horade el Eclyp-
fe , y d jfengañados de que el Eclypfe de Sol no es mas que
la falta de comunicación de fus rayos i la tierra por lain-
terpoíicion de la Luna , y el Eclypfe de Luna la falta de
comunicación de la luz Solar a ella por la interpoíicion
de la tierra. Tanto fe arraiga.en los ánimos vna obfer-
vacion fuperfticiofa , ique á penas puede turbaría de la
poífefsion el mas claro defengaño. N i fon menos ridicu-
los los habitadores de Coromandcl, los quales atribuyen-
do á fus pecados el Eclypfe de L u n a , luego que le advier-
ten , á tropas entran á lavarle en el M a r , creyendo que
afsi expían fus culpas.
; 3 Aunque errores de eñe tamaño fon particulares
folo de algunas barbaras Naciones; en todas reyna el ge-
neral engaño de que los Eclypfes ocafíonan graves daños á
las cofas fublunares , tanto feníibles como infeníibles , coíí
fus enemigos influxos. Tan vniverfal es el miedo de los
Eclypfes , que Plinio le eftiende hafta los .mifmos brutos:
Tíamque defecíum fyderam , O* catera pavent quadrupedesi
Pero es cierto que fe engaña : porque yo los he obfervado
nada menos alegres , y feftivos durante el Eclypfe , que
fuera de él. Y afsi aífeguro, que no es el miedo de los Eclyp-'
fes inftinto de los irracionales; fino irracionalidad de ios
hombres ; temor agenode todo fundamento, y que á vé-'
zesocaíiona grave perjuicio, atando las manos para executar
lo conveniente. Como le fucedió a Nicías , Capitán de
los Athenienfes , que riéndole precifo retirarfe con la A r -
mada Naval de el fitio infeliz de Siracufa , dexó de hazer-
lo por ver eclypfada la L u n a , parcciendole.que quanto en
aquel tiempo fatal fe execatafle ¿ tendna éxito funefto. De
ue
3
DISCURSO NONO. '¿©O
qué féfulto , que cargando luego fobre él los Siracufanos,*
derrotaron enteramenre á los Athenienfes. Muchos como
Nielas, durante el Eciypfe , levantan la mano de los-nego-
cios , y per ella interrupción pierden las coyunturas. Y o vi
no pocos al aííbmarel Eciypfe, meterfe mas. tímidos en fus
apofentos, que los conejos en fus madrigueras, Y no s¿
fi perdieron algo de íu fuperílicíofo miedo, viendo que á
mi no me avia fucedido algún daño, aunque, mientras duro
el Eciypfe, de prcpoüto me efíuve paíleando á Cielo def¿
cubierto.

§. II.
4 | '\E modo, que la experiencia éftá muy Iexos dé
\.Jr autorizar eífe miedo. Y la razón evidente-
mente le convence ele vano. Porque no fiendo otra cofa el
Eciypfe de L u n a , que la falta de fu luz reflexa por la ínter-;
poíicion de la tierra , y el de Sol la falta de la fuya por ls¡
interpoficion de la Luna : Pregunto : Qué daño puede hazer
el que falte por vn breve rato , ni de noche la luz de la L u -
na , ni de día la de el Sol ? N o falta v n a , y otra luz por vna
nube interpuerta , y aun mas dilatado tiempo , fin que por
elfo fe figa daño perceptible , ni en la tierra , ni en los aniñ
males , ni en las plantas ? Qué mas tendrá faltarme la luz}
de el S o l , porque la Luna me la eftorva, que faltarme por-;
que el techo de mi domicilio , donde eftoy recogido , ma-
la impide ? L a calidad, 6 naturaleza de el cuerpo inter-i
puedo no hazc ál cafo: porque que el techo de mi apofen-;
to fea de efta madera, ú de la o t r a , que efté cubierto de
plomo, u de pizarra, ú de teja , no puede hazer que la
falta de luz , ocafionadade elle eftorvo, fea mas 6 menos
?

nociva..
5 Pericles, Capitán de los Athenienfes , viendo-tur--
hados por vn Eciypfe de el Sol los Soldados , que eftabaii
pravenidos para vna expedición marítima, oportunamente
opufo á los ojos de el Governador de la Armada , conf-;
temado como los demás , la capa de Purpura que tenia fo-:
ferefus ombros,-eftorvandole con ella la villa de el Cielo,;
1 IO ECLYPSES,
y preguntándole fi aquello le podía hazer, ó pronoíticaf
algún daño ? Refpondiendo el Governador , que no: replicó
Pericies. Pues no ay alguna diferencia de \ na cofa á otra,
fino que la Luna , como mucho mayor cuerpo quita á mu-
chos la luz de el S o l , y la-capa á vno folo.
6 L o mifmo digo de la falta de calor, que puede ve-
nir de vno , ü otro Aftro, Fuera de que de la Luna no nos
, Viene algún calor, ó es totalmente infenfible. Aisi lo mof-
tró la experiencia en el mejor efpejo vftorio , que jamás
huvo en el Mando (dexamos á parte los de Archimedes,
acafo fabulofos ) que fué el que pocos años h a , como fe
lee en las memorias de T f évbux , fabricó en Francia el fe-
ñor Viliete : tan activo , que no fe encontró materia algu-
na , que expuefío al Sol no liquaíle promptamente coloca-
da en el punto de el foco.Digo, que en efte efpejo fe vio, que
la Luna no produce calor p o c o , ni mucho : pues aviendo
recogido fus rayos en é l , no fe percibió en el punto de el
t-foco calor alguno : y por poco que fueífe el calor de la Lu-
t c n a , creciendo en aquel punto á proporción que el de el
a.'Sol, fe avia de fentir allí muy vehemente.
7 N i fe me oponga aquel verfo de el Pfalmo n o .
íeper diem Sol non vret te, ñeque Luna p;r noclem , de el
ivqual fe movió Valles , para conceder en fu Philofophia Sa-
cra , cap. 7 1 . virtud de calentar á la Luna. D i g o , que eñe
T e x t o no prueba el intento. L o primero , porque en doc-
trina de San Auguftin folo admite fentido myfiíco : y afsi el
Cardenal Hugo no le dio otras inteligencias , que las de ef-
ta claífe. L o fegundo , porque , como fe puede ver en Lo-
r i n o , el verbo Hebreo de el original no fignifíca vftion , ó
calefacción, fi no qualquier genero de lefíon en general.
L o tercero, porque como exponen otros , la Luna quema
no calentando , fino enfriando, ó haze con el frió algunos
• efectos femejantes á los que obra el Sol con el calor. Por
.lo que dixo vn Poeta:

« • TJnum oper.tntur
Et calor, & frigus \Jicut hoc,J¡c & illud adurít.
Su tenebrts vifum ,j?c Sol contrarias aufert.
DISCURSO NONO, i t i
Y qué ño puede entenderte el Texto literalir.e-nte , fegun el
rigor de el verbo Latino Uro , es claro : pues aunque fe cen-
ceda alguna actividad para calentar à la Luna , nadie dirá
que es tanta que llegue á quemar.
8 Si alguno pienfa , que la fombra de la tierra llegan-
do à la L u n a , puede, malear fu influxo , confiriere lo pri-
mero, que la fombra tiendo pura carencia no puede tener
actividad alguna p o c a , ni mucha. Coníidere j o fegnndo,
que aun quando concedieífemos à la fombra alguna facul-
tad para inficionar el influxo, no avria por lo menos que
temer en el Eclypfe de el Sol , pues nunca llega, ni puede
llegar por razón de el Eclypfe à elle Adro alguna fombra:
Saprà Lunam pura omnia, ac diurna lucís piena, , dice
Plinio : dixe por razón de el Eclypfe , para excluir aque-
llas fonibras, que en ci Sol mueftran fus proprias manchas,
poc,o ha empezadas àobfervar con los Teleíxopios.

§. III.
p | ? S muy de el cafo, para defvanecer el miedo dé
J~2J ios Eclypfcs , proponer aqui lo que dice de
ellos Geronimo Cardano. Effe Autor , cuyas decifiones
deben ter muy veneradas de los Aftrologos , 'por aver fido
gran protector de las ideas de la Judiciaria , tan lexós
eiti de condenar los Eciypfes por nocivos , que antes
los aprueba por vtiles. En cafo de no ter muy frequen-
tes afsienta , que todos los Eciypfes enfrian fcnfibleméntet
la tierra , y los vivientes. Pero en ello mifmo funda fu
conveniencia: Siendo ,dice,necejfarioel calor para confer-
va;" la vida, de los animales , y las plantas : entre los flete
Viandas foto vno fue criado de naturaleza fría , que es
Saturno. Pero no pediendo vn folo Planeta frío corregir
el ardor que ocafonan feís Planetas calientes, para que en
el difeurfode el tiempo no fue (fe abrafado el Mundo, dif-
pufo Dios, que de tiempo en tiempo huvíeffe Eciypfes , los
quxles refrefeaffen la tierra. (Apborifm. Àfìron. fegm. 7 .
«•pbor. 52. ) Según ella doctrina en vez de temer los E c i y p -
fes debemos anuarios como auxiliares de nueftra conler-
?

Váz va-
-2 I 2 ECLYPSES,
Vacion, par quinto templan las ardientes iras de los feis
Planetas , que fh eñe correctivo nos reduxeran á cenizas^
Es verdad, que no es muy coherente ello con lo que Carda-
no dice en otra parte , que fí el Eciypfe de el Sol fucede
citando las mieles en flor, aquel año no tienen grano las
efpigas. Ciertamente frialdad, que haze tanto daño en las»
miefes, es muy excefsiva, para que fe puedan efperar de ella
buenos efectos en las demás fubílancias animadas. • Pero
quien creerá que la aufencia de el calor de el Sol por tres
s

horas , que es lo mas que duran fus Eclypfcs , pueda oca-


íionar tanta ruina, quando no vemos feguirfe ellos eftragos¿
aunque las nubes nos le efeondan por tres ellas?
10 También es bueno advertir aqui , que la regla
que dá Cardano en quanto á la duración de los Eclypfes,'
eftá encontrada con lo que en eñe punto fe nos dice co-
munmente en los Almanaques. L a regla de Cardano es ( vbl
fapr.aphor.-] 5.) que los efectos de los Eclypfes de Luna duran
otros tantos mefes , y los de los de el Sol otros tantos años,
quantas horas hirvieren durado, ó eftos , b aquellos. Y
ílendo cierto , que. el Eciypfe mas largo de Sol no dura mas
que tres horas , ni el de Luna mas que quatro, folo á tres
años pueden eítenderfe los efectos de aquel, y folo á qua-
tro mefes los de eñe. Como fe compondrá efto con la larga
ferie de años, que tal vez ponen los Almanaques fu jetos al
maligno influxo de los Eclypfes?
•* 1 1 Aunque hemos impugnado hafta aqui los malig-:
írosdníluxos de los Eclypfes en quanto dependientes de cau-:
faphyfica, conviene á faberdela frialdad que puede oca-:
fionar la aufencia de la luz de los dos Aftros, no fe pienfe
por efto que los Aftroiógos no introducen también en ella
materia los foñados preceptos de la judiciaria. Haze mucho
ai cafo, fegtin fu doctrina , pera determinar , variar , ó
modificar el influxo de la caufa plv/íica , la Cafa eclefte don-
de fucede el Eciypfe : también la pofiturade los dos lumi-:
nares en efte , ó en aquel Signo , con otras cofas á efte to-
no , cuya impugnación omitimos: porque quanto fe ha di-:
cho arriba contraía Aftrologia Judiciariaíbbre fer fus pre-
£e£tqg •abfolutanient.e arbitrarios., f¿a. fundamento alguno.
DISCURSO NONO.' i I3
til de razón, ni de experiencia, es adaptable al aífumptd.
preferiré.
12 Depongafe, pues, el vano miedo de elfos fatales*,
efectos, que á Dios te la depare buena nos pronoftican los
Almanaquiftas, han de durar por tantos, ó tantos años: A
Jignis cali nolitc metuere., qua timent gentes. Clama Dios
por Geremias. N o temáis, como los Gentiles , las feñales
de el Cielo. Efte texto defengaña generalmente de la vani-,
dad de la Judiciaria. Pero parece que con alguna partica-?
laridad fe puede aplicar á relavarnos de el fufto , que nos
introducen los Aílrologos con fus imaginarios efectos de los
Eclypfes. Y defe también por dicho efto par,a los
Cometas, de los quales vamos
á hablar aora.

COME-:
214

«£V - r • kj»- ríjL

5Í ¡H
¿ -,.„.

D I S C U R S O D É C I M O .

§. I.

I* ^ ¡ P ^ ^ S el Cometa vna fanfarronada de el Cíela


Í | lMf $jjij& contra los Poderofos de el Mundo:
i

«3 p l ^ l s P ^ Emulo , en la aprehenfion humana , de


la generofa furia de el Rayo : porque
como elle hiere en lo mas alto , aquel
en lo mas noble. Acafo la confideracion deque los Princi-
pes tienen menos que temer de parte de la tierra , que los
demás hombres , les hizo añadir terrores en la fuperior Es-
fera , para contener fu Orgullo. Pero en la verdad tantos
enemigos de fu vida tienen los Principes acá a b a x o , que
para afluftarles el aliento , no és menefter, que confpiren
con los malignos vapores de la tierra los brillantes ceños
de el Ayre. La ambición de el Vecino , la quexa de el Vaf-
fallo, el cuidado proprio fon los Cometas , que deben te-
mer los Soberanos. EifotraserraticasAntorchas.no pueden
hazer mas daño , que el que ocafionan con el fuílo.
2 N o folo el V u l g o , ni folo para los Principes, re-
conoce ealamitofos los Planetas. También algunos Auto-
res de efeogida nota fomentan eftos miedos , eftendiendo-
los á las Ciudades, á ios Reynos , en fin al común de los
hombres. De efte numero fon Fromondo , Keplero , Cabeo,
Kirquerio, Cardano, y otros. Bien , que no todos difeurren
por vn mifino camino. Algunos conftituyen á los Come-
tas fcúales aatuEaies pra&icas de los males que íes atribu-
yen:
DISCURSO DECIMO. 2 T5
yen : efto è s , dicen, que los Significan : porque phyfica-
mente los caufan. Otros desnudándolos de toda phyíica
eficiencia , les niegan la lignificación natural, concedién-
doles folo fer Signos por la voluntaria ordenación divina,
ò como fe explican las Efcuelas, Signos ad placitum. Yj
aun entre elfos ay alguna divifion : porque algunos quieren,'
que no folo la lignificación, mas aun la exiftencia fea natu-
ral en los Cometas , pretendiendo que Dios inmediatamen-
te por si mifmo los produce , fin dependencia, ó concur-
fo de alguna caufa natural, á fin de anunciar con ellos los
acotes , que fu jufta ira prepara á los mortales : porque en
villa de la amenaza fe mueban á la enmienda. Otros dcxan-
do fu producción, como la de todos los demás materiales
entes, en mano délas caufas fegundas , pone la lignifica-!
cion pendiente vnicamente de el beneplacito divino : no
de otro modo que el Yris , fiendo natural en fu exiftencia,
y producción , es feñal de que no avrà otro diluvio , folo
porque Dios quiere que lo fea.
$ Efte fentir no fe funda , ni puede fundar en otra
cofa , que en la obfervacion de' aver fucedido muertes de
Principes, y calamidades publicas à las apariciores dedos
Cometas. Beyerlink en el Theatro de la Vida Fiumana,
verbo Cornasi a , trabe vn Cathalogo de fuceffos fatales,
configuientes á algunos de eftos eípantofos Phenomenos.
Lo mifmo hazen otros Autores.
4 M ¡ s efte fundamento fe hallará fumamente ruino-
fo, fi fe obierva, que las calamidades no fclo privadas,
mas también publicas de los mortales , menudean tanto , y
fon tanfrequentes , que fe podría contar por Ungular pro-
digio , fi huvicfle año en que no acaecieífe alguna. Qual
fe hallará en los Alíñales tan digno de feñalaríe-con piedra
blanca , que , no digo comprehendiendo toda la circunfe-
rencia de el Mundo , mas aun emendónos al ambito de
Europa , no aya fido infaufto para eftos , ò aquellos R e y -
nos, ò con efterilidades,ò con epidemias, ò con guerras*
o conprodigiofas inundaciones , ò con muertes de Princi-
pes. Efta'í grandes eipinas fructifica comunmente la tierra
por el pecado de A d á n : y fus hijos con losnuefirosrepeti-
mos
2 ! 6 C o m e n t AS,
irnos al enojo Divino los motivos, para que repita ios acotes;
¡Que aya , pues , Cometa, que no le a y a , el Mundo en to-
cios los años fera valle de lagrimas , y nunca faltarán en él
¡miferias publicas. D e aqui fe infiere, que por las obferva-
ciones no ay mas razón para atribuir nueftras dcfdichas á
laexiftencia de los Cometas, que à la falta de ellos : pues
de el mifmo modo tenemos que llorar quando no los ay s

que quando los ay.

§. II.
'<y A íaADESB á efto la incertidumbre", infuficieñcia^
y ambiguidad de las obfervaciones hechas.
Señalan algunos Autores vn Cometa , que darò veinte y
jjueve dias enei año de 1 6 5 7 . de la Creación de el Mundo,
el qual quieren. fuelTe prenuncio de el Diluvio Univerfah
Quifiera faber en qué monumentos hallaron noticia de elle
Cometa. L a Sagrada Efcritura no dice tal cofa : D e las Hif-
torias profanas , dignas de alguna feé , ninguna es anterior
á la guerra de T r o y a . Con que folo reda , que Herlicio, u
otro qualquiera , que aya fido el primero que nos dio no-
ticia de eñe Cometa , tuvieiTe dentro de fu gavinete las
nunca vidas columnas de Seth , donde eftuvieífe gravada
ella narración , juntamente con la general inftruccion de to-
das las artes, que algunos Autores antojadizos quieren fe
ayan comunicado defpues de el Diluvio , por medio de eftat¡
columnas, á los hombres.
6 Siendo el numero de los Cometas hafta aora obfer-:
yados en todo el difeurfo de los Siglos hafta quinientos^
pocos mas , ò menos , Beyerlinck, citado arriba , quenta
folos hafta vnos treinta , á quienes fe figuieron fuceflos in-J.
fauftos. Aun quando á todos los Cometas obfervados feíí-:
guieiTen otros femejantes , nada fe probaria , por lo dicho
arriba. Mucho menos , fiendo en tan corto numero los infor-
tunados. Y aun al Cometa de el año 1 5 0 0 . no le encuentra
otro vaticinio , que el de el nacimiento de el Emperadora
Garios V . que ciertamente no puede a^umerarfe á los fucefc
fos iafeüces. . '. J -
\, Pere.
DISCURSO DÉCIMO. 217
7 Pero lo mas notable en efta materia es, que el P a -
ute Juan Zahno , docto Premonftratenfe Alemán ( Tom. i .
'Mundi Mirabilis) propone vn largo Cathalogo Chronolo-
gico de todos los Cometas que huvo defde el principio dé
el Mundo hafta el de el año 1 6 8 2 . y fuccefsivamenté con
igualdad refiere lúcenos infelices, y profperos , que acae-
cieron inmediatamente defpues de cada vno de ellos. D e
podo, que por efta cuenta no huvo Cometa que no fu eñe
igualmente faufio, que terrible. Luego la experiencia nada
nos enfeña en el aítumpto. Y no aviendo otro oráculo
que confultar en é l , fe vé que es fin fundamento quanto fe
dice, y teme de las amenazas de los Cometas.

§. III.
8 X 7 N T R E los mifmos , que tienen por vaticinantes
£2j los Cometas, ay tantadiferepancia, que el-
fo folo bañaría para defpreciar fu opinión. Unos los tie-
nen por-vuiverfalmente fatales. Otros juzgan que fon fauf-
tos en determinadas circunftancias , y refpecétos. P o n g o
por cxemplo. Algunos Autores , que cita Cardano , dicen,
que fi el Cometa dirige fu curfo al Ocafo , pronoftica ex-,
célente conftitucion , y temperamento de el año. Y que
el que naciere eftando el Cometa en medio de el Cielo,
logrará alta , y efelarecida fortuna. En tiempo de Augufto
es cierto que no eran tenidos los Cometas generalmente
por inlauítos ; pues vno que apareció al principio de fu R e y -
nado le tuvo el Principe por propicio, y Plinio dice , que
fué faiudable al Mundo : Salutare id terrisfuit. El V u l g o
creyó, que reprefentaba la alma de el difunto Julio Cefar, :

elevada á hazer numero con las demás Deidades : y por


elle refpeéto fe erigió Templo en Roma á aquel dichofo
Cometa , como refiere el mifmo Plinio.
9 Los Peripatéticos , que fíguiendo á Ariftoteles co-
locan todos los Cometas en la fuprema Región de el Ayre,
debaxo de el Orbede la Luna, dicen, que no fiendo otra cofa
el Cometa que vn conjunto de hálitos de la tierra encendi-
dos en aquella altura > precipitadas defpues fus cenizas,
Jomo L - - Ee ce-
218 COMETAS, ?

como vil maligno fermento, todo lo inficionan , ,'y prodt£


cenguerras chambres, y peftes,. Añaden algunos, que pof
fer los Principes de complexión mas delicada que el relio
de los hombres, padecen mas de ellas venenofas imprefsL.
nes: por cuya razón á las apariciones de los. Cometas fe
íiguen írequentemente muertes de Soberanos.
10 Peroefta fentencia enquantoal litio de los Co-
metas , ya oy es indefenfable :;• porque las obfervaciones Af-
tronomicas evidentemente prueban, que, fi. no todos los Co-
metas , los mas fon fuperi'ores , y muy fuperiores. al Orbe
de la Luna. No faltan Aftronomos que los coloquen todos
fobre el mas alto Planeta,, que es Saturno, L o q u e no tiene
duda , es , que todos, aquellos en quienes no fe ha obfervado
paralaxe alguna, eftán. altifsimos fobre los inferiores Plane-
tas. Y en quanto á que los malignos influxos délos Come-
tas fean por fu delicadez mas perjudiciales, á los Princi-
pes , quien no ve que por ella regla, con mas razón fe deberá
pronofticar , fiempre, que parece algún Cometa ,,vn fangrien-
to deftrozoen mugeres „ niños., y viejos?
11 Keplero , feñalando- diftintos fines á la. produc-
ción , y dirección de.el Cometa, dice,. que Dios produce los
Comerás, porque tenga el Cielo , no menos que el Mar , y
la Tierra ,. fus monitruos. Añade., que la materia de que
coníla el Cometa,es como v a excremento de la Región:Ethe-
rea , que fegregandefe , y juntándole en vna mafia , firve
á purgar las Esferas Celeíies, porque no fe manchen ú obs-
curezcan-fus luminares, como fucedio al Sol quando mu-
rió Julio Cefar , pareciendo en todo aquel año con tibia, y
maligna luz.. En quanto á la dirección.,, poficura, y movi-
miento de el Cometa juzga Keplero,. que fon ordenados á
fignificar mutaciones ,.y fuceííos, por la mayor parte cala-
mitofos, en la tierra , y que á elle fin Dios , o por si mifmo,
ó por medio de fus Angeles,, coloca,, ó dirige ei Cometa i
efta , ó á aquella parte de el Cielo.
12 Gerónimo Cardario. determina con tanta indivi-
duación el Pronoftico de los fucelTos correfpondientes á las
diferentes circunftancias de los Cometas, como íi eii el dif-
curfo' de fu vida huviefle obfervado algunos, centenares de
DISCURSO DÉCIMO. I IO
eftos Pheftomcnos ; lo que no puciiendo fer , fe ve , que vn
-mero capricho rué regla de toda fu doctrina. Dice , que los
Cometas de color rubicundo , lívido , ó negro , fon pcrni-
ciofifsimos : Que los plateados , ó albicantes fon menos
malos : Que los que duran mucho tiempo fon mas fatales
que los de breve duración : Que los que parecen en el In-
vierno fon peores que los Eftivos : Que íi el Cometa parece
junto á Saturno , ftgniñcatralciones , pefte , y efterilidad:
Junto á Júpiter mutación de leyes, y muertes de Papas:
Junto á Marte guerras : Junto al Sol alguna grande calami-
dad de todo el Orbe: Junto á la Luna vnas vezes inundacio-
nes , y otras Sequedades: junto á Venus muertes de N o -
bles : Junto á Mercurio v a r i o s , y muchos males. De ei
mifmo modo va difcurriendo por varias conftelaciones , v a -
riando el pronoftico en cada vna de ellas. N o folo cíTo:
también quiere que fe obferve el refplandor , la figura , el
movimiento v y fcgun las muchas diferencias, que admite
cada vna de efias circunftancias, afsi los pronofticos , que
feñala fon diverfos. Bien fe conoce que ello es hablar al
ayre: pues no pudo Cardano obfervar tantos Cometas, que a
repetidas experiencias debieííe tantos documentos. Ni tam-,
poco pudo tomarlos de obfervaciones agenas: pues otros Au-
tores que cita el mifmo Cardano feñalan diferentes reglas.

§. IV.
13 T OS Aftronomos modernos , bien defnudos de eí
1 , fuperfticiofo temor que policía á Cardano,
y á otros de los "paitados Siglos , tan lexos eftán de tener
miedo á los Cometas, que antes defean repetidas aparicio-:
neffuyas , para repetir íobre ellos fus obfervaciones; ef-:
pecialtuente defpues que el efelarecido Cafsinipufo en plan-
ta la plaufible opinión de que no fon los Cometas paífage-
ras llamas, que en pocos dias fe reducen á cenizas ; sí
confiantes Antorchas , que con los demás Aftros fueron criar
das ai principio de el Mundo.
14 De hecho efta opinión , la qual no debe coníide-
rarfe nacida , fino refucitada en nneftros dias : pues fe ha-
lla , que el famofo Aftronomo antiguo Apolonio Mindiano,
Ee a avia
lio COMETAS,
avia dado ya en cí mifmo penfamiento : y Plinio manifíefj
t a , que no pocos en fu tiempo eran de ei mifmo fentirí
Sunt qui & hac fydera perpetua e/fe credant ,fuoque ám-
bito iré ; fed non nifi relíela d fole cerní, (lib.z. cap.25,)
D i g o , que cita fentencia fe halla oy afsiítida de vna gran
veriíimilitud , en fuetea de las ingeniólas , y folidas conge-
turas con que la eftableció el citado Cafsini; fin que obíten
contra ella , ni la aparente rectitud de el movimiento de
los Cometas , ni los largos periodos , que á diftincion de
los demás Aftros efperan fus apariciones. Pues vno , y
otro fe compone muy bien, fuponiendo , como quiere elle
A u t o r , que el Cometa gire en vn circulo de diiatadifsima
circunferencia , y fummamente excéntrico al Orbe de la
tierra. Es claro , que en cite fyftema , eftando proporcio-
nada á naeítros ojos folo vna pequeña parte de el circulo '
por donde difeurre el C o m e t a , fus apariciones no deben
fer frequentes , lograndofe fu villa folamente en aquella
parte de el circulo, que por mas cercana á la tierra fe haze
vifible , y perdiendofe en todo el refto de fu g i r o , porale-
xarfe á inmenfa diftancia. El movimiento también debe fer
fenfi'olemente recto , aunque r e a l , y mathematicamente es <
circular : porque qualquiera pequeña parte de vn circulo
de enorme magnitud, fiempre parece á los ojos eftár enli--
nea recta, nofiendo pofsible diltinguir la cortifsima inflexión
de fu imperceptible curvatura.
15 Monf. Villemot, á quien liguen o t r o s , defiende
por camino diferente la opinión de fer los Cometas Plane-
tas confitantes , y perpetuos , colocándolos todos fobre Sa-
turno , en vna Región donde no ay movimiento común , ni
reglado , qual es el de el fluido , que conduce los demás.
Planetas , si folo corrientes irregulares , que admiten todo
genero de diferentes direcciones. Eíte fyftema feria mucho
mas defembarazado , como todos los Cometas carecielfen ,
de paralaxe fenfible (lo que es indifpenfable para colocarlos
todos fobre Saturno) y no parece que los Aítronomos eítén
¡convenidos en ello,
16. Como quiera, todos los Philofofos ,-que niegan
.Verdadera generación , y corrupción en los Cielos , ion in-
Sereffados en la fentencia, que afirma fer los Cometas Plañe-.
ras.
DISCURSO DÉCIMO. 221
Vas verdaderos de exiftencia confiante , y perpetua , ora de
regular, ora de irregular movimiento. Porque íi fon folo
vnos caducos incendios , cuya exiftencia no dura mas que
io queíe ob lienta fu aparición , fiendo por otra parte cier-;
t o , como lo es , q u e , lino todos, los mas eílán limados
dentro de las Celeftes Regiones , es precifo admitir ver-í
dadera generación , y corrupción en los Cielos.
17 Y fi ello es afsi, que los Cometas hazen numero'
'con los demás Aftros, y que con ellos fueron criados al
principio de el Mundo , vanos fon los temores de los que
colocándolos con Ariftoteles en la fuprema región de el A y -
re predicen en el precipicio de fus venenofas cenizas mas
danos que en el defpcño de los abrafadores rayos" O qué
hijas tan villanas produciría la tierra en fus exhalaciones,
fi deípues de elevadas , al defcender de la altura, no íoio
encendidas, mas aun apagadas confpiran á fu ruina! Va-:
ños fon también los futios de los que aprehenden preter-
natural la generación'de los Cometas, y en ella fundan
la lignificación ,que les atribuyen, de los Divinos enojos.
Para quien tiene los ojos abiertos no ha menefter la Mano
Omnipotente eftas nuevas amenazas; que harto vifibles fe
hazen en'innumerables exemplos fus vengadoras iras.
18 N o por elfo niego que tienen los Cometas tam-
bién en lo moral vfo muy acomodado á nueftro provecho,-
al qual pudo Diosdeftinarlos, y es de creer, que los deftino
en fu creación , 6 los deflina aora quando los produce, 1

además de el vfo phyfico que tienen en lo natural. Q u a l -


quiera nuevo Phenomeno , que aparece en el Cielo , llama
los ojos de los mortales á fu contemplación : y muy torpe
es quien luego no buela con la menre mucho mas arriba
á confiderar la incircunfcripta virtud , y grandeza de la
primera caufa, que no farisfecha de publicar fu gloria con
tantas lenguas de fuego quantos fon los Aftros que cotidia-
namente brillan en la Esfera , de tiempos en tiempos en-
ciende , ó aproxima al mifmo fin elfos brillantes cuerpos de
aun mas prodigiofa magnitud. \Jnos,y otros fon centellas de,
la inaccefsibiedtrz: y v n o s , y otros fon antorchas
á nueflra ceguedad,
íM AñO§
21%

ANOS CLIMATÉRICOS,
DISCURSO UNDÉCIMO.

I.
[i [ Í T H A G O R A S defpues de aver foñado;
que tranfmigraban de cuerpo en cuer-
po las almas , logró que tranfmigraf-
fen de alma en alma fus fueños. De fus
dos grandes dogmas , el de la transmi-
gración de los efpiritus , y el de la myfteriofa fuerca de los
números , el primero fe comunicó , y propagó harta el dia
de oy á muchos de los Pueblos Orientales: el fegundo cun-
dió, fin fentirlo, a. algunos Philofofos de todas Sectas.
2 En efta• fuperfticiofa phyfica, que al numero atri-
buye la poteftad que no tiene, fe funda el común error de
conftituir fatales todos los años feptenarios, á quienes-fe
da el nombre de climatéricos, y v a l e , ó fignifica lo miíino
que fcalares, ó gradarlos.
I Materia de rifa es ver las obfervaciones , y dif-
curfos con que algunos Autores quieren perfuadir la pode-
rofa actividad de el numero feptenario. Ponderan , que los
Planetas fon fiete, fíete también los .metales , íiete pies el
termino déla humana eítatura , fiete metes el tiempo de
la perfecta formación de el feto. T o d o eíto , que aunque
fuera cierto nada probaria , es muy dudofo. Los Planetas
fe puede decir que fon mas que fiete , contando los fatelites
de J ú p i t e r , y Saturno , que tienen tanto derecho para fet
llamados Planetas j como Mercurio , y V e n u s ; fuera de
que.
DISCURSO UNDÉCIMO. 123
que á los Cometas los tienen por verdaderos Planetas al-
gunos grandes Aftronomos : y de efte modo , fube mucho
jnas el numero de los Planetas. L o s metales ,. dicen mu-
chos Naturaliftas, que no fon mas que feis : paral lo qual def-
cuentan el eftaño , juzgándole vn mixto de plata ,. y plo-
mo. La eílatura humana no eftá circunfcripta én la magni-
tud de fíete píes : porque muchos hombres paífaron de eíTa
r»ya. En quantoal tiempo de la perfecta formación, ó ma-
turación de el feto para lograr la publica luz , fi fe habla
de el regular, fon no fíete, fino nueve mefes; fi fe com-
prehende también el irregular , 6 extraordinario, admi-
te toda la extenfion que ay defde los cinco mefes hafta ios
diez , u onze; pues para todo efte tiempo ay exemplos.
- 4 Marco Varrón , por otra parte Autor gravifsímo,'
fué tan nimio, ó tan pueril en difcurrir a favor de el fe pre-
ñado- que pensó esforcar fu autoridad facando al theatro
los líete Sabios de Grecia , las líete maravillas de el Mundo,
las fíete folemnidades de los Juegos Circenfes , y los fíete
Capitanes deftinados á la conquifta de Thebas. T o d o efto,
y mucho mas que pudiera juntarle de feptenarios , no necef-
iita impugnarfe con otro argumento , que la reflexión de
que para qualqu¡era otro numero que fe aprehenda , fe ha-
llará igual ferie de exemplos , yá en da hiftoria , ya en la
naturaleza. Ni fe debe hazer mas aprecio de los tiltiles dif-
curfos , prolijas , y arbitrarias convinaciones , con que
Macrobio en el fueño de Scipion pretendió dar alguna yeriíi-
militud á cfta fantafia, y que efeufo referir, porque fati-
gan la atención , fin alhagar la curiofidad. -
5 Tocias eftas obfervaciones fantafticas dé' los. nu^
meros, fobre v a n a s f o n perniciofas : pues de aqui.íe cle-
:

duxeron tantas fuperfticiofas practicas , en que para.va-.ios.


vfos. efpecialmente en la. Medicina , fe atribuye cfpecial
yirtud , yá al numero ternario,. y á al feptenario , yá al no-¿
Venarlo, generalmente al numero impar : por lo que ..
dixo el gran Poeta Numero Deus
impare gaudet,.
ÍJ) .'
224 Años CLIMATÉRICOS,

§. II.
R
6 A LGUNOS de los Climateriftas ya fe defvian. de la
±\_ fuperfticion, y fe acercan al parecer á lana-^
turaleza , probando la fuerca de los años climatéricos con
la experiencia de algunas mutaciones iníignes , que arriban
al hombre difcurriendo por todos lósanos feptenarios de
fu edad. D i c e n , que en el primer feptenario defpues de
el nacimiento caen los dientes , y fe perficiona la loquela.
En el fegundo fale el b o z o , y fe haze el hombre apto pa-
ra el matrimonio. En el tercero fe perficiona la barba, y
toma el cuerpo todo el aumento de l o n g i t u d , que ha de
\tener. En el quarto ceífa el incremento también en quanto
á la latitud. En el quinto llegan á fu vltimo auge las fuer-,
cas corporales. En el fexto fe termina el eftado , b entera
conservación de ellas , y fe mitiga el ardor de la concupif-
cencia. En el feptimo fe confuma la prudencia, cuya inte-
gridad fe conferva hafta el octavo. En el nono fe nota fen-
fible decadencia en ella. En el décimo fe haze vifible la ¡na-
turidad para la muerte en innumerables rudimentos de la
corrupción. De efte modo prueban , á fu parecer , que la
naturaleza en eftas mutaciones eftá apuntando como con el
dedo , la infigne fuerca de los anos feptenarios, 6 clima:
tericos.
7 Pero eñe argumento , por qualquiera parte que
fe mire , efiá lleno de.nulidades. L o primero: fi la eficacia
intrinfeca de el numero fuera caufacle las mutaciones di-
chas , fucederian las mifmas refpectivamente.en todos los
animales : porque el numero feptenario de los años el mif-
mo es en fu entidad en el hombre , que en los demás; y afsi
avia de fer el mifmo en la virtud ; lo qual es contra la ex-
periencia : pues la aptitud parala generación , el eftado de
las fuercas, el termino de la v i d a , .tienen ya mas largos,
yá mas breves plazos en diferentes brutos, fin arreglarle á
la ferie de los feptenarios. L o fegundo: la muger fe Cpn-
íidera apta para el matrimonio á los doce años : y aísi,
faltando aqui el feptenario, fe alterará en lo reliante toda
DISCURSO UNDÉCIMO. 225
ía ferie. L o tercero : ni en los homb res fe arreglan las mu--
tacioíies expreífadas á los feptenarios. El b ozo en los mas
no apunta halla los quince , 6 diez y feis años de edad.
El roltro en muchos fe llena de barba , y crece el cuerpo
a la deb ida altura antes de el veinte y vno. T o d o el au-
mento de fuercas fe logra en todos antes del treinta y cinco.
La mifma ob jeción fe puede hazer en todo lo demás. L o
quarto: en ella cuenta no fe haze computo de los nueve
mefes, que el homb re eflá en el ciauílro materno ; y de-
biera hazerfe , fegun buena razón , íi para feñalar años cli-
matéricos huvieífe razón alguna : pues el homb re á pocos
días defpues de fu generación empieza á vivir , fegun las
obfervaciones de los Médicos ; aunque Ariíloteles re-;
tarda algo mas la animación. L o quinto : fi las mutacio-
fces ob fervadas en los cinco climatéricos primeros prob af-
fen algo al intento , prob arían que eífos climatéricos fon
fauflos , y propicios; no infauílos, 6 adverfos, como c o -
munmente fe pienfa : porque las mutaciones feñaladas foa
á mejoría, 6 aumento de el hombre; no á diminución , o¡
decadencia.

§. III.
t Д UNQUE el Vulgo folo feñala por climatéricos
/ \ los años feptenarios , entre los Autores que
trataton de eña materia ay tanta variedad , que ella fola es
vna gran prueb a de que fundó ella opinión el antojo , y>
h coníerva la inadvertencia. Los que añaden á losfepte-:
narios los novenarios fon muchos: en cuya fentencia , n<j(
folo de fíete en fíete años , mas tamb ién de nueve en nue-:
ve fe van repitiendo peligros á la vida. Elle aditamento de
climatéricos tuvo por fundador á Cenforino , citado por
Salrmfio. Marfilio Fiemo fin hazer cafo de los novenarios,'
añade á los feptenarios los quartos intermedios, en que es
de notar la grave inconfequencia de elle Autor. Porque la
razón en que funda el que los feptenarios fean peligrofifsi-
Jnos, es , porque cada año feptimo correfponde al feptimoi
Planeta, que es Saturno , Aílro melancólico , de malos;
Xomq I. • " Ff ш» ^
ii6 Años CLIMATÉRICOS,
inflnxos ; y caminando por efta vereda , los anos quarto?
intermedios avian de fer los mas faludables , porque cor-
refponden al quarto Planeta , que es el S o l , Aftro el mas
favorable á la vida de quantos giran el Cielo.
p Claudio Salmafio dice , que todas ellas cuentas
Van erradas , y lo prueba con la autoridad de Julio Firmi-
c o , y otros Aftronomos antiguos : en cuya fentencia los
climatéricos , no proceden por feptenarios, ni por novena-
rios , ni por otro algún orden de números confiante en to-
dos los individuos ; íi que cada vno tiene fu ferie de clima-
téricos diverfa , fegun el S i g n o , y parte de el Signo que
correfpondib á fu nacimiento. Para ello dividen cada Sig-
no en tres porciones , que llaman Decanos : con que fien-
do treinta y feis los Decanos, por fer doce los Signos, vie-
ne á aver treinta y feis ordenes de climatéricos diflintas.'
Pongo dos exemplos. El que nace en el primer Decano de
A r i e s , tiene ocho años climatéricos; conviene á faber,el
quarto de fu edad , el noveno, el duodécimo , el veinte y
vno , el treinta y tres , el quarenta y nueve , el cinqueii-
ta y dos , el fefenta y quatro , y el fctenta y quatro;
E l que nace en el fegundo Decano de el mifmo Signo de
Aries , tiene doce años climatéricos; eflo es , el fegundo,
el feptimo, el trece , el diez y nueve , el veinte y quatro,
el treinta y d o s , él treinta y nueve, el quarenta y vno,
el cinquenta y dos , el fefenta y feis , el fetenta y vno,
y el ochenta y feis. A eñe modo fe van variando los cli-
matéricos por todos los demás Signos , y Decanos , fin ha-
zer cuenta de feptenarios .j ó novenarios. Qué fe infiere
de tanta variedad, fino que todo lo que fe dicede años
climatéricos es vna algaraviafin raO.rode fundamento?
10 L a mifma opoficion ay eu cuanto á la fuerca,
ó actividad de los climatéricos, Cpmuntr.tnte folo fe les
atribuye poteftad para hazer m a l . de modo , que las mu-
taciones que acaecieren en ellos, fcan fietnpic pe:nielólas.
Pero no faltan Autores, que habiendo paralelo entre los
años climatéricos de la-edad , y días críticos de las er¡ler-
tnedad.es, al modo que eftos fon indiferente:., para que tos
mutaciones que arriben en e l l o s , fcan para .mejoría, b pa-
ra'
DISCURSO UNDÉCIMO. 227
ix peoría , la miíma indiferencia eftablecen en los años cii-
.jnatericos. La opinión que reyna en el Vulgo , es , que en
los climatéricos peligra la vicia folo en virtud de alguna
alteración de el temperamento , que produzca dolencia do
cuidado. Salmafio dice, que ello es contra el fentir de t o -
dos los Antiguos, y que en los años climatéricos no folo
peligra la vida por ios principios intrinfecos , que pueden
producir enfermedades; mas también por qualefquiera ex-
ternos, y fortuitos accidentes como de naufragio, heri-
3

da , precipicio , &c. Non folum igitur interna corporis


mala , fsci ctiam externa annorum funt climaElericorum*
(Sa.hv.~di Ann. Climaíl, fol. mihi 14. ) Y poco maS'adelan-
te enfeña, que no folo tiene en los años climatéricos fu-s
tropiezos la vida , mas también tiene fus efcollos la for-
tuna , amenazando en ellos no menos que los amagos da
ia parca , los rebefes de la fuerte : Non enim vita tantum
fericula ad climaffericos pertinent ,fed & fortunarum , 0\
áignitatum.
ir Algunos con Enrico Ranzovio eftienden lajurif-:
dicción de los climatéricos á ios mifmos cuerpos de los I m -
perios, ó Republicas,queriendo que en ellos eftén mas arries-
gadas á mutaciones , 6 decadencias ; aunque , como por
lo común fon de mayor duración los Imperios , que los in-
dividuos , feñalan á aquellos periodos mas proHjos,figuien-:
do el mifmo orden de los feptenarios. El numero de fetenta
¿ños, que confta de diez feptenarios, le juzgan muy climaté-
rico , fundándolo en el exemplo de el captiverio de B a b i l o -
nia , que duró efle efpacio de tiempo , y en el vaticinio de
Ifaias de que duraría el mifmo efpacio la defolacion de
Tyro. Pero feñalan por el masrigurofo climatérico para los;
Imperios el año 594. que confta de fíete Septuagenarios. T o -
do ello fe dice porque fe quiere decir. Y los dos exemplos-
de la Efcritura probarían antes que el año feptuagenario es
feliz , y faufto: pues en él recobró fu libertad el Pueblo dfc
Ifraél, y T y r o fe reftableció en fu antigua felicidad. L a
fentencia mas feguida es que folo los individuos eftán fujetos
5

á la poteftad de los climatéricos ; no las Ciudades, R e y -


» 6 Repúblicas. Aun quando los climateriílas eftuvief*
írfa " fe»
i i $ Anos CLIMATÉRICOS,
Ген muy convenidos entre si , tendrian poco derecho para
íer creídos. Quanto menos , eftando en tantos capitulo^
tan difeordes?

§. IV.
Í2 T A experiencia e M afsimífmo contra fu орЫой.
J ¡ Y o tome el trabajo de computar los años de
vida de trecientos fugetos de quienes fe fab e por las Hiño-:
rías el año de fu nacimiento , y el de fu muerte. Y hecha
defpuesla regla, que llaman de proporción , no halle que
correfpondieífen aun en fu canto mas muertes en los fentena*:
r i o s , y novenarios , que en los demás años. De vn Padre
Jefuita leí en las Memorias de Trevoux , que en la.Ciu-
dad de Palermo por los libros de las Parroquias hizo el mif-
mo computo fob re muchos millares de hombres , y al ajuf-
tar. la cuenta hallo lo mifmo que y o .
ij Alegan los Cümateriftas vn corto Cathalogo de
hombres famofos, que murieron en años climatéricos. Pero
aunque el Cathalogo fueífe mas latgo , nada prob ana:
porque fiendo ios años climatéricos muchos, y contándote
los homb res famofos por mulares , feria menefter vna
efpecial providencia de Dios , para que muchos no cayef-
fen en los feptenarios , ó novenarios. Enera de que de al-
gunos, que cuentan muertos en los climatéricos,. no ay cofa
cierta. De Ariftoteles dicen, que murió á losfefentay tres
años de fu. edad, que muchos juzgan fer el mas rigurofo
climatérico, porque confia de el numero fíete multiplicado
por nueve ; pero Enmelo, citado por Diogenes Laercio, di-
ce, que murió á los fetenta. D e Platón dicen , que murió á
los ochenta y vno , gran climatérico tamb ién , porque re-
mita de el numero nueve multiplicado por sí mifmo. Pero
Atheneo dice, que murió á los ochenta y dos , y Neanthes
citado por.Laercio dice,-que á los ochenta y quatro.
14. Alegan tamb ién el fimil de los dias criticosde las
enfermedades , que afsimifmo proceden por feptenarios.
Pero lo primero: el aífuinpto es incierto. Grandes Medi-i
£os dan por mal fundad^ la ob fervacion de los dias fepte-
na-i
DISCURSO UNDÉCIMO'. 220-
fiarlos para las crifes, y hallan que en qualefquiera días fu-
ceden ellas con tanta regularidad como en los feptenarios.
Aun ella en opiniones defdc que punto fe ha de empezar z
hazer la cuenta. Unos quieren que fea defde el primer
infulto de la enfermedad , ú defde que fe empieza á fentir
alguna indifpoficion. Otros defde que ay fiebre manifiefta.
Otros defde que la fiebre rinde el enfermo aun reluctan-
te á la cama. Entre el primero, y vltimo termino paf-,
fan muchas vezes algunos dias. Como, pues, la experiencia
nos puede moílrar, que los feptenarios fon críticos, fi el que
es feptenario en vna opinión , en otra es quinto , ó fexto,
octavo, o noveno ? De aqui e s , que frequentemente los
Médicos viendo que la crife no vino en el día que antes
contaban por feptenario , varían la cuenta para hazerle
feptenario, que quiera, que no. Y de eílo he viílo mu-,
cho.
i? L o fegundo digo ,que aunque algunos Médicos
atribuyen la poteflad de los dias críticos á la virtud oculta
de el numero feptenario , eflos fon muy pocos Los mas
recurren á otras caufas , las quales no intervienen en el
periodo feptenario de l ó s a n o s , comoá los movimientos
y phafes de la Luna.
16 Finalmente refpondó , que la obfervacion de ios
dias críticos diferepa en muchas cofas de la de los años cli-
matéricos ; y afsi, no puede hazerfe argumento de paridad
de aquellos á eftos. En los dias críticos el quarto es ín-
dice ele el feptlmo t en los años climatéricos nadie dice
tal cofa. Los dias críticos fon indiferentes al bien , y al
mal. A los años climatéricos los dala fentencia común por
determinadamente infauílos. En los dias críticos defde el
fexto critico , que fe cuenta á los quarenta dias de enfer-
medad , fe profigue la cuenta, no de líete en fíete , fino de
Veinte en veinte; en lósanos climatéricos quieren que fe figa
Siempre constantemente la cuenta por feptenarios,
y novenarios. Omito otros muchos •
capítulos de difpa-
ridad,
AROS CLIMATÉRICOS,

••§.-• V. . i
17 / ^ \ T R O argumento , aunque en nadie le he vifto,
hallo que puede hazerfe á favor de los años
climatéricos , en quanto prueba abfolutamente la oculta ac-
tividad de determinados números para algunos efectos. Eftá
comunmente admitido , y dicen que obfervado , que las
ondas de el Mar de diez en diez aumentan fu ímpetu , de
m o d o , que la onda que fe cuenta decima en el orden, es
mucho mas impetuofa que todas las antecedentes, y afsj
á ella fe atribuyen comunmente los naufragios: por lo que
canto Ovidio en el de Ceix : Décima ruit impecíus vnda.
Y no pudiendo efto provenir de otro principio , que de la
«feondida merca de el numero decenario, no ay por que
obftinarnos en negar la virtud á determinados números en
algunas determinadas materias.
18 L o que á efto puedo decir , es , que yo hize
muy de efpacio la experiencia, puefto á las orillas de el
Mar „ por ver fi en efto avia alguna correfpondencia fixa,
y ninguna hallé ; si que las ondas eran muy defiguales en
la vehemencia, fin guardar orden alguno en el numero. Unas
vezes era mas impetuofa la tercera , otras la quarta, la
quinta, y afsi difeurriendo por todos los demás números.
Afsi que en efto , como en otras muchifsimas cofas, fe creen
en la naturaleza los myfterios que no ay : porque tal vez
lo que al principio fué ilufion , 6 fantafia de vn hombre-
folo , por no intereífarfe nadie en examinar la verdad»
poco á poco vá conquiftando el común
aflenfo.
23 1

*®t£\ *** MARÍA, y JOSEPH. *** J

S E N E C T U D D E E L M U N D O ,

DISCURSO DUODÉCIMO.

§. I .

