CÓDIGO DE ÉTICA DE LA SOCIEDAD PANAMEÑA DE INGENIEROS Y ARQUITECTOS

Por la integridad, honor y dignidad de la profesión, los miembros de la Sociedad Panameña de

ingenieros y Arquitectos se comprometen a mantener una conducta honorable y digna, para lo
cual adoptan el presente Código de Ética.

5. Procurar estar siempre bien informado y actualizado a bien de mantener su competencia,

afanándose por aumentar su caudal de conocimiento, y poder ofrecer a otros la oportunidad de
actualizarse profesionalmente.

Bien, Sabemos que estamos en constante desarrollo, lo que hoy puede ser la última innovación
mañana puede superado. Por eso es importante mantenerse actualizado ya sea en programas,
herramientas, materiales, servicios y metodologías del campo laboral para así poder ofrecer a los
clientes lo último e incluso ayudar en docencia a los colegas creando así un intercambio de
conocimientos que permita el crecimiento profesional de la industria.

6. Abstenerse de emitir opinión que no esté basada en un conocimiento adecuado y en

convicción honesta sobre cualquier asunto de tipo profesional.

Una opinión es un juicio que se forma sobre algo cuestionable, por lo que es muy importante
cuidar lo que se dice respecto a ciertos temas. Resulta algo impudente emitir opiniones de lo que
no se conoce, de lo que no se está muy seguro o de lo que simplemente se escucha por rumores y
lo es más aún si es en el ámbito profesional ya que se puede afectar a terceros, a nuestro trabajo e
incluso incurrir en aspectos legales.

7. Respetar y hacer respetar las disposiciones legales que garanticen la preservación del
medioambiente y la vida humana.

A pesar de que en ocasiones la industria de la construcción ha sido criticada por el impacto que
puede llegar a causar en los ecosistemas la misma se encuentra continuamente en interacción con
el medio ambiente teniendo como prioridad el respeto y la conservación de este. Es muy
importante que los profesionales tengan en cuenta las diferentes normas que se establecen para
el cuidado del medio ambiente, como respetar las áreas protegidas. El profesional también tiene la
responsabilidad de garantizar un mejoramiento en la calidad de vida de las personas y en este
sentido crear métodos que sean accesibles y generen bienestar.

8. Evitar participar en licitaciones de obras en cuyo proyecto hayan intervenido.

Una licitación es un sistema por el que se adjudica la realización de una obra o un servicio,
generalmente de carácter público, a la persona o la empresa que ofrece las mejores condiciones.
La misma tiene una serie de requisitos por lo que no deben haber intereses propios entre el que la
solicita y quien la otorga.
9. Honrar los compromisos adquiridos con otros colegas y colaboradores en razón de cualquier
contratación o trabajo solicitado.

Todo compromiso que adquieran entre colegas se deben cumplir, por lo que hay que tener
cuidado con lo que se establece en dichos compromisos y velar por que todo se de de forma legal
y correcta para beneficio de los involucrados.

10. Tener el debido respeto y consideración para con sus colegas y colaboradores.

Es muy importante que se respete el trabajo de los demás así como a su persona, no se debe
hablar mal ni criticar a ningún profesional.

11. Ser extremadamente cuidadoso en la preparación, estudio y evaluación de licitaciones o

concursos.

No se debe mentir, ni alterar datos. Al momento de una evaluación se debe rendir un informe
técnico y solicitar las aclaraciones y explicaciones que a bien tenga a los proponentes.

12. Abstenerse de supeditar sus conceptos o criterios profesionales a alguna actividad partidista
o subalterna.

Los pensamientos, opiniones y juicios profesionales de los miembros no debe depender de política
ni de gremios ajenos.

13. Abstenerse de revelar datos reservados de carácter técnico, financiero o personales, sobre
los proyectos o intereses confiados a nosotros.

Los miembros que manejen ciertos datos deben tener prudencia, ya que son confidenciales y
pueden afectar el desarrollo del proyecto.

14. Acatar las decisiones que emanan de los organismos rectores del gremio a su más alto nivel,
como los son la Asamblea General y la Junta Directiva, siempre que tales decisiones no sean
contrarias a los estatutos de la Sociedad.

Los miembros de la SPIA deben recordar siempre que existen organismos superiores y se debe
respetar cada una de sus decisiones si las mismas no violan ningún estatuto ya acordado.