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Desde tu punto de vista, ¿qué aspecto tendría que tener la Iglesia de hoy para ser
atrayente a los cristianos?
Pienso que es una pregunta que podría tener una respuesta concreta y, tal vez,
sencilla. La dificultad es llevarlo a la práctica, pues la incursión del modernismo
dentro de la misma Iglesia lleva a pensar, incluso a los cristianos mismos, que ésta
está pasada de moda o fuera de vanguardia ante los avances modernos. Por lo tanto,
pienso que debería ser una Iglesia que se adapte al tiempo actual, pero sin perder su
esencia ni su tradición misma, tomando aquellos avances que sirvan para la
evangelización y para la educación en la fe. Además, sus miembros deberían ser
personas que sepan escuchar al otro, ver por sus necesidades y reflejar, con actos de
caridad, el amor de Dios por la humanidad, empezando por los dirigentes y
continuando hasta los fieles laicos. Como dije anteriormente, parece algo sencillo de
realizar, pero no es así; sin embargo, nos toca hacer lo que nos corresponde como
cristianos.
Ante las dificultades que pasa la Iglesia y la apatía e indiferencia de los así
llamados “creyentes” de este tiempo, ¿cómo tendría que ser tu actuar con miras al
sacerdocio ministerial?
Pienso que debería ser un actuar viendo más allá de mi mismo, es decir, sin intentar
ser el protagonista exclusivo, el que se lleve todos los créditos y las aprobaciones;
tampoco tendría que actuar pensando sólo en mi comodidad o conveniencia. Es
importante ser consciente de la misión que Dios me encomienda y de los dones que
me brinda para poder llevarla a cabo. Por tal motivo, la formación debo verla como
un enriquecimiento humano, espiritual e intelectual, pero no para mí mismo, sino
para compartirlo con los demás, en donde la fe en Dios Trino y Uno sea el motor
que me impulse a obrar de ese modo y con una total entrega a Dios y a los demás
hombres. Se trata de hacer ver a los demás, mediante mis obras y mi vida misma,
que el seguir a Cristo tiene un sentido único que conduce al hombre a Dios mismo:
el sentido de mi existencia.