ÍS Ir'^fllíli O lloraba tan tiernamente Helena, al re-


prefentarle -elcryílal loseílragos, queeí
tiempo avia hecho en fu belleza : Flet
quoque vt in fpeculo rugas confpexit^
Aniles-Tindaris , como el mundo fe la-
menta de las ruinas , que contempla en fu vegez imaginaria.
A cada paflo fe oyen las quexas de que el tranícurfo de los
Siglos ha abreviado ala vida humana los plazos-, debilitado
las fuercas corporales , aumentado el numero de las dolen-
cias, difminnido , por defecto de la facultad prolinca, el de
los individuos; y para dar materia mas dilatada al dolor, en;
todo aquello, que puede fervir al hombre, fe reprefenta la"
mifma decadencia; en los alimentos menos fubílancia, en
: :

los medicamentos menos virtud, en la tierra menos feraci-


dad , y halla en los Cuerpos >Celeftes mas débiles los inñu-'
xos.
2 Pero toda ella larga lamentación carga ;fobre vna-
apreheníion fin fundamentó. Primeramente , por lo que mira :

al periodo de la vida humana, es fixo que oy es el niifmo que 1

era ha veinte , y aun treinta figlos. Ha dos mil y ochocientos


años, que vivió el Santo Prophcta D a v i d ; de m o d o , que.
fegnn el computo mas jufto de Gencbrardo, Sáliano, T o r -
nielo, Spondano , y o t r o s vinosa florecer, con corta difereh-í
}

cía
13* SENECTUD DE EL MUNDO,
cía , á la mifma diflancia de el principio de el Mundo , que dé
nueílro Siglo, aviendo nacido á los dos rail novecientos y diez
¿.ños de la Creacionde elOrbe. Elle; pues, jlufkado Rey, ha-
blando de el termino común de la vida de los hombres de fu
tiempo al Pialen, 88. feáala el raiímo, que experimentamos e»
nueílra edad: Dties anno,rum nojlrorum in igjis feptuagin-i
ta anni. L)e el mifmo David , quaudo, fegun los Au*
tores de la Chronologia Sagrada , avia llegado á los fetenta
años , dice la; Efcrkura en el capit. i, de el lib. j . de Ios-
Reyes, que era muy anciano, y por eflo el beneficio de la
ropa no bailaba á defenderle de el frío : Et Rex David fe-i.
naerat , babebatque atatis phrimos^dies , cumque operire^
tur vejlibus non calefiebat,
l Ellas pruebas fon tan concluyentes , que no dexari
algima falida. Y en verdad que pocos fe hallarán en nueflros
tiempos , que fiendo tan fobrios , y de tan buen tempa-
miento como David, no lleguen á la edad feptuagenaria con
pías vigor.
4 Ni yo entiendo como el error de la decadencia de I¡t
¡vida humana fe ha hecho tanto lugar; quaudo todas las Hiílo-
rias antiguas, afsi Sagradas, como Profanas ( exceptuando
lasfabnlofas) nonos reprefentan los hombres mas duraderos
en los paitados Siglos, que en los prefentes. Poquifsimos , o
rarifsimo hombre,que paffane de cien años,fe halla en Efcrko-:
íes Griegos, ni Romanos: en quienes generalmente los o&ua-í
genarios, y nonagenarios fon ponderados por longevos , co«
irjo en nueflro tiempo. San Juan Evangelifla es llamado de
muchos el Mathufalén de la Ley de Gracia: Y fegun el Car-f
denal Baronío no vivió mas de noventa y tres años. Pimío e«
el libro feptimo de fu Hiíloria natural cap. 48. cuyo titulo es
de Spatijs vita longifsimis, cuenta de intento los Roma-
nos , que duraron irregularmente en los Siglos próximamente
antecedentes al fuyo , y feríala por vidas larguifsimas la de Lt-
yia de Rutilio, que vivió noventa y fiete años, la de Statiliá,
que vivió noventa y nueve , la de el Pontífice Metello, 1

y la de Perpenna , que vivieron noventa y ocho , la de Marco


¡Valerio Corvino , que llegó á ciento. Y la vida mas larga que
leyere coa cuenta .fixa entre los Romanos, es la de, Clodia,;
gue
DISCURSO DUODECIMO. 33 j
ijuè vivió elenco y quince años. De los Eftraiigéros, en quien
mas fe eftiende es en Argantonio Gaditano, que Rey.no ochen-
ta años, entrando á Reynar à los quarencade edad. Es verdac|
gue Siiio Italico lib. 3 . le dà à eñe Rey trecientos años.

•- »•••' •Ditìfsìmus avi


Terdenos áteles emenfñs bslliger annosi

Pero à los Poetas los recularemos fiempre para teftigos. Lu«í


ciano , que trato efta materia con mas extenfion que Plinio¿
en el libro intitulado de Macrobijs, difeurriendo por toda la
antigüedad , y excluyendo d o s , ò tres edades reputadas por
íiibuloías , feñala muy pocos hombres, que pallaron de cien
años, y la vida que cuenta mas larga es la de el Hiftoriadog,
Ccefijjio, que llegó à ciento y veinte y quatro.

§. I I.
f fi ORA pregunto. Que País ay , donde oy no íe
vea vno , ù otro , que llegan , y pallan de cieií
años ? Dentro de eñe Principado de Afturias, donde afsifto^
tengo noticia de muchos , y efpecialmente de vna muger , que;
vivió ciento y treinta y dos años. Pofsible es que en efta noti-;
eia fe añadieífe algo. Pero de eñe riefgo no eftuvo exempta
Plinio , ni otros Efcritores antiguos. L o que puedo aflegurac,
ton toda verdad, es que avrà dos años, poco m a s , murió áj
diíta;ich de media legua de efta Ciudad de O v i e d o , en vna
Aldeillamada Caxigal, en la edad de ciento y once vna
pobre mugti , llamada Marigarcia , aviendo coníervado fiera-*
pre el juicio laniísimo. Y oy vive en dicha Ciudad deOvie«¡
do Don AloufoMuñiz Presbytero, de edad de ciento y fletei
años, con bien fundadas efperancas de vivir no pocos masi
Pues en vna edad tan abancada , todos los di as và à celebrai?
el Santo Sacrificio de ia Miífa à lalglefia de las Religiofas de
Santa Clara, diñante mas de quatrocientos paífos comunes
de fu cafa : y buena parte de el camino es baftantemènte agrio.
Si eftos exemplos fe hallan en vn Pais, que à caufa de fu mucha
humedadno.es celebradopqr muy falubre ( bien que yo le
Jomo is 9i ' í S9
a i
154. SENECTUD DE EL MUNDO,
tengo por bueno ) mayores fe hallarán en los que gozan mas
benigno Cielo. En la Isla de Ceylán es muy frequente lle-s
gar los hombres á cien años; y el Capitán J nan Ribeyro Por-
tugués , en la Hifioria de efta Isla , que dio á luz el año de
L
IÍÍ85. dice , que poco ha fe vio allí vno de ciento y veinte
años , que fin bailón en la mano iba á oir Milla á vna Igleíia
diñante vna legua de fu cafa. Murió en Inglaterra la Con-
defa de Nefmunda, ó Nefmond en la edad de ciento y quaw
renta años. Madamufeiade Eckléflon , Inglefa también , mu-
rió el año de 1691. de ciento y quarenta y tres años : y eñe
es vn hecho confiante en toda Inglaterra. En el de 16¡ 5. fue
prefentado al Rey Carlos 1. de la Gran Bretaña Thomás Park t

natural de la mifma Isla , en la edad de ciento y cínquenta y


dos años , que parece fer murió el año figuienté ; porque el
Cavallero Temple en fus Obras Mifcelaneas le cuenta de cien-
to y cinquenta y tres años de.vida. Bien Cabida es la danca¿
que formaron en la Provincia deHeríord doce viejos, cuyas
edades acumuladas fubian á la fuma de mil y dofcientos años;
de modo , que vno con otro , tenían ciento,
6 El Chanciller Bacóu , que murió no ha mas de vn Si-
glo , en la Hi¡loria, de la Vida , y la Muerte , entre todos los
Papas que avian governado la Igleíia hafta fu tiempo , cuenta
fulamente cinco , que llegaron, ó pallaron de ochenta años: y
todos cinco fueron próximos á fu tiempo. Conviene á fa-
ber: J u a n X X I I Í . que llegó á noventa. Gregorio X I I . á no-
Venta y vno. Paulo I Í L á ochenta y vno. Paulo I V . á ochenta
y tres. Y Gregorio X I I I . á lo mifrno. Los tres vltimos no ha
•dos Siglos que murieron. Y afsi, en la Serie de ios Pontífices
cñá hecha la cuenta (de que los que mas vivieron) fueron cer-
canos a nueftra edad. Es verdad que muchos de la Primitiva
Igleíia no deben entrar en eñe computo , por averies anricír
pado la muerte el martyrio»

Efiando imprimiendo efte Efcríto , murió en efia


Corte Doria Juana Quatrin ,. Flamenca , afsi[tente en la
cafa de-el Jeñor Duque de Populi, de ciento y once años,,
y fué enterrada el dia veinte y nueve de Julio en la Parro-:
quia de San Martin*
DISCURSO DUODÉCIMO. 235

§. III.
5 T T 7 L argumento ,que á favor de la opinión vulgar;
%/¿ fe toma de las larguifsimas vidas de los hombres
ante-diluvianos, y los quefuccedieron próximamente al Di-:
luvio , no es de el cafo. Porque no negamos , que la vida
de el hombre aya padecido alguno , y grave detrimento
defde fu primer origen ; si folo que de muchos Siglos á en-
tapártele aya padecido, y que aora de prefente fe vaya
entechando cada vez mas, como pienfa el Vulgo. Señalan
los Autores varias caufas de la prodigiofa duración de aque-
llos Antiguos progenitores nueftros : como fu mayor fo-
briedad ; la mejoria de los frutos de la tierra , que deterio-
ráronlas aguas de el Diluvio ; alguna efpecial protección
de la providencia ;, la gran noticia de remedios preservati-
v o s , comunicada de el primer Padre á fus hijos, y nietos»
que defpues fe fué perdiendo poco apoco.
7 Arguyefe también con los exemplos, de algunos
Antiguos , muy poíieriores al Diluvio , que alargaron fus
dias con mucho exceflo fobre los nueftros : como Neftor,'
Rey de Pilo , que vivió trecientos años. Algunos Reyes de
Arcadia, que llegaron á la mifma edad. Otros de Egyp-:
to , que vivieron mil y docientos años. Juan de los Tiem-
pos , Efcudero de Cario Magno , que vivió trecientos y¡
íeíénta.
b A ello fe refponde , que Neftor vivió los trecien-
tos años en el País de las Fábulas. L o de los Reyes de A r -
cadia , y de Egypto fe defvanece quitando la equivoca-
ción , que en efto ay. Es el cafo , que cada año nueftro tie-
ne quatro de los que contaban por tales los Arcades , en-
tre quienes el año confiaba no mas que de tres mefes , co-
mo rehere Plinio : y afsi, los trecientos años de vida de
cada Rey venían á fer fetenta y cinco de los comunes. E n -
tre los Egypcios , como teftifícan Diodoro Siculo , y Plu-i
careo, aun era mucho menor el a ñ o , porque los contaban
por Lunas; y afsi, mil y docientos años Egypcios no lle-
gaban á ciento de lqs nueftros. La edad larguifsima de Juan
Gg a de
2 3 ó* SENECTUD DE EL MUNDO,
de los Tiempos es repelida como fábula por los mejoré!
Hiftoriadores. Fuera deque aviendo muerto efte hombre el
año de 1 1 2 8 . de la Era Chriíliana , probaria el hecho fien.;
do verdadero ( contra lo que fe pretende de la fuccefsiva.
decadencia de la vida de los hombres , afsi como fueron cor-
riendo los tiempos ) que feis. ,. ú ocho Siglos ha fe vivia
mas que los diez , ú doce anteriores: pues retrocediendo
todo efte efpacio de t i e m p o , no fe encuentra hombre al-:
guno que duraífe. tanto»

§. I V .

jp- T ^ O R lo que mira á las fuerzas corporales , fi dea


_|_ xamos á los Poetas lo que es luyo , conviene
á faber las Fábulas , como fon los prodigios que nos cuen-
tan de Hercules ,. no hallaremos algún excedo en los Anti-
guos fobre los Modernos.. N o huvo fuercas mas pondera*
das en la Antigüedad , que las de el famofo Athleta Milón
Crotoniaco. De efte lo mas que fe cuenta e s , que en los>
.Juegos Olimpicos. llevó fobre fus ombros vn toro á diñan-
cia de vn eiiadio, á quien mató luego de vna puñada,. y en fin
le comió todo en vndia. Steft0.-vltim.0-e3 verdad (lo que yo
no quiero creer ) refpeótode fu voracidad ,. era bien poca fu
valentía. :• porqué quien ay tan débil, que no pueda, llevar
fobre los ombros veinte vezes mas pelo qae dentro de el
y

eftomago ? Como quiera que fea , juzgo que aquel célebre


Sottllo , á. quien, el Siglo paitado vio todo Madrid arrojar
adulancia de doze palios, vna piedra, que petaba quatro
quintales, podría cargar fobre fus efpaldas triplicadopefo
por lo menos ; y no-peía tanto vn buey de los comunes. Ni
¡hallo mas dificultad, en que,fabiendo.-dirigir el golpe, derri-.
baífe vn toro de vna puñada.
10 Floreció en tiempo de Augufto-el Centurión JiH
sxio Vaientc ,llamado, por fu incomparable robuftez, el Her-
cules de aeiuel t i e m p o , de auien con admiración dice Pli-
ftio,que tenia en-pefo vn carro cargado hafta quede exo-
neraífen de el todo. Ello mifmo en nueftros días ¡o oímos
¿ecir de el Padre Fray Francifco Zoquero., Religiofo. de
DISCURSO DUODÈCIMO. 237
San Francifco, natural de Riofcco , à quien yo. el aáo dd
1 7 0 5 . en Valladolid vi hazer pruebas no inferiores de fus
grandes fuercas. Omito otros muchos exemplares de hora-,
bres robuílifsimos de ellos tiempos : porque á penas ay¿
quien à cerca de efto no tenga bailantes noticias.
11 Oponen algunos, que en otros tiempos teníanlos!
hombres robullèz para refiílir algunos remedios violentos,;
que oy no pueden. Galeno dice , que en tiempo de Hyno-:
cmtes fe vfaba de el Veratro blanco vehemente vomitorio,;
que ya en fu tiempo no podía, fin rielgo , darfe aun á los
hombres de fuercas confiantes. Oponen también , que por
la mifma razón no fe fangra aora tanto como en tiempo;
de Galeno. A lo primero fe dice , que Hypocrates no
daría aquel vomitorio , fino à fugetos de efpecial reíiílen-»
eia , y medida con gran circunfpeccion la Dofís : lo oriu!
también oy fe podría hazer. A lo menos hemos vifto ;:d-¡
miniñrar alguna v e z , vna y e r v a , que en- Galicia íe ila-
ma Terva de Lobo ( no fabemos que nombre tiene entre
ios Profeílores, ) que es vehementifsimo vomitorio , y
aunque el enfermo tuvo harto trabajo , fe librò enteramen-
te de vnas tercianas terribles ,. y contumaces : para cuya
enfermedad en partes de aquel Re y no vían los Labradores
felizmente de efte remedio. La fegunda objeción fe retuer-
ce : porque íiendo cierro ,- que-Hypocrates no fangraba
tanto como Galeno , fe inferirá de el mifmo m o d o , que en
tiempo de Galeno eran los hombres mas- robuílos, que ent
tiempo de Hypocrates : y por consiguiente , que en los feis
Siglos que pallaron de Hypocrates á Galeno , crecieron los
hombres en fuercas , en vez de difminuirlas. L a verdad es,,
que Galeno en qualquicra tiempo que huviera nacido fan-!
graria mucho , porque effe era fu capricho : y fuera mejor
que no huviera nacido jamás , porque no fe fangrafíe tanto-
en el Mundo ,. como fe ha hecho defpucs que llenaron el
Mundo los Sectarios de Galeno. De los qnaies aun oy algu-
nos derraman la íangre de los hombres , corno fi fuera d $
fieras, Enel Difcurfo'de el abufo de la Medicina apun-
tamos dos inflgnesexemplos modernos
de cfta tyrana pradlca..
238 ' SENECTUD DE EL MUNDO,

r
iz >"T AM->OCO en el fácil, y perfecto vfo de las fa-¡.
Í

J[ cultades vitales, y animales en edad algo ade-;


lantada , fomos inferiores á los antiguos. Plutarco en la vi-
da de Pompeyo dice, que todo el Excrcito Roraano cele-
braba verá aquel Caudillo en la edad de cinquenta y ocho
años manejar el cavallo, y las armas, como pudiera otro en lo.
mas florido de la juventud. Y creo que no ay Excrcito oy etj
E u r o p a , ni aunen el M u n d o , donde no fe hallen algunos
Soldados de igual robuftez en la mifma edad. Siendo niño leí
la Relación imprefla de la conquifta de vna Plaza de Ungria,
en tiempo de el Emperador Leopoldo , en que fe decia , que el
TurcoGovernador de la Plaza fiendo hombre de ochenta años,
pareció en la brecha, jugando ferozmente dos alfangcsfo-
bre los Catholicos. El año de (iete de el prefente Siglo murió
Orangzeb Emperador de el M o g o l , con cien años cumplidos
de vida , como refiere el Padre Francifco Catrou , Jefuita , en
la Hiftoria General, que compufo de aquel Imperio. Y con-
fervó elle Principe hafta lo vltimo de fus dias, fegun el mifmo
Hifioriador , toda la fuerca de vn efpiritu prompto , y de vn
corazón guerrero , muriendo en fin en la Campaña en medio
de aquellas Tropas , que la agitación de fu genio ambiciofo
avia tenido fiempre en movimiento. Eneas Sylvio , refiere de
Federico, Conde de Cillei en la Stiria , que en la edad de
noventa años excedía al masdefordenado joven en incontij
nencia, y glotonería.

§. VI.
'ij I ~\E lo dicho fe infiere,que no es oy mayor la
. J L J ' gravedad , ó el numero de nueftras dolen-
cias , como comunmente fe dice : pues fiendo ai s i , nos de-
biütáran ias fuercas , y acortaran la vida , contra lo que que-
da demonftnjdo. Es verdad que v n a , u otra enfermedad fe
padecen en elfos tiempos , de las quaics no fe halla noticia en
los Efcricores antiguos de la Medicina , como el efcorbuto , y,
DISCURSO DUODÉCIMO. I 30
¡a infección gálica ; fin embargo de que algunos pretenden lo
contrario. Señaladamente Valies en el quarto de las Epide*
mías, juzga aver hallado en Hypocrates el contagio vene«¡
reo,
14 Pero efto nada obíta. L o primero : porque comcí
dice San Anguftin en el lib. 2 2 . de la Ciudad de Dios , cap, 22¿
no todas las enfermedades fe hallan en los libros de. los Mé-
dicos : y afsi pudieron padecer ios Antiguos algunas, de que
ellos no nos ayan dado noticia. L o fegundcrporque pudo com-
penfarfe el nacimiento de las nuevas enfermedades con la ex-*
tinción de otras , que reynaron en otros Siglos. Afsi, que co-
mo es verdad , que vnas enfermedades nacen , lo es también
que otras mueren. Plinio en el lib, 26. cap. 1 . haze memoria
de algunas, que avian ocafionado no leves eftragos en los
tiempos antecedentes, y ya en el fuyo no avia veftigio de
ellas: como la llamada Gemurfa , que tenia fu principio en-
tre los dedos de los pies. De la lepra dice, que. aviendofe e.r--
pezado á ver en Italia , en los tiempos de el Gran Pompeyó,
muy preftodefapareció. Y afsi concluye admirando, que vnas
efpecies de enfermedades duren en el Mundo , y otras fe
defvanezcan - Id ipfum mirabile olios morbos defiriere inno~
bis, alios durare.
15 Muchos Médicos no vulgares, aviendo obfervado
que los accidentes de el contagio venéreo, defde fu primer ori-
gen le han ido mitigando mucho (porque parece que cfte mal,
contra las reglas comunes , nació gigante , y creciendo en la
edad, fe fué diminuyendo en la criatura ) hazen juicio de que
llegará á extinguirle de el todo. Y es muy de creer , que
como ay enfermedades pendentes , ó epidémicas , que duran,
yá vn año „ yá d o s , ya mas, yá menos ,. fegun es mas , b
menos fácilmente difipable la imprefsion maligna de el am-
biente , ó la fermentación fubterranea que la ocafiona r afsi
ay otras, que naciendo de caufa mas tenaz , y firme, tan
den mucho mayor tiempo en diliparfe. Efto parecefer loque
mas vcrifimilmente puede difeurrirfe íobre aquellas enferme-
dades, que dominando algún efpacio largo de tiempo, vinieron
adefaparecer.
También puede congeturarfe ? que aunque pare-*
140 SENECTUD DE EL MUNDO,
eè que algunas efpeeies de enfermedades vienen de nucVó af
M u n d o , y otras falen de e l , en realidad no es afsi ; fino
que vaguean de vnas Regiones à otras : porque todas las;
porciones de la tierra fon Paites abiertos à eftos enemi-
gos , que expeliéndole mutuamente , oy los dominan vuos^
mañana otros. De hecho la experiencia mucura , que en
varias Provincias reynan vn tiempo algunas enfermedades
de las comunes padeciendofe con frequencia , y defpues fe
aufentan, ó fe padecen muy rara vez ; lo que puede atrH
buirfe al fomento que les preftan los hálitos fubterraneos¿
los quales varían , fegun varían las materias que fermentan'
gn las entrañas de la cierra.,

§. V I L
*7 quanto à la virtud propagativa , podemos"
JL_¿ afsimifmo aífegurar , que no recibió algún me-
flofcabo la efpecie humana defde fu origen halla aora. En el
Cementerio de los Santos Inocentes, dentro de la Ciudad de
P a r i s , fe lee el epytaphio de Jolanda Bailli, muger de DioiryJ
Ko Capeto , que aviendo fallecido en ochenta y ocho años de
edad , llegó aver dofcientos y ochenta y ocho delcendientes
fuyos : dicha que tendrá pocos, ó acafo ningún exemplo, eti
los veinte Siglos antecedentes.
i3 L a propagación mas prodigiofa que fe obferva cij
las Hifiorias , es la que huvo en los trecientos años imrnedia-'
tos defpues de el Diluvio. Murió Noè trefeientos y chiquen-;
ta años defpues de aquel eftrago vniverfal. Y refiere Philon
Jud¡o en fus Antigüedades Bíblicas, que aviendo contado tc~:
da la fuccefsion , que tuvo por fus tres hijos, poco antes de fu
muerte , halló en la defeendenoia de Chàm ( fué la mas nu-
merofa ) dofeicatas quarenta mil y novecientas almas. Ello
parece mucho 5 y es poco , ó n a d a , rcfpecto de lo que fe
dirà aora , y con que fe probará , que Philón no echó bien la
cuenta. to

19 Entró á Reynar Nino en la Monarchia de los Afsi-í


ríos, fuccediendo á fu padre Belo, ó Nemrod, docientos y qua-
renta y; nueve años defpues de el Diluvio» Y refiere Diodoro
DISCURSO DUODECIMO.' 241'
Siculo fobre la autoridad de Cteiìas, que yendo á combatir á
'.eñeMonarcha , Zoroartres,, Rey de los Baárrios , convn Exer-j
cito de quatrocientos mil hombres , junto Nino en el fuyo vn\
millón y fccecientos mil entre Infanteria , y Cavalleria. De CUH
yo excefsivo numero de Tropas fe colige la multiplicación que
huvo en trecientos, ò menos años : que parece prodigiofa»
aun quando en el Mundo no huviefle mas gente que la que fe
aliño debaxo de las Vanderas de los dos Reyes.
20 Bien sé que Cteíiasno erta reputado por Hifloria-*
'dor muy veridico ; y también s é , que algunos Chronolo-,
goshazen muy pofterior à Nino refpecío de aquellos tiempos,;
colocándole en los de Barak, y Debbora, Juezes de Ifraél^
Sin embargo dire , que por la cuenta, que reinita de la multi-
plicación grande del Linage Humano en los Siglos immedia-i
tos al Diluvio, ni fe debe negar la antigüedad, que hemos di-i
cho à Nino , ni condenarle por fabulofo el numero degente^
que componía fu Exercito : porque en nreft *>s dias fe v i o
ütra multiplicación , fi no mas , no menos admirable, nota-;
da en el gran Diccionario de Moreri, y copiada de vna Carta:
de Amfterdàn, cuya Hirtoria referiré aqui brevemente, por^
que es curiofa.
2r Navegando el año de 1590. àzia las Indias Orienta^
les vna Flota, compuerta de quatro Navios Inglefes, fué fot-;
prehendida de vna violenta tempeflad cerca de lá Isla de Ma-;
dagafcar , que hizo perecer luego tres vafos , y arrebatando
al quarto hafta vna Isla , llamada oy Pinés , colocada á veinte
y ocho grados de latitud Auftral, le rompió en los efCollos,
que cercaban la ribera. De cuyo infaufto accidente folo fe fai-.
Varón à favor de algunas flu&uantes tablas vn hombre , y
quatro mugeres, que eran vna hija de el Capitan de el N a -
vio , dos criadas fuyas , y vna efelava Mora. Saliendo eftas
cortas reliquias de el naufragio à la Isla dicha , la hallaron
defletta de hombres , y aun de fieras; pero bien poblada de
frutas comeftibles, y de aves, que les contribuían gran nume-;
ro de huevos. La impofsibilidad en que fe hallaban de paf-i
far à otra parte, los precifsó á ertablecerfe en aquel Sitio : y
el apetito confederado conia liberrad , concedió à vn hom-
bre folo el vfo de impe¡;ÍQ maridable íobre quatto mugeres,
h ' " U§ ~ ' " gomo/
24^ SENECTUD DE EL MUIÍDO,
Como también la afectada cxempcion de ias leyes de el paréfí-,
tefco á fus defcendientes ¡mmediacos ; con que fué creciendo
aquella Colonia fundada por el acafo,fin que huviefle noticia de
ella en parte alguna de el Mundo : halla que el año de Í66J,
navegando vn Navio Olandés buelta de el Cabo de Buena-Ef-;
peranca, fué conducido de otra tempeftad á la mifma Isla, y
aviendo defembarcado en ella, quedaron abfortos quandoen
vna parte tan remota de la Gran Bretaña oyeron á los ha-
bitadores hablar la Lengua Iñglefa. En fin por ellos fupie-
ron la referida Hifioria : y { l o que haze á nueftro intento )
que poblaban ya la Isla de once á doce mil individuos.
22 Supuefto eñe hecho , y que efta gente en el ef-
pacio de fetenta y fiete años , fe multiplicó de el numero
de cinco al de once mil , fi por regla de proporción fe
haze la cuenta de el numero á que pudo mi.l:ipl¡carfe en
los ciento y cinquenta y quatro años fignientes ( que fon
los fetenta y líete duplicados ) figuiendo la mifma progref-
fion , refultan al cabo mucho mas de mil millones de in-
dividuos. Con que en el efpacio de dofcientos y treinta y
Vn años , fi fe fueífe multiplicando aquella gente en la
proporción que en los primeros fetenta y fiete , de cinco
individuos fe fubiera á la fumma de mas de mil millo-
nes de Almas. Es verdad, que los cinco individuos prime-:
ros fe deben contar por ocho , por quanto en el principio
Vn hombre fuplió por quatro-de fu fexo. Pero fiempre fi-
le ella multiplicación muy excefsiva , fobre la que arriba fa
ponderó immediata al Diluvio , formando la cuenta fobre
feis perfonas que la empezaron, conviene á faber, los tres
hijos de Noé , y fus mugeres , y refulca numero mas que
triplicado de gente , que la que compufo ambos Exercitos
de N i ñ o , y Zoroaftres.

§.' V I I I .

23 " P L exceflo de los Antiguos en la corpulencia , es


JL-> otro capitulo por donde pretenden algunos con-
vencer la decadencia de el Genero Humano en los Modernos.
Pero ELTE exceflo no efta baftantemente comprobado, por mas
que
DISCURSO DUODÉCIMO. 243
qué ños citen varias Hiftorias de cadáveres de prodigiofa
eítatura. Los Autores dignos de fee no dan noticia de
aver vifto cadáver entero , cuya eítatura exceda á la de al-;
gunos de los próximos Siglos ; si folo de vno , ú otro
huello feparado , quales fe confervan aun oy algunos en ga-
villeros de curiólos, Pero los Sabios can todos convienen
en que vnos fon de Elefantes , 6 Ballenas, y otros de m a -
terias petrificadas. En las Tranfacciones Philofoficas de I n -
glaterra de el año 1 7 0 1 . fe refiere , que pocos años antes el
Pueblo de Londres creyó fer mano de vn Gigante cierta
ala de vna pequeña Ballena, que confia de el mifmo numero,
de junturas , que la mano de el hombre.
24 San Auguítin en el lib. i¿.de la Ciudad de Dios^
cap. 9. cuenta aver vifto en la Ribera de U t i c a , vn diente
molar, que abultaba por ciento de los comunes ; pero no
con certeza , si folo opilativamente dá á entender, que af-
.íintió á que era de cuerpo humano : Alicuius Gigantis fuij-
fe crediderim. Mas verifimil e s , que fuefie de vna de aque-¡
lias Ballenas, que el Latino llama : Cetus dentatus. Es v e r -
dad, que el Santo en el capitulo citado fe inclina á que huva,
en los tiempos antiguos cuerpos de tan enorme grandeza;-
pero es fobre la fe de Virgilio , cuyos verfos cita , en el
duodécimo de la Eneida, donde dice , que Turno le arrojo?
á Eneas vna piedra, que doze hombres robuftos de efte tiem-
po (fe entiende el tiempo en que el P o e t a d o eferivia ) no
podiian mantener fobre fus ombros. Pero Virgilio en efto
no merece el menor aííenfo, ya por la licencia poética, que
tenia para mentir, ya porque no hizo otra cofa que trasla-;
dar al combate de Eneas , y T u r n o , lo que Homero avia
referido en el lib. 6. de la Yliada de el combate de E n e a s , y¡
Diomedes , rebaxando folo á la piedra el pefo correfpon-
diente á las fuercas de dos hombres : pues Homero dice,'
que Diomedes le arrojó á Eneas vn peñafeo, que no p o -
dían levantar de el fuelo catorce hombres de los mas fuer-*
tes de fu tiempo. Quien podrá creer efto , fabiendo que la
ruina de Troya, fegun el computo mas probable, fue ante-
rior á Homero aun no feifcientos años cabales? Es creíble,'•
<|ue en efte efpacio de tiempo fe menofeabaííe la eítatura, •
2.44 SENECTUD DÉ EL MUNDO,'
y fuerça de los hombres tan enormemente, que n o pudíeflefi
catorce hombres valientes tener en pefo la piedra que antes
arrojaba vno folo? Afsi Juvenal en la fatirá 1 5 . tuvo poca
razón para affentit à la decrefeencia de los hombres fua^
dado en ella ficción de el Poeta Griego.
Nam ggnus boc vivo iamdeerefcebat Homeroi
Terra malos bominesnunc edueat^ arque pujíllosi

Otra t a l , y tan buena, o mejor à vn que las paitadas cueft^


ta Sali-Gelil, Autor Arabe , aunque no era Poeta , finoj
Hiûoriador , en fus Annales de Egypto : eílo es averfe def-j
cubierto en aquel Reyno vn hueífo de el eSpinazo de vit
hombre , que con gran dificultad conduxeron en vn carro
quatro efeogidos bueyes, no muy largo trecho.
25 Pero dexèmos ellas cofa para que las crea el Pa-
dre Martin de el R i o , como creyó todo lo que halló eferi-:
to de los Gigantes Sicilianos. Y que mucho ? Hombre eru-
ditifsimo ; pero tan fencillo, que creyó que vna muger avia
parido vn Elefante , porque lo leyó en AÍexandro ab Alexan-i.
dro : y AÍexandro ab AÍexandro lo eferivió, porque lo avia
leido en Plinio.
16 Y a no es nuevo engañar al P u e b l o , ó engañarte
el Pueblo creyendo fer hueífos de Gigantes , los que en
realidad lo fon de algunos brutos de mayor eílatura : pues
Suetonio hablando de Augufto, dice , que tenia en fu Pala-
cio de Capri algunos de eflos , que en el común paitaban por
hueffos de Gigantes : es£des Jüas non tàm fiatuarum , ta-
bitlarum qua p'tciarum ornatu , quam rebus vetujiate, ae
varietate notabUibus excoluit, qualia funt Capreis immanium
belluarum ferarumque membra pragrandia , qu£ dicuntur
Gigantum offa.
zj L a Sagrada Efcrkura, aunque varias vezes habla"
'de Gigantes , folo de dos determina la eílatura , y aun la
¡de vno no con toda precisión. Dice , que el lecho de Og,
R e y de Bailan, tenia nueve codos de largo. De Goliat , que
era alto feis codos , y vn palmo. L a relación que hizieron
?ü! Pueblo de ïfraèl los Exploradores de la. Tierra de Cha-v
DISCURSO DUODÉCIMO. ' i¿^i
flaañ diciendo, que avian vifto allí Gigantes tan monítruo-?
fos, que en comparación fuya no eran ellos mayores quei
Langoftas : Quibus comparati qua fi locufta videbamur , ef-
¡ta reputada entre todos los Expofitores por hyperbolica, y,
aun por mentirofa , íiendo el fin de los Exploradores , co-3
mo fe colige de el Texto Sagrado , amendrentar al Pue-,
jblo, y à fu Caudillo , para que no fe empeñaflen en l s
iconquifta de aquella Tierra. Con que quedándonos folo la
medida de O g , y G o l i a t , y rebaxando á la eílarura de O g
hafta dos codos, en que es muy veriíimil le excediefle el l e -
cho , no es cofa que nos alfombren los Gigantes antiguos;
pues entre los modernos fe han vifto algunos cafi de el mif-
tno tamaño.
28 En las Memorias de Trevoux es citado Juan Be-;
cano , famofo Medico Brabantino ( aunque no de el vitimo
Siglo , como dicen , por equivocación , l o s Autores de eftas
Memorias, fino de el antecedente, pues fobrevivió pocos?
anos à Carlos V . de quien fue eftimado ) en fu libro , in-:
titulado: Origines Antuerpiance : donde dice, que en fu edad
fe vieron , y el los vio , hombres de feis , ò flete codosf
de altura. Son fus palabras : Septem vel [ex cubitorum ho¿
mines nojlra quoque átate accidere : vidimus enim mulierem
decem pedes al: i*-?-. Iuvenem ítem novem pedibus non multò mi-
norem ::: fiatura eft Gigantea quidam Heratenfis ad decem
prope pedes longus. En vna Aldea de el Valie de Lemos¿;
Reyno de Galicia, fe viò poco mas ha de veinte años vn m u -
chacho, que á los flete años excedia la eft atura regular de vn
hombre perfecto. Murió en aquella edad , aviendo eftado
cafi continuamente enfermo defde que nació , aunque fe cui-'
dò mucho de èl, con animo de prefentarfele al Rey»

§. IX.
A VIENDO probado, que en la efpecie humana
J~\ de veinte Siglos à efta parte no ha avido
decadencia alguna , eltà por configuiente convencido qué
nolahuvo tampoco en todo aquello, que comunmente firve
§ la vida de el hombre. La razón es tiara, ; porque fi los.
*9c
i.\6 SENECTUD DE EL MUNDO,
ínfluxos celeftes, ó los alimentos , que nos preñan las plan-
tas , y los brutos, fe huvieran deteriorado , en nofotros
refultaria el daño , y afsi feriamos mas débiles, y de vida
mas corta.
j>o Algunos Autores, que eílán por la opinión co-:
mun de la feue&ud de el M u n d o , alegan lo primero, que
faltan oy algunas efpecies en el vniverfo, que huvo en los
pallados Siglos ': como entre los pezes el Múrice , 6 Purpu-
ra , con cuya fangre fe teñían los vellidos de los Reyes:
entre los brutos el Monoceronce , 6 Unicornio : entre las
aves el Fénix : entre las plantas el Cinamomo: entre las
piedras el Amianto , de cuyas fibras fe hazia el lino llama-
do Asbeflino i 6 Incombustible. L a falta de ellas efpecies
arguye , que en la tierra falta virtud para producir las in-
fenfibles , y que en las fenfibles fe fué difminuyendo la
virtud prolifica halla extiriguirfe de el todo : de donde fe in-;
riere, que fucederá lo mifmo á las demás.
31 Refpondo , que ninguno de los Autores , que di-;
cen ello , tuvo prefente todo el Mundo , como mi gran
Padre San Benito en aquella prodigiofa Viíion , que refiere
fu Choroniíla San Gregorio , para ver fi ay , ó no en él
todas las efpecies que le hermofearon al prin i^ ' o . Es cier-
to que algunas cofas fe dicen fin bailante e--..nien , y fe
aífeguran con ligereza : pues empezando por lo vltimo , el
lino Asbeftino le ay o y , y fe cria en Chinchin , Reyno de la
Tartaria Mayor , como aífegura el Padre Kirquer en fu
China lllufirata , y otros muchos. Pero no be menefter
Autores que me lo digan : porque yo mifmo lo v i , y pro-:
be , no texido, fino fuelto en la forma de vn fútil algodón-
cilio , aunque no tan blanco , si que tira algo á cenicien-
to : y aviendole pueftoenvn intenfo fuego por buen rato*
falió fin perder ni el mas tenue filamento. L a Purpura no
faltan Autores que digan fe halla oy en algunas retiradas
Collas de el África ; aunque el dilige'ntifsimo Gefnero di-
ce , que no tiene noticia de que aparezca aora en parte al-
guna de el Mundo. Mas verifimil e s , que aya faltado el
conocimiento , que la exiílencia de eñe preciofo pececillo.
En, quantq al Monoceronte , Gefnero cita varios Autores,»
'' que
DISCURSO DUODÉCIMO. 24,7
que afTeguran que aun perfevera fu efpecie. El Fénix no es
mucho no le aya oy , pues nunca le huvo. Dicen , que fe
yió en los tiempos de Sefoftris , Amafis , y Ptolomeo,
Reyes de Egypto. Seria como el que fe traxo á Roma en,
tiempo de T i b e r i o , de el qual aííegura Plinio , que era
mas claro que el Sol , no fer verdadero Fénix , fi no otra
ave muy diftinta. El argumento tomado de la Efcritura, que
en la boca de el Santo J o b le nombra , no prueba : porque
efta voz fe tomo de el Griego , eij cuyo Idioma la v o z
Fénix fignifica Palma. Y afsi leen muchos_: Sicut Palma
multiplicaba dies meos, en vez de Sicut Pboenix. Finalmen-
te fi falta el verdadero Cinamomo , y otras plantas , no
es fácil faberlo : porque las noticias de ellas ya fe eíconden*
ya fe manifieftan. En la Hiftoria de la Academia Real de las
Ciencias fe lee , que los Botaniftas Modernos defeubrieron
halla quatro mil efpecies de plantas ignoradas de los A n -
tiguos. Diremos por efto, que todas eftas efpecies nacieron
de nuevo en eftos tiempos vltimos ? N o por cierto, lino que
las avia antes ; pero no eran obfervadas.
32 N o feria tampoco inconveniente conceder, que
vna , ú otra efpecie de poca monta, y fin cuyo vfo puede
pallar bien el hombre, fe aya extinguido : porque efio pa-
ra el todo de el Mundo es cafi infenfible. A la verdad no
fe puede aífegurar , que entre tan innumerables efpecies,
todas fe ayan confervado halla aora ; fino es fuponiendo de
doctrina de San Augufiin, de San Gregorio, Santo Thomas,
y otros Doctores, que como cada hombre tiene vn Ángel de-,
putado para fu cuftodia, para cada vna de las demás efpe-
cies materiales eftá afsimifmo deputado otro Á n g e l , que
Vela para la confervacionde la efpecie , como en los hom-
bres para la de el individuo. Eíta doctrina fobre fer vene-
rable por fus grandes Patronos, tiene folido fundamento
e
'i la Sagrada Efcritura. Porque en el cap. 1 4 . de el A p o c a -
lypfi fe habla de vn Á n g e l , que tiene poteftad fobre el Fue-
go ; y en el diez y feis fe llama otro el Ángel de las Aguas:
uonde el fentido mas natural es , que eftos dos Angeles cui-
dan de la confervacion de los dos Elementos.
31 Alegan lo fegundo ¡ que no fe hallan oy en muJ
chas.
348 SENECTUD DE ÉL MUNDO,',
chas plantas las eñcacifsimas virtudes , que celebran ios
Eícrkores Antiguos. Refpondo que tampoco fe hallan cu
a

ellas las que celebran los Efcritores Modernos, Si fueífe


yerdad todo lo que nos dicen los Botaníftas , ó Herbola^
l'iosde los vltimos Siglos de las virtudes de infinitas ycr-,
v a s , convn pequeño huertecillotendría qualquicra lo baf-
íante para inmortalizarfe. N o ay gente que dé menos lo
que promete , que los Médicos. No ay dolor que en fus
libros no tenga mil remedios; y los mil no fon vnoenlle-;
gando á la execucion. Valles con fer de la profefsion conn
íielfa, que en ninguna cofa mienten , 6 defvarian mas los
Médicos , que en las virtudes que atribuyen á los medica^
mentos. Afsi no puedo menos de reir , que algunos Natu-
talíftas fe ayan quebrado la cabeza fobre averiguar , que
planta es aquella que Homero llama Nepenthes , tan eficaz
para regocijar el alma , y defterrar toda melancholia, que
con fuvfo fe paífaba fin dolor alguno por encima délos
nías terribles contratiempos ; y afsi la vfaba frequéntemen-
¡ce la hermofa Helena , como remedio feguro de fus difguf-
tos. L a dificultad eftá en que no fe encuentra oy planta a!-;
guna de virtud tan valiente ; y la dificultad es bien leve:
Porque fi mienten tanto en eíta materia los Médicos, y Na-;
fturaliftas, qué harán los Poetas?
54 Últimamente fe pueden oponer contra ñueftra
íentencla , los efiragos que hazen en la tierra las inundacio-
nes , y lluvias impetuofas , llevando gran porción fuya por
los RÍOS al Mar , con lo que es pr'ecifo, que en muchas par-
tes defnudando las peñas, ayan dexado varios efpacios eñe-
riles ; y en fin en la fuccefsion larga de Siglos podrá fuce-
der lo mifmo en todo el Mundo. Refpondo. Es verdad que
el Mar nos roba mucha tierra ; pero es falfo , que la robe
para no reftituirla jamás. De dos modos recobra la tierra
lo que la vfurpa el agua. El hio es , arrojando el Mar con
el tumulto de las ondas mucho limo , y arena á las orillas:
lo que fe vé claro en algunas partes donde el Mar fe ha re-
tirado por largo trecho de los antiguos términos. En nuef-
tro Monafterio de San Salvador de Cornellana en el Prin-
$ £ . d o de Añudas , ?.£ evidentes teíllnorüos de qu?
a
DISCURSO DUODECIMO, 249
{legaban allí losbaxeles ; y oy fe quedan mas dedos leguas
. oías abaxo. E d o es lo de Ovidio:

Vidi ego quod fuerat quondam folidifsima tellus


Effe freturn: vidi facías ex cequore térras.

• El otro modo es , exaltándote innumerables partículas ter-


reas en los vapores de que fe forman las nubes , las quales
defpeñandofe defpues en lluvias blandas., quedan pegadas
en las montañas, y peñafcos,y vàn haziendo coílra poco
à poco. L a mifma lluvia también fuele hazer tierra de la fu-,
perfide de las peñas, defatando con fu impulfo repetido 1a
firmeza de fu textura.
z5 L o s individuos, pues, aun en marmoles , y bron-
ces fe envegeeen , las efpecies , inmortales fe confervan. N i
nofotros podemos perpetuárnosla juventud^ n i e l Mundo
llegar a la decrepitez. Efto fu? lo que nos dixo Coltimela
en los elegantes verfos, que fe liguen:

Namque parens bominum aternam fartita inventa


Non fenio tellus , non deficit vbere partir,' 3

Sed facili vires, & fertilitatis honorem


Jie/ìituit cultu. Nos contra , cum femelannis
Invafit nulla reparabilis arte feneñus,
In peius ruimus, nec habet natura regrejfuv>)\

T o m o I. lì C O N-
**** **** **** * ** ****

CONSECTARIO •
A L A MATERIA DEL DISCURSO ANTECEDENTE

C O N T R A LOS P H I L O S O F O S

M O D E R N O S ,

D I S C U R S O XIII.

§. I.

^¥$№¡M V I E N D O en el Difcurfo paitado, pro 2

T/Étt^sM • hado , que el Mundo, ais i en fu todo,


como en el de cada efpecie fuya , no
padeció hafta aova algún fenfible de-
trimento , hemos de pr obar aór a , que
€ft el fyftema, ó fyftemas de la phiiofofia co r pufcula r , que
con tanta pr ofper idad cor r en en efte Siglo , no folo debió
padecerle muy gr ande;, per o ha muchos Siglos eftuvier a
refuelto en p o l v o , y acabado de el t o d o , fegun los pr iuci-,
pios de la nueva phiiofofia-.
2 Es máxima inconcufa de Renato D efe artes , fir -
memente r ecibida por fus fequaces , que el Mundo no pue-
de menos defer eter no , en tanto gr ado , que le niegan á
Dios toda potencia par a aniquilar ente alguno , fundán-
dolo en la r idicula r azón de que fe mudar la Dios fi avien-
dole antes dado la exiftencia , fe la quitafle defpues ; con
mucha jufiicia la llamo r idicula : por que la inmutabilidad
de DAOS queda iiefa , como no r etr ate el decr eto, ó pr o-
DISCURSO XIII. til
ponto que concibió ab aterno. Suponiendo , pues , que el
proponto que Dios concibió ab ¿eterno , fue que tai ente por
tal tiempo exiílieíTe , y por tal tiempo poílerior desalíe de
exiílir, no retrata el decreto , antes le executa , quitando
la exitíencia, al tiempo determinado, almifrao ente, que
antes avia producido. Mas : Si Dios fe mudaffe, hazien-
do que no exilia el ente que antes exiitia, también fe mu-
. darla haziendo que exifta el ente que antes no exiilia. Y ,
de efle modo , Dios nada pudo criar en tiempo ; fino que
debió criarlo todo ab ¡eterno , pena de quedar ociofo por
toda la eternidad , para no incurrir en la nota de mudable.
Mo es efte el vnico precipicio ázia donde refvala la doctrina
Cartefiana.
j Pero es cofa admirable, que aviendo Defcartes
foñado los entes tan de diamante, que no pueda deshazerlos
la Omnipotencia, concibió el Mundo tan de vidro , que á
fer como el lo concibió , no pudiera tardar mucho en fer re-
ducido á polvo. Firmemente creo, que fi Dios huviera he-
cho el Mundo como imaginó Defcartes , no llegaría el cafo
de aver Defcartes en el Mundo. D i g o , que formó elle Phi-
lofofo , fin penfarlo, vn Mundo de v i d r o , y fobre elfo pufo
fus partes vnas con otras en continuo choque : de que fe in-
fiere , que por poco tiempo podría dilatarfe la ruina, á fer,
quil el imaginó , fu eftruétura. Para probar "ello , ferá me-
nefler poner delante en compendio con la mayor claridad
pofsible fu fyílema.

