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El camuflaje militar es la habilidad por la cual un objetivo pasa desapercibido de la mirada de un soldado o

vehículo enemigo, confundiéndose con el entorno que le rodea. También se puede mimetizar el uniforme
mediante la maleza natural o artificial, como el barro, la nieve, las ramas, etc.
Etimología e historia
Según la Real Academia Española, camuflaje proviene del francés camouflage: Acción y efecto de
camuflar. A su vez, camuflar es una variación hispánica del vocablo francés camoufler: Disimular la
presencia de armas, tropas, material de guerra, barcos, etc., dándoles apariencia que pueda engañar al
enemigo. Por extensión, también significa disimular dando a una cosa el aspecto de otra
La primera unidad militar de camuflaje fue creada durante la Primera Guerra Mundial por el ejército francés
en 1915 y marcó el fin de los coloristas uniformes decimonónicos.
El camuflaje artístico en la guerra

Durante la Primera Guerra Mundial se probaron varias técnicas de camuflaje bélico. Una de ellas era el cubismo,
utilizado por los británicos y los estadounidenses para proteger los barcos de la amenaza de los nuevos submarinos
alemanes U-Boat.

Los aliados, al encontrarse desmoralizados y sin defensas efectivas, utilizaron los exploradores aéreos y la
fotografía. Los franceses fueron los pioneros al contratar a artistas para idear métodos que disminuyeran la
percepción de sus tropas, así como de elementos y equipos de destrucción. La mayoría de los intentos fracasaron,
pero se siguió perfeccionando.

Se conoce con el nombre de Convenios de Ginebra o Convenciones de Ginebra al conjunto de los cuatro
convenios internacionales que regulan el derecho internacional humanitario —también conocido por ello como
derecho de Ginebra— cuyo propósito es proteger a las víctimas de los conflictos armados. El primero fue firmado en
la localidad suiza de Ginebra en 1864, un año después de la fundación del Comité Internacional de la Cruz Roja, con
el fin de «lograr un pequeño ámbito de acuerdo universal sobre ciertos derechos de las personas en tiempo de
guerra, específicamente, los derechos del cuadro médico a ser considerado neutral a fin de poder tratar a los
heridos».

Convenciones

Las Convenciones de Ginebra han sido:

La Primera Convención de Ginebra, que comprende el Convenio de Ginebra para el mejoramiento de la suerte
que corren los militares heridos en los ejércitos en campaña de 1864, actualizado en las siguientes convenciones de
1906, 1929 y 1949.

La Segunda Convención de Ginebra, que comprende el Convenio de Ginebra para el mejoramiento de la suerte
de los militares heridos, enfermos o náufragos en las fuerzas armadas en el mar de 1906, actualizado en las
siguientes convenciones de 1929 y 1949.

La Tercera Convención de Ginebra, que comprende el Convenio de Ginebra para mejorar la suerte de los heridos
y enfermos de los ejércitos en campaña y el Convenio de Ginebra relativo al trato de los prisioneros de guerra,
ambos de 1929, actualizados en la siguiente convención de 1949.

La Cuarta Convención de Ginebra, que comprende el Convenio de Ginebra relativo a la Protección de Personas
Civiles en Tiempo de Guerra de 1949.

La última modificación de 1949 de los Convenios de Ginebra entró en vigor el 21 de octubre de 1950.

Contenido de las Convenciones

El contenido de las 4 convenciones es el siguiente:

I Convenio de Ginebra para Aliviar la Suerte que Corren los Heridos y Enfermos de las Fuerzas Armadas en
Campaña: Este tratado se aplica en caso de guerra declarada o de cualquier otro conflicto armado que surja entre
las partes contratantes, aunque una de ellas no haya reconocido el estado de guerra. También se aplica en caso de
ocupación total o parcial del territorio, aunque la misma no encontrase resistencia. Todas las personas que no
participen en las hostilidades, incluidos los miembros de las fuerzas armadas que hayan depuesto las armas y las
personas puestas fuera de combate, serán tratadas con humanidad, sin distinción alguna. Se prohíben los atentados
contra la vida y la integridad corporal, la toma de rehenes, los atentados contra la dignidad personal, las condenas
dictadas y las ejecuciones sin previo juicio ante tribunal legítimo y con garantías judiciales. Los heridos y los
enfermos serán recogidos y asistidos. En cada conflicto cada parte podrá tener una Potencia Protectora o un
organismo que ofrezca garantías de imparcialidad, para ocuparse de salvaguardar sus intereses. Los miembros de
las fuerzas armadas que estén heridos o enfermos tienen que ser respetados y protegidos en todas las
circunstancias.

