SEIS TINAJAS EN EL EVANGELIO DE SAN JUAN

EL NUEVO NACIMIENTO
LA ILUSTRACIÓN DEL EVANGELIO DE SAN JUAN EN LAS BODAS DE CANÁ
Primer Relato: Nicodemo // "El pecador religioso"
Juan 3:1-21
Romanos 2:20; Eclesiastés 7:20; Romanos 5:12-13; 3:21-24

La visita de Nicodemo es un relato que divide el libro del evangelio según san
Juan en cuatro secciones por sus tres apariciones o menciones, es el único de los
relatos que coloca un orden cronológico al libro, pues se entiende un momento
presente, un pasado y un antes; luego antes de esta visita es la primera donde puede
verse el comienzo del ministerio del Señor hasta el capítulo 3, la segunda abarca hasta
la narrativa en el capítulo 7 versículos 45 al 52 prestando atención al versículo 50 el
escritor señala temporalmente que hay un antes diciendo el paréntesis siguiente "el
que vino a él de noche", es decir, antes de estos hechos; comienza aquí la tercera
parte que llega hasta el capítulo 19 versos 38 al 42, donde aparece de nuevo la cita del
escritor para mencionar un orden de aparición con otro paréntesis similar "el que antes
había visitado a Jesús de noche", el resto es la cuarta parte y final. Es claro que en
el relato el evangelista quiere abarcar los aspectos indivisibles de la divinidad y su
voluntad de salvar al pecador, mostrando además el plan diseñado para lograr esto.

Nicodemo guardaba la ley, pues era principal entre los judíos, por eso tenía una
reputación e imagen que mantener y por tanto vino de noche a Jesús, como era
instructor de la Ley, poseía mucho conocimiento en diversas áreas de religión y ciencia.
Los judíos tienen en su vida, la instrucción de aprender un oficio, pero los
pertenecientes a la tribu de Leví pueden acceder a ser sacerdotes, aún así cualquiera
que pueda pagarse estudios con un buen maestro de la ley podría llegar a ser un
escriba o doctor de la ley, puede compararse estos doctores de la ley, con los
abogados de nosotros los occidentales, se puede tener diversos cargos en el sistema
judicial, desde transcriptores, otorgadores de documentos, notarios, registradores en
fin, los judíos debían prepararse para esto desde niños. En la cátedra de Moisés se
preparan muchos haciendo litigio con sus maestros desde los 12 años de edad, según
el evangelio de Lucas 2:42 el Señor tuvo este encuentro con los doctores de la ley y
mostró por breve su conocimiento; un niño judío podía recibir clases de un buen
maestro o doctor de la ley, si sus padres podían pagarlo, o aprender el oficio de alguno,
sea el padre o alguno cercano a él; entonces, si según la escritura el Señor no recibió
instrucción, entonces tenía un oficio como lo dice Marcos 6:3, mi Señor era carpintero.

El hecho que Nicodemo le llame Rabí, esta mención distingue la estima que le
tuvo al Señor, claro está como lo dice el mismo, "sabemos que has venido de Dios
como maestro", sin duda alguna, el pecador ha reconocido la distinción del hombre, y
no se ha dado cuenta de con quien ha tenido su encuentro, sin duda alguna Nicodemo
aún no ha entendido la necesidad de su salvación, al parecer viene buscando más
sabiduría; es muy difícil para nosotros los hombres de mucho estudio de ciencia
cuando no hemos creído reconocer que para Dios todo es posible aún aquello que para
nosotros es ciencia, así que no solo se es rico en dinero, también en conocimiento,
ciencias, verbos o sentimientos; y cuán difícil es que un rico entre al reino de los cielos
dice el Señor, Mateo 19:26; Marcos 9:23; Lucas 18:27 y Mateo 19:16-23; Marcos
10:17-25; Lucas 18:18-25; Nicodemo no fue la excepción a esta regla, una tinaja de
piedra, muy endurecida y hastiado del conocimiento.