§. II.
4 O U P O N E lo primero, que Dios crió la gran mafia
i l de la materia de el Univerfo, como vn cuer-
po inmenfo foüdifsimo , la qual luego, dividiéndola en par-
tes miuutifsimas , pufo en movimiento. Supone lo fegundo,
que efla divilion no las p u f o , digámoslo afsi , al primer
wipulfo, en figura esférica: porque muchos globos juntos
preciíamente avrian de dexar en los interfticios algún v a -
cio ( el qual en la doctrina Cartefiana es abfolutamente im-
pofsibi.es} fino en figura cubica, u. otra qualquiera qué
li x tea-
,252. CONSECTARIO;
tenga efquinas, ó prominencias defiguales. Supone lo té?.?
cero, que puertas vna vez. en movimiento las partes déla
materia , necesariamente fe ha de continuaren ellas da m'if.
ma cantidad de movimiento , que les dio el primer impid-
ió ; pero no de modo , que fimultaneamente ayan de ¿fiar
todas pueftas fiempre en movimiento ; si que la mifma can-
tidad "de movimiento aya de aver en el Univerfo , aumen-
tándole á vnas la porción de movimiento que fe quitare
a otras: para lo qual afsienta por regla fundamental , ó
ley. eftablecida por el Autor de la naturaleza , que ningún
cuerpo puefto en movimiento puede aquietarfe , fin comu-
nicar todo fu movimiento, á o t r o , 6 á otros cuerpos , o
la parte de el que perdiere , fino le pierde de el todo. Su-
' pone loquarto ,'que todo cuerpo'por fu naturaleza, 6 en
virtud de el impulfo comunicado por el Criador , fe mue-
ve con movimiento reóto ; aunque defpues el encuentro
de otros cuerpos le determine á dexar la rectitud/Supone
lo quinto , que íicndo impofsible moverfe algún cuerpo fin
expeler de ei lugar, á donde fe mueve , al que le ocupa-
ba antes, neceffariamente determina al cuerpo expelido á
' moverfe en circulo , para llenar el cfpacio que defocupa el
excelente: por lo menos , ya que no con todo cuerpo expe-
lido fuceda cito , ha de parar el impulfo en algún cuerpo que
fe mueva en el modo dicho : porque fi no, fe avia de procedes:
en infinito , impeliendo vn cuerpo á otro por via recta,
efte á otro ,' y afsi fin termino : y fobre efte inconveniente
avia el otro , de quedar vacio el lugar que antes ocupaba
el primer cuerpo puedo en movimiento.
5 Hechas eftas fupoficion'es , explica JDefcartes la
formación de el Univerfo de el modo ñguiente. Puefias-en.
movimiento, inmediatamente á fu creación, por rumbos en-
contrados las partes minutifslmas de la materia (que para
mayor claridad con el mifmo Defcartes fu ponemos d?-figu-
ra cubica•) fué preci-íb j que en los repetidos encuentros de
los ángulos de las vnas con dos de las otras , fe fucilen ra-
yendo , y deshaziendo los ángulos poro a poco , de mo-
d o , que vltimamente fe reduxeffen todas á-figura csierica.
En efta colifion .es.,co.nfiguieute , que las protuberancias
qiú-
DISCURSO XÍIL 2 5 ^
quitadas de las partes- de la materia para la formación de
los glób ulos , fe dividieffen en partículas de thfigual tama-
ño : vnas extremamente fútiles : otras mas craílas, y va-'
yiamente figuradas : como fucede en la contracción de cual-
quiera cuerpo duro , donde aunque la trituración , refpecto
de el todo , es la mifma , y dura el mifmo tiempo , fe ven
en la divifion vnas partículas minutifsimas, y otras de mu-
cho mayor mole. N o folo por la confracción de las'primeras
partes en que Dios dividió la materia, rcfultan cíias par-
tículas mas grueílas ; pero también fe forman incorporando-
fe, ó vniendofe en vna mole muchas partículas de lama»
teria fútil,

§. IIL'
<S T " \ E eñe modo eftán ya pueftos a lavifia los tres.
celebresElementos.de la.efcuels Cartefiana,
El primer Elemento, que fe llama ya materia fútil, yá- ethe-
?ea , yá celefte, confia de aquellos tenulfsimos ramentos,
ó polvillo mas menudo, y tenue-, que refultó de la cchU
{ion. EL legando Elemento , que fe llama materia glob uloía*
fe compone de aquellas esférulas que quedaren elfa figu-:
?

r a , por averíeles raidoenla coíííion todos los ángulos , yr


prominencias que antes tenían. ¥ las partículas mas craf-r
fas forman el tercer Elemento. Se dicen craílas r-efpeétiva-
mente á las de el primero, y fegundo Elemento : pues-r-eal-r
mente fon tan menudas que fe eícondsn á toda la perf-
t

picada de los lentidos , aun ayudados de qualefquiera in£-


trunientos. S o n , pues, las partes de el fegundo Elemento
mas fútiles que las de cltercsro , y las de el primero mas que
las de el fegundo,. '
7 Dividida la materia en los tres Elementos dichos¿
y continuando el movimiento- cómo tamb ién el repetida
[

encuentro-de-vnas partículas con o t r a s , no pudieron meó-


nos de perder luego el movimiento reóto conmutando*
к en-el circular, En- cuyo regreífo. fueron, mas-, veloces- las.
partículas mas tenues. L a razón es , poique ílsnde, los;
3

Sucrges mayores- ща& capaces; de gesfeverau Щ s í moví-*


CONSECTARIO, -
miento , ò impulfo adquirido, que los menores - y ¡Rendo
movimiento redo el que al principio fe imprimió à todas las
partículas, íi fe confiderà juntamente, que no fe les pudo
dar à todas el movimiento ázia vna parte ( porque fi la
extenfiondc la materia es infinita, no tenían à donde mo-
verfe , y si finita, fe moverían ázia vn efpacio imagina-
rio ) fino à partes opueftas, fe concibe neceflariamente vn
efpacio, que defocnpan las partículas mayores de la mate-
ria dividida , ázia donde buelven en giro las partículas me-
nores , por fer las que mas pretto , à razón de fu menor
mole,fon conturbadas de la re&icud de el movimiento.
•8 De efta fuerte fe entiende yà formado vn genero
de remolino , ó torbellino ( que no hallo otras vozesCaf-
tellanas , correfpondientes al fignificado de la voz Latina
Vortex, y à la Francefa Tourbillon, d e q u e v f a n l o s Car-
tefianos, que efcriven en las dos Lenguas ) en que la ma-
teria fútil , ó etherea, ocupa el medio , moviendofe fobre
el centro en continuados giros : inmediata à efta gira la
materia globulofa , ó fegundo Elemento , por fer la mas
tenue defpues de la etherea , y enei vltimo lugar déla cir-
cunferencia, gírala materia de el tercer Elemento, por fer de
mayor mole fus partículas.
9 He dicho que fe entiende formado vn torbellino:
efto es hablando de vn determinado efpacio. Pero en toda
la extenfion de la materia coloca eñe fyftema tantos torbe-
llinos , ó turbillones ( vfemos yá de efta voz Francefa, por
compiacer á los Cartefianos de Efpaña , que yà la intro-
duxeron en el Caftellano , pareciecdoles poco feguir la
Philofofia de Francia , fino figuen también el Dialecto Fran-
cés ) qnantos fon los Aftros, que refplandecen con propria
luz. Ni es otra cofa cada Aftro , que vna grande mafia, Q
agregado de materia fútil pura, que puefta en medio de
fu turbillon, gira continuadamente con fumma rapidez fo*
bre fu proprio exe. Inmediata à efta , y en torno de ella
ocupa la mayor porción de el turbillon la materia de el fe-
gundo Elemento , ó globulofa, ocupando también los in-
terfticios de efta otra porción de materia f ú t i l , para que
no quede, algún vacío i de modo que en el centro de el
x

tur-
DISCURSO XIII. i¿¿
íurbílloñ , para la formación de el A f r o , folo fe recogió la
materia etherea , que fobró para llenar los vacíos de el fe-
gando , y tercer Elemento. En la extremidad, ó circun-
ferencia de el turbillon eftá la materia de el tercer Elemen-
t o ; cuyas partículas porferde mayor mole , reuniendo mas
al encuentro de las otras, continuaron mas el movimiento
reno , ó quafi refto, obligando á las mas tenues á retroce-
der en circulo ázia la parte interior de el turbillon.
10 La tierra, y fus habitadores eStamos en vno de
éSlos turblliones , cuyo centro ocupa la materia fútil deque
fe compone el cuerpo folar : y afsi Defcartes en quanto
á la conílítucion de el Mundo abrazó elfyftema de Nicolao
Copernico , que colocando al Sol en el centro de el Orbe,
fin mas movimiento que el que tiene fobre fu proprio exe¿
trasladó a l a tierra los movimientos que en el fyficma c o -
mún fe atribuyen al Sol, Es cierto que todas las aparien-
cias fe falv'an bieh en el fyftema Copernlcaao. Afsi no
tuviera contras! la autoridad de la Sagrada Efcritura , co-
mo eftá indemne de razón que le convenca de falfo.
11 Como la materia fútil , que gira en el medio,:
afecta quanto es de fu parte el movimiento recto, el qual
le eílorva la materia globuíofa , que tiene ocupado el paf-
fo , no dándole lugar á que exercite fu rápido impulfo fino
ea repetidos tornos fobre fu centro , almiíino tiempo que
gira , ella haziendo continuo conato contra la materia g l o -
buíofa , cuyo impulfo por la contigüidad de todos los g l ó -
bulos fe propaga hafta los cuerpos denfos, constituidos en
la circunferencia de el turbillon. Efte impulfo es recipro-
cado con el contrario impulfo de la fuerca elaílica de los
cuerpos á donde para: y de los dos impulfos refulta, afsi
en la materia globuíofa, como en los cuerpos que la impe-
len , ó repelen, vn movimiento vibratorio , en quien co-
locan los Cartefianos la fenfacion de la luz : de modo, que
no es otra cofa en nueftros ojos la fenfacion de l u z , que el
movimiento vibratorio de la retina , que refulta de el en-
cuentro de fu elasticidad con la acción de la. materia glo-
buíofa : ni la fenfacion de color en los: objetos, otra cofa,,
jjue eífemifm.0 movimiento vibratoria refpec^ameme ¿.
?
a-5 6* CONSECTARIO,
la acción de la materia globulofa , modificado variamene
te, por la diverta textura eie las partes iufenfibles de los ob«;
jetos, en la reflexión que'haze de ellos.
12 Omitimos por evitar prolixidad la explicación de
otros Phenomènosen confequencia de elle fyftema', corno
también lo que difeurren los Certefianos de la formación de
el Globo de la tierra, y de los Planetas : en que fe hallar,
harto embarazados , pareciendo impofsible que en tan bre-
be tiempo , como nos enfeñá la Sagrada Hiftoria de el Ge-
nefis -, fe formaífen eftos grandes cuerpos , efpecialmeu»
te el de la tierra , con tanta , y tan hermofa variedad fo-
lo en virtud dejimtarfe , y enredarfe vnas partículas déla
materia con otras en la fucefsion de fus varios movimien-
tos. Por lo qual algunos de los mas cuerdos yà afsientea
i que Dios formò defde el principio la tierra, y los Plane-
tas en ei modo que oy fe v é n , fin fiar tales obras al ciego
movimiento de la materia.
15 Omitimos también las reglas de la comunicación
de el movimiento diableadas por Defcartes , de las quales
algunas fe defeubren encontradas con la experiencia : tanto,
que el Padre Malebranche , gran Promotor de el fyftema
de Defcartes , y gran venerador fuyo , de las fíete reglas
Cartefianas condeno lastres por faifas. Ni el aífumpto de eñe
D i fe arfo pide mas exacta explicación de el fyftema ,ni fe
pudiera hazer fin vfar de-figuras Mathematicas : por cuya
falta recelo, que aun lo que llavamos dicho , no fea muy
enteudido por los que eftán defnudos de toda noticia ante^
cedente.

§. IV.
- 14 / ^ I O N " muypoderofas razones han probado al-
V_j gunos Autores , que el Mundo no fe pudo,
formar fegun la idèa de Defcartes. A i primer paífo de fu
fyftema fe tropieza en el grande inconveniente de dar va-
cio , è infinitos vacíos en el Univerfo ( fiendo afsi, que le
tenia Defcartes tanto horror al vacio, que le juzgaba impof-
íible a la abfoluta Potencia de D i o s . ) L a rason, es clarad
Por,
DISCURSO XIIL 257
Porqué én la primera div;fion,y primer movimiento de h
materia , para encontrarte los ángulos de-vnas partes cubi-
cas con los de otras, era precito dexar internados en los la-
dos , los quales no podia Henar entonces la materia futí!,
porque aun no la avia ; formándote ella defpues con la re-
petida coliíion de vnas partículas con otras. La confervacion
déla mifma cantidad de movimiento en el todo de la mate-
ria, no tiene fundamento alguno: porque el que toman de la
inmutabilidad de D i o s , yate vio arriba en aftumpto terne-
jante quan futí! es. Ni tiene masfolidéz , lo que dicen deque
qualquiera cofa fe conferva en el citado en que cita , halla que
alguna cauta extrinfeca la mude : porque, fi fe mira bien, el
movimiento no fe puede llamar eflado de la cofa ; pues la ra-
zón de eflado dice permanencia, la quai es opuefla ai concept
to de movimiento.
15 Ellas, y otras muchas cofas ay contra el fyflema
Carccfiano ; pero no tiendo mi intento aora probarque el Mun-
do no pudo formarfe de el modo que pensó Defcartes ; fino
que auque fe hiziera afsi , fe avia de deshazer muy preflo : le
fnpotidremos hechofegun la idèa Cartefiana , para montaren
la breve confidencia de fu eílruítura , quan mal empleo el
tiempo Defcartes en tan caduca fabrica. Halla aora folofe
avia impugnado eñe fyflema , arguyendo de impofsible fu
formación. Y o le he de combatir , fuponiendo la íormacionj
y arguyendo de impofsible la permanencia.

§. V.
16 T ~ ? L primer argumento que ocurre à nueflro pro*
%2j pofito , es , que qualquiera magnitud que Dios
aya dido à la materia que crio al principio , fiendo magnitud
terminada , las partes conílituidas en la extremidad de fu cír-í
cunferencia , no teniendo yà otras al encuentro , que les eílor-
ven el movimiento recto alexandofe del centro, fe avian de ef-;
pareirpor el efpacio imaginario : Tras de eflasfe feguirian
las inmediatas, por carecer yà del freno que les ponían las vlti-i
mas, citando yà ellas difipadas por aquel inmenfo efpacio : Y,
afsi, procediendo halla el centro del globo total de la materia,
Tomo I, " " Jíl§ tpdc»
2 5S CONSECTARIO,
todo fe diííp aria á breve tiempo. Efta confequencia parece
for9ofa, fupuefta la máxima de Defcartes , que todas las par-
tes de la materia fe inclinan al movimiento re i c o , y folo el
encuentro de otras las determina al circular.
17 Efte inconveniente folo le podia evitar de dos ma-
neras , ó ciñendo todo el globo de la materia movida con vna
muralla tan diamantina , que ningunos embates de la materia
encarcelada, y en ninguna fuccefsion de tiempo pudieíTen def-
hazerla : 6 fuponiendo infinita la extenfion de la materia: por-
que de eífe modo, ni avria partes vltimasen la circunferencia,
ni reftaria efpacio á donde fedifiraífen. E l piimer arbitrio
»o era conforme á las ideas de Defcartes-, por loque abaxofe
dirá : fobrefer inconceptiblecuerpo de infinita dureza: pues
la opinión ^ que fe la atribuía á los Celeftes, cafi oy eftá de
el todo abandonada. Con que era neceífario recurrir al fe-
gundo : y de hecho recurrió Defcartes ,. aunque con algún em.
bozo : porque negando ai M u n d o , ó al todo de la materia
extenfion infinita, fe la concedió Indefinita i efto- es , no negó
que tenga términos ; folo afirmó , que ios términos fon inde-
fignables: demodo ,que feñalada qualqníera diftancia (pon-
gamos por exemplo , defde el fitio' en que eftamos) aunque
fe multiplique m a s , y mas vezes toda la diftancia, que ay de
aquí al Firmamenro , fiempre ay materia mas , y mas allá.
18 Pero efto no firve, para evadir la fuerca de nueftro
argumento. Porque fuponiendo términos á la extenfion de la
materia, aunque indeíiguab-les, fe deben íuponer partes vl-
timas ázia la circunferencia, aunque indcíígnabíes: y de ef-
tas procede el argumento, pretendiendo, que en virtud de
el impulfo que tienen al movimiento recio , no pueden me-
nos de efparcirfe á vn efpacio vacio indefignable,, ó cuyo prin-r
cipio es indefignable.

§. v i .
19 A nADESE á efto, que el fundamento de Defcar-
J~\_ tes,, para no poner termino al Mundo-, ó po»
nerfele indefigraa'ble, es ruinofo 'nafta no mas. D i c e , que á
«jualquiera. diftancia concebirnos extenfion; , fegun la trina
DISCURSO XIII. 259
dImfnGo-n de los cuerpos. De aquí infiere, que à qualquiera
diítancia la ay realmente : porque efta concepción viene de
vna idèa innata : y las ideas innatas, como impreflas por
el Autor de la Naturaleza, ertàn exémptas de toda falencia.
Conio, pues , la exteníion real , fea fegun fus principios
el conílkutivo de la materia ; fe ligue que à qualquiera dif-
unda ay materia : y afsi, lo que nofotros llamamos efpacio
imaginario, no es imaginario; fino real, verdadero , y cor-
poreo.
20 Para que fe vea quan r.uinofo , y aun peligrofo es
efte diíeurfo , apliquemos el mifmo à otro objeto. Es cierto,
que en elle efpacio, que oy ocupa el Mundo , confiderado por
rccroceíio de la imaginación antes que Dios criarte el Mun-
d o , concebimos exteníion , fegun la trina dimenfion , de el
miftno modo , que en el efpacio que oy llamamos imagina-
rio. Luego ya antes de criar Dios el Mundo la a v i a , y por
coaíiguiente avia materia. Luego la materia no fué criada
en tiempo, ò por lo menos no fué criada en el tiempo que nos
dice la Sagrada Efcritura : porque la idea de donde fale erta
confequencia, no hallo que fea menos innata, que la otra,
con que arguye Defcartes. De el tiempo imaginario , que
precedió ala creación de el Mundo , fe haze elrnifmo argu-
mente: porque en él concebimos la duración de vn dia, de
vn año , de vn figlo , &c. Y afsi , fe inferirà que huvo tiem-
po real, antes de el tiempo real.
21 No es tiempo aora de examinar lo que nos dicen
los Candíanos en materia'de ideas, Afsientan que no fe ha de
dar alíenlo à alguna c o f i , de la qual noie tenga idea clara.
Y lo que vemos es , que las que vnos tienen por ideas
claras, para otros fon muy obfeuras. Las que vnos tienen
por ideas innatas , ò partos de la naturaleza, de otros fon
reputadas por abortos precipitados de el juicio. Muchos di-
cen , que las ideas intencionales de Defcartes , fon copia ajuf-
tada de las de Platon. Pero fe engañan. Quando mas pue-
den paliar por vn rudo difeño , à quien el Padre Malebran-
che dio la vlriina mano con fu nueva, y ungular fentencia
de negar toda idea criada , y afirmar, que quanto conocemos,
es por las ideas Divinas, y Eternas, exiftetjtes en lamif-
P¡ 2 " "" ma
26o CONSECTARIO,
ma mente de Dios. -Llamo nueva , y ungular efta fentencía,'
porque por tal efta reputada ; pero en la verdad es puntual-
menee la mifma de Platon , como la refiere fu apasionado
fectario MarfilioFicino lib. i.de Studio/, fanit. tuerida. cai
pit. z6. Ellas fon fus palabras : Atque, vt Plato nofierin.
quii , quemaàraodhm v'ftis nibil vnqtiam vifibile percipit,
nifi in ipfo fummi vifibilis, id-efifolis ipfius , fplendw,
Jta ñeque ¿nuellecJus bumanus intelligibile quidquam apre-
bendit , nifi in ipfo intelligibilis fummi hoc ejl Dei , hu
mine nobis fe-tnpsr &• vbique prafente. Quien huviere leí-
do al Padre Malebranche , verá que ni aun en lasvoz.es dif-
crepa efta fentencia de la fuya : y que todo loque pufo de
fu cafa efte x'lutor, fueron algunos difeuríos fútiles para pec-
fuadirla.
22 Abftrayendc de examinar la naturaleza de las ideas,
que fírven à nueftros conocimientos : al argumento pro,
puefto arriba decimos, que nueftro entendimiento por fu li-
mitación no puede concebir las carencias, fino á modo de
entes pofsirivos._ Afsi concíbela fombra como real imagen
de el cuerpo ; la ceguera, como qualidad poísitiva de las
ojos* Y ni mas, ni menos aprehende el efpacio imagina-
rio , como*vn ayre tenebrofo, libre de todo corpufculo cf-
traño. Eftas fon vnas primeras aprehenfiones ( en quienes
formalmente no ay error) las quales corrige defpr.es el jui-
cio. N i , aun quando no las corrija , podemos atribuir el .error
al Autor de la Naturaleza: afsi como el que cree, que la vara
metida en la agua efta realmente; torcida , no debe qnexaríe
de que Diosle engaña , porque fabricó el organo , ydifpufo
el medio , y el objeto uè" modo , que fe le reprifente torcida
- alfentido. Aun menos puede tener e (Ta quexa en nueftro ca-
fo ¡porque Dios no es , ni aun caula remota délas imper-
i

fecciones de nueftro conocimiento, que vienen de la limitación


de nueftro ser. L a razón- es r porque no es caula de efta mif-
ma limitación. La limitación de eUèr es vna pura carencia
negativa de las perfeceiones-que le faltan : y 'Dios caufa todo
loque ay de poíitivo en ci sèr ; no las carencias : ni, fi fe
mira bien , las imperfecciones , y carencias pueden fer en
glgun m o d o , «atifada* per- quien es todo ser , y perfección,
DISCURSO XIII. 26 í
P o r efta razón , aunque Dios caufa nueftro ser , que es de-
fectible , tanto phyfica, como moralmente, no caufa la mif-
ma defectibilidad. Y a f s i , los Theologos no folo niegan,
que Dios fea caufa de el pecado, mastiembien que lo fea
de la mifma potencia de pecar , tomada formalmente. Si
tuvieífen prefente efta doctrina los Cartefianos , acafo fia-
rían menos en fus congenkas ideas. N a d a , pues, fe infiere
deque el primer ímpetu de la imaginación nos reprefente
en el efpacio imaginario vna extenfion real. L o mifmo fu-
cedería refpecto de el efpacio contenido entre ellas quatro
paredes, aunque Dios aniquilara el ambiente que ay en él,
prohibiendo al mifmo tiempo la intromifsion de otro.

§. V I L

- '2J T T E M O S probado hafta aquí, que el Mundo , fe-'


1 I gun el fyftema Cartefíano , fe a"ia de mar-
chitar, digámoslo afsi , en ñor; ó como edificio mai fun-
dado , fe avia de precipitar al fuelo , antes de formarte de
el todo. Pero concedamos graciofamente fu entera for-
mación. Probaré , que avia defer brevifsima fu coníif-
tencia.
24 Pudiera efto perfuadirfe lo primero con el prin-
cipio de que ningún movimiento violento permanece. Lue-
go tiendo el movieuto circular violento á las partes de la
materia , pues en virtud de el impulfo recibido folo piden'
movimiento recto , debería fe? de poca duración : y por
configuiente reduciéndole todas al citado de quietud , fe
baria de toda la materia v n a i n v t i l , y ociofa mafia.
25 P e r o cite argumento , que fegun los principios
comunes parece tiene mucha fncrca , bien coníiderado nada
vale refpecto á los principios Cartefianos : porque en ef-
tos no fe puede decir, que ay movimiento alguno violento' á
la míteria. Ella por si no es capaz de moverfe , ni tiene
exigencia á movimiento alguno. Aquel movimiento, pues,
leí.ra connatural, que fe le comunica , fegün las leyes efta-
blc-cidas por el Autor de la Naturaleza, Y como la difpofi-
. ciogde cite, fué que las partes d é l a materia femovieffea
lóz CONSECTARIO,
fiempre, rectamente quando no t u v u ' ^ n embarazo , y obli-
qua, 6 circularmente quando huviríle euorvo , de qualquie*
ra modo que fe muevan, fe moverán fin violencia. ;

§. V III.
26 A CANDONANDO, p u e s , efle argumento , infe-
J~\_ riré la prompta oleftruccion de efta gran
maquina por opueflo rumbo. Supongo la perpetuidad de
el movimiento , y pretendo que eífe movimiento niif-
roo, que conduxo á perfección la obra , hade acelerar la
ruina,
27 Confideremos para ello formado nueftro turbi-
llon ( l o mifmo ferá de todos los demás ) con los tres Ele-
mentos , en que eflá diftribuida la maífa de la materia. Es
claro , que para la confervacion de el turbillon en el ci-
tado prefente , es menefter que fe mantenga en cierta pro-
porción la cantidad de los tres Elementos. Porque íl la
materia fútil fe fuelle aumentando cada vez mas , y mas,
el cuerpo folar llegaría á tal tamaño , que abrafaria el
globo terráqueo con fu atmofphera , y aun desharía toda
la materia globulofa con fu violento ímpulfo. Pues eilo es
l o q u e afirmo, que no puede menos de fuceder; y lo'dc-
mucflro de efte modo. Ais i la materia fútil, que eflá re-
cogida en el cuerpo folar , como laque eflá eíparcida, ocu-
pando ios vacíos de los otros dos Elementos, continua-
mente con fu rapidifsimo movimiento eflá rayendo las par-
tículas de los otros dos , y aun concutiendo vnas con
o t r a s , de modo , que en tan continua colifion no puede
menos de formarfe á cada momento gran porción de ma-
teria fútil de las fracturas , y ramcntGS tenuiísimos de las
partículas de el fegundo , y tercer Elemento, como al princi-
pio íe hizo de toda la mafia de la materia.
2i Para dar idea mas ciara de efte argumento , ad-
viértete , que para conciliar la formación Cartefiana de el
Mundo con la Sagrada Efcritura , es meneíler confelfar, que
en el día primero de la creación fe formó grandifsima por-
ción de materia fútil, pues en eífe dia hizo Dios la l u z , la
DISCURSO X I IT. 16"$
qual fio es otra cofa , que el impulfo de la materia fútil,
recogida en el medio de el turbillon , fobre la materia glo-
bulofa. Y digafe lo que fe quifiere de la luz criada el primer
dia (la qual, para diftinguirla de el Sol,. dio mucho en que
peníar á Padres , y Expofitores: ) P o r lo menos el quarto
dia eftaba hecho el Sol con toda fuperfeccion, qual era rae-
nefter para la confervacion de todos los vivientes: por con-
figuiente avia ya entonces toda la materia fútil neceífari.a
para efte efecto. Pafsémos á delante. En los quatro dias
figuientes fué continuando la rapidifsima agitación de la
materia fútil, contenida en los interfticios de los glóbulos
de el fegundo- Elemento , con la qual rayendo fortiísima-
mente la fuperficie de elfos, neceílariamente avia de hazer
cada vez menor fu tamaño,. y reducir á materia etherea
gran porción de la globulofa. Los glóbulos mifmos eftre-
gandofe vnos con otros, ya por fu propria rotación , ya por
el impulfo comunicado por la materia fútil , fe avian de ir
deshaziendo en aquellos futlllfsimos ramentos, de que fe
compone la materia etherea. Añadafe á efto lo que la v e -
hementifsima rotación de la materia fútil , contenida en el
medio de el turbillon ,. forcejando con toda la parte con-
caba déla esfera de el fegundo Elemento, avia de gallar
de ella. Añadafe en fin el gafto, que fe avia de hazer tam-
bién en el tercer Elemento por la materia fútil , quevelocií-
fimamente difcurre por todos fus poros. Hecho en la forma
que fe puede el calculo, fale á la cuenta , que tanta, por-
ción por lo menos de materia fútil fe formó--eñ los quatro
dias figuientes á la formación de el S o l , q u e en los quatro
antecedentes. La materia tanfragilera aora como antes : L a
cantidad de el impulfo , ó movimiento para dividirla él
:

mifmo , fegun la regla eftablecida de confervarfe fiempre


en el Mundo la milma cantidad de movimierito. Luego
tanta cantidad de materia fútil, fe haría de las raeduras
de los otros dos Elementos en los quatro dias fegundos,
que en los primeros. D é l o s quatrodia-s que fefubfiguieron
defpues , fe haze el mifmo' argumento. Y .á. tile .andar,,
dentro de poco tiempo el Sol feria tan g r a n d e q u e abra-
fariala tierra , y dentro de vn año ó poco m a s t o d o el
tur-
2 6 4- CONSECTARIO,
turbillon feria vn Sol, Aunque rebaxémos mucho de la cúéfí-
ta , á pocos años fe figu iera de el efírago dicho.
2p Refponderafeme , que fe retardan al fegundo , y
tercer Elemento las pérdidas , porque al mifmo tiempo, de
la vnion de muchas parricidas de la materia etherea , que
tic cffe modo crecerían á mayor mole , fe formarían par-
tículas de el tercer Elemento , y de las partículas de el
tercer Elemento , raidos los ángulos en los encuentros , fe
irían fuccefsiv amenté, formando glóbulos para repararlos
atra-íTos de el fegundo.
jo Mas lo primero : quien creerá que en el ciego,'
y violento choque de las partículas de los tres Elementos,
con tanta regularidad , y proporción fe fuelle reparando
por vná parte lo que fe perdía por otra , que , no- digo en
y n o , u dos Siglos , fi no en vno , ú dos años , no fe per»
díeffe el equilibrio, de m o d o , que fe arruinaíTe toda la ma-
cjuina?
11 Ni podía abfoíutamente aver eíTa proporción:
íiendo ¡mpofsible que fe incruftaíTe , ni aun la milefima
parte de cantidad de materia etherea, refpecto de lo que
era menefter reparar en el fegundo , y tercer Elementos
L o qual fe evidenciará advirtiendo , que la materia etheb-
rea , fegun la ponen los Cartefianos, es infinitamente flui-
da , y por eílb no ay poro , ni cavidad tan fútil en los
cuerpos , por donde ella no difcurra con libertad : pues
aun la materia globulofa , que no es tata tenue , penetra los
poros de el diamante ; fi no , no diera paito á la luz. Puef-
to eíto , eonfiderefe con quanta dificultad fe incruítan , o
confolidan en porciones mayores las partes de los liquidos,'
.vniendofe vnas con otras. El efpiritu de Vino,el Azeyte, aun
el Agua mas depurada de corpufculos terreos , y de los
mixtos , .íiendo infinitamente menos finidos, que la mate-
ria etherea, y teniendo en fentir de los Cartefianos todas
fus partículas en continuo movimiento ( en que fegun fufen-
tencia confine la fluidez) fe confervan años enteros , fin
q u é d e l a vnion de fus partículas refulte alguna mole fenfi-
ble , que degenere de la naturaleza de el fluido. Quanto mas
tiempo ferá menefter, para que eíto fuceda en la fluidifsima
ma-
DISCURSO XIII. '16$
rflatéria etherea ? Por efto no puedo creer', que las manchas
tantas vezes obíervadas en el Sol ( pues fegun refiere el P ,
Dechalles , fuccdió verfe cinquenta á vn tiempo) nazcan de
ellas incruftaciones.de la materia fútil,como quiétenlos Car-;
tcíianos.
§. ix. -
'32 T I ? L mifmo inconveniente, que hafta aquí hemos
£_j argüido en la doítrlna de Renato Defcartes,
parece fe puede inferir también en el fyftema de Pedro G a -
fendo , aunque por diferente camino de el propuefto hafts
aora. Efte Philofofo refucitando la antigua philoíofía de
Epicuro , pone por principios de todos los entes materiales,
la innumerable multitud de cotpufculos infenlibles, comun-
mente llamados athomos, Convienen Cartefianos , y Gafen-
diílas, en la razón de Philofofos Corpufculares, que negando
toda forma fubfiancial , y accidental diilinta de la materia,,
üo piden para la formación de los compueftos naturales otra
cofa fobre la materia, qure lavarla configuración, y movi-
miento de fus partes. Pero fe diftinguen , lo primero en que
Defcartes da á la materia infinita divifibilidad ; Gafendo
folo finita : pues filie toda la potencia de dividirfe en los
athomos : los quales aunque tienen alguna extenfion , y con-;
figuración , y por tanto fon divifibles mathematicamentc;
pero phyficamente fon indivifibles. Diftinguenfe lo fegun-
do , en que Defcartes folo admite potencia pafsiva para el
movimiento en la materia ; Gafendo atribuye á fus atho-:
rao- virtud congenita para inoverfe. Diftinguefe lo tercero» 1

en que Defcartes tiene por impofsible el v a c i o ; Gafendo


no folo le concede pofsible , pero exilíente. Ello fe enríen-;
de de el vacio. que llaman diseminado , diftribuido en los
;

pequeñifslmos efpacios , que neceflariamente queda en los


interfticlos de los athomos; y concede también , que es
pofsible el vacio en vn grande efpacio. Eftos fon ¡os Capi-;
tulos principales de divífion entre las dos Efcuelas.
H Verdaderamente la refurreccion , que hizo eii
Gafendo la philofofia de E p i c u r o , es parecida en parte 3
1^ refurreccion , que efperamos á nueftros cuerpos , que,
Tomo I» *' Ll cg~
166 CONSECTARIO,
como dice el Apoftol, ferán entonces reformados : Refor-
mabit corpus humilitatis nojlrce. Pues no pufo á los atho.:
mos eternos , b exiftentes neceífariamente , como Epicuro¿
fino criados en tiempo por el Autor Supremo: que fué re-
formar , lo que tenia de contrario á la Religión la philofofia
de Epicuro.
34 Y fi he de decir loque liento , y o hallo mucho
mas defenfable el fyftema de Gafendo , que el de Defcar-
tes , efpecialmente defpues que el famofo Padre Maignan.
le quito algunas efpinas , que tenia ázia los dogmas Theo-
lógicos. Pero en quanto al inconveniente de fegulrfe á la
formación de el Mundo con poca dilación de tiempo fu rui-
na , aunque quanto fe ha argüido hafta aora contra Defcar-
tes , no tiene lugar contra Gafendo,. refta vn reparo, que
comprehendevno, y otro fyftema.
35 Cartefianos , y Gafendiftas concuerdan en eíta-
blecer en el Mundo la continuación de el mifmo movi-
miento de fus partículas , que al principióle dio ser, ó le
formo. Y efto es lo que yo hallo impofsible , b fumma-
mente difícil de entender : porque me parece que aquel mo-
vimiento con que fe ponen en orden las partes de vn to-
do , defpues de formado efte debe cefsár , para que fe
conferve el compuefto. L a razón , y la experiencia com-
prueban mi penfamiento. L a razón : porque qualquiera
movimiento, que conduce á algún termino, fi defpues de
logrado el termino no cefia, neceífariamente ha de facar
de el termino al m ó v i l , para llevarle á otro termino: pues
movimiento que no tienda á algún termino , es impofsible:
y el termino ya adquirido, no puede ferio refpecto de el
movimiento, que perfevera defpues de la confecucion, Digo
no puede fer termino ad quem , como fe explican los Ef-
cholafticos ; si folo termino d quo. Con que es precífo,.
que el moviento que continua , traslade al moble de el
mifmo eftado en que le pufo , a otro diferente. Siendo,
p u e s , la formación , y orden de el vniverfo termino de
aquel movimiento, que al principio tuvieron las partes de la
materia , continuando la mifma efpecie de movimiento ,- le
ha de facar de eíTe mifmo orden en que le pufo.-
DISCURSO XIII. i6j
»¿ La experiencia demueftra lo mifmo, no folo en
los compueños artificiales, donde fe ve que el movimiento
comunicado á las partes por el impulfo de el Artífice, ceíía en
eílando todas en el orden debido ; y fino ceñara , fe desba-
ratarla con effe mifmo movimiento toda la obra; mas también
en los compílenos naturales. El movimiento de el Acido , y
AlKali , que los conduce á vnirfe entre si , formando el
mixto, que fe llama S alfalfo , ceífa lograda la vnion. Sino
ceífara, es claro que luego fe defunirian, y no duraría la
vnion mas que vn inflante. Aun mas claro fe ve efio en los
frutos de las plantas. Defde que empieza á crecer vna mangana
en el árbol , empieza en ella el movimiento fermentativo, con-
que poco á poco fe va difponiendo para la madurez. Si llegan-
do á cflár madura , no para el movimiento fermentativo de fus
partículas, con eífe mifmo movimiento paila de la madurez á la
putrefacción. Y afsi, todas las diligencias que fe hazen para la
confervacion de los frutos, no fon otras , que aquellas que ef-
torvan el movimiento fermentativo de fus partículas. No veo
que pueda fuceder otra cofa en el compuefio vniverfal de el
Orbe , que lo mifmo que fucede en cada mixto particular.
11 Admirablemente dixo Bacbn , que aquella philofo-
fu ( conviene á faber la de Leucippo , Democrito , y Epi-
curo ) que mas es acufada de Atheifmo, fi fe mira bien , es
la que mas claramente demueftra la exiftencia de Dios, Por-;
que luego fe reprefenta ínconceptible , que vn exercito innu-
merable de athomos, vagando fin orden, formaffen efta admi-:
rabie, y concertada variedad de el Univerfo , fin fer regidos
por Artifice Divino (de ínter, rer. cap.16.) lo que Bacbn dixo
de la formación , aplico yo á la confervacion. Es impofsible,
que el vehementifsimo Ímpetu, que en las partes de la materia
fuponen efiable Defcartes, y Gafendo, no defiruya el orden de
«1 Univerfo, fi Dios no efta haziendo para fu confervacion vn
continuo milagro.

§. x.
38 T^ORQTJE pertenece derechamente al aflumptodé
I efie Difcurfo , le concluiremos examinando cier-
ta opinión particular de ellos tiempos en quanto á la gene»:
Lia ra-
16 o CONSECTARIO,
Jraciondelos vivientes, de la qual creo fe íigtie, qué todos
los vivientes en quanto á fus efpecies, huvieran perecido a
pocos paltos de fus primeras procreaciones.
3P Defpues que los Philofofos Modernos, con la íatU
. leza de fus efpeculaciones , fe empeñaron en defcubrir á la Na*;
turale'zafus mas retirados fenos, aviendo ya Defcartes in-
troducido la máxima de deílerrar todas las canfas fegundas,
recogiendo toda la virtud productiva en el Autor de la Natu-
raleza, de modo que ni aun por participación fe halle en algu-
na criatura, nos trageron algunos la gran novedad deque
Dios crió en el principio de el Mundo embuchas vnas en otras
las femillas de todos los vivientes, que avian de exiftir en to-
da la duración de los Siglos. De modo , que no folo virtual*
mente, fino formalmente en la primera planta de cada efpe-
cie , exiftieron las femillas de todas las plantas de la mifmá
efpecie , que h u v o , y ha de aver halla el fin de el Mundo.
Y lo que es mas, en cada vna de ellas innumerables fem¡«
Has, efiuvo perfectamente formada la planta confutroncOj
raizes , hojas, flores , y frutos.
40 No sé quien fué el ptimer Autor de efia opinión.
El primero de los que yo leí fué J a c o b o Rohault, rámofo Car-
teíiano , á quien inmediatamente fe figuió el Padre Malcbran-
che. Y creo eftán oy por ella los mas de los Cartefianos. Don
Gabriel Alvarez de Toledo , que en fu Hiltoria de la Igleíia,
y de el Mundo, antes de el D i l u v i o , quifo exornar la Sa-
grada Hiltoria de el Genefis , con las nuevas opiniones phi-
lofoficas ( aliños tan forafteros á aquel aítumpto , como el de
'fu improprio , y afectado ettilo ) eílendió en vna de fus
nocas efta nueva fentencia , aunque fin añadir nada á lo que
en otros halló efcrito.
41 A la verdad , en eñe Autor fe me hizo muy repa*
Sable el averfe declarado fectario de la nueva opinión. Lo
primero, porque no afsienta bien con la letra de el Genelis,
á quien íirve de gloífa aquella nota. El Texto Sagrado dice,
que mandó Dios á la tierra que brotarte yerva , la qual hizicf-
fe fu femilla : Dixitqus Deus : germinet torra herbam vi*
rentem , O" facientem femen, Y en el verficulo immediato
ferkde2que oj^Jedo h fea-., arrojando yerva,.la qual hazq
DISCURSO" XIII. 16p
U femilla de fu efpecie : Et protulit tcrra herbam vírenteme
,& facienkm femen iuxta genus fuum. Quien no vé que no
fefalva en la propriedad literal, hazer la planta fu femilla,'
precifamente por tenerla encarcelada en fu feno? Si no es cadai
yervamasque vna depofitaria de las femillas de las demás,-
que la han de fucceder , aviendolas producido Dios todas de;
ante mano , y fiandolas á la cuftodia de eíta planta, como fe
Verifica feria mifma planta verdadera hazedora de ellas?
42 L o fegundo , porque eftraño que Don Gabriel
abrazaiTe efta Sentencia, es la poca confequencia de ella , con
la phyíica que poco antes avia eftablecido , efto es en el ca-
pitulo quarto , y nota quinta , donde figuiendo á Gafcndo^
niega la infinita di viabilidad á la materia : y fin ella es abíb-
'hitamente inconceptible eífe reboltijo de millones de millo-
nes de femillas ( ó por decirlo mejor, millones de millones de
plantas formadas) en la primera femilla de cada efpecie. Ha-j
gamos efia impofsibilidad patente con vn exemplo.
44 Coufiderefe, que vn roble defde que empieza 3
dar fruto vive cien años , fiempre en eftado de darle , y que
vn año con otro produce diez mil bellotas : con que en todo
produce vn millón de bellotas. Rebaxo mucho,afsi de los años
de vida del roble , como del numero de el fruto; fiendo cier-
to que en terreno oportuno vivirá, y producirá mucho mas.
A efta cuenta, vamos haziendoia de lo qne encerraba en fu fe-
no la primera bellota , que huvo en el Mundo , difeurriendo
por la fuccefsion de varias generaciones, y fuponiendo que en
cada diez años pudo cada bellota facada á luz eflár hecha ro-;
ble, que prodngcífe nuevo fruto. Tenia , pues , la primera be-;
Ilota en fu feno para la primera producción vn millón de be*.;
Ilotas , dentro de cada vna de efias tenia para la fegunda pro-
ducción ocro millón,dentro de cada vna de efias tenia otro mi-;
llon para la tercera producción. Demos aora panados ciento
y diez años, en que la bellota abfolvió la primera ferie de fus
producciones. En los diez años figuientes fe debe Confiderar
acabada ln fegunda , y en los diez figuientes , la tercera ; por*
queyá cien años antes huvo robles de cada vna de efias feries,'
empezando á producir la primera bellota á los diez años def-;
gues cjue falip a l i a . • Por efte computo íale que por cada;
¿
27 o CONSECTARIO,
diez años que fe cuenten defpues de los ciento y diez primea
r o s , fe multiplican porvn millón las bellotas antecedentes.
Y afsi, folo para la tercera ferie de producciones, es precifo
que en la primera bellota eñe contenido vn millón de millo-
nes de millones de bellotas, que fe feñala con eftas cifras,
loooooooooooooooooo. Paliemos adelante : en cada diez
años Siguientes fe añaden á eñe numero feis cifras, fegun la re-
gla elemental de la Aritmética, porque en cada diez años
fe multiplica por vn millón el numero antecedente. En ca-
da cien años , fe añaden fefenta cifras. En cada m i l , feifcíen-
tas. Ajuílando ., pues, los años que han paífado defde la crea-
ción de el Mundo halla aora, que fegun el computo mas pro-
bable de todos., fon cinco mil quatrocientos y fefenta y feis
años , tenemos que el numero de bellotas contenido dentro de
la primera bellota , precifamente para las feries de produccio-
nes que pudo aver hafta eñe tiempo , no fe puede explicar con
menos de tres mil cifras de guarifmo.
44 Para quien no comprehende el inmenfo valor de
tantas cifras ., ó caracteres numéricos, bañará decirle , que íi
Dios criara vn Firmamento, que fueífe mil millones de millo-
nes de vezes mayor que el Cielo eftrellado, que aora tenemos,
y fe llenara toda fu concavidad de granos de arena tan menu-
dos,que mil juntos no pefaffen tanto como vn grano de mofta-
za,no ferian meneñer ni el diezmo de los caracteres dichos, pa-
ra fumar el numero de granitos de arena , que cabrían en aquel
vaftifsimo firmamento pofsiblc. Supueñala evidencia de ella
cuenta , que es mathemarica , quifiera que me dixera el mas
apafsionado de Don Gabriel A.lvarez , fi halla perfuafible,
que fiendo finita la dívífibilidad de la materia , eftuvieffen en-
cerradas en la primera bellota tanto numero de bellotas,co-
mo Significan los tres mil caracteres , con la adición de fer
tod^s ellas otros tantos robles formados con fus partes inte-
grantes. En que fe debe también advertir , que cada bellota
no contiene en todo fu cuerpo las que han de falir de ella; si
folo en la parre central fuya , que fe llama yema.
45 Alegafe á favor de efta opinión , lo primero la ex-
periencia de el Tulipán, en cuya femóla fe vé con el Microf-
copio, formado vn Tulipán entero. L o fegundo , que no fe
pUG'
DISCURSO XIII. ijx
puede entender que a y a , ni en las plantas, ni en los animales
virtud formatriz , 6 architecf onica para la admirable eftruc-
tura que piden fus efpecies.. L o tercero, la autoridad de San
Auguítin en el lib.i.deTrimt. cap.?,, donde d i c e , que crió
Dios en elle Mundo, no folo las femillas viíibles , mas tam-
bién otras inviíibles,que fon femillas de otras femillas.
46 A lo primero fe puede refponder , que de qué
aya vn Tulipán formado en la femilla de otro Tulipán , no
fe infiere que aya vna ferie como infinita de Tulipanes ef-
condidos vnos en otros. Acafo la virtud formatriz tiene fu
esfera de actividad terminada en eífa primera generación ; y
ello es lo mas verifimil. A lo fegundo fe dice, que la virtud
formatriz arbitrariamente fe niega , quando vemos aun en
los mixtos inanimados bailantes feñas de ella: pues el Sal-
Marino liquidado fe concreta fiempre en cubos , el Nitro en
columnas exagonas , y en varias tierras ay piedras , que o b -
fervan en la figura vna regularidad admirable. A lo tercero
refpondo, que S. Auguítin en el lugar citado fe puede enten-
der muy bien de femillas potenciales , efto es délos princi-
pios elementales de las femillas. Efto es mas conforme al
contexto: pues dice el Santo, que ellas femillas eftán efparci-
das por los Elementos. Y en cafo que fe entienda el Santo de
femillas formales , no favorece á la opinión nueva que im-
pugnamos , fi no á o t r a , que es muy antigua , de que de to-
das las cofas corpóreas ay femillas ocultas mezcladas en los
Elementos, que vagando en ellos, fon llevadas por los Vien-:
tosdevnas partes á otras : en cuya confequencia fe niega
la que fe llama generación efpontanea de los vivientes;
áfirmandofe que noay planta , ni animal, por vil que fea,'
gue no deba el origen á femilla de fu efpecie. Efla opinión
apadrina el Maeftro de las Sentenciasen el libro 2. diít. 17.;
y la liguen muchos Modernos.
47 Los fundamentos ,pues , en que eílriva ía nueva
opinión, no fon tan fuertes , como los que contra ella fe
toman : ya de las generaciones monftruofas , v . g. vn cuerpo
con dos cabezas : fiendo impofsible que de dos cuerpos fi-
gurados , y extenfos en dos femillas ,• fe haga vno folo. Y a
deque es inexplicable en aquella fenjenciala generación de
гуг CONSECTARIÓ,
los Hyb rldas , o animales de efpecie mixta : porque di
dos cuerpos , que cada vno tiene fu figura determinada, no
puede, fin desb aratar enteramente fu contextura, formarfc
otro cuerpo , que no tenga , ni vna , ni otra figura : y
afsi feria menefter deftruir las femiilas de vno , y otro
f e x o , para formar el tercero : que íeria vn modo de for-
mar ex jem'me totalmente contradictorio. Y a en fin deque
tampoco fe puede entender en la mifma, opinión , como
en las generaciones regulares el engendrado taiga fcmejante
á entramb os generantes, Eftas dificultades ay contraía nue-
va opinión, aun fupueíta la infinita divifib ilidad de Lima-
tena ; pero de ninguna de ellas fe hizo cargo Don Gab riel
A l v a r c z , como fi efcriviera para homb res fin difcurfo , yj
que no avian de leer mas que fu lib ro.
48 Corrió la pluma acafo mas de lo que deb iera cu
ía impugnación de efta fentencia , laqual folo por via de
digrcfsion tenia aquí cab imiento , tiendo mi intento folo
moftrar que de ella , p.icftos los principios Cartefianos, fe
ligue que muy luego defpues de producidas las plantas , y
animales , fe avian de extinguir todas fus cfpecies , deítru-
yendofe todas las femiilas. L o qual deduzgo de el Ímpetu
rapidifsimo , con que la materia cthereapenetra b aílalos
mas fútiles poros de todos los cuerpos : pues parece impof-
fible, que en tan continuados emb ates no dcftruyeiíe- la'tex-
tura de todos aquellos minutifsimos arb olillos, contenidos-
en las primeras femiilas. L o mifmo digo de las femiilas
organizadas de los animales. D e cfte modo fe eftorvab á de
el todo la propagación de las efpecies. Efte" inconvenien-
te ( p o r ocurrirá la replica que podia hazerfenos) no fe li-
gue en la común fentencia ; pues no eílando organizados los
arboles dentro de las femiilas , fino en potencia , aunque ha-
ga algún eftrago en ellas la materia etherea , difsiparide
fucceísivamente, ya v n a s , ya otras partículas , por me-;
dio de la nutrición fe van reparando al mifmo tiempo,
y de efte modo fiempre tiene la virtud
formatriz materiales para
la, fab rica,

MÚSICA
*73.

i***** *** ygv *** *****"l>r

á U S I C A
DE LOS TEMPLOS
; D I S C U R S O X I V o

£ N los tiempos aiitiquifslmós' ¡ íí cre?3


mos á Plutarco , folo fe vfaba la Mu-!
íica en los Templos , y defpues pafsq
a los rheatros. Antes fervia para decoro
de el Culto ; defpues fe aplicó para ef-¡
timulo de el vicio. Antes folo fe oia la melodía en Sacros
Hymnos ; defpues fe empezó á efcuchar en cantinelas pro-i
fanas. Antes era la Mufica obfequio de las Deidades ; def-;
pues fe hizo lifonja de las pafsiones. Antes eftaba dedicada;'
i A p o l o ; defpues parece que partió Apolo la protección»
de elle arte.con Venus. Y como fi no bailará para apellar;
las Almas , ver en la Comedia pintado el atractivo de el de-;
leyte con los mas finos colores de la rethorica , y con los
mas ajuftados números de la poefia , por hazer mas activo
el veneno , fe confeccionaron la rethorica , y la poefia con
laMufica..
z Efta diverfidad de empleos de la Mufiea, induxc»
también diferencia en la compoficion : porque , como era
precito mover diftjntos afectos en el tjreatro , que en el
í°. B
n
1% " isa*
274 MÚSICA DE LOS TEMPLOS,
Templo , fe difeurrieron diftintos modos de melodía , g
quienes correfponden , como ecos fuyos , divcrfos afectos
en el Alma. Para el Templo fe retuvo el modo que llama-
ban Dorio, por grave , mageftuofo , y devoto. Para el
theatro huvo diferentes modos , fegun eran diverfas las ma-
terias. En las reprefentaciones amorofas fe vfaba el modo
Lydio, que era tierno, y blando ; y quando fe quería avivar
la moción , el Mixo Lydio, aun mas eficaz , y pathetico¿
que el Lydio. En las belicofas el modo Phrigio , terrible, y
furiofo. En las alegres , y bachicas el Eolio, feftivo , y bu-
fonefeo. El modo Subphrigio fervia de calmar los violen-
tos raptos , que ocafionabael Phrigio: y afsi avia para otros
afectos otros modos de melodía.
3 Si ellos modos de los Antiguos correfponden á los
diferentes tonos , de que vfan los Modernos , no efiá de el
todo averiguado. Algunos Autores lo afirman ; otros lo
dudan. Y o me inclino mas á que no 5 por la razón de que
la diverfidad de nueftros tonos no tiene aquel influxo para
variar los afectos, que fe experimentaba en la diverfidad de
Jos modos antiguos.

