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21/04/2020

https://web.microsoftstream.com/video/9bd5cace-66ea-4d3c-8b2c-b8b71e34bbce
En una fase cómo está la creación de neologismos es un fenómeno importante relacionado con
cuestiones sociales de vario tipo y como la formación de palabras es uno de los temas de nuestro
curso entonces hoy vamos a hacer como una pausa en la exposición sobre la lengua del turismo y
vamos a aplicar los conceptos, los conocimientos, que hemos adquirido en este ámbito, a la
situación actual.
 RAE - CRISIS DEL COVID-19: SOBRE LA ESCRITURA DE CORONAVIRUS
https://www.rae.es/noticias/crisis-del-covid-19-sobre-la-escritura-de-coronavirus
Real Academia es una institución dedicada al estudio de la lengua y también a orientar a los
hablantes sobre los usos lingüísticos.
Este texto desde cierto punto de vista es una noticia, pero es mejor dicho una glosa.
La Real Academia el 18 de marzo publicó esta glosa con indicaciones sobre el uso de algunas
palabras relacionadas con la que se define como crisis global del coronavirus. Una crisis global que
“está planteando cambios sociales políticos y económicos” con “consecuencias en el día a día”, pero
también con consecuencias y fenómenos de tipo lingüístico porque las palabras siempre reflejan y
también participan en los fenómenos de tipo social, político, etcétera. La lengua puede reflejar estos
fenómenos, pero también los usos lingüísticos pueden tener un papel activo en esto.
El primer fenómeno que se comenta es la frecuencia de las consultas en el diccionario. El diccionario
de la lengua española se puede consultar de forma gratuita y hay datos analíticos que nos dice
cuáles son las palabras más consultadas.
De la misma manera que ocurre en Italia, las palabras que más se busca en el diccionario en estos
días son palabras como pandemia, epidemia, cuarentena, confinar, confinamiento, hipocondría, etc.
Palabras como estas son palabras existentes dentro de la lengua no son palabras nuevas, pero son
palabras que tienen como nueva vida; tienen una mayor frecuencia de uso y sobre todo los
hablantes las buscan para entender mejor su significado.
También se subraya otro fenómeno: muchas de las creaciones léxicas (las nuevas palabras que se
crean en este momento) son palabras efímeras (palabras que se ponen de moda que se encuentran
a lo mejor todos los días en los periódicos, que se utilizan, que se citan, pero luego desaparecen
junto con el fenómeno que las ha provocado).
De toda esta ola creativa o en todo caso palabras también que pueden pasar de un ámbito
especializado a la lengua general, se supone que algunas palabras se van a permanecer como el caso
de coronavirus.
Coronavirus es el nombre común, en realidad hay también una denominación específica de este
coronavirus porque coronavirus es una denominación que se puede aplicar a diferentes virus de la
misma familia. La denominación específica es SARS- CoV-2, pero es más un tecnicismo que la gente
no utiliza normalmente.
Coronavirus es la palabra común que en este momento no está en diccionario.
La Real Academia recoge las palabras cuando su uso en la lengua general es consolidado, pero
naturalmente ha sido propuesta para una posterior incorporación. La lexicografía en España tiene un
poco esta actitud de introducir en el diccionario académico las palabras solamente cuando su uso
está muy consolidado.
La lexicografía académica tiene también un carácter directivo (se pretende orientar el
uso, aconsejar el uso mejor más correcto a los hablantes).
La lessicografia spagnola accademica ha un po' questo carattere direttivo, prescrittivo, si vuole in
qualche modo orientare l'uso ma sempre a partire dall'uso consolidato quindi c'è questa specie di
doppio canale: si parte effettivamente dall'uso per poi in qualche modo selezionare l'uso migliore,
più consigliabile quindi a orientare il comportamento linguistico dei parlanti.
También se da una serie de instrucciones sobre la manera de escribir, cuestiones gramaticales, el
plural, el origen del nombre.