La enseñanza del señor Jesucristo es ilustrativa, el Dios que enseña a los

hombres uso la metáfora para enseñar a este hombre la necesidad del nuevo
nacimiento, debatiendo con su corazón en mismo lugar donde se encontraba arraigada
la ciencia y la lógica; justo donde nuestro Dios puede obrar el milagro, el sabio se
enfrentó al dilema de la pregunta ¿Puede un hombre nacer de nuevo siendo viejo?,
¿Puede acaso entrar por segunda vez en el vientre de su madre y nacer?, ciertamente
las respuestas a esta pregunta son negativas, Nicodemo se enfrenta a dos corrientes
de conocimiento humano, la naturaleza médico científico, y la historia bíblica de Adán,
esta última contradice el nacimiento natural de un hombre, para Nicodemo, estaba
oculto el misterio del postrer Adán. De esta manera ambas cosas son verdades de
hecho en lo que a la ciencia dice y de allí la pregunta de este fariseo.

Como la idea del nuevo nacimiento contradecía la filosofía del fariseo, Nicodemo
preguntaba acerca de esto y el Señor le cuestionaba acerca de su sapiencia al
respecto, puesto que alguno de los principios religiosos de los fariseos la inmortalidad
del alma, la resurrección y el castigo y recompensa eternos, al parecer entraba en
conflicto con la enseñanza del Señor acerca de nacer de nuevo, las respuestas del
Señor habían de ser espirituales para él; también Nicodemo como conocedor de la
historia de Israel, su nación, conoce la historia de los patriarcas, de tal manera que
Abraham y Sara ilustraban a él esta clase de milagros de la que habla el Jesús que ha
ido a visitar, puesto que un viejo, cuya simiente estaba seca, y una estéril, pudieron
tener un hijo en edad avanzada ya, relato que se encuentra en la Torah y básicamente
todo judío debía conocerla, la pregunta del nuevo nacimiento sería un paralelismo de
este milagro en cuanto a que era imposible que les naciera un hijo a Abraham y Sara,
el mismo que se llamó Isaac, y su pregunta análoga sería ¿Puede un hombre de
simiente seca y una mujer estéril procrear un hijo?, para Sara la respuesta fue “Hay
para Dios alguna cosa difícil?, un relato similar se repite en la historia del nacimiento de
Sansón en el libro de Jueces.

También por ser maestro de la ley, conocía ampliamente lo que allí estaba
escrito, principalmente los milagros que Jehová hizo al pueblo de Israel en el desierto,
luego, si el nuevo nacimiento no tiene fundamento físico razonable, tampoco lo tiene el
evento de salud que cita la escritura acerca de lo que escribió Moisés cuando levantó la
serpiente en el desierto, y los que creemos sabemos que así sucedió y conocemos que
se salvaron unos pocos según el libro de Números 21:4-9; hay dos preguntas en la
escritura que señalan el poder de Dios para obrar sobre todo entendimiento de los
hombres y ambas se hacen sobre un nacimiento, una está en Lucas 1:34-35 el
poderoso milagro del nacimiento del Señor y la otra hace referencia en este texto,
cuando Nicodemo pregunta en Juan 3:4 ¿Cómo puede un hombre nacer siendo viejo?,
y la respuesta es "con el poder de Dios", esto es lo que el Señor está enseñando, lo
que debe suceder para que opere el milagro de la salvación y pueda actuar el Señor es
necesario un acto de fe, si en aquel milagro del desierto no murieron los que levantaron
la mirada a la serpiente de bronce, los que miren la cruz donde fue levantado el Señor
Jesucristo y crean, no morirán, sino que su espíritu y su alma estará en manos del Dios
misericordioso para la redención, y a su tiempo tendrán vida y un cuerpo nuevo, acerca
de los demás la muerte ilustra la desgracia, es esto el nuevo nacimiento el cual es un
acto que no se puede discernir con ciencia o lógica, no hay manera de entenderlo con
teorías ni demostrarlo con la ciencia, al contrario estas cuentan la gloria de Dios porque
solo Él no está sujeto a ellas, ni a sus reglas.

