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TALLER AYUNO INTERMITENTE

Dictado por Lcda. Yaneth Hernández

Nutricionista – Dietista.

Mérida. Venezuela

.
La buena salud es algo normal y natural, somos nosotros mismos los
encargados de cuidarla y mantenerla; las enfermedades son una situación
anormal provocada por la violación de las leyes de la Naturaleza y los síntomas
de las enfermedades son el reflejo del esfuerzo del organismo para purificarse
y recuperar su estado natural.

“Se presenta la mayor herramienta que la Naturaleza ha dado al ser humano


para poder librar la causa fundamental de la enfermedad. El ayuno es conocido
como la cura universal que usan todos los seres vivos cuando tienen algún
inconveniente físico”.
Arnold Ehret.

La comida se ha convertido en una parte más del entretenimiento y comemos


sin necesitarlo, de tal modo que estamos obligando al cuerpo a trabajar y
almacenar más de lo que debería.
Contenido

1. Historia del ayuno

2. ¿Qué es el ayuno?

3. ¿Porque ayunar?

4. ¿Qué sucede durante el ayuno?

5. Beneficios

6. Mitos sobre el ayuno

7. Tipos de ayuno

8. Que comer durante el ayuno intermitente

9. Recomendaciones.

10. Precauciones.
1. Historia del ayuno

Si nos detenemos a observar a la naturaleza, descubriremos que los animales


se valen de su instinto para ayunar. Los animales salvajes, e incluso muchos de
los animales domésticos, evitan cualquier alimento cuando están heridos o
enfermos. Otras especies ayunan regularmente, como los osos y el resto de los
animales que invernan, y las focas, pingüinos y salmones machos durante la
época de apareamiento.

Sócrates, Platón y Pitágoras ayunaban para aumentar su fuerza física y mental,


y pedían a sus alumnos que les imitaran.

Durante muchos años, el hombre utilizó el ayuno como forma de curación,


hasta que la medicina le mostró lo que se consideró la mejor forma de curación
y conservación de la salud, «comer para conservar las fuerzas». Desde ese
momento el ser humano se convirtió en el único animal que come cuando está
enfermo, lo que origina la aparición de enfermedades crónicas.

En nuestra sociedad actual, la gran mayoría de enfermedades a las que nos


enfrentamos en el día a día, son causadas por excesos de todo tipo:
alimentarios, de trabajo, estrés, ruido y contaminación ambiental.
Nuestro metabolismo es el resultado de miles de años de evolución que nos
permitieron hacer frente a las dificultades del entorno. En la actualidad, las
condiciones que el ser humano ha creado para vivir (el estilo de vida
sedentario, la sociedad estresada y la mala alimentación) son perjudiciales para
el organismo, y conducen a la enfermedad.

La obesidad, la diabetes, la hipertensión, las dislipidemias y la arterioesclerosis


derivan en complicaciones cardiovasculares.

Esta combinación de factores, no es solo un problema de unos cuantos kilos de


más, se trata de un modo de vivir que enferma, y que reduce la esperanza de
vida.

De modo que es necesario que tomemos conciencia de nuestro cuerpo y


tomemos la determinación de salir del sedentarismo y la mala alimentación.
2. ¿Qué es el ayuno?

Es la abstinencia voluntaria a ingerir cualquier tipo de alimentos, a excepción


del agua, por motivos espirituales o con el objetivo de conservar la salud, o
recuperarse de una enfermedad.

AYUNO INTERMITENTE: Es un protocolo que alterna períodos de ayuno


durante 16 a 24 horas, con periodos de ingestión normal de alimentos, con el
objetivo de reducir el total calórico en un día y promover la utilización de las
reservas de grasa. Durante la fase de alimentación se eligen los nutrientes
necesarios para mantener en óptimas condiciones nuestros niveles de energía
y salud.
No se trata de una dieta en la que seleccionas los alimentos que consumirás
durante el día.

Más bien, es un patrón dietético u horario de alimentación en el cual


asignarás los alimentos que planees consumir durante el día.

