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i THEATRO Ш
1 CRITICO UNIVERSAL, i;
WS
О
DISCURSOS VARIOS
«й E N TODO G E N E R O DE MATERIAS,¡
DE ERRORES COMUNES.
Sl| DEDICADO ^
£t¡ AL Rr Р. M . F R . B E R N A R D O MARTIN; ~~
¡ General de la C o n g r e g a c i ó n de S . Benito de ЕС-
paña, Inglaterra, & : c
E S C R I T O
POR EL M. R. P . F R . BENITO GERONTMO FEYJOO,
Mae¡l''o Genera l de l a Rel igión de S. Benito , Abad que ha Jid-o dos $л
í vfcí'j й?<?/ Co'egio de S. Vicente de Oviedo , Graduado en l a Univer-
[ Jidadde dicha Ciudad , Gathedr ático de Santo fbomas, y de Sa-
grada Efcitu --a; y anual mente de Vifperas /<>J^>
de Theol ogia, &c. /^4É>*V
OMO S E X T O
«9% C O N P R I V I L E G I O .
E N M A D R I D : En la íaioreuca d e los Hered eros d e Francifco d el
Hierro. Año d e M . D C C . X X X I V .
*******************
AL R MO
P . M*°
E :
FR. BERNARDO M A R T I N ,
General de la Congregación de
San Benito de Efpaña, Ingla-
t e r r a , &cc.
P . RT
E
h
)
la de F.R™ pQr
a
do quiera que camina la
vemos únicamente acompañada del Amor,
y el Aplaufo. Quien no ha celebrado los
raros talentos de V» R . en el minifierio
m a
bafi
Zafana per s) folo a perfuadirla. Eft
qm Caja de la Religión no fe experimen-
tan , defpues de viftada por V, Ry Jos
faludables efeclos de fus benignos infla-*
xos\ Con folo ver á V, R , concibe an- m a
Tom.VL b d
"- —I — -4
el ultimo retoque à e ¡i a pintura con el
pincel de Claudiana , aplicando hV. R™ A
B . L . M . deV.R™ 3
fe*
AT%0 BAC10J^ VEL
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%T. Fr.Jo/eph Pere% Mae/lro
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V'rii
D
E orden, y mandato de nueflro Rmo» P . M ,
Bernardo Martin, General de la Congregación
de San Benito de Eípaña , é Inglaterra, &c. he
vifto el fexto T o m o del Tbeatro Critico , que da á luz
el Padre Maeíko Fr. Benito Geronymo Eeijoo , Maeñro
General de la mifma Congregación, Do¿tor T h e o l o g o ,
y Cathedratico de Santo Thomás, Efcríptura , y actual-
mente de Vifperas de ella Univerfidad de Oviedo , y
dos veces Abad del Colegio de San Vicente de la mit-
in a Ciudad ; y me parece, que efte T o m o es obra igual* 1
;;
FA~.
facilidad , ¡y Seguridad. Afsi lo dice aquel infigñe Eru- BibUoih.
dito ; Quatuor Ínter fe implacabiliter pugnantia indif- Santt.lfM.
folubili pacis fcedere conjunxijfe , videlicét Copiam, Bre-
yitatem, Facilitatem, & Securitatera, quas nulli unquam
literariimprofijf'jri ¡vel ante,vrí poji eum contigit fi-
rma potuífe connettere.
Los aííiimptos de losDifcurfos de e í l e T e m o fod
fingulares , y feleftos , como los de los demás T o m o s .
Gyran, como por propria efphera, por varias, y nobles
Facultades, como fon, Politica,Ethica,Phyíica,Hiíloria,
y otras ; y en todas difcurre el Autor con propriedad,
y excelencia grande. Hablando un Efcritor de la por-
tentofa literatura del iníigne Pedro Gañendo, dixo era
tan confumado , y excelente en todo genero de letras,
que difícilmente fe podia determinar en que Facultad
citaba mas vedado : Illud certé babes peculiare , atque Seth V y n r d
tibi proprium, quodin omrit litsrarum genere adeo ex- , n
Descae.
celias ,ut in qua tu parte, máxime verfatus Jis> plañe dif- j^^' ^
jiciíé Jlt decernere. La milma duda fe puede excitar de trenotnia
la literatura del Autor ; porque eu todas las Facultades Qmnttrka.
inítruye como Maeftro.
El eítilo es brillante , claro, enérgico, fuave , puro,
natural, y fin afeétaclon alguna 5 pero elegantifsimo , y
en fin el mifmo que el de las demás obras,y eferitos del
Autor : ó, por mejor decir, es el familiar , y nativo del
Padre Maeftro Feijoo, que con igualj fi no mayor, pro-
priedad, y elegancia habla fiempre que eferibe. Por eílb
juzgóle le debe de juíticia el epitheto , y fublime re-
nombre de gran Maeftro de la Eloqucncia, que Ifaac Ca-
fanbono dio a Quintiliano : Magnas Ule Magifler elo-
quentite Fabius , eferibe elle Autor ; y á mi me parece, Comment.
que con mas razón fe puede decir : Magnus Ule Magif- t ' ""
y r > 1
a
Fr.Jofepb Pérez*
LICENCIA DE LA ORDEN,
El Çeneral de S. Benit<^
c
P o r mandado de fu Rmaí
?A¿
fA B^CE%
c
VE m^JOSETR
Mau&no Gregorio de Elizalde ha y
Parra (Mexicano) Mae jiro en Artes,
T>oBor en Sagrada Theologia, y Redor
que ha [ido en la &eál Univerjidad de
México, Theologo y Examinador de la
t
Nunciatura de E/pana,
A
El intimarfeme el orden del feñor Do¿t. Don,
Bernardo Frollan de Saavedra , Canónigo Doc-,
toral de la Santa Igleíía Primada de las Efpa-
ñas de la Ciudad de Toledo , y Vicario de efta Villa de
Madrid,y fu Partido,por los, llnftrifsimos Señores Dean,
y Cabildo de la dicha Santa Iglefia, Sede vacante , & c .
para que v e a , y reconozca el fcxto T o m o del Theatrar
Critico Vmverfal, erudito defvelo de la delicada pluma,:
que confagrada para diverlion de ocios literarios , co-
menzó en proprio recreo , y ha profeguido con comunv
utilidad , el R m o . P . M. y Do¿t. Fr. Benito Geronymc?;
Feijoo, Maeftro General de la Sapientifsima , y Religio-:
íifsima Congregación Benedictina de Efpana , Abad que
ha fido dos veces del Real Colegio de San Vicente de
Oviedo, Doctor Theologo por fu Univeríidad , y en ella
fu Cathedratico de Santo T h o m á s , de Sagrada Efcritu-j
ra, y actualmente de Vifperas de Sagrada T h e o l o g i a , & c
ya quedaba el cuidado defembarazado del empeño , y
correfpondida la obligación del precepto : Porqne íi
con folo proferir el nombre , en fentV de Plinio (Lib¿
epi/loI.<\.) fe explica la obra : Omnia dixi cum virum di-
xi; aun los aplaufos, que la ojbra fe merece, quedaban
fatisfechos con la exprefs*ion ele fus titulos, ó con el
titulo de la obra. Porque fi el Autor , por fu nombre , y
por hijo de el Magno San Benito, es Grande, y es gran-
de por fus letras; folo parece menor a vifta de fu Thea-!
tro
t r o : d igno encomio , que "dicto la profund id ad d e Terv
culiario (Lib.fingal . de S peiíiac.) para el d ebid o apiaaíb
de el que conftruyó el.gran POTnpeyo : Pompsjus Aíag-
nus fal o Theatro fuo minar,. Mas íi aunque los aplaufos
inunden el Orbe COIR la d ilatad a fama d e gloriólos he
chos , es d elito no concurrir á el encomio d e obra tan
gigante con algún elogio: (Carol . Ruausl ib.z. Carm.Pa-
pegyr.x.)
Et quamquam cumfama vol at, cum maximus Qrbis
Sol-vi tur inpl aufuSjO' pl aujtbus aceinit zs£tbo\
Nil pracone opm ejl ; fcel us ф turnen al ta, Jil ere.
r
Ars utinam pojfet, BENED1CT1 pingere dotes;
Pulchrior in Terris, nalla tabella foret*
P.jfofepb de Elizalde.
LICENCIA DEL ORDINARIO.
P o r fu mandado,
Gregorio de Soto,
ATW °y<l BAC1 eDEL
Al. P. S.
¡Uvicra por íingnlarifsimo agaflajo de V . A . me
favorecieíie con eñe fexto T o m o del Tbeatrg
Critico Univerfal, fi fucile rcmifsion benigna de
fu mayor agrado , para que alabaífe el zelo , y telón in-
geniofo del R m o . P. M . Fr. Benito Geronymo Feijoo,
Maefh-o General de la Religión de N.P.S. Benito, Abad
dignifsimo que fué de fu Colegio de S.Vicente de Ovie-
do , DOCTOR de aquella Univcríidad, Cathedratico de
Santo Thoniás, Eicritura, de Vifperas , y al prefente J u -
bilado, & c . Para que alabaíle, digo, el tefon ingeniofo,
conque á beneficio del Publico va cumpliéndolo que Laudan pa
prometió hace pocos años ; y aun para que le dicfie las rtter^Sgra.
gracias con Plinio , por la aplicación continua (fin ha- "?^,n,
U a í
rr i iT • „ 5
í
r . , tu pcfjum.
intereílados muchiísimos. ( i ) Para uno, y otro afsiiten f^
2
acci.
tistacer quien recibe beneficios. ( 2 )
Que gracias no deberán contribuir las perfonas def- pienti,
va-
'vállelas, e IníéíéfladáS. en" la Parado x a , "qué" ñíáñlfiéft'l
Farinacío "fer ta Tortura inútil para deftubrir la verdad} C o n ó -
Prañ.crim. cen la dificultad muchos Jueces; confeífando alguno de
pare. 3. q. fingular voto en el punto, (3) que quando'los nías le'né~
81. n. 306. g| .
a 3a j tortura el delito , con blandura , y fuavidad
tl e n a
XomVL por-
k turba de impugnadores, que ha padecido eíla obra:
e
porque hace algunos años leí en Ariftoteles , que ni el
fuego excita humos raftidiofos, ni fomentan embidias
(7\ . las luftrofas acciones, quando aquellos reíplandores ion
Nec ignis
concipit fu
inftautaneos ; como exalaciones , que,al punto que tie-
inurn , nec nen ser, defaparecen. (7)
glnriagignit Si el Nuncio de Portugal fe quexare, le remitiremos
inviáias ¡fi al Reino ; cuyos ingenios , FIN valerfe de SAN Antonio,
repente utrü
que celeriter hallarán en el íiguiente Di fe u río algunas Efpecies per-
tmicuerit. didas ; y en el Confe&ario diverfas Maravillas de natu-
raleza , que no imaginarían , viílo folo el fobreefcrito:
aunque no dudo conheífen, como yo proteílo , nos He-:
lnvijibilia van al conocimiento de la Deidad fuavifsimamente,def-
Dei per ea,
ferrando con diverlion provechofa el Atheifmo, que tie-i
qu¡e fíela
Jv.nt, intel- ne en el mundo defeubierto mas feguidores de los que
l(c7j,confpi- concebimos; paliando la ninguna ley , que liguen con
ciuntur. pretextadas políticas operaciones. Quien de aquellas
Maravillas no infiere inteligente la D i v i n i d a d , querrá
(9) cegarfe ; ó no conocerá las criaturas, que prefume com-
la 1. Refpi- prehende. ( 8 )
cienium-ff.
de posnis.
Divertido con la variedad de affumptos fe pafsó de
Refpicien- la memoria, el que no quifiera huviera fido el ultimo.
dum efi ju- Emprehende defterrar una clemencia , y feveridad , que
dicanti , nt afirma con razón, fer indigna de jueces, y Magiílrados.
quid aut du
riui,aut re-
Para lograr efte empeño , aunque cita poco , funda mu-
m'ifshu con- cho , y parece tuvo prefente al jurifconfulto, ( 9 ) que
ftltuatur , afslgna un medio arreglado, previniendo huían los jue-
quam cali- ces afectar vanamente la gloria de clemencia, ó feveri-
fa depofcat:
nec enim fe-
dad, proporcionando las penas á las culpas : fi eftas fon
veritaíis , graves, no fatisface á fu oficio el Magilirado imponien-
aut ciernen • do aquellas leves ; como también faltará en fu minifte-
tice gloria rio, condenando á pena capital por un hurto folo , f i m -
affilíunda
p l e , que dicen los Peritos.
efl-ifedptr-
penfo judi- . Y a conozco me dirán, podiavalerme de otro exem-
cio , pro ut plo, y no manejar efte ultimo ; pues el Autor que le ufa
quaqae reí
(aunque celebérrimo entre los Efcritores, y Maeftros) en
expo/itilat,
ftUtten&um efte particular fe halla con la nota, que publicaron eftos
años en cierto tomo 6. M o r a l ; y entre las cofas nota-
bles, que llaman índice , de la obra t o d a ; folo en efta
ocafion única le feñala.
Que
, Que haya fulo fin conocimiento efta llamada del ín-
r
mitir. ;"'
Mas réfpondo : que la ilación no es buena , íiendo
verdadero el antecedente. De una Ley promulgada ,;6i;
renovada con jufticia, que manda fe exponga al ultimo)
fuplicio á qualquiera perfona, que probaren haver zo-.
bado á otro, no le condenará el Juez por un hurto íirn-:
pie, ó folo, fi mira bien , y premedita las clauíulas'deL
Decreto.
Motiva el Soberano fu refolucíon juftifsima, dicien-
do : Ror-quanto reconociendo , con laflimofa experiencia;
la REITERACIÓN con que fe cometen en la. mi Corte, y
caminos immediatos, y públicos de ella los delitos de Hur-~ -
tos, y Violencias; enterado deque igual defenfrenopue-i
de motivar fe de la benignidad con que fe ha praéiicado lo >:
difpue/lo por algunas Leyes del Reino. El hurto acom-
pañado de las circunftancias que fu Mageñad exprelfa,
no es folo, como entiende el Maeftro citado , ni Jimple,
con que fe explican los Jurifconfultos ; íiendo al inten-,
to fynonomos los términos.
Hurto íimple, ó folo, fe diñingue del hurro circunf-;
tanciado, ó qualificado. Mira el primero á folo el daño
que ocafiona en quatro, ó mas reales, que ufi:rpa,fin
otra circunftancia agravante, o q u e mude efpecíe. El
fegundo atiende al Hurto venido de una, ó muchas cir-i
cunftancias : la frequencia de hurtos, que fe experimen-
ta , la dignidad del lugar en que fe comete el deliro , la
perfona que fe ultraja, el invadir , ckternfnado á vul-
nerar, ó quitar la vida fi reíiíte,y otras á elle modo. D e
la gerarquia fegunda (no de la primera) fon los delitos,;
que fu Mageftad difpone fe paguen con la vida : L a rei-
teración de femejante delito es mucha circuiiftancia ; fu
Corte, y caminos immediatos deben aílegurar los bienes
.temporales á fus dueños.
L a Mentira, ya jocofa, yá oficiofa, por si fola á na-
die daña, nos dice el R m o . al Difcurlb nono ; pero la
impunidad, ó frequencia con que fe miente es muí per-
judicial al Publico, porque priva al común de los hom- .
bres
£res de un bien muí apreciabíe. Que diremos de ía fre-:
quencia del hurtar? Un hurto Simple, ó folo , es un per-
juicio en bienes de inferior orden á los de vida, y hon-
ra ; mas file defordenan los hombres reiterando á cada
paífo , y cafa la rapiña , pide la feguridad publica , lá;
paz común, e incorrígibilidad de los mortales , fe apli-
quen caufticos, no fea que de la impunidad fe figan mas
perjudiciales exeeíTos.
Corrió la pluma mas que pretendía la intención;
aunque quien leyere felo efte T o m o , conocerá debo fer
efeufado : porque excita mucho en fus Difcurfos , que
no contienen cofa contra los Sagrados Cañones, buenas
coftumbres, ó Reales Pragmáticas. Afsi lo liento ,faha
mellar i .judicio¿ San Francifco de Madrid , y Jimio 8«
EJL '
E L R E Y.
I
"\OPv Quanto por parte del Maeftro Fr. Benito Feí-?
J> joOjdei Orden de San Benito , Cathedratico de
Vifperas de la í/niverfidad de Oviedo , fe repre-
fentó en ei mi Coníejo tenia coinpuefto , y defeaba im->
prhiir el fexto Tomo del libro intitulado, TtieMro Cri-
tica Unmsrf&ly y para poderlo hacer fin incurrir en pe*
na alguna ,-fe me fuplicó fucile íervido concederle L i -
cencia, y Privilegio por diez años para fu imprefsioiij,
con "prohibición de que perfona. alguna lo pudiefle ina*
pvimir fin fu permiflb, remitiéndole á la cenfura de la
perfona que pareciere conveniente : Y vifto por los del
rnl-.Conffjo,' y c o m o por fu mandado fe hicieron las d i -
ligencias, que por la Pragmática últimamente promul-
gada iobre la imprefsion de los Libros fe difpone ; fe
acordó expedir ella mi Cédula: Por la qual concedo li~
cencia,y facultad al exprefiado Maeftro Fr.Benito Feijoo s
ER-
ERRATAS.-
Y) A g . i i. l i n . 1 0 , ophortet,\ee epertet. P a g a 8. lin. 2 9. pidirán , lee pH
•*• dirán. P a g . 6 4 . l¡r¡« ulcim. rnciocionios> lee raciocinios. Pag.éj.lin,
3 7 . producían, lee producción. P a g . 7 8 . l i u . 2 6 . b.tcbo, lee hecho. P a g .
8>\ l i n . 1 4 . iíc «íc, ! c c /íc «f. P a g . 3 0 . iin. 3 0 . quiddam , lee qu.ii.un.
1*3^,140. lin. 1 5 .f&ngrt , l c c fangre. P a g . 1 7 3 . I i n . 1 8 . producían,lee />.-«-
¿acción. P a g . 1 7 5 . lia.f./áCiJUj lee/ácdff. P a g . 1 8 7 . lin. 1 9 . ojtentifii^
rw¡, lee oftentofifiimos. P a g . 1 8 9 . l i n . i ? . Narcband,lee Msrchant. Pag.
1 9 7 . lin. 1 9 . producían, lee producción. P a g . i 1 0 . l i a . 1 9 . / 0 « , lee /0««
P a g . 3 3 3 . l i a . S . Crocodrilos, lee Crocodilos.
H e vifto el Texto T o m o del Tbeatro Critico del R . P . M . F r . B e n i t o
F e i j o o ; y c o n eftas erratas correfponde á ía o r i g i n a l . M a d r i d , y J u l i o
1 7 . de 1734« Lie,D.Manuel García AUffon,
C o r r e c t o r general por fu M a g e f t a d .
X A B~LTA~DEnLb$~DTs^c"iTá S~QS D T E S T E
fexto T o m o .
I . Paradoxas Politicas,y Morales. P a g . i2
I I . Apología de algunos Perfonages famofos
en laHiftoria. Pag.77;
I I I . Fábula del Establecimiento de Inquificioñ
en Portugal. Pag.151;
I V . Hallazgo de Efpecies perdidas. Pag.ie^.;
y . Confectario del Difcurfo antecedente fo-
bre la producción de nuevas Efpecies. Pag.ip3¿
V I . Maravillas de la Naturaleza. Pag.2o2.'
V I L Satyros, Tritones, y Nereidas. Pag.23
V I H . Examen Philofophico de un peregrino
fuceífo de eftos tiempos. Pag.a 5 iy
I X . Impunidad déla Mentira.' Pag.2pj.
X . Chifles de N. Pag.308.
X í . Razón del Güilo. Pag.331;
X I I . El No sé que. Pag.345.'
X I I I . El Error UniverfaU ^ Pag.3^0;
PRO-
PROLOGO.
L
Eótor mío, refuelto eftaba á dexar fin Prologo ef»<
te Libro, en atención á que en los de mis ante-i
riores obras te tengo prevenido de todos los co-
lirios necesarios para defender tus ojos de todos los
que quieren cegarlos con iluíiones, y te venden tinie-
blas por luces. Pero una noticia que recibí eftos. dias
me hizo precifa una nueva advertencia.
Cierto Librero de Sevilla, que havia comprado, jun-
tamente con algunos juegos de mis obras, las de la Tro-,
pa Tertuliana, para vender unas , y otras en fu tienda;
yiendo que eraa muchos los que acudían á comprar las
primeras, y nadie, ó rarifsimo las fegundas , fe valió del
ardid de no querer vender unas fin otras ; y afsi á qual-
quiera que llegaba á comprar mis libros decia , que no
fe los daría fi juntamente no le tomaba los de los T e r -
tulios : con que le ponia en la preciíion de comprar to-i
d o s , ó ninguno. Parecióme julio ocurrir al perjuicio,
que efta fupercheria ocafiona á muchos. Por tanto, aun-t
que halla ahora no he facado libros algunos de venta
fuera de Madrid, ni aun fuera de la Porteria de nueftro
Monafterio de San Martin , por no fer neceflario ; pues
allí vienen á bufcarlos de todas partes, fiendo el defpa-¡
cho tan acelerado, qual fe manifiefta por el quantiofo
numero de Exemplares que fe facan, (del Quinto, y del
SextoTomo fe han tirado tres mil)y por la repetición de
imprefsiones ; eftoi en animo de enviar á aquella Ciudad
una proporcionada cantidad de exemplares de elle fexto
T o m o , y acafo de los antecedentes , que fe vendan pof
mi cuenta ; con que fe evitará á los aficionados á mis
obras la infeliz preciíion en que quiere ponerlos aquel
Librero. Y fi de otra alguna Ciudad populofa huviere
avilo por perfona fidedigna, que algún Librero practica
el mifmo eílratagema, aplicare refpe&o de ella el mifi
pío remedio.
2V/;.r/ a f Jurn
Juntamente Lector, fi eres uno de los muchos que
encarecidamente me han rogado, que,defpreciando todo
genero de impugnaciones , proíiga mi obra principal,
reprefentandome que defraudo á la inñruccion , y cu-
rioíidad del Publico todo el tiempo que gafto en refpuef-
tas, las quales folo íirven de perfuadir á ignorantes, que
merecen alguna atención las réplicas , te repito la pro-;
tefta de que eres, y ferás obedecido ; eftando yo tan le-,
xos de repetir Apologías, que ni leo, ni leeré , ni he leí-
do mucho tiempo ha ni un renglón folo de quanto fe
eftampa, eílampará, y ha eftampado contra mis efcritos,-.
contentándome con las noticias que me dan algunos de
que las impugnaciones de oy fon como las de ayer ; y
otros de que el deslumbramiento es mayor cada dia,
reprefentandofe en ellas la Comedia de Calderón, Peor;
ejlá que ejizba, y la de Moreto, Trampa adelante.
Pero íi eres délos que miran con una indignación,
zelofa tales efcritos, y querrían la refpuefta no tanto
como defengaño, quanto como caftigo de fus Autores,,
procuraré aplacar la ira que has concebido contra ellos,
maniícflandote con el teftimonio del difcretifsimo J e -
fuita Daniel Bartoli, que en todos tiempos ha padecido
la República Literaria ella efpecic de débiles , y olTados
invafores. P o r canto debes tolerarlos con aquella re-
fignacion, con que en el Eftio fufres las mofeas, y las
pulgas. Afsi lo dice el citado Padre en la fegunda par-*.
te- de fu Hombre de letras, pag. mihi \ . \ 6 .
„ Que un hombre, que no tiene lino lengua, y vien-
'„ tre (como Antipatro dixo de Demades) quiera empe-
, , ñarfe á hacer de el Sabio con los efcritos de oro de
hombres Eruditos? Que pretenda averiguar en ellos,
„ como químico de letras , quanto tienen de p u r o , y
quanto de liga, condenando lo que no entiende , def-
, , preciando lo que no alcanza , y. royendo lo que no
„ puede malear? Que una vil mugercilla, tomando en
„ vez dclhufo la pluma, eferiba contra el Divino Theo-
,, phrafto,-tachándole de ignorante,}' renueve ios monf-
„ t r u o s antiguos de las fábulas ? Que una foberbiaOn-
. fa-
5, fala condene al grande Hercules de la clava á la rue-
5, ca,.yde el matar monítruos, al torcer hilo? Que un
„ Demofthenes, Cocinero del Emperador Valente,conio
„ íi la cocina fuera Efcuela de Sabiduría , y los platos
los libros, cenfure la Theologia del Gran ¿afilio , y la
„ arroje como vianda fin fal, y doctrina fin fabor ? Que
„ un Juan Ludovico trate de ignorante al Sabio Auguf-
„ tino, y pretenda (como un bruto á Minerva) enfeñar
las formas fylogiíticas á aquella Águila fublime toda
„ entendimiento, y á aquel ingeniofo Arquimedes , que
„ contra los Enemigos de la Fe, y Verdad , fupo hacer
„ tantos rayos, como argumentos, facando las propofi-
>, ciones de clarifsimos principios, como luces del Sol,
j , y uniéndolas con modos dialécticos en preiniílas de
infalible confequencia? N o es efto lo mifmo, que ver
„ falir los ratones de fus cavernas, y correr con una pa-
j , juelapor lanza contra los pechos de los Leones? R a -
g u a s de las Lagunas, que no folo enturbian el agua á
„ Diana; pero que intentan tragarfela entera, y h e r m o -
„ fa? Jumentos , que con las difonantes voces de fus
roncas trompetas pretenden atemorizar , y poner en
„ fuga á los Gigantes? 1
PA^
1№tflBwS>iKrSS &' Sí' § í í * $ S » t » S Í « Í » $ & Sí' 3« U 5¿' ' $ |
!
F O L I T I G A S ,
Y MORALES.
DISCURSO PRIMERO.
I yo miraflc a cngroíTar los libros
con menos corta mía , d ivid iría
en muchos Difcurfos varias ma
terias , que eftán recogid as en
Vino ; porque el efpacio d e pa
pel que qued a , en, parte limpio,
en parte ocupad o d e las letras
mayuículas d el título , entre Difcurío , y Difcurfo, mul
tiplicando el numero d e ellos , avulta confid erable
mente elTomo , fin añad ir trabajo al Autor. Pero , poí
no vend er á los Lectores papel vacio , que d e nacíales
firve , Siempre que las materias,aunque d iverías , por
convenir d ebaxo d e alguna razón genérica pod ían unir
fe , fi por otra parte , cad a una por si fola , ó no per
mitía , ó no merecía mucha extenfion , he procurad o
colocarlas d ebaxo d e un titulo , como componiend o
un Difcurfo folo. Efto ha fuced id o en los Difcurfos'
que tienen el titulo d e Paradoxas, y en otros muchos.
Tow.VI. A Ad-
i PARADOXAS P O L Í T I C A S , Y M O R A L E S ;
Advertencia , que me pareció hacer ahora , afsi por ef-
te Difcurfo, como por muchos de los antecedentes.
PARADOXA PRIMERA.
PARADOXA SEGUNDA.
PARADOXA TERCERA.
ve»
74 PARADOXAS P O L Í T I C A S , Y MORALES.
v.ó á fu Patria de un joven , quedaba cíperanzas de fer
con el tiempo un gran Caudillo.
2 8 Quando ias circunílancias no ofrecen julios mo-
tivos para apartarle de la Ley común , no hai lugar á la
clemencia , porque el apartarle feria injufticia, y es im-
pofsible que una mifma acción fea conforme á una
v i r t u d , y contraria á o t r a , pues feria buena , y mala
al mifmo tiempo. Afsi en ellos calos no hai otro par-
tido que tomar , fino aplicar la pena que preferibe la
ley , por mas que los elpiritus flacos lo noten de dure-
za , porque elfo es lo que conviene al publico.
2 p Annon , Santo Arzobifpo de C o l o n i a e n el un-
décimo ligio hizo arrancar los ojos á ciertos Jueces,
que havian pronunciado una fentencia injufta contra
una pobre muger , dexando á uno folo con un o j o ,
para que íirvieífe de guia á los demás. Supongo que
tan funeíto efpeótaculo llenaría de horror á toda la
Ciudad , y muchos acularían de cruel la execucion : pe-
ro ella fué juila , y juntamente ú t i l , pues la ceguera de
aquellos pocos Jueces á otros infinitos abriría los ojos
para mirar como fentenciaban las caufas.
30 Mas Ungular es el cafo que ahora voi á refe-
rir. Eílando gravemente enfermo el Conde Evkembal-
do de Burban, zeloíifsimo de la Jufticia , fupo que un
fobrino fuyo havia hecho violencia á una doncella:
mandó luego que le llevaífen al ultimo fuplicio. Tram-
peófe la execucion por los que havian de dar cumpli-
miento ai orden con la cfperanza de que el Conde mu--
s
&ts$i.3$l3$j.3Sí3S!í3SíJ8i,
r
PA-;
DISCURSO PRIMERO.
i
PARADOXA QUARTA.
V**' •***
"X".^."^" X^ X
*** ***
*** ***:
***
PA-
DISCURSO PRIMERO;' 27
PARADOXA QUINTA.
PA-:
DISCURSO PRIMERO;
PARADOXA SEXTA.
PA-.
DÍSCURSO •Ps.iMEJÚS;
PARADOX A SÉPTIMA.
PARADOXA OCTAVA.
PAPvADOXA NONA.
ro daña.
£3 T") Ara fentencia aquella de David : Bien-.
J l V aventurado el que exercita fu entendi-
miento en orden al pobre , y neccfsitado. Beatus qui
inteüigit fupsr egsnum, & pauperem. No dice , bien-
aventurado el que para focorrer al pobre exercita fu
amor , fu compafsion , íu caridad , lino el que exercita
fu inteligencia. Myfterio hai en el cafo. Sin duda ; y
el myíterio e s , que la llmoína no aprovecha íi no fe
diílribuyc con inteligencia , diferecion , y juicio.
84 Una mano precipitada en dar, quaí pinta Clau-;
diano la de Probo,
***
'***• *** ***
PA-
DrSCURSO PRIMERO; 4i
PARADOX A DECIMA.
La tortura es medio'/untamentefalible
en la inquificion de los de-
litos.
- %9 TTNtro pidiendo la vènia à todos los Tribu-
Jl_L nales de Juiiicia , para decir lo que (lento
en cita materia. Venero las Leyes , y la practica de ellas;
pero tratándole aqui de leyes puramente humanas, à
qualquiera es licito dií'currir fobre la conducencia , ò in-
conducencia de ellas. Ni el vèr la tortura admitida,
también en el fuero Ecleiiaitico la privilegia del examen,
porque como advierte el docto Canonilia Benedictino
Francifco Schmier , citando à otros Autores , fu practica
no es conforme à la antiguadiíciplina de la Igkíia, fino
que con el difeurfo del tiempo poco à poco fe fué de-
rivando de los Tribunales Seculares à. los Eclefiaílicos:
Pedetentim à Curijs S'¡sadaribus ad EedeJÌ&flicas perve-
nivi* (Schmier in Supplem. ad lib. 5. Decret.) conque,
por lo que mira al Fuero Ecleiiaitico inquirir fobre la
conducencia , 0 inutilidad de la tortura , no es otra co-
fa quedifputar qué practica es mas conforme à razón , fi
la antigua , ò la moderna.
90 Sobre fer la materia de fu naturaleza difputable,
dos notables circunstancias me alientan à entrar en cita
difcuíion : La primera, citaren fee de que muchifsimos
fienten lo mifmo que yo , comprehendiendo entre ef-
tos muchifsimos no pocos de los mifmos Jueces , que
practican la tortura en los cafos establecidos. Sienten
theoricamente contra lo que obran ; pero obran lo que
deben , porque fon-Miniaros , no arbitros de las leyes.
La fegunda, es haverme precedido en la publicación del
mifmo dictamen el doctifsimo Padre Claudio Lacroix.
F2 Vea-
44 P A R A D O X A S POLÍTICAS, Y M O R A L E S .
Véale fu primer Tomo de Theologia Moral,, lib. 4. num'j
145 5. y figuientes..
9 1 Ala fombra de tan ilufire Autor , cuyo re¿tifsl~
mo juicio en materias morales eftá altamente califica-í
do con la general aceptación que logra en toda la Chrif-
tiandad , entro animofo á esforzar fu dictamen , y mio¿
Corto es el recinto de la queítion 1 al primer palto del
difcurfo fe llega al termino»
9 2 Es innegable ,que eíno eonfeíTáren el tormeiH
to depende del valor para tolerarlo. Y pregunto : El va-
lor para tolerarle depende de la innocencia, del que cita
puefto en la tortura > Es claro que no ,, fino de la valen-
ría, de eípiritu, ó- robuílez de animo que tiene. Luego
la tortura no puede fervir para averiguar la culpa , 6
innocencia del que La ella padeciendo,, sifolo la naque-?
z a , o-fortaleza de fu animo*
. 91 Havienda iniquamente repudiado Nerón á Oc-
tavia , y defpofadoíe con. Poppea „110 contenta ella con,,
haverle ufurpado el tálamo , y carona á Octavia ; para:
quitarle también el honor', y la vida la acusó de co-
mercio criminal con tur Efclavo,. Fueron puertas á la,
tortura todas las-criadas de Octavia:, para examinar con.
fus. confefsiones el delito de la. Señora. Qué fucedió?,
unas, confesaron, otras negaron. No- fabian todas que
la actuación era faifa?- Afsilo-afsientan losEfcritores.
Qué importa elfo ?• En la tortura no la verdad, fino el
dolores quien exprime la.confefsion del delito. Quien,
tiene valor para tolerar el cordel.,, niega la culpa , aun-
que fea verdadera ; quien no le tiene la confiefla , aun-
que fea faifa. Los tormentos dados á las criadas de Oc-
tavia, defcubrieron la debilidad de unas , y fortaleza de
otras. Para la averiguación, de la caufa fueron inú-
tiles.
94 Parece pues que igualmente peligran en la tor-
tura los inocentes , que los culpados. Terrible inconve-
niente. Lo peores, que no es el peligro igual, fino de
parte de los inocentes mayor. Diránme que ella es otra
nueva Paradoxa. Confieífolo 5 pero , fi no me engaño,;
ver-
DISCURSO PRIMERO; 45* '
yerdaderifsima. Es confiante , que los hombres que tie-»
nen ofadia para cometer grandes crímenes , fon por lo
común de corazón mas duro y feroz , que los que tie<
T
PARADOXA XI.
Efta
104 i i U a
imaginación , aunque tranlccnctcnce a ig-
norantes , y doctos , liento que va mui lexos de la ver-
dad , y aísi la colocamos en la claíTc de los errores mas
comunes. No hablamos aqui de los dolores de la enfer-
medad , que difpone para la muerte , ó la induce , de ios
quales no fe duda que ordinariamente fon mui graves;
íolo pretendemos examinar fi fe padece alguno, y quan
grave fea en aquel momento en que fe fepara el alma del
cuerpo : generalmente fe juzga , que entonces fe pade-
ce un dolor de mui fuperior inteniion á quantos pueden
inducir los mas crueles tormentos. Exagerante los Au-
tores en los libros , los Oradores en los Pulpitos , y to-
do genero de perfonas en las convcrfacioncs , con efle
modo de difeurrir : Si al arrancar , dicen , una uña del
dedo , ó un dedo de la mano , fe fíente un dolor tan agu-
do , que no hai tolerancia para él,. quanto mas atroz fe
fefentirá al arrancarle el alma del cuerpo? Aqui fe pon-
dera la cílrechifsima unión de ellas dos partes del hom-
bre , para reprefentar la diviíion feníibie en fupremo
grado ; al modo que dos amigos tanto mas ficntcn apar-
tarfe , quanto mas los une el amor ; ó al modo que dos
partes integrantes del cuerpo animado tanto mayor do-
lor caufan con fu divilion , quanto eftán unidas con
mas firmeza. Añade fe , que aquel dolor es general á to-
das las partes del cuerpo , tanto inter ñas , como exter-
nas,-porque de todas fe arranca el alma ; universalidad,
que no tiene otro ningún dolor , pues aun el que es ar-
rojado en una hoguera no fíente el fuego en las entra-
ñas , quando empiezan a tofiarfe las partes externas. Con
eñe difeurfo concluyen , que es atrocifsimo, Sobre quan-
to Se puede imaginar, el dolor que le padece al momento
de morir.
105 Yo miro las coSas tan á otra luz , que juzgo
aquel dolor imaginario , y el difeurfo , con que lo prue-
ban , totalmente iluiivo. Es confundir las ideas de los
objetos , inferir de lo que paíTa en la divilion de las par-
tes integrales lo que Sucederá en la defunion del alma , y
cuerpo : el dolor confine en la difrupcion del continuo,
Tom.Vf G q
5o PARADOXAS POLÍTICAS, Y MORALES,
G en la próxima clifpoficicn para ella. En la clefunionde
alma, y cuerpo no hai divifion alguna del continuo. Lue-
go por que ha de haver dolor?
i q ó Es infinito lo que hace errar á los hombres en
:
JTE^VICE.
116 T TE notado á veces defconfolados los afsif-
J _ J . tentes, quando en los moribundos conf-
tltuidos en las ultimas agonías obfervaron algunos ex-
traordinarios, ó irregulares movimientos , temiendo , 6
creyendo, que aquella agitación provenga de algún acto
de impaciencia, en que han prorrumpido. Digo, que no
hai que temer en elle cafo : ya porque es mui creíble,
que aquellos movimientos fean meramente maquinales:
ya porque, aunque no lo fean , nada de malo arguyen.
En aquella proximidad de la muerte, quando no eíté per-
dido el fentido, efta por lo menos tan débil el ufo de el
difcurfo, ó tan «.nublada la razón, que carece el alma de
la libertad neceífaria para pecar, á lo menos gravemen-
te. No hai ebrio alguno, no hai fugeto , que al falir de
un profundo fueño, efté tan atolondrado , como lo efta
un moribundo colocado en aquella limación.
DISCURSO PRIMERO. 55
1 1 7 Finalmente , afsi por lo que mira á efta apén-
dice , como por lo que toca al aíTumpto principal,
quiero dar el ultimo , y eficacifsimo coníuelo á los que
temen que los dolores de la muerte arriefguen la íalud
del alma. Doi que aquellos dolores fean verdaderos, y
fean atrocifsimos , havrá algún peligro de que el -mo-
ribundo apretado de ellos caiga en pecado grave de
impaciencia, ó en otra alguna culpa mortal ? Refuel-
tamentc afirmo , que ninguno. Por el mifmo cafo que
los dolores fean defaforadamente intenfos , quitan todo
riefgo de pecar , porque perturban la razón , y quitan
la libertad. Efto es común á toda pafsion violentifsima,
como faben Philofophos , y Theologos. Virgilio , que
tuvo mui buen juicio , le hizo de que le havia privado
enteramente de él á Corebo el dolor de ver aprifionada
por los Griegos á fu amada Cafandra.
P A R A D O X A XII.
PARADOXA XIII.
PARADOXA XIV.
PARADOXA XV.
APO-
77
A P O L O G I A
DE ALGUNOS PERSONAGES
FAMOSOS EN LA HISTORIA.
DISCURSO SEGUNDO.
T riAw^W'-s^aszv O folo los fogetos , cnya dcfenfa
emprendemos en eñe Difcuríb,
fon de diferentes tiempos, clanes,
fexos , y profefsiones , mas tam-
bién fon de diferentes efpecies les
capítulos fobre que ha de caer la
'Apologia. Efta diverfídad, atendida por si fola , parece
pedia para cada fugeto difunto difcuríb •. y ala verdad
iobre objetos no de mayor amplitud han compuefto al-
gunos libros enteros. Pero , fobre que la infinidad de
materias diferentes, que me he propuefto abarcar en efta
obra, me precifa á ceñirme todo lo pofsiblc en cada una,
juzgo que la conveniencia genérica de todas eftas Apo-
logias me da libertad para colocarlas todas debaxo de
un titulo común. Ya he advertido lo mifmo en el exor-
dio del Difcúrfb antecedente ; como también, que en cf-
to prefiero á mi utilidad la del lector , el qual, fi yo di-
vidicífe en muchos difeurfos lo que puedo comprehen-
der en uno, me pagaria, como fi eftuvieííe eferito, mu-
cho papel en blanco , ú ocupado de las letras graneles
78 APOLOGIA DE ALGUNOS PERSONAGES,&C.
de los títulos de tantos difcurfos , y yo con menor tra-;
bajo recibirla el mifmo precio por el libro.
EMPEDOGLES.
DEMOCRITO.
§• I I .
§ T A o p i n i ó n vulgar ha t r a n s f o r m a d o á efte
P h i i o f o r o en un p o b r e m a n i á t i c o , en un b u -
fon extravagante , que pallaba la v i d a en c o n t i n u a s car-
cajadas , y p o r reírle de t o d o fe hacia irriíible de t o -
d o s : á l o que ha íido c o n í i g u i e n t e juzgarle p o c o m e -
n o s i g n o r a n t e , que r i d i c u l o . Sin e m b a r g o de eftár tan
d i a b l e a d a ella o p i n i ó n , es fácil demonítrar , que en el
f o n d o fué D e m o c r i t o u n o de l o s p e r f o n a g e s mas f e r i o s ,
y de m a y o r t a l e n t o que t u v o la A n t i g ü e d a d . Efto acre-
ditan fu aplicación al e í l u d i o , fu m o d o de v i v i r , la ef-
t i m a c i o n que de él h i z o fu Patria , y fu v a l l a fabi-
duria. T o d o lo que v a m o s á decir en detenía fuya , conf-
ta de D i o g e n c s L a e r c i o , de A t h e n e o , de V a l e r i o M á -
ximo , Cicerón , y otros.
p Su a p l i c a c i ó n al eftudio fué tanta , que le t e n i a
en un c o n t i n u o r e c o g i m i e n t o . A p e n a s íalia jamás de fu
cafa , ni aun apenas en fu mifma cafa fe e f p a c i a b a , m e -
t i d o caíi Siempre en el quarto de eftudio l e y e n d o , m e -
d i t a n d o , y e f e r i b i e n d o . El defeo ardiente , que t e n i a
de adquirir mas , y mas luces , le o b l i g ó á dexar p o r m u -
cho t i e m p o , n o í o l o el r e c o g i m i e n t o , mas t a m b i é n la
Patria , para confultar l o s S a b i o s de E g y p t o , de P e r -
fia , de Caldea , y c o m o quieren a l g u n o s , aun l o s de la
E t h i o p i a , y la I n d i a . C o n f u m i ó en ellas p e r e g r i n a c i o -
nes t o d o lo que havia heredado de fu padre , que m o n -
taba á cien t a l e n t o s . D e vuelta á fu P a t r i a , fué acufa-
do ante l o s M a g i f t r a d o s , c o m o difsipador d é l o s b i e -
nes paternos , p o r q u e en aquel P a i s fe t e n i a elle p o r
delito grave , y fe caftigaba p r i v a n d o al difsipador del
fepulcro de fus m a y o r e s , c o m o m i e m b r o i n d i g n o apar-
tado de la familia. El m o d o de juftificarfe D e m o c r i t o
Totn.VJ. L fue
82 APOLOGÍA DE ALGUMOSPERSOMAGES,&:C.
fué ungular. E f c o g i ó el mejor de l o s libros que h a v i á
efcrito ( intitulábale El gran Diacofmo ) y le l e y ó ante
l o s M a g i í l r a d o s , c o m o que aquel era el fruto d e fus v i a -
g e s , y de t o d o l o que havia e x p e n d i d o en e l l o s . A d m i r a -
ron t a n t o l o s M a g i í l r a d o s la profundidad de doctrina,
que havia en aquel libro , que d i e r o n p o r b i e n expen-
d i d o en adquirirla t a n c r e c i d o c a u d a l ; y n o f o l o a b -
f o l v i e r o n á D e m o c r i t o , mas hicieron que del p u b l i c o fe
le contribuyeífen q u i n i e n t o s t a l e n t o s , y c o m o á v a r ó n
e x c e l e n t i f s i m o fe le erigieífen eflatuas. N ó t e l e , fi l o s
J u e c e s , y la Patria practicarían tan altas a t e n c i o n e s c o n
un h o m b r e caprichofo , y truhán , p o r n o decir femifa-
t u o , que á t o d o s m o m e n t o s fe citaba r i e n d o de l o s
J u e c e s , de la P a t r i a , y de t o d o el M u n d o .
10 L a grande aplicación de D e m o c r i t o , a c o m p a -
ñada de un g e n i o f ú t i l , y v a l l o , le c o n c i l i a r o n tanta
e x t e n í i o n de iabiduria , que n o c o n o c i ó otra igual aque-
lla edad , pues al pallo que de l o s P h i l o í o p h o s de aquel
t i e m p o el que m a s abarcaba , í o l o f e eftendia á l a P h y -
íica , E t h i c a , y Metaphyfica ; D e m o c r i t o á eílas tres Fa-
cultades a ñ a d i ó la M e d i c i n a , la B o t á n i c a , la G e o m e -
tría , la A r i t h m e t i c a , la Muíica , la A i t r o n o m i a , l a P o e -
íia , la P i n t u r a , y el C o n o c i m i e n t o de las L e n g u a s . T o -
d o e l l o confia del C a t a l o g o de l u s obras , q u e hallamos
en D i o g e n e s L a e r c i o .
11 P r e g u n t o , 11 las c i r c u n í l a n c i a s , que h e m o s i n -
íinuado de D e m o c r i t o caracterizan un b u f ó n ridiculo?
ó antes bien á un v a r ó n circunfpccto , grave , ferio, c o n -
t e m p l a t i v o , y de m u i fuperiores luces á las c o m u -
nes?
12 Confieífo q u e la rifa d e D e m o c r i t o fe ha hecho
p r o v e r b i o en el M u n d o , c o m o n i m i a , ó redundante,
y que e ñ e p r o v e r b i o fué ocafionado de las n o t i c i a s que
de cite P h i l o f o p h o n o s d e x a r o n a n t i g u o s Efcritores.
C o n t o d o d i g o , que eíía rifa tan decantada n o exce-
d i ó de l o que permite la gravedad p h i l o f o p h i c a .
ij Para cuya d e m o n í l r a c i o n fe debe confiderar,
que q u a n t o hai de m a l o en l o s h o m b r e s p u e d e reducir-
fe
DISCURSO SEGVXDO. gj
fe arres c a p í t u l o s , que f o u fu m a l i c i a , fu defgracia , y
fu i g n o r a n c i a , ó falta de advertencia. Eftos tres niales
naturalmente m u e v e n , en quien racionalmente los c o n -
templa , tres d i f u n t o s afectos. L a malicia, i n d i g n a c i ó n ;
la defgracia, laftima; la i g n o r a n c i a , rifa. Según l e deter-
m i n a , pues , la coníideracion á a l g u n o de eftos tres
m a l e s , íe m u e v e d i f u n t o afecto ; y de aqui v i n o la gran
diferencia caracteriílica , que t o d o s n o t a n en l o s d o s
P h i l o f o p h o s de afectos antagoniftas , H e r a c l i t o , y D e -
m o c r i t o . Pintan á H e r a c l i t o l l o r o f o , en el m i f m o gra-
d o que á D c m o c r i t o rifucño. Es , que c o n t e m p l a b a ca-
da u n o diftinto mal en el h o m b r e ; el p r i m e r o fus def-
dichas , el f e g u n d o fus necedades. Efto es l o que c o -
m u n m e n t e fe dice ; que yo á la verdad j u z g o que H e r a -
clito n o excedia de c o m p a f s i v o , fino de iracundo , ni fi-
xaba la confideracion en la defgracia , fino en la m a l i -
cia de l o s h o m b r e s . Confia efto de fus tres cartas á fu
a m i g o H e r m o d o r o (lo ú n i c o que n o s ha q u e d a d o de fus
efcritos ) en las quales , tratando del mal g o b i e r n o , y
depravadas coftumbres de la Ciudad de E p h e f o , Patria
l u y a , n o fe v é el m e n o r veftigio de afecto c o m p a f s i v o .
En t o d o fu c o n t e x t o eftán refpirando ira , i n d i g n a c i ó n ,
y o d i o . E n las mifmas cartas fe vé que era p r e í u m p r u o -
fo en e x t r e m o , arrogante , f o b e r b i o , y deípreciador d e
t o d o s l o s demás h o m b r e s . Q u é tiene efto que ver c o n
la Índole blanda , y laftimera que fe le atribuye ? F i -
nalmente es confiante , que de tedio de l o s h o m b r e s fe
retiró á vivir folitario en l o s m o n t e s . T o d o efto fig-
nifica un g e n i o tétrico , infociable, c e ñ u d o , y que H e -
raclito merecía el e p i t h e t o que fe d i o al A t h e n i e n f c
T i m ó n , de Mifantbropo , efto e s , enemigo , ó aborrece-
dor de los hombres.
14 P e r o que H e r a c l i t o eftuvieífe o r d i n a r i a m e n t e
llorando , c o m o c o m u n m e n t e fe dice ; que riñendo , co-
m o y o l i e n t o , t o d o es u n o para nueftro p r o p o f i t o , el
qual fe reduce á manifeftar, que en H e r a c l i t o , y D c -
m o c r i t o fe m o v i a n diftintos afectos , porque fixaban la
atención en o b j e t o s diftintos. Fucilen , ó n o j u l i o s el
L 2 Han-
84 A P O L O G Í A D E ALGUNOS P E R S O N A G E S J & C .
llanto , ó ira de H e r a c l i t o , cuya A p o l o g í a n o i n í t k u i -
m o s aquí , d i g o que era razonable la rifa de D e m o -
c r i t o . Miraba D e m o c r i t o á l o s h o m b r e s p o r la parte p o r
d o n d e f o n ridiculos : confidcraba fus necedades , fus
l i m p i e z a s , fu p r e f u m p c i o n mal fundada , fus v a n o s d e -
f e o s , fus inútiles o c u p a c i o n e s , o b j e t o s t o d o s d i g n o s de
rifa , p o r q u e , c o m o d i x o Ariftotelcs , es ridiculo , 6
írriíible tocio l o que es torpe , fin caufar d o l o r , turpitu-
do fine dolore. L a necedad , y v a n i d a d del h o m b r e
f o n t o r p e s , y n o le duelen , antes cita c o n t e n t o c o n
ellas. L u e g o f o n o b j e t o s d i g n o s de rifa.
15 Si. M a s p u é d e l a r i l a , aunque n o hierre el o b -
j e t o , pecar de n i m i a ; y acafo ello es l o que fe repre-
hende en D e m o c r i t o . R e í p o n d o , cpic aun p o r efta par-
te la acufacion es injuria , y fundada en una mera e q u i -
v o c a c i ó n . L a rifa tan decantada de D e m o c r i t o n o fue
t a n t o exercicio c o m o D o g m a : mas fué o b j e t o , que ac-
t o . D i f t i n g u i ó f e elle P h i l o f o p h o entre l o s demás , n o
porque ricííe mas que t o d o s l o s d e m á s P h i l o í o p h o s , fi-
n o p o r q u e pufo a t e n c i ó n efpecial fobre las ridiculezes
de l o s h o m b r e s , y h i z o parte p r i n c i p a l í s i m a de fu d o c -
trina m o r a l la m á x i m a ungular de que las cofas huma-
nas mas m o v í a n á rifa , que á ira , ni c o m p a f s i o n . Fué
fácil c o n c e b i r m u í i n c l i n a d o á la rifa a un P h i l o f o p h o ,
que p h i l o f o p h a b a de elle m o d o , y de concebirle m u i
i n c l i n a d o á la r i f a , fué t a m b i é n fácil el traníito á c o n -
cebirle riendo á cada m o m e n t o : pero fu g e n i o folita-
r i o , y v i d a retirada hacen prueba eficaz en c o n t r a r i o .
Q u é f u g e t o mui i n c l i n a d o al retiro fe ha vifto que fuef-
fe m u i riíueño ? Parecen a b f o l u t a m e n t e i n c o n c i l i a b l e s
eftas d o s cofas. El que tiene mucha propenfion á reir
b u f c a l a s ocaíiones de execucarlo , y ellas fe hallan en la
c o m p a ñ i a d e l o s demás h o m b r e s , n o en la f o í e d a d .
16 Confirmafe que D e m o c r i t o era m a s f e r i o , q u e
feftivo , c o n un fuceífo f u y o q u e refiere L u c i a n o . D e -
cia D e m o c r i t o , que q u a n t o fe hablaba de f p e c i r o s ,
p h a n t a í m a s , y apariciones de cípiritus , era fábula.
C i e r t o s m a n c e b o s , ó para examinar íi l o fentia a f s i , 6
pan
DISCURSO SEGUNDO. §5
para hacerle mudar de p a r e c e r , entraron en fu quarto
de noche , h a c i e n d o reprefentacion de d i a b l o s c o n maf-
earas , y disfrazes h o r r e n d o s , á que añadieron v o c e s , y
m o v i m i e n t o s c o r r c í p o n d i c n t c s . D e m o c r i t o , que á la
fazon eftaba eferibiendo , bien l e x o s de aíluftarfe, fin
detener la p l u m a , y aun cali fin di gn arfe de m i r a r l o s ,
con v o z 'fevera les d i x o , que dexaíien de l o q u e a r , 6
fucilen á loquear á otra parte , y fin articular otra pala-
bra fué c o n t i n u a n d o c o n gran f e r e n i d a d f u eferitura. Q u é
ocafion m a s o p o r t u n a para reirfe D e m o c r i t o , íi fuelle
de g e n i o a l g o teftivo ? L a s matachinadas de l o s fingi-
d o s fpectros eran aptíísimas para excitar la rifa en
quien c o n o c í a fer t o d o fingimiento. Para una i n t e n t o -
na de aquel g e n e r o era caítigo m a s p r o p r i o una irrifíon
jocofa , que una i n c r e p a c i ó n feria. E n fin , en aquel o b -
jeto havia q u a n t o es meneiter para ferio de la rifa , ef-
t o es , torpeza jin dolor. P u e s p o r qué n o fe r i ó D e m o -
crito ? P o r qué lío l o s z u m b ó ? P o r qué n o .hizo irri-
i i o n d e í u mal forjada t r a m o y a ? Sin d u d a , que fu h u -
m o r n o le llevaba m u c h o á la carcajada.
17 N o repugnare que D e m o c r i t o rieíTe algunas v e -
ces afectadamente , á f i n de abrir c a m i n o para d o g m a t i -
zar fobre las ridiculezes de l o s h o m b r e s ; p e r o ia rifa
afectada n o fe o p o n e á la feriedad verdadera. T a m b i é n
concederé que en algunas ocaficnes , en que rciria d e
v e r a s , fe tendría fu riía p o r e x t r a v a g a n t e . T e n i a D e -
m o c r i t o p o r ridiculas muchas acciones de l o s h o m b r e s ,
que l o s demás reípetaban c o m o m u i razonables ; califi-
caba de necedades las que o t r o s m i r a b a n c o m o d i í c r e -
c i o n e s . Keiriaíe de ellas D e m o c r i t o , y i o s demás , q u e
no penetraban c o m o él la ridiculez que havia en tales
o b j e t o s , p e r eíib m i í m o le tendrían á él p o r r i d i c u l o .
18 E n el T o m o primero , difeurfo 1 . n u m . p , d i m o s
noticia de tres cartas de i i i p p o e r a t c s , en q u e eíte refiere
c o m o l o s Abdcritas le llamaron para que curaíTe á D e -
m o c r i t o c o n c i u d a d a n o f u y o , á quien p o r fus imperti-
nentes rifas juzgaban d e m e n t a d o ; que H i p p o c r a t e s fué á
verle, y d e la converfacion q u e t u v o c o n é l , refultó efti-
mar-
Só A P O L O G Í A DE ALGUNOS P E R S O N A G E S , & : C .
marle defpues p o r un h o m b r e Supremamente cuerdo , y
Sabio. Eíto podrá Servir de confirmación á t o d o l o que
a c a b a m o s d e decir en a b o n o d e D e m o c r i t o . P e r o valga
la verdad : defpues que eferibimos aquello , h e m o s n o -
t a d o que m u c h o s C r í t i c o s fe inclinan á que las exprelía-
das cartas f o n parto fuppofiticio de H i p p o c r a t e s ; y afsi
n o p r e t e n d e m o s aprovecharnos de ellas m a s q u e c o m o
un m o n u m e n t o i n c i e r t o .
19 U n a cofa d e b o advertir, y es, que en el lugar c i -
t a d o hai una exprefsion m i a , que p u e d e Significar , q u e
la rila de D e m o c r i t o era en algún m o d o nimia. Y p o r -
que n o Se m e note de inconfequencla , repito aqui l o que
ya noté en otras ocafiones: Q u e n o Suelo exprelfar m i
particular dictamen en ninguna materia , en que Siento
contra la o p i n i ó n vulgar, fino q u a n d o la trato de i n t e n -
t o ; quando la t o c o p o r i n c i d e n c i a , me ajuílo regular-
m e n t e al c o m ú n m o d o de hablar. E ñ e m e t h o d o es p r e -
d i o para dexar corriente la letura , y n o embarazar l o s
difeurfos c o n queftiones eStrañas.
20 O t r o chifme fe ha fufeitado contra D e m o c r i t o ,
que á fer verdad , probaria m a s eficazmente Su Salta de
j u i c i o , que t o d a la multitud de c a r c a j a d a s , que le i m p u -
t a n . Refieren varios A u t o r e s , entre ellos A u l o G e l l i o ,
que a d v i r t i e n d o , que l o s o b j e t o s fenfibles le diftrahian
a l g o de la c o n t e m p l a c i ó n de la naturaleza de las cofas,
fe p r i v ó v o l u n t a r i a m e n t e de la v i ñ a , para difeurrir c o n
mas a t e n c i ó n , y profundidad. Confeífaré fin dificultad,
que tal refolucion f o l o cabe en un fefo d e p r a v a d o . P e -
ro P l u t a r c o rechaza efte c u e n t o c o m o fabulofo. Illud
quidem falso jatüatum efi de Democrito , quod fponté fibi
ademerit oculos, &c. ( L i b . de Curiofit.) Q u é necefsidad
tenia, para remover el eStorvo de l o s o b j e t o s fenfibles, de
quitarle l o s ojos? N o lograrla l o mifino m e t i e n d o f e en
un lugar o b f e u r o , Siempre q u e quifieíTe meditar? E l P o e -
ta L a b e r i o , dando p o r verdadero el h e c h o , le Señaló
otra cauSa. D i c e que Se p r i v ó de la vifta D e m o c r i t o por
n o ver la proSperidad de l o s m a l o s ; c o m o fi n o confi-
guieíTe también l o m i f m o v i v i e n d o Siempre retirado de
to-
DISCURSO SEGUNDO; 87
t o d o c o m e r c i o : fuera de q u e cegarfe p o r eíía caufa ar-
g u y e un g e n i o extremamente d e f a b r i d o , y r a b i o f o , en
lugar del frefco, y rifueño, que a t r i b u y e » á D e m o c r i t o .
N i es m a s veriíimil l o que dice T e r t u l i a n o , que fe c e g ó
porque n o p o d i a ver las mugeres fin m o v i m i e n t o de la
i n c o n t i n e n c i a , y fin d o l o r , q u a n d o n o p o d i a gozarlas.
N a d a mas a g e n o del g e n i o de D e m o c r i t o , de quien e s
confiante, que nunca quifo cafarfe. M a l fe foftienen las
fábulas, q u a n d o fe e x a m i n a a t e n t a m e n t e la v e r d a d .
EPICURO.
§• I I I .
21 T ~ * L o r e c i ó elle P h i l o f b p h o en el t i e m p o q u é
empezaba á arder la e m u l a c i ó n entre Maef-
t r o s , y D i f c i p u l o s de varias Sectas de P h i l o f o p h i a . M u -
t u a m e n t e l e hacían guerra u n o s á o t r o s , y a c o n infieles
interpretaciones de la doctrina, y a c o n ialías acuñaciones
de las c o í l u m b r e s . E n el primer p u n t o m u c h o s t i e n e n
por un infigne calumniador á A r i í l o t e l e s . P e r o c o m p e n -
sófele c o n ventaja en el f e g u n d o , en que él fué atroz-
m e n t e c a l u m n i a d o . E n Epicuro halló m a s apariencias,
que en o t r o s P h i l o f o p h o s , la malicia para autorizar la
calumnia. C o n í i i t u i a E p i c u r o la fuprema felicidad en el
Deleite : doótrina e q u i v o c a entre t a n t o que fe mira e n
efta generalidad, p o r q u e el deleite e s indiferente á h o -
n e í l o , y t o r p e . Pero el v u l g o c o m u n m e n t e al oir la v o z
deleite la determina á mala fignificacion , porque fegun
fu groffero m o d o de entender., apenas percibe o t r o s d e -
leites que l o s de la i n c o n t i n e n c i a , y deítemplanza, ó pipr
l o m e n o s eftos tiene p o r l o s m a y o r e s . L a ruda i n t e l í i
gencia del v u l g o alentó á l o s É m u l o s para infamar l a
doctrina de Epicuro , c o m o que c o l o c a b a t o d a la b i e n -
aventuranza en la fehfualidad , y la gula. F u é fácil d e r i -
var l u e g o la acufacion de la doótrina á las c o í l u m b r e s ,
por-
8E APOLOGTA D E ALGUNOS P E R S O N A G E S , & C .
p o r q u e fiendo e v i d e n t e , que t o d o s l o s h o m b r e s c o n ape-
t i t o i n n a t o defean fer felices , era. coníiguiente que E p i -
curo bufcaria c o n anfia aquellos o b j e t o s , en quienes
creía coníiiür la felicidad. A t r i b u y é n d o l e pues aquel
p e r v e r í o d o g m a , era precifo inferir una v i d a cc-ntorme
á él, efto es c o n f u m i d a en l a f e i v i a s , g l o t o n e r í a s , y em-
briaguezes.
22 D e m á s ' d e la caufa Sobredicha , otras d o s c o n -
currieron á manchar la fama de E p i c u r o . L a primera fué
Su errada , y aun impía o p i n i ó n en o r d e n á la D e i d a d .
D e c i a E p i c u r o , que havia D i o f e s , pero D i o f e s o c i o f o s ,
I n e p t o s , incapaces de hacer bien ni mal á nadie, fin p r o -
v i d e n c i a , fin actividad, fin influxo ; y aunque confeílaba,
que eran merecedores de culto , atribuía cita deuda pre-
cisamente á la excelencia de Su naturaleza , Separándola
e n t e r a m e n t e de t o d a d e p e n d e n c i a , ó a g r a d e c i m i e n t o ; al
m o d o que p o r la ventaja de Su calidad o b i e q u i a m o s á
u n n o b l e , que n o n o s ha h e c h o , ni p u e d e hacer bien , ó
mal a l g u n o . Confieílb, que e ñ e era un p o d e r o f o m o t i v o
para penSar mal de la doctrina m o r a l , y aun de las coS-
t u m b r e s de Epicuro : p o r q u e r e m o v i d o s el t e m o r del caS-
t i g o , y la cSperanza del p r e m i o , p o c a eftimacion , 6 prac-
t i c a de la virtud Se puede cSperar de l o s h o m b r e s .
23 L a Segunda cauSa del deScredito de E p i c u r o fué
el relaxado m o d o de v i v i r de a l g u n o s Sectarios f u y o s ,
q u e t o r c i e n d o la doctrina del Maefiro á favor de fus v i -
c i o f a s i n c l i n a c i o n e s , perfuadieron á m u c h o s , que E p i c u -
r o havia enfeñado l o que e l l o s decían , y v i v i d o c o m o
ellos.
24. Sin e m b a r g o de t o d a s efias p r e o c u p a c i o n e s , n o
q u e d ó tan deplorada la cauSa de E p i c u r o , que a l g u n o s
celebres A u t o r e s n o emprendieflen felizmente fu defen-
fa. O c u p a entre ellos un h o n r o í i f s i m o lugar nueftro Sa-
m ó l o D o n FranciSco de Q u e v e d o , quien c o n t e f t i m o n í o s
de m u c h o s claros v a r o n e s de la antigüedad c o n v e n c e l o
primero , que Epicuro no conftituia la felicidad en l o s
deleites c o r p ó r e o s , fino en l o s espirituales : l o Segundo,
que elle P h i l o S o p h o , b i e n k x o s de Ser dado á la g l o t o -
ne-
DrscüRso S E G U N D O . ' £9'
necia, y embriaguez, era m u i parco en c o m i d a , y bebi-
d a , y ordinariamente paliaba c o n pan , agua, y quefo , ó
algunas l e g u m b r e s de fu huerto : l o tercero , que v i v i ó
caitamente, y abftrahido de i o s deleites v e n é r e o s . C o m a
las obras de Q u e v e d o andan en las m a n o s de t o d o s , o m i -
t o repetir l o s t e í t i m o n i o s que é l alega á favor de E p i c u -
r o . P e r o añadiré d o s d e gran p e l o , que el o m i t i ó . E l
p r i m e r o es de San G r e g o r i o N a z i a n c e n o , el qual en f u s
j á m b i c o s j.uftifica altamente afsi la doctrina moraL, c o m ^
la vida de E p i c u r o . Ellas f o n fus palabras:,
Sinceramente, S u p u c í t o q u e ha h a v i d o P h i l o f o p h o s q u e
n e g a r o n t o d a D e i d a d , qué dificultad hai en que otro,,
ú o t r o s concibieílen exilíente Solo u n a D e i d a d o c i o f a ,
ó c o m o titular , y h o n o r a r i a , feliz p o r sí m i f m a , y def-
embarazada de t o d o c u i d a d o . S o n Sumamente varias l a s
concepciones d é l o s hombres. T e n e m o s exempio idénti-
c o en P l i n i o el m a y o r . Efte grande h o m b r e ,. que t u v o
bailante luz para c o n o c e r que eran í a b u l o f o s t o d o s l o s
D i o S é s q u e adoraba el G e n t i l i f m o ,. y f e n t ó p o r baza ñ-
xa , que íi h a v i a D e i d a d era una f o l a , pueita ella h y -
p o t h c í i s cayó- en el m i f m o error de E p i c u r o , porque dí-
xo r e f u e l t a m e n t e , que en cafo de haver tal D e i d a d , n o
fe mezclaba p o c o , ni m u c h o c o n las c o l a s h u m a r a s , y
que era c o l a ridicula penfar l o contrario : Irri'dcndum
verd agere curam rerum bumanariwi illud quid quid eji
Summum. L o m a s e s , que elle d e f p r e u d i m i e n t o del. g o -
b i e r n o del m u n d o l o c o n t e m p l a b a , n o corno d e f e c t o ,
antes corno excelencia precita en la D e i d a d , y ai c o n -
trario la P r o v i d e n c i a c o m o ajamiento de fu nobleza:
An netamtrijli, multipliciqug minijlerio non pslluicre-
<j6 APOLOGIA DE ALGUNOS P E R S O N A G E S , & C .
