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Índice
Prólogo
Introducción
1. El Plan de Atención a la Diversidad en la escuela inclusiva
1. Una educación inclusiva con todos y para todos
2. El Plan de Atención a la Diversidad: seña de identidad de los centros docentes para
responder a las necesidades del alumnado
2. Actuaciones generales de centro para una educación común y de calidad
1. ¿Qué son las actuaciones generales?
2. Programas y actividades para la prevención, seguimiento y control del absentismo
y abandono escolar
3. Programas y actividades en colaboración y coordinación con las distintas
administraciones públicas, instituciones, organismos o asociaciones de ámbito
estatal, autonómico o local
4. Propuestas para adecuar las condiciones físicas y tecnológicas de los centros
5. Propuestas de ayudas técnicas individuales y equipamientos específicos para
favorecer la comunicación, movilidad y el acceso al currículum
6. Programas y actuaciones de apoyo para prevenir y ofrecer apoyo psicológico al
alumnado víctima del terrorismo, de catástrofes naturales, maltrato, abusos,
violencia de género o violencia escolar o cualquier otra circunstancia que lo
requiera
7. La organización de los grupos de alumnos, la utilización de los espacios, la
coordinación y el trabajo conjunto entre los distintos profesionales del centro y los
colaboradores y agentes externos al centro
8. La organización y coordinación entre el personal docente y entre estos y el
personal de atención educativa complementaria u otro personal externo que
interviene con el alumnado
9. Los programas, planes o proyectos de innovación e investigación educativa que
favorezcan una respuesta inclusiva a la diversidad del alumnado
3. Medidas ordinarias para atender las necesidades de todos en el aula
1. ¿Qué son las medidas ordinarias?
2. Aprendizaje cooperativo
3. Aprendizaje por tareas
4. Aprendizaje por proyectos
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5. Autoaprendizaje o aprendizaje autónomo
6. Aprendizaje por descubrimiento
7. El contrato didáctico
8. Enseñanza multinivel
9. Taller de aprendizaje
10. Organización de contenidos por centros de interés
11. Trabajo por rincones
12. Grupos interactivos
13. Graduación de actividades
14. Elección de materiales y actividades
15. Refuerzo y apoyo curricular
16. Apoyo en el grupo ordinario
17. Tutoría entre iguales
18. Enseñanza compartida
19. Agrupamientos flexibles
20. Desdoblamiento de grupo
21. Utilización flexible de espacios
22. Inclusión de las TIC
23. Las redes de coordinación y colaboración del profesorado para el diseño de
proyectos, programaciones y para el seguimiento y evaluación del alumnado
24. Orientación para la elección de materias optativas
25. Estrategias metodológicas que fomentan la autodeterminación para los alumnos
con NEE
4. Medidas específicas de atención a la diversidad
1. ¿Qué son las medidas específicas?
2. Adaptaciones curriculares significativas
3. Adaptaciones curriculares de acceso
4. Adaptaciones curriculares de ampliación y/o enriquecimiento
5. Flexibilización de los años de escolaridad para el alumnado con necesidades
educativas especiales o altas capacidades intelectuales
6. Aulas o grupos de profundización y enriquecimiento en contenidos específicos de
las distintas áreas o materias destinados a alumnado con altas capacidades
intelectuales
7. Programas de apoyo específico a alumnado con necesidades educativas especiales
8. Programas para alumnos con necesidades educativas especiales asociadas a la
discapacidad intelectual en IES (PRONEEP)
9. Programas ABC
10. Aulas abiertas especializadas
11. Programas u optativas de español para extranjeros
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12. Aulas de Acogida
13. Programas de compensación educativa
14. Aulas Taller
15. Aulas Ocupacionales
16. Programas de refuerzo curricular
17. Programas de mejora del aprendizaje y del rendimiento
18. Formación Profesional Básica. Programas Formativos Profesionales para los
alumnos y las alumnas con necesidades educativas específicas
19. Servicio de Apoyo Educativo Domiciliario (SAED)
20. Aulas Hospitalarias
21. Unidades o aulas escolares para la atención del alumnado con medidas judiciales
Bibliografía
Créditos
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A cuantas personas nos han ayudado para que este libro esté ahora en
vuestras manos, en ocasiones regalándonos su tiempo; a todos los
docentes, compañeros en muchos casos, que nos han enseñado a
entender lo que significa educar en la diversidad; a los alumnos que nos
empujaron a creer en un mundo donde la educación ha de ser de todos y
para todos y, concretamente a personas tan especiales como Julia Cano
Imbernón, Sarai Merino Ruiz, Raquel Molina Montoya y Raúl Martínez
Puche por el esfuerzo realizado.
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Prólogo
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colectivos. De manera especial a aquellos de cuyas singularidades y desventajas en
capital social, cultural y económico, la educación no se hizo cargo, y ha fracasado en
contrarrestar las ideas y las prácticas dominantes que han hecho del currículum y la
enseñanza casi una correa de reproducción escolar de las desigualdades sociales y
económicas. La falta de democracia y de equidad no solo ha quedado en la nómina de
asignaturas pendientes de aprobar, sino que además, con el tiempo, han surgido otras
nuevas. En la medida en que el orden social e ideológico imperante ha puesto por delante
de la democracia y la justicia los intereses de los más poderosos, sus prioridades y sus
políticas han marcado una carrera dislocada en la que muchas personas son abandonadas
por el camino y, lo que es más grave, se ha diluido la conciencia moral de que las
inequidades hayan de ser combatidas y corregidas. Las reformas más recientes,
contagiadas por los presupuestos y las lógicas del pensamiento único neoliberal, están
siendo las responsables en gran medida de que la educación haya perdido una buena
puerta del espíritu y el pulso por la justicia, la equidad y la erradicación de tantas
desigualdades injustas como las que pueden observarse a diario.
Este libro escrito por Josefina, Mari Carmen y Salvador, docentes del Departamento
de Didáctica y Organización Escolar de la Universidad de Murcia, es una defensa
explícita y convencida de los valores y los principios que se han ido desplegando, en los
últimos años, bajo el paraguas de la educación inclusiva. De ese modo, constituye una
buena muestra de algunas de las palabras que merecen ser una y otra vez pronunciadas,
así como de los discursos que son necesarios para tejerlas en relatos que justifiquen
determinados imperativos morales a los que los centros y sus afanes no pueden dar la
espalda en ningún contexto de formación en los tiempos actuales. Además de ello, el
libro da cumplida información de un abanico de proyectos y experiencias de las que se
puede echar mano para, como reza el título, desarrollar Planes de Atención a la
Diversidad. Recurriendo a la categoría que se ha ido acuñando de medidas ordinarias y
medidas específicas, en el texto se describen y se documentan más de una veintena en
cada caso, y ofrece para cada una de las presentadas una buena selección de fuentes
bibliográficas que serán provechosas para las personas que deseen profundizar y lograr
así una comprensión más fundamentada y detallada de las mismas.
A lo largo del texto se insiste en algunas ideas que considero centrales. Me parece
pertinente destacar tres en concreto. En primer lugar, la atención a la diversidad requiere
pensar y componer proyectos integrados. No se trata de una riada de medidas, sino, más
bien, de recursos de trabajo en las manos de los centros y el profesorado. Sin su buen
criterio, capacidad de reconstrucción de ideas y prácticas, y compromisos con la
equidad, la educación inclusiva no pasará de ser una bella expresión. La formación
docente, la de los equipos directivos y otros agentes escolares y sociales son condiciones
necesarias para crear proyectos con sentido, proyectos globales y concretos, proyectos de
alcance y cotidianos.
En segundo término, conviene señalar que la misma noción de Plan de Atención a la
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Diversidad tiene su problemática. Algo parecido ocurre con el afán de diferenciar el
Proyecto Educativo y los Proyectos Curriculares por un lado y, por otro, esa retahíla de
todo género de planes y medidas, desde los referidos a la convivencia hasta todos
aquellos dispuestos para «atender» fuera del currículum y la enseñanza ordinaria a
cualquier sujeto catalogado con la etiqueta elástica de «necesidades específicas». La
fuerte fragmentación de los programas y actuaciones para atender a la diversidad no es
sino una muestra de la incapacidad del sistema, los centros, los docentes y otros agentes
para idear y construir un tipo de escuelas, currículum y enseñanza donde quepan y sean
debidamente tratados todos y todas nuestras estudiantes.
En tercer lugar, otra alerta inexcusable es la que se refiere al hecho de que la
verdadera atención a las desigualdades y la diversidad no es una responsabilidad
exclusiva de los centros. Las políticas educativas y las administraciones, que siguen sin
adoptar la visión y los compromisos efectivos en pro de la igualdad, tienen grandes
responsabilidades. No bastan las retóricas fáciles y, desde luego, son preocupantes
cuando se aprecian grandes contradicciones entre lo que se proclama y lo que se decide.
Allí donde prime la apuesta por la excelencia frente a la justicia y equidad; la obsesión
por establecer y regular un currículum y enseñanza que construya arbitrariamente al
alumnado que vale y el que no; la carrera del éxito y el fracaso como una forma de
distinción social y de clase, se diga lo que se diga, se estarán creando condiciones
contrarias a la inclusión, haciendo de las mejores intenciones y planes una tarea de corto
recorrido. Si al leer este libro se toman en consideración estos y otros avisos, será
posible extraer un buen conjunto de ideas y propuestas para hacerse cargo de la
diversidad del alumnado.
Juan M. Escudero
Catedrático de Didáctica y Organización Escolar
Universidad de Murcia
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Introducción
No hay una definición de lo que es la educación de calidad que se acepte universalmente, la mayoría de los marcos
conceptuales incluyen dos componentes importantes: por una parte, el desarrollo cognitivo del educando; por la
otra, la función de la educación en la promoción de valores y actitudes de ciudadanía responsable y/o de un
desarrollo afectivo y creativo. En lo tocante a la calidad de la educación básica, [...] se hace hincapié en la
necesidad de proporcionar una educación a todos los niños, los jóvenes y los adultos que atienda sus necesidades y
sea pertinente para su vida preparando de esa manera el camino para un concepto de calidad expresado según
criterios basados en las necesidades.
UNESCO, 2009, p. 10
Desde la década de los noventa, como hemos podido apreciar en la cita, se viene
caminando desde el contexto escolar y, en concreto, desde la educación básica por la
necesidad de proporcionar una educación de calidad a todo el alumnado del centro, de
modo tal, que se responda y se atienda a sus necesidades y todos, al final, puedan
avanzar en su desarrollo personal. Esta pretensión solo es posible en la medida que
fomentemos en el centro una escuela inclusiva que permita que todos sus miembros se
sientan parte de una comunidad colaborativa que abogue por dar voz a los implicados en
la educación, pero de modo preferente al alumnado con riesgo de exclusión del sistema
educativo y de la sociedad. Sin embargo, aunque hemos avanzado mucho desde esos
primeros momentos y se ha producido un giro copernicano en la concepción y prácticas
referidas a la atención a la diversidad de necesidades del alumnado (León, 2012a), la
realidad no deja de sorprendernos y comprobamos, con citas y datos de diversos
informes, cómo tenemos que favorecer una acción social que reduzca los procesos de
exclusión, si pretendemos hablar y potenciar la inclusión educativa. Como afirma
Escudero:
Estos sujetos y colectivos que fracasan no existen en el vacío, sino que surgen, son creados y son sancionados en
centros y en otros contextos sociales y personales de relación... la exclusión dibuja sujetos excluidos o en riesgo y,
también, centros, docentes, entornos, políticas excluyentes, quizás también marginados y marginales.
Escudero, 2012, p. 24
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dentro y fuera de las aulas del centro? ¿Cómo fomentaremos la colaboración necesaria
entre todos los sectores educativos? Desde nuestra humilde opinión estimamos que
debemos abrir las puertas de los centros al resto de la comunidad educativa y a los
agentes sociales, debemos reflexionar juntos sobre los mecanismos que serán necesarios
llevar a cabo en los centros para coordinar la comunidad educativa entre sí, para articular
los procesos de toma de decisiones en aras de superar los conflictos que surjan y el modo
de dar respuesta a las necesidades de todo el alumnado y del centro en general. Es
imprescindible que el profesorado del centro haga partícipes a todos en su práctica
educativa, y el resto de la comunidad educativa tiene que conocer las características del
centro docente: perfil de alumnado, condiciones generales del centro, recursos
disponibles, qué características y necesidades tiene el alumnado escolarizado, etc. Desde
esta premisa de colaboración de toda la comunidad educativa para responder a las
necesidades y características del alumnado del centro, destacamos la importancia de la
existencia de un Proyecto Educativo de Centro que recoja, a su vez, otros ámbitos
fundamentales en la vida del mismo, tales como un Plan de Atención a la Diversidad. La
incorporación del mismo no debe contemplarse como algo más que un simple
documento anexo, como algo más que un plan de acogida, más bien, este plan debe
asumirse como una oportunidad para hacer partícipe a toda la comunidad educativa en la
reflexión, planificación y toma de decisiones en aras de sustentar la respuesta educativa a
todo el alumnado.
Este es el sentido del libro que ahora el lector tiene entre sus manos y que hemos
distribuido en cuatro capítulos. En el primero se aborda el marco de referencia de una
escuela inclusiva desde el Plan de Atención a la Diversidad y describimos lo que se
pretende con dicho plan, cómo es su estructura, quiénes lo elaboran, lo redactan, lo
aprueban y lo revisan, y cómo se hace un seguimiento y evaluación. Desde este
planteamiento general nos situamos para ir desarrollando los tres capítulos restantes. Así,
en el segundo abordamos las actuaciones generales que deben darse en un centro para
responder a las necesidades del mismo en aras de fomentar una educación común y de
calidad. Así se definen dichas actuaciones generales y se especifican algunas, como los
programas y actividades para la prevención, seguimiento y control del absentismo y
abandono escolar; la organización de los grupos de alumnos, la utilización de los
espacios, la coordinación y el trabajo conjunto entre los distintos profesionales del centro
y los colaboradores y agentes externos al centro, etc.
En el tercer y cuarto capítulos nos centramos en aquellas medidas más organizativas y
curriculares para atender las necesidades de todo el alumnado del centro. Así, en el
tercero se abordan las medidas ordinarias que se pueden llevar a cabo en el aula para
atender a todos los alumnos/as: aprendizaje cooperativo, tutoría entre iguales,
aprendizaje basado en problemas, grupos interactivos, etc. Y, por último, en el cuarto
capítulo se describen distintas medidas específicas para responder a las necesidades de
apoyo de determinado alumnado. Entre otras, se explicitan las adaptaciones curriculares
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significativas, de acceso, de ampliación y enriquecimiento; Aulas de Acogida, de
compensatoria; aulas abiertas; y distintos programas de refuerzo y de diversificación
curricular, programa ABC, etc.
Con todas estas actuaciones y medidas descritas a lo largo del libro, pretendemos
establecer solo una base para favorecer esa respuesta educativa a todo el alumnado del
centro, en aras de fomentar la inclusión educativa desde la equidad, reduciendo, en lo
posible, la desigualdad. De todos modos, aún quedaría mucho camino por andar, pues,
como hemos comentado antes, y como afirman Bonal y Tarabini (2012), si bien la
educación es imprescindible para la inclusión social, es posible que por sí sola no
consiga garantizar trayectorias sociales que eviten la exclusión, y como consecuencia de
ello, volvemos a lo planteado al principio, debemos fomentar la colaboración entre la
institución educativa y otras de índole social, que trabajen juntas de la mano desde
marcos legislativos que potencien dicha inclusión, ya que esta no podrá conseguirse
desde los parámetros de una sociedad excluyente.
Los autores
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1. El Plan de Atención a la Diversidad
en la escuela inclusiva
Lindqvist, 1994, p. 28
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culturales de normalidad. La educación inclusiva se nos presenta como una oportunidad
para que niños y niñas diferentes se conozcan e interactúen entre sí (UNESCO, 2005), ya
que esta «es una educación que valora y respeta las diferencias viéndolas como una
oportunidad para enriquecer los procesos de enseñanza y aprendizaje, y no como un
obstáculo que hay que evitar» (León, 2012a, 27).
La adopción de estos argumentos supone un verdadero agente de cambio educativo
que implica tomar decisiones y posicionarse en torno a todos aquellos elementos,
factores y procesos que configuran el marco escolar, aunque tampoco han de omitirse
aquellos que hacen referencia específica al marco social, ya que la inclusión del
alumnado no podrá conseguirse desde los parámetros de una sociedad excluyente.
Desde el marco escolar, como afirma la UNESCO (2009), «la educación inclusiva es
un proceso de fortalecimiento de la capacidad del sistema educativo para llegar a todos
los educandos» (p. 8). Pero ello conlleva, por un lado, un conjunto de políticas
destinadas a:
a) lograr un currículum pertinente e idóneo con un planteamiento que facilite el diálogo entre los diversos agentes
del sistema educativo; b) brindar un amplio repertorio de estrategias pedagógicas diversas y complementarias
(educación formal y no-formal) que atienda a la especificidad de cada estudiante, personalizando para ello la
oferta educativa; c) disponer de instalaciones y equipos adaptados al currículum elaborado y su implementación;
d) facilitar un intenso apoyo al profesor de aula, que considere a los docentes como codesarrolladores del
currículum; y e) dialogar con familias y comunidades para comprender sus expectativas y necesidades, así como
para promover su activa participación en la escuela.
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más seguros de ellos mismos y, por consiguiente, aumenta su autoconcepto. También
permite que aprendan de forma independiente tanto en el interior como en el exterior de
la escuela, los lleva a participar activamente, a sentirse felices con sus compañeros de
clase y profesores y a ser sensibles y adaptarse a las diferencias.
Por otro lado, León (2012a), tras realizar un estudio de diversos trabajos relacionados
con la educación inclusiva, destaca la necesidad de que:
En primer lugar, se debe producir un conjunto de cambios generales, encaminados a crear una escuela inclusiva
dentro del contexto de la educación general: llevar a cabo acciones encaminadas a crear una cultura de escuela
apoyada en la comunidad, fomentar estructuras organizativas que permitan la formación de equipos colaborativos
y procesos de solución de problemas, redefinición del currículum... Y por otro lado, encontramos una serie de
cambios que son necesarios en el día a día de las clases inclusivas. Nos referimos a cambios relacionados con la
utilización de programas, enseñanza individualizada, coenseñanza, enseñanza cooperativa, adaptaciones
curriculares, acomodación de la instrucción y evaluación a alumnos específicos, etc.
León, 2012a, p. 71
Como podemos apreciar, para la autora, en primer lugar sería necesario realizar
algunos cambios generales que desde el posicionamiento de varios autores (Moriña y
Parrilla, 2004; Ainscow, 2001; Arnáiz y Berruezo, 2003; Echeita, 2006; León, 2012a)
podríamos resumir en:
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instituciones educativas, pues todos están implicados en la educación y participan
en decisiones de la escuela.
6. El aprendizaje «colaborativo» de los docentes y su desarrollo profesional suponen
condiciones imprescindibles para caminar hacia centros con una orientación
inclusiva.
7. La instrucción que se ofrece es acorde a las características del alumnado y sus
necesidades, proporcionando apoyo para conseguir con éxito los objetivos del
currículum. Por consiguiente, uno de los elementos más significativos a los que
prestar atención, sin duda, es el currículum que, desde los presupuestos de la
educación inclusiva, demanda una aproximación basada en la flexibilidad.
Figura 1.1 Flexibilidad curricular como respuesta educativa al alumnado con necesidad
específica de apoyo educativo
Echeita, 2006, p. 37
En esta misma línea, Skrtic, Horn y Clark (2008) argumentan que el alumnado con
necesidad específica de apoyo educativo es fruto del currículum tradicional. De ahí la
importancia de abordar el currículum en términos de inclusión. Pero ¿cómo se define el
currículum en una escuela inclusiva?
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Según Arnáiz (2003), la existencia de un currículum en el que el alumnado con
necesidad específica de apoyo educativo participe al máximo posible de sus
posibilidades es fundamental si queremos que las escuelas sean para todos. Se hace, por
tanto, necesario un currículum flexible, abierto y con carácter interdisciplinar para que
todo el alumnado pueda aprender junto, adoptando una estructura de aprendizaje
cooperativo en la que todos se vean estimulados a cooperar, a ayudarse unos a otros para
aprender más y mejor (Pujolàs, 2012). Para hacer efectivo el principio de una educación
para todos, el alumnado tiene que ser el centro de la enseñanza y su aprendizaje tendrá
que estar basado en la apreciación de sus diferencias de comprensión, sentimientos,
habilidades sociales y perceptivas, etc. Por consiguiente, es importante que el currículum
sea flexible para adaptarse a las necesidades individuales del alumnado, en vez de ayudar
a este a incluirse y adaptarse al currículum ya prescrito. Como afirma Casanova (2011),
la flexibilización y personalización efectivas es lo que necesita el sistema para resultar de
calidad y equidad.
Además, desde los parámetros de la flexibilidad curricular se pretende estimular al
profesorado a cooperar entre sí y a buscar soluciones que pueden ser emparejadas con las
necesidades y habilidades de todos y cada uno de los alumnos y alumnas (Ainscow,
2006, 2010; Lozano, 2007). No se trata de otra cosa que la búsqueda de la calidad de
enseñanza desde una perspectiva conjunta, subscribiéndonos a la definición de Wilson
(1992): «Mi definición ampliada de la calidad en la enseñanza es: planificar,
proporcionar y evaluar el currículum óptimo para cada alumno, en el contexto de una
diversidad de individuos que aprenden» (p. 34). Por tanto, el currículum debe tener en
consideración las necesidades del alumnado para asegurar que pueda acceder a él,
ofreciendo opciones curriculares que se adapten a sus capacidades e intereses diferentes.
Pero ¿qué implicaciones conlleva esta perspectiva de cambio basada en la flexibilidad
curricular? Ainscow (1995) y Ainscow, Booth, Dyson, Farrell, Frankham, Gallannaugh
et al. (2006) destacan las siguientes:
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• Mejora de la práctica docente a través de la colaboración: la práctica de la
reflexión del profesor sobre su propia actuación tiene lugar a partir de un trabajo
colaborativo que favorece que este aprenda de la experiencia. Además, facilita la
experimentación de nuevas estrategias de trabajo conjuntamente con sus
compañeros y con su alumnado.
• La consolidación de una serie de prerrequisitos, de condiciones básicas: evaluación
y registro de las interacciones entre alumno y docente; recogida continuada de
información; rol fundamental del alumnado, que debe reflexionar sobre su propio
aprendizaje; y mejora de la calidad de la enseñanza y el aprendizaje proporcionado
a todo el alumnado.
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aprendizaje, permitiendo así una atención personalizada para que se oriente hacia la vía
educativa que mejor se adapte a sus necesidades y aspiraciones, lo que debe favorecer su
progresión en el sistema educativo.
Por consiguiente, lejos de la improvisación, las propuestas del centro para atender a la
diversidad tienen que ser planificadas de forma conjunta y desde el conocimiento de los
recursos disponibles en el centro y en la comunidad (Torres, 2012; Bolívar, 2010). No
obstante, la complejidad organizativa de los centros docentes puede dificultar la eficacia
y el desarrollo de estas, ya que desde la perspectiva de la educación inclusiva se
manifiesta la necesaria reflexión, coordinación, participación y toma de decisiones de
toda la comunidad educativa, pues la educación inclusiva no solo persigue una
educación para todos, sino también una educación con todos y de todos (Díez y Flecha,
2012; Feito, 2011). Si los centros docentes son capaces de organizar todos sus recursos
disponibles en torno a los presupuestos de la educación inclusiva, los centros docentes
serán para todos y darán respuesta a las necesidades educativas que presenta el alumnado
(León, 2012a; Lozano y Alcaraz, 2012; Echeita, 2008; Sales, 2012).
En este sentido, la incorporación de un Plan de Atención a la Diversidad a la vida de
los centros docentes puede ayudar a ello. Aunque para que sea efectivo, este plan se ha
de valorar desde una perspectiva amplia, es decir, si se limita su concepción a un
documento, uno más, de origen administrativo y con carácter burocratizado, la atención
a la diversidad quedará tintada en un papel incapaz de hacerse eco en nuestra forma de
concebir la educación. A nuestro entender, la riqueza de la presencia de un Plan de
Atención a la Diversidad en los centros educativos reside en su proceso de elaboración,
redacción, aprobación, ejecución, seguimiento y evaluación, ya que brinda una
magnífica oportunidad a toda la comunidad educativa de reflexionar y tomar decisiones
en torno a la diversidad de necesidades del alumnado, es decir, de ponerse de acuerdo
sobre qué tipo de educación queremos para nuestros alumnos y alumnas, para nuestros
hijos e hijas.
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Como quiera que, a nuestro entender, la esencia de la educación inclusiva reside en el
reconocimiento de la dignidad intrínseca y de los derechos iguales e inalienables de
todas las personas (Stainback y Stainback, 2007; Soriano, 2008), ha llegado el momento
de superar rechazos, segregaciones y exclusiones educativas y apostar por una defensa
apasionada de los derechos de todo el alumnado. Las escuelas para todos son un medio
efectivo para ello (Ainscow, Dyson, Goldrick y West, 2011).
La educación inclusiva apuesta por una escuela para todo el alumnado, con
independencia de sus capacidades y necesidades. Surge entonces la siguiente cuestión:
¿qué es una escuela para todos? Una escuela para todos es aquella que garantiza que todo
el alumnado que acoge tenga acceso a un aprendizaje acorde a sus capacidades y
necesidades; una escuela donde nadie, por ningún tipo de razón, sea excluido. Una
escuela que suprima barreras excluyentes y promueva una atención adecuada a las
capacidades y necesidades de todo el alumnado dentro de entornos educativos
ordinarios. Por consiguiente, una escuela para todos es aquella que trata de encontrar la
manera de educar con éxito a todo el alumnado adaptándose a la diversidad de
capacidades y necesidades, una escuela que se basa en la igualdad y responde a las
necesidades de todos (Jiménez, 2007; Echeita, 2008; Tomlinson, 2008; Torres, 2007,
2010; Fielding, 2011; Forteza, 2011). Así pues, todos los niños tienen derecho a la
educación y a todos se les debe dar la oportunidad de alcanzar y mantener su máximo
potencial en términos de capacidad cognitiva, emocional y creativa, aprendiendo,
siempre que sea posible, juntos, independientemente de las características, intereses,
capacidades y necesidades de aprendizaje que le son propias (Pujolàs, 2010).