“…Se escribe en una sola palabra y con minúscula inicial si se usa como el nombre común del virus
o, por metonimia, de la enfermedad: Los coronavirus pertenecen a la familia  Coronaviridae.”
La metonimia consiste en emplear una palabra para otro uso, en este caso es el nombre del virus
que genera la enfermedad en lugar de la enfermedad. Coronavirus es el tipo de virus, pero también
se dice que la persona se ha contagiado que tiene el coronavirus, aunque el nombre de la
enfermedad es otro.
“La voz coronavirus  es invariable en plural: los coronavirus.”
“El nombre se debe al parecido de la parte exterior del virus con la corona solar.” – corona + virus es
una palabra compuesta.
También se hace referencia el diccionario de términos médicos “Se trata de un nombre común
tomado del latín científico y registrado en el  Diccionario de términos médicos  de la Real Academia
Nacional de Medicina.”  Otra cuestión es como a veces las palabras pasan de un ámbito
especializado, en este caso de la medicina, a la lengua general.
“La Organización Mundial de la Salud ha propuesto la abreviación COVID-19 (a partir
de COronaVIrus + Disease ‘enfermedad’ + [20]19).
El acrónimo COVID-19 que nombra la enfermedad causada por el SARS-CoV-2 se usa normalmente
en masculino (el COVID-19) por influjo del género de coronavirus y de otras enfermedades víricas (el
zika, el ébola), que toman por metonimia el nombre del virus que las causa. Aunque el uso en
femenino (la COVID-19) está justificado por ser enfermedad (disease en inglés) el núcleo del
acrónimo (COronaVIrus Disease), el uso mayoritario en masculino, por las razones expuestas, se
considera plenamente válido.”
Aquí se introduce una referencia a la Organización Mundial de la Salud es decir como esta
institución recomienda la abreviación COVID-19 para referirse a la enfermedad, el nombre de la
enfermedad causada por el virus.
COVID-19 es un acrónimo (el acrónimo consiste en tomar algunos elementos de diferentes palabras
para crear una palabra única) a partir de COronaVIrus + Disease ‘enfermedad’ + [20]19).
Otra cuestión: todas las palabras tienen un género gramatical la Real Academia recomienda el uso
en masculino, pero hay también otras instituciones que se dedican a la lengua que en cambio
aconsejan el femenino.
El masculino es correcto por influjo del género de coronavirus de la misma manera que ocurre con
otras enfermedades víricas (adjetivo derivado de virus): el zika, el ébola.
Se añade que el uso en femenino está justificado porque se trata de una enfermedad.
La Real Academia insiste sobre el uso mayoritario en masculino, pero también se admite el
femenino. Con el tiempo se verá si los hablantes prefieren finalmente el masculino o en femenino
(en español finalmente no tiene el mismo significado del italiano, en español “finalmente” es “al
final”, el finalmente italiano se dice en español por fin “por fin, estás aquí”)
La cuestión de las mayúsculas o minúsculas “¿Se escribe COVID-19 o covid-19?
Al ser un acrónimo de reciente creación, aún no lexicalizado, lo indicado es su escritura en
mayúsculas en todas sus letras. Solo si con el tiempo llegara (subjuntivo imperfecto) a convertirse
enteramente en el nombre común de la enfermedad, la escritura indicada sería en
minúsculas, covid-19.” También hay un aspecto interesante, aquí se habla de lexicalizado
(lexicalización). La lexicalización es el proceso que convierte una sigla en nombre común. Por
ejemplo, lo que ha ocurrido con ave (alta velocidad española) que hoy se utiliza como palabra
común, radar (radio detection and ranging), láser (Light Amplification by Stimulated Emission of
Radiation), ovni (Objeto Volador No Identificado), etc.  la formación de palabras
En un momento como este se considera que todavía el acrónimo no está lexicalizado, por lo tanto,
es normal la escritura con mayúsculas, hay, pero otra institución que propone ya está lexicalización.
“¿Cómo se pronuncia COVID?