'd.xmiis , dubitemufus ? P u e s fi u n o de l o s ' m a y o r í a
h o m b r e s de la A n t i g ü e d a d , qual l o fue fin duda P l i n i o ,
• c o n c i b i ó c o m o perfección neceilaria .de la D e i d a d la
i n a c c i ó n , p o r que eftraúaremos el m i f m o error, en E p i -
c u r o ? E l l o c o m o quiera que f u e l l e , ó extravagancia d e
fu i m a g i n a c i ó n , ó artificio para disfrazar la impiedad,,
E p i c u r o v i v i ó i n d e m n e en A t h e n a s , fin q u e fe le hi-;
cieíie caufa robre el articulo de R e l i g i o n . Y fi D i a g o - :
ras huvieffe d a d o e n la m i f m a e f c o t a d u r a , defahogaria
fu furiofa colera, fin el riefgo de que l o s A t h e n i e n i e s le
perfigmeífen à fangre , y f u e g o , p o n i e n d o c o n p u b l i c o
p r e g ó n en v e n t a fu cabeza. Efte P h i l o f o p h o , h a v i e n d o
fido l o m a s de fu v i d a fuperfticiofamente d e v o t o c o n
fus D i o l e s , e n edad a l g o abalizada cali de repente fe
h i z o Atheiíla. El m o t i v o fué de l o s m a s ridiculos d e l
m u n d o . Era D i a g o r a s , n o f o l o P h i l o f o p h o , m a s t a m -
b i é n P o e t a . S u c e d i ó , q u e o t r o d e la m i f m a p r o f e f s i o n ,
p e r o de inferior n u m e n , le r o b ó ciertos verfos , que h a -
v i a c o m p u e i t o . H i z o l e comparecer en j u i c i o fobre el
h u r t o D i a g o r a s ; t o m ó f e l e juramento, al d e l i n q u e n t e , y;
él falfamente j u r ó , que l o s verfos- eran c o m p o f i c í o n fu«
y a . N o havia teftigos; c o n q u e el f e o fué a b í u e l t o , y p u -
b l i c ó defpu.es l o s verfos c o m o p r o p r i o s , r e c i b i e n d o p o r
e l l o s l o s aplaufos, que eran d e b i d o s à D i a g o r a s . D e tal
m o d o le d e s b a r a t ó a efte el e n t e n d i m i e n t o la i n d i g n a -
c i ó n , q u e , fin m a s n i m a s , e m p e z ó à publicar, q u e era un
error del m u n d o el penfar q u e havia D i o f e s , porque fi
l o s huvicfle, o n o permitirían , ó. caftigarian la i n í o l e n -
c i a de i u ofenfor, b i e n jexos de coronar i n i q u a m e n t e el
h u r t o c o n el p r e m i o del a p k u f o . P o d r i a , d i g o , D i a g o r a s
c o n el f y f t e m a T h c o l o g i c o de E p i c u r o defahogar la ira,
fin arriefgar la c a b e z a , pues para el efecto ele triunfar
i m p u n e m e n t e la maldad, l o m i f m o tiene carecer la D e i -
d a d de P r o v i d e n c i a , que carecer el m u n d o de D e i d a d ; y
i o s Athcnienfes le tolerarían aquella blasfemia, c o m o fe
la t o l e r a r o n à E p i c u r o .
PLI-:
DISCURSO SEGUNDO. 99
P U N I Ó E L MAYOR.
§• I V .
37 T N f e l i z perfonage h a c e P l i n i o entre l o s litera*
jj_ t o s de efcalera a b a x o . N a d a m a s es que un
embuftero, que llenó fu Hlftoria natural de patrañas. Ef-
t o ha d e p e n d i d o en primer lugar de l o s A u t o r e s Secretif-
tas , l o s quales para calificar c o n la autoridad dé P l i n i o
muchas maravillas, que falazmente n o s p r o m e t e n , citan
á P l i n i o , n o f o l o para l o que P l i n i o n o d i c e , p e r o , l o
que es m u c h o m a s , para l o que abierta, y claramente r e -
prueba. F r e q u e n t e m e n t e hace P l i n i o m e n c i ó n de v a r i o s
fecretos p r o d i g i o f o s , ú o p e r a c i o n e s raras de la M a g i a ;
pero fiempre c o n irrifion, y defprecio, tratando de char-
latanes, y embufteros á l o s autores de e l l o s . Siempre h e
d i c h o , y n o m e retrato. N o fe hallara fecreto a l g u n o e n
t o d o P l i n i o d e eftos, que tienen algún carácter de p o r -
t e n t o f o s (íiendo m u c h o s l o s que refiere) á quien n o eche
el repulgo de patraña, m e n t e c a t e z , ficción de l o s que fe
llaman M a g o s , & c . Y qué hacen l o s Secretiftas ? p r o p o -
nen el S e c r e t o , que l e y e r o n en P l i n i o , c o m o v e r d a d e r o ,
callando d o l o f a m e n t e que P l i n i o hace burla de él. A
q u a n t o s n e c i o s han trahido al retortero c o n la i n v e n -
c i ó n d e q u e pueden hacerle inviíibles q u a n d o quieran!
Efte gran n e g o c i o fe c o m p o n e trahiendo c o n í i g o la p i e -
dra H e l i o t r o p i a , c o n la hierba del m i f m o n o m b r e . Efta
milagrofa receta fe halla en P l i n i o : ( l i b . 3 7 . c a p . 1 0 . ) pero
t a m b i é n fe halla cofida c o n ella la cenfura m a s fuerte,
que fe le p o d i a arrimar, pues dice P l i n i o , que en un dif-
parate de efte t a m a ñ o fe v é clarifsimamente la ofladia, y
defverguenza c o n que m i e n t e n l o s que fe apellidan M a -
g o s . Mazorum impudentia vel tnanifejiifsimum in hac
quoque (la piedra H e l i o t r o p i a ) exemplum eft. L o m i f m o
fucede en t o d o l o d e m á s . Y en el í í b . 3 0 . cap. 1 . c o n un
N 2 raf-
ioo APOLOGÍA DE A L G U N O S P E R S O Ñ A G E S , & C .
r a i g o f o l o c o n d e n a t o d a la cáfila de o p e r a c i o n e s M á g i -
c a s , llamando á la M a g i a la m a s e n g a ñ ó l a , y falaz de t o -
das las zrt£s,fraudiikntif.úmaArtium.
38 A u n d e l o s fecretos m e n o r e s , que n o t i e n e n ca-
rácter a l g u n o de increíbles , c o m o f o n c o m u n m e n t e l o s
m e d i c i n a l e s , habla c o n t a n t a circunfpeccion, que apenas
p r o p o n e a l g u n o afirmativamente. Siempre , ó cafi fiem-
pre dá traslado á l o s q u e l o d i c e n , fin t o m a r cofa p o r fu
c u e n t a : Dicant ,ferunt, tradunt, &C. y muchas v e c e s
expreífia en particular el A u t o r .
19 M a s c o m o f o n p o c o s l o s que leen á P l i n i o en
P l i n i o , si f o l o en las infelices c o p i a s , q u e hicieron de él
t a n t o s charlatanes,y e m b u i l e r o s , creyendofe c o m u n m e n -
t e que t i e n e n p o r autor á P l i n i o las ridiculas ficciones
q u e ie atribuyen , ha l l e g a d o efte grande A u t o r á p a d e -
cer la i g n o m i n i o f a vulgar o p i n i ó n de p o c o v e r i d i c o , 6
n a d a fincero.
40 L o p e o r es (quifiera callarlo, y el fanto defenga-
ñ o m e m a n d a decirlo) que n o f o l o Secretiftas , y charla-
t a n e s han puefto á P l i n i o en efta mala o p i n i ó n , m a s aun
E f c r i t o r e s de m u í diferente n o t a . E n q u a n t o s eferitos
P h i l o f o p h i c o s , en q u a n t o s S e r m o n e s impreffos, y aun en
l i b r o s de Ethica, y Myftica, fe ha hallado c i t a d o P l i n i o
c o m o l e g i t i m o autor de tales patrañas 1 S u p o n g o que l o s
m a s le citan Con buena l e e , p o r q u e le hallaron c i t a d o en
o t r o s . P e r o D i o s n o s libre de que á u n Predicadorcillo
de l o s triviales le v e n g a bien para fimil , ó para alufion,
alguna de las quimeras, que defprecia P l i n i o , que n o d e -
xará de encaxarla á la f o m b r a de fu autoridad , c o m o
afirmada por él.
41 O t r a ocafion del deferedito de P l i n i o es la mul-
t i t u d ele p r o d i g i o s naturales (en gran parte fallos) que
refiere en fu H i í t o r i a , eípccialmcnte de gentes monftruo-
fas, y de raras qualidades, c o m o P y g m e o s , h o m b r e s fin
cabeza, y c o n l o s o j o s en l o s h o m b r o s ; o t r o s c o n cabe-
za canina••>o t r o s c o n un o j o f o l o , y cffe c o l o c a d o en la
frente ; o t r o s c o n l o s pies v u e l t o s atrás ; o t r o s c o n d o s
pupilas en cada o j o ; o t r o s de pies tan g r a n d e s , que echa-
dos
DISCURSO SEGUNDO. IOI
dos fe hacen f o m b r a á t o d o el cuerpo c o n ellos ; o t r o s
que v e e n mejor de n o c h e que de d i a ; n a c i ó n entera de
hermaphroditas ; gente que f o l o fe m i l e n t a de olores;;
otra d o n d e t o d o s l o s i n d i v i d u o s f o n f a f c i n a n t e s , & c .
C o m o las frequentes peregrinaciones de l o s E u r o p e o s e n
e l l o s ú l t i m o s l i g i o s han penetrado t o d a s las P r o v i n c i a s
del m u n d o , y e n n i n g u n a han hallado tales monítruos,-
fué fácil fofpechar u n o s , que t o d o s havian fido fabrica-
d o s en la cabeza de P l l n i o , y o t r o s creer que P l i n i o h a -
via fido neciamente crédulo á relaciones de v i a g e r o s
n.entirofos.
42 U n a , y o t r a calumnia fe redarguye c o n e v i d e n -
cia. L a primera, porque al p i é de cada n o t i c i a de aque-
lla claíle expreffa el A u t o r de d o n d e la d e r i v ó . L a í e -
g u n d a , p o r q u e antes de p r o p o n e r aquella turba de p r o -
d i g i o s hace la protefta de que n o fale p o r fiador d e la
v e r d a d , ó exiftencia de e l l o s , y r e m i t e al L e c t o r para q u e
fe entienda c o n l o s A u t o r e s , que cita, y que fe ofrece e x -
hibir á qualquiera que llegare á p r o p o n e r l e fu duda : Nee_
turnen ego in plerifque eorurn objlringam fidem meam, po-
tiufque adAuBores relegabo qui dubijs reddentur
y omnibus¿
43 Para c o m p l e m e n t o de ella defenfa de P l i n i o , e x -
p o n d r e m o s a q u i el j u i c i o q u e de é l , y de f u H i i t o r i a na-
tural h i c i e r o n a l g u n o s h o m b r e s eruditifsimos , y críti-
c o s de primera n o t a . C e l i o R h o d i g i n i o llama á P l i -
n i o Varón doSiifsimo ; y añade , que folo d !o¡ indoc-
tos defagradan fus efritos. Gerardo j u a n V o f s i o ape-
llida á fu H i í l o r i a Obra grande , y nunca bajlantemen-¡.
te alabada. Tofepho Scaligero , cuya errada creencia n o
le eflorva fer u n o de l o s p r i m e r o s v o t o s en ella m a t e -
ria , p r o n u n c i a , que la Rifforia natural de P l i n i o por
el mifmo cafo que están grande , y excelente , def agrada
d los entendimientos -vulgares. L a n í i o le da el citulo d e
Bibliotbecario de la naturaleza. A n g e l o P o l i c i a n o le iluf-
tra c o n l o s d e ColeBor de todas ¡as cofas memorables,
juez fupremo de los ingenios , Cenfor agudo , Admira-
dor difcrelo. El jefuita D r e x e l i o le predica , Panegy-
rijla nobUifsimo de la naturaleza , y hombre de prodi-
gio-
102 A P O L O G I A D E ALGUNOS P E R S O N A G E S , 8 ¿ C .
giofa erudición j y en otra p a r t e , ? erfpie ac'fsimo inda-
gador de la naturaleza. J u l i o L i p í i o dice , que no huvo
cofa que Plinio no leyejje , y fupiejfe, y que en fus ef~
critos junto quanta fabian Griegos , y Romanos. L o s
d o s e l o g i o s que n o s relian , pertenecen mas directamen-
t e al affumpto de ella A p o l o g i a . E l p r i m e r o de G u i l l e l -
m o B u d e o , q u e le d a el atributo de Supremamente ve-
rídico , q u e eílb fignifica c o n p r o p r i e d a d la exprefsion d e
veritatis antifles, de que ufa B u d e o . T h o m a s D e m p f t e -
ro l o s de Efcritor diligent if simo , eloquentifimo , vera-
cifsimo, incomparable; y en fin fentencia , q u e e s u n o
que vale p o r t o d o s : Unus omnium inflar. N o hai m a s
que decir.
LUCIO APULEYO.
§• V.
, 44 O l e m p r e he eltrañado , qué el d o c t o Gabriel
i3 N a u d e o en fu e r u d i t o libro , i n t i t u l a d o ,
'Apologia por los grandes hombres fofpecbados de Magia,
n o introduxeíTe la de A p u l e y o , c o n t r a q u i e n eílán m u -
c h o m a s vulgarizadas las fofpechas de M a g i a , q u e c o n -
tra m u c h o s , cuya i n o c e n c i a defiende en aquel l i b r o , y
n o c o n t a n leve f u n d a m e n t o . Seafe qual fe fuere la cali-
fa d e aquella o m i f s i o n , la fuplirémos ahora , y p o d r á
fervir elle parágrafo de a d i c i ó n al libro de N a u d e o .
45 E l rumor de la M a g i a d e A p u l e y o e m p e z ó v i -
v i e n d o é l , p r o p a g ó f e defpues de fu muerte , y aun o y fe
c o n f e r v a en el v u l g o l i t e r a t o . Es cierto , q u e fué A p u -
l e y o acufado en t o d a forma del crimen de M a g i a ante
C l a u d i o M a x i m o , P r o c o n f u l de Africa , en c u y o p r o -
ceflb el m i f m o reo h i z o el oficio de A b o g a d o , y c o m o
e l o q u e n t i f s i m o que era , d e f e n d i ó e x c e l e n t e m e n t e fu
caufa. Efto t o d o pafsó entre G e n t i l e s . Éralo el J u e z ,
éralo el r e o , eranlo l o s acufadores. M u e r t o A p u l e y o ,
dan-
DISCURSO SEGUNDO. 103
dando o c a í i o n para ello l o s m i í m o s G e n t i l e s , fe eflen-
dió latamente entre l o s Chriftianos la fama de f u M a -
gia ; la qual fe ha i d o c o n f e r v a n d o , c o m o he d i c h o ,
entre l o s literatos vulgares ; pero n o c o n tan a b f o l u t a
excluíion de l o s v e r d a d e r o s Sabios , que n o hayan c a í -
d o en elle error a l g u n o s de mas que ordinaria l i t e r a -
tura : en que de nadie m e a d m i r o t a n t o c o m o del d o c -
t i f s i m o L u i s V i v e s , que n o d u d ó de afirmar c o m o c o -
fa cierta , y confiante la M a g i a de A p u l e y o . (In lib. 18*
de Civit. cap. 18.)
45 E m p e c e m o s p o r fu proceffo. A p u l e y o , c o m o
natural de la África , e í l u d i ó p r i m e r o en C a r t a g o , def-
pues en A t h e n a s , y u l t i m a m nte en R o m a . Era de i n -
g e n i o f ú t i l , y afsi a d e l a n t ó m u c h o en p o c o t i e m p o ; de
m o d o , que aun en edad floreciente v o l v i ó á la África
d o é l o ya en t o d a forma , p e r o m u i p o b r e , p o r haver
c o n f u m i d o t o d o fu caudal en l o s v i a g e s que h a v i a h e -
c h o . Su j u v e n t u d , fu b u e n a p r c f e n c i a , y lu d i f e r e c i o n
le abrieron puerta para v i v i r c o n t o d a c o m o d i d a d . P r e n -
d ó l e de la gallardía , y agudeza de A p u l e y o una v i u d a
rica , llamada P u d e n d l a , en cuya cafa eftaba h o f p e d a -
d o ; y el n e g o c i o paró e n cafarfe l o s d o s . L l e v á r o n l o
m u i mal l o s parientes del primer m a r i d o , de quien ha-
v i a n q u e d a d o á P u d e n t i l a d o s hijos ; b i e n que u n o de
e f l o s , llamado P o l i c i a n o , q u e era a m i g o de A p u l e y o ,
havia entrado g u í l o f o , y aun influido a l g o en que el
m a t r i m o n i o fe cfeétuafle. R e f u e l t o s , pues , á d e f a h o -
gar l u ira , actuaron á A p u l e y o de h e c h i c e r o . A r t i c u l a -
r o n l o p r i m e r o , que c o n h e c h i z o s havia g a n a d o el c o -
razón de P u d e n t i l a , p o r q u e ella defpues de nueve a ñ o s
de h o n e í l a v i u d e z , y en edad a l g o adelantada , y c o n
f u c e f s i o n v a r o n i l , n o es creíble que tuviefle alguna p r o -
p e n í i o n al c a f a m k n t o , fi n o fucile excitada c o n malas
artes. Articularon l o í e g u n d o , que A p u l e y o guardaba
c o n f u p c r í l i c i o í o c u i d a d o un l i e n z o , en que tenia e m -
b u e l t o n o sé q u e , en que íe difeurria algún cachibache
m á g i c o . L o tercero m o í l r a r o n una claufula de una carta
de P u d e n t i l a , en que confeíiaba fer hechicero A p u l e y o .
La
,104 A P O L O G Í A D E ALGUNOSPERSONAGES,'8¿CV.
47 L a S a t i s f a c c i ó n , que p o d e m o s dar á eitos capí-
t u l o s de acufacion , es la que d i o en el T r i b u n a l el ínfi-
m o A p u l e y o , y o y í'e c o n f e r v a entre fus o b r a s . C o n
d e í p r e c i o r e f p o n d i ó al p r i m e r o , que n o era mencítcr he-
c h i z o a l g u n o para que una muger de quarenta a ñ o s (que
n o tenia mas , a u n q u e fus c o n t r a r i o s a u m e n t á b a n l a e d a d
á fefenta ) fe prendarle de un j o v e n , qual le p i n t a b a n á
él fus m i f m o s c o n t r a r i o s , efto es de gentil d i f p o f i c i o n ,
y gracia Singular , y mas c o n la circunítancia d e un ca-
li c o n t i n u o trato , p o r v i v i r l o s d o s d e b a x o de un mif-
m o t e c h o . Q u e á cito fe a n a d i a , que l o s M é d i c o s h a -
viaii perfuadido á P u d e n t i l a que fe caíáííe , a t r i b u y e n -
d o á fu c o n t i n e n c i a algunas i n d i f p o i i c i o n e s que p a d e -
cía ; y fu hijo P o l i c i a n o la nigeria , que h a v i e n d o de c a -
farte n o eligieífe o t r o m a r i d o , que á fu a m i g o A p u -
leyo.
48 E n efecto la acufacion en cita parte n o p u e d e
fer mas ridicula ; y c o n t o d o efib apenas hai o t r a m a s
v u l g a r . E n v i e n d o que u n a p e r f o n a , p o r o t r a parte p r u -
d e n t e , y c o n t e n i d a , fe a p a f s i o n a a r d i e n t e m e n t e p o r
o t r a de diferente f e x o , l u e g o entra la hablilla que le
d i e r o n h e c h i z o s . Y a es antiquifsima cita cantilena. E l
p r o p r i o r u m o r fe e í t e n d i ó en M a c e d o n i a c o n t r a u n a m u -
ger de T h e í f a l i a , de q u i e n P h i l i p o , padre d e A l e x a n -
d r o , eltaba e x t r e m a m e n t e e n a m o r a d o ; pero la a b f o l u -
c i o n d e l p e c a d o de hechicera le v i n o de d o n d e m e n o s
debia efpcrarla, efto es de la o f e n d i d a O l y n i p i a s , m u -
g e r de P h i l i p o . T u v o m o d o eíta R e i n a para hacer tra-
her á fu prefencia la c o n c u b i n a de fu e f p o f o . V i o fu
hermofura , n o t ó fu gracia , y fin mas pefquifa d i o en fu
favor la fentencia : Ha , hija mia ( l e d i x o ) que injujia-
mente te calumnian , pues no tienes , ni has menefter mas
hechizos , que los naturales , que dio el Cielo d ijfe cuerpo,
y dejfe efpiritu.
49 N i hace al cafo para probabilizar la acufacion
d e hechicería , el ver que una perfona , de c u y o j u i c i o ,
y circunfpeccion hai largas experiencias , c o n t r a el c o n -
c e p t o c o m ú n de fu v i r t u d , fe precipite en una p a f s i o n
def-
DISCURSO SEGUNDÓ". Jóf
¿lefordenada. Efte es un p h e n o m e n o harto natural. Haz
f u g e t o s para q u i e n e s f o l o tiene atractivo eficaz u n o , u
o t r o raro i n d i v i d u o . Infenfibles para t o d o s l o s d e m á s ,
fe m a n t i e n e n v i r t u o f o s , ó en la v e r d a d , ó p o r l o m e -
n o s en la apariencia ; halla que fu defgracia les p r e f e n -
ta aquel á q u i e n la naturaleza e n t r e g ó el e s l a b ó n , capaz
d e facar f u e g o del pedernal d e fu p e c h o . T a m p o c o fe
d e b e recurrir á fympathias ( v o z fin fignificado.) U n o c u l -
t o m e c a n i f m o l o hace t o d o . Según las varias difpofi-
c i o n e s , q u e hai en nueftro cuerpo , f o n diverfas en él
las i m p r e f s i o n e s de l o s o b j e t o s , p u e s a u n refpecto d e
un m i f m o i n d i v i d u o fe experimenta efta varia impref-
fion, fegun la varia difpoficion q u e t i e n e en diferentes,
tiempos.
50 A l f e g u n d o c a p i t u l o de a c u f a c i o n r e f p o n d i ó y
¡que l o que tenia e m b u e l t o en el p a ñ u e l o era una efpecie
d e reliquia , figno , ó m o n u m e n t o Sagrado de l o s m y f t e -
r i o f o s c u l t o s de cierta D e i d a d , que le havian d a d o u n o s
S a c e r d o t e s en l a G r e c i a ; y p r o b ó e l l o de m o d o , q u e Sa-
tisfizo al J u e z .
51. Sobre el tercer c a p i t u l o l l e n ó de I g n o m i n i a , y ¡
REINA BRUNIQUILDA.
$. V I .
58 A L g o h e m o s d i c h o a favor de eíla I n f a m a d a
JT\. P r i n c e f a en el T o m o q u a r t o , Difcurfo-
'octavo, n u m . 69. A h o r a e m p r e n d e r e m o s m a s de inten-i-
t o fu A p o l o g í a , c o m o d e r e c h a m e n t e p e r t e n e c i e n t e á e f t e
D i f c u r f o . B r u n i q u i l d a hija de A t h a n a g i l d o R e y de E f -
p a ñ a , y mtiger, p r i m e r o d e S í g e b e r t o R e y de Auílrafia,
y defpues de M e r o v e o f o b r i n o f u y o , hijo d e Chilperr-r
c o R e y de Francia , es reprefentada en las H i f t o r i a s ' , no,
c o m o una m u g e r , l i n o c o m o un m o n f t r u o , im d e m o -
n i o , una furia , en c u y o p e c h o fe a n i d a r o n , c o m o erí
d o m i c i l i o p r o p r i o , la a v a r i c i a , la a m b i c i ó n , la perfidia,
la ira , la v e n g a n z a , la crueldad , y la l a f e i v i a . Atribu-,
yenle las muertes , n o m e n o s que d e d i e z R e y e s , execu-;
ta,,
lio A P O L O G Í A D E ALGUNOS P E R S O N A G E S , & C .
tadas y a c o n v e n e n o , y a c o n hierro , entre ellos u n h í <
j o fuyo , un n i e t o , y el padre de fu l e g a n d o m a r i d o . S u
i m p u d i c i c i a fe encarece hafta el e x t r e m o de fer torpifsí-
m á m e n t e inceftuoía c o n un n i e t o f u y o , el m i f m o d e
q u i e n fe dice fué defpues h o m i c i d a . S u p o n e n haverfe d a -
d o muerte por fu orden á S. D e f í d e r i o , O b i f p o de V i e n -
na del D e l h n a d o , irritada de que elle S a n t o P r e l a d o la
huvieííe c o r r e g i d o fus innumerables efcandalofas l i v i a n -
d a d e s . H a c e n l a autora de las repetidas atroces guerras
que h u v o en fu t i e m p o en Francia entre P r i n c i p e s u n i -
d o s c o n l o s v í n c u l o s mas eftrechos de fangre. F i n a l m e n -
t e , fegun las cofas que d i c e n de efta m u g e r , n o p u e d e
p i n t a r l e c o n o t r o s colores , que c o n aquellos , que ¿
p i r o objeto aplicó Claudiano;
REINA FREDEGUNDA.
§. V I L
6~8 T 7 U E eíla R e i n a c o n t e m p o r á n e a de Brüniquil-
da, concuñada fuya , y muí parecida á ella
e n la publica n o t a , aunque c o n diverfo m é r i t o . Siendo
criada de A n d o v e r a muger de Chilpcrico , R e í de Fran-
cia, fe c o n c i l i o t a n t o la inclinación de elle torpe P r i n c i -
p e , que partió el lecho entre fu efpofa, y ella , y defpues
la e l e v ó de la baxcza de c o n c u b i n a á la grandeza de
Reina.
69 N o p u e d o hacer de efta m u g e r mas que una a p o -
l o g i a muí d i m i n u t a . L a verdad, y la juílicia reclamarían
c o n t r a m i , fi la emprendieífe mas ampia. E s confiante,
que c o m e t i ó varias maldades. U n o de l o s t e í l i g o s de fu-
prema calificación , que abíiielven á Bruniquilda , c o n -
d e n a á Fredegunda. ESte es San G r e g o r i o T u r o n e n f e , el
qual c o n chriíliana libertad refiere fus i n f u l t o s . P e r o
c o m o el v u l g o , cenfor i n i q u o de l o s que han incurrido
f u ' o d i o , aun q u a n d o es m e r e c i d o , n u n c a c o n t i e n e la mur-
muración dentro de l o s limites de la v e r d a d , á l o s ver-
daderos delitos de efta R e i n a añadió algunos de propria
i n v e n c i ó n . Sobre e l l o s precifamente caerá la A p o l o g i a ;
á la qual aplico la p l u m a , n o t a n t o p o r hacer m e n o s
o d i o f a la m e m o r i a de Fredegunda, q u a n t o porque de la
n o t i c i a de u n o de l o s delitos , que faifamente la acumu-
lan,
DrscuRsó SEGUNDO. 115
lan, refulta por incidencia la juftificacion de otra n o b í -
lifsima R e i n a , que v i v i ó en efte paflado ü g l o , y c u y o h o -
nor i n d i g n a m e n t e ha denigrado el m a l i c i ó l o , n o v e l e r o ,
y crédulo v u l g o .
70 El primer d e l i t o , que fallamente fe i m p u f o á
Fredegunda, es , que e n g a ú o f a m e n t e perfuadió á la R e i -
na A n d o v e r a , que r e c i b i d l e de la fuente bautifmal á la
niña Bafsina, hija de la m i f m a A n d o v e r a , para q u e i n -
currieífe efte i m p e d i m e n t o de cohabitar c o n fu e f p o f o ,
lo qual executado fimplemente p o r la R e i n a , C h i l p e r i c o
la apartó para íiempre de si. Efta es fábula manifiefta:
lo primero , p o r q u e de San G r e g o r i o T u r o n e n f e confta,
que Chilperico n o apartó de si á A n d o v e r a en effe t i e m -
p o , ni con eñe m o t i v o , lino defpues, por contraher m a -
t r i m o n i o c o n Galfuenda hija de A t h a n a g i l d o R e i de Ef-
paña, y hermana de B r u n i q u i l d a , el qual aunque m a n i -
ficftamente n u l o , e x e c u t ó c o m o fi n o l o fueífe. L o f e g u n -
d o , porque en aquel t i e m p o n o eftaba eftablecido eñe
i m p e d i m e n t o . D e San Aguftin en la epiftola 2 j . a l O b i f -
p o B o n i f a c i o confta, que en el q u i n t o figlo havia la cof-
tumbre de recibir l o s padres de la iuente del b a u t i f m o á
l o s p r o p r i o s h i j o s : ni á efta coftumbre fe d e r o g ó hafta
el C o n c i l i o de M o g u n c i a celebrado en t i e m p o de Cario
Magno.
71 El f e g u n d o d e l i t o fupuefto á F r e d e g u n d a es , ha-
verfe executado de orden fuya la muerte de fu m a r i d o
C h i l p e r i c o , á quien v o l v i e n d o de caza, un alevofo d i o de
puñaladas. Efto t a m b i é n confta fer falfo : l o p r i m e r o ,
por el lilencio de San G r e g o r i o T u r o n e n f e , el qual d a n -
d o noticias de o t r o s h o m i c i d i o s , en que era culpada Fre-
d e g u n d a , n o callaria fu influxo en efte , fi fueífe v e r d a d e -
r o . L o f e g u n d o , porejue feis años defpues puefto en t o r -
tura el executor de la muerte , que fe llamaba S u m e í e g i -
11o, por orden de Bruniquilda , y de fu hijo C h i l d c b e r t o ,
confefsó el d e l i t o , fin culpar á Fredegunda , lo que h u -
viera hecho fin duda á fer inftigado por ella; l o u n o por
minorar fu culpa, lo o t r o porque lifongearia m u c h o c o n
la acufacion de Fredegunda, aísi á B r u n i q u i l d a , c o m o á
P2 Chil-
i ict A P O L O G Í A D I ALGUNOS P E R S O N A G E S & C .3
EMPERATRIZ MARÍA
de Aragón.
§. V I I I .
8o 1 ; S efta Señora en las Hiftorias u n o de los.
X2J m a s feos exemplarcs entre las P r i n c e f a s ,
q u e c o n el v i c i o de la deshoneftidad m a n c h a r o n fu puef-
t o , y fu N o b l e z a . Cuentafe , que c o n h a b i t o , y n o m -
bre de muger tenia entre las D a m a s , que la fervian , un
m a n c e b o c ó m p l i c e de fu t o r p e z a : que h a v i e n d o l o e n -
t e n d i d o O t h o n III, fu m a r i d o , para m a y o r i g n o m i n i a
de la Emperatriz , en prefencia de m u c h o s teffigos , ha-
c i é n d o l e defpojar enteramente , dcfcubrib fu í e x o , y
l u e g o le caftigb q u e m á n d o l e v i v o : que ni la feveridad
practicada c o n el m a n c e b o , ni la indulgencia que h u v o
c o n Maria , fueron bailantes á e m e n d a r l a ; pues ena-
m o r a n d o f e deípues de cierto C o n d e , de g e n t i l prefen-
cia , cerca de M o t l e n a , le h i z o fu declaración ; m a s el
C o n d e , n o m e n o s h o n e í l o , que h e r m o f o , rechazo l o s
r e p e t i d o s ataques de la i n v e r e c u n d a Emperatriz. M a s fi
i m i t o á Tofeph en la v i r t u d , fué mu i desfemejante en la
fortuna. Irritada Maria c o n la repulfa , y refuelta á def-
ahogar la rabia femenil de verfe defpreciada , le a c u s o
ante el E m p e r a d o r de haverla f o l i c i t a d o . El crédulo
O t h o n , fin mas pefquifa , h i z o cortar la cabeza al C o n -
de , el q u a l , aunque al verfe c o n d e n a d o á muerte r e v e -
l ó á fu muger t o d o l o que havia paífado , h a c i é n d o l a
p r o m e t e r , que defpues de fu muerte calificada fu i n o -
cencia , n o quifo juftificarfe c o n el E m p e r a d o r , acafo
pareciendole que n o havia de fer creído , y p a d e c i ó c o n
reíignacion el fuplicio d e c r e t a d o . G u a r d ó la v i u d a la
cabeza de fu m a r i d o , y t o m a n d o el t i e m p o que le p a -
r e c i ó mas o p o r t u n o para fu juitificacion , en ocafion que
DISCURSO SEGUXDO. 121
e l . E m p e r a d o r daba audiencia en una aífamblea gene-::
ral c o n g r e g a d a en una gran plana , p a r e c i ó ante él p i -
d i e n d o jufticia c o n t r a el matador de fu marido , fin e x -
preñar q u i e n era, efte , ni quien era ella ; d o n d e fe ad-
vierte , que el E m p e r a d o r n o la c o n o c i a . P r o m e t i ó -
O t h o n hacerla fegun t o d o el rigor de las l e y e s . E n t o n -
ces la C o n d c f a , facando la cabeza de fu marido , q u e
u n o de l o s q u e l a afsiftian llevaba o c u l t a , le d i x o d e
quien era aquella cabeza , y que el m i f m o O t h o n era e l
matador ; que f o l o reliaba juitiricar la inocencia d e l
m u e r t o , á l o qual ella fe ofrecia p o r m e d i o de la p r u e -
ba del f u e g o . A c e t a d a la propuefta , fe traxo un hierro
ardiendo , el qual la C o n d e í a t u v o en las m a n o s , y,
m a n e j ó libremente t o d o el t i e m p o que fe q u i f o , fin re-
cibir la m e n o r lefion. E n cuya c o u í e q u e n c i a , dada p o r
l e g i t i m a la prueba , ofadamente p i d i ó á O t h o n fu p r o -
pria cabeza. D e f p u e s de varias d e m a n d a s , y refpueftas,
fe t e r m i n ó el n e g o c i o c o n t e n t a n d o f e la C o n d e í a c o n q u e
fueífe caíligada c o n pena capital la Emperatriz : l o q u e
fué executado l u e g o , c o n d e n á n d o l a el E m p e r a d o r á l a s
llamas.
81 Si p o r el numero de t e í l i g o s fe ha de hacer j u i -
c i o de efta h i f t o r i a , confieífo que m u i mala caufa t i e -
ne la Emperatriz Maria , p o r q u e es p o q u i f s i m o l o q u e
falta para que t o d o s l o s Hiftoriadores , d e quienes t e -
n e m o s n o t i c i a , eftén acordes fobre la v e r d a d d e l o s f u -
cellos referidos. Sin e m b a r g o , corno n i n g u n o de l o s
que fe pueden alegar es teftigo de v i f t a , n o s es l i c i t o
examinar la materia á la luz de la r a z ó n . .
82 Enrico Chriftiano H e r m i n i o en las A d i c i ó n
nes q u e h i z o á la Hiftoria Augufta de l o s E m p e r a d o r e s
R o m a n o s , defde J u l i o Cefar halla J o f e p h , i m p r e í f a e l
a ñ o de 1 7 0 7 . conftantemente aíTegura , que la narra-
c i ó n expreílada arriba es . f a b u l o f a , porque , dice , l o s
A u t o r e s c o n t e m p o r á n e o s , ó . n o hablan palabra , ó refie-
ren diverfamente la muerte de aquella Princefa. L a
c o n t r a d i c c i ó n d e efte A u t o r ..es de m u c h o pefo , por-
jquanto cita los, Autores coetáneos contra los •pofteriof 1
_,Tom.VI A res 4
12 2"' ApOtOGTA DE A L G U N O S P E R S Ó N A G E S J & Í C .
res, para hacer p r o b l e m á t i c o el a í í u m p t o ; en c u y o efta-
d o í c d e b e dar la fentencia fegun la verifirailitud , ó in-:
verifimilitud d é l o s fuceffos.
83 L o s referidos t i e n e n á m i entender grande aire
de fabulofos. "Introducirte un m a n c e b o disfrazado de
muger entre las D a m a s de una Emperatriz , nada tiene
de impofsible , pero t a n t o de t e m e r a r i o , que para creer
que haya h a v i d o ofadia para ello , f o n menefter muí au-
t e n t i c a d o s t e f t i m o n i o s . Protefto , que el ú n i c o lunar,
que encuentro en la e x c e l e n t i f s i m a ( n o me c o n t e n t o c o n
m e n o r e p i t h e t o ) N o v e l a de la A r g e n i s de Barclayo , es
la inverisímil i n t r o d u c c i ó n de P o l i a r c o en el g y n e c é o de
P a l a c i o . D e x a r á la Emperatriz fin caftigo a l g u n o , def-
pues de manifiefto el Secreto del eScondido galán , palta
los t é r m i n o s de una razonable ficción ; y mas q u a n d o
fe Sabe que O t h o n III. n o era de l o s P r i n c i p e s mas Su-
fridos del M u n d o , y que Sabia caftigar Severamente m e -
nores d e f a c a t o s , c o m o e x p e r i m e n t ó R.oma en el r e b o l -
tofo Crefcencio , y en el A n t i p a p a Juan , d e l o s quales
al primero c o r t ó la c a b e z a , y al Segundo q u i t ó l o s o j o s .
P e r o , fobre t o d o , la t r a g e d i a , y juiUlicacion del infe-
liz C o n d e parecen cofas de confeja. Si el C o n d e defea-
ba , yefperaba juftificar fu i n o c e n c i a , por qué n o l o ha-
cia por si m l f m o ? P o r qué havia de fe-r mas creída qué
él la C o n d e f a ? O íi efta era Inftrumento mas p r o p o r -
c i o n a d o para la juftiflcacion del C o n d e , por qué antes
que á efte fe le quitafle la v i d a , n o a c u d i ó á O t h o n ? Q u é
i n c o n v e n i e n t e grande fe evitaba dilatando la juftinca-
c i o n para defpues de m u e r t o el C o n d e , para que él por
elTa confideracion Se SacrincaíTe ? El o p r o b r i o de la E m -
peratriz , y el efcandalo del P u e b l o Se Seguian Igual-
m e n t e haciendo antes , ó defpues la juftiflcacion. A u n
•quando huvieiTe algún i n c o n v e n i e n t e tan g r a v e , que pre-
ponderante en la eftimacion del C o n d e á fu propria v i -
da ( l o que n o es fácil i m a g i n a r ) parece i m p o f s i b l e ,.que
l o aprehendieílé afsi la Ce,ndcfa , á quien fupone la mif-
m a hiftoria amantifsima d e fu m a r i d o . A u n q u a n d o l o
áprehendieiTe afsi , la permitirían el a m o r , y el d o -
, • lor
DISCURSO SEGUNDO. "IT}
lor guardar un fecreto , c o n el qual perdía para fiem-»
pre l o q u e mas a m a b a ? D i r á f e m e , que nada de l o d i -
cho es i m p o f s i b l e . Y o l o c o n c e d o > p e r o t o d o e l l o es
tan extraordinario , que f o n meneftcr buenas c r e e d e -
ras para tragarlo. Suceífos tan diílantes del curfo r e g u -
lar de las c o l a s , es imprudencia , y ligereza creerlos , n o
fiendo de muí alta calificación las p r u e b a s ; las que e n
nüeítro cafo enteramente faltan.
84 C o n c l u y o a d v i r t i e n d o , que el A u t o r mas a n t i -
g u o que he. vifto c i t a d o fobre la hiftoria q u e i m p u g -
n a m o s , es G o f r e d o V i t e r b i e n f e , el qual floreció cofa
de c i e n t o y quarenta a ñ o s defpues d e la Emperatriz M a -
ría de A r a g ó n : t i e m p o f o b r a d o para que , n a c i e n d o d e
p r i n c i p i o i g n o r a d o la n o v e l a , fuellé creciendo p o c o a
p o c o , halla ponerfe e n e í l a d o d e publica fama , de m o -
d o , que á G o f r e d o de V i t e r b o le parecieífe p o d e r ef-
tamparla c o m o t r a d i c i ó n i n c o n c i n a , que es l o que fu-
cede muchas v e c e s . A c a f o ( por dar a l g o á la c o n j e t u -
ra ) en la confufa m e m o r i a de un fucellb v e r d a d e r o fe
e n g e n d r ó o t r o f a b u l o f o . Es el cafo , que de la S a n t a
Emperatriz K u n e g u n d a , c o n m a s f u n d a m e n t o , fe re-
fiere , q u e h a v i e n d o f e fufcitado cierta fofpecha c o n -
tra fu h o n e í l i d a d , delante de fu efpofo E n r i c o S e g u n -
d o , llamado el Piado/o , el qual fincedlo i n m e d i a t a m e n -
t e á O t h o n III. p r o b ó f u i n o c e n c i a pifando ilefa u n o s
hierros e n c e n d i d o s . A c a f o , d i g o , la m e m o r i a de elle
fuceflb fe fue o b f e u r e c i e n d o en el V u l g o , y al paffo que
o b f e u r e c i e n d o desfigurando , de m o d o , que al fin c o n -
f u n d i e n d o una Emperatriz c o n otra , y trasladando
afsi la acufacion de d e s h o n e í l i d a d , c o m o la prueba del
fuego , de un f u g e t o á o t r o , y a y u d a n d o á la e q u i v o c a -
c i ó n la i n m e d i a c i ó n de t i e m p o , en que florecieron u n o s ,
y o t r o s P e r f o n a g e s , una hiftoria verdadera v i -
n o á transformarte e n una
fábula.
' ^ 1 1 lili M i l l s *
Cu. EN-,
i ¿4"
:
A P O L O G Í A - D E ALGUNOS P E R S C > . N A G E S & C »
}
E N R I Q U E DE VILLENAv
§. I X .
S5 "V "T U c f t r o Efpañol Enrique , M a r q u é s de V i -
- i ^ l d l e n a , pudiera entrar en el c a t a l o g o de
los h o m b r e s grandes aculados de M a g i a , c o m p i i c H o
p o r G a b r i e l , N a u d e o , c o n tanta , y mas razón que m u -
c h o s de l o s que eftán c o m p r e h e n d i d o s en d i c h o cátalo- 1
g o . D i f c u r r o , que el d o c t o Francés , ó n o t u v o n o t i -
c i a de é l , 6 creyó que la fama , que corrió de fu M a g i a ,
era verdadera. F l o r e c i ó el Marqués ílnrique en t i e m -
p o del E.ey D o n Juan el S e g u n d o de Cartilla, de quieií
fué d e s f a v o r e c i d o y r e c i b i ó bien m a l o s t r a t a m i e n t o s .
T o d o s l o s A u t o r e s fíentan que fué d ó c i l í s i m o en las
C i e n c i a s naturales. D e aqui t u v o principio la o p i n i ó n
de que era M a g o , p o r q u e en l o s Siglos en q u e reina-
ba la barbarie l o que fe grangeaba en fer fabios , era
la fama de liecliiceros. E n el T o m o f e g u n d o , ' D i f c u r -
fo quinto i o . f e ha d i c h o bailante ¡Cobre eíle aífump-
.to. A la referva de tal qual h o m b r e rarifsimo , t o d o
era v u l g o en aquellos t i e m p o s en Efpaña , y aun en la3
otras N a c i o n e s . L a M a t h e m a t i c a era e n t o n c e s la pie-
dra del efcandalo. S u g e t o s que o y , pueftos en L o n d r e s ;
P a r í s , , ó R o m a , apenas ferian eftimados c o m o m e d i a -
n o s M a t h e m a t í c o s , , eran t e n i d o s p o r infignes E n c a n -
tadores. Qualquiera curioíidael de M e c á n i c a ,. R e l o x e -
r i a , D i o p t r i c a , ó C a í o p t r i c a , fin r e m e d i o era d i a b l u -
ra. Es creíble , que el Marqués, d e V i l l e n a fupieífe
muchas- curioíidades de ellas , p o r q u e , c o m o dice el
Chroniíla Fernán, P é r e z de G u z m á n e n el cap. 28. de
l o s Claros V arones de aquel t i e m p o , era mu i copia/a,
y mezclado en diverjas Ciencias.
c\6 Es vcrdacl, q u e el citado Fernán Per.ez añade,que
fe ckxá correr atas Artes de adivinar, y interpretar fue-
y ños,
DISCURSO SEGUNDG. 125
tíos, y ejlor'nudos, y otras cofas tales. M a s q u a n d o fuella
afsi, l o que efto prueba e s , que era un v a n o o b f e r v a d o r ,
c o m o o y hai infinitos en t o d o s P a i f e s : l o q u a l , q u é t i e -
ne que ver c o n la p r o d i g i o f a N i g r o m a n c i a , que le atri-
buyen? A c a f o sodas- fus adivinanzas fe reducian á a l g u -
nas predicciones n a t u r a l e s , A s t r o n ó m i c a s , b Phyficas,
que en aquel t i e m p o eran genero de c o n t r a v a n d o , y e í
¡ V u l g o , mal imprefsionaclo ya p o r ellas , le i m p o n d r i a eí
ufo de "las a d i v i n a c i o n e s fnperfticiofas. El Padre Juan 1
de Mariana, c u y o dictamen es de m u c h o p e f o , n o r e c o -
n o c e en el eftudio del M a r q u é s de V i l l e n a aplicación a l -
guna, que n o fuelle decente , pues h a v i e n d o eferito en 1&
í í i l t o r i a Latina, que fe aliviaba de l o s trabajos , . y r e v é -
fes de la fortuna c o n recreaciones honeftas, bonejlis fola-
tijs: en la Callellana t r a d u x o , con el entretenimiento, que
tenia en fus efiudios : p o r configuiente fus eftudios n a d a
tenían de i l í c i t o s .
87 D e f p r e c l a n d o pues t o d o l o q u e , v i v i e n d o el M a r -
qués de V i l l e n a , p u d o diieurrir el V u l g o , f o l o un p u n t o
critico hai que examinar, ello e s , la quema de fus l i b r o s ,
executada p o r ordend e l R e y D o n Juan el S e g u n d o , lue-
g o que el Marqués m u r i ó . El hecho fué, que el R e y dio
ella c o m i f s i o n á cierto P r e l a d o , el qual e n t r e g ó al fue-
g o una parte de l o s libros del M a r q u é s . D i c e n a l g u n o s ,
que el orden del R e y fué abSoluto para que l o s libros f e
quemaífen ; o t r o s , que c o n d i c i o n a d o , efto es en cafo q u e
deSpues de examinados Se hailafle que c o n t e n í a n d o c u -
m e n t o s de la v e d a d a M a g i a . Y efto es m a s p r o b a b l e .
P o r l o m e n o s , d a d o caSo que la d e t e r m i n a c i ó n del R e y ,
fuelle a b S o l u t a , porque n o miraba c o n b u e n o s o j o s al
M a r q u é s , querría que Sonaíle la e x e c u c i o n j u i l a , l o q u e
n o p o d i a íer fin alguna formalidad, de e x a m e n . L a a u -
t o r i d a d pues d e l P r e l a d o , á q u i e n Se fióla c o m i f s i o n , - e s
la que da fuerza, y p e f o á la fama de fu M a g i a .
88 N o n i e g o , que dicha autoridad , coníiderada a b -
solutamente, y para o t r o s efectos, es muí r e c o m e n d a b l e ;
mas para nueftro intento las circunstancias la d e b i l i t a n .
El deSafecto del R e y al Marques era n o t o r i o , p o r c o n í u
íiuiea-
126 A P O L O G Í A D E ALGUNOS PERSONÁGESY&C.
g u í e n t e n o fe d u d a b a fe complacerla de que fobre fu Bí-;
b l i o t h e c a cayeífe el r a y o de una v i o l e n t a cenfura, la qual
p o r reflexión v e n i a á parar en fu perfona. S u p o n g o , que
el P r e l a d o era h o m b r e virtuofb ; pero fi de tanta inte-
g r i d a d , que el g ü i l o del R e y n o le hicieífe fuerza , e s l o
que fe puede dudar ; m a y o r m e n t e q u a n d o fe fabe , q u e
feguia fiempre la C o r t e , por razón de oficio , que tenia
en P a l a c i o ; l o que rara v e z dexa de infpirar algo de
c o n t e m p l a c i o n e s áulicas. L o principal e s , que las m a t e -
rias, de que trataban l o s libros del Marqués , eran m u í
forafleras á la i n t e l i g e n c i a del P r e l a d o .
2,9 Si pareciere, que ella cenfura m í a p o r defcargat
al M a r q u e s d e V i l l e n a , es iniqua contra el revifbr de fus
l i b r o s , e x h i b i r e m o s aqui o t r a harto m a s agria de A u t o r
c o n t e m p o r á n e o , y que fe hallaba en pofitura de p o d e r
hacer feguro juicio de la materia. Elle es el Bachiller
Fernán G ó m e z de C i u d a d R e a l , d o ó t o P h y f i c o del Rey,
TJ)on Juan el S e g u n d o , que le a c o m p a ñ a b a fiempre. Ef-
t e , d i g o , en una carta eferita al f a m o f o P o e t a J u a n de
M e n a , que es la 66. de fu C e n t ó n Epiílolar , refiere el
fucefíb de la q u e m a de l o s l i b r o s , c o m o fe figue , advir-
t i e n d o , que en l o s claros, que o c u p o c o n o c h o p u n t i c o s ,
o m i t o el n o m b r e del Prelado C o m i í f a r i o .
po , , N o le b a i l ó á D o n Enrique de V i l l e n a fu fa-
„ ber para n o morirfe , ni t a m p o c o le b a i l ó fer T i o del
R e y para n o fer llamado p o r encantador. H a v e n i d o
p, al R e y el t a n t o de fu muerte , y la conclufion que v o s
p u e d o dar , que afsáz D o n Enrique era f a b i o de 1 6
que á l o s o t r o s c u m p l í a , é nada fupo en l o que le
3, cumplía á él. D o s carretas fon cargadas de l o s l i b r o s ,
„ que d e x ó , que al R e y le han t r a h i d o , é porque diz q u e
„ fon M á g i c o s , é de Artes n o cumplideras de l e e r , el
„ R e y m a n d ó , que á la pollada de : : : : íueílen l l e v a d o s ,
é : :: : que mas fe cura de andar del P r i n c i p e , cá de fer
R e v i f o r de N i g r o m a n c i a s , fizo quemar mas de cien li-
, , b r ó s , cá n o l o s v i o él mas que el R e y de Marroécos,'
:
r
Aqusl claro padre , aquel dulce fuente,
Aquel que en el Cájlalo monte refucna¿
Es Don Enrique Señor de Villena,
Honra de Efpana, y del Siglo prefente¿
O ínclito, Sabio, Autor mui fíentet
G U I L L E L M O D E CROI,
Señor de Gevres.
•§. X.
lóf T AS 'lagrimas, y Sangre , que hizo derramar
J , á ESpaña la r e v o l u c i ó n de las C o m u n i d a -
d e s , dexaron á efte Caballero en la m e m o r i a ele l o s Efpa-
ñ o l e s , fin o t r o carácter, que el de un cStrangero codi-
cioSo, á quien la Sortuna Un m é r i t o a l g u n o c o l o c ó en el
e m p l e o d e - A y o del E m p e r a d o r Carlos Q u i n t o , y que abu-
s ó de la autoridad que le daba eíte e m p l e o para chupar
c o n hydropica Sed el o r o de ESpaña. L a quexa de Su c o -
dicia, juntamente c o n la de que por infiuxo Suyo Se con-
ferian, afsi las D i g n i d a d e s EclcliaSticas , c o m o las plazas
P o l i t i c a s , á E í l r a n g e r o s , n o d e x a n d o á l o s Naturales Si--
n o las que aquellos querían vender a e í l o s , dicen irrita-
r o n l o s á n i m o s , y diípufieron l o s P u e b l o s para el inSeliz
l e v a n t a m i e n t o , que l u e g o Se l i g u i ó .
: 102 ASsi c o m o n o n e g a r e , que eflas quexas t u v i e -
r o n algún f u n d a m e n t o , t a m p o c o afsiento positivamente
á que el m o t i v o fuciTe t a n t o , c o m o Se c l a m o r e ó e n t o n -
c e s , y aun Se clamorea ahora. Es confiante , que l o s Pue-
b l o s en e m p e z a n d o á mirar c o n m a l o s o j o s al V a l i d o ,
nunca c o n t i e n e la m o r m u r a c i o n dentro de l o s términos
de la verdad. N o f o l o exagera hyperbolicamente los v i -
c i o s , que t i e n e , mas finge t a m b i é n l o s que n o tiene , y
calla las v i r t u d e s . L a i m p o f s i b i l i d a d de deSahcgar la
ira c o n las m a n o s , hace rebentar p o r la lengua q u a n t o
v e n e n o puede concebir la i m a g i n a c i ó n . Afsi p i e n f o , que
generalmente h a b l a n d o , para hacer un c o n c e p t o pruden-
cial de l o s V a l i d o s , que incurren el o d i o p u b l i c o , Se de-
b e , por l o m e n o s , rebaxar la m i t a d del mal, que Se dice
de
DISCURSO SEGUNDO. " Ijj
de e l l o s . N o l o hicieron afsi nueftros Hiftoriadores en el
aíTumpto de Guille lirio de C r o i , antes pulieron p o r ef-
crito q u a n t o e n t o n c e s gritó la irritación del P u e b l o : e n
quienes n o t o t a m b i é n un afectado filencio de q u a n t o fe
p o d i a decir á favor, ó en difeulpa del acufado.
• 10 j U n a de las cofas que fe n o t a r o n , ó la q u e mas;
fe n o t ó , c o m o injuria grande de la N a c i ó n , al S e ñ o r
de G e v r e s , fué haver d i l i g e n c i a d o el ArzObifpado de
T o l e d o á fu f o b r i n o G u i l i e l m o de C r o l . Efte G u i l l e l -
m o de C r o i fuena en las R e l a c i o n e s vidgares de las re--
bueltas de aquel t i e m p o f o l o p o r fu n o m b r e . , y apelli-
d o , quiero decir Un efpecificacion de algún carácter , ó
p r e r o g a t i v a , que le proporcionarle en alguna manera
a t a n alta d i g n i d a d ; de m o d o , que l o s que é n t r e l a s
quejas de la N a c i ó n contra M o n i i u r de G e v r e s leen m u í
p o n d e r a d o el a g r a v i o que h i z o á Efpaña en e l e v a r a i s
d i g n i d a d de P r i m a d o á f u f o b r i n o G u i l i e l m o de C r o i ,
n o c o n c i b e n en efte f u g e t o mas que un o b f e u r o C l e -
riguillo F l a m e n c o , á quien vendrian mui a n c h o s mil-, ó 1
E L GRAN T A M E R L A N ,
§. X I .
109 Á Unque eíle Monarca floréelo antes qué
l\. los dos Señores de quienes tratamos
en los parágrafos antecedentes ; faltando al orden
Chronoiogico, que aqui no es de importancia , le re-;
fervamos para fenecer con el efte Difcurfo , porque co-
mo aíTumpto mas alto , mas curiofo, y demás ampli-
tud que los dos inmediatos , pide difeurrirfe en él con
mas extenfion , para la qual le halla embarazado un EC-
critor quando dentro de la mifma materia tiene mas
r
FA
•5 1
8t888S'888888¡88S8S8I8 88aSt !
FÁBULA
DEL ESTABLECIMIENTO
D E INQUISICIÓN
E N PORTUGAL.
DISCURSO TERCERO.
§. I.
jSta es otra tal que la de las Batuecas.
A portentofas quimeras da paflaporte
la credulidad de los hombres ; y lo
peor es , que quando la multitud conf-
pira en franquear puerta al embulle,
por el mifmo hecho la dexa cali enteramente cerrada al
defengaño. Tal vez todo un Reino admite como confi-
tante un hecho de gran magnitud , y de reciente data,
que fe dice pafsó dentro de él. Los que vienen defpues,
hallándole autorizado con el común afícnfo , fe confede-
ran juíiifsimamente difpenfados de todo examen ; ó por
mejor decir , ni aun llegan á dudar de fila materia pide
exa-
152 FaPULA D E L E S T A B L E C I M I E N T O ) . $ C V
§• II-
¡2 r
T * ^ A L es el eílado en que fe halla la fabulofa
.JL hiftoria del citablecimiento de la Inquiñ-
cion en Portugal; cuya narración es del tenor figuien-
te. Un mozo llamado Pedro Saavedra, natural de Cór-
doba , no foio de excelente pluma , rnas de infigne acier-
to en imitar todo genero de letras, fe aplicó á ufar de
ella habilidad para engrandecer fu fortuna : arte infe-
liz , cuyo ufo apenas puede jamás dexar de fer deiin-
quente. Su ofadia era mucha, fus penfamientos altos»
Por lo qual no contento con aquellos cortos , ó media-
nos intereffes , que otros adquieren con tan infame me-
dio , afpiró á otros mayores , donde á proporción del
fruto vá creciendo el ricfgo. Afsi , fingiendo Cédulas
Reales , Defpachos del Confejo , y Libranzas de los Mi-
niftros de Hacienda , no folo facó de las arcas Reales
buenas cantidades de dinero , mas logró ponerte un Ha-
bito de Santiago , y coníiguió una Encomienda de tres
mil ducados. Suele fer traidora la Fortuna de las prime-
ras empreñas; porque dando aliento á la temeridad pa-
ra otras mas arriefgadas, al fin abandona en el mayor
pe-
DISCURSO TERCERO. JJ?
peligro á ios miímos que fe metieron en él, fundados era'
fu favor. Afsi fucedió á nueftro Saavedra. La cafualí-
dad de ver un Breve Apoftolico , que trahia un Rcligio-
f >, que venia de Roma , dirigido á Don Juan el Terce-
ra , Rey de Portugal, le pufo en la fenda del precipicio,
excitándole la idea de emprender un alto aífumpto , me-
diante la habilidad que tenia para imitar los caracte-
res , formula, y eitilo del Breve. Pufofeie , pues en la
cabeza tomar el carácter de Nuncio Apoilolico , para
introducir en el Reino de Portugal el .Santo Tribunal dé-
la Inquificion. Debe creerfe , que efta intentona no fue
motivada por el zelo de la Religión , fino que refueltoa
todo trance á darfe aquel aire de grandeza, no halló otro
aífumpto mas á propefito para pretextar la Legacía , ó le
pareció que logrado el fin , como efperaba , la grande
utilidad quede el refultaba ala Religión, y.al Reino,
le facilitarla el perdón del delito. Fabricadas , pues , de
fu mano las Letras, y Deipachos neceíiarios, y aprove-
chándote de los dineros que havia negociado con las
trampas antecedentes , para ecbarfe tren competente, fe
entró en Portugal mui puefto de Nuncio. Difpufo tan
bien las cofas , y hizo el papel con tanto arte , que fué
recibido , y tratado como tal. Duró efta farfa fiéis rae-
fes , en los quales logró el fin de entablar la Inquificion.
Mas defeubierta luego la maraña, aunque fubfiftió el efec-
to del embulle , fué prefo el Artífice , y dcfpues de va-
rías competencias entre el Tribunal Real, y el de la In-
quificion, prevaleciendo elle , fué por él el reo condena-
do á galeras , en las quales eftuvo diez y ocho años , al
cabo de los quales falió de ellas á petición del Pontifi-;
ce Paulo Quarto , defeofo de conocerlo. Pone la rela-í
cion la Legacía del falfo Nuncio , y eftablecimientq
de la Inquificion en el año.
rom.VI.
IJ4 FÁBULA DES. ESTABLECIMIENTO, &C,
§• N I -
¿R.IV.
DISCURSO TERCEROÓ.;
§• I V .
5 / " ^ Uítofo abrazo el empeño de rebatir ella fa-
V ~í bula , no íolo por la razón general de fer
error común , lo que derechamente la conftituye deba-
xo de mi jurifdicion , mas también por el particular mo-
tivo de vindicar la Nación Portuguefa de la injuria que
lele hace en íuponerla tan ruda, que fe dexaííe engañar
de un hombrecillo folo , en negocio tan alto, y cúta-
les circunftancias , que la mas débil advertencia baila-
ría para defeubrir el .enredo. Amo , y venero á eíta no-
biliísima Nación por todas aquellas razones que la ha-
cen glorióla en todo el Orbe. El nacimiento me hizo ve-
cino luyo , y el conocimiento apafsionado. Eítrañarán
lo fegundo los que faben lo primero , porque entre los
confinantes fujetos ádiltintas Coronas fuele reinar cier-
ta eípecie de emulación , que los hace mal avenidos.
Pero como el Cielo me dio un efpiritu defembarazado
de ellas preocupaciones vulgares , igualmente eílimo el
mérito en qualquiera parte que le encuentro. Ni el
Pais donde el íugeto nace , ni el partido que ligue , aña-
den un grano de pefo en aquella balanza donde exa-;
mino lo que vale:
§• V..
7 T 7 Olviendo al propoíito , digo , que el que el
V embuftero Saavedra fe hicieíie recibir en
la Corte de Portugal cerno Isuncio , ó Legado de íu
Santidad,,es mui difícil de creer; y el que , aun íupuefta
fuadmiísion,-pudieü"e foñener por efpacio de ieis me-
fes el caraíter de tal, es una quimera. Lo primero fe
prueba , porque aunque forjaílé el Breve Apoílolico con-
ducente a eíte efteto , guardando rigurofamente el eíti-
lo de la Curia , y imitalle perfectamente la firma del Se-
c;erario de Breves, nada haría con todo efto , mien-
tras no le fellafie con el anillo del peleador , que es la
nota , ó divifa eíTencial de los Breves de fu Santidad , por
lo menos de los que fe dirigen á los Principes. Tan in-
expertos , ó tan infeníatos Miniflros tenia ci Fie y Don
Juan el Tercero, que no notaflen cita falta? Y el fu-
plir el Sello , no entiendo como podria ajuftarlo. Según
DISCURSO T E R C E R O : • 157
¡el tiempo en que colocan eñe fuceíTo, ya él Rey Don
Juan llevaba diez y ocho anos de Reinado ,, en los qua-
les confta , como fe verá mas abaxo , que havia recibi-
do diferentes Breves de Roma. C o m o , pues, fe le p o -
dría engañar íolo con el trampantojo de la imitación
de la ktra, faltando lo mas eflencial para que pcgaffe la
trampa ? Afsi toda la grande habilidad de Saavedra en
imitar letras ó hurtar firmas podría fervirle para ha-
T
§. VI.
9 "O Ero la mas eficaz impugnación de todo lo di-
I cho, afsi en quanto á la primera parte , como
•én orden á la fegunda, la debemos a la diligencia del Pa-
dre Fr. Antonio de Soufa, Religioíb Dominicano , Con-
fejero de la Suprema Inquificion de Portugal, que en un,
tratado de Origine S.vfib'ta Itiquifiíionis in Regno Lujita-
nia, que introduxo ai principio del Tomo , que eícribió
debaxo del út\Ao,Aj)borif¡ni Inquijitorum, bate en rui-
na la fábula de que tratamos, fin dexar en fu faltedad la
menor duda, pues todas las noticias que da en aquel tra-
tado , fon deducidas de las miímas Bulas Apoítolícas,
que fe expidieron fobre el negocio de la Inquificion de
Portugal, y de otros muchos inítrumentos originales
confervados, ya en la Secretaria Real, ya en ios Archi-
• vos de la Suprema Inquificion , y de las Subalternas,
JJ.8 p A S L ' L á - " 0 É L ESTABLECIMIENTO, &C.
Pondremos aqui lo que efte docto Religiofio efcribióTo"-.
bre la materia, tomando las cofas deide fu primer ori-
gen.
