Está en la página 1de 1

AL CRISTO NEGRO DE ESQUIPULAS

Hoy vine a visitarte de mañana.


Tu templo parecía vacío, silencioso.
Yo, apresadumbrado, solo, pecaminoso.
Vine a rogar paz que de ti emana.
Buscando consuelo a mi vacía alma,
Para que me inundes de mucho amor
y deje de padecer el gran dolor
que agobia mi vida y no se calma.

Solo tu crucificado Cristo Negro harás posible


cambiar mi desventura para que sea pronto
hombre íntegro.

Ya me voy para dejar mi aventura.


Con fe en la vida, ya me integro.
Con calma, paciencia y sin locura.

También podría gustarte