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UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA
FACULTAD DE DERECHO
MAESTRÍA EN DERECHO, MODALIDAD INVESTIGATIVA
MEDELLÍN
2012
RESUMEN
1
Aportes de la sociología jurídica, la teoría de los juegos del lenguaje, la
hermenéutica ius-filosófica, la principialística ético-bioética, la deontología
profesional, el derecho legislado y jurisprudencial nacional e internacional a la
seguridad social y a la salud fueron algunos de los insumos que –mediante
metodologías investigativas cualitativas- posibilitaron sustentar teóricamente el
supuesto de que el odontólogo es un operador jurídico del Sistema General de
Seguridad Social en Salud colombiano, llamado a ‘tutelar’ el derecho a la salud en
su componente bucal a la persona del usuario en el escenario clínico-
administrativo a partir de nociones científico-técnicas, ético-bioéticas y jurídicas.
2
Dedicada a los odontólogos que movidos por la excelencia, cotidiana e
inquebrantablemente se esfuerzan por una práctica profesional digna y
centrada en la persona del usuario del Sistema General de Seguridad Social
en Salud.
3
AGRADECIMIENTOS
4
CONTENIDO
pág.
INTRODUCCIÓN 18
PRIMERA PARTE
CAPÍTULO I
ELEMENTOS CONTEXTUALES Y METODOLÓGICOS
pág.
1.1 DEL CONTEXTO DE LA INVESTIGACIÓN 24
1.1.1 Complejidad y especialidad del SGSSS. 25
1.1.2 Los procesos de determinación de la salud en la mira de las 26
políticas públicas.
1.1.3 La profesión odontológica y el SGSSS. 29
1.1.4 Antecedentes investigativos. 30
1.2 METODOLOGÍA DE LA INVESTIGACIÓN 31
1.2.1 Tipo de estudio 32
1.2.2 El método de la investigación 32
1.2.3 Tema 33
1.2.4 Supuesto de la investigación 34
1.2.5 Categorías y dimensiones de análisis. 34
1.2.6 Objetivos de la investigación 36
1.2.6.1 Objetivo general. 36
1.2.6.2 Objetivos específicos 36
1.2.7 Justificación e importancia 37
1.2.8 Recolección, procesamiento y análisis de la información 39
5
1.2.9 Participantes 39
1.2.10 Alcance temporal de la investigación. 40
1.2.11 Momentos metodológicos. 41
1.2.11.1 Momento del diseño. 41
1.2.11.2 Momento de gestión e implementación 41
1.2.11.3 Momento de la comunicación de los resultados 42
1.2.12 Consideraciones éticas de la investigación 42
1.3 MEMORIAS METODOLÓGICAS 44
CAPÍTULO II
EL OPERADOR JURÍDICO Y LA SEGURIDAD SOCIAL: UNA MIRADA DESDE
LOS JUEGOS DEL LENGUAJE
pág.
2.1 LA NOCIÓN SOCIOLÓGICA DE ‘CAMPUS’ 47
2.2 LOS “JUEGOS DEL LENGUAJE” DE LUDWIG WITTGENSTEIN: UN 47
LENTE POTENTE PARA ESTUDIAR AL ODONTÓLOGO COMO
OPERADOR JURÍDICO
2.3 DISQUISICIONES SEMÁNTICAS Y FILOSÓFICAS EN TORNO AL 52
CONCEPTO DE OPERADOR JURÍDICO
2.4 EL OPERADOR JURÍDICO VISTO DESDE EL DERECHO 55
LEGISLADO
2.5 EL OPERADOR JURÍDICO VISTO DESDE EL DERECHO 58
JURISPRUDENCIAL DE LA CORTE CONSTITUCIONAL DE COLOMBIA
2.6 APROXIMACIONES DOCTRINALES AL CONCEPTO DE
OPERADOR JURÍDICO 61
2.7 UNA MIRADA AL OPERADOR JURÍDICO DESDE LOS ESTUDIOS
DE CONCIENCIA JURÍDICA 64
6
2.8 DE LA SEGURIDAD SOCIAL EN SALUD 71
2.8.1. La seguridad social en salud a partir de la herramienta del 71
lenguaje. Una mirada filosófica.
2.8.1.1 Breve recuento histórico sobre el devenir del juego del lenguaje 73
de la seguridad social.
2.8.2 Definición doctrinal de la Seguridad Social 76
2.8.2.1. La fundamentalidad de los derechos sociales prestacionales. 79
Un aporte doctrinal al juego del lenguaje de la seguridad social.
8.2.2.2 Aporte de la doctrina al juego del lenguaje de la seguridad social. 79
2.8.3. La acción de tutela como mecanismo de justiciabilidad del 85
derecho a la seguridad social en salud: el caso de Colombia.
2.9 DERECHO LEGISLADO DE LA SEGURIDAD SOCIAL 88
2.9.1 Derecho legislado internacional de la Seguridad Social 88
2.9.1.1 La Declaración Universal de los Derechos Humanos 88
2.9.1.2 El Convenio 102 sobre la Seguridad Social de la OIT 88
2.9.1.3 El Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y 89
Culturales (PIDESC)
2.9.1.4 La Convención Americana sobre Derechos Humanos 89
2.9.2 Derecho legislado de la Seguridad Social en Colombia 90
2.9.2.1 Derecho Constitucional de la Seguridad Social 90
2.10 DERECHO JURISPRUDENCIAL DE LA SEGURIDAD SOCIAL 92
2.10.1 Derecho jurisprudencial internacional de la Seguridad Social. 92
2.10.2 Derecho jurisprudencial nacional de la Seguridad Social 94
2.10.2.1 Derecho jurisprudencial constitucional de la Seguridad Social 95
en Colombia.
7
CAPÍTULO III
MARCO NORMATIVO Y JURISPRUDENCIAL DEL ODONTÓLOGO-
OPERADOR JURÍDICO DEL SISTEMA GENERAL DE SEGURIDAD SOCIAL EN
SALUD (SGSSS)
pág.
3.1 LA FUNDAMENTALIDAD DE LA SALUD COMO PARTE DE LOS 101
DERECHOS SOCIALES PRESTACIONALES. UN APORTE AL JUEGO
DEL LENGUAJE DE LA SEGURIDAD SOCIAL EN SALUD
3.2 EL CONCEPTO DE SALUD 102
3.2.1 La salud como derecho 104
3.2.1.1 La salud en el derecho legislado internacional. 105
3.2.1.2 La salud en el derecho jurisprudencial internacional 106
3.2.2 El derecho a la salud en el marco del derecho a la seguridad 113
social.
3.2.2.1 La salud en el derecho legislado nacional 114
3.2.2.2 La salud en el derecho jurisprudencial nacional 139
3.2.2.2.1 Definición, sentido y alcance jurisprudencial actual del derecho 141
a la salud en Colombia.
3.3. ÉTICA, BIOÉTICA Y SEGURIDAD SOCIAL EN SALUD 148
3.3.1 Tipología del saber bioético 150
3.4. HERMENÉUTICA Y DERECHO DE LA SEGURIDAD SOCIAL EN 155
SALUD
3.4.1 El comprender 157
3.4.1.1. La tradición y el círculo hermenéutico de la comprensión. 158
3.4.2 La interpretación-integración en la hermenéutica 160
3.4.2.1. Corte Constitucional y su interpretación progresista del derecho 162
a la salud.
3.4.3 La aplicación-creación en la hermenéutica 163
3.4.3.1 La jurisprudencia orientada a valores. 165
8
3.5. MIRADA SOCIO-JURÍDICA DEL SGSSS COLOMBIANO 167
3.5.1 Anotaciones sobre la anomia en el sector salud 168
CAPÍTULO IV
EL ODONTÓLOGO COMO OPERADOR JURÍDICO EN EL SISTEMA GENERAL
DE SEGURIDAD SOCIAL EN SALUD (SGSSS): UN ACERCAMIENTO
TEÓRICO.
pág.
4.1 LA PROFESIÓN ODONTOLÓGICA EN COLOMBIA 171
4.1 .1 Del empirismo al profesionalismo. 172
4.1.2. Profesión odontológica y la salud pública/colectiva. 175
4.1.3 Lo bucal en lo sistémico y lo sistémico en lo bucal. 176
4.1.4 Ética-bioética y odontología 177
4.1.4.1 Componentes de una ética práctica para la odontología. 178
4.1.5 Bioética. 183
4.1.5.1 Bioética y odontología 183
4.1.5.2 Los principios ético-bioéticos. 184
4.1.5.3 La jerarquía de principios y sus normas. 193
4.1.5.4 Procedimiento y metodología de la decisión moral. 194
4.1.5.5 Deontología o ética profesional 201
4.2 REFERENTES CIENTÍFICO-TÉCNICOS, ÉTICO-BIOÉTICOS Y 203
JURÍDICOS DE LA PROFESIÓN ODONTOLÓGICA
4.2.1 El acto odontológico. 205
4.2.1.1 El diagnóstico. 209
4.2.1.2 El pronóstico. 211
4.2.1.3 El tratamiento. 212
4.2.1.4 El pos-tratamiento. 214
9
4.2.2 Otras acciones del campo odontológico. 215
4.2.2.1 La educación para la salud 215
4.2.2.2 La promoción de la salud 215
4.2.2.3 La prevención de la enfermedad 216
4.2.2.3.1 La información al paciente 217
4.2.2.3.2 La obtención del consentimiento informado 218
4.3 DERECHO LEGISLADO EN RELACIÓN CON LA PROFESIÓN 220
ODONTOLÓGICA 220
4.3.1 Antecedentes normativos. 220
4.3.2 Ley 35 de 1989 221
4.3.2.1 Decreto 491 de 1990 222
4.3.3 Constitución Política de Colombia de 1991 223
4.3.4 Ley 1164 de 2007 223
4.4 DERECHO JURISPRUDENCIAL CONSTITUCIONAL 225
RELACIONADO CON LA PROFESIÓN ODONTOLÓGICA
SEGUNDA PARTE
CAPÍTULO V
EL ODONTÓLOGO COMO OPERADOR JURÍDICO: APORTES A UNA TEORÍA.
pág.
5.1 EL ODONTÓLOGO, LOS JUEGOS DEL LENGUAJE, LA 231
CONCIENCIA JURÍDICA Y SGSSS: UN PROLEGÓMENO.
5.2 LA CONCIENCIA JURÍDICA DEL ODONTÓLOGO COMO 232
OPERADOR JURÍDICO
5.3 EL ODONTÓLOGO: UNA PERSONA CUALIFICADA EN LA 234
10
PRESTACIÓN DE SERVICIOS AL INTERIOR DEL SGSSS DEL CUAL
ES OPERADOR JURÍDICO.
5.4 EL ODONTÓLOGO Y EL DERECHO LEGISLADO 235
5.4.1. Algunos deberes del odontólogo contemplados en las leyes del 235
SGSSS.
5.4.1.1. El Código de ética del odontólogo colombiano y su nexo con el 237
SGSSS
5.4.2 Autonomía y autorregulación: principios rectores del odontólogo 239
como operador jurídico.
5.5. EL ODONTÓLOGO Y EL DERECHO JURISPRUDENCIAL. 240
5.5.1 Del criterio de adscripción o no del médico-odontólogo y el 242
principio de confianza legítima.
5.5.2 “Jurisprudencia” de la Superintendencia Nacional en Salud. 244
5.6 EL ACTO ODONTOLÓGICO Y SU JURIDIFICACIÓN 246
5.6.1 Sentido y alcance del derecho a la salud. 247
5.6.1.1 Límites constitucionales a la terapéutica odontológica. 5.6.1.2 248
Límites legales a la terapéutica odontológica. 249
5.6.1.3 Límites reglamentarios a la terapéutica odontológica. 250
5.6.1.4. Límites jurisprudenciales al derecho a la salud y las exclusiones 259
del Plan Obligatorio de Salud odontológico.
5.7 EL ODONTÓLOGO COMO OPERADOR JURÍDICO Y EL 270
PROCESO HERMENÉUTICO
5.7.1 Concreción odontológica del derecho a la salud. 274
5.7.2 Los inicios del acto odontológico. 274
5.7.3 Hacia el diagnóstico, pronóstico y plan de tratamiento. 275
5.7.4 Situaciones hipotéticas derivadas del acto odontológico. 277
5.7.4.1 La consulta de urgencias. 277
5.7.4.2 La consulta programada 278
5.7.4.3 El fomento de la salud y la protección específica. 279
5.7.4.4 La terapéutica en odontología 280
11
5.8 LA COMPRENSIÓN HERMENÉUTICA Y EL PROCEDIMIENTO 285
ÉTICO-BIOÉTICO DE LA DECISIÓN MORAL EN LOS SERVICIOS
SANITARIOS
5.9 EL PROCEDIMIENTO Y LA METODOLOGÍA DE LA DECISIÓN 285
MORAL APLICADOS AL SGSSS
CAPÍTULO VI
EL ODONTÓLOGO COMO OPERADOR JURÍDICO DEL SISTEMA GENERAL
DE SEGURIDAD SOCIAL EN SALUD (SGSSS) COLOMBIANO. LA
EXPERIENCIA DEL TRABAJO INSTITUCIONAL.
pág.
6.1 SOBRE LA VOCACIÓN, EXPERIENCIA Y FORMA DE 293
CONTRATACIÓN DE LOS ODONTÓLOGOS
6.2 LA PERCEPCIÓN DEL ODONTÓLOGO FRENTE A LA PALABRA 296
‘DERECHO’
6.3 INFLUENCIA DEL DERECHO EN LA PROFESIÓN 297
ODONTOLÓGICA
6.4 EL ODONTÓLOGO Y EL DERECHO A LA SALUD 300
6.5 APRENDIZAJE, JUEGOS DEL LENGUAJE Y PRECONCEPTOS 301
SOBRE EL DERECHO A LA SALUD
6.6 CONOCIMIENTO DEL DERECHO A LA SALUD 305
6.7 PROFESIÓN ODONTOLÓGICA Y DERECHO A LA SALUD: UNA 307
RELACIÓN NECESARIA
6.8 VACÍOS COGNITIVOS DEL PLAN OBLIGATORIO DE SALUD 307
ODONTOLÓGICO
6.9 FENÓMENOS JURÍDICOS Y EXTRAJURÍDICOS QUE 310
CONCULCAN EL DERECHO A LA SALUD DE LOS AFILIADOS
12
6.9.1 La falta de técnica jurídica en la redacción de los contenidos del 311
POS odontológico y las arbitrarias interpretaciones institucionales.
6.9.1.1 Limitaciones arbitrarias al POS. 312
6.9.1.2 Contradicción jurídica del POS odontológico según la 313
racionalidad científico-técnica.
6.9.1.3 Imprecisiones. 313
6.9.1.4 Omisiones. 314
6.9.2 Las arbitrarias interpretaciones institucionales EPS-IPS. 315
6.9.3 La negligencia profesional por desconocimiento del derecho 317
legislado y jurisprudencial.
6.10. ASPECTOS CIENTÍFICO-TÉCNICOS Y OPERATIVOS DEL 319
ODONTÓLOGO EN RELACIÓN CON EL SGSSS
6.10.1 La formación científico-técnica. 319
6.10.2 La referencia y contrarreferencia de usuarios. 325
6.11 LA CONFIANZA LEGÍTIMA PARA MOVILIZAR EL COMITÉ 327
TÉCNICO CIENTÍFICO (CTC)
6.12 LOS ODONTÓLOGOS FRENTE A LA DIMENSIÓN ÉTICO- 331
BIOÉTICA DE LA PROFESIÓN
6.13 INFLUENCIA DE LAS EPS-IPS EN EL ODONTÓLOGO COMO 333
OPERADOR JURÍDICO
6.14 LA CONCIENCIA JURÍDICA DEL ODONTÓLOGO COMO 338
OPERADOR JURÍDICO DEL SGSSS
7. CONCLUSIONES 346
BIBLIOGRAFÍA 377
ANEXOS 394
13
ABREVIATURAS Y SIGLAS UTILIZADAS
SS: Siguientes
15
LISTA DE CUADROS, FIGURAS Y ESQUEMAS
CUADROS pág.
CUADRO # 1 Categorías teóricas y dimensiones de análisis tenidas en 229
cuenta en la investigación “El odontólogo como operador jurídico del
SGSSS.”
FIGURAS
FIGURA # 1 Relación entre las categorías y dimensiones de análisis en 35
torno al odontólogo como operador jurídico del SGSSS.
ESQUEMAS
ESQUEMA # 1 Propuesta de procedimiento de decisión moral de Ferrer y 196
Álvarez.
16
LISTA DE ANEXOS
pág.
ANEXO A Caracterización general de los odontólogos entrevistados en el 394
marco de la investigación “El odontólogo como operador jurídico del
SGSSS”.
17
INTRODUCCIÓN
El interés del investigador por asumir este proceso epistémico es el de integrar sus
dos profesiones de base --la odontología y la abogacía-- en relación con el
SGSSS a través de la producción de conocimientos que sean útiles para la labor
docente y en general para contribuir de alguna manera con el repensar la práctica
odontológica en función del derecho fundamental a la salud de la persona del
usuario, la conciencia jurídica del gremio y el ejercicio digno y responsable del
odontólogo.
22
PRIMERA PARTE
CAPÍTULO I
Introducción
La investigación cualitativa que hoy se presenta a la sociedad surge de unas
reflexiones acerca del “ser” y del “quehacer” del odontólogo en el Sistema General
de Seguridad Social en Salud (SGSSS) frente a la persona del usuario a partir del
complejo acto odontológico; acto que implica –consciente o inconscientemente
para todo profesional de la salud- un cotidiano ejercicio hermenéutico con fines
aplicativos y tendientes a “tutelar”, velar, salvaguardar la salud del paciente. Esas
reflexiones llevaron a que se generara cierta inquietud particular del orden
relacional entre categorías vinculantes de algunos elementos del derecho
legislado y jurisprudencial del SGSSS colombiano; de la sociología jurídica, en
especial el concepto de operador jurídico y la teoría versada en la conciencia
jurídica; de la filosofía a través de la principialista y el procedimiento decisional
ético-bioético; y la comprensión como proceso hermenéutico.
23
1.1 DEL CONTEXTO DE LA INVESTIGACIÓN
En torno a la entidad dinámica y compleja de la salud se tejen una serie de
indicadores objetivos y dimensiones subjetivas de orden económico, político,
cultural, biológico y socio-jurídico de directo influjo en los indicadores de calidad de
vida con los que se mensura el cumplimiento de los cometidos Estatales en pos de
su desarrollo1.
1Como parte de las teorías del progreso y bienestar social, varios han sido los índices que buscan
medir la calidad de vida a partir del desarrollo humano logrado por los Estados y la sociedad civil.
Son ejemplos de estos índices el de Necesidades Básicas Insatisfechas (INBI) y el de Desarrollo
Humano (IDH), utilizados para trazar objetivos pertinentes en materia de políticas públicas que
ayuden a superar la pobreza y sus efectos, las limitaciones a las libertades, la falta de
oportunidades políticas, cognitivas y culturales, los problemas laborales, de salud y sanitarios, etc.
Muy a propósito de éstos, las denominadas “metas u objetivos del milenio” hacen parte de un
compromiso político y económico que suscribieron los Estados Miembros de la ONU para luchar
contra la pobreza, el hambre, la desigualdad de género, la morbi-mortalidad de niños y gestantes,
el flagelo del VIH/SIDA, la degradación ambiental y la insolidaridad mundial. Véase: NACIONES
UNIDAS. Objetivos de desarrollo del milenio. [Internet, 22 may. 2010] Disponible en:
http://www.un.org/spanish/millenniumgoals/
24
1.1.1 Complejidad y especialidad del SGSSS.
La elevada complejidad y especialidad del SGSSS, caracterizada grosso modo por
los profundos y sensibles intereses que alberga, los recursos individuales y
colectivos que organiza, promueve y distribuye; la pluralidad de actores que
vincula, la diversidad de funciones que dinamizan las relaciones
interinstitucionales e interpersonales y los fines que persigue; a más de la
vastedad de conocimientos que le soportan (científico-técnicos, económico,
políticos y jurídicos), hacen de este componente del Sistema de Seguridad Social
Integral2 (SSSI) un escenario propicio para que se generen tensiones e incluso
conflictos3.
2 Colombia. Congreso de la República. Ley 100 de 1993 por la cual se crea el sistema de
seguridad social integral y se dictan otras disposiciones.
3Para comprender las tensiones y eventuales conflictos políticos, económicos y ético-sociales que
se suscitan al interior de los Estados que optan por ver la salud como un nicho de mercado,
haciendo peligrar nociones como la de derechos sociales, véase a LAURELL, Asa Cristina. La
Salud: De derecho Social a Mercancía. Publicado en “Nuevas tendencias y alternativas en el
sector salud. Documento en PDF. [En línea]. [Consultado el 25 de marzo de 2011] Disponible en:
http://www.javeriana.edu.co/Facultades/C_Sociales/Profesores/jramirez/PDF/laurell-aludymercancia.pdf
25
interés público4; como un derecho fundamental de la persona humana en el
contexto del actual Estado Social de Derecho5 y como un servicio público a cargo
del Estado6.
9 Naciones Unidas. CDESC. Observación General 14. Veintidosavo período de sesiones, 2000.
[Internet, 18 oct. de 2011] En: <http://daccess-dds-
ny.un.org/doc/UNDOC/GEN/G00/439/37/PDF/G0043937.pdf?OpenElement>
10 Al respecto considérese a BREILH, Jaime. Las tres “S” en la determinación de la vida. 10 tesis
hacia una visión crítica de la determinación social de la vida y de la salud. En Determinação Social
da Saúde e Reforma Sanitária/ Roberto Passos Nogueira (Organizador) – Rio de Janeiro: Cebes,
2010. En este trabajo se recoge sintéticamente buena parte del pensamiento crítico del autor
frente a los modelos de salud pública reducidos al positivismo biomédico o a la “vieja salud
pública”. Breilh sostiene que la determinación compleja de la salud (caracterizada por la
multidimensionalidad, lo cambiante de su movimiento, la jerarquía y conexión, la heterogeneridad
en la identidad y las variaciones dentro del sistema) es subsidiaria de algo más grande: la
determinación social de la vida. De allí que el telos de la salud colectiva sea lograr
transformaciones profundas, sustentables, solidarias y saludables en todos los frentes a favor de la
vida.
11André-Noël Roth D. concibe los programas de política pública como “un instrumento que tiene la
ambición de coordinar e integrar una política pública determinada en un nivel macro o
metapolítico”… como “un conjunto de políticas coherentes entre sí y que se refiere a una
problemática particular” comprendiendo “metas, estrategias y tácticas, los análisis prospectivos y
retrospectivos, la coordinación de las diferentes medidas necesarias, las medidas de
implementación y los mecanismos de evaluación”. ROTH D, André-Noël Políticas Públicas.
Formulación, implementación y evaluación. Bogotá : Ed. Aurora. 2009. pp.46-47/232
27
la participación ingente y consciente de los particulares (promotores, prestadores
de servicios y usuarios) y de la misma comunidad.
12 La ley 1438 de 2011 viene dando trato conceptual de Planes de Beneficios a lo que
originalmente en artículos como el 162, 163 y 165 de la Ley 100 de 1993 persiste -por ausencia de
derogatoria expresa- como Plan Obligatorio de Salud (POS). Esta falta de técnica y sistemática
jurídica del legislador genera confusión, ya que hasta el reciente Acuerdo 029 de 2011 proferido
por la Comisión de Regulación en Salud (CRES) se refiere es a la versión inicial: Plan Obligatorio
de Salud y no a Plan de Beneficios; ello daría opción de aplicar sinonímicamente ambos
conceptos, siendo la opción preferencial dese una perspectiva ‘pro-homine’ aquélla que genera
mayor garantía del derecho a la salud de las personas.
13 A partir de la Ley 1122 de 2007, artículo 33, literal 7, el Plan de Atención Básica consagrado en
la Ley 100 de 1993 pasó a denominarse Plan de Salud Pública de Intervenciones Colectivas,
componente integral del Plan de Salud Territorial, reglamentados por el Ministerio de la Protección
Social a través de la Resolución 425 de 2008 y que debe ser consecuente con el Plan Nacional de
Salud Pública (Decreto 3039 de 2007).
14 En materia de promoción se ofrece educación (individual o colectiva) sobre medidas de salud
oral en los diferentes grupos etarios (Comisión de Regulación en Salud –CRES- Acuerdo 29 de
2011); sin perjuicio de los programas de promoción adelantados por las respectivas secretarías o
direcciones locales de salud dentro del llamado Plan Territorial de salud. En cuanto a las
actividades de prevención en salud oral dentro del SGSSS – cuyas actividades cubren tanto al
régimen contributivo como subsidiado- la norma vigente es la Resolución 412 de 2000, proferida
por el Ministerio de Salud. Véase el Anexo 02 de Protección específica, mejor conocido como
“Norma Técnica para la atención preventiva en salud bucal, en el cual aparecen acciones
específicas como: control y remoción de placa dentobacteriana, aplicación de flúor, aplicación de
sellantes y detartraje supragingival. La detección temprana -cuando de mujeres gestantes se
trata- explicita la prioridad de efectuar el examen de odontología general para las maternas (Anexo
14, numeral 5.2.8.)
28
1.1.3 La profesión odontológica y el SGSSS. Cubrir las necesidades básicas
de salud oral de la población colombiana afiliada al SGSSS exige a la red
institucional de prestadores de servicios de salud contar con un número suficiente
de profesionales idóneos para ello: odontólogos generales y especialistas en los
diferentes niveles de complejidad según disponibilidad de los recursos y
atendiendo principios de administración en salud como el de complementariedad
y/o subsidiariedad15. De esos profesionales, formados en centros de educación
superior reconocidos por el Estado, se predica y espera una elevada vocación de
servicio social y trato humano, además de un especial talento cognitivo-operativo
del orden científico-técnico.
15 Colombia. Congreso de la República. Ley 10 de 1990. Artículo 3º, literales (d) y (e).
16Colombia. Congreso de la República. Leyes 35 de 1989 y 1164 de 2007, Conc. Dec. 491 de
1990.
17 Colombia. Ministerio de la Protección Social. Decreto 1011 de 2006
18 Tutela ha de ser entendida en sentido lato como todas aquellas acciones autónomas o
heterónomas tendientes a preservar o restaurar un bien o derecho individual o colectivo. En
materia de salud propongo –para efectos explicativos- la existencia de tres líneas o frentes
tutelares de ese bien y derecho: las dos primeras líneas serían extrajudiciales y la última línea sería
la tutela judicial como acción constitucional. Sobre la línea o frente tutelar afirmo que es
29
1.1.4 Antecedentes investigativos.
Investigaciones que relacionen a los profesionales de la salud19 en Colombia con
el SGSSS en cuanto a situaciones especiales suelen estar enfocados en los
médicos. El énfasis de tales ejercicios epistémicos ha sido mayor en cuanto a la
formación, el ejercicio de la profesión y el mercado; “muy pocos sobre la
odontología y otras profesiones importantes en el campo de la salud” 20; de hecho,
aquellos que se tienen documentados21 centraron su atención en la
caracterización socioeconómica del odontólogo a partir de relacionar - entre otras
cosas - centros de formación universitaria, mercado laboral, ingresos económicos
y movilidad en la escala social tras la implementación de la Ley 100 de 1993; mas
no se encontraron estudios que analizaran el quehacer profesional del odontólogo
relacionando la racionalidad técnico-científica con la bioética y el derecho de la
seguridad social22.
32
Finalmente, con base en esa teorización, se realizó un estudio exploratorio
complementario sobre la experiencia cotidiana del odontólogo- que trabaja para
IPS con contratos vigentes con EPS del SGSSS- indagando sobre la conciencia
jurídica que éste tiene de ser -valga la redundancia- un operador jurídico.
1.2.3 Tema
Esta investigación pertenece a la línea del derecho a la seguridad social en salud;
derecho que normativa, jurisprudencial y doctrinalmente es actualmente tenido por
fundamental y que así mismo es interdependiente con otros derechos humanos
fundamentales.
En 1993 fue creado el SGSSS por la Ley 100 de 1993 con el propósito de lograr
una cobertura universal, regular el servicio público esencial de salud y crear
condiciones de acceso en toda la población en todos los niveles de atención. El
SGSSS cuenta con un POS/Plan de Beneficios odontológico limitado, cuya
prestación debe ser garantizada por las Empresas Promotoras de Salud y las
Instituciones Prestadoras de Servicios de salud dentro de los términos legales y
reglamentarios, procurándose con ello la concreción del derecho a la salud de las
personas en relación con el componente bucal.
La salud bucal hace parte de las prioridades en salud pública25 del Estado
Colombiano. La odontología como disciplina científico-técnica está avocada a
contribuir integralmente con el mejoramiento de la calidad de vida individual y
34
profesión odontológica dio cuenta de las subcategorías: racionalidad científico-
técnica y acto odontológico; y finalmente la experiencia del odontólogo como
operador jurídico en las IPS del SGSSS pretendió cubrir en forma exploratoria la
percepción que al respecto tienen los profesionales vinculados a los sectores
público y privado.
35
Las dimensiones de análisis parten de una reflexión filosófica basada en la teoría
de los juegos del lenguaje de Wittgenstein y la hermenéutica de la comprensión de
Gadamer y otros; el acto odontológico, los principios bioéticos de autonomía,
beneficencia, no-maleficencia y justicia; y el procedimiento y metodología de la
decisión del acto odontológico; el derecho legislado nacional e internacional en
seguridad social, el derecho legislado nacional e internacional del derecho
fundamental a la salud --destacando las pautas interpretativas de la Corte
Constitucional correspondientes al acceso de tecnologías en salud no POS, los
principios ‘pro homine’ y de confianza legítima--; y, finalmente, los aportes
realizados por los odontólogos entrevistados como sujetos participantes. Para una
mirada esquemática más expedita y detallada de lo expuesto en este título,
sírvase remitirse al cuadro sintético al final del capítulo IV.
36
1.2.6.2.3 Explorar la figura del odontólogo general como operador jurídico del
SGSSS colombiano, considerando sus experiencias institucionales en las IPS
privadas y públicas en la ciudad de Medellín (2011).
31 Flórez Acosta, Jorge Hernán; Atehortúa Becerra, Sara Catalina; Arenas Mejía, Alba Cristina. Las
condiciones laborales de los profesionales de la salud a partir de la Ley 100 de 1993: evolución y
un estudio de caso para Medellín.Revista Gerencia y Políticas de Salud, vol. 8, núm. 16, enero-
junio, 2009, pp. 107-131. Pontificia Universidad Javeriana. Colombia. Disponible en:
http://redalyc.uaemex.mx/src/inicio/ArtPdfRed.jsp?iCve=54514071007
32
RESTREPO ZEA, Jairo Humberto; ATEHORTUA BECERRA, Sara Catalina; MEJIA MEJIA,
Aurelio. "Cobertura de la seguridad social y acceso a servicios de salud en Medellín, 2006-2007"
En: Colombia. 2008. Evento: Primer Congreso de la Asociación Colombiana de Economía de la
Salud, ACOES Ponencia:Cobertura de la seguridad social y acceso a servicios de salud en
Medellín, 2006-2007; Ministerio de la Protección Social. Certificado de cobertura Año 1998-2009.
Disponible en: http://www.minproteccionsocial.gov.co/buscar/Results.aspx?k=Cobertura&start1=1
38
odontología en pos de formar un odontólogo con mayores competencias
hermenéuticas.
1.2.9 Participantes
El criterio de selección fue por conveniencia buscando lograr captar la información
suficiente para considerar saturadas las preguntas emergentes desde el marco
categorial y las dimensiones de análisis. Parte de esa conveniencia implicó
39
considerar la disponibilidad y asequibilidad de los odontólogos entrevistados, que
representasen -en conjunto- diferentes IPS y EPS.
Se estableció que debían ser dos (2) el número mínimo de años trabajados por los
profesionales para las IPS, garantizando un margen de experiencia con la
normatividad y las dinámicas de funcionamiento del componente asistencial del
SGSSS.
40
1.2.11 Momentos metodológicos.
La investigación pasó por tres momentos metodológicos a saber:
41
Durante la fase final del momento de gestión e implementación se sistematizó en
un cuadro de Excel la información de las entrevistas concedidas por los sujetos
participantes analizándose las respuestas a partir de criterios tales como
coincidencias, pertinencia, relevancia y conducencia (noviembre-diciembre de
2011). Una vez reunida toda la información se procedió hermenéuticamente al
análisis, interpretación-integración de la información teórico-práctica dando lugar a
la síntesis dialéctica que se recoge en los dos últimos capítulos.
Se explicó a cada persona que participó que los beneficios percibidos por su
participación eran más del orden moral por su contribución con el conocimiento
social; se explicitó la posibilidad de retirar el consentimiento a seguir participando
(desistimiento) de la investigación cuando a bien lo tuviere. Igualmente el
consentimiento informado y la gestión documental de la información de los
participantes han tenido un manejo confidencial.
33Las garantías estipuladas se basan en las “orientaciones éticas” en: GALEANO MARÍN, María E.
Diseño de proyectos en la investigación cualitativa. Medellín : Ed. Fondo Editorial Universidad
EAFIT, 2008. pp.74-76
43
1.3 MEMORIAS METODOLÓGICAS
El devenir de esta investigación desde su diseño hasta su culminación tuvo
momentos de incertidumbre o de acomodamientos epistémicos. El tema
concebido en el anteproyecto, al inicio de la maestría, estaba enfocado a analizar
cuáles eran las principales situaciones problemáticas y conflictos vivenciados por
los profesionales de la salud – médicos y odontólogos generales - como
operadores jurídicos y coadministradores de recursos del SGSSS. Nótese lo
ambicioso y amplio del objeto de estudio a abordar en aquél entonces, lo que,
desde luego, implicó una serie de evaluaciones, renuncias y replanteamientos en
el seno de la pequeña comunidad académica propiciada por la Universidad de
Antioquia en la que compañeros de estudio, profesores, investigadores, asesores
metodológicos, las dos directoras de tesis en su momento y el investigador
retroalimentaban positiva y constantemente las propuestas y avances de los
candidatos, socializados en los coloquios o a través de las asesorías
personalizadas. La delimitación del tema y del ámbito personal de cobertura de la
investigación al odontólogo como operador jurídico fue fruto de esa enriquecedora
interacción formativa.
45
CAPÍTULO II
Introducción
En este, el primero de tres capítulos de marco conceptual, el lector encontrará
parte de los conceptos generales de la investigación “EL ODONTÓLOGO COMO
OPERADOR JURÍDICO EN EL SGSSS COLOMBIANO”. Tales conceptos
guardan correspondencia con las categorías y unidades de análisis
preestablecidas, destacándose entre éstos los siguientes: campus, juegos y
herramientas del lenguaje de la seguridad social en salud, operador jurídico,
fundamentalidad de los derechos prestacionales, derecho legislado y
jurisprudencial internacional y nacional de la seguridad social.
El orden establecido, ha sido una discrecionalidad del autor quien tiene la humilde
pretensión de favorecer la mejor comprensión del tema por parte del lector a partir
de una secuencia en “espiral” que va de la particularidad a la generalidad y luego
de la generalidad a la particularidad discursiva y así sucesivamente en ilación con
los sucesivos capítulos de la obra.