1 0 Refiere la expulfion de los judies de Efpaúa por,
los Reyes Catholicos año 1 4 8 2 . y como el Rey D. Juan
el Segundo de Portugal los permitió alli por tiempo li-
mitado, pena de que no faliendo al termino fcñalado,
fucilen hechos e.fciavos, como de hecho fe vendieron
muchos como tales, por haver" faltado al orden. Añade,
í^ue el Rey Don Manuel año de 1 4 9 7 . renovó el mifmo
Edicto pero haviendolo quebrantado algunos Judios,
(
§• V I L
1r 1 ' Sto es en fuma lo que refiere el P. Fr. Anto-
JlL nio de Souia, facado todo de instrumentos
auténticos : à que fe añade, que eíte Religiofo , fobre fer
natural de Lisboa, fué familiar del lutante Don Enrique,
y mui immediato al tiempo de la primera fundación de'
la Inquiílcion en aquel Reino : circunstancias , que, aun
fin el íubíidio de los instrumentos, perfuaden eitaria mui
enterado de la verdad del hecho.
1 2 A viíta de eíto, que fee debemos dar al manufi-
crito del Efcoriai, que no Sabemos quando , como , por
quien fe introduxo alli, ni ella guarnecido de prueba al-
guna de fu legalidad ? Ninguna : pues el eítar depofitado
en aquella Bibliotheca en ninguna manera, le autoriza,
fabiendofe, que las mayores , y mas eícogidas Blbliothe-
cas, en materia de manuícritos , Son como la red de él
Evangelio, que peScan de tocio , bueno , y malo. Ningu-
na, digo, pues pugna diametralmente con las Seguras no-
ticias del Padre Soufa, no por un capitulo Solo, fino por
ico FÁBULA DEL E S T A B L E C I M I E N T O , &CY
dos, ambos muí capitales. El manufcrito pone la erecV
clon de la Inquificion en el año de 1 5 3 9 . Según la rela-
ción de Soufa eftaba ya erigida tres años antes. £ 1 ma-
nufcrito fupone, que havia renitencia de parte del Rey
de Portugal-, fegun la relación de Soufa, tan lexos citaba
cite Principe de reíiftirla , que antes la folicitaba , y efta
folicitacion havia empezado muchos años antes.
1 j P o r otra parte fi el Doct. Páramo copió , como
fe debe fuponer, fielmente el manufcrito , hai en él un
anachronifmo garrafal, que le conítituye merecedor de
fumo defprecio, pues dice , que Saavedra con cédula fin-*
glda de Phelipe Segundo coníiguió la Encomienda de
que hablamos arriba, y la desfrutó por efpacio de diez y,
fíete años, todo eíto antes de fingir la Legacía : lo qual
abfolutamente repugna , porque la Legacía fe fupone
efectuada el año de 1 5 3 9 . y Phelipe Segundo no entró
en la Corona hafta el de 1 5 5 5 . en que la cedió Carlos?
Quinto. Mas cauto anduvo en efta parte el Autor de la
Comedia , que el del Manufcrito del Efcorial, y que el
Doót. Páramo , pues notando la incompatibilidad , que
expreífamos , pone en el Reinado de Carlos Quinto da
falílficacion , que eftotros feñalan en el de Phelipe Se-,'
gundo.
14 No es eíto aun lo mas fuerte , y eficaz, que hai en!
la materia , fino que el mifmo Paramo cali immediata-
mente á la relación , que hace del enredo de Saavedra,'
abiertamente fe contradice, y desbarata todo lo que acá-:
ba de referir, pues formando la ferie chronologica de los
Inquiíidores Generales de Portugal, dice, que el primero
fué D. Fr. Diego de Silva, Obiípo de Ceura , Confeífor
<de Don Juan el Tercero, quien fué electo para elle em-
pleo el año de 1 5 3 6 " . y que defde aquel año lo íirvió haf-
ta el de 1 5 3 9 . que lo renunció , y entró en fu lugar el
Infante Don Enrique, hermano del Rey D. Juan el Ter-;
cero, Arzobifpo de Ebora, Cardenal que fué defpues , y
Rey de Portugal: en que le vemos enteramente de acuer-
do con lo que dice Fr. Antonio de Soufa,y que por con -i
$guieiit.e no dexa la menor duda en que toda la relacio ií
au.n
DISCURSO TERCERO. 161
antecedente es una patraña. Notable inadvertencia de
Efcritor, quando no foío acaba de referir aquel íuceííó,
i|ias añade, que le tiene por verdatlero!
§. V I I I .
Yf Oí" embargo de todo lo dicho , una objeción
difícil nos refta que delatar, y es, que Gon-
zalo de Illefcas, que eferibió mucho antes que Páramo,
dá por confiante el hecho que impugnamos , como cofa
fucedida en fu tiempo,y de notoriedad publica ; añadien-
do, que él vio al mifmo Saavedra en las galeras pagando
fu delito. Afsi dice en el libro 6. de la Hiíloria Pontifi-
cal, cap.4. Siempre que me acuerdo ele efe Nicolao Lau-
rencio (fué eñe un pobre Notario Romano, que en tiem-
po del Papa Clemente V I . en fuerza de fu valor, é in-
duftria fe apoderó de la Ciudad de Roma , y la gobernó
abfoluto un pedazo de tiempo) me parece fu negocio al
de aquel Nuncio , que vimos en nueftros dias, que con le-
tras faifas hizo creer al Rey de Portugal, que le embiaba
el Sumo Pont i fice Papa Paulo III. a él por fu Legado , y
él fe buvo tan diferetamente en todo lo que pudo durar
la difsimulación \ y entre otras cojas mui feñaladas , que
hizo, fué una introducir en el Reino de Portugal el Santo
Oficio de la Inquificion al modo de C afilia , de donde fe
ha feguido en aquel R.einogrande férvido de Dios. Lia-,
mabafe ejie buen hombre Sayavedra ,y era,fegun oi, na-
tural de la Ciudad de Córdoba , grandifsimo eferibano , y
tenia otras muchas habilidades; y defpues le vi yo en las
galeras de fu Mageftad remando , adonde efluvo muchos
anos, hafla que fe le dio libertad, y murió en ella pobre-
mente.
16 He confeílado, que efta objeción es diñcil ,por
eñár fundada en el teftimonio de Autor contemporáneo,
y que no eferibió, fegun parece, atenido á la dudofa fee
del manuferito del Efcurial, el qual es bien verifirnil que
Tom.VL X no
IÓ2 FAJ>ÜLA DEL ESTABLECIMIENTO, & C .
no huvieíTe virio, fino á la voz común ; á que añade mu-
cho pefo el haver vifto al mifmo dcünqucnte en las ga-
leras. Pero toda fu dificultad íubíilie precisamente en-
tre tanto que fe considera folitariamente el teftimonio
del Autor alegado. Quiero decir , que la autoridad de
lilefeas feria bailante a perfuadir la efpecie, á no citar
contra fu depolicion , ya la grande inverisimilitud (que
arriba hemos manifestado) del hecho , ya la poderoíiísi-
ma teítiSicacion del Padre Soufa , ya la del mifmo Pára-
mo, que es contraproducentem. Pero todos eítos argu-
mentos en contrario de tal manera debilitan el que fe
funda en la autoridad de lilefeas , que le dexan fin fuer-
za alguna.
1 7 Mas como lilefeas pudo padecer un error tan
craílb en orden á un Sucelíb de iu tiempo ? Para Satisfa-
cer á eita pregunta no he meneiter valerme de la Critica,
que de eíte Elcritor hizo Leonardo de Argenibla , de
quien no dudó decir, que havia Sido fácil en creer , y li-
gero en eferibir. Digo que no he meneiter valerme de
eita Critica ; porque el Autor mas cauto puede c:;er tal
vez en igual yerro. Varias veces hemos notado de quan
leves principios Suele nacer un error popular, que cunde
todo un Reino , y como á veces echa tales raices , que
tarde, ó nunca llega el defengaño. En elle Reinado te-
nemos experiencia de algunos , que corrieron mucho
tiempo, y aunque defpues llegó el defengaño , Subliíten
los impreflbs , que los publicaron, y en la poíteridad ha-
rá Su teítimonio tanta, ó mayor fuerza , que en nueítro
tiempo el de IlleScas.
18 Tampoco debe movernos el que IlleScas vieíle
al miímo Saavedra en las galeras. Litaría en ellas por
otros delitos de falfario , que verdaderamente havia co-
metido ; íin que elfo haga confequencia para el princi-
pal, que le imputaba el rumor popular. Lo que pudo
engañar mas á lilefeas , y lo que acaíb engañó á tocia Ef-
paña, es, que el mifmo Saavedra fe adfcribia aquel Su-
cedo. Ello Se colige de que el manuferito del Éfcorial
fue-
DiSCCR.Su T e r c e r o . 161
fuena fer Autor ele él el miímo deiinquente. Y aunque
ello para muchos le añadirá fuerza , y pefo , ello miimo
en mi diótamen le hace defpreciable. Qué crédito m e -
rece un embuílero de profeísion ? O ! que no le culpa-
ría á si m i í m o , me dirán , 11 no fucile verdadera la cul-
pa. Replico, que íi ; y que efto es cofa , que fe vé mu-
chas veces. U n deiinquente, que fe vé en eílado de no
tener yá mas que perder , ni por lo que toca á la pena,
ni por lo que mira á la infamia , no rehuía adfcribirfc
u n o , u o t r o delito mas íbbre los que verdaderamente ha
cometido , y aun con eíludio , y de intento fuele hacer-
lo , quando el delito es de tai naturaleza , que acredita
mas fu induflria , ó fu valor. Elle es el caío en que fe
hallaba el falfario Saavedra , q u a n d o por fus embulles
fe vio condenado á galeras. P o r tomar el carácter de
Nuncio Pontificio en Portugal , fer venerado como tal
en aquel Reino , y introducir en él al abrigo de elle
engaño el Tribunal de la Inquificion , conocía que no fe
le havia de agravar en Caililla la pena merecida p o r
otros delitos. Refpeclo del Reino , donde no le havia
cometido la culpa , la grande importancia del fin fu-
primia la torpeza de los medios. Por otra parte con
la ficción de un delito de elle genero oílentaba una ha-
bilidad fingularifsima , una oiadia incomparable , que
fon las dos colas , que mas lifongean la imaginación de
los hombres. Los que con repetidas maldades perdie-
ron la vergüenza , y la lama , iuelen hacer jactancia de
un heroifmo contrahecho , que coníiíte en tener cora-
zón , y aftucia para emprender , y lograr infuítos arduif-
fimos , porque folo por eífe camino fe pueden hacer*
famofos. Efto fe entiende., quando cífa vanagloria no
hace de peor condición fu fortuna. T a l é r a l a fituacion
de Saavedra al ver concluida fu caula.
1 0 L o único , pues , que puedo admitir como ver-
dadero en efta hiftoria , es aquello poco que fe requie-
re para que la mentira fueíTe hija de algo. Greible es,
que Saavedra fe fingieííe Legado Pontificio, y hicieíle el
Xa pa-
i<54 FÁBULA DEL ESTABLECIMIENTO,&C.
papel de tal en algunas Aldeas, ó Lugares cortos de Caí-
tilla , y Portugal, donde fin mucha dificultad podria ha-
cer valer el embufte , y utilizarle mucho en él, ya pi-
diendo dineros preñados , ya beneficiando difpenfacio-
ncs; y que defpues fobre el pié de efta verdad añadieíTe
en fu relación circunftancias fabulofas , que engrande-
cieren la hiftoria hafta el grado de hazaña heroica en la
linea de la trampa.
§. I X .
do 1 " S cofa notable, que caí! al mifmo tiempo
£ 3 fe reprefentó en Italia otra Comedia feme-
jantifsima. Un famofo ladrón , cuyo verdadero nom-
bre ignoro , haviendo conocido que fe parecía mucho
en los lineamentos del roñro al Cardenal Ludovico Si-
moneta , Legado que íué en el Concilio Tridentino,
x
HA-
íí? $ as & «s $? c% & c & &fis«¡ & &
* * * * * * * * * * * * * * * * * * * ígffc-
HALLAZGO
D E E S P E C I E S PERDIDAS.
DISCURSO QUARTO.
§• I-
¡ZNtre los que creen qué el Mundo defde
creación halla ahora ella padecien-
1 1 1
IIííiÉír *°
C
f u
"n a
decadencia , mayor,
u c c e i s r v a
§. I I .
a T J Ü d i e r a cita opinión impugnarle con una doc-
1 trina Theologica de Orígenes , San Aguílin,
Santo Thomás , y otros Padres , y Doctores , los qua-
les , fundados en algunos lugares de la Eícritura , enfe-
nan , que la cuílodia de los Angeles no folo fe eílien-
de á los hombres , pero á todas las criaturas viíibles;
mas con cita diferencia , que para cada individuo de la
cfpecie humana cita deputado fu efpccial Ángel de
guarda. En las demás efpecies no eítán diíiribuidos por
individuos , fino que de cada efpecie cuida un Ángel fo-
lo. De cite modo eítá repartida entre varios Efpiri-
tus Angélicos la cuílodia de los Cielos, de los Aftros,
de los Elementos , de los Brutos , Plantas, Metales , Pie-
dras, &c. defeanfando ( que viene á fer la frafe con que
íe explica el Damafceno) todo el Orbe fobre fus hom-
bros:
Pronaque ad obfequium yars altera fujlinet Orbem
Auxilio fervatque fuo.
§• III-
T TTTMpécémos por la Purpura , cuya pérdida
i¿ es la que con mas feguridad fe afirma. Ef-
fca , fegun la deferipcion de los Antiguos Naturaliftas,-
cra un pezeeillo del genero Teftaceo , ó efpecie de Of-
tra , que en una parte de la garganta contenia aquel ro-
xo licor tan apreciado. Vena llama Plinio el recepta-
culo del licor ; pero en realidad no podia fer tal, pues
fi fuelle vena, por la ley de El circulación debiera el li-:
cor girar por todo el cuerpo , y afsi no en una parte fo-;
la de é l , fino en todo fe hallaria. Mejor , pues , Arifto-:
teles la llama Membrana ; y dice , que efta eftá embe-;
bida del roxo humor , el qual por exprefsion fe faca de
ella. No folo en el Mar de Tyro fe hallaba , como tie-
nen muchos aprehendido , fino en otros algunos ; aun-t
que frequentemente fe lee nombrada fola la Purpura dq
Tyro,porque era la mas precióla. Ni tampoco es fu efpe-:
cié uniforme ; antes fon mui diverfas unas de otras en
magnitud , figura , perfección del jugo, y otros acci-;
dentes ; aunque afsi Plinio , como Ariftoteles , atribuyen;
ella diverfidad, no ádiftincion efpecifica , fino al diver-i
fo fuelo que habitan, y alimento de que ufan. Donde
noto también , que tanto Plinio , como Ariftoteles , ha-:
blan del Múrice , y Purpura, como Teftaceos diStintos,
Tom. V l % X con-,
176 HALLAZGO DE ESPECIES PERDIDAS.
contra lo que comunmente fe cree; hora efta diftinciori
fea fubftancial, ó puramente accidental , como parece
mas probable.
6 Eñe pez , pues , que tantos Siglos, ha fe llora co-
mo perdido , deponen varios teftigos de villa , que aun
oy exilie. Rondelecio , y Belonio, citados por Gefne-
ro , dicen que le vieron , y manejaron, y aun Belonio le
anatomizó. Ellos dos Autores florecieron dos Siglos ha..
De los modernifsimos dan noticia de haver vifto la. Pur-
pura en varios parages de la America , como en Nico-
ya , en las Antillas , .&c. el Irlandés Thomás Gage , y
el Padre Labat, Dominicano. L o mifmo fe halla aileve-
rado en el Diccionario de Comercio de Jacobo Savari,
y en el Univerfal de Trevoux. Finalmente ,. haviendo
yo confultado lobre eñe punto al curiofiísimo , y eru;-
ditifsimo Caballero Don Tofcph Pardo ele Figueroa,
que paífeó buena parte de la America con una aplica-
ción grande á informarfe de todas las particularidades
de aquel continente , me refpondió, que fe hallaba la.
Purpura en abundancia en Guatimala , donde los Natu-
rales fe íirven de ella , abriendo la concha , y paflando.
el hilo , algodón , ó leda por aquel humor que encier-
r a , halla que le confumen , y hecho efto la reltituyen al
agua , donde vuelve á adquirir nuevo humor. Añadió-
me , que da aquel jugo un color mui fino , y que e¡ hi-
lo (á quien llaman Hilo del caracol, porque generalmen-
te dan alli efte nombre á todo genero de Teftaceos) es
•eflimado en aquella Provincia.
7 Eflos teftimonios nos aífeguran , que la Purpu-
ra exifte , aunque no en Tyro , ni acafo en los demás li-
rios , donde la hallaban los Antiguos , si en otros dife-
rentes. Eflo no es particular á elle pez.: En otros mu-
chos fe ha vifto faltar de tal, ó tal Puerto , donde era co-
piofafu cofecha , y lograrfe en otro diflante , donde an-
-tes no parecian. No folo en los animales marinos, tam-
'bien en los terreflres hai alguna experiencia de eflo. En
la Siberia, aquella dilatadifsima Provincia íujeta al Czar,
que comprehende gran parte de la Tartaria Septentrio-
Discurso Qharto. jjf
nal, y afpero deílierro délos infelices, que arroja allí
el enojo del Soberano , huvo un tiempo muchiísimos
Elefantes , como invenciblemente fe colige de la gran
copia de dientes fuyos , que oy fe encuentran en aque-
lla valia Región. Oy no parece un Elefante en toda la
extenfion de la Siberia , aunque los hai en abundancia en
otras partes de la Afia.
8 Una objeción eftá faltando á los ojos ; y es , que fi
oy fe hallaffe la Purpura en varias partes de la America,
ci comercio havria trahido fu ufo á Europa , pues aunque
elle fe puede fuplir , y fupie con el tinte de la Cochinilla,
que vulgarmente llamamos Grana , es de creer que el de
la Purpura , fegun la recomiendan los antiguos Efcrito-
res , era fin comparación mas fino , y afsi íiempre feria
apetecido con aníia de tantos Señores, que á todo cofte
Solicitan la pompa de los hábitos.
S> A efte argumento Se puede reSponder lo primero,
concediendo la Sequela. Thomás Gage dice , que en ES-
paña Se hace algún confumo del paño teñido de Purpu-
ra , pero poco , por Su mucho cofte , pues Sube á veinte
eSCudos La vara , y aSsi añade, que Solo los mayores Se-
fiores de ESpaña hacen algún gallo de él. Pero efta no-
ticia para mi es SoSpechoSa; y creo que tanto los Gran-
des Señores , como los chicos, Se Sirven de la grana co-
mún , ó paño teñido de la Cochinilla , con Sola la dife-
rencia de que , á proporción del mayor , ó menor poder,
uftm de grana mas , ó menos coftofa , pues hai dentro de
,efte genero gran diferencia de precios.
1 0 Mejor, pues, responderemos lo fegundo , que
no iguala el tinte de la Purpura al de la Cochinilla , y por
elfo es preSerido efte á aquel. En efto convienen co-
munmente los Autores , que teftifican de la existencia de
la Purpura , exceptuando el citado Thomás Gage. Don
JoSeph Pardo Se contenta con decir, que en nada exce-
de el tinte de la Purpura de Guatimala al de la Cochi-
nilla , pero es mas trabajoSa Su manifactura ; lo qual baf-
ta para que nunca venga á Europa , y folo tenga ufo en-
tre aquellos naturales , que hallándola á mano, ahor-
Y zj ra«
172.' HALLAZGO DE ESPECIES PERDIDAS.
fan el gafto de la conducion de la grana, Pero el Padre"
Labat habla con mucha defcítimacion del tinte de Pur-
pura , no por la debilidad del color, 6 luílre , fino por fu
pocí duración , pues dice , que con las lavaduras fe va
ganando halla difsiparfe enteramente ; por lo qual fe in-
clina , ó á que la Purpura , que oy hai, es difiinta de la
antigua de Tyro , o que los Antiguos tenian alguna par-
ticular manipulación para fixar el tinte , cuyo fecreto fe
ha perdido.
11 Fácil es componer eíla difcordia de opiniones,
en atención á que en los Antiguos Naturaliftas leemos,
que las Purpuras de difuntos Mares eran mui deiiguales
en la fineza del tinte. Sucederá , pues , y es precifo que
fuceda oy lo mifmo : con que havrá en una parte Purptu
ras , que den tinte tan fino como el de la Cochinilla , en
otra que le den algo inferior , en otra muí inferior.
Configuientemente cada Autor habla diferentemente,
porque cada uno vio diferentes Purpuras, uno en una
•parte , otro en otra. También la diferente manipulación
que havrá en diferentes parages , aun fiendo igual en
bondad el tinte , puede inducir una gran defigualdad en
el color de látela; lo que no advertido por los que no-
taron eíTa defigualdad, pudo ocafionar en ellos el error
de atribuirla á la Naturaleza , fiendo toda del Arte.
1 2 De la grande eílimacíon que entre los Anti-
guos tenia el tinte de la Purpura , no fe infiere que fucile
mas , ni aun tan preciofo como el de la Cochinilla. Era
aquel el único que tenian , porque la Cochinilla no ef-
- taba, defeubierta entonces ; afsi, á falta de otro mejor, ni
aun igual, es precifo que apreciaffen mucho aquel.
13 Concluyo con que las feñas que dáThomásGa-
•ge de la Purpura Americana, coinciden perfeétamente
eon la deferipcion que de efte pez hace Piinio : como fon,
que tiene el defeado licor en una blanca vena déla gar-
ganta ; que vive fiete años ; que fe fepulta en el orto efe
la Canícula, y eílá efeondida halla la Prima-
. vera figuiente.
*„•*
DISCURSO QUARTO.;
§• I V .
r
'14 T A opinión de que oy carecemos del verda-
JL¿ dcro Balfamo , creo que no tiene otro fún-
dame nto , que haver afirmado Plinio , que el árbol que
le deítila es tan privativamente proprio de la judea , que
no puede producirle otra alguna tierra. Uni térra Ju-
áeea coKccJfum , dice lib. 1 2 . cap. 2 5 . y Fajiidit Balfa-
mum alibi nafci, lib. 16. cap. j 2 . Como , pues , oy no
fe halle el Balfamo en judea , fe ha inferido , que eíta
efpecie fe perdió para todo el Mundo. Pero en eíta par-
te erró Plinio ; porque Diofcorides dice , que no folo
fe procreaba el Balfamo en judea , mas también enEgyp-
to ; y cite Autor , como natural de la Cilicia , mucho mas
vecina á Egypto que Roma, donde eferibió Plinio , ef-
taba mas proporcionado para tener noticia de las Plan^
tas de Egypto ; afsi merece mas fee que Plinio en eíta ma-
teria.
15 Lo mejor es , que ni los mifmos Hebreos atri-
buían á fu Patria el honor de fer producion tuya el Bal-
famo ; pues era Tradición entre ellos , que la Reina Sa-
bá, quando vino á vifitar á Salomón, havia trahido aque-
lla planta á judea. Afsi lo refiere jofepho : Ajunt etiam
quod Balfami plantam , cujus hodie quoque ferax efi no-
Jira Rfgio, illius Regina munijicen'ia ferriacceptam opor-
teat (Antiquit. judaic.lib.8. cap.2.) Según eíto , venia á
fer el Balfamo de judea originario de la África ; y fi la
Reina Sabá dominaba en Egypto , como eferibe el mif-
mo jofepho , coincide oportunamente eíta noticia con
laque da Diofcorides de que también en Egypto fe pro-
duce el Balfamo.
1 6 Con todo , oy no fe halla el Balfamo en Egyp-
to , ó folo fe halla como quieren algunos, en un jardin,
}
§• Y-
19 ' " T " * O d o s , ó cali todos los que niegan que fe
4 haya perdido la efpecie del Cinnamomo,
convienen en que ella planta no es otra que la que no-
fotros llamamos Árbol de la Canela. En efe<Sto la voz La-
tina con que lignificamos elle árbol, ó fu corteza , no es
otra que cinnamomum.
20 Y o eftoi perfuadido á lo mifmo , por algunas
fuertes congeturas, que me han ocurrido á favor de efta
opinión. La primera es , que las mifmas virtudes , que
Diofcorides atribuye al Cinnamomo , como fon mover
el mcnftruo , y la orina, facilitar el parto , clarificar la
villa, aprovechar á los hydropicos , reconocen los mo-
dernos en la Canela. La fegunda, que lo que mas fe efti-
maba , ó fe eíljmaba únicamente en el Cinnamomo de
los Antiguos,.érala corteza. Confia ello dePlinio:: Vi-
lifsimum quod radicibus proximum , quoniam ibi míni-
mum corticis , in quo fumma gratia. Qua de caufa pr<e-
feruntur cacurnina , ubi plurimus cortex. Efta feña es ef-
pecifica del árbol de la Canela , en cuya corteza efta, fu-
mayor, ó caii todo fu precio. La tercera es , que fegun
el mifmo Piinio,. el proprio terreno,que produce el Cin-
namom , produce también laCaísia lignea: Fruíex &
Cafsia efl,juxtaque Cinnawomi campos nafeitur. Seña,
que alsímiimo conviene á la Canela; pues la Isla de Zei-
lan, que produce la Canela, nos da también la Cafsia lig-
nea. L a quarta, que fegun Galeno, en el libro i . d e los
Antídotos, citado por el Doctor Laguna, la mas excelen-
te Cafsia lignea es mu i parecida al Cinnamomo , y imi-
ta
17!? HALLAZGO DE ESPECIES PERDIDAS.
ta iu virtud, de modo que es fupiemento de él, y fuele"
venderle en fu lugar. Efto es puntualmente lo que oy fe
experimenta refpeófo de la Caneia , á quien fuple admÍ-¡
niíirada en mayor cantidad la corteza de la Cafsia lig-í
nea; y aun afíeguran los que entienden de drogas , que
apenas fe nos vende jamás la caneia fin mezcla de algún
na porción de Caísia.'
2 1 No difsimularé dos objeciones , que fe me puS"-;
den hacer. La primera es, que Pimío dice , que el Cin-:
namomo no excedía de dos codos de elevación; y el Ar-:
bol de la canela, aunque no mui crecido , excede confi-
derablemente eíla eílatura. En el Diccionario univerfal
de Trevonx fe lee, que el aiío de 1660. fe tranfplantó un,
árbol de eílos de las Indias Occidentales á Hamburgo;
el oual creció á la altura de quince , ó diez y íéis pies. 1
Z ¿Mi
HALLAZGO DE ESPECIES PERDIDAS.
§• V I .
25 T U l i o Cefar Scaligero , y Gerònymo Cardano,
dos Autores tan generalmente opueftos en
los dictámenes, que parece fe havian convenido en no
convenirfe jamás, ò propucfto uno al otro , como Abra-
han à Lot, feguir fiempre rumbo encontrado al que él
eHgieíTe,y? adfinìjìram ieris, ego dexteram tenebo -, ¡i tu
-
§• V I L
33 < f \ U é coficofa fueífe lo que los Antiguos llaman
N ^ . ban Aurichalco, no es de mui fácil averigua-
ción. Muchos creen que era un compuefto de Oro, y Co-
bre, fundados en que la voz Aurichalcum es compuefta de
la voz Latina Aurum , que fignifica oro , y de la Griega
Cháleos, que fignifica cobre;vero efte es un error palmario.
Nebrixa,y Paiferacio advierten , que Aurichalcum fe dice
por abuíb , y corrupción. La voz genuina es Orichalcum*
Los Grieges conftantemente eferiben Orichakos, y afsi
eferibian aun antes que los Romanos íupieflen tomar la
pluma en la mano. Los mas antiguos Latinos no decían
Aurichalcum , fino Orichalcum. Afsi fe halla ella voz , y,
no aquella en Piauto, y en Cicerón.
3 4 Orichakos es voz adequadamente Griega, com-;
puefta de dos , oros , que fignifica monte , y cháleos , que
correfponde á la voz Latina <?s; y aísi lo proprio dice en
Griego Orichalcos, que en Latin <y£s montanum , y efta
es la verfio.n legitima de aquella voz. De aqui fe puede
co-
182 HALLAZGO DE ESPECIES PERDIDAS.
colegir, que el Aurichalco era una efpccie de cobre mas-
brillante , y preciofo que el común. Digo una cfpecie de
cobre, porcpie aunque la voz Caftellana cobre viene ori-
ginariamente del <¡s£s Cyprium, que es una cfpecie deter-
minada , por falta de otra explicamos con ella lo que el
Latino íignifica con la voz genérica cs£s.
3 5 El mas común fentir , y que reina en los Diccio-
narios , es , que Aurichalco le llamaba lo que nofotros
decimos Latón , el qual no es otra cofa que cobre mez-
clado con una tierra mineral, llamada Calamina. Ella
opinión me place , porque el Aurichalco tenia en el color
mucha femejanza con el oro , lo que confia de un palla-
ge de Cicerón: (Lib.3. de Ofric.) Si quis Aurum vendens
Oricbalcum fe putet venderé ; y no vemos metal alguno
que pueda equivocarfc en el color con el oro,lino el La-
tón. A que añado una eficacifsima conjetura. En el ter-
cero de los Reyes, cap. 7 . fie lee , que los vafos del Tem-
plo de Salomón eran de Aurichalco ( al original Hebreo
correfponde, c £ r e terfo) y Jofephojdice, que eran de Co-
bre , que tenia color, ó refplandor de oro : Fecit item
vafa ejus ex <y£re omnia , lebetes, & amulas, tenacula, &
barpagones , & reliqua , auri falgorem referentia. Se-
ñas tan efpeciñcas del Latón, que no permiten aplicarfe á
otra cofa.
36 Opondráfeme lo primero , que el Aurichalco era
eílimadifsimo entre los Antiguos , lo que no puede veri-
ficarte del Latón, metal de baxo precio. Refpondo, que
el precio , y eflimacion de las cofas fuben , y baxan fe-
gun la variedad de tiempos , Paifes , y otras circunílan-
cias. Si entre los Antiguos havia mui poco Latón , fe-
ria mui eílimado el Latón : como por eíla razón dixi-
mos en otra parte, que los habitadores de lalslaFor-
mofa le eftimaban mas que el oro. El que haya mucho,
ó poco , depende de eílár defeubiertas pocas, ó muchas,
grandes , ó pequeñas, próximas , ó difilantes las mineras
de Calamina. Acafo efte mineral no fe hallaba entonces,
fino en alguna Región remota , y de aqui venia la precio-
fidad del Lacón. Oy fe halla en muchas partes,y elfo le ha
envilecido. Opon-
DISCURSO QUARTOV "183
37 Opondráfeme lo fegundo , que Plinío cuenta el
Aurichalco no entre los metales facticios , ó que reful-
tan de mezcla, fino entre los nativos , ó limpies. Ref-
pondo lo primero , que en efta parte pudo Plinio pade-
cer engaño , y es natural le padecieíTe , fi el Aurichalco
era genero mui eitrangero , fiendo cofa común en los qué
venden drogas compuertas , ó artificiales , cuya fabrica fe
ignora , fingirlas naturales , y fimples , para aumentar el
precio. De efto tenemos un exemplo reciente en el fal
Ammoniaco , que viene de Levante , el qual fe juzgaba
acá nativo , hafta que por una carta del Padre Sicard,
Mifsionero Tefuita en Egypto , efcrita al Conde de T o -
loíá., cuyo extracto fe halla en las Memorias de Trevoux
del año 1 7 1 7 . y otra de Monf. Lemere , Confuí del Cai-
ro , á la Academia Real de las Ciencias fe fupo fer arti-
a
ficiaL
3 8 Refpondo lo fegundo , que acafo entre los anti-
guos havia Latón natural, ó que íalia tal de la mina,
trabajado por la naturaleza en litio donde concurrieífen
los dos materiales , cobre , y calamina. Hace verifimil ef-
to la denominación de zs£s montanum,qyLC parece alude á
algún determinado monte donde huvieífe efta minera;-
y adelantando la conjetura, fe puede difcurrir , que ef-
te monte era el Líbano , fobre el fundamento de que en.
el Apocalypíi, (cap. 2. verf. 1 8 . ) donde nueítraVulga-
ta lee Aurichalco , el original Griego dice^Chalco Liba-
no, efto es , Metal del Líbano ; bien que Nebrixa dá otra
lignificación diferentifsima á efta voz Griega ; pero es
generalmente impugnado.
19 Ni aun afsintiendo á que el Aurichalco fueíTe
Laton natural , fe infiere que efta efpecie fe haya perdi-
do. Puede fer que en aquella parte de donde le extra-
hian los Antiguos , fuellé el Libano ú otro monte , ha-
r
§. V I I I .
41 T A imaginación de que fe han perdido algu-
\_j ñas efpecies de hierbas medicinales , viene
á mi parecer de tres principios. El primero , la falta de
aplicación en inquirirlas, {i de dicha en encontrarlas.
Ei fegundo , la variación de los nombres. El tercero,
las virtudes , que ó fabulofa , ó hyperbolicamentc les
atribuyen los Antiguos.
42 Si porque oy no hallamos en los catálogos dé
los Botanistas modernos una , ú otra planta , de que dan
noticia los Antiguos, fueífe bueno inferir que eílas Ef-
pecies existieron en otros Siglos, y no existen ahora;
también , torciendo el argumento , de que en los Anti-
guos no fe hallan innumerables Efpecies, de que dan no-
ticia los Modernos , fe deberla inferir , que ahora cxiS-
ten muchifsimas, que no existieron en los Siglos ante-
riores : y Siguiendo eíte modo de diScurrir , hallaríamos
que es poquifsimo lo que perdimos , en comparación de
lo que ganamos; por. consiguiente, que oy la Naturale-
za
DfSCURSO Q U A R T O . zgf
ia. é s m a s v i g o r o f a , y-fecunda, que en los tiempos paA
fados. El famofo Botanifta Jofeph Pitton de Tournc-
fort llegó á conocer ocho mil ochocientas y quarenta
y feis Efpecies de plantas , entre terreftres, y mariti-
mas. Ni á la decima parte de -efte numero arribó el co-
nocimiento de Diofcorides. Diremos por eííb ., que elle
prodigiolb aumento de plantas fe debe á los nuevos ef-
fuerzos de la Naturaleza ? No fino á la mayor aplicación
de los Modernos en inquirir lo que la Naturaleza pro-
duce. Luego de la mifma calidad, no porque oy no fe
conozca una., uo.cra planta, que los Antiguos conocie-
ron , fe ha de -inferir., que oy no exifte ; fino que efti
retirada,ó en Regiones diñantes, ó en fenos poco accefsi-
bles., donde no llegó el examen de los Botaniftas mo<¡
dernos.
4 3 El Árbol del Caffe fe creyó mucho tiempo, ta»'
j r o p r i o de la Arabia feliz, que no nacia en otra parte
alguna del Mundo. El acafo le defeubrió poco ha en R e -
gión mui diñante de la Arabia. Los habitadores de la If-
la de B o r b ó n , llamada antes Mafcareñas, haviendo apor-
tado allí un Navio Francés, que venia de la Arabia , y.
trahia algunas ramas del Árbol del Caffe, con hojas , y,
frutos , viéndola eftimacion quede ellas hadan Jos Eran-
cefes ., dixerou , que aquel Árbol también nada en fus
montañas. E n efecto fe halló que era afsi. Como, pues¿
el juicio de que efta planta folo nacia en la Arabia , folo
porque no fe havia vifto en otra parte , fué precipitado, lo
es también d de que t a l , ó tal planta conocida de los
Antiguos no exifte o y e n el Mundo , folo porque ninguno*
de los Modernos la encontró. Han regiftrado por ventu*
ra los Botaniftas modernos todos los m o n t e s , valles , Jj
•enfenadas del Orbe?
4 4 L o mifrao que en el Árbol del Caffe, fucedió con'
el Gingfeng, planta famofa éntrelos C h i n o s , á quiert
atribuyen Anguladísimas virtudes,y adornan de oftentofif-
fimos epithetos, llamándola el Simple Efpiritofo , el EfA
piritu puro de la tierra , Receta de immortalidad, &c. n.a«¡
ge efta planta en unas felvaj» de la T a r t a r i a , fujeta al Em-í
H A L L A Z G O D E E S P E C I E S ?rrt T U D A S .
per ador de la China , y quanta fe coge fe reíerva para
aquel Principe , parte como tributo , parte vendida á
pelo de plata fina, y éL la revende a quadruplieado pre-
cio. Y a ha tiempo que vinieron á Europa, noticias del
Gingfeng , comunicadas por algunos jeluitasMiísione-
ros de la China, eílendiendofe con ellas la general perfua-
fion de que íolo á aquel Imperio , y folo en las, Selvas de
una porción de la Tartaria havia comunicado; el Cielo
elle beneficio ; pero pocos años ha la deícubrió el Padre
jofeph Franciíco Lafitau , Milsionero jefuitade los Y r o -
quefes , en las Selvas de la Canadá , Región de la Ame-
rica Septentrional. La reflexión que lobre elle delcubri-
miento le puede hacer a nueftro propolito , es la miima
que venimos de hacer lobre el Hallazgo dei Árbol Cade,
en la Isla de Borbón.
§. I X .
45 \J ^ f c g d o principio de equivocación en ef-
un
§• X.
47 " t 7 L tercero , y ultimo principio de equivoca-
Jt_> cion , es la atribución de íingularifsimas
virtudes á algunas plantas. Es verdad que en efto no se
quienes pecaron mas , fi los Antiguos , fi los Modernos.
La Medicina Siempre fué facultad fanfarrona; Siempre jac-
tó extremadamente fus fuerzas : mas con efta diferencia.
Los Antiguos , que no ufaban tanto de Compoficiones,
encarecían hyperbolicamente la actividad de los Simples; * , •>
los Modernos fus artificiofas mixturas, á quienes honran 0j/th.fr;i/"-
mra
§• X I .
51 T AS Plantas del Oriente han tenido con cor-
I , ta diferencia la propria fortuna que las de
la America. Qué maravillas no fe dixeron del Thé , y el
Cafre en fu primer arribo á nueftras Pvegiones! Mas ya
fu aprecio fué cayendo halta el punto de tenerlos mu-
chos por nocivos , y los mas por inútiles. Los Holande-
fes, que fupieron aprovecharle mui bien en efte punto de
la credulidad de los Europeos, tuvieron habilidad para
utilizarfe mucho aias en la de los Orientales. Es el cafo,
-que les perfuadieron á eftos que nueftra Salvia , planta de
que carece el Alia , tiene incomparablemente mayores
virtudes que el Thé. Con cito logran que allá les den
doblada porción de Thé, (y aun quadruplicada lei, en un
Autor) por una de Salvia. Efte engaño por reflexión vol-
vió de la Aíia á Europa, aunque limitado á la Salvia fyl-
veftre, de quien yá ha muchos años fe eftendió por acá,
que poffee con ventajas las mifmas virtudes del Thé. L o
que en efta materia puedo aífegurar de propria obferva-
cion, es, que en el Thé es palpable la facultad de firmar
la cabeza por algún tiempo contra las baterias del fue-
ño, y afsi es útil para los que fe hallan en alguna preci-
lion de defvelarfe. Pero nunca.cn el ufo de la Salvia, ni
hortenfe, ni fylveftre, reconocí tal efecto , aunque hice
repetidos experimentos.
52 Es verdad, que aun algunos oy eftán encapricha-;
dos de las utilifsimas facultades del Thé, y el Caffé , ef-
pecialmente del fegundo. Dichofos, fi fu apreheníion
fuple la virtud, que falta al medicamento : Felices errore
fuo. Lei de una Señora Francefa, devotifsima del Caffé, á
quien tenia por fu eficaciísimo quita pefares,que havien-
dole dado de golpe la no efperada noticia de la muerte de
fu marido, al momento empezó á gritar: Irabigan Caffé,
ven-
DISCURSO QUARTO. ipf
venga mí Café, Caffé, Cafe, Cafe. Traxeronle fu Caífé,
tomóle, y quedó tan foflegada, con poca diferencia , co-
mo ft no huviefle fucedido nada. Efta tenia fu quid pro
quo del Nepenthes Homérico ; y acafo el Nepenthes Ho-
mérico no haciamas que el Caftéspero fupliaHelena con
fu imaginación en la planta Egypcia, como la Señora,
que hemos dicho, en la de la Arabia.. O infeliz Cleopa-
tra, que teniendo tan á mano el Nepenthes, pues nacía
en fus Dominios, no fe. ílrvieSTe de él para difsipar los
crueles dolores ,. que le'ocaíionó la derrota, y muerte de
Antonio! Infeliz, digo , fi Siendo tan difcreta , y fabia,
como afleguran los Historiadores, ignoraba la portento-
fa virtud de una hierba , que crecia á la fombra de fu co-
rona, haviendo llegado efta figles antes a l a noticia de
una Dama. Griega. Ya veo, que fe podrá decír,que ya en
tiempo de Cleopatra faltaba el Nepenthes. Pero mas ba-
rato es decir, yfincomparación mas verifimil, que jamás
huvo tal hierba, ó que fi la huvo, la hai también ahora
debaxo de otro nombre ; pero fu virtud es mui inferior
á las ponderaciones de Homero.
5 3 En efecto algunos imaginan, que la hierba llama-
da Helenium es el Nepenthes Homérico , fundándote ya
en la alufion del nombre , que parece fe deriva de- el de
Helena, ya en que Plinio le atribuye la mifma virtud que
al Nepenthes, de difsipar !a trifteza. Si eílos difeurren
bien, aun no hemos perdido el Nepenthes, pues el Hde-
nium oy exifte. El Doctor Laguna fin misterio alguno
habla de él como de planta conocida, y dice, que en Caf-
tellano fe llama Ala. Pero qué milagros hace eiia hierba?
Es verdad, que eimifmo Laguna le atribuye la de hacer
olvidar as trijlezas, y co^goxas del corazón. Mas eíto
parece fer fin otro motivo, que haverlo leído en Plinio:
pues Dioícorides folo dice , que conficionada con vino
paíTo conforta el eítomago ; lo que íobre poder atribuir-
fe únicamente al vino paílb, es mui diveri o de hacer ol-
vidar todo pefar. Por otra parte no- vemos , que los
Médicos en las confecciones cordiales íé acuerden de tal
hierba.
jf.XII.
H A L L A Z G O DE ESPECIES PERDIDAS?;
§, X I I .
$ 4 T7lnálmente, yo no aífeveraré , que no fe hay*
i perdido alguna de las Efpecies que Dios
crió en el.mundo, con aquella confianza con que lo aíTe«i
guraba Pythagoras en la pluma de Ovidio:
Nonperit in toto quidquatn, mibi endite. Mundo.
Pero por lo menosefto es lo mas probable; efpecialmen^
te quando por la parte opuefta no fe alega argumento^
cuya folucion no fea facilifsima: pues aun quando n»
podamos moftrar,, ó feñalar con el dedo efta, o l a otra
efpecie conocida de los Antiguos, é ignorada de los MXH
demos,,qué probará efto ? Han regiftrado por ventura!
los Modernos quanto oy eacifte en el Mundo., campo pac,
campo, rifeo por rifeo, felva por felva? Monf. de Tour-;
.nefort ,en un viage, que hizo á Levante, en que no vifito
ni aun la feptima,ú ochava parte de la Afia,defcubrió miA
trecientas y cincuenta y feis Efpecies de plantas ignoran
das de los Botaniftas Europeos. .Quantas fe le efeonde-;
d a n aun en las mifmas Regiones que vifito ! Siendo pren
£Ífo que le quedaífen por examinar muchos , y grandes
,$fpacios de terreno,. Quantas m a s , con imponderable
.exceíTp., hayrá en las demás Regiones del Orbe., que no;
fia regiftrado algún Botanifta! Afsi ,es precifo confeíTar^
$ u e de lo.mifrao, que oy produce la Naturaleza
¡gl.Mundo es infinito lo que fe,
p
ignora.
£ O N -
CONSECTARIO
D E L DISCURSO A N T E C E D E N T E ,
S O B R E LA P R O D U C C I Ó N ,
DE NUEVAS E S P E C I E S .
DISCURSO QUINTO,
§. I.
U N Q U E los que pretenden que fe hair
extinguido algunas Efpecies de com-
pueftos naturales , que Dios crio al
principio , miran como confcquencia
de fu opinión el que la Naturaleza perdió mucho de fu
vigor primitivo, y el Mundo de fu antigua variedad , y
hermoíura, creo que bien reflexionada la materia , de fu
opinión mifma fe ligue todo lo contrario , efto es, qué
oy la Naturaleza efta mas vigorofa , y el mundo mas vif-
tofamente adornado. Lo qual demueftro de efte modo.
2 No fundan la pretendida extinción de algunas
Efpecies , fino en que no vemos oy algunas , cuya exif-
tcncia en otro tiempo confta de los antiguos Efcritores.
Digo, que íi efta prueba es buena, infiere que defde aque-
llos tiempos á los nueftros fe han producido muchas Ef-
Tora. VI. Bb pe-
iP4 CONSECTARIO D E L DISCURSO, &'c.
pecies, que antes no exiftian , pues hai muchas conoci-
das ahora , de las qualcs no tuvieron conocimiento los
Antiguos ; y el numero de ellas es fin comparación ma-
yor que las que fe dice fe perdieron. Notefe en el ge-
nero Vegetable el enorme exceflb , que en el Difcurfo
paliado notamos de las Efpecies , que conocen los Bota-
niftas Modernos , à las que conocieron los Antiguos.
N o es menor el que hai en el Reino Animal. No tuvie-
r o n los Antiguos noticia de la vigeíima parte de los I n -
fectos , que han explorado los Phyíicos Modernos : y ca-
da dia vàn defcubriendo mas, y mas. Luego fi de n o
conocerte oy algunas Efpecies conocidas en otros tiem-
pos fe infiere , que en un tiempo exiftieron , y ahora no;
de no conocerfe en los tiempos antiguos muchiísimas,
que oy fe conocen, fe inferirà que exilien ahora, y no
exiftieron entonces. Por coníiguiente fera oy la Natura-
leza mas fecunda, y el Mundo gozará mucho mayor va-
riedad.
3 Efte argumento folo tiene fuerza por vía de re-
torficn, y afsi en nueítra fentencia, y fcgun la verdad,
folo prueba la mayor aplicación en examinar la Natura-
leza, y dar noticia de ella en efte Siglo , que en los pana-
dos ; afsi como propueíto por la opinion contraria tam-
poco prueba lo que ella pretende, si folo lo que lata-
mente expufimos en el Diícurfo pallado.
§. I I .
2L T""Y O S cofas fin embargo me ocurren , que pue-
LJf den hacer alguna dificultad en eíta materia.
L a primera toca al Reino Animal, la fegunda al Vegeta-
ble. Apenas hai en Efpaña quien no tenga noticia del
cadáver de Águila de dos cabezas, que vino de la Ameri-
ca el año de veinte y tres, y fe conferva en el Real Mo-
naíterio del Efcorial. Elle raro paxaro, II no fe gradúa de
monílruo , ò fe difeurre que una de las dos cabezas fué
con arte añadida al cadáver, fe puede tener por una nue-
va efpecie entre los volátiles , por no haver parecido
otro
DISCURSO QUINTO. ip^
otro femejante en el inundo en todo el diíairíb de los
ligios.
5 Muchos fofpechan la adición artinciofa de una de
las dos cabezas; y aun yo eftuve inclinado á lo mifmo,
hada que me defengañó el feñor D . Alexo Antonio Gu-
tiérrez de Rubalcava , Intendente de Marina del Medi-
terráneo , y fus Islas , quien me aíícguró haver examina-
do con fus proprias manos , y con toda exactitud todas
las partes del paxaro immediatamente á fu arribo á Ef-
paña, y reconocido, fin la menor ambigüedad , fer natu-
ral la unión de las dos cabezas. Que tampoco es monf-
truo, fino individuo de efpecie perfecta, fe colige de la
relación del que le hirió, y cogió, el qual dixo le havia
vifto en compañia ele otros tres en todo femejantes, los
dos grandes, que difcurrió fer los padres, el otro menor,
y del mifmo tamaño del herido.
6 Si es verdad lo que comunmente fe dice , que los
monftruos fon infecundos , fe infiere bien que no eran
monftruos los quatro paxaros bicípites; pues fu multi-
tud no dexa duda que havian provenido por generación
regular. Mas como la eftcrilidad de los monftruos , á lo
que yo entiendo, no confie baítantemente por experien-
cia, ni alguna razón phyfica lo perfilada, lugar queda
para decir, que dichos paxaros eran monftruoíos.
7 Mas aun en cafo que fe crean individuos de ef-
pecie perfecta, no por elfo hai necefsidad de conceder,
que elía efpecie es nueva en la tierra. El que haya fido
ignorada de toda la antigüedad, no prueba que no exif-
tieíTe defde el principio del mundo. No todo lo que
havia en el mundo vieron los Antiguos , como ni tam-
poco los Modernos, aunque mas aplicados, y proporcio-
nados á regiftrar el mundo, vén todo lo que hai en él.
Es verdad, que fegun la Relación que vino de la Ameri-
ca acompañando á la Águila de dos cabezas , por todas
las afperezas de la Provincia de Guaxaca , donde fe ha-
lló efte paxaro, y fus compañeros, no le pudo defcubrir
defpues otro alguno , por mas diligencias que fe hicie-
ron. P ero tampoco eíto prueba. Acafo tienen fu habi-
Bb s ta-
ip¿ CONSECTARIO D E L D I S C U R S O , SCÓ.
tacion en paragcs totalmente inaccefsibles. Acafo íe
mudaron á otra parte todos los individuos de aquella
elpecie, por evitar la defgracia , que padeció el compa-i
ñero. Acafo es efpecie de limitadifsima fecundidad , y
que por configuiente íubfiíle en cortifsimo numero de
individuos.
§ Pofsible es, que algunos juzguen que ella Efpecie
no fue incógnita á los Antiguos , diícurriendo que la in-
fignia de las Águilas Imperiales, donde fe unen fobre
un cuerpo dos cabezas , fué ocafionada de haver vifto
alguna, ó algunas Águilas con duplicada cabeza. Pero,
ella conjetura ella mal texida , por ia deífemejanza ma-
nifieíla que hai entre la Águila Imperial, y la Americana.
Aquella tiene las dos cabezas encontradas , y que miran
á lados opueftos ; ella las tiene mirándole una á otra,
como confia de la deferipcion , y dibuxo , que me remi-
tió el citado Don Alexo. Fuera de que, fegun varios
Eruditos, el ufo de aquella infignia fe introduxo,y exer-
ció primitivamente quando citaban dos Emperadores fo-
bre el Trono, gobernando de común acuerdo el Impe-
rio, como fymbolo oportuno para fignificar eífa unión»
El ufo de la Águila con una cabeza iola, como infignia
del Imperio, es mui antiguo. Praóticaronle los primeros
los Perfas ; defpues poco á poco fe fué comunicando á
los Romanos, los quales al principio variaban, tomando
por Blafon en fus Ellandartes, yá Lobos, ya Leopardos,
ya Águilas, fegun placía á cada General, halla que en el
fegun do año del Confulado de Mario fe cílableció el
Águila como infignia confiante del Imperio , y Armas
Romanas. Supuelto efte ufo , fe vé claro , que ,finque
la Naturaleza prefentaííe á los ojos alguna Águila de dos
cabezas, era naturalifsimo elegir elle fymbolo par;i ílg-
nificar la unión de dos Emperadores en el gobierno del
Jmperio. Muchos figles deípucs fe hizo, no fe fabe con
qué ocaíion , la Águila bicipite Blafon general
de todos los Emperadores
Romanos.
y ir.
DISCURSO QUINTO»
§. I I L
9 TZ L fegundo argumento, en prueba de que fe
í_j engendran Eípecies nuevas , fe puede to-;
mar de un hecho , que fe refiere en la Hiftoria de la Асан
dcmiaReal de las Ciencias al año de 1 7 1 р . En el mes dû
Julio de 1 7 1 5 . fe apareció en el jardin de Monf. Mar-
chant , Botanifla de la Academia, una pequeña planta
incógnita à èl, y à otros Botaniílas. Defecofe , y pere-
ció à los fines de Diciembre : pero al mes de Abril del
año figuiente nacieron quatro plantas femejantes à la pri-
mera , y dos de tal modo diferentes , que podian confii-
tuir diverfa efpecic , aunque no colocarfe debaxo de di-,
verfo genero ; h ablo fegun el idioma de los Botaniílas.
Delecaronfe ellas feis plantas al fin de Diciembre , c o
mo la primera ; pero los años fíguientes fe fueron multi-
plicando fuccefsivamente en el efpacio de fíete , ù ocho
pies de terreno. L o mas notable à nueftro intento es,
que jamás fe les pudo defeubrir limiente alguna , cuva
circunftancia , junta con la certeza de que nadie h avia
hecho alli tal plantio , parece prueba h aver fido produis
cion nueva de aquel terreno , cuya radical fecundidad fe
explicaíle en virtud de alguna infolita concurrencia de
otras caufas.
1o No obftante efto , fe debe creer , que dichas
plantas tienen femilla, y nacen de eila. La prueba ella
clara en fu fuccefsiva producción , y multiplicación en el
mifmo efpacio de terreno ; lo que veriíimilmente no fe
puede atribuir à otro principio , fino à que haviendo
caído en tierra la femilla dé la primera , de ella fe pro-
duxeron las plantas del figuiente año , y de las femiilas
de ellas fe fueron multiplicando en los figuientes. El que
la femilla 110 h aya podido defcubrirfe , no o bit a, pues fe
Libe, que much as plantas la tienen menudifsima ; y co-
mo no fe labe h alla que termino puede llegar efia dimi-
nución , no hai fundamento alguno para negar que ha-
ya femiilas tan pequeñas, que lean totalmente imper-
cep-
tp8 CONSECTARIO DEL DISCURSO, &C.
ceptibles , mayormente quando hai gravifsimos funda-
mentos para creer que todas las plantas nacen de fe-
milla.
11 Supuefta la expreííada pequenez de la femilla , no
hai dificultad en que el viento la traníportaífe de otra
parte á aquel litio donde nació la planta. Y efto es lo que
generalmente fe debe difeurrir que fucede fiempre que,
fin previa diligencia humana , fe vé nacer qualquier ge-
nero de hierbas en terreno donde antes no las havia. Af-
fi como en la imprevista producción , que muchas veces^
acaece, de plantas de mayor femilla , es naturalifsima la
conjetura de que algunos paxaros conduxeron las femi-
llas en el pico.
12 No obíta tampoco , que Monf. Marchant , ú
otros Botanistas de París no conocielfen aquellas hier-
bas , pues ni huvo , ni hai , ni puede efpcrarfe que haya
jamás Botanista alguno , que conozca todas las Efpecies
de plantas que hai en elUniverfo.
§• I V .
"''íj X J O tenemos á la verdad certeza de que to-'
l_ \ dos los vivientes fe producen de femilla;
pero efta es la opinión valida entre los Phyíicos moder-
nos ; los quales han moltrado con evidencia , que en al-
gunas generaciones, que la vulgar Philofophia atribuía
únicamente á la putrefacción de algunas materias con el
concurfo de las caufas generales , interviene verdadera
femilla; y efto funda una prudente prefumpcion deque
en todas fucede lo mifmo.
1 4 Afsi muchos Philofophos de eítos tiempos def-
precian como patrañas de los Antiguos la generación de
las Abejas de la carne corrompida del Buey , la de las
Abifpas de la del Caballo, &c. Sperlingío obfervó , que
en una gran mortandad de Bueyes que huvo en Uvitem-
berga, de ninguno de tantos cadáveres podridos de aque-
lla efpecic fe engendraron Abejas. El Dotor Don Tofeph
Ortiz Barrofo , fabio Medico de la Ciudad de-Utrera,
ob-
DISCURSO QUINTO; 199
obfe'rvólo mifmo en dos temporadas de gran morcan-,
dad de efta efpecie de ganados , que huvo en el territo-
rio de Sevilla. Con lo que evidentemente fe rebate la
folucion , que quifo dar Francií'co Sachs á la experiencia
de Sperlingio, atribuyendo la falta de generación de Abe-
jas ala frialdad delPaisde Uvítembcrga; haviendo fu-
cedido lo mifmo en la Andaluzia , que es Pais caliente.
Fuera deq«e en la Rufsia , Podolia , y otras Regiones
Septentrionales frigidifsimas hai gran copia deAbejas,por
lo que en aquellas partes fe venden cera, y-miel á muí ba-
xos precios.
1 5 Ni obftan las generaciones de gufanos , y otros
Infectos , que frecuentemente fe vén en carnes , plantas,
y frutos corrompidos , pues eitas vienen de otros infec-
tos , que depuíieron en ellos fu femilla; á cuyo propo-
íito fon oportuniísimos los experimentos del célebre
Francifco Redi. Efte diligcntifsimo Phyíico pufo á pu-
drirte á un mifmo tiempo tres pedazos de carne recien
cortados i mas con efta diferencia, uno en un vafo to-
talmente cerrado , otro en un vafo cubierto con un trarif-
parente velillo de Ñapóles, otro totalmente defcubierto.
Lo que íucedió fué , que todos tres pedazos fe pudrie-
ron ; pero en el que eítaba totalmente cubierto no ha-
via gufano alguno, en el que eítaba totalmente defcu-
bierto muchos ; tampoco havia gufanos en el cubierto
con el velillo , pero en el velillo mifmo por la fuperfície
exterior le vieron muchos menudifsimos huevecillos de-
poíitados por las mofeas, y mofeardas , que allí acu-
dían á hacer fuerza para penetrar ala carne. Ello hace
creer que la putrefacción por si tola nada hace para la ge-
neración de los gufanos, fino que eítos nacen de los hue-
vecillos que en las carnes'ponen las mofeas. Y de aqui
fale una,prefumpcion bien fundada de que en las demás
generaciones , que fe vén en materias corrompidas , fu-
cede cofa equivalente.
16 Supuefta efta opinión, eoníiguientemente fe de-
be decir , que no puede oy refultar en el Reino vegeta-
ble alguna nueva efpecie , pues la femilla de que fe for-
ma
loó CONSECTARIO D E L DISCURSO, &c.
n u qualqüiéra planta, necefifariamente vino de otra plan-:
ta de la eípecie mifma , y procediendo de elle modo , fa-
1c por configuiente fixo , que todas las efpecies de plan-
tas que hai oy , fueron criadas en el principio del mundo.
§• V.
T7 T _ 1 [ E hinitatlo la affercion al Reino vegeta-!
x""J. bje , porque en el Reino animal, no o hi-
tante que todas las generaciones fe hagan de ternilla, que-
da lugar á la producción de nuevas Eípecies. Pero que
efpecies? No primarias , lino fecundarías. Llamo efpe-
cies primarias aquellas que fe propagan por la concur-
rencia de los dos fexos de la mifma eípecie,v.gr. el León,
el Caballo , &:c. fecundarlas las que remitan de la con-
mixtión de dos fexos de efpecie diferente ( v. gr. el Mu-
lo) á quienes comunmente fe da el nombre de Efpecies
terceras.
- 18 En ellas , pues , Efpecies fecundarías es innega-:
ble que puede haver muchas novedades, por las varias
combinaciones que en la conmixtión de los dos fexos
pueden intervenir entre diferentes beílias, como en efec-
to fe dice que las hai en aquellos aduftos territorios del
África donde por la grande efeafez de agua acuden a
P
7*om yh Ce
* * * * * * * * * * * * * * * * * * * Sm.
st* r < 8 w w a w í *^
MARAVILLAS
DE LA NATURALEZA.
DISCURSO SEXTO.
§. I.
JSf^Ernonia llamo á la Naturaleza. Arillo-
teles : Natura Damoniaefi, non Di-
WJf%¿» vina, ( L i b , de PrxfenC per fomnum. )
Epithcto de notable energía ,. y que
con poca,. ó ninguna diferencia Significa lo miímo en la
propriedad de la Lengua Griega , que en el ufo vulgar,
y figurado, del. Idioma Caftellano. De un hombre que
hace , ó dice cofas , que , por fuperar nueftra inteligen-
cia ,. excitan nueftra admiración folemos decir , que es
un Demonio. En efte mifmo fentido , y por la mifrna ra-
zón fe puede decir , que es Demonia la Naturaleza. Son
fus operaciones, y efectos tan admirables, que es pre-
cito reconocer en la actividad ele fus caufas un genio
elevado , fublime , myfteriofo , que por mas que vue-
le en fu alcance el difcurfo , fe queda licmpre mui lexos
de nueftra comprehenfion.
2 Es afsi fin duda : pero los mas de los hombres tan
abaxo quedan, que ni aun ello mifmo alcanzan. Qué di-
go yo los mas ? Cafi todos , parece que folo con los ojos
cor-
DISCURSO SEXTO. 203
corporales miran las obras de la Naturaleza. No cele-
bran lo excelente , fino lo raro; ó folo lo raro tienen
por excelente. Nada hallan admirable en lo que diaria-
mente miran , porque fu rudeza no pafla.de la fuperfi-
cie de J o que vén. Es fenteneia.común , que la admira-
ción es hija de la ignorancia ; y yo , fin contradecirla
abfoíutamente, afirmo , que infinitas veces el no admi-
rar procede de eftupidéz. T o d a la Grecia , dice Plutar-
co , admiraba los verfos del Lyrico Simonides. T o d a la
G r e c i a , exceptuándola gente de Theflalia. Preguntado
elmifmo Simonides por iacaufa., nofieñaló o t r a , que la
rudeza de los TheíTalos.
3 .No hai obra alguna enrodara Naturaleza, que no
fea rafgo deunamano Omnipotente, y de una Sabidu-
ria infinita. Admira el Vulgo£Í artificio de mía Mueítra
de Londres : incomparablemente es mas delicada , y fú-
til la fabrica de una Hormiga. L o que digo de la Hormi-
ga , eftiendo a otro qualquier compuefto natural. Ningu-
no hai cuya compoficion no fea eílupenda., no fea pro-
dlgiofa. Ariíloteles conoció mui bien efta verdad. N o
hai cofa, d i c e , en todo el Univerfo en quien no ocurra
algo que admirar : Cum nuila res Jit Natura, in qua non
mirandum aliquid inditum videatar. ( Lib. 1 . de Part.
AnimaL cap. 5.) Ella fenteneia puede fervir de comento
parala o t r a f u y a , que citamos arriba.
4 L a ignorancia de los hombres ha ceñido fu admi-
ración á mui limitado numero de entes. H a b l a n , pon-
go por exemplo , con alfombro del movimiento del
hierro á villa del Imán: del fluxo , y refluxo del Océa-
no : del eílupor que caufa en el brazo del Pefcador el
contado de la Trimielga. Si les preguntas, por qué? L o s
mas apenas te lo fabran decir ; pero yo lo diré por ellos.
Su alfombro nace únicamente de que no vén tales efectos
en las demás Efpecies contenidas debaxo de los mifmos
géneros. Reputan prodigiofo todo lo que es ungular.
Créeme, que fi todos los minerales , excetuando efle que
llamamos Piedra ¡man , tuvieflen virtud para mover el
hierro hacia s i ; nadie admirarla aquella virtud en los de-
Cc a «as,
20-¡- MARAVILLAS D E LA NATURALEZA.
más , antes fe admiraría en la piedra Imán la falta de¡
ella. Si no folo el Océano , pero todas las fuentes , ex-;
ceptuando. una Cola., tuvieiTen. fluxo ,. y refluxo , nadie
admiraría, el fluxo y refluxo en. las aguas , sí folo la tal-;.
ta de eíTos,periódicos movimientos en aquella fuente,que
no los invierte. S i t o d o s l o s p e z e s , a l a r.eferva de u n o;
§• II-
r 5 T 7 Sro es por lo que mira al Vulgo, de los hom~-
bres. El Vulgo d é l o s Philolóphos (que en:
todas las facultades hai Vulgo , y tanto , que reipecto de:.
los v u l g a r e s , fon poquifsimos los Nobles ) te reíponde-.
r á , que admira aquellos efectos, porque fon ocultas fus.
caufas; y fin decirte otra, cofa quedará con la fatistaccipn.
d e q u e fobre la materia n o refponderia mas un Oráculo.;
Aquí quiero que pares conmigo u n poco , para mof—
t.rarte que efta.fentcncia que oyes pronunciar, tantas vc-¡
ees con t o d a la gravedad• Philofophica. del Aula. ,.y que.
te dexa enteramente fatisfecho ,110 es m a s q u e un tram--;.
pantoj.o ridiculo. .Crees que es admirable , afsi laexpan-.