En resumen, se trata de una escuela con una orientación que se preocupa por la
identificación y eliminación de barreras, se dirige a la presencia, participación y logro de
todos los estudiantes e incluye un énfasis particular hacia aquellos grupos de estudiantes
que pueden estar en riesgo de marginación o exclusión (Lozano y Alcaraz, 2010;
Monzón, 2011).
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Por lo argumentado, debemos despojarnos de las etiquetas que categorizan una
respuesta educativa a un estándar de alumno, y apostar por un sistema educativo que se
adapte a la diversidad de alumnos que aprenden. Como señala Gimeno (2000, p. 87),
«cualquier pretensión de homogeneidad apoyada en la clasificación de sujetos singulares
por tantos motivos es un imposible, además de rechazable cuando supone jerarquización
de la que se derive algún estigma para los peor clasificados». En efecto, se ha destacado
el daño a la autoestima del alumno que le puede ocasionar el etiquetado (Echeita, 2006).
En este sentido, se hace necesario promover unos planteamientos ideológicos y
metodológicos para construir escuelas que apuesten por una educación inclusiva y que,
por tanto, transforme a la escuela tradicional en una escuela para todos que, bajo el
principio de equidad, se puede manifestar como uno de los medios más efectivos para la
mejora de la calidad de vida (Susinos y Rodríguez, 2011; Martínez, 2005, 2011), pues la
búsqueda de la equidad puede ser el mejor camino para la calidad.
Desde hace unos años, se viene planteando que el sistema educativo español se debe
organizar en torno al principio de atención a la diversidad en virtud del derecho
inalienable de todas las personas a recibir una educación de calidad con independencia
de sus características individuales, sociales, económicas, étnicas y culturales. Desde
entonces, los esfuerzos de la administración, de los centros docentes, de los
profesionales que se dedican al estudio, investigación e intervención educativa y de las
familias se han dirigido hacia la construcción de una escuela, que no solo acoja a todos,
sino que ofrezca la mejor educación posible para conseguir el aprendizaje de todos. Esta
idea es recogida en la actual ley de educación (LOMCE), donde en su artículo 1.b,
resalta la importancia de promover:
La equidad, que garantice la igualdad de oportunidades para el pleno desarrollo de la personalidad a través de la
educación, la inclusión educativa, la igualdad de derechos y oportunidades que ayuden a superar cualquier
discriminación y la accesibilidad universal a la educación, y que actúe como elemento compensador de las
desigualdades personales, culturales, económicas y sociales, con especial atención a las que se deriven de
cualquier tipo de discapacidad.
El proceso de apertura emprendido en los últimos años por los centros docentes a la
diversidad intrínseca presente en nuestra sociedad hace que esa responsabilidad del
profesorado no se limite a su acción individual, sino que se necesita de la participación y
colaboración de toda la comunidad educativa. Sin duda, la colaboración entre el
profesorado y la comunidad educativa es un reto dados los múltiples factores a los que
hay que atender: cómo se va a coordinar la comunidad educativa entre sí, qué procesos
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se van a desarrollar para reflexionar sobre la realidad de los centros docentes, qué
mecanismos se van a emprender para planificar actuaciones en el centro docente, cómo
se van a articular los procesos de toma de decisiones para superar conflictos y dar
respuesta educativa a necesidades del centro en su totalidad.
Para que esta colaboración de todos los miembros de la comunidad educativa se
produzca y sea efectiva, el profesorado del centro tiene que abrir y hacer partícipes a
todos en su práctica educativa y el resto de la comunidad educativa debe conocer el
centro docente: cuáles son las condiciones generales del mismo, de qué recursos dispone,
qué características y necesidades tiene el alumnado escolarizado, etc. Desde esta premisa
de colaboración de toda la comunidad educativa para responder a las necesidades y
características del alumnado del centro, subrayamos la importancia de la existencia de un
Proyecto Educativo de Centro que recoja, a su vez, un Plan de Atención a la Diversidad
no como algo más que un simple documento, sino como una oportunidad para hacer
partícipe a toda la comunidad educativa en la reflexión, planificación y toma de
decisiones para sustentar la respuesta educativa a todo el alumnado.
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idiosincrásicos: características del alumnado escolarizado y sus familias, recursos
organizativos, materiales y personales con los que cuenta, contexto cultural,
características del entorno social, etc. A este respecto, entendemos que el Plan de
Atención a la Diversidad refleja, de manera explícita, las señas de identidad del centro
docente para atender a la diversidad.
Este documento de los centros docentes recoge las actuaciones generales a llevar a
cabo en el centro, las medidas ordinarias para desarrollar en el aula y otras medidas
específicas para dar respuesta educativa a la diversidad de su alumnado (Decreto
359/2009, de 30 de octubre, por el que se establece y regula la respuesta educativa a la
diversidad del alumnado y Orden de 4 de junio de 2010, por la que se regula el Plan de
Atención a la Diversidad de los centros públicos y privados concertados de la Región de
Murcia). En él se contemplarán los criterios y procedimientos previstos para su
implantación, desarrollo, seguimiento y evaluación, así como los programas específicos
que, para una mejor atención del alumnado con necesidad específica de apoyo educativo,
puedan establecerse.
Por consiguiente, es un documento donde se recogen los programas y medidas que
los centros docentes ponen en práctica para ofrecer a la totalidad del alumnado y sus
familias una respuesta educativa ajustada a sus características y necesidades.
23
los centros educativos para responder a las necesidades y características de su alumnado.
24
2.4 ¿Qué estructura tiene el Plan de Atención a la Diversidad?
— Actuaciones generales.
— Medidas ordinarias.
— Medidas específicas.
25
marcha de la medida? Por tanto, se especifican los profesionales implicados, el
número de alumnos, el tipo de atención ofrecida al alumnado (fuera o dentro
del aula ordinaria), las formas de coordinación y colaboración entre los
profesionales implicados, la participación de instituciones u organizaciones del
entorno, así como los procedimientos para la participación e información de las
familias.
— Proceso de seguimiento, revisión y evaluación: aquí se especifica el proceso
previsto, los criterios, tiempos e instrumentos considerados, los profesionales
implicados y la coordinación entre los mismos.
26
A continuación, mostramos las unidades y personas encargadas específicamente de la
elaboración del Plan de Atención a la Diversidad en función de la etapa educativa:
27
coordinador de la misma, el orientador del centro y los jefes de departamento de las
materias instrumentales de Lengua Castellana y Literatura, y Matemáticas.
El jefe de estudios coordina la redacción de las actuaciones generales que son redactadas
por el equipo directivo y se las proporciona al Equipo de Apoyo a la Diversidad en los
centros de Educación Infantil, Primaria y Especial o al orientador en los centros de
Educación Secundaria Obligatoria, Bachillerato, Formación Profesional y educación de
personas adultas para que puedan ser incorporadas al Plan de Atención a la Diversidad.
Bajo la coordinación del jefe de estudios, los tutores de los centros de Educación
Infantil, Primaria y Especial y los jefes de departamento de los centros de Educación
Secundaria Obligatoria, Bachillerato, Formación Profesional y educación de personas
adultas son los encargados de la redacción de todas aquellas medidas de apoyo ordinario
que, por otro lado, quedan recogidas en sus programaciones docentes.
En el caso de los centros de Educación Infantil, Primaria y Especial, los tutores
proporcionan estas medidas a los coordinadores pedagógicos, quienes, en sesión del
Equipo de Apoyo a la Diversidad, las incorporan al Plan de Atención a la Diversidad.
28
En el caso de los centros de Educación Secundaria Obligatoria, Bachillerato,
Formación Profesional y educación de personas adultas, es el jefe de estudios quien
recopila de los departamentos didácticos las medidas de apoyo ordinario y se las
proporciona al orientador, quien las incorpora al Plan de Atención a la Diversidad.
29
La Comisión de Coordinación Pedagógica (CCP) realiza el seguimiento del Plan de
Atención a la Diversidad a lo largo del curso académico. Para ello, cuenta con la
información que le transmite el equipo directivo, el Equipo de Apoyo a la Diversidad en
los centros de educación infantil, primaria y especial o el Departamento de Orientación
en los centros de Educación Secundaria Obligatoria, Bachillerato, Formación Profesional
y educación de personas adultas, quienes incorporan, a su vez, toda la información del
personal docente y de atención educativa complementaria que desarrolle las medidas.
En este sentido, la Comisión de Coordinación Pedagógica informa al claustro de
profesores y al Consejo Escolar sobre el desarrollo y aplicación del Plan de Atención a la
Diversidad, quienes contemplan la posibilidad de realizar propuestas de mejora.
Así, la Comisión de Coordinación Pedagógica transmite el informe y la propuesta de
mejora al claustro de profesores, que analiza y valora el desarrollo del Plan de Atención
a la Diversidad. Después, el equipo directivo realiza un informe de evaluación de
aplicación y desarrollo del Plan de Atención a la Diversidad, que pasa a formar parte de
la memoria anual del centro una vez que haya sido aprobada por el Consejo Escolar.
Por otro lado, la inspección educativa supervisa y evalúa el desarrollo y resultados del
Plan de Atención a la Diversidad.
30
Figura 1.9 Elaboración, redacción, seguimiento, evaluación y revisión del Plan de
Atención a la Diversidad en centros docentes de Educación Infantil y Primaria
31
Figura 1.10 Elaboración, redacción, seguimiento, evaluación y revisión del Plan de
Atención a la Diversidad en centros docentes de educación especial
32
Figura 1.11 Elaboración, redacción, seguimiento, evaluación y revisión del Plan de
Atención a la Diversidad en centros docentes de Educación Secundaria Obligatoria,
Bachillerato, Formación Profesional y educación de personas adultas
33
2. Actuaciones generales de centro
para una educación común y de
calidad
34
control del absentismo y abandono escolar
En los últimos años, la preocupación por las altas tasas de fracaso escolar y su relación
con el absentismo y abandono escolar está cobrando un interés especial. El absentismo
escolar, entendido como aquella situación en la que el alumnado escolarizado en
educación básica y obligatoria asiste irregularmente al centro, se ha convertido en uno de
los principales conflictos a los que se enfrentan los centros docentes por las
repercusiones que puede generar a medio y largo plazo. Aunque se trata de un fenómeno
dinámico y heterogéneo, en muchas ocasiones dificulta la consecución de competencias
básicas del alumnado, que de esta manera puede sufrir retraso escolar. Si este fenómeno
no tiene un carácter aislado y excepcional y, como se ha señalado, interfiere de forma
significativa en el ritmo formativo del alumnado, puede derivar en la aparición de
fracaso y abandono escolar y desencadenar problemas sociales más complejos que
contribuyan a la aparición de fenómenos de desarraigo y marginación social. Por
consiguiente, el absentismo y el abandono escolar, que a veces van unidos, no solo se
configuran como un problema educativo, sino también como un problema social.
En esa misma línea de pensamiento, la LOMCE (2013) establece que uno de
principios del porqué de una necesaria reforma del sistema educativo español, es dar
respuesta a las altas tasas de abandono escolar que se producen. Para ello, establece
como principio la personalización e individualización de la enseñanza al convertir a la
escuela en el medio dinámico para favorecer que todo el alumnado pueda desarrollar las
capacidades, competencias y habilidades necesarias para su incorporación en el sistema
de mercado actual.
Como quiera que, a nuestro entender, las causas del absentismo y abandono escolar
son debidas a múltiples factores en interacción (factores individuales, escolares,
familiares y/o socioculturales), las respuestas a estos fenómenos no pueden enfocarse
desde una perspectiva individual del alumnado, sino que han de dirigirse al entorno en el
que este se desarrolla. En efecto, la respuesta al absentismo y abandono escolar es una
tarea de todos. Se necesitan, por tanto, planes integrales, coordinados entre las diferentes
consejerías y administraciones autonómicas y locales, que desarrollen políticas de
carácter preventivo, más que reactivo, que contemplen e integren la participación,
simultáneamente, de diversos ámbitos (familiar, escolar y comunitario) en los que se
encuentran las raíces de estos problemas e implique una actuación interinstitucional con
intervención de diferentes profesionales.
35
• Contribuir al diagnóstico y prevención del absentismo y abandono escolar.
36
• Alumnado que, debiendo estar escolarizado en la educación básica y obligatoria,
presenta asistencia irregular al centro docente.
• Alumnado que, debiendo estar escolarizado en la educación básica y obligatoria,
presenta faltas de asistencia regular y continuada al centro docente donde se
encuentra escolarizado, sin motivo que lo justifique, consentida o propiciada por la
familia o por voluntad propia.
• Alumnado que, debiendo estar escolarizado en la educación básica y obligatoria,
abandona el sistema educativo sin la titulación correspondiente y con la intención
expresa de no volver.
• Alumnado de edad temprana con riesgo en el acceso al sistema educativo.
• Alumnado menor de edad que, tras haber alcanzado la edad de finalización de la
escolaridad obligatoria, abandonó el sistema educativo de forma temprana sin
obtener titulación.
37
B. Anticipación a situaciones de absentismo y abandono escolar
Planes de acogida. Formando parte de los planes de acción tutorial, los centros docentes
pueden elaborar planes de acogida que se dirijan al alumnado de nuevo ingreso en el
centro, al alumnado que promociona a una nueva etapa educativa y al alumnado que se
reincorpora al centro tras encontrarse en situación de abandono escolar.
38
expulsión, como desarrollar ciertas actividades (tareas de mejora de la autoestima,
habilidades sociales, etc.) en horarios planificados para ello y que pueden ser
desarrolladas por varios profesionales (educador social). Un ejemplo podemos verlo en
la actuación del IES Tarradell, un centro de Secundaria del barrio del Raval de Barcelona
especialmente comprometido con la acogida e integración de todo tipo de alumnado
(Grau, 2006).
A. Principios de intervención
39
abandono escolar pueden proceder de la interacción entre distintos ámbitos (personal,
familiar y comunitario), las actuaciones e intervenciones que se propongan tienen que
ser sensibles a todos ellos. En este sentido, la respuesta a situaciones de absentismo y
abandono escolar tiene que abordarse desde actuaciones integrales que conlleven la
participación de dichos ámbitos.
Desarrollo de metodologías activas. Echeita (2006) plantea que las dificultades que
manifiestan algunos de los alumnos en los centros docentes son resultado, en muchas
ocasiones, de los estilos y formas de enseñanza que les ofrecemos. Por consiguiente, la
metodología de enseñanza que se desarrolle, entendida como el conjunto de
oportunidades, condiciones y formas organizativas que se ofrece al alumnado (De
40
Miguel, 2005), tiene un rol significativo en la prevención e intervención del absentismo
y abandono escolar. Los centros docentes pueden ofrecer al alumnado que se encuentra
en esta situación, que en ocasiones manifiesta un rechazo explícito a la institución
escolar, estilos y formas de enseñanza que se centren en él y en sus necesidades
individuales. Pero ¿por qué? Los métodos de enseñanza centrados en el alumnado, en los
que él es el protagonista y responsable de su aprendizaje, pueden generar, con respecto a
otros métodos, aprendizajes más profundos, significativos y duraderos. Por eso, para
prevenir y actuar sobre situaciones de absentismo y abandono escolar resulta pertinente
asumir una metodología donde el alumnado adopte un papel activo en la construcción de
su propio aprendizaje, mas ¿qué medidas podemos poner en práctica para desarrollar
metodologías activas? Algunas de las medidas que ayudan al desarrollo de metodologías
activas serán desarrolladas en este libro más adelante, pero el aprendizaje cooperativo, el
aprendizaje basado en problemas, el aprendizaje por descubrimiento, el aprendizaje por
proyectos y el contrato pedagógico son claros ejemplos de ellas.
41
finalización de una etapa educativa.
Adaptación de materiales. Entre otras, algunas de las causas que pueden derivar en
situaciones de absentismo y abandono escolar son las dificultades de aprendizaje,
desconocimiento del idioma de enseñanza y falta de interés y motivación. De ahí que,
para responder a estas necesidades, tengamos que prestar atención a variados aspectos
pedagógicos. Uno de ellos hace referencia a los materiales didácticos que se utilizan para
el proceso de enseñanza y aprendizaje, por lo que la utilización de materiales, recursos y
medios que puedan motivar al alumnado (por ejemplo, uso de medios digitales) y que
puedan adaptarse a sus necesidades, intereses y motivaciones es un factor de influencia
en la prevención e intervención contra el absentismo y abandono escolar.
42
2.4 Propuesta de organización de recursos
Como apuntamos antes, los destinatarios a los que se dirigen las respuestas educativas a
las situaciones de absentismo y abandono escolar incluyen, además del alumnado, a las
familias y al entorno social de estos, así como a los centros docentes y la comunidad
educativa, junto a otras instancias sociales. Sin ánimo de ser exhaustivos, resaltamos
algunos de los profesionales y funciones que pueden colaborar en los programas y
actuaciones de prevención, seguimiento y control del absentismo y abandono escolar.
Por consiguiente, ¿qué profesionales pueden intervenir en los programas y actuaciones
de prevención, seguimiento y control del absentismo y abandono escolar?
A. Equipo directivo
B. Tutor
43
en la asistencia de su hijo al centro educativo.
• Intercambio de información con el resto de profesorado del alumno o alumna con
el fin de reconducir aspectos necesarios de la intervención educativa sobre el
alumnado.
• Hablar con el alumnado para conocer las causas que inciden en el absentismo
escolar.
• Coordinar las propuestas de acción educativa dirigidas al alumnado en situación de
absentismo o abandono escolar.
C. Equipo docente
Desde una necesaria colaboración y ayuda entre todo el profesorado del centro en la
respuesta educativa a la diversidad, el equipo docente, entendido aquí como el conjunto
de docentes no tutores del aula, puede desempeñar las siguientes actuaciones:
Como agente interno o externo del centro docente, el profesorado técnico de servicios a
la comunidad puede llevar a cabo las siguientes actuaciones:
44
E. Orientador educativo
F. Inspección educativa
G. Consejo Escolar
H. Otros profesionales
45
Además de los que acabamos de citar, en los programas y actuaciones de prevención,
seguimiento y control del absentismo y abandono escolar pueden participar otros
muchos profesionales, como el mediador social, el mediador familiar, médicos,
psicólogos, educadores sociales, etc.
Por otro lado, como recursos personales en el desarrollo de los programas y
actuaciones de prevención, seguimiento y control del absentismo y abandono escolar
destacamos la figura del alumno-tutor que, entre otras, puede desempeñar las siguientes
actuaciones:
Una vez que se han destacado algunos de los profesionales que pueden participar en
los programas y actuaciones que se destinen para la prevención, seguimiento y control
del absentismo y abandono escolar, conviene señalar algunas formas de coordinación
entre estos profesionales para desarrollar esos programas y actuaciones. Hemos de tener
en cuenta que la respuesta pedagógica del profesorado y el clima escolar son claves para
reconducir estas trayectorias. Por consiguiente, ¿qué actividades de coordinación se
pueden establecer entre los distintos profesionales que participan en la respuesta
educativa al alumnado en situación de absentismo y abandono escolar?
46
• Jornadas de encuentro y formación entre profesionales que intervienen en los
programas y actuaciones de prevención, seguimiento y control del absentismo y
abandono escolar.
• Elaborar de forma consensuada entre todo el profesorado del centro indicadores de
prevención y observación del fenómeno.
• Reunión semanal de los equipos docentes: una hora de coordinación a la semana
por cada nivel educativo.
47
abandono escolar. En este sentido, destacamos brevemente algunos de los recursos
espaciales que se pueden utilizar en estos programas:
Los recursos personales internos del centro docente, es decir, el profesorado que se
integra en la estructura interna de los centros, son los responsables de la educación de
todo el alumnado. No obstante, esta tarea no puede ser asumida sin un sistema externo
de apoyo y colaboración que refuerce la capacidad de estos para ejercer sus
responsabilidades con todo el alumnado. En este sentido, en los programas y actuaciones
de prevención, seguimiento y control del absentismo y abandono escolar es
imprescindible la colaboración de todos aquellos recursos externos que puedan colaborar
con el centro y el profesorado. En el anterior epígrafe se nombraron algunos de ellos
(servicio de orientación, servicio de inspección, Consejo Escolar, etc.). A continuación
indicamos otros de especial significatividad:
48
• Motivar a la familia para asistir a las reuniones con profesores de sus hijos.
• Actuar para lograr que la familia del alumnado concilie vida familiar y laboral,
ya que conflictos en dicha conciliación pueden ser barreras para prevenir e
intervenir en situaciones de absentismo y abandono escolar. A este respecto, la
actuación de los servicios municipales y de empleo es muy pertinente.
• Asegurar la implicación y participación de las familias en las decisiones
adoptadas en los planes de acción tutorial.
49
• Ayudar en la mejora de las condiciones sociales de la comunidad para prevenir
la aparición de fenómenos de absentismo y abandono escolar.
La atención a la diversidad del alumnado que acoge los centros docentes exige de una
colaboración externa para ofrecer una respuesta educativa acorde a las necesidades,
intereses y motivaciones de todo el alumnado. A este respecto, esta colaboración externa
pretende apoyar la labor del profesorado en su responsabilidad para guiar el aprendizaje
50
de todo el alumnado. En este sentido, una actuación general que los centros educativos
pueden poner en funcionamiento para ofrecer una educación de calidad a todo su
alumnado, hace referencia a la puesta en práctica de todos aquellos programas y
actividades en colaboración y coordinación con distintas administraciones, instituciones,
organismos y asociaciones. Puesto que el centro docente no es una institución ajena a su
entorno, necesita de una incardinación con las personas y organismos insertos en él.
En función de la realidad de cada centro docente, así como con la administración,
institución, organismo o asociación con la que colabore, pueden llegar a ser muy
variados los programas y actividades que se propongan. Sin ánimo de ser exhaustivos, en
este libro reflejamos algunos ejemplos que nos ayuden a comprender qué tipos de
programas y actividades se desarrollan en los centros docentes en colaboración con las
administraciones, instituciones, organismos y asociaciones de ámbito estatal,
autonómico o local.
Son programas que se desarrollan para mejorar y perfeccionar el idioma español para
aquel alumnado que se incorpora al centro docente y lo desconoce. Así, algunos centros
se inscriben en el Aula Virtual de Español del Instituto Cervantes.
51
3. Proyecto RELACIONA
Este proyecto es una iniciativa del Instituto de la Mujer que se realiza en colaboración
con los organismos de igualdad de las comunidades autónomas cuyo objetivo es
promover la reflexión del profesorado sobre el tratamiento del amor y la sexualidad en la
educación y cómo se podrían abordar nuevas maneras para favorecer relaciones entre los
sexos libres de violencia. Para llevar a cabo el proyecto, el Instituto de la Mujer cuenta
con un equipo de asesoras que se desplazan a los centros y aportan sus conocimientos y
experiencias a los equipos de profesores y profesoras participantes, promoviendo el
diálogo, coordinando las reuniones y aportando materiales didácticos y nuevas
iniciativas.
Los centros docentes, que están adscritos a los centros de profesores y recursos, ofrecen,
entre otros aspectos, formación permanente a todo el profesorado para atender a la
diversidad.
Este tipo de programas hacen referencia a todos aquellos que, impulsados por la
administración educativa, tienen su ámbito de aplicación en el contexto europeo a través
de intercambios, visitas o estancias formativas. A continuación enumeramos algunos
ejemplos de estos programas europeos:
52
las necesidades de enseñanza y aprendizaje de todas las personas implicadas en la
educación y formación profesional, así como a las instituciones y organizaciones
que imparten o facilitan esa formación. En concreto, pretende apoyar al alumnado
en actividades de formación y de formación continua en la adquisición y uso de
conocimientos, competencias y cualificaciones con miras al desarrollo personal y
profesional. Además, también persigue apoyar las mejoras de la calidad e
innovación de los sistemas, instituciones y prácticas de educación y formación
profesional. Por último, pretende aumentar el atractivo de la formación profesional
y de la movilidad para las empresas y los particulares, y facilitar la movilidad de
trabajadores en formación.
• Proyecto Comenius. Es un programa que tiene por objeto reforzar la dimensión
europea en la Educación Infantil, Primaria y Secundaria y favorecer especialmente
la movilidad del alumnado y el profesorado, así como la cooperación entre los
centros educativos. En concreto, pretende fomentar entre los jóvenes y el personal
educativo el conocimiento y la comprensión de la diversidad de culturas y lenguas
europeas, así como el valor de esa diversidad. Además, pretende ayudar a los
jóvenes a adquirir las aptitudes básicas para la vida y las competencias básicas
para su desarrollo personal, su futuro laboral y la ciudadanía europea activa. El
programa Comenius incluye numerosas actuaciones en torno a la movilidad
internacional y las acciones escolares. Una de las acciones que se integran en este
proyecto de colaboración escolar con Europa es el programa eTwinning, que es
una iniciativa que fomenta la colaboración entre centros educativos europeos
mediante el uso de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC).