§. II.
¿f. A Ssi fe dividió en aquellos retirados Siglos la
J~\. Mufica entre el Templo , y el theatro , fir-
viendo promifeuamente á la veneración de las A r a s , y Á
la corrupción de las coftumbres. Pero aunque efia fué vna
relaxacion lamentable , no fué la mayor que padeció elle
Arte nobilifsimo : porque efta fe guardaba para nuefiro
tiempo. Los Griegos dividieron la Mufica , que antes, co-
mo era r a z ó n , fe empleaba toda en el culto déla Deidad,
diftribuyendola entre las folemnidades Reiigiofas , y las re-
prefentaciones Scenicas ; pero coníervando en el Templo
la que era propria de el Templo , y dando al theatro la
que era propria de el theatro. Y en ellos vltimos tiempos
qué fe ha hecho ? Nofolo fe coníervó en el theatro la Mu-:
íica de el theatro ; mas también la Mufica propria de el thea-j
SRO fe trasladó al Templo.
DISCURSO XIV. 27?
5 Las cantadas , que aora fe oyen en las Jgleíias,
fon en quanto á la forma, las mifmas que refuenan en las
tablas. Todas fe componen de Menuetes, Recitados, Arie-
tas, Alegros , y á lo vltimo fe pone aquello que llamaa
Grave ; pero de elfo muy poco , porque no fallidie. Qué es
ello ? En el Templo no debiera fer todalaMufica grave?
No debiera fer toda la compoíicion apropriada para infun-
dir gravedad , devoción , y modeftia ? L o mifmo fucede
en los inllrnmentos. Eífeayrede Canarios, tan dominante
en el güilo de los Modernos , y eílendido en tantas Gigas t

que á penas ay fonata , que no tenga alguna , qué hará


en los ánimos , fino excitar en la imaginación paftoriles tri-
pudios ? El que oye en el Órgano el mifmo M e n u e t , que
oyó en el Sarao , qué ha de hazer fino acordarfe de la dama
con quien dancó la noche antecedente ? De efta fuerte la
Mufica , que avia de arrebatar el efpiritu de el afsiftente
defde el Templo terreno al Celeftial, le traslada de la Iglefía
al feílin. Y fi el que oye, ó por temperamento, ó por habito
e.ftá mal difpueílo, no parará ai la imaginación.
6 O buen Dios ! Es efta aquella Mufica , que ai
grande Auguílino, quando aun eftaba ñútante entre D i o s ,
y el M u n d o , le exprimia gemidos de compunción , y la-
grimas de piedad ? O quanto lloré ( decia el Santo hablan-
do con D i o s e n fus Confefsiones) conmovido con los fuá-,
vifsimos Hymnos , y Cánticos de tu Iglejía \ Vivifsima¿
mente fe me entraban aquellas vozes por los oidos , y por
medio de ellas penetraban a la mente tus verdades. El cora-,
zon fe encendía en afeólos , y los ojos fe deshazian en la-
grimas. Elle efecto hazia la Mufica Eclefiaftica de aquel
tiempo : L a qual como lalyra de David expelia el efpiritu
malo, que aun no avia dexado de el todo la poífefsion de
Auguílino , y advocaba el bueno. L a de eñe tiempo expe-
le el bueno, fi le a y , y advoca el malo. El canto Eclefiafiico
de aquel tiempo era como el de las trompetas de Jofué , que
derribó los muros de J e r i c ó ; efto es las pafsiones, que forti-
fican la población de los vicios. El de aora es como el de
las Sirenas, que llevaban los navegantes
a los efcollo§|
iyó MÚSICA DE LOS TEMPLOS;

.$. III.
y f~\ Quanto mejor eítuviera la Iglefia con aquel
Canto Llano , que fué el vnico que fe cono- 4

feló en muchos Siglos , y en que fueron los máximos Maef-


,tros de el Orbe ios Monges de San Benito, ( incluyendo en
•primer lugar á San Gregorio el Grande , y al infigne Gui-
d o Aretino) halla que |uan de Murs , Doctor de la Sorbo-*
fía, inventó las notas que feñalan la varia duración de los
puntos. En verdad , que no faltaban en la fenciilez de aquel
canto melodías muy poderofas para conmover , y fuípen-
der dulcemente los oyentes. Las-compoficiones de Guido
'Aretino fe hallaron tan patheticas, que llamado de fu Mo-
nafterio de Arezzoporel Papa Benedicto V I H . no le dexó.
apartar de fu prefencia , nafta que le enfeñó á cantar va
verficulo de fu Antiphonario ,.comofe puede ver en el Car-
denal Baronioal año de 1 0 2 2 . Efte fué el que inventó el
fyílema Muíico Moderno r ó- progrefsion artificiofa , de
que aunoy fe v í a , y fe llama la Efcala.de Guido Aretino,
y juntamente la pluralidad harmoniofa. de las vozes , y va-
riedad de confonancias , laqual í l , como es mas verifimil,.
fué conocida de los. Antiguos, yá eüaba perdida de el todo
fu noticia.
8 Una ventaja grande tiene el Canto L l a n o , execu-
tado con la debida paufa , para el vfo de la Iglefia , y es,
que tiendo por fu gravedad incapaz de mover los afectos,,
que fe fugieren en el theatro,es-aptifsimo para ii.ducir los que
fon proprios de el Templo» Quien en la mageílad fon ora
de el HymnoVexilla Regís, en la gravedad feíliva de ú-Pan*
gelingua , en la ternura luctuefa de el. fnvitatorfo de Difun-
tos, no fe fíente conmovido-, ya á veneración ,. yá á devo-
ción, yá a laftima ? Todos ios dias fe-oyen -ellos cantos,y
fiempre agradan ;. al patio que las.compoficiones modernas,
Cn repitiendofe quatro , ó feis vez-es., faftidian.
9 No por elfo, eftoy reñido con el Canto, figurado* ó,'.
¡Komo dicen comunmente , de Órgano, Antes, bien eonoz-r
i?.?> S .? ÜBLZ? grandes ventajas al Llano ; yá porque guar-
U
DISCURSO XIV. • 277
ña Tus acentos á la letra, lo que en el Llano es impofsíble:
ya porque la diferente duración de los puntos , haze en el
oido aquel agradable efecto, que en la viña caufa la pro-
porcionada defigualdad de los colores. Solo el abufo que fe
ha introducido en el Canto de Órgano , me haze defear el
Canto Llano : al modo que el paladar bufea aniiofo el
manjar menos noble , pero fano , huyendo de el mas des
íicado, íi efti corrupto»

§. IV.
ío oídos bien condicionados podrán fufrir erí
\ J canciones fagradas aquellos quiebros ama-
torios , aquellas inflexiones lafcivas , que
contra las reglas de la decencia, y aun de la M-ufica , enfeñó
el demonio á las Comediantas, y eftas á los demás Cantores?
Hablo de aquéllos leves defvios, que con eftudio haze la
voz de el punto feñalado :• de aquellas caídas deímayadas
de vn punto á o t r o , paliando- no foto por el femitono , mas
también por todas las comas intermedias : Traníítos que ni
caben en el Arte ,, rii los admite la naturaleza.
1r L a experiencia mueftra , que las mudaneas que
haze la voz en el canto por intervalos menudos ,. afsi c o -
mo tienen en si no fe que de blandura afeminada , no se
qué de lubricidad viciofa ,. producen también vn cfe£to
femejarite en los ánimos de los oyentes , imprimiendo en
fu fantaíia ciertas imágenes confufas, que no reprefentan-
cofa buena. En atención á eiño muchos de los Antiguos, y
efpecialmente los Lacedemonios, repudiaron como nocivo á
la juventud el genero de Muíica llamado Chrornatico , el
qual introduciendo bemoles, y fubñenidos, divide-la octava
en intervalos mas pequeños, que los naturales. Oygamos á
Cicerón : ChromaPkum creditur repudiatum priai/a fuif".
fe genos j quod adolefcentum remoliefcerent eo genere ammi$
hs-Cádemonei improba/fe feruntur lf¡b.\. Tu fcul.qi:.'£/].) Su-:
ponefe ,. que con mas razón reprobaron también el genero
llamado Enharmonico , el qual añadiendo mas bemoles, , 1

y fubñenidos j y juntaadofe con los otros dos géneros día?,


Ij8 MÚSICA DE IOS TEMPLOS,
tónico, y chromatico , que neceíTariamente le preceden , de-
xa dividida la octava en mayor numero de intervalos, ha-
ziendolos mas pequeños ; por coníiguiente en efta mixtura
deíviandoíe la voz á vezes de el punto natural por efp
actos
aun mas cortos , conviene á faber los femitouos menores,
refulta vna Mufica mas molificante , que la de el chroma-
tico.
12 N o es harto de lamentar, que los Chriflianos no
vfemos de la precaución , que tuvieron los Antiguos , para
que ia Mufica no pervierta en la juventud las cofíumbres?
Tan lexos eftamos de elfo , que ya no fe admite poi buena
aquella Mufica , que afsi en las vozes humanas , como en
los Violines no introduce los puntos que llaman eftr-iños á
cada palto, paliando en todas las partes de el diapasón de
el punto natural al accidental; y ella es la moda. N o ay
duda que eftos tranfitos manejados con fobriedad , arte, y
genio , producen vn efecto admirable , porque pintan las
afecciones de la letra con mucho mayor viveza , y alma,
que las progrefsiones de el diatónico puro , y refulta vna
Mufiea mucho mas exprefsiva , j delicada. Pero f o n p o - '
quifsimos los Compofitores cabales en efta parte , y eííos
poquifsimos echan á perder á infinitos , que queriendo
imitarlos, y no acertando con e l l o , forman con los eftra-
ños que introducen, vna Mufica ridicula, vnas vezes ift-
fipida , otras afpera; y quando menos lo yerran , reful-
ta aquella melodía de blanda, y lafciva delicadeza , que
no produce ningún buen efecto en el alma , porque no
ay en ella exprefsion de algún afecto noble ; si folo de vna
flexibilidad lánguida, y viciofa. Si con todo quifieren los
Compofitores, que palle efta Mufica , porque es de la moda,
allá fe lo ayan con ella en los theatros, y en los falones; pe-
ro no nos la metan en las Iglefias: porque para los Templos
no fe hizieron las modas. Y fi el Oficio Divino no admite
mudanza de moda% ni en veftiduras, ni en R i t o s , por qué la
ha de admitir en las compoficiones Muficas?
13 El cafo es, que efta mudanca de modas tiene en et
fondo cierto veneno , el qual defcubrió admirablemente
Cicerón, quando advirtió, que en la Grecia alpalTo mifmo
gue
DISCURSO XIV. 270
í p e declinaron lascoftumbres ázia la corruptela, degene-
ró la Mufica de fu antigua mageftad ázia la afectada mo-
licie : ó porque la Mufica afeminada corrompió la integri-
dad de los ánimos : ó porque perdida , y eftragada efta
con los v i c i o s , eftragó también los güilos, inclinándolos á
aquellas baftardas melodias , que fymbolizaban mas con fus.
coftumbres : Cucitatum boc muliarum in Gracia interfuit,
antiquumvocum fervare modum : quarum mores lapji', ad
mollitiem pariter funt immutati in cantibus ; aut hac dul-
cedine corruptelaque depravati , vt quídam putmt : aut
cum feveritas morum ob alia vitia cecidijfet, tum fuit in
auribus animifque mutatis etiam buic mutationi locus. (lib. a .
de Legibus ) De fuerte, que el güilo de efta Mufica afemina-
da , ó es efecto, ó caufa de alguna relaxacion en el animo.
Ni por effo quiero decir, que rodos los que tienen efte guf-
to , adolecen de aquel defefto. Muchos fon de feverifsimo
genio , y de vna virtud incorruptible , á quien no tuerce la
Mufica viciada ; pero guftan de ella, folo porque oyen que
es de la moda : y aun muchos fin guftar, dicen que guftan,
folo porque no los tengan por hombres del Siglo paífado, ó ,
como dicen, de calcas atacadas, y que no tienen la delica-:
deza de gufto de los Modernos.

§. V.
Í4 embargo confieífo, que oy faleñ á luz al-
v) gunas compoficiones excelentifsimas , ora
fe atienda la fuavidad de el güilo, ora la futileza de el ar-
te. Pero á bueltas de eftas , que fon bien raras , fe pro-
ducen innumerables , que no pueden oirfe. Efto depende
en parte, de que fe meten á Compositores los que no lo
fon , y en parte de que los Compoíitores ordinarios fe
quieren tomar las licencias , que fon proprias de los Maef-
tros fublimes.
15 Oy le fucede á la Mufica , lo que á la Cirugía.'
¡Afsi como qu.Jquiera Sangrador de mediana habilidad lúe-;
go toma el nombre, y exercicio de Cirujano, de el mif-.
ino modo qualquicra Organiza h Yioliniita de razona-;
9

ble
18o MÚSICA DE LOS TEMPLAS,
ble deftreza fe mete á Compofitor. Ello no les cuefta má§
que tomar de memoria aquellas reglas generales de con-,
íbnancias , y dilfonancias : defpues bufcan .el Ayrecillo que
primero ocurre , ó el que mas les agrada, de alguna ib-;
pata de Violincs, entre tantas como fe hallan , yá manufcri-;
jtas, yá impreífas: forman el canto de la letra por aquel
.icono., y íigulendo aquel rumbo : luego mientras que la
yaz canta , la van cubriendo por aquellas reglas genera-;
les con vn acompañamiento fecc fin imitación , ni pri-;
mor alguno : y en las pautas de la voz entra la bulla de
los Violines por el efpacio de diez , ó doze compaíes , o
muchos mas en la forma mifraa , que la hallaron en la fo-
nata de donde hizieron el hurto. Y aun elfo no es lo peor¿
fino que algunas vezes hazen vnos borrones terribles : ó yá
porque para dar á entender que alcanzan mas que la com-
poficion trivial introducen faifas fin prevenirlas , ni abo-
5

narlas ; 6 yá . porque viendo que algunos Compolitore$


jluftr.es pallando por encima de las reglas comunes fe to¿
jnun algunas licencias, como dar dos quintas, 6 dos oc-
tavas feguidas , lo qual folo executan en el cafo de entrar
•vn paito bueno, ó lograr otro primor harmonlofo , que fin
effa licencia no fe pudiera confeguir, ( y aun efto es con al-
gunas.circunftancias , y limitaciones ) toman oífadia para
fcazer lo mitin o fin tiempo, ni propefito : con que dan
ynos batacazos intolerables en el oido.
16 Los Compositores ordinarios , queriendo feguit'
los paitos de los primorofos , aunque no caen en yerres tan
grolferos , vienen á formar vna Mufica , vnas vezes infipi-
da , y otras afpera. Efto confine en la introducción de acci-
dentales , y mudanca de tonos dentro de lamifma compo-
ficion : de que ios Maeftros grandes vían con tanta oportu-
nidad, que no folo dan á la Mufica mayor dulcura ; pero
también mucho mas valiente exprefsionde ios afectos que
férula la letra.. Algunos Eftrangeros huvo felices en efto;'
pero ninguno mas que ñueftro Don Antonio de Literc.s,
Compofitor de primer orden , y acafo él vnico que ha;
fabido juntar toda la mageftad, y dulcura de la Mufica an-
tigua con el bullicio de.la moderna; pero ei¿ ej manejo de
DISCURSO 'XIV. '281
•loapuntos accidentales es fingularifsimo : pues caí! fiempre
que los introduce, dan vna energía á la Mufica , correfpon-
diente al Significado de la letra, que arrebata. Efto pide cien-
cia , y numen ; pero mucho mas numen , que ciencia : y aísi,
fe hallan en Efpaña Maeítrosde gran conocimiento, y corn-
prehcníiou , que no logran tanto acierto en efta materia : de
modo , que en fias competiciones fe admira la futileza de el
arte , fin con fe guiris la aprobación de el oido.
i5 Los que cftán defaíiltidos de genio, y por otea
parte gozan no mas que vna mediana inteligencia de la Mufi-
ca , meten taifas , introducen accidentales , y mudan torsos^
folo porque la moda lo pide , y porque fe encienda que faben
manejar ellos faynetes; pero por la mayor parte no lograr»'
faynete alguno, y aunque no faltan á las reglas comunes, las
compoficioues filen defabridas : de fuerte, que executadasi
en el Templo , conturban los corazones de los oyentes , en vez
de producir en ellos aquella dulce calma , que fe requiere pa-4
ya la devoción , y recogimiento interior.
17 Entre los primeros, y los fegundos media otro genéá
ro de Compositores, que aunque mas que medianamente habw
les, fon los peores para las compoficiones Sagradas. Eílos
fon aquellos, que juegan de todas las delicadezas de que es ca.4
paz la Mufica; pero difpueftas de modo , que forman vname-¡
lodia buíonefea. Todas las irregularidades de que vfan, ya
en filfas , ya en accidentales, eftán introducidas con gracia?
pero vna gracia muy diferente de aquella que San Pablo pe-)
día en el Cántico Eclefiaílico , eferiviendo á los Colofenfesí
In grafía cantantes in cordibus veftris Deo : Porque es vna
gracia de chufleta , vna harmonía de chulada : y afsi, los míf-s
mos Múñeos llaman jugucticos , y monadas á los pafíages, que
encuentran mas guftofosen eñe genero. Eño es bueno para el
¡Templo ? Pafle norabuena en el Patío de las Comedias, en,
el Salón de ios Saraos ; pero en la Cafa de Dios chuladas,'
monadas, y juguetes? No es eñe vn abufo impío? Querej;
que fe tenga por culto de la Deidad, no es vn error abomina-i
ble? Que efecto hará eña Mufica en los que afsiftená los QfH
«as? Aun á los mifmos Infirumentiñasal tiempo de la exe-i
flueion , los provoca^ á genos índecorofoj 1 a ynas rifillas
1

¡feo. k &
a8 2. MÚSICA D E LOS T E M P L O S ,
de mogiganga. En los demás oyentes no puede influir íi nd
difpoíiciones para la chocarrería , y la chalada.
18 No es efto querer defterrar la alegría de la Mufica;
fi folo la alegría pueril, y bufona. Puede la Muííca fer güilo,
fifsima , y juntamente noble , mageftuofa , grave , que exci-;
tea los oyentes á afectos de refpecto , y devoción. O , por me-;
jor decir, la Muííca mas alegre , y delicióla de todas es aque-
lla que induce vna tranquilidad dulce en el Alma , recogién-
dola en si mifma , y elevándola , dígannoslo aísi, con vn ge-
aero de rapto extático fobre fu proprio cuerpo, para que
pueda tomar bu elo el penlámiento ázia las cofas Divinas. Ef<
ta es la Muííca alegre , que aprobaba San Augulíin, como vtil
en el Templo , tratando de nimiamente fevero á San Athana-
ílo en reprobarla ; porque fu proprio efeóto es levantar los co-
razones abatidos de las inclinaciones terrenas á los aféelos
nobles : Ut per h¡se oble51amento, aurium infirwior animus
tu affeffumpietatis ajjurgat, (lib. t o . Conf¿(f. cap. 3 2 . )
ip Es verdad que fon pocos losMaefhos capazes dé
formar efta noble melodia ; pero los que no pueden tantOj
contentenfe con algo menos , procurando íiquiera, que fus
compofíciones inclinen á aquellos a£tos interiores, que de
juíficia fe deben á los Divinos Oficios : ó por lo menos , que
no exciten á los actos contrarios. En todo cafo, aunque fea ar-i
riefgandofe al defagrado de el concurfo evitenfe elfos fayne-.
y

tes cofquillofos , que tienen cierto oculto parentefeo con los


afeólos vedados *. pues de los dos males en que puede caer la
Mufica Eclefiaftica, menos inconveniente es que fea efean?
.dalo de las orejas, que el que fea incentivo de los vicios.

s. vi. •
T ) I E N fe fabe el poder que tiene la Mufica fobré
_0 las Almas, para defpertar en ellas , ó las vir-
tudes, ó los vicios. De Pythagoras fe cuenta, que avien-
do ;con Mufica apropriada inflamado el corazón de cierto
joveri en vn amor infano, le calmó el efpirítu , y redtrxo
al vando de la continencia, mudando de tono. De Timo-:
sheo , Muíico 4e Alexandro , que irritaba ei furor bélico 1
DISCURSO XIV. 283
fle aquel Principe, de n o d o que echaba mane à las armas,
corno fi tuviera preíences ios Enemigos. Elio no era mu-
cho , porque confpìraba con el arte de el agente la naturale-
za de ci paííb. Algunos añaden , que le aquietaba defpucs
de averle enfurecido': y Alexando, que jamás bolviò á rieílro
alguno la eípalda , v&nia á fer fugitivo entonces de fu propria
ira. Pero mas es loque fe refiere de otro Mufico, con Eri-
co II. Rey de Dinamarca , llamado el Bueno : porque con vn
tañido fm-iofo exacerbo la colera de el Rey , en tanto grado,
que arrojándote fobre fus domefticos mato á tres, ò quatto de
ellos, y huviera pallado adelante el eftrago , fi violentamen-
te no le huvieran detenido. E fio fué mucho de admirar : poi-
que era aquel Rey de indole fumamente nunfa, y apaci-
ble.
21 No pienfo que los Múfleos de ellos tiempos pue-
dan hazer eitos milagros. Y acafo tampoco los hizieron los
antiguos; que eftas Hiltorias no fe facaron de la Sagrada Ef-
critura. Pero por lo menos es cierto, que la Mu fica , fegurt
li variación de las melodias , induce en el animo diverfas dif-
pofíciones, vnas buenas, otras malas. Con vna nosfenti»
mos movidos à la trifleza, con otra ala alegría.: con vna a
l,i clemencia, con otra á la faña : con vna à la fortaleza , con
01ra á la pufilanimidad :"' y afsi de las demás inclinacio-:
1KS.
:,2 No aviendo duda enefio , tampoco la ay en que
el Macfiro , que compone para los T e m p l o s , debe , quanto
es de fu parte , difponer la Mufica de modo , que mueva aque-
llos a fe ¡Sos mas conducentes para el bien efpiritual de las Al-i
roas, y para la mageftad , decoro, y veneración de los Divi-;
i:os Oficios. Santo Thomas tocando ette punto en la 2. i¿
qiij¡fl->9i. artic. 2. dice : Que fué faludable lainftitucion de el
Canto en las Iglefias , para que los ánimos de los enfermos,'
cflo e s , los de Haco efpiritu , fe excitaífen a l a devoción : Et i-,
áco fdubñter fuit in flit ut um , vt in Divinas Laudes cantus.
affuìnercntu?, vi animi infirmar um magis excitar entur ad
dtvoihnem. Áy Dios ! Qué dixera el Santo , fi oyera en las
Igleíias algunas canciones , que en vez de fortalecer á los en-:
ferinos, enflaquecen à los fanos ? Qué en vez de introducirla.
2 84 MÚSICA D E LOS T E M P L O S ,
devoción en el pecho , la deftierran de el Alma ? Qué en veis-
de elevar el penfamiento a confideraciones piadofas , traen á
la memoria algunas cofas ilicitas ? Buelvo á decir, que es
obligación de los Muficos, y obligación g r a v e , corregir eñe
abufo.
23 Verdaderamente , yo quando me acuerdo de la an-
tigua fériedad Eípañola, no puedo menos de admirar que
aya caído, tanto , que folo ganemos de Muficas de tararira.
Parece que la celebrada gravedad de los Efpañoies, ya fe re-,
duxo folo á andar embarados por las calles. Los italianos nos
han hecho efelavos de fu gufto , con la faifa lifonja de que
la Muííca fe ha adelantado mucho en eñe tiempo. Y o creo que
loque llaman adelantamiento, es «ruina, ó eílá muy c e r c
de ferio. Todas las Artes intelectuales , de cuyos primores
fon con igual autoridad juezesel entendimiento, y el güilo,
tienen vn punto de perfección , en llegando al qual , el que las
quiere adelantar , comunmente las echa á perder.
24 Acafo le fucederá muy prefto á la Italia ( fi no fu-
cede ya ) con la Mufica, lo que le fucediócon la Latinidad,
Oratoria, y PGefia. Llegaran ellas Facultades en el Siglo de
Augufto a aquel eftado de propriedad , hermofura, g a l a , y
energía natural, en que cor.filie fu verdadera perfección. Quw
íieron refinadas los que fuccedieron á aquel S i g l o , imrodu-:
clendo adornos improprios, y violentos , con que las precipi.
taronde la naturalidad á la afeótacion; y de aquí cayeron
defpues á la barbarie. Bien fatisfechos efiatwn los Poetas que
fuccedieron á Virgilio, y los Oradores q<se fuccedieron á
Cicerón , de que daban nuevos realces á los dos v\rtes ; pero lo
que hizieron , fe lo dixo bien claro á los Oradores el agudo
I'ecronio , haziendoles cargo de fu ridicula , y pompofa
afe<5fcacion: Vosprimi omnium eloqucntiam¡>t-,'didijiis.

§, V I L
25 T Q A R A ver fi la Mufica en eñe tiempo padece el
X raifmo naufragio, examinemos en qué fedif-
tinguela queaorafe practica de La de el Siglo paliado. La
primeraj, y mas feñalada difiincion que ocurre , es la di raí*
• ' " na-
DISCURSO XíV. 28?
Riicion délas figuras. Los puntos mas breves qué avia antes, -

eran las Semicorheas , y con ellas fe hazia juicio , que fe p o -


nian, afsi el canto, como el Inftrumenco en la mayor velo-
cidad , deque ,fin violentarlos, fon . capazes. Pareció ya p o -
co efio, y fe inventaron no ha mucho las Tricorcheas, que
parten por mitad las Semicorcheas. No paró aqui la extra-
vagancia de los Compofitores , y inventaron las Quatricor-
cbeas , de tan arrebatada duración , que apenas la fantasía fe
haze capaz de como en vn compás pueden caber fefenta y qua-
tro puntos. No sé que fe ayan vifto hafta efte Siglo figuradas
las quatricorcheas en alguna compoficion : falvo en ia deferip-
cion de el canto de el Ruyfeííor, que a l a mitad de el Siglo
paitado hizo eftampar el Padre Kirquer en el libro primero de
íwMufurgia Univerfal; y aun creo que tiene aquella S o l -
fa algo de lo hyperbolico : porque fe me haze difícil que aque-
lla ave , bien que dotada de Órgano tan ágil , pueda alentar
fefenta y quatro puntos difuntos, mientras fe alca , y baxa la'
mano en vn compás regular.
25 Aora digo que efla diminución de figuras, en vez
de perficionar la Mufica , la efiragá enteramente , por dos ra-
zones. La primera e s , porque rariísimo executor fe hallara,
que pueda dar bien, ni en la voz , ñi en el inftrumento puntos
tan veloces. El citado Padre Kirquer dice , que aviendo he r
:

cho algunas competiciones de canto difíciles', y exeticas ( yo'


creo que no lo ferian tanto como muchas de la moda de oy }
no halló en toda Roma Cantor, que las executaífe bien. Como
fe hadarán en cada Provincia , mucho menos en cada Cathe-
dral, Infiru'mentifias, ni Cantores, que guarden exactamen-
te, afsi el tiempo, como la entonación de effais figuras me-
nudifsimas , añadiéndote muchas vezes á efla dificultad', la
de muchos faltos extravagantes, que también fon de la m o -
da? Semejante folia pide en la garganta vna defireza , y v o -
lubilidad prodigiofa , y en la mano vna agilidad , y tino ad«,
mirable : y afsi, en cafo de componerte afsi, avia de fer fo-
laniente para vno , ú otro executor fingularifsimo , que fm-;
vieííé en cita, ó aquella Corte ; pero no darfe á la Imprenta
para que ande rodando por las Provincias: porque el mi fin o
Cantor, que con vna folfa natural, y fácil agrada a los oyen-,
z$ó M Ú S I C A ' D E LOS TEMPLOS,
t e s , los defcalabracon eíLtscompunciones difíciles : y en Lis
mil mas manos , en que vna fo na ta de fácil execucion fuena,
con fuavidad, y dulcura , la que es de arduo manejo folo pare*
ce greguería.
27 Lafegunda razón porque eff.t diminución de 'figti«.
ras deftruye la Muíica, es porque no fe da lugar al o í d o , pa-
ra que perciba la melodia. Aí'si como aquel deleyce , que cieñen
los ojos en la variedad bien ordenada de colores, no fe lo-
grara , íi cada vno fuelle paífando por la viña con tanto arre-
batamiento , que apenas hizieife diílinta imprefsion en*?cl
Órgano ( y lo mifmo es de qualefquiera objetos vifibles ) ni
m a s , ni menos, iilos puntos , en que fe divide la Muíica,
fon de tan breve duración, que el oído no pueda a&uarfe
diñiiKamentc de ellos , no percibe harmonía , lino confufsion.-:
Afsi efte inconveniente fegundo, como el primero, fe hazen
mayores, por el abafo que cometen en la practica los Inñru-.
mentí ñas modernos : los quales, aunque lean de manos tor-
pes , generalmente hazen oftentacion de tañer con mucha ve-
locidad, y comunmente llevan la fotuta con mas rapidez , que
quiere el Compoíítor, ni pide el carácter de la compoíiciou.
De donde fe ligue perder la Muíica fu proprio genio, faltar á la
execucion lo mas eífencial, que es la exactitud en la limpieza,
y oír los circunñantes folo vna trápala coafufa. Siga cada vno
el pallo , que le preferibe fu propria d'fpoíicion : que íi el
que es pelado fe esmerca á correr tanto como el veloz , toda
la carrera ferá tropiezos : y íi el que folo es capaz de correr,
quiere bolar , preño fe hará pedazos.
.23 La fegimda diñhiuion que ay entre la Muíica an-
tigua , y moderna, confine en el exceflo de eña en los fre-
quentes traníítos de el genero Diatónico al Cromatico , y
enharmonico , mudando á cada paífo los tonos con la intro-
ducion de fubftenidos , y bemoles. Elfo, como fe dixo arri-
b a , es bueno quanclo fe haze con oportunidad , y modera-
ción, Pero los Italianos, oy fe propaffan tanto en elfos tran-
íítos , que facan la harmonía de fus quicios. Quien noloqui-:
fiere creer , confuke defnudo de toda preocupación fus orejas,
quando oyere canciones, qíonatas, que abundan ir¡ucho de
accidentales.
La
DISCURSO XVT. 287
2p L a tercera diftincion eftàen la libertad que oy fe to-
man los Compofitores para ir metiendo en la Mufica todas
aquéllas modulaciones , que les van ocurriendo á la fantasía,
finligarfe à imitación, ò thema. El gufto que fe percibe en
ella Mufica fueka , y , digámoslo afsi, defgreñada , es fuma-:
mente inferior al de aquella hermofa ordenación con que los
Maeítros de el Siglo paliado iban figuieudo con amenifsima
Variedad vn paífo, eípecialmente quando era de quatro v o -
zes : afsi como deleyta mucho menos vn Sermón de puntos
foeltos , aunque conile de buenos difeurfos , que aquel que
con variedad de noticias, y conceptos và figuiendo conforme
à las leyes de la eloquencia el hilo de la Idèa, fegun fe propu-
fo al principio la planta. N o ignoran los Eílrangeros el fu-:
bido precio de ellas compoficiones , ni faltan entre ellos al-
gunas de elle genero excelentes ; pero comunmente huyen de
tilas, porque fon trabajólas: y afsi, fi v n a , ù otra vez in-
troducen algún paífo , luego le dexan, dando libertad à la
fantasía para que fe vaya por donde quifiere. Los Eftrange-
ros, que vienen à Efpaña , por lo común fon vnos meros exe-
cutores, y afsi, no pueden formar elle genero de Mufica,-
porque pide mas ciencia de laque tienen ; pero para encubrir
fu defedo, procuran perfuadir acá á todos , que ello de feguir.
paüos no es de la moda.

•§. VIII.
§0 i 'STA és la Mulita deeftos tiempos , cori que noá
JLL han regalado los Italianos por mano de íu afi-
cionado el Maeltro D u r o n , que fue el que introduxo en la
Mufica de Efpaña las Modas Eftrangeras. Es verdad , que ¿cU
pues acá fe han apurado tanto ellas., que fi Duron reluchara
ya no las conociera ; pero fiempre fe le podrá echar á el la cul-
pa de todas ellas novedades, por aver fido el primero , que
les abrió ta puerta : pudiendo aplicarfe à los ayres de la Mu-
fica Italiana , lo que cantò Virgilio de los vientos;

Qua data porta\ ruunt , aterras turbine j?erflant¿


2$8 M Ú S I C A D E LOS T E M P L O S ,
¡Y en quanto á la Mufica, fe verifica aora tn los Efpafioleíj
refpecto de los Italianos , aquella fácil condefcendenda a
admitir novedades , que Piinio lamentaba en los mif.
mos Italianos refpecto de los Griegos : Mutatur quo-
tidie ars interpollis , ®* ingeniar am Grasice jiati; impelii-
mur.
3r Con todo , no faltan en Efpana algunos fabios
Compofitores , que no han cedido de el todo á la moda,
6 juntamente con ella faben componer preciofos recios de la
dulce , y mageftuofa Mufica antigua. Entre quienes no pue-
do efeufarme de hazer fegunda vez memoria de el fuavifsi-
moLiteres , Compofitor verdaderamente de numen original,
pues en todas fus obras refolandece vn carácter de dulcura
elevada, propria de fu genio , y que no abandona aun en los
aífumptos amatorios , y profanos : de fuerte , que aun en
las letras de amores , y galanterías cómicas tiene vn gene-,
ro de nobleza , que folo fe entiende con la parte fuperior
de el Alma: y de tal modo defpierta la ternura , que dexa
dormida la lafeivia. Y o quifiera , que eíte Compofitor fiem-
pre trabajara fobre aífumptos fagrados : porque el genio
de fu compoficion es mas proprio para fomentar afectos ce-
leítiales , que para infpirar amores terrenos. Si algunos
cenan menos en él aquella defemboltura bulliciofa , que ce-
lebran en o t r o s , por elfo mifmo me parece á mi mejor:
porque la Mufica ( efpecialmente en el Templo ) pide vna
gravedad feria, que dulcemente calme los efpiritus ; no vna
travefura pueril , que incite a dar caítañetadas. Compo-i
aer de eíte modo es muy fácil; y afsi lo hazen muchos ; ds¡
gl otro es difícil, y afsi lo hazen pocos,

§. IX.
Ja T O que fe ha dicho haíta aqui de el deforden d¿
R / la Mufica de los Templos , no comprehende
folo las cantadas en lengua v u l g a r ; mas también Pfalmos*
Milfas, Lamentaciones , y otras partes de el Oficio Divino,
porque en todo fe ha entrado la moda. En Lamentado-*
3135 wnpreífas h§ vifto aguejlas mudanzas de ayres, feñaladas
— DISCURSO XIV. ;
r8o
¡con fus nomb res, que fe cftiian en las cantadas. Aquí fe
leía Grave,:, allí Ayrofo , acullá Recitado. Que aun e.n
vna Lamentación no puede ier.. todo grave ? Y es meneíter
que entren los ayrecillos de lis Comedias en la repreíen-
tacionde los mas triftes myfterios ? Si en el Cielo cupiera
llanto j llorarla de nuevo Geremias , al ver aplicar tal M u -
fica i fus Threnos.- Es роШЫе, que en aquellas fagradas
quexas , donde cada letra es vn gemido , donde fegun v a -
rios fentidps fe lamentan , yáda ruina de . jerufalén por los
Chaldeos,yá el eftrago de el Mundo, por los pecados, ya
la aflicción de la Iglefia. Militante en las perfecucioneg, y.i
en fin la anguilla de nueftro Redemptor en fus martyrios,
fe han de o.ir Ayrofos\ y Recitados? En el Alphab eto de
los penitentes , como llaman algunos Expofitores á los
Threnos de Geremias , han de fonar lqs ayrcs de fefiines, y
ferenatas ? Con quanta masrseori fe podía exclamar aquí
con la cenfura de Séneca contra Ovidio , porque en la def-
c.ripcion de. v a ob jeto tan tragico , -corno el Diluvio de
t

Peuealion , introduxo ab gim .verfo tanto .quanto ameno!


Non efi res fatis -fobria- JafcivJne. dsvordia orbe terrarunK
:

)Sfo fono tan mal,la cytfeira.de Nerón, quando eftab a ardient


do Roma,. comoTuenu Jaharmonía délos b aylcs;,-quando Ct
:

.eíián rfcpreíentando tan lúgubres m vítenos,


, >.}iS-'-¡' "V fb b re delinquirfe en eíto contra las reglas de
ia razón , fe peca tamb ién contra las leyes de Ja Mufica:
laslqiiides prefe-riven , que ei«auto fea apropriado á d a f i g -
nific.ac.ion de la letra: y afsi, donde la letra toda es grave,'y:
friílc,;grave , y trille.deb e fer todo el canto. .
; 3+ E s verdad , que contra efta regla,,-que es vna^dá
las pías caYdán.ales y pecan muy frequeñteinente los Muficos
£n todo;.-genero,d.e¿ compoíieiones';' vnos-por defecto, y
otros por exceífo. Por defecto , aquellos que forman la
Mufica fin atención algiuiíal genio de la letra; pero en tan
gtoífera falta apenas caen , fino aquellos que no fiendo ver-
daderamente Compófitb res;, 110 ha<ze}n«&rarc.óXa>. quetexec
retazos-de* femaras, ó cofeti•aimapipzo^.tiq lasxómpoficio-.
6es'dgptrpsMuficos. > »;.-flaco : ; •¡rf.IF. ' " f
: 3 5 , Por e.xcefio yerran los qufc^cídervándo con риеч
J o m o I. Oo ril
2PO MÚSICA D E LOS T E M P L O S ,
ril efcrupulo la letra , arreglan el canto á lo que fignifiea
cada dicción de por s i , y no al intento de todo el contex-
to. Explicará.me vn exemplo de que vía el Padre Kirquer,
corrigiendo eñe abufo. Trazaba vn Compofitor el canto
para eñe verficulo: Mors Fejtinat Lucluo/a. Pues que hizoí
En las vozes Mors, y i^ueiuofa , metió vna folia trine ; pero
en la voz Fcftinat, que eña en medio , como Significa celeri-
dad, y prefteza, plantó, vnas carrerillas alegres, que al rocín
mas pefado , fi las oyera , le -harían dar cabriolas. •
\6 Otro tanto , y. aun peor vi en vna de las Lamen-
taciones , quecité arHba : L a qual en la claufula : Depojitt
e/i vehementer non .babeas confolavorem , fenalaba Ayr$fo k

Qué bien viene lo ayrofo para aquella lamentable caída de


Jerufalén, ú de todo el Genero Humano, oprimido de él
pefo de fus pecados , con la agravante circunñancia defal-
tar confuelo enladefdicha J Pero la culpa tuvo aquel ad.
vervio Vehementer : porque la exprcfslon de vehemencia le
pareció al Compofitor , que pedia Mufica v i v a ; y afsi ¿ lle-
gando a l l í , apretó el paífo,. y 'para el Vehementer gañó eii
carrerillas vnas quarenta corcheas; fiendo afsi, que aunefti
-voz mirada por si fóla pedia muy-otra Mufica , porque allí
fignifiea lo, mifmo que Gravi/sime, expreífando enérgica-
mente aquella pefadéz, ó .pefadumbre con que la Ciudad
de Jerufalén agoviada de la bruñíante carga de fus pecados,
dio en tierra con Templo , cafas , y muros.
. 37 En eñe defecto cayó , mas que todos , el celebré
D u r o n , en tanto g r a d o , que á vezes dentro de vnamif-
ma copla vanaba feis, ú ocho vezes los afedos de el canto,
fegun fe iban variando los que fignificaban por si f@las las
diceiones-del verfo. Y aunque era menefter para efto grande
habilidad, como de hecho la tenia, era muy mal aplicada,.

'38 A'L'Gtií90Sf.( porque no dexémos eftó por decir j


J \ . • juzgan^ qtie.«b componer la' Mufi-tá 'ápro-
ipriada á los aífumptos , confine mucho en la eleífemft de
|os tonos : y afsi fbñakn vnb para aífumptos gtav e s , .otro
' .'o ... ..... : . - . r a
F
DISCURSO XÍV. ipi
para ios alegres, otro para los iuctuoíbs , &c. Pero yo creo,
que .efto haze p o c o , ó nadaparael cafo : pues na aytono
alguno, en-elqual no fe ayan hecho muy exprefsivas , y
pacheticas compoficiones para todo genero de afectos. E l
diferente; lugar , que ocupan los dos femitonos en el dia-
pafsón (que es en lo que coníiftela diftincion de los tonos )
es iníuficiente para inducir eífa diveríidad : ya porque don-
de quiera que fe introduzca vn accidental, ( y fe introducen
á cada paífo) altera eífe orden : ya porque varias partes, 6
las mas de la compoficion , variando los términos , cogen
los femitonos en otra poíitura, que la que tienen refpecto
de el diapafsón. Pongo por exemplo. Aunque el primer -

tono , que empieza en De ¡a fol re , vaya por efte orden;


primero vn t o n o , luego vn femitono , defpues tres tonos,
á quienes ligue otro femitono , y en fin vn tono : Los dife-
rentes rafgos de la compoficion , tomado cada vno de por
si, no liguen eífe orden : porque vno empieza en el primer
femitono, otro en el tono que eftá defpues de é l , y afsi de
todas las demás partes de el diapafsón, y acaban donde mas
bien le parece al Compofitar: con que en cada rafgo de la
compoficion fe varia la poütura de los femitonos , tanto c o -
mo en los diferentes diapaífones , que conftituyen ladiverfis
dad de los tonos.
39 Efto fe confírma,con que los mayores Muficos ef-
tánmuy difeordes en ladefignacion de los tonos, refpe&iva-
raente á diverfos afeítos. El que vno tiene por alegre , otro
tiene por trille ; el que vno por devoto , otro por juguetero.
Los dos grandes Jefuicas el Padre Kirquer , y el Padre D e -
chales, eftán en efto tan opueftos, que vn miimo tono le ca-
racterizad Padre Kirquer de efte modo: Harmonio/'us mag- t

nificas , & regia maieftate plenus. Y,el Padre Dechales d i -


ce : Ad tripudia , & choreas e/i comparatus , diciturque
propteredlafcivus, y poco menos diferepan en feñalar los
caracteres de otros tonos ; bien que no de todos.
40 L o dicho fe entiende de la 'diveríidad eflencial de
los tonos , que confifte. en la di verfa poíitura de los femi-
tonos en el diapafsón ; pero no de la diverfidad accidental,,,
ftuc confifte en fer mas a l t o s , ó mas baxos. Efta algo puede
Oo z con-
2Q2> MÚSICA D E LOS T E M P L O S ,
conducir: porque la mifma Mufica pucfta en vozes mas baxas;
es mas religiofa , y grave, y trasladada á las altas, perdien-
do vn poco de la mageftad , adquiere algo de viveza ale-
gre : por cuya razón , foy defentir, que las compunciones
para las Igleíias no deben fer muy fubidas: pues íbbre que las
vozes en el canto van comunmente violentas , y por tanto
fuenán afperas, carecen de aquel fácil juego, que es menefter
para dar las afecciones que pide la Mufica,y aun muchas ve-
zes claudican en la entonación; digo , que á mas de ellos in.
convenientes no mueven tanto los afectos'de refpeto ,deva-'
cion, y piedad, como fi fe formaran en tono mas baxo*

§.. XI.
'41 T3^ R
^ tn'fma razón eftoy mal con la introduce.
a

X cion de los Violines en las Igleíias. Santo


T h o m á s , en el lugar citado arriba , q u i e r e , que ningún'
inftrumento Mufico fe admita en el Templo- , por la- ra-
zón de que ellorva a la devoción aquella delectación feh-í
fible. , que ocafiona la Mufica inftrumental. Pero ella ra*
zon es difícil de entender, aviendo dicho el Santo , que
la delectación que fe percibe en el canto, induce á devoción
á los efpiritus flacos; y no parece , que »y difparidad
de vna á otra : porque íi fe dice que la lignificación de la
letra que fe canta , ofreciendo á la memoria las cofas Divi-'
rías, haze que la deleitación en el canto firva como de v e -
hículo , que lleve el corazón ázia ellas : lo mifmo fucederá.
en k delectación de el inftrumento que acompaña la letra^
y - e l canto. Añádete á efto , que. el Santo en el mifmo-
lugar aprueba el vfa de los inftrumentos Muficos enlaSy-v
nagoga : por la razón de que aquel P u e b l o , como-duro,,
y c a r n a l , convenia que con eíte medio fe provocarte á la
piedad. Luego por lo menos para: fe me jantes genios con-
vienen en la Iglefia los inftrumentos Muficos. Y por con-
figüieritefíendo de eíte jaez muchifsimos de los que concur-
ren á la Iglefia en eftos tiempos , fiempre ferán de grande
vtilidad los inftrumentos. Fuera de que no puedo entender
Spmq. la delecltacionfenfibie ,,que ocafiona la Mufica-infttut
INCA-
DISCURSO XIV. 203
mental induzca á devoción á los que per fu dureza r.v'n.
menos difpueítos para ella , y ia impida en los que tienen
el corazón mas-apto para el Culto Divino. -
4?, Conozco, y confie fio, que es mucho mas fácil
que yo no entienda á Santo T h o m á s , que noque el San-
to desafíe de decir muy bien." Mas en finia practica vnl-
verfal de toda la Igleíia autoriza, el vfo de ios inftrumen-
tos. E! cafo eftá en la elección de ellos. Y por mi digo,
que los Violines fon improprios en aquel Sagrado Theatro.
Sus chillidos , aunque harmoniofos , fon chillidos., y exci-
tan vna viveza , como pueril , en nuc'ftros efpirltus, muy
diftante de aquella atención decorofa , qi>e fe debe á la m a r

geítadde los Myfterios efpeclalmente- en elle tiempo, que


los que componen para Violines, ponen eftudio en hazer las
eompoíicione-s tan fubidas , que el execntor vaya á.dár en el.
puente con los dedos.
4J Otros inftrumentos ay refpe&ofos ,. y graves,;,
¡Corno la H a r p a , el V i o l ó n , la Efpineta ; fin que fea incon-
veniente de alguna-monta, que falten Tiples en la Mufica
ínfirumental, Antes con eífo ferá mas mageítuofa y feria,
que es loque e n e l T e m p i o f e necefsi'ta. El Órgano es vn,
inftrumento admirable, ó vn compueflo de muchos infíru-
raentos.- Es verdad que los Organiftas hazen. de él quanuo
quieren, Gayta, y Tamboril: y quieren muchas vezes».

$4 r V T O ^ * ^ 9 dé el intento ; antes muy con-;


r í u e r a

forme á é l , d e c i r aqui algo de la poefia,;


2|ue oy fe haze para las cantadas de el Templo , ó como
llaman-: A lo Divino. Sin temeridad me atreveré á pronun-
ciar, que la paefiá en.Efpaña eftá mucho mas pérdida, que la
Mufica. Son Infinitos los que hazen copias, y ninguno es
SPoeta; Sife me pregunta , quales fon las artes mas difíci-
les de todas , refponderé , que la Medica Poética , y Ora-
>

toria. Y fi femé pregunta quales fon las mas fáciles, ref--


¡pondéré , que la. Poética , Oratoria , y Medica. Ñ o ay
¡Ucersciadó , que fi- qukre.no haga.Gpgks quantos- Reli-;
?

-•' gio.-i
^94- MÚSICA D É LOS TEMPLOS,
giofos Sacerdotes ay fuben al Pulpito , y quaitos eftudiaf}
Medicin I hallan Partido, Pero á donde eftá el Medico verr
daderamente fabio , el Poeta cabal, y el Orador perfecto?
45 Nuellro erudicifsimo Monge Don Juan de Mabi-
ilón en fu libro de Eftudios Monafticos dice , que vn Poe-
ta excelente es vna alhaja rarifsima. Y yo me conformo
con fu dictamen : P o r q u e , fí fe mira bien , donde fe en-
cuentra , entre tantas coplas como falen á luz , vna fola
que ( dcxando otras muchas calidades) fea juntamente na-
tural , y fubiiine , dulce , y eficaz , ingeniofa , y clara,
brillante fin afeita c ion , fonora fin turgencia, harmoniofa
fin iinpropriedad, corriente fin tropiezo, delicada fin me-
lindre , valiente fin dureza, hermofa fin afeyte , noble fin
ptefumpcion , conceptuofa fin obfcuridad ? Cafi oífaré decir,
que quien quifiere hallar vn Poeta , que haga verfos de elle
m o d o , le bufque en la Región donde habita el Fénix.
4¡5 Por lo menos en Efpaña , fegun todas las apa-
riencias , oy no ay que bufcarle, porque eftá la poefia en
Vn efiado laftimofo. El que menos mal lo haze ( excep-
tuando vno , ii otro raro ) parece que eftudia en como lo
ha de hazer mal. T o d o el cuidado fe pone en hinchar el
v e r f i c o n hyperboles irracionales, y vozes pompofas : con
que fale vna poefia hydropica confirmada, que da afeo, y laf-
tima verla.' La propriedad , y naturalidad , calidades eífen-
ciales, fin las quales, ni la poefia , ni la profa jamás pueden
fer buenas, parece que andan fugitivas de nuefiras compofi-
cioiií.s. No fe acierta con aquel refplandor nativo , que haze
brillar el concepto ; antes los mejores penfamientos fe def-
figuran con locuciones afectadas : al modo que cayendo el
aliño de vna muger hermofa en manos indiferetas , con ri-
diculos afeytcs fe le eftraga la belleza de las facciones.
47 Efto en general de la poefia Efpañola moderna.
Pero la peor es , la que fe oye en lasCantinelas Sagradas.
Tales fon , que fuera mejor cantar coplas de C i e g o s : por- .
que al fin eftas tienen fus afectos devotos , y fu mifmaruf-
rica feticiiíez ella en cierto modo haziendo feñas á la
buena intención. T o d a la gracia délas cantadas, que oy
fuenan en las Iglefus , confifte en equívocos baxos , me-
ta-
DISCURSO XIV. 2 0 ^
íaphoras triviales , retruécanos pueriles. Y lo peor e s , que
•carecen enteramente de eípiritu , y moción , que es lo prin-
cipal , 6 lo vnico que fe debiera bufear. En ella parte han
pecado aun los buenos Poetas. Don Antonio de Solis fue
fin duda nobilifsimo Is»geni,o, y que entendió bien todos
¿los primores de la poefia, excediéndote á si mifmo , y ex-
cediendo á todos en pintar los afectos con tan proprias, in-
timas , y fútiles exprefsiones, que parece que los da mejor
á conocer fu pluma , que la experiencia. Con todo, en fus
letrillas facras fe nota vna eftraña decadencia : pues no fe
encuentra en ellas aquella nobleza de penfamientos , aque-
lla delicadeza de exprefsiones, aquella moción de afectos,
que fe hallan á cada- patío en otras poefia^ líricas tuyas.,
Y no es porque le faltarte numen para affumptos Sagrados;
pues fus endechas á la Converfiou de San Erancifco de Borja^
fon lo mejor que él hizo, y acafo lo mas fublime , que hafta
aora fe ha compueílo en lengua Caitel¡ana t

48 Creo que ello ha dependido de que.afsi Solis , c o -


mo otros Poetas de habilidad , á ellas letrillas que Se hazen
paralas feftividades, las han mirado como, cofa de juguete;;
fiendo áfsi, que ninguna otra compoficion pide atenderfe
con tanta Seriedad. Qué aííumpto mas noble , que el de ef-
tas composiciones , donde ya fe elogian las virtudes de los.
Santos. , ya. fe reprefenta la excelencia de los My Herios.,. y.
atributos Divinos? Aqui es donde fe avian de e.sforear mas,
los que tienen numen. Qué empleo mas digno de vn g e -
nio venta j o f o , que pintar la hermofura de la virtud , de
fuerte, que enamore reprefentar la fealdad de el vicio,
de modo, que horrorice , elogiar á D i o s , y á fus Santos s

de forma , que el elogio encienda á la imitación, y a! cul-


to? L o grande de la poefia es aquella actividad perfuaSiva,
que fe mete dentro de el alma , y mueve el corazón ázia la
parte que quiere el Poeta. Eíle no es juego de niños (dice
nueftro Mabillón, hablando de la poefia ) mucho menos ferá
juego de niños la poefia Sagrada* C o n todo la que fe canta, en
nueílras Igleíias, no es otra cofa..
49 Aun aquellos , cuyas composiciones fe eíliman,
ño, hazen otra cofa que preparar los. conceptillos que les
2p6 M Ú S I C A B E .LOS T E M P L O S ,
ocurre ¡I fob re el" aflumpto , y aunque no tengan entre.Í?I
.vnion de reíjieóto , ó conducencia á algún defignio, los
diftribuyen en las coplas , de m o d o , que.todo loque fe lla-
ma d i c h o , o concepto , aunque vno vaya para glandes,
,y otro para Marruecos, fehaiteque entre en el .contexto,
У como cada copia diga algo (afsife explican) aunque fea
Xín moción,, efpiritu, ni fuerza; mas e s , aunque fea fin
¡6rden , ni dirección á íia determinado , fe dice que es b ue-
na composición ; íiendo afsi que ni merece nombre de СОНЬ:
poíicion : como no merece el nomb re de edificio vn moni-
toa, de piedras , ni el nombre de pintura qualquiera agrega-;
do de colores,
I o Lafentrencia aguda ,el chille, el donayre, el concep--
to ,fon adoraos precifos de la pocha ; pero fe han de ver en
el i a , no como que fon b ufeados con efiudio ; si como que al
Poeta fe le vienen a l a mano. El ha de feguir fu camino íegim
el rumb o propueífo , echando mano folo de aquellas flores,
que encuentra al pallo, ó que nacen en el nfifmo .camino. Afsi
lo hizieron aquéllos grandes Mae'ftros los Virgilios , los
O v i d i o s , los Horacios, yquauto tuvo de ilufire la antigue-
d.id en efie Arte. Hazer coplas , que no fon mas que vnas
mafias informes de conceptillos, es vna cofa muy fácil , y
juntamente muy. .invtil: porque no a y en ellas, ni cabe alguno
de los primores altos de lapoefia. Que digo , primores alto?
de la poefia ?• Ni aun las calidades que fon de fu eífencia.
сt Pero aun no he dicho lo peor que ay en las canta-
das a lo Divino : y e s , q u e , ya que no todas., muchifsimas
eftán compueltas al genio b urlefeo. Con gran diferecion .por
cierto : porque las cofas de Dios fon cofas de entremés. Que)
concepto darán de el inefab le myfterio dé la Encarnación
mil difparates puertos en las b ocas de G i l , y Pafqual ? De^
stoloaqui , porque me impaciento de confiderarlo, Y á quiei»
.ña le dÜfoaare tan indigno ab ufo por si mifmo^
, : • no podré yo convencerle con argu-.
mentó alguno.