íion del Océano hacia las orillas como el regreilo de.
ellas , porque defpucs de todas las-, efpeculacior.es- de los
Philofophos permanece oculta la caufa de elfos m o v i -
mientos. Bien ; pero dlme , por qué no admiras igual-
mente el movimiento de fuentes-, y rics hacia el Ocea-;
no ? Reirafte de la pregunta ,. y me dirás , que la caufa
de eíTe movimiento es tan. notoria , que el-mas rudo la
alcanza ; conviene á faber la. pefadez del agua , la qual
obligándola á correr hacia el lugar mas baxo ,.entre tan-
t o que fe le dexa libre elcurfo , la vá impeliendo fuccef-
fívamente harta llegar al Océano , porque t o d o el cami-
no defde la fuente harta el piélago ertá puerto en conti-
nuada declinación. Juzgas que has dicho algo? Pues te
aíleguro con toda, verdad , que bien lexos de darme ref-
,j pucf-
• DISCURSO SEXTO. 205
puefta, ni aun fiquiera has entendido la p r e g u n t a . P o r .
eííb , que llamas peladez , ó g r a v e d a d , entiendes otra co- •
fa , mas que una inclinación innata de las aguas al m o - .
v i m i e n t o hacia abaxo? Nada mas. P u e s í i no feñalas otra
caufade elié movimiento , o t r o tanto ya te lo fabes de
la caula del movimiento del Océano , en cuyas aguas re-
conocerás fin duda ( fegun la Philofophia que ligues ) una
inclinación innata á fluir , y refluir periódicamente. Si:
te preguntan , pues , por qué el Océano fluye ,, y reflu-
ye , te parece que fatisfarás baftantemente , refpondien-.
d o , que la caufa.esuna inclinación innata,que tiene á ef-,
fos dos reciprocados movimientos? Cogido te tengo,,
que afirmes, que niegues. Si afirmas infiero : luego tan-
notoria es para ti la caufa del fluxo , y refluxo del Ocea-,
no , como la del defcenfo de las aguas hacia é l ; por con-
figuiente no tienes mas razón para admirar aquel m o -
vimiento , que eñe o t r o . Si niegas , deduzco : Luego
tan oculta es para ti la caula del defcenfo de las aguas,,
como la del movimiento del Océano ; por configuientc
igualmente debes admirar effo ,. que aquello.
6 D e modo- , que elfo que llamas Gravedad , no es
mas que una voz inútil , la qual dexa la materia tan obf-.
cura como fe eftaba. Llámale grave el cuerpo , . que fin
impulfo manifiefto baxa ,. como leve el que fin impid-
y
í SSL.
DISCURSO SEXTO";
§. I I I .
9 \ Quien no fatisfaciere la .infirmada arduidad
_/"\_ del P h e n o m e n o c o m ú n del deíceníb de ios
graves, ferá fácil moftrarle o t r o s m u c h o s , donde pueda
conocer,, que no tiene mas razón, para admirar ios mo-
vimientos del Océano , y el del hierro hacia el Imán,
que otros innumerables , que cotidianamente tiene de-
lante de los ojos,. Contémplente en todas las plantas,
los dos movimientos encontrados d e las raices hacia
abaxo, de t r o n c o , y ramas hacia arriba. Quien determi-
na las difuntas partes de una mifma femilla á eftos- dos
opueítos m o v i m i e n t o s ? T e n d r é por un Apolo á quien
me refponda. N o es ciertamente la gravedad de las unas,
y levidad de las otras , pues las raices no fon tan peta-
das, como la tierra por donde basan , ni las ramas tan
leves, como el aire por donde fuben, Precifo es recurrir
á. un agente incógnito , ó qualidad. oculta ,. como en el
O c é a n o , y en el Imán ; por consiguiente tan myfteriofo
fe queda aquello como c i t o ,
1 0 T o d o s ios dias , todas las horas eftán fubiendb
los vapores de la tierra á la. esfera del Aire.- Q u e fon. los
vapores? N o otra cofa, que el agua difuelta en partícu-
las m e n u d a s , como fe hace vifible en la niebla. Pues-co-
m o tiendo el agua fin comparación mas grave que el ai-
re, m o n t a fobre él? Es regia confiante de í a H y d r o f t a t i -
ca, que un liquido no puede nadar fobre o t r o , que no
fea de mayor gravedad efpecifica que él, efto es, que cor-
tejadas partículas iguales , ó de igual mole de u n o , y
o t r o , fean mas leves las del liquido, que íbbrenada, C o -
mo,.pues, fuben , y ie remontan las partículas del agua
fobre elle aire inferior, cuyas partículas de igual mole
fon mueño mas leves, que aquellas ? L o mejor es , que
aquí hai también fu eípecie de fiuxo ,.y refluxo ; porque
los miímos vapores que fuben, deípues baxan ; con que
fe aumenta la dificultad , por conícrvar la mifma natu-
raleza, y quididades en el defeenfo , que tenían en el ai-
ees-
-oS MARAVILLAS DE LA NATURALEZA.
ccnfo. Algunos Philoíbphos modernos , contemplando'
cita gran dificultad, fe imaginaron para evacuarla , que á
cada particuiilla minutiisima de agua fe pega mucho
mayoi" porción de materia etherea, íutil, 6 ígnea, 6 bien
incluyendofe en ella, como en una delicadiisima a m p o -
llara, ó bien circundándola por la fuperficie externa , de
m o d o , que el complexo, que refulta de agua , y materia
Ígnea, fea mas leve que el aire inferior,y por elfo afcien-
da fobre é l ; á la manera, que un poco de hierro, aunque
mucho mas pefado que la agua, nada fobre ella, fi le li-¡
gan, ó clavan en mucho mayor porción de madera , por-:
que el complexo, que refulta de madera, y hierro unidos,;
es mas leve, que igual volumen de agu.i. Configuiente-
niente fe han imaginado, que defpues fe desliga , ó fuel-
la la materia etherea del agua, y eíta dexada á fu natural
gravedad baxa.
11 Yá fe vé, que efte expediente , bien lexos de fa-<
tisfacer á los Philofophos C o m u n e s , les parecerá una
algarabía , femejante á la del Mechanifmo , con que l o s
Cartcíianos componen las propriedades del Imán. P e r o
ellos dicen algo fobre la materia? Nada. Lo peor es,que
ni dicen, ni pueden decir, pues ni aun pueden ufar aquí
• del Fidelitim de fus qualidades ocultas, porque la a g u í
las mifmas qualidades tiene , quando eftá q u i e t a , que
quando fube, y quando fube,que quando baxa. Con que
cito fe reduce á que los Philofophos de la Efcuela mas
atollados fe hallan en la contemplación de efte Phenomc-í
n o , que en la de las propriedades magnéticas ; y ios Mo-¡
dernos, por lo menos, igualmente embarazados en uno,;
que en o t r o ; porque (omitiendo otras muchas dificulta-:
des gravifsimas, que fe pudieran . oponer) la adherencia
de la materia Etherea á las partículas de agua es total-,
mente ininteligible , por la perfecta fluidez , que atribu-:
yen á aquella materia, Del mifmo m o d o , como es pofsi-»
ble permanecer por algún tiempo encarcelada la materia
Etherea en las ampollítas de agua, quando , á caufa de fu
extrema futileza, aífeguran , que no hai cuerpo alguno;
por compacto, y folido que fea, por cuyos poros no fe
efeape?. ' jf.lV,
D I S C U R S O SEXTO» sy_y
§. I V .
Tí ^ v T R O S innumerables movimientos haí, cu-:
yo principio impulíivo es igualmente i g -
norado. T o d o s los fermentativos fon de efte genero.
Eirá el moflo quieto algún t i e m p o , luego que le echan
en' la cuba. Qué agente fe introduce en la concavidad
de aquel cerrado vafo, para mover las partículas del li-
cor, en aquella tumultuante l u c h a , que defpues tienen
unas"cón otras ? Quien 'impele la cal, y agua mezcladas á
una tan fervorofa intumefeencia , como ii les aplicaffen
fuego por defuera? Quien á varios licores Chimicos,
que eftando friós feparados, luego que los mezclan hier-
ben, y aun algunos'levantan llama? Quien al heno acu-
mulado en gran cantidad, y humedecido, para arder vio-
lentamente?
' ,'• §• V.
13 T } E R O qué andamos a m o n t o n a n d o exempla-
|_ res? Cada hombre, cada animal, cada plan-
ta, tiene dentro de si un fluxo, y refluxo continuado, n o
menos admirable , que el del Océano. En. los Animales
fluye, y refluye la fangre : en las Plantas el jugo n u t r i -
cio. Fluye la fangre del corazón nafta las partes mas re-
motas del cuerpo por las arterias , y refluye de ellas ai
corazón por las venas:
§. V I .
14 T j O F f decirlo en una palabra, es cierto que en
X t o d o s los movimientos, que llamamos na-
turales , hai algún principio impelente ; y es cierto tam-
bién, que fe ignora qual es eífe principio. O j i e n mueve
á los vientos? Nadie lo fabe. L o poquifsimo, que fobre
efta materia fe ha cabilado, eftá mucho mas lexos de lle-
nar la i d e a , que lo que fe ha difeurrido fobre los P h c -
nomenos del O c é a n o , y del Imán. Qué agente tan v i g o -
rólo es a q u e l , que al aire dá fuerza para derribar a r b o -
les, y ediíicios'í Y lo que es mas, de qué puede depender,
que eíte liquido , movido á muchas leguas de diftancia
del litio donde recibe el impulfo, no pierde nada del Ím-
petu adquirido? Es regla general dictada p o r la expe-
riencia , y por la r a z ó n , que t o d o cuerpo impelido p o r
o t r o al movimiento , quanto mas va caminando-, tanto
va
DISCURSO SEXTO. -¿I I
va perdiendo de fuerza , y moviéndole mas lentamente.
En el aire he obfervado varias veces lo contrario. V i e -
ne á ella orilla del Mar Cántabro un aire meridiano de
Cartilla, que hace aqui grandes eftragos, fin fentirfe mas
impetuofo, á veces ni aun tanto como en los términos
de Cartilla, diñantes ele aqui veinte leguas , p o r d o n d e
viene.
15 Bien sé que Cartefio juzgó defatar cfte proble-
ma , imaginando que el aire acelera fu movimiento al
embocarle por las estrechuras que forman en fu división
los montes confinantes, al m o d o que el agua de un rio
acelera el Suyo al enfilarSe por el ojo de un puente, ú o t r o
qualquier Sitio eftrecho. Pero con Su licencia no hai pa-
ridad de uno á otro caSo. N o es dudable, que un liqui-
do que lleva inherente á si miSmo en la continuación de
Su curSo la tuerza impelente,y eítá Siempre igual, prescin-
diendo ele particulares circunstancias, aumentará Su m o -
vimiento al meterfe por un eftrecho. Efto es lo que Su-
cede en el agua de un rio , la qual lleva Siempre configo
Su gravedad, que es la fuerza que la mueve : pero el aire
no lleva configo el agente que le mueve. Recibe de él el
impulfo en determinado cfpacio,y feparandofe del agen-
te , es precifo que el impullo Se vaya debilitando SucceS-
livamente.
16 Sea norabuena que al meterSc en un eftrecho ad-
quiera algo mayor impulSo que el que trahia en el eSpa-
cio anterior immediato. Pero íi ie hace comparación
entre cite aumento de impulíb adquirido en la eftrechu-
ra, y el decremento de impulSo que es precifo quando fe
alexa mucho de la fuerza impéleme, fe hallará, fegun la
regla arriba cftablecida, que cite es mucho mayor que
aquel. Ais i el aire que viene de Canilla á eítePais , por
embocarSc en el tranfito por algunos Sitios cftrcchos , lle-
gará aqui con algo mas fuerza , que Si viniefle por una
campaña llana, y eSpacioSa, pero con mucho menos, á lo
que parece, que quando le impelió la caula motriz allá
en Canilla. Lo p r o p r i o Sucederá en el agua puefta en las
mifmas circunstancias. Supongámosla colocada en un
Dd 2 va-
2i2 MARAVILLAS D E LA NATURALEZA.
vaio prolongado, cuya concavidad à trechos fe dilate , y,
á trechos fe eftreche , y que con la mano fe agite defde
la una extremidad. Es indubitable , que fin embargo de
algún grado de aceleración que adquirirá en cada eftre-
chura refpectivamente al efpacio anterior i m m e d i a t o , fu
impulfo fe irà debilitando fuccefsivamente de m o d o , q u e
à la extremidad opuefta llegará con menos Ímpetu, que
aquel que recibió quando le impelió la m a n o . Luego es
precifo para explicar el aumento de Ímpetu que adquie-
re el aire, recurrir á caufa diílinta de la que feñala Car-
tefio.
1 7 Quien arrancó de las profundidades d é l a rierra
para las alturas del aire azufres, y faiitres, de que defpues
fe forman truenos , y rayos? Quien encamina por los
ciegos conductos de las plantas el jugo que las nutre?
Quien por los poros de los minerales, de las conchas, de
las peñas, el licor que las aumenta? Quien en los anima-
les guia por el ducto Thoracico aquella blanca mafa, lla-
mado Chilo, que los repara? Pero cita materia de la nu-
trición pide que nos detengamos algo en ella. C o n t e m -
plemos el origen de una planta en íu fendila.
1 8 Luego que fe fepulta en la tierra aquel myftcriofo
ovillo, empieza á defplegarfe. Quien le deípliega? El asi
mifmo? Elfo es quimera. Agente hai. fin duda epe lo ha-
ce ; pero de tan diricil averiguación , y acafo mas , que el
que mueve el hierro en la prefencia del imán. Si fe -mira
con reflexion, fe hallará, que es mas admirable la acción
de aquel, que la de efte. El agente, que mueve al hierro,
no hace otra cofa, que impelerle por linea recta, y unir-
le al Imán. Ella es una acción mui limpie ; nada , digá-
moslo afsi, artificióla. Pero en el a g e n t e , q u e deípliega
la fendila, fe requiere un tino , una deiireza incompara-
ble. P o c o à poco la và desarrollando , colocando cada
partccilla fuya en el lugar correfpondiente , fin barajar,
ó trafiornar alguna, fin romper fus deiicadifsimas fibras,
fin confundir fus futilifsimos canales , fin enredar aque-
llas, fin obítruir eftotros. O gran D i o s ! Degradefe de
racional , quien no ve claramente tu mano poderofa,
DISCURSO SEXTO; 21J
dirigiendo el agente criado, qualquiera qué fea »para e l
acierto de tan fútil, y delicada obra.
§. V I L
THVlráme acafo alguno , que lo qué admira érl
\_Jr el hierro , no es que fe mueva por ocul-
to impéleme , fino que folo fe mueva en la prefencia del
I m á n . Y o le replico , que tampoco por ella parte es mas
dificil explicar el movimiento del hierro , que el de la fe-
milla. Nótele que la femilla no fe mueve , b defpliega
en qualquiera parte que efté , halla que fe fepulta en la
t i e r r a , ni tampoco en toda tierra, porque Non orarás fert
omnia tellus , fino en tierra apropriada. Ello por qué?
P o r q u e folo en aquella Región , y en determinadas p a r -
tes de ella encuentra el a g e n t e , que puede defarrollar-
la. Pues lo mifmo paífa puntualmente en el hierro. Ef-
tá efte quieto en qualquiera parte que efté , como efté
diñante del Imán : colocafe en la prefencia de é l ; tifo
t s trasladarte á aquella P^egion donde cftácl agente , que
puede moverle. A aquella Reglón digo , la qnal no es
otra , que la atmofpfiera del Imán, b eíphera, que fe com-
pone de los efluvios emanantes de eñe m i n e r a l , y que
por todas partes le circundan ; de modo , que eftán en
determinadas Regiones , afsi el agente , que mueve el
hierro , como el que mueve la femilla , incógnito u n o ,
y otro ; pero , fcgun parece , mas prodigiofo efte , que
aquel.
20 Pafsémos adelante. L u e g o que empieza á def-
plegarfe la femilla , empieza á beber por los poros de fus
raices el jugo de la tierra , y continua en chuparle def-
defus mas altas r a m a s , y hojas , quando la ternilla cre-
ció á planta agigantada. N o podríamos llamar atrac-
ción áefía , como fe llama la del I m á n , y colocar en la
ttlanta una virtud magnética del ju^o terreftre ? P e r o
mayor maravilla nos llama. T o d o me Heno de alfom-
bro al contemplar la fabrica portentofa de t a n t a s , y tan
dive rías cofas como fe hacen en la breve oficina de una
plan-
•i4 MARAVILLAS DE L A NATURALEZA.
p l a n t a , firviendo á todas de materia el miímo tenuifsi-
m o terreare jugo. D e cite fe hace la porofa fubítaneia
de las raices , de eíTe la firme folidéz del tronco , de eííe
el tofeo veftido de la corteza , de elle la pompa de las ra-
mas , de eíTe la alegre frefeura de las hojas , de elle la
viftofa hermofura de las flores , de eíTe la fazonada uti-
lidad de los frutos. Quanta variedad de qualidades en
t o d o s eftos miembros! Diftinto el color, diftinto el olor;
difunto el f a b o r , diftinto el texido , difunta la figura.
Qué hemos de decir á e í t o , lino repetir lo de Ariftotelcs,
que la Naturaleza es Demonia ? N i menos grande fe
oftenta efita fabrica en lo que tiene de uniforme , que en
lo que hai en ella de vario. N o es prodigio , que en tan-
tos millares de hojas como tiene un á r b o l , ninguna en
la formación diferepe de otra ? La mifma figura , el mif-
m o color , el miímo texido , feguidas , y acompañadas en
la mifma proporción las fibras , rectas, y tranfverfas, ma-
yores , y m e n o r e s .
§. V I I I .
- 21 S~\Tro movimiento hai en las plantas al for-
V_/* marfe , no menos eftupendo , que t o d o lo
dicho haña ahora. Es de advertir , que la raíz fale de
una determinada extremidad de la femilla; y el tallo, ó
tronco de la extremidad contrapuefta. P o n g o por exem-
p l o : En la bellota de una encina la raíz brota íiempre
de la p u n t a , y el tallo d é l a bufa. Arrojenfe cantidad
de bellotas en la t i e r r a , como las efparza el acafo : ni-
ñ í s i m a fe ni la que fe aíslente con la punta abaxo , mu-
chas afrentarán Cobre la bala ; muchas mas , inclinadas
diverfamente , ó en licuación horizontal , fegun fu lon-
gitud. T o d a s arrojarán la raíz por la punta ; de m o d o ,
que las que tienen la punta hacia arriba , hacia arriba
fueltanlaraiz , y hacia al lado l a s q u e la tienen ladeada.
Aqui entra el prodigio : Las mifmas raices que falcn há-
zia arriba , empiezan luego á encorvarle bufeando la
tierra , haña que la encuentran, y prenden en ella; y ulti-
ma-
DISCURSO SEXTO;
inamente girando en un medio circulo t o d o el cuerpo de
la planta , el tallo , que eílaba abaxo , fe coloca arriba,
y la raíz que eftaba arriba , fe coloca abaxo. Qué dirà
á ello la vulgar Philofophia , fino que aquí interviene
una atracción magnetica de la tierra à laraiz , ò una in-
clinación fympathica de la raíz à la tierra ; y uno , y o t r o
viene à incidir en conicííar elle Phenomeno tan nryfte-
riofo , como el del acceflb del hierro al Imán. L o s P h i -
lolophos modernos andarán bilicando à tientas entre t i -
nieblas un infenlible mechanifmo à que atribuirle , del
mifmo m o d o que le bufean para los movimientos mag-
néticos. Y un rulVico , fi lo obfervafle con alguna refle-
xión en una femilla fola , ignorando que lo mifmo luce-
de en todas , diría que aquella vuelta no podía hacer-
fe fino por e n c a n t a m i e n t o , ò arte del D i a b l o . En al-
gún fentido atinaría con la verdad , pues ya que no fea
D e m o n i o quien lo hace , es por lo menos D e m o n i a : Drf-
monia eji Natura , non Divina.
22 Aun no para aquí. Si la bellota , cuya punta eftà
hàzia arriba , íc voltea , quando yà la raíz encorvando-
fe và à tocar la t i e r r a , de m o d o , que con eira vuelta la
extremidad de la raíz mire hàzia arriba , de nuevo vuel-
ve efta à encorvarfe , y bufear la t i e r r a , de fuerte , que
fubfifticndo la primera dirección , y añadiéndole efta fe-
gunda curvatura , queda formada la raíz en arco. D i o -
nyfio D o d a r t , tamofo Medico , y Botanifta de P a r í s ,
fué el primero que hizo ella obíervacion. N o folo con
i n g e n i o , mas con eíludio , y refon parece que obra la
Naturaleza aveces contra los cftorvos , con que
fe pretende fruiirar fus in-
tentos.
***
*** *** ***
y.ix
21(5 MARAVILLAS' D E LA NATURALEZA.:
§. I X .
2
? f * \ ^ V
obferyackm. .de Monf. Dodai't defcu-^
í l
§. X.
Uchos Phyficos modernos , para difmi-
nuirla admiración de parte de lo que he-
m o s dicho arriba en orden á la formación de las plan-:
tas , eípecialmente por lo que mira á la uniforme fyme-:
tria
DISCURSO SEXTO. ггу'
tria de fus hojas , recurren al fyttema , poco ha i nventa:
do , de la conti nenci a formal de la planta en fu femi lla.,
que hemos expli cado en el T o m o pri mero , Di fcurfo 1 3 .
num. зр. adonde remi ti mos al L e c t o r , por evi tarla p r o
lixidad de repeti rlo aqui . Pero íbbre las di fi cultades que
allí opuf i mos á efte fyftema , y aun adm i t i endo que fea
verdadero , qué fe logra aqui con efte recurfo ? N o mas
que fubíli tulr á una maravi lla grande , otra i g u a l , ó ma
yor ; pues la continencia de toda la planta formada en la
femilla , y fucefsivamenté la de otra planta en la íemi
lia de aquella , &c. es un portento de tal m a g n i t u d , que
no puede abarcarle la i mag i nac i ón : fuera de que ni aun
admitida eífa conti nenci a , evacúa enteramente la otra
dificultad. D oi que efte la planta con todas íus partes
formadas dentro de la femilla , aunque revueltas , y arro
lladas , y que defpues no hacen eftas mas que i rfe defar
rollando , y aumentando fu magni tud con el nutri men
t o que reci ben de la ti erra. Pregunto Í C o m o fi endo las
partes , por excmplo las hojas , en aquel pri mer ci tado
de una pequenez notabi li fsi ma , y fus fi bras tan fúti les,
que ci en mi l uni das no harán el grueífo de un c a b e l l o , al
defplegarfe p o r un agente ci ego n o fe rompen t o d a s ,
mayormente quando eítán padec i endo al mi fmo ti em
p o los var i os choques d e los Elementos ? N o es di g n o
de alfombro , ver en una caufa enteramente defi ni da d e
c o n o c i m i e n t o , aquel ti no , aquel aci erto , aquella maña,
que no cabe en t o d a humana i nduítri a?
2 5 Apuremos mas á ellos Phi lofophos , mostrándo
les nuevas Maravi llas de la N a t u r a l e z a , ó la mi fma en
o t r o s compueítos naturales , donde no ha i recurSo al
fyftema de la conti nenci a en las luni llas. En vari as eSpe
cies de pi edras if guradas guarda la Naturaleza las mi f
mas di meníi ones , la mi fma fymetri a , la m i fma if gura;
de fuerte , que hai vari os eSpaci os de terreno , llenos d e
piedras fi guradas del mi fmo m o d o . Haccnfe eífas pi eц
tiras de femi lla , para deci r que con la mi fma confi guran
clon c i taban conteni das en ella ? A eSta pregunta e n m u
decen cafi todos, T a l qual d e los M o d e r n o s t i t u b e a , f,
•2i8 MARAVILLAS DE LA NATURALEZA,
íblo el famoíb Botaniíla Monf. de Tournefort refponde
refueltamente que 11. A la verdad, havlendo yo esforza-
do en el quinto T o m o , DiTcurfo 1 5 . num. 1 7 . eílafingu^
lar opinión con algunas conjeturas , no debo infiíiir fio-
bre elle p u n t o ; y aísi trasladaré la dificultad á otra parte,
donde no fe le puede dar falida con opinión alguna.
2 6 Es claro, que la n i e v e , no fiendo otra cofa , que
el agua que fube en vapores congelada , no fe hace de
femilla. Ahora p u e s ; qualquiera puede , examinando los
copos de nieve , recibidos en un paño f e c o , obfervar,
que por la mayor parte cada uno es un texido de varias
eltrellas de feis rayos cada una. El primero que lo ad-
virtió fué Keplero : defpues Gañendo obfervó otra ef-
pecie de nieve mas folida, que fe compone en figura he*
mifpherica , de m o d o que fiendo la bafa plana , deíde el
punro capital baxan dividiendo fu circunferencia feis
canalillos, que van creciendo fuccefsivamente , halla ha-
cerfe baftantemente fenfibles en la margen de la bafa.
Qué Artifice fubió allá arriba á componerla de eñe , ó
aquel m o d o en tan perfecta, y hermofa fymetria? Acafo
las aereas Poteílades , ó Efpiritus m a l i g n o s , que en la
medía región del aíre conmueven los Elemenros , fe di-
vierten en organizar de u n a , ú de otra fuerte la nieve?
N o interviene en ella fabrica otra aerea Poteílad, ni o t r o
D e m o n i o , que la miíiria Naturaleza: Damonia eji Na-
tura, non Divina.
27 En varias fales (tampoco fe forman de femillas)
fe oílenta el mifmo prodigio. El fal marino fe confor-
m a en cubos, ó figuras quadradas de feis lados iguales;
el nitro en columnas hexagonas; otros fales toman otras
figuras. Qué mano invifible los amalla, de m o d o , que
t o d o s los de una efpecie guarden conílante-
mente la mifma organiza-
ción?
DISCURSO SEXTO;
§. X I .
28 ^ 7 O es eíto andar bufcando con curíofa ín-
, /S¡ veftigacion las Maravillas. Ellas íe me vie-
nen a l a s manos , y a los ojos. En rodo objeto las en-
cuentro : Cura nulla resfit Natura, in qua non miran-
dum aliquid inditum videatur. Difcurrafe por los Ele-
mentos. T o d o s prefentan aigo admirable. La T i e r r a fu
virtud magnética, de que ya hablamos en otra parte , y
que ya eftá constantemente recibida entre Philofophos,
v Mathematicos : de Suerte,que viene á fer la tierra Imán
del hierro, y mucho mas del mifmo Imán. Qué fe a d m i -
ra ya ver en una pequeña piedra , ó en una cantera eífa
virtud atractiva? T o d a la tierra la tiene, y toda la tierra
es una malla de piedra imán. La Agua fu diafanidad.
Ahi es poca cofa. T o d o s los Philofophos fe han que-
brado halla ahora inútilmente la cabeza, fobre indagar,
en qué coníilte la tranfparencia de los cuerpos , que g o -
zan eíta prerrogativa. Parece , que han difcurrido algo,
los que la han atribuido á la rectitud de los poros. P e -
ro vé aqui, que el agua agitada conferva la tranfparen-
cia, Siendo afsi, que es precifo , que en la agitación los
poros fe tuerzan , y padezcan mil inflexiones diferentes.
El Aire fu portentofa fuerza elaítica , de que hemos ha-
blado amplamente en el T o m o 5 . difcurfo 9.
29 Pero añadiremos aqui una cofa notabilifsima ; y
es, que Siendo afsi, que t o d o s los cuerpos elafticos, u de
reforte , eftando. comprimidos violentamente mucho
tiempo, pierden, ó en t o d o , ó en parte fu fuerza expan-
siva, el aire folo goza el Singular privilegio , de que du-
rando por larguiisimos efpaclos de tiempo Su compre-
sión, nada fe disminuye fu fuerza elaítica. Tacobo Ber-
nardo tuvo un año entero comprimido el aire, en aquel
grado , en QUC uiaba de él para arrojar el agua hacia
arriba, en una machina hydraulico-pncumatica;y folián-
dole deípues arrojo el agua á igual altura , que el aire,
que citaba comprimido un folo m o m e n t o . EStc aire,
Ee 2 que
220 MARAVILLAS DE LA NATURALEZA.
que nofotros refpiramos , cita íiempre comprimido del
aire luperior , que con íu pefo continuamente le grava-
fin embargo de lo qual fus valentiísimos muelles jamás
fe rompen, ni afloxan. El Fuego ; mas qué diré del fue-
go ? P o r quantas partes le m i r o , le admiro. Explicaréme
con una hypothefi , p a r a que t o d o s admiren , lo que ad-
miro yo : y viene á 1er dar luces mas vivas al penfamien-
t o , que en otra parte propufimos de Fernelio. •*
30 D o i que folo en una R e g i ó n mui diñante de no-
fotros tuvieííe fluxo, y refluxo el Mar ; que folo en otra
huvieíle piedra Imán ; y en fin, que folo en otra huvicíie
Fuego. Añadamos, que de ellas tres partes vinicílen á un
tiempo tres Viagcros , y concurrieffen á contarnos cada
u n o la maravilla de la Región donde havia citado , v de
que acá no teníamos antes la menor noticia, Diria el
•primero : En tal Región la agua de el Océano no eítá
muertamente enancada, como por acá ; antes tiene qua-
,tro movimientos periódicos cada dia , dos eftendiendo-
fe hacia las orillas, y dos recogiendofe á fus fenos. D i -
ria el fegundo : En tal tierra hai una piedra de tan fin-
guiar naturaleza , que fe endereza fiemprc hacia deter-
minada parte del m u n d o , de tal m o d o , que fi la remue-
ven de aquella dirección , ella por si mifma la bufea.
O t r a particularifsima propriedad tiene, y es,que ponien-
d o un poco de hierro en prefencia fuya, al momento cf-
te metal fe mueve , y corre á abrazarle con ella. T o d o
eifo es nada, diria fin duda el tercero , en comparación
de lo que yo he viíto. Allá en lo ultimo del O r i e n t e ,
hai un e n t e , una fubftancia , un cuerpo , que no tiene
determinada figura, fino inconftante,que á cada momen-
t o fe varia. Es impofsible eítár q u i e t o , y lo mifmo fe-
ria ceñar de moverfe , que perecer. De tan ambicióla
naturaleza es, que aunque le coloquen en la mayor altu-
ra, íiempre anhela á fubir mas. Aunque ella íiempre fu-
biendo con rápido movimiento , apenas en ligios ente-
ros fubirá medio dedo mas, fino en cafo , que fu cuerpo
fe aumente. T a n dependiente es del aire ; tan amigo , y
tan enemigo fuyo es eíte elemento, que un foplo le p r o -
tlu-
DISCURSO SEXTO. 22 Í
•drice , o t r o le aniquila. Siendo fu ser tan d é b i l , es por
otra parte tan valiente , que deftruye , y deshace en me-
nudo polvo quanto fe le acerca. Aunque es i n a n i m a d o ,
nccefsita de alimento para fu confervadon,.y caíi quan-
to hai en el Univerfo le íirve de alimento. N o tiene co-
ta alguna fu magnitud, y como le fubmlniítren cebo fin
limite, crecerá fin termino, nafta ocupar quanto á m b i t o
ella contenido dentro de la concavidad del Cielo. Es tan
amante de la libertad , que al inflante que le ..«encarcelan
con eftrechéz perece. A ningún h o m b r e , á. ningún animal
permite que fe le acerque mucho ; hiriendo fuertemente
á qualquiera que tiene la ofadia de tocarle. Lo mas p e -
regrino-es, que á pefar de la aufencia del Sol,, en qual-
quiera parte que efté, hace de la noche dia.
. j.r P r e g u n t o : Qué concepto haríamos de las rela-
ciones de los tres Viageros conftituidos- en la hypotheíi
eflablecida? N o me parece que tiene duda la materia.
Hallaríamos lo que decía el primero , y fegundo- mui di-
fícil, mas no impofsibie ; b quando m a s , íobre la mifma
pofsibilidad quedariamos pcrplexos. Mas por lo que mi-
ra á la relación del tercero, refueltamente d i r i a m o s , que
era un texido de quimeras , fabricado por una fantasía,
nada regida del difeurfo , que, cuidadofa folo de mover
la admiración a m o n t o n a n d o prodigios , havia bufeado
la ficción , huyendo de la veriíimiiitud. Y íi alguno qui-
fieffe fer mui piadofo con el itelacionero, no hallaría ar-
bitrio para ferio, lino levantando los ojos-al poder infi-
nito d é l a primera caufa , que puede hacer mucho mas,
que el hombre concebir : pero consiguientemente diría,,
que aquel cumulo de qualidades prodigiolas recogidas en
lin individuo ente, fiendo verdadero , era la mayor obra,
y juntamente el mayor crédito de la Omnipotencia , que
havia en el O r b e .
32 A h o r a bien. El Fuego el mifmo es , y fus quali-
dades las mifmas , que fi efluviefle , en la hypotheíi ex-
preflada, recogido en un remotifsimo rincón de elle Glo-.
bo : luego igualmente admirable , y portentofo en elle,
que en aquel cafo. Pues por qué no le admiramos? P o r -
que
322 MARAVILLAS D E LA NATURALEZA.
que no eftimamos las obras de la Naturaleza, p o r lo qué"
ellas fon en si inifmas, fino fegun que fon , ó mas raras,
6 mas frequentes : Afsiduitate viluerunt, dice S. Aguf-
íin hablando de las mas dignas de fer admiradas.
§. X I I .
33 " \ /í AS para qué nos cantamos? Refueltamen-
IVjL te digo , que no fe me feñalará cuerpo
a l g u n o , de quantos hai en el Univerfo , donde yo no
mueílre algo admirable, y verifique la fentencia de Arif-
toteles : Cum nulla res Jii Natura, in qua non miran-
dum aliquid iniitum vidíatur. N o hai Vulgo en la R e -
publica de la Naturaleza. T o d a s fus obras tienen mucho
de fubiime. En todas, fi fe miran bien, fe halla impreflo
el fello de la mano O m n i p o t e n t e , que auténticamente
califica el alto origen de donde vienen. P e r o demos un
nuevo realce al aífumpto.
§. X I I I .
34 ^"JO quantos objetos fe prefentan á la
1 Aj villa dan m o t i v o á la admiración , mas
el mifmo prefentarfe los objetos á la villa es una mara-
villa , que confiderada bien , debe elevarnos en un ex-
tático alfombro. Sueño acafo quando eferibo ello ? N u n -
ca mas defpierto. C o m o fe hacen prefentes los objetos
á la villa ? P o r si mifmos ? N o . P o r q u e muchos eílan
diftantiísimos de ella, y aun fi fe colocaran mui imme-
diatos á ella , no fe verian. N o por si mifmos pues , fi-
no por una efpecie , reprefentacion , o imagen luya, que
imprimen en ios ojos. N o t a ahora, que al punto mif-
m o que levantas de noche los ojos al Firmamento , eíl:i,
o l a otra Enrolla cilampa en ellos fu imagen. Di ib, la
Eftrella de ti mas de cien millones de leguas. C o m o á tan
enorme diítancia puede producir fia imagen ? Diráíinc
que no puedes comprehenderlo. L o mifmo te digo y o .
DISCURSO SEXTO. 22 $
Pero aun en mayor confuíion quiero ponerte. Suponga-
mos en t o r n o de la Eftrella una esfera, cuya circunferen-
cia fea de feifcientos millones de leguas , y que t o d o fu
ámbito elle ocupado de hombres , en tal difpofícion, que
todos puedan ver la Eftrella , los quales ferán fin duda
muchos millones de millones de individuos , y duplica-
do numero de ojos. Supongamos también que t o d o s
elfos hombres , en un mifmo m o m e n t o enderecen fus
ojos hacia la Eftrella. En eífe m o m e n t o mifmo p r o d u -
cirá la Eftrella tantas imágenes l u y a s , quantos fon los
millones de millones de ojos , diftribuidos por el vaftif-
limo ámbito de ella esfera. Miralo con reflexión, y ha-
viendolo coníiderado bien , confieflame con ingenuidad,
qual admiras mas , íi el que la piedra Imán mueva u n p e -
dacito de hierro , que tiene cerca de s i , ó que aquel cuer-
po luminofo en un m o m e n t o produzca tan innumerable
multitud de imágenes fuyas, y en la enormifsima diftan-
cia de rantos millones de leguas.
3 5 Y defde luego te defengaño , que aunque vayas
á los Philofophos á q u e te expliquen efto , tan mal fatif-
fecho volverás á cafa , como havias falido de ella. D i r á n -
te unos , que eífas fon las Efpecies viíibles que envían
•> los objetos á los ojos. P e r o ni te explicarán de m o d o
que los e n t i e n d a s , qué coficofas fon ellas Efpecies viíi-
bles , ni como las envian los objetos , ni c o m o en tanta
m u l t i t u d , ni como en un m o m e n t o á tanta diftancia.
C o n que la maravilla maravilla fe queda. Fuera de efto,
pregúntales li eífas Efpecies viíibles fon fubftancias , ó
accidentes. Si fon fubftancias fon cuerpos , pues no fon
fubftancias efpirituales. Si cuerpos , es preciíb que fe pe-
netren unos con otros , pues al mifmo tiempo , y por el
mifmo punto del medio diafano fe eftán cruzando las
Efpecies de diftintifsimos objetos ; á no fer afsi, no p u -
dieran elfos objetos verfe fino de un p u n t o determinado
cada tino. Si accidentes , ferá forzofo que muchos acci-
dentes de la mifma efpecie fe fujetcn á un mifmo tiem-
p o en el mifmo p u n t o del medio diafano , contra lo que
enfeúan eftos mifmos Philofophos. O t r o s te d i r á n , que
de
MARAVILLAS DE LA NATURALEZA.
tic rodos los objetos fe eftán deíprendiendo todos los
inflantes unas dclicadifsimas fupcriicies , las qnales lle-
gando à los ojos los reprefentan en ellos. N o píenlo que
le haya excogitado halla ahora abfurdo Philofophico
igual a elle. Que objeto no le desharia en breve tiem-:
p o con una pérdida continuada de íiiperficies luyas , pues
aunque ellas iban delicadifsiinas , fon también infinitas;
para lo qual confiderà , que una Eftrella del Firmamen-
t o defpide en un m o m e n t o tantas de s i , que llenan to-
d o el efpacio que hai entre ella, y nofotros. Ello fe ve
c l a r o , pues en qualquiera parte ctel efpacio intermedio
que fe colocafie un hombre , veria la Eftrella , p o r con-;
Siguiente alli tendria una fuperfície que la reprefentaífe.
Corno ellas fuperficies interpueftas no embarazan la vif-;
ta de otros objetos ? C o m o la fuperfície deíprendida de
una Efírella , fiendo de mucho mayor extenílon que to-í
d a la T i e r r a , fe achica de m o d o , que quepa en un ojo?¡
O t r o s te dirán , que no hai otra efpecie vilible , ni o t r a
Imagen , que la mifma luz , la qual modificandofe de cier-:
t a manera en el objeto , y haciendo reflexión de èl à la
villa , produce en efta un genero de afección con que le
percibe. P e r o fobre que no te acomodarás « creer que
los rayos de la luz formen en tus ojos una reprefenta-
cion tan clara g de qualquier objeto , pregúntales por v i -
d a t u y a , c o m o elTa modificación , que reciben del oh-i
j e t o , no fe baraja , y confunde en las varias reflexiones,
refracciones, y aun inflexiones que padecen , ya en el
diafano interpuefto, por no fer homogéneas en denfí-j
d a d todas fus partes , yá en los corpufeulos-opacos, quei
nadan en effe diafano ? C o m o no fe confunden también
al tiempo que hieren los rayos en los ojos , recibiendo al
rnifmo p u n t o otra modificación d i f u n t a , pues en cada
cuerpo que hieren , ò iluftran fe modifican diferentemen-
te ? En fin , aun quando lo acomodaflen t o d o mui bien'
( lo que jamás fe puede cfperar ) no harían otra cofa, que'
trasladar tu admiración , y tu embarazo à la contempla-l
cion de o t r o o b j e t o , que es la mifma luz. Objeto digo!
|>Grtentofíí*imo , el mas c l a r o , y mas obfeuro del U n n
yer-j
DISCURSO S E X T O . 22%
vcríb , que da en los ojos de rodos , y en quien todos
dan de ojos , que desbarata á la Philofophia todas fus
medidas , viendo en él las propriedades de cuerpo , con
la agilidad , y futileza, que parece folo pueden íer pro -
prias del efpiritu ; por lo que algunos la conftituyen m e -
dio entre uno , y o t r o . La experiencia del Efpejo U í t o -
rio , en cuyo foco congregados fus r a y o s , no folo ha-
cen los efectos de la llama , mas aun á la villa fe repre-
fenta claramente como t a l , convence que es la luz cor-
póreo , f o r m a l , y verdadero fuego. Mas como eíTa llama
fe enciende en un momento en dilaradifsimos efpacios,
al p u n t o que el Sol aparece fobre ei Horizonte ? En qué
cuerpo fe ceba ? C o m o fe apaga al momento que el o t r o
fe efconde ? Vés ahora como queriendo los Philofo-
phos con fus explicaciones extraherte de las olas en que
fluctuabas á la orilla, te meten en mas profundo pié-
lago?
§. X I V .
"36 T 'A valentía , y primor con qué la N a t u r a l e -
| _ , za pinta los cuerpos en el órgano de nuef-
tra villa , fe hace mas viíible en el dibuxo , que hace de
ellos en un Elpejo. Qué poco nos hacemos cargo del
valor intrinfeco de las cofas ! P r e g u n t o : Si huvieííe un
P i n t o r tan primorofo , que facafle las efigies tan perfec-
tas , tan parecidas á fus objetos , como las que fe forman
en un Efpejo de cryílal, á qué precio venderla cada lien-
zo , ó lamina , de fu mano ? Apenas hallaría precio cor-
refpondiente en el erario de un gran Principe. V e n d i ó
Apeles la pintura que hizo de Alexandro , con el rayo en
la m a n o , en veinte talentos de oro , que reducidos á
nueílra m o n e d a , fuman ciento y veinte mil doblones,
poco mas , ó menos. Demos que aquella haya fido la
mas excelente efigie que halla ahora produxo el Arte;
iiempre ferá precifo confelfar , que feria muí inferior á
las que en el Efpejo forma la Naturaleza ; y quanto
nías pediría Apeles p o r la pintura , fi reprefentaüe no fo-
íom.VI. Ff lo.
iz6 MARAVILLAS DE LA N A T U R A L E Z A .
lo el vulto de Alexandra , mas también fus movimien-
tos ? Quanro mas , fi difpuíieffe , 6 preparaffe de tal m o -
do el lienzo , que figuraffe , no folo á Alexandra , lino
indiferentemente á qualquiera objeto que fe pulidle de-
lante del miímo lienzo. T o d o ello es impoísible á los
mas prolixos defvtlos del Arte , y t o d o lo executa en un.
momento la Naturaleza. Pveianle los f.ípañoles de la lim-
pieza de los Americanos , que les daban trozos de oro p o r
unos pequeños efpejuelos. Yo me n o de la rudeza de los
Efpañoles , que reputaban fimpleza , lo que era difere-
cion. Si no huvieíie mas que un Efpejo en t o d o el M u n -
d o , no havria en t o d o el Mundo precio para él. Si ellos
no fuellen conocidos en Europa , y traxeífen acá los pri-
meros de una Provincia remotifsima , u de la Alia, tide
la America , donde eítuvieífe refervado el íécreto de fu
fabrica, á qué precio los comprarían los Europeos ? Def-
embarazadamente aíléguro , que darían por ellos mucho
mas , que en el defeubrimiento del Nuevo .Mundo daban
los Americanos , y folo hombres poderoíifsimos tendrían
caudal para la compra de un Eípcjo. En elta limación fe
hallaban aquellas g e n t e s , quando los Efpañoles aporta-
ron á fus ti', r r a s , y afsi compraban á los Efpañoles los
Efpejos , con mucho o r o si , pero acafo con menos que
les darían los Efpañoles á ellos, fi ellos los primeros hu-
vieífen trahido á Europa los Efpejos. Y fi ni los Ameri-
canos , ni nofotros huvieílcmos viíto las imperfectas re-
preíéntaciones que fe forman en las aguas , y otros cuer-
pos de íuperficie terfa , al ver el primer Efpejo , tan-
t o nofotros , como los Americanos juzgaríamos firme-
mente , que en aquella.rapida producción de varías '
imágenes intervenía ilufion dia-
bólica.
J.XV.'
DISCORSO SEXTO.
§• X V .
37 h Efta luz deben mirarfe las obras de la Na-
J~\. turaleza. Para examinar fus fondos es me-
nefter colocarnos en la hypotheíi de contemplarlas como
raras. Elle es el p u n t o de vifta, que piden ; y regiílradas
de eñe p u n t o de vifta , las mas comunes alfombran: Vir
in/ipiens non cognofcet, &ftultus non intelliget ¡o¡se.
38 Es confiante, que quantos lean el titulo de efte
Difcurfo, antes de entrar en fu contenido juzgaran ha-
llar en el un catalogo de las raridades mas exquifitas del
O r b e , como de varias efpecies de monftruós ; de Meteo-
ros Ungulares ; de Vegetables , y Piedras de admirables
virtudes (en que es iabulofo por la mayor parte lo pri-
mero,y no se lì en t o d o lo fegundo;) de las Plantas , que
llaman Senfitivas ; de Animales de prodigiofa pequenez,
ù de portentofa magnitud ; de fuentes , que tienen flu'xo,
y refluxo como el Mar; de peregrinas calidades de varias
tierras ; de las naturales metamorphoíis de guíanillos en
Abifpas, Abejas, y otros Infectos volantes ; de algunas
efpecies de Infectos , donde todos los individuos fon
hermaphroditas, &c. Nada de elfo hai aqui ; antes t o d o
lo contrario , porque mi intento.folo es defeubrir lo
prodigiofo aun en lo mas vulgarizado , para que fe vea,
que la Naturaleza en todas fus obras admirable , en t o -
das eftà inoltrando la mano poderofa, que la rige.
3 9 Para cuya mayor evidencia echare la clave alas
Maravillas de la Naturaleza , fcñalando una pafrnoíifsi-
ma , que es tranfeendente à quantas fubftancias carpo-
reas contiene en fu dilatado ambito. Efta es. la c o m p o -
íicion del continuo. Tiende la vifta por donde quiíieres,
de Oriente à Poniente, del Setentrion al-Mediodía , deí-
de la Eftrella mas alta del Firmamento, hafta el lodo que
firve de lecho al grande cuerpo de N e p t u n o . Mira hom-
bres, brutos, troncos, metales , peñas , agua , tierra, fue-
go, en fin t o d o lo que hai que mirar. N o folo en cada
individuo, mas en cada porción luya, la mas menuda que
Ff2 pue-
"2a8 MARAVILLAS D E LA N A T U R A L E Z A ' .
pueda percibir tu villa, hallaras un prodigio incompr"e~~
heníible ; cito es, la infinidad de partes , que la c o m p o -
nen. N o tienes que dudar de efto. Si un Ángel fe pufief-
fe á dividir el átomo mas leve , que lleva el viento , le
podría dividir en cien mil millones de partecitas difun-
tas ; luego cada partecita de ellas en cien mil millones
de otras, y aunque de ella fuerte profiguieffe la divilion
por cien mil millones de anos, haciendo cien mil millo-
nes de divifiones cada dia , y aun cada hora , en partes
íiempre menores , y m e n o r e s , le reliaría fiempre t a n t o
que hacer, como li no huvieílé empezado. Efto no cabe
en tu imaginación. T a m p o c o en la mia. Pero por mas
que la imaginación refiíla, el entendimiento fe convence
en fuerza de las demonftraciones M a t h e m a t i c a s , que i n -
venciblemente lo perfuaden. Ni tienen los Philoíbphos
de la Aula que venirte con fu diftincion de partes alt-
quotas, y proporcionales; pues no ignoran, ni ignoramos
t o d o s los que fornos del A r t e , que elle es un mero t r a m -
pantojo de v o c e s , fin átomo de fubftancia, y folo de
provecho para engaitar muchachos. Es evidentiisimo,
que li las partes del continuo (llamenfe como fe quiíie-
ren) no fuelTen actualmente infinitas, necesariamente lle-
garía en algún tiempo el Ángel á fu ultima divilion , y
aun en un momento le podria dividir quanto es divifi-
ble, pues feria finita fu divifibilidad en effe cafo.
40 Ella es una maravilla de tan enorme magnitud,que'
en algún m o d o defaparecen en fu íombra todas las demás,'
porque t o d o es menos que lo infinito. Pero con efpecial
titulo pueden degradarle del orden de maravillas, algunas
que entre los Philofophos eftán en la pofiéfsion de tales;
hablo de aquellos minutifsimos animalejos , que folo fon
vifibles por medio del Microfcopio, y quanto por fu pe-
quenez fon menos perceptibles á la v i l l a , tanto por ello
mifmo avultan mas en la imaginación. Tales fon los
gufanillos, de que generalmente abunda el vinagre , y la
leche azéda, los que fe hallan en la materia feminal de
varios animales, entre ellos la humana. Monf. Heiftcr,
famofo Ocuiifta, y Anatómico Alemán, que oy vive, ob-
fer-
DISCURSO SEXTO; 229
fervó una efpecíe de pulgas,que infeftan las mofeas. Mas
es lo que refiere el Padre Gafpar S c h o t t o , que las pul-
gas , que á nofotros nos moleítan , fon moleftadas p o r
otras pulguecillas , tan menudas , que difeurren por los
pos de ellas, y fe alimentan de fu fangre, como ellas
_ e la nueftra. El Holandés A n t o n i o de Leuvvenhoeck^
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TRITONES.
Y N E R E I D A S .
DISCURSO SÉPTIMO.
§• I.
^ U E R O N ellas tres Efpecles famofif-
ílmas en el P a g a n i í m o . Terreíle la
p r i m e r a , maritimas la fegunda , y la
tercera. P i n t a b a n los Gentiles á los
Satyros en la figura medio brutos , y
medio h o m b r e s ; pero en la eflima-
cion eran medio H o m b r e s , y medio Deidades. T e n í a n
cuernos , cola , y pies de cabras ; en el refto humana t o -
da la configuración. Habitaban las Selvas como fieras,
y eran adorados en los Templos como Semidiofes.
2 L o s T r i t o n e s medio hombres , y medio pezés,'
gozaban la mifma prerogativa de Semideidades. Venían
á fer los T r o m p e t e r o s de N e p t u n o , baxo de cuyas or-
denes , infpirando fu aliento á una concha retorcida
Gga - en
2 i6 SATYKOS, T R I T O N E S , Y N E R E I D A S .
en forma cié bocina , con fu ronco fonido aterraban el
piélago.
2 L a s Nereidas no fe diftimniian de los Tritones.'
fino en el fexo , y en que n o fe les atribuía el ufo de la
bocina. Tenían la mitad del cuerpo de m u g e r , el refi-
to de p e z , y eran Semidiofas marinas , como los T r i t o -
nes Semidiofcs.
4 Suenan en el M u n d o Satyros , T r i t o n e s , y Nerei-
das „ como meros entes tabulólos. Pero yo ,, fin negar
que mezcló en ellos algo la fábula , liento que fueron cn- ;
tes v e r d a d e r o s , y reales.
§. III.
13 Egados , pues , Satyros racionales , y con
£ ^ ufo de locución , folo admitimos Saty-
ros brutos , ó e m b r u t e c i d o s , y m u d o s , quales eran a q u e -
llos de quienes hablan D i o d o r o Siculo , y Plutarco. Efi-
te con exprefsion refiere , que haviendo hablado al Sa-
t y r o , prefentado á Syla, por Interpretes de varias Len-
guas , no folo no reSpondió á a l g u n a , pero ni Se le oyó
fon alguno articulado ; ni aun la voz tiraba á humana , si
folo á una confufa mezcla de caballar', y caprina.
1 4 N o folo es poísible la producción de eítos monf-
truos ; pero mui verifimil, que hayan nacido algunos
de la detestable commixtion de individuos de la eSpecie
humana con los de la caprina ; y una fuerte conjetura me
confirma en que los Satyros , que veneró el Paganifmo,
n o eran o t r a cofa que los partos d e eítos concubitos
infames,
DISCURSO SÉPTIMO. Z :<?
i 5 Muchos Eruditos fon de fentir, que el D i o s Van,
Satyros , Silvanos , Í n c u b o s , y Faunos , t o d o s eran una
mi fina' cofa debaxo de diferentes n o m b r e s . Afsi dicen,
que no huvo un Pan folo, lino muchos , para lo qual hai
tcftimonios claros en los antiguos P o e t a s . En efecto el
D i o s Pan era pintado por los Gentiles en la mifma for-
ma que los Satyros , ello es con cuernos , cola, y pies de
cabra , en lo demás humano el afpecfto. Tenia el D i o s
P a n efpecialifsimo culto entre los Paftores ,.como ungu-
lar patrono luyo. Afsi O v i d i o íe llama Dios del Rebaño,
Virgilio, y otros Poetas, ya Dios de los Pajlores, ya D i o s
de la Arcadia (Provincia Paftoril por antonomafia.) N o -
tefe ahora , que los Paftores fon la gente mas ocafiona-
da, que hai en el M u n d o , á los crímenes de beftialidad,
yá por fu ruda educación, ya por la continua afsiftencia
á los g a n a d o s , yá por faltarles otro menos torpe def-
ahogo á la laícivia. T o d o lo dicho coincide á hacer creí-
ble , que haviendo nacido algunos individuos de ella
. tercera efpccie, íemicaprina , y fen-.ihumana en la figura,
por la abominable commixtion de Paftores con cabras,
la barbarie junta con la malicia de aquella ruftica gente
quiíieiíe autorizar el delito atribuyendo una efpecie de
divinidad al parto (lo que venia á fer producir o t r o
monftruo mental harto mas horrorofo que el phyfico) y
luego como cofa propria la conílituyeílen Deidad t u t e -
lar luya, á quien deipues por varios accidentes , 6 m o -
tivos apellidailen con diftintos nombres. D e aqui los
Panes , los S a t y r o s , los Silvanos , los Faunos , y los ín-
cubos.
\6 Si fe me opufiere que algunos Philofophos nie-
gan fer pofsible que provenga generación alguna del co-
mercio de hombre, y bruto : Refponderé lo primero,que
contra la autoridad de cflbs pocos Philofophos eftá la
de muchos mas que fienten lo contrario , y demás á mas
el común confentimiento de los T h e o l o g o s , que quanelo
tratan del bautifmo ele los monftruos, íuponen polsibles
tales generaciones. Lo fegundo, que los que las niegan
pofsibies, no dan razón, que haga alguna fuerza. L o ter-
ce-
z.to SATYROS, T R I T O N E S , Y N E R E I D A S .
c e r o , que fon m u c h a s , y mui autorizadas las Historias
que hai de Semejantes generaciones, como faben t o d o s
los que manejan algo los libros. Efto fupuefto , no hai
el menor veíligio de. inveriíimilitud , antes muchas razo-;
nes de congruencia para creer , que los monftruos que los
Antiguos veneraban debaxo del nombre de Satyros , fuef-
fen producciones de la efpecie humana mezclada con la
caprina.
.. 17 N o ignoro que Plinio da el nombre de Satyros a
unos animales, que hai en ciertos montes d é l a I n d i a ,
•mui parecidos al hombre ; por consiguiente parece , que
de ellos vendría el gentílico error de los Satyros. Pero'
obfta el que aquellos eran cierta efpecie de M o n o s , como
el mifino Piinio manifiestamente infinúa , los quales no'
tienen c u e r n o s ; y los Satyros generalmente Se pintaban'
bicornes..
•18 N o t o aquí para los curloSos , que efta efpecie de
M o n o s , ni mas ni menos que los deferibe Plinio , oy Se
hallan en algunos parages de la India. El Padre Le C o m ?;
$• I V .
Y? T 7 ^ T A noticia naturalmente me conduce á
C» rectificar o t r a , que en la forma que hafta
ahora fe ha comunicado del Oriente á la Europa es de
difícil creencia ; pero bien e n t e n d i d a , no dexa el menor
tropiezo al aífenfo. Algunas Relaciones de la Isla de Bor-
neo, fituada en el Mar de la India , dicen que en las Sel-
vas de aquella Isla fe hallan hombres Salvages, ó Silvef-
tres. Afsi los llaman , no folo en el fentido en que fe
aplica efte epitheto á algunas cerriles naciones de la A m e -
rica, si con mas propriedad , porque aunque en la difpo-
ficfon de t o d o s los m i e m b r o s , y m o d o de ufar de ellos
nada defdicen de la efpecie humana , pero les falta la l o -
cución; y por otra parte fu m o d o de vivir carece de t o -
da policía, ni mas ni menos que el de las fieras.
20 Sobre efta noticia luego ocurre la dificultad, qué
arriba propufimos contra la exiftencia de los Satyros.
Tales hombres , li los h a i , apenas fe pueden confiderar
defeendientes de Adán, pues li lo fueífen , fuccefsívamen-
te fe irla comunicando de unos á otros alguna policía, y
el ufo de la habla. Aúadcfe , que fin milagrofa, é infufa
iluílracion no fe les podrá comunicar la luz del Evange-
lio ; lo que en las leyes ordinarias de la benignifsima
Providencia Soberana no cabe.
21 Defpues de todo,eftas dificultades no parecen ín-
fuperables. A la primera fe puede fatisfacer con la pof-
fibilidad del cafo que dos tiernos infantes de diftinto
fexo , cuyos padres vlvielfen en algún retirado monte,
por la muerte, ó por la fuga de eftos quedaflen al abrigo
de la Providencia en aquella foledad, que en ella crecief-
fen, y procreaífen. Es para mi p r o b a b i l í s i m o , que ni
ellos , ni fus hijos hablarían idioma alguno ; por confi-
guiente aunque defeendientes del mifmo padre común,
carecerían del ufo de la locución.
22 N o por elfo liento, que fea precifo comunicarfe
£l lenguage originariamente por infulion , como a nuef-
Tom. VL Hli tros
242 SATYROS, T R I T O N E S , Y NEREIDAS.
tros primeros Padres. Pero me parece , que en una fami-
lia, ó congregación de gente, donjle no huvieíle ni infpi-
racion , ni enfeñanza, pallarían algunas , y aun muchas
generaciones antes que á fuerza de ingenio , eíludio , y
practica fe formaíTen idioma para entenderle. Es ella
una obra mui larga, y muí difícil. P o d r í a n palfar mil , 6
dos mil años,y aun muchos mas antes que á ninguno de
aquella progenie ocurrielle, que con los varios m o v i -
mientos de la lengua fe podian explicar los penfamien-
t o s , que tenia en el animo.
23 O quantos, al leer ello , juzgarán , que les p r o -
p o n g o una extravagante paradoxa. H a i cofa mas fácil,
dirán, que hablar ? Haviendo infinitos hombres rudifsi-
mos para materias mui triviales, para'el ufo de la locu-
ción ninguno es r u d o . Hafla los mas fatuos le l o a r a n .
O ' p o r mejor decir, t o d o s quando lo logran fon fatuos,
pues hablan todos los niños antes de llegar al ufo de la
razón. P o r qué, fino por fer una obra tan n a t u r a l , que
apenas, ni aun apenas tiene que hacer en ella el entendi-
miento ? Efla réplica es hija de la taita de reflexión. D i -
g o , que el hablar por enfeñanza es facilifsimo ; hablar
por esfuerzo del proprio difeurfo , ñañamente arduo.
.Tienefe, y con razón, por un peregrino defeubrimicnto,
una futilifsima ingeniada, acafo la mayor que hafta aho-
ra cupo en el humano entendimiento , como yá infirma-
rnos en otra parte , la invención de las Letras. Hacefe
palpable la fuprema dificultad, que efto tiene, en que en
ninguna de las Naciones Americanas fe halló el ufo de
ellas. O porque los primeros, que pallaron á aquel Con-
tinente no havian aprendido á eferibir , ó porque aun no
fe havia inventado el eferibir quando paffaron , no huvo
quien enfeñaííe el ufo de la pluma en la nueva Colonia.
Y qué fucedió? Que por mas que fe multiplicó la gen-
te en aquellos vaftifsimos Paifes , ligios , y mas ligios fe
eñuvieron fin que á nadie ocurrieffe , que la pluma podia
fuplir la lengua , ó los caracteres las palabras. D e tantos
millares de millares , y aun millares de millones de hom-
bres nadie dio en ello , fin embargo de que la necefsidad
era
DrsScuRso S É P T I M O . 243
era grande , y la importancia univerfalifsima. Pregunto
ahora : Qual invención es mas ardua, la de explicar con
las letras las palabras, ó la de explicar con las palabras
los conceptos ? Sienta cada uno como quiíiere ; yo de-
cido, que es mucho mas ardua la fegunda. La razón es,
porque hai mucho mayor diftancia del figno al fignifica-
do en ella, que en la primera. Los rafgos de la pluma,
y los movimientos de la lengua convienen en fer u n o , y
otro cofa m a t e r i a l ; pero de los conceptos del animo à
los movimientos de la lengua hai la enorme diftancia,
que fe confiderà entre lo efpiritual , y lo corporeo. Ni
f e m é oponga, que también la pluma explica los penfa-
micntos ; porque etto no lo hace fino mediante las pala-
bras. Es mera copia de copia.
24 Aun refita mas. Confiderete , que defde la inven-
ción, ó aquella primera ocurrencia de que los movimien-
tos de la lengua pueden fervir à explicar los conceptos
del animo hafia la formación del idioma mas imperfeóto,
ó mas r u d o , hai larguifsimo camino que andar , no folo
larguifsimo,pero efeabrofifsimo. Afisi, computado t o d o ,
fe hallará fumamente veriíimil, que una progenie , que ni
por infufion, ni por efcuela huvieífe adquirido idioma,
fe efitaria muchos figlos fin habla. Con que queda reíuel-
ta la primera dificultad que fe propufo contra la noticia
de los hombres Salvages de la Isla de Borneo.
25 La fegunda dificultad, que es puramente T h e o l o -
gica, nos quiere.meter en un piélago , cuya orilla igno-
ran los hombres, quiero decir en el abyfmo de la D i v i -
na P r o v i d e n c i a , cuyos limites fon incógnitos á todos los
mortales. U n a cofia nos confita ciertamente de las Sagra-
das Letras, y es, que Dios con fin-cera voluntad quiere,
que todos los hombres lleguen al conocimiento de la
verdad , y fe falven. P e r o afisi como con efia voluntad
Antecedente, y general (como la llaman los Theologos)
es compatible, que tantos infantes perezcan en los clauf-
tros maternos , fin que con alguna humana diligencia
pueda procurarfe fu falvacion por medio del Sacramen-
to del Baptifmo ; por que n o fiera compatible con efia
Hh 2 mil-
244 SATYROS, TRITONES, Y NEREIDAS.
mifma voluntad g e n e r a l , y Antecedente, cl que algünoS
adultos queden impoísibilitados al beneficio de la enfe-;
fianza? Cafi t o d o s los T h e o l o g o s , à la referva de un cor-
tifsimo numero, afirman, que aun à aquellos infantes fe
extiende la voluntad Antecedente de la falvacion.La mif-
ma doctrina, con que componen ello , es idéntica para
componer lo o t r o . Aun quando por la impofsibilidad
de lograr el beneficio de la predicación pereciefie una N a -
ción entera, deberíamos refignados venerar los D i v i n o s
Decretos , conformándonos à aquella fagrada Máxima:
Quistibi imputabit fiperierint Nationes, quas tufecifii>
(Sapient. c a p . i 2 . )
2 5 Ello es refponder al argumenro , aun fin falir d e
los limites de la común Providencia. Pero quien fabe , íi
.Dios refpecto de gente incapaz de la predicación , ufaría
de otra Providencia particular? Es facrilega temeridad
pretender apurar lo que Dios quiere , y puede hacer. L o
que no tiene duda es , que ella dificultad t o d o s deben
t r a g a r l a , y digerirla; fiendo cierto, que muchos a d u l t o s ,
que h ai entre los Barbaros , fin culpa fuya carecen de el
B a p t i f m o , y de la Predicación. Qué dicen à elto los
T h e o l o g o s ? U n o s , por falvar en t o d a la extenfion i m a -
ginable la fentencia de S. Juan : Illuminât omnem homU.
nem venientem in bunc Mundum, dicen, que fi con algún
pecado perfonal no lo defmerecen , D i o s por medio de
u n Ángel, 6 infundiéndoles efpecies de los myílerios, los
ilumina ; o t r o s , que, como refpeóto de eftos no eftà p r o -
mulgado el Evangelio, o es lo miímo que fi no fe huvief-
fe promulgado, no pertenecen à la Ley de Gracia , fino
à la Ley de Naturaleza. Aplique cada uno lo que quificre,
à los Salvages de la Isla de Borneo.
• 27 P e r o aunque lo dicho bafta para falvar, que no
hai impofsibilidad alguna en que los que fe dicen h o m -
bres Salvages de la Isla de Borneo fean realmente hom-
bres, no tengo efto por lo mas verifimil ; fino que fon
una efpecic de Zvíonos, ó la mifma , o poco diferente de
la que pintan Plinio , y el Padre Le C o m t e . P o r elfo di-;
xe arriba, que mi intento era rectificar aquella noticia^
Ï
D r s c u R s o SÉPTIMO'.' 24J :
§. V.
30 T 7 N los T r i t o n e s , y Nereidas hai p o q u í s i m o
j L J I que purgar de fábula á la verdad. Quales
nos los pintan los antiguos Poetas , tales fe hallan oy en
los Mares , á la reíerva de la bocina , cuyo ufo no han
reconocido los modernos en los T r i t o n e s . D i g o que fe
hallan en los Mares , bien que fon infrequentes á la vif-
t a , unos aquatiles de medio abaxo pezes , que de medio
£ m b a obfervan exactamente todos los lineamentos de
" l a
2^6 SATYROS, T R I T O N E S , Y NEREIDAS.
la humana configuración , con todas las leñas , que díf-
tinguen los dos fexos.; de fuerte , que unos en quanto á
la figura fon medio pezes , y medio hombres , otros m e -
dio mugeres , y medio pezes. L o s m o d e r n o s , t o m a n d o
la denominación de la parte p r i n c i p a l , llaman hombres
marinos á aquellos , y mugeres marinas á ellas. D e los
antiguos Eícritores en Plinio , Eliano , y Paufanias fe
leen algunas hiílorias de ellos hombres ,,y mugeres ma-
rinas. Nauclero , Belonio , Lilio Giraldo , Alexandro
de Alexandro , Gefnero , y o t r o s Autores mas modernos
refieren hiílorias femejantes.