• Proyecto Portafolio Europeo de las Lenguas (PEL). Es un programa auspiciado
por el Consejo de Europa que pretende la concienciación positiva hacia el
fenómeno del multilingüismo y multiculturalismo, ayudar y facilitar al aprendiz de
lenguas tal proceso, conseguir una mayor autonomía en el desarrollo de su
aprendizaje a través del manejo de la autoevaluación periódica y finalmente la
obtención de unos grados de conocimiento en idiomas, estandarizados y aceptados
a nivel europeo. La idea que subyace en este proyecto es la de incorporar las
directrices que se reseñan en el Marco Común Europeo de Referencia para las
Lenguas con respecto a la unificación de criterios en los niveles de competencia
lingüística y su certificación. Este proyecto trata de adecuar las enseñanzas de
idiomas del sistema educativo español a las pautas extendidas por toda Europa, así
como la equiparación de certificación. El PEL es un documento personal en el que
el alumnado que está aprendiendo una lengua puede registrar sus experiencias de
aprendizaje de lenguas y culturas y reflexionar sobre ellas. La propiedad de este
documento es de su titular (el alumno o alumna), pudiendo hacer uso del mismo
cuando quiera, tanto en su propio país como en cualquier otro país europeo, por
ejemplo, cuando cambie de institución educativa, acceda a un nivel educativo
53
superior, necesite o desee utilizarlo para buscar un primer o nuevo empleo o en sus
desplazamientos por Europa por motivos profesionales. Concretamente, consta de
tres partes: Pasaporte de Lenguas, que refleja lo que el titular sabe hacer en
distintas lenguas mediante un cuadro de autoevaluación de competencias,
incluyendo toda aquella información sobre diplomas obtenidos, cursos a los que ha
asistido, así como contactos relacionados con otras lenguas y culturas; Biografía
Lingüística, donde se describen las experiencias del titular en cada una de las
lenguas y está diseñada para servir de guía al aprendiz a la hora de planificar y
evaluar su progreso y Dossier, que contiene ejemplos de trabajos personales para
ilustrar las capacidades y conocimientos lingüísticos. Además de los objetivos que
se han planteado anteriormente y de la experimentación en el aula de este
programa, los centros docentes pueden enriquecerlo a través de distintas
actuaciones: certámenes y jornadas de exposición e intercambio de experiencias.
Esta actividad tiene como destinatarios a los centros de educación primaria y secundaria
(públicos y privados concertados) y tiene como objetivo acercar la ciencia y la
tecnología a las aulas haciendo al alumnado partícipe activo de su aprendizaje, así como
promover el diseño de actividades científicas contextualizadas para este alumnado.
Este programa tiene como objetivo la adquisición, en al menos una lengua extranjera, de
la competencia comunicativa básica que les permita expresar y comprender mensajes
sencillos y desenvolverse en situaciones cotidianas.
Son programas dirigidos a llevar a cabo actuaciones preventivas, para evitar la aparición
de problemas personales y escolares y, en su caso, minimizar la influencia de los
mismos, en el desarrollo psicopedagógico de los escolares en la etapa de Educación
Infantil y derivando a los servicios especializados de atención temprana los casos que
requieran de su intervención.
Este programa, dirigido a centros educativos públicos y/o privados concertados, pretende
realizar actividades destinadas a descubrir y disfrutar la naturaleza, valorar el patrimonio
en todas sus vertientes y promover la educación ambiental desde una perspectiva de
54
educación en valores, favoreciendo la convivencia y profundizando en el conocimiento
de nuestro entorno.
Tiene como objetivo esencial que el alumnado aprenda a cuidar, respetar y mantener el
medio ambiente, conjugando el desarrollo económico con la conservación del medio
natural, para conseguir de esta forma un desarrollo sostenible. Se trata de
proporcionarles conocimientos, habilidades y actitudes para que puedan participar
activamente y adquirir las capacidades necesarias en la mejora y la protección del medio
ambiente, y que a su vez contribuyan al desarrollo sostenible. El programa se deberá
desarrollar en torno a las materias propias que constituyen el objeto de la educación
ambiental: ruido, residuos y reciclaje, agua, paisaje, etc.
Los centros docentes pueden participar en la promoción del deporte escolar entre el
alumnado escolarizado en sus centros. Estos programas desarrollan actividades
deportivas organizadas en horario no lectivo para garantizar que todo el alumnado
conozca la práctica de diversas modalidades deportivas. Además, se establecen
competiciones escolares entre distintos centros.
55
12. Programa Red de aulas de la naturaleza
Los centros docentes, a través de los servicios de orientación, pueden informar a las
familias de la existencia de instituciones de atención psicológica o educativa específica
para las necesidades que presentan sus hijos. En este sentido, para aquellas familias que
usen servicios de salud mental, gabinetes privados de atención psicológica, logopédica,
etc., los servicios de orientación del centro establecerán planes de coordinación para
conocer la situación del alumnado y cómo se le puede ayudar desde el centro.
Para una atención educativa de calidad para el alumnado que presenta necesidad
específica de apoyo educativo, los centros docentes pueden llevar a cabo actuaciones,
proyectos y programas en colaboración con organizaciones y asociaciones de personas
con discapacidad. Así, por ejemplo, muchos centros mantienen relaciones fluidas,
participando en las actividades que organizan y la información que ofrecen a las
familias, con asociaciones como ASSIDO, la ONCE, la Asociación de ayuda al déficit
de atención y/o hiperactividad, la fundación CEPAIM, etc. También suele ser frecuente
que los centros docentes mantengan una relación con asociaciones para coordinar
actuaciones y derivar a determinado alumnado que finaliza su escolarización y necesita
de los servicios de un centro ocupacional o de empleo, realizando, en muchas ocasiones,
programas de cualificación profesional inicial especial.
56
saludables en la población escolar de tercero y cuarto de Educación Primaria como base
de la prevención de futuros trastornos alimenticios.
Aquí se albergarán todos aquellos programas que desarrollan los centros docentes en
colaboración con los consistorios municipales y locales, como por ejemplo, proyectos de
promoción educativa para jóvenes en situación de desigualdad social, programas para
favorecer la convivencia familiar, programas de inserción social y laboral para jóvenes,
programas de educación sexual para jóvenes, planes de absentismo escolar, talleres de
drogodependencias, talleres de educación en valores, actuaciones del programa de
deporte escolar y programas de consumo responsable y actividades extraescolares.
Además, la colaboración que se establezca con la administración local también viene
reflejada en el desarrollo de determinadas medidas específicas, como por ejemplo en los
programas de cualificación profesional inicial.
Las administraciones locales pueden colaborar con los centros docentes en programas
para la extensión del tiempo escolar. Estos programas pretenden potenciar que los
centros públicos puedan ofrecer actividades y servicios complementarios a fin de
favorecer la ampliación de su oferta educativa para atender las nuevas demandas
sociales. Algunos ejemplos de estos programas son los siguientes: «Conciliación de la
vida laboral y familiar», «Aula matinal», «Taller para alumnos madrugadores», «Los
primeros del cole», «Proyecto de acogida para niños de nuestra escuela», «Desayuno
escolar», «Taller de relajación y/o descanso», «Taller de psicomotricidad y creatividad»,
«Acompañamiento a centros educativos», «Apertura de centros», «Ampliación del
horario de entrada al colegio», «Juego libre y dirigido», «Educación para respeto al
medio», «Hábitos de higiene y autonomía personal», «Servicio de conciliación», etc.
Normativamente, los centros docentes deben ser accesibles para todo el alumnado. A
este respecto, los centros docentes tienen que reflejar en este apartado si las condiciones
físicas del centro permiten el acceso de todos y en qué forma (Pérez y Andreu, 2010).
57
Asimismo, con este propósito en el Plan de Atención a la Diversidad del centro docente,
también se debe reflejar qué tipo de actuaciones de mejora o renovación de sus
condiciones físicas ha programado para garantizar el acceso de todo el alumnado
escolarizado. Ejemplos de estas actuaciones son la supresión de barreras arquitectónicas,
la incorporación de recursos tecnológicos, el establecimiento de plazas de aparcamiento
en el centro para personas con discapacidad, aseos adaptados, etc.
58
Pero no se trata solo de dotar al alumnado de un ordenador personal, sino también
de poner en marcha las denominadas «aulas digitales» del siglo XXI, dotadas de la
infraestructura tecnológica y la conectividad básicas para abrir las aulas a la
realidad.
• Proyecto «Aula xxi». Es un proyecto consistente, entre otras acciones, en la
dotación a grupos de quinto de Educación Primaria y primero de Educación
Secundaria Obligatoria de ordenadores portátiles para el alumnado, una pizarra
digital interactiva para el aula, una cámara de documentos y la infraestructura
necesaria para la conexión a red local e Internet mediante conexión wifi, así como
la guarda y custodia de los equipos en el propio centro. Los centros docentes
beneficiarios del proyecto, además de promover la integración de las TIC en su
labor docente, desarrollarán proyectos educativos innovadores basados en la
utilización en las aulas seleccionadas y de forma habitual, de equipos y recursos
informáticos didácticos avanzados.
Los centros docentes pueden escolarizar al alumnado que requiere de una ayuda técnica
o equipamiento específico para apoyar su proceso de enseñanza y aprendizaje. En
ocasiones, los centros docentes no cuentan con esa ayuda técnica o equipamiento
específico, para lo cual la Consejería de Educación de determinadas comunidades
autónomas propone un proceso de solicitud y dotación a los centros que tengan tales
necesidades. A continuación vamos a explicar cómo se realiza la solicitud y
procedimiento de concesión de ayudas técnicas y equipamientos específicos para los
centros docentes.
Entre los objetivos de este programa se encuentran:
59
• Ayudar al alumnado con necesidades educativas especiales a alcanzar los objetivos
establecidos con carácter general para todos los alumnos y alumnas en función de
los principios de normalización e inclusión escolar.
• Dotar a los centros docentes de medios técnicos precisos que aseguren el
seguimiento y la participación del alumnado con necesidades educativas
especiales en todas las actividades escolares.
• Compensar las dificultades de aprendizaje del alumnado con necesidades
educativas especiales en su proceso educativo.
60
violencia de género y educar en la igualdad entre hombres y mujeres colabore toda la
comunidad educativa. En este sentido, en muchos centros docentes estas actividades se
impulsan desde el Consejo Escolar y las asociaciones de madres y padres de alumnos
(AMPA). Puede ser pertinente que en el seno de los centros docentes se creen
comisiones que impulsen medidas educativas que fomenten la igualdad real y efectiva
entre hombres y mujeres.
El centro docente puede desarrollar programas dirigidos a educar para la igualdad entre
hombres y mujeres, como el programa «La máscara del amor», programa estructurado en
el ámbito escolar cuyo objetivo es la prevención de la violencia de género.
Este programa tiene la intención de fomentar el respeto a las normas de educación cívica,
61
velando por el bienestar de los menores durante su estancia en el centro educativo y
promover actitudes positivas para evitar conflictos en la comunidad escolar y prevenir
conductas antisociales. El programa desarrolla cuatro áreas principales: educación vial,
educación cívica, absentismo escolar y seguridad en instalaciones.
En este apartado se debe incorporar qué criterios utilizan los centros docentes para
organizar al alumnado que escolariza y cómo se organizan en el desarrollo de las
distintas enseñanzas impartidas. En este sentido, se debe describir cómo se organiza el
alumnado en función de las medidas ordinarias y específicas de atención a la diversidad
que lleve a cabo el centro.
En este punto se debe explicitar qué criterios sigue el centro para organizar los distintos
espacios con los que cuenta y cómo los organiza para el desarrollo del proceso
educativo. En este sentido, se deben explicitar qué espacios van a ser utilizados para
atender al alumnado que necesita apoyo educativo y cómo se distribuyen con el fin de
dar respuesta a sus necesidades. Además, se deben describir las pautas sobre la
62
utilización adecuada de los espacios y los bienes inmuebles que en ellos existen.
4. Trabajo conjunto entre los distintos profesionales del centro y los colaboradores y
agentes externos del centro
En este apartado debería aparecer cómo se van a desarrollar las coordinaciones entre
todos los agentes internos y externos que intervienen en el centro. Por ejemplo, cómo se
coordina la relación del jefe de estudios con los tutores, cómo se van a coordinar los
tutores con el resto del equipo docente, cómo se coordinan entre sí los profesionales que
intervienen en el mismo tramo de la etapa, cómo se van a desarrollar las coordinaciones
y colaboraciones entre el personal docente y el personal docente de apoyo educativo,
cómo se coordina el equipo docente con los agentes externos al centro docente
(mediador social, mediador familiar, equipo psicopedagógico de zona, de atención
temprana, específico, etc.).
1. Trabajo conjunto entre los distintos profesionales del centro y los profesionales de
atención educativa complementaria que intervienen con el alumnado
2. Trabajo conjunto entre los distintos profesionales del centro y el personal externo que
interviene con el alumnado
63
a la diversidad del alumnado
En este apartado del Plan de Atención a la Diversidad, los centros docentes deben
reflejar todos aquellos programas, planes o proyectos de innovación e investigación
educativa que estén desarrollando con el objetivo de dar respuesta a la diversidad. Estas
actuaciones pueden ser realizadas por el centro docente con o sin ayuda externa. A
continuación destacamos algunos proyectos de innovación e investigación educativa:
64
3. Medidas ordinarias para atender las
necesidades de todos en el aula
2. Aprendizaje cooperativo
65
2.2 ¿Para qué sirve?
66
• Se desarrolla el trabajo en equipo que debe fomentar la interdependencia positiva
de los equipos de trabajo formados a partir de mecanismos de recompensa grupal
y/o de estructuración de la tarea para la consecución de los objetivos propuestos.
• Al final de la tarea de aprendizaje cooperativo se inicia un proceso de evaluación
sobre el grado de consecución de los objetivos propuestos, tanto por parte del
equipo como del alumno.
El método Jigsaw. La finalidad que busca es crear las condiciones necesarias para que el
trabajo de cada miembro del equipo sea imprescindible, de modo que el resto de los
miembros puedan completar la tarea y lograr los objetivos propuestos. Para ello, se
divide el grupo-clase en equipos de trabajo formado por grupos poco numerosos de
alumnos (de tres a cinco) y con condiciones heterogéneas. A cada alumno se le asigna
una parte de la tarea que debe dominar. La evaluación se efectúa por el aprendizaje de la
unidad completa, es decir, cada individuo ha de asimilar, tanto la tarea que le es asignada
como la encomendada al resto de los compañeros de equipo.
El método Student Team Learning. En este método los alumnos se agrupan durante
periodos largos de tiempo en grupos heterogéneos de pocos miembros (de cuatro a
cinco). Cada uno de los alumnos se ayudan mutuamente hasta dominar los materiales de
trabajo presentados por el docente; posteriormente cada estudiante es evaluado de forma
individual. Al final, los grupos consiguen algún tipo de recompensa que reconozca su
éxito solo si se demuestra que todos los integrantes del grupo han aprendido.
El método Group Investigation. Este método plantea que los estudiantes creen sus
propios grupos (entre dos y seis miembros) para tratar algún aspecto complejo de un
tema propuesto a todo el grupo-clase. Cada grupo deberá hacer un informe y una
presentación para todo el grupo-clase.
Los alumnos desempeñan unos mismos roles en la tarea de aprendizaje grupal y, al
mismo tiempo, los intercambios comunicativos entre los alumnos presentan una gran
variabilidad en función de las características intragrupales, intergrupales y de estructura
de la tarea y recompensa.
El docente desempeña un rol de guía, asesor y coordinador del proceso formativo del
alumnado, facilitando el desarrollo de la tarea de aprendizaje cooperativo. En este
67
sentido, el docente especifica los objetivos a conseguir, explica a los alumnos la
importancia de la interdependencia positiva, interviene en la creación del grupo
favoreciendo la heterogeneidad, supervisa el aprendizaje del alumnado, interviene en los
distintos grupos de trabajo para apoyar el desarrollo de la tarea y mejorar el desempeño
interpersonal y grupal de los alumnos y evalúa el aprendizaje del alumnado.
EJEMPLO
68
aclaraciones sobre la explicación de los otros expertos y contribuir con su propia
opinión – tomar notas e ideas fundamentales para preparar el esquema o guion que
se presentará al equipo de trabajo original y controlar el tiempo. En la reunión con
el equipo de trabajo, el alumno asumirá tres roles: explicación de su esquema
elaborado en la reunión de expertos – pedir aclaraciones y ofrecer opinión de la
explicación que ofrezcan otros miembros del equipo sobre los otros documentos de
trabajo – Tomar notas y controlar el tiempo.
• Criterio de éxito. Cada miembro del grupo es capaz de explicar la síntesis del
contenido de cada uno de los documentos de trabajo propuestos para abordar el
tema.
• Interdependencia positiva. Cada miembro del grupo tiene una parte del material
(Doc1 – Doc2 – Doc3 – Doc4) y tiene un rol asignado para conseguir los objetivos
de la tarea.
Exigibilidad personal. Un miembro del grupo, elegido aleatoriamente, hará un
resumen global de la documentación o responderá a preguntas del profesor sobre
los materiales estudiados.
• Habilidades sociales en juego. Capacidad para expresar y sintetizar ideas,
capacidad para cuestionar y pedir aclaraciones sobre las explicaciones de otros.
• Reflexión sobre el trabajo del grupo. Cada miembro del grupo debe mencionar una
cosa que ha ido bien y una que ha ido mal en el trabajo realizado por el grupo.
69
Cuadernos de Pedagogía, n.º 345, 50-54.
Terán, M. y Pachano, L. (2006). «El trabajo cooperativo en la búsqueda de
aprendizajes significativos en clase de matemáticas». En F. Trujillo y M. Ariza,
Experiencias educativas en Aprendizaje Cooperativo. Granada: Grupo Editorial
Universitario.
— (2009). El trabajo cooperativo en la búsqueda de aprendizajes significativos en
clase de matemáticas de la educación básica. Investigación arbitraria, n.º 44, 159-167.
Trujillo, F. y Ariza, M. (2006). Experiencias educativas en Aprendizaje
Cooperativo. Granada: Grupo Editorial Universitario.
http://fernandotrujillo.es/wp-content/uploads/2010/05/AC_libro.pdf
70
Algunos ejemplos de tareas podrían ser: listar, ordenar, distribuir, comparar, extraer y
utilizar cierta información, describir imágenes o situaciones, resolver problemas, crear
algo, hacer presentaciones, etc. En general, se trata de tareas que deben implicar al
discente en la comprensión, ejecución, creación y puesta en práctica de la competencia
adquirida o en proceso de adquisición, siendo el aula un espacio de entrenamiento para
su puesta en acción a través de tareas altamente motivadoras y que incitan a aprender
todo lo necesario para llevarlas a cabo.
Es un método que otorga gran valor a la información y experiencias que aportan los
alumnos y se realiza teniendo en cuenta la siguiente secuencia:
71
• Evaluación del proceso desarrollado.
EJEMPLO
2. Objetivos:
3. Tareas finales:
72
• Los alumnos elaboran una ficha en la que especifican el lugar/es elegido/s para el
viaje y el tipo de información que necesitan. Distribuyen la tarea de búsqueda de
información entre los miembros del grupo y lo reflejan en la ficha.
• Fuera de la clase, los alumnos realizan visitas a estaciones y agencias de viajes,
oficinas de turismo y toman nota de diversa información que, posteriormente,
ofrecerán a sus compañeros.
• Los alumnos, en sus grupos, a través de preguntas y respuestas intercambian la
información que necesitan para organizar el viaje.
• Los alumnos eligen entre las diferentes opciones presentadas las que más se ajuste
a sus intereses.
— Presentación de la unidad.
— Presentación rápida de los objetivos de la lección 1 en relación con los objetivos
de la unidad.
— Presentación de los nuevos componentes lingüísticos necesarios para la
consecución del objetivo especificado anteriormente.
— Tarea de comprensión oral: los alumnos escuchan un diálogo grabado en el que
una persona solicita información para realizar un viaje. Los alumnos rellenan un
cuadro con la información que se les ofrece.
— Tarea de producción oral realizada en pareja:
73
b) Mismo planteamiento que en la tarea anterior pero cambiando los roles del
alumno y la información del viaje.
c) A y B comprueban que la información que han puesto en sus cuadros es la
correcta.
Esta lección irá seguida de otras, que desarrollarán los demás componentes,
desembocando en las tareas finales descritas anteriormente.
74
aprendizaje. Ayuda a motivar a los estudiantes, ya que los niños pueden escoger temas
que tengan relación con sus propias experiencias, así como permite utilizar estilos de
aprendizaje relacionados con su estilo personal de aprender (Katz y Chard, 1989). Este
enfoque es utilizado como modelo metodológico, para el desarrollo de estrategias de
pensamiento divergente en alumnado de altas capacidades y/o habilidades.
Son los propios alumnos los que proponen el proyecto a realizar, por tanto, al ser de
su interés, el trabajo se vuelve más motivante. Este protagonismo del alumno en las
distintas fases y actividades que hay que desarrollar en un proyecto le ayuda a ser
consciente de su proceso de aprendizaje. También facilita la integración de las distintas
áreas que forman el medio de actividades significativas correlacionadas. Se puede
desarrollar de manera individual o por medio de grupos de aprendizaje cooperativos en
los que participarán uno o varios docentes de diferentes áreas o niveles según la
naturaleza del proyecto.
Las tareas que conforman el proyecto de aprendizaje deben ser seleccionadas según
criterios de eficacia y relevancia para el aprendizaje del alumno. Las tareas se secuencian
en niveles progresivos de dificultad (de lo más simple a lo más complejo o de lo general
a lo específico) que permitirá ir asentando los conocimientos. Un modo podría ser el
siguiente:
75
• Inicio
— El alumnado debe completar las tareas y metas parciales una por una. El plan
de trabajo debe dividir el proyecto en una secuencia de tareas, cada una con su
programación y meta.
— Con la aprobación del docente, los equipos ajustan, continuamente, la
definición del proyecto.
— Los miembros de los equipos toman parte en el aprendizaje colaborativo y en
la solución cooperativa de los problemas.
— Se hará una autoevaluación como una evaluación mutua entre los miembros de
los equipos. El profesor también evalúa y da retroalimentación.
— El docente debe guiar hacia la finalización del proyecto. Un proyecto tiene
como resultado final un producto, una presentación o una interpretación
dirigida a una audiencia específica.
— Si es necesario, se repiten los pasos de esta sección hasta que todas las metas
parciales se hayan alcanzado.
76
— Evaluación final. Se presenta el trabajo terminado en la forma acordada. Por lo
general, toda la clase participa y, junto con el profesor, ofrece
retroalimentación constructiva.
— Cierre. Alumnos y equipos analizan sus productos, presentaciones o
interpretaciones finales, apoyándose en la retroalimentación recibida.
— El docente debe guiar hacia la conclusión del proyecto. Para ello, debe facilitar
una discusión y evaluación general del proyecto en la clase.
— El docente hará registro de sus notas, reflexionando sobre el proyecto, sobre lo
que funcionó bien y sobre lo que se debe mejorar para la próxima vez que lo
use en una clase.
EJEMPLO
77
nuestros, así como sobre los medios de transporte que utilizan para viajar hasta aquí.
Pero como, evidentemente, todo parte de la intuición y de las preguntas sobre lo
más próximo, también volvemos a los detalles más cercanos y pueden surgir
cuestiones: ¿dónde viven los niños chinos?, ¿dónde está la selva?, ¿dónde viven las
focas?, ¿dónde vivía Pinocho? Preguntas y preguntas que parecen no cesar, y a las que
ellos tienen que dar respuesta a través de su investigación.
La realidad es que surgen muchos más contenidos de los que se puede imaginar.
Por consiguiente, se trata de organizarlos y de darles forma en un mapa conceptual.
Dada la motivación de los alumnos, conviene siempre hacer partícipes a los demás
maestros; así, el maestro que imparta psicomotricidad y música puede preparar con los
alumnos una selección de danzas del mundo, y la maestra de inglés trabajará aspectos
culturales del Reino Unido. De este modo, podremos ir dando respuesta a las
necesidades de formación de los alumnos.
Las familias también colaborarán en este trabajo aportando información sobre
diferentes países, y se las invitará a una actividad de clausura donde los alumnos
explicarán algunos aspectos de los países que se habían estudiado y realizarán una
pequeña representación de las danzas del mundo.
La experiencia puede ir mucho más allá de lo previsto, puesto que permite trabajar
todas las áreas del currículum y conseguir muchos más objetivos de los que al
principio se había planificado de una manera muy general. Finalmente, el docente hará
con todos los alumnos un debate en clase sobre el proyecto de trabajo y lo aprendido.
Para ello, es bueno que se recoja por escrito, en un mural, todas las aportaciones del
alumnado, todo lo que se ha aprendido desde que se empezó el proyecto, desde los
conocimientos previos que tenían los alumnos antes de su comienzo y que, también,
se recogieron en otro mural. Así se puede precisar la evolución y el aprendizaje. Del
mismo modo, se preguntará al alumnado qué es lo que más dificultad le ha supuesto,
lo que más le ha gustado, y lo que no volvería a realizar. Así, el docente contemplará
los cambios de mejora necesarios a llevar a cabo de cara al próximo proyecto.
78
Información y las Comunicaciones. Eduteka:
http://www.eduteka.org/APPMoursund2.php
Ocaña, C. (2010). Algo sorprendente está por llegar. Cuadernos de Pedagogía, n.º
407, 83-85.
Peñas, J. y Martín, J. (2008). Nuevos problemas, nuevos lenguajes. Ciencias y TIC.
Cuadernos de Pedagogía, n.º 384, 62-64.
Pérez, J. F. (2006). Educación Física para la paz. Cuadernos de Pedagogía, n.º
358, 32-34.
Rodríguez, E., Vargas, E. y Luna, J. (2010). Evaluación de la estrategia aprendizaje
basado en proyectos. Educación y Educadores, n.º 13 (1), 13-25.
Trujillo, N. (2013). Aprendizaje basado en proyectos en 10 pasos. Actualidad
pedagógica: http://actualidadpedagogica.com/aprendizaje-basado-en-proyectos-en-10-
pasos/
79
• Aceptar que sus necesidades de formación son cambiantes.
Para desarrollar este proceso será necesaria la colaboración del docente que le ayude
a reflexionar sobre las diferentes maneras de aprender; a descubrir sus propias
estrategias, a ensayar, a aprender de su proceso de aprendizaje. Para ello, será necesario
el uso de diferentes estrategias:
Todo ello con un objetivo final, conseguir que el alumno adquiera los objetivos
propuestos y el desarrollo de sus capacidades.
80
Además, el docente debe ayudar al alumno a reflexionar sobre su proceso de aprendizaje.
En definitiva, las funciones del docente en este método de aprendizaje serían las
siguientes:
EJEMPLO
TÓPICO: El paisaje
81
mapas, banderas, textos, etc.). Puedes pedir ayuda a tus padres, amigos... y tráelos
a clase.
• Se forman grupos de cuatro o cinco niños para realizar un mural con lo que los
miembros del grupo han aportado, y que, después, se colocará para adornar la
clase, recogiendo los conocimientos previos de cada grupo respecto del tema
objeto de estudio.