No hay una norma que determine cómo se acentúan prosódicamente los acrónimos en mayúsculas;
por lo general, suele aplicarse el patrón acentual mayoritario (la tendencia se sigue la tendencia
general de los hablantes) para palabras con estructura similar. Así, lo normal es pronunciar [kobíd].”
Como todos sabemos en Italia no pasa lo mismo porque en Italia no se habla de [kobíd] sino de còvid
– [kɔvid] porque en italiano el patrón acentual es diferente.  En la transcripción fonética indica el
acento, pero también la V se pronuncia B.
 FUNDÉU - CORONAVIRUS, CLAVES DE ESCRITURA
https://www.fundeu.es/recomendacion/coronavirus-claves-de-escritura/
Cuando leemos un texto lo primero que tenemos que hacer es preguntarnos ¿Quién es el emisor
(una persona, una institución, una organización)? Si no lo conocemos tenemos que buscar
información.
Este texto es anterior de la Real Academia, pero más o menos el periodo es el mismo.
Es un texto elaborado y publicado por la Fundéu. Fundéu BBVA (acrónimo de Fundación del Español
Urgente; BBVA porque es una fundación respaldada por el Banco Bilbao Vizcaya e Argentina) es una
institución importante que se dedica a la lengua con un objetivo específico y a que también lo vemos
a continuación “Se ofrece una serie de claves para redactar adecuadamente las noticias
relacionadas” es decir es  una institución que se dedica a dar sugerencias, instrucciones, consejos y
recomendaciones a los periodistas que muchas veces se enfrentan con problemas lingüísticos de
vario tipo (cómo transcribir un apellido, un topónimo, utilizar las mayúsculas o las minúsculas para
determinadas palabras, etc.)
En España hay una tradición importante de libros de estilo, guías de estilo (lo dijimos al hablar del
periodismo).
En los últimos años se ha creado esta fundación qué se dedica a realizar diferentes estudios,
trabajos, dar recomendaciones, también consultas (en la parte derecha de la pantalla también si
invita al lector a enviar una consulta si tiene alguna duda sobre los usos lingüísticos).
También hay un dato importante que debemos tener en cuenta: la Fundéu está asesorada por la
Real Academia Española es decir no se mueve en contradicción con la Real Academia, aunque se
expresan opiniones en parte divergentes, en todo caso son compatibles.
La Fundéu va un poco más allá es decir las indicaciones de la Real Academia son esenciales de hecho
Real Academia se encarga fundamentalmente de elaborar el diccionario. La Fundéu nos dice algo
más porque los periodistas necesitan más indicaciones, más información, etc.
Algunas de las cosas que se dicen coinciden con lo que hemos leído en la web de la Real Academia.
Se empieza por el nombre de la enfermedad COVID-19, también se dice que la grafía recomendada
es con mayúsculas y con un guion antes de los 2 dígitos (los números 19, que representa el año
apareció), “La grafía recomendada para el nombre de la enfermedad es COVID-19  (con mayúsculas y
con un guion antes de los dos dígitos) tal y como ha establecido la Organización Mundial de la
Salud.” – también se hace referencia a OMS que ha dado una recomendación generalizada.
“No obstante, si en un texto general se desea lexicalizar esta denominación pasándola a minúsculas,
lo adecuado es no dejar la inicial mayúscula porque se trata de un nombre común de
enfermedad: covid-19, no  Covid-19.”
Real Academia decía “todavía no está lexicalizado, pero aquí se da enterrada a la voluntad del
hablante de lexicalizar. Dentro de un texto a veces hay reglas que vale a lo mejor dentro de un
contexto discursivo, dentro de un género textual y no en otro; la dicción oficial es COVID-19 con
mayúsculas, pero si dentro de un texto queremos lexicalizar, queremos apropiarnos de este
acrónimo podemos utilizarlo en minúsculas pero lo que no se aconseja hacer es poner la inicial
mayúscula.