46
2.1 LA NOCIÓN SOCIOLÓGICA DE ‘CAMPUS’
Pierre Bourdieu concibe el ‘campus’ o ‘campo’34 como “un espacio estructurado de
posiciones cuyo funcionamiento depende, entre otras cosas, del ‘habitus’35 de las
personas que hacen parte de éste, y cuyas propiedades dependen, a su vez, de
su posición en estos espacios, y que pueden analizarse en forma independiente
de las características de sus ocupantes”36. El campo es a su vez un espacio de
conflicto y competición, un escenario de juego, en el que los actores que
interactúan sobre él y dentro de él miden fuerzas permanentemente generando
todo un ‘campo de poder’, en procura de establecer monopolios de ‘capital’ y
jerarquías, como actos propios de autoridad o influenciando a la autoridad para
mantener el estado de las cosas o inducir el cambio.
34BOURDIEU, Pierre. La distinción. Criterios y bases sociales del gusto. 2ª ed. Madrid Ed.
Taurus, 2000. 597 P.
35‘Habitus’ es aquél sistema de disposiciones adquiridas por medio del aprendizaje explícito o
implícito que funciona como un sistema de esquemas generadores: “es a la vez un oficio, un
cúmulo de técnicas, de referencias, un conjunto de creencias”. Ibíd. p. 63 y ss. El ‘hábitus’ da
cuenta de la lógica real de las prácticas que se desarrollan al interior del campus. (En:
BOURDIEU, Pierre; TEUBNER, Gunter. La fuerza del derecho. Bogotá : Ed. Siglo del
Hombre/Uniandes. Facultad de Derecho. Universidad de los Andes, 2000. pp 155-189)
36 BURDIEU, P. 2000, Op cit. p. 25
47
ha dotado de significados, porque -en últimas- “el lenguaje es el vehículo del
pensamiento”37. Para toda persona con pretensión de interactuar y contribuir a la
transformación del mundo le es imprescindible “operar con palabras”38 y esto ha
acaecido desde que el hombre ha desarrollado su dimensión comunicativa,
incorporando “juegos del lenguaje”, que van desde los más incipientes (“juegos del
lenguaje primitivo”) hasta los más sofisticados como los juegos del lenguaje
jurídico, ético-bioético y científico-técnico; partes de un todo formado por el
lenguaje y las acciones con las que está entretejido, llamado también “juego del
lenguaje”39. Todos los juegos del lenguaje en sus diferentes niveles posibilitan
-desde su esencia lógica- al hilvanar pensamientos, establecer el correlato o la
figura del mundo y su orden a partir de proposiciones efectuadas con sentido
sobre ese mundo40.
El “juego del lenguaje” requiere de reglas para poder comprender el mundo que
se describe41 haciendo accesibles los esencialismos conceptuales de la
filosofía42, muchas veces metafísicos a un empleo cotidiano 43. Esas reglas
tienen que ver con los niveles de conciencia en el uso de las palabras al
Muy a propósito del uso pragmático del lenguaje en Wittgenstein, en relación con
la presente investigación, es el prever que el conocimiento del uso del lenguaje
está orientado hacia fines determinados, a establecer una serie de órdenes que
en parte exigen “la reforma del lenguaje” “para determinadas finalidades
prácticas, el mejoramiento de nuestra terminología para evitar malentendidos en el
uso práctico, es perfectamente posible”46.
44 Ibíd. p. 43
45 Ibíd. p. 44
46 Ibíd.
47 Ibíd. p. 49
48 Ibíd. p.189
49
el mero conocimiento técnico hacia la capacidad de hacer inferencias no sólo de las
palabras, sino también de las acciones que llevan a conclusiones justificadas49 y por
ende conducen a juicios correctos50.
49 Ibíd. p. 117
50 Ibíd. p. 189
51 Ibíd. p. 56
52 Ibíd. p. 78
53 Ibíd. p. 54
54 La presuposición en Wittgenstein es un equivalente al prejuicio en H.G. GADAMER y al
preconcepto de K. LARENZ
50
forman el objeto de la denominada hermenéutica constituyen un fenómeno del
lenguaje”55.
Wittgenstein aclara que seguir las reglas en todo juego del lenguaje puede implicar
la necesidad de interpretarlas estableciendo conexiones para hacer coherente las
acciones del jugador que pretende guiarse por aquéllas. Empero, asegura que
“las interpretaciones solas no determinan el significado”56. Esas reglas o
“indicador de caminos” requieren de “un uso estable, una costumbre” lo que en
Gadamer se asemejaría a la historia efectual. Concluye Wittgenstein que “[s]eguir
una regla, hacer un informe, dar una orden, jugar una partida de ajedrez son
costumbres (usos, instituciones)”.
55 GADAMER, Hans George. VERDAD Y MÉTODO II. Salamanca : Sígueme, 2004. p. 181.
56 WITTGENSTEIN. Op cit. p. 72
57 Ibíd. p. 152
58 Ibíd. p. 105
51
fundamentalidad de los derechos sociales en tanto que en las segundas se
restringe al máximo dicha posibilidad.
El juego del lenguaje del derecho de la seguridad social en salud y del mismo
ejercicio profesional de la odontología debe ser comprendido por quienes están
inmersos en ese medio y más aún por quienes tienen el deber de garantizar el
acceso a los servicios de salud de los usuarios. Para cualquier operador jurídico,
la descripción del “mundo” de la Seguridad Social, demanda el uso adecuado del
lenguaje en aras de la comprensión del derecho, los deberes y las garantías que
de éste se derivan.
62 Contrario al entendimiento del operador jurídico en función a sus productos jurídicos, desde la
sociología jurídica y especialmente desde los denominados estudios de conciencia jurídica
centrados en la valoración de las actitudes de las personas frente al derecho, se ha demostrado
que los americanos “evalúan sus experiencias jurídicas en términos de los procesos y formas de
interacción más que de los productos”. (SILBEY, Susan. Introducción al debate sobre cultura
jurídica y conciencia jurídica. [Internet] En: derechovirtual. com Año 1, #3, Noviembre de 2006-
enero de 2007. p. 5. Disponible en < http://www.derechovirtual.com/index.php?id=85>
En la presente investigación, desde una perspectiva socio-jurídica y antiformalista, se entenderá
en sentido lato que operador jurídico es cualquier persona que al encontrarse influenciada,
cuestionada, facultada y limitada en su autonomía por el derecho a través de prohibiciones y
mandatos; desde sus posibilidades e iniciativa conoce, interpreta, integra y aplica ese derecho.
63 SARAT, Austin (1990). “El derecho está en todas partes”: el poder, la resistencia y la conciencia
jurídica de los pobres que viven de la asistencia social. Compilador: GARCÍA VILLEGAS, Mauricio.
SOCIOLOGÍA JURÍDICA. Bogotá : Universidad Nacional de Colombia. Facultad de derecho y
ciencias políticas y sociales. pp. 219-266.
64 LÓPEZ MEDINA, Diego. Teoría impura del derecho: la transformación̤ de la cultura jurídica
latinoamericana. Bogotá: Legis. Universidad de los Andes; Universidad Nacional de Colombia,
2004. pp. 431-432.
54
2.4 EL OPERADOR JURÍDICO VISTO DESDE EL DERECHO LEGISLADO
La Constitución Política de Colombia es la fuente normativa que direcciona los
derechos y deberes de los coasociados en general y las funciones de los
servidores públicos en particular; unos y otros operadores jurídicos se encuentran
en permanente interrelación con el conjunto de normas, planes, programas,
proyectos, acciones, instituciones, actores y recursos que viabilizan al Estado
como forma de organización social.
El modelo de Estado Social de Derecho por el cual abogó la Carta del 91, declara
en el preámbulo la aspiración de la organización política en la que se destaca el
“asegurar a sus integrantes la vida, la convivencia, el trabajo, la justicia, la
igualdad, el conocimiento, la libertad y la paz, dentro de un marco jurídico,
democrático y participativo que garantice un orden político, económico y social
justo”…; es decir, que tales integrantes –nacionales y extranjeros- cuyo deber
basilar es acatar la constitución, las leyes, y respetar y obedecer a las
autoridades, deben sinérgicamente coadyuvar con éstas a la consecución de tales
aspiraciones, fines y cometidos; aplicando preferentemente –en casos de
incompatibilidades entre la Constitución y la Ley- las disposiciones de la Norma de
Normas.
66Para mejor comprender la teoría del acto o negocio jurídico, véase a Ospina Fernández y Ospina
Acosta en: Teoría general del contrato y del negocio jurídico. 6ª ed., Ed. Temis. Bogotá-Colombia.
pp. 17-37.
67Constitución Política. Op cit. p. 6.
68 El texto constitucional es claro y no requiere de métodos interpretativos diferentes a la exégesis:
“Toda persona tendrá acción de tutela para reclamar ante los jueces… por sí misma o por quien
actúe a su nombre, la protección inmediata de sus derechos constitucionales fundamentales” (Ibíd.
Artículo 86) esa disposición normativa faculta a “toda persona”, por el sólo hecho de serlo a salir a
la defensa de sus derechos fundamentales, requiriendo para ello de un proceso de “operatividad”
del derecho con ciertos niveles de conciencia jurídica; es decir, reconocer que se tienen unos
derechos, que la Constitución Política los tiene por fundamentales, que de ser vulnerados o
amenazados existe un mecanismo tendiente al amparo de esos derechos, que se puede instaurar
la acción sin necesidad de abogado y prescindiendo de formalidades en su presentación.
(Colombia. Constitución Política. Art. 86)
69 Colombia. Corte Constitucional. SentensiasT-409-98 M.P. José Gregorio Hernández.
70 Constitución Política de Colombia. Op cit. Artículo 14
71 Ibíd. Artículo 23
72 Ibíd. Artículo 26, concordado con el artículo 49; ya que se entiende que el Estado delega la
atención de la salud en los particulares (profesionales y técnicos del área de la salud) como
también lo hace con las entidades públicas y privadas.
56
derecho de acción que posibilita la actuación sin apoderado judicial73 cuando así
está reglado, constituyen ejemplos de usos aplicativos del derecho por parte de la
ciudadanía como operadores jurídicos.
73 El Decreto 196 de 1971 o Estatuto de la abogacía, hoy derogado parcialmente por la Ley 1123
de 2007, mantiene vigente algunas excepciones por las cuales una persona con capacidad legal
puede litigar en causa propia sin ostentar la calidad de abogado (artículo 25), tales como los
derechos de petición y las acciones públicas consagradas por la Constitución y la Ley y los
procesos de mínima cuantía (artículo 28) por mencionar algunas de tales excepciones. En ese
sentido, la deontología de médicos y odontólogos autoriza -en caso de procesos éticos y
disciplinarios- a que los profesionales procesados asuman su propia defensa sin que sea óbice ser
asistidos por abogados. (Ley 23 de 1981, Artículo 77; Ley 35 de 1989, Artículo 73).
74 Colombia. Congreso de la República. Ley 100 de 1993, Artículo 156, literales g y h,
concordados con la Ley 1438 de 2011, artículo 3º, numerales 3.10 y 3.12.
75 Véanse las amplias competencias y funciones –incluso jurisdiccionales- de la Superintendencia
Nacional de Salud, otorgadas principalmente por la Ley 100 de 1993, la Ley 1122 de 2007,
artículos 38 y siguientes; reglamentada por el Decreto 1018 de 2007 y recientemente modificada
por la Ley 1438, artículo 119.
76Con respecto a la autorregulación y autonomía de médicos y odontólogos, se tienen los artículos
104 y 105 de la Ley 1438 de 2011.
57
Los anteriores ejemplos sustentados en el derecho legislado pretenden ser
ilustrativos y justificatorios de la tesis de un operador jurídico en sentido amplio,
con el pretendido énfasis del profesional de la salud -en especial para este
estudio- del odontólogo que trabaja al interior del SGSSS.
77 Existen sentencias de este tipo centradas en aspectos constitucionales ligados al derecho penal,
tributario, civil, administrativo. Algunas de ellas hacen referencia a los presuntos yerros de los
operadores jurídicos judiciales que dan lugar a las vías de hecho. Algunos ejemplos de estas
sentencias son: Sentencias: C-645 de 2000, M.P. Alejandro Martínez Caballero; C-805 de 2000,
M.P. Carlos Gavira Díaz; T-299-08, M.P. Jaime Córdoba Triviño.
78 Cuando la Corte Constitucional se refiere en sentido amplio a los Operadores jurídicos, lo hace
dando a entender que frente un caso de derecho no sólo quienes tienen competencia
jurisdiccional, o los servidores públicos en cumplimento de sus labores administrativas tendrían tal
calidad, porque otras instituciones, nacionales o internacionales, públicas o privadas que tengan
interés en el asunto, eventualmente pueden fungir como operadores jurídicos dentro de los límites
de sus competencias.
79 Una norma jurídica desde el sistema formal de fuentes va desde la Constitución hasta el contrato
informal; éste último bien puede ser elaborado por legos en materia de derecho. Frente a la teoría
del acto jurídico propio del operador del derecho –“no sólo magistrados y juristas”- y el principio de
la buena fe constitucional, considérese la sentencia T-618-00 M.P. Alejandro Martínez Caballero.
58
argumentativa, en el caso del sistema pensional, es de rescatar las razones que
sustentaron la decisión de la Corte (‘ratio decidendi’) con respecto a reconocer la
eficacia real de los derechos de las personas a la seguridad social en pensiones,
planteando:
la obligación para los operadores jurídicos (entre ellos los funcionarios
que tramitan las solicitudes de pensiones en el I.S.S.) de superar las
simples normas reglamentarias, para poner especial cuidado en los
principios constitucionales y ponderar y reflexionar sobre los valores
jurídicos y los derechos fundamentales constitucionales (T-715/99, M.P.
Alejandro Martínez Caballero). O sea que no solamente se deben leer
los reglamentos del I.S.S. sino que hay que aplicar de manera
preferencial la Constitución, las leyes de la República e interpretarlas
respetándose los derechos, los principios y los valores. Por
consiguiente, las Resoluciones del I.S.S. que sólo tienen en cuenta la
reglamentación interna de la Institución y la Ley 100 de 1993, carecen
de motivación suficiente porque pasan por alto la Constitución Política y
otras leyes que pueden y generalmente son necesarias para resolver
cada caso concreto81. (Subrayado fuera de texto).
Y enfatizó:
[L]a procedibilidad de la tutela en estas materias decaerá en la medida
en que esta Corporación fije criterios claros de interpretación del
“Manual de Actividades, Intervenciones y Procedimientos del POS en el
SGSSS”, pues es de esperarse que, de manera paulatina, los
operadores jurídicos –E.P.S., I.P.S., etc.-, ajusten su conducta a los
criterios de unificación que adopte la Corte en la materia84. (Subrayado
fuera de texto).
Cabe concluir que los operadores jurídicos que desarrollan el llamado régimen de
protección social de los indígenas involucra a actores tan diversos como el
Gobierno Nacional en cabeza del Ministerio de Salud y Protección Social; la
Superintendencia Nacional de Salud, las EPS e IPS indígenas, los usuarios y
hasta los profesionales de la salud que prestan sus servicios en tal régimen.
Desde la perspectiva weberiana del influjo del derecho en el cambio social a partir
de factores tales como la educación, las instituciones y la modernización del
sistema jurídico sería dable afirmar que la labor consciente y permanente del
87 Ibíd.
88 WEBER, Max. Economía y sociedad: Esbozo de sociología comprensiva. FCE. México. 1996.
p. 599. [Internet, 14 marz. 2010] Disponible en:
<http://books.google.com.co/books?id=i70Lx1RU8AsC&dq=Bibliograf%C3%ADa+Econom%C3%A
Da+y+sociedad:+esbozo+de+sociolog%C3%ADa+comprensiva&hl=es&source=gbs_navlinks_s >
61
operador jurídico puede generar cambio social, dado que éste resulta ser un
eslabón fundamental en la racionalización del derecho.
Kaupen, siguiendo los vaticinios de Sant Simon de que cada vez se requieren
menos hombres de leyes y más hombres de técnica e industria, afirmó que
“la moderna sociedad industrial se manifiesta un proceso de
racionalización por el que tanto las normas sociales como las normas
jurídicas se transforman en normas instrumentales según el modelo
medio-fin. Proceso que será controlado, dice, por informaciones
técnicas bastante más que por decisiones autoritarias, y proceso en que
los agentes de control serán cada vez más técnicos especialistas y cada
vez menos jueces y juristas ligados a los principios de autonomía y
conformidad a la ley.”90
91 CHARRY, Juan Manuel, citado por TOBO RODRÍGUEZ, Javier. La Corte Constitucional y el
control de constitucionalidad en Colombia. Bogotá : Ediciones Jurídicas Gustavo Ibáñez. 1999.
p.177
92 “La Constitución es norma de normas. En todo caso de incompatibilidad entre la Constitución y
la Ley u otra norma jurídica, se aplicarán las disposiciones constitucionales.
Es deber de los nacionales y de los extranjeros en Colombia acatar la Constitución y las Leyes, y
respetar y obedecer a las autoridades.” (Colombia. Constitución Política de Colombia. Artículo 4)
63
igualdad “por ser estos los valores éticos, morales y jurídicos de mayor relevancia
en el Estado Social de Derecho democrático” 93; agregando que en materia de
movilidad entre EPS, la Ley 100 de 1993 (artículo 153) y la otrora vigente
Resolución 5261 de 1994 (artículo 22) “orientan al operador jurídico respecto a los
elementos cualitativos que estructuran una atención en salud de óptima calidad. Si
en cada caso que el operador jurídico examine, encuentra que la atención en
salud que se le viene brindando a la persona no cumple con alguno de tales
elementos cualitativos, se configura una deficiente calidad del servicio”94.
97 Ibíd. p.39
98 Ibíd. p.39
99BOURDIEU, Pierre. La fuerza del derecho. Bogotá : Universidad de los Andes-Facultad de
Derecho; Instituto Pensar; Siglo del Hombre, 2000. pp. 160-189.
65
los hábitos de vida, las creencias y las pautas de conducta de sus coasociados100;
entendiendo el derecho como una manifestación de poder determinado y
determinante.
Los ámbitos donde pueden llevarse a cabo los estudios de conciencia jurídica se
caracterizan por su inespecificidad, si bien puede ser el escenario de los diferentes
órganos e instituciones judiciales; también son válidos los escenarios de trabajo de
los profesionales del derecho, de los servidores públicos103; en suma, el escenario
de los operadores jurídicos en sentido amplio. De allí que los estudios de
conciencia jurídica suelan ser usados para “resaltar analíticamente ciertos modos
en los que las instituciones jurídicas formales y las relaciones sociales diarias se
cruzan y comparten recursos cognitivos”104 en cada nicho social en el que el
derecho extiende su cobertura: familia, colegio, trabajo, el espacio público, los
66
centros de prestación de servicios públicos y almacenes son – por citar ejemplos-
algunos de esos ámbitos.
Convencionalmente, el investigador propone un sistema clasificatorio por niveles en cuanto a las
personas (naturales, jurídicas o ambas) que se ven inmersas en tensiones o conflictos dentro del
SGSSS a partir de los derechos y obligaciones en juego y las funciones que les corresponde
cumplir. Los órdenes de las relaciones pueden ser: intersubjetivos (personas naturales entre sí),
interinstitucional (IPS-EPS-ESTADO) y mixto (PACIENTE-MÉDICO-IPS-EPS-ESTADO). El
gradiente de las tensiones o conflictos oscilaría de leve a grave según los daños, costos
biopsicosociales y económicos, las implicaciones jurídico-procesales para la resolución de los
conflictos y las eventuales sanciones a que hubiere lugar.
105Spinelli, siguiendo a Bourideu, prefiere referirse a ‘campo’ en lugar de ‘sistema de salud’.
SPINELLI, Hugo. Las dimensiones del campo de la salud en Argentina. Revista de Salud
Colectiva. Buenos Aires, 6(3):275-293, septiembre-diciembre, 2010.
106 EWICK, Patricia y SILBEY, Susan S. Op cit. Págs. 273-274.
67
Los Jueces constitucionales de tutela o los pertenecientes a la especialidad
jurisdiccional Laboral y de Seguridad Social, los funcionarios públicos que fungen
como representantes del gobierno en sus funciones de dirección, vigilancia y
control en los diversos órdenes territoriales; las agencias aseguradoras y las
prestadoras de servicios de salud, los usuarios y los profesionales de la salud
fungen como verdaderos operadores jurídicos en cumplimiento de sus
competencias o en defensa de sus derechos e intereses constitucionales y
legales107. En el estudio de conciencia jurídica adelantado por Austin Sarat 108en
107 Con respecto a la particularización de la defensa de intereses de cada uno de los actores del
Sistema General de Seguridad Social en Salud, es frecuente encontrar análisis como el siguiente:
“… las tensiones que se dan entre los actores: Entes de Dirección vs Aseguradores, Aseguradores
vs Prestadores, Instituciones Prestadoras vs Servidores de la Salud, Profesionales vs Pacientes.
Estas tensiones están vinculadas con las relaciones contractuales de prestación de servicios, las
facturas, las glosas y los intereses encontrados, dado que cada uno trabaja en función de lograr
sus propias metas sin considerar cuáles son las de los demás. En este escenario, las decisiones y
la calidad en la atención en salud se tornan más complejas.” (MOLINA MARÍN, G. Dilemas en las
decisiones en la atención en salud: ética, derechos y deberes constitucionales frente a la
rentabilidad financiera. Bogotá : Universidad de Antioquia, 2009.
108 Op cit. SARAT, Austin (1990). p. 219-266.
109 Ibíd. p 220.
110Es posible, a través de estudios de conciencia jurídica, lograr aproximaciones comprensivas al
fenómeno de los profesionales de la salud como operadores jurídicos del SGSS, así lo expresa
Susan Silbey: “[…]el estudio de la conciencia jurídica rastrea los modos en que individuos
68
ya que conocer, interpretar, integrar y aplicar el marco normativo (derecho
legislado y jurisprudencial) que resulte pertinente, posibilitando garantizar de mejor
forma el derecho a la salud de la persona del usuario, poniendo en contexto y
función los principios bioéticos basilares como la autonomía, la beneficencia, la
no-maleficencia, la justicia, por citar algunos; junto con la metodología para la
toma de decisiones morales en todo acto médico.
Los juegos del lenguaje de la seguridad social y de la salud han requerido de todo
un proceso para tener el posicionamiento y la aceptación que hoy tiene en los
modelos de Estado Social de Derecho; es decir, son “herramientas para hacer
cosas que no había sido posible proponerse antes de que se dispusiese de esas
herramientas”124. A continuación, siguiendo esa línea reflexiva, se hará una breve
referencia histórica con matices sociales, políticos y jurídicos sobre lo que ha sido
el devenir del juego del lenguaje de la seguridad social y acto seguido hacer lo
propio con la salud como entidades ontológicas complejas.
2.8.1.1 Breve recuento histórico sobre el devenir del juego del lenguaje de la
seguridad social.
Como lo reseña Wittgenstein, la creación de un nuevo lenguaje parte de
reinterpretar el mundo, concibiendo en ese acto complejo un “nuevo objeto” que
describir con base en presuposiciones implícitas, de preguntas o formulaciones
tipo problema125. Ello no suele ser tarea pacífica. Inicialmente, los juegos del
lenguaje pretenden legitimarse a través de proposiciones con pretensiones de
ser verdaderas; empero, si no se cuenta con las condiciones que hagan
propicio su establecimiento y posterior desarrollo, éstas sólo llegan a ser -en
términos de Rorty- meras “Metáforas”.
126 Simón Bolívar ante el Congreso de Angostura, el 15 de Febrero de 1819. Disponible en:
<http://es.wikisource.org/wiki/Discurso_de_Sim%C3%B3n_Bol%C3%ADvar_ante_el_Congreso_de
_Angostura>
127 Richard Rorty, explica que un enunciado que es proferido sin estar inserto en el juego del
lenguaje no puede ser ni verdadero ni falso, empero, con el tiempo, “puede ser repetido, acogido
con entusiasmo, asociado con otros. Entonces requerirá un uso habitual, un lugar conocido en el
juego del lenguaje. Con ello habrá dejado de ser una metáfora, o, si se quiere, se habrá convertido
en lo que la mayoría de los enunciados de nuestro lenguaje son: una metáfora muerta. Será,
precisamente, un enunciado más --literalmente verdadero o literalmente falso-- del lenguaje”; de
allí, que la falta de desarrollo político, económico, social y cultural de las palabras “Seguridad
Social” al momento de ser proferidas por Bolívar, para ese momento resultasen ‘inciertas’. Véase a:
RORTY, Richard. Contingencia, ironía y solidaridad. Paidós. Barcelona. 1991. p.38
128 Ibíd. RORTY, Richard. p.38
74
2.8.1.1.2. Ejemplos de ‘corpus’ que han posicionado históricamente el
lenguaje de la seguridad social.
Algunos ejemplos históricos de Declaraciones y prescripciones normativas que
han servido para confeccionar y posicionar la Seguridad Social - y con ella el
derecho a la salud como herramientas del lenguaje contemporáneo - lo
constituyen la Carta de Amiens de 1906, con la cual los trabajadores franceses
reivindicarían la seguridad social como derecho; la Constitución Mexicana de 1917
que en su artículo 123 - numeral XI, introdujo por vez primera en un texto de esa
talla la composición gramatical –seguridad social- cada vez más llena de
contenido: riesgos profesionales, licencia de maternidad, asistencia médica,
recreación y vivienda. En 1927 se creó la Asociación Internacional de la
Seguridad Social (AISS) auspiciada por la OIT. En 1935, se implementó en los
Estados Unidos de Norte América el primer Sistema de Seguridad Social. En
1941 fue firmada “la Carta del Atlántico”129 en pos de desarrollar la Seguridad
Social como política pública internacional.
129 La Carta del Atlántico fue un documento firmado el 14 de agosto de 1941 por el Presidente de
los Estados Unidos Franklin D. Roosevelt y el Primer Ministro Británico Winston S. Churchill, con el
propósito de coadyuvar en el establecimiento de la paz y el progreso de los pueblos, teniendo
dentro de sus varios cometidos los de luchar contra la pobreza, la intervención económica en pro
de mejorar las condiciones de trabajo, el progreso económico y la protección social. En: RUEDA
MARTÍNEZ, Fernando. URQUIJO GOITIA, Mikel. Materiales para la historia del mundo actual.
Madrid : Istmo S.A., 2006. pp. 45-47/432.
130 Se destaca la descripción que de esa complejidad hace Rengifo Ordoñez, quien señala que la
seguridad social… “involucra varias áreas del conocimiento. Los abogados estudiarán la parte
positiva del sistema, y la forma de solucionar los conflictos jurídicos. La medicina hará su aporte
en aspectos preventivos, curativos, rehabilitación, servicios hospitalarios, farmacéuticos,
quirúrgicos, medicina general y especializada, etc. Los matemáticos o estadísticos, realizaran los
cálculos actuariales, para determinar los costos de las contingencias asumidas, cotizaciones,
índices de morbilidad, natalidad, mortalidad y determinar el equilibrio financiero del sistema. La
sociología estudiará los fenómenos sociales y políticos de los pueblos, así como el reflejo de la
estabilidad en general” faltando mencionar en todo ello a los politólogos, los economistas, los
filósofos, los literatos y en general los usuarios; ello como para esbozar que la seguridad social es
un área transdisciplinar del conocimiento y la vida humana130. En: RENGIFO ORDOÑEZ, Jesús
75
jurídico, económico y social; posibilitando el devenir de los Derechos Económicos,
Sociales y Culturales (DESC) cuya génesis no se circunscribe únicamente al
Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales131; sino que
se retrotrae a diversas Declaraciones y Convenios, tales como: la Declaración
Universal de los Derechos Humanos de 1949132 y el Convenio 102 de la
Organización Internacional del Trabajo en el que se establecen las normas
mínimas a que se debe comprometer un Estado Parte en materia de Seguridad
Social.
María. La Seguridad Social en Colombia: legislación colombiana de los seguros sociales. 3ª ed.
Bogotá : Temis, 1989. 594 P
131 El Pacto de Derechos Económicos, Sociales y Culturales data del 16 de Diciembre de 1966. En
su artículo 9º norma que “Los Estados Partes en el presente Pacto reconocen el derecho de toda
persona a la seguridad social, incluso al seguro social”; y en el artículo 12º pregona que “Los
Estados Partes en el presente Pacto reconocen el derecho de toda persona al disfrute del más alto
nivel posible de salud física y mental”. El pacto de los DESC fue ampliado a través de la
Convención Americana sobre Derechos Humanos, especialmente en su capítulo III, artículo 26.
(Firmado el 22 de noviembre de 1969) y el Protocolo Adicional a la Convención Americana sobre
Derechos Humanos en materia de Derechos Económicos, Sociales y Culturales; Artículos 9º y 10º.
132 El artículo 22 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos prescribe: “Toda persona,
como miembro de la sociedad, tiene derecho a la seguridad social, y a obtener, mediante el
esfuerzo nacional y la cooperación internacional, habida cuenta de la organización y los recursos
de cada Estado, la satisfacción de los derechos económicos, sociales y culturales, indispensables
a su dignidad y al libre desarrollo de su personalidad.” Esta disposición se debe concordar con el
artículo 25, numerales (1 y 2) ius-Ibíd. “Toda persona tiene derecho a un nivel de vida adecuado
que le asegure, así como a su familia, la salud y el bienestar, y en especial la alimentación, el
vestido, la vivienda, la asistencia médica y los servicios sociales necesarios; tiene asimismo
derecho a los seguros en caso de desempleo, enfermedad, invalidez, viudez, vejez y otros casos
de pérdida de sus medios de subsistencia por circunstancias independientes de su voluntad. La
maternidad y la infancia tienen derecho a cuidados y asistencia especiales”.
133ALMANSA PASTOR, José M. Derecho de la Seguridad Social. 7ª edición. Madrid :
Tecnos,1991. p 64.
76
La anterior conceptualización devela a la Seguridad Social como una
macropolítica pública a cargo del Estado y un derecho cuyos titulares son los
individuos y las comunidades. La Seguridad Social se ejecuta a través de
diferentes frentes de acción: la protección y la prevención, ligadas a la gestión del
riesgo134; la reparación y la recuperación cuando se requiere cubrir una necesidad
o minimizar los efectos o compensar los daños derivados de ciertas contingencias.
Esa política pública tiende a ser limitada por los recursos financieros y el derecho
legal y jurisprudencial de cada Estado135.
134 La Gestión del Riesgo (GR) implica a todos y cada uno de los actores del SGSSS; en el nivel
micro (prestadores de servicio-pacientes) que es el escenario donde se da el acto médico, la GR
consiste en “el análisis de los procesos de atención como su estructura y resultados que permiten
la prevención de los eventos inesperados (adversos) o el manejo oportuno de sus consecuencias
para el paciente, el profesional de la salud, las instituciones prestadoras de servicios de salud y el
sistema”. (Nota entre paréntesis fuera del texto original) Léase a: GÓMEZ CÓRDOBA, Ana I.
Responsabilidad en la gestión del riesgo de la atención a la salud en el sistema colombiano. En:
Derecho médico-sanitario. Actualidad, tendencias y retos. (I) Compilado por Castaño de R. María
P. Bogotá : Universidad del Rosario. 2008. pp. 78-82/449.
135Tanto la OIT a través del Convenio 102 (norma mínima en Seguridad Social) como la ONU a
través del Pacto de Derechos Económicos, Sociales y Culturales desarrollado interpretativamente
por el Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales reconocen que el ejercicio del
derecho a la seguridad social hace parte de una política pública de desarrollo progresivo merced a
que conlleva importantes consecuencias financieras para los Estados Partes. No obstante, reiteran
que la seguridad social es fundamental para la dignidad humana y debe ser una prioridad en la
agenda política y jurídica del Estado; quienes “deben elaborar una estrategia nacional para lograr
que se ponga plenamente en práctica el derecho a la seguridad social, y asignar suficientes
recursos fiscales y de otro tipo a nivel nacional. De ser necesario, deben tratar de obtener
cooperación y asistencia técnica internacionales de conformidad con el párrafo 1 del artículo 2 del
Pacto”. Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de la ONU. Observación General
No. 19 de 2007. Véase además OIT. Seguridad Social: un nuevo consenso. Oficina Internacional
del Trabajo. Ginebra. 2002. P.132.
136Véase el comparativo que realiza sobre este punto en particular ARENAS MONSALVE,
Gerardo. En: El derecho colombiano de la seguridad social. 3ª ed. Ed. Legis. Bogotá. 2011. pp.
3-13 (797).
77
considera las necesidades básicas que deben ser satisfechas y la cobertura de
ciertas contingencias individuales y colectivas que conlleven a la promoción de la
dignidad de las personas y el desarrollo y convivencia de la comunidad.
137 Las prestaciones de seguridad social que se encuentran contenidas en el Convenio 102 de la
OIT son: asistencia médica y prestaciones familiares, así como prestaciones monetarias de
enfermedad, prestaciones de desempleo, prestaciones de vejez, prestaciones en accidentes de
trabajo y de enfermedad profesional, prestaciones de maternidad y de invalidez, y prestaciones de
sobrevivencia.
Op cit. OIT. Seguridad Social: un nuevo consenso. Ginebra : Oficina Internacional del Trabajo.
138
153 El contenido de los DESC con rango de fundamentalidad suele ser vago o ambiguo en los que
aparecen formulados y ello conlleva a toda suerte de problemas interpretativos y de aplicación por
parte de los operadores jurídicos institucionales. Véase a ABRAMOVICH, Víctor; COURTIS,
Crhistian. Hacia la exigibilidad de los derechos económicos, sociales y culturales. Estándares
internacionales y criterios de aplicación ante los tribunales locales. Artículo autorizado por los
autores como apoyo didáctico en el Curso Básico Autoformativo sobre Derechos Económicos,
Sociales y Culturales. IIDH. p.27/51. <En: www.
http://www.observatoridesc.org/sites/default/files/Exigibilidad_de_los_DESC_-_Abramovich.pdf>
154Rodolfo Arango reseña tres tesis con respecto a los derechos sociales fundamentales: i) la
minimalista, ii) la intermedia y iii) la maximalista.
La tesis minimalista sostiene que “los derechos sociales fundamentales deben ser reconocidos en
cierto grado. Esto significa; existe un mínimo jurídico constitucional de derechos positivos
generales, reconocido o que debe ser reconocido por cualquier estado constitucional y democrático
moderno (…) derecho a un mínimo vital”.
Por su parte, la tesis intermedia alude a que “sólo algunos de los derechos sociales
fundamentales son derechos subjetivos”, verbigracia, la educación.
Finalmente, la tesis maximalista aboga porque los derechos sociales fundamentales deben ser
garantizados a cualquiera en cualquier circunstancia, ejemplo: “derechos a la alimentación, a la
salud, a la vivienda, a la educación, al trabajo y a la seguridad social y presuponen normas
jurídicas, obligaciones jurídicas y posiciones jurídicas cuyo reconocimiento debería ser universal,
sin limitarlo a determinadas personas”. Véase, ARANGO, Rodolfo. El concepto de derechos
sociales fundamentales. Bogotá : Legis-Universidad Nacional, 2005. págs. 53-54/385.
