cuent volando de flor en flor, se fue alejando de la colmena y cuando se
o de quiso dar cuenta, mientras saboreaba
el dulce néctar de un loto, ya era de noche. Al hacerse la oscuridad, el loto la se plegó sobre sí mismo y se cerró, quedando la abeja atrapada en su interior. Esta contrariedad, no abeja entraba en sus planes… pero tampoco le preocupó, así que, la abeja…se quedó dormida allí, hasta el amanecer. Al día siguiente el loto se abrió y la abejita salió volando y se fue a su colmena.