31 Los dos fuceílbs mas cercanos á nueílros tiem-
pos que he leído , fon : El primero , el que fe ha efpar-
cido en varias Relaciones del hombre marino, defcubier-
t o el año 11571. cerca de la Gran R o c a , o Isla Petrofa,
llamada El Diamante, que difla una legua de la M a r t i -
nica. Yieronle diferentes veces mui á la orilla dos Fran-
cefes , y quatro Negros , que eftaban fobre el borde de
dicha R o c a , y unánimes depuíieron defpues jurídica-
mente del hecho. T e n i a defde la cintura arriba perfecta
figura de hombre , la talla del tamaño de un muchacho
de quince años , los cabellos mezclados de blancos , y
negros , pendientes fobre las efpalelas , como fi los hu-
vieffen peinado , la cara llena , la barba parda , y por t o -
das partes i g u a l ; la nariz mui roma; cara, cuello, y cuer-
p o medianamente blancos , y el cutis al parecer delica-
d o . La parte inferior, que fe vcia entre dos aguas , era
de pez , y terminaba en una cola ancha, y hendida.
32 El fegundo , aun mucho mas próximo al tiem-
p o prefente , es del hombre marino , villo en Breíl el año
de 1 7 2 5 . y de que dan ampia noticia las Memorias de
T r e v o u x del mifimo año , T o m o 4 . pag. 1 9 0 2 . Vieron-
le largo tiempo treinta y dos perfonas , que havia en un
B a x é l , cuyo Capitán era Olivier M o r i n . Era perfecta-
mente p r o p o r c i o n a d o , y fus miembros en todo feme-
jantes á los n u e í l r o s , falvo que entre dedos de manos,
y pies tenia una efpecie de aletas al m o d o de las Añades.
Seria prolixidad referir los varios m o v i m i e n t o s , y a d e -
ma-
DISCURSO SÉPTIMO. 247
manes que hizo t o d o el tiempo que duro la obfervacion.
L o mas notable fue , que viendo la figura que havia en
la proa del Baxèl, que era imagen de u n a m u g e r h e r m o -
í a , defpucs de contemplarla , fufpenfo un rato ,. fe a b a -
lanzo fuera del agua , en ademán de querer afirla. H u -
vo también dos circunftancias ridiculas en efle fuceflb:
La primera de parte del m o n f t r u o , el q u a l , como ha-
ciendo irrifion de la gente del Navio , vueltas à ella las
efpaldas , y levantado algo en el agua , exonero el v i e n -
tre à villa de todos. La fegunda de parte del Contramaefi-
tre del B a x è l , el qual teniendo enarbolado yà un H a r -
pon para tirarle , dexb de arrojarle , forprendido de un
terror pánico. Es el cafo , que el año antecedente un
Francés , llamado Lacommune, en el mifmo Baxèl fe ha-
via defefperadamente quitado la vida , y le havian arro-
jado al Mar en el mifmo litio. Ocurrióle , pues , al C o n -
tramaeflre al tiempo, que eílaba para lanzar el H a r p o n ,
y. fe le imprimió fuertemente , que el hombre marino era
no mas que un Efpeclxo , phantafma, ó aparición del def-
venturado Lacommune.
§• V I .
33 T Q E r o fe ha de a d v e r t i r , que entre las varias
X hiftorias de m u g e r e s , y hombres marinos^
fe encuentran algunas , en que el cuerpo era enteramen-
te h u m a n o . T a l era el hombre marino , que dice Plinio
fué villo en fu tiempo en el Océano Gaditano , toto corpa-
re abfoluta Jimilitudine. Y porque no fe pienfe que ella
es alguna de las patrañas , que un vano rumor llevaba
á Plinio de lexas tierras , él mifmo advierte , que lo o y ó
• á algunos Caballeros R o m a n o s tefligos oculares del ca-
fo : Auóíores babeo in Equefiri ordine fplendentes, vi-
fum ab bis, &c. T a l el que refiere Monf. de Larrei en fu
Hiítoria de I n g l a t e r r a , haver fido pefeado en aquella If-
la el año 1 1 8 7 . y prefentado al G o b e r n a d o r de O x f o r d ,
el qual le tuvo en fu cafafeis mefes ; á cuyo termino , ha-
llando ocafion de volver.fe al M a r , lo hizo , y no pareció
:ttas. Tal
248 SATYROS, T R I T O N E S , V NEREIDAS.
34 T a l era también lamugcr marina , que en el Díc-"
cionario Univerfal de T r e v o u x fe ice haveríe hallado,
al baxar la m a r e a , en la orilla de Uveítfnfia , deípues de
una gran tempeftad, el año de 1 4 3 0 . U n a s m u g e r e s de la
C i u d a d de Edam , que la hallaron , la llevaron al Pue-
blo , la viftieron , y enfeñaron á hilar. Fué delpues tranf-
ferida á Harlem , donde vivió algunos años ufando de
nueftros alimentos ; pero nunca perdió la inclinación á
Jiabitar en el agua.
3 5 P e r o el hallazgo mas plaufible que ha havido en,
'ella materia , es el que en el mifmo Diccionario fe lee
haverfe logrado cd año de 1 5 6 0 . cerca de la Isla de M a -
nar , fobre la cofia Occidental de Ceilán. U n o s Pefca-
dores en una redada fola cogieron líete hombres mari-
n o s , y nueve mugeres. Algunos Jeluitas , cutre ellos el
P a d r e Enrique Enriquez , juntamente con D i m a s Bof-
que de Valencia,, Medico del Virrey de G o a , fueron tef-
tigos del hecho. N o foto la figura era enteramente hu-
mana , mas también las partes interiores eran perfecta-
mente parecidas á las del hombre , lo que confió por el
examen anatómico que hizo el Medico.
l6 O t r o hombre marino , que Alexandro de Ale-
xandro cuenta haver fido cogido en fu tiempo en E p i -
r o , y cuyo hecho afirma como autenticado por Actas
publicas , parece que también era de configuración per-
fectamente humana. Eíte fe efeondia á tiempos en una
cueva próxima al Mar , defde donde azechaba á las mu-,
geres , que iban á t o m a r agua á una fuente , que cita-
ba cerca de la cueva , y q u a n d o obfervaba alguna fola,
y vueltas las efpalelas , con filenciofos paffos fe llegaba a
e l l a , y lafeivamente la o p r i m í a .
37 Ellas hiftorias, por el mifmo cafo que prueban
mas de lo que pide nueítro aífumpto , le perfuaden efica-
cifsimamente : pues fi fon pofsibles , y exiítentes anima-
les marinos en t o d o el cuerpo femejantes al hombre , con,
mucho m a y o r razón fe hacen creíbles los que folo
en alguno , ó en algunos miembros
fon femejantes.
í .VIÍ*
DISCURSO SÉPTIMO^ . j^c?
§. V I L
38 13^ '^ arguirfe
cr
contra las Híftorias referí--
|_ das , que la total femejanza en la organiza-
clon infiere total íemejanza en la forma efpecifica ; p o r
configuiente , íi los animales marinos de quienes fehi-
zo memoria , fon totalmente femé jantes al hombre en la
organización, fe debe difeurrir que verdaderamente fotí
h o m b r e s ; lo q u a l , fiendo impofsible, por algunas razo-;
nes , que fácilmente fe prefentan al difeurfo , debemos,
concluir , que aquellas narraciones fon fabulofas.
39 Prefcindiendo p o r ahora de íi es , ó no pofsible,
que haya verdaderos hombres habitadores del.Mar , c o -
m o los pezes ( d e que trataremos en el Difeurfo figuien-
te) refpondo por ahora al argumento , permitiendo el a n -
tecedente , y negando la confequencia. Afsiento á que lá
total femejanza en la organización infiere conveniencia
efpecifica en la forma fubllancial; pero no eftá averigua-
do , ni acafo es pofsible averiguarle fi aquellos animales
fon organizados en t o d o , y por t o d o , como el h o m b r e .
El examen que en efta materia hace la vulgar A n a t o m í a ,
no paffa de las partes de fenfible extenfion; y aunque ha-
ya en eftas toda la femejanza que pueden percibir nuef-
t r o s f e n t i d o s , cabe que haya en las partes mas fútiles de
los órganos la deffemejanza que baila , para que fean
proporcionadas á ellos , otra forma fubftancial, y otras
facultades diverfas.
40 Puede comprobarfe ello con la reflexión de qué
la m a y o r , o menor femejanza de organización fenfible,-
entre diferentes efpecíes, no prueba mayor , ó , m e n o r
femejanza en las facultades. La organización fenfible-del
Elefante es mucho mas diverfa de la del hombre > que la
de otros muchos brutos ; no obftaute lo q u a l , . e n las fa-
cultades animafticas.es el Elefante mas femejante al h o m -
bre , que aquellos. Afsi como , pues , la mayor femejan-
za en la organización fenfible no arguye mayor femejan-
za en las facultades, tampoco la total femejanza en la or-
; .Tem.VI. li
f)0 SATYROS, TRITONES, Y NEREIDAS.
ganizacion temible argüirá total fcmejanza en las faculta-
des , y por configuiente ni en la forma efpecifica , á quien
aquellas fon coniiguientes.
§. V I I I .
4 1
EXA-
2
5 i.
^££££££££££££££££££££££g
* S * * * * * * * * * * * * * * * * * * * 32?
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» » » §•»:i » s » "
E X A M E N
PHILOSOPHICO
DE UN PEREGRINO S U C E S S Q
DE ESTOS TIEMPOS.
DISCURSO OCTAVO;
§. I.
¡ L cafo , que da materia á efte Difcurfo^
es tan eftraño , tan exorbitante del re
g d orden de las cofas , que no me
l a r
§. I I .
15 T T Afta aqiú la Relación remitida por el feñoi?
t ~ j [ Marqués de Valbucna ; la qual poco def-
pues fué confirmada.en un t o d o por D o n Gafpar Mel-
chor de la Riba Agüero , Caballero del H a b i t o de San-
t i a g o , vecino del Lugar de Gajano , cufiante de Liér-
ganes cofa de media legua , en refpucfta á fu hierno D o n
D i e g o Antonio de la Gándara Velarde , refidente en eita
C i u d a d , que también me hizo el favor de folicitar el in-
forme de aquel Caballero , el qual en fu carta afirma ha-
ver tenido algunas veces en fu cafa , y dado de comer al
fugeto de eita hiftoria. Afsi me k confirmo toda otro
Caballero llamado D o n Pedro Dionyfio de Rubalcava,
natural del Lugar de Solares , próximo á Liérganes , que
también trato mui.de intento, á.nupftro nadante ; y a eíte»
' en
DISCURSO O C T A V Ó . 257
èri orden á la circunltancia de las cícamas , debí la in-
dividuación , de que quando llegó à Lièrganes tenia al-
gunas fobre el e í p i n a z o , y como una cinta de ellas def-
de la nuez al eílomago , pero á poco tiempo fe le caye-
ron. D o n Gafpar de la Riba dice en fu relación , que
en algunas partes del cuerpo tenia el cutis afpero al m o -
do de lija. Con eftas dos ultimas advertencias fe conci-
lia el aparente encuentro de las noticias en orden á las
efeamas. Los que le vieron en fu arribo à Santander,
pudieron afirmar con verdad que las tenia , porque de
hecho las tenia entonces , y los que le vieron defpues
afirmaron también con verdad , que no las tenia , p o r -
que yá fe le havian caído. También algunos equivoca-
rían el cutis afpero de algunas partes de fu cuerpo , con
pielefeamofa.
16 Efte prodigiofo cafo abre campo à algunas cu-
riólas dudas , y reflexiones , en cuya confideracion , aun-
que la principal conjetura , que fundaremos en el , per-
tenece en parte à la materia del Difcurfo paflado , por
no alargarnos mucho en e l , le hemos refervado para for-
mar fobre él diílinto Difcurfo.
§. I H .
£7 "Y 7Erdaderamente es cofa laíllmofa , que nuéf-
V t r o nadante hombre perdlelfe el ufo de la
razón , no folo mirandolo como fatalidad fuya , mas
también como pérdida nueílra , y de todos los curiofos;
pues fi efte hombre huvieífe coníervado el juicio , y con
él la m e m o r i a , quantas noticias en parte útiles , y en
parte efpeciofas, nos daria , como fruto de fus mariti-
mas peregrinaciones! Quantas cofas ignoradas halla aho-
ra de todos los Naturalistas , pertenecientes à la errante
República de los Pezes , podríamos faber por él ! El fo-
lo podia haver exactamente averiguado fu forma de
criar , fu m o d o de vivir , fus paltos , fus transmigracio-
nes , y las guerras , ó alianzas de efpecies diítintas. Qué
bjien explorados tendría los lechos de varios Mares^
.Tom.rit Kls ' peca-.
2)3 E X A M E N PHII.OSOPHICO, & C .
Océano nuevo dentro del miuno Océano , y Fondo fin
lucio , relpicto de innumerables efpeculaciones philo-
fophicas , ya por las plantas , que en él nacen , ya por
las materias que en él fe juntan , ya por las immutacio-
nes que en' él reciben , ya por las fuentes , y ríos que en
él brotan , ya por las cavernas que reciben las mií'mas
aguas marítimas , para traníportarlas á lugares diítin-
t i í s i m o s , ya por otras mil colas ! Pero lo que mas de
cerca pica la curioíidad philofophica , y lo que folo por
elmifmo hombre podia laberfe , fon algunas circunftan-
cias del miímo hecho ; como fe acomodó eñe hombre
tan repentinamente á un genero de vida en t o d o tan di-
verfo del que en tierra havia tenido ; como fe alimen-
taba en el Mar ; íi dormía algunos intervalos; h a ñ a q u a n -
to tiempo infria la falta de rcípiracion ; como fe evadía
de la voracidad de akninas beltias marinas , &c.
. . . . .
18 Si tuvicílemes alguna feña pofitiva de que el ca-
fo havia líelo miiagroío; por un camino , aunque no muí
real , muí trillado , evadiríamos todas ellas dificultades.
Recurrir en los embarazos ele la Philofophia al extraor-
dinario poder de la Deidad , es hacer lo que Alexandro,
cortar con el azero el nudo , que no puede defatar el dif-
curfo. L a voz que corrió por Efpaña , de que la infeli-
cidad del pobre Francifco provino ele una maldición de
fu madre , jullificaria dicho recurfo , íi fuefic verdade-
ra. Pero aquella voz fué hija de la ignorancia de los li-
mites , hafta donde puede eftenelerie la Naturaleza , y
del común prurito ele tocar á milagro en t o d o extraordi-
nario acontecimiento. T o d a s las Relaciones fidedignas,
que con mí diligencia, y la de mis Amigos he adquiri-
do , eftán conformes en que no huvo tal maldición , ni
otra circunftancia alguna por donde pueda colegirfe
que falio de los términos de natural
t i fuceffo.
*** ***
"^"•X-"^" ^"^"^
DrSCORSO OCTAVO.
§, I V .
19 A La verdad las Hiftorias (en quantó yo he
X \ leído) no nos ofrecen cafo parecido al
nueftro , exceptuando uno folo , y aun eífe no lo es fino
en parte. Eíte es el de aquel Siciliano , llamado vulgar-
mente de los fuyos Pe/ce (Jola (ello es el Pez. Nicolao) de.
quien dimos noticia paiiagera en el T o m o quinto , Dif-
curfo 6. n u m . 7 . y ahora daremos mas cumplida relación,
por hacer tanto á nueftro propoíito.
20 Efte Nicolao, nacido de padres humildes en la
Ciudad de C a t a n i a , por inclinación fe dio mucho def-
de niño al exercicio de nadar. El exercicio le moftró , y
al mifmo tiempo aumentó la nativa habilidad que tenia
para é l ; y la habilidad , y inclinación acompañadas de la
pobreza , fácilmente le induxeron á bufear en las aguas
arbitrio para vivir. Hallóle en la pefea de Oftras , y de
Coral. Continuando en efta efpeeie de grangeria, fe ha-
bituó tanto á la a g u a , que ya vivia algo violento en la
tierra. Domefticado con aquel feroz E l e m e n t o , igual-
mente fe recreaba en fus íerenidades , que deípreciaba
fus favores. C o n la mifma libertad navegaba el Mar in-
quieto que tranquilo. Apenas pez alguno con mas ofa-
dia penetraba fus profundos leños , ó con mas celeridad
corria fus efpacioías campañas. Deidad del piélago le
creeria la Gentilica fuperiticion. L o quezal principio fué
folo deleite , llegó á ier neceísidad. El dia que no entra-
ba en el agua , ientia tal anguftia , tal fatiga en el pecho,
que no podia Ibífcgar. Servia frequentemente de Correo
marítimo de unos Puertos á o t r o s , ó del Continente á las
Islas , haciéndole necellario , quando el Mar eftaba tan
procelofo , que no fe atrevían con él los Marineros. Su
continuación en cruzar t o d o s aquellos Mares le hizo co-
nocido de quantos por prolefsion exercitaban la Náuti-
ca fobre las collas de Sicilia , y de Ñapóles. N o fe con-
tentaba con las orillas ; comunmente fe engolfaba en
mucha a l t u r a , donde tal vez pallaba dias enteros. Quan-
Kk'2 do
?.6o E X A M E N P K I L O S O P H T C O , &c.
do veía tranlitar algún B a x é l , aunque fuellé á larga dis-
tancia , con velocifsimo curio fe arrojaba en fu fegui-
m i e n t o , halla abordarle ; entraba en é l , comía , y be-
b í a l o que le daban ; ofreciafe humana , y cortesanamen-
te á llevar noticias de los navegantes á qualcfquiera puer-
t o s , y lo executabacon puntualidad. D e allí partia á d i -
ferentes orillas á noticiar , en una á los padres , en otra
á la m u g e r , y hijos , en otra á los Amigos , en otra á los
dependientes de e ñ e , de a q u e l , y del o t r o navegante,
t o d o lo que eftos le encargaban. Conducía afsímifmo
qualefquiera c a r t a s , para lo qual andaba prevenido con
u n a b o l f a d e cuero bien guarnecida , y a j u i l a d a , p a r a que
no fe mojaflén.
21 Ais i vivía eñe racional Amphibio , hafta que fu
defdicha le hizo victima de N c p t u n o , á quien adoraba.
E l Rey Federico de Ñapóles , y Sicilia , b p o r hacer una
prueba relevante de la eftraña habilidad de N i c o l a o , ó
p o r una curiofidad philofophica de íaber la difpoíicion
del fuelo del Mar , en el litio donde ella aquel víolcn-
tiísimo remolino de las a g u a s , á quien la antigüedad
llamó Charybdis,fituado cerca del Cabo de Faro; le man-
d ó baxar á aquella cavernoia profundidad. Dificultan-
d o Nicolao la execucion , como quien conocia el monf-
truofo tamaño d e l r i e l g o , arrojó el Rey en el litio una
copa de oro , diciendole , que era luya , como la facaífe
de aquel abifmo. L a codicia excitó la audacia. Arrojó-
fe á la horrorofa profundidad , de donde defpues de paf-
fados cerca de tres quartos de hora ( que t o d o e ñ e tiem-
p o fué meneñer para b u í c a r l a copa en el marítimo labe-
rinto) íalió arriba con ella en la m a n ó . Informó al Rey
d e la difpcficion de aquellas cavernas , y de varios monf-
truos aquatiles , que fe anidaban en ellas ; en que acafo
excederla algo de la verdad , eñando cierto de que nin-:
gun teftigo de viña le havia de convencer de la menti-
ra. O fuellé que el Rey deíeaffe relación mas individual
de todas las particularidades, ó que Federico fuellé uno
de los muchos P r i n c i p e s , que faftidiados yá de los pla-
ceres c o m u n e s , folo encuentran lifonja fenfible al güi-
to?.
DISCURSO OCTAVO. %6t
"to , quando la habilidad del que los divierte viene fazo-,
nada con fu peligro , procuró empeñar á Nicolao á nue-
vo examen ; y hallándole mucho mas refiftente , que á'laí
primera vez , porque havia palpado la enormidad del
riefgo , aun mucho mayor del que antes havia concebid
do , no folo arrojó a l agua otra copa de o r o , mas tam-;
bien le moílró una bolfa llena de monedas del mifmo me-¡
t a l , aílegurandolc , que íi recobraba la fegunda copa , fe-i
ria dueño de ella , y del bolfillo. La defordenada an-¡
fia del oro , que para tantos mortales ha fido f a t a l , l o
fué también para el pobre Nicolao. Refuelto fe tiró á la
fegunda prella ; pero fué para no volver j a m á s , ni muer-
t o , ni vivo. Muerte , y fepultura encontró en una de
aquellas intrincadas cavernas ; quedando dudólo fi fe
metió incautamente en alguna eftrechéz donde no p u d o
manejarfe, ó í i , haviendo penetrado á algún enredofo
feno , no acertó con la falida , ó íi en fin fue aprefado por
alguna de las beflias marinas , que él mifmo havia dicho,
habitaban aquellas grutas.
2 2 Efte fuceífo concuerda con el nueílro en mucho
de lo que efte tiene de admirable , aunque no en t o d o . En
uno , y otro fe vé una violentifsima pafsion por la vida
a q u a t i l j i í n a fuerza, y habilidad extraordinaria para el
exercicio del nado ; y en fin la natural maravilla de paffar
muchas horas fin el ufo de la refpiracion. En nueílro ca-
fo fe "añade probablemente la falta de fueño , y cierta-
mente la privación de juicio. Difcurrirémos fobre t o d o s
cftos capitulos,
§• V.
^3 T¡¡' L primero apenas ofrece fobre que dificiil-
C tar. La pafsion por el exercicio de nadar,'
en los que han empezado á practicarle es comunifsima,
en algunos violenta , y mucho mas en aquellos que reco-
nocen en si miímos efpecial habilidad para dicho exer-j
clcio:
•mu
' l6z EX'AMEN PHIIOSOPHfCO,iS-:C.
§. V I .
25 T A fuerza , y habilidad de nueftros dos na-
dadores , aunque extraordinaria , no tiene
mucho de admirable , fupuefto fu mucho exercicio. Ale-
xandro de Alexandro refiere de otro nadador Napolita-
no , á quien él mifmo conoció , el qual con movimiento
continuado corria el efpacio de feis millas , que hai en-
tre la Isla E n a n a , y la Prochita en el Golfo de Ñapóles;
y tal vez fué , y volvió en el mifmo dia. Efto ferá increí-
ble a a l g u n o s ; pero es fácil hacerfelo creíble , folo con re-
prefentarles una cofa , que ellos ciertamente creen , efto
es , que un hombre , por robufto que fea , íi palfa una vi-
da quietifsima , y Sin exercicio alguno , mas que algunos
palios dentro de fu cafa , quando llegue el cafo de deter-
minarle á un paíleo largo , apenas puede andar un quar-
t o de legua fin grandíisima fatiga ; y al contrario otro
mucho menos robufto , pero muí exercitado en andar á
píe , camina feis , y ocho leguas de una tirada fin inco-
modarfe mucho. Confidercie ahora , que el exercicio de
los nadadores ordinarios viene á fer cali ninguno, reípec-
DISCURSO OCTAVO.
to de aquel que tiene uno , que dominado de una v i o -
lenta pafsíon goza de la diveríion del nado todos los
días, y todos los ratos que puede , y quiere. Afsi es v e -
riiimil, que aunque aquellos no puedan navegar fin in-
terrupción , mas que cincuenta , ó íefenta brazas de
agua,efte pueda difeurrir haítaSeis,6fiete millas.Añádale,
que acaro los nadadores infignes , de que hablamos , eran
dotados de gran robufiez nativa para t o d o genero de tra-
bajo corpóreo , lo que , concurriendo con fu mucho exer-
cicio , era capaz de hacerlos en la facilidad , y perfeve-
ranciade romper las aguas cafi iguales á ios Delfines.
- 5- V I L
16 "FT L capitulo d é l a falta de refpiracion es mas
JCZi diílcil. N o obftante, fobre efte punto re-
mitimos el LeAor á lo que hemos eferito , T o m o quin-
to , Diícurfo 6. nura. 7 . y 8 . donde verá como en varios
cafos , y por diferentes caulas pueden los hombres vivir
confiderablc tiempo fin refpirar. Alli diximos debaxo-
de la autoridad de Galeno , que la caufa por que en los
gravifsimos afectos hyftericos eítán ias mugeres mucho-
tiempo fin refpirar , es p o r q u e durante aquella efpecie de
dolencia, tienen el corazón mui refrigerado. Es el cafo,'
que en la Sentencia de Galeno , y común entre fus Secta-
rios , la refpiracion no es neceífaria en la vida de los
animales para otra cofa , que para templar el nimio ar-
dor del corazón , y la Sangre. En ella opinión Se puede
entender bien , que los que Se habitúan á vivir en el
agua , como los pezes por naturaleza , y los Buzos por
oficio, no neceSsiten de reSpirar tan Srequentemente , co-
mo los demás animales. El agua les refrigera ei corazón,
y la Sangre , con que Se Suple la falta del aire.
27 N o ignoro,que la Sentencia Galénica padece gra-
ves dificultades , y que oy es mas plaufible la que conf-
tituye neceflaria la.reípiracion, porque el nitro aereo , 6
eSpiritu nitrofo, que refide en el aire, conferve en Su flu-
jdbilidad, y movimiento la Sangre, la qual fin el Socorro
de
2¿4 EXA\:EM PKILOSOPHICO,
de cfte efpiritu animofo, ó animance , dicen los Autores
de efta fentcncia, fe coagularía. El Doctifsimo Martí-
nez, que en fu Anatomía campista ligue , y esfuerza c o -
piofamente ella opinión , explica fegun fus principios,
c o m o los buzos , y mucho mas los pezes carecen de la
necefsidad de la frequente refpiracion. Fuera de que
difeurriendo por o t r o camino del que ligue efte A u t o r , fe
podría fin violencia conjeturar, que en el Sal marino , b
aguas del mar hai o t r o efpiritu equivalente al nitrofo
aereo, y que firve de quid pro quo de aquel á los pezes,
y hombres, que frequentan mucho el piélago para el efec-
t o de impedir la coagulación de la fangre. Ais i , que en
todas fentencias fe puede explicar philofophicamente la
particularidad de nueftros dos grandes nadadores en paf-
far mucho tiempo fin el ufo de la refpiracion.
28 P e r o valga la verdad. La opinión moderna del
ufo de la refpiracion fe funda en bien falibles conjeturas,
y nada menos que la antigua es combatida de graves di-
ficultades. Algunas particulares , que me ocurren , p r o -
p o n d r é al Doctor Martincz ; no como quien le impugna
con fatisfaccion ; fino como quien le confulta con reve-
rencia ; que á hombre tan grande folo fe puede argüir
debaxo de efta falva. Efte efpiritu nitrofo aereo es en fu
fentencia tan fútil, que puede penetrar las mas duras fubf-
tancias; (pag. 3 32.) de donde infiere: Luego mas fácil-
mente penetrara las blandas membranas del pulmón, y va-
Jos capilares fuyos, &c. Y yo de aquel antecedente infie-
r o eítotra confequencia: Luego mas fácilmente pene-
trará los poros del cutis, y de arterias , y venas hafta co-
municarfe á la malfa Sanguinaria ; por configuiente, para
que el nitro aereo fe comunique á la fangre , y haga en
ella el efecto expreSfado, u o t r o qualquiera, no es necef-
faria la refpiracion, y afsi podrán t o d o s los animales vi-
vir fin ella. Infiero también , que, en cafo que fe quiera
decir, que no baila el nitro a e r e o , que entra por los po-
ros , antes fe necefsita m a y o r copia , y para lograrla es
precifa la refpiracion; ferá menor efta necefsidad en tiemn
p o calurofo, que en el frió. La razón e s , porque enton-
DISCURSO OCTAVO. Z6Z
ees eftán los poros mas abiertos , por coníiguiente entra
por ellos mayor cantidad de nitro aereo : luego ferá en-
tonces menos neceílaria, 6 menos frequente la refpira-
cion. Pero la experiencia mueílra diarnetralmtiite lo
opuefto, pues quanto es mayor el calor fenrimos mavor
neceísidad de reípirar, y relpiramos con mas frequencia.
Mas qnando fe halle algún arbitrio , para foftener que el
nitro aereo, no obitante fu gran futileza, no puede intro-
ducirle por los poros del ámbito del cuerpo , fe feguirá
por lo menos, que un hombre a quien fe haga alguna , 6
algunas llagas, y las conferve expueflas al ambiente , no
necefsitará de refpiracion. La razón es clara, porque en
las llagas encuentra el nitro aereo abiertos los vafos fan-
guinarios, por coníiguiente fe entrará por ellos como'
por fu cafa á comunicarte á la fangrc,y en mucho mayor
copia, que fe comunica por la refpiracion, quanto va de
entrarte por unas puertas abiertas de par en par , á trauf-
colarfe por unos angoftifsimos refquicios , quales fon
los poros de las membranas del pulmón. La ilación pa-
rece indefectible. Con todo no creo , que hombre algu-
no me conceda, que un llagado en la forma dicha pueda
pallar fin reípirar.
29 Finalmente en algunos afectos, en que la fangre fe
futiliza demafiado, de los quales yo he vifto uno bien fin-
guiar en eíte Colegio, en el P. Fr. N. de Cuebas, Hijo del
Monafterio de San Benito de Sahagun, al qual fe le liqui-:
do la fangre de modo , que no folo fe le derramaba por,
boca, narices, oídos, via anterior, y pofterior , mas aun
fe le vertia por el ámbito del cuerpo dividida en varias
góticas, que allomaban al cutis ; y por mi dictamen fue
íocorrido con todo genero de refrigerantes, hafta apli-:
carie copia de nieve por afuera en varias partes del cuer-:
po : digo que en tales afectos feria no folo inútil, mas
nociva la refpiracion, pues por medio del nitro aereo,
liquaria mas la fangre , lo qual feria agravar el afecto.
No necefsitandofe, pues, entonces dicho nitro para ha-
cer fluxible la fangre, quando ella lo eltá yá rnas de lo
que conviene, celTaria la refpiracion totalmente, porque
.. Tom.VL L1 ' la
zóó EXAMEN PHILOSOPHICO, ¿Ve.
lii naturaleza , que e v i t a c u i d a d o í a m c n t c . t o d a fuperflui-
d a d , ceíTando el fin celia en la o p e r a c i ó n . P e r o n i en el
afecto, que he d i c h o , cefso la refpiracion al e n f e r m o , ni
p i e n f o que ceílará en o t r o a l g u n o de eíia claffe.
30 M a s fea l o que fuere del fin , que hace neccílaria
la refpiracion (lo que para mi i n t e l i g e n c i a es u n o de l o s
myfterios, que tiene refervados en fu p r o f u n d o feno la
Naturaleza) para nueftro p r o p o f i t o baílanos faber, que el
ufo de ella n o es tan a b f o l u t a m e n t e indifpenfable , que
n o falte bailante t i e m p o en a l g u n o s l u g e t o s , e l l a d o s , y
circunftancias. N o refpiran, ó refpiran p o q t d f s i m o , c o -
m o ya h e m o s n o t a d o , las m u g e r e s en l o s extraordina-
r i o s afectos h y í l c r i c o s . L o m i f m o , c o m o a d v e r t i m o s en
el c i t a d o D i f c u r f o f e x t o del T o m o q u i n t o , fucede en
o t r o s graves afectos c o m u n e s á a m b o s f e x o s . N o refpi-
ran l o s infantes en el claufitro m a t e r n o , ni aun defpues
que falen de él, mientras eftán e m b u e l t o s en las fecundi-
n.as. D e aqui fe infiere c o n e v i d e n c i a , que hai en el te-
f o r o de la Naturaleza a l g u n o s f u p l e m e n t o s de la refpira-
c i o n . Q u i e n p o d r á aífegurar , que a l g u n o s h o m b r e s de
t e m p e r a m e n t o extraordinario n o t e n g a n en él u n o de
elfos f u p l e m e n t o s ?
31 P e r o el e x e m p l o que n o s hace mas al cafo , por
fer i d é n t i c o , es el de l o s B u z o s . E n e l l o s hai m u c h o m a s ,
y m e n o s ; y e n t i e n d o que el m a s , y m e n o s , p o r lo c o m ú n
d e p e n d e precitamente del m a y o r , y m e n o r u f o ; ó á lo
m e n o s el ufo hace en e l l o m u c h i f s i m o . L o s B u z o s O r i é n -
tales, que v i v e n de la pefea de las P e r l a s , fon l o s que mas
t i e m p o c o n t i n u a d o efián d e b a x o del agua. Se dice , que
hai entre ellos q u i e n e s refifien l a f u m e r f i o n mas de una
h o r a , y aun halla d o s . E í l o mal fe p u e d e atribuir al tem-
p e r a m e n t o , que influye el c l i m a , pues d e b a x o de climas
:
mui d i f u n t o s , y mui cufiantes hai en el Alia péfquerias de
perlas. Afsi el exceífo de aquellos b u z o s fobre l o s Euro-
> p e o s , f o l o fe puede verifimilmente difeurrir, qué proviene
• del m a y o r ufo de la fumerfion , porque aquellos la efián
e x e r c i c ñ d o c o n t i n u a m e n t e , y e l l o s f o l o en tal qual acci-
dente., 6 p o r l o m e n o s c o n m u c h o m e n o r frequéhcia.
DISCURSO OCTAVO. :.fi-
?2 P e r o en efto m i f m o hal c a b i m i e n t o á d o s d i f u n -
t o s diferirlos. El p r i m e r o , q u e el frequentado c o m e r c i o de
las aguas haga en fu t e m p e r a m e n t o alguna ¡inmutación,
coníiderabie, por la qual n o necefsitan de refpirar c o n t i -
nuadamente ; el l e g a n d o , que el m i f m o e x e r c i c i o repeti-
d o de c o n t e n e r la refpiracion los v a y a h a b i l i t a n d o m a s ,
V mas fucccfsivamente para contenerla p o r mas l a r g o
t i e m p o . Es b i e n v e r i í i m i l , que u n o , y o t r o p r i n c i p i o
concurren. P o r el primero hai una fundadifsima c o n j e -
tura p h i l o f o p h i c a . En el Difcurfo paitado v i m o s c o m o
fe han hallado animales marinos t o t a l m e n t e femejantes
al hombre en la o r g a n i z a c i ó n f e n í i b l e , p o r c o n f í g u i e n -
te d o t a d o s de l o s m i f m o s i n i t r u m e n t o s de la o r g a n i z a -
c i ó n : l u e g o el que aquellos palfalfen l a r g o s i n t e r v a l o s
fin refpirar, c o m o era precito , í i e n d o c o n t i n u o s h a b i t a -
dores del p i é l a g o , fe debe atribuir a un g e n e r o de t e m -
peramento,-que influyen las aguas , y por elfo es c o m ú n
el futrir la falta de refpiracion , o paitar c o n p o c a refpi-
racion, t o d o s l o s pezes. P o r el f e g u n d o e í t a un experi-
m e n t o del famofo B o y l e . Ette célebre Phyfico , h a v i e n d o
m e t i d o v i b o r a s , y o t r o s animalejos en la m a q u i n a p n e u -
mática, fué e x t r a h i e n d q el aire hafta el p u n t o de v e r l o s
agonizar por la falta de refpiracion. A f l o x b l u e g o la lia-,
v e , y d e x b entrar el aire hafta que fe recobraron perfec-
t a m e n t e . D e a l l i á p o c o v o l v i ó á extraher el a i r e / y m i -
:
repita el e x e r c i c i o . 3
*** '
L I 2 Í'.VILIÍ
z'6S EXAMEN PHILOSGPKICO,tkc,
§. V I I I .
33 T T A f t a aquí h e m o s difcurrido fohre l o qué
¿J. fué c o m ú n á l o s d o s n a d a d o r e s Efpañol, y
S i c i l i a n o . A h o r a entran las particularidades del Efpañol.
El nadador Siciliano o r d i n a r i a m e n t e pallaba las noches
en tierra, d o n d e repofaba c o m o l o s d e m á s h o m b r e s . El
E f p a ñ o l c o n t i n u a d a m e n t e , p o r cfpacio de q u a t r o , ó cin-
c o a ñ o s , h a b i t ó las o l a s , d o n d e n o parece p o d i a gozar el
beneficio del f u e ñ o .
34 A r i f t o t e l e s en el libro que eferibió de Somno , <&
Vigilia, afirma, que n i n g ú n animal puede v i v i r fin f u e -
ñ o , ó l o que es lo m i f m o , eftár perpetuamente v e l a n d o .
P e r o dexa en alguna d u d a , fi la generalidad de la exclu-
íiva mira á las efpecies f o l a m e n t e , ó t a m b i é n á l o s indi--'
y i d u o s , elfo e s , fi f o l o quiere decir, que n o hai efpecie al-
g u n a de a n i m a l e s , á quien n o fea natural el f u e ñ o , ó fi fe
e x t i e n d e á afirmar,que n i n g ú n i n d i v i d u o animal de qual-
quier efpecie que fea , puede pallar e n perpetua vigilia.
M a s p r e f e i n d i e n d o de efto, el que algunos h o m b r e s , por
cierta i n t e m p e r i e del celebro , paffaron m u c h o t i e m p o
fin d o r m i r , lo' teñifican varias hiftorias. Séneca refiere,
que M e c e n a s eftuvo fin d o r m i r tres años c o n t i n u o s . Fer-
n e l i o cuenta de un delirante, á quien d u r ó la v i g i l i a qua-
tro m e f e s . Y J u a n H e u r n i o , M e d i c o de L e i d e n , de o t r o ,
que fin delirio pafsó fin fueño a l g u n o , d i e z a ñ o s .
3 5 Supuefta la verdad de citas hiftorias, n o tiene di-
ficultad alguna, que nueftro Fratuifco de la Vega eftuvief-
fe fin d o r m i r l o s q u a t r o , ó c i n c o a ñ o s , que h a b i t ó el mar.
t a i n t e m p e r i e , que p a d e c i ó fu c e l e b r o , fué fin duda gran-
d e , pues le d e f o r d e n ó t a n extraordinariamente el juicio.
Q u é hai q u e admirar, p u e s , que velafle c o n t i n u a d o s qua-
t r o , ó c i n c o años?
•36 Etto es falvar el h e c h o p o r la parte que parece
m a s difícil: p u e s fi fe quiere d e c i r , que e n effe mifmo
t i e m p o t o m a b a algunas horas d e fueño e n n o m u i cufian-
tes i n t e r v a l o s , n o hai e n ello t r o p i e z o a l g u n o . Quien le
qui-
DISCURSO O C T A V O . z6y
quitaba retirarfe algunas n o c h e s á efta , o aquella orilla-
d e í p o b l a d a , de tantas c o m o baña el mar , y repofar en
ella las horas que neccfsitafle? A c a f o p o d r í a d o r m i r t a m -
bién en el m i f m o lecho del m a r , A r i l l o t e l e s en el lugar
c i t a d o a r r i b a , dónele c o n í l i t u y e el fueño p o r neceífario
á t o d o s l o s a n i m a l e s , expreífamente c o m p r e h e n d e en ef-
ta regla univerfal.á l o s pezes ,.y alega fobre ella fu p r o -
pria obfervacion •-. Pifces enim omnes , atque adeo , qu'i
Molles appellantur, dormiré obfervabimus. D e b e fuponer-
fe*. que para efto n o fe retiran á las riberas, ni fe c o l o c a n
fobre l o s efcolloSj.que eftán d o m i n a n t e s fobre las aguas,-
fino que en el m i f m o fuelo del mar repofan. P o r qué n o
p o d r í a h a c e r l o m i f m o quien eftaba h a b i t u a d o a,vivir e n
el m i f m o e l e m e n t o que l o s pezes ? P l i n i o fe n o s o p o n -
drá, a l e g a n d o , que n o fe puede dormir fin refpirar. Qjfis
enim fine refpiratione fomno locus>. dice l i b . <?. c a p . 7 . N i
hai que reconvenirle c o n que él m i f m o c o n c e d e , que l o s
p e z e s duermen , pues t a m b i é n afirma,, que- refpiran aun
c o l o c a d o s d e b a x o del agua ,. infinuando c o n bailante cla-
ridad la doctrina m i f m a , que liemos d a d o T o m o q u i n t o ,
difcurf.p. Parado-xa 8» Efta refpiracion , que l o s p e z e s
f u m e r g i d o s l o g r a n , es claro que n o l a p o d i a g o z a r nuef-
t r o nadante , p o r carecer de l o s inftrumentos , q u e para
ella tienen l o s p e z e s . Veafe el lugar c i t a d o d e nueílro
q u i n t o T o m o . P e r o á la verdad n o v e o y o , q u é c o n e x i ó n
t e n g a la refpiracion c o n el í u e ñ o , ni p o r qué un h o m b r e ,
que puede eftár e n el f o n d o del mar d o s horas fin refpi-
rar, n o p u e d a t a m b i é n fin refpirar d o r m i r allí o t r a t a n -
t o t i e m p o . L o s P h i l o f o p h o s , que i n q u i e r e n , qual fea la
caula p r ó x i m a d e l fueño ( p u n t o muí. d i f í c i l , y en que hai
harta variedad de o p i n i o n e s ) n o fe acuerdan jamás de
la refpiracion , ni c o m o c o m p r i n c i p i o , ni c o m o c o n d i -
c i ó n . D i g o , que e n n i n g u n a de las o p i n i o n e s , que hai f o -
bre ella materia,- entra d e algún m o d o en cuenta la ref-
p i r a c i o n . L u e g o es manifiefto que ningún P h i l o f o p h o
>
Acá-;
zjo E X A M E N PHILOSO.PHICO, & X .
57 A cafo nos opondría alguno la experiencia de
que quando dormimos reípiramos mas fuertemente, lo
que con evidencia mueílra que entonces fe infpira , y ex-
pira mayor copia de aire ; y de aqui pretenderá inferir
que hai mayor necefsídad de rcípirar, ó necefsidad de
reípirar mas en el fueño , que en la vigilia. Pero refporu
do , que el configuiente no fe infiere. Es verdad que en
cada refpiracion fe infpira, y expira mayor copia de ai-
re en el fueño , que en la vigilia ; pero ello fe compen-
facon que en la vigilia es mucho mas frequente la refpi-
racion , que en el fueño ; de modo , que velando fe exer-
citan dos rcfpiraciones en el efpacio de tiempo, que dur-¿
miendo fe exercita una , 6 mui poco menos.
§• I X .
38 T Legamos yá al capitulo de la privación de
| d juicio , en que no debemos detenernos por
lo que mira al accidente , tomado en general, el qual ve-
mos arribar á innumerables hombres,ypor diferentifsimas
caufas. Lo que tiene de particular en nueftro cafo , es
baftantemente notable , elfo es , la complicación de ef-
tragarfe enteramente las facultades mentales para unas
acciones , quedando fin lefion para otras. Elle hombre
obedecía con puntualidad, y acierto lo que le ordenaban,
padeciendo al mifmo tiempo una fatuidad, que llegaba
a infenfatez para todo lo que era obrar por dirección
propria. En la memoria no havia menos complicación,
que en el entendimiento. Acordabafe de los Lugares , de
los caminos , de las perfonas que havia comunicado an-
tes, y eílaba olvidado de .lo que era mucho mas difícil
olvidar , eílo es del ufo de las voces , y de folicitar aun
por feñas los alimentos necefiarios para fu confervacion,'
cofa que tienen prefente aun los brutos nías eftupidos , y,
para que baila aquella razón inferior , que conocemos
en ellos, y que. llaman Injlinto. los Philofophos Vul-j.
gares.
Pe-:
DISCURSO OCTAVO. 271
3 9 P e r o en la realidad no es efto tan particular , co-
m o parece á primera vifta. La parcial leíion del juicio fe
experimenta en algunos de aquellos locos , que los Médi-
cos llaman Melancólicos , y comunmente decimos maniá-
ticos ; los quales razonan cabalmente en unas materias , y
desbarran con fuma extravagancia en otras. D e laiefion
parcial de la memoria , también hai tal qual exemplo,
aunque mucho mas raro. Plinio (¡ib. 7 . cap. 24.) refiere
de uno , que herido de una piedra en la cabeza, fe olvi-
d o de las letras del Alphabeto , confervando la memoria
de todo lo demás , como antes. Materia es efta digna de
philofophar algo fobre ella , yá por la extrema dificultad,
que luego fe reprelénta , en averiguar en que coníifta una
complicación tan rara de memoria , y olvido , yá porque
n o se que Philofopho alguno haya tocado halla ahora
elle p u n t o .
40 Si contemplaíTemos el celebro , ó aquella parte
del celebro , donde fe exerce la facultad memorativa,
como un complexo de varios fcnos , en los quales eílán
diftribuidas las imágenes de los o b j e t o s , fácilmente fe
comprehenderia , como por varios accidentes fe pierda
la memoria de unos, quedando entera la de o t r o s . P o d r í a
(pongo por exemplo) el golpe de una piedra,ó una caída,
herir la cabeza en tal p a r t e , ó con tal dirección , que def-
barataííe precitamente el teño donde ella colocada la ima-
gen de tal objeto , por configuicnte fe perdería la memo-
ria de efle objeto , fin borrarfe la de otros. En efecto af-
íi conciben muchos que fe hace el depofito de las cfpe-
cies en la Memoria. Y o concederé fácilmente que efia
explicación no es mui p u n t u a l (y como en materia tan
incomprehenfible fe puede dar alguna que lo fea? ) pero
la tengo por verdadera en quanto al punto fubfiancial de
colocar las efpecies divididas entre si en el celebro, y eflb
baila para nueftro propoíito.
41 D i í c u r r o afsi: Eífas efpecies , ó imágenes , ó fon
-corpóreas , ó espirituales. Si corpóreas, ó fubftancias , ó
accidentes , qualquiera cofa que fe diga no pueden citar
dos colocadas en un mifmo lugar. N o , fiendo fubfian-.
cias,
27- E X A M E N P H I L O S Ó P H I C Q , 8cc.
cías ; p o r q u e eflb n o p u e d e fer fin penetración d e ' t i n a c o ' ^
o t r a , y la p e n e t r a c i ó n de d o s cuerpos es naturalmente
ínipofsible. T a m p o c o , fiendo accidentes ; p o r q u e efibs
accidentes f o l o fe p u e d e n diflinguir numéricamente , p u e s
aunque reprefenten diferentes o b j e t o s , c o n v i e n e n efpe-
e i f i c a , y e s e n c i a l m e n t e e í i e l m o c í o d e la reprefentacion,
c o m o p o r la m i f m a razón las efpecies q u e firven á la po- :
§• x.
44 T T O l v i e n d o de las efpeculacionés p h i l o f o p h i -
V cas á la fubftancia del h e c h o í o b r e que
caen ; e n o r d e n á una cofa , que dexada al diícurfo m e
parece p r o b l e m á t i c a , defearia y o nías puntuales n o t i c i a s .
En la R e l a c i ó n arriba inlérta le dice , que nueftro h o m -
bre , antes de fu v i d a náutica , g o z a b a el ufo regular d e
las facultades m e n t a l e s . Y c o m o quiera que e l l o fea v e r -
dad t o m a n d o el t i e m p o antecedente c o n alguna a m p l i -
tud , parece d i f í c i l , que quando fe arrojo al agua en la
ribera de V i i b a o para n o v o l v e r á tierra , n o tuvieíTe y a
el j u i c i o depravado : porque c o m o es creíble que un h o m -
bre , q u e eftaba en s i , le refolvieffe á t o m a r habitual-
mente un m o d o de vivir tan eftraño á aquel en que h a -
via l i d o e d u c a d o , y p o r coníiguiente tan v i o l e n t o ? E s
pofsiblc , q u e quien tiene el j u i c i o l a ñ o fe determine á
pallar fin v e l l i d o , fin l e c h o , fin c o m e r c i o a l g u n o c o n t o -
d o s l o s d e m á s h o m b r e s , á alimentarle f o l o de p e z e s cru-
d o s , y elfo c o n m i l p e l i g r o s , que á la consideración fe
ofrecen Cn l o s e n c u e n t r o s c o n varias bestias marinas?
45 Si a i efecto tenia yá perdido el j u i c i o q u a n d o
f o r m ó la resolución de v i v i r en el agua , m e i m a g i n o q u e
fu locura era de aquella efpecie , que l o s G r i e g o s llama-
í o n , y o y llaman t a m b i é n l o s L a t i n o s Lycantbropij, que
confifie en una efpccial lefion de la I m a g i n a t i v a , p o r la
qual l o s que la padecen fe juzgan c o n v e r t i d o s en a l g u -
na efpecie d e b r u t o s . L a v o z Lycantbropia primariamen-
te fe i n s t i t u y ó para lignificar aquella efpecial perturba-
ción del j u i c i o , p o r la qual l o s h o m b r e s fe imaginan c o n -
vertidos en Lobos , p o r íér ella la m a s frequente ; y c o m -
ponefe de las d o s v o c e s G r i e g a s , Lycos, y Anthropos , la
p r i m e r a , q u e significa Lobo , y l a f e g u n d a Hombre; pero
defpues fe h i z o c o m o genérica la v o z , para lignificar la
imaginada m u t a c i ó n en qualquiera efpecie bruta. L o s
que padecen t a n estrada d e m e n c i a , en t o d o procuran i m i -
Tom^VL " Mm tar,
274 EXAMEN PHUOSOPHTCO, & c .
tar las a c c i o n e s , y m o d o de vivir de aquellos b r u t o s , en
cuya efpecie fe juzgan c o m p r e h e n d i d o s . L o s que fe i m a -
ginan L o b o s , fe retiran á l o s m o n t e s , perfiguen l o s gana-
d o s , matan las relés , y las c o m e n crudas. L o s q u e fe
creen Perros ( c u y a p a f s i o n es llamada Cynmtbropia) la-
dran c o m o ellos , fe p o n e n á las puertas de las cafas , fe
tiran c o n anfia á l o s huellos , &c. D i g o , que razonable-
m e n t e fe puede conjeturar , que fi nueftro h o m b r e cita-
ba l o c o , q u a n d o fe d e t e r m i n ó á la v i d a a q u a t i l , p a d e -
cía eíta efpecie de d o l e n c i a , cito es , que i m a g i n a n d o -
fe P e z , fe r e í o l v i ó á vivir c o m o tal. N o m e acuerdo en
qué A u t o r M e d i c o lei de u n o que fe i m a g i n a b a A n -
guila.
4<5 M a s p o r otra parte , fi e ñ e h o m b r e antes de t i -
rarle al mar padecieíTe tal efpecie de locura, ú otra qual-
quiera, capaz ele precipitarle en tan extravagante defati-
n o , n o fe o m i t i r i a una circunftancia tan eíléncial en las
r e l a c i o n e s , q u e h e m o s a d q u i r i d o , las quales bien l e x o s de
elfo, eítán c o n f o r m e s en la integridad de iu j u i c i o en t o -
d o el t i e m p o antecedente á la fatal d e t e r m i n a c i ó n , fin e x -
c e p c i ó n , ó l i m i t a c i ó n alguna. N i á e l l o fe puede Satisfa-
cer d i c i e n d o , que las relaciones v i n i e r o n de fu Tierra,
d o n d e p u d o ignorarte, II en l o s d o s ú l t i m o s a ñ o s c o n -
f e r v ó el j u i c i o , p o r q u e en elle t i e m p o n o e í t u v o en fu
tierra, fino en V i l b a o aprendiendo el oficio de Carpinte-
r o . N o fatisface, d i g o , ella refpueíla , p o r q u e n o es creí-
b l e , que el Maeítro , c o n quien aprendía , n o dieíle noti-
cia á la madre , y hermanos de Francifco , de la funeíta
n o v e d a d de haver e ñ e p e r d i d o el j u i c i o , fi en realidad le
huvieife p e r d i d o ; y aun q u a n d o eita n o v e d a d acaecieiíe
u n o , ú d o s dias antes de arrojarfe al agua ; q u a n d o fe le
d i o á la madre avifo de fu creída m u e r t e , fe le darla tam-
bién de la caufa de e l l a , que era la pérdida del juicio.
Efto es tan n a t u r a l , que n o puede p o n e r l e duda en ello.
Añadafe , que fi el Ma eí t ro , y c o m p a ñ e r o s de Francifco
huvieífen advertido que citaba l o c o , le obfervarian con
mas cautela, ni aun le permitirían apartarte de la orilla.
D i f c u r r i r que en el m i f m o acto de bañarfe fe le pervir-
3
DISCURSO O C T A V O . 275
t í o la r a z ó n , feria extender la conjetura halla l o s últimos
t é r m i n o s de la p o í s i b i l i d a d .
47 Afsi t e n g o p o r m u c h o mas p r o b a b l e , que en el
difcurfo de t i e m p o que v i v i ó en el mar fe le fué fuccef-
fivamente eílragando la razón. En e l l o p u d i e r o n influir
varios c o m p r i n c i p i o s . E n primer lugar,el c o n t i n u o c o n -
tacto del agua marina es natural induxefle alguna grave
intemperie en fu celebro , que le dexalfe inútil para las
operaciones racionales. E n la agua marina hai que c o n -
fiderar tres distintas f u b í l a n c i a s ; la primera e s la agua
mifma , ó l o que es puramente a g u a ; la fegunda el Sal,
que cita m e z c l a d o c o n ella ; la tercera es otra Substancia
b i t u m i n o f a , ó fulfurea, que es l o que principalmente la
hace infalubre, y fétida. Afsi n o ella en la f a l , c o m o c o -
m u n m e n t e fe p i e n f a , l a dificultad de hacer p o t a b l e el a g u a
del mar, pues la fal fin dificultad , y c o n v a r i o s m e d i o s
fe fepara de ella ; fino en eftotra fubítancia b i t u m i n o f a ,
cuyas partículas eítáii tan enredadas c o n las de la agua,
que halla ahora n o fe halló m o d o de fepararlas e n t e r a -
mente : y haría un gran beneficio al m u n d o el que d e f c u -
bríeífe fecreto para l o g r a r l o . T o d o s ellos tres p r i n c i p i o s ,
de que confia la agua marina, p u d i e r o n inducir la i n t e m -
perie dicha, ó p o r l o m e n o s a l g u n o de e l l o s ; efpecial-
mente el tercero , c o m o mas eftraño al h o m b r e , pues el
fal, y el agua n o fon foraSteros de nueStro u f o .
• 4 8 E n f e g u n d o lugar el a l i m e n t o de pezes c r u d o s .
N o es dudable, q u e hai a l i m e n t o s n o c i v o s al celebro , y
algunos t a n t o , que d e f e o m p o n e n el j u i c i o . C o m e r u n a ,
u otra v e z pezes c r u d o s , es c i e r t o , que n o llega á caufar
tanto d a ñ o ; pero nada tiene de inverisímil , que l e caufe
fu c o n t i n u o u f o . Y q u a n d o e l l o n o , quien quita que ha-
ya alguna efpecie de p e z e s , que haga elle efecto , y que á
nueftro N a v e g a n t e obligatfe ó la n e c e f s i d a d , ó la cafuali-
dad á c o m e r algunas v e c e s l o s de efla efpecie.
49 E n tercer lugar la reparación de c o m e r c i o c o n
todos l o s racionales. N o hai facultad en el h o m b r e , que
110 fe habilite m a s c o n el exercicio , y que n o fe e n t o r -
pezca p o r la falta de él. L a acción de difeurrir es algo
Mm 2 ta-
ij6 EXAMEN PHIT.OSOPIITCO, tkc.
fatigante , c o m o qualquiera puede experimentar en sí
m i i m o . A l s i , ii fe hace reflexión fobre ello , fe hallará,
que apenas n o s p o n e m o s jamás á difeurrir, lino m o v i d o s
de alguna cfpccie de neceísidad , ú de interés. El preci-
i b c o m e r c i o con l o s demás h o m b r e s n o s o b l i g a á difeur-
rir, n o f o l o q u a n d o tratamos c o n ellos , mas t a m b i é n en
l o s i n t e r v a l o s , que n o t r a t a m o s , para obrar,y hablar c o n
a c i e r t o , q u a n d o llegue la o c a í i o n de tratar ; c o n acierto
d i g o , fegun los fines que cada uno t i e n e . A l s i m e ima-
g i n o , que u n o que fe reSoivicíle á v i v i r Siempre feparado
de t o d a fociedati humana , exercitaria p o q u i f s i m o el dif-
c u r i b . El difeurrir le coílaria alguna í a t i g a ; y nadie fe
fatiga fin el atractivo de alguna c o n v e n i e n c i a . Q u a n d o
m a s , ocuparla la razón en aquello p o c o , en que o c u p a la
fuya, tal qual ella e s , un bruto m o n t a r a z , cito es en p r o -
curarle el a l i m e n t o para fu c o n f e r v a c i o n ; y li elle le t u -
vieífe fiernpre á m a n o , c o m o nucitro h o m b r e en l o s pe-
z e s , ii o t r o que habitaife las felvas en frutas íilveílres , ni
aun en elfo la ocuparía. A f s i , d i c h o Solitario , entregan-
d o t o t a l m e n t e al o c i o la facultad diícuriiva , Solo daría
o c u p a c i ó n á la I m a g i n a t i v a , á quien Soltaría la rienda,
para que errante, fin o r d e n , fin c o n c i e r t o , fin dcíignio,
vaguealSe p o r t o d o s l o s o b j e t o s , que le prefentaíle la ca-
íualidad, p o r q u e en ello n o fe líente fatiga alguna. D e
e í l e exercicio de la i m a g i n a c i ó n , y o c i o del difcurfo,con-
t i n u a d o s p o r m u c h o t i e m p o , es natural refulte una ef-
traña confufion de ideas, que Sirva de grande embarazo
al ufo de la razón, y que c o n dificultad fe borre. Es ver-
d a d , que ella caufa fola n o bailarla para la d e m e n c i a , de
q u e t r a t a m o s , pues á depender ú n i c a m e n t e de efle prin-
c i p i o , p o c o á p o c o c o n el n u e v o c o m e r c i o c o n l o s Racio-
nales Se iría restituyendo á Su eílado natural el difeurfojy
confia, que nueflro h o m b r e l o s nueve a ñ o s que deSpues
e í l u v o en tierra fiernpre Se m a n t u v o en el m i f m o eiiatlo
de perturbación. ASsi Se debe c r e e r , que juntamente con
elle p r i n c i p i o concurrieron l o s a n t e c e d e n t e m e n t e expreSt
f a d o s , b por l o m e n o s a l g u n o de e l l o s .
ir. xi<
278 EXAMEN PHILOSOPHICO, & C .
§< X I .
51 T T E m o s difcurrido nafta aquí p h i l o f o p h i c a -
J _ J . m e n t e f o b r e t o d a s las circunftancias del
p e r e g r i n o fuceíTo de efte h o m b r e . A h o r a n o s refta d e d u -
cir de él algunas c o n f e q u e n c i a s conjeturales, que f o n re-
l a t i v a s á parte de l o s p u n t o s efléncialcs, que h e m o s tra-
t a d o en el D i f c u r f o a n t e c e d e n t e . Conjeturales d i g o , c o n
q u e fignifico, que n o p r o c e d o refolutoria, fino p r o b l e m a -
t i c a m e n t e , e n l o q u e v o i á p r o p o n e r . Es el a í l u m p t o m u i
d e l i c a d o , y el r u m b o p o r d o n d e ahora l l e v o el d i f c u r f o ,
m u i n u e v o , p a r a p o d e r , í i n n o t a de t e m e r i d a d , e m p e ñ a r m e
en una deciíion afirmativa.Afsi t o d o l o que p r u d e n t e m e n -
t e p u e d o , y d e l i b e r o hacer, es p r o p o n e r c o n indiferencia
m i s conjeturas á l o s D i f c r e t o s , para q u e las admitan , ó
r e p r u e b e n , fegun el d i c t a m e n q u e les parezca m a s acer-
tado.
52 E n el D i f c u r f o a n t e c e d e n t e h e m o s tratado de l o s
h o m b r e s m a r i n o s , y d e l o s que en la i s l a d e B o r n e o lla-
m a n h o m b r e s filveftres, 6 falvages , a p l i c á n d o n o s al f e n -
tir univerfal de que f o n v e r d a d e r o s b r u t o s l o s p r i m e r o s ,
y á la o p i n i ó n , í e g u n c o m u n e s p r i n c i p i o s , mas p r o b a b l e ,
de que t a m b i é n l o f o n l o s f e g u n d o s . A h o r a v e r e m o s c o -
m o el fuceíTo , q u e h e m o s referido , da bailante m o t i v o
para conjeturar, que u n o s , y o t r o s f o n v e r d a d e r o s h o m -
bres , de la m i f m a cfpecie q u e n o f o t r o s , y hijos de l o s
m i f m o s c o m u n e s padres. E m p e z e m o s p o r l o s h o m b r e s
m a r i n o s : e n t e n d i é n d o t e , que aqui h a b l a m o s , n o de aque-
l l o s , cuya figura es la m i t a d de h o m b r e , y la m i t a d de
p e z , á quienes d i m o s el n o m b r e de T r i t o n e s , fino de l o s
o t r o s , que en t o d o s fus m i e m b r o s i m i t a n perfectamente
l o s nueftros.
sj L a u n i f o r m i d a d en la configuración d e m i e m -
b r o s , es para t o d o s una prueba tan fegura d e uniformi-
d a d en la efpecie , q u e nadie hai q u e n o colija de la pri-
mera la f e g u n d a : de m o d o , q u e fi un E u r o p e o , trasla-
d a d o á u n a tierra i n c ó g n i t a , v i e n e allí u n animal feme-
jan-
DISCURSO SÉPTIMO. 279
jante en la configuración de t o d o s l o s m i e m b r o s á nuef-
tros c a b a l l o s , o t r o iemejante á nueítros p e r r o s , o t r o fe-
mejante á nueítros b u e y e s , afirmarla fin d u d a , q u e el
primero era C a b a l l o , el f e g u n d o P e r r o , el tercero B u e y .
Es v e r d a d , q u e la certeza de efta prueba d e b e c o n f i d e -
rarfe l i m i t a d a á l o s cafos , en que n o haya a l g u n a difi-
cultad t o t a l m e n t e infuperable , c o n t r a la conclufion q u e
fe d e d u c e en ella. Efta dificultad fe c r e y ó que la h a v i a ,
en que l o s h o m b r e s m a r i n o s fueffen v e r d a d e r o s h o m b r e s ,
porque nadie i m a g i n ó que aquellos animales n o fuellen
m a r i n o s en fu primero o r i g e n , efto es , cuya primera
creación fe havia h e c h o en las aguas , c o m o la de t o d o s
l o s d e m á s aquatiles. Siendo e l l o a f s i , n o p o d i a n fer def-
cendientes de A d á n : l u e g o ni v e r d a d e r o s h o m b r e s ; p u e s
n o s enfeña la r e , que t o d o s l o s que l o f o n d e f c i e n d e n d e
Adán : Omnes Hominss de folo, <&" ex térra, unde creatus
efi Adam. ( E c c l e f i a f t . c a p . j 3 . ) A u n q u a n d o á a l g u n o ocur-
rieife el p e n i a m i e n t o de ii era pofsible , ó n o , que a q u e -
llos aquatiles tuvieílen íu o r i g e n en nueítra m i f m a efpe-
cie , refolveria fin duda p o r parte de la impofsibilidadf
pues miraría c o m o u n a gran quimera , q u e algún h o m -
bre n a c i d o , y criado en la tierra , c o m o l o s d e m á s , q u i -
fieífe , ni pudielfe hacer m o r a d a perpetua en el M a r , c o -
m o los pezes.
54 Efta dificultad , q u e parecia i n f u p e r a b l e , y a fe
halla fuperada c o n el e x e m p l o de nueítro a q u a t i c o p e -
r e g r i n o ; c o n q u e fubíiíte t o d a la fuerza del a r g u m e n t o ,
t o m a d o de la u n i f o r m i d a d d e configuración en h o m b r e s
m a r i n o s , y terreitres. L o que h i z o el h o m b r e de Liér-
ganes, p u d i e r o n hacer en l o s S i g l o s anteriores o t r o s al-
g u n o s , n o l o lo h o m b r e s , m a s m u g e r e s , p u e s n o r e p u g -
na en a l g u n o s i n d i v i d u o s de eíte f e x o t o d a la fuerza , h a -
bilidad , i n c l i n a c i ó n , y e x e r c i c i o en el nado que tenia
nueítro h o m b r e . Y c o m o un h o m b r e , y una muger de
común acuerdo p u d i e r o n juntarle ( l o que p o r i n n u m e r a -
bles accidentes p o d i a fuceder)de eítos p o r varias f u c e f s i o -
nes p o d r í a n originarfe t o d o s l o s h o m b r e s , y mugeres m a -
rinas, que fe han vifto en d i f u n t a s partes d e l O c é a n o .