155 Ibíd. p. 497
156 Ibíd. p. 498
157Robert Alexy explica que el principio de libertad fáctica, es aquél mediante el cual el titular de
un derecho de acción de libertad es “fácticamente libre en la medida en que tiene la posibilidad de
82
democracia (que incluye la competencia presupuestaria del parlamento)
al igual que (3) principios materiales opuestos (especialmente aquellos
que apuntan a la libertad jurídica de otros) son afectados en una medida
relativamente reducida a través de la garantía iusfundamental de la
posición de prestación jurídica y las decisiones del Tribunal
Constitucional que la toman en cuenta. En todo caso, estas condiciones
están satisfechas en el caso de los derechos fundamentales sociales
mínimos, es decir, por ejemplo, a un mínimo vital, a una vivienda simple,
a la educación escolar, a la formación profesional y a un nivel estándar
mínimo de asistencia médica158.
Uno de los grandes problemas que enfrentan los derechos fundamentales sociales
tiene que ver con la viabilidad o disponibilidad financiera – principio de
competencia presupuestaria del legislador- para disponer de los medios
necesarios que garanticen las prestaciones derivadas de los derechos sociales
como el acceso a los servicios de salud. La mayor tensión se da cuando los
Estados experimentan momentos de crisis económicas porque es cuando más se
manifiesta la necesidad de la población de acceder a los derechos
iusfundamentales a prestaciones, por lo que en tiempos de crisis se hace
indispensable una protección iusfundamental de las posiciones sociales159.
hacer o no hacer lo permitido” (R. Alexy. P. 218); es decir, que no basta la garantía del derecho de
libertad jurídica sino que el sujeto del derecho cuente con los bienes materiales y espirituales que
hagan viable o posibiliten su autodeterminación, de no ser así su derecho de libertad se reduciría a
disposiciones vacías. Léase a ZUÑIGA FAJURI, Alejandra. Más allá de la caridad. De los
derechos negativos a los derechos positivos generales. Revista de Derecho de la Pontificia
Universidad Católica de Valparaíso XXXIII (Valparaíso, Chile, 2do Semestre de 2009) [pp. 621 -
638].
158 Ibíd. p. 495
159 Ibíd. p. 499
83
En tal sentido, Abramovich y Courtis son promotores de las Observaciones
Generales del CDESC donde es destacada la No. 14 del derecho a la salud,
aseverando que “[a]ún en períodos de limitaciones graves de recursos, causados
por procesos de ajuste, de recesión económica o por otros factores, el Estado
debe proteger a los miembros vulnerables de la sociedad… en relación con sus
derechos económicos y sociales” 160.
Lo anterior tiene que ver con la justiciabilidad de los derechos que implica la
ruptura paradigmática de que sólo son fundamentales y exigibles judicialmente los
denominados derechos de primera generación; es decir, los derechos individuales
del orden civil y político que presuntamente exigen del Estado una faceta negativa
(abstención de hacer). En sentido contrario a la tesis de la fundamentalidad y
exigibilidad judicial únicamente de los derechos civiles y políticos --Abramovich y
Courtis-- sostienen que incluso los Derechos Sociales, Económicos y Culturales –
incluido el derecho a la salud- pueden no sólo tener facetas positivas (obligaciones
160ABRAMOVICH, Víctor. COURTIS, Crhistian. Los derechos sociales como derechos exigibles.
2ª ed. Madrid : Ed. Trotta, 2004. p.92.
161 Alexy. Op cit. p.499-500
84
de hacer), sino incluso facetas negativas (obligaciones de no hacer) por parte del
Estado; como por ejemplo la obligación de no dañar la salud, de no empeorar la
educación, de no destruir el patrimonio cultural. Es por eso que para los autores
comentados existe una interdependencia entre el reconocimiento y exigibilidad
judicial de los derechos del liberalismo clásico con el marco de garantías para los
Derechos Económicos, Sociales y Culturales. Aseverando de esa manera que
“las diferencias entre derechos civiles y políticos y derechos económicos, sociales
y culturales son diferencias de grado, más que diferencias sustanciales”162.
162 ABRAMOVICH, Víctor. COURTIS, Crhistian. Hacia la exigibilidad de los derechos económicos,
sociales y culturales. Estándares internacionales y criterios de aplicación ante los tribunales
locales. Artículo autorizado por los autores como apoyo didáctico en el Curso Básico
Autoformativo sobre Derechos Económicos, Sociales y Culturales. IIDH. p.18/51. [Internet, 28 de
ag. 2011] Disponible en:
http://www.pj.gov.py/ddh/docs_ddh/Exigibilidad_de_los_DESC_Abramovich.pdf
Frente a la organización jurisdiccional del Estado véase la Ley 270 de 1996, estatutaria de la
163
166Decreto 2591 de 1991 artículo 8° y Decreto 306 de 1992, artículos 2° y 3°. Sentencias de la
Corte Constitucional T-202 de 2011, M.P. Nilson Pinilla Pinilla; y T-760 de 2008, M.P. Manuel José
Cepeda Espinosa.
167 COLOMBIA. Defensoría del Pueblo. La tutela y el derecho a la salud 2010. Bogotá :
Defensoría del Pueblo. 2011. p. 93. Véase además a GAÑAN RUIZ, Jaime León. Los muertos
de la Ley 100: Prevalencia de la libertad económica sobre el derecho fundamental a la salud una
razón de su ineficacia. Caso del Plan Obligatorio de Salud del Régimen Contributivo. Bogotá. 2010
328 P. Doctorado en Derecho. Universidad Externado de Colombia. Facultad de Derecho.
168El informe de la Defensoría del Pueblo sobre tutela y salud de 2010, reportó algunos hallazgos
representativos relacionados con solicitudes odontológicas: 663 cirugías, 54 imágenes
diagnósticas y 318 prótesis. (Ibíd.)
169 Ibíd. p. 87.
86
Las anteriores cifras dan cuenta de algunos costos tangibles e intangibles por no
tener a la salud como un derecho fundamental (a sabiendas de la limitación de
recursos), y de las barreras reales o ficticias que se le interponen a muchos
usuarios; costos que se trasladan al servicio público de administración de justicia;
ya que el juez ordinario relega los procesos de su competencia legal para
investirse con la toga constitucional y fallar en ese sentido. Cuando la tutela en
salud debería ser un mecanismo excepcional, la desnaturalización del derecho a
la salud como mercancía, lo tornó en la regla. La Corte Constitucional, en el texto
de la sentencia T-760 de 2008 lo reseñó como un antecedente que justificaría la
mutación de la línea jurisprudencial, al afirmar que “estos problemas han llevado a
que la mayor proporción de acciones de tutela que se presentan en el país versen
sobre el derecho a la salud, sin que las órdenes que ha impartido la Corte, caso
por caso, así como todos los jueces del país, hayan conducido a la superación de
tales problemas”170.
170Colombia. Corte Constitucional. Sentencia T-760 de 2008. M.P. Manuel José Cepeda
Espinosa.
87
2.9.1.1 La Declaración Universal de los Derechos Humanos en su artículo 22
expresa que “Toda persona, como miembro de la sociedad, tiene derecho a la
seguridad social, y a obtener, mediante el esfuerzo nacional y la cooperación
internacional, habida cuenta de la organización y los recursos de cada Estado, la
satisfacción de los derechos económicos, sociales y culturales, indispensables a
su dignidad y al libre desarrollo de su personalidad”
88
2.9.1.4 La Convención Americana sobre Derechos Humanos (firmada el 22 de
noviembre de 1969), amplió el PIDESC especialmente en su capítulo III 171, y el
Protocolo Adicional a la Convención Americana sobre Derechos Humanos en
materia de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (Firmado el 17 de
noviembre de 1988); que explicitó los derechos a la Seguridad Social 172 y a la
salud 173.
171 El artículo 26 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos prescribe que “Los
Estados Partes se comprometen a adoptar providencias, tanto a nivel interno como mediante la
cooperación internacional, especialmente económica y técnica, para lograr progresivamente la
plena efectividad de los derechos que se derivan de las normas económicas, sociales y sobre
educación, ciencia y cultura, contenidas en la Carta de la Organización de los Estados Americanos,
reformada por el Protocolo de Buenos Aires, en la medida de los recursos disponibles, por vía
legislativa u otros medios apropiados”. Nótese la relación del principio de progresividad con el de
sostenibilidad fiscal.
172“Derecho a la Seguridad Social. 1. Toda persona tiene derecho a la seguridad social que la
proteja contra las consecuencias de la vejez y de la incapacidad que la imposibilite física o
mentalmente para obtener los medios para llevar una vida digna y decorosa. En caso de muerte
del beneficiario, las prestaciones de seguridad social serán aplicadas a sus dependientes. 2.
Cuando se trate de personas que se encuentran trabajando, el derecho a la seguridad social
cubrirá al menos la atención médica y el subsidio o jubilación en casos de accidentes de trabajo o
de enfermedad profesional y, cuando se trate de mujeres, licencia retribuida por maternidad antes
y después del parto”. (El Salvador. Convención Americana sobre Derechos Humanos. Protocolo
Adicional a la Convención Americana sobre Derechos Humanos en Materia de Derechos
Económicos, Sociales y Culturales. Artículo 9)
173 “Derecho a la Salud. 1. Toda persona tiene derecho a la salud, entendida como el disfrute del
más alto nivel de bienestar físico, mental y social. 2. Con el fin de hacer efectivo el derecho a la
salud los Estados partes se comprometen a reconocer la salud como un bien público y
particularmente a adoptar las siguientes medidas para garantizar este derecho: a. la atención
primaria de la salud, entendiendo como tal la asistencia sanitaria esencial
puesta al alcance de todos los individuos y familiares de la comunidad; b. la extensión de los
beneficios de los servicios de salud a todos los individuos sujetos
a la jurisdicción del Estado; c. la total inmunización contra las principales enfermedades
infecciosas; d. la prevención y el tratamiento de las enfermedades endémicas, profesionales y de
otra índole; e. la educación de la población sobre la prevención y tratamiento de los problemas de
salud, y f. la satisfacción de las necesidades de salud de los grupos de más alto riesgo y que por
sus condiciones de pobreza sean más vulnerables. (Ibíd. Artículo 10)
89
sociales y culturales tan amplios como el trabajo, la educación, la recreación, los
subsidios por compensación familiar, la vivienda, el saneamiento básico y la
seguridad ciudadana por citar algunos. Tal propósito excede los límites
investigativos del presente estudio, por lo que el derecho legislado de la seguridad
social en este apartado sólo se circunscribirá a las generalidades constitucionales.
El derecho legislado del derecho a la salud, como parte de la seguridad social, se
desarrollará más adelante.
190 En tal sentido las sentencias T-251 de 1995, T-258 de 1997, T-203 y 383 de 1999.
191 Colombia. Corte Constitucional. Sentencia SU-062-10. M.P. Humberto Antonio Sierra Porto
192 Posición planteada desde la sentencia T-406 de 1992. M.P. Ciro Angarita Barón
193 Nótese la influencia explícita de Víctor Abramovich y Christian Courtis en la postura de la Corte
Constitucional, quien resume la propuesta de los anteriores juristas al decir “que los derechos
civiles y políticos así como los derechos sociales, económicos y culturales son derechos
fundamentales que implican obligaciones de carácter negativo como de índole positiva. El Estado
ha de abstenerse de realizar acciones orientadas a desconocer estos derechos (deberes negativos
del Estado) y con el fin de lograr la plena realización en la práctica de todos estos derechos –
políticos, civiles, sociales, económicos y culturales – es preciso, también, que el Estado adopte un
conjunto de medidas y despliegue actividades que implican exigencias de orden prestacional
(deberes positivos del Estado)”. Sentencia SU-062-10.
194 Ver las sentencias T-016-07 sobre el derecho a la salud, T-585-08 sobre el derecho a la
vivienda y T-580-07 sobre el derecho a la seguridad social.
95
(L)a seguridad social es consecuencia necesaria de la consagración del
Estado colombiano como Estado Social de Derecho, en la medida en
que la adopción de tal modelo supone para la organización estatal el
deber de promover el florecimiento de condiciones en las cuales se
materialice el principio de la dignidad humana y la primacía de los
derechos fundamentales. Tal deber, como ya había sido anunciado,
resulta especialmente relevante en aquellos eventos en los cuales la
salud o la capacidad económica de sus beneficiarios ha sufrido mella en
la medida en que estas contingencias constituyen barreras reales que se
oponen a la realización plena de la sociedad y del individuo195.
195 Colombia. Corte Constitucional. Sentencia T-418-07. M.P. Álvaro Tafur Galvis
196 Colombia. Corte Constitucional. Sentencia SU-062-10. M.P. Humberto Antonio Sierra Porto.
197 Colombia. Corte Constitucional. Sentencia C-623-04. M.P. Rodrigo Escobar Gil
198 Colombia. Corte Constitucional. Sentencia T-580-07. M.P. Humberto Antonio Sierra Porto.
96
garantizar la plena satisfacción de los derechos fundamentales de la
persona, empresa para la cual surge como requisito ineludible la debida
atención de las contingencias que se inscriben en el concepto de
seguridad social. Así pues, tal sistema no sólo debe consultar los
principios de universalidad, solidaridad y eficiencia que, según el artículo
48 superior, han de guiar el funcionamiento del sistema, sino que
adicionalmente está llamado a procurar el cumplimiento de los fines
esenciales del Estado que han sido recogidos en el artículo 2° del texto
constitucional.
199 Colombia. Corte Constitucional. Sentencia T-056-09. M.P. Jaime Araujo Rentería.
200 Con respecto a las explicaciones jurisprudenciales de la Corte Constitucionales sobre la
seguridad social como Servicio público, pueden consultarse – entre otras- las Sentencias: T-418-
07, T-580-07, T-056-09, SU-062 de 2010.
201 Colombia. Constitución Política. Artículo 365.
Colombia. Corte Constitucional. Sentencias T-580-07. M.P. Humberto Antonio Sierra Porto y T-
202
ello dan buena cuenta las sentencias más iconográficas en salud como la T-760 de 2008, M.P.
Manuel José Cepeda Espinosa. Véase a FETERIS E. Fundamentos de la argumentación jurídica :
revisión de las teorías sobre la justificación de las decisiones judiciales. Bogotá́ : Universidad
Externado de Colombia; 2007. p. 16-17.
100
CAPÍTULO III
Introducción
En este segundo capítulo del marco conceptual se realiza el tránsito de las
generalidades y particularidades de la teoría filosófica de los juegos y
herramientas del lenguaje, los estudios de conciencia jurídica, la noción doctrinal,
legal y jurisprudencial del derecho de la Seguridad Social en función del constructo
teórico: operador jurídico; hacia las generalidades y particularidades del concepto
salud, lo ético-bioético de la seguridad social en salud, la hermenéutica del
derecho a la seguridad social en salud, la salud como derecho fundamental, las
inclusiones y exclusiones del Plan Obligatorio de Salud (POS) circunscrito a la
‘salud oral’, además de unas algunas consideraciones socio-jurídicas del SGSSS.
101
3.2 EL CONCEPTO DE SALUD
La salud como entidad compleja210 y concepto polisémico que también es un juego
del lenguaje, ha experimentado -y lo seguirá haciendo- cambios permanentes en
su noción según la ciencia, disciplina o paradigmas históricos que lo aborde;
verbigracia, las versiones hipocráticas, galénicas, sydenhamianas,
anatomoclínicas, fisiopatológicas, etiopatológicas, eclécticas, biologistas y
epidemiológicas211.
210 BREILH, Jaime. Epidemiología Crítica: Ciencia Emancipadora e interculturalidad. Buenos Aires
: Lugar Editorial. 2003/4. p. 46-50 y 119-136.
211 La salud para los hipocráticos consistía en el equilibrio de los cuatro humores constitutivos de la
naturaleza humana: la sangre, la pituita, la bilis amarilla y la bilis negra; para los seguidores de
Galeno, árabes y medievales, lo sería la ordenación regular a la propia naturaleza, concepto
esencialista; Para Sydenham la salud es la lucha contra la enfermedad prevaliéndose del
empirismo clínico centrado en la descripción de la historia natural de la enfermedad a la cual se le
interpondrá un método curativo estable y acabado; y de la perspectiva epidemiológica a partir de
un sistema clasificatorio de las enfermedades. La versión anatomoclínica de la salud yacía
centrada en la lucha contra las lesiones anatómicas, fundamento de la patología y la clínica, y que
contribuirían grandemente con la semiología médica; la fisiopatología por su parte enmarca la
salud en el terreno del recto funcionamiento del cuerpo y la mente humana “el silencio de los
órganos” y la enfermedad se tiene como un proceso lesivo cuyo inicio es anterior a la aparición de
los signos y síntomas orgánicos; la etiopatología incursiona con la versión de que la salud es la no
exposición a un agente causal como los microorganismos; los eclécticos buscan superar el
reduccionismo biologista y orgánico-funcional, aduciendo que entre la salud y la enfermedad sólo
hay diferencias de grado donde lo normal es lo que más se adecua a la norma estadística de sano
y la enfermedad es aquello que se aleja de la norma; la epidemiología ha pretendido clasificar
todas las enfermedades y determinar los múltiples factores que las determinan para luego
intervenir sobre ellos en procura de obtener los mayores niveles de salud posible. Véase: “El
proceso salud-enfermedad: Hacia una clínica y una epidemiología no positivistas” de Emilio
Quevedo En: Sociedad y Salud. Compilador : Álvaro Cardona. Bogotá : Zeus Asesores, 1992. pp.
7-85.
102
“como un proceso social”212 con consecuencias para “las prácticas de las
profesiones de la salud”213, implica darle un “papel primordial a las ciencias
sociales en salud (antropología, sociología, historia, economía, política, lingüística,
semiótica, psicología social, psicoanálisis, etc.) repensadas no exclusivamente
desde el cuantitativismo sino integradas desde la perspectiva de la aproximación
histórica” propendiendo por “la superación de los modelos funcionalistas,
ecologistas, sistémicos y conductistas y sus explicaciones deshistorizadas y
descontextualizadas, dirigiéndose hacia modelos que retomen desde dichas
ciencias sociales las metodologías y las perspectivas de la historia y de la
economía política y potencien así explicaciones más integrales y dinámicas de los
procesos”214.
212 Ibíd. P. 66
213 Ibíd. P.66
214 Ibíd. P.66-67.
215Definición utópica, inter y transdisciplinar, atribuida al Dr. Jordi Gol i Gurina en el X Congreso de
Médicos y Biólogos de Lengua Catalana. 1976. Véase a Artigas J., Martín L., Fernández O., Ferris
A., Tuà i T. La participación ciudadana en la sanidad pública catalana: concepto, análisis y
propuestas. Scripta Nova. REVISTA ELECTRÓNICA DE GEOGRAFÍA Y CIENCIAS SOCIALES.
Universidad de Barcelona. Vol. XII, núm. 270 (103), 1 de agosto de 2008. [Internet, 10 oct. 2011]
Disponible en: <http://www.ub.edu/geocrit/sn/sn-270/sn-270-103.htm>
103
3.2.1 La salud como derecho
Es importante aclarar que el objeto de esta tesis no es ahondar en el histórico
debate de la salud como derecho o como mercancía, ya que el ejercicio
hermenéutico que se ha propuesto es primordialmente socio-jurídico más que
socio-político o económico. No obstante, el lector encontrará a lo largo del escrito
algunas alusiones al tema que se tornan difíciles de soslayar y que han de ser
tomadas como meras provocaciones discursivas.
216Una mirada crítica a la validez material del derecho a la salud derivado del Sistema General de
Seguridad Social en Salud colombiano y puede ser leída en HERNÁNDEZ ÁLVAREZ, Mario. El
enfoque sociopolítico para el análisis de las reformas sanitarias en América Latina. Rev Cubana
Salud Pública 2003;29(3):228-35
104
persona (Estado Social de Derecho); empero, dicho derecho subjetivo se
garantiza en parte a través de su encuadre funcional como un servicio público
esencial a cargo del Estado y en el que también participan funcionalmente los
particulares.
223 United. Nations. Committee on Economic, Social and Cultural Rights (CESCR). General
comment 5. Persons with disabilities. Eleventh session, 1994. [Internet, 18 oct. de 2011] En:
<http://www.unhchr.ch/tbs/doc.nsf/(Symbol)/4b0c449a9ab4ff72c12563ed0054f17d?Opendocument
>
224 United. Nations. Committee on Economic, Social and Cultural Rights (CESCR). General
comment 6. The economic, social and cultural rights of older persons. Thirteenth session, 1995
[Internet, 18 oct. de 2011]. Disponible en:
<http://www.unhchr.ch/tbs/doc.nsf/(Symbol)/482a0aced8049067c12563ed005acf9e?Opendocumen
t>
225 Naciones Unidas. CDESC. Observación General 14. Op. Cit.
226 El CDES, dedica un análisis especial bajo el título “Temas especiales de alcance general”, en el
que se concibe que el derecho a la salud debe ser tomado como preferente en ciertos grupos
poblacionales como las personas que tienden a ser discriminadas por razones de edad, sexo,
filiación política o religiosa, condiciones socio-económicas, etc. (CDESC-ONU. Observación
General 14. 2000. págs. 6-10, # 18-29).
108
adopción de instrumentos jurídicos concretos”. Posteriormente hace un recuento
de las principales normas internacionales contentivas del derecho a la salud y se
afirma que el derecho a la salud se encuentra íntimamente ligado a otros
derechos227 que en conjunto “abordan los componentes integrales del derecho a
la salud”228.
La parte final de esa introducción explica que la información remitida por los
Estados Parte se convierte en el insumo fundamental para las evaluaciones del
Comité, evaluaciones que le llevan a concluir que son millones de personas en el
mundo para las cuales el derecho a la salud es un “objetivo remoto”230.
227 Entre otros, se encuentran conexos con el derecho a la salud: “el derecho a la alimentación, a la
vivienda, al trabajo, a la educación, a la dignidad humana, a la vida, a la no discriminación, a la
igualdad, a no ser sometido a torturas, a la vida privada, al acceso a la información y a la libertad
de asociación, reunión y circulación”. (Ibíd. p. 1-2 #3).
228 Ibíd.
229 Ibíd. p. 2, # 4.
230 Ibíd. p. 2, # 5 y 6.
109
sistemáticamente cada uno de los supuestos normativos del artículo 12 del
PIDESC, aclarando que el derecho a la salud no debe entenderse como “el
derecho a estar sano”231, sino “como un derecho al disfrute de toda una gama de
facilidades, bienes, servicios y condiciones necesarios para alcanzar el más alto
nivel posible de salud”232; y que por lo mismo, el derecho a la salud, supone el
ejercicio de ciertas libertades relacionadas con el autocuidado del cuerpo, la
vivencia de la sexualidad, el otorgamiento del consentimiento para investigaciones
y procedimientos biomédicos. Ya en el plano de los derechos que posibilitan
mejores oportunidades para lograr el más alto nivel posible de salud destaca el
derecho “a un sistema de protección de la salud”233.
231 El CDESC, en este aspecto de que el derecho a la salud no es extensible al derecho a estar
sano explica que “(e)xisten varios aspectos que no pueden abordarse únicamente desde el punto
de vista de la relación entre el Estado y los individuos; en particular, un Estado no puede garantizar
la buena salud ni puede brindar protección contra todas las causas posibles de la mala salud del
ser humano. Así, los factores genéticos, la propensión individual a una afección y la adopción de
estilos de vida malsanos o arriesgados suelen desempeñar un papel importante en lo que respecta
a la salud de la persona”. (Ibíd. p.3, # 9)
232 Ibíd. p.3, # 9.
233 Ibíd. p. 2, # 8
234 Ibíd. p. 4 # 11.
235 Ibíd.
110
3.2.1.2.2 Elementos esenciales del derecho a la salud e interrelación con
otros derechos: El derecho a la salud requiere de ciertos elementos esenciales e
interrelacionados y cuyas condiciones manifiestas dependerán de las posibilidades
de los Estados, posibilidad que exige de planeación para el desarrollo
progresivo236 del derecho bajo análisis, absteniéndose éste de adoptar medidas
regresivas237. El CDESC tiene por requisitos esenciales e interrelacionados los
siguientes238: 1) la disponibilidad de recursos logísticos y programáticos en salud,
demandando personal médico y profesional capacitado y bien remunerado; 2) la
accesibilidad física, económica, sin discriminación y el acceso a la información; 3)
la aceptabilidad fundada en el respeto de la persona a partir de la ética médica y
las consideraciones debidas a la cultura de los pueblos por parte de los
establecimientos, bienes y servicios de salud y 4) la calidad científico-técnica del
THS y los equipamientos, contando con condiciones sanitarias adecuadas.
Con respecto al párrafo 2º del artículo 12 del PIDESC, el CDESC insta a los
Estados Partes a proteger efectivamente el derecho a la salud materna, infantil y
reproductiva; a la higiene en el trabajo y protección del ambiente; a la prevención,
tratamiento y lucha contra las enfermedades; a contar con condiciones que
aseguren a todos asistencia médica y servicios médicos en caso de enfermedad
física y/o mental. Lo anterior implica la adopción de planes, programas y acciones
complejas pero concretas en materia de promoción de la y educación para la
salud, prevención, tratamiento y rehabilitación de la enfermedad; que a su vez
requiere de serios compromisos en política legislativa, organización institucional y
funcional, erogaciones presupuestarias, medios de defensa judicial de los
derechos.
236 El CDESC es enfático en señalar dentro de las obligaciones de los Estados Parte está el
desarrollo progresivo concreto, constante, expedito y eficaz posible “hacia la plena realización del
artículo 12” del PIDESC. (Ibíd. p.10 #31)
237 Ibíd. p. 10 # 32.
238 Ibíd. p.4, # 12.
111
3.2.1.2.3 Niveles de obligación de los Estados Parte frente al derecho a la
salud: El CDESC cita tres tipos o niveles de obligaciones a cargo de los Estados
Partes con respecto a los derechos humanos y por ende el derecho a la salud: a)
respetar evitando tener injerencia en el menoscabo del derecho a la salud, b)
proteger a través de diversos mecanismos que terceros vulneren dicho derecho y
c) cumplir la efectividad del derecho a la salud a través de diferentes mecanismos
políticos, económicos, jurídicos, sociales, etc. Estas obligaciones son de carácter
nacional e internacional y parten de unos deberes estatales básicos cuales son:
a) Velar por la atención de la salud genésica, materna (prenatal y
postnatal) e infantil; b) Proporcionar inmunización contra las principales
enfermedades infecciosas que tienen lugar en la comunidad; c) Adoptar
medidas para prevenir, tratar y combatir las enfermedades epidémicas y
endémicas; d) Impartir educación y proporcionar acceso a la información
relativa a los principales problemas de salud en la comunidad, con
inclusión de los métodos para prevenir y combatir esas enfermedades;
e) Proporcionar capacitación adecuada al personal del sector de la
salud, incluida la educación en materia de salud y derechos humanos239.
(Subrayado fuera de texto. Nótese la pertinencia de esta obligación
básica en relación con la tesis del odontólogo como operador jurídico).
3.2.1.2.5 Aplicación del derecho a la salud por parte de los Estados Parte y
obligaciones de otros actores: Finalmente, el CDESC establece unas pautas a
los Estados Parte para que apliquen las directrices emanadas del PIDESC en
materia del derecho a la salud; empezando por la adopción de una adecuada
legislación interna, políticas públicas pertinentes, sistemas de información
eficientes evaluados a través de indicadores y líneas bases de referencia, y la
113
En ese campo fundamental del derecho a la salud, desde la seguridad social, la
CDESC-ONU generó unas obligaciones generales y específicas para los Estados
partes que incluyen: “adoptar medidas para prevenir las enfermedades y mejorar
las instalaciones, los bienes y los servicios de salud (art. 12), (…)asegurar el
acceso a un sistema de seguridad social que ofrezca a todas las personas y
familias un nivel mínimo indispensable de prestaciones que les permita obtener
por lo menos atención de salud esencial”242. Estas disposiciones deben ser
armonizadas con la Observación General No. 14, proferida por el mismo Comité y
que es específica del derecho a la salud.
La ley 10 de 1990 - Art. 2°, hace una regresión conceptual porque no concibe la
salud como un componente de la seguridad social, sino, meramente, como un
119
servicio público a cargo de la Nación (Art. 1°) que por fuera del subsector de la
previsión y el subsector privado continúa con su función “asistencialista”. No
obstante, es de resaltar de la Ley 10/90 el que introdujo cierta principialista (Art.
3°) de corte político y administrativo relacionada con la regencia del servicio
público de salud: universalidad, participación ciudadana, participación
comunitaria, subsidiariedad, complementariedad e integración funcional.
3.2.2.1.3 Ley 100 de 1993 del Sistema de Seguridad Social Integral (SSSI):
Frente al supuesto de que el odontólogo es un operador jurídico al interior del
SGSSS, la ley 100 después de la Constitución Política de Colombia, es el
referente normativo más importante. Esta norma que data del 23 de diciembre de
1993 y “por la cual se crea el Sistema de Seguridad Social Integral251 y se dictan
otras disposiciones” regula algunos derechos sociales prestacionales: i) las
pensiones por vejez, invalidez o muerte; ii) las prestaciones asistenciales y
económicas de los habitantes del territorio nacional afiliados al SGSSS, iii) los
riesgos profesionales de los trabajadores asegurados y iv) algunos servicios
complementarios con énfasis en el subsidio a los nacionales en condición de
indigencia que se encuentran según el ciclo vital individual en la tercera edad.
Estas facetas prestacionales, según el preámbulo de la propia ley están
enderezadas a contribuir con la calidad de vida de las personas y la comunidad
como parte de “la cobertura integral de las contingencias, especialmente las que
menoscaban la salud y la capacidad económica, de los habitantes del territorio
251 Según el artículo 8º de la Ley 100 de 1993, el Sistema de Seguridad Social Integral se conforma
por el “conjunto armónico de entidades públicas y privadas, normas y procedimientos y está
conformado por los regímenes generales establecidos para pensiones, salud, riesgos profesionales
y los servicios sociales complementarios” definidos en esa ley.
120
nacional, con el fin de lograr el bienestar individual y la integración de la
comunidad”252.
122
nociones de reglas rectoras, enlista veintiún principios256 del SGSSS que
desarrollan y se integran a los traídos por la Constitución Política de Colombia y
los generales del SSSI. Estos principios son fundamentales para los operadores
jurídicos que pretenden contribuir con la concreción efectiva del derecho a la salud
de las personas.
256 Los principios generales del SGSSS son: universalidad, solidaridad, igualdad, obligatoriedad,
prevalencia de derechos, enfoque diferencial, equidad, calidad, eficiencia, participación social,
progresividad, libre escogencia, sostenibilidad, transparencia, descentralización administrativa,
complementariedad y concurrencia, corresponsabilidad, irrenunciabilidad, intersectorialidad,
prevención, continuidad. (Ley 100 de 1993, artículo 153, modificado por la ley 1438 de 2011,
artículo 3).
123
calidad de pacientes/usuarios del SGSSS, lo cual le confiere algo de legitimidad a
la legalidad.
A los afiliados del Régimen Contributivo se les garantizará un POS (POS) y a los
del Régimen Subsidiado un (POS-S), la atención de urgencias en todo el territorio
nacional, la libre escogencia de Empresas Promotoras de Servicios de Salud
(EPS), Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud (IPS) y de los
profesionales según la oferta de éstas y aquéllas en la red de servicios; la
participación como ciudadano y usuario258.
259 Ley 100 de 1993 artículo 162 ha denominado como POS a los contenidos prestacionales de
tipo asistencial en salud a que tienen derecho los afiliados de SGSSS. No obstante, la ley 1438 de
2011 ha introducido el concepto de Plan de Beneficios pretendiendo obviar eufemísticamente el
carácter de obligatoriedad que quiso imprimir el legislador en sus inicios. (véase la nota al pie
número 9).
260 El POS fue desarrollado una parte por la Resolución Ministerial 5261 de 1994 y se le conoce
como Manual de Actividades, Intervenciones y Procedimientos del POS en el Sistema General de
Seguridad Social en Salud (MAPIPOS), atendiendo niveles de complejidad técnico-científica de las
Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud (IPS) -ver de la Resolución el Libro II, Arts. 91 y
ss.- y el estado mórbido patológico del paciente, quien en todo caso tendrá un ingreso por el primer
nivel de atención por consulta externa o por urgencias y de requerir servicios de mayor complejidad
se remitirá conforme al sistema de Referencia y Contrarreferencia de la Red de Prestadores de
Servicios de Salud (Decreto 4747 de 2007 artículo 1º y 17º). La otra parte del POS, otrora
conocida como el Manual de Medicamentos y Terapéutica del SGSSSS, que tuvo por fuente
regulatoria el Acuerdo 3 de 1994 y los subsiguientes (53 y el 83 de 1997, el 228, 236 de 2002,
entre otros) expedidos por el Consejo Nacional de Seguridad Social en Salud (CNSSS), fue
recogido por el Acuerdo 08 de 2009 y recientemente por el Acuerdo 29 de 2011de la Comisión de
Regulación en Salud (CRES), organismo de reciente creación por la Ley 1122 de 2007.
Finalmente, el paquete de servicios del POS se cierra con las actividades de salud pública de
intervenciones colectivas, individuales y familiares actualmente desarrolladas por la ley 1122 de
2007, el Decreto 3039 del mismo año y la Ley 1438 de 2011.
125
exclusiones, insumos ius-teóricos basilares del odontólogo como operador jurídico
del SGSSS.
La ley 100 de 1993 crea los copagos por cuenta de los beneficiarios y las cuotas
moderadoras a cargo de afiliados cotizantes y beneficiarios que hagan uso de los
servicios de salud con el fin de coadyuvar a la financiación y la racionalización en
el uso de los servicios de salud prestados por el sistema261. De esta disposición
han sido eximidos los afiliados al régimen subsidiado, clasificados en el nivel I por
el SISBEN262.
Cabe señalar en este punto que el régimen subsidiado cuenta con un POS propio
(POS-S) y reducido con respecto al POS del régimen contributivo (POS-C) que
para el año 2001, en aras del principio de la progresividad en la cobertura se
pretendía fuesen iguales. Actualmente no se ha alcanzado este propósito,
situación duramente cuestionada por la Corte Constitucional a través de la
sentencia hito T-760 de 2008263 y que mediante la Ley 1438 de 2011264 se busca
subsanar. No obstante a lo anterior, el POS odontológico ha sido unificado para
ambos regímenes desde la Resolución 5261 de 1994 del Ministerio de Salud y el
actual Acuerdo 29 de 2011 de la CRES.
Cepeda Espinosa.
264 Colombia. Congreso de la República. Ley 1438 de 2011, artículos 1º , 2º y 36º .
126
permanente o aquellos que tengan menos de 25 años, sean estudiantes con
dedicación exclusiva y dependan económicamente del afiliado. A falta de cónyuge,
compañero o compañera permanente, e hijos con derecho, la cobertura familiar
podrá extenderse a los padres del afiliado no pensionados que dependan
económicamente de éste” (Art. 163).