En los periódicos italianos esta solución se utiliza con mucha frecuencia, poner la inicial mayúscula.
“También es posible emplear expresiones descriptivas como enfermedad del
coronavirus o neumonía por coronavirus.” Se dan estos consejos porque la persona que escribe un
artículo, el periodista que escribe u otros (aquí se ofrecen claves para redactar las noticias por lo
tanto el interlocutor privilegiado es el periodista, pero también puede ser todo hablante) pueda
emplear sinónimos, para no repetir siempre lo mismo.
Dentro de un artículo de investigación tenemos que repetir o incluso en el prospecto de
medicamento se deben emplear determinados tecnicismos a veces sin sinónimos, sobre todo el
artículo de investigación.
Dentro de un texto periodísticos conviene tener a disposición cierta gama de sinónimos.
“Lo preferible es emplear el femenino (la COVID-19), puesto que el referente principal del acrónimo
es el sustantivo enfermedad.  No obstante, no se considera censurable el uso del masculino (el
COVID-19), pues, tal y como explica la Gramática, la vacilación en la elección del artículo es habitual
en casos como este en los que el componente principal no queda claro para los hablantes.”
La Real Academia prefiere el masculino la Fundéu nos dice mejor en femenino porque el referente
principal del acrónimo es el sustantivo enfermedad en la Real Academia nos daba otras razones para
el uso del masculino. También no se considera censurable el uso del masculino.
En italiano COVID es masculino; el italiano determina nuestra elección, pero si nos acostumbramos a
leer textos españoles en los que aparecen femenino acabamos tomándolo como cosa normal.
“Para referirse al virus causante de la enfermedad, el Comité Internacional para la Taxonomía de los
Virus le ha dado oficialmente la identificación SARS-CoV-2, aunque es frecuente que se siga
empleando el provisional 2019-nCoV.”
SARS-CoV-2 es el nombre del virus, el tecnicismo qué se refiere al tipo de virus. Este virus que nos ha
atacado es un tipo de coronavirus. 
“El sustantivo coronavirus es el término común para referirse a cualquier virus de la
familia Coronaviridae  o del género Coronavirus.  En este contexto y en textos generales se está
empleando para hacer referencia específicamente al SARS-CoV-2, lo que no resulta incorrecto
aunque no es del todo preciso.”
Dentro de un género ámbito científico se utilizará el nombre específico de este virus, pero dentro de
un texto periodístico en la lengua general se emplean normalmente coronavirus.
“Se escribe en una sola palabra, sin guion ni espacio intermedios y con inicial minúscula, tal como
recoge el Diccionario de términos médicos  de la Real Academia Nacional de Medicina. Es invariable
en plural: los coronavirus.” - estas indicaciones coinciden con las de la Real Academia.
Luego se explica “la distinción tradicional entre los términos   epidemia  y  pandemia: el primero se
refiere a una enfermedad que se propaga por un país durante algún tiempo, mientras que el
segundo es indicado cuando la enfermedad se extiende a otros países.” Es lo mismo en italiano, los
equivalentes italianos tienen el mismo significado únicamente hay una diferencia en la pronuncia.
También es interesante “las expresiones pandemia global y pandemia mundial no se consideran
redundancias incorrectas.” yo hubiera dicho que sí porque pandemia ya conlleva este significado de
difusión global, mundial, en cambio la Fundéu nos dice que es correcto también emplear estas
expresiones, pero se considera incorrecto el utilizo de “epicentro del foco del virus” porque es
expresión redundante (reitera en exceso la misma información: foco y epicentro son sinónimos)
“Supercontagiador, mejor que super spreader
El sustantivo supercontagiador, escrito en una sola palabra, sin guion ni espacio intermedios, es una
alternativa preferible al anglicismo super spreader, término con el que se hace referencia a
aquella persona cuya capacidad para transmitir un virus es muy superior a la media. También es
posible optar por supervector, pues uno de los significados de vector es ‘ser vivo que puede
transmitir o propagar una enfermedad’, o superpropagador, voz bien formada en español a partir
del prefijo super- y el sustantivo propagador. aquí hay también consejos sobre el uso de otras
palabras.