Di-
2So E X A M E N PHÍiosofHtco, Srtf;
5 5 Diíicultaráfe acato , c o m o fe p o d r í a cxercer den-
t r o de las aguas la o b r a de la generación , la del p a r t o ,
•y también la e d u c a c i ó n de l o s infantes. M a s en nada de
e l l o encuentro dificultad , que n o fea muí v e n c i b l e : pues
í b b r e que á t o d o s elfos oficios p o d i a n fervir varias 11-
-.letas d.-iiertas,}' las rocas m i f m a s , que f o n e í t o r v o á l o s
n a v e g a n t e s , y aun muchas orillas defpobladas , de u n o ,
y o t r o C o n t i n e n t e ; n o fe ofrece i m p o i s i b i l i d a d alguna,
en que las d o s primeras o p e r a c i o n e s le cxercieíién d e n -
t r o de las aguas ; y por l o que mira á la t e r c e r a , p o d r i a n
alternar padre , y madre el c u i d a d o de foftener al infan-
te f o b r e la fuperficie del agua el t i e m p o neceífario p a -
ra refpirar , nafta t a n t o que fe habilitalle para nadar c o -
rno e l l o s .
5(5 T a m b i é n m e perfilado á que el n o penfar nadie
en que l o s h o m b r e s m a r i n o s fuellen v e r d a d e r o s h o m -
bres , p r o v e n d r í a en parte de verlos n e g a d o s al ufo de
la l o c u c i ó n , y c o n p o c a s , 6 n i n g u n a s apariencias de ra-
c i o n a l i d a d : mas t a m b i é n ella dificultad queda perfecta-
m e n t e allanada c o n la experiencia d e l e m b r u t e c i m i e n t o ,
y carencia cali total del habla del h o m b r e de Liérganes.
E s de c r e e r , que eftando mas t i e m p o en el agua per-
diellé -el ufo , aun de aquellas p o c a s v o c e s , que fuera de
p r o p o í i t o articulaba. Áfsi fuputíta la uniformidad de
configuración de t o d o s l o s m i e m b r o s , que ateftiguan las
hiftorias , entre h o m b r e s m a r i n o s , y terreftres , t o d o
confpira á perfuadir , que aquellos f o n defeendientes de
e l l o s . Caben en la p o f s i b i l i d a d innumerables accidentes,
p o r l o s quales un h o m b r e , y una muger , ii a l g u n o s h o m -
bres , y mugeres fe entregaffen al m i f m o deftino que nuef-
t r o Francifco de la V e g a . Q u a n factible es que en uno,
ó m u c h o s lugares m a r í t i m o s haya en la a n t i g ü e d a d do-
m i n a d o á u n o , y o t r o f e x o una v i o l e n t a p a í s i o n por la
d i v e r l i o n del n a d o ? Puerta ella, el m u c h o exercicio , y la
e m u l a c i ó n de excederte u n o s á o t r o s habilitaría algunos
h o m b r e s , y mugeres halla aquel grado , en que conside-
r a m o s al Siciliano Nicolao , y al Efpañol Francifco. H a -
b i l i t a d o s de elle m o d o , qué i m p o f s i b i l i d a d , ni aun qué
D I S C U R S O OCTAVO'. o g /
Inverlfimilitud hai en que el amor loco de un hombre , y.
una muger, á quienes era impofsible lograr en la tierra
el apetecido contorció , los impelieífie á procurarte per-
petua compañía en la libre República de los Pezes ? Que
impoísibiiidad, ni aun qué inveriíimilitud hai en que mu-
chos hombres , y muchas mugeres de un Pueblo cóm-
plices en algún atroz delito , no hallando otro medio de
evitar la muerte merecida, recurrieífen al miímo afylo?,
A elle modo fe pueden diícurrir otros motivos. Acafo ia
fábula de los navegantes Tyrrhenos , transformados por
Baco en Delfines, tuvo fu origen de algún acaecimiento,
de elle genero.
57 £ 1 argumento tomado de la uniformidad de con-;
figuración queporsifolo es mui fuerte ,.adquiere mu,
5
§. X I I .
j9 T T A c e también lugar el cafo referido , para
j T j . que fean verdaderos hombres los Salva-
gés de la Isla de Borneo. Todo lo que fe reprefenta pa-
ra que no lo fean , es fu índole ferina , diminuta capaci-
dad , y falta de habla. Acafo ello ultimo es lo único que
los defacredita de Racionales: porque en el común fentir
el ufo de la locución fe reputa por carácter , que infali-
blemente diftingue al hombre del bruto. Pero fobrelo
Tom. VI. Nn. que;
EXAMEN P u a o s c p i n c O j & r c .
a u c en d D i f c u r l o paitado a l e g a m o s , d e q u e puede e n
una f a m i l i a , ó p r o i á p i a de R a c i o n a l e s e x t i n g u i r l e t o t a l -
m e n t e el ufo , é inteligencia de las p a l a b r a s , ahora fe
añade , para probar l o m i l m o por c a m i n o diferente , el
e x e m p l o del h o m b r e de L i é r g a n e s . Elle p e r d i ó la l o c u -
c i ó n , por haverfe e m b r u t e c i d o c o n la intemperie que
ocafionaron en fu celebro el E l e m e n t o del A g u a , y fuef-
traño m o d o de v i v i r , y de alimentarle. U n a v i d a total-
m e n t e felvatica , es p o c o m e n o s cftraña al h o m b r e , que
la aquatil. R i g e f e en ella en o r d e n a t o d a s fus o p e r a c i o -
nes de o t r o m o d o m u i d i v e r f o , aliméntale de o t r o m o -
d o , p í e n l a de o t r o m o d o . U n a defnudez c o n t i n u a junta
c o n efto , y c o n las inclemencias del aire , á que íiempre
.eftá e x p u c í l o , fe reprefenta i g u a l m e n t e p o d e r o f a , que la
v i d a a q u a t i i , para eftragar la t e m p e r i e de fu c e l e b r o .
L u e g o n o f o l o l o s hijos de aquellos p r i m e r o s , que f u p o -
n e m o s retirarte a l a s f e l v a s , pueden , en la forma que ex-
p u f i m o s en el Difcurfb pallado , carecer de la l o c u c i ó n ,
mas aun aquellos p r i m e r o s p u d i e r o n perderla embrute-
c i d o s , á influxo de la v i d a felvatica.
6o El gran D i c c i o n a r i o H i i l o r i c o n o s miniflra un
e x e m p l o eficacifsimo , en c o m p r o b a c i ó n de cite aífump-
t o . El a ñ o de 1661. u n o s Cazadores en las Selvas de L i -
thuania defeubrieron entre una tropa de O l i o s d o s n i ñ o s ,
c u y o c o l o r , y lineamenros en nada deídecian de huma-
n o s . A h u y e n t a d o s l o s OiTos , p u d i e r o n alcanzar fulamen-
te á u n o de l o s d o s n i ñ o s , dcfpues de bailante reniten-
cia que eíle h i z o , v a l i é n d o t e de u ñ a s , y d i e n t e s . Pre-
fentaronle al R e y de P o l o n i a . Era en t o d o perfectamen-
te p r o p o r c i o n a d o , el cutis e x t r e m a m e n t e b l a n c o , tam-
bién el cabello , el roítro h e r m o f o : afsi n o h u v o difi-
cultad en la refolucion de baptizarle ; en cuya fagrada
c e r e m o n i a fué Madrina tuya la Pveina , y P a d r i n o el Em-
baxador de Francia. P u l i é r o n l e el n o m b r e de J«fepb , y
p o r apellido TJrfino , en alufion á la crianza que havia te-
n i d o ; p e r o jamás d i ó m u e í t r a s de rener ufo de razón.
P o r mas c u i d a d o que fe pufo en fu e d u c a c i ó n , nunca pu-
d i e r o n domeiticarle e n t e r a m e n t e , n i enfeñarle á hablar,
bien
D I S C U R S O OCTAVO.-' 28/
bien que n o havia defecto alguno en la o r g a n i z a c i ó n d e
la l e n g u a . N u n c a p u d o íiifrir v e l l i d o , ni z a p a t o s . G o -
mia i g u a l m e n t e la carne cruda , que c o c i d a . A l g u n a s v e -
ces fe efcapaba á las S e l v a s , d o n d e , fe c o m p l a c í a en def-
pedazar c o n las uñas la corteza de l o s arboles , y chupar,
fu j u g o . Finalmente , t o d a s fus inclinaciones eran m o n -
tarazes ; y aunque fe h i z o efpecial eíludio de inílruirle
en las materias de R e l i g i ó n , n o d i o leña alguna de h a -
verfe l o g r a d o la inftruccion , falvo que q u a n d o fe iiorn-:
braba á D i o s , levantaba o j o s , y m a n o s al C i e l o ; l o que:
en n i n g ú n m o d o p o d í a tomarfe c o m o prueba de i n t e -
ligencia , pues también l o s b r u t o s fe habitúan á imitar
algunos m o v i m i e n t o s en que l o s i m p o n e n , al oír t a l e s ,
ó tales v o c e s . Representaba fer de n u e v e a ñ o s , q u a n d o
le c o g i e r o n .
61 N o es f á c i l , ni t a m p o c o i m p o r t a á nueftro pro-;
pofito adivinar por qué accidente fe criaron aquel n i ñ o ,
y fu c o m p a ñ e r o entre l o s O í l o s . L o que mas p r o m p t a -
mcnte fe ofrece al difcurfo es , que fueífen hijos del c o n -
c u b i t o de alguna infeliz muger c o n u n o de aquellos b r u -
t o s , de quien f o r p r e n d i d a , aunque al p r i n c i p i o p a d e -
c'icíTe v i o l e n t a el i n í u l t o , p u d o p e r d i d o s defpues el m i e -
do , y el horror , confentir muchas v e c e s , y p o r m u c h o
t i e m p o , voluntaria. T a m b i é n p u d o fer , que padre , y
madre fueífen de nueílra efpecie. E s harto factible , q u e
un h o m b r e , y una muger , h a v i e n d o c o m e t i d o algún gra-,
ve d e l i t o , fe refugiaífen á la afpereza de una montaña,;
haciendo en ella h a b i t a c i ó n de una g r u t a ; que allí v i v i e f -
fen algún t i e m p o , y procreaflen d o s hijos ; que e í l a n d o
eílos aun en la i n f a n c i a , a l g u n o , ó a l g u n o s Offos defn
pedazaífen á l o s padres , ó l o s obligaífen á huir precipí-,
tadamente de aquel afylo , de m o d o , que el terror no;
les permitieffe v o l v e r á un litio tan arriefgado para re-;
coger a fus hijuelos ; que l o s A n g e l e s C u í l o d i o s de eftos;
los prefervaílen de la crueldad de las fieras , y aun con;
oculto impulfo m o v i e í f e n á ellas á cuidar de ellos , y ali-
mentarlos : Si ya para u n o , y o t r o n o bailaban aquellos
rafgos de c o n o c i m i e n t o , y de b e n i g n a i n c l i n a c i ó n , que 1
284 E X A M E N P H T L O S O P H I C O , &c.
algunas v e c e s le han e x p e r i m e n t a d o aun en b r u t o s fe--
roces.
62 De qualquier m o d o que fuelTc , fe d e b e dar por
fentado , que el n i ñ o de que t r a t a m o s era de la c í p e c i e
h u m a n a . Su perfecta configuración quita t o d a duda ; af-
fi , c o m o n o la h u v o en baptizarle,, ni la hai jamás entre
l o s T h e o l o g o s en cafos femejantes. C o n t o d o , aquel
m u c h a c h o fe havia e m b r u t e c i d o halla el grado de distin-
guirte apenas , en la citupidez , inclinaciones , y costum-
bres de i o s m i f m o s O l i o s , entre quienes fe havia educa-
d o . A que fe debe atribuir cito ? N o d u d o que en orden
à i n c l i n a c i o n e s , y costumbres haria l o mas , b t o d o , el
e x e m p l o de lo que havia v i l l o executar à l o s Olfos , c u -
yas c f p e c i e s , á caufa de fu tierna e d a d , fe havian i m -
presto altamente en fu celebro : mas para la estupidez,
es precito hulear caufa , n o puramente i n t e n c i o n a l , c o -
m o la e x p r e f i a d a , fino rigurofamente phyíica. Y qual
otra fe puede difeurrir , fino la pervertida temperie del
celebro , contrahida p o r la irregularidad de la vida m o n -
taraz , t o t a l m e n t e contraria à la natural constitución del
hombre?
•6 3 A cite m o d o p u d i e r o n tener o r i g e n , y contraher
por las m i f m a s cautas fu citupidez , c o n d i c i ó n f e r i n a , y
carencia de l o c u c i ó n l o s h o m b r e s Salvages de la Isla de
B o r n e o . E n q u a n t o à otras particularidades de aquellos
Salvages , eíto e s , que tienen el cutis m u i b e l l o f o , elrof-
t r o t o í t a d o , y f o n m u c h o m a s fuertes , y ágiles que n o -
f o t r o s , nadie pienfo negará que t o d o eito fe ligue n a t u -
ral , y aun necelfariamente ala v i d a Selvatica.
64 E n efecto l o s b r u t o s m i f m o s , que por algún ac-
cidente paitan de d o m e f t i c o s á m o n t a r a z e s , adquieren tal
m u t a c i ó n , afsi en el cuerpo , c o m o en el a n i m o , que pa-
rece fe hacen d o s v e c e s b r u t o s , y apenas l o s reputarán
p o r h e r m a n o s en la cfpecie l o s que fe quedan Siempre
d o m e f t i c o s . S o n mas fieros , m a s e í t u p i d o s , mas lanu-
d o s , ò cerdofos , mas a g ü e s , y fuertes. S o n de la mifma
efpecie que l o s d o m e f t i c o s , y f e d e f v i a n t a n t o de ellos en
l a a p a r i e n c i a , q u a n t o l o s h o m b r e s Salvages de l o s que
DISCURSO OCTAVO. 285
y l v e n en fociedad p o l í t i c a . L u e g o de eftos fe debe , en
q u a n t o á la u n i f o r m i d a d de la efpecie , hacer el m i f m o
j u i c i o , que de a q u e l l o s . Y n o o m i t i r é que en efte p u n -
t o cita ciara , á favor de nuefitra conjetura , la autoridad
de Ariftoteles , el qual (Lib.i. de Partib. Animal, cap. 3 . )
defpues de fentenciar que es error reducir á diferentes
efpecics aquellos animales , que d e b a x o de un m i f m o
n o m b r e fe diitingucn p o r l o s atributos de u r b a n o s , 6
d e m e d í e o s , y filveftres : Atque ettam fylvejlris , urhani-
que ralione iia dividiré , quoi error eji ; dice , que de las
m i f m a s efpecics de t o d o s l o s animales domefticos fe e n -
cuentran o t r o s , que f o n filveftres , v entre ellos incluye
t a m b i é n á l o s h o m b r e s :. Cum omnia , qua urbana funi,
eadem fyluejiria quoqus reperiantur , ut bomines, equi,
boves , canes in térra Indica , fues , capra , oves. E n eftas
tierras n o c o n o c e m o s efpecie de animales , que fe d i v i -
da en d o m e f t i c o s , y montaraces , lino la del P u e r c o . E n
o t r a s R e g i o n e s hai m u c h a s , L o que puede caufar alguna
a d m i r a c i ó n es , que Ariftoteles tuvieílé n o t i c i a de l o s
h o m b r e s fylveftres. E n efecto la t u v o , y fu dictamen e s ,
que i o n de nuefitra mifma efpecie ; c o m o l o s P u e r c o s
m ó n t e l e s , l l a m a d o s c o m u n m e n t e Javalies , f o n de la mif-
m a efpecie de l o s d o m e í t i c o s .
65 A c a f o p o d r i a alargarle nuefitra conjetura hafta
aquella calta de M o n o s a g i i i f s i m o s , de que d i m o s n o t i -
c i a en el Difcurfio pallado , c i t a n d o á p l i n t o , que t u v o
relación de ellos , y al P a d r e L e C o m t e , que l o s v i o . Es
cierto que entre las varias d a l l e s de animales , c o m p r e -
h e n d i d o s tlebaxo del n o m b r e c o m ú n de M o n o s hai algu-
nas , en quienes refplandece una fagacidad tan exquiíi-
ta , una i m i t a c i ó n tan v i v a de la inteligencia , y aun de
las inclinaciones , y afectos h u m a n o s , que f o n nienefter
principios m a s f e g u r o s , que l o s de la c o m ú n P h i l o í b -
p h i a , para diílinguir fu racionalidad de la nuefitra. Es
g r a c i o l a á elle p r o p o í i t o la ilulion , ó patraña de un a n -
ciano M o r a b u t o ( Sacerdote , ó R e l i g i o f o M a h o m e t a n o )
que refiere el Padre Labat en fu n u e v a Predación de la
África O c c i d e n t a l , c o n ocafion de tratar de unos M o -
nos
z8o EXAMEN P H I L O S O P H I C O , & C .
nos fumamente aftutos, y m a l i g n o s , que hai en el P a í s de?
T u a b o . D i c h o M o r a b u r o , h a b l a n d o con un comercian-'
te E u r o p e o , le d i x o , c o n t o d a la íériedad , y magiilerio.
proprios de un h o m b r e perfectamente inltruido en la
hiitoria de aquellos M o n o s , que fu o r i g e n venia de un
P u e b l o Salvage , c u y o s m o r a d o r e s , en tuerza de andar
c o n t i n u a m e n t e expueftos al aire , y íobre l o s arboles , fe
havian i d o desfigurando halla parecerfe mas á las beftias,
que a l o s demás h o m b r e s ; pero fin perder cofa de fu a n -
tiguo, difeurfo. A n a d i a (efto es lo mas g r a c i o f o ) que en-:
tentlian mui bien ia L e n g u a dei Pais , y la hablarían per-f
l e d a m e n t e , li quiíieflcn ; pero d o l o í a m e n t e fingían no
entenderla , p o r q u e l o s Señores de los Lugares n o l o s hi--
cieíicn E l c l a v o s , y o b i i g a í k n a trabajar, ó l o s v e n d i c f -
fen para efte m i f m o fin á l o s N e g o c i a n t e s Francefes , y
por elío ufaban entre si de o t r o i d i o m a i n c ó g n i t o á l o s
habitantes de aquella tierra.
66 H e d i c h o que l o s p r i n c i p i o s de la c o m ú n Philo-:
fophia n o bailan para diftinguir la racionalidad de a l g u -
n o s M o n o s de la humana. L a razón es , p o r q u e la c o m u i l
P h i l o f o p h í a n o halla , ni fe halla m e d i o entre un i m p u l -
fo c i e g o , que llaman Lnftinto , y que de'ílina al m a n e -
j o de l o s brutos , y la perfecta racionalidad , ó difeurfo,
p r o p r i o del h o m b r e . P e r o es mas claro que la luz del
d í a , que un i m p u l f o c i e g o es infuficiente para i n n u m e -
rables o p e r a c i o n e s de l o s M o n o s , en quienes fe h a c e
evidente una deftreza , y fagacidad admirable ; c o n q u e
n o queda o t r o recurio , que atribuirles una perfecta ra-
cionalidad , igual á la del h o m b r e . M a s en nueftra p a r -
ticular P l i i l c í o p h i a n o hai cite e m b a r a z o , porque d a n d o
una racionalidad , ó difeurfo inferior á l o s b r u t o s , f e -
gun las l i m i t a c i o n e s que p r o p u í l m o s en el T o m o t e r c e -
ro , D i f e u r f o n o n o , queda c a m p o abierto para ampliar,
6 reftringir refpectlvamente cita r a c i o n a l i d a d en diferen-
tes efpccíes de brutos , fegun las m a y o r e s , ó m e n o r e s .
apariencias de induítria , que en ellas fe defeubren ; p e -
ro fin facarla jamás de la claífe en que la c o l o c a n aquellas
limitaciones.
Afsi¿
DISCURSO O C T A V O . 287
6j Afsi, por m u c h a que íea la fagacidací obfervada
e n algunas caitas de M o n o s , de n i n g ú n m o d o infiere por
si foia, ni aun conjeturalmente , que rengan fu o r i g e n en
nueítra efpecie. P e r o en l o s M o n o s , que v i b el Padre L e
C o m t e , íe añaden la femejanza de configuración á la
nueítra, y otras teñas, que en el D i f c u r f o antecedente he-
m o s i n f a m a d o . C o n r o d o d e b e m o s eftàr en que efien-
• cialmcnte fon verdaderos b r u t o s . L a razón es, p o r q u e fi
por e ita femejanza c o n el h o m b r e les dieílemos o r i g e n
en nueítra efpecie, p o r ley de buena confequencia d e b e -
ría eítenderfe ella n o b l e p r e r o g a t i v a aun à b r u t o s m u i
deffemejantes à n o f o t r o s , h a c i e n d o una p r o g r e l s i o n def-
cendente e n q u a n t o à la femejanza entre varias efpecies
d e b r u t o s . E x p l i c ó m e . Si aquellos M o n o s f o n de nuef-
tra efpecie por la femejanza que tienen c o n n o f o t r o s ,
ferán t a m b i é n de la efpecie de ellos o t r o s M o n o s , que
a u n q u e m e n o s lemejantes à n o í o t r o s que e l l o s , fon mas
•femejantes à e l l o s , que ellos à n o f o t r o s : L u e g o t a m b i é n
t i t a fegunda caita de M o n o s tendrá fu origen en la efpe-
cie humana, f u p o n i e n d o pertenecer à ella m i f m a efpecie
la primera caita de M o n o s . P a l l e m o s á otra tercera caf-
ra, c u y o s i n d i v i d u o s lean mui p a r e c i d o s à l o s fegundos.,
pero mas diferepantes de l o s h o m b r e s que l o s m i f m o s
f e g u n d o s . Saldrá en e í t o s la mifma c o n f e q u e n c i a ; y de
cite m o d o irà p r o c e d i e n d o la i l a c i ó n halla algunas efpe-
cies de b r u t o s , c o n quienes n o t e n g a m o s la m e n o r f e m e -
janza, ni en la figura , ni en i n c l i n a c i o n e s , ni en o p e r a -
ciones.
58 N o fe m e o c u l t a , que el m k m o a r g u m e n t o fe p o -
dría retorcer contra l o s Salvages de B o r n e o , ni t a m p o c o
me falta refpuefta para efta r e t o r í i o n . P e r o en una ma-
teria, que trato p r o b l e m a t i c a m e n t e , n o es meneíter apu-
rar halla fus ú l t i m o s t é r m i n o s la q u e í t i o n , en que feria
también inevitable el i n c o n v e n i e n t e de la p r o l i x i d a d .
Bailante h e m o s philofofado fobre la peregrina
hiftoria de nuettro N a d a d o r .
ADDI-
283 EXAMEN PHILOSOPHICO, & C .
A D D I GI O N.
6g A R r i b a fe d i x o , c o m o u n o de l o s f u g e t o s , quej
jTJL l l o s
certificaron de la hiftoria referida , fue
D o n Gafpar M e l c h o r de la R i b a A g ü e r o , Caballero del
H a b i t o de S a n t i a g o , el qual folicitado á r u e g o m í o p o r
fu Y e r n o , y mi A m i g o D . D i e g o A n t o n i o de la Gándara
Vclardc, rcíklcnte en eíla C i u d a d de O v i e d o , en algunas
cartas le aífeguró fer verdad l o que la v o z c o m ú n refería
del nadador de L i é r g a n e s , efpecificando juntamente una,:
u otra particularidad, c o m o quien le havia c o n o c i d o , y ¡
COTIA DE CJFITULO DE
Cartavejenta por Don Melchor (Cafpar de
la %iba dguero, a Don Diego Antonio de
¡apandara alarde, fu fecha en el Lugar,
de(j ajano a u.de
1
U^oviembro
9
Tom.VI. O o
•*po EXAMEN PHILOSOPHICO, &C.
le o y ó p r o n u n c i a r , Liérganes , de que fe t o m ó aflump-
„ t o para inquirir la lignificación de cita v o z ; y al fin e n -
t e n d i d a p o r un f u g e t o M o n t a ñ é s , affeguró que en fu
P a i s havia un L u g a r , que fe llamaba aísi, y que de ef-
t o daría razón m a s l e g i t i m a D o n D o m i n g o de la C a n -
55 t o l l a , M i n i í l r o de la Suprema I n q u i i i c i o n , p o r fer n a -
3, tural del p r o p r i o Lugar : c o n ella n o t i c i a eferibieron á
33 eñe C a b a l l e r o , y él á fu L u g a r , p r e g u n t a n d o , li faltaba
53 en él un m o z o de aquella edad, y feñas, y fe le respon-
35 d i ó que fi , y que podría fer hijo de Maria del Cafar,
i>v i u d a del referido Francifco de la V e g a . A n i m a d o c o n
33 eftas n o t i c i a s el Padre Frai Juan R o i e n d c , R e l i g i o f o
33 F r a n c i f c o , que havia v e n i d o p o c o antes de Terufalen á*
3 3dicha C i u d a d de Cádiz , r e f o l v i ó averiguar p o r si la
33 verdad ele cofa tan extraordinaria ; y c o n efecto par-
3 3t i ó c o n él defde d i c h o C o n v e n t o el c i t a d o a ñ o de 679*
33 y l l e g a n d o al m o n t e , que llaman ele la D e h e f a , un quar-
33
t o de legua antes de entrar en Liérganes , le hizo feña
pallarle adelante, y guiaffe , l o q u e e x e c u t ó ele fuerte,
33 que fin extraviar im palio , v i n o á meterfe en cafa d e
33 fu m a d r e , la q u a l , y o t r o s h e r m a n o s , que fe hallaron
33 prefentes, le c o n o c i e r o n l u e g o eme le v i e r o n , paitan-
33 d o á la d e m o n f l r a c i o n de abrazarle , que influye el ca-
33 riño defpues de una larga a u f e n c i a ; pero él fe m a n t u -
33 v o i m m o b i l , fin correfponder ni c o n palabras, ni c o n
feñas : l o s h e r m a n o s eran t r e s , de i o s quales el u n o Sa-
33
c e r d o t e l l a m a d o D . T h o m á s d e la V e g a , o t r o Tofcph,
93
y o t r o J u a n ; el Tofeph , p o c o t i e m p o antes n o t i c i o f o
33
33 de que fu h e r m a n o Francifco citaba en C á d i z , falió á
33 bufcarle , y n o fe ha f a b i d o m a s de él. En ella fizón
3 , citaba p r e d i c a n d o M i f s i o n en aquel Lugar Fr. D i e g o
„ de Santander, F r a n c i f c a n o , del S e m i n a r i o de Sahagun,
j , c o n c u y o m o t i v o havia m u c h o c o n c u r f o de g e n t e de
los L u g a r e s c o m a r c a n o s , y fe h i z o n o t o r i o en t o d o s el
c a f o , aunque o y han q u e d a d o p o c o s , que fe acuerden,
, , y puedan dar razón individual de e ñ e h o m b r e ; To le
„ vi muchas veces , c o n la ocafion ele q u e q u a n d o iba
5 , Santander, p o r la m a y o r parte entraba á c o m e r en efta
„ ca-
DISCURSO OCTAVO. 291
,, cafa, y afsl pude obfcrvarlc algunas particularidades.
,, El no folieitaba la c o m i d a ; pero fi fe la p o n í a n ciclan-
t e , ó li veja c o m e r , y fe lo permitían , c o m í a , y b e b i a
„ m u c h o de una v e z , y defpues en tres , ó quatro dias n o
,, v o l v i a á comer ; íu afsiftencia c o n t i n u a era en cafa d e
,, fu madre , y íi le m a n d a b a llevar alguna cofa á cafa d e
algún v e c i n o , iba , y la entregaba p u n t u a l m e n t e ; p e r o
,, iin hablar p a l a b r a , y la q u e m a s frequente fe le o í a
,, cvaTabaco, de que t o m a b a m u c h o , fi fe l o daban ; t a m -
,, bien p r o n u n c i a b a algunas v e c e s pan , vino, pero íi le
preguntaban li l o quería , n o refpondia , ni p o r feñas
5 , íignificaba, que fe l o dieifen ; de d o n d e fe pafsb á h a -
cer j u i c i o havia p e r d i d o la parte intelectual, q u e d a n d o -
le folo la que fe puede decir inftlntiva. Q u a n d o le v i
3, la primera v e z , y a n o tenia efeamas , aunque si la c u -
tis mui afpera, y las uñas muí g a l l a d a s ; aunque un a n -
j , ciano de aquel Lugar , h o m b r e de m u i buena r a z ó n ,
)> affegura, que q u a n d o v i n o fe le veían algunas efeamas
en eí p e c h o , y efpalda ; pero que l u e g o fe le fueron c a -
y e n d o . Iba á la Iglefia íi v e í a ir á o t r o s , ó fe l o m a n -
>> d a b a n , mas en el T e m p l o de nada hacia cafo , ni fe le
j , n o t a b a a t e n c i ó n alguna á la M i l l a , ni demás f u n c i o n e s
, Ecleíiafticas. E n una ocaíion , entre o t r a s , m e affegu-
5
Oo 2 „ por-
'fpí EXAMEN PHILOSOPHICÓV&C
, , p o r c i o n a l m e n t e en t o d a la cítructura de fus miembros,'
p e l o r o x o , y mui p a r e c i d o á fus h e r m a n o s , e x c e p t o al
„ Sacerdote, que era p e l i n e g r o ; de l o s quales f o l o v i v e
„ o y Juan, m a n t e n i e n d o f e del e x e r c i c i o de L a b r a d o r ; y
•„ aunque es h o m b r e mui d e v o t o , y v i r t u o f o , fíente con
e x t r e m o le t o q u e n la efpecie de eíle P h e n o m e n o , y
3 3 afsi nadie fe atreve á m e n c i o n a r l a en fu prefencia : E s
, c i e r t o fe d i v u l g o , que la madre de eíle h o m b r e le h a -
„ v i a e c h a d o una m a l d i c i ó n íiendo n i ñ o ; p e r o el referí-:
d o Sacerdote fu h e r m a n o m e d i x o algunas v e c e s , que
3 , fu madre lo n e g a b a , y me i n c l i n o á la v e r d a d de ella
„ m u g e r , p o r q u e la c o n o c í , y m e pareció manfa , y vir-:
3 , tuofa. El t i e m p o que fe m a n t u v o en Liérganes def-
„ p u e s que v i n o de Cádiz , n o le he p o d i d o indagar á
„ p u n t o fixo, pero p o r algunas p r o b a b l e s circunílancias:
c o m p u t o , que fué de n u e v e á diez a ñ o s , al cabo de.,
s i
I M PU NIDA D
DE LA MENTIRA.
D I S C U R S O IX,
§. I.
I O S errores c o m u n e s fe me préfentaii
en la materia de elle D i f c u r f o ; u n o
T h e o r i c o , o t r o P r a c t i c o . El T h e o -
rico es reputarte entre l o s h o m b r e s la
qualidad de m c n r i r o í o c o m o un v i c i o
d e ínfima, ó cafi Ínfima n o t a . S u p o n g o la divifion , q u e
hacen l o s T h e o l o g o s , de la mentira en oficióla , j c c o f a ,
y p e r n i c i o í a . S u p o n g o t a m b i é n , que la mentira p e r n i c i o -
fa cftá en la o p i n i ó n c o m ú n reputada p o r l o que es , y
padece t o d a la a b o m i n a c i ó n que merece ; de fuerte , q u e
l o s f u e e t o s , oue eftán n o t a d o s de i n c l i n a d o s á mentir en
d a ñ o del p r ó x i m o , generalmente i o n coníidcrados c o m o
peffes de la R e p ú b l i c a . M i reparo f o l o fe t e r m i n a a las
m e n t i r a s oficiólas , y j o c o i a s , eflo e s , aquellas en que n o
fe pretende el d a ñ o de tercero , si f o l o el deleite , 6 la
utilidad p i o p r i a , 6 agena. T a m b i é n a d v i e r t o , que t r a t o
efie p u n t o m a s c o m o P o l í t i c o , que c o m o T h e o i o g o M o -
ral. L o s T h e o l o g o s gradúan kis mentiras oficióla, y j o -
cofa de culpas v e n i a l e s . Y ni y o , conííderadas M o r a l m e n -
te.
2<>4 IMPUNIDAD D E LA M E N T I R A .
t e , p u e d o , ó d e b o denigrarlas m a s . Pero miradas á la
luz de la P o l í t i c a , j u z g o que la c o m a n o p i n i ó n cita n i -
m i a m e n t e i n d u l g e n t e c o n cita eipecie de v i c i o s .
2 En qué confute cita i n d u l g e n c i a nimia ? En que
n o fe tiene el mentir p o r afrenta. La n o t a de m e n t i r o f o
á nadie degrada de aquel h o n o r que por o t r o s refpetos
fe le d e b e . El C a b a l l e r o , por mas que m i e n t a , fe q u e d a
c o n la estimación de Caballero,el Grande con la de G r a n -
d e , el P r i n c i p e c o n la de P r i n c i p e . C o n t r a r i o m e pare-
ce e l l o á t o d a razón. El mentir es infamia , es r u i n d a d ,
es vileza. U n m e n t i r o f o es i n d i g n o de t o d a f o c i e d a d h u -
m a n a ; es un a l e v o f o que traidoramente fe a p r o v e c h a de
la fce de l o s d e m á s para e n g a ñ a r l o s . El c o m e r c i o mas
p r e c i o f o , que hai entre l o s h o m b r e s , es el de las almas:
efte fe hace p o r m e d i o de la c o n v e r f a c i o o , en que r e c i -
p r o c a m e n t e fe c o m u n i c a n l o s g é n e r o s mentales de las
tres p o t e n c i a s , l o s afectos de la v o l u n t a d , l o s d i c t á m e n e s
del e n t e n d i m i e n t o , las efpecie's de la m e m o r i a . Y qué es
u n m e n t i r o f o , fino un f o l e m n e t r a m p o f o de efte c í t i m a -
b i l i f s i m o c o m e r c i o ? U n e m b u s t e r o , que permuta i l u s i o -
nes a realidades? U n m o n e d e r o fallo , que paila el hierro
d e la m e n t i r a por o r o de la verdad? Q u é le falta p u e s a
efte h o m b r e para merecer que l o s d e m á s le d e f e a t t e n c o -
m o trasto vil de c o r r i l l o s , i m m u n d o enfuaciador de c o n -
y e r f a c i a n e s , y detestable falsario de noticias?
$• I - 1
3 T T N A monstruosa i n c o n f e q u e n c i a n o t o , que fe
V_y padece c o m u n i f s i m a m e n t e en efta materia.
Si á u n h o m b r e , que fe precia de fer a l g o , fe le dice en
l a cara que m i e n t e , l o reputa p o r gravifsima injuria , y
t a n t o , que fegun las crueles leyes de el h o n o r h u m a n o
q u e d a afrentado , fi n o t o m a tina fatisfaccion m u i san-
g r i e n t a . Q u i n e r a y o f a b e r , c o m o el decirle que miente
p u e d e fer gravifsima i n j u r i a , fi el m e n t i r n o es un g r a -
v i f s i m a defecto. O c o m o puede un h o m b r e quedar afren-
t a d o p o r q u e le d i g a n que m i e n t e , 11 la m i f m a acción de
men-
D I S C U R S O IX. 2^5
m e n t i r n o es afrentofa. L a ofenfa q u e fe c o m e t e i m p r o -
p e r a n d o un v i c i o , fe gradúa fegun la n o t a , que entre l o s
h o m b r e s padece elle v i c i o . Si el v i c i o n o es de la claífe
de a q u e l l o s , que defdoran el h o n o r , t a m p o c o fe iiente
el h o n o r h e r i d o , p o r q u e fe diga á un h o m b r e que le t i e -
ne. S i e n d o efta una v e r d a d tan n o t o r i a , l o q u e de la o b -
fervacion hecha infiero, e s , que la frequencia de m e n t i r
m i t i g o en el c o m ú n de l o s h o m b r e s el horror que la n a -
turaleza r a c i o n a l , confiderada p o r si fola, tiene á elle
v i c i o ; pero de m o d o , q u e , fin e m b a r g o , ha q u e d a d o en
el f o n d o del alma cierto confufo c o n o c i m i e n t o de q u e
el mentir es vileza.
4 Confirmafe ello c o n la reflexión de que el d e f d e -
cirfe ella r e p u t a d o en el m u n d o p o r o p r o b r i o . P o r q u é
ello? P o r q u e es confeSfar que a n t e c e d e n t e m e n t e fe h a
m e n t i d o . El o p r o b r i o n o p u e d e eílár en la verdad q u e
ahora fe conhclfa ; l u e g o confifte en la mentira q u e fe
d i x o antes. Confelfar que fe m i n t i ó es Sinceridad , y n a -
die fe avergüenza de fer fin c e r o . L u e g o t o d a la i g n o m i -
nia cae Sobre haver m e n t i d o . E l l o , d i g o , hace manifief-
t o , que en l o s h o m b r e s n o fe ha o b f e u r e c i d o de el t o -
d o aquel n a t i v o dictamen , que reprefenta la v i l e z a d e
la m e n t i r a .
§• I I I -
5 T 7 L error p r a c t i c a d o , que hai en efta m a t e r i a ,
es que la m e n t i r a n o fe c a í l i g u e , ni las l e y e s
preferiban pena para l o s m e n t i r o f o s . Q u e n o haya t r e -
n o a l g u n o que reprima la p r o p e n f i ó n q u e tienen l o s
h o m b r e s á engañarle u n o s á o t r o s ! Q u e m i e n t a cada u n o
q u a n t o q u i f i c r e , fin que ello le cucíle nada! N i aun fe
contentan l o s h o m b r e s c o n gozar una t o t a l i n d e m n i d a d
en m e n t i r . Muchas v e c e s iníultan á l o s p o b r e s que l o s
creyeron, h a c i e n d o gala de fu e m b u l l e , y tratando d e i m -
prudencia la Sinceridad agena. N o es. elle un deforden
a b o m i n a b l e , y d i g n o de caíligo?
6 D i r a f e m e , que las leyes h u m a n a s n o atienden a
pre-
•296 I M P U N I D A D D E LA M E N T I R A .
precaver c o n el m i e d o de la pena lino aquellas c u l p a s ,
q u e fon perjudiciales al p u b l i c o , o inducen d a ñ o de ter-
c e r o ; y las mentiras o f i c i ó l a s , y j o c o f a s (que es de las que
aqui fe trata) á nadie dañan, pues fi dañaílen, ya fe c o l o -
carían en la d a l l e de p e r n i c i o f a s .
7 C o n t r a efta refpuefta (por mas que ella parezca fo-i
lida) t e n g o d o s cofas muí n o t a b l e s que reponer. L a pri-
mera e s , q u e aunque cada mentira oficiofa,ó j o c o í a , confi-:
derada por si f o l a , á nadie daña, pero la i m p u n i d a d , y fre-
q u e n c i a c o n que fe m i e n t e o í i c i o f a , y j o c o f a m e n t e , e s m u í
dañofa al p u b l i c o , p o r q u e priva al c o m ú n de l o s h o m b r e s
de un b i e n m u í apreciabie. Para darme á e n t e n d e r , c o n -
t e m p l e m o s las i n c o m o d i d a d e s , que n o s o c a í i o n a "la def-
confianza que t e n e m o s de li es verdad , ó mentira l o que
fe n o s dice ; defconfianza c o m u n m e n t e precífa , y p r u -
d e n t e m e n t e fundada en la frcquencia c o n que fe m i e n t e .
A l oir una n o t i c i a , e n que fe p u e d e intercluir nueílro
g u f l o , ó c o n v e n i e n c i a , q u e d a m o s perplexos fobrc creer-
la, 6 n o c r e e r l a ; y efta perplexidad trahe configo una
molefta a g i t a c i ó n del e n t e n d i m i e n t o , en que el mal ave-:
n i d o configo m i f m o ,™y c o m o d i v i d i d o en d o s partes,
queftiona fobre fi debe preñar aííenfo , 6 diffeníb á la
n o t i c i a . Siguefe á e í l o fatigarnos en inquificiones , pre-
g u n t a n d o á eftos, y á l o s o t r o s para aífcgurarnos de la
Verdad. A l o s que fe aprovechan de las noticias que
o y e n , para efcribirlas, y publicarlas , en qué agonías n o
p o n e á cada paflb efta incertidumbrcí Quieren cnterarfe
de la realidad, de un fuceflb curiofo , y o p o r t u n o al af-
f u n t o fobre que trabajan , y apenas hacen m o v i m i e n t o
a l g u n o para el examen , d o n d e n o t e n g a n algún t r o p i e -
z o , Eftos fe l o afirman, aquellos fe l o niegan. A q u i fe lo
refieren de un m o d o , acullá de o t r o ; y entre t a n t o tiene
én una fufpenfion v i o l e n t a la p l u m a .
8 P e r o fi trahe eftos d a ñ o s la perplexidad en aífen-
t i r , aun f o n m a y o r e s l o s que fe figuen á la facilidad en
Creer. C o n t e m p l e f e , q u e las queftiones, p e n d e n c i a s , y dif-
•turbios, que haí en las c o n v e r f a c i o n e s , nacen por la ma-
y o r parte de efte p r i n c i p i o . N a c e n , d i g o , de las noticias
ne-
D I S C U R S O IX. 197
encontradas , que recibieron íbbre un írfifíno afíumpto
diferentes fugetos ; y por haverlas creído nielen defpues
altercar furioiamente,porfiando cada uno por foílener la
fuya como verdadera. Contémplete afsimifmo quantos
fe hacen irrifibles por haver creído lo que no debieran!
creer. Finalmente la fociedad humana, la cofa mas dul-,
ce que hai en la vida, 6 que lo feria, íi los hombres tra«¿
tallen verdad, fe hace ingrata,y defapacible á cada paito,,
por la reciproca defconfianza que introduce en los hom-j
bies la experiencia de lo mucho que fe miente.
9 Para comprehender quanto fea el bien de que nos
priva ella trille defconfianza , imaginemos una Repúbli-
ca, qual no la hai en el Mundo; una República digo,don-,
de, b porque fu generofo clima influye efpiritus mas no-
bles, b porque la mentira es caftigada con feverifsimas
penas, todos los individuos , que la componen, fon muí
veraces. Un cielo terreftre fe me reprefenta en efta di-»
chota República. Qué hermandad tan apacible reina en
ella! Qué dulce que es aquella confianza de el hombre
en el hombre, fabrofifsimo condimento del trato huma-
no! Qué grata aquella Satisfacción con que unos á otros
fe hablan, y fe efeuchan , fin el menor rezelo en aquellos
de no fer creídos , y en eftos de fer engañados! Allí fe
goza á cada palto el mas bello efpectaculo del Mundo,
viendo un hombre en otro abierto el theatro del alma.
No pienfo que el Cielo con todas fus luces , b la Prima-
vera con todas fus flores prefenten tan apetecido objeto
á los ojos, como el eme á la humana curiofidad ofrece
la variedad de juicios , afectos , y pafsiones de aquellos
con quienes fe trata. Todos viven allí en una apacible
tranquilidad , porque nadie teme que á favor de las Ara-
tes Politicas fe ingiera por amigo un alevofo : que la hy-:
pocrefia fe ufurpe una injuíla veneración : que el aplaufo
lleve embuelto el veneno de la lifonja , que el confejo
venga torcido hacia el interés de el que le miniílra, que
la corrección fea hija de la ira , y no del zelo. Pero po-
bres de nofotros! qué lexos eftamos de gozar la dicha
de aquellos felices Republicanos! Apenas nos dexan ua
Tom.VI. Pp
ts.9S I M P U N I D A D ' D E LA M E N T I R A " .
inflante de í b f s i e g o los r e m o r e s , las i n q u i e t u d e s , l o s ré-
z e l o s , c o n que c o n t i n u a m e n t e n o s aflige la experiencia
de la p o c a íñiceridad que hai en el M u n d o . V e a f e ahora
fi la frequencia de mentir n o s priva de un gran bien , 6
p o r mejor decir de m u c h i f s i m o s , y e f t i m a b i l i í s i m o s b i e -
nes.
§• IV.
.10 T O f e g u n d o que t e n g o que o p o n e r á la ref-
f __j pueíla de arriba, e s , que muchas v e c e s las
m e n t i r a s , que f o l o fe juzgan oficiofas , ó j o c o f a s , en el
efecto f o n p e r n i c i o l a s . Q u é i m p o r t a que la i n t e n c i ó n del
que m i e n t e n o fea dañar á nadie , fi efectivamente el da-
ñ o fe ligue? H a v i e n d o f e prefentado al Emperador T h c o -
dofio el S e g u n d o una m a n z a n a de peregrina m a g n i t u d ,
fe la d i o á la Emperatriz E u d o x i a , y ella á P a u l i n o , h o m -
bre d o ó t o , y d i f e r e t o , c u y a c o n v e r s a c i ó n frequentaba la
E m p e r a t r i z , que t a m b i é n era diferetifsima. P a u l i n o i g -
norante de qué m a n o havia paliado la manzana á la de
E u d o x i a , y íin que elia l o fupiefie, fe la e n t r e g o á T h e o -
dofio ; el qual a d v i r t i e n d o que era la m i f m a que él havia
d a d o á la Emperatriz , la p r e g u n t o difsimuladamente¿
q u e havia h e c h o de la manzana? Ella forprendida e n t o n -
ces de algún rezelo de que el E m p e r a d o r llevaffe mal el
que la huvieffe e n a g e n a d o , r c f p o n d i ó que la havia c o -
m i d o . Efta en la i n t e n c i ó n de E u d o x i a fué una mentira
p u r a m e n t e oficióla , pero en el efecto tan pernicioia, que
de ella fe figuió la muerte de P a u l i n o , p o r q u e T h e o d o l i o
e n t r a n d o en fofpecha de que fu c o m e r c i o c o n L s E m p e -
ratriz n o era mui p u r o , le h i z o quitar la v i d a .
• 11 H a v i e n d o Galigula l e v a n t a d o el deftierro á uno,
á q u i e n fe havia impuefto ella pena en el g o b i e r n o ante-
c e d e n t e , le p r e g u n t ó en qué fe o c u p a b a mientras clluvo
defterrado. El , p o r hacerfe m a s g r a t o al Emperador,
r e f p o n d i ó , que fu c o t i d i a n o exercicio era pedir á los
D i o f e s i l a muerte de T i b e r i o , y que él le fuccedieife en el
T r o n o . Qu¿.mentira, al parecer, mas inocente? Sin tm-
bar-
D I S C U R S O IX. 299
bargo en el efecto fué pernicioíifsíma : porque Caligula,
iníirlendo de aqui, que los que él havia deíterrado , del
mifmo modo pedían á los Diofes fu muerte , los mando
quitar la vida á todos.
12 Podría traher otros muchos exemplares al mif-
mo intento. Hagome cargo de que ellos fon unos acci-
dentes impreviítos. Pero las malas confequencias acci-:
dentales de las mentiras, que en particular no puede pre-
vcer el que miente, toca á la prudencia de el Legislador
preveerlas en general, y a fu providencia precaverlas
quanto eftá de lu parte , feñalando pena á la mentira de
qualquiera condición que fea. Por lo menos el motivo
de evitar eítos daños accidentales, coadyuva las demás
razones que feñalamos para caftígar á.los mentirofos.
§• v.
rj T C * principal es, que entre las mentiras , que
%_j palPan plaza de jocofas, ú oficiofas, hai mu-
chifslmas, que no folo por accidente, lino por fu natura-
leza mifma fon .nocivas. Tales fon todas las adulatorias.
Entre tantos apoplvchegmas,como fe leen fobre \z Adula*
clon , ninguno me parece mas hermofo que el de Bion,
uno de los líete Sabios, de Grecia. Preguntáronle -un dia,
qual animal era mas nocivo de todos? Refpondió, que
de los montaraces el'Tyrano : de ¡os domefticos el Adulador.
Es afsi, que lalifonja íiempre, 6 cali líempre hace nota-
ble daño al objeto que halaga. Los mifmos , que ferian
prudentes, apacibles, modeftos, íi no los incenfalfen con
indebidos aplaufbs, con eítos fe corrompen de tal mane-
ra, que fe hacen foberbios, temerarios , intolerables , ri-
diculos. No á un hombre .folo, á un Reino entero es Ca-
paz de deftruir una mentira adulatoria. Fatalidad es ef-
ta, que ha fucedido muchas.veces. Varios Principes al-
go tentados de la ambición, los qualcs, á no haver quien
les fomentalTe efta mala difpoíicion del animo, huvieran
vivido tranquilos , por perfuadirlos un adulador , que
fu mayor gloria coniiítia.en agregar á fu.Corona con las
Pp 2 ar«
"300 I M P U N I D A D D E LA M E N T I R A :
armas nuevos Dominios, fueron un azote Sangriento de;
fus fubditos, y de fus vecinos.
.14 El gran Luis Decimo quarto fue dotado fin du-:
da de excelentes qualidades , y tuvo baftantifsimo en-
tendimiento para conocer, que la mas folida , y verdade-
ra gloria de un Rey es hacer felices à fus vallados. Sin
embargo en la mayor parte de fu Reinado la Francia ef-¡
tuvo gimiendo debaxo del intolerable pefo de las con-:
tribuciones, que eran menefter para foftener los gallos
de tantas guerras, fobre tener que llorar la infinita fan-:
gre Francefa, que à cada paffio fe derramaba en las cam-;
« pañas.. De que nació etto, fino de que los aduladores le
perfuadian, que fu gloria mayor confiftia en enfanchar,
con las armas fus Dominios , y hacerte temer de todas
las Potencias confinantes? No folo elfo, mas aun le in-:
timaban, que con elfo mifmo hacia fu Reino bienaven-i
turado. Y aun llegó la fervil complacencia de algunj
Poeta à cantarle al oído, que no folo à fus Pueblos, mas
à los mifmos que conquiftaba hacia dichofos con las ca-í
denas, que echaba à fu libertad ; y lo que es mas que to-i
do, que folo los conquiftaba con el fin de hacerlos di-¿
chofos.
11 Regnepar amour dans les Villes conqutfes,
Et ne fall des fujets que pour les rendre beureux¿
§• VI.
te U e r a de la mentira adulatoria hai otras mu-i
,
chas, que p o r o t r o s c a m i n o s f o n n o c i v a s ,
'aunque fe juzgan c o l o c a d a s en las claffes de oficiofas, y.
^ocofas. M i e n t e un gallina hazañas proprias. U n o q u e
le efcucha, y le cree, procura ganarfele por a m i g o , p o r
tener un v a l e n t ó n á fu l a d o , que le faque á falvo de'
qualquier e m p e ñ o , y en eífa confianza fe m e t e en un pe-:
l i g r o , d o n d e perece. M i e n t e un i g n o r a n t e la p r e r o g a t i -
Ya de fabio entre n e c i o s , c o n q u e o y e n d o e l l o s q u a n t o
d i c e c o m o fentencias verdaderifsimas , llevan las cabe-
zas llenas de d e f a t i n o s , que v e r t i d o s en otras c o n v e r f a -
c i o n e s , les grangean al m o m e n t o la o p i n i ó n de m e n t e -
c a t o s . M i e n t e el defvalido el favor del p o d e r o f o , y n o
faltan quienes bufcandole c o m o ó r g a n o para fus c o n v e -
niencias,defperdician en él r e g a l o s , y f u m i f s i o n e s . M i e n -
te el hazañero efpiritual m i l a g r o s que v i o , ó experimen-;
t o de tal, ó tal Santo ; de que á la c o r t a , ó á la larga re-;
fulta ( c o m o p o n d e r a m o s en otra parte) n o leve detri-j
m e n t ó á la R e l i g i ó n . M i e n t e el M e d i c o la ciencia que'
n o tiene ; y el enfermo i n a d v e r t i d o , c r e y é n d o l e un E í c u -
l a p l o , fe entrega á o j o s cerrados á un h o m i c i d a . M i e n t e
el aprendiz de M a r i n e r o fu pericia n á u t i c a : fobre elfe f u -
puefto le fian la d i r e c c i ó n de un n a v i o , que viene á ha-
cerfe aftillas en un e f c o l l o . Efte m i f m o r i e f g o , m a y o r , ó
m e n o r , á p r o p o r c i ó n de la irw:eria que fe a v e n t u r a , le
hai
302 I M P U N I D A D DE. LA M E N T I R A .
h a i en l o s profcflfores de t o d a s las Artos, q u e , íiendo i m -
p e r i t o s , fe v e n d e n p o r d o c t o s . N o acabaría jamás, (i qui-
íieífe enumerar t o d a s las efpecies de m e n t i r a s , que deba-,
x o de la capa de oficiofas, ó j o c o f a s , i o n n o c i v a s .
§• VIL
I
7 " \ /F^ n o
P ^ dexar de hacer mu i l é ñ a l a -
u e c 0
IVJL da m e m o r i a de cierta d a l l e de m e n t i r a s ,
que g o z a n a m p l i f s i m o falvo c o n d u c t o en el m u n d o , c o -
m o li fuellen t o t a l m e n t e i n o c e n t e s , íiendo aísi, que i o n
e x t r e m a m e n t e dañofas al p u b l i c o . H a b l o de las mentiras
j u d i c i a l e s : aquellas, c o n q u e , q u a n d o fe hace á los j u e c e s
relación de el h e c h o , que dá materia al l i t i g i o , fe desfi-
gura en a l g o , p o r pintarle favorable á la parte p o r q u i e n
fe hace la r e l a c i ó n . Ellas mentiras f o n tan írequentes,
que.apenas fe vé c a f o , en que las d o s partes o p u e í l a s
c o n v e n g a n en t o d a s las circunílancias. D e aqui v i e n e
hacerle precifa la p r o l i x i d a d de las i n f o r m a c i o n e s , en
q u e confute t o d a la d e t e n c i ó n de l o s p l e i t o s , y la m a -
y o r parte de fus g a l l o s . Q u i e n n o c o n o c e , que en c i t o
p a d e c e un g r a v i f s i m o d e t r i m e n t o la República? Sin e m -
b a r g o nadie aplica la m a n o al r e m e d i o . P e r o c o m o fe
p u e d e remediar? P l a c i e n d o l o que fe hace en el j a p ó n .
E n t r e a q u e l l o s I n f u l a n o s , c u y o g o b i e r n o p o l í t i c o excede
fin d u d a en m u c h a s partes al nueitro , fe caftiga fevera-
m e n t e qualquiera m e n t i r a proferida en j u i c i o . L o p r o -
p r i o paila entre l o s A r g e l i n o s . Qualquiera que miente
en prefencia del B e y , ó d e m a n d a n d o lo que n o le le debe,
ó n e g a n d o l o eme d e b e , e s maltratado rigurofifsimamente
c o n a l g u n o s centenares de p a l o s . Afsi las canias fe expi-
den p r o n t a , y f e g u r a m e n t e fin eteribir ni un r e n g l ó n , p o r -
q u e de m i e d o de tan grave pena apenas fucede jamás,que
a l g u n o pida l o que n o fe le d e b e , ó niegue lo que d e b e . Si
fe hicieffe acá lo mifino,ferian b r e v i f s i m o s los pleito.s,co-
m o allá l o f o n . L o que detiene l o s l i t i g i o s n o e s la necef-
fid.td de bulcar el derecho en l o s C ó d i g o s , fino la de in-
quirir el h e c h o en l o s t e í t i g o s . Si atsi la P a r t e , c o m o fu
Pro
DISCURSO IX. 303
P r o c u r a d o r , y A b o g a d o , eftuvielíeii c i e r t o s de que c o -
g i é n d o l o s l o s j u e c e s en alguna m e n t i r a , la haviau de pa-
gar á mas alto p r e c i o que vale la caula que fe l i t i g a , n o
reprefentarian lino la verdad defnuda. D e e ñ e m o d o
c o n v e n i d a s las partes defde el p r i n c i p i o en q u a n t o al
h e c h o , n o reñaria que hacer mas que examinar p o r l o s
P r i n c i p i o s c o m u n e s el D e r e c h o , en que c o m u n m e n t e fe
tarda p o q u i f s i m o . A f s i l o s J u e c e s tendrían m u c h o m a s
t i e m p o para eftudiar, y vivirían m a s d e f c a n f a d o s : e v i t a -
rianfe t o d o s , ó cali t o d o s l o s p l e i t o s , que fe fundan e n
relaciones fmieftras. Las partes confumirian m e n o s t i e m -
p o , y m e n o s d i n e r o . L a R e p ú b l i c a en general fe interef-
faria en el t r a b a j o , que pierden m u c h o s profelfores de
las Artes lucrofas, por eftar d e t e n i d o s m e f e s , y a ñ o s e n -
t e r o s á las puertas de l o s T r i b u n a l e s . T o d a la pérdida
caería fobre A b o g a d o s , P r o c u r a d o r e s , y E f c r i b a n o s : p e -
ro aun la pérdida de eftos v e n d r í a á íér g a n a n c i a para
el p u b l i c o , porque m i n o r á n d o l e el n u m e r o de ellos , fe
aumentaría el de l o s profeflbres de las Artes mas ú t i l e s .
18 N u e ñ r a s L e y e s á la v e r d a d n o fueron tan omíf-'
fas en efta parte, que n o hayan feñalado refpeétivamente
á varios cafos algunas penas á las mentiras judiciales.
P a r e c e m e admirable aquella de la P a r t i d a 3 . tic. 3 . parti-
da 3 . Negando el demandado alguna cofa enjuicio, que
otro le demandajfe por fuya, diciendo que non era tenedor
de ella,fi dcfpues de effole fueffe probado , que la tenia,
debe entregar al demandador la. tenencia de aquella cofa,
maguer el que la pide non proba/fe que era fuya. Pero
quinera y o l o p r i m e r o , que aísi efta l e y , c o m o otras fe-
mejantes fe eftendíeífen á mas cafos que l o s que feña-
lan, ó p o r mejor decir, á t o d o s ; de fuerte , que n i n g u n a
mentira judicial quedaííc fin caftigo correfpondtcnte. L o
f e g u n d o , que a l g u n o s A u t o r e s n o huvieflen eñrcchado
con tantas l i m i t a c i o n e s ellas mifmas L e y e s : pues es de
difeurrir, que de aquí viene en gran parte el que nunca,
6 rarifsima v e z fe v e a cañigar a nadie p o r e ñ e d e l i t o .
Y o á lo m e n o s n o lo he o í d o jamas. L o s mas de l o s J u e -
ces, por p o c a p r o b a b i l i d a d que hallen á favor de la cie-
rnen-
304 IMPUNIDAD DE LA M E N T I R A .
m e n c i a , fe arriman á ella. P e r o n o tiene d u d a , p o r l o
que h e m o s d i c h o , que i m p o r t a infinito al p u b l i c o , que,
en efta materia fe p r o c e d a c o n bailante fevcridad,
§. VIH.
19 T ^ I n a l m e n t e c o n t e m p l a n d o en t o d a fu a m p l i -
t u d la mentira , la hallo tan i n c o m m o d a á
la v i d a del h o m b r e , que m e parece debiera t o d o el r i g o r
de las leyes conjurarte contra ella, c o m o contra una ene-i
m i g a moleftifsima de la humana f o c i e d a d . Z o r o a f t r o ,
aquel f a m o f o L e g i s l a d o r de l o s P e r f a s , b Zerdufcbt, q u e
fue fu verdadero n o m b r e , fcgun el Erudito T h o m á s Hy-i
d e , de quien fe aparta p o c o T h o m á s Stanley , l l a m á n d o -
le Zaraduifsit (pues el de Zoroaftro fué alteración hecha
p o r l o s G r i e g o s para a c o m o d a r el n o m b r e á fu i d i o m a )
e n l o s Eftatutos, que f o r m ó para aquella N a c i ó n , g r a d u ó
la mentira p o r u n o de l o s mas graves c r í m e n e s , q u e p u e -
d e n c o m e t e r l o s h o m b r e s . CcmfieíTo , que erró c o m o
T h e o l o g o ; pero p r o c e d i ó c o m o fagaz P o l í t i c o : p o r q u e
para hacer feliz una R e p ú b l i c a , n o hai m e d i o m a s o p o r -
t u n o que el introducir en ella un gran h o r r o r á la m e n -
tira. Y al c o n t r a r i o , fi la gran p r o p e n í i o n que tienen l o s
h o m b r e s á m e n t i r n o fe ataja , p o r tantas , y juilas q u e
fean t o d a s las d e m á s l e y e s , n o fe evitarán innumerables,
defordenes.
•§. i x .
'26 O O l o e n u n a c i r c u n f t a n c í a j u z g o ala mentira
tolerable ; y es q u a n d o n o fe encuentra
o t r o arbitrio para repeler la invaíion de la injuila pef-
quifa de algún f e c r e t o . P r o p o n g o el cafo ele elle m o d o .
U n A m i g o m i ó , c o n el m o t i v o de p e d i r m e confejo , me
fió un d e l i t o t u y o . L l e g a á fofpccharlo una perfona p o -
derofa, y ufando injuftamente de la autoridad , que le dá
fu p o d e r , me p r e g u n t a fi sé que F u l a n o c o m e t i ó tal de-
l i t o . S u p o n g o , que es f u g e t o tan a d v e r t i d o , que n o fir-
ven
DISCURSO IX. joj
v e n para deslumhrarle algunas evafiones, q u e , fin negar,
ni confeííar, pueden difeurrirfe; antes , n e g á n d o m e á dar
refpueíla p o í i t i v a , hará juicio d e t e r m i n a d o de que el d e -
l i t o fe c o m e t i ó verdaderamente : c o n q u e es precifo ref-
ponder abiertamente fi , ó n o , y él m e infla fobre e l l o .
E s c i e r t o , que e i l o i o b l i g a d o por las leyes de la a m i í t a d .
de la lealtad, de la caridad, y de la juílicia á n o revelar e l
fecreto c o n f i a d o . Que he de hacer en tal aprieto?
2i N o faltan T í i e o l o g o s , que equiparando elle ca-¡
f o , y o t r o s femejantes (en que para el alfumpto de la d u -
da lo m i f m o tiene el fecreto p r o p r i o , que el a g e n o , c o -
m o fea de grave i m p o r t a n c i a , y haya d e r e c h o , y o b l i g a -
c i ó n á guardarle) al de el ligilo Sacramental, c o n un mif-
m o arbitrio refuelven una , y otra q u e í i i o n . D i c e n , que
preguntado en la torma arriba expreífada, p u e d o , y d e b o
refponder r e d o n d a m e n t e , que n o sé tal c o f a , ni ha lle-
g a d o á mi noticia. P e r o c o m o ? Es l i c i t o mentir en elle
cafo? N o por c i e r t o , ni en elle, ni en o t r o a l g u n o . Pues
fi y o sé, que Fulano c o m e t i ó tal d e l i t o , c o m o p u e d e exi-
mirfe de fer mentira el decir que n o l o s é ? R e f p o n d e n ,
que en tales cafos fe profieren las v o c e s , de que confia la
refpueíla, f o l o m a t e r i a l m e n t e , y deíhudas de t o d a lignifi-
c a c i ó n . P e r o tiene el que refponde autoridad para q u i -
tar fu propria lignificación á las voces? Confieílan que
n o . P e r o d i c e n , que en tales cafos eílá quitada por un
c o n f e n t i m i e n t o t á c i t o de l o s h o m b r e s ; ó p o r q u e la v i r -
tud Significativa de las v o c e s depende de la v o l u n t a d d e
el que las i n í l i t u y ó para Significar tal, y tal cofa, y n o es
creíble, que el que las i n í l i t u y ó quifieífe, que en tales c a -
fos fignificaíTén aquello que el que refponde tiene en la
mente, p o r q u e ella feria una v o l u n t a d iniqua ; ó en fin,
porque para dar v i r t u d fignificativa a l a s v o c e s , es m e -
ncíler, demás de la v o l u n t a d de el que las inílituye , la
aprobación, y c o n f e n t i m i e n t o de la R e p ú b l i c a , el que no,
puede prefumirfe respectivamente á tales cafos.
22 Eíta d o c t r i n a , que el Siglo paífado havia eftam-
pado el Cardenal P a l a v i c i n o , figuió,y esforzó p o c o s a ñ o s
ha el Padre Carlos A m b r o l l o C a t a n e o , d o c t o Jefuita Ita-
Tom. VI. Q¿1 " U;Ví
^o5- I M P U N I D A D D E LA M E N T I R A .
l i a n o , y aunque fe le o p i n o c o n t o d a s f u s fuerzas el P.,
M . Fr. J o í é p h Aguftin Oríi , D o m i n i c a n o , d e la m i f m a
N a c i ó n , en diferentes efcritos , á t o d o s e l l o s fué refpón- f
03 2 chis-
3 o8
* ***************** *
J^g, * * * * * * * * * * * * * * * * * * * ígfj
C H I S T E S
DE N.
D I S C U R S O X.
§• i.
L defeo de agradar en las converfiM
ciones es una goloíina, caí! común a
todos los hombres; y efta goloíina es
raíz fecunda de innumetables mentí-.
ras. Todo lo exquifito es cebo de los
"oyentes; y como lo exquifito no fe encuentra a cada
paflb, á cada paflb fe finge. De aquí vienen tanta copia
de milagros, tantas apariciones de difuntos, tantos fan-
tasmas, 6 Duendes, tantos portentos de la Mágica, tan-
tas maravillas de la Naturaleza. En fin , todo lo extra-
ordinario fe ha hecho ordinarifsimo en la creencia del
Vulgo, por el hipo que tienen los hombres de hacerfe
fpectables, vertiendo en los corrillos cofas prodigiofas.