Así mismo, en desarrollo del principio de solidaridad, la misma Ley 100 dispone
que aquéllas personas (individuos) que careciendo de capacidad de pago total o
parcial para cotizarle al sistema y su grupo familiar -por su particular
vulnerabilidad- deberán afiliarse al SGSSS a través del régimen subsidiado para
recibir las prestaciones contenidas en el Plan Obligatorio de Salud del respectivo
régimen (Art. 157, literal A, numeral 2; conc. Arts. 162, 211 y 212); prestaciones
que vienen siendo reglamentadas por la Comisión de Regulación en Salud
(CRES). Progresivamente los contenidos del POS-S habrán de unificarse con los
del POS del régimen contributivo.
127
independientes y sus beneficiarios quienes tendrán derecho a acceder a los
beneficios del POS a partir de la fecha de su afiliación y pago anticipado265.
Se estableció --dentro del POS-- que a las mujeres embarazadas les sean
prestados los siguientes servicios de salud: control prenatal, atención del parto,
control del postparto y la atención de las afecciones relacionadas directamente
con la lactancia; y en relación con los menores de un año: “la educación,
información y fomento de la salud, el fomento de la lactancia materna, la vigilancia
del crecimiento y desarrollo, la prevención de la enfermedad, incluyendo
inmunizaciones, la atención ambulatoria, hospitalaria y de urgencias, incluidos los
medicamentos esenciales; y la rehabilitación cuando hubiere lugar”; lo anterior sin
Es preciso decir que tienen derecho a las prestaciones económicas del SGSSS los
afiliados del régimen contributivo; es decir, aquellos vinculados a través de un
contrato de trabajo, servidores públicos, los pensionados y jubilados y los
trabajadores independientes con capacidad de pago, se les reconocerá las
incapacidades generadas en enfermedad general bajo los lineamientos de los
Decretos 1406 de 1999, 047 de 2000 y 783 de 2000. En este punto es
fundamental la calificación del origen de la enfermedad, pues si es de origen
común el cubrimiento de tales riegos los asumen las Empresas Promotoras de
Salud mediante las figuras comerciales de los seguros y los reaseguros. Empero,
si las incapacidades se originan en enfermedad profesional y accidente de trabajo,
280Colombia. Presidente de la República. Decreto 1283 de 1996, modificado por el Decreto 3990
de 2007, conc. con el Acuerdo 307 de 2005 del CNSSS. Véase además la Ley 1438 de 2011 y el
Decreto-ley 019 de 2012, artículos 113-115.
281 Ley 100 de 1993. Op Cit. Artículo 167 conc. con los arts. 218-223 ius-ibídem.
131
la cobertura de tales contingencias las asumen las Entidades Promotoras de Salud
quienes pasarán las respectivas cuentas de cobro a las Administradoras de
Riesgos Profesionales. Básicamente las prestaciones son el subsidio por
incapacidad y la licencia de maternidad.
Finalmente, cabe destacar la exclusión tajante del SGSSS para el pago de las
prestaciones económicas por concepto de incapacidad por enfermedad general
“cuando éstas se originen en tratamientos con fines estéticos o sus
complicaciones, los cuales se encuentran expresamente excluidos de los
beneficios del SGSSS” e incluso la asunción de sus complicaciones salvo que se
traten de urgencias médicas289.
287 Decretos 770 de 1975, 1406 de 1998, 1804 de 1999, 783 de 2000 y 2463 de 2001.
288 Colombia. Presidente de la República. Decreto 019 de 2012, artículo 121.
289 Decretos 1804 de 1999 y 047 de 2000 – art. 3º, Sentencias T-1268-2005 y T-005.07, M.P.
Nilson Pinilla Pinilla; Sentencia T-676-2002, M.P. Jaime Araujo Rentería.
133
con la Constitución Política, tendientes a organizar la prestación de los servicios
de educación, salud y saneamiento básico. En lo relativo a salud se definen los
recursos económicos que contribuyen con el financiamiento --subsidio a la oferta
(vinculados) y la demanda (régimen subsidiado)-- en consideración a la
descentralización territorial, la certificación municipal para administrar dichos
dineros y la red de prestadores de servicios de salud - según el nivel de
complejidad técnico/científico y la implementación de los planes de salud pública
de intervenciones colectivas e individuales. Igualmente hace énfasis en las
funciones de vigilancia, inspección y control que deben ejercer las entidades
territoriales a EPS e IPS.
3.2.2.1.2.3 Ley 1122 de 2007: esta ley, modificatoria del SGSSS de la Ley 100 de
1993 y a su vez reformada por la ley 1438 de 2011, toca con el derecho a la salud
de los afiliados al propender --entre otras cosas-- por la cobertura universal, la
accesibilidad económica a los servicios de salud para los afiliados clasificados en
el Nivel I del SISBEN, la disminución del período de carencia a 26 semanas, la
afiliación de la población desplazada y de los desmovilizados, el control
administrativo a las EPS cuyos Comités Técnicos-Científicos (CTC) nieguen el
suministro de medicamentos no POS y que sean concedidos por Tutela. Es
importante también para los profesionales de la salud que pretenden fungir como
operadores jurídicos en razón a la búsqueda de la estabilidad laboral de éstos en
las IPS públicas.
3.2.2.1.2.4 Ley 1164 de 2007: conocida como la ley del Talento Humano en
Salud. Tiene relevancia por cuanto propugna por la formación por competencias
de los profesionales y el personal auxiliar en salud, desarrolla el concepto de ‘acto
propio de los profesionales’, trae los principios ético-bioéticos requeridos y los
valores a considerar por los profesionales y el personal auxiliar para ejercer en el
campo de la salud. Igualmente prescribe los deberes y derechos del personal
134
talentosos en salud. Al respecto remítase al título “Derecho legislado en relación
con la profesión odontológica”.
3.2.2.1.2.5 Ley 1438 de 2011290: por la cual se reforma el SGSSS, destaca que el
SGSSS está orientado a generar condiciones que protejan la salud de los
colombianos, ya que el bienestar del usuario es el eje central y núcleo articulador
de las políticas en salud y que ese bienestar -entre otras cosas- sólo se logrará
alcanzar unificando el Plan de Beneficios (término con el que se pretende
reemplazar el de Plan Obligatorio de Salud) para todos los residentes
garantizando la universalidad del aseguramiento, la portabilidad o prestación de
los beneficios en cualquier lugar del país y preservando la sostenibilidad financiera
del Sistema.
Dispone esta ley con respecto a los servicios de salud excluidos del Plan de
Beneficios (no POS) que su provisión por condiciones particulares, extraordinarios
y que se requieren con necesidad que sean prescritos por el profesional de la
salud tratante deberá someterse al CTS de la EPS, órgano autónomo que ha de
pronunciarse sobre el contenido de la solicitud dentro de los dos días calendarios
siguientes a su presentación. Además, es creada la Junta Técnico-Científica de
pares (JTC) con el ánimo de que éste órgano colegiado interdisciplinario y
especializado conceptúe a manera de control sobre la pertinencia médica y
científica de las prestaciones no previstas en el Plan de Beneficios ordenadas por
el profesionales de la salud tratante -incluyendo odontólogos- previo
pronunciamiento del CTC de la respectiva EPS. Dicha norma sería modificada por
el Decreto 019 de 2012 como se verá más adelante.
290 Recientemente la Corte Constitucional declaró exequible en su conjunto a la Ley 1438 de 2011;
al encontrar que con ella el legislador no vulneró la reserva de ley estatutaria en materia de
derechos fundamentales; ya que, si bien la salud es un derecho fundamental, también es cierto
que su dimensión prestacional relacionada con la reglamentación del servicio público asistencial
requiere de configuración legal que perfectamente puede tramitarse, en aras de la eficacia y la
flexibilidad a través del proceso legislativo ordinario.
135
La ley 1438 de 2011 juridificó el concepto de ‘autonomía profesional’,
reconocimiento formal basilar en lo que tiene que ver con el acto médico-
odontológico del personal talentoso en salud, definiéndolo como “la garantía que el
profesional de la salud pueda emitir con toda libertad su opinión profesional con
respecto a la atención y tratamiento de sus pacientes con calidad, aplicando las
normas, principios y valores que regulan el ejercicio de su profesión.”291
Colombia. Corte Constitucional. Sentencia T-760 de 2008, numeral 3. “El derecho a la salud
299
300Ibíd. numeral 3.2.4. Considérense además, con respecto a la línea jurisprudencial de la tutela al
derecho a la salud por conexidad con otros derechos fundamentales, las Sentencias T-406 de
1992 (M.P Ciro Angarita Barón), T-571 de 1992 (M.P Jaime Sanín Greiffenstein), sentencia T-328
de 1993 (M.P Eduardo Cifuentes Muñoz)
301 Corte Constitucional, sentencia T-597 de 1993 (M.P Eduardo Cifuentes Muñoz).
302Con respecto a la fundamentalidad del derecho a la salud en los niños pueden revisarse las
sentencias SU-225 de 1998, T-801 de 2004, T-1008 de 2004, T-656 de 2005, T-762 de 2005, T-
152 de 2006; con respecto al derecho fundamental a la salud de las personas de la tercera edad
véanse las sentencias SU-062-99 M.P. Vladimiro Naranjo Mesa, T-083 de 2008 (MP Mauricio
González Cuervo), T-221 de 2004 (MP Eduardo Montealegre Lynett), T-1083 de 2003 (MP Manuel
José Cepeda Espinosa), T-060-07 M.P. Humberto Sierra Porto;
303Corte Constitucional de Colombia. Sentencia T-760-08. Numeral 3.2.5. M.P. Manuel José
Cepeda Espinosa.
140
Finalmente, la tercera y más reciente vía jurisprudencial - en palabras de la Corte-
ha afirmado “la fundamentalidad del derecho a la salud en lo que respecta a un
ámbito básico, el cual coincide con los servicios contemplados por la Constitución,
el bloque de constitucionalidad, la ley y los planes obligatorios de salud, con las
extensiones necesarias para proteger una vida digna”304. Con esto se elimina la
exigencia artificiosa de la conexidad y se abre el panorama interpretativo del
derecho a la salud como fenómeno complejo, no sólo centrado en el
asistencialismo médico, sino como entidad interdependiente de la conjunción de
ciertos determinantes biológicos, ambientales, culturales, sociales, económicos,
políticos y jurídicos; determinantes en los que existe una corresponsabilidad por
parte de la comunidad mundial, principalmente de los países desarrollados, el
Estado colombiano y todas las personas –naturales y jurídicas- que hacen parte
de él305.
Así las cosas, la Corte Constitucional define el derecho a la salud tal cual lo hace
el CDESC-ONU; es decir, como un derecho humano fundamental e indispensable
para el ejercicio de los demás derechos y que por lo mismo se encuentra
estrechamente vinculado y dependiente con el ejercicio de otros derechos
humanos: alimentación, vivienda, trabajo, educación, dignidad humana, vida, no
discriminación, igualdad, a no ser sometido a torturas, vida privada, acceso a la
información, libertad de asociación, reunión y circulación; ya que esos y otros
derechos y libertades abordan los componentes integrales del derecho a la
salud308.
307Considérense al respecto las sentencias: T-016 de 2007, M.P. Humberto Antonio Sierra Porto;
T-760 de 2008, Manuel José Cepeda Espinosa; C-252 de 2010, M.P. Jorge Iván Palacio Palacio;
C-662 de 2009, M.P. Luis Ernesto Vargas Silva y C-791 de 2011, M.P. Humberto Antonio Sierra
Porto.
Apartes de la Observación 14 del Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de la
308
ONU citados por la Corte Constitucional de Colombia. Sentencia T-760-08. Numeral 3.4.2.1. M.P.
Manuel José Cepeda Espinosa.
309 Sentencia T-760 de 2008. Numeral 3. M.P. Manuel José Cepeda Espinosa
310Sentencias T-845 de 2006 (MP Jaime Córdoba Triviño), T-016 de 2007 (Humberto Antonio
Sierra Porto), T-760 de 2008 (M.P. Manuel José Cepeda Espinosa)
142
a la dignidad humana 312, que presenta dimensiones positivas313 y negativas314 a
la vez que exhibe una faceta prestacional de cumplimiento progresivo315 que -pese
a ser limitable316- debe ser garantizado317 desde el acceso a los servicios
públicos318 de salud que la persona requiera cuando estos se encuentran
contemplados en los planes obligatorios319; empero, dicho derecho fundamental a
la salud no necesariamente se encuentra delimitado por tales planes ya que puede
hacerse extensivo a un servicio de salud no incluido que se requiera con
necesidad y comprometa en forma grave la vida digna o integridad de la
persona320.
311 El de la salud “[E]s un derecho complejo, tanto por su concepción, como por la diversidad de
obligaciones que de él se derivan y por la magnitud y variedad de acciones y omisiones que su
cumplimiento demanda del Estado y de la sociedad en general. La complejidad de este derecho,
implica que la plena garantía del goce efectivo del mismo, está supeditada en parte a los recursos
materiales e institucionales disponibles. (Ibíd. Sentencia T-760 de 2008. Numeral 3.2.3.)
312 Ibíd. Numeral 3.2.1.2
313 La faceta positiva del derecho a la salud se relaciona con la protección gradual y progresiva
que debe garantizar el Estado al sujeto titular del mismo so pena de que su no concreción le
faculte para buscar la tutela judicial. (Ibíd. Numeral 3.3.2.)
314 La faceta negativa del derecho a la salud alude a las acciones u omisiones del Estado o de
terceras personas causantes de daño a la salud de una persona. (Ibíd. Sentencia T-760 de 2008,
numeral 3.3.2., referenciando fallos como las sentencias T-328 de 1993 y T-597 de 1993 del MP
Eduardo Cifuentes Muñoz)
315 Ibíd. Sentencia T-760. Numerales 3.3.5. y siguientes.
316 “El derecho fundamental a la salud es limitable y, por lo tanto, el plan de beneficios no tiene
que ser infinito sino que puede circunscribirse a cubrir las necesidades y las prioridades de salud
determinadas por los órganos competentes para asignar de manera eficiente los recursos escasos
disponibles”. (Ibíd. Sentencia T-760 de 2008. Numeral 3.5.1.)
317 “La salud es un derecho fundamental que debe ser garantizado a todos los seres humanos
igualmente dignos. No hacerlo conduce a que se presenta un déficit de protección
constitucionalmente inadmisible”. (Ibíd. Sentencia T-760 de 2008. Numeral 3.2.1.4.)
318 C-791 de 2011. Op. Cit. Numeral 6. Conc. con la sentencia C-662 de 2009.
319 T-760-Op. Cit. Numeral 3.2.1.3.
320 Ibíd. Numeral 3.2.1.2
143
Corte Constitucional de Colombia la hace extensible a prestaciones no incluidas
en el POS dadas ciertas condiciones, como se pasará a ver.
324 Colombia. Corte Constitucional. Sentencia T-343-03. M.P. Marco Gerardo Monroy Cabra.
Pueden consultarse entre otras sentencias -que citan los cuatro requisitos jurisprudenciales de
procedibilidad de la tutela del derecho a la salud por tratamientos No POS- las siguientes: T-500-
94, SU-819-99, T-523-01, T-586-02, T-990-02, T-760-08.
145
odontólogo adscrito a la EPS-IPS para ordenar --cuando estime que su paciente
lo requiere-- tecnologías en salud no POS. Esa confianza legítima surge en virtud
al vínculo jurídico establecido por el profesional con el paciente, por ser aquél
quien lo conoce y por estar capacitado para decidir con base en criterios
científicos; decisión tenida en principio como relevante y vinculante para la EPS, el
CTC e incluso el Juez Constitucional de Tutela cuando ésta no se desvirtúa de
manera oportuna con fundamentos científico-técnicos de mayor peso.
3.2.2.2.5 El principio ‘pro homine’: novel principio, tenido por la doctrina como
una herramienta hermenéutica de carácter interpretativo que se ha incorporado al
mundo jurídico con el advenimiento de los derechos humanos326 y que en tal virtud
se erige como el punto de partida para una adecuada interpretación de los
derechos fundamentales constitucionales a favor del más débil327.
325 La sentencia T-760 de 2008 en el numeral 4.4.2 argumentó cómo el concepto científico del
médico tratante es el principal criterio para establecer si su paciente requiere un servicio de salud,
aclarando que dicho concepto no es exclusivo. En este apartado de la sentencia se pone de
relieve el principio de confianza legítima referenciando su propio precedente jurisprudencial: “El
reconocimiento a la idoneidad del médico tratante para atender la enfermedad del actor y, de otra,
el reconocimiento tácito de la existencia de un vínculo jurídico, para el caso concreto, entre ella y el
médico tratante, dada la autorización de la cirugía practicada por este último y la asunción del
mayor costo del servicio prestado.” (Colombia. Corte Constitucional. Sentencia T-662 de 2006.
MP Rodrigo Escobar Gil)
326 AMAYA VILLARREAL, Álvaro Francisco. (2005). El principio pro homine: interpretación
extensiva vs. el consentimiento del estado. International Law: Revista Colombiana de Derecho
Internacional, junio, 337-380.
327ARIZA CLERICI. Rodolfo. Interpretación constitucional. Principio ‘pro hominis’. [Internet, 20
oct. de 2011] Disponible en: <http://www.circulodoxa.org/documentos/Circulo%20Doxa%20-
%20Hominis.pdf>
328 Sentencia T-760-08. Op cit. Numeral 6.1.1.1.3.
146
conforme a un criterio finalista, relacionado con la recuperación de la salud del
interesado y el principio de integralidad; ii) en caso de duda acerca de la exclusión
o no de un servicio de salud del POS, debe aplicarse la interpretación que resulte
más favorable a la protección de los derechos de la persona, de conformidad con
el principio ‘pro homine’.
Y precisó la aplicación del citado principio con respecto al hoy derogado artículo
18 de la Resolución 5261 de 1994 al aducir que
El derecho a la salud, en los términos de la Observación General N°14
del Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, se entiende
como el derecho al máximo nivel posible de salud que le permita vivir
dignamente. Lo anterior supone una clara orientación finalista de este
derecho, lo que impone la adopción del mismo criterio para efectos de
interpretar las disposiciones que regulan la materia. (…) Si se busca
garantizar el mayor nivel de salud posible, autorizar un procedimiento
implica autorizar los elementos requeridos para realizar el
procedimiento, salvo que sea expresamente excluido uno de tales
elementos. (…) A esta solución podría oponerse la regla establecida en
el artículo 18 literal i) de la misma resolución, conforme a la cual están
excluidas las “actividades, intervenciones y procedimientos no
expresamente consideradas en el presente Manual”. (…) dicha
disposición no prohíbe el suministro de los elementos requeridos para
329 En la Sentencia T-760 de 2008 se hizo la siguiente referencia: “La Corte Constitucional ha
aplicado en numerosas ocasiones el principio pro homine, por ejemplo, como regla interpretativa
de la convenciones internacionales se ha señalado que “(…) en caso de conflictos entre distintas
normas que consagran o desarrollan estos derechos, el intérprete debe preferir aquella que sea
más favorable al goce de los derechos”, sentencia C-251 de 1997 (MP Alejandro Martínez
Caballero). Ver también Sentencia C-148 de 2005 (MP Álvaro Tafur Galvis) y C-318 de 1998 (MP
Carlos Gaviria Díaz)”.
330 Colombia. Corte Constitucional. Sentencia T-037 de 2006. MP Manuel José Cepeda
Espinosa.
147
realizar el procedimiento, intervención o actividad, sino que prohíbe
actividades, procedimientos e intervenciones no contenidas en el
manual.331
331 Colombia. Corte Constitucional. Sentencia T- 859 de 2003. M.P. Eduardo Montealegre Lynett.
332Colombia. Corte Constitucional. Sentencia T-760 de 2008. Numeral 6.1.1.2.2. M.P. Manuel
José Cepeda Espinosa
333 En el Capítulo V se analizarán las tres líneas jurisprudenciales que a criterio del autor ha
trabajado la Corte Constitucional en materia de tutelabilidad del derecho a la salud en materia de
prestaciones odontológicas a partir de sentencias como: T-343-03, T-543-03, T-1276-03, T-843-04,
T-504-06, T-004-08, T-760-08, T-159-09, T-402-09, T-789-09, T-927-09, T-170-10 y T-198-11.
Esta última denominación de las exclusiones del POS es introducida por el artículo 27 de la Ley
334
El lector habrá de disculpar el hecho de que las nociones éticas y bioética, dada
su íntima conexión y debido a que cuesta establecer los límites en donde termina
la disciplina y empieza la especialidad, sean tratadas a lo largo de este trabajo
unas veces de manera separada u otras tantas como dupla; es decir, como
nociones ético-bioéticas.
Existe una relación entre la bioética y la seguridad social en salud, ya que los
sistemas sanitarios, su organización y funcionamiento, el modelo teórico desde el
cual se justifican, permiten que se realicen reflexiones y se establezcan pautas
que orienten la conducta de los diferentes agentes morales vinculados, máxime
335 FERRER, Jorge José; ÁLVAREZ, Juan Carlos. Para Fundamentar la Bioética. Bilbao :
Universidad Comillas - Desclée De Brower, 2003. p. 26. Considérese además a BOHÓRQUEZ
POLLONI, Blanca; CIOCCA GÓMEZ, Luis; LOLAS STEPKE, Fernando; ROMO, Fernando;
TORRES QUINTANA, María A. Ética, bioética, ley: conceptos básicos. En: Ética y Odontología.
Una introducción. CIEB. Universidad de Chile. Cuaderno No. 2. Nov. 2006. p. 19; y a CAMPS,
Victoria. Prólogo. En: Historia de la ética. Vol. I. España : Crítica. 1988. p.11
336 Hoy día se conocen varios conceptos de bioética, dos de los más clásicos se atribuyen al
médico oncólogo Van Renssealer Potter y al gineco-obstetra André E. Helleger. No obstante,
desde una lectura más ecléctica, en este ensayo se optará por el aporte teórico conceptual
efectuado por la Enciclopedia de bioética en la cual ésta se precisa como el “estudio sistemático de
las dimensiones morales–incluyendo la visión moral, las decisiones, las conductas y las políticas de
las ciencias de la vida y del cuidado de la salud, usando una variedad de metodologías éticas en
un contexto interdisicplinario” En: ENCYCLOPEDIA OF BIOETHICS. Ed. Warren Thomas Reich.
1995. Cloth. Five volumes.
149
cuando la asistencia médico-sanitaria se encuentra preponderantemente
institucionalizada.
como derecho fundamental por conexidad o autónomo por sí mismo son las sentencias: T-406 de
1992, MP Ciro Angarita Barón, T-328 y 597 de 1993, MP Eduardo Cifuentes Muñoz; T-538 de
2004, MP Clara Inés Vargas Hernández; T-845 de 2006, MP Jaime Córdoba Triviño; T-016 de
2007, MP Antonio Humberto Sierra Porto; T-653 de 2008, MP Humberto Antonio Sierra Porto; T-
760 de 08, M.P Manuel José Cepeda Espinosa; T-452-10, M.P. Humberto Antonio Sierra Porto. En
su momento la sentencia de unificación SU-819 de 1999, MP Álvaro Tafur Galvis, aludió de
manera tácita pero muy significativa a la bioética del Sistema General de Seguridad Social en
Salud colombiano.
151
Estado de la justicia social y un marco especial dentro del cual se desarrolla por
ejemplo el modelo de justicia sanitaria que demanda la creación de normas
especialísimas regulatorias de los deberes y derechos de los actores del SGSSS,
entre otros tópicos.
339 La Ley 1164 de 2007, prescribe en su artículo 34 que “los principios, valores, derechos y
deberes que fundamentan las profesiones y ocupaciones en salud, se enmarcan en el contexto del
cuidado respetuoso de la vida y la dignidad de cada ser humano, y en la promoción de su
desarrollo existencial, procurando su integridad física, genética, funcional, psicológica, social,
cultural y espiritual sin distinciones de edad, credo, sexo, raza, nacionalidad, lengua, cultura,
condición socioeconómica e ideología política, y de un medio ambiente sano.
La conducta de quien ejerce la profesión u ocupación en salud, debe estar dentro de los límites del
Código de Ética de su profesión u oficio y de las normas generales que rigen para todos los
152
normativa, estableciendo en el Capítulo VI “la prestación ética y bioética de los
servicios” a cargo de los trabajadores de la salud.
342 Las cuatro corrientes bioéticas más representativas son el comunitarismo, el libertarianismo, el
utilitarismo y el pragmatismo; éstas a su vez se sustentan en el paradigma del principialismo
bioético; no obstante, la literatura menciona otros modelos teóricos que en buena medida se hallan
subsumidas en una u otra corriente de las antes vistas: el relativismo, el constructivismo, el
naturalismo ético, el evolucionismo, la ética de mínimos, la ética aplicada y la ética de cuidados son
unos buenos ejemplos.
154
El modelo Canadiense es un modelo de salud de tendencia comunitarista y
matices igualitaristas que se financia a expensas de los impuestos; se orienta por
los principios de acceso igualitario y no mercantilización de la salud, la priorización
de necesidades de salud pública, la cultura del autocuidado y la participación
comunitaria; la cobertura en Canadá es universal e implementa el sistema de
portabilidad nacional (ser atendido en cualquier provincia).
343 La noción teórica de hermenéutica jurídica en Kaufmann sintetiza los aportes principalmente de
Dilthey, Gadamer, Ricoeur, Maihoffer, et al; y se encuentra dispersa a lo largo de su libro:
Hermenéutica y Derecho. En éste se da una relación esencial con la argumentación jurídica y una
155
Es una filosofía trascendental por que va más allá de circunscribir a la
hermenéutica (hermeneueien) como un mero método que dé cuenta de la
aplicación del derecho natural o del derecho positivo; por el contrario, la
hermenéutica jurídica permite formular las condiciones que hacen posible
cualquier comprensión de sentido al escapar del minimalismo de un “concepto
objetivista del conocimiento” en derecho, superando el acto de subsunción344 en la
aplicación de las leyes a partir de una dinámica interrelacional objetiva-subjetiva345
por la cual el sujeto que quiere comprender el derecho lo hace a partir de su
propia historia de vida, inserta en las tradiciones346, que le sirve de referente y que
se transforma permanentemente desde la lingüisticidad347. Ello posibilitará que el
operador jurídico, el ciudadano con conciencia jurídica, se convierta en sujeto
creador del derecho al ampliar su horizonte de sentido.
Los operadores jurídicos deben obrar conforme al sentido unitario; es decir, deben
buscar primeramente entenderse en la cosa349 que hoy llamamos derecho a la
salud; esto es, pre-comprender con sentido de la pertenencia que “la
hermenéutica tiene que partir de que el que quiere comprender está vinculado al
asunto que se expresa en la tradición, y que tiene o logra una determinada
tradición desde la que habla lo transmitido”350 generándose en el acto familiaridad
y extrañeza, punto medio y verdadero topos de la hermenéutica351.
3.4.1 El comprender
Es basilar para todo operador jurídico el complejo proceso de comprender no sólo
el fenómeno normativo sino también los hechos en sus peculiares condiciones de
tiempo, modo y lugar en aras de interpretar-integrar y aplicar-crear el derecho a
partir de decisiones justas. De allí que Kaufmann sostenga que “la determinación
del derecho significa ante todo y sobre todo argumentar correctamente en un
sistema abierto”352
363Heidegger parafraseado por GADAMER, Hans George. En: VERDAD Y MÉTODO II. Ed.
Sígueme. Salamanca. 2004. p. 105.
Para GADAMER la reflexión hermenéutica es de alcance universal. GADAMER, Hans George.
364
374 Ibíd.
375 Betti citado por AFLEN DA SILVA, Kelly Susane. En: Hermenéutica jurídica y concreción
judicial. Ed. Temis. Bogotá. 2006. p.134.
376 Ibíd.
377 Colombia. Congreso de la República. Ley 100 de 1993, Art.162
378 Ibíd. Preámbulo.
162
Tan abundante y prolija producción jurisprudencial viene influyendo en la política
del derecho nacional379, alcanzando su mayor expresión en la denominada
‘sentencia hito’, la sentencia T-760 de 2008380. A través de ese fallo la Corte
rompe con el anterior conservadorismo de considerar a la salud como un derecho
fundamental sólo por conexidad con otros derechos de primera generación,
respetar en buena medida el criterio de progresividad en la cobertura y los planes
de beneficios. Al respecto, el máximo órgano tutelar expone que
[e]l reconocimiento de la salud como un derecho fundamental en el
contexto constitucional colombiano, coincide con la evolución de su
protección en el ámbito internacional. En efecto, la génesis y desenvolvi-
miento del derecho a la salud, tanto en el ámbito internacional como en
el ámbito regional, evidencia la fundamentalidad de esta garantía381,
383Sobre los criterios de interpretación judicial adoptados por la Corte Constitucional de Colombia,
verbigracia, la racionalidad, la proporcionalidad y la razonabilidad puede consultarse a BERNAL
PULIDO, Carlos. EL DERECHO DE LOS DERECHOS. Universidad Externado de Colombia.
Bogotá D.C.- Colombia. 2008. pp. 61-11.
384 Se aclara al lector que en éste estudio no se ahondará en la relación existente entre la
interpretación y sus métodos o cánones con la teoría jurídica de la argumentación y sus tres
enfoques: el lógico, el retórico y el dialógico; ello debido a que tal temática supera por mucho los
objetivos del mismo. Al respecto consúltese a FETERIS, E. Fundamentos de la argumentación
jurídica : revisión de las teorías sobre la justificación de las decisiones judiciales. Bogotá Colombia:
Universidad Externado de Colombia; 2007. P. 317.
385 Ibíd. Feteris E. p.23-28.
164
Debe reconocerse –según Kaufmann- que existen momentos subjetivos en la
metódica fundamentación de lo que será la concreción decisional “que la
comprensión de normas legales y contenidos vitales implica una actividad
creadora del que comprende, y si, como consecuencia, su persona, con sus
prejuicios, convicciones, intereses y situaciones (de tipo individual y social), se
inmiscuye siempre y necesariamente en el proceso de comprensión, los criterios
del proceder y decidir correctos tendrían que referirse a la persona que comprende
y actúa, así como también a la situación de la acción y de la comprensión”386; es
decir, el operador jurídico “no sólo ha de tener en cuenta la ley y el caso, sino que
tiene que someterse a sí mismo a reflexión”387.
No hay duda de que el apartamiento del iusnaturalismo y del positivismo
jurídico y el acercamiento a la hermenéutica jurídica no significa
facilitamiento alguno ni para el legislador ni para el juez. Por el
contrario, se hace más difícil establecer o decir derecho, aunque
también se hace más humano. El derecho natural racionalista y el
positivismo jurídico habían convertido a los juristas, y más aún al juez,
en funcionarios. La hermenéutica jurídica quiere devolverles
personalidad.
Los operadores socio-jurídicos, que de uno u otro modo a través del acto médico
producen situaciones jurídicas particulares en su relación con la persona del
usuario en torno al derecho de acceder a la salud integral, deberán entender que
“[l]a comprensión hermenéutica… no es algo meramente receptivo, sino un actuar
práctico, conformador. Sólo a través de tal actuar se realiza el derecho concreto,
histórico”388.
389Parafraseando a LARENZ, la Dogmática Jurídica, ciencia que se interesa por la complejidad del
derecho y por ende de una de sus especialidades como lo es la Seguridad Social en Salud, es
prácticamente ignorada por quienes aparecen en la primera línea de interpretación y aplicación de
sus normas cuando de prestación de servicios de salud se trata: los profesionales de la salud y las
Entidades de Promoción y Prestación de Servicios de Salud (EPS e IPS). Los unos por centrarse
en la cientificidad de su quehacer o porque no recibieron una formación hermenéutica adecuada,
las otras porque su interpretación obedece más a los intereses económicos que persiguen que al
verdadero significado de la salud como derecho al interior de un Estado del que se predica una
esencia Social. (LARENZ, Karl. Op cit. p. 224)
390 Ibíd. p. 225
391 ZAGREBELSKY, Gustavo. El derecho dúctil. Madrid – Trotta, 1995. 160 P.
166
3.5. MIRADA SOCIO-JURÍDICA DEL SGSSS COLOMBIANO
Dentro del modelo neoliberal de prestación de servicios de salud implementado en
Colombia392 (aseguraticio y eficientista), el “profesional de la salud
institucionalizado”393 (vinculado, “cooperativizado” o contratista independiente)
cumple un rol preponderante – a pesar de las limitaciones de ley394 – en la
promoción, prevención, tratamiento y rehabilitación de múltiples y variadas
enfermedades que afectan la vida de aquellos usuarios que se acercan - según la
capacidad adquisitiva en el “mercado de los derechos” - a las Instituciones
Prestadoras de Servicios de Salud (IPS); entre ellas las que afectan el
componente estomatognático que suele ser conocido de forma reductivista como
componente bucal y que tradicionalmente desde el siglo pasado suele ser
competencia – entre otros395- de los odontólogos.
392 Colombia, diligentemente emprendió una serie de reformas jurídicas de primera y segunda
generación con el ánimo de poner en práctica las ‘recomendaciones’ de la banca internacional en
pos de obtener un presunto mayor desarrollo económico y social; dan cuenta de ello el Acto
Legislativo 01 de 1985, la Ley 10 de 1990, la Constitución Política de Colombia de 1991, la Ley 60
de 1993 derogada íntegramente por la Ley 715 de 2001, la Ley 100 de 1993, la Ley 1122 de 2007,
la Ley 1164 de 2007, la Ley 1438 y el Acto Legislativo 03 de 2011; Sobre mercantilización de la
salud véanse: AHUMADA, Consuelo. Política Social y Reforma de Salud en Colombia.
Documento preparado para la Facultad de Medicina, Universidad de Antioquia, Área de Salud y
Sociedad. 1998. 23 P; VELÉZ, Marcela. Salud: Negocio e inequidad. Quince años de la Ley 100
en Colombia. Bogotá : Aurora, 2008. 177 P.
393 Siguiendo a Douglas North, desde un marco economicista del desarrollo institucional como el
propiciado en salud por la Ley 100 de 1993, un profesional institucionalizado sería aquél que
encuentra extensamente regulado su campo de interacción -por normas legales y culturales- con
otros agentes que conforman la sociedad. Entiéndase por agentes a pacientes (usuario, cliente),
Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud, Empresas Promotoras de Salud, órganos de
dirección, vigilancia y control del Estado, etc. Douglas North citado por Wiesner, E. En: La
efectividad de las políticas públicas en Colombia. Bogotá : Departamento Nacional de Planeación-
TM Editores, 1998. P. 308.
394Ley 100 de 1993 en lo relativo al POS; Decreto 1292 de 1994 y Acuerdo 29 de 2011, expedido
por la CRES y que entró a regir el primero de enero de 2010.
395 El complejo o sistema estomatognático, desde una mirada funcional-organicista, ha sido campo
competencial para su estudio y abordaje interventivo de médicos generales y especialistas como
los neurólogos, neurocirujanos, cirujanos plásticos, otorrinolaringólogos; empero, también lo ha
sido de los odontólogos generales y las diferentes especialidades derivadas de esta disciplina:
cirugía maxilofacial, estomatología, patología oral, periodoncia, implantología, rehabilitación oral,
odontopediatría, ortopedia maxilar, endodoncia y odontología alternativa. Hoy día se conoce que
para ciertos procedimientos se presentan disputas entre disciplinas (medicina y odontología) y
especializaciones.