Los regímenes dietéticos funcionan bajo una de estas dos premisas:

 Limitar la cantidad de calorías ingeridas.

 Limitar el tipo de alimento que se ingiere.

El ayuno intermitente no disminuye raciones, ni calorías durante la fase de


alimentación, lo que produce mayores niveles de saciedad y una menor
sensación psicológica de privación.
Por otro lado, el ayuno intermitente no prohíbe ningún alimento, pero si hace
hincapié en la necesidad de alimentarse de forma variada y balanceada durante
la fase de alimentación.

También promueve la práctica de una actividad física moderada para evitar la


pérdida de masa muscular.

3. ¿Por qué ayunar?

Los alimentos son la principal fuente de energía y nutrientes, pero también


suelen ser una fuente de toxinas.

En el intestino se absorben los nutrientes que necesitamos y se convierte en


residuos los que debemos expulsar, algunos de estos residuos son de difícil
eliminación, lo que provoca que se acumulen y generen trastornos en el
organismo. Una disfunción en el procesado de los alimentos puede provocar
una excesiva acumulación de sustancias tóxicas en el intestino, estos se
reabsorben, llegan al hígado y viajan nuevamente por todo el organismo a
través de la circulación.

A veces, abusando de determinadas comidas o medicamentos, podemos forzar


al sistema digestivo, lo que irremediablemente conduce a distintas afecciones:
colon irritable, intolerancias alimentarias, náuseas y diarreas regulares, entre
otras. A pesar de que las enzimas pancreáticas y hepáticas que actúan en el
intestino pueden degradar gran cantidad de sustancias, cuando se dan
problemas de hígado o de páncreas, las grasas y las proteínas no son bien
digeridas y, junto con los carbohidratos mal asimilados pasan al colon, donde
permanecen en estado de putrefacción. Esto provoca que el intestino esté
expuesto a sustancias tóxicas, una circunstancia que deriva en un trastorno
llamado permeabilidad intestinal. Entonces, el sistema inmunológico del
intestino empieza a fallar. Se abren agujeros en las vellosidades intestinales,
por donde pueden penetrar los alimentos sin digerir, que llegan a la sangre.
Frente a estas sustancias sin digerir, el cuerpo reacciona
desproporcionadamente, lo que da lugar a alergias. El organismo identifica
como agresores a estas sustancias que deberían nutrirnos.
Muchas enfermedades son producto de la permeabilidad intestinal: psoriasis,
dermatitis, asma, alergias...

Al practicar el ayuno darás un descanso al sistema digestivo, permitiendo que


el organismo ahorre energía, la que, en condiciones normales, se destinaría a
digerir y procesar los alimentos. Esta energía sobrante se invertirá en limpiar,
desintoxicar y expulsar, por fin, todas esas sustancias tóxicas que se acumulan
en él. Debes tener en cuenta que cuando abusamos de comida procesada y
saturada de sustancias tóxicas, el hígado es uno de los órganos que más sufren.
Porque es un gran agente filtrador y la mayoría de las toxinas pasan por él. Un
exceso de tóxicos impide su correcto funcionamiento.

Para potenciar los efectos del ayuno, mantener sano tu hígado y conseguir una
limpieza a fondo, es recomendable seguir unos sencillos pasos previos, que lo
descongestionarán y facilitarán su posterior depuración.

Durante los 15 días previos al ayuno, tomar, a primera hora de la mañana, una
cucharada de aceite de oliva con limón para limpiar el hígado, la vesícula y los
riñones. Tomar infusiones de diente de león, comer alimentos azufrados como
ajo y cebolla, y tomar jugos de frutas y verduras (jugos verdes).

Eliminar el consumo de productos lácteos y sus derivados, embutidos y carnes


procesadas, con esto se disminuye el exceso de ácidos grasos como el ácido
araquidónico, generador de prostaglandinas tipo 2, precursor de la inflamación.