II Convenio de Ginebra para Aliviar la Suerte que Corren los Heridos, los Enfermos y los Náufragos de las
Fuerzas Armadas en el Mar: Este tratado tiene normas similares a las del Primer Convenio pero referidos a los
miembros de las fuerzas armadas navales y a los náufragos. Legisla sobre las garantías de los barcos hospitales y
sobre los transportes sanitarios. Incluye también la protección para el personal médico, sanitario y religioso de los
barcos hospitales y sus tripulaciones.

III Convenio de Ginebra relativo al trato debido a los prisioneros de guerra: Tiene las mismas Disposiciones
Generales de los dos convenios anteriores. Este instrumento internacional protege a los prisioneros de guerra que
están en poder de la potencia enemiga. Es esta la responsable de los mismos y no los individuos o los cuerpos de la
tropa que los hayan capturado. No podrán ser transferidos sino a otra potencia que sea miembro del Convenio. Los
prisioneros de guerra deben ser tratados humanamente en toda circunstancia. Se prohíben los actos u omisiones
que causen la muerte o pongan en peligro la salud de los prisioneros. Los prisioneros tienen derecho al respeto de
la persona y de su honor. El prisionero no está obligado a declarar más que sus datos personales y número de
matrícula y, menos las armas, puede guardar sus objetos personales. Los prisioneros deben ser evacuados, con
humanidad, lejos de la zona de combate para no correr peligro y pueden ser internados en un campamento en tierra
firme y con todas las garantías de higiene y salubridad. El convenio legisla sobre el alojamiento, alimentación y
vestimenta de los prisioneros de guerra y sobre la higiene y asistencia médica. El personal sanitario y religioso que
hubiera sido retenido por la potencia detentará su rango y condición para asistir a los prisioneros, no será
considerado prisionero de guerra y deberá contar con facilidades para prestar la asistencia médica y el auxilio
religioso. Los oficiales prisioneros serán tratados con las consideraciones a su grado y edad.

IV Convenio de Ginebra relativo a la protección debida a las personas civiles en tiempo de guerra: Este tratado se
refiere a la protección general del conjunto de la población de los países en conflicto, sin distinción alguna, contra
ciertos efectos de la guerra. Contiene las mismas disposiciones generales que los otros tres convenios. Las partes
en conflicto podrán, de común acuerdo designar zonas neutralizadas para los heridos y enfermos, combatientes o
no, y para las personas civiles que no participen en las hostilidades. Los heridos y los enfermos, así como los
inválidos y las mujeres encinta serán objeto de protección y de respeto particulares. En ningún caso podrá atacarse
a los hospitales, pero estos deberán abstenerse de efectuar actos perjudiciales para el enemigo. También se
respetaran los traslados de heridos y de enfermos civiles, de los inválidos y de las parturientas.

Protocolos

Las convenciones de 1948 han sido modificadas por tres protocolos de reforma:

Protocolo I (1977.) relativo a la protección de las víctimas de los conflictos armados internacionales.

Protocolo II (1977) relativo a la protección de las víctimas de los conflictos armados sin carácter internacional.

Protocolo III (2005) relativo a la adopción de un emblema distintivo adicional.

Los protocolos entraron en vigor el 7 de diciembre de 1978.

Aplicación

La Convención de Ginebra se aplica en tiempos de guerra o conflicto armado entre aquellos gobiernos que han
ratificado sus términos. Los detalles de aplicabilidad se exponen en los Artículos Comunes 2 y 3. El tema de la
aplicabilidad ha generado alguna controversia. Cuando la Convención de Ginebra se aplica, algunos gobiernos
deben perder cierto grado de su soberanía nacional para cumplir la ley internacional. Estas leyes pueden no ser
enteramente armoniosas con su constitución nacional o con sus valores culturales. A pesar de las ventajas ofrecidas
por las Convenciones a los individuos, las presiones políticas pueden causar que los gobiernos se muestren reacios
a aceptar sus responsabilidades.
Artículo Común 2 relativo a los Conflictos Armados Internacionales

Este artículo establece que las Convenciones de Ginebra se aplican para todos los casos de conflictos entre varios
países, mientras exista al menos uno que haya ratificado la Convención. Principalmente:

La Convención se aplica en todos los casos en los que los países firmantes de la Convención hagan una
declaración de guerra. Este es el sentido original que apareció en 1949.