167
3.5.1 Anotaciones sobre la anomia en el sector salud
Un sector de la doctrina socio-jurídica pregona que América Latina es proclive a la
anomia intersectorial396 afectando con ello los proyectos de Estados de Bienestar.
Panorama que se ve oscurecido con las tendencias internacionales a desmontar
los sistemas de seguridad social a expensas de la globalización y mundialización
de las propuestas neoliberales que buscan focalizar el manejo del riesgo a partir
de una nueva herramienta del lenguaje: La Protección Social397.
396 Es particularmente pertinente la concepción de anomia espetada por Carlos Santiago Nino
como un “estado de inobservancia de normas, ya sean jurídicas, sociales o morales… generadora
de bajos grados de eficiencia y productividad social”. Referenciado en: GIROLA, Lidia. Anomia e
individualismo. Del diagnóstico de la modernidad de Durkheim al pensamiento contemporáneo.
México : Antrophos Editorial-Universidad Autónoma Metropolitana – Azcapotzalco, 2005. P. 116.
397 La protección social es un concepto de política pública que como herramienta del lenguaje es
introducida por el Banco Mundial en la década de los 80, para ser relanzada como estrategia en el
año 2000 con el propósito de que los Estados focalicen sus esfuerzos de asistencia pública en los
más pobres y vulnerables bajo el lema: “Ayudar a los pobres a ayudarse a sí mismos”. No
obstante, pretende ir liberando a los Estados de la responsabilidad de velar por la universalización
de las garantías de Seguridad Social Integral en lo que se considera el desmonte de los estados de
bienestar -modelo que aún es incipiente en Colombia-. Prueba de la adopción de esa política
pública en el País es que el texto constitucional de 1991 alude en varios de sus artículos al
concepto Seguridad Social; empero, en un acto de incoherencia administrativa, durante el primer
gobierno del ex presidente Álvaro Uribe Vélez, es proferida la Ley 789 de 2002, fusionando los
Ministerios de Trabajo y Salud para llamarlo en su lugar Ministerio de la Protección Social. En
dicha ley, la Protección social es definida como “el conjunto de políticas públicas orientadas a
disminuir la vulnerabilidad y a mejorar la calidad de vida de los colombianos, especialmente de los
más desprotegidos. Para obtener como mínimo el derecho a la salud, la pensión y el trabajo”
(Artículo 1º). Recientemente ha operado nuevamente la escisión de los anteriores Ministerios.
Para ampliar la idea de la disputa entre Seguridad Social Integral y Protección Social, léase a
FRANCO G. Á. El auge de la protección social. Revista Facultad Nacional de Salud Pública 2005;
23: 135-147.
Véase al respecto: COLOMBIA. Defensoría del Pueblo. La tutela y el derecho a la salud 2010.
398
402Ehrlich parafraseado por ARIZA HIGUERA, Libardo y BONILLA MALDONADO, Daniel. En: El
pluralismo jurídico. Contribuciones, debilidades y retos de un concepto polémico. Pluralismo
Jurídico. Daniel Bonilla Maldonado [et al]. Bogotá : Siglo del Hombre Editores, Universidad de los
Andes, Pontificia Universidad Javeriana, 2007. P. 35-36/280.
403 Boaventura de Souza citado por SIERRA, María Teresa y CHENAUT, Victoria. Los debates
recientes y actuales en la antropología jurídica. Las corrientes anglosajonas. P. 157-159/113-169.
En. Antropología Jurídica: perspectivas socioculturales en el estudio del derecho. Edición de
Esteban Krotz.—Rubí (Barcelona):; México: Antrophos Editorial / Universidad Autónoma
Metropolitana-Iztapalapa, 2002 P.332; 20 cm.—(Autores, Textos y Temas, Antropología; 36)
404 Ibíd. p. 157.
405 VELÁSQUEZ ESCOBAR, José P. Una mirada a la profesión odontológica desde la
antropología jurídica. Artículo inédito. Medellín. 2010. p. 4/6.
170
CAPÍTULO IV
Introducción
En este capítulo se hará una referencia conceptual centrada en la profesión
odontológica y su componente organizacional, la principialista de Beauchamp y
Childress y la propuesta jerarquizada de Ferrer y Álvarez, además del
procedimiento de decisión moral; abordándose y aplicándose a partir de las
dimensiones científico-técnica, ético-bioética y jurídica (derecho legal y
jurisprudencial) a lo que se concibe como acto odontológico.
406 El modelo paternalista es asociado con el hipocrático; es decir, aquél que propende por que el
profesional de la salud obre beneficentemente en favor del paciente, aún sin mayor protagonismo
decisional de éste. BIOÉTICA, Temas y Perspectivas. Organización Panamericana de la Salud.
Washington D.C. 1990. p.23. No obstante a la anterior caracterización en torno al consentimiento,
existe otra que justifica la figura del paternalismo como una categoría conceptual necesaria para
delimitar el problema moral específico de la medicina. (ALEMANY, Macario. Las estrategias de la
benevolencia (Sobre las relaciones entre el paternalismo y la bioética). DOXA. Cuadernos de
filosofía. N. 26. España : Universidad de Alicante.2003. Págs. 769-795).
407 “El modelo contractual asigna al médico la función de proveedor y al paciente la de receptor de
servicios especializado, como los de diagnóstico o tratamiento de laboratorio, anestesia o
intervenciones quirúrgicas especializadas. En este caso el paciente está en pleno control de su
autonomía y su relación con el médico no es distinta de la que existe entre otros proveedores y sus
clientes”. (OPS. Op cit. p. 22)
171
comunitarismo408. Es así como el devenir de la práctica odontológica ha
atravesado por un proceso en el que inicialmente primaba la desregulación de
finales del siglo XIX409 hasta las dos últimas décadas del siglo XX410; en contraste
con las actuales acciones técnico-científicas extensamente normativizadas jurídica
y deontológicamente.
408 Las éticas comunitaristas son desarrolladas por Ezekiel J. Emanuele, Beauchamp T.L. y
Childress J.F., Thiebaut C., Cortina A. En materia de política pública, los Planes Nacionales de
Desarrollo: las Leyes 812 de 2003 y 1151 de 2007, expresaban esa intencionalidad de perseguir
un modelo de estado comunitario en el que la salud tendría su cuota de participación organizativa.
El actual Plan de Desarrollo, Ley 1450 de 2011, ha prescindido en su discurso de ese enfoque
particular; no obstante, alude – a la usanza de un modelo social-democrático - a la necesidad de
ajustar la oferta educativa en salud para que el recurso humano esté acorde con las necesidades
poblacionales; lo que implica de alguna manera un llamado de atención a la conciencia socio-
jurídica en Seguridad Social en Salud de las instituciones educativas. COLOMBIA. Anexo Bases
para el PND 2010-2014, pág. 26. [Internet, 5. Ag. 2011] En:
<http://www.indepaz.org.co/attachments/577_Anexos%20Bases%20PND%20definitivas.pdf>
409 El Estado colombiano intervino formalmente la regulación de las profesiones médicas –
incluyendo la odontología- a partir de la Constitución Política de Colombia de 1886, que en su
artículo 44 rezaba: “Toda persona podrá abrazar cualquier oficio u ocupación honesta sin
necesidad de pertenecer a gremios de maestros o doctores. Las autoridades inspeccionarán las
industrias y profesiones en lo relativo a la moralidad, la seguridad y la salubridad pública. La Ley
podrá exigir títulos de idoneidad para el ejercicio de las profesiones médicas y de sus auxiliares”.
410 A partir del artículo 44 de la Constitución Política de Colombia de 1886 se promulgaron varias
Leyes, a lo largo del siglo XX tendientes a regular la materia: i) La Ley 83 de 1914 reguló in genere
las profesiones médicas; ii) la Ley 89 de 1923, “sobre la enseñanza de la odontología”, fue pionera
en establecer las bases de la educación formal en el área aprovechando la experiencia de clínicos
formados en universidades europeas y norteamericanas; iii) La Ley 51 de 1937 reglamenta el
ejercicio de la odontología y buscaba ir marginando a los empíricos o “teguas” de la práctica dental;
iv) la Ley 10 de 1962, promovida por la Federación Odontológica Colombiana, endureció las
medidas para los empíricos y en general para quienes practicaran de forma ilegal la odontología,
imponiendo penas de arresto hasta de 2 años a quien se le hallare responsable de tal conducta.
Este mismo texto legal, de muy pobre desarrollo deontológico pero fuertemente administrativo en
cuanto a requisitos de idoneidad para el ejercicio de la odontología, se ocupó además –por vez
primera- del personal auxiliar (Decreto reglamentario 1002 de 1978); v) En 1989 es promulgada la
Ley 35 conocida como el “código de ética del odontólogo colombiano”, norma de vigencia actual y
con desarrollo reglamentario en el Decreto 491 de 1990. Posteriormente otras preceptivas que
condicionarían mucho más el ejercicio profesional como parte del tránsito de un Estado de
Derecho al Estado Social de Derecho adoptado en 1991 con la gesta de la más reciente
Constitución Política de Colombia.
172
bucal colectiva ha ido, filosófica y sociológicamente, redefiniendo su objeto de
acción -más que en el bienestar individual que se pueda generar a los pacientes
que asisten a consulta clínica- en dar una adecuada respuesta científico-técnica y
social a las necesidades de salud bucal de la población para contribuir con la
salud integral411 y por ende con la calidad de vida individual y colectiva.
411 El Plan Nacional de Salud Bucal – Resolución 3577 de 2006- pretendió, como política pública
del Ministerio de la Protección Social, cumplir con el objetivo general de “[e]stablecer parámetros
tendientes a mejorar las condiciones de salud bucal, a través de la concertación de estrategias y
modelos que permitan el mejoramiento de los procesos para el fomento de la salud, la prevención
de la enfermedad, la prestación de servicios, la coordinación e integración del recurso humano, y el
conocimiento de los derechos y deberes relacionados, como aporte al logro de condiciones
favorables de salud general”. Para tal cometido hizo un llamado a todos los posibles sectores y
actores como la Federación Odontológica Colombiana y demás asociaciones científicas y
gremiales de profesionales, y la Asociación Colombiana de Facultades de Odontología en procura
de convocar y formar a los profesionales del ramo en competencias que les faculte a “ejercer en
sus ámbitos de desarrollo el derecho de ofrecer servicios de calidad y el deber de dar cumplimiento
a los procesos y de informar a los usuarios respecto de las condiciones que les garanticen mejores
condiciones de salud y bienestar”. Con respecto al objeto de acción de la salud bucal colectiva y al
quehacer del odontólogo véase a: CUENCA SALA, Emili. Op cit. pp. 278; y a DOMINGUEZ
GÓMEZ, Eduardo. Cuerpo, cultura e industria de la salud: viejos y nuevos paradigmas en la
formación del médico. Revista Uni-pluri/versidad. 2 (2) 2001: p.49-52.
412 La salud pública renovada ha sido una reacción a la crítica que se le viene haciendo a la salud
pública tradicional centrada en la epidemiología de la enfermedad y su abordaje eminentemente
tecnocrático, lo que le ha ameritado el seudónimo de “enfermología pública”. Por el contrario, la
salud pública renovada se disputa con la salud colectiva, la tarea de contribuir con el logro de los
más elevados niveles de calidad de vida posible a partir de la epidemiología crítica, el trabajo
interdisciplinar y la necesaria participación de la comunidad en la toma de decisiones que le
afectan, como es el caso de las políticas públicas en salud. Hoy día, la salud es una entidad
compleja que va más allá de la ausencia de signos o síntomas o del silencio de los órganos. La
salud implica que se satisfagan ciertas necesidades tales como la alimentación, la nutrición, la
vivienda, el acceso al agua limpia potable; que se cuente con condiciones ambientales, sanitarias y
de trabajo adecuadas, seguras y sanas; acceso a la educación e información sobre cuestiones
relacionadas con la salud, las condiciones biológicas y socioeconómicas esenciales de la persona
y los factores que consideran diferencias basadas en la perspectiva de género. Al respecto
173
Históricamente, la práctica dental ha sido eminentemente técnica, realizada por
operarios (cirujanos-barberos o teguas). Su objeto estaba centrado en la
reproducción morfo-funcional de las piezas dentarias afectadas a través de
restauraciones o reemplazos protésicos con diversos materiales, la extracción de
aquéllas piezas que estuvieran seriamente comprometidas y el uso empírico de
algunas sustancias medicinales para buscar alivio a las infecciones y lesiones que
afectaban las estructuras intra y extra orales. No obstante a lo anterior, es posible
encontrar otra manifestación de la práctica dental en la actualidad que no es
precisamente histórica como la anterior sino de carácter conductual. La práctica
dental es entendida por Cortés N. como relación entre objetos, es decir, como:
La “realización, generalmente instrumentada, de procedimientos
biotécnicos en cavidad bucal [que podría] asimilarse con Gadamer a la
producción de una obra de tipo artesanal, previamente contratada. Lo
anterior quiere decir que, en lo fundamental, es la obra misma la que se
encarga de establecer el nexo entre el contratante y el ejecutor, relación
que desaparece cuando se termina o se entrega el artículo, objeto del
contrato. Ahora, si la práctica dental se reduce sólo a un intercambio, a
dar y a recibir, la relación queda, necesariamente reducida a una
permuta de objetos: conocimiento científico-técnico y fuerza de trabajo
por honorarios; en otras palabras, entre odontólogo y paciente ya no hay
un trato, sino un contrato”413 (Anotación entre paréntesis del autor).
consúltese a GRANDA, Edmundo. (2004). ¿A qué llamamos salud colectiva, hoy?. Revista
Cubana de Salud Pública; abril-junio.
413CORTÉS C. NELSON. El sujeto en la práctica odontológica. Rev Fac Odont Univ Ant, 2003;
14(2):76-77.
414 DOMINGUEZ, Eduardo. Citado por CORTÉS. Ibíd. p. 77.
415 Ibíd. p. 77
174
Las anteriores reflexiones tienen mucho peso en la teoría del odontólogo como
operador jurídico, quien dentro de su quehacer debe procesar el derecho a la
salud en relación con situaciones fácticas particulares que podrían eventualmente
afectar la dignidad, la salud y por ende la calidad de vida a la persona del usuario,
enriqueciendo lo científico-técnico con lo ético-bioético y lo socio-jurídico.
Según los autores que la defienden, esta teoría se basa en el hecho de que la
salud bucal tiene una proximidad sumamente estrecha con las ciencias sociales y
humanas de las cuales adopta en parte, sus métodos y referencias para organizar
el campo biomédico y garantizar su reproducción social. Para Carlos Botazzo 417,
416 NARVAI, Paulo Capel. Saúde bucal coletiva: caminhos da odontologia sanitária
à bucalidade. Rev. Saúde Pública [online]. 2006, vol.40, n.spe [citado 2012-04-15], pp. 141-
147 . DisponÃvel em: <http://www.scielo.br/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0034-
89102006000400019&lng=pt&nrm=iso>. ISSN 0034-8910. http://dx.doi.org/10.1590/S0034-
89102006000400019.
417 Véase a BOTAZZO, Carlos. Sobre a Bucalidade: notas para a pesquisa e contribuição ao
debate. Ciencia & Saude Coletiva. 11(1); janeiro/março 2006 : 7-17. Otra forma más restringida
de conocer terminológicamente a la salud bucal colectiva es la odontología comunitaria, definida
por la American Association of Public Health Dentistry como ‘el arte y la ciencia de prevenir y
controlar las enfermedades orales y promover la salud a través de los esfuerzos organizados de la
comunidad’; de acuerdo a la doctrina actual, sería ‘la práctica y la ciencia de prevenir las
enfermedades orales, promover la salud oral y mejorar la calidad de vida, a través de los esfuerzos
organizados de la sociedad’ (Blanaid D, Watt R, Batchelor P, Treasure E. Introduction to the
principles of public health. En Blanaid D, Watt R, Batchelor P, Treasure E. editors. Essential Dental
Public Health. Oxford: Oxford University Press; 2002. P. 1-45.); por tanto, “la odontología
comunitaria tiene un objetivo perfectamente delimitado: la salud oral de la comunidad, y el paciente
en odontología comunitaria es la comunidad”. (CUENCA SALA, Emili. La práctica de la
Odontología. En: Odontología Preventiva y comunitaria. Principios, métodos y aplicaciones. 3ª ed.
Barcelona:Masson, p. 275.) Nótese que las anteriores tesis serán fundamentales para Colombia
en lo que tiene que ver con el énfasis que se hará -dentro de la dinámica funcional del SGSSS- al
175
la boca humana hace parte de la función institucional en tanto y por cuanto es
parte de la salud colectiva, campo que se interesa por la odontología social a
través de políticas públicas centradas en la realidad. Tanto Narvai como Botazzo
propugnan por un enfoque de derecho humano fundamental de la salud bucal a
partir del cual se deben asegurar los recursos necesarios para que todas las
personas accedan a los servicios odontológicos que requieran, máxime si se entra
a considerar que la ‘bucalidad’ es inescindible de la salud del resto del cuerpo
humano.
La salud bucal colectiva pareciera ser un esnobismo que se esfuerza por legitimar
un subcampo dentro del género: Salud Colectiva, presentando argumentos de
marcado componente socio-epidemiológico.
modelo de Atención Primaria en Salud (APS), muy a propósito de la entrada en vigencia de la Ley
1438 de 2011.
176
cerebrales, la anemia, los linfomas aparecen como ejemplos de enfermedades
sistémicas que comprometen al sistema estomatognático418.
418PRETI, Giulio; et al. Rehabilitación protésica. Tomo 1. Bogotá : Amolca. 2007. Págs.. 12-
25/261. Véase además a: LINDHE, Jan; NIKLAUS Lang; THORKILD Karring. Periodontología
clínica e implantología 5ª ed. Buenos Aires : Médica Panamericana, 2009. P. 489 y ss/592;
LITTLE, James. Tratamiento odontológico del paciente bajo tratamiento médico. Madrid : Harcourt
Brace, 1998. p. 676.
177
para abordar las reflexiones críticas y deónticas sobre el hecho de la vida moral419,
que en el presente trabajo se relacionará en ulteriores capítulos con el rol del
odontólogo como operador jurídico dentro del SGSSS.
que la odontología no sólo demanda un sustento cognitivo centrado en conceptos teóricos sino que
179
decir, que todo odontólogo debe adquirir, mantener y actualizar ciertas
competencias cognitivas y prácticas de manera tal que pueda prestar con calidad
–accesibilidad, seguridad, oportunidad, suficiencia, continuidad, pertinencia- sus
servicios sociales a la persona del paciente y a la comunidad. El componente
intelectual o de conocimiento va estrechamente entrelazado con la virtud de la
humildad intelectual, ya que el odontólogo debe conocer cuáles son sus límites
competenciales, qué está dentro de su esfera de manejo y qué no lo está, y dado
que se llegare a reconocer que se encuentra ante éste último caso, éste opte por
el bien del paciente, por referirlo hacia el profesional que cuente con la
especialidad o el equipamiento que éste requiera en actitud prudente y
beneficente.
Si bien la relación entre los campos de la ética y el derecho no son objeto de este
estudio, es oportuno señalar que ha habido una fuerte tendencia por llevar el
discurso moral de la ética normativa427 – que no ley- al ámbito legislativo428, lo cual
426 El término deontología se le atribuye al filósofo inglés Jeremías Bentham, quien lo acuñara en
su obra Deontología o ciencia de la moralidad, concibiéndola desde su enfoque utilitarista como
una disciplina moral por conveniencias, “fundada en la tendencia a huir del dolor y perseguir el
placer, y que prescinde de toda apelación a la conciencia”. (Véase ÁLVAREZ DE LA CADENA
SANDOVAL, Carolina. Deontología en la odontología. En: HERNÁNDEZ ARRIAGA, Jorge Luis.
Bioética General. México: Ed. El Manual Moderno, 2002. pp361.). Ha habido una muda
conceptual desde entonces, llegándose a la concepción de que la deontología es una rama de la
ética orientada a comprender y aplicar los deberes y derechos de los profesionales a partir de los
principios, virtudes, valores y actitudes aceptadas y esperadas por la comunidad en defensa de su
moralidad. (Ibíd.). A I. Kant se le circunscribe dentro del deontologismo puro, entendido como el
deber imperativo o categórico que tiene todo ser autónomo para cumplir con las “obligaciones
perfectas” sin que medie excepción alguna. Los principios de los imperativos categóricos de Kant
se conocen como los principios de universalidad y de humanidad, y son desarrollados en sus
obras: Fundamentación de la metafísica de las costumbres y Metafísica de las costumbres.
(FERRER y ÁLVAREZ, Op cit. p. 113-117).
427 Un claro ejemplo de la íntima relación entre ética y derecho tiene que ver con que “las
cuestiones morales más candentes suelen también ser cuestiones legales porque afectan la
convivencia social y el orden público(…) de hecho, en los últimos años ha nacido una nueva
especialidad jurídica: el bioderecho. Sin embargo, ni las decisiones de los jueces, ni la sola
promulgación de leyes bastan para zanjar el problema moral y, en ocasiones, pueden
recrudecerlo...” (FERRER y ÁLVAREZ, Op cit. p. 46. El binomio bioética-bioderecho según Luis
González Morán, quieren significar de manera relacional “la ética como instancia crítica y canónica
del Derecho y de éste como expresión positiva y práctica de la Ética” con la finalidad de velar por la
garantía de los derechos fundamentales de las personas; entre ellos la salud. (GONZÁLEZ
MORÁN, Luis. De la Bioética al Bioderecho. Madrid : Universidad Pontifica de Comillas-Dykinson
S.L., 2006. P. 11).
428 Un aporte teórico de extraordinario valor crítico frente al proceso de sometimiento de la ética y
la bioética a la razón del Estado como una forma clara de imposición de procesos históricos
jurídico-políticos, es el legado por Hans Thomas en su artículo: “DE HIPÓCRATES A
KEVORKIAN: ¿HACIA DÓNDE VA LA ÉTICA MÉDICA?”. Traducido Del alemán al castellano por
José María Barrio Maestre. [Internet. 17 de en. 2007] En:<
http://www.unal.edu.co/bioetica/documentos/docum_07/7_48_de_hipocrates_a_kevorkian.pdf>.
Título original: “Von Hippokrates zu Kevorkian: Wohin treibt das Arztethos?”, en Imago Hominis
181
es un contrasentido a la teleología de la ética profesional y al principio de
autorregulación de cada profesión liberal; ya que, por ejemplo, la Ley 35 de 1989,
mal llamado ‘Código de ética del odontólogo colombiano’ no es un código de ética
normativa en sentido estricto, sino que es un cuerpo normativo heterónomo de
carácter coercible, inserto dentro de la estructura administrativa del Estado; al
punto que los Tribunales de Ética Odontológica (nacional o seccionales) son
financiados con recursos del Sistema General de Participaciones429 y las
actuaciones que se surtan en ellos son consideradas actos administrativos que
posibilitarían el derecho de acción para demandarlos en la Jurisdicción
Contencioso Administrativa.
(Quartalschrift des Instituts für Medizinische Anthropologie und Bioethik. Wien), Vol. VII/Nr. 1, 2000,
pp. 49-58.)
429 Colombia. Congreso de la República. Ley 715 de 2001, artículo 42, numeral 42.18
430 Colombia. Superintendencia Nacional de Salud. Circular Única. Título I, Capítulo IV.
431 Colombia. Ministerio de la Protección Social. Decreto 1011 de 2006.
182
Finalmente, ha de decirse que la Federación Odontológica Colombiana por
mandato legal, debe dirimir todo disentimiento profesional entre odontólogos; y por
su parte, las asociaciones gremiales de odontólogos -según las diversas
especialidades- plantean pautas de deber ser profesional para sus miembros a
través de sus estatutos.
4.1.5 Bioética.
La bioética consiste en el “estudio sistemático de las dimensiones morales–
incluyendo la visión moral, las decisiones, las conductas y las políticas de las
ciencias de la vida y del cuidado de la salud, usando una variedad de
metodologías éticas en un contexto interdisciplinario.”432 Esta definición es la que
se adopta en esta investigación en relación con el odontólogo operador jurídico del
SGSSS.
Se predica de los principios el tener un carácter prima facie, es decir, son “guías
generales que dejan lugar al juicio particular en casos específicos y que ayudan
explícitamente en el desarrollo de reglas y líneas de acción más detalladas” 440 y
que por lo mismo son tenidos como obligatorios o vinculantes por el sujeto moral
en igualdad de condiciones en tanto no colisionen entre sí o mientras no sean
rebasados en su aplicación por una consideración moral de mayor peso.
438Los principios son constructos intermedios entre las normas y las teorías éticas. Ibíd.
BEAUCHAMP y CHILDRES. pp. 98-99.
439 Si bien BEAUCHAMP y CHILDRESS ponen en un mismo nivel de vinculatoriedad a los
principios ético-bioéticos de respeto a la autonomía, no maleficencia, beneficencia y justicia, Diego
Gracia -por el contrario- los ubica jerárquicamente en dos niveles; ya que, “la no-maleficencia y la
justicia se diferencian de la autonomía y la beneficencia en que obligan con independencia de la
opinión y de la voluntad de las personas implicadas, y que por tanto tienen un rango superior a los
otros dos.” En la estructura jerárquica de Gracia, en el primer nivel --denominado de ‘autonomía’
o disciplinario-- se encontrarían los principios de no-maleficencia y justicia; el segundo nivel -el de
la ‘autorrealización’ o no disciplinario- se constituiría con los principios de autonomía y
beneficencia. Para ampliar estos conceptos véase a GRACIA, Diego. Procedimientos de decisión
en ética clínica. Madrid : Eudema, 1991. P. 126; y, en Introducción a la Bioética. Bogotá : El
Buho, 1991. P. 109-123
440 “Los principios obligan prima facie y pueden ser revisados. Un principio prima facie … es una
guía de acción normativa que establece las condiciones de permisividad, obligatoriedad, corrección
o incorrección de los actos que entran dentro de su jurisdicción”. (BEAUCHAMP Y CHILDRESS.
Op cit. p. 98)
441 Ibíd. p. 34
185
influencias externas de control del acto moral. Beauchamp y Childress, aducen
que “para que una acción sea autónoma no es necesario que el conocimiento y la
independencia sean totales, sino que bastará simplemente con cierto grado de
ambas.”442
453 Ibíd.
454 Ibíd. p. 254
455 Ibíd. p. 418
189
En relación con el sistema sanitario y el deber de observar fidelidad con el
paciente, los conflictos de intereses no considerados en la relación del profesional
de la salud con el paciente pueden conducir al quebrantamiento de los principios
bioéticos. “En particular las empresas financiadoras y los proveedores
institucionales han impuesto limitaciones a las decisiones médicas sobre el
diagnóstico y las intervenciones terapéuticas (…)que a veces, ponen el interés del
médico en conflicto con el mejor interés del paciente, produciendo serios conflictos
éticos de intereses, además de conflictos de fidelidad”(…).
Como mínimo, la fidelidad al paciente requiere esforzarse por colmar las
necesidades de éste, tanto como sea posible dentro de las directrices,
así como revelarle por qué no se le ofrece un procedimiento diagnóstico
o terapéutico potencialmente útil. La fidelidad de un clínico hacia los
pacientes puede requerir también esfuerzos para cambiar las
limitaciones profesionales e institucionales que no son conformes a los
intereses del paciente. El clínico puede tener que evaluar si la fidelidad
a los intereses del paciente requiere una modificación del sistema en
beneficio del paciente, aunque esta práctica puede implicar el engaño y
la violación de la fidelidad hacia los contratos y promesas a terceros456.
Las políticas públicas sanitarias estarían justificadas por la justicia distributiva ante
lo que se ha considerado como necesidades fundamentales y bienes primarios en
relación con la salud461.
Una primera fase dentro de la estructura básica del proceso de decisión moral, es
la obtención y verificación de información sobre el caso. Así como el método
científico aplicado en la elaboración de la historia clínica, busca la obtención de
suficiente información que permita llevar a un diagnóstico cierto y por ende a un
adecuado pronóstico y plan de tratamiento. En la ética-bioética, para la toma de
decisiones, es fundamental la determinación de los hechos mediante la obtención
y verificación de datos biológicos, sociales, creenciales, legales y de todo lo que
pueda aportar a “un mejor conocimiento de los implicados en la situación,
fundamentalmente el paciente y su entorno.”467 En el segundo paso debe darse la
identificación de los problemas éticos del caso, suscitados por los conflictos de
principios y valores. Para terminar, el tercer paso implica la toma de una decisión
inicial o tentativa que para quedar en firme deberá finalmente ser justificada
racional o ponderadamente, dando cuenta de ello mediante la argumentación468.
PROCEDIMIENTO DE DECISIÓN
RECOGIDA DE DATOS
-Historia Clínica
-Informes: social, jurídico, psiquiátrico, etc.
-Entrevistas personales: médicos, enfermos, etc.
D
I. CANON o NORMA MORAL FUNDAMENTAL I
Á
II. PRINCIPIOS Y NORMAS MORALES L
- Nivel 1: Normas de gestión pública O
G
- No-maleficencia O
- Justicia
- Respeto a las decisiones autónomas
I
- Beneficencia N
T
E
- Nivel 2: Normas de gestión privada R
D
- No-maleficencia I
- Justicia S
C
- Respeto a las decisiones autónomas I
- Beneficencia P
L
I
En caso de conflicto se seguirán las reglas específicas en el texto N
A
R
III. PONDERACIÓN DE CONSECUENCIAS
IV. JUSTIFICACIÓN DE LA DECISIÓN
ACTITUD DE APLICACIÓN
Fuente: Tomado de FERRER, Jorge J.; ÁLVAREZ, Juan C. En: Para Fundamentar la
Bioética. Ed. Universidad Comillas –Madrid- y Desclée De Brower. Bilbao 2003. p. 494.
196
4.1.5.4.2.1 Recogida de datos: Consiste en la determinación de los hechos y su
verificación abordando la información desde diferentes perspectivas. El agente o
los agentes morales deben evitar incurrir en yerros por sesgos en la recolección e
interpretación de los datos.
Frente a los problemas éticos presentes y futuros que son en últimas sobre los
que se puede tomar decisiones, una metodología que facilita su abordaje es la que
se conoce como el árbol de problemas; ya que los problemas éticos suelen estar
encadenados unos con otros en cuanto a las condiciones de tiempo, modo y lugar.
Conocer problemas pasados que tengan relación causal con los presentes y/o
futuros, posibilitará maximizar el respeto de los deberes y principios morales en
aras de resolver con mayor facilidad el difícil problema bajo examen. Cada caso
marcará la pauta metodológica a emplear, como por ejemplo la técnica de las
entrevistas personales.
471 Retómese la explicación dada en el título “Los principios ético-bioéticos”, sobre los niveles
jerárquicos planteados entre principios y específicamente entre las normas derivadas de cada uno
de ellos en tanto seas de gestión pública o de gestión privada. (Ibíd. 481-486 )
200
justificación de la decisión”472; máxime desde una perspectiva democrática y
pluralista que aboga por la participación.
tecnológico y especializado, y que está más orientada al servicio que al beneficio en el marco de
un código ético propio” (Starr, P. The social transformation of American Medicine. New York.
Basic Books Inc Punblishers. Estados Unidos. 1982. P.15). Para una aproximación de tipo socio-
económico relacionado con las profesiones liberales y su función gremial léase a Dingwall, R.
(2004). Las profesiones y el orden social en una sociedad global. Revista Electrónica de
Investigación Educativa, 6 (1). [Internet, 12 de jul. de 2011] Disponible en:
<http://redie.uabc.mx/vol6no1/contenido-dingwall.html>
475 HERNÁNDEZ ARRIAGA, Op cit. 361-373.
IRRIBARRA MENGARELLI, Roberto; RODRÍGUEZ YUNTA, Eduardo; TORRES QUINTANA,
476
odontólogo. En: Ética y odontología. Una introducción. Chile : Universidad de Chile, 2006. pp.
129-138.
477 PAYARES GONZÁLEZ, Carlos. ¿Es la práctica odontológica un trabajo social
descontextualizado?. Revista Facultad de odontología. Universidad de Antioquia. Vol. 8 – No. 1.
Segundo semestre 1996. Medellín. págs. 4-9.
478La profesión liberal, es concebida sociojurídicamente como aquélla que “constituye el ejercicio
de una de las carreras seguidas en centros universitarios o en altas escuelas especiales, por lo
general de actividad y trabajo sólo intelectual, aun cuando no excluya operaciones manuales;
como las del cirujano, y la de los arquitectos e ingenieros al trazar sus planos.” (CABANELLAS, G.
Guillermo, Diccionario enciclopédico de derecho usual. Buenos Aires : Heliasta. Tomo IV.)
479 CUENCA SALA, Emili. Op cit. p. 275.
480Para ahondar en las consideraciones éticas y jurídicas en torno a los honorarios médico-
odontológicos, remítase a: VÉLEZ CORREA, Luis Alfonso. Medicina y beneficio económico. En:
203
Es propicio parafrasear a Pellegrino quien sostiene que, en medio de los conflictos
de lealtades de los médicos al paciente o al enfoque utilitarista de los sistemas
sanitarios de contingencia de los costos, la apuesta se debe hacer al principio de
confianza legítima y la virtud de la fidelidad a la promesa481, por el cual la persona
enferma confía en que todas las decisiones y acciones médicas procuran la
garantía de su autonomía e integridad482.
Ética Médica. 3ª ed. Medellín : CIB, 2006. Pp. 124-135; las leyes 23 de 1981 y 35 de 1989
respectivamente desarrolladas por las sentencias de la Corte constitucional: C-106-97 y C-537-05.
481 “De hecho, la fidelidad es quizá la más fundamental de las virtudes del médico, tan
indispensable como la beneficencia y la renuncia al propio interés”. (PELLEGRINO. E. La relación
entre la autonomía y la integridad den la ética médica. Boletín de la oficina sanitaria panamericana.
Washington D.C. : OPS, 1990 Jun;108(No. 5 y 6):379-389). Algunos de los doctrinantes que se
han pronunciado frente a las tensiones entre la ética médica y la economía sanitaria son Tom
Beauchamp, James Childress, Diego Gracia, Elio Esgreccia, Carlos Abadía, Jaime Escobar Triana,
Gustavo García Cardona y Carlos Zambrano.
PELLEGRINO E. Deber Social y Complicidad Moral. Conflicto de lealtades para los médicos.
482
Cuadernos Del Programa Regional de Bioética. . Washington D.C. : OPS, 1997 Jul(4):93.
483 Medical Professionalism in the new millenium: a physicians’ charter. Lancet. 2002; 359:520-2
484 “En la actualidad la práctica de la odontología se enfrenta a importantes desafíos en nuestra
sociedad, desafíos que se centran en las crecientes disparidades existentes entre las legítimas
necesidades de los pacientes y los recursos limitados para satisfacer estas necesidades, la
creciente dependencia de las fuerzas del mercado para transformar los sistemas sanitarios y
también la tentación de los profesionales de abandonar su compromiso de velar por el bienestar de
los pacientes sucumbiendo al mercantilismo” (CUENCA SALA, Emili. Op cit. p. 279-280)
204
reestructurar el SGSSS en defensa del derecho universal e inalienable a la salud y
de la dignidad del ejercicio profesional.