PARALE^
^..¿R^/***** *** *** *** *****\t^|Tífc~

PARALELO
E LAS LENGUAS
•I
CASTELLANA , Y FRANCESA,
D I S G U R S Q < R , X V ,

§. I*

M ^ s r ^ N ? O S extremos,, entrambos repreheñfibles¿


noto en nueftros Efpañoies en orden &
las cofas nacionales. Unos las engrana
deccn hafta el Cielo. Otros las abaten
hafía el Abifrao. Aquellos, que ni con
c-1 trato de los Eílrangeros , ni con la letura de lo's Libros,'
efpaciaron fu efpirku fuera de el recinto de fu Patria*
juzgan que quanto ay de bueno en el Mundo eftá encerrado
en ella. De aqui aquel bárbaro defdén , con que miran á las
demás Naciones , afquean fu idioma, abominan fus coftum-
bies, no quieren efcuchar, ó efcuchan con irriíion fus adelan-
tamientos en artes, y ciencias. Baílales ver á otro Eípañoí
con vn libro Italiano, ó Francés en la m a n o , para conde-:
narle por genio extravagante , y ridiculo. Dicen , que
(.manto ;¡y bueno , y digno de fer l e í d o , fe halla efcrito esi
ios dos idiomas L a t i n o , y Caftellano, § u e los libros EÍ-.
> ¡ l o m o Ja " Pg ^
2.pS PARALELO D E LAS LENGUAS,
trangeros , especialmente Francefes, no trahen de nuévoj
fino vagatelas , y futilidades. Pero de el error , que padecer»
en efto, diremos algo abaxo.
2 P o r el contrario los que han peregrinado por varias
tierras, 6 linfa)ir de lafuya comerciado con Eñrangeros,
fi fon picados tanto quauto de la vanidad de efpiritus ame-
nos , inclinados á lenguas , y noticias , todas las cofas de
otras Naciones miran con admiración , las ce la nueftra
con defdén. Solo en Francia , pongo por exempio , reynan,
fegun fu dictamen , la delicadeza , la policia, el buen güito.
Acá todo es rudeza, y barbarie. Es cofa graciola ver á al-
gunos de eítos Nacioniftas (que tomo por lo milmo que
Antinacionales ) hazer violencia á todos fus miembros,
para imitar á los Eítrangeros en geftos , movimientos , y
acciones , poniendo efpecial eítudio en andar como ellos
andan , fentarfe como fe tientan , reirfe como fe rien , hazer
la corteña como ellos la hazen : y afsi de todo lo demás,
Hazen todo lo pofsible por defnaturalizarfe : Y yo me hol- |
garia que lo lograífen enteramente, porque nueítra Nación j
defcartafle tales figuras.
I Entre eítos , y aun fuera de eítos , fobrefalen al-
gunos apafsionados amantes de la lengua Francefa , que
prefiriéndola con grandes ventajas á la Caftellana , ponde-
ran fus hechizos, exaltan fus primores, y río pudiendofu-
frir ni vna breve anfencia de fu adorado idioma , con al-
gunas vozes que vfurpan de él , faipican la converfacion,
aun quando hablan en Cattellano. Eíto en parte puede de-
c i r f e , que ya fe hizo moda : pues los que hablan Caítelia-
no p u r o , cafi fon mirados como hombres de el tiempo de
ios Godos»

§. II.
'4"\/ ^ r
^ ° y reñido con la curiofa aplicación á
1 1 0 e

\ inítruirfe en las lenguas Eítrangeras Conoz-


co que fon ornamento , aun quando eftén demudas de vtili-
dad. V ; o q u e fe hizieron inmortales en las Hiítorias Mi-
;

«hridates, R e y de P o n t o , por faber veinte y dos idiomas


di-
DISCURSO XV. iog
.diferentes: Cleopatra , Rey na de E g y p t o , por fer fu Jen-
gua , como la llama Plutarco , órgano en quien variando
á fu arbitrio los regiílros , fonaban alternativamente las
vozes de muchas Naciones : Amalafunta , hija de Theodo*
rico, Rey de Italia , porque hablaba las lenguas de todos
los R e y n o s , que comprehendia el Imperio Romano. N o
apruebo la aufteridad ele Catón , para quien la aplicación
á la lengua Griega era corrupción digna de caftigo : ni el
eferupulofo reparo de Pomponió Leto , que huia como de
va afpid , de el conocimiento de qualquiera voz Griega,;
por el miedo de manchar con ella la pureza Latina.
5 A favor de la lengua Francefa fe añade la vtilidad,*
y aun cali necefsidad de e l l a , refpectode los.fugetos incli-
nados á la letura curiofa , y erudita. Sobretodo genero de
erudición fe hallan oy muy eftimables libros eferitos en
idioma Francés, que no puedenfuplirfe con o t r o s , ni L a -
tinos, ni Eípañoles. Pongo por exeinplo. P a r a l a Hiíiorias
Sagrada , y Profana no ay en otra lengua promptuario
equivalente al gran Diccionario Hijiorico de Moreri: por-;
que el que defea vn refumen de los hechos de algún fuge-;
to , ignorando la Era en que floreció , en defecto de el D i c -
cionario Hiftorico , Lera menefter rebuelva muchos libros
con gi*an difpendio de tiempo, y en el Diccionario , figuien-j
da el orden alphabetico al momento halla lo que buíca¿
Afsimifmo para la Geographia fon promptifsimo focorra
ios Diccionarios Geographicos de Miguel Braudrand , y
Tbomis Cornelia ; quando faltando eftos , el que quiere
inílruirfe de las particularidades de alguna Ciudad , Monte,;
ó Rio , fi ignora la Región donde eftán firmados, avrá de
rebolver muy de efpacio los agigantados volúmenes de
Gerardo Mercator , Abrahan Hortelio , Bleu , Sanfon, p
La-Fer.
ó . D e la phyfíca experimental (que es la vnica qué
puede fer vtil) fe han eferito en el idioma Francés mu-
chos , y curiólos libros , cuyas noticias no fe hallan en
otros. La Hi¡loria de la Academia Real de lar Ciencias^
es muy ungular en eñe genero , como también en infinitas
t^evacigav-s Agronómicas, Chinacas, y Botánicas, cuyo
300 PARÁLELO DE LAS LENGUAS,
cumulo no fe encontrará , ni fu equivalente, en libro alguna!
L a t i n o ; mucho menos en Caftellano.
7 De Th'jologí'i Dogmática dieron los Francefes á
luz en el patrio idioma prcciofas obras. Tales fon algunas
de el famofo Antonio Ama! do : y todas las de el infigne'
Obiípo Medenfe Jacob o Benigno Boffuet, efpecialmcnte fu
Hifioria de Lis variaciones ds las Iglefias Frote fiantes , y la
expoficion déla doclrina de la Iglefia CatbolicJ fobre las ma-
t

terias de eontroverjia : eferitos verdaderamente incompara-


bles , y .que reduxeron mas Hereges á la Religión verda-:
dera , que todos los rigores juftamente practicados con
ellos por el gran Luis X I V . En que no fe deroga á la gran-
de eftimacion, que fe merecen los inmortales eferitos de el
Cardenal Belarmiao , y otros Controverfíftas anteriores.
iÑi ellos hazen evitar la necefsidad de aquellos : porque los
nuevos efugios , que defpues de Belaruii ¡o difeurrieron
los Ptoteítantes , y las variaciones , 6 novedades , que
introduxeron en fus dogmas , precifaron á bufear contra
ellos otras a r m a s , ó por lo menos á dar nueves tilos alas
que eftaban depoíitadasen Sos grandes armamentarios de los
Controvertidas antecedentes.
8 P...ra la inteligencia literal de toda la Efcritura
Sagrada , reyna oy en la eílimacion de todos ¡os Profefio-
res la admirable expoficion , que poco ha dio á luz el ía-
pientifsimo Benedictino Don Augujhn Caimet , como vn
magifle'-io deltilado á la llama de la mis jui:ioffa critica de
q u t i t o bue.iofe avia eferito en todos los Siglos anteriores
fobre ttn noble aíTumpto. En que logro también el P. dre
Caímet la ventaja de aprovecharle de las nuevas 'luzes,
que en ellos tiempos adquirió la G o g r a p h i a , para iluf-
trar muchos lugares , antes poco entendidos, de la Efcri-
tura.
9 Para el mas perfecto conocimiento de el poder,
govierno , Religión , y coftumbres de machos Reynos.dif-
tantes, nadie 'negará la gran conducencia de las relacio-
nes de Tabsr-n'er ,.T,ievenot, y otros célebres Viageros
Francefes, Otros muchos libros ay eferitos en el vulgar
idioma de la Francia , Angulares'cada vno en fu chifle,/
DISCURSO XV. 301
o para determinada efpecie de erudición : Como las noti-
cias de L República de las letras : Las memorias de Trevouxi
el Diario de los Sabios de Varis \ La Bibliotbeea Oriental de
Berbelot, &c.
t o Afsi, que el que quiíiere limitar fu eñudío á aque-;
Has facultades que fe eifeñan en nueftr >s Efcnelas, L ó g i -
ca , Methar>hyfica , Jurifprudencia , Medicina Galénica,
Theologia Efchoiaftica , y M o r a l , tiene con la lengua La-
tina quanto ha menefter. Mas para Sacar de eñe ámb ito,
ó fu erudición , o fu curiofidad , deb e b ufear como muy
v t i l , tino ab folutamente neceífaria la lengua Fr..ncefa. Y;
elfo baña para que fe conozca el error de los que repme-s
bau como invtil la aplicación á eñe idioma.

• §. I I I .

и h~ /TAs no por elfo concederemos, ni es razón",'


•VI alguna ventaja á la lengua Francefa f o -
bre la Caftcllana. Los exceffos de vna lengua , reípedo
de otra , pueden reducirle á tres capítulos : ¡•rop,-iedad >

Harmonía , у Сор/.и Y en ninguna de eflas calidades cede


la lengua Cafteilana á la Francefa.
12 En la propriedad j u z g o , contra el común dicta-
inen , que todas las lenguas fon iguales en quanto á todas
aquellas v o z e s , que efpecificamente Significan determina-
dos ob jetos. L a razones clara: porque la propriedad de
vna voz no es otra cofa , que fu eíp* ciíica determinación
á Significar tal ob jeto ; y como cita es arb itraria , ó d e -
pendiente de la lib re voluntad de los homb res , íupuefto
que en vna Región eñe tal voz determinada á figniricar
tal ob jeto , tan propria es como otra qualquiera que ie
Signifique en idioma diferente. A L i no Se puede decir
(pongo por exemplo) que el verb o Francés Twtaper,i'éa
mas, I.i menos propcio que el Cañellano engaña? , la voz
ríen que la voz nada. Puede aver entre dos lenguas la
defigualdad de que vna ab unde mas de vezes particulares,
6 eí'pecificas. Mas eño en rigor ferá 1er mas copiofa, que
es capitulo diñinto ; quedando igiules en la ptopriedad]
ед
301 P A R A L E L O DE LAS L E N G U A S ,
esi orden á todas las vozes efpecihcas, que aya en vna',
y otra.
ij De la propriedad de el idioma fe debe diftin-
guir la propriedad de el eftiio : porque ella, dentro de el
mifr.o idioma admire m a s , y menos , fcgnn la haoilidad,
y genio de el que habla, ó eferive. Confine la proprie-
dad de el eftiio en vfar de las locuciones mas ¡¡atúrales , y
mas inmediatamente reprefentativas de los objetos. En. ef-
ta parte , fi fe haze'el cotejo entre Eícrlptores Modernos,
no puedo negar , que por lo común hazen ventaja los Fran-
ceies á ios Efpañoles, En aquellos fe obferva mas naturali r

d a d ; en eftos mas afectación. Aun en.aquellos Franceíes


que mas-fublimaron el eftiio , como el Arcobifpo de Caní-
brai , Autor de el 'Th*ism.ico , y Magdalena Scuderi, fe ve
que el Arte eftá amigablemente vride; con la naturaleza.
Refplandece en fus obras aquella gala nativa, vnica her-
mofura , con que el eftüo hechiza á el entendimiento. Sotf
fus eferitos como jardines donde las flores eípontaneamea-
te nacen;' no como lléneos donde eftucliofamer.ee fe pin-
tan.' En los Efpañoles,'picados de cultura, dio en reynarde
algún tiempo á efta parte vna afectación pueril cíe tropos
rethoricos, por la mayor parte vulgares , vna multiplicación
de epithetos fynonimos, vna colocación violenta de vozes
pompólas , que hazen el eftiio no gloriofamence magcñno-
fo ; si afquerofamente entumecido. A que añaden muchos,
vna temeraria introducción de v o z e s , ya Latinas , ya Fran-
ceías, que debieran fer defeaminadas, como contravando
de el idioma , 6 idioma de contravaiido en eftos Reynos;
Ciertamente en Efpaña fon pocos los que diftinguen el ef-
tiio fublime de el afectado ; y muchos ios que confunden
vno con otro.
14 He dicho que por lo común ay efte vicio eft
nueftra Nación ; pero no fin excepciones: pues no. faltan
Efpañoles , que hablan , y eferiven con fumaia naturali-
dad , y propriedad el idioma Nacional. Sirvan por todo?,'
y para todos de exemplares D <n Luis de Saiazar y O f -
t r o , Archivo grande , no menos de la lcu-rua Caftelhna
antigua y moderna eu toda fu ext^níion, que delaHlf-,
s
DISCURSO XV*. 303
foria , la G e n e a l o g í a , y la Crítica mas falúa: y el M a -
rifcal de Campo Vizconde de Puerto , que con fus exce-
lentes libros de Reflexiones Militares dio tanto honor á la
Nación Efpañola entre las Eftrangeras. No nacen , pues,
de el idioma Efpañol la impropriedad , ó afectación de al-
gunos de nueilros Compatriotas ; si de falta de conoci-
miento de el miíino i d i o m a , ü defecto de g e n i o , ó cor-
rupción de gufto.

§. IV.
Í5 | ; N qüanto á la harmonía, ó grato fonido de
JL2< el idioma , no sé qual de dos cofas diga:
b que no ay exceífo de vnos idiomas a otros en eíla par-
te: ó que no ay Juez capaz de decidir la ventaja. A t o -
dos fueua bien el idioma nativo ; y mal el Foraftero,
hafta que el largo vfo le haze proprio. Tenemos hecho
concepto de que el Alemán es afpero ; pero el Padre K i r -
quer en fu Defcripcion de la Torre de Babel, affegura que
no cede en elegancia á otro alguno de el Mundo. D e n -
tro de Efpaña parece á Caílellanos, y Andaluces hunúide,
y plebeya la articulación de la Jota , y la G de Portu¡i¡..e-
fes , y Gallegos. Pero los Francefes, que pronuncian c'e
el miírno modo, no folo las dos letras dichas , mas tam-
bién la Ch , efcuchan con horror la articulación Cafteilana,
que refultó en ellos Reynos de el hofpedage ae los A f r i - •
canos. N o ay Nación que pueda fririr oy el lenguage,
que en ella mifma, fe hablaba doeientos años ha. L o s
que vivían en aquel tiempo guflaban de aquel lenguage,
fin tener el Órgano de el oído diferente en nada de los
que viven aora ; y fi refucitalfen , tendrían por barba-:
ros á fus proprios compatriotas. Eleftilode-Alano Char-
tier , Secretario de el Rey Carlos V I L de Francia , fue
encanto de fu Siglo : en tal grado, que laPrincefa Margari-,
ta de Efcocia , efpofa de el Deirin , hallándole vna v e s
dormido en la Ante Tala de Palacio , en honor de fu ra-;
ra facundia, á villa de mucha C o r t e , eftampó vn ofculo
en fus labios. D i g o , que en honor de fu rara facundia,

1
5,ó'4- . PARALELO D E "LAS. LENGUAS,
y-fin intervención de alguna paf»ion baftarda,pór fer' Al'^
: 1

no extremamente feo : y afsi reconvenida iobre efte'capi-i


tuló por los. Aísiftentes , refpondió , que 'avü befado , no
aquella feifslma cara, fino aquella hermofifsimab'ocá. Y óf
tanto las profasjcómo las poefias de Alano, nó pueden leerfe)
en Francia fin tedio : aviendo variado la lengua'francefa'dé
aquel Siglo a elle mucho mas que ía Caftsll'ana» Qué otra
cofa, que la falca de vio , convirtió en diffonahcia ingrát'á
aquella dulcifsima harmonía?
fó' De m o d o , que puede aífegurarfe que los idío-;
mas no fon afperos , ó apacibles , fino á proporción , que
fon , ó familiares , ó efiraños. L a defigualdad verdade-
ra eftá en los que los habían , fegun fu mayor , ó ménoc
g e n i o , y habilidad. Afsi entre ios mifmos Efcfitores£?'pa-
ñoles ( l o mifmo digo de ias demás Naciones ) en vaos ve-
mos vn eftiio dulce, en otros afpero : en vnos enérgico,
en otros lánguido : en vnos mageftuofo , en otros abatido.
N o ignoro que en opinión de muchos críticos, ay vnos
idiomas mas oportunos que otros , para exprimir determi-
nados afeólos. Afsi fe dice , que para reprefentadones tra-
ficas no ay lengua como la Indicia. Pero yo c r e o , que el
íiiayor eitudio que los Inglefes , llevados de fu genio feroz,
pulieron en. las piezas dramáticas de efte carácter, por la
complacencia que logran de ver imágenes fangricntas en
el theatro.,. los hizo mas copiofoá en exprefsiones repre-
fensativas de vn corage bárbaro , fin tener parte en efto la
índole de el idioma. De el-mifmo modo la propriedad,
que algunos encuentran en las compunciones Portuguefas,
yá oratorias, ya poéticas , para aflumptos amatorios , fe
debe atribuir , no al genio de el lenguage , fino al de la
Nación. Pocas vezes fe explica mal lo que fe fíente'bien:
porque la pafsion , que manda en el pecho , logra cafi igual
obediencia en la lengua , y en la pluma.
17 Una ventaja podrá pretender la lengua Erancefa
fobre la Caftellana ,-deducida de fu mas fácil articulación. E s
c i e r t o , que losFrancefes pronuncian mas blando, los Efpá-
•ñoles mas fuerce. La;lengua,Francefa ( digámoslo afsi) fe def-
i la Efpañola golpea.. Pero lo primero eft a diferenciaba
DISCURSO XV. 30 y
fcfta-en la.fubílaiKu de el Idioma; fino en EL accidente de la
pronunciación: fie.ido cierto , que vnamiíma dicción , y
,V3la mitina letra puede pronunciarfe , ó fuerte , ó blanda,, fe-
gun ia va*-ia aplicación de el órgano , que por la mayor par-
te es voluntaria. Y afsi no faltan Efpañoles , que articu-
len con mucha í u a v i d a d : y aun creo que cafi tod<\\ JOS
hombres de alguna policía oy lo hazen afsi. Lo fegundo
g o , que aun quando fe admitiente efta diferencia entre LOS
dos i d i o m a s , mas razón avria de conceder el exceífo al Gaf-
fellano: fiendo prenda mas noble de el idioma VNA **'*len-i
£Ía varonil , que vna. blandura afeminada.
18 Marco Antonio Mureto , en fus Notas {d&)e Ca-í
CULO , notó en los Efpañoles el defecto de hablar hueco,'
y fanfarrón : Mo.rz patrio inflatis buccis loquentes. Y o con-
fieífo, que es ridiculez hablar hinchando las MCGILLA3 CO-;
MO fi fe infpiraífe el aliento á vna trompeta , y en vná
converfacion de paz entonar lafolfa de la ira, Pero eñe de-
fecto NO exifte fino en los plebeyos , entre quienes el ef-;
fuerco material de los labios pafia por fuplementq de la efij
^acia de las razones.

gp T f 7 N la copia de vozes ( vnico capitulo que púe*J


de defigualar fubftancialmeníe los idiomas)
juzgo que excede conocidamente el Caftellano al Francés.
Son muchas las vozes Caftellanas , que NO tienen equivalen-,
te en la lengua Francefa ; y pocas he obfervado en eña¿
que no l e tengan en la Cañellana. Efpecialmente de vozes
eompuefias abunda tanto nueñro idioma , que dudo que le
iguale aun el Latino , ni otro alguno , exceptuando al
Griego. El Chanciller Bacón, ofreciendofe hablar ( de inter¿
rerum , cap. 38.) de aquella verfatilidad política, que conf-,
tituye Á los hombres capaces de manejar en qualquierí
ocurrencia fu fortuna, confieíTaque NO halla en alguna de
las qujtro lenguas Inglefa, Latina, Italiana , y Francefa,
yoz que fignifique lo que la Caftellana defemboltura. Y acá
¡guamos tan de fobra, que para fignificar lo mjfnio tene^
tos \ " ' ¿398
3 oó* PARALELÓ D E LAS LENGUAS,
mos otras dos vozes equivalentes , Defpejo , y Defem*
• barazo.
20 Notefe , que en todo genero de aflumptos efcrk
vieron b ien algunas plumas Efpañolas, fin mendigar nada
de otra lengua. L a elegancia , y pureza de Don Carlos Со-
l o m a , y Don Antonio de Sólis en materia de Hiftoria no
tiene que emb idiar á los mejores Historiadores Latinos;
L a s Empreñas Políticas de Saavedra fundieron á todo Ta-;
cito en Caftellano, fin el focorro de otro idioma. Las Theo-,
logias Expofitiva, y Moral fe b ailan vertidas en infinitos
Sermones de bello eftilo. Que Autor Latino efcrivió con
mas chridad , y copia la Myftica, que Santa Therefa ? Ni
la Efcholaftica en los puntos mas fub limes de ella , que la
M a d r e M a r i a d e Agreda ? En los aflumptos poéticos,nin-
guno ay que 4as Muías no ayan cantado con alta melodía
en la lengua Caftellana. Garcilafo, Lope de Vega, Gongora,
Q u e v e d o , Mendoza , Solis , y otros muchos, fueron C i -
nes fin veftirfe de plumas Eñrangeras. Singularmente fe
y e y que la lengua.Caftellana tiene para la poefia heroyea
tanta fuerca como la Latina , en la traducción de Lucano,
que hizo Don Juan de Jauregui : donde aquella arrogante
valentía, que aun oy aííufta á los mas apafsionados de Vir-
gilio , fe halla con tanta integridad trasladada á nueflro
i d i o m a , que puede dudarfe en quien b rilla mas efpiritu, Si
en la copia , Si en el original. Últimamente eferivío de to-
das las Mathematicas (eftudio en que haña aora fe avian def-
cuidado los Efpañoles) el Padre Vicente de Toska , cor-
riendo fu dilatado campo , fin falir de el patrio idioma. Ев
tanta variedad de aííumptos fe explicaron excelentemente
los Autores referidos , y otros infinitos que pudiera alegar,-
•fin tomar ni vna voz de la lengua Francefa. Pues á que pro-
pofito nos las introducen aora?
21 E l empreñito de vozes , que fe hazen vnos idio.-'
mas á otros , es fin duda vtil á todos : y ninguno ay,
que no fe aya intereflado en eñe comercio. L a lengua Lati-
na quedaría en vn árido efqueleto , Si le hizíeSíen reftkuir
todo lo que debe á la Griega. L a Hebrea con fer madre de
todas de todas heredodeípues algpuas v o z e s , como afir-!.
?

ma
DISCURSO' ' XV. 507
jfítá San Gerónimo : Omniumpcene linguarum ve>'brt vtun?
tur Hcebrii. (in cap. 7. Ifai.) L o mas íingular es , que
íiendo la Caílellana , que oy fe vfa , dialecto de la Latina,
fe halla que la Latina mendigó algunas vozes de la lengua
antigui Efpañola. A u l o G e l i o citando á Varrón dice, que
ia voz Lancea la tomaron los Latinos de los Efpañoles.
( Noel. Attic, lib. 1 ) . cap. 3. ) Y Quintiliano , que la v o z
Gurdas , que figniíica hombre r u d o , u de corta capacidad,
fué trasladada de Efpjtña á R o m a : Et gurdos , quos pro
ftolidis aceipit valgus , ex H'fpania traxiffe originem audivi,
{lib. i.lnjl.Orat.cap. 9.)
22 Pero quando el- idioma nativo tiene vozes pro-
prias, para qué fe han de fubltituir p>r ellas las de el age-
no ? Ridiculo penfainiento el de aquellos , que , como n o -
taba Cicerón en vn amigo f u y o , con vozes inufitadas juz-
gan lograr opinión de diferetos : Qui recle putabat loqui
ejfe inufitate loqui. (lib. de Orat.) Ponen por medio el
no fer entendidos , para fer reputados por entendidos;
quando el huirfe con vozes eftrañasde la inteligencia de los
oyentes , en vez de avecindarte ea la cultura, es , en dicta-
men de San Pablo , hofpedarfe en la barbarie : Si nefeiera
vim vovis ,ero ei qui toquiíur barbarus, qui loquitur,-
in me barbarus.
23 A infinitos Efpañoles oygo vfar de la *'0z Re-,
mar'cable , diciendo: Es vn fuce/fo 'remarcable , vna cofa
remarcable. Eíta voz Francefa , no fignifica mas ni menos,
que la Cafiellana Notable : afsi como la voz Remarque , de
donde viene Remarcable , no fignifica mas ni menos, que
la voz Cafiellana Nota , de donde viene Notable. Tenien-
do , pues , la voz Cafiellana la mifma lignificación , que la
Francefa, y tiendo por otra parte mas breve , y de pro-
nunciación menos afpera, no es extravagancia vfar de 1*
Ettrangera dexando la propria? L o mifmo puedo decir de
muchas vozes , que cada dia nos trahen de nuevo las
Gacetas.
24 LaconfervacioH DE el idioma patrio, ES DE tan-
to aprecio en los efpiritus amantes de la Nación , que EL
GRAA juicio DG Y^UPTUVO EÍTE DERECHO POR DIGNO DE ca*5
^o8 P A R A L E L O E>E L A S ¿ L E N G U A S ,
pitularfc entre dos Deidades Júpiter, y J u n o , al convenirli
en que los Latinos admitieíTen en fu tierra à los Troyanos*

y Sermoncm Aufonium patrium ¡morefque tenebunt.

H o a y que admirar : pues la introducción de eldenguageí


foraftero es nota indeleble de aver fido vencida la Nación^
á quien fe defpòjò de fu antiguo idioma. Primero fe quita
à vn Reyno la libertad ,• que el idioma. Aun quando fe ce-
ide à la fuetea de las armas , lo vltimo que fe conquida
fon lenguas , y corazones. Los antiguos Efpañoles , con-:
quinados por los Cartaginefes , refiftieron conílantemente
( como prueba Aldrete en fus Antigüedades de E/paña ) la
Introducción de la lengua Punica. Dominados defpues pos*
los Romanos , tardaron mucho en fujetarfe à la Latina. Di-
remos , que fon legítimos defcendientes de aquellos, los que
py íin necefsidad eftudian en afrancefar la Caftellana?
25 En la forma, p u e s , que efíá oy nueftra lengua^
puedepaífar finios focorros de otraalguna. Y vnode los
m o t i v o s , que he tenido , para efcri^ir en Caftellano efta
o b r a , en cuya profecucion apenas avrà genero de litera-:
t u r a , ò erudición que no fe t o q u e , fué mofirar que para
efcrivír en todas materias bafta por si folo nuefiro idioma,
?

finios fubfidios de el ageno ; exceptuando ompero algunas


Vozes facultativas, cuyo empreftito es indifpenfable de vna$
paciones à otras.

§. VI.
T
ì6 A UNQUE el motivo ¿ porque hemos difcurridó
i \ en el cotejo de la lengua Caftellana con la
Francefa, no milita refpecfo d é l a Italiana; porque efta aun
»0 gano la afición,ni fe hizo en Efpaña de la moda: la oca/ion
«ombida à decir algo de ella, y juntamente de la Lufitana,
por comprehender ert el Paralelo , para fatisfaccion de los
xuriofos , todos los dialectos de la Latina.
27 He dicho por cowprehender todos los diale fioí
de la Latina ; porque aunque eftos vulgarmente fe reputan
FER
' D I S C U R S O " .• X V * ' 309
fer ño mas que t r e s , el Efpañol , el Italiano, y el Fran-
cés , el Padre Kirquer , Autor dcfapafsionado (de 'f'urri
Babel, lib.¡. eap.i.)añade el Lufitano : En que, advierto, fe
liebe incluir Ja lengua Gallega , como en realidad indiflinta
déla Portuguefa , por fer poquifsimas las vozes en quedif-:
crepan , y la pronunciación de las letras en todo femejautei:
y afsi fe entienden perfectamente los individuos de ambas
Naciones,fin alguna inítruccion antecedente.
28 Que la lengua Lufitana , b Gallega , fe deber
confiderar dialecto feparado de la Latina , y no fubdia^
lecto, b corrupción de la Cafiellana, fe prueba á mi pa-
recer con evidencia , de el mayor parentefeo que tiene;
aquella, que eíta, con la Latina. Para quien tiene conocí-:
miento de-citas lenguas no puede aver duda , de que por;
lo común las rozes Latinas han degenerado menos en la
Portuguefa. Eíto no pudiera f e r , fi la lengua Portuguefa
fuéífe corrupcion,ófubdialecto de la Cafiellana: fiendo cierto,
que con quantas mas mutaciones fe aparta vna lengua de la
fuente , tanto fe alexa mas de la pureza de fu origen.
29 Si por el mayor parentefeo , que tiene vn d i a -
lecto con fu lengua original, b menor defvio , que -pa-
deció de ella , fe huvieíTe de regular fu valor , entre todos
los dialectos de la Latina,, daríamos la preferencia á la len-
gua-Italiana , y en fegundo lugar pondríamos la Portugue-;
fa, A . algunos les parecerá deber hazerfe afsi ¡porque fien-
do vna efpecie de corrupción "aquella declinación que in-:
fenfiblemente vá haziendo la lengua primordial ázia fu
dialecto, parece fe debe tener por menos corrompido , y.
por configuiente por menos imperfecto , aquel dialecto en
quien fué menor el defvio. , -. .- . \ ,-
;

jo Sin e m b a r g o , eíta razón tiene mas apariencia


que folidéz. L o primero, porque la corrupción, de que
fe r u b i a , . n o es propria , fino metaphoricamente tal. L o
fegundo, porque, aunque pueda ílamarfe corrupción aquel
perezofo tranfito , con que la lengua original vá declinando
al dialecto ; pero defpues que eíte , logrando fu entera for-:
macion, eítá fixado , yá no ay corrupción , ni aun meta--
phorica. Eíto fe t é en las cofas phyficas , donde aunque;
3 To PARALELÓ DE LAS LENGUAS,
fe llama corrupción, ò fe afsienra que la ay en aquel eftact»
vial con que la maceria pafla de vna forma à otra ; pero
quando la nueva forma fe confiderà en eflado permanente:
O infuno effe , como fe explican los Philofofos de la Ef-
cuela, nadie dice que r¿y entonces corrupción : ni el nuevo*
coni niello fe puede llamar en alguna manera corrompido. Y
afisi, como à vezes fucede, que no obflante la corrupción
que precedió en la introducción de la nueva forma, el nuevo
compuello es mas perfecto que el antecedente : podría tam-
bién fuceder, que mediante la corrupción del primer idioma,
fe engendrarle otro mas copiofo, y mas elegante, que aquel
de donde trahe fu origen.
3i Por efte principio , pues , no fe puede hazer jui-
cio de la calidad de los dialectos. Y excluido tile , no veo
o t r o , por donde de los tres didectos en queflion fe deba
dar preferencia à alguno fobre los otros. Paíeceme que la
lengua Italiana fuena mejor que las demás en la poefia. Pe-
ro también juzgo , que eflono nace de- la excelencia de el
idioma; si de el mayor genio de los Naturales , ó mayor
cultivo de efte Arte. Aquella fantafia propria à animar
los rafgos en la pintura , es , porla fymbolizacion de las
dos Artes , la mas acomodada á exaltar los colores de la
poetica : Ut pìSlu^a poejìs erit. Defnues de los poemas de
H o m e r o , y V i r g i l i o , no ay cafa que iguale e n e i genero
epico à la ferufalèn de el Talfo.
Iz Los Francefes notan las poefias Italiana, y Efpa-
nola de muy hyperbolicas. Dicen, que las dos Naciones dan
demafiado al Enthufiafmo , y por excitar la admiración, fe
alexa-i de la veriíímilitud.Pero yo digo,que quien quiere qae
los Poetas fean muy cuerdos , quiere que no aya Poetas. El
furor es la alma de la poefia.El rapto de la mente es el buelo
de la pluma: ímpetus Ule fase? , qui vatum peBora nut>'/t r

dixo Ovidio. En los Poetas Francefes fe v e , que por afectar


fitr muy regulares en fus penfamientos , dexan fus composi-
ciones muy lánguidas. Cortan à las Mufas las alas , ó con el
pefo de el juicio les abaten al fuelo las plumas. Fuera de que
también la cadencia de fus rimas es defayrada. Pero lacriíis
de la poefia, le hará 4? imeneo en otro Tomo s
DISCURSO XV. 311

C O R O L A R I O .
\ VIENDO dicho arriba por incidencia, que ti
jf\. idioma Lufitano , y el Gallego fon vno
mifmo, para confirmación de nueftra propoficion, y para
fatisfacer la curiofidad de los que fe intereífaren en la v e r -
dad de ella, expondremos aqui brevemente la caufa mas
yerifimilde ella identidad.
34 Es confiante en las Hiftorias, que el añoquatro-
cientos, y pocos mas de nueftra Redempcion, fué Efpaña
inundada de la violenta irrupción de Godos, Vándalos, Sue-
vos , Alanos , y Selingos, Naciones Septentrionales. Que
de eftos los Suevos debaxo de la conduda de fu R e y H e r -
menerico fe apoderaron de Galicia,- donde reynaron glo-
riofamente por mas ,de ciento y fetcnta años , hafta que
los defpojo de aqujjl florentifsimó Reyno Leovigildo, R e y
de los Godos. Es afsimifmo cierto , que no folo domi-
naron los Suevos la Galicia, mas también la mayor parte,
de Portugal. Manuel de F a r i a , en el Epytome de las Hif-
torias Portuguefas (part. 2. cap.3.) con Fray Bernardo de
Brito , y otros Autores de fu Nación , quiere que no fo-
jo .fueífen los Suevos dueños de la mayor parte de P o r -
tugal , mas también de qitanto tuvo el nombre de Lufi-
tania , en tanto grado , que perdida tila denominación
tomó aquel Reyno el nombre de Suevia. En fin tampoco ay
duda en que al tiempo que entraron los Suevos en G a l i -
cia , y P o r t u g a l , fe hablaba en los dos Reynos , como
en todos los demás de Efpaña , la lengua Romana , e x r

tinguida de el todo , ó cafi de el toco la antigua Eíjuñóla


(por mas que contra las pruebas coucluycntcs , deducidas
de muchos Autores antiguos , que alegan Aldrete , y otros
Efcritores Efpañoles , pretenda lo contrario el Macílro Fray
Francifco de V i v a r e n fu Comentario á Marco Máximo en
el año de Chrifto j 16.)
35 Hechos eftos fupueftos , ya fe halla á la mano
la caufa, que huleamos, du la-identidad de el idioma Por-
tugués , y Gallego jy e s , que ¿viendo diado las dos-Nació*
g i l PARALELÓ DE LAS LENGUAS,
nes , fcparadas de todas las demás Provincias , debaxo de
la dominación de vnos uñimos Reyes e n aquel tiempo pre-
v

citamente en q u e , corrompiéndole poco á poco la lengua


jRomana en Efpaña por la mezcla de las Naciones Septen-
trionales , rué degenerando en particulares dialectos, con-:
figuientemente al continuo , y reciproco comercio de Portu-
guefes, y Gallegos ( Crqueia neceiíari-; de eftar la-s dos Na-:
ciones debaxo de vna mifma dominación) era predio que
en ambas fe formaife vn mifmo Dialecto.
l6 Añadefe á ello, que el Reyno de Galicia compre-
íiendiaen aquellos tiempos buena porción de Portugal, pues
fe incluía en él la Ciudad de Braga , como confia del Chro-
nicón de Ydacio, que florería á lafazon. Afsi dice en el añoi
de Chriílo 447. Theodorico Rege cam exercitu ad Bracaram
extremara Civitatem Gdecix per tendente, &c.
37 En fin en honor de nueftra patria diremos , que fi
ti idioma de Galicia, y Portugal no íé formó promifcuamen--¡
te á vn tiempo en los dos Reynos, fino que de el vno pafsó al
otro, fe debe difeurrir, que de Galicia fe comunicó á PorttH
g a l ; no de Portugal á Galicia. L a razón es : porque durante
la vníon de los dos Reynos en el govierno Suevo, Galicia era
la Nación dominante, refpe&o de tener en ella fu afsiento,y
Corte aquellos Reyes.Pot lo qual,afsi los Efcritores Efpaño-
les, como los Eftrangeros, llaman á los Suevos abfolutamen-
te Reyes de Galicia, atribuyendo la denominación á la Coro-
na por la Provincia dominante: como antes de la vnion con,
Aragón, fe llamaban abfolutamente Reyes de Qaft:illa los que
y

juntamente con Caftilla regian otras muchas Provincias de


Efpaña. Y lo mifmo diremos de los Reyes de Aragon,refpec-i j
to de las demás Provincias vnidas á aquella Corona. Siendo,'
pues, durante aquella vnion, el Reyno de Galicia afsiento de
£aCorona,es claro que no pudo tomar el idioma de Portugal?
porque nunca la Provincia dominante le toma de la
dominada; fino al con-,
trario.

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• -'. D E F E N S A
B E LAS M U C E R E S ,
D I S C U R S O XVI.

§. I.
1
N grave empeño me pongo. No eá yjjj
folo vn vulgo ignorante con quien en-,
tro en la contienda : Defender á t o -
das las mugeres ,. viene á fer lo mif-
mo , que ofender á cafi todos los
hombres : pues raro ay que no fe intereíTe en la preceden..
; eia de fu fexo , con defeftimacion de el otro. A tanto fe h¡£
efiendido la opinión común en vilipendio de las mugeres,
que apenas admite en ellas cofa buena. En lo moral las lle-
na de defectos , y en lo phyíico de imperfecciones. P e r o
¿onde mas fuerca haze , es en la limitación de fus entendí-
cruentos. Por ella razón , defpues de defenderlas-con alguna
brevedad fobre otros capítulos , difcurrire mas largamente
fobre- fu.aptitud para todo genero de ciencias , y conocí-
uñen ros fu.blimes.
2 El fallo Profeta Mahoma en aquel mal plantado
paraifo, que deftinb para fusfequaces, les negó la entrada
á las mugeres , limitando infelicidad al deleyte de ver def-;
de á fuera la gloria que avian de pofíeet dgiitró los hom-
R

ÍJATRO h K| feres.
^ 14. DEFENSA D E LÀS• MUGÈRIS,"
bres. Y cierto , que feria muy bueña dicha de las cafadas;
vèr en aquella bienave.nturanca compuerta toda de torpe-;
zas , à fus maridos en los brazos de otras confortes'., qué
para elle efecto fingió fabricadas de nuevo aquel grande
..Artífice de Chymeras. Bailaba para co.mprehender quanto
puede errar el hombre, vèr admitido efte delirio en vna
gran parte de el Mundo.
2 Pero parece que no fe alexa mucho de quien lesi
"niega la bienaventuranca à las mugeres en la otra vida , el
que les niega cafí todo el merito -en efta. frequentifsima-;
mente los mas torpes de el v u l g o , reprefentan en aquel
fexo vna horrible, fentina de vicios ; como li los.hombr-és
fueran los vnicos depofitarios de las virtudes. Es'verdad,;
que hallan à favor de eñe penfamiento muy fuertes invec-
tivas en infinitos libros : en tanto grado , que v n o , ü otrfl
apenas quieren aprobar ni vna fola por buena: componien-
do en la que ella afsifiida de las mejores feñas , la modefiͧ
en el roftro con la lafeivia en el Alma:

A/pera fi'vija efi, rigida/"que imitáis Sahínas¿


Vaile ,fed ex alto dij"simulare puta.

Contra tan infoiente maledicencia , eldefprecio, y ía dé¿


teftacion fon la mejor Apologia. N o pocos de los que con
mas frequencia , y fealdad pintan los defectos de aquel fexq,
fe o b f e r v a f e r los mas folicitos en grangear fu agrado,
Qaè myfterio avrà en efto ? Acafo con la ficción de fer de
efte dictamen , quieren ocultar fu propenfion. Acafo tam-<
¡bien fe venga tal vez con femejarttes injurias la repulfa de
los ruegos, : que ay hombre tan maldito, que dice , que
,yna m u g e r n o es buena , folo. porque ella no quifo fer
inala.-. . , ,
: • ; \ '; _. . .j '
.4 , N 0 niego J o s vicios de muchas. Mas ay ! Si fe
aclarara.la genealogia de fus defovdenes , como fe hallaría
tener f a pri,m:r origen.en e l porfiado impulfo de indivi-
duos de nueftro, fexo, ! Quien quifiere hazer buenas à todas
l a s mugeres , convierta, à todos ios hombres. Pufo en ellas
4%Mtu£ale¿a por antemural la verguenca coatra todas'das,
,. ';,.; " ~ *'" ^:'
:
*".*" • ' • fea- '
/•••'-.•••DISCURSO XVI. 31 ?
gaterías de el apetito : y rarifsi'ma vez fe le abre á efta mura-
lla la brecha por la parte interior de la plaza.
; ; 5 Las declamaciones, que contra las mugeres fe leen
én algunos Efcritores Sagrados , FE deben entender dirigi-
das á las perverfas , que no es dudable las ay. Y aun quan-
do miraran en común: al fexo , nada fe prueba de ay : por-;
que declaman los Médicos de las Almas contra las muge-
res , como los Médicos de los cuerpos contra las frutas,
que tiendo en si buenas, vtiies , y hermofas, el abufo las
haze nocivas. Luera de que no fe ignora la exteníion , que
admite la oratoria en ponderar..e.l riefgo, quando es.fu inten-
to defvlar el daño.
6 Y díganme los que fupónen mas vicios en aquel
fexo , que en el nueítro , como componen eíto con darle la
iglefia á aquel con efpecí.alidad el epitheto _de devoto*
Como , con lo que dicen gravísimos Doctores, que fe fal-
yarán mas mugeres , que hombres , aun atendida la propor-
ción á fu mayor numero ? L o qual no fundan, ni pueden fun-
dar en otra cofa , que en la obfervacion.de ver en ellas mas
inclinación a, la piedad.;.; .
; ;./..-. . . - '
.7 Y á oygo contra nueílro aífumpto aquella propoíi-
cion de mucho ruido , y de ninguna verdad : que las mu-
geres fon .caúfa de todos los males. En cuya comprobación
baila los Ínfimos de la plebe inculcan á cada, paño, que la
Cao a induxo la pérdida de Efpaña, y Eva la de todo el
Mundo.
8 > Pero el primer exemplo abfolutamente es falto.
El-Conde Don Julián fué quien traxo los Moros á Efpaña,
FIN que FU hija íe lo períuadieífe ; quien no libo mas que
nunifeliar al padre fu. afrenta. -Defgraciadas mugeres , fi en
el cafo de que vn inicíente las atrepelle , han de fer priva-
das de el alivio de defahogarfe con el padre , b con el EF-
pofo ! Eífo quiííeran los agreífores de femejantes temeri-
dades. Si alguna vez fe íigue vna venganca injuíla, í ra
la culpa , no de la inocente ofendida íi no de el que
la executa con el 'azero» y de el que dio ocafion con el
intuito : y afsi , entre los hombres queda todo el de-
fe . \ ,
Rr, : El
g I6 DE¥ENSÍ D E LAS MUGERES, 1

9 E l fegundo exempló , (i-prueba que lasmugeréf


CÍI común fon peores que los hombres , prueba de el mifm<i
'modo,que los Angeles en común fon peores que las mugeres:
porque como Adán fué inducido á pecar por vnamuger-, la
muger fué inducida por vn Ángel. N o eftá haita aora deci-
dido , quien pecó mas gravemente , íi Adán , fi Eva : por«¡
que los Padres eftán divididos. Y en verdad que la difeut-
pa que dáCayetano, á favor de E v a , de que fué engañada potí
yna criatura de muy fuperior inteligencia, y.íagacidad , chv
cunftancia que no concurrió en Adán, rebaxa caucho reíase^
«o d e eñe el delito,de aquella.

so T^ASSAMDÓ de lo moral á lo phyfko , que es maá


X de nueftro intento: L a preferencia de el fexo
robufto fobre el delicado fe tiene por pleyto vencido : en
tanto grado, que muchos no dudan en llamar á la hembra
animal imperfecto, y aun monfttuofoalfegurando que el
defignio de la naturaleza en la obra de la ger eracion fiem=¡
pre pretende varón ; y folo p o r error , ó defecto , yá ¿i
la materia, yá de la facultad produce hembra.
íi O admirables phyficos 1 Seguirá-fe de a q u í , que
la naturaleza intenta fu propria ruina : pues no puede con-
fervarfe la efpecie, fin la concurrencia de ambos fexos. Se-
guiráfe también, que tiene mas errores, que aciertas la Na-
turaleza Humana en aquella principalifdma obra l u y a ; fien-
do cierto , que produce mas mugeres que hombres. Ni co-
mo puede atribuirle la formación ele las hembras á debili-
dad de virtud , ó defecto de materia , viéndolas nacer mu-
chas vezes de padres bien'complexionados, y robuftos en
lo mas florido de fu edad? A c a f o , fiel hombre confervára
la inocencia original, en cuyo cafo no huviera eftos defectos^
a o avian de nacer algunas mugeres, ni fe avia de propa-,
gar el Linage Humano?
T 2 Bien sé que huvo Autor que fe tragó tan grave
abfui'do por mantener "fu declarada ojeriza contra el orro
foco. Efte fue Alinarjso', Doctor Pariíienfe de el Siglo dúo?
den
DISCURSO XVÍ.
¿cclmo: el qual entre otros errores dixo, que durando el ef-4
'rada de la inocencia, todos los individuos de nueífro fexo
ferian varones , y que Dios los avia de criar inmediata-i
mente por si mifmo , como avia criado á Adán.
Fué Almarico ciego fequáz de Ariftoteles , dá[ y

modo,que t o d o s , 6 cali todos fus errores fueron conten


quencias que tiro de doctrinas de aquel Philofofo. V i e n 4
do , pues, que Ariftoteles, no en vna parte fola de fus obras*
dá á entender , que la hembra es animal defectuofo , y íjt
generación accidental , y fiera de el intento de la- natu-
raleza , de aqui infirió, que no avria mugeres en el eílado de
la inocencia. Afsi fe figue muchas vezes vna Theologia he#
retica á vna errada phyfica.
14 Pero la grande adherencia , que con Ariftoteles
profefsó Almarico , les eftuvo mal á Almarico ,'y á Arif-
toteles : Porque los errores de Almarico fueron condenados
en vn Concilio Parifienfe el año de 1 2 0 9 . y en el mifmo,
Concilio fué prohibida la lectura de los libros de Ariflote-
les : confirmando defpue? eíla prohibición el Papa Grego-
rio I X . era yá muerto Almarico vn año antes , que fe prof-
crivieífen fus dogmas : y afsi fueron defenterraios fus huef-;
fos, y arrojados en vn lugar inmundo.
15 D e aquí e s , que no nos deben hazer tuerca vno, u
otro D o c t o r , por otra parte g r a v e , que aífentaronfer de-
fectuofo el fexo femíneo , folo porque Ariftoteles lo d i x o ,
de quien fueron finos fectarios, aunque fin precipitarte en
el error de A l m a r k o . Es cierto que Arifloteles fué iniquo
con las mugeres : pues no folo proclamó con exceíto fus de-;
5

feílos phyficos; pero aun con mayor vehemencia los mora-


les ; de que fe apuntará algo en otra parte. Quien no pert-*
fará que fu genio le inclinaba al defvio de aquel fexo? Pues>
nada menos que elfo.. N o folo amó con ternura á dos muge-
res que t u v o ; pero le facó tanto de si el amor de la p r i -
' mera, llamada Pythais , hija como quieren vnos, ó fobrina¿
como dicen o t r o s , de Hermias, tyrano de Atarneo , que l l e -
gó al delirio de darle incienfos como á Deidad. También
le cuentan ínfanos amores tuyos con vna criaduela : bkrt'
que Plutarco no fe acomoda á creerlo. Pero en eíla partí;
MERA
3 i 8 DEFENSA D E LAS .MUGERES,
merece mas- fe Theocriro Chio (que en vn 'Epygramavi-:;
valúente exprobró á Ariftoteies fu- obfeenidad:) porque?-
fué de el tiempo de Ariftoteles ; y Plutarco muy pofterior;
En cuyo exemplo fe vé, que la mordacidad contra las muge-:
r e s , muchifsimás vezes, y aun las mas anda acompañada
de vna defordenada inclinación ázia ellas , como ya dixi-/
mos arriba.
;6 D e el mifmo error phyfico, que condena á la m u ,
ge: por animal imperfecto , nació'otro error theologico
i rnp agnado por San Au gu ftin iib, zi.deC ivifute Dei, cap. i 7,
Cuyos Autores decian, que en la Refurreccion Univerfal ef-
ta obra imperfecta fe ha de perfictouar , paíf indo todas las
mugeres al íéxo varonil : como que la gracia ha de concluir
entonces la obra que dexo folo empezada la naturaleza.
I7 Efte error es muy parecido al de los infatuar
dos Alchimiftas , que fobre la máxima de que la naturale-
za en la producción metálica íiempre intenta la generación
de el o r o , y folo por defecto de virtud para en otro metal
imperfecto , pretenden que defpues el Arce conduzca la'
obra á fu perfección , y haga oro lo que nació hierro.
Mas al fin efte .error es mas tolerable , ya porque no toca
en m ¡teria de f é : ya porque ( feafe lo que fe rucre de el in-
tento de la naturaleza , y de la imaginaria capacidad de el
Arte ) de hecho el oro es el metal mas noble , y los demás
fon de muy inferior calidad. Pero en nueftro aíTumpto to-
do es falfo ; que la naturaleza intenta fiempre varón : que
fu operación bailardéa en ¡a rnuger : y mucho mas que cite
yerro fe ha de enmendar en la Refurreccion Univerfal.