2 Pero no folo la producción de infinitas fábulas
viene de efta raíz viciofa, mas también la alteración de
infinitas verdades, aáadiendoles circunftancias fabulofas.
L a que mas ordinariamente fe practica, es la translación
,de dichos, y hechos de una perfona á otra, de una Re-
gión,
D I S C U R S O X. 309
glon á o t r a , y de un tiempo á otro. Como los afeólos
humanos fe intereiTan fiempre algo en todo lo que mi-
ran de cerca, y tanto mas, quanto mas de cerca lo miran,
no es tanto el deleite , que fe recibe oyendo un mote
agudo, un fuceffo graciofo , una novedad extravagante
(pues también ellas fon fainete grande de las conversa-
ciones) quando fe refieren ú de otro ligio, u de otra R e -
gión diílanre, como quando le atribuyen á nueílro tiem-
po, y á nueftra Patria, creciendo el placer á proporción,
que el chille fe acerca mas á nofotros, de modo,que fube
al mas alto grado,quando fe coloca en cabeza de perfona
conocida. De aqui nace el alterarfe frequentemente en
las converfaciones las circunílancia.s de tiempo, lugar, y
perfona, de modo, que lo que fe leyó en un libro, como
fucedido en ligio, ó Región diñante , fe trahe al ligio, y
Provincia propria, para dar mas fal á la relación. Pro-
pondré de efto varios exemplos, fegun el orden que me
fueren ocurriendo á la memoria. Con efle motivo halla-
rá el Lector algo de gracejo en elle Theatro, que es
¡ton que como Univerfal tenga algo de todo.
§. I I .
1} T 7Ivía poco ha en Efpaña un Ecieíiaflico de al-
V to carácter, pero de corto entendimiento,
por lo qual dio lugar á que el Vulgo crcyeífe de él al-
gunas notables fimplicidades. Havia eílado en Francia;
y fe le imputó , que para ponderar la agudeza de los
Francefes, decía acá, que eílaba pafmado de ver , que en
aquel Reino los niños de tres, y quatro años fabian-ha-
blar la Lengua Francefa , quando en Efpaña apenas fe
encuentra alguno, que á los doce la fepa. Rara haluci-r
nación! Que han de hablar los niños en Francia fino la
Lengua nativa , que es la Francefa , como los de Efpaña
la Eípañola? Pero efle chille fué tomado del primer to-'
too de los cuentos del Señor d' Ouville , y faltamente
atribuido al Ecieíiaflico mencionado. El Señor d'Ouville,
digo, pone efle chifle en la boea de un criado tontifsi-
mo
3 ro CHISTES DE N .
rao de un Caballero Francés, que de Paris pallaba á R o -
m a , y h a v i e n d o llegado ál primer P u e b l o de P i a m o n t e ,
Calió el criado á balear algunas c o f a s , que havia menef-
t e r ; pero v i e n d o , que nadie le e n t e n d í a (porque l o s del
P a i s hablan la L e n g u a Italiana) v o l v i ó f u m a m e n t e a d m i -
r a d o al A m o , y le d i x o : Monfiur, no he vi/lo en mi vi-
da gente igualmente tonta, que la de e/la tierra. En Pa-^
rhlos niños de tres,y quatro años me entienden lo que
les hablo ; y aqui (apenas lo creeréis) hombres llenos de
barbas nrme entienden mas, quefi fueran unas beftlas.
4 D e l m i f m o Eclefiallico fe refiere ( a f í n de perfua-
dir fu total i g n o r a n c i a de L a t i n i d a d ) que al t i e m p o que
e f l u v o en R o m a , h a v i e n d o l e hablado n o s s quien en L a -
t í n , j u z g ó q u e le hablaba en I d i o m a I t a l i a n o , y v o l v i é n -
d o t e á i o s que le a c o m p a ñ a b a n , d i x o : Como no sé l.i Len-
gua Italiana, no puedo refponderle , que fi me hablara en
Latín, le havia de confundir. A u n q u a n d o fucediefle afsi,
n o es prueba l e g i t i m a de i g n o r a n c i a de L a t i n i d a d en
a q u e l P e r f o n a g e , pues en la miiina e q u i v o c a c i ó n i n c u r -
r i ó m u c h o , t i e m p o ha o t r o , que fin duda era gran Latir
n o . E n r i c o Chriitiano H e n n i n i o refiere , que Scaligero
fiendo c u m p l i m e n t a d o p o r . u n Irlandés en Latín , j u z g ó
q u e le hablaba en el I d i o m a Irlandés , y le d i x o , c o m o
para prevenirle , q u e le hablaíle en L a t í n , Domine, non
intelligo Hibernicé. Efta e q u i v o c a c i ó n pende d e q u e ca-
d a N a c i ó n p r o n u n c i a e l L a t i n c o n aquella m i f m a articu-
l a c i ó n , que el I d i o m a P a t r i o ; y hai tanca diverfidad en
la articulación d e unas N a c i o n e s á otras , que á veces
p r o n u n c í a n c t o tales letras del A l p h a b e t o , reprefentan á
l o s de otra N a c i ó n pronunciar otras diferentes. P o n g o
p o r e x e m p l o ; l o s A l e m a n e s p r o n u n c i a n la v c o m o no-
f o t r o s l o s Efpañoles laf. la f , c o m o n o í o t r o s la d-.la.jota,
c o m o n o f o t r o s la.g blanda: l a g , c o m o n o f o t r o s la c: ia b,
c o m o n o f o t r o s l a p : la u v o c a l , c o m o n o f o t r o s t;»:el á'ipli-
t h o n g o eu, c o m o n o f o t r o s oi. E n las demás N a c i o n e s hai
á p r o p o r c i ó n la m i f m a diverfidad. D e aqui es,que quan-
d o el de una N a c i ó n p r o n u n c i a r i g o r o f a m e n t e el Latín
fegun la afección del p r o p r i o I d i o m a , y el de otra no
D I S C U R S O X. j i i
preíta efpecial atención , 6 no eftá prevenido de la dife-
rencia exprefiada, es fácil juzgar , que le hablan el Idio-
ma Patrio. Erafmo en el Dialogo de recia Latini, Gr<e-
cique fermunis pronuntiatione , dice , que fe halló pre T
§. I I I .
.<? T " " \ E Don Francifco ele Quevedo fe cuenta ge-
i . ^ / neralmente el chifle, de que efiando en-
fermo, y haviendole ordenado el Medico una purga, lue-
go que efta fe traxo de la botica, la echó en él vafo, que
tenia debaxo de la cama. Volvió el Medicóla tiempo
que la purga, fi fe huvieífe tomado, ya havria hecho fu
efecto, y reconociendo el vafo, para examinar, íégun fu
practica, la calidad del humor purgado, luego que per-
cibió el mal olor del licor, que havia en el vafo , excla-
mó (como para ponderar la utilidad de fu receta:) O
que humor tan pefiifero\ Q^ié havia de hacer efle dentro
de un cuerpo humanal A lo que Quevedo replicó : Taun
por fer ¿l tal, no quife yo meterle en mi cuerpo,
7 Poggio Florentino, que murió mas de cien años
antes que Quevedo nacieiié, refiere qnanto á la fubfian-
clael mifmo chifte colocado, en la perfona de Angelo
Obifpo de Arezzo. Defpreciaba, ó- aborrecía eñe Prela-
do todas las drogas de botica. Sucedió, que cayendo
en.una grave dolencia, los Médicos llamados convinie-
ron, en que moría infaliblemente, fi no fe dexabafocor-
rer de la Pharmacopea. Defpues de mucha renitencia fe
2 12 O B S T E S DE N.
rindió, ò fimulò rendirfe à fus exhortaciones. Receta-;
ronle pues una purga. Trahida de la botica la echò ert.
el vafo excretorio. Viniendo los Médicos el dia íiguien^
te, le hallaron limpio de calentura; y no dudando de que
la mejoría fe debia al ufo del decretado pharmaco , to^
marón de aqui ocafion para infultar al enfermo , repre-
hendiendo como totalmente irracional el defprecio que
hacia de las drogas boticales. Si por chrto, dixo el buen
Obifpo ; feñores Dotares, vuejfas mercedes tienen razón:
ahora, conozco quan eficaz es fu purga , pues haviendola
echado en effe vafo, que efiá debaxo de ¡a cuna , tal es fu
aBividad , que defde olii me ha caufado la mejoría: quan-
to mejor lo hiciera (yá fe vè) fi la huviera metido en el
ejìomagoì
8 Del mifmo Quevedo fe cuenta , que motejandofe-
leen un corrillo el exorbitante tamaño del pie, dixo,
que otro havia mayor que el en el corrillo. Mirandofe
los circunílantes los pies unos á otros, y viendo que to-
dos eran menores que el de Quevedo, le dieron en rof-
tro con la falfedad de lo que decia. Lo dicho dicho, in-
íiílio el, otro hai mayor en el corrillo. Inflándole à que
lo feñalaffe , facò el otro pié, que tenia retirado , y en
efecto era mayor ; y inoltrandole, vean vueffas merce-
des, les dixo, fi efte no es mayor que el otro. El Portu-
gués Francifco Rodriguez Lobo, en fu Corte en la Aldea,
dialogo 11, atribuye efte proprio gracejo à un Eítudian-
te ; y Don Antonio de Solis en fu Romance, Oy en un
piélago entro , à una Dama.
9 Chifte es también atribuido àQuevedo, el que
encontrandofe en una calle con ciertas damifelas achu-
ladas, y diciendole ellas , que embarazaba el paífo con
fu nariz (fuponiendola mui grande) él doblando con la
mano la nariz à un lado ,pajfen, les dixo , u/iedes fño-?
ras P. Cufpiniano hace Autor de efte gracejo al Empe-
rador Rodulfo. Encontròfe con él un decidor en calle
eílrecha. Advirtiendole los Miniílros , que fe apartarle;
el, motejando de mui grande la nariz del Emperador,
les replicò ; Por donde he de paff^ifi la¿nariz. del Em<-
P'
DISCURSO X. 313
prado? ¡lena la calle . A lo que Rodulfo, doblando la na-
7
$• iv.
fi r / ^ O r a o cofa mui reciente oi , que uno muí
V i preciado de matón fe llegó en Madrid á un
gran Señor ofreciéndote á fervirle, como Valiente fuyo,
para matar a dieítro , y finieítro quanros fe le antojaííe.
Elle havia recibido muchas heridas en algunas penden-
cias, y prefentaba por teftimonio de fu valentía las ci-
catrizes. El Señor le defpidió con irrifion , diciendole:
Trabigame V.md. para Valientes 9?2Íos d los que le dieron
todos effos golpes, que d effos me atengo en todo cafo*
En un Anonymo Frances lei el mifmo dicho atribuido
á Ageíilao Rey de Lacedemonia , en ocaiion que fe le
preíentaron , para fervirle en la guerra, quatro hombres
mui cicatrizados, y que por tanto orientaban mucho fu.
Valentía.
12 También viene de Ageíilao el gracejo harto vul-
garizado en Efpaña de un Sacerdote , que celebrando el
Santo Sacrificio de la Mifla, fe íintió morder de un pio-
jo, y afiendole le eílrujó entre la uña, y la patena, dicien^
do : Al traidor matarle, aunque fea fobre el Altar. Plu-
tarco en el libro de los Apothegmas Lacónicos pone el
mifmo fuceífo, y el mifmo dicho , fin diferepancia algu-
na, en la perfona de Agefilao , eílando Tacañeando un
Tom.VI. " Rr buej
114 C H I S T E S D E N.
Buey en el altar de Minerva. Per Déos hbenter , vel in
Ara Injidiatorcm ; es la exprefsion,que atribuye Plutar-
co á Ageíilao al matar el piojo.
§• V.
12 T~j N elle Principado de Afturias corre como
C hecho de reciente data acaecido en el mif-
ffio Pais, que hallándole un Religioíb de traníito en una
Aldea, y queriendo reconciliarle para decir Milla, acu-
dió al Efcufador del Cura del Lugar , á quien hecha la
Confefsion, halló tan ignorante, que ni aun la forma de
la Abiblucion fabia, ó iolo la labia deformada con unos
quantos folccifmos. Fuelle el Religioíb al Cura, y le di-
xo, corno en conciencia no podia tener por Efcufador
aquel Clérigo, por fer tan incapaz, que aun la forma de
la Abfolucion ignoraba. El Cura, que no era mas capaz
que el Efcufador , le refpondió : Padre , y a sé que ejfe
hombre es un jumento : pero no puedo remediarlo, porque
no quiere fujetarfe d lo que yo le digo. Mil -veces le ten-
go dicho, que no fe meta en abfolver d nadie , fino que
les oiga los pecados , y defpues me los embie d mi para
que IOÍ abfuelva ; pero no bai modo de reducirle d ejfo.
El Doct. Tofeph Boneta, en fu Librito, Gracias de la gra-
cia de los Santos, refiere efte chille, y dice, que el que hi-
zo la camal experiencia de la profunda ignorancia de
los dos Sacerdotes fué el Eximio Doctor en uno de fus
viages ; lo qual iiendo afsi, el chille fobre fer mas anti-
guo, que acá fe pienfa, fucedió en diverlo Pais , pues el
Padre Suarez nunca eíluvo, ni viajó en Afturias.
1 4 A un Pintor moderno , y que pintaba bellos ni-
ños, y tenia unos hijos mui feos , fe atribuye una bella
refpuefta á la pregunta que alguno le hizo , de que co-
mo hacia unos niños tan feos, fabiendo dibuxarlos tan
hermofos? Es el cafo, refpondió , que los hago d efeuras;
y los pinto d la luz, del dia. El mifmo dicho oi atribuir
á un Efcultor, que alcancé en Galicia, pero la verdad es,
<¡ue precedió muchos ligios afsi ai Pintor , como al Ef-
cul-
DISCURSO X. 315-
cultor expreftados. Macrobio hace Autor de efta aga-
deza á Lucio Mallo, Pintor Romano, con el motivo de
que eñe Pintor hacia bellas imágenes, pero en fus hijos
mu i feos originales, le echó Servilio Hemino efta pulla:
Non Jimiliter Malli fingís, &pingis. Refpondió Mallo:
Tsnebris enim Jingo, luce pingo.
§. VI.
15 I " > E un Rey de Efpaña , y otro de Inglaterra
fe refiere una mifma fentencia, pronun-
ciada con la ocaíion c'e haverfele quexado un Señor prin-
cipal, de que parecia eftimaba mas que á él á un Pintor
iníignc, que tenia. To puedo, dixo el Rey, hacer Duques t
§. VIL
16 1 .'N nueítras hiftorias fe celebra el valor de
£j!, una Señora, la qual viéndole íitiada,y ame-
nazándola los enemigos , que matarian á un hijo fuyo,
que tenian priiionero, ii no fe rendía, con defenfado mas
que varonil, feñalando con cierto ademan la oficina de
la generación, les dixo,que alli tenia con que hacer otros
hijos, íi le matatTen aquel. Herodoto en el libro fegundo
cuenta de unos á quienes fe queria reducir fulminando
amenaza contra fus hijos, y mugeres, que moftrando uno
de ellos el inítrumento de la procreación,refpondió: Ubi-
cumque id effet,fibi & uxores,&liberas fore. La brabata,
y el motivo fon los mifmos, con la diferencia fola de
colocarfe en diferente fexo.
*„*
§,VLHi
CHISTES DE N.
§. VIII.
17 í~\* celebrar como chifle poco ha fiicédido,'
V , / en cierta meía,uno mui graciofo,que Athe-:
neo refiere, como antiquifsimo. Eílaba Philoxeno Poe-
ta, comedor infigne, cenando con Dionyíio. Pufieron á
eile un pez grande , que Atheneo con voz Griega llama
Trigla , y es lo que nolbtros llamamos Barbo de mar.
A Philoxeno pufieron otro pez de la mifma efpccie, pe-,
ro mui pequeño. Luego que Philoxeno notó la gran
desigualdad de los dos pezes, arrimó la boca á la oreja
del íiiyo en ademan de decirle algo. Preguntóle Diony-
íio, qué hacia'í Refpondió Philoxeno : Tengo empezada
una obrilla , cuyo aflumpto es Galatéa; y como de eíla
Ninfa del mar los que mejor pueden faber la hiíloria
fon los pezes, le preguntaba á elle fobre algunas cofas,
que le havian acaecido en el tiempo de fu padre Neréoj
pero él me refponde, que como puede faber cofa alguna
de ellas antigüedades, fiendo un pezeciilo nuevo,que na-;
ció ayer? Que le pregunte ellas cofas á elle otro Barbo,
que tenéis ahi, que es mui anciano, y alcanzarla íin du^
da los tiempos de Neréo. Agradóle á Dionyfio el do-
naire, con que Philoxeno fe quexaba, de que le huvieííetj
puerto un barbo tan pequeño, y le dio el grande,
§. IX.
18 T 7 N A de las famofas fentencias del Rey Don 1
§• XI.
:
20T A decantada refpuefta de Phllipo Rey de
i—J Macedonia al Medico Meneerates , el qual
havia llegado á tal extremo de jactancia, por los feli-
ces íucciíbs de fus curas , que ya queríale invienen por
Deidad , y á clíe fin efcribiendo una carta a Philipo,
ponia por falutacion, ó principio de ella : Meneerates
Jupiter Pbilippo falutem ; pero Philipo caftigó fu locu-
ra diferetamente, poniendo en la frente de la refpuefta:
Pbilippus Menecrati fanitatem ; la atribuye Plutarco a
Agelilao Rey de Lacedemonia.
§. XII.
21 'Í_j N la Ciudad de Santiago fe refiere,que un
S~J Portugués yendo á ver nueítro gran Mo-
ñafterio de San Martin , que hai en aquella Ciudad , y
notando la defproporcion de la puerta principal , que
es mui pequeña refpeclivamente á la efcalera immedia-
ta, obra mageftuofa, de grande magnitud, y hermofu-
ra, dixo con donaire : EJios Padres , esmo ejliman tanto
la efcalera, y ella fin duda lo merece , hicieron la puerta
tan pequeña, porque no fe les efeapaffe por ella. Efte di-
xho viene á íer el mifmo, aunque invertida la materia,
de Diogenes á los Mindianos, cuya Ciudad era pequeña,
pero las puertas de ella mui grandes. Advirtióles Dio-
genes, que las cerraífen , porque la Ciudad no fe efea-;
paífe por ellas.
§. XIIÍ.
22 Scribe Monf. Menage, que haviendo pallado
- L í á Inglaterra Juan Bodin , célebre jurifeon-
fulto Francés, entre la comitiva del Duque de Alanfon,
quando efte Principe fué á pretender fu cafamiento con
la Reina Ifabela, hablando Bodin con un Inglés fobre
efta pretenfion, el Inglés, que no debia de guftar, que
D I S C U R S O X. jip
fe lograiTe , le dixo , que aquel matrimonio no podía
efecruarfe , á cauía de que por ley del Reino,todo Prin-
cipe eftrangero eftaba excluido de afpirar á la Corona
de Inglaterra. Bodin, todo metido en colera, le replicó,
que tal ley no havia, y que la moftraife , ó dixeffe don-
de fe hallaba efcrita. Pero el Inglés le refpondió con
gran focarroneria, que en el mii'mo pergamino donde
eftaba efcrita la ley Sálica, á las efpaldas de ella hallaría
aquella ley del Reino de Inglaterra. Los que faben las
dudas que hai fobre la ley Sálica, que excluye las hem-
bras de heredar la Corona de Francia , ya entienden en
qué confute el chifte de la refpuefta del Inglés. Efta in-
fultatoria retorfion fe encuentra en varias Relaciones
aplicada á diferentes perfonas , y materias. Pongo por
exemplo ; fe dice, que en ocaiion de eftár poco acordes
Roma,y Venecia, le dixo el Papa al Embaxador de aque-
lla República, que defeaba ver el inftrumento, ó efcritu-
ra, por donde los Venecianos fe havian hecho dueños
del Mar Adriático. Efto era declarar , que tenían aquel
Dominio por mera ufurpacion. El Embaxador refpon-
dió, que fu Santidad hallaría dicha efcritura á las efpal-
das del original de la donación, que Cpnftantino hizo á
la Iglefia Romana. Los Eruditos no ignoran las contef-
taciones , que hai , y ha havido fobre la donación de
Conftantiuo , y que el Cardenal Baronio , y el Padre P a -
gi la niegan ; aunque-no otros julios títulos, por don-
de la iglefia Romana poíTee lo que le atribuye aquella
donación.
XIV.
23 T*7 N el Tomo 3 . difeurfo 2. num.39. tenemos
£_¿ eferito , que oyendo el Caballero Borri,
que fu eftatua tal dia havia fido quemada en Roma , y
haciendo reflexión fobre que el mifmo dia havia hecho
tranfito por una montaña nevada , como deípreciando
aquella ignominiofa ceremonia, que dexaba ilefa fu per-
fona, dixo, que bien lejos de fentir aquel fuego , en to-
da fu vida no havia padecido frío igual al de aquel dia.:
En
320 CHISTES DE N .
En el mifmo lugar apuntamos, que eftc mifmo dicho Te
cuenta del Calviuifta Enrico Stcphano , y de el Apóllala
Marco Antonio de Dominis , los quaies mucho antes
que el Borri, padecieron la miíma afrenta de quemarles
las eílatuas. Y acá en Efpaña fe atribuye el proprio di-
cho a un Efpañol fugitivo de Roma,por ciertas doctrinas
legales,poco conformes á las máximas de aquella Corte,,
§• xv.
24 TP7 L Anonymo Francés Autor de las Refiexio-
j C ni s Morales, reliere,que quexandofe un jo-
Ven de que la cfpada que le havian dado era corta , fu
madre, muger de efpiritu prompto , y varonil, le dixo:
Quando te bailes en el combate, con dar un pajfo adelante
hacia el enemigo la harás bajlantemente larga. El Autor
Árabe (verdadero, ó fupuelto) de laH.iltoria de la pérdi-
da de Efpaña, pone elle dicho en la boca de Almanfor,
Emperador de los Árabes, fiendo muchacho, con la oca-
fion de notar fu padre de corto un rico efpadin , que le
havian preíentado.
§. XVI.
25 \2 L figuiente chifle fe refirió en un corrillo,
t j , donde me hallé , como fucedido ellos años
paíTados en Zaragoza. Liego á aquella Ciudad un Tu-
nante, publicando que fabia raros arcanos de Medicina;
entre otros, el de remozar las viejas. La proífa del bri-;
bon era tan perfuafiva, que las mas del Pueblo le creye-
ron. Llegaron pues muchifsimas á pedirle, que les hicief-
fe tan preciofo beneficio. El les dixo, que cada una pu-
fiefié en una cedulilla fu nombre , y la edad que tenia,
como circunílancia precifa para la execucion del arca-i
no. Havia entre ellas feptuagenarias , octogenarias, no-,
nagenarias. Hicieronlo afsi puntualmente , fin difsimu-
lar alguna ni un dia de edad, por no perder la dicha de
¿emozarfe, y fueron citadas por el Tunante para venir á
DISCURSO X. 32 %
fu pofada el día figuieate : vinieron , y el al verlas em-i
pezb á lamentarle, de que una bruja le havia robado ta-,
das las cedulillas aquella noche, embidiofa del bien que
las efperaba; afsi, que era precifo volver á efcribir cada
una fu nombre , y edad de nuevo ; y por no retardarlas
mas el conocimiento, porque era precifa aquella circunf-;
tancia, les declaro, que toda la operación fe reducia,a
que á la que fuelle mas vieja entre todas havian de que-:
mar viva, y tomando las demás por la boca una por-
ción de fus cenizas , todas fe remozarían. Pafmaron al
oir ello las viejas; pero crédulas ílempre á la promclfa,
tratan de hacer nuevas cédulas. Hicieronlas en efecto,
pero no con la legalidad que la vez primera,porque me-
dróla cada una de que á ella por mas vieja le t o calle icr
Sacrificada á las llamas, ninguna huvo que no fe quitaífe
muchos anos. La que tenia noventa , pongo por exem-
plo, fe ponia cincuenta; la que fefenta , treinta y cinco,
&c. Recibió el picaron las nuevas cédulas, y tacando
entonces las que le havian dado el dia antecedente, he-
cho el cotejo de unas con otras, les dixo : Ahora bien,
feúoras mias; yá vueifas mercedes lograron lo que les
prometí; yá todas fe remozaron. V.md. tenia ayer no-
venta años, ahora yá no tiene mas de cincuenta. V.md.
ayer fefenta, oy treinta y cinco : y difeurriendo afsi por
todas, las deípachó tan corridas como fe dexa conocer.
Digo que oí ella graciofa aventura , como fucedida po-
co -ha en Zaragoza ; pero yá antes la havia leído en el
Padre Zahn, el qual (j.p. Mundi mirabilis ,pag. 75.) lé-
ñala por theatro de ella á Hailbron , Ciudad Imperial
en el Ducado de Vvitemberg.
§. XVIL
26 T A vulgarizada necedad de un Vizcaíno , qtíé*
*—J admirado de los reglados movimientos con
que un Mono imitaba las acciones humanas , dixo , que
por picardía fuya no hablaba, á fin de que no le hicief-
fen trabajar ; fin diferepancia alguna fe la oyó a un D o -
Tom.Vl. Ss S°?
C H I S T E S DE N.
tor Mahometano el Señor La Brue, Director de la Com-
pañía Francefa del Senegal. En elDifcuríb 8. de elle T o -
mo, num.6'5. referimos á otro propoíito la extravagan-
te imaginación ele aquel ignorantiísimo Dotor.
§. XVIII.
27. Señor el' Ouville trahe entre fus cuentos
g^2j el que un hombre que queria apartarte de
fu muger, con quien tenia poca paz , pareció á efle fin
ante el Provifor. Eftrañó elle la propueíla , porque co-
nocia la muger,y era de buenas calidades. Por qué que-
réis dexar á vueitra muger? le preguntó el Provifor ; no
es virtuofa? Si íéñor, reípondió el hombre. No es rica?.
Si feñor. No es fecunda? Si feñor. En fin á todas las
partidas fobre que era preguntado refpondia en abono
luyo. Con que le dixo el Provifor : Pues fi vueílra mu-
ger tiene tantas cofas buenas, por qué queréis apartaros
de ella? A ello el hombre defcalzando un zapato , pre-
guntó al Provifor : Señor, elle zapato no es nuevo? Si,
refpondió el Provifor. Añadió: No ella bien hecho? Si,
á lo que parece, refpondió- el Provifor. No es de buen
cordobán, y buena lucia? Refpondió del mifmo modo,
que fi. Pues vé Vmd. con todo ello , dixo el defeonten-
to marido, que yo quiero quitarme elle zapato , y poner
otro, porque yo sé mui bien donde me aprieta ,, y man-
ca, y V.md. no lo fabe. Efle cuento es traslado mani-
fiello de lo que Plutarco cuenta ele un Rornano,y fe pue-
de ver en nueftro quarto Tomo, difeurfo 1 . num.20.
§. XIX.
28
•15
Y ~ ? L mifmo Señor d' Ouville refiere de una
Paifaníta Francefa un agudo pique , que
en cierta converfacion 01 atribuir á una Labradora
Caílellana. Según Ouville , pafsó el cafo de elle mo-
do. Iba una mozuela fu camino , y llevando delante de
si una burra cargada de no sé qué, encontró en el cami-
no
DrSCURSO X. 323
1T0 un Caballero, el qual advirtiendo, que la Paifana era
:
§. X X .
zp TTT Scribe el Padre Manuel Bernárdez Luíitano,
£j_v en fu fegundo tomo de Apothegmas, que
haviendo ido dos Comiílarios de cierta Comunidad á
pedir al Rey Phelipe Segundo no se que merced, el mas
antiguo, á quien por tal tocaba hablar,y que era un vie-
jo inconliderado, y moledor, eftuvo fumamente prolixo
en la oración. Haviendo acabado , preguntó el Rey al
otro, fi tenia algo que añadir. Efte, que eítaba tan en-
fadado de la imprudencia de fu compañero,como el Rey
canfado de fu pefadéz. Si feñor, refpondió: míe jira Co-
munidad nos ha encangado,.queJiV.Mag.no nos concede
al panto lo que le pedimos, mi compañero vuelva á repe-
tirle todo lo que ha dicho, defde la primera letra hafia la
ultima. Guftó el Rey de la gracioíidad , y fin dilación
dio el defpacho, que fe le pedia. Tengo leído (no pue-
do aflegurar fi fué en la fegunda parte de la Fioreíta Ef-
pañola) aue eíto mifmo fucedió. en la Legacía de dos
' Ss a. " " " Di-
gizj. C H I S T E S DE N .
Diputados de una República de Italia , á un Papa mv?¿
anterior á Phelipe Segundo.
§. XXI.
50 F | L Señor d'Ouville cuenta , qué tranfitando'
• C Luis Décimo quarto por una pequeña Villa
'de fu Reino, y entrando en ella á la hora de comer, fue-
ron á harengarle unos Diputados de la Villa. El Rey-
tenia mas gana de comer, que de oír harengar , mas a!
fin fe dexó vencer por los Señores de fu Comitiva,y tra-
to de oir á los Diputados. Empezó el mas antiguo de
efte modo : Sire, Alexandro el Grande. No bien lo pro-
nunció, quando le faltó la memoria de todo lo que fe
feguia, con que volvió á repetir fegunda , y tercera vez:
Sire, Alexandro el Grande. Vifto ello , el Rey le dixo:
Amigo, Alexandro el brande havia comido, y yo no : va~
mos d comer, y guarde fe la b arenga para otra ocjjion. El
Autor de las Obfervaciones fideeras literarias coloca ef-
te fuceflb enelAvuelo de Luis Décimo quarto , Enrice»
el Grande, en ocafion que querían harengarle unos Di-
putados de Marfella , y empezaba la oración : Saliendo
Aanibal deCartbago. Enrico , ya porque era hora de
comer, ya porque no guftaba de harengones , cortó al
Harenguifta, diciendo : Qu ndo filio Annibal deCartha.-
go yá havia comido, y a voi d hacerlo ahora.
§. XXII.
31 T "TN Amigo mió , hombre de entera verdad,
* J me refirió, que el año de 7 0 5 . al Corregi-
dor de Calatayud, que lo era entonces Don Juan Rami-
r o , pulieron en aquella Ciudad un Pafquin baltantemen-
te picante, por lo qual él comenzó á hacer viviísimas
diligencias para averiguar el autor. Pero el picaron,que
eílaba bien aífegurado de no fer defeubierto , porque ni
tenia cómplice en el infinito, ni á nadie fe lo havia con-
fiado 3 de nuevo intuito al pobre Corregidor, fixando
en
D I S C U R S O X. '325
en el mifmo fitio donde havla puefto el Pafquin eíle irri-
forio defengaño:
No lo /abrás bobo,
porque yo foi folo.
§. XXIII.
3i TTStudié, fiendo muchacho, las Artes en nuef-
d tro Colegio de San Salvador de Lerez , que
.difta folo un quarto de legua de la Villa de Pontevedra'.
Reíidian entonces en aquella Villa algunos Caballeros
de familias mui iluítres fin duda,pero notados de que
ostentaban con alguna demasía iu nobleza, por lo qual
los llamaban, ios Caballeros de la Sangre. Era consiguien-
te á ello, que aunque no huvieífe Titulo en que fundar-
lo, afectaífen el tratamiento de Señoría. Para demonf-
tracion de que ella afectación llegaba al mas alto gra-
do que puede imaginarle , fe refirió como proferida en-
tonces una necedad graciofifsima. Malparió la muger
de uno de aquellos Caballeros con tanta anticipación,
que apenas daba leñas de animado el feto. Luego que
fucedió el aborto, falió del apofento de la Señora una
de las criadas afsiftentes , y algunos de la familia , que
citaban en la quadra immediata , en la inteligencia , que
.el parto havia íido legitimo , le preguntaron Si era varón,
: ó hembra ; á lo que ella promptamente rcfpondió : No
fe fabe, porque aun no tiene alma fu Señoría. Es quanto
fe puede apurar la materia, tratar de Señoría á una maf-
ia inanimada, (ó juzgada tal) folb por fer producción
dé'Un Caballero , y de una Señora de la Sangre. Como
he dicho, eñe chiste corrió entonces en aquel País , co-
mo
DISCURSO X . 327
mo efectivamente fuccdido. P e r o defpues leí el miímo
:
§. XXIV.
34 T ^ " N mi tierna edad havia en la Villa de A1Í&.
fi f riz un Alférez de Milicias,que afectaba tra-
her fiempre grandes vigotes , aunque era hombre de
mui pequeña cara. Encontrándole una vez mi Padre , le
dixo : Alférez, 0 comprar cara , o vender vigotes. Cclc-
brofe el donaire ; pero realmente ello n o era mas , que
copia de lo que fe cuenta de un Vizcaíno que viendo
fobre un pequeño rio un gran puente , dixo á los del
Lugar : O vender puente, ó comprar rio. El P . Bouhours
en fus Penfamisntos ingeniofos varia algo el dicho. R e -
fiere, que un Efpañol pallando el Manzanares en el Ef-
tio á pié enjuto, y mirando al mifmo tiempo él puente
de Segovia, dixo, que fuera bueno vender el puente p a -
r a comprar agua.
§. XXV.
35 / " " c o n c l u y a m o s efle Difcurfo con dos chines'
de hecho. Efta extremamente vulgariza-
do , que un Papa advirtiendo los muchos dientes (fu-
pueftos) que havia de la Virgen y M á r t i r Santa Apolo-
nia, expidió un Edicto por t o d a la Chriftiandad , orde-
nando, que quantos fe hallaílen fueífen remitidos á R o -
ma; y que executado fielmente el orden del Papa , entró
en aquella Ciudad tanta cantidad de dientes de Santa
Apolonia, que cargaban un carro. Y o tengo efto p o r
cuento, y juzgo , que jamás huvo tal Edicto Pontificio,.
Lo que difeurro e s , que efta fama tuvo fu origen en
Martin Kemnicio , Autor Luterano , el qual en un t r a -
tado, que eferibió de las Reliquias, á fin de hacer o d i ó -
la, y vana la adoración , que les da ta Iglefia Catholica,
refiere, que un Rey'de Inglaterra expidió el orden , q u e
8 CHISTES DE N.
la voz común oy atribuye al Papa, y que folo en él am'.¡
bito de la Gran Bretaña fe hallaron tantos dientes de
Santa Apolonia , que huvo con que llenar muchos To«;
líeles. No por elfo atiento á que fea verdadera la reía-;
cion de Kemnicio, antes es fin comparación mas inve-
rifimil, que la que corre en el Pueblo. Mucho es , que
de toda la Chriftiandad fe juntaíTe un carro de dientes
de Santa Apolonia; pero que en foia la Isla de Ingla,;
térra huvieíFe dientes para Henar muchos Toneles , es
totalmente increible. Sin embargo es vcriiimil , que
aquella fábula fe derivo de efta, mudando la circunftan-
cia del lugar, y la perfona.
§. xxvr.
RA-
Vii - - - - -
A Z O
DE EL GUSTO.
D I S C U R S O XI.
§• I-
S Axioma recibido de todo el num-,
do,que Contra ¿ufo no bai di/pu-
ta. Y yo reclamo contra efte re-
cibidifsimo Axioma, pretendien-
do, que cabe difputa fobre el guf-
to , y caben razones, que le abo-,
nen , ò le difuadan.
2 Confiderò , que al verme el Lector conftituido en
efte empeño, creerà que me armo contra el Axioma con
el fentir común de que hai güitos malos , que llaman
eítragados : Fulano tiene mal guflo en ejlo, fe dice i ca-
da pafío. De donde parece fe infiere, que cabe difputa
fobre el gufi o ; pues fi hai güilos malos , y gufios bue-
nos, como la bondad, ò malicia de ellos no confia mu-
chas veces con evidencia, antes unos pretenden, que tal
güito es bueno, y otros que malo, pueden darfe razones
por una, y otra parte, efto es, que prueben la malicia,
y la bondad.
3 Pero eíloi tan lexos de aprovecharle de eíta
Tt 2 yul-
5 R A Z Ó N DE EL GUSTÓ;
Vulgaridad, que antes l i e n t o , que, h a b l a n d o philofoplil-i
camente, nunca fe puede.decir con verdad, que h.ai guf-¡
to nulo, ó que alguno tiene mal güilo , fea en lo que fe
fuere. Diftinguen los Philofophos tres géneros de bie-
nes, el honeíto , el útil, y el deleitable. De eftqs tres
bienes folo el ultimo pertenece al güilo ; los otros dos
eílán fuera de fu esfera. Su único objeto es el bien d e -
lectable j y nunca puede padecer error en orden á éL
Puede la voluntad abrazar como honeílo un objeto,
que no fea honeílo, ó como útil el que es i n ú t i l , por
reprcfcntaríélos tales falfamente el entendimiento. Pe-
ro es impofsible , que abrace como deleitable , objeto
que realmente nólo'fca. La razón es clara ; porque íi
le abraza c o m o deleitable, guita de él: fi guita de él, ac-
tual, y realmente fe deleita en él: luego actual, y real-
mente es deleitable el objeto. Luego el güito en razón
de güito fiempre es bueno con aquella bondad real, que
únicamente le pertenece , pues la bondad real, que toca
el güilo en el objeto, no puede menos de refundirle en¡
«1 acto.
4 Ni fe me diga, que quando el güilo fe llama ma-¡
lo, no es porque carece de la bondad deleitable, fino
de la honefta, ú de la útil. Hago manifieíto , que no es
afsi. Quando uno en dia que le eítá prohibida toda car-
ne come una bella Perdiz , aquel aíto es fin duda inho-
neílo ; con todo nadie por elfo dice, que tiene mal guf-
to en comer la perdiz. Tampoco quando galla en re-
galarte mas de lo que alcanzan fus medios, y de elle mo-
do va arruinando fu hacienda, fe dice que tiene mal güi-
to, aunque efite güilo carece de la bondad útil: Luego
f o l o fe llama mal güilo el que carece de otra bondad
diílinta de la honefta, y útil. No hai otra diftinta que la
deleitable ; y de eíla tengo probado , que nunca carece
él gufto ; luego contra toda razón fe dice, que algún
güilo, fea el que fe fuere, es malo.
5 Los Africanos guílan del canto de los grillos,mas'
que de qualquiera otra muíica. Ateas Rey de los Scy-
. shas, quería mas oir los relinchos.de fu caballo , que ai
DISCURSO XI. " ¡33
famofo Mufico Ifmcnias. Di rafe , que aquellos tieneú
mal gufto, y efte le tenia peor? No fino bueno, afsi efte,
como aquellos. Quien percibe deleite en oir elfos foni-
dos, tiene el güilo bueno con la bondad que le corref-
ponde, ello es, bondad deleitable. Muchos Pueblos Sep-
tentrionales comen las carnes del Offo , de el Lobo , y
de el Zorro: los Tártaros la de el Caballo, los Árabes la
del Camello. En partes de la África fe comen Crocodi-
los , y Serpientes. Tienen todos ellos mal güilo? No fu
no bueno. Sabenles bien ellas carnes, y es impofisible
faberles bien, y que el-güilo fea malo; ó por mejor de-
cir, íer güilo, y fer malo, es implicación manifiefta, por-
que feria lo mifino, que tener bondad deleitable , y ca-
recer de ella.,
§• I I .
6 X ^ O n todo eito, digo, que caben difputas fo-
bre el Gufto. Para cuya comprobación me
«s precifo impugnar otro error común, que fe da la ma-
no con el expreffado , efto es , que no fe puede dar ra-
zón de el guíló. Tienefe por pregunta extravagante , fí
uno pregunta á otro, por qué guita de tal cofa ; y juzga
el preguntado, que no hai otra refpueíta quedar, lino,
güilo porque güilo , ó gufto porque es de mi güilo , ó
porque me agrada, ikc. lo que nace de la común perfuar
fion, que hai, de que de el güito no fe puede dar razón.
Xo eftoi en la contraria.
7 Dar razón de un efecto es feúalar fu caufa ; y no
una fola, fino dos fe pueden feúalar de el güilo. La pri-
mera es el temperamento ; la fegunda la aprehenfion. ,
8 A determinado temperamento fe liguen determi-
nadas inclinaciones: Mores fequuntur temperamentum,
y alas inclinaciones fe ligue el güilo, ó deleite en el
exercicio de ellas : de modo, que de la variedad de tem-
peramentos nace la diverfidad de inclinaciones , y güi-
ros. Efte guita de un manjar , aquel de otro ; elle de
una bebida, aquel de otra ; efte de la mufica alegre, aquel
?3_¡. RAZOX DE EL GUSTO.
de la ti'lftc, y afsi de todo lo demás, fegun la varia dif.
poficion natural de los órganos , en quienes hacen im-
prefsion ellos objetos; como también en un mifmo fu-
jeto fe varían á veces los güilos fegun la varia difpofi-
clon accidental de los órganos. Afsi el que tiene las
manos muí frias, fe deleita en tocar cofas calientes ; y el
que las tiene mu i calientes,fe deleita en tocar cofas frias:
en eftado de falud güila de un alimento , en el de en-
fermedad de otro , ó acafo le defplacen todos. Efta es
materia, en que no debemos detenernos mas, porque á
la limpie propuefta fe hace, clarifsirna.
§. III.
9 T ^ E r o fobre ella fe me ofrece ahora excitar una
I queftion mui delicada, y en que acafo nadie
ha penfado halla ahora; ello es, li los guftos diverfos en
orden á objetos difuntos , igualmente perfectos cada
uno en fu esfera, fon entre si iguales. Pongo el exem-
•plo en materia de Muíica. Hai uno, para cuyo güito no
hai melodía tan dulce como la de la Gaita ; otro , que
prefiere con grandes ventajas áefta, el harmoniofo con-
cierto de Violines con el baxo correfpoadiente. Supon-
go, que el Gaitero es igualmente excelente en el manejo
de fu inltrumento, que los Violinistas en el de los fuyos;
que también la compoficion rcfpectivamcnte es igual,
eíto es, tan buena aquella para la gaita, como ella para
los violines ; y en fin, que igualmente percibe el uno la
melodía de la gaita, que el otro el concierto de los vio-
lines. Pregunto,li percibirán igual deleite los dos, aquel
oyendo la gaita, y efíe oyendo los violines? Creo , que
unos refponderán, que fon iguales ; y otros dirán , que
ello no fe puede averiguar; porque quien , 6 por qué re-
gla fe ha de medir la igualdad, ó defigualdad de los dos
güilos? Y o liento contra los primeros, que fon desigua-
les ; y contra los fegundos, que eíto fe puede averiguar,
con entera , ó cali entera certeza. P.-.s por donde fe
han de medir los dos güilos? Por los objetos. Ella es
una
DISCURSO X I . JJ¿
fina prueba mètaphyfica, que con la explicación fe hará
phyfica, y feníible.
1 0 En igualdad de percepción de parte de la po-
tencia, quanto el objeto es mas excelente , tanto es mas
excelente el acto, hite entre los Mttaphyficos es Axio-
ma inconteítable. Es rrufica mas excelente la de los vio-
lines, que la de la gaita, porque eíto fe debe fuponer; y
también fuponemos, que la percepción de parte de los
dos fugetos es igual. Luego mas excelente es el acto,
con que el uno goza la mufica de los violines , que el
acto con que el otro goza la de la gaita. Mas qué exce-
lencia es efta? Excelencia en linea de delectación,porque
éífa correfponde á la excelencia del objeto deleitable.
La bondad de la mufica à la linea de bien deleitable per-
tenece , pues fu extrinfeco fin es deleitar el oído , aun-
que por accidente fe puede ordenar, y ordena muchas
veces, como á fin extrinfeco, à algún bien honeflo , ò
útil. Aísi pues como el objeto mejor en linea de honefi-
to influye mayor honeítidad en el acto , y el mejor en li-
nea de útil mayor utilidad ; también el mejor en linea
deleitable influye mayor deleitación.
11 Diráme acafo alguno , que el exceffo, que hai
de una mufica à otra, es folo rcípeótivo , y alsi recipro-
camente fe exceden ; eíto es, reípeítivamente á un íuge-
to es mejor la mufica de violines, que la de gaita; y res-
pectivamente à otro es mejor eita , que aquella. En va-
rias materias, tratando de la bondad de les objetos en
comparación de unos à otros, he vino que es muí co-
mún el fentir de que folo es refpeitivo el exceílb. Pe-
ro manifieítamente fe engañan los que tienten afsi. En
todos tres géneros de bienes hai bondad abfoluta, y ref-
pcitiva. Abfoluta es aquella, que fe confiderà en el ob-
jeto , prefeindiendo de las circunítancias accidentales,
que hai de parte del fugeto ; refpeitiva la que fe mide
por eíías circunítancias. Un objeto , que abfolutamente
es honeíto, por las circnnliancias en que fe halla el fu-
geto, puede fer inhoneíto , como el orar quando infta la
obligación de focorrer una grave neccfsidad del próxi-
mo.
3 2,6 RAZÓN D E E L GUSTÓ.
mo. Uña cofa, que abfolutamente es útil, como l a pofé
fefsion de hacienda, puede fer inútil , y autr. nociva $
tal fugeto; V.gr. fi hai de parte de él tales-circunftancias,
••que los focorros que • recibiría- careciendo de hacienda-i,
le huvieífen de dar vida mas commoda, que la que goza
teniéndola. Lo proprioTucede en los bienes deleitables,
Hai unos abfolutamente mejores que otros ; pero los
mifmos que fon mejores, fon menos deleitables, ó ab-
folutamenteindeleítables por las circunftancias de ta-
les fugetos. Quien duda, que la perdiz es un objeto
deleitable al paladar? Mas para un febricitante es in-,
deleitable. •
12 Generalmente hablando, todo quanto eftorva, ó
minora en el fugeto la percepción de la delectabilidad
del objeto, es caufa de que la bondad refpectiva de ef-
te fea menor que la abfoluta. El que eftá enfermo perci-
be menos , ó nada percibe la delectabilidad del manjar
regalado : el que con mano llagada, ó con la llaga mifma
de la mano toca un cuerpo fuavifsimo al tacto , no per-
cibe fu fuavidad. • De aqui es, que ni uno , ni otro ob-
jeto fean refpeótivamente deleitables en aquellas circunf-
tancias -, fin que por elfo les falte l a delectabilidad ab-i
fotuta. • . • •
13 Aplicando efta doctrina, que es Terdaderifsima,'
á nueftro cafo, digo, que la caufa de que fea menor pa-
ra uno de los dos fugetos la bondad refpectiva de l a
muíica de violines, es la obtufa, groífera , y ruda percep-¡
clon de fu delectabilidad , ó bondad abfoluta. Efta ob->
tufa percepción puede eítár en el oido , ó en qualquierí
de las facultades internas, adonde mediata, ó immcdia-
tamente fe -tranfmiten las efpecies miniftradas por el !
'de-
BrscWlo XI.- ' ' jfj
mayor deleite, por la razón que hemos alegado. Ella
prueba, y explicación firvert para refolver la qneílion
propueíta, á qualefquiera otros objetos deleitables que
fe aplique, demonllrando generalmente , que el fugeto,
que güila mas del objeto mas delectablc, goza mayor de-
leite, que el que güila mas de el que lo es menos.
1 4 Univerfalmente hablando , y fin excepción algu-
na, todos los que fon dotados de facultades mas vivas,
y expeditas, tienen una difpoficion intrinfeca, y perma-
nente para percibir mayor placer de los objetos agrada-
bles. Pero no deben lifongearfe mucho de efla ventaja,
pues tienen también la mifma difpoficion intrinfeca pa-
ra padecer mas los penofos. El que tiene un paladar de
delicadifsima, y bien templada textura, goza mayor de-
leite al guílar el manjar regalado ; pero también padece
mas grave deífazon al guílar el amargo , ó acerbo. El
que es dotado de mejor oido , percibe mayor deleite al
oir una mufica dulce ; pero también mayor inquietud al
oir un eílrepito difibnante. Ello fe eíliende aun á la po-
tencia intelectiva. El de mas penetrante entendimiento
fe deleita mas al oir un difcurfo excelente; pero tam-s
bien padece mayor deifabrimiento al oir una necedad.
§. IV.
[5$ T A fegunda caufa de el Güilo es la apreherí-
J—1 fion,y de la variedad de guftos la variedad
(Je aprehenfiones. De fuerte , que fubfiíliendo el mifmo
temple, y aun la mifma percepción en el órgano exter-
no, folo por variarfe la aprehenfion,fucede defagradar el
objeto, que antes placía; b defplacer el que antes agra-
daba. Efio fe probará de varias maneras. Muchas veces
el que nunca ha ufado de alguna efpecie de manjar , ef-
pccialmente fi fu fabor es mui diverfo de el de los que
ufa, al probarlo la primera vez fe difgufta de él, y def-
pues continuando fu ufo le come con deleite. El órga-
no es el mifmo, fu temperie, y aun fu fenfackm la mif-
,ma. Pues de donde nace ia divedidad? De que fe vario
' Tow. VI, "' " " y.S " k
338 R A Z O I * D E EL GtfSTo;
la aprehensión. Miróle al principio como cftraño al pa*
laclar, y por tanto como ddapacible ; el ufo quitó eíía
apreheníion odiofa, y por consiguiente le hizo gullolb.
i<5 Al contrario otras muchas veces, y aun irequen-
tifsimamente, el manjar que ufado por algunos dias es
gratifsimo , Se hace ingrato continuándole mucho. La
fenfacion del paladar es la mifma, como qualquiera, que
haga reflexión, experimentará en si proprio ; pero la
consideración de Su repetido ufo excita una aprehenfion
faftidiofa, que le vuelve aborrecible. De ello hai un
exemplo infigne , y concluyeme en las Sagradas Lettas.
Llegaron los Ifraelitas en el Defierto á aborrecer el ali-
mento del Maná , que al principio comian con deleite.
Nació eíla mudanza de que, por algún accidente, hicieífe
en la continuación , alguna imprefsion ingrata en el ór-
gano del güilo? Confta evidentemente, que no : porque
era propriedad milagrofa de aquel manjar , que fabia á
lo que quería cada uno : Deferviens uniufcujufque vo~
luntati, ad quod quifque volebat convertebatur. Pues de
qué? El Texto lo exprefla : Nibil vident oculi nojlri,
nifi Man. Nada vén nueSlros ojos, fino Maná. El tener
íiempre, todos los dias, y por tanto tiempo, una mifmá
efpecie de manjar delante de los ojos, fin variar, ni aña-
dir otro alguno, excitó la aprehenfion faftidiofa, de que
hablamos.
. 1 7 Muchos no guftan de un manjar alprincipío, y
guftan defpues de él, porque oyen que es de la Moda, ó
que fe pone en las meíás de los grandes Señores ; otros
porque les dicen que viene de remotas tierras , y fe ven-
de á precio fubido. Como también al contrario , aun-
que guften de él al principio , Si oyen defpues que es
manjar de rufticos , ó alimento ordinario de algunos
Pueblos incultos y barbaros, empiezan á fentir displi-
cencia en fu ufo. Aquellas noticias excitaron una apre-;
henfion, ó apreciativa, ó contemptiva, que mudó el guf-
10. En los demás fentidos, y refpecto de todas las de-;"
más efpecies de objetos deleitables , fucede
lo mifmo.
§. v.
»8 TUzgafe comunmente, qué eí güilo , 6 dífguf-
to, que fe fíente de los objetos de los í'enti-
dos corpóreos , ella fíempre en los órganos refpectivos
de eftos. Pero realmente efto folo fucede , quando el
gufto, ó difguílo penden del temperamento de eífos ór-
ganos. Mas quando vienen de la aprehensión, folo eítán
en la Imaginativa, la qual fe complace, ó fe irrita , fegim
la varia imprefsion, que hace en ella la reprefentacíon-
de los objetos de los fentidos. Es tan fácil equivocarle
en efto, y confundir uno con otro, por la intima corref-
pondencia , que hai entre los fentidos corpóreos, y la
Imaginativa, que aun aquel grande Ingenio Lüfitano, el
digno de toda alabanza, el infigne Padre Antonio Vieira,
explicando el tedio , que los Ifraelitas concibieron al
Maná, bien que usó de fu gran talento para conocer
que efife tedio no efitaba en el paladar , no le traslado
adonde debiera, porque le colocó en los ojos , fundado
en el fonido del texto,N¿¿/7 vident oculi no/lri,r}i/í Man.
Y o digo, que no eftaba el tedio en los ojos, fino en la
Imaginativa. La razón es clara, porque es impofsiblc
que fe varié la imprefsion , que hace el objeto en la po-
tencia, fi no hai variación alguna, ó en el objeto, ó en la
potencia, ó en el medio por donde fe Comunica la efpe-
cie. En el cafo propuefto debemos fuponer , que no hu-
vo variación alguna, ni en el Maná (pues efto confita de
la mifma Historia Sagrada) ni en los ojos de los Ifraeli-
tas, ni en el medio por donde fe les comunicaba la ef-
pecie, pues efto , fiendo común á todos , feria una cofa
totalmente mfolita, y preternatural, que no dexaria de
infirmar el Hiftoriador Sagrado ; fuera de que en efie ca-
fo tendrían legítima difculpa los Ifraelitas en el aborre-
cimiento del Maná: luego aquel tedio no eftaba en los
ojos, fino en la Imaginativa.
i P Ni fe me oponga, que también feria cofa total-
mente infolka, que la Imaginativa de todos'fe vHafíe
- y v 2 Con
RAZÓN DE EL G U S T O ;
con aquel tedio. D i g o , que no es ello infolito, 6 pré'-i
ternatural, lino naturalilsimo, porque los males de la
imaginativa ion conragióíos. Un individuo íolo es ca-
paz de inficionar todo un Pueblo. Ya fe ha vifto en:mas
de una , y aun de dos comunidades de mugeres, por,
creerte Energumena. una de ellas, ir paliando iucceisiyaa
mente á todas las demás la milma aprehenlion , y JUZH
garfe todas poííeidas. Sobre todo, una aprehenfion fafti-.
diofa es facdilsima de comunicar. Se nos viene natu->
raímente el objeto a la imaginativa , como corrompido
de aquella tedióla difpüccncia , que vemos manifieíU
Otro hacia el: elpecialmente li el otro es perfona de aU
gima eipecial perfuafiva, ú de muí viva imaginación,
porque ella tiene una fuerza ungular para infinuar
ptros la mifma idea de que ella pollada,
§. V I .
/ 3 0
" O ^ ' ^ y*> I
0 < u e e
" ° depende de dos príii^
^ S U U
• SÍ*
34'3 RAZÓN D E É l GüSTfJ.
eftos artificiosos circuios, lino acometiendo (digámosla
afsi) frente á frente fu demencia. El cafo pafsó con una
Monja Benedictina del Convento de Santa Maria de la
¡Vega, existente extra muros de efta Ciudad de Oviedo;
JESta ReligioSa, que fe llamaba Doña Eulalia Pérez, y ex-
cedía la edad Sexagenaria, haviendo paitado dos , ó tres
años defpues de perdido'el juicio , Sin que en todo eífé
tiempo gozaífe algún lucido intervalo , ni aun por bre*
viísinio tiempo, cayó en una fiebre, que pareció al Me-
dico peligrofifsima (aunque de hecho no lo era) por lo.
qual fui llamado para administrarla el Socorro elpiri-
tual, de que eítuvieiie capaz. Entrado en fu apoíento,
la hallé tan loca como me havian informado lo eílaba
antes ; y realmente era una locura rematadilsima la lu-
ya. Apenas havia objeto fobre el qual no desbarraífe
enormemente. Empezé, intimándola que fe confelfaífe;
refpondia ad Ephejlos. Propínele la gravedad de íu mal,
y el riefgo en que eltaba, fegun el informe del Medico,
como 11 hablaífe con un bruto. Todo era prorrumpir
en defpropofitos. Bien que el error , que mas ordinaria-
mente tenia en la imaginación , y en la boca , era que
hablaba á todas horas con Dios,y que Dios la revelaba
quanto paitaba, y havia de pallar en el mundo. Viendo-
la en tan infeliz eftado, me apliqué con todas mis fuer-
zas á tentar fi podía encender en fu mente la luz de la
razón , totalmente extinguida al parecer. En cofa de
medio quarto de hora lo logré. Y luego, temiendo jun-
tamente , que aquella fueiíe una ilustración palfagera co-
mo de relámpago , me apliqué á aprovechar aquel di-
chofo intervalo, haciendo que fe confeflalfe fin perder
un momento ; lo que executó con perfecto conocimien-
to , y entera Satisfacción mia. Defpues de abfuelta,eítu-
Ve con ella por eipacio de media hora, y en todo efte
tiempo gozó integramente el ufo de la razón. Defpedi-
nie fin administrarla otro Sacramento, por conocer, que
la fiebre no tenia vifos de peligroSa , aunque el Medico
la conítituia tal; como en efecto dentro de pocos dias
convaleció ; pero la ilustración de Su mente fué transito-
ria,
D I S C U R S O XI. ' 343
ría, como yo me havia temido. Dentro de pocas horas
volvió áíu demencia, y en ella períeveró lin intermif-
íion alguna hafta el momento de fu muerte , que íucedip
tres , o quatro años defpues. Hallábame yo aufente de
Oviedo quando murió, y me dolió mucho al recibir 1$
noticia , creyendo con algún fundamento , que acaío le
lograría en aquel lance el irnportantifsimo beneficio)
que havia confeguído en la otra ocafion ; bien que no
ignoro, que la dificultad havia crecido en lo inveterado
del mal.
24 Es naturalifsimo defee el Lector faber á qué h\j
duftria fe debió efta hazaña , no íolo por curiofidad,
mas también por la utilidad de aprovecharfe de ella , íi
le ocurrieffe ocafion femejante. Parece que no huvo in-
duftria alguna ; antes muchos, mirándolo á primera luZj
bien lexos de graduarlo de ingeniofo acierto, lo repu-
tarán una feliz necedad. Quien penfará, que de intento,
y derechamente me pufe á perfuadir á una loca , que lo
eftaba, y que quanto penfaba, y decia, era un continua-
do defatino ? O quien no diría , al verme eíperanzado
de iluftrarla por efte medio, que yo eftaba tan loco co-
mo ella í Para conocer la verdad de lo que yo le pro-
ponía era meneiter tener el ufo de la razón , el qual le
faltaba ; y íi no la conocía,era inútil la propuefta : con
que parece que era una quimera quanto yo intentaba»
Sin embargo efte fué el medio, que tomé. Por qué,y co-:
mo fe logró el efe¿to, explicaré ahora.
2 5 Para vencer qualquiera eítorvo , ó lograr qual-
quiera fin , no fe ha de confiderar precifamente el me-
dio, ó inftrumento de que fe ufa, mas también la fuerza,
y arte con que fe maneja. La cimitarra del famofo J o r -
ge Caftrioto en la mano de f u dueño , de un golpe corta-
ba enteramente el cuello á un toro ; trasladada á la del
Sultán, folo hizo una pequeña herida. Elto paffa en las
cofas materiales, y efto mifmo fucede en el entendimien-
to. Ufando ele la mifma razón uno que otro-, liai quien'
defengaña de fu error á un necio en u n quarto de hora>
y hal quien no puede-convencerle e n u n d i a , ni en m u í
344 RAZÓN D E E L GUSTO.
chos dias. Pues como, fi ambos echan mano del rriífniá»
inftriimento? Porque le manejan de muí diferente mo-
'do. Las voces de que íe uía, el orden con que fe enla-
zan, la actividad, y viveza con que fe dicen , la energía
de la acción, la impericia fuerza del gesto, la dulce, y al
mifmo tiempo eficaz valentía de los o j o s , t o d o cito cotvf-
pira , y todo e f t o es meneíter para introducir el defert-
• gaño en un entendimiento, ó infatuado, ó eítupido. La
mente del hombre en el eltado de unión al cuerpo, no
fe mueve folo por la razón pura, mas también por el me-
canismo del órgano ; y en cfte mecanismo tienen un
oculto, pero eficaz influxo las exterioridades expreífa-
das. Conviene también variar las exprefsiones , moftrar
la verdad a diferentes luces , porque cito es como dar
Vuelta á la muralla para ver por donde fe puede abrir la
brecha. Ello, en el cafo dicho fe logro elfin,como pue-
den teítificar mas de veinte Religiofas del Convento
mencionado, que viven oy , y vieron el fuceflb. No fo-
lo en ella ocaíion ; también en otra logré iluftrar á un
loco mucho mas rematado , haciéndole conocer el er-
ror , que fin intermifsion trahia en la mente muchos
años havia. E s verdad, que en elle mucho mas prefto fe
apagó la luz recibida, de modo, que apenas duró dos mi-
nutos el defengaño. Tampoco yo iniifti con tanto em-
peño, porque no havia la necefsidad, que en el otro,
cafo.
26 Confieüb, que en una perfecta demencia no ha-'
vrá reCurfo alguno ; es precifo , que reste alguna cente-
Uka de razón, en quien fe encienda efia paíiagera llama-.-
En la ceniza, por mas que fe fople , no fe producirá la
mas leve luz. Pero quando fe halla una perfecta demen-
cia? Pienfo, que nunca, ó cafi nunca. Apenas hai loco,
que en quanto pienfa , dice , y hace , desatine. Todo el
negocio confute en acertar con aquella chlfpa, que lia
quedado, y faber agitarla con viveza. Nadie nos pida
lecciones para practicarlo, porque fon inútiles. Es obra
de el ingenio ; no de la instrucción.
• 2 7 Los exemplos alegados prueban fuperabundan-
te-
D I S C U R S O XI. 345"
cemente nucílro intento. Si es poísible reducir á la ra-
zón á quien tiene dañado juntamente con la Imaginati-
va el entendimiento , mucho mas fácil ferá reducir á
quien lolo tiene viciada la Imaginativa, fin lefion algu-
na de parte del entendimiento; efpecialmente quando,
como en ei cafo de la queftion, el vicio de la imagina-
tiva es folo rcfpectivo á objeto determinado. De todo
lo alegado en eñe Difcurfo fe concluye , que hai razón
para ei Güilo , y que cabe razón , 6 diíputa contra el
(Juño.
EL N O SÉ Q U É ,
DISCURSO XII.
§• I-
N muchas producciones, no folo de la
Naturaleza, mas aun del Arte, encuen-:
tran los hombres , fuera de aquellas
perfecciones fujetas á fu comprehen-
íion, otro genero de primor mifterio-
fo , que quanto lifongea el gufto atormenta el entendi-
miento; que palpa el fentido, y no puede defzifrar la ra-
zón ; y afsi al querer explicarle , no encontrando voces,
ni conceptos, que fatisfagan la idea, fe dexan caer def-
alentados en el rudo informe de que tal cofa tiene un
no se que, que agrada, que enamora, que hechiza , y no
hai que pedirles revelación mas clara de eñe natural
mifterio.
2 Entran en un edificio , que al primer golpe que
da en la villa, los llena de gufto , y admiración. Repaf-
fandole luego con un atento examen, no hallan , que ni
Torn.FI, X'x por
34<5 f
E - N O SE QUE.
por ib. grandeza, ni por la copia de luz, ni por la precio-?
iidad del material, ni por la exacta obfervancia de las re-
glas de Arquitectura exceda, ni aun acafo iguale á otros
que han vilto fin tener que guftar , ó que admirar en
ellos. Si les preguntan, qué hallan de exquifito , ó pri-
morofo en elle, refpondcn, que tiene un no sé que, que
cmbelefa.
3 Llegan á un fitio deliciólo , cuya amenidad cóf-
teo la naturaleza por si fola. Nada encuentran de ex-
quifito en fus plantas; ni en fu colocación, figura,6 mag-
nitud, aquella eftudiada proporción, que emplea el arte
en los plantíos hechos para la diveríion de los Princi-
pes , 6 los Pueblos. No taita en él la criítalina hermo-
fura del agua corriente , complemento precifo de todo
litio agradable , pero que bien lexos de obícrvar en fu
xuríó las menfuradas direcciones , defpeiios , y rcfaltes,
con que fe hacen jugar las ondas en los Reales jardines,
errante camina por donde la caíual abertura del terre-
no da pallo al arroyo. Con todo, el fitio le hechiza ; no
acierta á falir ele él, y fus ojos fe hallan mas prendados
de aquel natural deíaliñó, ciuc de todos los artificiólos
primores , que hacen oítentofa, y grata vecindad á las
quintas de los Magnates. Pues qué tiene elle fitio , que
no haya en aquellos? Tiene un no sé qué , que aquellos
no tienen. Y no hai que apurar, que no paifarán de
aquí.
4 Veen una dama ; ó para dar mas fenfible idea del
aiTumpto , digámoslo de otro modo : Veen una gracio-
íita Aldeana, que acaba de entrar en la Corte , y no bien
fixan en ella los ojos , quando la imagen , que de ellos
trasladan á la imaginación , les reprefenta un objeto
amabilifsimo. Los mifmos que miraban con indiferen-
cia, ó con una inclinación tibia las mas celebradas her-
mofuras del pueblo , apenas pueden apartar la villa de
la ruftica belleza. Qué encuentran en ella ele ungular?