• Finalmente, cada grupo enseñará su mural al resto de los compañeros.
• Después podrán responder, de un modo autónomo, a las siguientes preguntas:
El docente recogerá aquellos contenidos que ya han sido tratados por los grupos y que
se pueden consolidar mejor con un resumen que él expone y facilita al alumnado, tal
como el siguiente, a modo de ejemplo.
El paisaje es el terreno que nos rodea. En él podemos encontrar montañas, ríos,
campos, mar, edificios, casas bajas...
Según lo que predomine, lo llamamos de una manera determinada. Se muestran
varias fotografías con ejemplos de paisajes: paisaje llano, montañoso, costero y se
propone al alumnado que una el tipo de paisaje con cada fotografía (estas fotografías
se han retomado de sus murales).
Todas las personas necesitan una casa para vivir. Las de los pueblos o las que
están en el campo suelen tener una o dos plantas. Son las viviendas rurales.
En las ciudades la mayoría de las viviendas son edificios de varias plantas, donde
viven muchas familias. Son las viviendas urbanas.
Tras esa observación los alumnos deberán describir el tipo de paisaje rural o
urbano.
Se sigue profundizando en el conocimiento intercultural de estos dos países a
través de otras actividades de aprendizaje autónomo, como:
82
PARA SABER MÁS
83
6.3 ¿Cómo se lleva a cabo? ¿Con qué o quiénes?
El aprendizaje por descubrimiento implica una tarea distinta para el alumno frente a
otros métodos de aprendizaje. En este caso el contenido no se da en su forma acabada,
sino que debe ser descubierto por él. Este descubrimiento o reorganización del material
debe realizarse antes de poder asimilarlo; el alumno reordena el material adaptándolo a
su estructura cognoscitiva previa hasta descubrir las relaciones, leyes o conceptos que
posteriormente asimila.
El maestro organiza la clase de manera que los estudiantes aprendan a través de su
participación activa. Es el que proporciona los recursos necesarios al alumno para que
pueda llegar al aprendizaje y el que motiva a su alumnado para que haga observaciones,
elabore hipótesis y compruebe los resultados.
EJEMPLO
84
trabajo, fuera de los muros de la escuela»..
Componentes de una WebQuest
• La tarea es una descripción formal del proyecto que los estudiantes deberán haber
llevado a cabo al final de la WebQuest. El proyecto podría materializarse en una
presentación multimedia, una exposición verbal, una cinta de vídeo, una pagina
web o una obra de teatro. La tarea es la parte más importante de una WebQuest y
existen varias tipologías o maneras de asignarlas: tareas de repetición, de
compilación, de misterio, periodísticas, de diseño, de construcciones de consenso,
de persuasión, de autorreconocimiento, de producción creativa, analíticas, de
juicio, científicas.
• El proceso describe los pasos que el estudiante debe seguir para llevar a cabo la
tarea. Ello incluye la descripción de tareas y subtareas y los roles que debe tomar
cada estudiante. También se indica el tiempo con el que cuentan los alumnos para
entregar el proyecto y la forma de presentarlo.
85
• Los recursos consisten en una lista de sitios web que el profesor ha localizado para
ayudar al estudiante a completar la tarea. Estos son seleccionados previamente para
que el estudiante pueda enfocar su atención en el tema.
• La evaluación describe los criterios de evaluación del proyecto. Estos deben ser
precisos, claros, consistentes y específicos para el conjunto de tareas. Una forma de
evaluar el trabajo de los estudiantes es mediante una plantilla de evaluación. Esta
se puede construir tomando como base el «Boceto para evaluar WebQuests», de
Bernie Dodge, que permite a los profesores calificar una WebQuest determinada y
ofrece retroalimentación específica y formativa a quien la diseñó.
• Por último, la conclusión resume la experiencia y estimula la reflexión acerca del
proceso, de tal manera que extienda y generalice lo aprendido. Con esta actividad
se pretende que el profesor anime a los alumnos para que sugieran algunas formas
diferentes de hacer las cosas con el fin de mejorar la actividad.
86
problemas y viceversa. Aula de innovación educativa, n.º 171, 12-16.
Lara, S.; Orobiogoikoetxea, E. y Mir, J. L. (2008). La WebQuest para la
elaboración de vídeos científicos. Aula de innovación educativa, n.º 169, 88-96.
Lorenzo, R. (2001). La enseñanza por descubrimiento y el aprendizaje
significativo. Números. Revista didáctica de las matemáticas, n.º 46, 9-18.
7. El contrato didáctico
B. Según la temática:
• Cambiar los parámetros relacionales del discurso, entre el qué enseñar y el qué
aprender, de forma que las normas implícitas sean sustituidas por normas
explícitas y el control del docente por la autonomía del estudiante, permitiendo de
esta forma que emerja con fuerza un «aula diversificada» (donde tiempos,
espacios, contenidos, metas..., pueden ser diferentes).
• Promover la autonomía y responsabilidad del alumno.
• Incrementar la motivación e implicación del alumno en su propio aprendizaje
(toma de decisiones).
87
• Estimular la actividad del alumno en el proceso de enseñanza-aprendizaje.
• Atender a las características personales de cada estudiante: responder a las
necesidades, intereses, etc., del estudiante como individuo.
• Dirigir académicamente el trabajo independiente del alumno.
• Democratizar la educación, promoviendo procesos de negociación y participación
del estudiante en el proceso de la docencia: desde el establecimiento de los
objetivos y contenidos a la evaluación.
• Promover la capacidad de autoevaluación y pensamiento crítico del estudiante.
• Especialmente se estimula la capacidad de autorreflexión sobre el propio
aprendizaje.
Fase 2: Diagnóstico inicial de la situación de partida del estudiante. Orientarlo para que
analice e identifique su situación de partida en cuanto a aprendizaje, necesidades,
intereses, motivaciones, competencias, etc.
Fase 3: Negociación del contrato y orientación del aprendizaje. Entrevista cara a cara del
profesor/a y estudiante para acordar los diferentes elementos del contrato. El contrato
debe ser individualizado, pero a la vez garantizar que cumple con los requisitos/objetivos
generales básicos del área, y realista (realizable, claro, etc.). La negociación está presente
durante todas las fases. Se pueden elaborar diferentes revisiones del mismo.
88
nivel de aspiración/motivación del estudiante (por ejemplo, nota que desea obtener
en el área).
Fase 6: Evaluación del trabajo realizado. Obviamente los logros parciales pueden
evaluarse y a esta evaluación contribuir el propio estudiante (autoevaluación). El
contrato puede renovarse y cambiarse a lo largo de la «vigencia» del mismo con el
acuerdo mutuo de las partes.
El alumno y el profesor de forma explícita intercambian sus opiniones, comentan sus
necesidades, sus sentimientos, comparten proyectos y deciden en colaboración la manera
de llevar a cabo el proceso de enseñanza-aprendizaje y lo reflejan oralmente o por
escrito.
El docente en esta medida tiene el papel de establecer los términos del contrato y
cumplir la parte estipulada en el mismo. También debe ser el mediador entre las partes
afectadas, alumno, familia y resto de docentes que se vean afectados por el desarrollo y
cumplimiento del contrato.
EJEMPLO
CONTRATO ESCOLAR
YO (Nombre y Apellidos):
Alumno de Educación Primaria en curso:
Colegio/ IES:
Conocedor de que puedo y debo mejorar en mi rendimiento escolar y mi actitud en
el aula y sabedor de que con ello conseguiré mejores resultados escolares, me
comprometo a realizar las siguientes conductas en mi aula en particular y en el
colegio/IES en general.
CONDUCTAS:
89
• Mejorar la participación y la atención en clase.
• Mejorar los resultados escolares.
• Otros...
Al final de la clase, revisaré con el maestro/profesor la actitud y el trabajo realizado
durante la misma. Si he cumplido las conductas anteriores, tendré derecho a...
Fecha:
Firma alumno:
Firma tutor:
Firma padres:
Firma director:
8. Enseñanza multinivel
90
Es el enfoque de planificación que asume la individualización, la flexibilidad y la
inclusión de todos los alumnos (en el aula ordinaria), sin distinción ni exclusión por su
nivel de habilidades o capacidades. En esta enseñanza se mantiene la referencia de unos
objetivos y aprendizajes comunes, se dispone de un amplio elenco de métodos y
estrategias de instrucción que utilizan de manera flexible en función de las características
individuales de los alumnos.
La enseñanza multinivel trata de dar respuesta a la diversidad de niveles. En esta
enseñanza se mantiene la referencia de unos objetivos y aprendizajes comunes, se
dispone de un amplio elenco de métodos y estrategias de instrucción que se utilizan, de
manera flexible, en función de las características individuales de los alumnos. Por
consiguiente, es un método de enseñanza que permite a los profesores responder a las
necesidades de los estudiantes e impartir una educación de calidad para todos.
Las claves de este procedimiento están en los distintos estilos de aprendizaje o
multiplicidad en las formas de aprender, el desglose de actividades en distintos niveles,
favoreciendo ir de los más simples a los más complejos, y en la diversidad de técnicas e
instrumentos para evaluar.
91
• Los recursos y materiales que se utilizan.
• La evaluación de los aprendizajes.
La enseñanza multinivel permite que el docente planifique una lección para todo el
alumnado y, así, disminuya la posibilidad de usar programas diferentes, a la vez que
permite introducir objetivos individuales en los contenidos y en las estrategias
educativas previstas en el aula.
Para impartir la enseñanza multinivel, no se necesita un entrenamiento extenso, pero
sí que los profesores revisen su enseñanza previa. Esto podría significar tener que
abandonar lecciones impartidas numerosas veces con anterioridad y estar dispuesto a
abordar el mismo material desde perspectivas nuevas, algo que requiere tiempo para
planificar las nuevas lecciones y la voluntad de querer sustituir el rol de presentador por
el de facilitador.
La enseñanza multinivel obliga a apartarse de una clase controlada por el profesor e ir
hacia otra en la que los estudiantes tengan una autonomía mayor y más posibilidades de
elegir. Constituye una forma de responder a un tiempo a las necesidades del currículum
y a las de estudiantes que presentan distintos niveles. Es un método que demanda a los
profesores una gran cantidad de trabajo. ¿Por qué tendrían que estar los docentes
dispuestos a dedicar toda la energía que requiere introducir estos cambios? Porque para
que la educación inclusiva se convierta en el sistema educativo del futuro es necesario
aplicar la instrucción multinivel, compartir sus bases filosóficas y asumir el compromiso
de proporcionar los recursos necesarios para implantarla. Pensemos que los profesores
son, en la actualidad, responsables de aulas caracterizadas por la heterogeneidad, y
necesitan ampliar la gama de estrategias de enseñanza que pueden utilizar para responder
a estas necesidades diversas. Como resultado de este cambio, tanto los estudiantes como
el sistema educativo lograrán niveles mayores de éxito.
EJEMPLO
Para desarrollarlo se parte de una unidad didáctica que tiene como eje vertebrador
siete capítulos de la serie que la BBC elaboró con el título «Viaje al cuerpo humano»,
los cuales van describiendo las diversas etapas de la vida, desde el nacimiento hasta la
muerte. A partir de cada uno de los vídeos, se plantean una serie de actividades.
Por ejemplo, el capítulo titulado «Primeros pasos» está dedicado a la infancia. En
él una de las actividades trata de que los alumnos obtengan de su familia datos sobre
elementos aparecidos en este capítulo, como la edad de inicio al gateo, de la
bipedestación, del desarrollo del lenguaje, etc. La redacción de todo esto conforma un
dosier final elaborado en el ordenador que incluye diversas fotografías escaneadas u
obtenidas de Internet.
Esta actividad tiene la virtud de ser multinivel, puesto que cada dosier será
92
diferente según las capacidades del estudiante en cuestión. En algunos casos los
alumnos y alumnas completarán sus dosieres y en otros el profesorado sugerirá que
vayan ejecutando las mejoras progresivas que estén en su zona de desarrollo próximo.
La evaluación se lleva a cabo atendiendo tanto al nivel exigido al grupo como al
esfuerzo de cada uno, y toma como referencia las tareas, los resultados de los
exámenes, el nivel de los trabajos individuales (dosier) y las observaciones que el
docente realiza en el aula.
9. Taller de aprendizaje
93
9.2 ¿Para qué sirve?
EJEMPLO
El pan
Previamente a los talleres una mañana basándonos en lo que los niños traen de
desayuno hablamos en asamblea sobre ello, pretendiendo averiguar sus conocimientos
previos sobre este alimento. Para acercarnos al tema se habla de las diferencias entre
el pan y otros alimentos de panadería, cuáles son sus ingredientes, etc. Centrándonos
en este tema se trabajan los siguientes talleres:
• En el taller de lenguaje escrito se trabajan diversos textos con la palabra «pan» y
otras relacionadas, la receta de cocina, utensilios, etc.
• En el taller de experiencias realizamos actividades de observación del pan por
dentro y por fuera, de sus formas y clases y de los diferentes usos. También
preparamos experimentos con él en distintas condiciones y anotamos resultados.
• En el taller de cocina observamos los ingredientes y después elaboramos en la
clase la masa del pan. Asimismo, fotografiamos el proceso. Cada niño y niña
amasa y da forma a un trozo de masa elaborada.
• En el taller de lenguaje oral trabajamos el cuento La gallina Paulina que da pie al
94
taller de teatro en el que participan todos los niños y niñas.
• En el taller de plástica se han realizado varios trabajos donde los niños utilizaron
diversas técnicas, como el plegado, recortado, decoración, etc.
Por último, con todo lo realizado en los talleres se monta el rincón de la panadería
y se exponen todos los trabajos realizados por los niños en el hall del edificio de
Educación Infantil.
Experiencia llevada a cabo en el Colegio Público «Fernando de los Ríos»,
Burjassot (Valencia).
95
al alumnado. Los centros de interés se desarrollan a través de grupos heterogéneos
reducidos, se parte de los intereses del alumnado y todos los contenidos a trabajar se
globalizan, formulándolos y organizándolos a través de los centros de interés (León,
2012a).
Decroly, uno de los autores más representativos, utiliza los centros de interés como
una forma de globalizar el currículum. Basa la globalidad en las necesidades e intereses
naturales de los niños (Decroly y Boon, 1968). Según estos autores, las necesidades
básicas de los niños son similares, por tanto, los centros de interés también lo serán.
Ellos plantean tres tipos de ejercicios para desarrollar los centros de interés:
96
situación. Hay que tener en cuenta el ambiente sociocultural en el que está inmerso
el alumnado.
• Limitarse a los intereses subjetivos de los alumnos, los intereses reales son la
expresión de necesidades, y la escuela debe satisfacer aquellas que contribuyan a
la personalización y socialización de los alumnos.
• Limitar los centros de interés a la Educación Infantil, ya que es un método válido
para el desarrollo de las capacidades programadas en las diferentes etapas
educativas.
• Emplearlos de forma eventual en el aula.
• Confundirlos con las unidades didácticas, ya que los centros de interés se sitúan en
relación con los demás elementos de la unidad didáctica.
Los alumnos se presentan como agentes activos frente al aprendizaje. El docente debe
conocer al grupo de alumnos, ya que los centros de interés parten de las necesidades e
intereses de los mismos, y de las necesidades del contexto en el que se encuentran.
El docente debe investigar cuáles son los intereses y necesidades individuales de sus
alumnos y estar disponible para resolver las dudas que les puedan surgir durante el
proceso de enseñanza/aprendizaje. Debe, también, facilitar la actividad natural del niño,
tanto física como intelectual.
EJEMPLO
Objetivo: entender que todos los trabajos pueden ser realizados, indistintamente,
por personas de uno u otro sexo, reconociendo y valorando el trabajo doméstico y la
responsabilidad de los trabajos individuales y colectivos, tanto en la casa como en la
escuela.
Contenidos:
97
en el colegio», «Visitamos un lugar de trabajo»...
• Investigación, recogida e interpretación (lógico-matemática, lingüística, de
experiencias, plástica...) de la información sobre el tema: trabajo doméstico, trabajo
en el barrio, oficios preferidos...
• Composición de murales, móviles... alusivos al tema, colaborando con el resto de
compañeros y compañeras en su realización.
• Dramatización y simulación de situaciones de los diferentes oficios, de los cuentos
trabajados, de las canciones...
• Adquisición de diferentes técnicas para la construcción de herramientas y útiles de
trabajo con materiales de desecho o de fácil adquisición.
• Comunicación de la información interpretada utilizando diferentes medios:
monografía, periódico escolar, corresponsales, exposiciones, merienda...
• Valoración positiva de las múltiples actividades que pueden realizar las personas
independientemente de su sexo.
• Asunción progresiva de las tareas domésticas como un trabajo que debe ser
compartido.
• Desarrollo de una actitud de responsabilidad y cooperación en las tareas escolares y
familiares.
Actividades:
Sobre una lámina que recoge distintos trabajos se harán una serie de preguntas:
¿Cuál es su trabajo? ¿Qué trabajo realiza cada persona? ¿Cuántas mujeres hay? ¿Y
cuántos hombres? ¿Cómo se llaman sus oficios? ¿Cuál les gusta más de los que
aparecen? ¿Por qué?
• Dialogar en clase sobre los trabajos que realizan papá y mamá. Elegir dos o tres
preguntas que les queramos hacer sobre su trabajo. Por ejemplo: ¿En qué trabajas?
¿Te gusta? ¿Por qué?
• Comentar en clase los resultados de la encuesta: ¿En qué trabajan la mayoría de las
mamás? ¿Y los papás? ¿Hay muchas mamás que trabajan solo en casa? ¿Y algún
papá? ¿Por qué?
• Dibujar a papá y a mamá realizando su trabajo.
• Dialogar en función de las imágenes de una ficha: «¿Qué ocurre en esta historia?»:
¿Cómo colabora cada cual? ¿Qué hacen antes de comer? ¿Quién hace esas tareas
en tu casa?
98
• Pintar y picar las distintas escenas y realizar con ellas agrupaciones, series...
• Dramatizar dichas actividades.
4. Hipótesis fantásticas
• Dialogar sobre qué pasaría si los padres dejaran de hacer la comida, lavar la ropa,
limpiar la casa, hacer la compra...
• Preparar una entrevista con las preguntas que quieran formular a las personas que
limpian en el colegio: ¿Le gusta su trabajo? ¿Por qué? ¿Qué le pedirían a los niños
y a las niñas del colegio?
• Realizar la entrevista.
• Comentar en clase los resultados de esta: ¿Qué personas limpian el colegio? ¿Son
hombres o mujeres? ¿Pueden hacer los mismos trabajos los hombres y las mujeres?
¿Por qué?
• Confeccionar dibujos alusivos a la entrevista.
• Invitar a un hombre y a una mujer a la clase para que nos expliquen su trabajo (en
ocasiones pueden ser padres de los alumnos).
• Preparar las preguntas que nos gustaría hacerles: ¿Te gusta tu trabajo? ¿Qué
herramientas utilizas? ¿Dónde trabajas?
• Pedir a estas personas, si su trabajo lo permite, que nos hagan una demostración.
• Comentar los resultados de la visita: ¿Cuáles eran sus profesiones? ¿Cuál gustó
más? ¿Por qué?...
• Preparar la visita a algún lugar de trabajo del barrio: venta, panadería, fábrica,
farmacia, taller de costura...
• Preparar las preguntas que queramos hacerles a las personas que allí trabajan y
repartir responsabilidades.
• Comentar en clase el desarrollo de esta: ¿Había hombres y mujeres? ¿Solo
hombres? ¿Solo mujeres? ¿Por qué? ¿Pueden realizar ese trabajo personas del otro
sexo? ¿Qué herramientas utilizaban para hacer su trabajo? ¿Dónde lo hacían?...
• Dibujarles realizando su trabajo.
99
distintos oficios que aparecen en las imágenes (utilizar las herramientas construidas
en los rincones), mientras los demás niños y niñas intentan adivinar de qué oficio
se trata.
9. Realización de rincones.
• Crear distintos rincones en la clase en los que se realicen las tareas propias de cada
oficio o profesión.
• Confeccionar con material como cartulina, pasta de papel... las distintas
herramientas.
• Motivar para que niños y niñas participen en todos los rincones, rotando de unos a
otros: una tienda, un hospital, un taller de mecánica, de costura, una peluquería...
• Comentar al final de la sesión: ¿Cómo nos hemos sentido? ¿Cuál nos ha gustado
más?...
• Elegir imágenes de periódicos, revistas... que representen los oficios que nos
gustan.
• Comentar, en gran grupo, los oficios preferidos: ¿Cuáles gustan más a los niños?
¿Y a las niñas? ¿Hay alguna diferencia?
• Confeccionar un collage con las imágenes de los oficios elegidos por la clase y
otros materiales accesorios.
• Relatar un cuento que haga referencia al tema del trabajo o las profesiones.
• Por medio de una lluvia de ideas, inventarse distintos finales para el cuento,
introducir nuevos personajes.
• Dramatizar el cuento y sus distintos finales.
12. Representación de una obra de teatro o guiñol.
100
Evaluación del centro de interés.
Según Tavernier (1987), los rincones se pueden definir como un lugar, permanente o
101
no, en el que se desarrollan actividades muy determinadas, libres o guiadas, individuales,
en grupos pequeños o colectivos: biblioteca, grafismo, cocina, tienda, muñecas, garaje,
etc.
En ellos, los niños desarrollan una mayor creatividad y se proporciona una atención
más individualizada y dirigida a sus necesidades. Se pretende, por consiguiente, una
organización distinta de los elementos que componen el aula, y un cambio en la
metodología con la que se trabaja. La finalidad es dar una respuesta adecuada al ritmo,
intereses y diferencias de cada alumno o alumna, favoreciendo la autonomía de los
mismos.
El trabajo por rincones permite responder a los diferentes ritmos e intereses de
alumnado del aula y consiste en dividir el aula en distintos espacios físicos, en los que
hay unos materiales específicos. Esto proporciona al maestro trabajar de forma
simultánea diferentes actividades a diferentes grupos y a alumnos individuales,
permitiendo, de este modo, utilizar espacios y tiempos de forma diferenciada (León,
2012a).
Según Calle (2009), Gervilla (1995) e Ibáñez (1992), la finalidad del uso de esta medida
es:
102
• Como complemento de la actividad del curso. En esta modalidad los niños acuden
al rincón cuando han concluido sus tareas, es decir, en los ratos libres. Por tanto,
esta modalidad no modifica el fondo de la organización de la clase. La desventaja
de este tipo de rincones es que favorecen a aquellos niños que acaban antes la
tarea, sin tener todos la misma oportunidad.
• Como contenido específico. Los rincones tienen la misma importancia que
cualquier otra actividad y poseen un tiempo determinado para estar en ellos. La
ventaja es que todos los niños pueden acceder a ellos.
Para llevar a cabo los rincones es necesario elegir el material adecuado para cada
rincón, estos materiales no tienen por qué ser escolares, pueden formar parte de su vida
diaria. Para favorecer su uso se ha de presentar de forma ordenada y fácilmente
identificable, siendo este agradable para los niños (Calle, 2009).
Los maestros planifican las actividades de manera que cada niño/a vaya pasando a lo
largo de un periodo de tiempo (semana, quincena...) por los diferentes rincones de
trabajo. Durante todo el proceso el docente debe llevar a cabo una tarea de observación.
Dependiendo del rincón, el rol del alumno va variando. Los niños desarrollarán
actividades de manipulación, fomentando su creatividad y capacidad de representación.
Así, el alumno individualmente, puede organizar sus trabajos, guiándose por sus
intereses y potenciando así su autonomía. Del mismo modo, a nivel grupal los alumnos
fomentarán su comunicación, respeto, etc.
El docente debe adaptar el contenido de los rincones a las necesidades e intereses de
sus alumnos, así como al funcionamiento de los niños/as. También tendrá en cuenta la
programación de la clase, la unidad didáctica o el proyecto que se esté trabajando. Su rol
principal será el de trabajar conjuntamente con los alumnos, dejando libertad y
autonomía en los rincones. El docente tendrá una actitud observadora, anticipando los
conflictos que pueda ocasionar esta modalidad de trabajo, e intervendrá cuando el interés
y la motivación decaigan en el alumnado o cuando el rincón deba ser dirigido por él.
EJEMPLO
Este espacio debe ofrecer a los niños todos los materiales transformables a partir de
la manipulación. Lo importante de este rincón es potenciar al máximo la creatividad y
la expresión libre del niño. El niño irá descubriendo a través de los materiales que le
ofrezcamos, así como a través de las distintas situaciones de aprendizaje, cómo se
pueden expresar desde otra perspectiva, y creará así sus propios códigos de imágenes.
Resulta muy importante ofrecer una gran variedad de utensilios y de soportes, así
103
como renovar y cuidar el material. Es aconsejable que el rincón se sitúe en un espacio
luminoso y a ser posible cerca del agua, de manera que tanto el suelo como las mesas
se puedan limpiar fácilmente. También es necesario proveerlo de delantales de
plástico o de tela. Tampoco podemos olvidar disponer de un espacio que permita
exponer sus creaciones.
Resulta muy aconsejable que a través de las distintas experiencias que ofrezcamos
en él les vayamos ofreciendo diferentes obras de artistas con el objeto de ofrecer un
trabajo bien hecho, nunca con el sentido de copiarlo pero sí para crear un ambiente
artístico potenciador.
Los materiales que se pueden utilizar son: pinturas de dedos, témperas, ceras
blandas, rotuladores, masas de modelar, tapaderas, moldes de repostería, rollitos de
cocina, pegamentos, collages, papeles de colores, tijeras, punzones, cucharas,
tenedores, palillos de algodón, hilos, lanas, periódicos, esponjas, etc.
Rincón del lenguaje
104
la vida fuera del colegio.
Como los demás rincones del aula, los recursos o materiales matemáticos deben
estar organizados, clasificados y estructurados en un rincón, de manera que sean
accesibles para el niño y puedan ser guardados y ordenados con facilidad.
Estos recursos pueden ser materiales traídos de casa, como pinzas, garbanzos,
periódicos, etc., así como materiales didácticos comprados por el centro, como ábacos,
dominós, puzles, regletas, bloques lógicos, construcciones y un largo etcétera.