El Señor intenta ilustrar a Nicodemo acerca de los tres aspectos de la salvación

del hombre, la voluntad del Padre y su amor y misericordia por el perdido pecador, la
necesidad de la obra del Hijo de Dios en la cruz del calvario y la necesaria intervención
del Espíritu Santo en el milagro que opera en el corazón del pecador, este último
ilustrado con los elementos del agua y el viento, así muestra el Señor que este gran
milagro de la Salvación es la oportunidad del nuevo nacimiento en el nuevo pacto que
habría de hacerse en el sacrificio hecho por el Hijo, con el derramamiento de sangre y
su resurrección, esta resurrección como muestra del poder y perfección de la obra
hecha y aceptada por el Padre, cuyo autor material podría decirse Es el Señor
Jesucristo, pero el autor intelectual por decirlo de alguna manera, quien inspiró que
fuera escrito por los profetas, la Ley y los salmos, es el Espíritu Santo.

Así entonces, Nicodemo se encuentra ante el contraste de las cosas terrenales

sujetas a las leyes, pero, su propia religión le indicaba que a su pueblo le habían
sucedido cosas inexplicables, que habían sido escritas y él las había estudiado, pero
como estaba maravillado de los milagros y las cosas que hacía el Señor, tal vez no
lograba entender las cosas celestiales, luego el Señor apela a su conocimiento de la
Torah para que recuerde que hay una relación muy cercana entre la palabra que sale
de la boca de Dios y los milagros, si el Señor puede hacer las cosas que el Padre hizo
en el desierto, también puede hacer el milagro más glorioso que es el de la salvación
del alma por medio del sacrificio del Hijo, la entrega del mismo Dios el cual su vida
pone por los amigos, y tiene el poder para poner la vida como también el poder para
volverla a tomar.

Nicodemo en su pregunta ¿Puede un hombre nacer de nuevo siendo viejo?,

también estimula a todos a meditar acerca de nuestra propia desdicha por pecadores, y
puede entenderse recordando a ICABOD el nieto de Eli, cuyo nombre significa SIN
GLORIA, aquel neonato recibió su nombre el mismo día que el arca fue tomada cautiva
por los FILISTEOS y sus Padres y su Abuelo murieron quedando en el desamparo, lo
que nos revela que NINGUN HOMBRE PUEDE SALVAR SU PROPIA VIDA, mucho
menos interceder por la de otro para salvarla, en referencia a la intercesión delante del
GRAN JUEZ Y DIOS el alma está condenada al destino del infierno. Pero Nicodemo en
su nombre griego llega buscando su salvación, recibiendo el GLORIOSO EVANGELIO,
para la salvación de su alma, no es casualidad que siendo de un nombre que
representa una nación global y mundial, el significado del mismo sea LA VICTORIA
DEL PUEBLO, no por medios propios, sino por medio de un salvador, único y perfecto,
poderoso y majestuoso, este no es otro que JESUCRISTO su nombre que es sobre
todo nombre, venció al mundo y venció la muerte para darnos la esperanza de llegar a
estar junto con él.

El relato de este encuentro también ilustra las tres personas de la divinidad

única, ilustrada en primera persona por el Hijo de Dios, el Señor Jesucristo, revelada
por el Espíritu Santo mencionado en el texto donde se señala el agua, el viento y sus
propiedades o atributos, explica además la voluntad del Espíritu Santo para determinar
en el corazón del hombre la necesidad de la salvación, en cuanto al Padre, lo revela en
tanto que introduce en el texto al amor de Dios por los hombres, de tal manera como
dice que envió a su Hijo unigénito para morir en la cruz del calvario en sustitución a
éste.

Luego se trata entonces de un relato descriptivo de toda una obra, su

arquitectura, su diseño bajo la voluntad de Dios, manteniendo la unicidad del mismo,
una ilustración reconciliadora de Dios con los hombres bajo su misericordia, justicia y
juicio o fe, de lo cual sólo el hombre tiene la oportunidad de elegir o despreciar, paa su
propia condenación o para su salvación.

El nuevo nacimiento milagroso del hombre está a la espera por aquellos que
vienen a buscarle en su presencia, en lo intimo, en lo personal, es un asunto que se
dirime entre el individuo y su creador, una conversación sincera y sabiendo que aquel
que conoce todas las cosas y que ausculta y escudriña el corazón del hombre lo sabe
todo, desde la necesidad de un salvador para los incapaces y los pobres, los
menesterosos, enfermos, ciegos, cojos, mancos, viudas y huérfanos, todo aquel que
quiera confesarle como su Señor, creerle que Dios le envió al sacrificio sustituto y que
el mismo Dios le resucito.