§, III.
r3 \ J O por elfo apruebo el arrojo de Zacuto Lu^ "
[_ %
' l i t a d o , que en la introducción al Tratado
de fiforbis Mutierum, con frivolas razones quilo poner de
vando mayor á las mugeres , haziendo crecer fu perfec-
ción phyfica fobre los hombres. Con otras de mayor apa-
riencia , fe pudiera emprehender effe aflunipto. Pero mí
S¡mpeño no es perfuadir La ventaja, Uno ia igualdad. . .
DISCURSO XVT. 319
f
ip Y para empezar á hazernos cargó de la dificul-
tad^ dexando por aora á parte laqueftion de el entendi-
miento , que fe ha de difputar feparada , y mas de intento
en eñe Difcurfo ) por tres prendas, en que hazen notoria
jventajaá las mugeres , parece fe debe la preferencia á los
hombres : Robuflez, Confiancia , y Prudencia, Pero satí
^concedidas por las mugeres ellas ventajas , pueden preten-
der el empaté, feñalando otras tres prendas, en que exceden;
" ellas: Hermofura , Docilidad, y Sencillez.
20 L a Robuflez , que es prenda de el cuerpo, puede
confiderarfe cqntrapefada con la hermofura , que también
loes, Y aún muchos le concederán á efla el exceflo. T e n -
drían razón, fi el precio de las prendas fe huvieile de de-:
terminar precitamente por la lifonja de los ojos. Pero de-
biendo hazer mas pefo en el buen juicio , para decidir efta
ventaja , la vtilidad publica, pienfo' debe fer preferida la;
robufiez á la hermofura. La robuftez de los hombres trahe
al Mundo cífencialifsimas validades en las tres columnas,
que fuíleutan toda República , Guerra , Agricultura, y
Mechanica. De la hermofura de las mugeres , no sé que
fruto importante fe faque , fi no es que fea por accidente.
Algunos la argüirán de que bien lexos de traher prove-
chos , acarrea gravifs,imos daños en amores defordenados
que enciende , competencias que fufeita , cuidados , inquie-i
tudes , y recelos que ocafiona en ios que eftán encargados,
de fu cuftodia.- ' '
21 Pero ella acufacion es mal fundada, como ori-
ginada de falta de advertencia. En cafo que todas las mu-
geres fuellen feas*, en las de .menos deformidad fe experi-
mentaria tanto atractivo como aora en las hermofas; y por
1

configuiente harian el mifmo eftrago. L a menos fea de t o -


das, puella en Grecia, feria incendio de Troya , como Elena,
.y puefta en el Palacio de el Rey Don Rodrigo , feria rui-
na de Efpaña , como la Caba. En los Paites donde las rffu-
geres fon menos agraciadas , no ay menos defordenes, que
en aquellos donde las ay de mas gentileza", y proporción.
Y-aun en Mofcoyia , que excede en copia de mugeres be-;
lias a todos 1Q§ demás R e i n o s de E u r o p a , no eíta tan def-
en-
-'qio DEFENSA D É LAS MUGERES,
enfrenada la incontinencia , como en otros Paifes ; y la Eg
Conyugal fe obferva con mucha mayor exactitud.
22 N o e s , pues, la hermofura por si mifma AUKN
ira de los. males que le atribuyen. Pero en el cafo de la
.quettion doy mi voto á favor de la robuftez, la qual juzgo
prenda mucho mas apreciable, que la hermofura. Y afsi^
•en quanto á efta parte fe ponen de vando mayor los horrt-j
bres. Quédales empero á falvo á las mugeres replicar,;
Valiéndote de la fentencia de muchos doctos , y recibida
de toda vna iiuftre Efcueia , que reconoce la voluntad poí ;

potencia mas noble , que el entendimiento, la qual favo^


rece fu partido ; pues íl la robuftez , como mas apre-¡
ciable logra mejor lugar en el entendimiento , la her-
mofura como mas amable tiene mayor imperio en la vos
f

Juntad.
a3 L a prenda de la Conftanci*, que ennoblece á los
hombres , puede contrarreítarfe con la docilidad que ref-
plandece en las mugeres. Donde fe advierte, que no ha-i
folamos de eítas , y otrasprendas , confideradas formalmente
en el eítado de virtudes : porque en eíte fentido no fon de
la linea phyfica; fino en quanto eftán radicadas , y como
delineadas en ei temperamento, cuyo embrión informe es
indiferente para el buen , y mal v f o , y afsi mejor íe lla-
marán flexibilidad,. 6 inñexibilidad de el j t n i o , que cónf-,
fancia, b docilidad.
24 Diráfeme , que la docilidad de las mugeres decli-
na muchas vezes á ligereza; y yo repongo , que la confian-
cia de los hombres degenera muchas vezes en terquedad.
Confiefio, que la firmeza en el buen propofito es aurora de
grandes birnes ; pero no fe me puede negar, que la obftina-
cion en el malo es caufa de grandes males. Si fe me argu-
ye , que la invencible adherencia al bien, b al mal es cali-
dad de los Angeles: Refpondo,que,fobre no fer eflo tan cier-
to-, que no lo nieguen grandes Theologos , muchas pro-?
priedades que en las naturalezas fwpeviores nacen de fu ex-
celencia , en las inferiores provienen de fu imperfección, Los
Angeles, íegun Doctrina de Santo Thomás, quanto mas per-
£e£fcq5 entienden por: menos efpegies ¿ y en ig§ hombres el
coito
DISCURSO XVí* 3 2 F'
^ító'«limero de efpecies es defecto. En los Ángeles el eíhi-
dio feria tacha de fu entendimiento; y á los hombres les
Üluítra el fuyo.
af L a prudencia de los hombres fe equilibra con la
fencilléz de las mugeres. Y aun citaba para decir mas:
porque en realidad al Genero Humano mucho mejor le eíta-
ria la fencilléz, que la prudencia de todos fus individuos.
Al Siglo de Oro nadie le compufo de hombres prudentes, fi-:
no de hombres candidos.
26 Si fe me opone , qué mucho de l o q u e en las mu-:
geres fe llama candidez , es indiferecion ; repongo y o ,
que mucho d é l o que en los hombres fe llama prudencia,'
es falacia , doblez , y a h v o í i a ; que es peor. Aun eíTamif-
ma franqueza indifereta, con que á vez-es fe manifiefta el
pecho contra las reglas de la razón , es buena confíderada
como feñal. Como nadie ignora fus proprios vicios , quien
los halla en si de alguna monta , cierra con cuidado á los
azechos de la curiofidad los refquicios de el corazón. Quien
comeré delitos en fu cafa, no tiene á todas horas la puer-
ta abierta para el regiftro. De la malicia es compañera in-
dividua la cautela. Quien, pues , tiene facilidad en fran-;
quear el pecho , fabe que no eftá muy afquerofo. En efta
coniideracion , la candidez de las mugeres fiempre ferá
apreciable : quando arreglada al buen diclamen, como per>
lección ; y quando no , como buena feñal.

§. IV. ;
27 O ORRE las buenas calidades expreífadas , reda
\3 á las mugeres la mas hermofá, y mas tranf-
cendente de todas , que es la verguenca : gracia tan cha-
rafteriítica de aquel fexo , que aun en los cadáveres no le
defampara, íi es verdad lo que dice Plinio , que los de los
hombres anegados fluctúan boca arriba , y los de las mu-
geres boca abaxo : Vcluti pud'ori aefunclamm paréente na*
tura. ( Vib.i, cap.ij. )
28 Con verdad , y agudeza , preguntado el otro
3?hilofofo , qué color agraciaba mas el roftro a las muge-*
Tomo I, Ss yes.
321 DEFENSA D É LAS MUGERES;
res , refportdió , que el de la verguenca. En efecto juzgS^
que eftaes la mayor ventaja , que las mugeres hazen á los;,
hombres. Es la verguenca vna v a l l a , que entre la virtud,;
y el vicio pufo la naturaleza. Sombra de las bellas Almas,'
y carácter vifible de la virtud la llamó vn difcreto Francés»'
Y San Bernardo , eftendíendofe mas , la iluftró con los
epithetos de piedra preciofa de las collumbres , antorcha de
la alma púdica , hermana de la continencia , guarda de la fa-
ma , honra de la vida , afsiento de la virtud, elogio de la
naturaleza, y divifa de toda honeftidad. (Serm.%6. inCant.)
Tintura déla virtud la llamó , con futileza , y propriedad
Diogenes. D e hecho efte es el robufto, y grande valuarte,'
que pueíto enfrente de el vicio cubre todo el alcázar de la
a l m a , y que vencido vna vez , no a y , como decia el Na-
zianzeno, renitencia á maldad alguna : Protinus extinelo
f %beunt mala cúnela pudor'e.
29 D i r a f e , que es la verguenca vn infigne preferva-,
tivo de execuciones exteriores, mas no de internos confen-i
timientos ; y a f s i , fiempre le queda al vicio camino abier-,
to para fus triunfos , por medio de los invifibles aífaltos,;
que no puede eílorvar la muralla de el rubor. Aun quafH
do ello fueífe a f s i , fiempre feria la verguenca vn preferva-
tivopreciofifsimo , por quanto por lo menos precave infij
nitos efcandalos, y fus funeftas confequencias. Pero fi fe
haze atenta reflexión , fe hallará que defiende , fi no en vn
todo , en gran parte , aun de eflas efcaladas filenciofas , que
-no fajen de los ocultos íenos de la Alma : porque fon muy
raros los confentimientos internos, quando no los acom-
pañan las execuciones , que fon las que radican los afectos
criminales en el Alma , las que aumentan , y fortalecen las
propenfiones viciofas. Faltando eftas, es verdad, que vna,.
u otra vez fe introduce la torpeza en el efpiritu ; pero no fe
aloxa en él como domeftica , mucho menos como feñora ; si
folo como peregrina.
30 Las pafsiones fin aquel alimento que las nutre,'
yazen muy débiles, y obran muy timidas : mayormente,
quando eri las períonas muy ruborofas es tan franco el co-
mercio entre el pecho, y el fembiante , que pueden rece-,
te
DISCURSO XVI.
íar Taiga á la plaza publica de el roftro, quañtomaquinatt
en la retirada oficina de el pecho. De hecho fe les pinta»
á cada paífo en las mexillas los mas eícondidos afectos:
que el color de laverguencaes el'vnico que íirve á formar,
\ imágenes de objetos invifibles. Y a í s i , aun para atajar tro-
piezos de el defeo , puede fer rienda en las mugeres el
miedo de que fe lea en el roftro, loque fe imprime en.el,
animo.
31 A que fe aúade, que en muchas fube á tal pun--
CO el r u b o r , que le tienen de si mifmas. Efte heroyco pri-
mor de la verguenca , de que trato el ingenioíifsimo Padrá
iVieyra en vno de fus Sermones , no es puramente ideal,
como juzgan algunos efpiritus groíferos , fino practico , y-
real en los fugetos de Índole mas noble. Afsi lo conoció
Demetrio Phalereo , quando inftruyendo la juventud de
Athenas , les decia, que dentro de cafa tuvieífen vergüenza
de fus padres , fuera de ella de todos los que los vienen,
§n la foledad cada vno de si proprio.

§. V.
ga' T)IENSO averfeñalado tales ventajas de parte dé
J las mugeres , que equilibran , y aun acafo
fuperan las calidades , en que exceden los hombres. Quien
pronunciará la fentencia en efte pleyto ? Si yo tuvieífe au-,
toridad para ello , acafo daria vn corte , diciendo , que las
calidades en que exceden las mugeres , conducen para ha-
zerlas mejores en si mifmas : Las prendas en que exceder»
los hombres , los conftituyen mejores, efto e s , mas vti-;
les para el publico. Pero como yo no hago oficio de
Juez , fi no de A b o g a d o , fe quedará el pleyto por aora
indecilfo.
33 Y aun quando tuvieífe la autoridad neceflaria¿¡
feria forcofo fufpender la fentencia : porque aun fe repli-;
ca á favor de los hombres , que las buenas calidades que!
atribuyo á las mugeres, fon comunes á entrambos fexos;
Y o lo confieífo ; pero en la mifma forma que fon comunes
a ambos fexps las buenas calidades de los hombres. P a n j
§sa " 00
3 î'4 DEÏENSA DE LAS MUGERES,
ho confundir la queftion , es preçifo feñalar dé PARTE de C3J
da fexo aquellas perfecciones , que mucho mas fréquentes
mente fe hallan en fus individuos , y mucho menos en los I
de el otro. Concedo, pues, que fe hallan hombres doci-i}
l e s , candidos, y ruborofós.. A ñ a d o , que el rubor , queesí/
buena feñal en las mugeres, aun lo es mejor en los \iom-.
bres ; porque denota , robre Índole generóla , ingenio- agiw
d o : lo que declaró mas de vna vez en fu Satiricon Juan!
Barclay o ; à buyo futilifsimo ingenio no fe le puede negar;
fer voto de muy efpecial. nota: y aunque no es feña infa-í
l i b l e , yo en efta materia he obfervado tanto , que ya no
efpero jamás cofa buena de muchacho, en quien advierto»
frente muy oífada.
34 Es afsi -, digo.,. que en varios individuos de nuef-;
tro fexo fe obfervan , aunque no con la mifma frequencia;
las bellas qualidades que ennoblecen al otro. P e r o eño en
ninguna manera inclina à nueftro favor la balança: porqué
hazen igual pefo por la.otra parte las perfecciones., de- quç
fe jactan los hombres comunicadas à muchas mugeres.
a

§. VI.
5î í ^ Y E prudencia política fobran ejemplos efi mil:
L/ Princefas por extremo habiles. Ninguna,
edad olvidará la primera muger en quien defemboza la Hif-
toria las obfeuridades de la Fabula : Semiramis , digo, Rey-:
NA de los A f y r i o s , que educada en fu infancia por las P a l o -
mas, fe elevó defpuesfobre las Águilas : pues no folo fe fupo
hazer obedecer ciegamente délos fubditos, que le avia dexa-
do fu efpofo, mas hizo también fubditos todos los Pueblos
^ecinos,y vecinos de fu Imperio los mas diñantes, entendien-
d o fus conquiftas, por vna parte hafta la Ethiopia , por otra-
JIAFTA la India. Ni à Artemtjfa, Reyna de Caria , que no fo-
lo mantuvo en fu larga'viudcz la adoración de aquel R e y -
n o : mas (lenda alfalfada de los Rhodios dentro de é l , con
dos fingularifsimos eñratagemas , en dos lances fojos def-
t m y ó las Tropas que le .avian invadido , y paffancTb veloz-;
ínente. de la defenfiva à labfenüva , conauiüó v triun-ív
DISCURSO XVÍ. 315
fó de la Isla de Rhodas. N i á las dos Afpafias , á cuya
admirable dirección fiaron enteramente con feliz fu ce fio el
govierno de fus Eftados Pericles, efpofo de la vna , y Ciro,;
hijo de Dario Notho , galán de la otra. Ni ala prudentif-;
lima Pbile•., hija de Antipatro , de quien aun fiendo niñato-:
maba fu padre confejo para el govierno de Macedonia , y¡
que defpues con fus buenas artes facó de mil ahogos á fu
efpofo el precipitado, y ligero Demetrio, Ni á la mañofi?;
Livia , cuya fútil aftucia parece fué fuperior á la penetra-:
don de Augufto , pues no le hirviera dado tanto dominio
fobre fu efpiritu , fi la hirviera conocido. Ni á la fagáz;
Agripina, cuyos Artes fueron fatales para ella , y para el
Mundo, empleandofe en promover á fu hijo Nerón al So-:
lio. Ni á la fabia Amalafanta, en quien fué menos enten-
der las lenguas de todas las Naciones fujetas al Imperio
Romano , que governar con tanto acierto el Eftado , durante;
la menoridad de fu hijo Athalarico.
¡6 Ni ( dexando otras muchifsimas , y acercan-a
ídonos á nueftros tiempos ) fe olvidará jamás Ifabela de
Inglaterra, muger, en cuya formación concurrieron con
igual influxo las tres gracias , que las tres furias : y cuya
foberana conducta feria fiempre la admiración de la Europa,'
fi fus vicios no fueran tan. parciales de fus máximas, que
fe hizieron imprefcindíbles : y fu imagen política fe pre-i
fentará íiempre ala pofteridad , coloreada (manchada di-
ré mejor) con la fangrc de la inocente Maria ELtuarda , Rey-,
na de Efcocia. Ni Gathalina de Medkis, Reyna de Francia,
cuya folerciaenla negociación de mantener en. equilibrio
los dos partidos encontrados de Carbólicos , y Calviniftas,
para precaver el precipicio de la Corona, fe pareció á la
deñreza de los Funámbulos , ó Volatines , que en alta , y
delicada cuerda con el prompto, y artificiólo manejo de
los dos pefos opueftos, fe aííeguran de el defpeño , y deley-
tan á los circunftantes, orientando el r i e f g o , y evitando
el daño. No fuera inferior á alguna de las releridas nuef-;
tra Carbólica Ifabela en la adminiítracion de el govierno,-
fihuviera fulo R e y n a n t e , como fué Reyna. Con todo no
le fakaroii ouüoncs, y acciones, en que feo refplande^
" cer
^ló DEPENSA D E LAS MUGERES,
cer vna prudencia confuniada. Y aun Laurencio Beyer-ì
link en fu Elogio dice , que no fe hizo cola grande en fu
tiempo , en que ella no fueife la parte , ò el todo : Quid, '
magni in Regno fine illa, imo nifi per ilUm feregefturn e/li.
P o r lo menos el defcubrimiento de el nuevo Mundo , que-
fuè el fuceifo mas gloriofo de Efpaña en muchos Siglos , es
cierto que no fe huviera confeguido , íi la magnanimidad-
de Ifabela no huvieífe vencido los temores, y perezas de Fer-i
nando.
37 En fin ( lo que es mas que todo ) parece fer,aunquc;
no eftoy muy íeguro de el computo , que entre las Reynas,
que mandaron largo tiempo como abfolutas , las mas fe
hallan en las Hiftorias celebradas como Governadoras ex-
celentes. Pero las pobres mugeres fon tan infelices , que,
fiempre fe alegarán contra tantos exemplos iluílres, vna Bru-
nequilda , vna Fredegunda , las dos Juanas de Ñapóles , y,
otras pocas ; bien que à las dos primeras les fobrò malicia^
ño les faltó fagacidad.
3S N i es en el Mundo tan vniverfal, como fe pienfaj
la perfuafion de que en la cabeza de la muger no afsienta
bien la Corona : pues en Meroe , Isla que forma el Nilo
en la Ethiopia , ó Peninfula , como quieren los Moderi
n o s , R e y n a r o n , fegun el teftimonio de Plinio , mugereí
por muchos Siglos. El Padre Cornelio Alapide , tratando
de la Reyna Saba, que fue vna de ellas , pienfa que fu Im-
perio fe eftendió mucho fuera de el ambito de M e r o e , y
compreheudió acafo toda la Ethiopia , fundado en que
Chrifto nueftro Bien llamó á aquella Señora Reyna de el
Auftro, titulo que fuena vn bafto Dominio ázia aquella
plaga. Si bien que , como fe puede vèr en Thomas Corne-
lio , no falta A u t o r , que aífegura fer la I s l a , ó Peninfula
de Meroe , mayor que la Gran Bretaña ; y afsi no eramují
corto el Eftado de aquellas R e y n a s , aunque no falieífe de
el ambito de Meroe. Ariftoteles (lib.i. Poli tic. cap. j.)
dice, que entre los Lacedemonios tenían gran parte en el go-
yierno politico las mugeres. Efto era conforme á las leyes*
gueles dexó Licurgo.
1% laaabien, ca Borneo, Isla gránele de el Mar de lai
- - - - - - ' ja.
DISCURSO XVL 3 27
India, Réyñan mugeres, fegun la relación de Mandeslo;
que fe halla en el Segundo T o m o de Oleario ; fin gozar fus
maridos otra prerrogativa, que fer fus mas calificados Valía-
nos. En la Isla Fermofa, fituada en el Mar Meridional de
la.China , es tanta la fatisfaccion que tienen de lapruden-:
te conducta de las mugeres aquellos Idolatras , que á ellas
vnicamente eftá fiado el Miniftetio Sacerdotal, con todo
lo que pertenece á materias de Religión : y en lo políti-
co gozan vn poder en parte fuperior al de los Senadores»'
como Interpretes de la voluntad de fus Deidades.
40 Sin embargo , la practica común de las Naciones
és mas conforme a l a razón, como correfpondiente al Di-:
vino Decreto, notificado á nueítra primera Madre en el Pa-j
raifo , donde á ella , y á todas fus hijas en fu nombre fe
les intimo la fujecion á los hombres. Solo fe debe corre-
gir la impaciencia con que muchas vezes llevan los Pueblos
el govierno mugeril, quando fegun las leyes fe les debe obe-
decer : y aquella propaííada eílimacion de nueflro fexo,'
que tal vez ha preferido para el régimen vn niño incapaz, 3
vna muger hecha. En que excedieron tan ridiculamente los
antiguos Perfias, que en ocafion de quedar la viuda de vn©
de fus Reyes en cinta, fiendo avifados de fus Magos , que la
concepción era v a r o n i l , le Coronaron á la Reyna el vien-
tre, y proclamaron por R e y fuyo el feto, dándole el nom-¿
bre de Sapor antes de aver nacido.

S. VIL
41 *f 1"ASTA aqui de la prudencia política, conten.:
JtjL tandonos con bien pocos exemplos , y de-
sando muchas. De la prudencia económica es ociofo ha-
blar, quando todos los dias fe eflán viendo cafas muy bien
govef nadas por las mugeres, y muy defgovernadas por los
hombres. c
42 Y paliando á la fortaleza, prenda que los hom-
bres confiderrm comoinfeparable de fu fexo , yo convendré
en que el Cielo los mejoro en efta parte en tercio , y quin-
to ; mas n o , en que fe.les aya dado como Mayorazgo^
o
'318 DEFENSA D E LAS MUCÎERES,
o Vinculo indiviiible , exempto de toda partida ccn el otr$
fexo.
4} No pafso Siglo à quien no ayan ennoblecido mu-
geres valerofas. Y dexando los exemples de las Heroínas
de la Efcritura , y de los Santos Martyres de la Ley de Gra-
cia ( porque hazañas, donde intervino efpecial auxilio Sobev
rano , acreditan el poder Divino ; no la facultad natural
m el fexo ) ocurren tantas mugeres dé heroyco valor , y ef-
forçada mano, que en tropel fe preíentan en eltheatro de la
memoria. Y tras de las S emir amis , las Artemijfas, las Trío,
tniris, las Zenobias fe parece vna Aretciphila efpofa de Ni-:
cotrato , Soberano de Cirene en la Libia : en cuya incompa-
rable cenerofidad fe compitieron el amor mas tierno déla
Patria , la mayor valentía de el efpiritu , y la mas fútil def-
treza' de el difeurfo : pues por librar fu Patria de la violenta
tyrania de-fu marido, y vengar la muerte que elle por pof-
feerla avia execut ido en fu prim.-r conforte , hiziendofe
Caudillo de vna confpiraeion,dcfpojb à Nicotrato de el Rey-
no , y la vida. Y aviendo fucedido Leandro , hermano de
Nicotrato en la Corona , y en la crueldad , tuvo v a l o r , y
arte "para echar también de el Mundo à efte fegundo Tyra-
no : coronando en fin fus iluftres acciones con apartar de fus
fienes la Corona, que reconocidos à tantos ben¡ ficios le ofre-
cieron los de Cirene. Una Oripetina , hija de el gran Mithri-
ídates, compañera infeparable de fu padre en tantos arrbf-
gados proyectos, que en todos moftrb aquella fuerça de al-
iña , y de cuerpo , que defde fu infancia avia prometido
la fingalaridad de nacer con dos ordenes de dientes : y def-
pues de deshecho fu padre por el gran Pompeyo , finada
en vn Caftilió por M m l i o Prifeo, fiendo impofsible la de-
fe ufa, fe quito voluntariamente la v i d a , p o r no fufrir k
ignominia de efelava. Una Clelia Romana , que , fiendo
prifionera de Porfena, Rey de los Etrufcos , venciendo mil
dificultades , fe libró de la prifion , y rompiendo con vn
caval.lo ( otros dicen que con fus brazos proprios ) las ondas
de el Tiber , arribo felizmente à Roma¡ U n a Arria , n:u-
gerde Cecina P e t o , que fiendo comprehendido fu marido
en; la Coafpkacioa de Camilo contra el Emperador Claudio,

%
DISCURSO XVI. 3 2 9
0*. por cñz crimen condenado á muerte , refüelta á no fobre-
vivir á fu efpofo, defpues de tentar en vano hazerfe pe-
dazos la cabeza contra vna muralla, logró introducida en
la prifion de Cecinna , exortarle á que fe anticipaífe con
fus manos la execucion de el Verdugo , méticndofe ella
primero vn puñal por el pecho. Una Epponina, que con
la ocafion de averfe arrogado tu marido Julio Sabino en las
Gaiias el titule de Cefar , toleró con rara conñancia inde-
cibles trabajos : y fiendo vltimamente condenada á muer-
te por Vefpaíiano , generofamente le d i x o , que moria con-:
tenta por no tener el difgufto de ver tan mal Emperador co«:
locado en el Solio.
44 Y porque no fe pienfe, que eftos Siglos vltimos
en mugares esforcidas ion inferiores á los antiguos , ya fe
prefentan armadas vna Poncella de Francia, columna que
fufteutó en fu mayor aíiiccion aquella vacilante Monar-
chia ; y ñ bien que encontrados en los dictámenes , como
en las armas , Inglefes , y Francefes , aquellos atribu-
yeron fus hazañas á pacto diabólico , y eflos á moción
divina : acafo los Inglefes fingieron lo primero por odio,
y los Francefes , que manejaban las cofas, ideáronlo fe-
gando por política : que importaba mucho en aquel def-
mayo grande de Pueblos, y Soldados , para levantar fu
animo abatido , perfuadirles que el Cielo fe avia declarado
por Aliado f u y o , introduciendo para eñe efecto al theatro
de Marte vna Doncella magnánima , y defpierta , como
inftrumento proporcionado para vn íocorro milagrofo.
Uaa Margarita de Dinamarca , que en el Siglo decimoquar-
to , conquiñó por fu perfona propria el Reyno de Suecia,
haziendo prifionero al Rey Alberto , y la llaman la fe-
gunda Semiramis los Autores de aquel Siglo. Una Martilla^
natural de Lemnos , Isla de el Archipiélago , que en el
íitio déla fortaleza de Cochin , puefto por los Turcos,
viendo muerto á fu padre, arrebató fu efpada , y rodela,
y convocando con fu exemplo toda la Guarnición, en cu-
ya frente fe pufo , dio con tanto ardor fobre los Enemigos,,
, que no folo rechazó el analto; masobligó al Bajá Solimán
á levantar el fitio: hazaña que premió el General Loreda-j
330 DEFENSA D E LAS MÜGERES;
ño de V e n e c i a , cuya era aquella Plaza , dándole á efco'j
.ger para marido cualquiera que ella quiíieííe de los mas
iluftres Capitanes de fu Exercito , y ofreciéndole dote
competente en nombre de la República. Una Blanca de
Rofsi , muger de Bautifta Porta , Capitán Paduano , que
defpues de defender valerofamente , puefta fobre el muro,
la Plaza de Banano en la Marca Trevifana , fíendo luego
cogida la Plaza por traycion , y prefo , y muerto fu ma-
rido por el Tyrano Ezelino, no teniendo otro arbitrio pa-
ra refluir los ímpetus brutales de eñe furiofo enamorado
de fu belleza, fe arrojo por vna ventana ; pero defpues de
curada , y convalecida (acafo contra fu intención) de el
golpe , padeciendo debaxo de la oprefion de aquel Bárba-
ro el oprobrio de la fuerca , fatisfizo la amargura de fu
dolor , y la conñancia de fu fe conyugal, quitandofe la
vida en el mifmo fepulchro de fu marido , que para eñe
efecto avia abierto. Una Bonna , payfana humilde de la
Valtelina , á quien encontró en vna marcha fuya Pedro
Brunoro , famofo Capitán Parmefano , en edad corta guar-
dando ovejas en el campo , y prendado de fu intrcpita vi-
veza , la llevó contigo para cómplice de fu incontinencia;
pero ella fe hizo también participe de fu gloria , porque
defpues de fenecer H vida deshoncfta con la fantidad de
el matrimonio , no folo como Soldado particular peleó fe-
rozmente en quantos encuentros fe ofrecieron , pero vino
á fer tan inteligente en el Arte Militar , que algunas em-
preñas fe fiaron á fu conducta, cfpecialmente la conquif-
ta de el Canillo de Pavono , á favor de Fcancifco Esforcia,
Duque de Milán , contra Venecianos , donde en medio de
liazer el oficio de Caudillo , pareció en las primeras fijas
al analto. Una María Pita, heroyna G a l l e g a , que en.el
Litio pueño por los Inglefes á ¡a Coruña el año de 1585?.
eñando ya los Enemigos aloxados en la brecha , y la Guar-
nición difpueña á capitular , defpues que con ardiente,
aunque vulgar facundia- , exprobró á los nueñros fu, co-
bardía , arrancando efpada , y rodela de las manos de vn
Soldado , y clamando , que quien tuvieífe honra la figuief-
f e , encendida en coirage fe arrojó á la brecha ; de cuyo
fuego'
DISCURSO XVI. 3 3T
¡fuego marcial falcando chifpas á los corazones de jos Sol-
dados , y Vecinos , que prendieron en la pólvora de el
h o n o r , con tanto Ímpetu cerraron todos fobre los Enemi-
gos , que con la muerte de mil y quinientos (entre ellos
vn hermano de el General de Tierra Enrique Norls ) los
obligaron á levantar el litio. Phelipe Segundo premió ei
valor de la Pita , dándole por los días de fu vida grado , y
fueldo de Alférez V i v o , y Phelipe Tercero perpetuó en
fus defeendientesel g r a d o , y fueldo de Adferez Reforma-
do. Una Ana de Vaux , gallarda Flamenca , natural de vna
Aldea cerca de Lila , que folo con el motivo de guardar fu
honor de ¡os infultos Militares en las guerras de el vltimo
Siglo , efeondiendo fu'fexo con los hábitos de el nueítro,
fe dio al exercicio de la guerra, en que íirvió mucho tiem-
po , y en muchos lances con gran valor, de m o d o , que
arribó á la Tenencia de vna Compañía, y fiendo defpues
hecha prifíonera por Francefes , defeubierto ya fu f e x o , el
Marifcal de Seneterrele ofreció vna Compañia en el fervi-
cio de Francia ; lo que ella no admitió por no militar con-
tra fu Principe , y bolviendo á fu Patria fe hizo Re-;
ligiofa.
45 El no aver nombrado hafta aora las Amazonas, íien-
do tan de el intento , fué con el motivo de hablar de ellas
feparadamente. Algunos Autores niegan fu exiíiencia, con-
tra muchos mas que la afirman. L o que podemos conceder
es, que fe ha mezclado en la Hiftoria de las Amazonas
mucho de Fábula : como es el que mataban todos los hijos
varones, que vivían totalmente feparadas de el otro fexo,
y folo lebufeaban parafecundarfe vna vez en el año, Y de
eltnifmo jaez ferán fus encuentros con Hercules, y T h e -
íeo , el' focorro de la feroz Penthefilea á la afligida T r o y a ;
como acafo también lavifita de fu ReynaTaleftris á.Ale-
xandro. Pero no puede negarfe fin temeridad contra la fe
de tantos Efcritores Antiguos , que huvo vn cuerpo for-
midable de mugeres belicofas e n l a A f i a , á quienes fe dio
el nombre de Amazonas.-
46 Y en cafo que también efto fe niegue : por las
Amazonas, que nos quitan en la A f i a , para gloria de las.
5 51 DEFENSA D É LAS MUGERES^
mugeres parecerán Alimonas en las otras tres partes cíe 1

el Mundo America , África , y Europa. En la America las


s

defeubrieron los Efpañoles, corleando armadas el mayor


R i o de el M u n d o , que es el Marañón , á quien por efta
dieron el nombre que oy conferva de Rio de las Amazonas*.
En la África las ay en vna Provincia de el Imperio de el
Monomotapa , y fe dice que fon los mejores Soldados, que
tiene aquel Principe en todas fus tierras ; aunque no falta
Geógrafo , que haze eftado á parte de el País que habitan
ellas mugeres guerreras.
47 En Europa , aunque no ay País donde las muge-
res de intento profeffaífen la M i l i c i a , podremos dar el nom-
bre de Amazonas a aquellas que en v n a , ú .cera ocafion
con Efquadron formado triunfaron de los Enemigos de fu
Patria. Tales fueron las Eranceías de Belovaco , ó Beauvais,
que fiendo aquella Ciudad fitiada por los Borgoñones el año
de r472. juntándole debaxo de la conducía de Juana Ma-
cheta el dia de el affako , rechazaron vigorofamente los
Eneinigos',aviendo precipitado fu Capitana !a Hachcta de la
muralla al primero que arbolo el Eftandartc íbbre ella.
E n memoria de efta hazaña fe haze aun oy fie fia annuilen.
aquella Ciudad , gozando las mugeres el Ungular privilegio
de ir en laProceísion delante de los hombres. Tales fueron
las habitadoras de las Islas Echinadas , oy llamadas Cur-
Solares, celebres por la victoria de Lepanto „ ganada en el
Mar de eftas Islas. El año antecedente á efta fatnofa bata^
lia , aviendo atacado los Turcos la principal de ellas , tal-
fué el terror de el Governador Veneciano Antonio Balbo,'.
y de todos los habitadores, que tomaron de noche la fuga,,
quedando dentro las mugeres refueltas á perfuafion de vn Sa-
cerdote llamado Antonio Rofoneo á defender la Plaza, co-
mo de hecho la defendieron con grande honor de fu fexo ?

y igual oprobrio de el nueílro.

NOTA. En las mugeres , que fe mataron d si


mifmas no fe propone efia refolucion , como exemplo de
virtud, fino como exceffo viciofo de la fortaleza ; que el
¡oquebajía para el intento»
DISCURSO XVI 33?
§. VIII.
S}8 "|3 ESTA en ella memoria demugeres mágnanimaá
X v decir algo. í b b r e v n Capitulo en que l o s
hombres mas acufan á las mugeres, ,y en que hallan mas
ocafionada fu flaqueza , ó mas defeétuofa fu conftancia, que
es la obfervancia de el fccreto. Catón el Cenfor no admitía;.
Cn efta parte excepción a l g u n a , y condenaba por vno de
los mayores errores de el hombre fiar fecreto á qualquie-
ra muger que fueífe. Pero á Catón le defmlntió fu pro-:
pria tartaraniet» Porcia, hija de Catón el menor, y muger
de Marco-Bruto , la qual obligó á fu marido á fiarle el
gran fccreto de la conjuración contra Cefar con la extraor-
dinaria prueba , que le dio de fu v a l o r , y conftancia , en la
alta herida, que voluntariamente para efte efecto con vn
cuchillo fe hizo en el muslo.
40 Plinio dice , en nombre de los Magos , que el co-
razón de cierta ave aplicada al pecho de vna muger d o r -
mida , la h.rze revelar todos fus fecretos. L o mifmo dice en
otra parte de la lengua de cierta fabandija. N o deben de fer
tan fáciles las mugeres en franquear el pecho, quando la M á -
gica anda bufeando por los efeondijos de la naturaleza lia-
ves, con que abrirles las puertas de el corazón. Pero nos rei-
mos con el mifmo Plinio de eífas invenciones: y concedemos,-
que ay poquifsimas mugeres obfervantes de el fecreto. M a s
á bueltas de efto, nos confeífarán afsimifmo los Políticos
mas expertos , que también fon rarifsimos los hombres á:
quienes fe puedan fiar fecretos de importancia. A la ver-»
dad , íi no fueran rarifsimas eftas alhajas , no las efíimáran
tanto los Principes , que apenas tienen otras tan aprgciabies
entré fus mas ricos muebles.
50 Ni ¡es faltan á las mugeres exemplos de invencl-:
ble conftancia en la cuftodia de el fecreto. Pithagoras eftan-
do cercano á la muerte, entregó fus eferkos todos , don-
de fe contenían los mas recónditos myfterios de fu Pililo-
folia, á la fabia Damo, hija fuya , con orden de no publk.
carlos jamás: lo que ella tan puntual mente obedeció, qu$
334 DEFENSA D E LAS MÜGERÉS,
aun viendofe reducida á fuma pobreza , y pudiendo ven-'
der aquellos libros por gran fuma de dinero, quilo mas fer
fiel á la confianca de fu padre, que falir de las anguftias de
pobre.
51 L a magnánima Aretapbila , de quien ya fe hizo
mención arriba , aviendo querido quitar la vida á fu efpofo
Nicotrato con vna bebida poncoñofa , antes que lo inten-
CaíTe por medio de conjuración armada, fué forprendida en
el defignio : y puefta en los tormentos para que declararle
todo lo que reliaba faber , eftuvo tan lexos de embargarle
la fuerca de el dolor el dominio de fu corazón, y el vio de
fu difeurfo , que entre los rigores de el fuplicio no folo no
declaro fu intento , mas tuvo habilidad para perfuadirle
al T y r a n o , que la poción preparada era vn filtro amatorio,
difpurfto á fin de encenderle mas en fu cariño. De hecho
efta ficción ingeniofa tuvo eficacia de philtro; porque N i -
cotrato la amo defpues mucho mas , fatisfechode que quien
felicitaba en él excefsivos ardores , no podia menos de
quererle con grandes anfias.
52 En la conjuración movida por Ariftogitón con-:
tra Hyppias , Tyrano de Athenas , que empezó por la
muerte de H y p a r c o , hermano de Hyppias , fué puefta á
la tortura vna muger cortefana , fabidora de los cómplices:
la qual para defengañar promptamente al Tyrano de la im-
pofsibiüdad de facarla el fecreto, fe corto con los dientes la
lengua en fu preferida.
53 En la Confpiracion de Pisbn contra Nerbn,'
a v i e n d o , defde que aparecieron los primeros indicios , ce-
dido á la fuerca de los tormentos los mas iluftres hombres
de R o m a , donde Lucano defcubrib por cómplice á fu'pro-
pria m a d r e , otros á fus mas Íntimos a m i g o s , folamente á
Epiebaris, muger ordinaria , y fabidora de todo , ni los
azotes , ni el fuego , ni otros martyrios , pudieron arrancar
de el pecho la menor noticia.
54 Y yo conoci alguna , que examinada en el potro
fobrevn delito a t r o z , que avian cometido fus amos ,refif-
tió las pruebas de aquel rignrofo examen , no por falvarfe á
SÍ Í si folo por falvar á fus duróos.: pues a- ella le avia to*
cado
DISCURSO XVI. 33?
gado tan pequeña parte en la culpa, ya por ignorar la gra-
vedad de ella , ya porfer mandada, ya por otras circunf-
tancias , que no podia aplkarfele pena , que equivaliefle,
ni con mucho al rigor de la tortura.
55 Pero de mugeres, á quienes ño pudo exprimir,
el pecho la tuerca de los cordeles , fon infinitos los exem-:
piares. Oi decir á perfona que avia afsiftidoen femejantes
a&os , que fiendo muchas las que confieflan al querer def-
nudarlas para la execucion , rarifsima defpucs de paífar
eñe martyrio de fu pudor , fe rinde á la violencia de el
cordel. Grande excelencia verdaderamente del fexo! Que las
obligue mas fu pudor p r o p r i o , que toda la fuerca de vn,
•Verdugo.
56 N o dudo que parecerá á algunos algo lifongero
eñe paralelo que hago entre mugeres , y hombres. Pero
yo reconvendré á eftos , con que Séneca, cuyo eftóycif-
mo no fe ahorro con nadie , y cuya feveridad fe pufo bien
lexos de toda fofpecha de adulación , hizo comparación
no menos ventajofa á favor de las mugeres : pues las conf-
tituye abfolutamente iguales con los hombres en todas las
difpoíiciones , ó facultades naturales apreciables. Tales
fon fus palabras •• Quis autem dicat naturam maligne cum
muliebribus ingenijs egijfe, & virtutes ilh.rum in arfiurn
retraxijfe ? Par illis mibi erede , vigor , par ad bonefia
{lioeat) facultas e(l. Laborero doloremque ex aqw Ji con-
fueveré patiuntur. (in Confol. ad Marciam.)

$. IX.
57 T LEGAMOS ya al batidero mayor , que es la
I 4 queftion de el entendimiento , en la qual yo
confieflo-, que íi no me vale la razón , no tengo mucho re-
curio á la autoridad : porque los Autores que mean efta.
materia ( falvo v n c , íi otro muy raro ) eftán tan a favor
de la opinión de el vulgo , que cali vniformes hablan de el
entendimiento de las mugeres con defprecio.
58 A la verdad bien pudiera refponderfe á la auto-»
ridad de los mas de eífos l i b r o s , con el apólogo que á otro
pro-
33¿> DEFENSA DE LAS'MUGERES,
proponto trahe el Siciliano Cardúcelo en fus Diálogos Í6~ -
bre la pintura. Yendo de camino vn Hombre , y vn León,
fe les ofreció difputar quienes e n n mas valientes , íi los
liomb^es , íi los Leones. Cada vno daba la ventaja á fií
efpecie : hana que llegando á vna fuente de muy buena
eftructnra, advirtió el Hombre , que en la coronación efta-
ba figurado en marmol vn hombre hazíendo pedazos á vn
León. Bueíto entonces á fu contrincante , en tono de ven-
cedor , como quien avia hallado contra él vn argumento
conclayente , le dixo. Acabarás ya de defengañarte d e q u e
los hombres fon mas valientes que los Leones , pues allí vés
gemir oprimido , y rendir la vida vn León debaxo de los
brazos de vn hombre. Bello argumento me trahes, ( reípon-
«lió fonriendofe el Loen ) efía eílatua otro hombre la hU
20 , y afsi no es mucho que h formaífe como le citaba
bien á fu efpecie. Y o te prometo, que íi v n L e o n la hu-
viera hecho , él huviera buelto la t e t i l l a , y idantado el
León íbbre el Hombre haziendo gigote de él para fu
plato.
59 A l cafo. Hombres fueron los que eferivieron ef-
fos libros, en que fe condena por muy inferior el entendí-"
miento de las mugeres. Si mugeres los huvieran eícrito, no-,
ábrros quedaríamos debaxo, Y no faltó alguna que lo hi-
zo. Pues Lm recia Mar india , docta Veneciana , entre otras
Obras que compufo , vna fué vn libro con efte titulo : Ex*
tciencia de las muges , cotejada con los deferios, y vicios de
los hombres: donde todo el affuinpto fué probar ia prefe-
rencia de fu fexo al nueftro. El Sabio Jcfialia Juan de Car-
thagena dice , que vio , y leyó efte libro con grande placer
en Roma. L o cierro es , que ni ellas , i'i nofotros podernos
en efte pleyto fer juezes, porque fomos partes : y afsi fe avia
de fiar lafentencia á los Angeles, que como no tienen fe-'
x o , fon indiferentes.
60 Y lo primero , aquellos que ponen tan abaxoel
entendimiento de las mugeres, que cafi le dexan en puro
inítinto , fon indignos de admitirle á la difputa. Tales fon
los que afsientan , que á lo mas que puede fubir la cap«cí-.
4ad de vna muger, es á governar vn Gallinero.
DISCURSO XVL 337
di T a l aquel Prelado citado por Don Francifco Ma-:
¡Suelden f u C a r t a , y Guia de Cafados , que decia,que la
muger que mas fabe, fabe ordenar vnaaVcade ropa blanca.
Sean norabuena respetables por otros titulos, los que profie-
ren femé jantes fencencias ; no lo ferán por eftos dichos:
pues la mas benigna interpretación, que admiten, es la des
•recibirfe como hyperboles chiftofos. Es notoriedad de hes
cho , que huvo mugeres que fupieron governar,'y ordenas;
Comunidades Religiofas , y aun mugeres que fupieron go=
J/ernar, y ordenar Repúblicas enteras.
62 Efios Difcurfos contra las mugeres fon de hotri-3
bres fuperficiales. Vén , que por lo común no faben fino
aquellos oficios caferos , á que eftán deftinadas : y de aqui
infieren (aun fin faber que lo infieren de aqui , pues no
hazen íbbre ello algún acto reflexo) que no fon capaces de
otra cofa. El mas corto Lógico fabe , que de la carencia de
el acto i la carencia de la potencia no vale la ilación : y
a f s i , de que las mugeres no fepan m a s , no fe infiere, que no
tengan talento para mas.
6$ Nadie fabe mas , que aquella facultad que eítu.
idia; fin que de aqui fe pueda colegir, fino bárbaramente»
que la habilidad no fe eftiende á mas que la aplicación.
Si todos los hombres fe dedicaflen a la agricultura ( como
pretendía el infigneThomás Moro en fu Utopia) de modo,
que no fupieífen otra cofa, feria efto fundamento para dif-
currir , que no fon los hombres hábiles para otra cofa ? En-
tre los Drufos , Pueblos de la Paleftina , fon las mugeres
las vnicas depoíitarias de las letras , pues cafi todas fa-:
ben leer, y eferiyir ; y en fin lo poco , 6 mucho que ay¡
de literatura en aquella gente , efiá archivado en los en-:
tendimieútos de las mugeres, y oculto de el todo á los
hombres, los quales folo fe dedican á la agricultura , a l a
guerra, y á la negociación. Si en todo el Mundo hirviera
la mifma coílumbre, tendrían fin duda las mugeres á los
hombres por inhábiles para las letras , como oy juzgan loa
hombres fer inhábiles las mugeres. Y como aquel juicio feria
fin duda errado , lo es de el mifmo modo el que aora fe hazest
|>ues procede fobre el m¿fmg fundamentos
DEfEÑSA Í5É ÍAS MUGERES;

Acafo Cobre el mifmo principio , aunque 1

mucho mas benigno con las mugeres , el


Padre Malebranche, en fu Arte de invejligar la Verdad,
¡ e s concedió v e n t a j a c o n o c i d a fobre l o s h o m b r e s en l a fa*
c u i t a d d e difcernir ias cofas f e n í i b l e s , dexandolas m u y aba->
x o p a r a las ideas abftractas: p u e s , aunque feñala p o r ra-
z ó n de efto la blandura de fu celebro , eftas caufas phyficas
y a fe fabe que cada v n o las b u f c a , y feñala á fu m o d o ,
d e f p u e s q u e p o r la experiencia e f t á , ó fe juzga aífegurado
d e l o s efectos. Siendo efto a f s i , c a y ó efte Autor en aque^
lia dolencia i n t e l e c t u a l , de que quifo el mifmo curar á to-;
d o el Linage H u m a n o ; efto es el error ocaíionado de pre-i
Ocupaciones comunes , y principios mal reflexionados:
p u e s h i z o fin duda efte j u i c i o , ó p o r dexarfe arraftrar de el
c o m ú n , ó porque a d v i r t i ó , que las mugeres reputadas por
hábiles difcurren c o n mas f e l i c i d a d , y acierto que los hom-
b r e s , en orden á l a s cofas fenfibles , y con m u c h o menos,
.(' fino enmudecen de el t o d o ) en materias abftractas: fiendo
a f s i , q u e efto n o proviene de l a deligualdad de talento;
Fino de l a diferencia d e aplicación , y v i o . Las mugeres fe
o c u p a n , y pienfan m u c h o mas q u e los hombres en el con-
d i m e n t o de el m a n j a r , en el ornato d e el v e n i d o , y otras
c o f a s á efte t o n o , y afsi d i f c u r r e n , y hablan acerca de
ellas c o n m a s a c i e r t o , y c o n mas facilidad. P o r el con-
t r a r i o en queftiones theoricas , ó ideas abftractas , rarifskna
snuger pienfa , ó rarifsima v e z ; y a f s i , n o es m u c h o que
l a s encuentren t o r p e s , q u a n d o les tocan eftas materias.
P a r a m a y o r defengaño de efto fe obfervará , que aquellas
imugeres a d v e r t i d a s , y d e genio galante , que guftan de
d i f c u r r i r á Vezes fobre las delicadezas de el a m o r Platóni-
c o , q u a n d o fe ofrece razonar fobre efte p u n t o , dexan m u y
a t r á s al h o m b r e mas difcreto , q u e n o fe ha d e d i c a d o á ex-
plorar eftas vagatelas de la fantafi3.
65 Generalmente qualquiera , p o r grande capacid/d
g t i e tenga , parece rudo ¿ 6 de corto alcance en aquellas
DISCURSO XVL 339
rftaterías à que no fe aplica, ni tiene vfo. Un Labrador
úe el campo , à quien Dioe aya dotado de agudifsimo in-
genio , como algunas vezes incede, fino ha penfado jamás
en otra cofa que fu labranca , parecerá muy inferior al mas
rudo politico , fiempre que fe ofrezca hablar de razones de
eftado. Y el mas fagàz politico, fi es puro politicò , me-»
tíendofe à hablar de ordenar efquadrones , y dar batallas,
dirà mil defvarios ; y íi le oye algún hombre inteligente
en la Milicia , le tendrá por vn fatuo : como reputó tal
Annibal ai otro grande Orador Afiatico , que en prefencia
f u y a , y de el R e y A n t i o c o , fe arrojó á razonar de las cpfaa
de la guerra.
66 L o proprio fucede puntualmente en nueftro ca=
fo. Eftáfe vr.a muger de bciíifsimo entendimiento dentro
de fu cafa, ocupado el penfamiento todo el dia en el ma-,
nejo domeftico fin oír , ù oyendo con defeuido , íi ta£
5

vez fe habla delante de ella de materias de fuperior esfera.'