“8. Severo no es lo mismo que grave
El término severo, en español, equivale a ‘riguroso, áspero, duro en el trato’ o ‘exacto y rígido’, y no
a ‘extremo, grave, importante o serio’, acepciones estas que sí tiene la voz inglesa severe.
Esto también pasa en italiano se tiende a veces utilizar el adj. severo, por influjo del inglés, como un
calco del inglés severe, pero no es correcto ni en italiano ni en español, aunque se está difundiendo.
Luego cuarentena que “no necesariamente implica un periodo de 40 días” (lo mismo en italiano), el
paciente cero son todas expresiones que conocemos, que tiene su equivalente italiano.
“11.  Infodemia, alternativa a infodemic
La voz infodemia, que proviene del inglés infodemic, está morfológicamente bien formada y se
emplea en el contexto de las noticias sobre el coronavirus con relación a la gran cantidad de
información que hay sobre el tema, mucha de ella poco rigurosa.”
Es interesante la cuestión de la infodemia que se refiere a la enorme cantidad de información que se
concentra en torno a este tema. También quiero destacar esta información que hay sobre el tema
“mucha de ella poco rigurosa”. Esto está entrada a la cuestión de las noticias falsas.
Dentro de esta infodemia hay como diferentes grados de rigor: noticias rigorosas, luego noticias
dudosas y luego los bulos (las noticias falsas). Las noticias falsas a veces contienen elementos ciertos.
El problema es que a veces las noticias falsas se difunden porque tienen como base también
elementos reales, noticias correctas, pero luego mezclan lo verdadero y lo falso y de esta manera los
falsos se difunden más fácilmente.
Luego, otros consejos sobre los chinofobia y cómo se pronuncian Wuhan  y Hubei.
El último punto sobre los topónimos italianos.
“Bolonia, Emilia Romaña, Friul-Venecia Julia o el Lacio son algunas de las regiones italianas que se
han visto afectadas por la enfermedad del coronavirus, cuyas grafías son preferibles a las
italianas: Bologna, Emilia Romagna, Friuli-Venezia Giulia y el  Lazio, respectivamente. Pueden
consultarse estos y otros topónimos, además de sus correspondientes gentilicios, aquí.”
Existen algunas formas españolas de topónimos italianos tanto de ciudades como Milán, Florencia,
Turín, Génova Nápoles son bastante conocidos. No todos los topónimos tienen una versión en
español, pero algunos sí son muy famosos. Menos conocido el caso de Bolonia y menos conocidos
son los nombres españoles de las regiones italianas. También aquí se reenvía a una página en la que
se encuentran más topónimos.
 EL PAÍS - 'Covidiota', 'balconazis', 'cuarenpena'... Los neologismos que nos ha traído la
pandemia
https://verne.elpais.com/verne/2020/04/07/articulo/1586246728_179666.amp.html?
id_externo_rsoc=TW_CC&__twitter_impression=true&fbclid=IwAR03EmUApuXmZN1EHSlb30C0x4W
kAGW0a_QurJUgGoV5i7G8SQK8VKIVBAQ
Este texto se centra en otros fenómenos es decir hasta ahora hemos visto las palabras más
directamente relacionadas con esta nueva enfermedad, pero alrededor de este fenómeno también
se registran diferentes formaciones que forman parte de ese ámbito de creaciones efímeras.
En estas situaciones críticas la atención de las personas se centra en un problema: en esta crisis del
coronavirus, el momento que estamos viviendo.
En este texto se reflexiona sobre otros fenómenos que van desde la revitalización léxica
(recuperación de palabras ya existentes) a la creación de neologismos.
Este texto pertenece a una sección del País que es una sección un poco especial es decir se propone
como explorador de Internet que tiene el objetivo de sorprender, llamar la atención sobre algún
fenómeno porque el nombre Verne viene del escritor francés y su libro titulado “ Viaje alrededor del
mundo” entonces es algo sorprendente.
