PELÍCULA HOTEL RWANDA

DERECHOS HUMANOS

CONTEXTO HISTÓRICO

Se informa en la escena en la que el periodista (interpretado por Joaquin

Phoenix) está hablando con un periodista nativo y con Paul (el protagonista,
interpretado por Don Cheadle). Se explica que Rwanda fue colonia de los belgas, que
ejercieron el poder utilizando la discriminación y dando como raza superior a los tutsi
por encima de los hutu porque aquellos tenían unos rasgos más parecidos a los blancos.

Al irse los belgas, los hutu quisieron vengarse de los tutsi, pero por mediación de
la ONU (cuyo Coronel es interpretado por el actor Nick Nolte) se eligió a un Presidente
para conseguir la paz en el país.

El Presidente murió en un viaje en helicóptero. Como hecho social no se ha

conseguido averiguar si fue accidente o atentado, pero los hutu lo utilizaron acusando a
los tutsi de haberlo matado.

A partir de ahí, los hutu comenzaron a cometer crímenes contra la humanidad,

concretamente de genocidio: como explica la Médico en una escena hablando con Paul
y su esposa (interpretada por la actriz Sophie Okonendo), el objetivo son, sobre todo,
los niños para que no haya más descendencia (por eso el nombre del delito: gen-ocidio).

Está basada, por tanto, en hechos reales y el comportamiento solidario y

caritativo de Paul fue cierto (a salvo las licencias cinematográficas obvias).

DIGNIDAD HUMANA

Rebajar la dignidad humana es, por desgracia, más fácil de lo que parece. Esto se
ve en los siguientes aspectos de la película:

- Llamar a los tutsis “cucarachas” y repetirlo constantemente para que entre en las
conciencias de los hutu.
- Los DNI están marcados mediante cuño con las palabras “hutu” o “tutsi”, como
si las personas fueran reses de ganado. Están, por tanto, clasificadas.
- Los Directivos de la Cadena de Hoteles le convencen al mismo protagonista de
que “hay que mantener la dignidad del hotel”, cuando la dignidad se predica de
las personas, no de las cosas. Consecuencia: es capaz de comprar en el mercado
negro para mantener esa dignidad mencionada que, además, como le dice a su
fiel Conserje llamado Dubé, crea estilo y “es, en cualquier caso, trabajo”.
PODER

Al menos en dos ocasiones se comprueba que política = poder = dinero:

- La primera vez que Paul va a comprar a George Rutagunda, éste le pregunta por
qué no va a la manifestación, y el protagonista le responde que tiene mucho
trabajo y no tiene tiempo para manifestaciones y política. La respuesta es: “la
política es poder, poder hutu; y el poder es dinero”.
- La otra ocasión se ve en la escena en la que habla con el Presidente de la
Compañía propietaria de los Hoteles. Éste no tiene ningún problema en llamar
por teléfono al Presidente de Francia y conseguir hablar con él inmediatamente.
- Por otro lado, en la misma escena, después de aclarar que son los franceses
quienes proveen a los hutu, ni Francia, ni EEUU, ni Gran Bretaña “van a parar la
matanza” porque no valen ni un voto para ese poder.
- Incluso, la primera vez que al protagonista se le ve volviendo a su casa desde el
trabajo, los vecinos le saludan: saben que tiene una buena posición económica,
es decir, poder.
- Quiebra, por tanto, el principio de subsidiariedad y, por ende, los demás
principios.

CONVERSIÓN GRADUAL DEL PROTAGONISTA

Al principio compra en el mercado negro “por trabajo”, como hemos dicho

antes. Vende y compra favores para proteger a su familia (escena en cama con su
Mujer), que para él es lo más importante. Lo que más le interesa es el “estilo”.

Su Esposa le hace ver que, siendo lo más importante, no es lo único (los vecinos,
por ejemplo), ampliándole el horizonte de la solidaridad. Incluso, su hijo Roger va a
casa de su amigo Simon para ver cómo está.

La segunda vez que vuelve a casa desde el trabajo, es su Esposa quien ha

acogido a los vecinos (es decir, lo ha hecho cuando él no estaba).

La larga escena en la que tiene que buscar dinero (en ambos Hoteles) para salvar
a un grupo tutsi (entre ellos su familia) marca el primer cambio solidario de Paul.

El segundo cambio importante se ve en la escena donde habla con el Coronel de

la ONU en el bar del Hotel. Paul pretende brindar con whisky y el Coronel le responde
que “deberías escupirme a la cara. No van a hacer nada para parar la matanza”. Paul
dice no entenderle pero el Coronel le contesta: “No sólo no eres blanco sino que eres
negro, negro africano. (…). Tú eres el más espabilado de los que hay aquí: ¿por qué no
has llegado a gerente del Hotel?”.
 Acto seguido le dice a su Mujer que ha sido un tonto, que no tiene memoria, que
se lo ha creído todo (la dignidad del hotel, el estilo…), cuando lo único que le han dado
es “su mierda”.

Momento a partir del cual empieza a ser él mismo, es decir, una persona
compasiva, solidaria y caritativa.

No se puede llegar ahí si no tiene tales cualidades dentro de sí (aunque no las

haya visto antes): por eso es tan educado (siempre habla diciendo “por favor”), responde
con paciencia al Conserje rebelde (Reguard, papel antagonista: éste se “chiva” a los
hutu, se instala en la Suite Presidencial, le amenaza, se enriquece… a costa de la guerra;
aquél ejerce la solidaridad porque hay guerra).

Ahora compra en el mercado negro porque hay una extrema necesidad en los
huéspedes del Hotel (ya no es por trabajo), les pide que llamen a sus países generando
compasión, acoge a todos. Es más, la película acaba con una frase suya: “Siempre hay
sitio”.

DERECHOS HUMANOS

La película plasma dos realidades diferentes: la del Hotel y fuera del Hotel.

Fuera del Hotel se vulneran, al menos, los siguientes Derechos:

- Vida
- Integridad física y moral
- Igualdad
- Libertad
o De circulación
o De expresión
 La radio es utilizada para generar violencia
o De conciencia
o De creencia
o De opinión
- Vivienda
- Libertad
- Paz
- Derechos sociales laborales: Rutagunda compra los machetes a 10 céntimos y
los traen desde China, y puede venderlos por lo menos a 50 céntimos cada uno:
dejando aparte que son machetes, si se venden a 10 céntimos, ¿Cómo serán las
condiciones laborales de los trabajadores chinos?
 Dentro del Hotel se respetan los Derechos Humanos, aunque algunos (por
razones de la guerra), son limitados. Por eso la gente vive una vida “normal” (los niños
bailan, corren y juegan); las escenas del Hotel, habitualmente, son de día, con luz,
mientras que las de fuera son normalmente de noche (obscuridad).