Su marido , aunque de muy inferior talento , trata poc
á fuera frequentemente yà con Religiofos fabios , yà cotí
hábiles políticos , con cuya comunicación adquiere varias
íiotieias, enterafe de los negocios públicos , recibe mu-i
chas importantes advertencias. Inftruìdo de efte m o d o , ÍJ
alguna vez habla delante de fu muger de aquellas-materias,
en que por ella via cobró vn poco de inteligencia , y ella
dice algo que le ocurre al propofito , como , por muy pe-
netrante que fea, eftando defnuda de toda inftruccion , ES
precifoque difeurra defe&uofamente, haze juicio el.mariw
d o , y aun otros , fi lo efeuchan , de que es vna tonca , que-i
dandofe el muy fatisfecho de que es vn lince.
6~i L o que pafla con efta muger, paffa con infinitas*
que fiendo de muy fuperior capacidad refpe&o de l o ?
hombres concurrentes , fon condenadas por incapaces de
difeurrir en algunas materias ; fiendo afsi, que el no difeur-
r i r , ó difeurrir mal depende , no de falta de talento, fin»'
de falta de noticias ; fin las quales ni aun vn entendimiento
Angelico podrá acertar en cofa alguna j los hombres entre
tanto, aunque de inferior capacidad, triunfan, y lucen comq
í ^ ! o $ S § á e f e E°rc¡ue f t prevenidos
e a n
notólas.
34° DEFENSA DE"-LAS MUGÉKÉS,
£>8 Sobre la ventaja de las noticias , ayotra detmí-J
cho momento ; y e s , que los hombres eftán muy acof-;
tumbrados á meditar , difcurrir , y razonar fobre eñas ma-i
terias, que fon de f u v f o , y aplicación; al paño que las
mugeres rarifsima vez pienfan en ellas : con que fe puede
decir, q u e , quando llega la ocafion, los hombres hablan;
muy de penfado^ y las mugeres muy de repente.
69 En fin los hombres con la reciproca comunica-:
clon fobre tales aífumptos , participan vnos las luzes de
©tros; y afsi, quando razonan fobre e l l o s , no folo vfan
de el difcurfo proptio , mas también fe ávproveclv.i de lo-
que tomaron de el ageno: explicándote á vezes en la boca
de vn hombre folo , no vn ~entendimieuto folo , fino rím-
enos entendimientos. Pero las mugeres como en fus confe-
rencias no tratan de eftas materias fublimes , fino de fus
l a b o r e s , y otras cofas domeílicas, no fe preftan fobre ellas
luz alguna vnas á otras : con que ocurriendo el cafo de
hablar en femejantes materias , fobre razonar de re-
pente , y fin noticias , vfan folo cada vna de fus luzes
proprias. '
70 Eftas ventajas que ay para que vn hombre áM
cortifsima penetración difeurra mucho m a s , y con mucha
mayor acierto en aífumptos nobles , que vna muger de
gran perfpicacia , fon, de tanto momento, que puede fu-
ceder en la concurrencia de vna; muger agudifsima con va
hombre rudo, parecer efte difereto, y aquella tonta, á quiea
ño hizieré las reflexiones que llevo eferitas.
71 D e hecho la falta de eftas reflexiones introduxó
tn tantos hombres ( y algunos por otra parte fabios , y dif-
cretos ) efte gran deíprecio de el entendimiento de las mu-
geres ; y lo mas graciofo e s , que han gritado tanto fobre,
que todas las mugeres fon de cortifsimo alcance , que
a muchas, íi no á las m a s , ya fe lo
han hecho creer.
)(?)(

!*tj ÍÜ M ££t)
DISCURSO XVL 341

§. XI.
fi 17" Parece que ni aun aquellos que acércando'j,
X fe nías à la razón aísientan , pero con mu-$
fcho menor exceífo, ventajofo el entendimiento de los hom-;
bres , dexando lugar á que entre .las mugeres aya algunas
de f o l i d o , y perfpicaz ingenio : D i g o , que ni aun aquellos
/hirvieran, à mi encender , eílab lccido ella deíigualdad e m
tre los dos fexos , íi huvieran atendido à las circunftancías
expreífidas , que ocurren, para que aun excediendo en la
capacidad, parezcan inferiores las mugeres en las mas осан
(Sones.
11 N i yo sé que fundamento puede tener efta pre-¡
tendida deíigualdad, mas que b l que llevo dicho, y cuyaí
equivocación he defcub ierto. Porque íi fe me dice , que la
experiencia lo ha demòni! rado , ya eftá prevenido , que la
experiencia , que fe alega , es engañofa, y manifeílados va-;
rios capítulos de fu falacia, Fuera deque en orden à expe--
. rienda , yo citare dos grandes teftigos à favor de las muge-í
res. El primero es el diferetifsimo Portugués Don Francifcoi
M a n u e l , en fu Carta de Guia de Cafados.
74 En elle Cavalleto concurrieron químtas circunf-
tancias fe pueden defear para tener feñaladiísimo voto en la
materia de que tratamos : porque fob re fer de efeogida ad-;
yertencia, peregrino varias tierras , mezclado comunmente
en negocios, por los quales , y por el genio aulico , y cor-
tefano que tenia, trató en todas partes muchas Señoras , co-,
mo fe ve en fus eferitos.
75 Eñe A u t o r , pues , parece que no contento сой
dexar iguales en la parte intelectual á las mugeres con los
hombres, les concede à ellas alguna ventaja. Afsi dice en el,
libro citado , fol. 73. defpues de referir la opinion contraria
á las mugeres: Soy de muy diferente opinion, y creo cierta
ay much as de gran juicio. Fi, y traté filgurtul ёп BfpAna'i
y fuera de ella. Por efio mifmG me parece"que aquella agik
lidad fuya en percibir , y difeurrir 5 en que nos h azenven^
taja, es necejfa/ip templarla co» grande tínstjia^ ^ pocomgp
342, DEFENSA D E LAS MUGERES,
abaxo : Afs't,pues ,no es licito privar a las mugeres de el
futilifsinio metal de entendimiento , con que las forjó la natu-
raleza , podemos ji quiera defviarle las ocafiones , de que h
¿filen en fu peligro , y en nueftro daño. El teftimonio de
efte Autor , como he dicho, es de gran pefo: porque ta-
bre fu mucha experiencia , y diferecion fe añade, que en
el eferito citado nada indulgente eftá con las mugeres : y
aun al fin de elfinmucho rebozo fe acufa á si proprio de
algo fevero.
•jó - El fegundo teftigo es el eruditifsimo Francés el
'Abad d^Bellcgardc , hombre también áulico , y que co-
noció bien el Mundo en el gran theatro de París. Efte Au-
tor en vn libro que dio á luz, intitulado : Cartas curiofas de
Literatura, y de Moral, afirma, que el efpir¡tu de las mu-;
geres no es en alguna manera inferior al de los hombres para
qualquiera de las ciencias., artes, Ó empleos. No he vifto
Á efte Autor ; pero le citan fobre efte aflumpto los de lass
JAMONAS de Trevoux en el mes de Abril de el año de i702^

§. X Í I .

jj T ^ C H A D O , pues, á parce el fundamento de LÁ


JLJ experiencia , FOLO Leña QUE fe NOS pruebe
la pretendida defigualdad de entendimientos con alguna
razón phylica. Pero yo afirmo, que no ay alguna. Porque
folo fe puede recurrir , Ó á la defigualdad entitativa de las
Almas , 6 á la diftincta organización, o diferente tempe*
rie de los cuerpos de ambos iexos.
78 A l a defigualdad entitativa de las Almas no aj/j
recurfo: pues en lafentencia común de los Philofofos to«:
las Almas racionales en fu perfección phyfica fon iguales."
Bien sé que algunos citan á San Auguftin , por la fenten-
tiacontraria en úlib. 1 5 . deTrinitate cap. 1 3 . pero yo en
i

aquel capitulo no hallo, que San Auguftin toque fi quiera el


punto. También sé, que la Facultad Pariíienfe condenó vna
propoíicion , que afirmaba no fer la Alma de Chrifto Se-
ñor nueftro mas perfecta que el alma de el alevofo Judas. A
que tefpoiide el noble ELcoylta Majjtt^ que aquella
l
DISCURSO XVI. 34 1
loftdenaciori , como no eftá confirmada por la Sede Apof-
tolíca, no debe hazernos fuerza. Y es aísi. Pero convengo
en que tal propoficion fe deba borrar en qualquiera libro
queíe halle : porque es diflonante ; y refpecto de los Idio-
t a s , que en las Alinas no diftinguen claramente lo phyfico,
de lo m o r a l , efcandalofa. Mas efto no perjudica en mane-
j a alguna á la verdad de la común fentencia, que afsienta la
total igualdad phyfica de las Almas.
79 Aun en cafo que las Almas fean entitativamente.
defiguales, como nos probarán , 6 nos harán creer, que
Dios efcoge las mejores para los hombres, dexando las me-
nos pefecñas para las mugeres ? Antes creeremos , que la
Alma de Maria Santifsima feria en eñe cafo la mejor que
tuvo toda otra pura criatura : como de hecho afirma , que
aun en lo phyfico fué perfeétifsima el eximio Suarez.
(tom. 2. in i.part. quaft. 2j.di/p. i . fecl. 2 . ) Y a f s i biéñT
puedeneftarfe firmes las mugeres, que dicen, que la Alma;
lio esvarón, ni hembra: porque dicen bien.
80 En quanto á la organización , bien creo yo que;
la variedad de ella puede variar mucho las operaciones de el
A l m a ; aunque halla aora no íabemos, qué organización
es la mas oportuna para difeurrir bien. Ariftoteles pretende,*
que los de cabeza pequeña fon mas difeurfivos. Congetu-
ro , que antes de efcrivirlo tomóla medida á la luya. Otros
votan á favor de las cabezas grandes. N o debían de fer,
las de eftos pequeñas : que fi lo fueran , feguirian á Arifto-
teles. El Cardenal Sfrondati dice en fu Curfo Philofofico,'
que el Cardenal de Richelieu tenia los órganos , que íirven
al difeurfo, duplicados : á lo qual atribuye la iufigne perfpi-
cacia, y agilidad intelectual de aquel Miniftro. Y o lo en-;
tiendo de duplicación , no en el numero , porque íeria
monftruofa , fi no en la magnitud; y efto es conforme 3
lo que dicen muchos, que qu. nto el celebro es mayor en
quantidad, fe diícurre mejor : lo que' coligieron de ave?
obfervado en el hombre mayor celebro á proporción, que
en todos los demás animales. Órros, (como Martínez en
fu Aiuthomia ) excluyéndolas cabezas grandes , y chicas,
quieren que las de mediano tamaño fean mas oportunas pa-r
344- D E F E N S A D E IÀS M U G E R E S ^
í a las operaciones de el entendimiento. Digan lo qué qui-;
fieren eftos que andan tomando la medida á ios miembros,
para computar el valor de las Almas : la experiencia muef-
tra, que entre hombres de cabezas grandes fe hallan vnos fu-
tiles , y otros eftupidos ; y de la mifma manera entre hom-
bres de cabezas pequeñas. Si la diferente magnitud de la
c a b e z a , à de el celebro indugerà deíigualdad en las ope-
raciones de el entendimiento , fe hallaria fer muy defigua-
les en entender , y percibir los hombres muy deíiguaies
feñ laeftatura , pues à proporción de ella fon mayores , ò
menores, afsi el c r a n i o , como el celebro ; lo qual es contra
l a obfervacion.
8r Por tanto , aun quando fea verdad lo que dice
'Plinio, que en los hombres es mayor materialmente la fubf-
taucia de el celebro, que en las mugeres (en lo qual fuf-
a n d o el juicio , halla tomar el parecer de Anathomicos ex-
pertos ) nada fe prueba de ay : pues fi la ventaja en entender
fe huv.iv-íte de arreglar á eíTe exceíío material de el celebro,
feria menefter que vn hombre agudifsimotuvKlTe quarenta,ò
tinqueara vezes mayor celebro que vn fatuo: y que los hom-
bres de mayor cuerpo fueíTen generalmenremas perfpicaces,
que los de corta eftatura: pues tienen también mayor celebro
á proporción. Y fi elfo fe lo hizieren creer al que eícrive
pilo , les darà las gracias , por que le eftá bien.
82 Afsienro , pues , á que la mayor , ò menor cla-
ridad , y facilidad en entender, depende en gran parte de la
¡diferente organización ; pero no de da diferente organiza-*
cion fenfible de las partes mayores ; sì de la infenfible de
partes minutifsimas ; comode la diferente textura , ò fir-
meza defutillfsinas fibras , y de la mayor , ò menor con-,
Cabldad, limpieza, y terfura de los delicadifsimos canales,
por donde comercian los efpirkus, Y nada de efio pode-
mos faber fi es diftiuto en los hombres que en las mugeres,
porque no alcmcari á difcemirlo los antojos Anathomicos:
como ni los Cartefianos , por buenos Microfcopios que
bufquen , podrán explorar fi la glándula pineal, que íeñalan
por total domicilio de la A l m a , tietie clifereucetexturae»
y $ m u g e r e s , que; ert I05 ll^flibjs^
DISCURSO XVI.' "345-
8?' Que la diferente organización fenfible no induce
Variedad en las operaciones racionales por ío menos no
íiendo enormemente irregular , fe haze claro de que ay.
hombres diferentemente organizados , que fon igualmente
hábiles , y hombres organizados de vn mifmo modo , que
.fon en las facultades de el Alma muy diferentes. El Frigio
-Eflbpo fué en todo el cuerpo tan disforme , y tan contra-
hecho , que apenas parecía hombre , p o r l o q u a l quedó fu
memoria á los Siglos que fucedieron para antonomafía
de la fealdad : Con todo fefabe , que fué de delicado, jk
penetrante efpiritu. Sócrates no diftó mucho de Eflbpo era'
la irregularidad cíelas facciones; y no tuvo la antigüedad'
mas ajuítado entendimiento. Peroquando concedieflemos,.
que a diftinta organización fenfible fe figuediftinta habi-
lidad intelectual, qué fe inferirá de aqui ? N a d a : porque;
las mugeres no fon diítintamcnte formadas , que los liorna
bres en los órganos que ñrven á la facultad difcurfivay'
si folo en aquellos quedeftinóla naturaleza á la propagan
cion de la eipecie.

§. XIII.
£4 ^T^AN poco en la diferencia de temperamento
j[ puede fundarfe la imaginada inferioridad de
el entendimiento femíneo. N o porque yo niegue , que pa-
ta el recto , ó defordenado vfo de las potencias de eí Al-'
ma , d temperamento haze mucho al cafo. Antes eftoy per-
fuadido á que ocafiona mas variedad en las operaciones el
di ¡tinto temperamento, que la diferente organización: pues
no 2y quien no experimente en si m i f m o , que fegun HH
variamente templado, fin que la organización fe deíquauér-
n e , eítá mas , ó menos hábil para todo genero de opera-
ciones ; y apenas ay intemperie que ofenda el cuerpo, que
no turbe al mifmo tiempo poco , ó mucho en fus funcio- ,
nes al Alma. Pero qué efpecie de temperamento , u de
temperie conduce para entender , y difeurrir mejor , no es
fácil averiguarlo.
8> Si fe ha de eítár i lo que énfeña Ariftoteles , f^
¡Tonao I. 2ís iíit
DEFENSA D E LAS MUGERES,
inferirá , que el temperamento femíneo es mas á propoíí-
to para efte efecto. Eftc Philofofo , que quantos efectos
aparecen en el dilatado campo de la naturaleza , fujeta al
dominio de fus quatro quaíidades primeras , dice en la
fe Si. 1 4 . de fus Problemas, quafí, 1 5 . que les hombres de
temperamento f r í o , fon mas intelectuales , y difeuriivos,'
que los de temperamento caliente ; fin embargo de que en
la mifma queftion entra fuponiendo , que en los climas ar-
dientes fon los hombres mas ingenioíos , que en los fríos:
( l o que yo tampoco creo , pues fe fíguiera , que fon mas in-
geniofos los Africanos , que los Ingiefes, y Olandeíes }
porque figukndo fu fentenciade la intenfíon de las quali-;
dades en fuerca de la Antyperiflafis, afirma , que en los
Paifes mas fríos fon los hombres mas ardientes,. y en los
ardientes mas fríos : Etenim , qui fedes frígidas babent¿.
frigore loei objifiente , longe calidiores, quam fuá fint na-
tura , redduntur. Y tan inferiores dexa rcfpecto de los de
temperamento frío , para difeurrír, á ellos hombres' mas
calidos, que no duda de compararlos á los que tienen la ca-,
beza traftornadacon el demafiado vino» Afsí pro'~gue inme-
diatamente á las palabras citadas : Itaque vinolentrs ai",
modum fmiles efe videntur ,nec ingenio valent quo prof-
piciant, rerumque rationes inequirant. M u y olvidado ef-
taba el Philofofo de fu Dlfcipulo Alexandro , quando pufo
á los ardientes en la claííe de los efíupidos : ó no foío ol-
v i d a d o , mas aun refentido: pues es cierto , que eferivió
las mas de fus obras defpues que Alexandro le defvió de
sí , por fófpechas que tuvo de fu poca fidelidad, y retira-
do en Athenas tuvo el nuevo difgufto de ver , que aquel
Principe embiaffe á regalar á fu competidor , y condiíci-i
pulo Xenocrates con treinta talentos de oro , fin hazer me-
moria de Ariftoteles ; aunque es dudofo fi el refentimiento
llegó á t a n t o , que confpiraífe con Antipatro contra la vi-
da de Alexandro , y difcurrieífe el modo de conducirpara la
execucion el veneno. Pero vamos al cafo.
85 El mifmo Ariftoteles enfeña, ( y en ello convienen
todos los Phyficos , y Médicos) que la difsimilitud de
temperamento en los d o s f e x ó s ella eii que el hombrees
3

ca-
DISCURSO XVI. 547
calido , y f e c o , la irrnger fría , y húmeda : EJl antera
vir calidas , O" ftccus , mulier frígida bumi-laque. ( fc£f.<j4

qutejl. 2 5 . ) Siendo , pues , en fentencia de Ariftoteíes, el


temperamento frío mas oportuno para difcurrir , corno al
contrario el caliente ; y fiendo las mugcres fiias , y ios
hombres calidos , fe figue , que el temperamento femíneo
es mas á propofito para entender , y difcurrir bien , que el
varonil.
87 Ella prueba es concluyeme para los que creen
quanto dixo Ariftoteíes ; pero á mi protefto , que no
me haze alguna fuerca: porque ni creo, que en los Paifes
ardientes ay mejores ingenios , que en los fríos, ni que los
hombres fríos fon mas íngeniofos , que los calientes ; y
mucho menos, que los de temperament í igneo fean cafí in-
fenfatos. Y en quanto á la pretendida fuerca de la Antyptrif-
taj?s, quedefe por aora en la duda que tiene.
88 Humedad, y fequedad fon las otras dos qualida-
des diftintivas de los dos temperamentos. En atención aellas
también fe infiere de doctrina de Ariftoteíes, que las muge-
res fon mas perfpicaces que los hombres. Los que afsíentan,
que la mayor quantidad de celebro trahe configo la facultad
de entender mejor , l o fundan en que el hombre , que es el
mas advertido de todos los animales , tiene mayor celebro
á proporción , que todos. Aora arguyo afsi. Ariftoteíes
dice , que el hombre es de temperamento mas húmedo,
que todos los demás animales : Horno omnittm an''rn\r4ium
máxime hunúdus natura efi. (feél. 5. quitfl.j.) Conque
fi de tener el hombre mayor celebro, que los brutos, fe
infiere , que el mayor celebro influye mayor difcurfo : de
fer el hombre mas húmedo que los brutos , fe inferirá , que
la mayor humedad influye mas conocimiento. La mu-
ge r es mas húmeda , que el hombre: luego ferá mas in-
teligente que él.
8 9 , Tan poco efte argumento prueba, fino por vía de
retorfion á los contrarios : pues los principios en que eftri- •
Va fon, á buen librar , inciertos , y dudofos. Quien le di-
xo á Plinio, que el hombre tiene mayor celebro, que to-
áoslos demás animales? H a v o por ventura algün nombrí-'
DEFENSA D E LAS MUGERES;
tan prolixo,'que quebraíTe la cabeza á todas las efpeckS'
feníitivas , para pelar defpues los íeffos ? N i quien Je dixo.
a Ariíloteies, que el hombre es mas húmedo, que todos
los brutos ? Por ventura eíie Phiiofofo los exprimió á todos
€n prenfas para ver lá cantidad de humor que tiene cada
Vno. ? Antes parece, que ciertos brutos domeílicos , los
mas de los infectos, y todos , ó cafi todos los pezes fon
mas húmedos que el hombre. N i , aun quantlo fuera ver-'
d a d , que el celebro humano es mayor que todos los de-
más , fe inferirla , que dentro de nueftra efpecie á mayor
celebro fe íigue mayor difcurfo : pues en otras muchas par-;,
tes de el cuerpo fe diftingue el hombre de el bruto , fin
que el exceflo de algunos individuos en ellas arguya ma-
yor conocimiento. Seria menefier para efto aver obfervado,
que entre los miímos brutos IQS de mayor celebro tienen
mejor infinito -. lo que creo que no fucede ; pues fiendo
afsi, a total falta de celebro correfponderia total carencia
de percepción , lo qual es falfo : pues fegun Plinio muchos
feníitivos, que carecen de fangre , carecen de celebro ; y nq>
por elfo dexan de tener fu inftinto»

§. XIV.
<9Q | AEX'ADAS , pues, ellas pruebas, que proceden fo- :

\_Jf bre doctrinas- Ariftotelicas , ó faifas , o ;

inciertas, y folo les podrán fervir á las mugeres para red-


argüir á Ariftotelicos cerrados , que aprueban quanto dixo
fu Maeftro : Vamos á ver íi el caoitulo de la humedad , en
que excede la muger al hombre , infiere en fu aptitud inte-
lectiva algún detrimento. De efía aldaba fe afcn comun-
mente los que quieren comprobar con alguna razón phyíica
la inferioridad de el difcurfo femíneo. Y parece proba-,
ble la razón : porque el excefsivo h u m o r , ó por si mif-
mo , ó por los vapores que exhala , es apto á retardar
el curfo de los efpiritus animales, ocupando en parte los."
cftrechos conductos , por donde fluyen eftos tenuifsimos
cuerpos. • •
pi Con todo j efte argumento evidentemente es fa-j
láz:
DISCURSO XVL '349F
Ih.': pues fi no lo fuera Y-probarla , no qué las mugeres
tienen efpiritu menos penetrante , y p r o f u n d o f i n o que
fon de difcurfo: mas tardo , y detenido ; lo qual es fal-
f o , pues en promptitud muchos hombres les conceden ven-j
taja. .'
. 92 Mas. Muchoshombres agudifsimos, promptos,y
profundos abundan de fluxiones catarrales habituales , las
quales provienen de muchas humedades excrementicias,
recogidas cerca de las meninges , y dentro de la mifma
fubftancia de el celebro, como fe puede ver en Riberio
en el capitulo de Catarrho. Luego no eftorva la excefsiva
humedad de el celebro el vfo prompto , ó recio de el dif-
cu-rfo. Y fino le eftorva la humedad excrementicia,menos,
podrá la natural.
91 Y para que no eftorve la natural fe añade , que, 1

en doctrina de P l i n i o , el celebro de el hombre es mas hu-;-


medo , que el de todos los demás vivientes : Sed homo
pgrtione máximum , & humidifsimum. (lib. n . cap. 3 7 . )
Y no es creíble , que la naturaleza ponga en el órgano,
que firve al mas perfecto conocimiento , Vn temperamento
capaz de hazer perezofo , ó defetfuofo el difeurfo. Si fe
me dixere , que , con toda efía humedad nativa ,. en que el
celebro de el hombre excede al de el bruto , queda en la
temperie proporcionada para el mejor vfo de la rázon , y
que el de la muger excede : Refpondo , epae fupuefto que
la humedad por fu naturaleza no eftorva , nadie Libe en
qué proporción •, 6 cantidad debe fer húmedo el celebro,
para executar las funciones á que eftá deílinado effe órga-
n o : y por conüguiente voluntariamente fe dirá , que eftá
con mas proporción en los hombres, que en las mugeres , 6
en las mugeres, que en los hombres.
94. Opondráfe no obftante contra la humedad el fen-
tir de muchos , que afirman , que los Paifes húmedos , y
nebjlofos, producen efpiritus grofferos ; y al contrario en
los efelarecidos , deípejados , y enjutos , nacen ingenios
felices. Pero fean muchos , ó pocos ¡os que dicen eÜo,lo;
dicen fin mas fundamento , - que aver aprehendido las nie-;
blasde el- Or¡rogte.¿- trasladadas, 3. la esfera de el celebro^
co-
^jo DEFENSA DE LAS MUGERES,
corno fi ctilos Paifcs liuvioíós la opacidad de la "Atmof-
phera fue»ié fombra, que ohfturecieiie la Alma , ó en los
que gozan Cielo íereno el mayor reipiandor de el dia, dief-
fe mayor claridad á la razón. Con mas verifimilitud fe di-
xera , que en las Regiones mas defpejadas , y efelarecidas,.
íiendo mas vifibles los objetos, diftraen mas el Alma por las
ventanas de ios o j o s , y aísi ladexan menos apta para es-
peculaciones , y difeuríos : pues por efta razón vernos , que
en la obícurid-¡d de la noche fe interrumpe menos el hilo de
eidiieurío, y fe tiran con mas firme fequela las ilaciones,
que en ia clandad de el dia.
95 Los que tienen las Regiones húmedas por ineptas
para producir hombres fútiles , pongan los ojos en los
Oiandcíes , y Venecianos , que fon de los mas hábiles Eu-
ropeos; fiendo afsi , que los primeros viven fitiados de la-
gunas; y los fegundos robaron parte de fu imperio á los
p.eces, Aun .acá en El paña tenernos el exemplo de los Añu-
r i a n o s , que fin embargo de habitar vna Provincia la mas aco-
fada de nieblas , y lluvias , que ay en toda. íaPeninfula, fon
generalmente reputados por f a tiles, dcí'pit.rtos , y ágiles.
Pero qué ay que admirar i Harto mas húmeda Región ha-
bitan ios Delfines, que eftán fiempre metidos en las ondas : y
fin embargo, no produxo ¡a naturaleza brutos de tan noble
iiiñinco , ni que tanto fe acerquen , yá por amor , ya por
imitación de eoftumures , al hombre: p u e s , como fe pue-
de ver en Conrado Gefnero, cuidan con efpecial aplicación
de fus padres ancianos , fe han vino guiar á los hombres en
la navegación ,.y ayudarlos en ia pefea : y aun fe ha obfer-
vado sucre .ellos la atención con los muertos, retirando los
cadáveres de fu efpecie , en el riefgo de fer devorados por
otras beftias marinas.
p5 Por el contrario las aves que gran parte de ei
tiempo gozan deayre mas fútil , y defpejadode vapores , yá
difeurriendo por los vientos , yá colocándole en las altu-
ras de los montes, deberían fer mas fagazes, que ios brutos
terreares ; lo qual no es afsi.
97 Por ia mifma razón deberían fer los Egypcios
Ips hombres mas agudos de el Mundo , pues gozan eiCie-.
lo
DISCURSO XVI. 371
lo mas defpejado, que ay en. todo el Orbe. Apenas cubre
vna nube á Egypto en todo el a ñ o ; y fuera totalmente
infecundo fu fuelo , fi no le regara el Nilo. Y íi bien que
la Antigüedad venero á aquella Región en algunos Siglos,
por la gran Maeftra de las Ciencias , como fe reconoce en
las peregrinaciones , que hizieron á ella Pithagoras , Ho-i
mero , Platón , y otros Philofofos Griegos , para adelan-;
tarfe enlaPhiloíofía , y Mathematicas , efto no prueba que
fean mas fútiles que los demás mortales , fi no que las cien-;
cias han andado peregrinas por la tierra, y vnos Sigloshi-;
zieron afsiento en vna R e g i ó n , otros en otra. Por otra
parte la íingular extravagancia de los antiguos Egypcios
en materia de R e l i g i ó n , los acredita de muy corta luz la-;
teleétual. L o mifmo podemos decir de el Valle de Lima cu- s

yo Cielo es tan defpejado, que fe ignora qué cofa es llu-


via en aquella tierra , debiendofe toda la fertilidad de el!;?-
á vn ligero rocío, á-que fe añade vna temperie hermofa entre
frió , y calor-, (in que por elfo los Naturales fean de inge?
ni o muy delicado ; antes bien los Pizarros, que los con-
qiriftaron , los hallaron mas fáciles á fer forprendidos de
fus d o l o s , que Cortés á los Mexicanos á fer conquiítaci¿z
de fus armas.
98, N o ignoro que los habitadores de la Beocia eran
tenidos antiguamente por tan rudos, que pafsó á proverbio
Beeoticum ing*nium , y Baotica fus , para tratar á vn hom-
bre de eftupido , y que ello fe atribuya al ambiente grof-
fero y vaporofo , que domina aquella Provincia : por lo
3

que dixo. Horacio en vna Epiltola:-2?¿o/ ttw in craffo iurares


f

aérenatum. Empero creo con algún fundamento, que los


Antiguos, que fe citan , hizieron poca merced á aquel Vzh T

tonvindo la ignorancia originada de la f.dta de aplicación,


por incapacidad ; á lo que pudo concurrir también fer la
Beocia contermina de la Attica , donde florecían las le-
tras : que á vifta de vna Provincia, que es theatrodela
Sabiduría, parece la vecina Colonia de la rudeza. Por otra
parte es cierto, que la Beocia produxo algunos Ingenios
de fuperior orden , como Pindaro , Principe de los Poetas
Lyricos, y ei gran P l u t a r c o , que en fentir de Bacón .de
351 DEFENSA D E LAS MUGERES,
(Verulamio , no tuvo hombre mayor la Antigüedad. Y a M
fofpecho , que , retrocediendo á antigüedad mas retirada,
huvo tiempo en que los Beodos fuperaron á todos fus ve-
c i n o s , y á todo el refto délos Europeos en la cultura de
Ciencias, y Artes : porque Cadmo-, que viniendo de ia
Phenicia, fué el primero que introduxo las letras de eí
'Alphabeto en Grecia , fiendo en Europa el primer Autor
de la Efcritura , y de la Hiíloria , hizo fu afsiento en 1$
B e o d a , donde fundo la Ciudad de Thebas. A que fe aña-:
d e , que en la B e o d a eftá el Monte Helicón dedicado $
las Mufas, que de él fe nombraron Heliconides; y de efte
Monte defeiende la famofa fuente Aganippe , confagrada
¿ las mifmas fingidas Deidades , cuya agua fe creía fer eí
vino de ¡os Poetas , como que faeandolos de si por medio
de el rapto , les encendía en furiofos enthufiafmos el cele-;
b r o . Todas ellas ficciones parece que no pudieron tener
otro origen, que aver en algún tiempo florecido la poefia
fcn aquella Región.
99 Pero dado el cafo , que los Beocios fcan por fu
lYaturaleza rudos , como fe probará que efto depende
de la humedad de el P a í s , y no de otras caufas ocultas? Ef-\
peclalmente quando vemos otros Paifcs húmedos , que no
incurren efla nota. Defagraviefe , pues , la humedad de el
falfo'teftimonio que le han levantado de eftár reñida con
ia agudeza: y quede aífentado, que por elle capitulo no
fe puede probar, que las mugeres fean inferiores en el difcucí
ÍQL á los hombres.

§. XV.
'roo f ; L Padre Malebranche dífeurre por otro cá-:
£jj m i n o , y niega á las mugeres igual en ten-
oimiento al de los hombres , por la mayor molicie , b blan-
dura di las fibras de fu celebro. Y o verdaderamente no se
íi lo que fupone de eíía mayor blandura , es afsi, 6 no. Dos
Anathomicos he l e í d o , que no dicen palabra de eílb. Acafo
fuponiendo la mayor humedad , fe dio por inferida U
m¿yoí blandura \ y no es la confeguen^a. fixa: porque el
DISCURSO XVI. '3 53
feto es Húmedo , y no es blando. E l metal derretido eg
blando, y no es húmedo. Acafo por 'la mayor blandura,
ó docilidad de el genio de las mugeres, fe difcurrib fer cam-
bien en toda fu material compoíicion mas blandas : que
a'y hombres tan fuperficiales , que por eftas Analogías for-'
man fus ideas , y defpues por falta de reflexión fe eítiendert
hafta entre los mas perfpicaces. •
' 101 Pero fea afsi norabuena. Qué connexion tiene"
la mayor blandura de el celebro, con la imperfección de
el difcurfo ? Antes bien , fiendo ^ r eífa caufa mas dócil á
íaimprefiion de los efpiritus, > á inftrumento , u o r g a -
;

no mas apto para las operado i .mentales. Elle argumcu-,


to es mas fuerte en la doctrina de efte Autor : porque dice
en otra parte , que fiendo los vettigios , que dexan con fu
movimiento en el celebro los efpiritus animales , las lineas
con que ia facultad imaginativa forma en él las efigies d s
los objetos , quanto elfos veftigios, b imprefsiones fueren
mayores , y mas diítintas , tanto con mas valentía , y clan
ridad percibirá el entendimiento los objetos mifmos : Cttm
igitur imagin&tio conjift&i in'fola virtute, qua mens Jtbí
imagines obieSiorum effbrmare poieft, eas imprimendo , vt
ita loquar yfibris cerebri, cerlé quovejíigia fpirituum anii
malium , qua funt veluti imaginum illarum Une amentar
erunt difiincliora , & grandiora , eo fortius, & diftinflius
mens obieéla illa imaglnabitur. (lib.z. de Inequirenda Veri-i
tate,part.i. cap.i.)
103 A o r a , pues : es claro , que fiendo mas blafidoi'
el celebre, y mas flexibles fus fibras, imprimirán con mas.
facilidad, como trmbien m a y o r e s , y mas diftintos veíti-.'
gios los efpiritus. Con mas facilidad, y mayores : porque
refiíte menos la materia. Mas diftintos : porque fiendo algo
rígidas las fibras, enfuerca de el elaterio hazen algún co-i
nato por reftituirfe á fu antigua pofitura ; y afsi obfeu-i
recen algo la fenda que avian abierto los efpiritus con fa
rriovimiento : luego fiendo en el celebro de las mugeres mas
flexibles las fibras , que en el de los hombres , formarán
aquellas mayores , y mas diítintas las imágenes , y por;
Spnfiguiente percibiíán-roejor-los objetoss
' • %m<> h t?e'
3 5 4 D E F E N S A D E L A S MÜGERES"_,
IOJ N o por efib fe pknfe que concedo mas enterl-
dimiento a. las mugeres que á los hombres; folo redar-
guyo al Padre Malebranche, pretendiendo, quede fu doc-
trina fe infiere efia ventaja , contra lo que él mifrnoen otra
parte pronuncia. Pero l o q u e yo liento e s , que con elfos
difcurfos philofoficos todo fe puede probar , y nada fe prue-
ba. Cada vno phiiofoia á fu modo. "Y.fi yo efcriviera por
adulación, ó por capricho, ó por orientación de ingenio, fá-
cil me fuera,texiendo confequencias de principios admitidos,
elevar el entendimiento de las mur/eres febre el nueílro mu-
chas varas. Pero no es cífe mí^ genio , fino propalar con fin-
ceridad mi dictamen. Y afsi d i g o , que ni el Padre Male-
branche , ni otro alg-ino halla aora fupo el puntual v f o , ó
efpecifico manejo , con que firven ios órganos de la cabeza
á las facultades de el Alma. N o Libemos hafta e.ora como
el fuego quema , 6 como la nieve enfria , fiendo cofas que
fe prefentan á la v i ñ a , y al tacto ; y quiere el Padre Ma-
lebranche con los demás Cartefianos perfuadirnos, que han
regiftrado quanto paffa en el mas recóndito gavineto de el
Alma racional. Ni me parecen bien fundadas eflas" máxi-
mas , que reduciéndolo todo á mechanifmo , nos figuran
al efpiritu , eftampando materialmente las imágenes-de los
objetos en el celebro, como el burilen el cobre. N o igno-
ro las gravifsimas dificultades , que padecen las efpecies in-
tencionales Ariílotelicas. Pero lo que fa!e de aqui e s , que
ni v n o s , ni otros hazemos otra cofa, que palpar la ropa
a- la naturaleza. Todos . a n o s á ciegas , y el mas ciego dé
todos es aquel que pienfa, que vé las cofas con toda cla-
ridad : corno fucedia a l a otra criada de Séneca ,'llamada
Harpacta, tan fatua, que careciendo de villa juzgaba que
la tenia.' Es cierto , que ellos que viven muy fatisfechos
de que penetran las cofas naturales, eftán mas expueílos á
peligrofos errores : porque el que camina con mucha con-
íranca , y poca luz , va mas arriefgado á caer ; al contrario
¿iíla mas de eífe peligro , el que conociendo que el camino
es.obfcuro, fe vá con tiento.
^ 104 Mas concediendo al Padre Malebranche , y á los
demás C a r t e f i a n o s q u e la repreíenucion de ios objetos á
' * ' la
DISCURSO XVI. 3??
la mente fe haze por medio de eflas materiales trazas, eme
con fu curfo forman en e celebro los efpirkus ; lo que' fe
ligue es , queíiendoel de las mugeres mas blando , por la
docilidad de la materia fean los diiieños mayores. Y de aquí
qué fe inferirá ? En la doctrina de el Padre Malebranche fe.
infiere vno , y o t r o , que las mugeres entienden mejor que
los hombres , y que no entienden también. Lo*primero fe
Infiere por el lugar , que citamos arriba ; y lo fegundo,
porque quando fe explica contra las mugeres , quiere que
las imaginaciones vivifsimas , que refukan de ellas imáge-
nes mayores , fe opongan á la recta inteligencia de los
objetos : Cum enim teñidora obieBa ingentes in deücatis
eerebri fibris excitent motas, in mente pretinas etiam exci-
tart fenfatior.es ¿ta vividas , vt ijs tota ocapetur. ( ¡ib. z,
part.2.,cap,i.)
105 Pero efto fegundo es contra toda razón : perqué
las imagen:..*' mayores no quitan que fe repreienten bien los
objetos, aun quando ellos fean menudos ; antes conducen;
por lo qual fe vén mejor por medio de el micrófeopio los
átomos. Y la viveza de la imaginación , no íiendo tanta
que llegue á locura , contribuye macho para vna perfpicáz.
inteligencia.
io5 Mas en realidad , de. cífa mayor blandura de el
celebro, no fe ligue ni v n o , ni otro : ni que el entendi-
miento de las mugeres fea mavor , ni que fea menor : por-
que no fe infiere de ella , que las eíbimpas que imprimen
los efpiritus fean mayores ( que es de donde fe avia de de-;
(lucir io v n o , b lo otro.) L a razón e s : porque puede fer
el impulfo de los efpiritus proporcionado á la docilidad
de la materia , y afsi no hazer mayor imprefsion , que
aquella que hizieran efpiritus mas impetuofos en celebro
mas fuerte : de ei mifmo m o d o , que templando la fueres
de la mano pueden abrirfe con el buril en la cera lineas tan
fuperficiales , como aquellas que vfando de mayor impul-
fo fe feñalan en el plomo. L o que yo creo es , que de to-
do efte fyífema de el celebro de las mugeres , lo que pue-
de feguirfe es , que los movimientos corpóreos fean en
ellas menos v i g o r ó l o s , que en los hombres ; por quanto
Yy 2 ' los;
356* DEFENSA DE LAS MUGERES,
los nervios, que tienen fu origen en las fibras de el celé.?
b r o , y en la medula efpinal, es configuiente , que feati
ihenos fuertes , ó movidos con mas débiles impulfos ; pe-J.
ro no que fus operaciones mentales fean mas , ó menos
perfectas.

§. XVI.
107 ' X / ' A es tiempo de falir de las afperezas de I j
X phyfica á las amenidades de la Hiíloria-, y
perfuadír con exemplos , que no es menos hábil el entendí-
miento de las mugeres , que el de los hombres, aun para
las ciencias mas difíciles : medio el mejor para convencer
al V u l g o , que por lo común fe mueve mas por exemplos,
que por razones. Referir todos los que ocurren , feria muy
faftidiofo : y afsi folo feñalarémos algunas de las mugeres
mis iluftres en doctrina de eftos vltimos Siglos, que flore-,
cieron ya en nueítra Efpaña, ya en los Reynos vecinos.
108 Efpaña á quien los Eflrangeros cercenan mucho
el honor de la literatura , produxo muchas mugeres infignes
en todo genero de letras. Las principales fon las que fe li-
guen.
109 Doña Ana de Cervaton, Dama de Honor de la
Reyna Germana de Fox , feguhda efpofa de Don Fernando
el Catholico , fué celebradifsima aun mas por fus bellas le-
tras , y preciofos talentos, que por fu peregrina hermofu-
r a , fiendo efta tanta, que era tenida por la muger mas bella
déla Corte. En Lucio Marineo Siculo fe hallan las Cartas
Latinas , que eíte Autor efcrivió á dicha Señora , y las refr
pueílas de ella en el mifmo Idioma.
11 o Doña Ifabél de Joya , en el Siglo decimofex-
t o , fué doct-ifsíma. Se quenta de elia, que predico en la Igle-
íia de Barcelona , con pafmo de el inumerabie concurfo
que la efcuchó ( fupongo que el Prelado que fe lo permi-
tió , hizo juicio , de que la regla de el Apoftol que en la
Epiftola primera á los Corinthios prohibe á las mugeres
hablar en la Iglefia, admite algunas excepciones : como las
gdmite la prohibición,de queenfeñefí, en la Epiüola pri-
me-:
Discurso XVÍ. 357
¡mera á Thimoteo : pues de hecho P r i f c i l a , compañera dé
5I mifmo Apoftol, enfeñó , é inítruyó á Apolo P o n t i c o , ert
la Doctrina Evangélica : como confta de los actos de l o s
Apollóles) Y que defpues paitando á Roma en el Pontifica-
do de Paulo I I I . delante de los Cardenales , con fuma fa--
tisfaccion de ellos explicó muchos puntos difíciles de los
libros de el Sutil Efcoto. Pero lo que mas la ennoblece, es
aver convertido en aquella Capital de el Orbe gran numero
de Judios á la ReligiónCatholic*.
111 Luifa Sigea , natural de Toledo, y originaria
de Francia, fobre fer erudita en la Philofofia, y buenas le-
tras , fué ungular en el ornamento de las lenguas : porque
fupo la Latina , la G r i e g a , la Hebrea , la Arábiga , y la Sy-
riaca: y en ellas cinco lenguas fe dice, que efcrivió vna carta
al Papa Paulo I I I . fiendo defpues íu padre Diego Sigeo
llamado á la Corte de Lisboa para Preceptor de Theodofio
de P o r t u g a l , Duque de Berganca , la Infanta Doña Maria
de Portugal,hija de el R e y Don Manuel, y de fu tercera
efpofa Doña Leonor de Auftria, que era muy amante de
las letras , quifo tener en fu compañía á la fabia Sigea. Ca*.
so ella Señora con Francifco de Cuevas , Señor de Villana-
fur, Cavallero de Burgos , y tiene en Caftilla ( fegun re-
fiere Don Luis de Salazar, en fu Hiftoria de la Cafa Earne-
fia ) mucha, y muy clara fuccefsion.
H2 Doña Oliva Sabuco de Nances , natural de Alca-
ráz , fué de fublime penetración , y elevado numen en mate-
rias Phyficas, Medicas, Morales , y Políticas , como fe
conoce en fus efcritos. Pero lo que m a s í a iluftró , fué fu
nuevofyfiema Phyfiologico, y M e d i c o , donde contra t o -
dos los Antiguos, eilabieció , que no es la fangre la que
nutre nueftn>s cuerpos, fino el jugo blanco derramado de el
celebro por todos los nervios , y atribuyó á los vicios de
elle vital recio cafi todas las enfermedades. A elle fyfiema,
que defitendió la incuriofidad de Efpaña,abrazó con amor la
curiofidad de Inglaterra, y aora yá lo recibimos de mano de
los Eílrangeros, como invención luya, fiendolo nueílra. Fatal
genio de los Efpañoles ! Que para que les agrade lo que na-
je en fu tierra, es menefter que fe lo manipulen, y vendar*
lo§
3^8 DEFENSA D E LAS MUGERES,
ios Eftr.vngeros. Tamb ién parece que efta gran nniger fue
delante de Renato Defcartes , en la opinión de conftituiret.
celebro porvnico domicilio de el Auna racional, aunque
eíiendicndola á toda fu íub ftancia , y no t-ftrcchañdola pre-
cifamente á la glándula pineal , como Defcartes. La con-
fiarle a суде tuvo Doña Oliva en el proprio ingenio para de-
fender fus ungulares opiniones, fue t a l , que en'la Carca
Dedicatoúa , eferita al Conde de Barajas , Préndente de
Caíiilla , te fuplicó emp« eafle fu autoridad para juntar los
mas fab ios Phyficos, y Médicos de Efpaña, ofreciéndole
ella a convencerlos deque la Phyfica , y Medicina, que
ib en leñaba n las Efcuelas , toda ib a errada. Floreció ец
tiempo de Pheiipe I I .
i t3 Doña Bernarda Ferreyra , Señora Portuguefa, -

hija de Don Ignacio Ferreyra , Cavallero de el Ab ito de


Santiago , fob re entender , y hab lar con facilidad varias
L e n g u a s , fupo la Poeíia , la Retorica , la Philofofia, y
las Mathematicas. D e x ó varios eferiros poéticos. Y nuef-
tro famofo Lope de V e g a , hizo tanto aprecio de el extraor-
dinario mérito de efta Señora , que le dedicó fu Elegia , inti-
tulada la Pbylis.
i x4 Doña Juliana Mor ella , natural de Barcelona,-
fué vn portento de fab iduria. Aviendo fu padre cometido
vn homicidio , huyó llevándola configo á León de Fran-.
cia , donde eftudiando ella rara niña , hizo tan rápidos pro-
greífos , que á la edad de doce años (y fué el de 1 6 0 7 . )
defendió Conclufiones pub licas en Philofofia, que dedicó
á Doña Margarita de Auftria , Reyna de Efpaña. A la edad
de 1 7 . años , fegun la relación de Guido Patin , que vivió
en aquel tiempo , entrab a á difputar pub licamente en el
Colegio de los Jefuitas de León. Supo Philofofia, Theolo-
g i a , M u f i c a , y jurisprudencia. Dicefe que hablaba catorce
lenguas. Entrófe Religiofa Dominica en el Convento de San?
ta P raxedb de Aviñón.
ну L a céleb re Monja de México Sor Juana Inés de
la Cruz, es conocida de todos por fus eruditas , y agudas
poefias: y afsi es efeufado hazer fu elogio. Solo diré , que
lo menos que tuyo fué el talento parala рос fia , aunque es,
т . . I • • — • - ----- - ----- J
DISCURSO XVI. 259
el que mas fe celebra. Son muchos los Poetas Efpañoles,-
que la hazen grandes ventajas en el numen; pero ninguno
acafo la igualó en la vniverfalidad de noticias de todas fa-
cultades. T u v o naturalidad ; pero faltóle energía. L a c r i -
íis de el Sermón de el Padre Vieyra acredita fu agudeza;;
pero haziendo jufticia es mucho menor , que la de aquel
incomparable jefuita á quien impugna. Y que mucho que
fucile vna muger inferior á aquel hombre , á quien en
penfar con elevación, difcurrir con agudeza, y explicarfe con
claridad, no igualó haftaaora Predicador alguno?
Ii5 ÜJ también ociofo el Panegyrico de la Señora
Duque/a de Aveyro, difunra, porque citan bien recientes
fus noticias en la C o r t e , y en toda Efpaña.

§. XVII.
r
H7 J . A S Francefas fabías fon muchifsimas : porque
tJ tienen mas oportunidad en Francia , y creo
que también mas libertad para eftudiar las mugeres. R e d u -
ciremos fu numero á las mas famofas?
118 Sufana de Habert, muger de Carlos de el j a r -
dín , Oficial de el Rey Enrico III. fupo Philofofia , y t

Theologia , fué muy verfada en las doctrinas de los Santos


Pjclres. Aprendió las lenguas Efpañola, Italiana, L.udna,
G i i e g a , y HeLxea, Pero para fu verdadera g l o r i a , contri-
buyó mas fu piedad Chriltiana , en que fué extremada , que
fu baila fabiduria. •
119 Mafia de Gurnay, Pariíienfe, de iluftre Fami-
lia, á quien el fabio Dominico Baudio dio el nombre de
Sirena Francefa, alcancó tan gloriofa fama de ingenio, y
literatura , que apenas huvo hombre grande en fu tiempo,
que no fe hiziefie mucho honor de tener comercio epiilolar
coneila : y al si fe hallaron en fu gavineto, quando murió,
cartas de los Cardenales Richelicu , Bentivollo , y Perrón,
de San Francifco de Sales , y otros esclarecidos Prelados,
de Garios Primero Duque de Mantua , de el Conde de
A ! é s , de Ericio Puteano, Juíto-Lypfio , Monf. Baízac¿
Mayrurdo , Keinfio , Cefar Capacio , Carlos Pinto , y (

otros
%6ó DEFENSA: D E LAS MÜGÉRÉS,
«tros muchos de erudiccion fobrefaliente en aquella
gdad.
izo Madalena Seuderi, llamada con mucha razón l j
"Sapbo de fu Siglo , pues igualo á aquella celebradifsima
jGriega en el primor de las compoíiciones, y la excedió mu-
cho en la pureza de coílumbres , fué gande en la doctrina;
pero incomparable en la difcrecion , como teftifican fus mu-
chas , y excelenrifsimas obras. Su Artamenes, ó Gran Ciro^
y la Clelia , que debaxo de el velo de Novelas efconden mun
cho de verdaderas KiMonas , á manera de el Argenis de
Barclayo , fon piezas de fumo v a l o r , y que en mi fentir
exceden á quanto fe ha efcrico en efte genero , afsi en Fran-,
cia , como en las demás Naciones , á la referva fola de el
Argenis : porque la nobleza de los penfamientos , el harmo-
nioio texido de la narración, la pathetica eficacia de la per-;
fuafiva , 1 a viveza de las defcripciones , y la nativa pureza^
m a g e í l a d / y valentía de el eíKIo , hazen vn todo admira-
ble : á que fe añade para mayor realce, el manejar con to-
da la decencia pofsibie los empeños amatorios , reprefentar
con la hermofura mas atractiva las virtudes morales , y con
el mas brillante refplandor las heroycas. En atención á las
prodigiofas prendas de ella muger , la vino á bufcar el Ungu-
lar honor de recibirla por Aífociada todas las Academias^
doncl: fe admitían perfonas de fu fexo. En la Academia
Francefa llevó el precio feñalado á las piezas de eloquen-
cia el año de 1 5 7 1 , que fué lo mifimo que declararla aquel
ftobilifsimo cuerpo por la perfona mas eloquente de la FraiM
cia. El Rey Chrltianifsimo Luis X I V . á cuya compreheru
í&on ningún mérito elevado fe efcondia, le feñaíó vna pen-:
fion de docientas libras de renta. E l Cardenal Mizzariní
mucho antes le avia dexado en fu teftamento otra. Y otra
tenia por la liberalidad de el fabio Canciller de Francia
Luis de Boucherat. Con que terminó llena de gloria vna;
vida muy regular, y muy dilatada el año de 1 7 0 1 .
t2i Antonieta de la Guardia, noble Francefa , her-?
mofa de apueíla en c u e P ° > y alma : pues por ella fe dixo^
r

que la naturaleza avia tenido el guftazo de juntar todas las:


gracias de el efpkitu, % 4? ?| cuerpo en vna muger; fu«
DISCURSO XVI. ¿¿T
Can eminente en la poefia , que. en vn tiempo , en que eñe
Arte era muy cultivado , y cftimado en Francia , no huvo
en todo aquel dilatado Reyno hombre alguno , que le pu-
lí ¿fié el pie delante. Sus obras fe recogieron en ños v o l ú -
menes , que no he vino. Murió el año de 169^. dexando
yna hija heredera de fu ingenio , y numen , que ganó el'prej
ció de la poefia en la Academia Francefa.
122 L a Señora Marta Maáalena Gabriela de Monte-
mart, hija de el Duque de Montemart , y Religión?. Be-;
nedictina , nació con todas las difpoficioncs neceífarias pa-:
ra las ciencias mas difíciles, y abftractas, como dotada d i
feliz memoria , fútil ingenio , y recto juicio. En fu pri-;
mera edad aprehendió las lenguas Efpañola, Italiana,Latina¿
y Griega. Siendo á los quince años prefentada á la R e y na
de Francia Maria Thereíade Auftria , inmediatamente á fu
entrada en aquel Reyno , hizo admirarle toda la Corte,
.oyéndola hablar la lengua Efpañola conpropriedad , y ele-
gancia. A ¡caneó quanto hafta oy fe fabe de la antigua , y
nueva Philofoíia. Fué confumada en'as Theologias Eíco-:
kft'c:- Dogmática, Expoñtíva, y Myftica. Hizo algunas
¿.ad....ciones , entre las quales es recomendadifsima la de;
l o : primeros libros d é l a Yliada , y eferivió fobré diferen-;
tes materias, ya de M o r a l , ya de Critica , ya de aflump-
tos Académico í. Sus cartas fueron eftimadifsimas , y el
gran Luis. X I V . las recibía con gran placer. C o m p o n u
primorofos verfos ; pero p o c o s , y elfos defpues de vna
.íimple lectura los condenaba al fuego: facrííicio que h i z o ,
fu humildad de otras muchas obras fuyas, y hiziera de
todas, ñ obraífefolo por el propriodictamen. Su piedad,
y talento para el govierno refplandecieron en igual gra--
d o , que fu doctrina. En coníideracion de tantas , y tan
altas qualidades , fué elegida Abadefa General de la Con-:
gregacion Fontevraldenfe , Orden de San Benito , que tic*:
ne la particularidad de que fiendo compuefta de gran nun
mero de Monafterios de v n o , y otro fexo , repartidos en
quatro Provincias , todos reconocen por vniverfal Prelada
fuya á la Abadefa de Fuentevraldo , Monafterio iñfign;,
£ no menor theatro de nobleza, que de virtud , pues eñen-
z'ói DEFENSA D E LAS MUGERES,
ta entre fus Prelacias catorce Princefas , y en cuas cinco
de la Cafa Real de Borfv.n. Aun Juera de Francia fe cílcu-
dió vil tiempo la jurisdicción de laAbadefa de Fucntevral-
do , fiendo cierto , como aíícgura el Chronifta Yepes , que
los dos Religiofifsimos Conventos de Monjas Santa María
d é l a Vega de Oviedo , fito en el Principado de Afturias, 1

y Santa María de la V e g a de la Serrana , en tierra de Cam-


pos , eftuvieronfujetos á la Prelada de Fuentevraldo , ru-
tes que fe vnieííen á la Congregación de San Benito de
¡Valladolid. Llenó tan alto empleo la Señora Montemart,;
con tanta fatisfaccion de todo el Mundo -.como edificación,
y acrecentamiento de fu Congregación mandando dignifsi-
mamente á los hombres vna muger ,.que en el conjunto de
prendas ,.fi no fué fuperíor á todos los hombres de fu tiem-
p o , por lo menos en el concepto de los que la trata-
ron ninguno fué fuperíor a ella ; y murió llena de méritos
e l año de 1704.
1 zj Ana Le-Fevre, conocida comunmente debaxo dá
el nombre de Madama Dacier, fiendo hija de vn padre doc-
tifsinio Tanaquildo Le-Fevre , falió igual á fu padre en
trudiccion, y mayor que él en laeloquencia, y en el pri-
mor de eferivir con delicadeza y hermofura el proprio
y

idioma. Fué Critica de primer orden, de m o d o , que en ella


facultad, por lo menos en quanto a Autoras profanos, no
Jauvo hombre en fu tiempo, ni en la F r a n c i a , ni fuera de
ella , que la excedieífe. Hizo muchas traducciones de Au-
tores Griegos , que iluftró con diferentes Comentarios.. Su
pafsion por Homero la empeñó en varias diífertaciones,
donde refplandecieron igualmente la viveza de fu ingenio,
y la rectitud de fu juicio , manteniendo la preferencia de el
Poeta Griego , fobre Virgilio , contra algunos Critico?,
«que la impugnaron T efpecialrnente contra Monf. de la
M o t a , d e la AcademiaFranccfa : ,y íi bien , que algunos
Partidarios de el Poeta Latino fe pulieron de parte de
Monf. de la M o t a , no pueden negar , que el voto de elle
era de corto pefo por ignorar el idioma Griego , en que ef-
crivió H o m e r o , y quefabia con perfección fu docta Coo-
Í>ofi_tora_, ]T por lo que mira á lajuftkia d é l a caufa,haze;
DISCURSO XVI. '36*3
gfafi tuerca el que á Virgilio folo algunos Autores Latí-;
nos , pero ninguno G r i e g o , le conceden ventaja , 6 igual-
dad con Homero ; al paííb, que eñe tiene á fu favor todos
los Griegos , y muchos Latinos : entre quienes fobrefale
el difcretifsimo Hiñoriador Veleyo Paterculo , dándole el
alto elogio de que ni tuvo á quien imitar, ni le fucedíó
alguno que pudíefíe imitarle á él. Murió Ana Le-Feyre pieñ-r
[o que ha t r e s , ó quatro años,