500Es posible que en el acto médico, el profesional no cuenta con los conocimientos, habilidades,
destrezas o equipamiento necesario para diagnosticar o tratar a un paciente. En estos eventos, es
un imperativo ético-bioético derivar el paciente al especialista. En Colombia en el Sistema General
de Seguridad Social en Salud se ha establecido un sistema de referencia y contrarreferencia de
usuarios dentro de la red de prestadores de servicios de salud, propendiendo que cada paciente
sea atendido según su situación particular en el nivel de complejidad y con el talento humano en
salud que se corresponda (Decreto 4747 de 2007, Acuerdo 08 de 2009 y Ley 1438 de 2011).
501 DICCIONARIO MOSBY. Vol 1. Madrid : Mosby/Doyma libros S.A., 1995. p. 333/1538.
502 CEDIEL ÁNGEL, Ricardo. Semiología médica. Bogotá : CELSUS.. 1996. P. 537.
503El examen físico exige la implementación sistemática de métodos exploratorios, adoptados de la
semiología médica, tales como: la inspección visual, la palpación, la auscultación, la percusión, En
odontología la inspección visual facilitada por una fuente luminosa focalizada puede hacerse en
forma directa con o sin sistemas de aumento (binóculos o lupas), indirecta mediante el uso de
espejos. Las superficies duras de los dientes suelen ser evaluadas con un explorador fino y presión
suave (BARRANCOS p. 349). En la evaluación del periodonto resulta basilar la medición de los
niveles de inserción de la encía (epitelio de unión) al cemento radicular a través de un instrumento
denominado sonda periodontal. (NIKLAUS, Lang; LINDHE, Jan. Periodontología clínica e
implantología odontológica. 5ª ed. Ed. Panamericana, 2009. V 2, p. 577 /1364). Véase también
de CECCOTTI, Eduardo Luis y SFORZA, Ricardo. El diagnóstico en clínica estomatológica. .
Buenos Aires : Ed. Panamericana, 2007. P. 663.
209
durante la consulta- emitir mínimamente un diagnóstico presuntivo, hasta tanto
sea posible ratificarlo o reconsiderarlo, merced al análisis, integración e
interpretación de la información complementaria de las ayudas diagnósticas.
504 En Colombia, el CIE-10 fue adoptado a través de la Resolución ministerial 1895 de 2002,
constituyéndose en un componente esencial de los Registros Individuales de las Prestaciones de
Salud (RIPS), e insumo basilar del Sistema de Información de Prestaciones de Salud que posibilita
los procesos de dirección, regulación y control; así como el soporte de la venta de servicios
asistenciales de los prestadores de servicios del Sistema General de Seguridad Social en Salud.
210
enfermedades de las glándulas salivales, K12 estomatitis y lesiones afines, K13
otras enfermedades de los labios y de la mucosa bucal, K14 enfermedades de la
lengua.
4.2.1.2 El pronóstico.
Consiste en la “predicción de la posible evolución de una enfermedad basándose
en el estado de la persona y el curso habitual de la enfermedad observado en
situaciones similares”.505 En odontología, según la patología en cuanto a
extensión, severidad y compromiso sistémico será el pronóstico. Es posible
encontrar distintos grados de favorabilidad o desfavorabilidad506 en el pronóstico
dental, periodontal, oclusal y de otras estructuras que comprometerían en mayor o
menor grado la forma, función, estética, permanencia o no de componentes
anatómicos del sistema estomatognático507; e incluso el pronóstico llega a ser
malo cuando las patologías son de aquellas que pueden eventualmente
4.2.1.3 El tratamiento.
Es un sistema metódico de asistencia y cuidados prodigados al paciente para
combatir, mejorar o prevenir la enfermedad, trastorno o lesión. Ello sólo es
posible, tras haber recolectado y procesado intelectivamente cierta información
tendiente a obtener el diagnóstico y el pronóstico de la patología que afecta la
calidad de vida del paciente. Una vez se cumplieron esas etapas es deber del
clínico formular las propuestas de tratamiento que, según el caso particular, puede
ser de varios tipos: activo (orientado a curar), paliativo (aliviar el dolor), profiláctico
(para prevenir una enfermedad o trastorno), noxal (busca erradicar o controlar la
causa de la enfermedad) 509.
508NEVILLE, Brad W., DAMM, Douglas D., ALLEN, Carl M., BOUQUOT, Jerry E. Oral and
maxillofacial pathology. 3a ed. Ed. Saunders Elsevier. St. Louis Missouri. 2009. P. 968.
ISBN978-1-4160-3435-3.
509 MOSBY. Op cit. Vol. III. p 1092/1538.
510En Colombia, el ejercicio de la medicina alternativa fue reconocido y autorizado por la ley 1164
de 2007, artículo 19.
511 Op Cit. Ley 35 de 1989. Artículo 1º, literal C.
212
Los tratamientos deben obedecer a las necesidades del paciente con la salvedad
de que en el SGSSS las posibilidades se ven limitadas a los contenidos del Plan
Obligatorio de Salud/Plan de Beneficios (POS/PB) y excepcionalmente, mediante
trámite administrativo –solicitud al CTC-, o judicial –acción de tutela-, se accede a
tratamientos no incluidos en el POS (no POS).
4.2.1.3.1 La rehabilitación.
La rehabilitación se encuentra muy ligada a los tratamientos; de allí que se diga
sobre ésta que es un proceso terapéutico que -concomitante con la educación-
pretende que las personas discapacitadas por causa de enfermedades o
accidentes exploren “al máximo sus posibilidades funcionales” y alcancen un
“grado satisfactorio de bienestar e independencia”512; implementándose ayudas
técnicas especializadas apoyadas en el trato humano inter y transdisciplinar
(profesionales del área de la salud, familiares y amigos).
4.2.1.4 El pos-tratamiento.
Entraña un deber de cuidado del clínico frente al paciente tras la realización de los
procedimientos quirúrgicos o la terapéutica, al hacer seguimiento diligente a la
evolución de éste; implementando para ello “una vigilancia permanente que
garantice la superación de todas las dificultades que se le puedan presentar al
paciente… el acto médico no termina cuando el tratamiento quirúrgico o
terapéutico ha finalizado completamente sino cuando se finaliza exitosamente todo
el tratamiento o procedimiento incluyendo las actividades posteriores a
aquéllos”514. Lo anterior implica para el odontólogo el deber de la continuidad en
la prestación del servicio hasta considerar que las afecciones del paciente han
sido controladas, “(e)n especial, durante el tratamiento postoperatorio (p. ej.
extracciones u otros actos de cirugía), hasta que el paciente esté en condiciones
de recibir el alta”515.
516 IRELAND, Robert. Higiene dental y tratamiento. México : Manual Moderno, 2008. P. 150/574.
517 Ibíd. p. 151
215
4.2.2.3 La prevención de la enfermedad: consiste en la manera de evitar el
inicio o progreso de una enfermedad, en algunos casos lo toman como la
restauración de la función perdida por causa de la enfermedad; dada la amplitud
del concepto, la prevención según el objetivo buscado y por ende las acciones
desplegadas es clasificada como i) prevención primaria (dirigida al mantenimiento
de la salud individual y colectiva y a la reducción del riesgo de enfermedad a
través de acciones de protección específica y detección temprana); ii) prevención
secundaria (enfocada en la implementación de medidas terapéuticas que intentan
limitar la progresión y los efectos de la enfermedad) y iii) la prevención terciaria
(tendiente a rehabilitar a un individuo de las secuelas dejadas por las lesiones
causadas por enfermedad o accidente).
518 Las acciones de prevención en salud bucal -contempladas como parte del plan de beneficios
para todos los habitantes del territorio nacional –según las características del grupo etario al que
pertenezcan - son: control y remoción de la placa bacteriana, aplicación de flúor, aplicación de
sellantes y detartraje supragingival.
216
Otras acciones relevantes que transversalizan ética y administrativamente esa
relación profesional con el paciente a partir del acto odontológico son: i) el manejo
de la información y ii) la obtención del consentimiento informado.
519El paciente tiene derecho “a disfrutar de una comunicación plena y clara con el médico,
apropiadas a sus condiciones sicológicas y culturales, que le permitan obtener toda la información
necesaria respecto a la enfermedad que padece, así como a los procedimientos y tratamientos que
se le vayan a practicar y el pronóstico y riegos que dicho tratamiento conlleve”. (COLOMBIA.
Ministerio de Salud. Resolución 13437 de 1991. Por la cual se constituyen los Comités de Ética
Hospitalaria y se adoptan el Decálogo de los Derechos de los Pacientes. Art. 1 # 2.)
520“El odontólogo debe informar al paciente de los riesgos, incertidumbres y demás circunstancias
que puedan comprometer el buen resultado del tratamiento”. (Colombia. Congreso de la
República. Ley 35 de 1989, Artículo 5º). Las anteriores normas se concuerdan con la Ley 1164 de
2007 -artículos 26 # 5 y 34-38 en cuanto a los valores, principios, deberes y derechos del Talento
Humano en Salud.
521 KOTTOW, Op cit. p. 225-235/267
217
técnicos, sino de aquellos que sean significativos y que puedan, razonablemente,
incidir en la decisión del paciente”522.
En 1937 fue expedida la ley 51 y posteriormente, en 1962 la Ley 10 con las cuales
se pretendió reglamentar el ejercicio de la odontología a su vez que desestimular
la práctica empírica de una disciplina que se venía consolidando con rigor
académico. No obstante, la Federación Odontológica Colombiana como máximo
ente gremial de la profesión, desplegó ante el Congreso de la República una
ingente campaña política para expedir el “Código de Ética del odontólogo
colombiano”, labor que tuvo su fruto mediante la expedición de la Ley 35 de 1989,
reglamentado posteriormente a través del Decreto 491 de 1990.
4.3.4 Ley 1164 de 2007. Conocida como la Ley del Talento Humano en Salud
(THS). Su mayor aporte en el presente estudio del odontólogo como operador
jurídico del SGSSS tiene que ver con lo prescrito en su artículo 26, modificado por
529“Toda persona es libre de escoger profesión u oficio. La ley podrá exigir títulos de idoneidad.
Las autoridades competentes inspeccionarán y vigilarán el ejercicio de las profesiones. Las
ocupaciones, artes y oficios que no exijan formación académica son de libre ejercicio, salvo
aquellas que impliquen un riesgo social. Las profesiones legalmente reconocidas pueden
organizarse en colegios. La estructura interna y el funcionamiento de éstos deberán ser
democráticos. La ley podrá asignarles funciones públicas y establecer los debidos controles”
(Colombia. Constitución Política de 1991. Artículo 26)
530 Ibíd. Artículo 4.
531 Ibíd. Artículos 11 y 44.
532 Ibíd. Artículo 16.
533 Ibíd. Artículo 38.
534 Ibíd. Artículo 49.
535 Ibíd. Artículos 49 y 78.
536 Ibíd. Artículos 58 y 333.
223
la Ley 1438, artículo 104, en la que se estableció que el ‘acto propio de los
profesionales’:
Es el conjunto de acciones orientadas a la atención integral de salud,
aplicadas por el profesional autorizado legalmente para ejercerlas. El
acto profesional se caracteriza por la autonomía profesional y la relación
entre el profesional de la salud y el usuario. Esta relación de asistencia
en salud genera una obligación de medio, basada en la competencia
profesional.
Los profesionales de la salud tienen la responsabilidad permanente de la
autorregulación. Cada profesión debe tomar a su cargo la tarea de
regular concertadamente la conducta y actividades profesionales de sus
pares sobre la base de:
1. El ejercicio profesional responsable, ético y competente, para mayor
beneficio de los usuarios.
2. La pertinencia clínica y uso racional de tecnologías, dada la necesidad
de la racionalización del gasto en salud, en la medida que los recursos
son bienes limitados y de beneficio social.
3. En el contexto de la autonomía se buscará prestar los servicios
médicos que requieran los usuarios, aplicando la autorregulación, en el
marco de las disposiciones legales.
4. No debe permitirse el uso inadecuado de tecnologías médicas que
limite o impida el acceso a los servicios a quienes los requieran.
5. Las actividades profesionales y la conducta de los profesionales de la
salud debe estar dentro de los límites de los Códigos de Ética
Profesional vigentes. Las asociaciones científicas deben alentar a los
profesionales a adoptar conductas éticas para mayor beneficio de sus
pacientes.
Las Leyes 100 de 1993 y 1438 de 2011 fueron tratadas en el título “La salud en el
derecho legislado nacional”. Sin embargo, sobre ellas se volverá en el siguiente
capítulo señalando su estrecha relación con la profesión odontológica en el ámbito
del SGSSS.
En ese sentido, el derecho a ejercer la odontología hace parte del núcleo esencial
de los derechos fundamentales “a ejercer las profesiones en las áreas de la salud
y al trabajo”544; ya que quien la ejerce cuenta con la autorización del Estado al
reconocérsele su idoneidad tras haber cumplido una serie de requisitos
conducentes a la obtención del condigno título; por ello, el profesional de la
odontología cuenta con la facultad “de desempeñar trabajos relacionados con la
disciplina que escogió para desarrollar su vida económica, social y espiritual”. La
preceptiva constitucional insta al Estado, en el marco de los Derechos
Económicos, Sociales y Culturales, a que establezca las garantías para facilitar el
desempeño y contribuir con la “tranquilidad y relativa seguridad para proveer las
necesidades y para realizar las aspiraciones económicas personales y familiares
de su titular”545. Las leyes expedidas por el Congreso de la República, cuando
tocan el núcleo del derecho fundamental al libre ejercicio de profesión u oficio 546,
han de ser tramitadas como leyes de carácter estatutario.
543 Colombia. Corte Constitucional. Sentencia T-756 de 2008. M.P. Marco Gerardo Monroy Cabra
544 Ibíd.
545 Sentencia C-942-09, M.P. Jorge Ignacio Pretelt Chaljub. Véanse entre otras las sentencias C-
756 de 2008, C-1063-08 por las cuales se declara inexequible el proceso de recertificación del
talento humano en salud, artículos 10, 18, 24 y 25 de la Ley 1164 de 2007.
546 Para la Corte Constitucional, el núcleo esencial del derecho al libre ejercicio de profesión u
oficio, “supone, entre otros aspectos, la existencia y goce de la facultad que el Estado otorga o
reconoce a una persona para desempeñarse en el campo técnico en el que su titular acreditó
conocimientos y aptitudes. De igual manera, hace parte del mínimo de protección del derecho la
posibilidad de desarrollar, aplicar y aprovechar los conocimientos profesionales adquiridos, en
condiciones de igualdad, dignidad y libertad. Pero, también, como lo advirtió este Tribunal en
anterior oportunidad, se afecta el contenido mínimo de este derecho fundamental cuando el
legislador ‘exige requisitos que vulneren el principio de igualdad [o] restrinjan más allá de lo
estrictamente necesario el acceso a un puesto de trabajo o impongan condiciones exageradas
para la adquisición del título de idoneidad.” (Colombia. Corte Constitucional. Sentencia T-756 de
2008. M.P. Marco Gerardo Monroy Cabra.)
226
En el campo específico de la deontología del odontólogo colombiano –Ley 35 de
1989- la Corte Constitucional ha emitido varios fallos relacionados con el ramo;
fallos que parten del supuesto de que “la odontología, como todas las demás
profesiones que se ocupan de la salud, se funda en los mas altruistas valores
humanos, lo cual exige su ejercicio con un carácter eminentemente
humanístico(…)”547 y que por lo mismo se basa en el principio de la buena fe
[s]egún el cual hay que partir del supuesto lógico de que el profesional
normalmente aspira a desempeñarse de conformidad con los valores
morales, instruidos e inculcados en las facultades donde obtuvo su
formación académica, pues estas se hallan en la obligación de transmitir
la enseñanza de la respectiva ciencia dentro de unos principios éticos
que emergen de los deberes morales que son consustanciales con el
desarrollo recto y responsable de las labores profesionales, lo cual
repugna a la asunción de conductas indebidas que tengan una
repercusión negativa en la sociedad548.
547 Colombia. Corte Constitucional. Sentencia C- 355 de 1994. M.P. Antonio Barrera Carbonell.
548 Ibíd.
549 Ibíd.
227
requiere el paciente: si es indispensable para la salud oral o corresponde a un
tratamiento meramente estético, eventos en los que interviene además, la
situación económica del paciente”550.
550 Colombia. Corte Constitucional. Sentencia C-537-05. M.P. Alfredo Beltrán Sierra.
551 “Deben comprender los médicos que muchas veces detrás de un acto médico hay un acto
jurídico, regulado incluso en frecuentes ocasiones por normas imperativas de obligatorio
cumplimiento, lo que implica que cada médico que realiza un acto de esta categoría deba cumplir
la ley… ese desconocimiento de lo jurídico tiene sus raíces más profundas en la poca importancia
que suele darse en la formación de los profesionales, técnicos y tecnólogos sanitarios a otras
áreas del conocimiento y dentro de ellas el derecho” (CASTAÑO DE RESTREPO, María P. Op cit.
p. 96/449.)
228
CUADRO # 1. Categorías teóricas y dimensiones de análisis tenidas en cuenta en
la investigación “El odontólogo como operador jurídico del SGSSS.”
229
SEGUNDA PARTE
CAPÍTULO V
Introducción
Este capítulo es fundamental dentro de la investigación porque dará cuenta del
cumplimiento de los objetivos de la misma; por ende, tratará de desarrollar la tesis:
el odontólogo es un operador jurídico, lo que per se implica efectuar un ejercicio
hermenéutico de comprensión marcadamente analítico-interpretativo sobre el
influjo que deberían tener las dimensiones: científico-técnica, ético-bioética y
jurídica (derecho legislado y jurisprudencial) en un acto odontológico cuyo ‘telos’
sea tutelar en el escenario clínico-administrativo el derecho a la salud de las
personas.
Harán parte del análisis y de la síntesis los elementos conceptuales del orden
filosófico como los juegos del lenguaje de Wittgenstein, la propuesta hermenéutica
de Gadamer sobre la comprensión, la principialista y el procedimiento decisional
ético-bioético de Ferrer y Álvarez; del orden socio- jurídico, en especial el
concepto de operador jurídico y la teoría versada en la conciencia jurídica; del
orden jurídico (derecho legislado y jurisprudencial) en torno a la odontología y el
derecho a la salud, destacándose la competencia del odontólogo para fungir como
operador jurídico en el Sistema General de Seguridad Social en Salud (SGSSS)
en virtud al reconocimiento de su idoneidad por parte del Estado, a su autonomía y
autorregulación profesional; así como, de los principios de confianza legítima y
‘pro homine’. Especial énfasis se hará al análisis sobre los variados
planteamientos realizados por la Corte Constitucional con respecto a los
230
tratamientos odontológicos no contenidos en el Plan Obligatorio de Salud (no
POS) y el mecanismo de la tutela.
Ese juego del lenguaje se refiere entre otras cosas al sentido y alcance del
derecho a la salud, a los derechos y deberes de los diferentes participantes y
actores, a la financiación del sistema, a la naturaleza de las instituciones que
participan ora con prestaciones asistenciales, ora con prestaciones económicas; a
las sanciones derivadas del incumplimiento de las obligaciones y de las
autoridades facultadas para impartirlas.
Colombia. Corte Constitucional. Sentencia T-760 de 2008. Numeral 3.2.1.4. M.P. Manuel José
552
Cepeda Espinosa.
232
su vida cotidiana busca -a través de diferentes procesos cognitivos y prácticos-
comprender-interpretar, integrar y aplicar-crear el derecho que le vincula.
Los doctrinantes Treves y Charry coinciden en parte que cualquier persona puede
fungir circunstancialmente como operador del derecho en términos de aquél555, o
como ejecutor jurídico en términos de éste; máxime cuando existe el mandato
constitucional para todas las personas de aplicar preferencialmente la Constitución
553 Colombia. Corte Constitucional. Sentencias C- 131 de 1993, T-715/99, T-827-99 M.P.
Alejandro Martínez Caballero; C-063-10 M.P. Humberto Antonio Sierra Porto.
554 Colombia. Corte Constitucional. Sentencia T-859-03 M.P. Eduardo Montealegre Lynett
555 TREVES, Renato. Introducción a la sociología del derecho. Madrid: Taurus; 1978. p. 202.
233
en caso de incompatibilidad con la ley556. Esa ampliación -en términos
gadamerianos- del “horizonte de sentido” con respecto a que cualquier persona
puede ser -a la luz de lo normado- un operador jurídico, se identifica con el trabajo
de los estudiosos de la conciencia jurídica para quienes cada individuo en busca
de sentido concibe, asimila e interactúa con todo el andamiaje jurídico-institucional
que le vincula557.
556 CHARRY, Juan Manuel, citado por TOBO RODRÍGUEZ, Javier. La Corte Constitucional y el
control de constitucionalidad en Colombia. Ediciones Jurídicas Gustavo Ibáñez. Bogotá. 1999.
p.177
557 EWICK, Patricia y SILBEY, Susan S. (1992). Op cit. p.273.
234
5.4 EL ODONTÓLOGO Y EL DERECHO LEGISLADO
Esa profesión liberal y su ejercicio -con un fuerte componente deontológico-
cuenta con abrigo constitucional558 y legal559 en cuanto a la autonomía que tienen
las personas de elegir a la odontología como carrera y actividad disciplinar
tendiente al desarrollo de su dignidad humana; ello, sin perjuicio de la
competencia estatal de dirigir, inspeccionar, vigilar y controlar la prestación
responsable del servicio de salud por parte del odontólogo a través de entidades
públicas (como servidor público o contratista) o privadas (como profesional
independiente, empleado o contratista) sean o no parte del SGSSS.
Dentro del juego del lenguaje deóntico y normativo560, sólo puede ejercer la
profesión de odontólogo aquél que acredite condiciones académicas que avalen
su idoneidad: la obtención del título de profesional en institución de educación
superior legalmente reconocida o la convalidación del mismo en el evento de
haber sido titulado en el extranjero, y finalmente, encontrarse certificado mediante
inscripción en el Registro Único Nacional.
558Colombia. Constitución Política. Artículos 1, 2, 4, 5, 6, 16, 26, 48, 49, 78, 83,90, 95, 122, 333,
356, 357, 365 y 366.
559Principalmente la ley 9 de 1979, ley 35 de 1989, ley 10 de 1990, ley 100 de 1993, ley 1122 de
2007, ley 1164 de 2007, ley 1438 de 2011. La ley 10 de 1962 en lo atinente a la profesión
odontológica debe tenerse como derogada tácitamente por la anterior normativa y por la Ley 599
de 2000.
560Colombia. Congreso de la República. Ley 1164 de 2007. Artículo 18 # 1, literales (a) y (c); #2
(La certificación por inscripción en el Registro Único Nacional del talento humano en salud aún no
ha sido reglamentado).
561 Colombia. Congreso de la República. Ley 1438 de 2011. Artículo 3.
562 Ley 1438 Artículos 3 -#3.8; 58, 107,
235
afiliados. Además, tiene el deber de colaborar con las autoridades en la
elaboración y aplicación de los protocolos563 y guías de atención564 relacionados
con los medicamentos, procedimientos, intervenciones y actividades del Plan de
Beneficios565 siguiendo los referentes basados en la evidencia científica566;
procurando formarse y mantenerse actualizado continua y preponderantemente en
lo atinente a programas de Atención Primaria en Salud de conformidad con las
características y necesidades en salud de la población.567
Otro tipo de consideraciones para el odontólogo que trabaja al interior del SGSSS,
es la de su aporte con los sistemas de información por medio del diligenciamiento
de aquellos registros que alimentan ciertos indicadores568 sobre fomento,
prevención, tratamiento y rehabilitación. Finalmente, ha de decirse que es basilar
en el ejercicio de la odontología dentro del SGSSS –so pena de sanciones
administrativas, ético disciplinarias y judiciales569- el deber de agilizar y prestar
oportunamente la atención de urgencias570, así como realizar las actividades en
salud derivadas de enfermedad general, maternidad, accidentes de trabajo,
enfermedad profesional, accidentes de tránsito y eventos catastróficos que le
atañan a su área específica de competencia disciplinar; sin perjuicio de hacer uso
576 Aquí se entenderá como operador jurídico en sentido amplio, ya que la Ley 35 de 1989
posibilita que el odontólogo tenga funciones de operador jurídico en sentido estricto como auxiliar
de la justicia (Artículo 1º literal –h-)
577 Colombia. Congreso de la República. Ley 35 de 1989. Artículo 1º literal (b).
578 Ibíd. Art. 1º. Literales (c) y (d).
579 Ibíd. artículos 2, 5, 8, 11, 12, 14, 15, 17, 25
580 Ibíd. Artículo 38
238
incurrir en la infracción de la “ética”581 que le regula. Parte de ese compromiso del
odontólogo con la sociedad consiste en que su práctica profesional al interior del
SGSSS colombiano se encuentra fundamentada en el reconocimiento de la
inescindible relación existente entre el derecho a la salud de las personas y la
dignidad humana; y que desde tal premisa habrá de prodigar la atención que sus
pacientes ‘requieren’582. Nótese como ese comprender la preceptiva deontológica
de la odontología por el profesional -en perspectiva del derecho a la salud en el
SGSSS- ha de implicar procesos de cognición, interpretación, integración para el
‘hacer’; es decir, para su aplicación por acatamiento en forma de actos
concatenados de operación jurídica.
581 El artículo 26, numeral 5º de la Ley 1164 de 2007, modificado por el artículo 104 de la ley 1438
de 201,1 liga las conductas “ético normativas” de los profesionales de la salud con el
desenvolvimiento de éstos en el Sistema General de Seguridad Social en Salud al preceptuar que
“(l)as actividades profesionales y la conducta de los profesionales de la salud debe estar dentro de
los límites de los Códigos de Ética Profesional vigentes”.
582El término ‘requieren’ es un elemento basilar en el concepto de derecho a la salud desarrollado
por la Corte Constitucional en relación con las necesidades de tratamiento de los afiliados al
SGSSS y como tal será desarrollado en otro apartado dentro de éste capítulo.
583 Op cit. Ley 1438 de 2011. Artículo 105.
239
valores que regulan el ejercicio de su profesión”, lo que sólo es posible si se han
agotado otros momentos en la ‘espiral hermenéutica’584 del complejo acto
odontológico: conocer, interpretar, integrar las nociones jurídicas y metajurídicas y
luego entonces poder llegar al momento de su aplicación en beneficio de su
paciente.
Por tratarse de ‘ratio decidendi’587 con fuerza vinculante de carácter general –que
no meramente interpartes- se destaca en la anterior argumentación el
reconocimiento expreso de que el juez no es el único operador jurídico en el
SGSSS, sino que lo son también las Entidades Promotoras de Salud (EPS), las
Instituciones Prestadoras de Salud (IPS) y otros actores particulares que como el
odontólogo caben dentro de ese ‘etc’. Igualmente, es muy oportuno destacar que
el razonamiento progresista y progresivo de la Corte espera que los operadores
jurídicos como el odontólogo –al servicio de la dignidad humana- ajuste su
conducta como tal a los criterios de unificación que en esa materia, “de manera
paulatina”, adopte la corporación.
Colombia. Corte Constitucional. Sentencia T-760 de 2008 numeral 4.4.3. M.P. Manuel José
591
Cepeda Espinosa.
592 Ibíd. Sentencia T-760 de 2008. Numeral 4.4.3.2.1
243
Constitucional a la autonomía del profesional, apoyándose en la aplicación del
principio de confianza legítima, por el cual se reconoce la idoneidad de los
médicos-odontólogos para atender la enfermedad de sus pacientes y “el
reconocimiento tácito de la existencia de un vínculo jurídico”593 profesional-
paciente.
593 Sentencia T-760-08 citando la Sentencia T-662 de 2006, M.P. Rodrigo Escobar Gil.
594 Colombia. Ministerio de la Protección Social. Resolución 548 de 2010. Artículo 7º.
595 COLOMBIA. Superintendencia nacional de salud. Concepto solicitado sobre movilidad de los
afiliados en el Sistema General de Seguridad Social en Salud y sobre suspensión y pérdida de
antigüedad. [Internet, 28 de feb. de 2011). p. 49. Disponible en>
244
que los diferentes operadores jurídicos vinculados al SGSSS adopten los
elementos cualitativos normativizados en la Ley 100 de 1993 y la Resolución 5261
de 1994596 tendientes a estructurar una “atención en salud de óptima calidad”597
para salir siempre en defensa de los usuarios.
Conclusión
A manera de conclusión de éste acápite, se plantea que han sido elucidadas
suficientemente las razones socio-jurídicas y del derecho legislado y
jurisprudencial por las cuales es dable afirmar que el odontólogo es un operador
jurídico del SGSSS. Una de las formas de concreción fáctica de tal aseveración
por parte de aquél es cuando solicita -en defensa del derecho a la salud y dignidad
de sus pacientes- un medicamento, intervención, procedimiento o actividad no
POS como cirugías periodontales, ortodoncia y/o rehabilitación protésica; es decir
que, la conducta del odontólogo al diligenciar y remitir el formato de solicitud de
servicios no POS al Comité Técnico Científico (CTC) de la EPS, pretende la
inaplicación de la norma prescriptiva de las exclusiones del Plan de Beneficios y
de este modo tutela598 constitucionalmente -desde el escenario clínico- el derecho
fundamental a la salud de la persona del paciente/usuario.
http://www.dmsjuridica.com/CODIGOS/DOCTRINA/SUPERSALUD/Conceptos/afiliacion/perdida_a
ntiguedad.pdf
596 La Resolución 5261 de 1994 cuenta con una vigencia parcial, ya que por mandato legal la
CRES asumió entre otras cosas la regulación del POS y la UPC, acciones que ha efectivizado a
través de la expedición de una treintena de Acuerdos.
597 Ibíd. p. 45.
598 Tutela ha de ser entendida en sentido lato como todas aquellas acciones autónomas o
heterónomas tendientes a preservar o restaurar un bien o derecho individual o colectivo. En
materia de salud propongo –para efectos explicativos- la existencia de tres líneas o frentes
tutelares de ese bien y derecho: las dos primeras líneas serían extrajudiciales y la última línea sería
la tutela judicial como acción constitucional. Sobre la línea o frente tutelar afirmo que es
personalísimo; en ésta se involucran factores biopsicosociales protectores o lesivos de la situación
de salud del individuo. Serían algunas acciones propias en este primer escenario la promoción de
la salud, la prevención de la enfermedad y el cumplimiento de las recomendaciones y
prescripciones de los profesionales de la salud en caso de enfermedad. La segunda línea tutelar
se integraría por la asistencia en salud con criterios de oportunidad, calidad, y suficiencia a partir
de la atención primaria en salud y hasta los niveles de mayor complejidad. Dentro de esta línea se
encuentra al odontólogo. Finalmente, ajena al campo específico de la prestación de servicios de
245
Esa tutela implica unos procesos de operación jurídica; verbigracia, el
conocimiento, la interpretación, la integración y la aplicación del sentido y alcance
del derecho a la salud, de la principialista de la Seguridad Social, de los
contenidos y exclusiones del POS y de los trámites administrativos en procura de
autorización; sirviéndose además de elementos metajurídicos como la integración
de la racionalidad científico-técnica de la ‘lex artis’ aplicada a los diferentes
momentos del acto odontológico (diagnóstico, pronóstico, plan de tratamiento,
pos-tratamiento, información) y las nociones éticas-bioéticas (principios de no
maleficencia, justicia, autonomía y beneficencia). El anterior acto de comprensión-
concreción a cargo del odontólogo, en perspectiva de hermenéutica y conciencia
jurídica, será desarrollado en los siguientes títulos.
salud -pero vinculada a través del derecho de acceso a la justicia- aparece la tutela judicial por la
cual se acciona a la jurisdicción constitucional para que un juez valore la presunta vulneración o
amenaza al derecho a la salud según el sistema de reglas de ese mecanismo, que en últimas
remitirá al ciudadano hacia los dos frentes antes vistos.
600La Corte Constitucional ha explicado que “toda persona tiene derecho a que se le garantice el
acceso efectivo a los servicios médicos contemplados dentro de los planes obligatorios de salud”
(Sentencia T-005 de 2005; véase también la SU-819 de 1999). Sin embargo, ésta ha sido enfática
en afirmar que cumpliéndose con ciertos criterios, tal garantía no sólo se limita al POS; ya que
cuando la persona requiere con necesidad servicios que no estén incluidos en el plan de beneficios
pero que son indispensables para conservar la salud, la vida digna y la integridad personal, dicho
servicio le debe ser prestado. (Sentencia T-760-08 M.P. Manuel José Cepeda Espinosa)
247
desarrollo y posicionamiento histórico internacional de los derechos económicos,
sociales y culturales de la Seguridad Social y la Salud; sumado a las
interpretaciones auténticas que del Pacto Internacional de Derechos Económicos
Sociales y Culturales ha hecho el Comité de Derechos Económicos, Sociales y
Culturales de la Organización de Naciones Unidas (CDESC-ONU); además de
cierto precedente jurisprudencial de la misma Corte y de los aportes de
doctrinantes que consideran que los derechos sociales prestacionales al igual que
los derechos de libertad como derechos fundamentales; sumándose todo ello al
sustrato fáctico permanente de las sistemáticas, reiteradas y anómicas prácticas
desplegadas por diferentes actores del SGSSS con las cuales se vulnera,
amenaza y pone en peligro el derecho a la salud de las personas, lo que
consecuencialmente deriva en la incesante actividad tutelar del Juez
constitucional.
En suma, es un imperativo moral, ético y jurídico para cada odontólogo que trabaja
al interior del SGSSS, reconocer -y obrar en consecuencia durante todos los
momentos del acto odontológico- la dignidad y el derecho fundamental que le
asiste a la persona (afiliado/usuario) de acceder a los servicios del SGSSS según
lo ‘requiera’.
601 Ibíd. Artículo 49, modificado por el A.L. 02 de 2009; conc. artículo 48 ius-ibídem.
249
beneficios de ambos regímenes. Más adelante, la misma ley da la posibilidad de
que los afiliados o las empresas opten por tomar Planes Voluntarios de Salud que
amplían las posibilidades prestacionales, financiándose a través de la figura del
gasto de bolsillo (Art. 169). Complementa los antes dicho las disposiciones
pertinentes de la ley 1122 de 2007 y 1438 de 2011.
602 El precepto que desde la academia se ha estado tratando de entronizar como juego del
lenguaje de la práctica odontológica en Hispanoamérica es el de ‘bucalidad’ en vez de ‘oralidad’.
Las razones son de orden lingüístico y socio-epistemológico. Véase al respecto la revisión
efectuada por BELTRÁN S. Magda. De lo oral a lo bucal en la odontología. Revista Colombiana de
Investigación en Odontología ACFO. Vol. 2 No. 5. Noviembre. 2011. Versión electrónica pendiente
de ser publicada. En el plano normativo ya se avizoran esas diferencias posturales: La normativa
que ha reglamentado el POS – Resolución 5261 de 1994, Acuerdos 08 de 2009 y 29 de 2011 –
hace referencia a la salud oral, no obstante, la Resolución 3577 de 2006 -Plan Nacional de Salud
Bucal- y el Decreto 3039 de 2007 – Plan Nacional de Salud Pública- reseñan al término compuesto
salud bucal.