Con esto se trata de dar descanso al sistema inmunitario asociado al intestino,


que debido a los excesos y a la elevada carga de trabajo que supone nuestra
alimentación, puede encontrase alterado y propenso a generar enfermedades
autoinmunes y trastornos como las infecciones respiratorias recurrentes.
4. ¿Qué sucede durante el ayuno?

Desde el punto de vista fisiológico, el cuerpo humano solo puede


estar en dos modos:

 El modo alimentación, en el que comemos y almacenamos las calorías


que estamos ingiriendo.

 El modo ayuno, en el que consumimos y quemamos nuestras reservas de


energía.

Mientras el cuerpo se encuentra en modo alimentación, obtiene la energía a


partir de la glucosa presente en la sangre, a la que puede acceder fácilmente,
de manera que no va a activar los mecanismos para obtener energía de las
reservas de grasa. Sin embargo, si no ha recibido alimento desde hace varias
horas, el cuerpo entrará en modo ayuno y tendrá que comenzar a quemar la
grasa para poder mantener sus funciones vitales.
Durante la ingesta normal de alimentos, en el estado post-absortivo, se
incrementan los niveles de glicemia, triglicéridos, aminoácidos y ácidos grasos
libres. Frente el incremento de la glucosa el cuerpo sintetiza y libera insulina,
esta transporta la glucosa a las células para ser utilizada como energía y
además activa los mecanismos de almacenaje (formación de triglicéridos,
empaquetamiento de glucógeno hepático y glucógeno muscular). El glucagón
disminuye.

En estado de ayuno, el cuerpo detecta los bajos niveles de glicemia, y activa los
mecanismos de consumo de las reservas, la insulina baja y aumenta el
glucagón, el cual libera el glucógeno hepático, luego el glucógeno muscular y
moviliza los triglicéridos y ácidos grasos para ser utilizados mediante la
gluconeogénesis como fuente de energía.

De forma más sencilla…

En las primeras 24 horas de ayuno, el cuerpo consume la glucosa presente en la


sangre, y la que se encuentra almacenada en forma de glucógeno, en el hígado
y los músculos. A partir de allí, comenzará a utilizar el glicerol contenido en la
grasa corporal, mediante la activación de rutas metabólicas como la
gluconeogénesis.
Durante el ayuno, el cuerpo vive un proceso de regeneración celular dado que
el sistema digestivo, descansa y puede utilizar la energía, que invierte en la
digestión, para la eliminación de alimentos descompuestos, así como de
bacterias patógenas que se encuentran en el intestino. Por otro lado, el ayuno
equilibra la bioquímica hormonal del individuo, llevándolo a un proceso de
auto-curación y mejora.
También se ha detectado una normalización de la sensibilidad a la insulina,
leptina y grelina, y de los niveles de hipertensión, obesidad, hiperlipidemia,
hiperglicemia (diabetes no insulinodependientes) así como en problemas de
piel, enfermedades reumáticas, alergias y procesos inflamatorios.

Con la práctica del ayuno desaparecen los antojos y los deseos de comer
carbohidratos, ya que se obtiene la energía a partir de las grasas, los niveles de
energía y vitalidad aumentan.

 Aumento de las catecolaminas: tanto la adrenalina como la


noradrenalina aumentan durante el ayuno. Ambos neurotransmisores
incrementan el gasto de energía durante la fase sin alimento, activando
la enzima lipasa y potenciando la quema de grasa. Es decir: no sólo
estarás perdiendo peso, sino que ese peso será en mayor porcentaje
grasa sobrante, y no músculo.

 Aumento de la secreción de hormona del crecimiento. La falta de esta


hormona en los adultos conduce al exceso de peso, ya que se trata de
una de las principales hormonas que facilita la quema de grasas. El ayuno
es un estimulante natural para la secreción de esta hormona.