En este caso se reflexiona sobre los neologismos que nos ha traído la pandemia.
El artículo en las primeras líneas contiene una referencia a Eduardo Aute. Eduardo Aute murió hace
unos días como víctima del coronavirus y era un cantautor muy querido por los españoles.
Se reflexiona sobre la lengua y en primer lugar sobre las palabras que yacían dormidas en el
vocabulario, palabras que se encuentran en el diccionario, pero que no se utilizaba mucho
empezando por confinamiento, pandemia, infodemia, etc. Cuando se ponen de moda ciertas
palabras hay otras que quedan como desplazadas.
Se menciona las siglas “EPI como equipo de protección individual”, pero también otro aspecto que es
la variación léxica “las mascarillas son nasobucos en Cuba y barbijos en Argentina y Bolivia” estos son
usos coloquiales que se ponen de moda dentro de un ámbito geográfico (corresponden a la
variación diatópica de la lengua, las variedades de una lengua que dependen de la geografía son las
variedades diatopicas).
También hay otro aspecto interesante el significado social que asumen unas palabras: esencial
cuando se habla de los servicios esenciales. No son palabras nuevas evidentemente, pero son
palabras que en un momento determinado adquieren un significado más importante.
Luego la sugerencia de emplear, por lo menos acostumbrarse a emplear la mano no dominante (la
mayoría de las personas es la derecha, para los zurdos es la izquierda) para tocar los objetos que
encontramos en nuestro camino porque así en el momento de tocarnos los ojos en cambio
utilizaremos la mano dominante, de esta manera la mano qué puede haberse contagiado no es la
misma que llevaremos a los ojos.
‘La mano no dominante’ es algo que no formaba parte del léxico disponible de los hablantes porque
aparte el léxico que está en el diccionario luego está la cuestión del léxico disponible (el léxico que
efectivamente las personas suelen utilizar).
Otras resurrecciones léxicas (palabras que se revitalizan): “desescalar como sinónimo de 'graduar'”
se refiere a cuándo empieza a disminuir bajar los números de la curva epidémica.
Luego se pasa a LA CREACIÓN DE NEOLOGISMOS: palabras que se forman utilizando las reglas de
formación de palabras que tiene una lengua determinada. Son palabras que a lo mejor se utiliza
mucho durante un tiempo y luego tienden a desaparecer, son palabras efímeras.
Es interesante estudiarlas en el momento en el que se forma porque son representativas de las
actitudes de los hablantes, de sus sentimientos, de sus sensaciones, de su visión del mundo,
cuestiones psicológicas, cuestiones sociales entonces el estudio de estas palabras nos da mucha
información.
No es a lo mejor determinante para el diccionario, pero si lo es dentro de los estudios lingüísticos, en
un sentido más amplio. Hay diferentes, incluso periódicos, instituciones que se dedican a recoger
estas palabras, a crear glosarios, diccionarios, etc.
Una de las más importantes o frecuentes creaciones es el adjetivo covidiota que encuentra su
equivalente también en inglés. El italiano no tiene alguna formación análoga y esto también es
interesante porque es bastante representativo de diferentes actitudes de grupos de hablantes decir
en italiano no se ha dado este fenómeno, en español en cambio sí, mucho, con todas sus variantes.
Luego se habla también de coronaburro.
¿Cómo se forman estas palabras?
Son compuestos, de la misma manera que lo es el coronavirus, pero en lugar de utilizar términos
neutros se combina una parte del cuerpo de la palabra con otra que es idiota, burro, etc.
Evidentemente es como un juego de palabras, con intención humorística, pero también con la
intención de estigmatizar un determinado comportamiento social.
Luego tenemos carallovirus (carallo es un eufemismo en lugar de carajo que es una palabrota), luego
cuarentena se convierte en cuarenpena (cambia solo una letra, pero con valor humorístico).
