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EL IMPRESIONISMO

El impresionismo es un estilo pictórico que se origina en Francia, en la segunda mitad del siglo XIX. Se
caracteriza por su persistente experimentación con la iluminación (similar al luminismo).
Los cuadros impresionistas se construyen técnicamente a partir de manchas bastas de colores, las
cuales actúan como puntos de una policromía más amplia, que es la obra en sí. Por ello, al observar
los lienzos es necesario tomar cierta distancia, para que aparezcan las luces sombras y figuras.
Resumiendo, este movimiento se caracteriza por el uso de colores puros sin mezclar («todo color es
relativo a los colores que le rodean»), el hecho de no ocultar la pincelada, y por supuesto darle
protagonismo ante todo a la luz y el color. De esta manera las formas se diluyen imprecisas
dependiendo de la luz a la que están sometidas, y una misma forma cambia dependiendo de la luz
arrojada sobre ellas, dando lugar a una pintura totalmente distinta.

OBRAS REPRESENTATIVAS DEL IMPRESIONISMO


Nombre del autor:
CLAUDE MONET
Nacionalidad: Rue
Laffitte, París, Francia
Tiene un especial
interés por el paisaje
y la incidencia de la
luz a diferentes horas.
Nombre de la obra: «La Gare Saint-
Lazare»

Año de creación: 1877


Técnica Óleo sobre lienzo
Tamaño 75 cm × 104 cm
Localización Museo de Orsay, París.
Consta de 12 lienzos que representan la estación de Saint-Lazare en París, inspirado por el paisaje
moderno de la ciudad de su época.
Escogió el tema del progreso técnico, que por ese entonces estaba muy en boga. Para París, es la
época haussmanniana y, para la estación Saint-Lazare, la del ingeniero Eugène Flachat que realizó el
pont de l'Europe y la ampliación de la estación con vidrio y acero.
Nombre del autor:
EDOUARD MANET

Nacionalidad: París,
Francia
SUS PINTURAS ERAN
símbolo de rebeldía y renovación
Nombre de la obra: ‘Omlympia’
Año de creación: 1863
Técnica Óleo sobre lienzo
Tamaño 90 cm × 130,5 cm
Localización Museo de Orsay, París,
Creó polémica, porque los desnudos en
ese entonces solo se permitían en obras mitológicas.
Explícitamente inspirada en la Venus de Urbino, de Tiziano, el personaje central parece ser una
prostituta parisina, aunque esta identificación también se discute. En lugar de las doncellas que
acompañaban a los desnudos del Cinquecento, entra en escena llevando un ramo de flores una mujer
negra, cuyo rostro, casi imperceptible sobre el fondo oscuro, contrasta con los tonos claros de su
vestimenta oriental.

Nombre del autor: BERTHE MORISOT

Nacionalidad: Bourges, Francia


en la misma lucha que Cassatt; los retratos de
mujeres y representaciones silenciosas de madres
y niños atrapados en momentos cotidianos.

Nombre de la obra: La cuna (Le berceau, en


francés)
Año de creación: 1872

Técnica Óleo sobre tela


Tamaño 56 cm × 46 cm
Localización Museo de Orsay, París, Francia

Representó en esta pintura a su hermana Edna Portillon velando


el sueño de su hija Blanche
La cuna constituye la primera aparición en la obra de Morisot del
tema de la maternidad. El lienzo revela la influencia de Édouard Manet, pintor al que Morisot había conocido en
el Louvre en 1868.La composición del cuadro se basa en la diagonal formada por la mirada de la madre hacia su
hija dormida y la tela de la cuna en que esta duerme.3La diagonal queda reforzada por el brazo izquierdo,
doblado, de la madre, al cual responde el pequeño brazo, también doblado, del bebé

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