 Descenso de los niveles de insulina. Después de comer, el páncreas


libera insulina para favorecer el almacenamiento de energía. La insulina,
por tanto, inhibe la quema de grasa (lipolisis) y la liberación de
triglicéridos almacenados en el cuerpo. Durante el ayuno, sucede lo
contrario, es decir, disminuye la producción de insulina y aumenta la
producción de glucagón, se movilizan las reservas y se incrementa la
quema de grasa.

Durante los primeros momentos de ayuno, los niveles de insulina se mantienen


gracias al glucógeno y a la glucogénesis, pero una vez usados estos recursos el
cuerpo pasa al modo quemagrasas. El descenso de esta hormona viene
acompañado de una reducción del exceso de sal y de agua, ya que la insulina
causa su retención en los riñones.
 Mejora de la sensibilidad a la insulina: de esta forma, tu cuerpo
necesitará generar menos cantidad para que surta su efecto. La
resistencia a la insulina está relacionada con la ganancia de peso y el
aumento del apetito y el riesgo de diabetes.

 Induce autofagia. La autofagia es el proceso por el cual las células se


deshacen de sus desechos: orgánulos celulares, proteínas dañadas, virus,
bacterias o incluso células completas. Se suprime después de las comidas
y se activa en los periodos de escasez. Además de limpiar el organismo,
mejora el sistema inmune protege frente a la neurodegeneración y
podría disminuir el crecimiento de algunos tipos de cáncer.
5. Beneficios

 Disminuye el riesgo de afecciones cardiovasculares y enfermedades


degenerativas crónicas debidas a los malos hábitos de vida.

 Permite la eliminación de depósitos sobrantes y restablece el correcto


funcionamiento del tracto intestinal.

 Disminuye afecciones dermatológicas, alergias y asma... Todas ellas


pueden tener su origen en la acumulación de toxinas.

 El ayuno restaura el estado de equilibrio del cuerpo y le aporta más


fuerza y salud, al mismo tiempo que aumenta su longevidad y su
capacidad mental y física.

 Es un método alternativo de curación, que ayuda a reestablecer la salud.

 Disminuye el riesgo de enfermedades cardiovasculares, diabetes,


enfermedades crónicas, presión sanguínea y triglicéridos elevados.
 Ayuda a tener mayor fortaleza y control mental y emocional.

 Con el ayuno, el organismo mantiene intactas las reservas energéticas


que utilizaría en el proceso de digestión, de forma que destina dichas
reservas a la curación y reparación de sus partes dañadas.

 Contribuye a la disminución de los altos niveles de insulina y mejora su


captación por parte de la célula.

 Favorece la pérdida de peso a expensas de grasa.

 Control del colesterol y de la glicemia.

 Disminuye los marcadores de inflamación, tales como la homocisteína,


la proteína C reactiva, o el ratio TC/HDL.

 El ayuno intermitente, tiene efectos beneficiosos sobre mecanismos


directamente involucrados en la pérdida de grasa
6. Mitos sobre el ayuno

 El desayuno es la comida más importante del día. Esta regla se ha vuelto


tan común en toda la comunidad de salud y ejercicio que se acepta como
una ley universal. Desayune como un rey, almuerce como un príncipe y
cene como un mendigo, es un dicho que solemos escuchar con
frecuencia, como un consejo de salud, pero no por tanto repetir, es
cierto. La palabra desayuno, se refiere a deshacer el ayuno, romper el
ayuno, es decir, comer después de una cierta cantidad de horas sin haber
ingerido alimentos, la palabra desayuno no hace alusión a comer
temprano, aunque esa sea la forma como lo entendemos ahora.

 Si no desayunas te baja la glicemia; a no ser que tengas tendencia a la


hipoglucemia, el cuerpo se encargara de regular y optimiza los niveles
adecuados de glucosa en sangre, de forma totalmente automática,
gracias al trabajo de la insulina y el glucagón. La primera se encarga de
retirar de la sangre la glucosa excedente y contribuye a almacenarla en
forma de glucógeno (glucogenogénesis) o grasa (lipogénesis). El
glucagón, en cambio, libera la glucosa almacenada para que sea
utilizable.