§. XVIII.
T24 TTALIA no cede á Francia en copla 'de mugereá
J _ eruditas; pero por la mifma razón , que ce-
ñimos á breve numero las Francefas , haremos lo proprio
con las Italianas.
125 Dorothea Bucea , natural de Bolonia, aviendó
fido deftinada defde fu infancia á las letras, fe adelantó
con paños tan agigantados en ellas , que fe practicó con
ella la ( haña entonces ) nunca viña fingularidad de darle
aquella famofa Univerfidad el bonete de D o c t o r a , donde
fué mucho tiempo Cathedratica. Floreció en el Siglo deci-¡
tnoquinto.
izó Tfotta Nogarola , natural de Verona , fué el
Oráculo de fu Siglo : porque fobre fer muy docta en Philo-i
foíia, y T h e o l o g i a , fe le añadió el ornamento de varias
lenguas, gran lectura de los Padres , y en la eloquencia fe
aífegura, que no fué inferior á los mayores Oradores de;
aquella edad. Las pruebas de fu facundia no fueron vulgar
res : pues oró varias vezes delante de los Papas Nicolao V¿
y Pió I I . y en el Concilio de Mantua , que convocó eñe
Pontífice á fin de vnir todos los Principes Chriftianos contraí
el Turco. Aquel iluftre Protector de las letras el Cardenal
Beñarion , aviendo vino algunas obras de Y f o t t a , quedóí
tan prendado de fu¡ efpiritu, que hizo viage de Roma á¡
Verona , folo por verla. Murió eíla Señora á los treinta y¡
ocho años de fu edad en el de 145*5.
127 Laura Cereti, natural de Brefcia, defde la edad
¿ $ f e X ocho, añosenfeñó publicamente PhiloforTa¿
gó'íi DEFENSA D E LAS MUGERES;
con general aplaufo , á los principios de el Siglo decimos
Texto.
128 C afanara Fidele , V e n e c i a n a , fué tan celebra-}
da en la inteligencia de la lengua Griega , en la Philofofia,'
en la Theologia , y en la Hiftoria, que apenas huvo Prin-:
cipe iiuftre en aquella edad , que noledieífe teftimcnio pu-
blico de. fu eftimacion, y fe cuentan entre los veneradores
de Cafandralos Papas Julio I I , y León X . el Rey Luis X I ;
de Francia , y nueftros Catholicos Reyes Don Fernando, 1

y Doña Ifabél. Efcrivió diverfas obras , y murió de ciento y


dos años en el de 1 5 6 7 .
izo Catbalina de Gibo, Duquefa de Camerino efí
la Marca de Ancona , fupo la lengua Latina , la Griega , y
la H e b r e a , Philofofia, y Theologia. Su virtud ció unen
vo explendor á fu doctrina. Edificó el primer Conven-;
to , que tuvieron los Capuchinos. Y murió el año de

130 Martha Mar china , Napolitana , de baxo naci-


miento , pero de genio tan elevado , que fu.perando los ef-
íorvos de fu humilde fortuna , aprehendió con fuma ve-
locidad las lenguas Latina Griega , y H e b r e a , y fué no
vulgar poetifa. T a n excelfas prendas no fueron poderofas
á levantarla de aquella esfera en que avia nacido , contraf-
tandolas con malignos influxos fu adverfi* eftrella : pues fe
fabe , que trasladada á Roma fe fuRentó á s i , y á fu fami-
lia haziendo jabones. Pero es de creer, que vn efpintu de
elle carácter , á tener la oportunidad para e'rudiar , que
tuvieron otras mugeres, fuera prodigio^ entre ¡as mugeres,
y aun entre los hombres. Murió de quarenta y ílis años en
el de KÍ46". "

131 Lucrecia Elena Cornara , de la iluílrifsima fami-


lia de los Gomaros de Venecia , fi en la ferie de eíla me-
•rrioria es la vitinia de las fabias Italianas , por fer la mas-
1

moderna, podemos decir, que en dignidad es la primera, fin


fer injulios contra alguna. Nació ella muger, psra honor de
fu fexo, el año de 16¿^6. Defde fu tierna infancia deciarp
«Vna violenta inclinación á las letras , á quien cqrréfpon-
jdj,erpa.,portc>i tpÍQS •y -'í-apidps..prc>grelT0S; porque no folo
l ? í

«v . .. ' fe
DISCURSO XVT.
fe ínftruyó con facilidad rara en las lenguas L a t i n a , Griega;
y Hebrea, mas aprehendió también cafi todas las lenguas vi-;
ivas de la Europa. En Philofofia , Mathematicas , y Sagrada
^Iheologia, fe diftinguib con tantas ventajas, que la Uni-;
verfidad de Padua refolvib darla el Grado de el Do¿tora4
d o , en la facultad de Theologia : lo que fe huviera ejecu-
tado , á no intervenir la opoficion de el Cardenal Barban-:
g o , Obifpo de la Ciudad, que eferupulizó en la materia,'
en atención á la máxima de San P a b l o , que niega á las;
mugeres el minifterio de enfeñar en la Iglefía ; y a f s i , pará ;

no violar efta Regla Canónica, ni faltar á la eñimacion de-


bida al relevante mérito de Elena, fe tomo el temperamen-:
to de confucuirla Doctora en la facultad Philofofica , avien-
do acudido á hazer masplaufible el acto muchos Principes,'
y-I'rincefas de varias partes de Italia. Aviendo fido tari
eminente fu ciencia , folo pudofer excedida, y lo fué, de
fu rara piedad. A la edad de doze años hizo voto de virgini-
dad. Y' avrvqac defpues vn Principe Alemán, felicitando
Con ardor la msno de Elena , le ofreció cpnfeguir de fu
¡Santidad dlfpeníádon en el v o t o , aun afsiftido de los rué-,
gos de fus parienres no pudo rendir fu conítancia. Para cor-
.tar de vn golpe la? efpcrancas de otros muchos pretendien-
tes importunos, quiic entrarfe. Rdigiofa' Benedictina ; pero
.eftorbada por fu padre, hizo lo que pudo , que fué revali-
dar la prorneíía de virginidad, añadiendo los otros v o t o s
R e i i g i o f o s , en qualidad de oblata de la Religión de San
Benito , en nv.nos ele el Abad de el Monaíterio de San j o r -
ge. A efte lacririció de fu libertad fe íiguió vna vida tan
exemplar dentro de la cafa paterna ,»que pudiera fer embi-
diada de ia mas auftcra Religiofa. Era tanto fu amor al re-
cogimiento , y tanto fu pudor de parecer en p u b l i c o , que
aunque, vindiendofe ni precepto ele fu padre , fe dexaba v e r
.ai ganas vezes ,era con tanta pena, que folla decir, que aque-
lla obediencia le avia de coftar la vida. En efecto eíta fue
bien c o r t a , pues paf .o á otra mejor á los treinta y echo
r

años de edad , con igual regocijo de los Andeles , que lian-:


to de los hombres, d<:x.isdo n v i - r h . ' * nbrat, :\s .: podrán ha-
!

¿.er eterna fu fama. Son mucho; lo¿ A : « ; i , - ' , • hi.deron el


$66 DEFENSA D S LAS MUGERES,
Panegyrico de ella rara muger. Entre quienes Gregorio Lè'-i
ti en fus Raguallos H'.fiorkos le dà los Epitectos de Heroyna
de las Letras, y de Monftruo de las Ciencias, llamándola juna
jámente Ángel en la herma fur a y en el candor.
t

§. XIX.
1^2 | Á Alemania,en cuyo elado fuelo tiene mas v¡s¡
gor Apolo para influir en los efpiritus, que;
para derretir los carámbanos , nos prefenta también vna.
Centella de el Sol en vna muger de fu P a i s .
133 Efta fueiafamofa Ana Mar i a Schurmdn , glo->
ria de v n a , y otra Germania, fuperior, e inferior : por-i
que aunque nació en Colonia, fus padres , y abuelos fueron*
de los Paífes Baxos. N 0 fe conoció hafta aora capacidad
mas vniverfal, en vno, ni en otro fexo. Todas las Ciencias,!
y todas las Artes reconocieron con igual obediencia el im-i
perio de fu efpiritu , fin que alguna hiziefle la menor refiften-;
cia , quando efta Heroyna fe empeñaba en fu conquifta^
A los feis años de edad cortaba con tixeras en p a p e l , fin pa-i
tron alguno, preciofas, y delicadas figuras. A los ocho , en¡
pocos dias aprehendió á hazer dibujos de flores , que fuer
tron eftimados. A los d i e z , no le coftb mas que tres horas de;
trabajo , el faber bordar con primor. Pero fus talentos, pa-:
ra exercicios mas altos eftaban entre tanto efcondidos , hafla
que á los doze años fe defcubrieron con efta ocafion. Eftu-
diaban dentro de cafa vnos hermanitos fuyos : y fe notó
que varias vezes al tomarles la lección , donde les faltabí
la memoria, les apuntaba la niña, fin que huviefle precedi-
do de fu parte otro eftudio mas que el oírlos, quando efta-:
ban paffando la lección , como de paflo. Efta feña junta cotí
las demás quedaba de vna habilidad enteramente extraordi-:
naria , determinaron á fu padre á permitir que la niña fu
guieflepor la carrera delosEftudios el pendiente de fu in-:
elinacion. Pero no fué carrera, fino buelo aquel acelerado
movimiento, con que la Schurmán difcurrió por todos los
anchifsimos efpacios de la erudiccion Sagrada , y Profana?,
arribando en fin a la pofteísion de cafi todas las ciencias hu-;
DISCURSO. XVI. 367
ffiáhás, Juntamente con ia Sagrada Theología , y grande
inteligencia de la Efcritura. Supo perfectamente las lenguas
Alemana,01andefa,Inglefa,Francefa,Italiana,Latina,Griega,
Hebrea , Syriaca, Chaldea, Arábiga , y Etiopica : era dota-
da también de el numen poetico , y compufo muy diícretas
obras en verfo. En las Artes Liberales logró igual aplaufo,
que en las Ciencias, y en los idiomas. Comprehendió cien-
tíficamente la Mufica, y manejaba varios inftrumentos cotí
deftreza. Fue excelente en la pintura, en la efcultura, y en ei
Arte de gravar à cincel. Cuentafe , que aviendo hecho fu re-
trato proprio en cera al Efpejo, vnas perlas que ferviande
adorno à la imagen, falieron tan naturales, que nadie creyó
que fuellen de cera, hafta hazer la experiencia de picarlas con
,vn alfiler. Sus cartas fe hizieron eftimar, y defear, no folo
por la hermofnra de el eftilo , mas también por el primor
de la letra, que quantos la vieron juzgaron inimitable, de
modo , que qualquiera rafgo de fu pluma era bufcado co-
mo alhaja rara de gavineto. Apenas huvo hombre grande
en fu tiempo que no le dieífe teftimonios de fu eflinaacion,
y folidtafíe íu comercio literario. L a iiuftre Reyna de Po-,
Ionia Luifi Maria G o í i c a g a , en fu traníito à aquel Reyno,'
defpues de defpofada en París por Procurador con el R e y
Ladislao , fe dignó de vifitar à la Schurmàn en fu propria
cafa. Nunca quilo cafarfe , aunque folicitada de 'muchos*
eon ardor , y con ventajofos partidos , efpecialmente de
Monf, Catee , Penfionario de Olanda , y famofo Poeta,,
que avia hecho algunos verfos en elogio fuyo , quando»
A n a Marta no tenia mas de catorce años : En fin eíta mu-:
g e r , merecedora de fer inmortal , murió eíi el de i6jSi
al fetenta y vno de fu edad.

§. XX.

íes Europeos,, por concluir con vn exemplo reciente d é l a


A í i a , para prueba de que-no ella la gloria literaria de la§
mugeres encarcelada en la Europa»
Eñe
368 DEFENSA D E LAS MUGERES,
I 35 Efte ferá de ia bella , difcreta, y generofa S/tH
'Mtam , muger de ei famofo Vlagero Pedro de la Valle, Ca-
yallero Romano. Nació Maani en ia Ivleíbpocamia , porque
aquella feliz P r o v i n c i a , en cuyos términos creen algunos
Expofitores, que eftuvo plantado el Paraifo , tuvieífe la
dicha de fer Patria de dos Radíeles : pues es cierto que
Harán , donde nació la querida efpofia de Jacob , era lugai?
de la Mefopotamia. Aviendo hecho rcfplandecer defde muy
jóvenes años no menos la nobleza de fu genio , y la vive-;
za de fu entendimiento , que la hermofura de fu femblante^
ellas noticias excitaron en la curiofidad de Pedro de la Valle
el defeo de lograr fu villa , y tras de las noticias l a ; expe-
riencias encendieron en fu amor las anfias de tenerla por
efpofa. Efectuado el matrimonio , no folo dexó Maani el
rito Chaldeo cine feguia, por abrazar el Romano , pero re-
duxo a fus padres á lo mifmo. Parece increíble loque ef-
ta amable Allana.adelantó en. pocos años (porque fueron po«í
eos los que v i v i ó : ) pues no folo adqciñió todos los conoe
cimientos, de que ion capaces aquellas Regionc , que mi-j
ran oy como forafteras las Ciencias ; pero llegó á entender;
doze diferentes idiomas. Aun fue mas crecido el numero,
como también la perfección de fus virtudes morales : entra
las quales como mas eílraña en fu fexo , brilló mas la for-i
taleza , aviendo afsiftido armada en dos , ó tresenquentros
á la defenfa de fu-marido. Efta m u g e r , de muchos modos
peregrina , por fus prendas, y por fus viages , en vno de;
ellos cerca de Ormuz , rindió la vida á vna fiebre , verda-
deramente maligna , á los veinte y tres años de edad. Afsi
murió , con dolor de quantos la conocían , ella nueva Ra-i
chel tan femejante á la antigua que parece que la natura-,
s

l e z a , y la fortuna , eftudiofamente formaron el Paralelo;


Entrambas naturales de Mefopotamia. Entrambas bellas
por extremo. Entrambas cafadas con hombres muy merece-;
dores; pero forafreros. Entrambas iguales en la refolucion
de dexar el rito Patrio por feguir la Religión de el efpofo;
Entrambas conformes en llevar parte déla vida peregrinan*
.cío 5, fíguiendo ios paífos de fus confortes. Y al fin entraña*
bas mujieron en la flor de fu e d a d , y en d camino. Pero er¿
DISCURSO XVI. :
el tráfióc Fatal parece que-fue muy defemejante el eípofo de
la vna al déla otra, por aver excedido mucho Pedro de la V a -
lle al Patriarca Jacob en ¡a fineza. Éftefepultó á"fu Raquel
en el mifmo camino donde murió ; quando parece que cor-
refporidia ai grande mérito de fu efpcfa, tener con fu cadá-
ver la atención que tuvo con él proprio , el qual encargó
fuertemente á fu hijojofeph conduxcífe al fepulcro de fus
mayores, que eilaba en Hebrón. Efte cuidado, que fe he-
cha menos en aquel amante Patriarca ( bien que fe debe dif-
currir, que huvo razón poderofa , ó myfteriofa , ó natu-;
ral para omitirle ) í'obrefalió con ios realces mas finos ea
2?edro de la Valle : porque defpues d.?.V- cn aromatizado el
;

fcadaver de fu adorada Maani, d-ipyíicado en coftofa vrna¿


íe condnxo .configo quatro años enteros , que difeurtió por
la Afia , llevando fiempre puerta la villa en fus cenizas,'
como el corazón, y la memoria en fus virtudes ; halla que
bolviendo á Roma , colocó aquellos defpojos de la parca
en el fepulcro de fus mayores los Señores de la V a l l e , que
le tienen en la Capilla de San Pablo de la Iglefia de. S a n t j
Maria de Ara-Cali, con tan ofientofos funerales , que ape-i
ñas fe vieron mas magníficos, pronunciando el mifmo Pe-<
dro de la Valle la Oración fúnebre , en que dixeron mucho'
mas fus ojos , que fus labios , harta que ceñaron de el todo
los labios, porque lo dixeífen todo los o j o s : Fué el cafo,-
que añudada la garganta de la congoxa, fué precifo dexan,
la Oración imperfecta , y quanto efiaba prevenido era,
cioquentes claufulas, fe derritió en lagrimas tiernas : vq-í
zes proprias de el dolor , cuyos ecos reciprocó
ei numerofo concurfo en fus
gemidos.

NOTA. Sítti es titulo de honor entre ¡os Verfi&nos^


Que equivale d Señora»

S£omo h 1- 2Xtá
3 7 o DEFENSA D E LAS MUGERES, 1

§. X X L
136 T TEMOS omitido en efte Cathalogo de mugérésr
J~Í_ eruditas muchas modernas , porque no fa-»
iicfle muy dilatado ; y todas las antiguas , porque fe en-
cuentran en infinitos libros. Baile Saber, ( y efto parece mas
que todo) que cafi todas las mugeres , que fe han dedicado;
á las letras , lograron en ellas coníiderabíes ventajas ; fien-;
do afsi, que entre los hombres , apenas de ciento que íi-:
guen los eftudios , falen tres , ó quatro verdaderamente
fabios,
137 Pero porque efta reflexión podia poner á las
mugeres en parage de confiderarfe muy faperiores en capa-;
cidad á los hombres , es judo ocurrir á fu prefumpcion,'
advirtiendo , que eífa defiguaidad en el logro de los eftu-
dios nace de que no fe ponen á e l l o s , fino aquellas muge-
res en quienes, ó los que cuidan de fu educación , ó ellas
en si mifmas , reconocieron particulares difpoíiciones para
la confecucion de las ciencias ; pero en los hombres no ay
efta elección ; los padres en atención á adelantar fu fortu-
na , fin confideracion alguna de fu genio , u de fu rudeza,
los deftinan á la carrera literaria ; y fiendo los mas de los
hombres de habilidad corta , es precifo que Salgan pocos
aventajados en literatura.
138 M i voto , pues, es , que no ay defiguaidad en
las capacidades de vno , y otro fexo. Pero íi las mugeres
para rebatir á importunos defpreciadores de fu aptitud pa-
ra las ciencias, y artes, quifieren paffar d é l a deferí! va á
la ofenítva, pretendiendo por juego de difputa Superiori-
dad refpecto de los hombres , pueden ví'ar de los argu-
mentos propueftos arriba, donde de las mifmas máximas
phyíicas , conque fe pretende rebaxar la capacidad de las
mugeres, moftramos , que con mas verifimilitud fe infiere
fer la fuya Superior á la nueftra.
139 A q u e l e s añadiremos la autoridad de Ariftote-
l e s : el qual en varias partís enfeña , que en todas eípecies
de animales incluyendo expiefiamente a la humana, las
2

Jiem-
DISCURSO X V L ^7r
hembras fon mas -alturas, c ingeniofas que los mafeulos:
Señaladamente en el ¡ib. p. de Hijior. Animd. c¿p, r. donde
pronuncia afsi lafentencia : In omnibus vero quorum pro-
er cutio efl fœmlnarn , & marem Jimili ferè modo natura
dijíinxit moribus , qulbus mas differt a fœmina : quod pré-
cipice tum in bornine , tum etiam in bis, quœ magnitudi-
ne prœftent , & quadrupèdes vivípara fînt , percïpit'ur-
funt enim fcernina moribus mollioribus , tnitefeunt cele-
riuSy & mrmm faciiias patiuntur: difeunt etiam, imitaniur*
que ingsniojius,
140 Efta autoridad de Ariftoteles , que à las muge-
res concede-no folo la ventaja de docilidad, y blandura de
genio , mas también el exceífo de ingenio fobre los hom-
bres , podrá hazer gran fuerça à tantos adoradores de efte
Philofofo j que le llaman el genio penetrante de la natura-
l e z a , y termino de la humana inteligencia. Pero yo à las
mugeres les prevengo, que no les ella bien dar mucha fè
à Arittoteles : porque íi en el lugar citado las ennoblece
con la fuperioridad en la perfpicacia , poco mas abaxo las
envilece con el aumento en la malicia : Verum malitioJtores y

aflutiores, infidiores fœmina funt. Y aunque algodefpues


les concede el noble atributo de la mifericordia, con pre-
ferencia à los hombres, luego las mancha con los borrones
déla embidia, la maledicencia, la mordacidad , y otros:
Ira quod mulier mifericors m agis , & ad lacbrimas pro-i,
penfior , quaní vir efl : invida item magis , Ô" que rula,
& maledicentior -, & mordatior. N o se , p u e s , que quie-
ran las mugeres acetar con eftas peníioties la ventaja de in-J
genio, que las concede elPhilofofo. N o obftante fe puede
difeurrir , que quando quien eftaba tan mal con ellas,
aliento la baza de fer mas ingeniofas, nq debieron de fer Yi-i
geros los fundamentos.

§. XXII.
14Í Á Qui ocurre, y es razón decir a l g o d e l a a p r
JtW. titud de las mugeres , para aquellas arteâ
fajas elevadas , que las en que comunmente fe exercitan¿
Aaa s. co>
^yi Defensa delasMitgse.es,
como-la pintura, y la efcukura. Poquifsimas mugeres Fe.
dedicaron á ellas artes, pero de eílas- pocas Calieron al gua-
nas excelentes Artífices. De la admirable Ana María Schur-;
man , yáfedixo arriba como fué eminente en pintura , efcul-.
t u r a , y gravadura.
142 En Italia fueron Pintoras celebradas las tres her4
manas Sophonisba, Lucia, y Europa de Angofcióla : á kf-
primera de.las quales traxo á fu. férvido Ií'abela , Reyna
d e E f p a ñ a , muger de Phelipe I I . y eraran grande fu re-
putación , que el Papa Pió I V , folickó vn retrato de aquella-
Reyna de mano de Sophonisba.
14 3 Ir en? de Spilimberg , Veneciana , fué tan prí-J
'morofa en el mifmo arte , que fe equivocaban frequente-í
mente fus pinturas con las de el Ticiano , cuya contempo-
ránea fué.'Arrebatóla el hado á los veinte y fíete años de
fu edad, con dolor vniverfal , y aun con lagrimas de fu
proprio competidor.
144 Tere/a de Pd logra en Ñapóles oy , fi es qufi
aun vive , alta eftimacion en la pintura : y fe pueden ver
preciónos liencos fuyos en el gaviaste de la Excelentifdma
Señora Marquefa.de V i l l e n a , q u e le hizo trabajar fiendo
(Virreyna de Ñapóles.
145 . Aun en la eftatuaria produxo la Italia mugeres
famofas. Propercia de Rofsi fué generalmente' aplaudida'
pOr fus hermofos diifeños , y bien labradas eñaruas de
marmol. Pero mas que eña , y mas que todas la infigne
Labinia Fontana. En FranciaTolo tengo-noticia de vna Pin-
tora , pero de primer orden, Eña fué i [abela- Sopbia de
Cberón , conocida por el nombre de Álidamn Le-Hai : la ,
qual ,' fobre las prendas de mas que mediana poetiíá , y
jnufica , fué en el arte de pintar perñdliísiina , y tan cele-
brada por ella , que el Delfín , hijo de Luis el Grande,
hizo que le pin ta fie á é l , y á fus hijos. L o mifmo hizo
Cafimiro V . Rey de Polonia , que reíidió en París , def-
pues de fu voluntaria abdicación de aquella Corona : lo
•mifmo muchos de los primeros Señores de Francia-, que
fe dignaban de ir á la cafa de Iíabela, como lo hhs nuij^
£ has vezes el Principe de Conde , para eñe efecto. El Em-¡
pe.
DISCURSO. - XVL-.• •.(.: 373
pCfador "jofeph la quifo llevar á . V i e n a , feñalandoíe vna
penfion crecida ; y no pudiendo reducirla , le .embió .los
modelos de fu femblaute , y de rodos los demás de la F a -
milia Imperial, para que fobre ellos formaüe los retratos.
Siendo extremada, afsi en el diífeño, como en el colorido»
fu exactitud , no era menor la facilidad : puesfeguiaqual-
quiera converfacion , fin dar treguas al pincel. Pero las
acciones Chriílianas , y generofas de fu piadoío efpiritu , la
hizieron-mas eílimable , que los rafgos de fu mano, Y murió
corno vivió el año de 1 7 1 r.
145 Adonde fe ve mejor la igualdad de las mugeres
con los hombres en la aptitud para las artes nobles , es en
la mufica ( como facultad indiferente á vno , y otro fexo: ).
pues las que fe aplican á ella , tantas ventajas logran res-
pectivamente al tiempo que efludian, como nofotros •• ni
hallan mas dificultad los Maeflros de efte Arte en enfeñar
á niñas, que á niños. Yo.conoci vna de efta profefsion , que,
antes de llegar á quince años era Compoíitora.

§. XXIII.

imugeres fon iguales á ios hombres en la aptitud pura las


artes , para las ciencias , para el govierno político , y eco-:
ftomico , por qué Dios eftabkdó el dominio , y íuntriori-
dad de el hombre , reípeíto de la muger , en aquella fenten-
cia de el cap. j . de el Genefis : Sub viri pot*/iate erfs : Pues
:

es de creer que dieffe el govierno á aquel fexo , en quien re-


conoció m.;yor capacidad.
148 , Refpondo io primero , que el fentldo efpecifico
de efte texto aun no fe fiabe con certeza, por la variación de
las veríiones. Los Setenta leyeron : Ad wrm» converjo tua„
Aquiia : A.i vitum ¡bcietus tur-.. Simmacho : ,>i virum
appt'thus , vel ímpetus Unís. Y el ríodilüimo Benedicto P e -
reyra dice , que traduciendo el original liebrco.palabra por
palabra , fale la fentyticia de efte m o d o : /W vuum áej¡¿s«
VÍUM, vd concup'.fcemia tua t

u
374 DEIEMSA DE LAS MUGERES,
149 L o fegundo refpondo , que fe pudiera decir,
q"ue la fujecion policica de la muger fué abíolutamente pena
de el pecado , y afsi en el ellado de la inocencia no la avria»
E l texto por lómenos no lo contradice. Antes bien parece
que aviendo de obedecer la muger al varón en el eftado de
da inocencia , debiera Dios intimarle la fujecion luego que
la formo. Siendo ello afsi , no fe infiere que la preferencia
fe le dio al hombre , por exceder á la muger en entendi-
miento, fino porque lamuger le dio la primera ocafion al
delito.
150 L o tercero digo , que tampoco fe infiere fupe.
rioridad de talento en el varón, aunque defde fu origen le
diefle Dios fuperioridad guvernativa de la muger. L a razón
e s : porque aunque fean iguales los talentos, es precifo que
vno de los dos fea primera cabeza para elgovierno de cafa,
y familia; lo demás feria confufion , y deforden. Entre las
efpecies probables de govierno tienen los Philofofos M o r a -
les , figuiendo á Arifioteles, por la Ínfima , b menos perfec-*
ta la que fe llama T i m o c r a c i a , en que todos los indivi-i
dúos de la República mandan igualmente , b tienen igual
voto. Pero entre marido , y muger no folo feria imper-
fecto eíte modo de mandar en quanto al govierno econo-,
mico , fino impofsible porque en la multitud de el Pue-,
blo quando ayadiverfidad de dictámenes, fe puede decidir la
dificultad por pluralidad de votos ; lo que entre marido , y.
muger no puede fuceder , porque eftán vno á vno : y afsi en
cafo de oponerte en el dictamen, no fe puede determinar,'
fino es vno de los dos fuperior. Pero por qué aviendo de fet¡
fupcrior el v n o , tiendo iguales los talentos, quifo Dios qué
lo fuelle el hombre ? Pueden difcurrirfe varios motivos en el
exceífo de otras prendas , como en la conítancia, b en h
fortaleza, porque eftasvirtudes convienen para tomar las
refoluciones convenientes , y mantenerlas defpues de toma-
das , atrepellando en vno , y otro los eftorvos de temores^
o v a n o s , b ligeros. Pero es mejor d e c i r , que "en las
divinas refoluciones ignoramos por ta
mayor parte los mo-
jí, XXIVi
DISCURSO XVI; '375

§. XXIV.
ÍS'5'1; / " " ^ O n c l u y o eñe Difcurfo , Satisfaciendo á vff
reparo , que fe podrá formar fobre el af-
jfumpto : y es , que perfuadir al Genero Humano la igualdad
de ambos fexos en las prendas intelectuales , no parece que
trahe vtilidad alguna al publico , antes bien le ocafionará al-
gún daño, por quanto fomenta en las mugeres fu prefump-;
clon, y orgullo.
15 2 Pudiera ocurrir á eñe efcrupulo folo con decir,'
que en qualquiera materia que fe ofrezca al difcurfo , es
vtilidad bañante conocer la verdad , y defviar el error.-
E l recto conocimiento de las cofas por si mifrno es efli-
mable, aun fin refpe¿to á otro fin alguno criado. Las ver-
dades tienen fu valor intrinfeco: y el caudal , 6 riqueza de
el entendimiento , no confia de otras monedas. Unas fon
..•«mas preciofas que otras; pero ninguna invtil. Ni la verdad
que hemos probado , puede por si inducir vanidad , y pre-
fumpcion en las mugeres. Si ellas Ion verdaderamente en
las perfecciones de el Alma iguales con nofotros, no avrá
vicio alguno en que lo conozcan, y entiendan afsi. Santo
Thomás hablando de la vanagloria , d i c e , que eñe pecado
no fe incurre, por conocer cada vno , y aprobar el bien,
ó perfección que tiene : Qjjod autsm aliquis bomm fuum cog-
nofcat & aprob-1 , ¿on efl peccatit>n. ( 2. 2. qa<eft. 122.
art. 1 . ) Y en otra parte hablando de la prefumpcion , dice,
.que eñe vicio fiempre fe funda en algún error de el entendi-
miento : l'Wifmnptio Aur-em efl motits avpetiitvus , qiiKi im.
port.it q;i.v'id.x>Y>fytrninor.limtAm , b.ib.tantera fe e'-:fnr-
miter mulkbUú fuifo, {qu<zji. 22. a>'t. 2.) Luego el cono-
cer las mugeres lo que fon , como no lleguen á peníar de
fus prendas mas a c l o q u e deben, no podrá hazerlas vana-
gloriosas , ó prefumidas ; antes fi fe mira bien , el d. L u g a -
no á que fe orde-.u elle capitulo , no añade prefumpcion á,
las meg^res, y fe hi quita á ios hombres*
15 j - Pero m-'cho mas pretendo , y e s , que la má-
xima que hemos e í L b k c k i e , no folo no puede ocaíionar,
?0
37 O DsíENSA D E LAS MüGERES,
en lo moral daño alguno ; fino que puede traher mucho pro-
yecho. Confidereíe á quancos hombres la imaginada Supe-
rioridad de talentos , los haze ofiados para emprender fo-
br¿ el. otro íexo criminales conquiftas. En qualquiera lid
J.a conñanca , u defeonfianca de la merca propria , haze mu-
cho para ganar , o perder la b atalla. El homb re en fe de la
' «ventaja en el difeurfo , propone con valentía; la muge- juz-
'gandofe inferior efeucha con refpeto. Quien puede negar
aquí vna gran difpoficion para que él venca , y ella ib
- rinda?
i 54 Sepan , pues, las mugeres, que no fon en el co-
Iiocimiento inferiores á los homb res : con eílo entrarán
confiadamente á reb atir fus fophifmas , donde fe disfrazan
con capa de razón las finrazones. Si á la muger la perfua-
oen , que el homb re refpeóto de ella es vn oráculo , á \i
mas indigna propuefta preñará atento el oido , y reveren-
ciará como verdad infalib le la falfedad mas notoria. Bien
fe fab e á qué torpezas han reducido los Heregcs, que lía-
ciamos Moliniftas , á machas mugeres antecedentemente
muy virtuofas. De qué nació la perverfion, fino de aver ima-,
ginado en ellos vnos homb res de fuperiores luzes, y de aver
defeonfiado con demafia de el proprio entendimiento, quan*
do les eftab a reprefentando b ien claramente la falfedad de
¡aquellos venenoíos dogmas? . .
15 5 Otra confideracion ay que hazer muy importan-;
¡te en efta materia. Es cierto q u : qualquiera cede mas fácil-;
mente á aquel en quien reconoce alguna notab le ventaja
Va homb re firve fin violencia á otro homb re, que es mas
noble que él ; pero con fuma repugnancia , fi fon iguales en
nacimiento. L o proprio fueede en nueñro cafo. Si Uvmuget
Cve.i en el error , de que el homb re es de fexo mucho mas
noble , y que ella por el fuyo es vn animalexo imperfec-
to , y de b axo p r e c i o , no tendrá por oprob rio el rendir-
fele ; y llegandofe á efto la Hfonja de el ob fequio , reputa-
rá por gloria lo que es ignominia. Conozca, pues, la mu-
ger fu dignidad , como clamab a San León al homb re. Sepa
que no ay ventaja alguna de parte de nueñro fexo, y afsi
que fiemo ce ferá oprobrio v_ vileza fuy a conceder al homb«
я

á
DISCURSO XVt. 377
£l dominio de fu cuerpo, Calvo quando le autorizare la fian*
tidadde el matrimonio.
15«? Aun no he dicho toda la vtiíidad, que en lo mo-
fal.traherá el Cacar á los hombres , y mugeres de eñe error,
en que éftán , de la desigualdad de ios fexos. Firmemente
creo, que eñe error es caufa de mancharfe con adulterios in-
finitos chalamos. Parece que me enredo en vna eftraña para-,
¿oxa; pero no es ñ no vna verdad confiante. Atención.
1 <; 7 Paña-dos pocos mefes, defpues que con el vincu-:
l o de el matrimonio fe iigaron las Almas de dos confortes^
pierde la mager aquella eñimacion que antes lograba por
alhaja recien poífeida. Paña el hombre de la ternura á la
tibieza: y la tibieza' muchas vezes viene á parar en def-
precio, y defeñimacion pofsitiva. Quando el marido llega
á eñe viciofo extremo , empieza á triunfar , y á infukar
á la efpofaen fe de las ventajas que imagina en la Superio-
ridad de fu fexo. Inñruido de aquellas fentencias, que la
muger que mas alcanca, alcanca lo que vn niño de catorce
oños, que no ay que bufear en ellas fe ño , ni prudencia , y
btras de eñe jaez , todo lo que obferva en la fu ya , trata con
fumo defprecio. En eñe eftado quanto la pobre muger dif-
curre , es vn delirio , quanto dice vn defpropofito , quan-*
t o obra vn yerro. El-atractivo de la hermofura , íi es que
la tiene , yá no firve de nada, porque le rebaxó el precio
la feguridad de la poíl^fsion. Eñe es vn hechizo que yá efta
deshecho. Solo fe acuerda el marido de que la muger es vn
anim.il imperfecto ; / ¿ f e d e f e u i d a , á la mas linda le echa-;
l*á en la cara, que es vn vafo de inmundicia.
158 En eñe eñado de abatimiento efta la infeliz mu-!
g e r , quando empieza á mirarla, como Cuelen d e c i r , con
buenos ojos vn galán. A la que efta aburrida devér a todas?
horas vn Csmblante ceñudo, es natural que le parezca de-;
maíiadamcnte bien vn roftro apacible. Efto bafta para facili-
tar la converfacion. En ella no oye cofa, que no la lifonjee
el gufto.Antes no efeuchaba fino defprecioss aqui no Ce le ha-
bla fino de adoraciones. Antes era tratada como menos que
muger; aora fe vé elevada á la esfera de Deidad. Antea
j$ le decia, que ejrj yn.$ t o n t a ; aora efeucha, que tiene v n
£<uaq I* " í3bb, " cq-3
37$ DEFENSA D E LAS MUGERES,
encendimiento divino. En la boca de el marido ,. era toda
imperfeccionescilla de ei galán es toda gracias. Aquel la
feñoreaba como tyrano dueño; elle fe le ofrece como rendido
efelavo. Y aunque el enamorado , fi fuera marido , hizieralo
mifmo que el o t r o , como effo.no lo previene la trine cafada,
halla entre los dos la diftincion que ay entre vn Á n g e l , y
,vn bruto. V é en el marido vn corazón lleno de efpinas; en el
galán coronado de flores. A l l i f e l e prefenta vna cadena de,
hierro ; aqui de oro. Allí la efelavitud ; aqui el imperio,
!
Alli la mazmorra ; aqui el folio.
i $9 En efta limación, qué hará la muger mas valien-
te ? C o m o rendirá dos impulfos dirigidos á vn mifmo fin,
vno que la impele , otro que la. atrahe? Si el Cielo'no la
detiene con mano poderofa, fegura es la caída. Y fi cae,
quien puede negar que fu proprio marido la defpeña ? Si él
no la tratara con vilipendio , nolehiziera fuerza el amante
con la liíonja. El mal tratamiento de el vno dá valor al ren-
dimiento de el otro. T o d o elle mal viene muchifsimas vezes
de aquel concepto b a x o , que los hombres cafados tienen he-
cho de el otro fexo. Dexenfe de eíías erradas máximas, y
lograrán las mugeres mas fieles. Eftimenlas, pues Dios los
manda amarlas : y defprecio , y amor no entiendo,
como fe pueden acomodar juntos en
vn corazón, refpeélo de el.-
mifmo objeto-
cu

SU-
379
'¿fe ÁSák A A A A s
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SUPLEMENTO,
DÉ ESTE ULTIMO DISCURSO.

L V Í D O S E en efte Difcurfo , quando fe trataba


9'PWn% de mugeres valerofas , la memoria de María
% V^$tÉ & de Eftrada , conforte de Pedro Sánchez Far-¿
tan , Soldado de Hernán Cortés , merecien-
4/vv\ü%\\\ t| j0 ay {¡ g i
m U p - f muchas , y raras
n U a r ) 0L us

hazañas, que refiere el Padre Fray Juan de Torquemad: ,' 1

en fu primer T o m o , de la Monarchia Indiana. Tratando


de la luctuofa falida que hizo Cortés de México , defpues
de muerto Motezuma, dice de ella lo figuiente : Mojhbje
muy valer o/a en e/le aprieto , y conflicto Marta de Eftrada y

la qual con vna efpada , y vna rodela en las manos hiz9


hechos maravillo/os , y Je entraba por los Enemigos con
tanto coragf-, y--anir.no , como Jt fuera vno de los mas
rali entes hombres de el Mundo , olvidada de que era muí
g;r, y revé/1 ida de el valor, que en esfos feme/antes fue-,
¡en tener lo; hombres de valor , y honra. T fueron tantas
las maravillas , y cofas que hizo , que pufo en efpantoj
y sfo'mbro a quintos la miraban. Refiriendo en el capi-
tulo figuiente la'batalla que fe dio entre Efpañoles , y¡
Mexicanos en el Valle de Otumpa ( 6 Ocumba como 3

la llama Don Antonio de Solis ) repite la memoria de


efta iluílre muger con las palabras, que fe liguen: En efta,
batalla , dice Diego ¿Muñoz Camargo , en fu Memorial de
Tlaxcala, que Marta de Eflrada peleo d cavallo , y con vn¡t
fa en la mano , tan varonilmente , como Ji fuera vno
Dbba de
•3S0 SuMMÉ^fo.
'de los mis 'valientes hombres de el Exercilo ,- y aventá*
peandofe d muchos. N o dice el Autor de donde era hativj
ral efta Heroyna ; pero el apellido perfuade que era Afn
jturiana.
Tratando délos pocos Efcritores, que dieron por Igua-í
íes en entendimiento á los dos fexos, fe citaron folamen-;
te Don Francifco Manuel , y el Abad de Bellegarde. 1

tsío ocurrió entonces, aunque fe avia leído , que el Au-


tor de la Jomada de los Coches de Madrid d Alcalá ( que
fea quien fe fuere , fe conoce fer hombre de v o t o ) es de
el mifmo fentir (pag. 4 1 . ) También fe íabe , que el Padre
Buffier , célebre Efcritor Francés , de la Compañía de Jesvs,'
probó de intento el mifmo affumpto en vn libro , intitula-;
4 o : Examen des prejugez vulgaires.
D e intento, en la mención que fe ha hecho de tan*,
tas mugeres iluftres, no fe tocó en las excelfas prendas de
jnteílra efelarecida Reyna la Señora Doña Il'abél Farnefio:
ya porque no fe atrevió á entrar en efte fagrado , con
pan grolfera p l u m a , mi refpeto: ya porque otra mas bieq
cortada entre los timbres de fu Regia Cafa, tiró algunos,
rafgos á delinear los refplandores
de la perfona.

Omnia fub corrc&ione S. R E c c í e f e 4


3 Si

I N D I C E

p E L A S M Á X I M A S C O M U N E S ^
q u e fe i m p u g n a n en e ñ e T o m o .

£; T A voz de el P u e b l o , ò vniforme confentimiento ¿6


tJ la multitud en alguna opinion -, no es prueba de
fu verdad, pag. i. per totum Difcurfum.
£ . N o es cierto que las fentencias de los Phílofofos Anti-:
guos, á quienes impugno Ariítoteles, fuellen tales, quálesf
las propufo eítePhilofofo , pag.7. num.p.
¡3. L o s Philofofos Antiguos folo en la apariencia feguian la'
Religión de el Pueblo , pag. 1 5. num.22.
íj.. Menos trabajofa es la virtud , que el vicio , aun atendi-
da folamente la conveniencia de la vida temporal, pag. 1 7 .
per totum Difcurfum.
(J. Todos los pecadores fon infelices, y defdichados en ella
vida , pag.23. á num.14. vfquead 2 2 .
í5. Los mifmos AtheifVas , aun quando lleguen à exonerarfe
de todo interior remordimiento , paitan vna vida congo-,
xofa, pag.25. & 2 7 .
7 . El camino de el Cielo folo es afpero en las primeras jor-;
nadas,pag.29. à n.25.vfque ad 3 0 . pag.34.11.38. & 39.
8. Mucho mas dulce es para la muger el citado Religiofoe
que el matrimonio, pag.37, &feq*
'p. En la muger igualmente trabajofo es aborrecer à fu ma-
rido , que fer aborrecida de el , pag.40.
'lo. Es leviísima la dificultad que padecen las Rellgiofas en,
la obfervaucia de los votos , pag,42. & feq,
¡ I I . L a humilde , y alta fortuna ion iguales, ò es de mejor;
. condición la humilde , pag,45. per totum Difcurfum.
il 2. L a felicidad temporal de los hombres , no fe puede, n |
debe medir-por la magnitud de fus riquezas, pag.48. n.8.
I3. E l q goza mas deleytes es el q gózamenos, p.5<5¿n.22.
1? 4. Tanta hambre tiene el opulento h a r t o , como el pobr§
hambriento, p.jet. n,2¿, " p<$
^Sz ÍNDICE D E LAS MAXÍMW,
i j í . Las hab itaciones mas commodas que ay en el Mundo
fon las mas eftrcchas, pag.. 5 9. num.26.
16. Igualmente , o mas fe regala el pobre que el rico, pag.
61.num.29.
1 7 . Grande yerro, que Incurre la piedad común en el fq-
corro de los pob res , pag,67. num.41.
r 8. El interés, y no el amor, liga los hombres á habitar fu
propria Patria , pag.б9. & 7 0 .
1 9. Los Antiguos no fueron mejores , ni mas íinceros que f
los homb res de eñe tiempo., p a g . 7 3 . & 7 4 .
2 0 . En el Mundo mejor fe negocia con la veracidad,y b uen
tratOjquecon la aftucia,y el dolo,p.75. á n.6. per tot.Dilc, !

2 r. Mus apto es para el govierno vn homb rejuño fin prac-


tica en la Politica,que el que toda la vida eftudió las razo-j
nes de Eftado , pag. 9 8 . a num. 4 2 . vfque ad 4 8 . •;
^ 2 . L a Medicina eftá toda llena de dudas, de modo,que noj,
ay en ella principio cierto alguno, p. 1 0 5 . pertot. Difc.
2 3 . Lafangriaes remedio muy arriefgado, p.i 1 8 . п . : 9 . ¡í¿
2 4 . N o ay purgante que no dañe,,p. 1 2 3 . a 11.3 7.vfq. ad 46,
2 5 . L o s remedios coftofos fon mas invtiles,p. 12 9.0.48.45,
2 6 . L o mas que fe dice en los libros médicos de las virtudes.
de los medicamentos, es fupuefto, pag. 1 3 9 . n . 5 2 .
i7. Multitud de remedios fiempre es nociva, 1 3 1 . n . 5 2 . цг
? 8. Peca el Medico,fiempre que receta fin prob ab ilidad de
que aprovechará el remedio , aunque efté cierro de que no :

ha de dañar , pag.i 3 2 . 1 1 . 5 7 . 5^.


2 9 , Es impoísib le que acierte las curas el Medico que yerfl 'J
los Pronoñicos, pag. 1 4 0 . n . 7 0 . 7 1 . ]
, jo.. Ningún Medico puede fab er por las reglas de fu Arte, t

que régimen conviene á ningún individuo, pag. 1 4 2 . |


3 1 . De ningún alimente fe puede decir, que es ab íolutai
menee nocivo, pag. 1 4 3 . a 11.3. _ |
• j a . No es conveniente vfar íiempre de vna mifmacfpcti^
de alimento , pag. 1 4 З , n.9. -(
•33. Es prob ab le , que los pezes, y las frutas fon alimento,.
mas provechofo que las canes,p. 1 4 7 . n 1 o. & deince ps. 1
34. La dieta muy eftrccha en muy raro individuo dexarí
de fer muy nociva, pa¿. 1 ¡j j , n . s o . &díinceps.
QUF S E I M P U G N A N E N E S T E ToMO. ^Sg
§ 5. El freno meridiano no es dañofo, p a g a 5 8 . n . 2 9 .
35. Es/alfo que las Regiones húmedas feaninfalubres,pag.
1 j p . n u m . 3 0 . & deinceps.

'37. En el apofento donde fe duerme,mas fe ha de cuidar de


la ventilación, que de el abrigo, pag. 1 5 ? . n . 3 7 .
3 8 . Es perniciofo no mudar camifa á l o s enfermos. Y es
precaución mal confiderada veftirfela, antes que fe la pon-
gan , otro hombre fano, pag. 1 6 4 . n . 3 9 .
'3?. En las noches ardientes no tiene inconveniente dexajf
abierta la ventana de el apofento, pag. 1 6 6 . 1 1 . 4 1 .
40. Es falible el experimento de pefar las aguas para cono-
cer la bondad de ellas.Y lo es afsimlfmo la obfervacion de
que la fuente falga al Oriente , ibid. 1 1 . 4 2 . 4 3 .
ÍJ.T. Es falfo que la bebida que fe enfrió con nieve fe?, noci-
va defpues que perdió la frialdad , pag. 1 6 7 . n.44._
4 2 . E l e f t u d i o , ú o c u p a c i ó n l i t c i a t i a no abrevia la VKW,
pag. I 7 0 . per totum Difcurfum.
' 4 J . L a Aftrologia Judiciaria es mera Fábula, pag. 1 8 1 . -
44. Los Eclypfes nada fignifican de futuro, ni tienen m a l o a .
efe&os, p a g . 2 0 7 . pertot. Difc. n 11»
'45-.. L o s Cometas no^v^¿mS^SÍ^^its publicas,ni pri-
vadas j ^ a í r ^ J ^ T p e r tot. Difc.
4 é W ' E l fitio de los Cometas no es la fuprema Región de e^
/ Ayre , p . 2 1 8 . n . 1 0 . p . 2 1 9 . á 11.1 3 . ad 1 7 .
47. N o ay anos climatéricos en la forma que vulgarmente
fe pienfa, ó que procedan por determinados periodos,
\ pag.2 2 . 2 . per totum Difcurfum.
^ 4 8 . . Es incierto lo que fe dice de los dias criticos de las en-
? fermedades , p a g . 2 2 8 . n, 1 4 .
; 49. Es falfo que entre las ondas de el M a r , la décima fea
mas Impetuofa que las demás , p a g . 2 , 3 0 » n. 1 8 .
. .50, El Mundo, ó la naturaleza de las cofas , no fe ha enve-
gecido ,b perdido algo de fu vigor de treinta Siglos a efta
parte. Afsi es falfo ,que los hombres de aora fean de mas
corta vida,u de facultades mas débiles que los quetvi vieron;'
en los paifados Siglos , p a g ! 2 3 1 . per tct. Difc, . . •
: - 5 1 . L o s enormifsimos G i g a n t e s , que en varios-libros fe
j lee aver ávido en ios tiempos antiguos, fon fabulolo?,.
384. • ÍNDICE D E LAS MÁXIMAS, ¡
•52. Nliy,ni ImvoFénix,pag.247.num.3r. ^ ;
; . L a Moflea que oy fe eftila en los Templos c? impropria ¡
5 i

y aun indecorofa para e l l o s , p.273'. per cot.Dííc. ^ [


5 4 . LaMufica Moderna no es mas perfecta; anees mas im- j
perfecta que la antigua p . 284. á 1-5.25. ad 2 p. 5 ¡'
' 5 5 , L a elección de tonos nada haze para la exprefsion de ¡
los aíedos de la letra , pag,29t. n . j S . 39- • ;
r
<,5. Las DOEFUS, que fe componen para las cantadas a lo di-¡
vino, fon defecluofifsimas, pag.293. a N.44. ad 5 1. '
| . 7 La lengua C a ellana en nada es interior, y en algo cs¡
r

fuperior f i a Francefa , pag,2 07. feré per tot. ;


5 3. Es vtii, y laudable la aplicación a faber la lengua ton
. cefa,pag.29p. án.5.ad 10. : r

«9. Todos los idiomas en quartto a la propnedad ticii:


y
vozesfon iguales, pag.301. num.12.
ZTO. M XJIAI-CAU Gallego , Y EL Lufitano fon vno mamo
n'jg. 10^. UUM.SY.
r. L a lengua Luíitana no es fubdialecto , ó corrupción d¡
,• la Cafteilana, lino dialecto de la Latina, p.^09.
smik u 8 ' Y teme janea de vn-dialecto con la lengua orí-,
, o r

d i a f c a o s f p a g j o p . n . } o 7 perfección refpeao de otros!


V: ^ m
^ " o e s animal imperfeto, p.31^. á „ . . „ . . 17!
i

* . 4 Las prendas en que los hombres excedería lasmugere


fe contrapefan con otras en que las mugeres exceden áTos
. hombres, p a g . 3 1 n . i p . & f . . 9 ? "cxccaena.o, eq
&

f 5- El entendimiento de las mugeres no'es inferior al dtf 1

.os h o n o r e s , j 5, ¿ . . per tot. Difc.


P ; 3 n 5 7^
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DJW rR;NR
; ?DIEN.,
F m

pag.
Z a d 0 n í b n í Í b
P feo.
. num.So. &
l £ n o d e e n d e
1» facultad de
3 4 ?

, ninguna temperie defignable en laconvinaebn delaf

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