Rincón de juego
• Que el niño experimente la satisfacción que produce cuidar a unos seres vivos para
que sigan viviendo y creciendo.
• Concienciar al niño de que los vegetales y los animales son seres vivos que
necesitan cuidado y respeto.
• Que el niño adquiera los conocimientos necesarios para el cuidado de las plantas y
animales que hay en clase: alimentación, limpieza, situación, para que luego
podamos aplicarlos a los de su entorno.
Rincón de la lengua extranjera
105
Los elementos comunes necesarios para el rincón de la lengua pueden ser los
siguientes: días de la semana, meses del año, tiempo climatológico, ¿cómo estás hoy?,
los colores y los números.
Todos estos temas nos permiten trabajar en paralelo la lengua extranjera con los
propios contenidos de la Educación Primaria, además de que muchos de ellos son base
para trabajar otras actividades y resultan bastante motivadores.
Este rincón se puede decorar con un bonito letrero en el que ponga «ENGLISH
CORNER» (Rincón de Inglés), en el caso que el idioma extranjero fuera inglés. Nos
servirá para colgar todos los trabajos que elaboren los niños y niñas en ese idioma,
para realizar juegos, poner en práctica alguna rutina diaria en esta lengua como
saludarnos por las mañanas dándonos los buenos días: GOOD MORNING! (Buenos
días), o despedirnos: GOOD BYE! (Adiós).
Además, podremos aprovecharlo para aprender palabras nuevas y repasar las ya
aprendidas, siempre tratando de hacerlo del mismo modo que en español. Todos estos
temas nos permiten trabajar en paralelo la lengua extranjera con los contenidos
propios en español.
106
12. Grupos interactivos
Según Carralero y Rubio (2005) los grupos interactivos son agrupaciones heterogéneas
de alumnos, en las que se realiza una actividad concreta bajo la tutela de más de una
persona adulta. La composición de los miembros de cada grupo es totalmente flexible y
puede variar cada día, pero es importante asegurar que sean grupos heterogéneos, en
género, rendimiento, etc. (Lleras, Medina, Herrero y Ríos, 2001).
Para León (2012b) es el profesor responsable del aula quien programa las actividades
didácticas con relación a unos objetivos curriculares, dinamiza la sesión y coordina los
tiempos y los materiales, el otro adulto (docente, voluntario...) se centra en potenciar el
trabajo en grupo. Para ello favorece que los grupos de alumnos se ayuden entre sí,
interaccionando para realizar las diversas actividades.
Las finalidades que perseguirían los grupos interactivos (Carralero y Rubio, 2005) serían
las siguientes:
• Desarrollar al máximo las capacidades del alumnado sin que las condiciones
sociales externas afecten a la consecución de los resultados educativos.
• Fomentar el aprendizaje de materias instrumentales mediante el trabajo en equipo
y la interacción entre iguales.
• Reducir y/o eliminar la aparición de conductas disruptivas en el aula.
• Mejorar el clima de convivencia y disciplina dentro y fuera del aula.
• Aumentar la motivación del alumnado hacia el aprendizaje y mejorar su imagen
como estudiante.
• Modificar la concepción que el alumnado tiene respecto a la posición tradicional
del profesorado: cooperación frente a imposición.
• Prevenir el absentismo escolar.
Según Carralero y Rubio (2005), la metodología apropiada para lograr los objetivos debe
ser necesariamente activa y participativa. Se parte de la motivación hacia la tarea para
romper la pasividad del alumnado, para que de esta forma ellos mismos se sientan
activos dentro del proceso de enseñanza/aprendizaje.
Para desarrollar en ellos hábitos de aprendizaje autónomo, es necesario que las
actividades propuestas sean sugerentes y próximas a las experiencias de los alumnos.
107
Para despertar el interés del alumnado, es necesario que:
Tabla 3.1 Relación de las tareas del maestro tutor con las del maestro voluntario
108
Seguimiento de los
Contribuir a la evaluación.
grupos.
Criterios de
evaluación.
EJEMPLO
109
Luna, F. (2007). Aprender en grupos interactivos. Cuadernos de Pedagogía, n.º
368, 18-23.
— y Florza, C. (2011). Adolescentes que enseñan en infantil. Cuadernos de
Pedagogía, n.º 412, 18-21.
Marín, N. y Soler, M. (2002). Una comunidad de aprendizaje. Cuadernos de
Pedagogía, n.º 311, 60-62.
— y Ortoll, I. (2012). Grupos interactivos: heterogeneidad y optimación de los
recursos. Cuadernos de Pedagogía, n.º 429, 34-36.
Odina, M., Buitago, M. y Alcalde, A. I. (2004). Los grupos interactivos. Aula de
Innovación Educativa, n.º 131.
Oliver, E. y De Gracia, S. (2004). Grupos interactivos en Secundaria. Cuadernos
de Pedagogía, n.º 341, 70-72.
Píriz, R. M. (2011). Una experiencia de grupos interactivos en un centro de
Secundaria. Tendencias pedagógicas, n.º 17, 51-64. Universidad Autónoma de
Madrid: http://www.tendenciaspedagogicas.com/Articulos/2011_17_06.pdf
Rus, J. M. de (2012). Lectura que trasciende. Comunidades de aprendizaje.
Escuela, n.º 3, 7-8.
110
• Incrementar la motivación del alumnado al adquirir los conocimientos.
Se lleva a cabo a través de una serie de pasos. En primer lugar, el docente debe
establecer qué contenidos son los más importantes de cada uno de los temas, es decir, los
esenciales dentro del tema. Tras ello, es necesario concretar cuáles son las necesidades
de los alumnos, qué les interesa más y es más motivador para ellos. Así como los
sistemas de evaluación más adecuados. Este paso es necesario para poder conocer al
alumnado y pensar en él a la hora de plantear la graduación de las actividades. Una vez
realizadas estas pautas, se debe plantear la actividad o actividades a desarrollar, y tras
concretarlas graduarlas en diferentes niveles de dificultad y profundidad, consiguiendo
así que todos los alumnos aprendan los mismos contenidos adaptándolos a su nivel.
Los alumnos desarrollarán la actividad implicándose en el aprendizaje de los
contenidos, puesto que la tarea propuesta les motivará a ello. De este modo realizarán las
actividades acorde con su nivel.
El docente desempeña un rol muy importante, puesto que es el que diseña la actividad
y debe realizar una graduación de la misma con relación a sus alumnos y al
conocimiento que tiene de ellos. Su papel es fundamental para que las actividades
promuevan los intereses y la motivación de los alumnos.
EJEMPLO
111
fichas de los nombres de los alumnos de la clase, señalando aquellos que tienen la
B/b, haciendo una clasificación en nombres que lleven la B/b y que no la lleven. Se
trabajará al mismo tiempo la letra mayúscula y minúscula. El docente sacará la
letra «B/b» y a continuación presenta BA/ba, BE/be, BI/bi, BO/bo, BU/bu, dentro
de la palabra y con sus pictogramas correspondientes.
• Escucha y repite las palabras presentadas anteriormente que enuncia tu maestro o
compañero-tutor, fijándote en la posición de sus labios, en la pronunciación del
fonema /b/. Después mirándote en un espejo debes pronunciar correctamente dicho
fonema y a continuación los sonidos: ba, be, bi, bo, bu.
La graduación de esta actividad consistiría en tareas como: las palabras que se
presentan junto con el pictograma de la letra «B» serán pronunciadas por el
docente o por un compañero-tutor exagerando el sonido de dicho fonema al tiempo
que se pronuncian las sílabas directas. Con la finalidad de que el alumno realice
una discriminación auditiva del fonema /b/ en el interior de las palabras. A
continuación y con la ayuda de un espejo el alumno pronunciará correctamente el
fonema /b/ y los sonidos /ba/,/be/, /bi, /bo/, /bu/.
Con los nombres de los alumnos de la clase se podrán realizar distintas
actividades:
También conviene recordar que todas las actividades referidas al trabajo del grafema
«b»: giro adecuado, reconocimiento del mismo entre otros grafemas, en el interior de
sílabas y palabras es otra de las actividades que hay que trabajar según el nivel de los
alumnos.
• Piensa y dibuja tres objetos donde en su nombre suene /b/ y después coloréalos.
• ¿Dónde suena /b/? Se presentan una serie de pictogramas y los alumnos tras una
discriminación auditiva tienen que señalar dónde suena el fonema a estudiar, en
este caso /b/.
112
Algunas propuestas para la graduación de esta actividad, según el nivel de
competencia de los alumnos, serían: el docente o un compañero de la clase leerá la
siguiente relación de palabras para que el alumno discrimine auditivamente aquellas
que en su nombre suene la letra /b/ y que coloree aquellos pictogramas que en su
nombre suene dicho fonema. La pronunciación del fonema dentro de la
palabra se realizará de un modo exagerado, con la finalidad de que el niño la capte
y compruebe la colocación correcta de la boca. Con la finalidad de favorecer la
discriminación auditiva del fonema /b/ en los nombres del alumnado se exagerará
dicho fonema en la pronunciación de cada palabra, resaltando de este modo la
colocación adecuada a la hora de articular y haciendo que el niño observe cómo se
colocan adecuadamente la lengua, los labios, etc., en el espejo.
Otra propuesta consiste en analizar los nombres que tienen determinados fonemas
al principio o al final de palabra para clasificarlos, por ejemplo, se puede proponer al
alumnado que nos diga nombres de los compañeros donde suene el fonema /b/.
Siguiendo con esta propuesta y llegando a un nivel de dificultad mayor, se le puede
proponer si en determinado nombre suena el fonema en cuestión, por ejemplo «En
Beatriz suena /b/», «dónde suena, al principio o al final del nombre». De este modo, y
exagerando siempre el sonido al que nos referimos dentro de la palabra, se le irá
ayudando al alumno a discriminar auditivamente un sonido que también, después,
verá escrito en el interior de la palabra, llegando así a asociar fonema y grafema, pero
siempre a partir de palabras totalmente significativas para el alumno como suele
resultar en este caso el nombre de los compañeros de la clase.
Otra actividad de interés consiste en lograr la discriminación auditiva de aquellas
palabras en cuyo interior suene la letra «b», tanto con los nombres de los compañeros
de la clase como de aquel otro vocabulario. Se pueden hacer juegos de clasificación
según suene dicha letra al pronunciar cada una de las palabras o en función de los
pictogramas referidos a ellas. Por ejemplo, en el nombre de Bernardo suena «b» pero
en el de Saúl no.
• Buscamos la letra «B/b». Rodea la letra «B» con un círculo rosa y la letra «b» con
un triángulo amarillo, después repasa el grafema.
113
BAÑERA ESCOBA ALFOMBRA DEBAJO
Fuente: Lozano, J., Angosto, R., Cerezo, M. C., Ramón, J. y López, A. (2008).
Aprendiendo el lenguaje con Nora: colección de materiales didácticos para el acceso
al lenguaje en contextos educativos interculturales y multilingües. Granada: Grupo
Editorial Universitario.
114
de todos los estudiantes. Barcelona: Octaedro.
115
conocimientos...
El alumno puede trabajar autónomamente con los materiales y recursos que facilita el
docente. Así, lleva a cabo el desarrollo de las distintas fases de un proyecto de trabajo
basándose en agrupamientos flexibles del grupo clase. De este modo, puede efectuar la
búsqueda y tratamiento de la información, previsión de recursos temporales y materiales,
elección del formato en que se va a presentar el resultado del proyecto (informe escrito,
tríptico, mural, exposición oral...).
El profesor es un guía que aporta materiales y medios diferentes en cada ocasión para
que, motivándolos, los alumnos puedan trabajar de manera autónoma y eficaz. La
selección y adaptación de materiales didácticos implica una actitud crítica y reflexiva por
parte del profesorado (Delgadillo, 2009).
EJEMPLO
Así, la selección de los materiales a utilizar con los estudiantes siempre se realizará
contextualizada en el marco del diseño de una intervención educativa concreta,
considerando todos estos aspectos y teniendo en cuenta los elementos curriculares
116
particulares que inciden. La cuidadosa revisión de las posibles formas de utilización
del material permitirá diseñar actividades de aprendizaje y metodologías didácticas
eficientes que aseguren la eficacia en el logro de los aprendizajes previstos.
117
concretos de un área curricular que se hayan trabajado en clase, y que están
condicionando la superación y su evolución en dicha área.
EJEMPLO
118
Con respecto a la evaluación y el seguimiento del alumnado, los profesores que
impartan el refuerzo educativo reflejarán en la hoja de seguimiento del alumno la
actuación diaria, de modo tal que cualquier otro profesor que apoye a dicho alumno
sepa qué hizo el precedente. Diariamente el profesor tutor, como responsable, tendrá
un conocimiento de lo realizado por cada profesor de refuerzo y buscará el modo de
coordinarse con estos si hay que modificar las actuaciones previstas semanalmente.
119
fomentando las redes naturales de apoyo y compartiendo la responsabilidad del
aprendizaje (Stainback y Stainback, 2004).
Los alumnos reciben apoyo no solo a problemas individuales, sino también con fin
preventivo a nivel de centro, aula o familia. El segundo profesor que presta el apoyo
ordinario dentro del aula se coordinará y trabajará conjuntamente con el profesor del
aula, entendiéndose esta tarea como colaborativa entre todos los profesores. El profesor,
por tanto, co-enseñará a todos los alumnos de forma indistinta.
EJEMPLO
Fuente: Adamson, D., Mattews, P. y Schller, J. (1990). Five ways to Bridge the
120
Resource-to-Regular Classroom Gap. Teaching Exceptional Child, Winter, v. 22, n.º
2, 74-77.
121
• Favorecer la interacción entre la pareja de alumnos, proporcionando oportunidades
de socialización, generando así relaciones diádicas y de aprendizaje cooperativo.
• Dar valor educativo a las interacciones entre alumnos.
• Integrar a todo el alumnado.
• Promover la reflexión de los alumnos sobre la importancia de la ayuda entre
iguales.
• Ofrecer a los estudiantes la oportunidad de actuar como tutores, practicando una
actuación docente.
• Favorecer el aprendizaje del contenido y la reflexión sobre la práctica educativa.
Es necesario que estas prácticas estén dentro del currículum: en horas de clase y en un
marco evaluable. Previamente a la realización se debe planificar teniendo en cuenta la
modalidad de tutoría, los conocimientos de los alumnos, los materiales necesarios y la
combinación de parejas diseñando la interacción entre ellas. Durante la tutoría el
profesor debe ir supervisando el proceso y llevar a cabo una evaluación de la actividad.
Se diferencian dos roles. Uno será el rol del alumno tutor, que consiste en ayudar
pedagógicamente a su compañero, pero a la vez este alumno irá aumentando y
afianzando sus conocimientos mediante la preparación y el ofrecimiento de la ayuda. Por
su parte el alumno tutorado recibirá una ayuda permanente y ajustada de su compañero.
De este modo, ambos alumnos aprenden mediante la interacción (Duran y Vidal, 2004).
El rol del alumno tutor se basará en planificar, mediar y guiar esta tutoría, explicando
previamente su funcionamiento y proporcionando al alumno tutor estrategias para llevar
a cabo su función. El docente deberá diseñar cuidadosamente la interacción de las
parejas y crear mecanismos que lo promuevan.
EJEMPLO
122
El trabajo terminará cuando ambos consigan su objetivo.
Se realizará un listado con todas las parejas en un lugar visible y se registrará el
momento en que cada pareja termina la tarea. En el desarrollo de la medida es
importante explicar con claridad los pasos a seguir. Durante los primeros días de
tutoría se reforzará principalmente esta rutina, recordando las parejas e iniciando
habilidades sociales básicas, como pedir ayuda o dar las gracias. Este reforzamiento
irá cambiando a medida que pase el tiempo y los niños vayan afianzando los
conocimientos, así posteriormente el esfuerzo se centrará en conseguir que soliciten,
cada vez más, la ayuda del compañero por propia iniciativa.
Una vez transcurrido el tiempo necesario, se puede introducir una nueva frase,
preguntando a los niños si ya saben abrocharse solos. De este modo, aunque se seguirá
interviniendo para recordar la necesidad de solicitar ayuda, en este momento ya un
número importante de parejas realiza estas rutinas de manera autónoma. Un porcentaje
significativo de alumnos ha conseguido sus objetivos: los dos miembros saben
abrochar botones: el tutor ha enseñado y el tutorado ha aprendido. Es el momento de
reconocer públicamente en la asamblea el éxito de la tarea.
123
18. Enseñanza compartida
Según Duran y Miquel (2004), el hecho de poner juntos a dos profesores no significa que
ya se lleve a cabo entre ellos un trabajo colaborativo. Las interacciones que se generen
en estos casos deberán cumplir una serie de condiciones, como que las finalidades y las
tareas conjuntas sean claras y las asuman todos los participantes y que estén relacionadas
con sus propias necesidades.
Cook y Friend (1995) hablan de diferentes modos de apoyar con dos profesores en el
aula:
• Enseñanza interactiva. Se realiza por dos profesores que se dirigen al mismo grupo
y alternan.
• Enseñanza por secciones o grupos rotativos. El alumnado dividido en grupos, va
rotando por diferentes secciones en las que se presentan contenidos o se realizan
actividades de distinta naturaleza y/o nivel de dificultad.
• Enseñanza simultánea o paralela. Se divide a los alumnos de la clase en dos
grupos, de forma que: a) cada profesor trabaja con un subgrupo explicando el
mismo contenido al mismo tiempo, o b) ambos profesores enseñan con distinto
contenido simultáneamente. Finalizada su intervención, los profesores cambian de
124
grupo para explicar el mismo contenido a la otra mitad de la clase.
• Enseñanza alternativa. En este procedimiento se divide la clase en dos subgrupos,
que trabajan contenidos o habilidades específicas. Mientras un profesor enseña al
grupo pequeño, el otro enseña al resto.
Se ayuda a los alumnos a que puedan responder a las demandas reales de la clase en
cualquier área, poniendo la ayuda a disposición de todo el alumnado, tanto para los que
la necesitan constantemente como para aquellos que recurren a ella de forma ocasional.
Es importante resaltar que los alumnos que necesitan más ayuda no quedan etiquetados
por el hecho de tener que salir fuera y pueden seguir manteniendo como referente al
profesor de aula (Duran y Miquel, 2004). Según estos autores, para los docentes
representa una mejora con relación a la gestión del aula en general, en concreto en
materia de disciplina. Entre ellos pueden compartir y elaborar nuevos materiales, así
como metodologías de trabajo, ofreciéndose apoyo mutuo frente a las novedades o
dificultades. Deben planificar conjuntamente las sesiones en las que intervienen,
estableciendo funciones complementarias y repartiéndose las tareas a desarrollar con el
alumnado, pero no de manera rígida.
EJEMPLO
• En una clase de una hora se organizan tres grupos de trabajo heterogéneos, con tres
actividades diferentes. Dos de ellas van a estar tutorizadas por un profesor y una la
van a realizar solos.
• Los grupos rotan durante la sesión, de forma que todos hagan las tres actividades.
Cada docente se encarga de dinamizar la misma actividad, con cada grupo,
sucesivamente. Al terminar la primera, los grupos rotan. El grupo que estaba solo
ahora estará con uno de los profesores, el segundo con el otro y el tercer grupo se
quedará solo. La siguiente imagen puede ayudar a entender la propuesta. En ella,
cada uno de los diagramas corresponde a una de las tres sesiones en que se divide
el tiempo de clase.
125
Fuente: Antolín, A., Mendizábal, I., Landaruze, L. M., Karranza, A., Osa, I., Martínez,
A. T. y Aretzaga, L. (2010). Prácticas inclusivas para el éxito escolar. Cuadernos de
Pedagogía, n.º 406, 35-37.
Los agrupamientos flexibles son una estrategia organizativa para tratar de dar respuesta a
diferentes ritmos de aprendizaje y a la diversidad de intereses y características de los
alumnos. A través de ellos se organiza a los alumnos en nuevas estructuras grupales en
función de su nivel académico y en determinadas áreas del currículum especialmente las
áreas instrumentales (Rué, 1991). Estos agrupamientos se realizan en función de la
progresión del alumno y su nivel de rendimiento.
126
trabajar en una estructura rígida.
• Permitir que los alumnos lleven a cabo su proceso de aprendizaje a su propio ritmo
pero sin separarse del resto de sus compañeros.
EJEMPLO
127
La distribución hemos de realizarla en función del número de niveles que el centro
nos permita organizar. Nos centraremos en tres o incluso cuatro niveles:
Nivel 1: alumnas y alumnos con altos niveles de competencia curricular, que
puedan seguir el currículum sin ningún problema o incluso destaquen.
Nivel 2: atendería alumnado con bajo nivel de rendimiento y ciertas dificultades
para el aprendizaje. Pueden seguir el currículum pero con ligeras adaptaciones en los
contenidos y con metodología específica.
Nivel 3: grupo de alumnos con graves dificultades en el aprendizaje y con un
acusado desfase curricular.
En casos necesarios también se podría establecer un cuarto nivel:
Nivel 4: se trataría del grupo intermedio entre el 2 y el 3, consiguiendo alcanzar
una mayor aproximación a la realidad.
En la figura siguiente se muestra la organización: dos grupos tienen que coincidir
en las sesiones de la misma materia. Ejemplo grupos A y B.
Se han flexibilizado dos grupos (A y B), obteniendo como resultado tres niveles y,
por tanto, tres profesores a su cargo, uno para cada uno de ellos.
128
como mínimo, al homogeneizar los distintos grupos a flexibilizar.
Consiste en la distribución del alumnado de un grupo, en otros dos, tomando como único
129
criterio el numérico y siendo esta división heterogénea. Esta distribución mejorará los
resultados de aprendizaje, puesto que se disminuye la ratio profesor-alumno.
Los grupos preferentes para aplicar los desdobles serán los que cuenten con mayor
número de alumnos con desfase escolar y bajos niveles de competencia curricular.
Presenta poca complejidad organizativa, pero es necesario contar con dos profesores a la
misma hora para simultanear sus horarios. La programación es la misma para los grupos
resultantes del desdoblamiento.
Previamente a la realización se necesita incrementar recursos personales y realizar
pruebas de evaluación inicial. La distribución del alumnado puede hacerse en función de
criterios diversos, como puede ser el nivel de competencia curricular.
Cada profesor atenderá a un grupo diferente. Los profesores encargados de los grupos
desdoblados serán los propios de los departamentos de las materias instrumentales en el
caso de Educación Secundaria, en la Educación Primaria serán los maestros con restos
horarios. En esta situación, la evaluación se realizará conjuntamente con los tutores.
EJEMPLO
130
Blanchard, M. y Muzas, M. (2005). Propuestas metodológicas para profesores
reflexivos. Madrid: Narcea.
Moreno, O. M. (2009). Escuela inclusiva: la importancia de atender a la diversidad.
Innovación y experiencias educativas, n.º 19, 1-9.
Teixidó, J. (2008). ¿Desdoblar? o ¿dos docentes en el aula? La innovación, la moda
y el problema/dilema organizativo. GROC, Grup de Recerca en Organització de
Centres: http://www.joanteixido.org/doc/dos_aula/texto_provisional.pdf
Esta medida permite administrar el espacio y el tiempo en función de las necesidades del
aula, favoreciendo las decisiones organizativas y curriculares más adecuadas. Para llevar
a cabo esto se realiza una estructuración tanto de espacios como de tiempos en el aula y
el centro en función de las actividades que se realicen.
Los espacios hacen referencia no solo al aula, sino a todo aquel espacio que sea
susceptible de ser utilizado en el proceso de enseñanza/aprendizaje. Así, se tienen en
cuenta tanto los elementos arquitectónicos como el mobiliario y materiales que se
encuentra en el centro y en clase. La selección de los espacios y su organización estará
en función de las actividades que nos propongamos realizar. En cuanto a la utilización
flexible de los tiempos, es interesante tener en cuenta algunos principios, como son:
131
varias personas.
• Principio de coherencia: en la distribución de tiempos es importante tener en
cuenta el currículum.
• Principio de diversidad: es necesario flexibilizar los tiempos en función de los
grupos.
EJEMPLO
Las actividades en un centro no tienen por qué centrarse en las aulas de los
diferentes niveles, hay multitud de espacios que pueden considerarse educativos.
Desde el patio, donde se realizan distintas actividades de juegos dirigidos, hasta los
espacios comunes de centro como los pasillos, donde el alumnado de todas las etapas
educativas pueden exponer sus trabajos o realizar actividades de diferente tipología,
como murales en papel continuo o decorados, entre otras. Las escaleras del centro
pueden ser de mucha utilidad para desarrollar la psicomotricidad de los niños de
edades tempranas; el salón de actos para realizar representaciones y dramatizaciones a
la comunidad educativa; el comedor para desarrollar actividades relacionadas con el
plan de salud del centro. Así como, cualquier otra dependencia del centro aunque no
cumpla una función educativa directamente.
En relación a los tiempos tenemos que considerarlos flexibles a la hora de
programar o planificar nuestras actividades, puesto que tenemos que contar con la
diversidad de alumnado de las aulas y dar respuesta a todas sus necesidades.
La inclusión de las TIC en el aula consiste en el uso didáctico de las nuevas tecnologías
de la información y la comunicación como medio para acercar al alumnado información
de índole muy diversa y ampliar las posibilidades de intercambio y experiencias entre el
profesorado (Fuentes, 2007).
132
22.2 ¿Para qué sirve?
Según Fuentes (2007), para aprender con Internet es necesaria una adecuada mediación
educativa, favoreciendo en los alumnos una actitud crítica y una adecuada toma de
decisiones.
En este proceso, que podemos dividir en etapas, la primera de ellas se caracterizaría
por la intervención pautada del alumnado que con ayuda del profesor, y siendo este el
que tome las decisiones, pueda desarrollar la actividad. Gradualmente el profesor debe
ceder responsabilidad al alumno, mediante el diálogo y la negociación de los
procedimientos y elementos a utilizar.
En una segunda fase, el profesor acerca al alumnado a Internet. En un primer
momento se puede optar por trabajar navegando por un espacio reducido, por un
conjunto de documentos previamente seleccionados, para después pasar a trabajar en un
contexto más variado.