 Si desea bajar de peso, asegúrese de comer seis comidas pequeñas


durante el día para acelerar su metabolismo de modo que se mantenga
operando a su máxima capacidad durante todo el día. Es cierto que
después de cada comida existe un incremento en la tasa metabólica,
conocido como Efecto Termogénico de los Alimentos (ETA), pero este es
proporcional al número de calorías que se ingiere y depende de la
composición de macronutrientes de cada comida. Esto quiere decir que
si ingerimos la misma cantidad y el mismo tipo de alimentos, es
indiferente si se ingiere en una comida o en siete, ya que durante el día
el gasto será el mismo.

 Ayunar produce pérdida de masa muscular, la mayoría de las personas


cree que si pasa mucho tiempo sin comer, el cuerpo empezará a utilizar
la proteína de los músculos para funcionar. En realidad, la digestión de
las proteínas es un proceso largo y lento, en el que influyen otros
factores, como el tipo de alimento que se ingiere o la cantidad de grasa y
fibra que contienen. Después de una comida rica en proteína y fibras, el
cuerpo tendrá aminoácidos disponibles en sangre durante muchas horas.

El catabolismo, de la masa muscular para obtener energía, sólo se producirá si


pasas más de 24 horas. Al principio, el cuerpo empezará a utilizar sus reservas
de glucógeno hepático y luego el glucógeno muscular, para mantener los
niveles de glucosa en sangre. Sólo cuando estas reservas se hayan agotado, el
organismo comenzará a utilizar las proteínas para producir glucosa (a partir de
24 horas desde el comienzo del ayuno); no obstante, si tu última comida ha
sido rica en proteínas, todavía tendrás muchos aminoácidos en la sangre y no
tendrás que preocuparte por eso.

Mientras existan aminoácidos libres en la sangre el cuerpo no sacrificará


tejido muscular para la obtención de energía.

Una comida puede tardar 5 horas o más en ser digerida.

Eso significa que si comes una cantidad importante de proteína, junto con otros
nutrientes que ralenticen la absorción como la fibra o las grasas puedes tardar
entre 16-24 horas en absorberlo todo.
7. Tipos de ayuno

Existen diferentes tipos de ayuno, desde el más estricto en el que se consume


únicamente agua mientras el organismo se nutre de sus reservas, pasando por
el que incluye la toma de zumos, caldos e infusiones, conocido como ayuno
Büchinger, hasta el ayuno en el que se dejan 2 días a la semana, sin comer, con
un aporte de mucho líquido.

Dependiendo del método que elijas tendrás un período de alimentación más o


menos restrictivo.

No es conveniente comenzar con ayunos de 16 horas inmediatamente.


Comienza con 10 horas, luego ve aumentando el número de horas de dos en
dos hasta llegar a 16, tomando en cuenta que no es tan complicado, ya que la
mitad de este tiempo lo pasaremos durmiendo.

Posteriormente, podemos ir aumentando las horas de ayuno y adaptándolos a


nuestras circunstancias, horarios de trabajo y ritmo de vida.
 AYUNO 16/8

Se trata de restringir el consumo de alimentos durante un período de 16 horas,


y seguido de 8 horas donde podrás comer.

En este caso puedes elegir entre omitir la cena o el desayuno, dependiendo de


las actividades que realices. Por ejemplo, si eliges realizar tu última comida de
la jornada a las 4:00 pm tendrás 12 horas de ayuno a las 4:00 de la madrugada
y ya a las 8:00 am podrás desayunar habiendo cumplido tus 16 horas. O por el
contrario podrías tomar la última comida a las 8:00 de la noche y volver a
comer a las 12:00 del mediodía siguiente, es decir para la hora del almuerzo.