L a tez no es tan blanca como otras muchas que vén to-
dos los dias, ni las facciones fon mas ajuftadas , ni mas
rafgados los ojos, ni mas encarnados los labios , ni tan
ef-
DISCURSO XII. 347
efpaciofa la frente, ni tan delicado el talle. K o importa.
Tiene un no sé qué la Aldcanita, que vale mas que todas,
las perfecciones de las otras. No hai que pedir mas,que
no dirán mas. Efte no sé qué es el encanto de fu volun-
tad, y el atolladero tic fu entendimiento.
§• II.
*" '
c m
bien, no hai efpccie alguna de ob-
r a
§. III.
?f ' ^ 7 0 folo fe eftiende el no sé que á los objetó?
1 \ | gratos, mas también á los enfadofos : de
fuerte, que como en algunos de aquellos hai un primor
que no fe explica, en algunos de ellos hai una fealdad,
que carece de explicación. Bien vulgar es decir: Fulano
me enfada fin faber por qué. No hai fentido que no re-
prefente elle, ó aquel objeto defapacible , en quienes hai
cierta qualidad difplicente, que fe refifte á los conatos,
que el entendimiento hace para explicarla, y últimamen-
te la llama, un no sé qué que difgufta , un no sé qué que
faftidia, un no sé qué que da en roílro, un no sé qué que
horroriza.
8 Intentamos pues en el prefente Difcurfo explicar"
lo que nadie ha explicado, defzifrar elle natural enigma,
facar eíla coficofa de las miíleriofas tinieblas en que ha
citado, halla ahora ; en fin decir lo que es efto , que
todo el mundo dice que no fabe
qué es.
DISCURSO XIL;
§• I V .
«p¡ Ara cuyo efecto fupongo lo primero , qne los
X objetos que nos agradan (entendiéndote def-
'de luego, que lo que decimos de ellos es igualmente en
fu genero aplicable á los que nos defagradanj fe dividen
en limpies, y compueílos. Dos, ú tres exemplos explica--
rán ella diviiion. Una voz fonora nos agrada, aunque
efte' íixa en un punto , eílo es, no varié, ó alterne por va-
rios tonos, formando algún genero de melodía. Efte es
un objeto limpie del güito de el oído. Agracíanos tam-
bién, y aun mas, la mifma voz procediendo por varios
puntos difpueítos de tal modo, que formen una combi-
nación mufical grata al oido. Efte es un objeto com-
pueíto, que coníiite en aquel complexo de varios pun-
tos, difpueítos en tal proporción , que el oido fe prenda
de ella. Afsimifmo á la villa agradan un verde efmeral-
dino, un fino blanco. Eftos fon objetos limpies. Tam-
bién le agrada el juego que hacen entre si varios colo-
res (v. gr. en una tela , b en un jardin) los quales eítán
refpectivamente colocados de modo, que hacen una har-
xnonia apacible á los ojos , como la difpoficion de dife-
rentes puntos de muíica álosoidos. Efte es un objeto
compueíto.
1 0 Supongo lo fcgundo, qué muchos objetos com-"
pueítos agradan, b enamoran, aun no haviendo en ellos
parte alguna, que tomada de por si lifongee el güito.
Eílo es decir, que hai muchos , cuya hermofura coníiite
precitamente en la reciproca proporción , ó coaptación,
que tienen las partes entre si. Las voces de la muíica '
tomadas cada una de por sí, b feparadas , ningún atrac-
tivo tienen para el oido ; pero artificiofamente difpuef-
tas por un buen compofitor, fon capaces de embelcíar
el efpiritu. Lo mifino fucede en los materiales de un
edificio, en las partes de un litio ameno , en las diccio-
nes de una oración, en los varios movimientos de una
danza. Generalmente hablando; que las partes tengan
Por
¡ 50 B L No S E Q U E .
por si miímas hcrmofura, ó atractivo, que no, es cierto
que hai otra hermofura di'tinta de aquella, que es la del
complexo,} confine en la grata diípoíicion, orden,y pro-
7
§. v.
O E n t a d o s ellos fupueílos , advierto , que la
\ 3 duda, ó ignorancia expreííada en el no sé
qué, puede entenderle terminada á dos cofas diilinras,
al qué, y al por qué. Explicóme con el primero de los
exemplos propueílos en el num. 5. Quando uno dice:
tiene efta voz un no sé qué, que me deleita mas que las
otras, puede querer decir , ó que no fabe qué es lo que
le agrada en aquella voz, ó que no fabe por qué aquella
voz le agrada. Mui frequentemente , aunque la expref-
fion fuena lo primero, en la mente de el que la ufa íigni-
fica lo fegundo. Pero que fignifique lo uno, que lo otro,
yees
DISCURSO XII. '351
yeés aquí defzifrado el mifterio. El qué de la voz, pre-
cifamente fe reduce á una de dos cofas, ó al fonido de
ella (llamafe comunmente el metal de la voz) ó al mo-
do de jugarla; y á cali nada de reflexión que hagas , co-
nocerás qual de ellas cofas es la que te deleita con efpe-
cialidad. Si es el fonido (como por lo regular acontece)
yá labes quanto hai que faber en orden al que. Pero
me dices : no ella refuelta la duda , porque elle fonido
tiene un no sé qué, que no hallo en los fonidos de otras
voces. Refpondote (y atiende bien lo que te digo) que
elle que llamas no sé qué, no es otra cofa que el fer indi-
vidual del miímo fonido, el qual perciben claramente tus
oídos, y por medio de ellos llega también fu idea clara
al entendimiento. Acafo te matas, porque no puedes de-
finir, ni dar nombre á eíle fonido fegtin fu ser indivi-
dual. Pero no adviertes, que efio mifmo te fucede con
los fonidos de todas las demás voces que efcuchas? Los
individuos no fon definibles. Los nombres, aunque vo-
luntariamente fe les impongan, no explican, ni dan idea
alguna distintiva de fu ser individual. Por ventura lla-
marle Fulano Pedro , y Citano Francifco , me dá algún
concepto de aquella particularidad de fu ser, por la qual
cada uno de ellos fe distingue de todos los demás hom-
bres? Fuera de cito, no ves, que tampoco das , ni acier-
tas á darílíe, nombre particular á ninguno délos foni-
dos de todas las demás voces? Créeme pues , que tam-
bién entiendeslo que hai de particular en cffe fonido,
como lo que hai de particular en qualquiera de todos
los demás ; y fol© te falta entender que lo entiendes.
13 Si es el juego de la voz, en quien hallas el no sé
qué (aunque efto pienfo que rara vez fucede) no podré
darte una explicación idéntica, que venga á todos los
cafos de efte genero, porque no fon de una efpecie to-
dos los primores, que caben en el juego de la voz. Si
yo oyeífe eífa miíma voz , te diría á punte fixo en qué
cftá cíTa gracia, que tu llamas oculta. Pero te explicaré
algunos de elfos primores (acaíb todos) que tu no acier-
tas" á explicar, para que, quando llegue el cafo, por uno,
3 52 EL NO SE QVT..
§• VI.
18 L excmplo propueño da una amplifsima luz
JH^, para dcfzifrar el no sé qué en todos los de-
más objetos, á qualquiera fentido que pertenezcan. Ex-
plica adequadamente el qué de los objetos limpies , y el
por qué de limpies , y compuellos. El por qué es uno
mifmo en todos. El qué de los limpies es aquella dife-
rencia individual privativa de cada uno, en la forma que
la explicamos en el num.12. De fuerte , que toda la dis-
tinción, que hai en orden á cito entre los objetos agra-
dables, en que no fe halla no sé qué, y aquellos en que fe
halla, confine en que aquellos agradan por fu cfpecie , ó
ser efpecifico, eftos por fu ser individual. A eñe le agra-
da el color blanco por fer blanco, á aquel ei verde por
Ser verde. Aquí no encuentran miilerio que dcfzifrar. La
efpecie les agrada ; pero encuentran tal vez un blanco , ó
un verde, que fin tener mas inteníb el color les agrada
mucho mas, que los otros. Entonces dicen , que aquel
blanco, 6 aquel verde tienen un no sé qué , que los ena-
mora ; y eñe no sé qué digo yo, que es la diferencia indi-
vidual de elfos dos colores ; aunque tal vez puede con-
íiftir en la infeníible mezcla de otro color, lo qual ya per-
tenece á los objetos compílenos , de que trataremos
luego.
1 9 Pero fe ha de advertir, que la diferencia Indivi-
dual no fe ha de tomar aqui con tan exacto rigor philo-
fophico, queá todos los demás individuos de la mifma
cfpecie eñe negado el proprio atractivo. En toda la co-
lección de los individuos de una efpecie, hai algunos re-
ciprocamente mui femejantcs, de fuerte, que apenas los
fentidos los diñinguen. Por consiguiente ii uno de ellos
por fu diferencia individual agrada, también agradará
el otro por la fuya.
•20 Dixe en el mira, 1 8 . que el exemplo propuefto ex-
plica adequadamente el qué de los objetos Simples. Y
porque á cito acafo fe me opondrá , que la explicación
del
DISCURSO XII.
del manejo de la voz no es adaptable á otros objetos
diílintos, por coníiguiente es inútil para explicar el qué
de otros. Reípondo, que todo lo dicho en orden al ma-
lí.-jo de la voz, ya no toca á l o s objetos limpies , lino á
los compueílos. Los gorgeos fon compueítos de varios
puntos. El defeanfo , y entonación no conílituyen per-
fección difunta de la que en si tiene la mufica que fe
canta, la qual también es compuerta : quiero decir , lolo
fon condiciones para que la mufica fuene bien , la qual
fe deshice mucho faltando la debida entonación , ó can-
tando con fatiga. Pero por no dexar incompleta la ex-
plicación del no sé qué de la voz , nos eítendimos tam-
bién al manejo de ella y también porque lo que hemos
eferito en ella parte puede habilitar mucho á los Lecto-
res para difeurrir en orden á otros objetos diferentifsi-
nios.
§• VII.
21 T 7 Amos ya á explicar el no sé qué de los o b -
V jetos compueítos. En eftos es donde mas
frequentemente ocurre el no sé qué , y tanto , que ra-
rifsima vez fe encuentra el no sé qué en objeto , donde
no haya algo de compoficion. Y qué es c\no <é qué en
los objetos compueítos? La mifma compoficion. Quie-
ro, decir, la proporción, y congruencia de las partes, que
los componen.
22 Opondrafeme, que apenas ignora nadie , que la
fymetria, y recia difpoíicion ele las partes hace la princi-
pal, á veces la única hermofura de los objetos. Por con-
íiguiente efta no es aquella gracia mifteriofa, á quien por
ignorancia, b taita ele penetración fe aplica el no sé qué.
z¡ Refpondo , que aunque los hombres entienden'
cito en alguna manera, lo entienden con notable limita-
ción, porque folo llegan á percibir una proporción de-
terminada comprehendida eir angoftifsimos limites , o
reglas, fiendo ais i , que hai otras innumerables propor-
ciones [diftintas de aquella , que perciben. Explicaráme
Yy 2 un
f§5¿ EL N O SE QUE.
unexemplo. La hermofura de un roftro es cierto, qué
confifte en la proporción de fus partes, ó en una bien dif-
puefta combinación del color, magnitud,y figura de ellas.
Como cito es una cofa, en que fe intcreflan tanto los
hombres, defpues de penfar mucho en ello , han llegado
á determinar, ó efpecificar eíta proporción, diciendo,que
ha de fer de eíta manera la frente, de aquella los ojos, de
,1a otra las mexillas, &c. Pero qué fucede muchas veces?
Que vén efte , ó aquel roftro , en quien no fe obferva
aquella, cítudiada proporción , y que con todo les agra-
da muchifsimo. Entonces dicen, que no obftante effa
falta, 6 faltas, tiene aquel roftro un no sé qué , que he-
chiza. Y efte no sé qué, digo yo, que es una determinada
proporción de las partes, en que ellos no havian penfa-
do, y diftinta de aquella, que tienen por única , para el
efecto de hacer el roftro grato á los ojos.
24 De fuerte, que Dios de mil maneras diferentes, y
con innumerables diverfifsimas combinaciones de las
partes, puede hacer hermofifsimas caras. Pero los hom-
bres reglando inadvertidamente la immenfa amplitud'de
las ideas divinas por la eftrechéz de las tuyas, han penfa-,
do reducir toda la hermofura á una combinación tola,
b quando mas, á un corto numero de combinaciones ; y
en faliendo de alli, todo es para ellos un mifteriofo no
sé qué.
25 Lo proprio fucede en la difpoíicion de un edifi-i
cío , en la proporción de las partes de un íitio ameno.
Aquel no sé qué de gracia , que tal vez los ojos encuen-
tran en uno, y otro, no es otra cofa que una determina-
da combinación fymetrica colocada fuera de las comu-
nes reglas. Encuéntrate alguna vez un edificio , que en
eíta, ó aquella parte tuya defdice de las reglas eftableci-
das por los Arquitectos , y que con todo hace á la viña
un efe¿to admirable , agradando mucho mas que otros
mui conformes á los preceptos del Arte. En qué confute
efto? En que ignoraba elfos preceptos el Artifice que le
ideó? Nada menos. Antes bien en que fabia mas, y era
de mas alta idea, que los Artífices ordinarios. Todo lo
DISCURSO XII. 357
hizo fcgim regla, pero legua una regla fuperior,que exif-
te en fu mente, distinta de aquellas comunes , que la Ei-
cucla enSeña. Proporción, y grande ; fymétría , y ajufta-
difsima hai en las partes de ella obra.; pero no es aquella
fymetria, que regularmente fe cítudia , fino otra mas ele-
vada, adonde arribó por fu valentía la Sublime idea del
Arquitecto. Si cito Sucede en las obras del Arte , mucho
mas en las de la Naturaleza , por fer ellas efectos de un
Artifice de infinitafabiduria , cuya idea excede infinita-
mente, tanto en la inteníion, como en la exteníion, á to-
da idea humana, y aun Angélica.
2 6 En nada Sé hace tan perceptible eíta máxima,co-
mo en las composiciones Muficas. Tiene la Muíica un
Syftéma formado de varias reglas , que miran como
completo los profeífores; de tal fuerte, que en violando
alguna de ellas, condenan la composición por defectuo-
fa. Sin embargo fe encuentra una, ú otra compoficion,
que falta -á eíta, ó aquella regla,y que agrada infinito aun
en aquel paílage donde falta á la regla. En qué confiíte
cito? En que el Syftéma de reglas , que los Muficos han
admitido como completo , no es tal, antes mui incom-
pleto , y diminuto. Pero cita imperfección del Syftéma
folo la comprehenden los Compofitores de alto numen,
los quales alcanzan , que fe pueden difpenfar aquellos
preceptos en tales, ó tales circunstancias, ó hallan modo
de circunstanciar la mufica de fuerte, que , aun faltando'
á aquellos preceptos, leafumamente harmoniofa, y gra-
ta. Entre tanto los Compofitores de claífe inferior cla-
man , que aquello es una heregia. Pero clamen lo que
quiíieren ; que el Juez fupremo , y único de la Mufica es
el oido. Si la mufica agrada al oido,y agrada mucho, es
buena, y bonlfsima ; y Siendo bonifsima , no puede fer-
abfolutamente contra las reglas, fino contra unas reglas
limitadas, y mal entendidas. Dirán , que ella contra ar-
te, mas con todo, tiene un no sé qué, que la hace parecer
bien. Y yo digo, que eífe no sé qué no es otra cofa , que
eílár hecha fegun arte, pero fegun un arte fuperior al Su-
yo. Quando empezaron á introducirfe las Faifas en la
Mu-
3 5S Ei. No SE QUE»
Mufíca , yo sé que , aun cubriéndolas oportunamente,
clamaría la mayor parte de los Compoíitores, que eran
Contra Arte; oy yá todos las confidcran íégun arte, por-
que el arte , que antes eftaba diminutifsimo , fe dilató
con efte defcubrlmiento.
§. VIU.
27 \ Unque la explicación, que hafta aquí hemos
/V dado de el No sé qué, es adaptable á q L l a n -
to debaxo de ella confuía expreísion ella efeondido, de-
bemos confeífar,que hai cierto no sé qué proprio d: nuef-
tra efpecie, el qual por razón de fu efpecial carácter pi-
de mas determinada explicación. Diximos arriba , que
aquella gracia, ó hermofura del roftro, á la qual , por no
entendida,, fe aplica el no sé qué , confute en una deter-
minada proporción de fus partes, la qual proporción es
diftinta de aquella que vulgarmente eitá admitida como
pauta indefectible de la hermofura. Mas como quiera
que efto fea verdad , hai en algunos roltros otra gracia
mas particular , la qual, aun faltando la de la ajuitaela
proporción de las ficciones, los hace mui agradables.
Ella es aquella reprefeutacion, que hace el roftro , de las
buenas qualidades del alma, en la forma que para otro
intento hemos explicado en el Tomo 5.diícurfo 3. deíde
el fium.io. hafta el mira. i 5 . inclufiué , á cuyo lugar re-
mitimos al Lector, por no obligamos á repetir io que
hemos dicho alli. En el.complexo de aquellos varios fu-
tiles movimientos de las partes del roftro, efpeciaimente
de los ojos , de que fe compone la reprefeutacion ex-
preífada, no tanto fe mira la hermofura corpórea, como
la efpiritual; ó aquel complexo parece hermofo , porque
mueStra la hermofura del animo , que atrahe fin duda
mucho mas que la del cuerpo. Hii fugetos , que preci-
tamente con aquellos movimientos , y pofitura de ojos,
que fe requieren para formar una magcltuofa, y apacible
rifa, reprefentan un animo excelío , noble , perfpicaz,
complaciente, dulce, amorofo, activo, lo que fin libertad
les hace.amar á quantos les miran.
DISCURSO X I I . 35c?
28 Efta es la-gracia íuprema del femblantc huma-
no. Ella es la que, colocada en el otro fexo, ha encendi-
do pafsiones mas violentas, y pertinaces , que el nevado
candor , y ajuftada fymetria de las facciones. Y ella es
la que los mi lirios , cuyas pafsiones ha encendido , por
mas que la eílán contemplando cada inflante , no aca-
ban de defzifrar; de modo, que quando fe ven prccifa-
dos de los que pretenden corregirlos á feñalar el moti-
vo por que tal objeto los arraftra (tal objeto digo , que
carece de las perfecciones comunes) no hallan que decir,
lino que tiene un no sé qué, que enteramente les roba la
libertad. Tcngafe fiempre prefente (para evitar objecio-
nes) que ella gracia , como todas las demás que andan
rebozadas debaxo del manto del no sé qué, es refpectiva
al genio, imaginación, y conocimiento del que la perci-
be. Mas me ocurría que decir fobre la materia ; pero
por algunas razones me hallo precifado
á concluir aqui efte Dif-
curfo.
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L E
U N I V E R S A L .
DISCURSO XIII.
§• I.
. I el Amor, hablando en general, fe
pinta ciego, como fe deberá pintar
el amor proprio ? Horacio, que fué
dotado de bella inteligencia, parece
que folo á efte tuvo por ciego, o por
lo menos con íingularidad antonomaftica le aplico el
epithctoi Ccscus Amor fui. (Lib.i.Od.i8.) Pero yo, con
la venia de todos, dixera, que ni el Amor en general es
ciego , ni aun lo es el Amor proprio. Tiene el Amor
ojos , tiene vista , y vida fin defecto alguno , lino aquel
de que no fe exime aun la vifta corpórea mas perfpicaz.
Qué fucede en los ojos corpóreos? Que vén bien los
objetos que eftán á una determinada diftancia; pero íi
eftán , 6 mui remotos , ó demasiadamente cercanos , 6
no los vén , ó los vén folo confusamente. Eíto mifmo
fucede al Amor.
2 La Voluntad vé los objetos con los ojos del En-
tendimiento , ó por mejor decir, en el entendimiento ef-
tán los ojos de la voluntad. Afsi con grande improprie-
dad
/dad fe dícl, qué la voluntad es potencia ciega; no es ii«:
no potencia con viíla; pero fuvifta, ó fu potencia vifiva
es el mifmo entendimiento. Con impropriedad fe di-
ría;, que el alma para ver los colores es ciega, porque fo-
lo los vé con los ojos, que fon una parte del cuerpo.
Qué importa, íi eífa parte del cuerpo es, para éite efecto,
órgano del alma? Con mas razón'fe debe decir el-en-
tendimiento viíla de la voluntad , porque no hai entre
ellos la difcrepancia que hai entre alma, y cuerpo , ni
aun, distinción real en probabilifsima fentencia,
§• I I
f T 7Iendo pues la voluntad Con los ojos del en-*
V tendimiento , Veamos como vé con eftos
¿ojos los objetos. Con la mifma proporción en orden á
diílancia, ó proximidad, que los ojos corpóreos. Es me-
neller que eltén los objetos á una determinada distancia
de la voluntad, para que ella los vea claramente. Ni muí
lexos, ni mui cerca. Si tan lexos, que refpecto de la vo~
•Imitad fe consideren como totalmente eílraúos , no los
,Ve bien. Si tan cerca, que fe contemplen como proprios,
tampoco. En aquellos fe le ocultan las perfecciones, en
eftos los defectos. Es precifa una distancia media,y pro-
porcionada, para que ni la difplicencia oculte lo que hai
de bueno, ni el proprio interés efconda lo que hai de
«ríalo.
4 Sin embargo, efta analogía entre la viíla efpirl-
tual, y corpórea no es tan confiante, que no padezca al-
gunas excepciones. Sugetos hai, que con los ojos del
entendimiento vén mui bien aun lo mas llegadorque dif-
ciernen claramente lo que hai de malo , como lo que hai
de bueno en el paifano, en el pariente, en el bienhechor,,
y, lo que es mas, aun en si mifmos.
5 Digo, que hai fugetos , que conocen fus próprios
defectos. Pero en efta mifma excepción entra otra ex-
cepción. Hai cierto defecto, el qual ningún hombre co-
noce en si mifmo. Ninguno? Ninguno. Pues qué defec-
Tom.VIs " Zz to
EL ERROR Um VERSAL;
toferáefte? En una palabra lo digo : el defecto dé en-
tendimiento. Efta es la piedra donde tropiezan todos:
ella es la parte donde nadie fe conoce á si mifmo ; y aqui
es donde vuelve á reílablecerfe la analogía propueíta
entre la viña efpirítual, y corpórea. Ni fe vén á si mif-
mos los ojos corpóreos, ni fe vé á si mifmo. el entendi-
miento.
6 Son muchos los que conocen los defectos del pro-
prio. cuetpo, aun quando no fon mui fobrefalíentes. Al-
gunos, conocen, en si mifmos aun las malas difpoíicio-
nes del alma. No ignora eñe, que padece el vicio de ira-
cundo, aquel el de inconftante , el otro el de timido , y
afsi de los demás. Pero llegando al entendimiento , no
hai que penfar, que nadie fe conozca. Todos fe hacen
merced, ásiproprios. Necios, y Ent.endidos,,aunque no
con igual ceguera,, unos, y otros caen en el mifmo lazo.
El necio pienfa que es mui entendido ; y el entendido
pieufa que lo esmucho mas de lo que realmente es. Por
elfo doi á eñe Error el epitheto de Univerfal; con lo
qual eftá explicado el aífumpto de eñe Difcurfo..: de mo-
do, que el error univerfal. es el juicio ventajofo, y na
merecido, que todos hacen del proprio entendimiento.
Defpues de tantos. Errores Comunes,falga á eñe Theatrq
un Error Univerfal.,
§. III.
7 T ) A r a entender como es univerfal eñe error, fe
X debe confiderar, que al entendimiento no le
conftituye bueno 6 malo el faber mucho , ó poco. El
x
Zza; S.IVV
EL ERROR U N Í V E R U M
$. IV.
9 TV /TUchos. (itrio, todos) conciben en los Efplrirí
XVX tus una identidad tan limpie, tan unifor-,
me, que fe imaginan que ala primera ojeada del entena
dimiento eftá vino todo lo que es un Efpiritu; y aun lie--
ga á parecerles, que, vifto un Efpiritu,e.ítán viítos todos,
por lo menos los que fon de la milma efpecie. De aqui.
reinita, que no pudiendo contemplar en los entes efpiri-
tuales aquella variedad, que tanto nos agrada en los
materiales^fokx coníideran en la vifta clara de aquellos
(que fe fupone fernos impofsible en. el citado prefente,
un deleite de cortifsima duración , por quanto todo la
que hai que ver, eftá vifto en un inflante , y la repetida
íeprefent^jon de un mifmo objeto , en quien jamás fe
vé mas que lo que fe vio á la primera ojeada, bien lexos
de fer grata,, á corto efpacio de tiempo llega á fer fafti-
dlofa. Ellees un error procedido de falta de reflexión,.
Si Dios nos diefle luz para conocer claramente qual-;
quiera alma humana, qué Theatro tan vallo, y tan varia-
do fe prefentaria de repente á. los ojos de nueftro en-
tendimiento? Quanto numero de facultades diverfas!'
En cada faeultad,quanta multitud de d'iftintas deternfU
naciones!. Qué variedad tan prodigiofa de inclinación
nes, y afeólos! Ningunafelya tiene tantas hojas , quan-
tas fon las diferencias, que hai que. contemplar en cada»
una de las partes exprefladas.
1 0 Para hacer bien comprehenfible efto , liento una
fupoficion, que pienfo no. me negará ningún hombre de
mediano:entendimiento ; y es,.que entre tantos, millares
de millares, y aun millares de millones de hombres^ que
hai en el mundo, no- fe hallará alguno,, que fea perfecta-
mente parecido á otro, ni en el complexo de inclinacio-
nes, ni en el conocimiento de todos los objetos. Qual-;
quiera que lea efto, haga reflexión fobre fí ha vifto ja-
más dos. individuos tan acordes en; los afectos, que á
ano agradalíe todo lo que agradaba al otroj q tan conn
DISCURSO XIII. 36$
íbrmes en entender, que nunca difcrepaiTen en el diéta-
menv Es elertifsimo,. que no. Y de aquí fe infiere con
evidencia, que afsi la parte Intelectiva, como la Apetiti-
va de cada hombre ,. confia de un numero innumerable
de difpoficiones.diítintas ,pues á no fer afsi, feria im-
pofsible, que entre tantos millares de millones de indi-
viduos no fe repitieífe en algunos, y aunen. muchos,.e|i
mifmo complexo.
11 Toda la variedad, que hemos confideradoen el
¡entendimiento, y voluntad del. hombre, es menor que la
que hai que contemplar en.el amplifsimo feno de la. me-
moria : aquel feno,,digo,.capaz de contener el.ser inteli-
gible de todo, un mundo, y aun de muchos mundos ,.y
donde actualmente fe contienen millares de millares, de
aquellas.efpecies, que laEfcuela llama inteligibles, ó im-
preíla9. Qué Theatto tan vario , tan efpaciofo, tan au-
gufto aquel donde fe repreíenta al vivo la immenfa mo-
le del Cielo,, el cuerpo,.curfo^ yrefplandor.de todos-fus
Aftros; laTierra, el Aire, el Agua,con tanto numero fin
numero- de. cuerpos vivientes, inanimados ¿elementales;,
y mixtos!
12 Todoi elfo, y mucho-mas, que es impofsible in-
dividuar aquí, hai que contemplar en eLEfpiritu del
hombre, que tan limpie, tan uniforme fe rspr.efe.nta-al.
común modo de entender. Y o me imagino , que fi Dios
nos fuelle moftrando fuccefsivamente todo lo que hai
que ver en él, de modo que en cada minuto de tiempo
folo vielfemos lo que es reprefentable en un acto cimas
prccifivo del entendimiento, paliarían muchos centena-:
res de años, antes de verlo todo. Y o fin duda , fi fe me:
dieffe opción, antes, eligirla ver claramente una alma:
:
§• v.
13 £|Upuefto.pues, que, como hemos infinuado
<3 arriba, en el entendimiento hai que consi-
derar muchas facultades difuntas,, digo; que el error uni-
yerfal no es refpecrivo aqualquiera.de ellas , y mucho
menos á todas juntas, si. íolo en. orden á. una, pero la.
mas eífencial , que es la rectitud del juicio.. Infinitos
hombres hai, que conocen lindamente que otros fon
mas promptos en comprehender ,, mas ágiles en difcur-
rir, mas, felices en explicarfe, de. mas genio para efta , ó
aquella profefsion, de mas,vafta extenfion para abarcar
aun tiempo varios objetos ,,de mas inventiva,,&c. pero
fiempte le queda.un recinto,,y el, mas importante de to-
dos donde falvar fu. vanidad,,que es el juzgar rectamen-
te de las cofas,Una vez. que. fe. impongan, en los térmi-
nos.. Efte. es el punto en que nadie cede a nadie.. Bufi-
quefe al hombre , que mas modeftamente fien ta. de si
mifmo ;,confeflar.á,.que es poquifsimo lo. que fabe; que
es tardo, en comprehender, y aun;en:difcurrir ; que fe ex-
plica mal; y á.efte modo, otros muchos, defectos de fu
entendimiento : pero al mifmo tiempo- fe quedará en la
prefumpcion de que en orden á aquellos objetos ,.cuyos-
términos comprehende ,,dandofde el. efpacio neeetfario-
para meditar en.ellos ,nadie juzga con. mas- acierto..
y
§• VI.
Tj T^OK otro camino,y en distintas clrcunftancIaS
X & engañan frequentemente los hombres^
para no conceder exceílb en el entendimiento, aun á otros
que fe lo hacen mui grande. Oyen , 6 leen una Máxima
bien fundada, una Sentencia aguda,un difcurfo folido fo-
bre alguna de aquellas materias en cierto modo Extra fa-
cultativas, en que todos entienden algo;pongo por exera-
pío, en materia de coftumbres, genios, gobierno, ó polí-
tica. Supongo, que nunca leyeron antes, ni oyeron aquet
pensamiento, pero al momento que lo leen, les quadra
como verdadero , como en efecto lo es : hacenfe cargo
de la razón,y afsienten de plano á la nueva máxima; mas
no por effo tributan algún particular elogio al Autor.
Pues por qué no? Porque les parece que ya ellos alcan-
zaban lo mlfmo. Afsi con gran satisfacción propria, ef-
to, dicen, ya yo acá me lo conocía. Es verdad , que mil
veces fe havria tocado en las converfaciones, en que
ellos fe hallaban, la materia á que pertenece la máxima,
y nadie fe la oyó, ni cofa equivalente, ni aun , íi quieren,
confeffar la verdad, penfaron en ello jamás. Pues como'
es efto? Mienten quando dicen , que yá fabian aquello^
No por cierto. No mienten ; fe engañan.
18 Es de atlvertlr, que en ellas materias , que fon,;-
digámoslo afsi, de la jurifdiccion de todos-los hombres,
no hai verdad alguna, que no esté en algún modo cftanv
pada en los entendimientos de todos, por lo menos de
aquellos, que tienen el juicio bien puefto, y fon dotados
de una buena razón natural ; pero mui defigualmente,
fegun la desigualdad,que hai en los mismos cntendimiciir!
tos. En unos ella estampada con claridad , y diftincionj
en otros confufamente , y como en bofquexo : en unos
pintada con toda perfección ; en otros amagada folo;
en un rudo difeño : en unos tan brillante , que gozan dé
lleno-fu luz, y aun la pueden participar á otros; en otros
tan cubierta de fombras, que ni aun la perciben para -si^
Tom.VL Aaa tc'-j
2jó EL ERROR UNIVERSAL.'
teniéndola dentro de si mifmos. Quando pues eños fe-?
gundos leen aquella verdad, ó la oyen á alguno , que h
goza claramente, la luz, que elle les da , diíslpa aquellas
fombras que fe la ocultaba, y entonces viendo la verdad
dentro de fu proprio entendimiento , quedan muí hue-
cos con la prefumpcion de que aquello ya fe lo fabianj
y de aqui infieren, que fu alcance no es inferior al de
aquel que los alumbró.
ig O que engañados viven ellos! Ahí es nádala di-
ferencia. Apenas hai otro exceflo íubílancial de un en-
tendimiento á otro, fino el de entender aquel con clari-
dad lo que elle percibe folo confufamente. Corren pa-
rejas en eflo la villa corpórea, y la intelectual. Si de dos
fugetos , que tienen á igual diílancia de fus ojos un mif-
mo objeto, uno le ve con claridad, y otro confufamen-
te, no dudamos en pronunciar , que la villa de aquel es
buena, y la de elle corta. La mifma defigualdad fubíiíle
entre dos entendimientos, de los quales uno entiende
con claridad, otro con confufion el mifmo objeto , que
ella á igual diílancia de entrambos , ello es, que en or-
<len á fu inteligencia no haya tenido mas eíludio , ó en-
feñanza uno que otro.
§• VIL
5o ^ U e l e n los que alcanzan menos equivocarle,
v i / transfiriendo ella defigualdad de la facul-
tad intelectiva á otra dillinta, ello es, concibiendo , que
folo es claridad de explicación , lo que es claridad dé
inteligencia. Afsi les parece , que toda la ventaja , que
hai de parte del otro, es la de explicarfe mejor. Pero lo
primero, yo me imagino, que la ventaja de explicarfe
mejor viene por la mayor parte de la de entender mejor.
De dos Pintores, que igualmente fepan el ufo de los co-
lores para pintar, pero fean íriui defiguales en la clari-
dad de la vifta, fi tienen un mifmo objeto á tal diílancia
(aunque la fupongo igual refpeclo de entrambos) que el
uno le vea mui claramente, y el otro con mucha confu-
fion.
DISCURSO XIII. $yy;
fion, aquel le pintará muí bien , y efte muí mal. Y ello
por que ? No mas que porque aquel le vio mui bien,
y efte mui mal. Ahora bien : con las voces pintamos
lo que entendemos. El ufo de las voces igualmente le
faben los que tienen igual crianza , eíludio , y exercicío
en el lenguage. Con todo vemos, que tai hombre, que
ha tenido igual, y aun mas efcuela en el lenguage que
otro, no explica algunos objetos, que tiene en la men-
te , tan bien como efte. Por qué? Porque aunque en-
trambos faben el ufo de las voces, que fon los colores
que ílrven á pintar los conceptos, aquel pinta mal el ob-
jeto, porque con los ojos del entendimiento le vé mal,-
efto es, coníufamente ; y efte le pinta bien, porque le ve
bien.
21 Y para quitar toda duda en efta materia , pre-
gunto : Quando uno oyendo á otro dice, que fe explica
admirablemente,)'' le concede en efta parte una gran ven-
taja , no le entiende promptamente todo lo que dice?
Sin duda, y aun por ello alaba fu explicación: Luego, fa-
bia antecedentemente el ufo, y lignificación de todas las
voces, con que el otro fe explicó ; por coníiguiente en
efta parte eftan ¡guales. Luego toda la deíigualdad vie-
ne de entender efte mejor que aquel. Generalmente di-
go, que como poíl"ea bien el lenguage, qualquiera que fe
explica bien á si mifmo alguna cofa, fe la explica bien á
otro ; y no puede explicarla bien á otro , quien no fe J a
explica bien á si mifmo.
2 2 Lo fegundo digo, que en el cafo, en que efta-
mos , es claro , que no folo falta la explicación , mas
también el conocimiento. El que al oir un nuevo con-
cepto, cuya verdad percibe al inflante, juzga que aquello
yá fe lo labia, folo porque entonces fe le aclara en la
mente una obfeura idea del objeto , que tenia encerra-
da en ella, es manifiefto que fe engaña. Tenia la efpe-
cie, pero lin ufo. Tenia la idea , pero eícondida aun al.
mifmo depoíitario de ella. Faltábale al fugeto no folo
la explicación externa del objeto, mas también la inter-
na. No folo no fe exprimía en los labios, mas ni aun
Aaa 2 en
372 EL ERROR UNIVERSAL.
en la mente. Dé, pues, las gracias al que con fu luz le
íacb aquella idea de la obfcuridad en que yacía, y con
fu. cultivo hizo fructificar aquella femilla fepultada.
§. VIII.
•&3 T TAfta acjui hemos difcurrido en orden á los
JL X entendimientos cortos. De parte de los
excelentes concurren los mifmos principios, para que fe
engañen en el concepto, que hacen de si miímos ; no a
la verdad en juzgarte excelentes, pues fiendolo realmen-,
te, en ello no hai engaño ; fino en penfar que fu exce-
lencia eftá colocada en mas alto grado, que el que real-
mente ocupa. Para entender que ello es afsi, no hai lino
volver los ojos á los Efcritorcs mas infignes de todos
tiempos. Eftos fin duda hacían concepto de que acerta-
ban en quanto eferibian ; pues fi de alguna parte de lo
que eferibieron no hicieífen eífe concepto, no huvieraa
<efcrito eífa parte. Sin embargo ninguno fué tan feliz,
que, fegun el común, fentir de los Sabios, no haya erra-
do en algunas cofas: luego fe eítimaban en mas de lo
que eran. Ni vale refponderme , que acafo ellos acerta-
ron en todo, y el yerro eftá de parte de los Críticos , que
hallan que cenfurar en fus obras. No vale, digo : lo pri-
mero, porque la razón natural dicta, que nadie debe fer
admitido por Juez en propria caufa. Afsi no debemos
eftár al juicio, que los Autores hicieron de fus obras¡¡
fino al que hacen otros, en quienes fe fupone alguna ap-
titud para juzgarlas. L o fegundo , porque aunque con-
cedamos , que alguno de aquellos Autores deba prepon-
derar en el juicio de fus obras al de otro qualquiera Cri-
tico tomado en particular, mas no al común fentir de
todos, b cali todos ; por fer mucho mas verisímil que fe
•engañe uno, por excelente que fea, en caufa propria,que
muchos, aunque inferiores, en la agena.
24 Hacefe mas vifible efto , particularizando la re-:
flexión hacia los antiguos Philoíbphos. Y no confidere-
mo$ entre ellos, fino aquellos, á quienes el contentamien-
to
DISCURSO XIII.
£o uníverfal da la primacía del ingenio : Platón, digo,y
Ariftotcles. Qué duda tiene, que fueron eflos dos enten-
dimientos admirabilísimos? A cada pallo fe encuentran
en fus obras rafgos, que demueftran una fublimidad , y
penetración prodigiofa. Pero quien negará, que tam-
bién fe tropiezan grandes borrones en íus eícritos? Muí
lexos citaban ellos de penfar que lo fueffen •„ antes bien,
acafo prefumieron elevarle mas fobre los demás morta-
les, donde erraron mas torpemente,y donde mas impor-
taba acertar, que fué cu el concepto de la Divinidad. En-
trambos desbarraron aqui enormemente, aunque por di-
ferentes caminos. De todo lo dicho parece debe con-
cluirte, que univerfalmeute todos los hombres aprecian
el propi'lo entendimiento mas de. lo juño.
§• X.
28 T A fegunda objeción , que fe nos puede ha-
-fi—' cer, es, como dixe , experimental. Veemos
algunos hombres de bello entendimiento , los quales no
obitante fien ten mui modeftamente de fu capacidad , de
modo que bien lexos de hacerfe merced, parece que ni
aun la eítitnan fegun fu merito : luego no es univcrfal
el Error de que tratamos.
29 Refpondo, que el aífumpto del antecedente ad-
mite algunas grandes limitaciones. La primera es, que
los mas, de los que parece fienten modeftamente de el
proprio entendimiento, no exprimen lo que fienten. Es
afeitada fu modeftia, á fin de grangear con eífa afecta-
ción un nuevo aplaufo, feguros de no perder por ella,
ni rebaxar el concepto, que los demás han hecho de fu
capacidad. La fegunda es, que elfos mifmos , que real-
mente fienten con moderación de fu talento, forman ef-
fe concepto moderado, no en orden á aquella mas eílen-
cial, y primitiva facultad intelectiva , que confitte en
juz-
DISCURSO X I I L ^75
juzgar rectamente (y rcípecto de quien únicamente conf-
tituimos el Error univerfal) fino en orden á otras menos
fubílanciaícs, que hemos expreífado arriba. La tercera
excepción es de los Santos, los quales fin duda en orden
á todas fus facultades forman un concepto humilde , y
aun inferior al julio. Pero cito proviene de una gracia
efpccialifsima, con que Dios los favorece ; lo que no es
del cafo para nuefiro intento ; pues aqui hablamos de
lo que líente el hombre de si mifmo , dexado á las fuer-
zas naturales del proprio juicio , y prefeindiendo de los
auxilios preternaturales de la Gracia.
• J O Finalmente decimos,que permitido que haya uno,
ú otro fugeto rarifsimo , el qual por fer extrordinaria-
mente reflexivo haga concepto juño, perfecto, y adequa-
do de fu entendimiento , ello no obfta á la verdad de
nuefira Máxima; pues no pretendemos con todo empe-
ño, que el Error, de que tratamos , fea Univerfal meta-
phyficamente. Baílanos que lo fea moralmente; y la uní-
verfalidad moral no fe falfifica por la excepción de uno,
u otro particular entre millares de millares de individuos.
§.. XI.
31 " \ / A que hemos defeubierto ella enfermedad
X general del Linage humano , podremos
hallarle remedio? Rem difjicilem pojíulafii. Gran bene-
ficio haría al mundo qualquiera que nos defcubrielle al-
gún Efpecifico para curar ella dolencia, pues de ella na-
cen varios fymptomas perniciofifsimos á la fociedad hu-
mana. De la prefumpcion del proprio entendimiento
vienen tantas altercaciones, tantas furiofasdiiputas, que
turban las converfaciones , y los ánimos ; y fuelen parar
en injurias , mientras fatistecho cada- uno del proprio
talento, á todo trance quiere que valga fu dictamen. De
la prefumpcion del proprio entendimiento viene , que
tantos necios, que ignoran difsimuiar fu vanidad , lean
faffidiofos con ella a los demás hombres. De la fatisfac-
ción del proprio entendimiento vienen tantas murmu-
ra,-
"yj6 E L ERROR UNIVERSAL;
raciones, tantas quexas contra ei gobierno, y contra to-
do genero de gobiernos , donde ei inferior fin eítudio,
y fin practica, pretende corregir todas las operaciones,
y deíignios del Principe, del Ministro , y de el Prelado;
llegando efto á tal punto de ridiculez , que tal vez el
Ecleliaitico mas retirado del mundo cenfura con con-
fianza fuprema quanto fe dilpone en el Gavineto,y quan-
to fe obra en la Campaña. De la Satisfacción del proprio
entendimiento viene en infinitos , que profeífan laobe-
diencia, una obediencia violenta, que les eítraga el mé-
rito, y deífatlofsiega la vida; tiendo mui dificil, que exe-:
cuten con güito, lo que imaginan ordenado fin acierto.
De la Satisfacción del proprio entendimiento viene ea
gran parte la reinante peílilencia de la ambición ; por-
que el que fe juzga con capacidad Superior para el man-
do, ardiente aSpira Siempre á ocupar la filia. De la Satis-
facción del proprio entendimiento vienen los atrafíbs
de la República Literaria en todas las Facultades ; por-
que empeñándote necios oílados en impugnar lo que
diScurren modeltos entendidos , dexan dudo ib al publi-
co quien tiene razón ; y aun muchas voces hacen creer
que la tienen ellos, porque para perfuadir á los que no
encienden las cofas, Suele conducir mas el orgullo , que
el ingenio. Seria mui prolixo, fi quifieífe referir todos
los demás males, que ocafiona al mundo cite Error uni-
verSal.
3 a Seria yo fin duda uno de los mas achacofos de
eita general dolencia, Si prefumicífe haver diícurrido efi-
caz remedio, con que curarla. Sin embargo propondré
al publico uno de propria experiencia, con alguna con-
fianza de que ei que quisiere uíar de él, yá que no Se cu-
re perfectamente, podrá mejorar mucho.
33 En eita enfermedad, mas que en otra alguna de
quautas trata la Medicina de los, cuerpos , Se verifica el
famofo Aphorifmo, Cogrtitio morbi inventio eft remedí].
El que conoce en si mifmo cita enfermedad , yá ella cu*,
rado de ella. Pero en conocerla cita la dificultad. Aun-
que el entendimiento es reflexivo , no alcanzan , como
. . • DISCURSO XIII. ¡jj
liemos probado , fus reflexiones á ver la limitación,'
6 defectos de el proprio juicio. Pues como podrá
Verlos? Como vén los ojos corporales los Puyos : no
en si mifmo, fino en un efpejo , que por reflexión fe
íos prefente. Mas donde cíiá efle efpejo milagrofo?,
Hai innumerables en el mundo. Los Entendimientos
de todos los demás hombres fon otros tantos efpe-
j o s , donde cada uno puede ver la imperfección del
íuyo. Yá he dicho , que efte remedio es de propria ex-
periencia. Explicaré como ufo de él, para inflruir en :
§. XII.
5j OnfíefTo no obftante , que eñe remedio,'
fi no fe le añaden los ingredientes de
otras reflexiones, no alcanza a curar á todo genero
de fugetos. Hai algunos , que juzgan n o habla con
ellos el defengaño propueífo , por tener fundada en
mejor finca fu prefumpcion. Eiablo de los que le vén
aplaudidos, y oyen relonar fus alabanzas en las bocas
de otros muchos. Verdaderamente cita es una gente
difícil deconquiftar, porque fuñenta en a'.gun modo
fu vanidad á cofta del Publico, y tiene atrincherada
la Satisfacción propria tras de la elllmacion agena. Si
alguno fe empeña en combatir fu opinión , todo el
pueblo les firve de muro ; tal vez toda la Provincia,
y todo el Reino : porque dicen entonces , que el con-
cepto , que hacen de si miímos, es el concepto mifmo,
que de ellos hacen los demás ; afsi no es fu capricho
proprio, fino la voz publica quien los perfuade ias ven-
tajas de fu entendimiento.
Con
D I S C U R S O XIII. '¿jp
26 Con todo también para ellos daremos receta;-
la qual coníiíle únicamente en ladear un poco el ef-
pejo hacia la circunítancia mifma , que nos proponen
á fu favor. Veíte aplaudido ; diré á qualquiera de ef-
tos. Eftá bien. Pero te aplauden todos ? Vives muí
engañado íi lo pienfas ; ni aun creo que lo pienfes. No
huvo halla ahora hombre , que gozaífe tal dicha. Vés
los aplaufos , y no los vituperios, porque aquellos te
bufcan por la frente ; eílos por las efpaldas. Es impof-
fible , que tu entendimiento parezca bien á todos,
porque fon. nrachifsimos los que juzgan de las cofas
mui diferentemente que tu , y eílos necesariamente
p tenían que yerras á cada paílo. Siendo pues cierto,
que unos te aplauden , y otros te defeíliman , de qué
labes , que tienen razón aquellos , y no eílos ? Parece-
rante acaío aquellos ios mas difcretos. Eíle es el lazo
en que caes. Pero repara en los demás hombres, y ve-
rás , que ficmpre tienen por los mas difcretos aquellos
que fe conforman con fu opinión. Pues los vés enga-
ñar á cada paílo en eíle concepto , por qué no podrás
engañarte tu en el tuyo? Mas paífemos adelante. Doi,
que todos te aplaudan , ó por lo menos que te aplau-
dan todos ios entendidos, y difcretos. Pregunto : haf-
ta qué grado te aplauden, ó en qué altura colocan rti
entendimiento ? Confieífan por ventura , que en todo
aciertas ? Sin duda que no ; y á la villa tienes la prue-
ba , pues muchas veces impugnan tu dictamen en or-
den á varias cofas , y fon de contraria opinión. Lue-
go tu, que juzgas que fiempre aciertas , adelantas tu
vanidad mucho mas allá de el termino , adonde lle-
ga la agena eílimacion. Rebaxa pues de tu prefump-^
cion , halla colocarte en el grado donde te ponen los
que te aplauden.
37 Pero lo peor e s , que aun tienes mucho mas
que rebaxar. Lías ele rebaxar de los miífnos aplaufos
lo que añade la cortefania , lo que el hyperboic, lo
que la adulación. Rarifsimo.es el fugeto , que elo-*
'• Bbb z " gian-i
^ 8O E L E R R O R U N ¡ V BR S A i ;
•giando á otro en fu cara, no engrandezca el pánegyj
rico algunos palmos fobre lo que tiene en la idea. Ma-i
• chos fon naturalmente exagerativos , afsi en lo que
aprueban , como en lo que reprueban ; y cafi todos
lo fon en los elogios de fugeto prefente , porque el
defeo de agradar al elogiado es tranfcendente á todo
elogiante.
38 Pero fobre todo te encargo , que defiendas
.Con fuma vigilancia tu juicio de los aífaltos de los
dependientes, porque te le corromperán fin duda , íi
los crees. Una cofa bien notable voi á decirte. En el
difeurfo de mi vida he vifto afcender á innumerables
hombres de inferior á fuperior fortuna. A muchos de
eflos traté baftantemente en uno, y otro efiado. Afi-
fegurote con toda verdad, que en todos ellos , todos
iin exceptuar alguno , conocí con entera certeza mu-
cho mayor preíumpcion de la propria capacidad def-
•pues de elevados, que la que tenian antes de fu ele-i
vacion. En qué confifte efto , fino en que creen á tan-
tos aduladores , quantos fon los dependientes? Ayer,
ojue yacían en fortuna humilde , nadie aplaudía fu en-
tendimiento. Oy á cada momento les repiten , que
tienen un ingenio foberano , una compreheiofion pro-;
digiofa, una prudencia confumada. Quando los oyea
hablar de chanza , celebran como fazonadifsimos fus
chifles ; quando de veras, todas fon Sentencias dignas
de efiamparfe en marmoles : los adoran como Ídolos,
y los efeuchan como Oráculos. Con que los pobres
cegados del humo de los incienfos, fi antes erraban
mucho , ahora yerran mucho mas ; porque perfuadir
dos á que fu inteligencia es mui fuperior á la de los
demás hombres, folo fu capricho toman por regla pa-|
ra todo ; y entre tanto los mifmos , que publicamen-
te los veneran como prudentes , y fabios, ocultamen-
te los defpr.ecian como eftolidos , y ridiculos. A y mi-:
feros de ellos , fi dando otra media vuelta la rueda
de la Fortuna , los precipita á la baxeza en que antes
DISCURSO- X I I I . ' -381
Sitaban ! Entonces fe retira el aplaufo , y falé á publi-
co el vituperio.
3 9 Tengo noticia de un Religiofo , á quien , ha-
viendo afcendido fin mucho mérito á una de las mas
eílimadas Prelacias de fu Orden , muchos fubditos
fuyos le traftornaron enteramente por eíle camino,
porque conociéndole de genio intrépido , y duro,
no hallaban otro arbitrio para mitigar fu ira, 6 ga-
nar fu afeito , fino adularle , exagerando á cada paf-
fo el gran talento , que Dios le havia dado. Tragaba-
felo el cuitado , y fobre eííe fnpueíto rajaba, hendía,
ataba, y defataba , fin confultar otro entendimiento
mas que el fuyo. Acabófe el tiempo de la Prelacia , y
fe vio reducido al mifmo eftado , en que antes fe ha-
llaba. Entonces los mifmos, que antes le adulaban,
íin mucho rebozo le daban á entender , que quanto
hablaba , y difeurria , era un continuado defacierto.
Entonces, aunque con tardo deíengaño , cayo en la
cuenta , y con trille, y defconfolado gracejo decia á los
que le improperaban: Es pofsible que tan tonto foí>
Pues Padres míos , no me dirán adonde fe fué-aquel
grande entendimiento , que yo tenia mientras fui Pre-
lado ? No sé lo que reípondian ellos. Y o le refpon-
deria , que havia venido con la Prelacia , y fe havia ido
con la Prelacia , como fucede á otros muchos; y que
fe quexaíle de si mifmo , pues no le havria caufado
daño alguno la adulación , fi no fe huvieffc pueílo de
parte de ella fu credulidad.
40 Mirenfe pues los que ocupan puertos , donde
tienen dependientes, en el efpejo de eíte , y de otros
muchos. Ninguno dexará de conocer á algunos de
bien corta capacidad , los quales eílán perfuadidos á
que la tienen admirable , folo porque fe lo intima afsi
la adulación. Digafe pues cada uno asi mifmo: Por
qué no podrá fucederme á mi lo que veo fucede á ef-
te , á aquel, y al otro ? Por qué no podré yo eílár en-
gañado , como lo eílán ellos?
Ef-
'382' EL ERROR UNIVERSAL.
4 1 . Efta lección ílrve para infinitos de inferior for-
tuna , íi quieren aprovecharte de ella, Vuelven mui
huecos á fu cafa, 6 á fu celda, efte que acaba de pre-
. lidir un Acto en la Aula , y aquel que acaba de orar
en el Templo. Y efto por que ? Porque al pié de la
Cathedra, y del Pulpito recibieron mil norabuenas.
O incautos ! no haveis vifto á algunos , á quienes re-
putáis caíi de el todo incapaces para uno , y otro mi-
nifterio , recibir otras tantas en las mifmas circuns-
tancias? Diréis que aquellas fueron dictadas de la cor-
tefania , y eftas de la verdad. Pero también los otros
fe hacen efTa merced a si míanos ; y unos, y otros fois
Jueces incompetentes , porque juzgáis en caula pro-
pria.
42 O mortales! con todos habla la fentencia:
No/ie te ipfum, eftampada en las puertas de el Templo.
Delphico, Con todos hablan eftos avifos del
Theatro Critico.
IN-
Í N D I C E
ALPHABÉTICO
D E LAS COSAS NOTABLES.
B do antes àotros^ifc.io^.
n.23.
B
Boyle. ( Roberto ) Experi-i
Al/amo. Si fe ha per-
mentó fuyo, acerca de la
dido ? difc. 4 . n. 1 4 .
' refpiración, en la Maqui-
Hailo en Arabia, 1 1 , 1 7 . Y
na Pneumática -, difc. 8,-
en la America, n . 1 8 .
n.32.
$aptif;no. Deben fer bau-
Bruniquilda. (Reina) Su.
tizados debaxo de con-
Apología, difc.2. n . 5 8 .
dición los hijos de ma-
Buzos. Algunos Buzos
dre humana,y padre bru-
- Orientales eftán debaxo
to, difc. 1 . n . 1 3 4 .
de la agua mas de una
jBarclayo. Reparo fobre fu
hora, difc.8.11.31.
Argenis, difc.2.11.83.
c
Batracbomyomacbia. Poe-
ma atribuido áHomero;
qué figuiñea? difcurf.io.
Bayazeto. Emperador de
los Turcos. Averigúate
lo que le fuceuib con el
C ^Afié. El Árbol dele*?
_j ffe , no folo nace en
la Arabia, fino también
Gran Tamorlan, difc. 2 . en otros Paifes , difc. 4 .
n. 1 2 8 . n. 4 3 . Averiguante fus
Bellota. Explicación de la virtudes, ibi. n.fi.y 52.'
generación de las Plan- Canela. Si es uCinnamo-¡,
tas , con el exemplo de mo de los Antiguos? dits
una bellota, difc.6.11.2 r. curf.4.11.19. y 2 0 .
Biante. Exemplo de la juf- Cafsia Ligne a. Si es la qué;' 1
E
es de buena voluntad,
difc.i. 1 1 . 1 2 1 .
Entonación. En qué coníif-
F Abula de el Eftablcc?-
%
G n.j.
H
G Alfuenda. Hija de
Athanagildo Rey de
Efbaña. Caso con Chil-
H AbJar. No hai cofa
que parezca mas fá-
cil que el Hablar ; pero,
es- mui difícil, difeurf. 7 .
±
I,
no ella ligada á las 'reglas
comunes de la fymetria
humana , difc. 1 2 . n. 2 7 .
y J
y 28.
Hierba. La Nepenthes , fa- J Apon. Caíligo fevero de
la mentira , que fe di-
bulofa , difc. 4 . n. 4 8 . y ce en juicio,en el Japón,
5 1 . Las virtudes de la difc.9. n. 17.
Heliotropia , ridiculas, llkfcas. (Gonzalo de) Su
difc.2.11.37.La Hypecua- fentir fobre el FalfoNun-
na , nociva muchas ve- cio de Portugal, difc. 3=
ces contra la Dyfenteria, n. 1 5.
difc.4. 11.5 o. Lupo/lores. Noticia de uno
Hierbas. No fe han perdi- que fe fingió fer el Car-
do las Hierbas Medici- denal Simoneta , difc. 3 .
nales, difc.4. n . 4 1 . n . 2 0 . De otro que, en
Hippocrates. Critica délas París, fe fingió Embaxa-
Epiílolas que andan con dor de Períia, ibi. 11.2 1 .
fu nombre, difc.2. num. Impunidad, de la Mentira;
18. difc.9. todo, pag,2P3.
Hombres. Noticia de Hom- Inqu/fiJon. Es tabulo ib el
bres Marinos, difeurf. 7 . modo con que dicen fe
números 3 3 . 3 4 . 3 5. 36. introduxo en Portugal,
y todo el Diícurfo VIII. difc.3. todo, pag. 1 5 1 . y
p a g . 2 5 1 . H a i noticia en 11.7. El modo con que fe
Ariíloteles de hombres introduxo, difc. 5. n. 1 0 .
fylveftres, difc.8. n . 6 4 . Infeclos. Varias dalles de
Hormigas. Si fe hizo pro- Infectos , b gufanillos,
ceífo legal en la Ameri- minutifslmos, difeurf. 6,
ca contra la multitud n.40.
epidémica ele Hormigas? Inveiiiva , y Demonítra-
difc. 1 0 . 11,3 8. cion contra Atheiftas,
Hofpicios. Utilidad de los difc.6. n . 4 2 . 4 3 . &c.
Hofpicios, difc.i.n. %6. Jóvenes. Noticia de algu-
Hypecuana. Hierba contra nos jóvenes literatos,
las Dyfenterias;pero fiíu- difc.i. n.69.
ir-
¿c las cofas liotables. '391,
Jfraelitas. Faílidiaron el rentemente lasNaciones,
Maná en el Deíierto ; y que le hablan , difc 1 0 .
por qué ? difc, j i. n. 16, n.5.
y 18. Latón. Es el Oricbalco de
jfuczes. Reflexiones que de- los Antiguos, difcurf. 4 .
ben hacer los Juezes pu- n . 3 5 . Si huvo en otros
filanimes , quando hu- tiempos Latón natural?
vieren de fentenciar á ibi. 11.38. Si oy le hai en
muerte á algún malhe- algún Pais? n>3£.
chor, difc.i. n . 3 1 . Leeuvvenboeck.. (Antonio)
Obfervó que la malla
n.38.
Libros. Tirulos falaces de
libros, difc.2. n.p8.
L Andrico. Si es verdad
el cafo que fe dice ha-
ver lucedido entre Fre-
Liérganes. Lugar de las
Montañas de Burgos , y
Patria de un hombre
degunda , y Landrico? que en ellos tiempos vi-
difc.2. n . 7 2 . vió, como Pez,en el Mar
Latín. Pronuncianle dife- años enteros, difcurf. 8 .
def-
3 9 *' índice Alp h a b e t i c d
ti cíele el numero j . & c . Mama. Curas ridiculas de
Limo/has. Gran parte de Manías extravagantes,;
lo que fe expende en li- difc.i 1 . iT.22. ítem: Cu-;
mofnas, no folo fe pier- ras particulares •, n. 23.;
de; pero daña, difcurf.i.
Manlio Torquato. Cruel-;
Locución. Si el ufo de la dad cjue executó-con fu
habla, ú de la locución, hijo, difc. 1 . 1 1 . 2 7 .
fe podrá perder del to- Maravillas de la Naturales
do en alguna familia?dif- z.¡,difc.<5.todo,pag. 2:02.
curf. 8. n.5p. María. (Emperatriz) Apo-
Lucio Mallo. Pintor Roma- logía^ defenfa de laEm-'
no. Dicho fuyo mui agu- peratriz María de Ara»
do, difc. i o. n. 1 4 . gon, difc.2. n.8o.
Luis X/^.Obras deja mag- Memoria. Notable lefioii
nificencia de Luis XIV, de la memoria , difc. 8»;
Rey de Francia , difc. 1 . n.jp. 4 0 . 4 1 . &c.
n.48. Extravagancias de Mena. Verfos del Poetj
fus Aduladores , difc, p. célebre Juan de Mena^en
. n . 1 4 . Pafquin que fe le elogio de Don Enrique
pufo fobre fu mefa, dif- de Viiiena,difc.2.n.pj.
curf. 1 0 . n.$ 1 . Menendez. (Pedro) Ade-
Lycantbropia, Qué enfer- lantado de la Florida: fu
medad ? y razón de fu elogio, difc.i. n.2<5.
ctymologia, difc.8.9.45, Mentira. Contra la impu-
nidad de la yi/i'tf.//'.2,dif-
M
curf. p. todo, n.i.&c. La
Mentira oficiofa fuele
fer pcrnicipfa en fus re-
O Ceano. Myfterio de
fu fluxo, y refluxo,.
fu territorio? difcurf. 1 0 ;
difc.ó', n . j .
Ociojidad. Caíiígafe con pe-
na de muerte la Ociojí-
P
dad en la República de
las Abejas, difc. r. n. 8 6 .
Oólavia. Muger de Nerón..
P An.. Defcripcion del
Dios Pan de IQS Gen-
tiles, difc.7. n.15.
Fallamente acufada de Paradoxas Políticas, y Mo-
adulterio,difc. 1. n.p?. rales, difc.i. todo,pag.i.
Ojiciofa. (Man tira). Reinitas Pafquin. Uno que fe pufo
trágicas de las mentiras á Luis X I V . difcurf. 10»
oficiadas , difc. p. n. l o . n.31.
yu. Per/as. Leyes de los Perfas
Oficios. Debieran fcr here- contra la mentira,difc.p.
ditarios todos los Ofi- n.rp.
cios,difc.i. n.75. Obfer- Pezes. Noticia de algunos
• vabafe efto en Lacede- Monítruos medio hom-
• monia, y Egypto : y oy . .bres, y medio Pezes,elif-
curf.
d e las cofas notables. 391
cüvf.7. ri. 3 i. y 3 2 . Hif- ventor, num.9.
toria del Pez Nicolao, Portugal. Elogio de la Na-
< diíc.8. 11.19. Si los Pezes ción Portuguefa, difc. 3.;
duermen? ibi. n.36.
Pbiloxtno. (Poeta) Chille Pueblo. Debiera hacerfe-
1 curiofo que le paísó con ' confiar- al Magiftrado de
Dionyílo, dilc.ro. 11.17. qué fe S'uílentan - todos
Plantas. Touruefort•cono- los Individuos del Pue-
• ció 884-5. Efpecies de blo, difc.i. n . 8 1 . Efto fe
Plantas entre terreflres, obfervaba en Athenas, y,
y m ari ti m as, d i fc. 4 . n. 4 2. en Egypto, ibi.
Los muchos nombres de Purpura. Si fe ha perdido?,
una Planta, ocasionaron difc. 4. n. j .
el error de que fe haa
perdido algunas , ibi. n.
4 5 . y 46". El mifmo er-
ror procedió de las vir-
tudes fingidas que algu- JJevedo. (D. Francifco) :
nos Autores atribuyeron Defendiò à Epicuro,
á varias Piantas Medici- difc. 2 . 1 1 . 2 4 . Chiftes que
nales, n. 4 7 . y 4 8 . Noti- fe le atribuyen, difc. io./,
cia de una Planta incóg- numerosa. 8 . 9 . y 1 0 .
nita, difc. 5.11.9. Dificul- Quinto. (Carlos V.) Su elo^
- taeies fobre la produc- gio, difc.a. 1 1 . 1 0 4 .
ción de las Plantas , dif-
• curf.6. n.9. Excmplo del
modo con que una Plan-
ta fe produce, ibi. n.i 8.
iH'mio. (el Mayor) Qué Sin-
tió de los Diofes? difc. 2 .
R Atones. Si fe hizo pro'-;
ceffo legal contra
ellos., en Afturias , y en
n.34. Su Apologia, y de- otras partes? difeurf. 10.;
fenfa, ibi. 11.37. Elogios números 315. 3 7 . y 3 8 .
que los Eruditos han da- Razón del Gnjlo, difc. 1 l'e-
do á Plinio, ibi. 11.43. rodo, pag. 33 1 .
Pólvora. La invención de Reina. Apologia de una"
la Pólvora ha fido utilif- Reina de Efpaña,difcurf«
fima, difc. 1 . 1 1 . 2 . Su In- n.n.7<5.
Ddd z. Ref : r
\96 Infice Alphabetico
Rcfpiraciofi. Si los hom- El Satyro que , fd
bres podrán vivir fin tef- apareció á San Antonio,
pirar? difc.8. n.26. &c, y era Demonio, difeurf. 7.
n.30. n.ir.
Rigor. El que fe llama Ri- Secreto.Como fe debe guar-
gor de la juñida muchas dar? difeurf.pv m 20. 2 1 ¿
veces es cohveniente,dif- V 2-2. ,
. Clirf.2. n . I . i p . Sen. Modo de quitarle fui
Rifa. La Rifa que fe atri- mal olor,y faborydifc.4.
buye á Democrito , mas n.50. •
era Dogma , que exerci- Sepultura. Es rárlfsimo el
cio, difeurf.2. n.i 5 . cafo en que fe debe ne-
gar el honor de fepultür
S ra Eeleliaftica al qiieá si
mifmo fe quitó la vida,
difc. 1. n.i 55?.
N.
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