El alumno progresivamente aprende a tomar decisiones acerca de: ¿qué busco y para
qué lo busco?, ¿dónde y cómo lo busco?, ¿qué he encontrado y qué es?, etc.
El docente en un primer momento toma las decisiones y guía los procedimientos que
deben seguir los alumnos, para luego pasar a ser un facilitador del proceso comunicativo
e interactivo del alumnado con las TIC.
EJEMPLO
Un ejemplo de cómo introducir las TIC en el aula podría ser la caza del tesoro. Es
un tipo de actividad didáctica muy sencilla que utilizan los docentes que integran
Internet en el currículum. Consiste en una serie de preguntas y una lista de direcciones
de páginas web de las que pueden extraerse o inferirse las respuestas. Algunas
incluyen una «gran pregunta» al final, que requiere que los alumnos integren los
conocimientos adquiridos en el proceso. En este texto se explica qué es una caza del
133
tesoro, sus potencialidades didácticas, dónde encontrar cazas ya preparadas en Internet
y cómo prepararlas nosotros mismos, en función de nuestros objetivos curriculares.
Una «caza del tesoro» (en inglés Treasure Hunt, Scavenger Hunt o Knowledge
Hunt, ya que de las tres formas se la conoce) es una de las estructuras de actividad
didáctica más populares entre los docentes que utilizan Internet en sus clases. En
esencia, una caza del tesoro es una hoja de trabajo o una página web con una serie de
preguntas y una lista de páginas web en las que los alumnos buscan las respuestas. Al
final se suele incluir la «gran pregunta», cuya respuesta no aparece directamente en las
páginas web visitadas y que exige integrar y valorar lo aprendido durante la búsqueda.
Las cazas del tesoro son estrategias útiles para adquirir información sobre un tema
determinado y practicar habilidades y procedimientos relacionados con las tecnologías
de la información y la comunicación en general y con el acceso a la información a
través de Internet en particular.
La siguiente caza del tesoro es muy simple: todas las respuestas están en el mismo
sitio web (prácticamente una lista con las respuestas) y no hay una gran pregunta final.
Su objetivo es adquirir información sobre la naturaleza de la luz. Puede utilizarse
como actividad complementaria en una unidad didáctica sobre dicho tema.
Instrucciones:
¿Qué sabes sobre los colores del universo? Utiliza la información que encontrarás
en el sitio web de más abajo para responder las preguntas de esta página. Escribe las
respuestas en las líneas que hay debajo de cada pregunta.
Preguntas: ¿De qué color es la onda más larga de luz? ¿Qué clase de partículas
atmosféricas hacen que Marte sea rojo? ¿De qué color es el océano en un día nublado?
¿Qué colores hay en la luz blanca? ¿Qué clase de partículas se encuentran en la
atmósfera de la Tierra?
Fuente: Adell, J. (2003). Internet en el aula: a la caza del tesoro. Edutec. Revista
Electrónica de Tecnología Educativa, n.º 16:
http://edutec.rediris.es/Revelec2/revelec16/adell.htm
134
innovación educativa, n.º 165, 41-45.
García, F. (2011). La web 2.0 irrumpe en la escuela. Cuadernos de Pedagogía, n.º
418, 62-64.
Guitert, M. y Romeo, T. (2011). La formación en línea: un reto para el docente.
Cuadernos de Pedagogía, n.º 418, 77-81.
Marqués, P. Chispas TIC y Educación. Blog Pere Maruquès. Facultad de
Educación, Universidad Autónoma de Barcelona: http://peremarques.blogspot.com/
Martí, L. (2011). Producir y producir, truco infalible. Un centro referente en el uso
de las TIC: el CEIP San Walabonso, de Niebla (Huelva). Cuadernos de Pedagogía, n.º
418, 84- 87.
Méndez, D. Educación y TIC. Blog Domingo Méndez:
http://domingomendez.blogspot.com/
Monereo, C. (coord.) (2005). Internet y competencias básicas. Barcelona: Graó.
Monereo, C. y Pozo, J. I. (2001). ¿En qué siglo vive la escuela?. Cuadernos de
Pedagogía, n.º 298, 50-55.
Pérez, I. (2010). WebQuests y WebTasks, en el aprendizaje de una segunda lengua.
Cuadernos de Pedagogía, n.º 401, 57-59.
Regueiro, M.: Incluye TIC aula. Recursos para la inclusión digital en el aula. Blog
Marta Regueiro, coordinadora TIC del CPEE Latores (Oviedo):
http://blog.educastur.es/incluyeticaula/
Rozas, M. y Bosco, J. (1999). Internet y las lenguas extranjeras. Cuadernos de
Pedagogía, n.º 285, 24-31.
Segovia, B., Blanco, R. y Rodríguez, M. P. (2011). Aprender en comunidad con las
TIC. Cuadernos de Pedagogía, n.º 410, 35-37.
Las redes de colaboración están constituidas por un grupo de personas o centros que
aportan un trabajo intelectual a un proyecto con un objetivo común al grupo. Estas redes
se plantean con la intención de crear un espacio de ayuda mutua entre compañeros para
hacer frente a las necesidades del centro partiendo de una metodología colaborativa y del
intercambio y contraste de experiencias y conocimientos.
135
• Favorecer el trabajo colaborativo.
• Compartir dudas, innovaciones y proyectos con el resto de docentes.
• Coordinar las actuaciones.
• Fomentar las relaciones e interacciones entre las personas de un mismo centro.
• Fomentar el entramado de comunicación, reflexión y debate del profesorado.
• Crear un espacio de ayuda mutua entre compañeros.
• Hacer frente a las demandas de una educación más inclusiva.
• Aprender a partir de la interacción con otros docentes.
• Favorecer la práctica reflexiva.
Se lleva a cabo mediante reuniones donde los docentes plantean sus problemas en el aula
y a través del trabajo colaborativo y la ayuda mutua se intenta apoyar y solucionar
dichos problemas.
Los docentes participan de manera activa compartiendo sus dificultades y problemas
en el aula para colaborar y ayudarse mutuamente compartiendo formación, análisis y
experiencias. De este modo, todos los docentes buscan y desarrollan nuevos modelos de
pensamiento y actuación.
EJEMPLO
La ayuda mutua puede ser una excelente forma de abordar las dificultades,
incertidumbres y retos que plantea la atención a la diversidad. Bajo esta premisa nacen
los Grupos de Apoyo entre Profesores, en los que se analizan y buscan soluciones a
los problemas que suelen surgir en la actividad diaria de aula y de centro.
136
Ejemplo de red de colaboración entre docentes de diferentes instituciones educativas
Otro ejemplo de estas redes a mayor escala, siguiendo a Ainscow, M., Howes, A.,
Farrell, P. y Frankham J. (2002), es la red denominada «comprensión y desarrollo de
las prácticas inclusivas en las escuelas» formada por equipos de investigadores de tres
instituciones de educación superior en colaboración con 25 escuelas. Es un medio de
coordinar la participación de la Administración Educativa local y del personal
universitario en los proyectos de las escuelas.
Fuente: Font, J. (2004). Escuelas que se ayudan. Cuadernos de Pedagogía, n.º 221,
63-65.
Ejemplo de red de colaboración digital en Cataluña
Espurn@ es un proyecto digital que se lleva a cabo en Cataluña para dar apoyo a
los docentes en su trabajo de atención a la diversidad del alumnado. Se trata de cuatro
portales en Internet con un sinfín de actividades que se pueden realizar con o sin
ordenador, un proyecto pensado para alumnado con dificultades de aprendizaje, que
tiene cabida en cualquier aula y contexto educativo. La propuesta se configura como
una innovadora red de trabajo colaborativo del profesorado, que comparte
conocimientos, ideas, recursos y materiales.
Estos portales son: Kampus, dirigido específicamente a las aulas abiertas de
Educación Secundaria; Kalidoscopi, concebido especialmente para las Aulas de
Acogida; Kitxalla, pensado para Educación Primaria, y Klaustre, un portal general de
recursos, comunicación y formación. También disponen de una red Ning, que permite
la comunicación, la coordinación y la cooperación entre los docentes que intervienen
en el proyecto, y de un espacio de comunicación y encuentro virtual 3D alojado en la
plataforma Second Life.
Fuente: Barlam, R., Masalles, J. y Pinya, C. (2011). Una red telecolaborativa para
personalizar el aprendizaje. Cuadernos de Pedagogía, n.º 411, 31-34.
137
Parrilla, A. y Gallego, C. (1998). Grupos de Apoyo entre Profesores: Una
experiencia pionera en la Provincia de Sevilla. Cuadernos de Pedagogía, n.º 270, 29-
31.
Parrilla, A. (2004). Grupos de apoyo entre docentes. Cuadernos de Pedagogía, n.º
331, 66-69.
Quintana, A. (2008). Planes educativos. Cuadernos de Pedagogía, n.º 375, 50-53.
Se lleva a cabo mediante la realización de charlas por parte del orientador del centro,
para informar, de una manera general, a todo el alumnado que se enfrente a la elección
de materias optativas para el siguiente curso. En ellas se informarán de las diferentes
opciones que pueden elegir y su repercusión en el siguiente nivel de estudios. Del mismo
modo, también se realizará de una manera individual con el alumno siempre que lo
precise.
138
Los alumnos deben reflexionar sobre sus capacidades, intereses e inquietudes y
basarse en ellas para elegir las optativas más afines a ellos y a su futuro. El docente debe
asesorar y orientar al alumno en la toma de decisiones basándose en sus intereses y
motivaciones.
EJEMPLO
En esta página web del IES «Emilio Pérez Piñero» de Calasparra (Murcia), desde
el departamento de Orientación se les ayuda a elegir las diferentes materias optativas
en 4.º ESO.
http://www.murciaeduca.es/iesemilioperezpinero/aula/archivos/repositorio/0/69/PARA_LLEVAR
Así, se le informa al alumnado de las dos opciones de matemáticas y cuál es más
útil para su futuro académico-profesional.
Para la elección de las materias troncales se le ofrece un cuadro donde se solventan
algunas de las dudas de los estudiantes (tabla adjunta). Así como la información de las
salidas profesionales de la elección de las diferentes materias.
Por último, también se le informa sobre las materias optativas. Aunque la elección
de las optativas está muy condicionada por los intereses personales, que para eso
están, no está de más dar unas recomendaciones para que puedan servir de pista en la
139
elección de la optativa.
Después de esta información, también se le ofrece la oportunidad al alumno de que
acuda al orientador del centro para cualquier otra duda o cuestión que se le pueda
plantear.
Se trata de desarrollar todas las estrategias necesarias para dar la respuesta adecuada a lo
que precisan los alumnos con necesidades educativas especiales (NEE) con la finalidad
de favorecer su independencia y su desarrollo personal en aras de fomentar su
aprendizaje. Para dar respuesta a la diversidad del alumnado que hay en nuestras aulas,
entre los que se encuentran estos alumnos con necesidades especiales, es necesario
establecer una serie de estrategias, cuyos objetivos se deben centrar en:
140
• Se evidenciarán diferentes «modos» de dar un contenido, con distintas
incentivaciones, recursos y propuestas de actividades según las necesidades de los
niños y del grupo.
• Se organizará el espacio de aprendizaje, facilitando la interacción con otros, la
tutoría entre iguales y el aprendizaje cooperativo.
• Se propiciará el «andamio» del adulto al niño y entre pares, facilitando la
incorporación de la idea de diferencias, del respeto por el otro y del ejercicio de la
tolerancia y la solidaridad (nadie puede solo).
• Se organizarán los tiempos, respetando los de cada uno dentro de un marco de
tiempo grupal.
• Se implementarán tareas de integración de la familia al ámbito educativo con
propuestas que vayan más allá de los talleres para padres y que le den un espacio y
tiempo de participación concreta dentro de la institución y del aula, favoreciendo
siempre el desarrollo de grupos interactivos.
Van destinadas a alumnos con necesidades educativas especiales que estén escolarizados
en centros ordinarios, en las aulas abiertas de estos centros y en los centros de educación
especial; que precisen un apoyo intenso y generalizado en todas las áreas y que necesiten
programas o procesos más específicos de enseñanza-aprendizaje. A modo de ejemplo y
para casos con necesidades educativas especiales diversas podemos citar: la estimulación
multisensorial, la programación por entornos, la estructuración espacioambiental, la
planificación centrada, la comunicación aumentativa y alternativa, etc., que ya hemos
tratado y ejemplificado en medidas anteriores, y que por esa razón no se van a
desarrollar aquí.
El profesorado encargado ha de propiciar la motivación constante del alumnado y la
participación de este en la dinámica del aula, teniendo en cuenta el nivel de competencia
curricular de cada cual. Para ello, se fomentará la participación de otros compañeros y se
facilitará la creación de redes de apoyo (tutoría entre iguales, trabajo cooperativo, etc.)
en el proceso de enseñanza-aprendizaje cuando sea posible. Además, ha de llevarse a
cabo de modo tal que el tutor y los especialistas de otras áreas, como maestros
especialistas de educación especial o audición y lenguaje, «se han de integrar para
organizar una comunidad de aprendizaje de forma que se superen, progresivamente, las
barreras de aprendizaje y la participación, y donde la instrucción que se ofrece es acorde
a las características del alumnado y sus necesidades» (León, 2012a, p. 78).
Respecto al lugar donde se llevará a cabo, mayoritariamente se desarrollará dentro del
aula, a no ser que la tipología de la actividad no lo permita y se realice en espacios
determinados para tal fin. En ocasiones puede ser necesario salir del centro educativo y
hacer las tareas en el entorno del mismo (por ejemplo, se pueden comprar los materiales
141
necesarios en un mercado o supermercado cercano al colegio o instituto para realizar,
posteriormente, una receta de cocina en el centro).
El profesorado, a la hora de diseñar el proceso metodológico a seguir en el aula, ha de
plantearse el desarrollo de los alumnos con necesidades educativas especiales, así como
el del resto de los compañeros de estos. Por consiguiente, tanto el currículum como el
sistema de apoyo se acomodarán para ayudar no solo al estudiante necesitado, sino
también a otros que se puedan beneficiar con dicha intervención.
EJEMPLO
Serían muchos los ejemplos a destacar en esta medida, pero estimamos que se han
ido abordando, a lo largo de este capítulo, ejemplificaciones de otras medidas donde
también se precisan estrategias para favorecer la autodeterminación de los alumnos
con necesidades educativas especiales (apoyo en el grupo ordinario, tutoría entre
iguales, enseñanza multinivel, grupos interactivos, aprendizaje cooperativo, etc.).
Por ello, en esta ocasión, y llegados a este punto, queremos destacar una serie de
estrategias generales que parten de una concepción y organización de todo centro que
favorezca la inclusión de todos y, por ende, la autodeterminación de aquellos que
requieren una atención más específica por sus necesidades concretas. Así, y según
Ainscow y Miles (2008, p. 33), la organización escolar y la práctica del aula, que
pretendan definirse como inclusivas, deben regirse por unos principios generales tales
como:
142
centro la creación de un aula de estimulación multisensorial como un espacio
habilitado para que puedan interactuar con el medio a través de la estimulación de sus
sentidos (podemos potenciar los diferentes tipos de estimulación visual, táctil,
auditiva, corporal, vibratoria, gustativa, olfativa, etc.).
En otras ocasiones será la creación del rincón de la calma, cuando el alumnado
está más afectado y presenta plurideficiencias, o sencillamente seguir las indicaciones
del proyecto PEANA, donde a través de dibujos o pictogramas se facilita que los
alumnos se sitúen en el tiempo señalando el día, el mes, la estación en la que se
encuentran y el tiempo que hace, así como los alumnos que han asistido a clase ese
día. Sin duda, las estrategias metodológicas estarán condicionadas por las necesidades
educativas especiales de cada alumno y por el plan de trabajo que se haya planificado
y diseñado, de modo tal que se pueda desarrollar en colaboración, siempre que sea
posible, de otros compañeros, familiares y docentes y en el espacio más normalizador
posible en aras de fomentar una escuela inclusiva.
Ainscow, M. y Miles, S. (2008). Por una educación para todos que sea inclusiva:
¿Hacia dónde vamos ahora? Perspectivas, XXXVIII (1), 17-44.
León, M. J. (2012a): El liderazgo para y con la escuela inclusiva. Educatio Siglo
XXI, n.º 30 (1), 133-160.
López, M. (2010). Discriminados ante el currículum por su hándicap: estrategias
desde el currículum para una inclusión justa y factible. En Gimeno, J. (coord.),
Saberes e incertidumbres sobre el currículum. Madrid: Morata, pp. 457-477.
Ministerio de Educación (2011). Actuaciones de éxito en las escuelas europeas.
Madrid: Colección Estudios CREADE, n.º 9.
Moriña, A. y Parrilla, A. (2004). Criterios para la formación permanente del
profesorado en el marco de la educación inclusiva. Revista de Educación, n.º 339,
517-539.
143
4. Medidas específicas de atención a la
diversidad
2.1 Finalidad
144
2.2 Alumnado destinatario
Será el alumno que presenta necesidad específica de apoyo educativo, bien por
necesidades educativas especiales derivadas de discapacidad o trastornos graves de
conducta. Estas necesidades estarán, previamente, recogidas en la evaluación
psicopedagógica, dado que en el alumnado destinatario de esta medida se detecta un
desfase curricular significativo con respecto al que corresponde por su curso y/o etapa.
145
realice el orientador/a del centro. Estos profesionales mantendrán reuniones
durante todo el curso escolar para dar al tutor las pautas de actuación más
ventajosas para la actuación directa dentro del grupo clase de referencia o para
preparar material adaptado a las capacidades y habilidades del alumnado
destinatario.
• Recursos materiales. Estos recursos se concretan en materiales didácticos
específicos para atender las necesidades manifestadas por el alumnado destinatario
y/o la adaptación de recursos materiales ordinarios del aula para dicha atención y
que se plasmarán por escrito en el Plan de Trabajo Individualizado (PTI) que,
como hemos comentado, lo realiza el conjunto de profesionales que intervienen en
el proceso educativo (profesorado del centro, orientador del equipo
psicopedagógico o del Departamento de Orientación, etc.). De esta forma se pueda
sistematizar y sintetizar toda su evolución, lo que permite también revisar la
adecuación de las decisiones adoptadas.
Este documento debe contemplar los componentes básicos del proceso:
El equipo docente que interviene con cada alumno evaluará mensualmente, y como
mínimo cada trimestre, los avances y logros obtenidos respecto a lo programado, la
motivación e interés del alumno, sus relaciones con los demás. Con relación al equipo
docente será necesario evaluar el grado de cumplimiento de los acuerdos tomados
146
respecto del proceso, los beneficios de la modalidad de este, la necesidad de hacer
ajustes en el currículum, etc.
Pensemos que para que la atención a la diversidad sea efectiva debemos resaltar la
necesidad de que se tomen y adopten determinadas medidas no solo en el currículum,
sino en la propia organización del centro y del aula (Moya, 2001, 2002; Moya, Martínez
y Ruiz, 2005). Un aspecto a destacar es que la dificultad de llevar a cabo las
adaptaciones curriculares significativas no es un problema técnico de saber
cumplimentar o no un documento denominado Plan de Trabajo Individualizado. Por el
contrario, nos encontramos que si, como señalaba Arnáiz (2003), las adaptaciones son
procedimientos de reflexión, colaboración y acuerdos mutuos, eso conlleva que la
adaptación curricular significativa debe ser un trabajo colaborativo del profesorado, que
no se justifica sino como propuesta para la acción en el aula ordinaria, y ello
necesariamente va a requerir medidas organizativas y didácticas que chocan con la
rigidez en la propia metodología empleada en el aula (Porras, 2008; León, 2012a y b).
Como señalamos, encontramos homogeneidad en cuanto a la programación,
presentación, materiales, actividades, etc. Evidentemente, es bastante difícil, casi
imposible, concebir desde esta estructura y estos planteamientos, lo que representa esta
medida de atención a la diversidad, en especial las adaptaciones curriculares individuales
significativas: alumnos y alumnas que realizan actividades diferentes, con materiales
distintos, ritmos plurales...
La revisión de la medida se realiza, prescriptivamente, a principio de curso y, como
comentábamos antes, de manera trimestral con la finalidad de ajustar o reajustar la
respuesta educativa al alumno. Al término del curso académico el equipo docente
valorará la consecución de los objetivos propuestos a través de un informe. El
Departamento de Orientación, en el caso de Educación Secundaria, elaborará una
memoria al finalizar el curso. En dicha evaluación se tendrán en cuenta los resultados
obtenidos no solo en los estándares de aprendizaje evaluables planificados de carácter
curricular, sino en las capacidades que debe adquirir el alumno y que se definen en los
mismos que son de tipo cognitivo, instrumental y afectivo. Se ha de valorar si los
estándares marcados han permitido el desarrollo pleno de dicho alumno y le ha ayudado
a la resolución de problemas reales y cotidianos de modo que se prepare para
desenvolverse en la vida (León, 2012b).
A MODO DE SUGERENCIA
• Describid las dificultades que tenga el niño para aprender o para participar
completamente de la vida escolar. Hablad con el niño y sus padres.
147
• ¿Hay algún especialista que os pueda ofrecer consejo o ayuda?
• ¿Hay algún tipo de cambio que podáis hacer en el aula o en el entorno escolar?
• ¿Hay algún cambio que podáis hacer a vuestros métodos didácticos? ¿Podríais
emparejar el niño para trabajar con algún otro alumno?
• ¿Cómo podéis alentar al niño a participar más activamente en otras actividades
escolares?
• ¿Qué modificaciones podríais hacer en cada materia escolar con relación a los
contenidos o nivel de contenidos para hacerlos más apropiados a las habilidades
del niño?
• ¿Qué cambios pueden ser necesarios con relación a la manera de evaluar el
aprendizaje del alumno?
Fuente: UNESCO (2001). Understanding and responding to children’s needs in
inclusive classrooms. A guide for teachers. París: UNESCO.
3.1 Finalidad
148
• Incorporación. La propuesta de introducir al alumno en esta medida específica
requiere una necesaria evaluación psicopedagógica. Por consiguiente, para la
elaboración de estas adaptaciones se debe contar con la intervención de
profesionales encargados de realizar la oportuna evaluación psicopedagógica, que
favorezcan un análisis riguroso de los factores intrínsecos y extrínsecos que, de
alguna forma, pueden estar influyendo en la escolarización y resultados
académicos del alumno en cuestión. Es decir, a través de la evaluación
psicopedagógica se trata de determinar cuáles son las necesidades educativas del
alumno, para lo cual es necesario analizar las circunstancias personales de este, las
repercusiones de los recursos personales, materiales y espaciales tanto del
contexto del aula como del contexto sociofamiliar.
• Finalización. Su finalización tendrá lugar cuando no sea necesario ajustar de forma
significativa los elementos del currículum. De lo que se trata, en definitiva, es de
no pensar en las adaptaciones como un producto predeterminado, sino como un
proceso dinámico y flexible.
• Recursos personales.
• Recursos materiales. Los recursos materiales para esta medida específica ayudarán
a la comprensión y asimilación de los contenidos y facilitarán la adquisición de
habilidades y destrezas básicas formativas, sociales, cognitivas, etc. Este tipo de
recursos serán facilitadores de experiencias de aprendizaje y estimuladoras de los
149
sentidos y estarán ubicados en las diferentes dependencias donde se realicen las
sesiones de apoyo específico o, si es posible, en el aula ordinaria de pertenencia
del alumno o aquella donde el alumno lo requiera. A continuación especificamos
algunos ejemplos:
• Recursos espaciales. Entre estos recursos se puede destacar el espacio físico del
centro sin barreras arquitectónicas y con adaptaciones en las distintas
dependencias: sonoridad e iluminación adecuadas, cambios que favorezcan la
correcta ubicación del alumno dentro del aula, que favorezcan el trabajo
cooperativo, la enseñanza tutoriada, etc.
El equipo docente que ha intervenido junto con el tutor evalúa, al término del curso
académico, la consecución de los objetivos propuestos. En este sentido, en las diferentes
sesiones de evaluación trimestrales, el equipo docente al completo, junto con los
especialistas que intervengan (maestro de Pedagogía Terapéutica, de Audición y
Lenguaje, intérprete de lengua de signos, fisioterapeuta y un representante del Equipo
Psicopedagógico (en su caso), deciden sobre el uso de las diferentes ayudas técnicas
empleadas como recurso de atención a la diversidad, valorando tanto la organización de
los recursos (materiales y espaciales) empleados y su idoneidad como cualquier
circunstancia que haya podido obstaculizar un trabajo adecuado orientado a la
consecución de los diferentes elementos curriculares. Con esa información, jefatura de
estudios propone, en sesión de claustro de equipo docente, las consideraciones y
150
decisiones que se consideren para la mejora de las medidas del trimestre anterior. Es
fundamental, siempre que sea posible, la colaboración de la familia en el desarrollo de
algunas adaptaciones referidas con sistemas alternativos y o aumentativos de
comunicación, dado que se tendrán que llevar a cabo en el contexto escolar y en el
familiar. De ahí, la necesidad de valorar y conocer los puntos de vista de la familia
respecto de la evaluación que realiza esta de los avances y dificultades de sus hijos, así
como la urgencia de transmitir la información a los padres sobre aquellos cambios que se
estimen oportunos y el modo de trabajo conjunto en la escuela y en el hogar.
PARA REFLEXIONAR
Los errores más comunes que aparecen en el diseño de adaptaciones son (MECD,
2012):
4.1 Finalidad
151
referencia, es decir, esta medida no requiere atender al alumnado destinatario en grupos
distintos al de su grupo clase. En palabras de León (2012b, p. 271):
En el enriquecimiento curricular se le ofrece al alumno y alumna con altas capacidades un conjunto de
experiencias que son adicionales y complementarias a lo establecido en el currículum ordinario, que van
convenientemente planificadas según las necesidades, intereses y capacidades de los alumnos.