603Se alude a significativos los actos jurídicos reglamentarios que marcan la política legislativa
general de los Planes de Beneficio en el tiempo y no a los Acuerdos que han modificado a aquéllos
con actualizaciones parciales. Véanse los Acuerdos de la Consejo Nacional de Seguridad Social
en Salud y de la CRES que han cumplido con este propósito.
250
garantizado a los afiliados por las EPS y/o las Entidades Territoriales (ET) a través
de la prestación efectiva por parte de las IPS contratadas; dejando en claro que –
salvo situaciones especiales como la atención de urgencias o remisión autorizada
por la EPS- el paciente debía acceder a los servicios asistenciales a través del
primer nivel de complejidad, en el Municipio o Zona de su residencia.
El odontólogo general hace parte del primer nivel de complejidad dentro de la red
institucional de prestadores de servicios, por ello, al igual que el médico general se
le puede considerar como la “puerta de entrada obligatoria del afiliado a los
diferentes niveles de complejidad definidos para el Sistema de Seguridad Social
en Salud”604 cuando sus necesidades de atención odontológica ameriten mayores
recursos científico técnicos; como por ejemplo en el caso de enfermedades
degenerativas de la articulación temporomandibular (K076) o de aquéllas
clasificadas como catastróficas; verbigracia, el cáncer bucal (C140-149) o el
trauma máxilofacial (S024-S029).
252
quirúrgica, drenaje de abscesos; odontopediatría: exodoncia diente temporal,
frenectomía o frenotomía, resina preventiva presellante.
Establecido el anterior listado, se pasa al título del POS para el primer nivel de
complejidad, señalando que la consulta externa no debe ser inferior a 20
minutos605 y que
La atención odontológica incluye actividades de educación, motivación
y prevención, las cuales serán de carácter obligatorio y se brindarán
a todo paciente que inicie su atención. Tales actividades serán ofrecidas
por el Odontólogo y una auxiliar de higiene oral de la E.P.S.
directamente o de las I.P.S. con las cuales se tenga contrato o convenio.
Las actividades del primer nivel de atención constan de: Examen clínico
odontológico, R.X en caso necesario, educación en salud oral,
indicaciones y práctica de cepillado, indicaciones y práctica con hilo
dental, control de placa, detartraje supragingival, sellantes de fosas y
fisuras, topicación con flúor, profilaxis final.
Cuando el paciente se encuentre suficientemente motivado sobre su
higiene oral y presente un máximo de placa del 15% se debe continuar
con tratamiento curativo que incluye: obturaciones con resina de
fotocurado, obturaciones con amalgama de plata, extracciones dentales
sencillas y/o quirúrgicas, curetaje y alisado radicular, endodoncias606.
El juego del lenguaje sobre contenidos del POS fue ampliado con miras a la
precisión con el glosario615 del Acuerdo 08 de 2009: más de cuarenta términos
fueron puestos a disposición de los diferentes operadores jurídicos del SGSSS
Colombia. Corte Constitucional. Sentencia T-760-2008. Numeral 6.1.2.2. M.P. Manuel José
608
Cepeda Espinosa.
609 Colombia. CRES. Acuerdo 004 de 2009.
610 Colombia. CRES. Acuerdo 027 de 2011.
611 Colombia. CRES. Acuerdo 08 de 2009. Artículo 1º
612 Ibíd. Artículos 2º y 3º.
613 Ibíd. Artículo 7º.
614Según lo planteado por la Corte Constitucional en la Sentencia T-760 de 2008, hubiese sido
más técnico que la CRES hubiese redactado la disposición en términos de “requerirlos”, en lugar
de “necesitarlos”.
615Ibíd. Artículo 8º glosario sobre generalidades del SGSSS, artículo 38º glosario en relación con
los medicamentos, artículos 53º y 55º glosario sobre eventos y servicios de alto costo.
254
para facilitar sus labores hermenéuticas y de aplicación del derecho en sus
respectivos ámbitos de competencia616. Su conocimiento y dominio resultaban
basilares para el odontólogo so pena de caer por desconocimiento en una “babel”
comunicativa con el resto de los actores que interactúan en el Sistema.
620Colombia. CRES. Acuerdo 29 de 2011. Artículo 1º. Considérese también el artículo 7º que
exige a las EPS la garantía efectiva a los afiliados de acceder a las tecnologías en salud
contempladas en el POS.
621 El término ‘Tecnología en salud’ ha sido acuñado recientemente por la CRES en los glosarios
de los Acuerdos 028 y 029 de 2011, definiéndolo –para efectos prácticos- como un concepto
amplio que incluye todas las actividades, intervenciones, insumos, medicamentos, dispositivos,
servicios y procedimientos usados en la prestación de servicios de salud, así como los sistemas
organizativos y de soporte con los que se presta esta atención en salud. (Ibíd. Artículo 4º, numeral
24)
622 Ibíd. Artículo 2º.
623 Ibíd. Artículo 3º.
624 “Consulta odontológica: Valoración y orientación brindada por un odontólogo a los problemas
relacionados con la salud oral. La valoración comprende anamnesis, examen clínico, definición de
impresión diagnóstica, plan de tratamiento y tratamiento en cualquier fase de la atención,
promoción, prevención, curación y/o rehabilitación. La consulta puede ser programada o de
urgencia, general o especializada”. (Colombia. CRES. Acuerdo 29 de 2011. Artículo 4º, numeral
12º) Nótese como de alguna manera se reglan los diferentes momentos del acto odontológico en el
256
Como herramientas hermenéuticas el odontólogo como operador jurídico del
SGSSS deberá tener muy presente los siguientes lineamientos: i) los principios
generales del POS625, ii) los criterios para las exclusiones626, iii) los criterios
generales para las inclusiones del POS627, iv) las exclusiones del régimen
contributivo628, v) las inclusiones de ambos regímenes – que en materia de salud
bucal se encuentran unificados629 y que son citadas directamente en el texto del
acuerdo como aquéllas enlistadas en sus anexos 1, 2 y 3; y iv) lo pertinente de las
coberturas especiales para los menores de 18 años630.
Las aclaraciones e inclusiones más relevantes en ‘salud oral’ son las siguientes:
No existen restricciones con respecto al número de superficies dentales
cubiertas por el POS y que prima el criterio del odontólogo tratante según la
necesidad631.
Las obturaciones temporales se tienen como actividades que forman parte
integral del tratamiento de operatoria dental632.
Los pacientes que por sus condiciones especiales requieran para sus
tratamientos de anestesia general o sedación asistida, “se entiende que
éstas se encuentran incluidas en el POS”633.
SGSSS; apartándose el autor del término ‘curación’ empleado por la entidad; ya que ni los
profesionales de la salud, ni las tecnologías en salud curan. Quien se cura es el paciente.
625 Los principios generales del POS son: integralidad, territorialidad, complementariedad,
pertinencia demográfica y epidemiológica, costo-efectividad, eficiencia y sostenibilidad financiera,
participación, transparencia, competencia, corresponsabilidad y calidad. (Colombia. CRES.
Acuerdo 29 de 2011. Artículo 5º).
626 Ibíd. Artículo 6º.
627 Ibíd. Artículos 8 y 9.
628 Ibíd. Artículo 6º. Este artículo es uno de los que en mayor medida posibilita la aplicación del
principio pro homine por parte del operador jurídico.
629 Ibíd. Artículos 16, 37, 49 #10, 28 y 29; y 72.
630 Ibíd. Título IV.
631 Ibíd. Artículo 16.
632 Ibíd. Artículo 16, Parágrafo 1º.
257
Incluyó las prótesis dentales mucosoportadas totales (C00001634) para los
afiliados y beneficiarios a quienes les sea indicada por el profesional y
tengan un ingreso base de cotización igual o inferior a dos salarios
mínimos635 y la topicación de flúor en barniz (C00015)636.
Orienta la conducta del prestador de servicios de salud con respecto a
agotar primero los contenidos de cobertura por otros planes de beneficio
antes de que entre a suministrarse los beneficios del POS; especialmente en
accidentes de trabajo y enfermedades profesionales, eventos catastróficos y
accidentes de tránsito, plan de salud de intervenciones colectivas, planes
voluntarios de salud y otros.
En cuanto a las exclusiones del POS odontológico se tienen “los
tratamientos de periodoncia, ortodoncia, implantología, dispositivos
protésicos en cavidad oral, blanqueamiento dental en la atención
odontológica, diferentes a los incluidos en el presente acuerdo”637; enjuagues
bucales y cremas dentales638; y cepillo y seda dental639.
259
respetar los principios de razonabilidad y proporcionalidad en un
contexto de asignación de recursos a las prioridades de la salud641.
Varias son las sentencias de la Corte Constitucional relacionadas con la tutela del
derecho a la salud cuando tienen origen en la negación que hace la EPS o los
prestadores de servicios a la persona del usuario de acceder a medicamentos,
actividades, intervenciones y procedimientos odontológicos excluidos del POS.
Estas sentencias son susceptibles de ser agrupadas en tres grupos, a saber: i) las
que niegan la tutela al derecho a la salud accediendo a tratamientos No POS, ii)
las que conceden la tutela al derecho a la salud a través del acceso a tratamientos
No POS y iii) las que no tienen por objeto decidir sobre la presunta vulneración,
violación o amenaza a la salud del paciente por negación de servicios
odontológicos, pero que en su parte motiva traen en sus argumentos los
tratamientos odontológicos.
5.6.1.4.1 GRUPO 1. Las que niegan la tutela: Dentro de las tres sentencias
analizadas que negaron la tutela642 al derecho a la salud se tiene que las
entidades accionadas fueron EPS del sector privado y que el derecho fundamental
vulnerado no siempre aparecía expreso; empero, se infería que era el derecho a la
salud relacionado con la intención de los accionantes de recibir tratamientos
odontológicos no incluidos en el POS; por ejemplo: prótesis, tratamiento
periodontal y cirugía periapical (tratamiento quirúrgico de una lesión de origen
endodóncico).
641Colombia. Corte Constitucional. Sentencia T-760 de 2008. Numeral 6.1.1.2.2. M.P. Manuel
José Cepeda Espinosa.
642 Colombia. Corte Constitucional. Sentencias: T-1276-03, T-343-03, T-543-03
260
Igualmente, una de ellas643 propuso la excepción de incompetencia del Juez
Constitucional e improcedencia de la tutela, ya que los accionantes contaban con
otros mecanismos de defensa judicial como los procesos ante el Juez laboral y de
seguridad social y la Superintendencia Nacional de Salud.
Colombia es considerado el país más desigual de América latina y el cuarto del mundo. Para el
649
año 2009, las estadísticas del DANE frente a una población de más de cuarenta y cinco millones
263
requeridos. Este tipo de condiciones hacía que con respecto a ciertos sujetos se
predicase una especial protección constitucional y una consideración a la salud
como derecho fundamental autónomo; ello confería mucha relevancia a la
motivación y al sentido del fallo.
de habitantes indicaban una incidencia de la pobreza del 64,3% de los habitantes, teniendo que la
pobreza extrema (indigencia) fue del 16,4%. El ingreso promedio per-cápita fue de $ 550.309; lo
cual comparado con el coeficiente Gini de desigualdad en los ingresos, donde 0 es la perfecta
igualdad y 1 la perfecta desigualdad, arrojó la cifra de 0.487. Misión para el Empalme de las Series
de Empleo, Pobreza y Desigualdad (MESEP). Reporte. En: COLOMBIA. DANE.
http://www.dane.gov.co/files/noticias/Declaracion_MESEP_2009.pdf
264
como fundamento de las decisiones tomadas con las cuales se tutelaba el derecho
y se ordenaban los tratamientos y acciones pertinentes a la concreción del mismo.
650 La Corte Constitucional para garantizar el acceso efectivo al derecho tutelado, prevaliéndose
en este acto del artículo cuarto constitucional: “La Constitución es norma de normas. En todo caso
de incompatibilidad entre la Constitución y la ley u otra norma jurídica, se aplicarán las
disposiciones constitucionales”. ordenó en los fallos bajo análisis la inaplicación normativa de los
artículos 18 de la Resolución 5261 de 1994 o 54 del Acuerdo 08 de 2009 según la vigencia
normativa del momento.
651Se tiene como precedente jurisprudencial -vía analogía interpretativa con la ‘hipertrofia mamaria’
y patologías afines- que los tratamientos de salud oral no POS pueden ser tutelados cuando
pueden catalogarse como no estéticos, “aunque la mejoría estética sea producto secundario del
mismo, pues el procedimiento clínico permite que el afiliado ya no padezca más dolor, traumas o
complejos, problemas funcionales que resultan definitivos para mejorar su calidad de vida y
desarrollarse íntegramente como persona”. Corte Constitucional. Sentencia T-402-09. M.P. Jorge
Ignacio Pretelt Chaljub. Otras sentencias que comparten esa tesis son La T-004-08 Mauricio
González Cuervo y la T-504-06. M.P. Jaime Araújo Rentería.
652 Colombia. Corte Constitucional. Sentencia T-004-08. M.P. Mauricio González Cuervo.
265
por verse afectada la función, o por el riesgo de comprometer la salud sistémica
del paciente, máxime si se tiene conocimiento de alguna comorbilidad653;
igualmente, ha de signar en los mencionados documentos ii) que el requerimiento
del paciente -procedimiento, tratamiento o medicamento- no puede ser sustituido por
otro previsto en el POS, o que existiendo una alternativa ésta no tiene la misma
efectividad que el excluido; esos documentos eventualmente podrían servir –ante
una tutela judicial- para demostrar que se trató de una iii) orden proveniente de un
médico (odontólogo) adscrito a la Empresa Promotora de Salud –EPS- a la que se
encuentre afiliado el accionante. Finalmente, durante el acto odontológico, a través
de la anamnesis de la historia clínica, sería posible colectar información socio-
económica relevante del usuario –información que podría ser judicialmente
complementada u objetada por la EPS a partir de los datos que reposan en su
sistema de información- que permitiesen inferir la iv) no capacidad para sufragar el
costo del procedimiento, tratamiento o medicamento y el no acceso a otro sistema o
plan de salud.
653La comorbilidad es la presencia de dos o más trastornos o enfermedades que concurren con el
trastorno o la enfermedad de base. El Acuerdo 029 de 2011 lo define en su artículo 4º numeral 8º
como la ocurrencia de dos o más enfermedades en una misma persona.
266
favor del derecho a la salud de sus pacientes, llegue a sufrir acoso e incluso
padecer la terminación de su contrato de trabajo por parte de la IPS
especializadas en la contingencia de los costos económicos.
5.6.1.4.3 GRUPO 3. Las que no tienen por objeto decidir sobre la presunta
vulneración, violación o amenaza a la salud del paciente por negación de
servicios odontológicos, pero que en su parte motiva traen en sus
argumentos los tratamientos odontológicos: En la sentencia T-760-08, hito
progresivo jurisprudencial del derecho a la salud, en relación con los tratamientos
odontológicos expresa varias afirmaciones desafortunadas y contradictorias con
su propia jurisprudencia. Elementos retomados irreflexivamente por la Sentencia
T-857-09 cuyo caso giraba en torno a un tratamiento de fertilidad.
Entre los servicios de salud negados mencionó como ejemplos los estéticos
derivados del sobrepeso, el acné juvenil, los de fertilidad, gafas y cirugía
oftálmica, desintoxicación alcohólica y odontología; predicando de éste último que
“una buena dentadura o una dentadura completa son deseables, pero distan de
ser necesarias para preservar la vida o la integridad personal o de ser
indispensables para que se pueda vivir dignamente”.
267
personal, la dignidad; descripciones éstas irresponsables por lo
descontextualizadas y porque se prescindió de la real entidad del complejo bucal y
su relación integral con la salud sistémica; y ii) porque las sentencias que
referenció la Corte Constitucional para sustentar el ejemplo fueron dos en las
cuales el problema radicó más en las formas probatorias que en la sustancialidad
de la situación mórbida de los pacientes reclamantes: en la T-343-03 porque
supuestamente no amenazan la vida e integridad personal del actor -situación
que contraría la odontología basada en la evidencia-; y en la T-1276-01 lo fue la
no demostración por parte del accionante de su incapacidad de pago654, pese a la
probada perturbación funcional. En conclusión, las sentencias citadas por la Corte
Constitucional se evidencia que la falta de conocimientos técnicos en derecho de
los interesados para interponer acciones de tutela con suficiencia y pertinencia
probatoria –lo que contraría el espíritu original del mecanismo-, sumada a la
omisión del juez de ordenar oficiosamente prueba pericial para la valoración del
compromiso de la vida, la integridad o la dignidad llevaron a la Corporación a una
valoración desfavorable de los casos.
654 Este tópico de la prueba de la insolvencia económica, retomado por el comentario que se le
critica a la Corte Constitucional, entra en contradicción con jurisprudencia de ese organismo ya que
en la sentencia T-504-06 -citando a las sentencias T-861 de 2002 y T-260 de 2004, M.P. Clara
Inés Vargas Hernández- se alude a la inversión de la carga de la prueba frente a la capacidad
económica del accionante a la EPS cuando éste sólo afirma como negación indefinida no tener
capacidad de pago.
268
humana… No hay duda, conforme a lo expuesto, que la periodontitis a
pesar de que no afecta la vida misma, sí perjudica la salud del actor, su
integridad física, lo cual conlleva a que su vida digna resulte
comprometida655.
Hasta aquí se pretendió hacer una presentación analítica sobre los límites
jurisprudenciales al derecho a la salud en lo concerniente a las exclusiones del
plan de beneficios de los afiliados, a partir del juego del lenguaje científico-técnico
655 Colombia. Corte Constitucional. Sentencia T-843 de 2004. M.P. Jaime Córdoba Triviño.
656 Colombia. Corte Constitucional. Sentencia T-004 de 2008. M.P. Mauricio González Cuervo
657 Colombia. Corte Constitucional. Sentencia T-198-11. M.P. Jorge Ignacio Pretel Chaljub
269
y jurídico empleado por la Corte Constitucional, facilitador del proceso de
comprensión de la ‘cosa’658 “requerir con necesidad” odontológicamente:
medicamento, tratamiento o procedimiento /tecnología en salud). A continuación
se realizará el análisis versado en el proceso hermenéutico del odontólogo como
operador jurídico.
Los odontólogos que trabajan al interior del SGSSS tuvieron que -en algún
momento de su devenir profesional- ser aprendices del juego del lenguaje
científico-técnico, ético-bioético y jurídico relacionado con el objeto de la profesión:
dar una adecuada respuesta a las necesidades de salud bucal de la población
para contribuir con la salud integral y por ende con la calidad de vida individual y
colectiva.
658La ‘cosa’ hermenéuticamente es tenida como el objeto sobre el cual recae el acto de
comprensión por parte del intérprete. En GADAMER, Hans George. VERDAD Y MÉTODO II.
Salamanca : Sígueme. 2004. p. 62 y ss.
270
A partir de ese proceso de aprendizaje659- que parte de una serie de prejuicios660-
se empiezan a reconocer las reglas661 particulares que dimanan de diversos
tratados de odontología, códigos deontológicos y cuerpos normativos desde los
cuales se configura un juego del lenguaje inter y transdisciplinar que le permiten al
odontólogo trascender el conocimiento técnico-instrumental, ampliando su
horizonte de sentido y su capacidad de inferir y actuar comprensivamente en
procura de lograr la más elevada “concordancia en los juicios”662 frente al ‘ser’, el
‘deber-ser’ y el ‘quehacer’ y consecuencialmente enriquecer el proceso histórico
efectual de la profesión odontológica en el seno de la sociedad.
659 Buena parte de los procesos de aprendizaje los aporta –desde la práctica odontológica- el
componente formador del talento humano. Es en las universidades donde se inicia para el
estudiante de odontología todo un proceso de “tradición” formativa tendiente a desarrollar actitudes
científico-técnicas, filosófico-hermenéuticas y jurídicas para cumplir de la mejor manera posible su
rol como prestador de servicios de salud.
660 El prejuicio es “un juicio que se forma antes de la convalidación definitiva de todos los
momentos que son objetivamente determinantes. En el procedimiento jurisprudencial un prejuicio
es una pre-decisión jurídica antes del fallo de una sentencia definitiva” que no es bueno o malo por
sí mismo, sino que depende de la valoración que se le llegue a dar. GADAMER, Hans George.
VERDAD Y MÉTODO I. 5o ed. Salamanca-España: Sígueme S.A.U. 1993.p. 337.
661 WITTGENSTEIN. Op cit. p. 28 y ss.
662 Ibíd. 78.
663 RORTY. Op cit. p. 37/222.
664 Sobre la concreción del acto de la comprensión, véase a GADAMER Op cit. 1993. P.402
271
La Universidad, como parte del componente formador del recurso odontológico
en la sociedad, tiene la gran responsabilidad social de garantizar unos
contenidos básicos pero suficientes (a través de sus planes de estudio), el
personal docente cualificado, las metodologías y didácticas adecuadas para
favorecer ese acto de aprendizaje de los juegos del lenguaje que se utilizan en el
‘campus’ de la salud; de allí que se espera del odontólogo estar familiarizado con
el juridificado lenguaje 665 del derecho a la salud en el SGSSS en lo que
competencialmente le atañe y por ende con la comprensión del sentido y alcance
de ese derecho.
669Los prejuicios no tienen una connotación negativa, todo lo contrario, el prejuicio es “un juicio que
se forma antes de la convalidación definitiva de todos los momentos que son objetivamente
determinantes. En el procedimiento jurisprudencial un prejuicio es una pre-decisión jurídica antes
del fallo de una sentencia definitiva” que no es bueno o malo por sí mismo, sino que depende de la
valoración que se le llegue a dar. (GADAMER Op cit. 1991. p. 337). Tales prejuicios hacen parte
de la precomprensión que luego, a través de la espiral hermenéutica y sus diferentes “momentos
determinantes”: conocimiento de base, verificación y corrección, interpretación-integración
(reflexión), argumentación y aplicación-creación, posibilitarán al operador jurídico del Sistema
General de Seguridad Social en Salud concretar con decisiones el derecho de la persona del
usuario. ( KAUFMANN. Op cit. p. 139-140)
670 LARENZ, Karl. Op cit. p. 207.
671Bien podría decirse que lo tradicionalmente conocido como acto médico/odontológico, que no
siempre se agota en un instante, obedece más a una serie concatenada de actos orientados al
objetivo común de velar por la salud bucal del paciente para contribuir con su calidad de vida. No
es pues un acto aislado. Este análisis hace pensar al autor que sería más preciso referirse en
términos de ‘proceso conductual médico-odontológico’.
273
5.7.1 Concreción odontológica del derecho a la salud.
El odontólogo debe entender que el acto de comprensión del derecho a la salud
del paciente implica una ‘conciencia básica’ que le permita proyectarse en una
correcta atención, fundada y teleológicamente orientada por el sentido y alcance
de ese derecho. Esta premisa conductual minimizará las posibilidades de
arbitrariedad en las decisiones y acciones que dimanen del acto odontológico.
672 Sobre los métodos de argumentación puede consultarse a ATIENZA, Manuel. Bioética,
Derecho y Argumentación. Pensamiento Jurídico Contemporáneo. Ed. Temis- Palestra.
Colombia. Págs.. 15-79; véase también a FERRER, Jorge J.; ÁLVAREZ, Juan C. Para
Fundamentar la Bioética. Ed. Universidad Comillas –Madrid- y Desclée De Brower. Bilbao 2003.
p. 162 y ss.
673 Diagnóstico, pronóstico, tratamiento y pos-tratamiento.
274
examen. Se inicia con la invitación que se hace a la persona del usuario o a su
acudiente -en el evento de tratarse de incapaces- para que exprese el motivo de
consulta, queja, dolencia o situación que impulsó a requerir la prestación de
servicios de salud bucal. Éste es un momento fundacional de la confianza legítima
entre las partes y que per sé implica el compromiso del odontólogo de obrar
durante todo el proceso del acto odontológico conforme a los principios éticos-
bioéticos, deontológicos y jurídicos.
674Es un deber-tener - para el odontólogo como operador jurídico del SGSSS- abrir, diligenciar y
conservar la historia clínica de sus pacientes de conformidad con el artículo 25 de la Ley 35 de
1989 y la Resolución 1995 de 1999.
675 Hoy día, procesos de determinación de la salud como la biología (genética del individuo y su
parentela consanguínea), las condiciones socio-económicas (estilos de vida, alimentación y
nutrición, vivienda, educación, acceso a agua potable y otros servicios básicos, trabajo decente,
acceso a servicios sanitarios de calidad) y las condiciones ambientales han sido incorporados al
lenguaje jurídico de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales en el diálogo entre las
ciencias naturales y las llamadas ciencias sociales (Véase el Pacto Internacional de Derechos
Económicos Sociales y Culturales y las Observaciones Generales 3, 5, 14 y 17 del CDESC-ONU).
Esos procesos de determinación de la salud y la vida –en términos de Breilh- deben ser incluidos
en las pesquisas que se realizan sobre y con el paciente en los distintos momentos del acto
odontológico y muy en particular durante la anamnesis; ya que esta etapa contribuye
sustancialmente en la obtención de un diagnóstico, pronóstico, plan de tratamiento con mayores
niveles de certeza científico-técnica y pertinencia sociocultural.
275
sólo el odontograma- registrando en la historia clínica cada uno de los hallazgos y
análisis significativos (signos, síntomas, observaciones). Es posible que en la
consulta el profesional determine la conveniencia de prescribir ciertas ayudas –
por considerar que el paciente lo requiere676-- que contribuyan a la definición del
diagnóstico.
676 A lo largo de este capítulo se han repetido conscientemente los términos ‘requerir’, ‘requieren’,
‘requeridos’; acompañados o no con la palabra necesidad. El sentido de esto estriba en que son
elementos conceptuales esenciales en el constructo jurisprudencial del derecho a la salud
desarrollado por la Corte Constitucional de Colombia.
677 Colombia. Congreso de la República. Ley 35 de 1989. Artículo 6º
276
5.7.4 Situaciones hipotéticas derivadas del acto odontológico.
Pluralidad de diagnósticos y planes de tratamientos pueden llevar a que se
suscitaren varias situaciones y en todas ellas sería indispensable reconocer y
garantizar el derecho a la información del paciente sobre su situación de salud 678,
así como el principio de autonomía concretado no sólo en la elección de EPS, IPS
y profesional -cuando ello llegare a acaecer- sino en la obtención del
consentimiento informado con respecto a la situación de salud y a las opciones
terapéuticas en virtud de la cobertura o no del plan de beneficios; a posibilitar la
comprensión por parte de la persona del usuario sobre los beneficios y riesgos
que se desprenden de la ejecución o no de la terapéutica propuesta; a establecer
si el paciente requiere -con necesidad o no- dichos tratamientos; a las
implicaciones económicas (copagos, cuotas moderadoras y/o gasto de bolsillo),
las condiciones de tiempo, modo y lugar en las que se prestaría el servicio
requerido y los deberes del paciente con respecto a su salud y al SGSSS.
684 Las política pública en salud bucal trazadas por el Estado colombiano procurando atender la
situación de salud de los colombianos y de paso cumplir con las llamadas Metas del Milenio, han
sido recogidas en los Planes Nacional de Salud Bucal (Resolución 3577 de 2006) y Nacional de
Salud Pública (Decreto 3039 de 2007), merced a la prioridad que tienen diferentes enfermedades
bucales en las tazas de morbi-mortalidad de la población colombiana. De allí que dicha normativa
se constituyan en referentes obligados para los prestadores de salud.
685El Decreto 3616 de 2005 regula actualmente al personal técnico auxiliar en salud oral, su
formación por competencias y las funciones que podrían cumplir, atendiendo los perfiles
ocupacionales que demanda el medio.
686 Reglamentando el artículo 173 de la Ley 100 de 1993 sobre funciones del Ministerio, 179
versado en la contratación de las actividades de Promoción y Prevención, Concordada con el
Artículo 46 de la Ley 715 de 2001, 14 de la Ley 1122 de 2007, la Resolución 412 de 2000
proferida por el Ministerio de Salud estableció las actividades, procedimientos e intervenciones de
demanda inducida y obligatorio cumplimiento junto con las normas técnicas y guías de atención
para el desarrollo de las acciones de protección específica y detección temprana y la atención de
enfermedades de interés en salud pública. La norma técnica para atención preventiva en salud
bucal, complementada con la de detección temprana de las alteraciones del crecimiento y
desarrollo en el menor de 10 años, y la detección temprana de amenazas al embarazo son de
279
5.7.4.4 La terapéutica en odontología. Si el diagnóstico emitido por el
odontólogo durante la consulta se corresponde con alguna patología específica,
esta debe ser ubicada en la Clasificación Internacional de Enfermedades CIE-10,
adoptada en Colombia como sistema de codificación obligatorio para los
prestadores de servicios de salud a través de la Resolución 1895 de 2002. Tal
sistema de clasificación es limitante para el clínico, quien debe subsumir el
diagnóstico en opciones inespecíficas que agrupan una serie de eventos
patológicos.
obligatorio conocimiento por parte del odontólogo quien debe velar por su cabal aplicación en un
acto comprensivo y proactivo de la gestión del riesgo.
687 Colombia. Ministerio de Salud. Resolución 13437 de 1991. Artículo 1º #2. Derechos de
información y consentimiento de pacientes y/o familiares.
688 La Corte Constitucional hace especial hincapié en que al interior del Sistema General de
Seguridad Social en Salud “la persona competente para decidir cuándo alguien requiere un servicio
de salud es el médico tratante, por estar capacitado para decidir con base en criterios científicos y
por ser quien conoce al paciente. 688 La jurisprudencia constitucional ha considerado que el criterio
del médico relevante es el de aquel que se encuentra adscrito a la entidad encargada de garantizar
la prestación del servicio; por lo que, en principio, el amparo suele ser negado cuando se invoca la
tutela sin contar con tal concepto” (Sentencia T-760-08, numeral 4.4.2. M.P. Manuel José Cepeda
Espinosa)
280
en materia de salud bucal- dicho Plan se encuentra unificado para los afiliados de
los Regímenes Contributivo y Subsidiado en el Acuerdo 29 de 2011 de la
Comisión de Regulación en Salud689.
689 Las dos primeras reglamentaciones del POS en odontología – Resolución 5261 de 1994 y
Acuerdo 08 de 2009- no estaban exentas de problemas para los profesionales al momento de
aplicarlas como operadores jurídicos y tampoco lo estaban para los mismos pacientes en cuanto a
la tutela en el escenario clínico de su derecho a la salud, suscitando verdaderos dilemas éticos y
jurídico: de un lado la Ley 35 de 1989 ha preceptuado como imperativo que el odontólogo dedique
a sus pacientes el tiempo necesario para hacer una evaluación adecuada de su salud bucal e
indique los exámenes indispensables para establecer el diagnóstico y prescribir el tratamiento
(aplicación al principio bioético de beneficencia), del otro lado se tienen las disposiciones
constitucionales, legales, reglamentarias y jurisprudenciales que limitan el derecho a la salud en el
SGSSS atendiendo las posibilidades económicas estatales con fundamento en la sostenibilidad
financiera y la progresividad en cuanto a los niveles de cobertura poblacional y de necesidades
básicas de atención. De otro lado, habrá que esperar la manera en que se implementará la nueva
versión del POS y sus exclusiones: el Acuerdo 029 de 2011 de la CRES, que en apariencia
mejoraría el panorama para el operador jurídico relacionadas con la falta de claridad normativa
sobre las facultades del profesional y las coberturas que otrora tensaban las relaciones del
odontólogo con el personal administrativo: coordinadores de sección de odontología, auditores y en
general por quienes defienden los intereses económicos de las EPS e IPS.
281
Si al odontólogo luego de los raciocinios científico-técnicos del caso se le plantea
la obligación de realizar el diagnóstico de un cuadro mórbido cuyo tratamiento se
encuentra excluido del POS, éste deberá efectuar una interpretación orientada a
valores690 a partir del caso, una integración normativa y deontológica para aplicar-
crear el derecho a la salud que se corresponda a favor de la persona que está
atendiendo.
283
mayores niveles de conciencia jurídica para construir mentalmente los argumentos
del por qué cree que se cumplen los cuatro requisitos desarrollados por la Corte
Constitucional para que el afiliado pueda acceder a esa tecnología en salud,
principalmente los relativos a su competencia científico-técnica.
En tercer y último lugar el odontólogo deberá lograr unidad de sentido para poder
llegar a la legitimación de ese momento hermenéutico de interpretación-
integración del caso bajo análisis; unidad de sentido que dará cuenta de ese todo,
sentándolo como texto en la historia clínica y el formulario de solicitud y
justificación médica dirigido al CTC; afirmando que -a partir de los hallazgos
biopsicosociales del paciente, la odontología basada en la evidencia, la literatura
científica, la principialista bioética, el derecho legislado y jurisprudencial aplicable-
se cumplen los cuatro criterios jurisprudenciales de la Corte Constitucional por lo
cual el clínico considera debe inaplicarse en lo pertinente el artículo 49 del
Acuerdo 29 de 2011 de la CRES para hacer prevalecer la Constitución Política de
Colombia concediendo la tecnología en salud requerida con necesidad por la
persona. Todo el recorrido anterior lleva entonces a que se concretice como acto
final de aplicación-creación696, la tutela del derecho a la salud de la persona del
usuario en el escenario clínico/administrativo.
696 “La comprensión de normas legales y contenidos vitales implica una actividad creadora del que
comprende, y si, como consecuencia, su persona, con sus prejuicios, convicciones, intereses y
situaciones (de tipo individual y social), se inmiscuye siempre y necesariamente en el proceso de
comprensión, los criterios del proceder y decidir correctos tendrían que referirse a la persona que
284
5.8 LA COMPRENSIÓN HERMENÉUTICA Y EL PROCEDIMIENTO ÉTICO-
BIOÉTICO DE LA DECISIÓN MORAL EN LOS SERVICIOS SANITARIOS
El anterior proceso de comprensión y concreción del derecho a la salud es
perfectamente conciliable con el procedimiento y la metodología de la decisión
moral implementados en ética y bioética. Bastaría atender las especificidades del
modelo propuesto, que en la presente investigación se ha optado por el de Ferrer
y Álvarez, porque en suma el círculo hermenéutico de la comprensión de un caso
en salud en el SGSSS, implica necesariamente -como quedó visto- establecer el
qué, para qué y el por qué se debe desarrollar todo un proceso de justificación
científico-técnico, ético-bioético y jurídico de una acto odontológico prescriptivo,
por ejemplo, de una tecnología en salud no POS. El odontólogo legalmente
cuenta con la competencia y la comparte con el CTC.
Una vez vislumbrados los problemas éticos se realiza la discusión de cada uno y
se establece un curso de acción, que para el caso sería: i) diligenciar la solicitud
de la tecnología no POS al CTC o ii) no diligenciar la solicitud, omitiendo informar
al paciente sobre las alternativas de tratamiento y formas de acceder a ellas,
aprovechando la asimetría de conocimientos entre el paciente y el profesional
institucionalizado.
287
administrativos generadores de costos de funcionamiento como los CTC y los
recobros al FOSYGA; lo que en últimas se traduce en mayor rentabilidad.