Cuando ya tienes más experiencia, será más fácil extender tu período de ayuno
más allá de 16 horas.
La segunda comida puede ser una merienda a base de vegetales, frutas,
cereales integrales y/o semillas. El tamaño de la ración dependerá del volumen
de las otras dos comidas, siendo esta la más pequeña en relación a las otras.
 AYUNO 24/24

En este caso se alternan 24 horas ayunando y 24 horas comiendo


normalmente. A medida que avanzas en el ayuno intermitente te iras dando
cuenta que poco a poco la sensación de hambre irá disminuyendo y será más
fácil cumplir un protocolo de 24 horas.

Este protocolo es solo, para personas con mucha experiencia y conocimiento


en esta práctica.
En este caso si el último alimento del día anterior fue a las 9:00 pm, el primer
alimento del día siguiente deberá ser a la misma hora de la noche.

En este caso, conviene preparar el cuerpo gradualmente antes de realizar un


protocolo de 24 horas. Se comienza por extender el ayuno a 18 horas y luego
20 horas para probar cómo reacciona tu cuerpo y cómo te sientes. Esto se hará
solo una vez por semana.
El protocolo que sugerimos en este taller es el de 16/8.

De ninguna manera se recomienda hacer el protocolo 24/24 sin contar con


supervisión de un profesional.

La estrategia más apropiada para comenzar y probar cómo responde nuestro


organismo, es ayunar una vez a la semana durante 12 horas y luego ir
aumentando las horas y la frecuencia de forma gradual.

Todo depende de nuestro organismo, nuestros hábitos y estilo de vida.

Los beneficios del ayuno se mantienen en el tiempo.

El proceso de adaptación puede ser difícil para algunos, y en muchos casos será
necesario adaptar este nuevo sistema de alimentación a tu estilo de vida, tus
responsabilidades, tu trabajo, horarios de entrenamiento, entre otras
actividades.

8. Que comer durante el ayuno intermitente.

En todo momento nuestro cuerpo requiere de una alimentación variada y


balanceada con alimentos completos y en su estado natural; actividad física
regular y adecuada a la edad y a las condiciones de salud, descanso y sueño;
agua pura; aire fresco; baños de sol y control emocional. Si privamos al
organismo de alguno de estos requisitos básicos, su vitalidad se reducirá y
aparecerán las enfermedades.
Como hemos dicho anteriormente, este método no es una dieta. Al
incorporarlo no estarás realizando cambios en lo que comes sino en el horario
en el que tomas los alimentos.

Sin embargo, para que funcione correctamente, se debe asociar con un


régimen apropiado, que incluya frutas y vegetales frescos, granos
germinados, cereales integrales y carnes magras. Se eliminan por completo
los carbohidratos refinados, la comida chatarra, los endulzantes artificiales,
las bebidas gaseosas.

No tendría sentido comer de forma excesiva y poco saludable para después


hacer un ayuno de 16 horas, ya que aunque se podría perder peso, no se
estarían aprovechando todos los beneficios terapéuticos que produce el ayuno.

Elimina todos los alimentos procesados de tu dieta. Asegúrate de que los


alimentos que consumes durante el período de alimentación sean reales y
saludables. Comer alimentos procesados va en contra del propósito de
desintoxicación de tu cuerpo.

Durante este tiempo puedes consumir agua y bebidas con poco o ningún índice
calórico como el café o el té, siempre y cuando no tengan azúcar, lácteos, ni
ningún otro agregado.

La ingesta de líquidos no debe detenerse en ningún momento del día, y puede


ayudarnos a disminuir la sensación de hambre.
9. Alimentos que se pueden consumir durante el ayuno:

 Proteínas: Como huevos, carnes y pescados magros, todos ellos alimentos


idóneos para quemar grasas de forma rápida y eficaz, siendo posible comer la
cantidad de proteínas que se desee durante las 8 horas que corresponden al
periodo de alimentación. Cabe destacar que si la primera comida del día es alta
en proteínas se sentirá menos hambre a lo largo del mismo.

 Semillas y granos: Lentejas, garbanzos, caraotas, arvejas, frijoles guisantes,


linaza, ajonjolí, chía, amaranto, semillas de calabaza y girasol.

 Frutas, verduras y hortalizas.