Para diversos autores estudiosos del tema (Prieto, Ferrándiz, Ferrando, Sánchez y
Bermejo, 2008; Artiles, 2005) además de esta medida se puede hablar de otras
relacionadas con esta, tales como: extensión curricular, donde se introducen
ampliaciones horizontales y verticales en el currículum ordinario; currículum compacto
con la finalidad de proporcionar al alumno una serie de experiencias de aprendizaje e
investigaciones sobre temas del currículum ordinario, para poder progresar
independientemente y según sus intereses. También podemos hablar de mentoría cuando
se recurre a alumnado de cursos superiores o a expertos de la comunidad educativa para
que ayuden al superdotado a desarrollar algún área de interés que no pueda ser satisfecha
desde la escuela y actividades extraescolares.
152
• Finalización. Su finalización tendrá lugar cuando no sea necesario ajustar
significativamente los elementos del currículum. De lo que se trata, en definitiva,
es de no pensar en las adaptaciones como un producto predeterminado, sino como
un proceso dinámico y flexible.
153
otros si fuese necesario) como los tutores de este alumnado y cualquier otro
personal docente del centro.
154
PARA SABER MÁS
5.1 Finalidad
155
La finalidad de esta medida es adecuar, con carácter de excepcionalidad, la oferta
educativa de los alumnos con necesidades educativas especiales o altas capacidades
intelectuales, flexibilizando el periodo de escolarización (reduciéndolo o prolongándolo
en años), con el propósito de conseguir una mayor adquisición de las competencias
básicas, así como favorecer procesos de maduración e integración social del alumnado.
156
específica se requieren niveles altos de consecución.
Estas medidas de flexibilización (EOEP, Molina, 2011) se iniciarán a propuesta
del maestro tutor, previo acuerdo del equipo docente, y contando con el informe
de evaluación de los servicios de orientación. Asimismo, se contará con la
conformidad, en el caso de la Educación Infantil, o la opinión, en el de la
Educación Primaria, de los padres o tutores. La decisión de permanencia o
reducción de los años de escolaridad se valorará en sesión de evaluación, con el
objetivo de preparar la documentación antes de la fecha límite de la entrega de
documentos que preparan la escolarización del siguiente año académico.
157
caso. Además, se cuenta con el asesoramiento del EOEP de sector o del
Departamento de Orientación sobre las ventajas e inconvenientes de la
implantación de esta medida, así como de las diferentes medidas ordinarias o
posibilidades de actuación educativas.
6.1 Finalidad
Esta medida se dirige a alumnado con altas capacidades intelectuales que tiene un
rendimiento excepcional en un número limitado de áreas (talentoso, precoz o
conglomerado), así como aquel que presenta un rendimiento global excepcional y
continuado (superdotación intelectual), pero que puede manifestar desequilibrios en los
158
ámbitos afectivo y social.
159
— Materiales preparados por el docente.
— Materiales didácticos específicos para atender las necesidades específicas de
apoyo educativo de los destinatarios.
— Hardware y software informáticos.
• Recursos espaciales. Se deben organizar los espacios en el aula, para que sea
posible la realización de diferentes tipos de actividades en función de los distintos
ritmos de trabajo e intereses del grupo de alumnos y alumnas, pudiéndose crear,
por ejemplo, rincones de trabajo y/o talleres de ampliación o el uso de espacios
educativos alternativos (aula de informática, biblioteca, etc.).
EJEMPLIFICACIÓN
• Actividades de ampliación
Estas actividades las aplicará el docente en su aula cuando detecte que un alumno/a
o grupo de alumnos presenta altas capacidades y/o un rápido aprendizaje; deberán
estar incluidas en sus programaciones de aula, se adaptarán a las características del
160
grupo al que van dirigidas. Dichas modificaciones, que se introducen en la
programación de aula, van destinadas a enriquecer y ampliar los contenidos de la
programación, no siendo exclusivas para un alumno en concreto, sino dirigidas al
grupo y podrán beneficiarse de ellas, según casos, todos los alumnos.
Estas concreciones tienen que contemplarse dentro del Plan de Atención a la
Diversidad, y deberán diseñarse por el equipo docente que va a desarrollarlas con el
asesoramiento, si es necesario, del orientador/a del centro. Siguiendo algunas de las
siguientes propuestas: partir de lo más ordinario para ir hacia el mayor grado de
diferenciación, evitar adelantar contenidos de cursos superiores, no incrementar en
cantidad, no dar «más de lo mismo», sino profundizar, conectar, enriquecer... plantear
actividades más complejas ya sea porque impliquen mayor actividad cognitiva o por
su aplicabilidad, potenciar el pensamiento creativo, proponer actividades
motivadoras...
Por tanto, podemos señalar, que el fin de estas actividades de ampliación suponen
un enriquecimiento de las programaciones de aula, mediante el que se obtienen varias
ventajas: toda la clase puede beneficiarse de las adaptaciones, los alumnos de altas
capacidades son atendidos en su grupo-clase, se atienden las necesidades individuales
dentro de la dinámica general del aula, y además se aumenta la motivación hacia el
trabajo escolar.
161
alumnos de clase un tiempo semanal al trabajo por rincones. Según niveles, pueden
diseñarse de forma más global o por áreas.
Así esta opción implica: preparar uno o más rincones en el aula que pueden ir
variando a lo largo del curso; diseñar un procedimiento tanto para el acceso al rincón
como para el trabajo en el mismo; disponer de un amplio abanico de materiales,
recursos, actividades...; diseñar un procedimiento de evaluación de esas actividades,
entre otras. Algunos ejemplos serían:
— Elección del tema. Planteamiento del trabajo, presentación del mismo como
problema, investigación, elaboración de un producto...
— Motivación hacia la tarea. Recoger el conocimiento que el grupo tiene y
formular los objetivos de lo que se quiere aprender.
— Planificar el desarrollo del proyecto y las distintas fases: búsqueda y tratamiento
de la información, previsión de recursos temporales y materiales, elección del
formato en que se va a presentar el resultado del proyecto (informe escrito,
tríptico, mural, exposición oral...).
— Desarrollo del trabajo, de forma individual o por pequeños grupos.
— Presentación del producto y evaluación del proceso y del producto final.
162
• Programar en una o más áreas actividades por proyectos
Es una variante del anterior, en este caso no todos los contenidos del área se
trabajan por proyectos, sino que una vez al trimestre o con la periodicidad que se
estime, se incluyen proyectos de trabajo que enriquecen las actividades ordinarias. Se
tendrá en cuenta: decidir si los proyectos se planificarán partiendo del currículum del
área, de los intereses del grupo de alumnos, de hechos incidentales que suceden a lo
largo del curso (un terremoto, un descubrimiento científico, un campeonato deportivo
a nivel mundial...), o alrededor de objetivos y actividades programadas a escala de
centro (una salida al bosque, una visita al planetario, la celebración del día del árbol,
el carnaval, el reciclado de papel...). Algunos ejemplos, en las diferentes áreas:
— Área de Lengua: realizar una revista del curso, representar una obra teatral,
preparar una mesa redonda sobre un autor literario...
— Área de Conocimiento del medio: elaborar un tríptico sobre la localidad, hacer
un mural sobre hábitos saludables, preparar una campaña de educación vial...
— Área de Plástica: decoración del centro, diseño y elaboración de juegos para el
patio (bolos, rana...), preparación de los disfraces de carnaval...
163
introducir de forma sistemática estos programas, como analizar los programas
disponibles y elegir aquel que mejor complemente el trabajo desarrollado a través de
las áreas del currículum.
7.1 Finalidad
164
coordinados por la Jefatura de estudios, quien valorará las necesidades educativas
especiales de cada alumno y determinará, en función de ellas, los programas a
desarrollar. Por consiguiente, los profesionales implicados son, fundamentalmente, los
tutores y docentes que imparten las áreas curriculares en el grupo ordinario en
colaboración con el equipo de atención a la diversidad del centro (PT, AL, fisioterapeuta,
intérprete de lengua de signos, orientador, etc.) y en determinados casos, con el
representante del equipo de orientación específico.
Estos profesionales son los responsables de trabajar, en equipo, para poner en marcha
las medidas educativas que se consideren necesarias y aplicar programas para el alumno.
Igualmente se requiere la participación del orientador para la realización de la evaluación
psicopedagógica, que es la que determinará las necesidades educativas que presenta
dicho alumnado, así como para asesorar y orientar al profesorado y a las familias en la
aplicación de programas destinados a este alumnado con necesidades educativas
especiales.
Los programas estarán en función de dichas necesidades educativas y pueden ser
diversos, por lo que a continuación describimos solo algunos, a modo de ejemplo, que
plasmen algún programa que pueda resultar menos conocido por utilizarse
mayoritariamente en centros específicos o aulas abiertas específicas en centros
ordinarios:
165
7.2 Alumnado destinatario
Esta medida específica se dirige al alumnado con necesidades educativas especiales que
precisa de adaptación curricular significativa, previa evaluación psicopedagógica.
166
ser seguro, resistente y duradero, de fácil manejo, que se pueda utilizar con
finalidad pedagógica, que resulte atractivo, polivalente, no excesivamente
estructurado y que permita la experimentación. Así pueden ser: objetos
cotidianos, reales y simbólicos, de diferentes texturas, dibujos de objetos y
fotografías, piscina de pelotas, cama de agua, lámpara multisensorial, duchas
secas, peluches, instrumentos musicales, secador, linternas, plumas, estropajos,
material manipulativo, alimentos, sustancias olorosas, láminas con imágenes,
programas educativos informáticos, cuentos y revistas, etc.
167
diferenciar lo que está comiendo y cuáles son sus gustos y preferencias. En el
caso del espacio táctil, en él encontraremos elementos con diferentes texturas,
temperatura, peso, volumen, etc., que van a permitir diferenciar objetos y
estimular el tacto. Este tipo de incitación es importante, por ejemplo, para
personas ciegas que luego accederán a la lectura por medio del sistema Braille.
Asimismo, el espacio táctil puede combinarse con el auditivo mediante objetos
como las mantas o los paneles musicales.
En el espacio auditivo se emplean la música, las voces, los sonidos y
algunos materiales, como, por ejemplo, el palo de lluvia, el tambor, el gong,
etc. La estimulación auditiva puede trabajarse a través de estímulos sonoros por
vía ósea o mediante vibraciones. Asimismo, en este espacio se puede ayudar a
los alumnos que presenten discriminación auditiva, estimulándolos para que
logren distinguir entre diferentes voces, fonemas y palabras, así como realizar
comparaciones de sonidos. Todo ello por medio de la musicoterapia, las
relaciones, la comunicación, la relajación, etc.
— Proyecto PEANA. A modo de ejemplo, todos los alumnos comenzarán la sesión
colocando los pictogramas referidos a día, mes, temperatura, etc., en el tablero
referido a ello en el rincón de la clase. Es conveniente que las aulas dispongan en
su puerta de fotos de los alumnos que asisten a ella y de la profesora que los
atiende. Dichas aulas están diferenciadas por dibujos o pictogramas de manera que
resulte más sencillo asociar a qué aula pertenece cada alumno. En todas las aulas
será conveniente que haya un rincón donde están presentes las normas de la
misma, mediante iconos que corresponden al proyecto PEANA.
La Guía para el Diseño Universal del Aprendizaje (DUA) elaborada por el Centro
para la Tecnología Especial Aplicada (CAST) ofrece diferentes opciones de
enseñanza. Puedes acceder a su página web Universal Disign for Learning Guidelines.
Version 1.0: http://udlguidelines.wordpress.com (en inglés).
El Diseño Universal del Aprendizaje se fundamenta en tres principios (MECD,
2012):
168
se les presenta. Por tanto, hay que ofrecer distintas opciones para abordar
contenidos a través de diferentes canales de percepción (auditiva, visual, motriz) y,
por otro lado, proporcionar la información en un formato que permita lo más
posible ser ajustado por el alumno.
2. Proporcionar múltiples medios para la acción y la expresión (el «cómo» del
aprendizaje). Los alumnos difieren en el modo en que pueden «navegar» en medio
del aprendizaje y expresar lo que saben. Por eso, es necesario ofrecer variadas
opciones para la acción (mediante materiales con los que todos los alumnos puedan
interactuar), facilitar opciones expresivas y de fluidez (mediante facilitadores para
la utilización de programas y diferentes recursos materiales) y procurar opciones
para las funciones ejecutivas (a través de la estimulación del esfuerzo, de la
motivación hacia una meta).
3. Proporcionar múltiples medios de compromiso (el «porqué» del aprendizaje). Los
alumnos difieren en la forma en que pueden sentirse implicados y motivados para
aprender. Por tanto, habrá que ofrecer opciones amplías que reflejen los intereses
de los alumnos, estrategias para afrontar tareas nuevas, opciones de autoevaluación
y reflexión sobre sus expectativas, etc.
8.1 Finalidad
169
8.2 Alumnado destinatario
170
integración entraría al aula con el profesor de esta materia.
• Recursos materiales. Los espacios donde se desarrolle el programa PRONEEP
deben contar con recursos informáticos, bibliográficos, telefónicos, de almacén,
así como con el mobiliario común del aula (García Nadal, 2004).
• Recursos espaciales. Es necesario que el centro cuente con espacios
complementarios y adyacentes al centro para apoyar el proceso de enseñanza-
aprendizaje. En este sentido, es recomendable establecer un lugar/aula o taller
estable, aunque no tiene por qué postularse un aula aparte o bien diferenciada,
donde habitualmente se vayan a desarrollar las actividades del PRONEEP (García
Nadal, 2004).
171
• Ropas que se usaban en la época.
• Visita virtual al «Museo» para ver su obra y para que los alumnos realicen algunas
de las actividades que ofrece su web.
• Observación de algunas obras de Goya en:
http://www.biografiasyvidas.com/monografia/goya/cuadros23.htm
• Dibujos y pequeños trabajos.
9. Programas ABC
9.1 Finalidad
172
funcionarios de la propia Consejería de Educación especialistas en lengua de
signos. También pueden participar profesionales de la intervención y
rehabilitación de audición y lenguaje vinculados al movimiento asociativo, cuya
actuación puede realizarse en horario lectivo o no lectivo. Por último, en el
programa también participan los profesionales del equipo específico de
discapacidad auditiva y docentes que dominan la lengua de signos e imparten su
asignatura utilizando ambas lenguas.
• Recursos materiales. Además de los recursos propios del centro, en esta medida
específica se destaca la elaboración de materiales y adaptaciones realizado por los
propios docentes del programa. Además, los profesionales del equipo específico
de discapacidad auditiva aportan también sus propios materiales, informan sobre
nuevos materiales publicados y ayudan a los docentes en la elaboración de
material adaptado.
En ocasiones, y a modo de ejemplo, se puede utilizar el lenguaje de signos o el
método dactilológico como apoyo al inicio de la lectoescritura.
• Recursos espaciales. Los centros que desarrollan esta medida cuentan con un
acondicionamiento espacial adaptado a las necesidades del alumnado destinatario.
En este sentido, los centros pueden disponer de alarmas luminosas y señalizar las
dependencias del centro en lengua de signos. En el aula se sitúa al alumno donde
mejor pueda percibir a través de sus restos auditivos, alejado de las áreas ruidosas.
Este tiene establecido un horario fijo de rutinas que facilitan la realización de
actividades, siempre que sea posible con apoyo visual. También se favorecerá el
desarrollo de actividades de ocio y de juego que favorezcan la interacción de
173
alumnos sordos y oyentes.
10.1 Finalidad
Con esta medida específica se pretende hacer efectivos los principios de normalización e
inclusión del alumnado que tiene necesidades educativas especiales graves y
permanentes, y precisa de un apoyo extenso y generalizado en todas las áreas
curriculares. Esta medida pretende adaptarse a las necesidades educativas del alumnado,
creando, dentro de los centros ordinarios, un entorno lo menos restrictivo posible, que
propicie la planificación de actividades compartidas con un grupo ordinario de
referencia, permita desarrollar una atención educativa individualizada y una supervisión
y ayuda constante en las tareas que se realizan.
174
agotado todas las medidas organizativas, metodológicas y curriculares posibles en el aula
ordinaria.
• Recursos personales:
• Recursos materiales:
— Libros de texto.
— Mobiliario común de clase.
— Materiales didácticos específicos para atender las necesidades educativas
especiales de los destinatarios.
— Materiales preparados por el docente.
— Pizarra.
— Uso de las paredes.
— Murales.
175
— Hardware informático (ordenadores, impresora y escáner).
— Software informático.
• Recursos espaciales:
El tutor del aula abierta específica, con la orientación del profesional del EOEP,
evaluará, al término del curso académico, el desarrollo del aula abierta especializada. La
Inspección de Educación supervisará esta medida con la periodicidad que sus planes de
actuación determinen, en el marco de sus actuaciones específicas y de análisis.
• Ejemplo de aula abierta específica de alumnado con trastornos del espectro autista.
Blog de Carolina Martínez (maestra especialista en Educación Especial) del CEIP
Federico de Arce:
http://aulaabiertatgd.blogspot.com.es/
• Ejemplo de centro de Educación Infantil y Primaria con aula abierta específica de
alumnado con discapacidad auditiva en las Jornadas sobre experiencias de
escuelas eficaces para atender a la diversidad en Educación Infantil y Primaria de
la Región de Murcia, los días 3 y 4 de diciembre de 2012, en la Facultad de
Educación de la Universidad de Murcia.
11.1 Finalidad
Esta medida tiene como finalidad que el alumnado procedente de diferentes países pueda
participar plenamente en la vida social del país que lo acoge y, al mismo tiempo,
garantizar su permanencia y promoción en el sistema educativo. Esta medida trata de
desarrollar un programa específico para dar respuesta a las graves carencias lingüísticas
del alumnado a fin de facilitar su integración en el curso correspondiente en el menor
tiempo posible; el desarrollo de estos programas será en todo caso simultáneo a la
176
escolarización de los alumnos en los grupos ordinarios. En definitiva, esta medida
pretende dar respuesta a los alumnos que han formado parte de las Aulas de Acogida
(véase p. 199) y todavía continúan con carencias lingüísticas en español, así como a
aquellos que no han podido integrarse en ellas, al no estar su centro autorizado para
impartirlas.
Es necesario un mínimo de cinco alumnos destinatarios por curso para que el programa
se pueda poner en funcionamiento en los centros.
• Recursos personales:
177
mencionados anteriormente, podrán impartir este programa en primer o
segundo curso si pertenecen al cuerpo de maestros, y en todos los cursos si son
profesores de Educación Secundaria.
• Recursos materiales:
• Recursos espaciales:
12.1 Finalidad
178
12.2 Alumnado destinatario
179
reincorporando de manera progresiva a su grupo de referencia en aquellas áreas
que el equipo docente determine.
• Nivel II. Agrupamiento para adquisición de competencias lingüísticas generales y
específicas. El tiempo de permanencia en este nivel, incluido el transcurrido en el
nivel I, no superará el equivalente a un curso escolar. No obstante lo anterior y
para situaciones excepcionales en las que la fecha de incorporación del alumno no
coincida con el comienzo del curso escolar, podrán adaptarse los tiempos de
permanencia en este nivel. El horario semanal de asistencia al aula de acogida en
este nivel será como máximo de 12 horas en Educación Primaria y 18 horas en
Educación Secundaria Obligatoria.
• Nivel III. Adquisición, mediante los apoyos correspondientes, de competencia
lingüística específica y curricular en las áreas instrumentales que presente
desfases, una vez agotado el tiempo de permanencia en el nivel II. El equipo
docente del grupo de referencia propondrá la medida organizativa en la que pueda
ser incorporado con las adaptaciones curriculares individuales, debiéndose realizar
estas de manera coordinada entre el profesorado de apoyo y el del área/materia del
grupo de referencia. El horario semanal de asistencia al Aula de Acogida en este
nivel será el correspondiente al de la medida organizativa a la que se incorpore el
alumno. El resto del horario lectivo semanal será cursado por el alumnado en sus
grupos de referencia mediante las adaptaciones curriculares individuales que sean
necesarias.
El proceso de enseñanza-aprendizaje en estas aulas se organizará a través de
adaptaciones curriculares para el aprendizaje del español. Estas adaptaciones
curriculares tendrán entre sus principales objetivos la posterior reincorporación del
alumnado a su grupo de referencia, de manera que pueda continuar el proceso
escolar de una forma normalizada. En el nivel II, las adaptaciones curriculares se
articularán como sigue:
180
en torno a los cuales se articulen los contenidos de las áreas/materias
mencionadas, en los que prime un enfoque eminentemente práctico del proceso de
enseñanza del español.
• Recursos personales. Al alumnado del Aula de Acogida se le asignará un tutor
propio, recayendo el cargo en el maestro o profesor de apoyo adscrito a la misma
para Educación Primaria y primer y segundo curso de Educación Secundaria
Obligatoria. Para tercer y cuarto curso de Educación Secundaria Obligatoria el
tutor será nombrado entre el profesorado que imparta docencia en las materias
citadas anteriormente. En el caso de que el profesor de apoyo de compensación
educativa pertenezca al cuerpo de profesores de Secundaria, podrá ser tutor del
aula de acogida el que lo fuera en los cursos tercero o cuarto de ESO. Por las
características propias de estas aulas y el proceso de enseñanza-aprendizaje que
habrá de promoverse, en su nivel I podrá ser impartido, en Educación Primaria,
por maestros preferentemente habilitados en Lengua extranjera Inglés o Francés y
en el caso de Educación Secundaria Obligatoria por profesores de las
especialidades de Inglés, Francés o Lengua castellana y literatura. En el nivel II
será desarrollado por los mismos maestros que en el nivel I, en Educación
Primaria. En el caso de Educación Secundaria Obligatoria podrá incorporarse el
profesorado de la materia del ámbito educativo correspondiente. Los centros que
cuenten con profesorado de apoyo de compensación educativa podrán implantar
esta medida utilizando dicho recurso. En el caso de grupos de Aulas de Acogida
en Educación Secundaria Obligatoria podrá completar la dotación del aula, el
profesor técnico de servicios a la comunidad. Esta modalidad requiere la
coordinación entre el profesorado del grupo de referencia al que pertenezca el
alumno y el correspondiente del Aula de Acogida, durante y después de su
estancia en la misma. En este sentido, se procurará que el número de profesores
que atienden al Aula de Acogida sea el menor posible, siendo conveniente que no
exceda de un máximo de dos en los niveles I y II.
• Recursos materiales. Materiales didácticos. Materiales adaptados. Mobiliario
común del aula.
• Recursos espaciales. Espacio físico del aula ordinaria, espacios comunes del
centro, patio del centro escolar y Aula de Acogida.
181
correspondientes adaptaciones curriculares. No obstante, en cuanto a promoción y
titulación, se aplicarán los mismos criterios que con carácter general rigen para el resto
del alumnado. Se elaborará un informe individualizado que recoja el progreso realizado
por el alumno, para constancia en su expediente académico.
13.1 Finalidad
Esta medida pretende compensar las necesidades específicas de apoyo educativo del
alumnado originadas por estar en situaciones sociales o culturales desfavorecidas (León,
2012a) y tiene como meta dar apoyo específico, preferiblemente dentro del aula o, con
carácter temporal, fuera del aula en agrupamientos flexibles, al alumnado que lo precise,
principalmente en las áreas instrumentales (Lengua Castellana y Matemáticas).
Aunque, como afirma Escudero (2003), si colocamos la educación compensatoria en
el escenario que es conveniente, hemos de relacionarla con políticas sociales y escolares
de mayor alcance que las que serían propias de un programa específico y puntual. A
través de este programa se persiguen, entre otros objetivos:
182
• Potenciar los aspectos de enriquecimiento que aportan las diferentes culturas,
promoviendo el desarrollo intercultural.
• Fomentar la participación de los diferentes sectores de la comunidad educativa y
del resto de los estamentos sociales para hacer efectivo el acceso a la educación y
a la sociedad en igualdad de oportunidades y para facilitar la incorporación de las
familias provenientes de otras culturas o con especiales dificultades de integración
social.
• Impulsar la coordinación y la colaboración con otras administraciones,
instituciones, asociaciones y organizaciones sin fines de lucro para la
convergencia y desarrollo de las acciones de compensación social y educativa
dirigidas a los colectivos en situación de desventaja.
183
compensación educativa se realizará mediante el informe correspondiente de
adopción de medidas de compensación educativa, y estará sujeta a revisión
continua a lo largo de toda la etapa y, en cualquier caso, deberá revisarse al
comienzo de cada curso escolar. El informe pedagógico para la adopción de
medidas de compensación educativa se custodiará en el centro correspondiente.
Los informes pedagógicos realizados por los tutores y el maestro de educación
compensatoria están en el expediente del alumno, donde se recogerán los aspectos
curriculares importantes de su escolaridad.
• Finalización. El alumnado destinatario de medidas de compensación educativa en
Educación Primaria, que no alcance los objetivos previstos para la etapa, no
promocionará a la etapa de Educación Secundaria sin agotar la posibilidad de
permanencia un año más en la etapa de Educación Primaria. Es importante
precisar que la inclusión de un alumno en el programa estará sujeta a la revisión
continua a lo largo del curso, siendo posible su incorporación al grupo ordinario, si
su mejora académica así lo demanda.
184
Individualizado.
— Atender y actuar con este alumnado para darle una respuesta educativa
adaptada a sus necesidades.
— Participar en la concreción del Plan de Acción de Compensación Educativa.
— Participar en el Plan de Formación Específica de Compensación Educativa.
— Impulsar la coordinación y colaboración del centro con otras instituciones:
Equipos de Orientación Educativas Psicopedagógica (EOEP), Departamentos
de Orientación, Servicios Sociales, ONG, asociaciones..., que favorezcan la
articulación de medidas, recursos, acciones, etc., que tiendan a la compensación
de las desigualdades: becas (escolares, de comedor, transporte...), ayudas,
contraprestaciones, atención domiciliaria, según sea el caso.
— Dar a conocer a la comunidad educativa lo que supone la compensación
educativa e intercultural.
