RINOCERONTE BLANCO

INTRODUCCIÓN

Es el cuarto mamífero terrestre más grande y pesado, además de ser la especie de

rinoceronte de mayor tamaño que existe en la actualidad.

Su nombre se debe a una confusión en la interpretación, ya que cuando llegaron los

primeros colonos holandeses a Sudáfrica llamaron a este animal “wijde” que significa
ancho en alusión a su labio, pero al llegar los británicos pensaron que la palabra era
“white”.

A su vez se encuentra dividida en dos subespecies de acuerdo a su ubicación: el

rinoceronte blanco del norte y el del sur.

DESCRIPCIÓN DEL RINOCERONTE BLANCO

A pesar de su nombre, en realidad el rinoceronte blanco es color gris, simplemente

una tonalidad más clara que el rinoceronte negro. Tiene el labio ancho y recto, a
diferencia del labio en forma de pico de las otras especies.

Su longitud es de 3 a 4 metros, el macho pesa en promedio 2-2.3 toneladas mientras

las hembras 1.6 toneladas.

Posee dos cuernos que en realidad son durezas formadas por queratina (mismo
material que forma las uñas y cabello humano) que se encuentra en el área de la nariz.
Debido a este material se pueden regenerar en caso de haber sufrido alguna fractura
durante una pelea. El cuerno frontal es aproximadamente 90 cm más grande, llegando
a alcanzar una altura de 1.50 m.

ALIMENTACIÓN DEL RINOCERONTE BLANCO

Son animales herbívoros, principalmente se alimentan de las hierbas que se

encuentran al ras del suelo. Bebe agua dos veces al día, pero en caso de sequías puede
sobrevivir de cuatro a cinco días sin beber.
REPRODUCCIÓN DEL RINOCERONTE BLANCO

Las hembras alcanzan la madurez sexual entre los 6 y 7 años, mientras los machos en
promedio de los 10 a los 12 años. Las parejas permanecen juntas durante un período
de 5 a 20 días, luego cada uno continua con su vida por separado.

La gestación tiene una duración de 16 a 18 meses de donde nace solamente una cría
que pesa entre 40 y 65k. Las madres son muy protectoras, pues llegan a ser muy
violentas con cualquiera que represente una amenaza.

EXTINSION

El verdadero peligro que enfrentan son los cazadores furtivos que comercializan con
sus cuernos, pero a pesar de esto los rinocerontes blancos se consideran levemente
amenazados debido a que su cacería no es muy frecuente.