 La patilla (Sandía), la lechosa (papaya) y el melón producen sensación de


saciedad y además aportan vitaminas.

 Los cítricos, como la naranja, el limón, y la toronja (pomelo) tienen un alto


poder antioxidante.

 La manzana y las uvas tienen un efecto depurativo.

 El rábano favorece la pérdida de peso aporta fibra y agua con un bajo nivel
calórico.
10.Recomendaciones.

 En los días de ayuno, es recomendable realizar ejercicio físico ligero para


evitar aumentar el estrés metabólico y causar un desequilibrio hormonal.
Luego, en el tiempo que no haces ayuno, aprovecha en realizar ejercicio
físico intenso.

 Es recomendable mantener cierta actividad física moderada, como pasear


durante 1 hora al sol, para no perder musculatura y beneficiarnos además
del aporte de vitamina D.

 No hagas el ayuno todos los días. Empieza por lo mínimo, ayunando 12 o


16 horas una vez a la semana, y según las sensaciones ve aumentando la
frecuencia del mismo. No se recomienda practicarlo más de 3-4 veces por
semana a no ser que lo necesites por cuestiones concretas.

 La siguiente comida al ayuno tiene que ser completamente normal. Se y


no atiborrarte a comer.

 Cabe recalcar que, sobre todo mientras te acostumbras, puede que en


algún momento sientas mucha hambre, estrés y cambios de humor. Si
esto ocurre, come algo. No te ocurrirá nada. El proceso de adaptación
podría ser gradual y lo mejor es seguir intentando y escuchar a tu propio
cuerpo.

 Aunque, tienes que ser consciente de ti mismo y encontrar el equilibrio


entre escuchar a tu cuerpo y ser demasiado condescendiente y permisivo.

 No te fuerces a ti misma si te sientes mal.


11. Precauciones

 Este tratamiento está dirigido a adultos sanos.

 Los niños no deben ayunar porque necesitan los alimentos para su


crecimiento y desarrollo.

 Personas con bajo peso, que tengan un IMC inferior a 18.5 Kg/m2

 Si tienes o has tenido desórdenes alimenticios como anorexia o bulimia.

 Personas con malos hábitos alimenticios, ya que se necesita comer


saludablemente para poder hacer ayuno.

 No deben ayunar personas que sufren de úlceras pépticas.

 Si tienes presión arterial baja, es importante consultar con tu doctor


antes de comenzar.

 Las mujeres embarazadas o que estén amamantando tampoco deben


realizar el ayuno.
 Si tienes problemas de fertilidad y/o estás tratando de concebir,
considera suspender el ayuno intermitente por el momento.

 Siempre es aconsejable consultar con tu médico, antes de iniciar


cualquier tipo de ayuno, para asegurarse de que estas sugerencias son
apropiadas para tu actual condición física y estado de salud.

 Ten en cuenta que las necesidades nutricionales de cada persona son


diferentes.

 Si eres una persona con tendencia a las hipoglucemias, no hagas ayuno.

 Si estás en periodos de mucho estrés y ansiedad por el motivo que sea.

 Si estás tomando medicamentos, debes consultar con tu doctor para


asegurarte de que el ayuno no interfiera con el tratamiento.

“cuanto más alimentes a un cuerpo lleno de impurezas, más lo perjudicarás”.

Hipócrates
Bibliografía

Barrionuevo, E.; Moreno, D. (2018) El poder del ayuno Guía práctica para bajar
peso, depurarte y aumentar el bienestar.

Bizkarrra, K. (2007) El poder del ayuno.

Fung, J. (2017) La guía completa del ayuno.

Garcia, A. (2014) Ayuno intermitente. Una solución flexible para perder peso, ganar
salud y simplificar tu vida

Morral, J. (2013) Ayuno Mágico Disciplina para cuerpo y mente.

Suvorick, A.(2009) La curación por el ayuno.


Elaborado por: Lcda. Yaneth Hernández

Colaboradora: Mariana Fajardo

Mérida, Venezuela. Mayo – 2020

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