Ahora lo que, sí, circula muchísimo, tanto en Italia como en España, son los memes; no son bulos
porque no pretenden ser serio sino simplemente divertir a la gente entonces el juego de palabras es
en esto fundamental.
Luego el confinamiento se convierte en confitamiento (la gente come mucho y va aumentando de
peso).
Luego hay también otra actitud que se ha estigmatizado también en Italia: la tendencia de algunos a
insultar a las personas que circulan por la calle, a veces sin saber cuáles son las razones que mueven
a las personas a ir por la calle. Una palabra para designar estas personas es balconazis.
Efectivamente en español está creatividad verbal tiene mucha difusión a nivel popular, la gente tiene
esta tendencia: crear estás formaciones humorísticas.
También se explica cómo algunos han promovido otro tipo de creatividad verbal qué consiste en
señalar nuevas acepciones para palabras existentes, también es un fenómeno que se indica aquí y
que vosotros conocéis: el neologismo semántico (la palabra que tiene normalmente un significado,
pero adquiere otro en determinadas circunstancias. Ej. ratón el animal vs ratón, el mouse).
Aquí pues es otro: dentro de este fenómeno del neologismo semántico, pero con un toque
humorístico; el objetive es esto. Ej. se define “ventana como "parte de nuestra casa que durante el
periodo de confinamiento disfruta de una clara actualización de su sistema operativo" naturalmente
no podemos pensar que activamente la palabra ventana asuma este significa, pero es una manera
de reflexionar sobre un fenómeno de tipo social es decir el papel que cumple la ventana en una
situación cómo está.
La conclusión es bastante triste porque lamentablemente se habla de otro fenómeno: entra nuevas
palabras, otras desaparecen y a veces desaparecer junto con las personas que de alguna manera
eran portadoras de estas palabras o sea palabras que se utilizaban, que utilizaban otras
generaciones.

NO ESTAMOS EN GUERRA
LOLA PONS
Más difíciles de detectar, y por eso muy peligrosas, han sido otras maniobras lingüísticas que han empezado a
darse en el discurso político para referirse al virus, por ejemplo, hablar del coronavirus con metáforas de
guerra: la Casa Blanca habla de "nuestro Pearl Harbor" para referirse a Nueva Jersey y Nueva Orleans,
escenarios de importante propagación del virus en los Estados Unidos. Definir con lenguaje bélico la situación
que vivimos (lo contaba Nuria Labari en un artículo de opinión e Inés Olza en esta entrevista) es enfocar mal un
problema de salud y de gestión de recursos, es disfrazarlo de conflicto, como un ente ajeno que acecha antes
de atacar; de esta forma, derrotar a la pandemia sustituye a curar la enfermedad. Estos ejemplos muestran
cómo el discurso político también juega con las palabras y con sus significados en estas circunstancias.
La última glosa, la última parte también introduce un fenómeno interesante es decir aquí de alguna
manera se da un paso más: se pasa de una reflexión sobre estas creaciones más o menos efímeras,
palabras nuevas, fenómenos sociales que generan nuevas palabras para definirlos y se pasa otra
cuestión que también se relaciona con la lengua de la política es decir la tendencia sobre todo de
algunos políticos a utilizar la metáfora bélica (la guerra) como campo semántico y conceptual de
referencia para interpretar la situación.
A este respecto no lo voy a comentar, pero sino lo que los señalo porque también es una un texto de
cierta dificultad, es un texto de opinión del país en el que se expresa claramente esta opinión es
decir es peligroso utilizar el léxico belicista para referirse a un tema que al fin y al cabo es el tema
de curar una enfermedad y también aquí se hace con una…, se distingue entre una actitud masculina
como presentar la cura de la enfermedad, el cuidado de la enfermedad como una guerra
protagonizada por un héroe y en cambio, queda como en la sombra el campo semántico de la
solidaridad, la atención por los pacientes, etc. Es una reflexión muy interesante sobre este aspecto.

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