La Convención se aplica en todos los casos de conflicto internacional, incluso en caso de que no haya una
declaración de guerra. Esto se añadió en 1949 en los casos de acciones policiales.2

La Convención se aplica a la nación signataria incluso si la nación contra la que lucha no ha firmado dicha
Convención, pero esto sólo es válido si la nación contraria "acepta y aplica las provisiones" de los Convenios.

Artículo Común 3 relativo a los Conflictos Armados No Internacionales

Este artículo establece que exista un mínimo de reglas de guerra también aplicada a aquellos conflictos armados
que no tengan carácter internacional. La aplicabilidad de este artículo descansa en la interpretación del término
conflicto armado. Por ejemplo se podrá aplicar en conflictos entre el Gobierno y las fuerzas rebeldes, o entre dos
fuerzas rebeldes, o hacia otros conflictos que tengan todas las características de una guerra pero que estén
contenidos en un único país. Un grupo de individuos atacando una comisaría de policía no será considerado un
conflicto armado sujeto a este artículo, pero sí estará sujeto a las leyes del país.

El combate cuerpo a cuerpo, a veces abreviado por las siglas en inglés HTH o H2H (de hand-to-
hand combat), es un término genérico que normalmente se refiere a la lucha sin armas llevada a cabo desde un
punto de vista militar. La frase «cuerpo a cuerpo» indica combate desarmado pero suele permitir considerar el uso
de algunas armas. Combate cercano es el término común para el combate a corta distancia. Éste puede incluir
métodos letales y no letales.

Combate, lucha, riña, contienda, pendencia, pugna, pelea o reyerta, es un conflicto violento intencional
destinado a establecer su dominio sobre el oponente.

El término "combate" (en combate: komba'kiri) por lo general se refiere a los conflictos armados o bélicos entre las
fuerzas militares en la guerra, mientras que el término más general "lucha" puede referirse a cualquier conflicto
violento entre individuos o naciones.
La violencia del combate puede ser unilateral, mientras que la lucha implica al menos una reacción defensiva. Sin
embargo, los términos suelen utilizarse como sinónimos, junto con el término "pelea". Una lucha a gran escala se
conoce como una batalla.

Un combate puede tener un determinado conjunto de reglas o no estar regulado. Ejemplos de reglas incluyen los
Convenios de Ginebra (que abarca el tratamiento de los soldados en la guerra), la caballería medieval, las normas
del Marqués de Queensberry (que cubren el boxeo) y varias formas de deportes de combate.

El combate en la guerra incluye dos o más organizaciones militares opuestas, por lo general la lucha entre las
naciones en guerra (aunque la guerra de guerrillas y la supresión de la insurgentes pueden quedar fuera de esta
definición). La guerra entra bajo las leyes de la guerra, que rigen sus objetivos y conductas, y protegen los derechos
de los soldados y los no combatientes.

El combate puede ser armado o sin armas. El combate cuerpo a cuerpo es un combate de muy corto alcance, en el
que se ataca al oponente con el cuerpo (dando puñetazos, pateando, estrangulando, etc.) o con a armas blancas
(cuchillos, espadas, bastones, etc.), a diferencia del combate de largo alcance.

Adiestramiento militar: Es la enseñanza o preparación del personal militar para alguna actividad
otécnica; con la finalidad de darle mayor capacitación a dicho personal y que puedan servir para la
defensade la nación. El adiestramiento militar es la actividad más importante para las Fuerzas Armadas,
entiempo de Su finalidad es preparar individuos, unidades, grandes unidades y comandos conjuntos para
ellogro de las capacidades necesarias para el cumplimiento de misiones de guerra y no guerra.
Eladiestramiento debe ser concurrente, realista y referido a normas doctrinarias. Las distintas
fuerzasdedicarán el máximo esfuerzo, tanto en recursos como tiempo, para alcanzar niveles de
adiestramientomediante el planeamiento sistemático de la enseñanza de las diferentes habilidades,
destrezas,conocimientos y aptitudes requeridas, con la debida observancia de medidas de seguridad y el
respeto a ladignidad humana. Aprender haciendo es la filosofía básica del adiestramiento, debiendo
orientarse, con prioridad, al cumplimiento de las misiones de defensa. Es requisito indispensable el
dominio de lastácticas particulares de las fuerzas en todos sus niveles, previo a la conducción de
maniobras conjuntasque integran los niveles táctico, operacional y estratégico militar. Se concederá igual
importancia aladiestramiento de las armas de combate, apoyo de combate y apoyo de servicio de combate
de todas las fuerzas.

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