185
Ejemplo de un PROGRAMA DE COMPENSACIÓN EDUCATIVA en el CEIP
José Hernández Ardieta de Roldán (Murcia), que se describe en unas jornadas
interculturales que tuvieron lugar en dicho centro:
http://www.educarm.es/admin/visualizaPaginaWeb.php?
wb=103&mode=visualizaPaginaWeb&aplicacion=EXPERIENCIAS&zona=PROFESORES&menuS
14.1 Finalidad
Se trata de una modalidad organizativa que tienen como objetivo prevenir el abandono
prematuro del sistema educativo y favorecer la integración en el centro del alumnado de
educación compensatoria que demanda una respuesta educativa distinta. Esta medida
trata, fundamentalmente, de promover el desarrollo de las competencias básicas
expresadas en los objetivos generales de la etapa mediante una metodología y unos
contenidos adaptados a las necesidades e intereses de sus destinatarios. Todo ello viene a
resaltar la conveniencia de adecuar respuestas educativas que hagan posible el principio
de la igualdad de oportunidades y desde una respuesta organizativa y curricular se
posibilite la adecuación del proceso de enseñanza-aprendizaje al alumnado, a sus
intereses, capacidades y motivaciones. Por tanto, los centros podrán establecer grupos
específicos de aula taller de compensación educativa para el alumnado «menor de
dieciséis años que presente graves dificultades de adaptación en el aula, desmotivación
hacia el trabajo escolar y riesgo de abandono prematuro del sistema educativo» (León,
2012a, p. 272).
Alumnado con necesidades de compensación educativa, es decir, aquel que presenta dos
o más años de desfase entre su nivel de competencia curricular y el del curso en el que se
encuentre escolarizado, si ello es debido a su pertenencia a una minoría étnica o cultural
en situación de desventaja social o a otros grupos socialmente desfavorecidos, y que
presente graves dificultades de adaptación al aula.
186
— Informe psicopedagógico prescriptivo del Departamento de Orientación.
— Conformidad, por escrito, de los padres o tutores del alumno para su
incorporación al grupo.
— Propuesta razonada de la del equipo docente del grupo de referencia al que
pertenezca el alumno, firmada por el tutor y dirigida a la dirección del centro,
en la que se indicarán los motivos por los que se considera que esta medida es
la más adecuada para su proceso de aprendizaje.
187
adaptados, mobiliario común del aula.
• Recursos espaciales. Aula de apoyo, espacio físico del aula ordinaria, patio del
centro escolar.
Resulta de gran interés leer la experiencia y visualizar los vídeos del Aula Taller
del IES Poeta Sánchez Bautista (Llano de Brujas, Murcia):
http://servicios.educarm.es/admin/visualizaPaginaWeb.php?
wb=735&mode=visualizaPaginaWeb&aplicacion=EXPERIENCIAS&zona=EDUCARM
15.1 Finalidad
188
su incorporación y promoción en la etapa. Podrán incorporarse a un aula ocupacional de
compensación educativa aquellos alumnos que presenten las características señaladas y,
además, reúnan todas y cada una de las siguientes condiciones:
— Cumplir quince años antes del 31 de diciembre del año natural en el que se
escolarizarán en el aula de compensación educativa.
— Estar desescolarizados o en grave riesgo de abandono escolar por encontrarse
en situación familiar y social desfavorecida.
— No encontrarse en condiciones de alcanzar los objetivos de la Educación
Secundaria Obligatoria, a pesar de haberse adoptado con él las medidas de
atención a la diversidad previstas en la legislación vigente.
189
El currículum de las Aulas Ocupacionales de compensación educativa se organizará en
tres ámbitos: ámbito práctico, ámbito lingüístico-social y ámbito científico-matemático,
que incorporarán las competencias de las áreas y materias de la Educación Secundaria
Obligatoria.
Cada equipo docente decidirá cuál es la organización horaria que mejor se adapta a la
consecución de los estándares propuestos. Dicha organización podrá modificarse de
acuerdo con la evaluación de los resultados obtenidos. En términos generales se propone
el siguiente horario semanal:
— Diez horas semanales para el ámbito práctico en gran grupo (15 alumnos, como
máximo).
— Cuatro horas semanales para el ámbito práctico en pequeño grupo (8 alumnos,
como máximo).
— Cuatro horas semanales para el ámbito científico-matemático en pequeño
grupo (8 alumnos como máximo).
— Cuatro horas semanales para el ámbito lingüístico-social en pequeño grupo (8
alumnos, como máximo).
— Dos horas semanales de Educación Física en gran grupo (15 alumnos, como
máximo).
— Tres horas semanales de actividades complementarias en gran grupo (15
alumnos, como máximo).
— Una hora semanal de Religión/asignatura alternativa en gran grupo (15
alumnos, como máximo). Los centros podrán organizar, dependiendo del curso
en el que estén matriculados los alumnos, dos horas semanales de
Religión/asignatura alternativa, en cuyo caso, el número de horas semanales de
actividades complementarias se reducirá a dos.
— Dos horas semanales de tutoría en gran grupo (15 alumnos, como máximo).
190
Religión, que podrán tener destino en el Instituto de Educación Secundaria al que
se adscriba el aula ocupacional.
• Recursos materiales. Materiales didácticos, mobiliario común de las aulas.
• Recursos espaciales. Espacio físico del aula ordinaria, patio del centro escolar.
• Noticias: «Las Aulas Ocupacionales facilitan que 165 alumnos con problemas de
adaptación al sistema escolar continúen sus estudios»:
http://www.carm.es/web/pagina?
IDCONTENIDO=76670&IDTIPO=10&RASTRO=c77$s3$m
La Consejería de Educación, Cultura y Universidades de la Región de Murcia
desarrolla esta medida, dirigida a alumnos de quince años y que previene el
absentismo y el abandono escolar, en colaboración con diez ayuntamientos de la
Región.
• Experiencia de los alumnos del Aula Ocupacional del IES José Planes de Murcia,
Un día en el Aula Ocupacional:
http://servicios.educarm.es/admin/visualizaPaginaWeb.php?
wb=1144&mode=visualizaPaginaWeb&aplicacion=EXPERIENCIAS&zona=PROFESORES&
191
16. Programas de refuerzo curricular
16.1 Finalidad
Serán destinatarios de esta medida específica aquellos alumnos que, una vez iniciada la
etapa de Educación Secundaria Obligatoria, presentan dificultades generalizadas de
aprendizaje asociadas a problemas de adaptación al trabajo en el aula, que les impiden
alcanzar los objetivos propuestos para primer y segundo curso y les obligan a repetir los
mismos. En segundo van dirigidos, preferentemente, a los alumnos que cursaron primero
dentro de un Programa de Refuerzo Curricular y no presentan la madurez suficiente para
reincorporarse a un grupo ordinario.
— Análisis por los equipos docentes de los grupos de primero, tras la evaluación
final ordinaria, de los alumnos que se consideren posibles candidatos a
incorporarse al programa. A estos efectos se podrá tener en cuenta la
trayectoria de los alumnos en Primaria a través del estudio y análisis de los
informes de evaluación elaborados por los centros donde los alumnos cursaron
esta etapa.
— Reunión del jefe de estudios con los tutores de los diferentes grupos de primero
que tengan alumnos candidatos y el orientador del centro, para elaborar la
relación provisional de estos.
192
— Tras la evaluación final extraordinaria se procederá a la revisión de la relación
provisional y elaboración de la relación definitiva.
La ratio de cada uno de los grupos del programa estará comprendida entre 15 y 20
alumnos. Excepcionalmente, en el caso de aquellos centros que por tener un número
reducido de unidades no alcancen el mínimo de alumnos exigido, podrán solicitar
autorización a la dirección general competente con la justificación correspondiente. Los
centros autorizados adaptarán los elementos prescriptivos del currículum (contenidos,
criterios de evaluación y metodología didáctica) para dar respuesta a este perfil de
alumnado y conseguir los objetivos del programa. Las materias de contenido
humanístico se organizarán en un grupo y las de contenido científico en otro. Cada uno
de estos grupos será impartido por un único profesor. Las materias de Música y
Educación Física serán impartidas por maestros o profesores especialistas. Todas las
materias dispondrán de una carga lectiva igual a la establecida en la normativa vigente
para primer y segundo curso de ESO. Los alumnos cursarán una materia de apoyo
instrumental que constará de dos partes: una relacionada con el fomento de la lectura y
otra que permitirá al alumno comprender la justificación científica de experiencias
cotidianas. Esta materia sustituirá, con la misma carga lectiva, a la segunda lengua
193
extranjera y será impartida conjuntamente por los dos tutores del grupo.
17.1 Finalidad
El equipo docente podrá proponer a los padres, madres o tutores legales la incorporación
a un programa de mejora del aprendizaje y del rendimiento de aquellos alumnos y
alumnas que hayan repetido al menos un curso en cualquier etapa, y que una vez cursado
el primer curso de Educación Secundaria Obligatoria no estén en condiciones de
promocionar al segundo curso, o que una vez cursado segundo no estén en condiciones
de promocionar a tercero. El programa se desarrollará a lo largo de los cursos segundo y
tercero en el primer supuesto, o solo en tercer curso en el segundo supuesto.
Aquellos alumnos y alumnas que tras haber cursado tercer curso de Educación
Secundaria Obligatoria no estén en condiciones de promocionar a cuarto, podrán
194
incorporarse, de modo excepcional, a un programa de mejora del aprendizaje y del
rendimiento para repetir tercero.
18.1 Finalidad
195
Las administraciones educativas promoverán medidas metodológicas de atención a la
diversidad que permitan a los centros, en el ejercicio de su autonomía, una organización
de las enseñanzas adecuada a las características de los alumnos/as, con especial atención
en lo relativo a la adquisición de las competencias lingüísticas contenidas en los módulos
profesionales de Comunicación y Sociedad I y II para los alumnos/as que presenten
dificultades en su expresión oral, sin que las medidas adoptadas supongan una
minoración de la evaluación de sus aprendizajes.
De acuerdo con la disposición adicional cuarta del RD 127/2014 de 28 de febrero, las
administraciones educativas competentes podrán organizar Programas Formativos
Profesionales para los alumnos/as con necesidades educativas específicas:
196
b) Haber cursado el primer ciclo de Educación Secundaria Obligatoria o,
excepcionalmente, haber cursado el segundo curso de Educación Secundaria
Obligatoria.
c) Haber sido propuesto por el equipo docente a los padres, madres o tutores legales
para la incorporación a un ciclo de Formación Profesional Básica.
197
b) Módulos asociados a los bloques comunes establecidos en el artículo 42.4 de la
Ley Orgánica 2/2006, de 3 de mayo, según la modificación introducida por el
apartado 35 del artículo único de la Ley Orgánica 8/2013, de 9 de diciembre, para
la Mejora de la Calidad Educativa, que garantizarán la adquisición de las
competencias del aprendizaje permanente:
198
incluida una hora de tutoría semanal. No obstante, para determinados grupos específicos,
las administraciones educativas podrán reducir el mínimo hasta el 22% de dicha
duración, garantizando, en cualquier caso, la adquisición de todos los resultados de
aprendizaje de los citados módulos profesionales.
Los Programas Formativos Profesionales destinados a alumnos con necesidades
educativos especiales tendrán una estructura modular. Los módulos del programa serán
los siguientes:
a. Módulos específicos:
199
básicas en los institutos de Educación Secundaria, este profesorado será
funcionario del cuerpo de maestros, perteneciente o adscrito a los
departamentos de coordinación didáctica de Lengua castellana y literatura,
Matemáticas, Geografía e Historia y Ciencias de la Naturaleza. Entre ellos,
tendrán preferencia los docentes que acrediten experiencia y formación en la
atención educativa del alumnado al que se dirigen estos programas.
— El tutor será uno de los profesores del equipo educativo que imparta el
programa y dedicará una hora semanal a la función tutorial.
Los equipamientos han de ser los necesarios y suficientes para garantizar a los
alumnos y alumnas el logro de los resultados de aprendizaje y la calidad de la enseñanza.
Además, deberán cumplir las siguientes condiciones:
200
a) El equipamiento dispondrá de la instalación necesaria para su correcto
funcionamiento, y cumplirá con las normas de seguridad y prevención de riesgos y
con cuantas otras sean de aplicación.
b) La cantidad y características del equipamiento deberán estar en función del
número de personas que lo han de utilizar y permitir el logro de aprendizaje,
teniendo en cuenta los criterios de evaluación y los contenidos que se incluyen en
cada uno de los módulos profesionales que se impartan en los referidos espacios.
201
19.1 Finalidad
En esta medida podrá participar el alumnado que por prescripción facultativa debe
permanecer largos periodos de convalecencia (superior a treinta días) en su domicilio sin
posibilidad de asistir al centro educativo en el que está escolarizado. Son niños y niñas
que padecen enfermedades o lesiones traumáticas que les obligan a periodos de
hospitalización o convalecencia prolongados, y por tanto, se encuentran en situación de
desventaja respecto a su permanencia en el sistema educativo. Su escolarización se ve
dificultada y suelen acumular retrasos escolares que solo pueden ser paliados desde la
adopción de medidas de apoyo que serán útiles.
También el alumnado con enfermedad crónica que conlleve bajas intermitentes de al
menos seis días continuados al mes dentro de un periodo mínimo de seis meses, según
previsiones médicas.
El tiempo máximo de atención semanal al alumno de Educación Primaria será de seis
horas semanales, distribuidas de ser posible en tres periodos de dos horas y en el horario
que se autorice. En Educación Secundaria Obligatoria será de ocho horas semanales
distribuidas preferentemente en cuatro periodos de dos horas y en el horario que se
autorice:
202
finalizar el servicio, el profesor del SAED tendrá una reunión en el centro para
preparar la vuelta del alumno o alumna. Asimismo, enviará un informe, donde se
recogerá lo que se ha trabajado durante su ausencia del centro. Dependiendo de los
casos, el informe lo realizará el profesor del SAED, o de forma conjunta entre el
SAED y el aula hospitalaria donde haya recibido el tratamiento.
203
Para ello, reflejará el número de horas y días que asiste al domicilio y los contenidos
trabajados. En caso de que el alumno fuera hospitalizado, será el equipo docente de las
Aulas Hospitalarias el encargado de llevar a cabo esta medida.
Si finalizado el proceso de atención domiciliaria el médico determina que el alumno
debe permanecer en baja domiciliaria, se ampliará el servicio. Si, por el contrario, se
produce una mejoría que permita al alumno asistir a clase, el médico solicitará el alta y
el alumno se incorporará de inmediato al centro educativo.
La evaluación de los aprendizajes del alumnado de atención educativa domiciliaria
corresponde al centro docente en el que esté matriculado. Dado el carácter global,
continuo, formativo y orientador del proceso educativo que tiene la evaluación de las
distintas etapas educativas, se considerarán los informes y documentos, que a tal efecto
elabore el profesorado que desarrolle la atención educativa domiciliaria y el tutor. El
profesorado que presta la atención educativa domiciliaria ejercerá como vínculo entre el
profesorado y el alumnado en cuanto al desarrollo de las actividades que sirvan para la
evaluación de los conocimientos adquiridos durante el periodo de convalecencia:
trabajos, pruebas o cualquier otra actividad que pueda aportar información al
profesorado responsable para la evaluación y calificación del alumnado. Las decisiones
sobre promoción y titulación se tomarán atendiendo a lo establecido con carácter general
para el resto del alumnado y para cada una de las etapas educativas, de acuerdo a la
normativa vigente. El alumno que haya recibido atención educativa hospitalaria y/o
domiciliaria será objeto de una evaluación inicial en el momento de su vuelta al centro,
con el objetivo de adaptar la respuesta educativa a sus necesidades en ese momento.
Dicha respuesta podrá incluir las medidas de atención educativa que se estimen
oportunas, incluida la elaboración de adaptaciones curriculares individualizadas.
Los siguientes ejemplos son de gran interés para conocer instrucciones y modos de
llevar a cabo el Servicio de Apoyo Educativo Domiciliario (SAED):
204
puede subsanar gracias al Servicio de Apoyo Educativo Domiciliario (SAED), que
permite que estos chicos puedan continuar con normalidad sus estudios. Para
hablarnos de las ventajas de este plan nos acompañan Carmen Guaita, maestra y
vicepresidenta del sindicato de profesores ANPE; Miguel Ángel Villa, director del
Instituto Blas de Otero de Madrid, y Jesús Ruiz Gálvez, profesor del SAED:
http://www.rtve.es/alacarta/audios/la-noche-en-vela/noche-vela-1-061113/
2123390/
20.1 Finalidad
Las Aulas Hospitalarias son las unidades escolares surgidas dentro del hospital con el
objetivo principal de atender escolarmente a los niños hospitalizados, al mismo tiempo
que se ayuda a prevenir y evitar la posible marginación que por causa de una enfermedad
puede sufrir el niño por estar hospitalizado. Con esta medida se trata de evitar que el
alumnado que presente necesidades educativas derivadas de una situación de
hospitalización no pueda alcanzar las competencias básicas y objetivos establecidos para
las distintas etapas educativas.
Entre los principales objetivos encontramos: cubrir las necesidades de los niños en
edad escolar que, por razones de salud no pueden hacer uso normalizado de los servicios
educativos; facilitar mediante la acción educativa que el periodo de hospitalización sea
lo más llevadero posible para el niño, atendiendo sus necesidades afectivas para superar
la pérdida de seguridad y el trauma que supone el ingreso y la estancia hospitalaria; crear
en el aula un entorno estimulante, motivador, alegre que represente un espacio escolar de
normalidad para los niños; y facilitar a los alumnos recursos para la utilización de su
tiempo libre, potenciando y dinamizando la lectura y las actividades lúdicas.
Los objetivos y actuaciones desarrolladas en las Aulas Hospitalarias se referirán tanto
a los aspectos escolares como al conjunto de acciones necesarias para facilitar un marco
de atención global que incluya elementos relacionados con la socialización, la
afectividad y el bienestar general del alumnado hospitalizado.
205
El destinatario de esta medida es el alumnado que presente necesidad específica de
apoyo educativo derivada de hospitalización por enfermedad prolongada y no pueda
asistir de manera habitual y continuada al centro educativo en el que haya sido
escolarizado. Abarca a los alumnos de edades comprendidas entre los tres y los dieciséis
años, aunque en ocasiones puntuales son atendidos niños de otras edades superiores,
aquellos que cursan Bachillerato.
Para la puesta en funcionamiento de un Aula Hospitalaria se debe mantener un
número mínimo de ocho alumnos de media o larga hospitalización en edad de
escolarización obligatoria, exceptuando los existentes en las unidades de cuidados
intensivos.
206
hospitales que exista un número mínimo de ocho alumnos de media o larga
hospitalización de esta etapa, se asignará al equipo docente un profesor de
enseñanza secundaria de una materia del ámbito sociolingüístico, especialidad
Inglés, y otro de una materia del ámbito científico-tecnológico, especialidad
Matemáticas o Física y Química.
La relación con los padres ha de ser diaria y permanente, ya que son ellos, junto
con sus hijos, los primeros en orientar al maestro sobre el nivel educativo de estos,
al mismo tiempo que sirven de nexo de unión entre el colegio y sus tutores con el
Aula Hospitalaria.
• Recursos materiales. Material curricular, material lúdico, TIC, equipamiento
escolar.
• Recursos espaciales. Aula Hospitalaria, pasillos del hospital y otras dependencias
del centro hospitalario.
207
continuo, formativo y orientador del proceso educativo que tiene la evaluación de las
distintas etapas educativas, se considerarán los informes y documentos que a tal efecto
elaboren el profesorado que desarrolle la atención educativa hospitalaria y el tutor. El
profesorado del aula hospitalaria ejercerá como vínculo entre el profesorado y el
alumnado en cuanto al desarrollo de las actividades del aula de los conocimientos
adquiridos durante el periodo de convalecencia: trabajos, pruebas o cualquier otra
actividad que pueda aportar información al profesorado responsable para la evaluación y
calificación del alumnado. Las decisiones sobre promoción y titulación se tomarán
atendiendo a lo establecido con carácter general para el resto del alumnado y para cada
una de las etapas educativas, de acuerdo a la normativa vigente. El alumno que haya
recibido atención educativa hospitalaria y/o domiciliaria será objeto de una evaluación
inicial en el momento de su vuelta al centro, con el objetivo de adaptar la respuesta
educativa a sus necesidades en ese momento. Dicha respuesta podrá incluir las medidas
de atención educativa que se estimen oportunas, incluida la elaboración de adaptaciones
curriculares individualizadas.
21.1 Finalidad
Promover una actuación educativa orientada a la diversidad para ofrecer a estos menores
208
las oportunidades necesarias para su integración social y ofrecer a los alumnos que
requieran una atención educativa diferente a la ordinaria una respuesta ajustada a sus
características y necesidades, facilitándoles el máximo desarrollo posible de sus
capacidades personales y, en todo caso, alcanzar los objetivos y competencias básicas
establecidas con carácter general para todo el alumnado.
La administración educativa con competencias en educación dotará de los recursos
humanos necesarios para el desarrollo de la labor docente en estas unidades escolares,
siempre y cuando se habiliten con este fin los espacios suficientes por el titular de las
dependencias, así como los recursos materiales necesarios.
Las finalidades de estos programas son: desarrollo personal, social y profesional;
igualdad de oportunidades, lucha contra la exclusión; justicia social, y la inclusión y
cohesión social.
Alumnado de catorce a veintitrés años, que esté sometido a medidas judiciales. Los
alumnos con medidas judiciales presentan un desfase curricular, además de dificultades
de adaptación y atención educativa, por lo que el objetivo es reincorporarlos al proceso
educativo y que adquieran las competencias suficientes para poder continuar con sus
estudios como ocurre con los alumnos menores de dieciséis años. También con aquellos
mayores de dieciséis años la finalidad será la misma, la obtención del título de Graduado
en ESO, a través de diferentes modalidades educativas (PCPI, Enseñanza Básica de
Personas Adultas, Educación Secundaria de Personas Adultas).
La tipología de este alumnado es: alumnado escolarizado en IES; inmigrantes sin
escolarizar; españoles sin centro de referencia claro (absentistas); alumnado de refuerzo
educativo.
209
21.3 Organización de los recursos internos y externos
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Gracia”, Murcia». Jornadas sobre experiencias de escuelas eficaces para atender a la diversidad en Educación
Infantil y Primaria de la Región de Murcia: http://tv.um.es/video?id=44031&cod=a1
Viñuelas, M. I., Hernández, M. A., Rodríguez, J. y Megía, M. (supervisor) (1999): Proyecto de Inteligencia
«Harvard». Madrid: CEPE.
Walters, L. S. (2000): Four Leading Models, Harvard Education Letter’s Research Online:
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Wilson, J. D. (1992): Cómo valorar la calidad de la enseñanza. Barcelona: Paidós.
215
Edición en formato digital: 2015
© Josefina Lozano Martínez, M.ª del Carmen Cerezo Máiquez y Salvador Alcaraz
García, 2015
© Alianza Editorial, S. A., Madrid, 2015
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Índice
Prólogo 7
Introducción 10
1. El Plan de Atención a la Diversidad en la escuela inclusiva 13
1. Una educación inclusiva con todos y para todos 13
2. El Plan de Atención a la Diversidad: seña de identidad de los centros docentes
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para responder a las necesidades del alumnado
2. Actuaciones generales de centro para una educación común y de
34
calidad
1. ¿Qué son las actuaciones generales? 34
2. Programas y actividades para la prevención, seguimiento y control del
34
absentismo y abandono escolar
3. Programas y actividades en colaboración y coordinación con las distintas
administraciones públicas, instituciones, organismos o asociaciones de ámbito 50
estatal, autonómico o local
4. Propuestas para adecuar las condiciones físicas y tecnológicas de los centros 57
5. Propuestas de ayudas técnicas individuales y equipamientos específicos para
59
favorecer la comunicación, movilidad y el acceso al currículum
6. Programas y actuaciones de apoyo para prevenir y ofrecer apoyo psicológico
al alumnado víctima del terrorismo, de catástrofes naturales, maltrato, abusos,
60
violencia de género o violencia escolar o cualquier otra circunstancia que lo
requiera
7. La organización de los grupos de alumnos, la utilización de los espacios, la
coordinación y el trabajo conjunto entre los distintos profesionales del centro y 62
los colaboradores y agentes externos al centro
8. La organización y coordinación entre el personal docente y entre estos y el
personal de atención educativa complementaria u otro personal externo que 63
interviene con el alumnado
9. Los programas, planes o proyectos de innovación e investigación educativa
63
que favorezcan una respuesta inclusiva a la diversidad del alumnado
3. Medidas ordinarias para atender las necesidades de todos en el
65
aula
1. ¿Qué son las medidas ordinarias? 65
2. Aprendizaje cooperativo 65
3. Aprendizaje por tareas 70
4. Aprendizaje por proyectos 74
217
5. Autoaprendizaje o aprendizaje autónomo 79
6. Aprendizaje por descubrimiento 83
7. El contrato didáctico 87
8. Enseñanza multinivel 90
9. Taller de aprendizaje 93
10. Organización de contenidos por centros de interés 95
11. Trabajo por rincones 101
12. Grupos interactivos 107
13. Graduación de actividades 110
14. Elección de materiales y actividades 115
15. Refuerzo y apoyo curricular 117
16. Apoyo en el grupo ordinario 119
17. Tutoría entre iguales 121
18. Enseñanza compartida 124
19. Agrupamientos flexibles 126
20. Desdoblamiento de grupo 129
21. Utilización flexible de espacios 131
22. Inclusión de las TIC 132
23. Las redes de coordinación y colaboración del profesorado para el diseño de
135
proyectos, programaciones y para el seguimiento y evaluación del alumnado
24. Orientación para la elección de materias optativas 138
25. Estrategias metodológicas que fomentan la autodeterminación para los
140
alumnos con NEE
4. Medidas específicas de atención a la diversidad 144
1. ¿Qué son las medidas específicas? 144
2. Adaptaciones curriculares significativas 144
3. Adaptaciones curriculares de acceso 148
4. Adaptaciones curriculares de ampliación y/o enriquecimiento 151
5. Flexibilización de los años de escolaridad para el alumnado con necesidades
155
educativas especiales o altas capacidades intelectuales
6. Aulas o grupos de profundización y enriquecimiento en contenidos
específicos de las distintas áreas o materias destinados a alumnado con altas 158
capacidades intelectuales
7. Programas de apoyo específico a alumnado con necesidades educativas
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especiales
8. Programas para alumnos con necesidades educativas especiales asociadas a la
169
218
discapacidad intelectual en IES (PRONEEP) 169
219