Tras el análisis de los conflictos entre las normas derivadas de los principios
en los diferentes niveles jerárquicos, se debe realizar la ponderación de
consecuencias que de un lado ponen a la salud integral y calidad de vida del
paciente y la eventual financiación del tratamiento a cargo del FOSYGA en tanto
se cumplan con ciertas formalidades; del otro lado campean razones personales
como la responsabilidad ética del profesional por omitir información, las posibles
amonestaciones/sanciones por contrariar la contingencia en los costos sanitarios,
entre otras referidas en el análisis de los principios. En este punto se decide dar
mayor peso a la salud del paciente, encontrando que -si bien la solicitud de
tratamientos no POS son la excepción y no la regla en la práctica- existen
elementos para su justificación.
697 “Si el conflicto se da entre diferentes normas de gestión pública existe conflicto entre las normas
de gestión públicas: las derivadas de la no-maleficencia tendrán dominancia sobre las derivadas de
la justicia, éstas sobre las derivadas del respeto a las decisiones autónomas y éstas sobre las
derivadas de la beneficencia” (FERRER Y ÁLVAREZ . Op cit. p. 484)
288
Tomada la decisión de diligenciar la solicitud del tratamiento odontológico no
POS, la misma normativa que reglamenta los CTC exigen al solicitante la
justificación de la decisión de optar por una excepción.
698Véase Ley 1438 de 2011, artículos 26 y 27; éste último modificado por el artículo 116 del
Decreto 019 de 2012. Analícese además en consideración de las reglas interpretativas
establecidas por la Corte Constitucional mediante la sentencia C-934 de 2011.
699 Colombia. Ministerio de Salud. Decreto 1757 de 1994; concordado con la Ley 1374 de 2010 por
la cual se crea el Consejo Nacional de Bioética.
290
decisiones futuras y con ello ciertamente se tutelará clínico-administrativamente el
derecho a la salud de las personas afiliadas al SGSSS.
Conclusión
Como pudo verse a través de las diferentes situaciones planteadas, ese proceso
conductual odontológico que va desde los prolegómenos del saludo, la
presentación y el encuentro de la conciencia del profesional con la persona del
usuario hasta la concreción del diagnóstico y el pronóstico en un plan de
tratamiento a ser ejecutado, y luego monitoreado en el pos-tratamiento, validan la
tesis del odontólogo como operador jurídico en el SGSSS; rol que se apoya en la
hermenéutica filosófica de notorio influjo en el procedimiento decisional como el
propuesto por FERRER y ÁLVAREZ, y que en últimas no deja de ser en sí mismo
un proceso hermenéutico con el ropaje de la bioética; instrumento que facilita la
adecuada articulación de las dimensiones científico-técnicas, ético-bioéticas y
jurídicas del caso en pro de tutelar el derecho a la salud de la persona del usuario.
291
CAPÍTULO VI
Introducción
En ejercicio hermenéutico a lo largo de esta investigación se ha tratado de dar por
cierto el supuesto teórico: el odontólogo es un operador jurídico en el SGSSS
colombiano y se vale --en cumplimiento de tal función-- de criterios científico-
técnicos (acto odontológico), ético-bioéticos (principios y métodos para la toma de
decisiones morales) y jurídicos (derecho legislado y jurisprudencial).
292
redundancia- operadores jurídicos del SGSSS que coadyuvan en el escenario
clínico-administrativo con la tutela del derecho a la salud de las personas.
Ha de decirse con respecto a las formas de contratación, que existe una especie
de gradiente en cuanto a aquellas que ofrecen mayores garantías para los
profesionales; en primer lugar estaría la contratación directa con las EPS, cuando
el profesional mismo ejerce de manera independiente, ello le da mayor autonomía;
empero también mayores responsabilidades frente a los distintos actores del
SGSSS y riesgos financieros por las dilaciones en los pagos por parte de la
agencia aseguradora (EPS) o el desbalance de los costos operativos y el valor del
contrato pactado con la EPS.
700 LÓPEZ FAJARDO, Alberto. Elementos de derecho del trabajo. 3ª ed. Bogotá: Librería
ediciones del profesional, 2006. pp. 141-158/665.
702Con respecto a las condiciones laborales de los odontólogos puede consultarse de RESTREPO,
Jairo Humberto; LOPERA, John Fernando; PICO, Carmen Evelia, et al. La salud en Colombia.
Ley 100 de 1993: Organización industrial y condiciones laborales. Medellín : Ediciones Escuela
Nacional Sindical, 2009, 220 p.
296
con unos requerimientos mínimos, para satisfacer unas necesidades de vida” (6).
El derecho es “lo justo, lo correcto, lo que socialmente debe ser.”(3).
297
Con respecto al derecho del SGSSS hubo quienes afirmaron que el derecho
influyó de manera tal que modificó el escenario de la práctica profesional por la
reorganización de una profesión que era eminentemente liberal y que se vio
afectada por un sistema que hace de la salud un negocio en el que las más
favorecidas en sus intereses son las EPS.
“[L]os hace estar organizados de acuerdo a un sistema… entendiéndolo
así (el derecho), organiza el ejercicio profesional”(7)
“Toda esa normatividad, entonces lo influye (el ejercicio profesional de
la odontología), pero en forma más negativa para el paciente y más
positiva para las EPS”. (8)
298
6.4 EL ODONTÓLOGO Y EL DERECHO A LA SALUD
Tras haber indagado sobre las percepciones que tienen los odontólogos frente a
palabras tan complejas en su significado como derecho y salud, se les preguntó
sobre qué entendían por derecho a la salud; ello con miras a entender cuáles son
los preconceptos o cuál la comprensión de éstos con respecto al ‘quid’ de la
presente investigación.
299
6.5 APRENDIZAJE, JUEGOS DEL LENGUAJE Y PRECONCEPTOS SOBRE
EL DERECHO A LA SALUD
Parece ser que, en la mayoría de los entrevistados, los preconceptos sobre el
derecho a la salud y los comienzos del aprendizaje del juego del lenguaje del
SGSSS fueron adquiridos y tuvieron lugar en cierto momento de su formación de
pregrado; otros, por el contario, narraron que su aprendizaje ha sido a través del
ejercicio profesional en las IPS, principalmente durante el proceso de inducción al
trabajo. Es a partir de entonces como fueron conociendo la estructura y dinámica
del SGSSS, bien porque durante su formación de pregrado no había entrado en
vigencia la Ley 100 de 1993, bien porque los contenidos recibidos en la
universidad fueron insuficientes o porque en su rol de estudiantes no le dieron la
debida importancia por no hacer parte de las preferencias académicas.
300
Existe una base preconceptual (pre-juicios) y por ende una serie de pre-
comprensiones del SGSSS por parte de los odontólogos entrevistados. No
obstante, podría aseverarse a partir de lo captado en sus discursos es que falta un
mayor empoderamiento de las herramientas del lenguaje del derecho a la salud;
juego del lenguaje que resulta basilar en términos de lograr que los diferentes
operadores jurídicos cumplan con el principio de unidad e integralidad desde el
discurso y lo lleven a los hechos procurando la mayor beneficencia posible a las
personas de los usuarios.
302
La situación anterior se refuerza por el hecho de que --tras haber culminado sus
estudios como odontólogos generales-- la mitad aseveró no haber recibido
capacitaciones o actualizaciones por parte de la EPS, ni de la IPS contratante, ni
de las entidades gremiales, ni de la Universidad. Hubo quienes afirmaron que se
han capacitado y actualizado por iniciativa propia y otros que describieron haber
sido capacitados de manera eventual y restringida a los contenidos del POS, y a
las acciones de fomento de la salud, protección específica y detección temprana
de enfermedades (Resolución 412 de 2000). Tal capacitación ha sido orientada
por personal formado en administración de servicios de salud adscritos a las EPS-
IPS.
“…No de una forma muy metódica. Nos tratan de tener al día en cuanto
a las resoluciones que van saliendo día a día… cuando salió la 412, el
decreto que reglamentaba la parte de promoción y prevención en la
institución donde yo estaba trabajando, teníamos que actualizarnos en
eso, que cuando empezó toda la parte de consentimiento informado y
formatos de historia clínica." (6)
"[E]l adoctrinamiento que le dan a uno cuando va a entrar a trabajar en
la IPS… porque desde que usted entra, el POS es esto, el POS es esto,
pero hay que decirle al usuario y a los pacientes o clientes, que esto no
se lo cubre, que esto no, o sea hay que poner a voltear al paciente, así
uno sepa que eso lo ganó, y que eso está ganado por derecho."(4)
303
Los principios ‘pro homine’ y ‘confianza legítima’ son ampliamente desconocidos
por los odontólogos, siéndolo más el primero. Con respecto al segundo, las
dubitativas representaciones que se hacen algunos odontólogos se asocian con la
confianza que debe tener la persona del usuario en el facultativo de la odontología
de quien se reputa es idóneo y ético para ejercer la profesión y contribuir a mejorar
con criterio la situación de salud bucal de aquél.
"No sé, me parece que hace referencia a cuando una persona asiste a
reclamar sus derechos, debe tener la confianza de estar siendo atendido
por un profesional idóneo con la formación adecuada para prestarle un
servicio; o sea, que la entidad también debe garantizar la idoneidad y la
formación del profesional que va a prestar el servicio directamente, no lo
conocía pues con tantas palabras, pues con esos términos no, se
supone que dentro del sistema de licitación uno de los estándares es
garantizar la formación del profesional, a través de unos requisitos, que
se obliga a que se contará con poder garantizar en las medidas del
profesional la prestación del servicio. " (6)
"No sé si se refiere al hecho de confiar en el criterio médico-odontológico
cuando dicta un diagnostico o un tratamiento, y que ese es el que debe
tener el paciente." (7)
304
consultando base de datos del usuario); y conciencia jurídica efectiva de que como
profesional adscrito a la EPS-IPS le asiste la facultad de prescripción de tales
tecnologías en virtud del principio de confianza legítima y demás principios del
SSSI y del SGSSS; verbigracia: solidaridad, integralidad y prevalencia de
derechos cuando fuere pertinente.
"Si, el paciente hace la gestión obviamente con los lineamientos que uno
le da, me explico, un paciente que en algún momento manifestó la
necesidad de tutelar o de pedir un procedimiento que esté excluido del
POS, uno tiene que darle unas bases pues, a veces usted tiene que
sustentar el por qué a ese paciente se le está solicitando un
procedimiento que esta por fuera del POS, pero en realidad el tramite lo
hace es él como paciente." (6)
La labor del odontólogo como operador jurídico del SGSSS cuando se trata de la
argumentación de casos clínicos que demandan tratamientos no POS a favor de
un afiliado se ve comprometida no sólo por ese desconocimiento del derecho
legislado y jurisprudencial, sino por las limitaciones de tiempo.
“El corre-corre del tiempo, en la cuestión de los servicios no da pues
como para decirle a un paciente, sentarse uno para explicarle todos los
derechos; o sea, el porqué de lo que se le va a hacer, de lo que se le
va a dejar de hacer. A veces, cuando el paciente reclama una citación se
le dan argumentos, pero no es como cumplir un protocolo de a cada
paciente informarle por qué se le va a hacer esto… " (6)
305
ser cumplido ese derecho. Siempre se debe otorgar al paciente lo que
se establece” (Anotación entre paréntesis del autor. 3)
"Pienso que igual, la odontología tiene mucho deber y mucho que hacer.
De cierta forma nosotros somos profesionales de la salud y eso no lo
podemos negar, y estamos implicados en ese bienestar de las personas,
y según la demanda que ellos mismo manifiestan, nosotros tenemos que
estar ahí siempre atentos, como para saber resolver ciertas necesidades
en salud bucal, que otros profesionales no las pueden atender, entonces
estamos llamados a cubrir precisamente esas necesidades, pienso yo, y
que sí tenemos como una responsabilidad social grande en ese
sentido."(7)
"Completamente, están completamente relacionados, lástima que
solamente ahora… estemos atendiendo los derechos a la salud que se
habían dado en Colombia. Antes no estaba el derecho a la salud oral o
a la odontología, ese derecho, porque el principio con el que se
funcionaba era que los muecos también podían trabajar, entonces no
había prestación de servicios en odontología, y ya vemos que la boca es
también una parte súper importante y vital del ser humano por donde
entran cantidad de enfermedades; y si la boca está enferma las
consecuencias a distintos órganos del cuerpo también se ven
afectados..." (9)
"… Si se imparten normas que van a limitar ese acceso a la salud, está
relacionado con el quehacer de un odontólogo."(10)
306
al acceso a los servicios de salud instrumentalizando para ello al profesional o
induciéndolo a la anomia.
"Pues sí, podría uno decir pues que diariamente lo haces ¿pues cierto?,
porque estas otorgándole a un paciente lo que la ley dice a lo que pueda
acceder ¿cierto? Pero, cómo hacer valer el derecho a lo que tiene el
paciente? no puedo, porque siempre tengo que hacer que ese paciente
'no necesite', 'no pida', 'no conozca que requiere', esa prácticamente es
la función diaria, hacer que ese paciente no demande necesidades, que
se le olvide que tiene necesidades y que puede acceder" (3)
"Conozco lo que está dentro del POS, y el derecho puede que el
paciente lo tenga ganado y yo lo hago cumplir así con mis pacientes; lo
que pasa es que en la EPS, eso lo miden a uno y siempre están
diciendo, esto lo cubre pero diga que no; yo, sin embargo, digo que sí y
se lo mando por el POS." (4)
"Si claro, en la práctica profesional nos toca también por los sistemas de
habilitación, sistemas de garantía de calidad, tenemos que aplicar todo
lo que es, el manejo de las historias clínicas, lo del consentimiento
informado, pues todo eso hace parte pues de la parte legal de la
prestación del servicio, osea relaciones con los pacientes, el alcance de
nuestra práctica, también eso ha servido como para limitar la práctica y
darle un alcance muy definido, no como anteriormente pues que
considerábamos la práctica que uno como odontólogo general tenía un
campo de acción mucho más amplio, y hoy día por la parte pues de
legislación se ha limitado un poquito más, pero nos toca aplicar eso."(6)
Con respecto a las exclusiones del POS se dan situaciones particulares, como
que, hay odontólogos que rezan textualmente las traídas por la norma; otros
adicionan algunas de más que no son tales o incorporan diferencias entre el
régimen contributivo y subsidiado pese a la unificación de contenidos, y
finalmente, hubo quienes evadieron la pregunta con respuestas impertinentes,
poco claras o confusas. Por lo general la fuente más cercana de conocimiento
sobre las exclusiones del POS son las EPS-IPS quienes ejercen permanente
control al respecto. La consulta de la norma como fuente primaria es algo exótico
entre los profesionales entrevistados.
"Periodoncia y Maxilofacial… Cirugía maxilofacial”. (1)
"Prótesis, periodoncia, ortodoncia y odontopediatría. Odontopediatría lo
que tiene que ver con ortopedia maxilar." (2)
"¡Sí!… porque diario, vea, si a uno se le zafa una cosita y se la hace a
un paciente así de regalado que no está en el POS, el llamado de
Atención es muy grande; entonces, a uno siempre, permanentemente, la
mayor vigilancia no es si usted atendió bien, si la calza le quedó bien, si
el paciente quedo satisfecho. ¡No!, permanentemente la vigilancia es si
usted si hizo o no lo que estaba en el POS." (4)
308
"Algunas… porque en la experiencia que he tenido, en la práctica, en
los servicios claramente durante las inducciones se nos explica cuáles
son las actividades que se pueden realizar y cuáles no, cuáles cubre el
POS y cuáles no cubre; les tenemos que decir a los pacientes que las
deben conseguir particular…la fuente primaria (para acceder a la
información) es la institución."(Anotación entre paréntesis incorporada
por el investigador. 5)
"¡Sí!, más o menos lo general sí. Para el POS subsidiado o el POS
contributivo, porque tenemos que diferenciarlos." (6)
Todos los odontólogos, sin excepción, consideraron como muy importante conocer
los contenidos del POS de odontología en los diferentes niveles de complejidad y
algunos aceptan que se tienen grandes deficiencias cognitivas y comprensivas del
mismo.
“[S]í conocemos ese paquetes de servicios, ese plan de beneficios,
podemos saber qué procedimientos podemos realizar, qué
medicamentos podemos mandar, qué actividades podemos hacer. ¡Es
necesario!"(5)
"Sí, yo pienso que sí. Por lo menos, en general, con respecto a los otros
servicios médicos tener idea de cuáles son las posibilidades de
cobertura, no solamente para nuestros pacientes… [N]osotros también,
finalmente, somos pacientes y somos usuarios de este plan de servicios
y es importante conocer la odontología en general para guiar al paciente
y saber a qué puede acceder."(7)
“¿Todo el POS?, sí, yo creo que es importante conocer todo el POS.
Porque si usted no lo conoce usted no podría prestar los servicios que
se necesitan en el servicio." (9).
"Ahí sí estamos graves porque no los conocemos realmente… todas
esas cosas que uno no interpreta. Uno lee y ya. Como un burro, lee y lee
y lee y lee y lee y ya, pero ponerle análisis como a la cosa no."(3)
309
6.9 FENÓMENOS JURÍDICOS Y EXTRAJURÍDICOS QUE CONCULCAN EL
DERECHO A LA SALUD DE LOS AFILIADOS
No obstante a la declarada necesidad de conocimientos del POS (inclusiones y
exclusiones), en las respuestas dadas por algunos odontólogos se notaron
vaguedades descriptivas, imprecisiones, interpretaciones erradas sobre el sentido
y alcance del Plan de Beneficios y denuncias tácitas de prácticas tendenciosas
generadoras de gastos de bolsillo sobre tecnologías incluidas en el POS. Lo
anterior lleva a inferir que ese desconocimiento del derecho legislado y
jurisprudencial sobre el plan de beneficios favorecen las imprecisiones y
consecuencialmente la comisión de yerros en el proceso de comprensión y
concreción del derecho a la salud de la persona del usuario en el escenario clínico
por el odontólogo como operador jurídico; causándose con ello -más que la
deseable ‘tutela’- la afectación no intencionada (‘culposa’) de dicho derecho.
"Por ejemplo la serie radiográfica, o la panorámica, después de estar
trabajando un largo tiempo en SURA, fue que me di cuenta que sí
estaba cubierta por el POS, pero no se le informaba a los pacientes,
para ahorrar costos.” (11)
"Si… pongamos un ejemplo de la radiografía panorámica. La radiografía
panorámica está incluida en el POS. Para la exodoncia de terceros
molares se exige que se tome la radiografía panorámica particular y hay
(disponibles) órdenes de muchos centros radiológicos en la ciudad;
entonces se le dice al paciente, vaya con esta orden a cualquier centro y
usted lo paga porque eso no está en el POS; pero yo no, yo les hago
una orden escrita con mi nombre en un papel, con un formato de
XXXXXX, en la cual les digo (a los pacientes): vayan a recepción, hacen
autorizar esta orden y van a cualquier centro radiológico, pero no tiene
que pagar si no el copago." (Anotación entre paréntesis perteneciente al
autor. 4–P)
310
ordenar la radiografía; ello se torna en un imperativo deontológico sustentado en
los principios bioéticos de beneficencia al buscar el bien de la persona del usuario
con la acción de ordenar la ayuda diagnóstica imagenológica; y el principio de
justicia se cumple a través de la asignación del recurso a quien lo requiere. La
segunda situación sería la de omitir ordenar la radiografía cuando esta se requiere
y se está en posibilidad de hacerlo -lo que se constituye en una conducta
negligente del profesional- minando los anteriores principios. La tercera y última
situación es la de ordenar la radiografía panorámica a la que tiene derecho la
persona pero induciendo a ésta a asumir el costo de la misma mediante gasto de
bolsillo; conculcándose con esta exacción los principios de buena fe, veracidad,
confianza legítima, no-maleficencia y justicia.
312
configuración de los arcos dentales, información de innegable importancia en
materia forense por la presunción de veracidad del contenido de la historia clínica.
“[P]or ejemplo el POS no le cubre sino tres superficies de un diente y el
paciente tiene a veces hasta las cinco superficies del diente
(comprometidas), nosotros hacemos las cinco superficies, y cobramos
tres”. (Nota entre paréntesis de la redacción del autor. -9-)
“[E]s muy claro, en la facturación, un paciente que solamente su EPS le
va a cubrir tres superficies de un diente y vos le hacés las cuatro y las
cinco y le facturas tres, porque uno sabe que es un paciente que no
puede acceder más de ahí, y que en medio de la situación como tal y de
lo que vos querés ofrecer y a lo que ese paciente puede acceder hay
que hacer eso." (3)
706 Indicaciones del uso de los materiales según la situación particular de la persona del usuario.
707 Principios de beneficencia, no maleficencia, justicia, autonomía, mal menor, totalidad, causa-
doble efecto.
708 Código civil y los principios para interpretar las exclusiones del POS.
709 Principios ‘pro homine’ y confianza legítima.
314
verdadero fármaco coadyuvante en la terapéutica periodontal. Otro procedimiento
no descrito es la desobturación de conductos endodóncicos para efectuar
retratamientos.
“A mí me parece que una desobturación de conductos -según cuentan-
no está cubierto por el POS, pero la endodoncia si… ¿Por qué se hace
una desobturación? y ¿Por qué se hace una endodoncia? De ahí parte
pues cómo entender la respuesta; si yo necesito una endodoncia para
poder garantizarle al paciente, aliviarle el dolor, y requiere una
desobturación y luego hacerle la endodoncia para calmarle el dolor,
¿Por qué la desobturación no está cubierta por el POS? O en qué casos
realmente está cubierta y en qué casos no”. (2)
Otras tecnologías frente a las que se guarda silencio y con ello se puede ver
conculcado el derecho a la salud de la persona podrían ser las cirugías
periapicales con fines endo-periodontales (actividad de segundo nivel de
complejidad) ya que los procesos infecciosos llegan a comprometer la salud,
integridad y dignidad de las personas.
315
de Salud a todos los operadores jurídicos del SGSSS de interpretar conforme al
principio pro homine.
316
"Si, cuando hablaba por ejemplo de operatoria mucha veces hablaba de
que no incluye resina para dientes posteriores, pero hablamos de
situaciones en las que por decir algo una caries cervical de un diente,
obviamente no voy a poner una amalgama, y finalmente no voy a
cobrarle tampoco al paciente, no tiene sentido que incluya un material el
POS, que si sirve para un diente anterior y que lo puedo utilizar en un
diente posterior y se justifica. Muchas veces yo lo hago y los justifico,
creo que estoy actuando de la mejor manera según la preparación
académica… científico-técnica”. (7)
Las falencias del legislador, la ignorancia del POS odontológico por parte del
profesional y en general el fenómeno anómico por parte de diferentes actores del
SGSSS hace propicia la arbitrariedad del operador jurídico institucional EPS-IPS;
conculcándose con ellos principios tan estimados como el de unidad, integralidad,
favorabilidad, ‘pro homine’, beneficencia, no maleficencia, autonomía y justicia.
317
dictados en la universidad eran insuficientes o no los recibieron, al desinterés en el
tema y a la falta de capacitación tras egresar del pregrado.
Las competencias más relacionadas con el SGSSS las agrupa el ICFES en torno
a objetivos tan variados como gestionar la salud oral de individuos y colectivos,
asumiendo una postura comprensiva, crítica y propositiva frente al sistema general
318
de seguridad social colombiano; desarrollar capacidades para comprender el
proceso de cambio permanente de los sistemas de seguridad social del país y del
mundo, las lógicas bajo las cuales éstos operan y las implicaciones que conllevan;
tomar decisiones y resolver problemas en diferentes niveles de complejidad de
acuerdo con una valoración de costo-beneficio que, más allá del componente
económico entre otros considere aspectos éticos, sociales, políticos; presentar una
propuesta que corresponda a conflictos administrativos de diversos niveles de
complejidad con sentido crítico710.
320
ahorita por el Posgrado, obviamente el enfoque también de estar
estudiando en la Universidad todavía ya desde el posgrado da una
visión más amplia pues de estarse como actualizando en muchos otros
temas y en otros más específicos como la Odontopediatría.” (7)
“Trato constantemente de ir a los simposios, los cursos que me sean
posible. Además, allá en la empresa tenemos una evaluación frecuente,
son tres o cuatro evaluaciones al año de temas diferentes. Nos dan
unos folletos actualizados por odontólogos de XXXXX universidad, se
llaman ‘Salus Holos’ y esto nos actualiza bastante. Son temas variados:
desde urgencias, clínica, traumatismo hasta parte administrativa, ley
100; es decir, cada tema es diferente… entonces esto nos ayuda mucho
a actualizarnos.” (10)
Es difícil para un odontólogo que trabaja al interior del SGSSS aplicar todos sus
conocimientos, aptitudes y destrezas científico-técnicas debido a las limitaciones
del POS, de los tiempos de atención– en promedio 20 minutos por paciente-, del
instrumental y de los materiales; sumadas a los controles administrativos
institucionales de algunas EPS-IPS que de manera expresa o tácita constriñen la
autonomía profesional. Todas esas restricciones generan sentimientos
encontrados entre los odontólogos; de un lado hay quienes afirman sentirse
“acosados”, “limitados” en su ejercicio profesional, otros se sienten gratificados por
sentir que sus servicios reportan algún beneficio a la población de usuarios; sólo
unos cuantos dijeron sentirse plenamente realizados como profesionales en el
SGSSS, bien por ser propietario de la IPS en la que trabaja (9), bien porque
encuentran que la EPS-IPS que les emplea tiene valores empresariales que les
hace sobresalir de entre las demás instituciones del mercado; lo que se manifiesta
en el buen trato hacia los clínicos que se sienten respetados en su criterio
científico-técnico y en una ética del buen trato hacia los usuarios (6; 10).
“Si los beneficia (las actualizaciones científico-técnicas), lo que pasa es
que el paciente del POS siempre va a ser un paciente muy mal atendido
realmente en todas las situaciones: el tiempo, los materiales, las
limitaciones; pero se trata de implementar -en la medida de las
posibilidades- lo que más pueda uno entregarle a ese usuario."
(Anotación entre paréntesis del autor. (3)
322
Adicionalmente, los odontólogos entienden que a pesar de lo limitado del POS,
brindar una atención a los usuarios con ética, calidad y calor humano es un valor
agregado dentro de esa integralidad.
"¡No!, no es posible (el servicio de salud adecuado e integral) porque
hay mucha traba. Tenemos que lidiar con dos políticas de manejo: la
establecida por la EPS y la que la IPS para la que uno trabaja establece;
entonces, hay que encontrar un punto de equilibrio entre todas esas
pequeñas posibilidades que brinda la una o la otra y ofrecerle a la gente
lo máximo posible en medio de tanta dificultad. La EPS da unas cosas
que la IPS retira, entonces ya le toca a uno es hacer sus ‘trucos’ ahí
para poder ofrecer un buen servicio ¿cierto?. Toca engañar al mismo
sistema al que vos le tenés que cumplir para poder ofrecer un buen
servicio… Eso es muy claro en la facturación. Un paciente que
solamente su EPS le va a cubrir tres superficies de un diente y vos le
haces las cuatro y las cinco y le facturas las tres, porque uno sabe que
es un paciente que no puede acceder más de ahí, y que en medio de la
situación como tal y de lo que vos querés ofrecer y a lo que ese paciente
pueda acceder hay que hacer eso." (3)
"Uno sabe que puede hacer otras cosas, que puede ofrecerle otras
cosas al paciente pero que la EPS no se las va a cubrir; entonces, no se
las puedo ofrecer, queda solamente limitarse al POS, es hacer lo
mínimo, lo básico." (8)
"Por eso mismo, porque diario, vea, si a uno se le zafa una cosita y se
la hace a un paciente así de ‘regalado’ algo que no está en el POS, el
llamado de atención es muy grande, entonces a uno siempre,
permanentemente la mayor vigilancia no es si usted atendió bien, si la
calza le quedó bien, si el paciente quedó satisfecho ¡No!.
Permanentemente la vigilancia es si usted hizo o no lo que estaba en el
POS."(4)
323
principio de corresponsabilidad711 en el autocuidado del sistema estomatognático.
Finalmente, hay quienes entrevén la amenaza para la práctica particular o el
ejercicio liberal de la profesión basado en realizar tratamientos no POS a personas
que detentan capacidad de pago. El mercado de la salud al interior del sistema,
monopolizado por las EPS-IPS legitimadas por el Estado a través del derecho,
absorberían la práctica odontológica llevándola casi que a su extinción como
profesión liberal en Colombia712.
"Siempre va a ser insuficiente por todas esas cosas a que se ‘inventan’
(EPS_IPS) a las que no pueden acceder, ¿cierto?, ósea esas
endodoncias preprotésicas que les niegan, esas terapias periodontales -
-que yo ojalá pudiera luchar por que en el POS estuviera incluido el
tratamiento periodontal-- porque yo digo, es que es una enfermedad
como una hipertensión. La gente no quiere que le dé enfermedad
periodontal, ¿cierto? ¡Da y ya! Da por la razón que sea. Ya la parte de
rehabilitación yo no estoy como tan de acuerdo (de que sea incluida en
el POS) porque de todas formas yo culpabilizo al paciente de haberse
dejado deteriorar sus dientes; entonces, que asuma éste el costo de
eso… yo muchas veces sí digo ¡De malas!, para que se dejó podrir las
muelas." (3)
"Como si fuéramos a hablar de un tratamiento, o sea de abordar al
paciente desde una forma integral, pues obviamente se habla de
insuficiente (el POS), si la mirada del sistema es como que le debemos
proporcionar al paciente un básico -un mínimo básico- con el que se le
permita manejar unas condiciones de salud adecuadas. Obviamente
uno sabe que eso tiene que estar enmarcado dentro de unas
condiciones financieras, de unas condiciones económicas para
garantizar la estabilidad del sistema. Yo diría que es adecuado; ósea le
puedo dar varias interpretaciones, si le doy la mirada en parte
económica es mínima de que por lo menos el sistema le garantice a
esa persona un nivel básico de salud estaría bien , pero si le doy una
amplitud y una mirada más amplia y más social… es que es claro,
ningún sistema de salud en el mundo te da una cobertura 100%, y
ningún sistema de salud al 100% sería sostenible pues, entonces yo
pienso que lo que falta es adecuar y aterrizar el sistema y concretar cuál
711 “Corresponsabilidad: Toda persona debe propender por su autocuidado, por el cuidado de la
salud de su familia y de la comunidad, un ambiente sano, el uso racional y adecuado de los
recursos el Sistema General de Seguridad Social en Salud y cumplir con los deberes de
solidaridad, participación y colaboración. Las instituciones públicas y privadas promoverán la
apropiación y el cumplimiento de este principio”. (Ley 1438 de 2011. Artículo 3, # 3.17)
712JARAMILLO DELGADO, Gonzalo; VELÁSQUEZ ESCOBAR, José P. La práctica odontológica:
profesión liberal que se debate entre la distinción y la extinción. Artículo de investigación (inédito).
Medellín : Universidad de Antioquia. 2012.
324
es el alcance primero con esa cobertura." (Anotación entre paréntesis
introducida por el autor. -6-)
"Creo que es insuficiente, pues, yo trabajo con la EPS, pero también
pienso en la contraparte: las personas que quisieran tener su consultorio
odontológico, como somos la mayoría de los odontólogos, si nos
enfrascamos en que la EPS lo cubra todo, donde queda también la
profesión… también hay que pensar de que no podemos volvernos a
que al paciente hay que darle todo…" (2)
En suma, los odontólogos tienen muy claro que es necesario el dominio del saber
científico-técnico de la odontología para su aplicación cotidiana en la prestación de
servicios al interior del SGSSS, lo que se refleja positivamente en el servicio
brindado al usuario --no obstante a las limitaciones que ofrece el mismo complejo
normativo-institucional para el desarrollo pleno de las potencialidades del
profesional y para garantizar una atención integral en todos los casos--. Por su
parte, algunas EPS-IPS tienen el interés de actualizar al personal talentoso en
salud a su cargo procurando dictar capacitaciones cuyas líneas temáticas
conciernen a los servicios ofertados.
325
Para que opere el sistema de referencia713 y contrarreferencia714 de usuarios es
menester que el odontólogo conozca la forma en que éste funciona, lo que implica
contar con suficientes bases científico-técnicas, ético-bioéticas y jurídicas; mismas
que le permitirán tomar decisiones acertadas y oportunas como medidas clínico-
administrativas tutelares del derecho a la salud de los pacientes a su cargo.
713 La referencia, conocida en el argot médico como remisión, “es el envío de pacientes o
elementos de ayuda diagnóstica por parte de un prestador de servicios de salud, a otro prestador
para atención o complementación diagnóstica que, de acuerdo con el nivel de resolución, de
respuesta a las necesidades de salud”. (Decreto 4747 de 2007, artículo 4º literal e.)
714 La contrarreferencia “es la respuesta que el prestador de servicios de salud receptor de la
referencia, da al prestador que remitió. La respuesta puede ser la contrarremisión del paciente con
las debidas indicaciones a seguir o simplemente la información sobre la atención prestada al
paciente en la institución receptora, o el resultado de las solicitudes de ayuda diagnóstica”. (Ius-
Ibíd.)
326
y ortodoncia. Las que implican tratamientos no POS implican la autorización por
parte de los CTC y ese proceso será tratado en el próximo título.
"[Q]ue sea un procedimiento que yo no tenga la posibilidad de realizar
en mi sitio de trabajo, o que sea un procedimiento de complejidad
mayor, que yo no pueda hacer y que esté dentro de la cobertura del
plan. En los pacientes de la IPS (…)los pacientes del SISBEN que yo
atiendo, generalmente los remito por que requieren, necesitan y se
justifica hacer una cirugía de terceros molares los remito al cirujano; o
cuando un paciente tiene múltiples endodoncias, o endodoncias que se
ven de una complejidad ya mayor, los remito a endodoncia. Esos han
sido como los casos que más se presentan."
“[S]ervicio de endodoncia cuando es multirradicular o cuando es una
endodoncia que implique conductos laterales, o que tenga algún
problema adicional, (en estos casos) se puede remitir a endodoncia; ya
que, hay especialista de endodoncia por el POS. Esto se lo cubre la
EPS al paciente y también la cirugía de terceros molares, cirugías de
lesiones, cirugías exodóncicas de diente retenido o cosas así (…)cuando
es un tratamiento no POS también he remitido a los pacientes para
ortodoncia… a todas las especialidades."(4)
"Si, y lo cubre el POS. Tenemos tanto acceso a estomatólogo como a
cirujano maxilofacial. Son dos especialidades que tenemos aparte." (2)
Parece ser que los odontólogos como operadores jurídicos conocen y hacen uso
adecuado y oportuno del sistema de referencia y contrarreferencia de usuarios;
empero es de anotar que este proceso implica de cierta forma contar con los
conocimientos de las inclusiones y exclusiones del plan de beneficios en los
diferentes niveles de complejidad, y como quedó visto en el título 5.4 de este
capítulo, existen grandes carencias al respecto.
715 La Resolución 548 de 2010 del Ministerio de la Protección Social, por la cual se reglamentan
entre otras cosas el quehacer de los Comités Técnico-Científicos; dispone en el artículo 6º, literales
(a) y (b), cuáles son los criterios relacionados con las prescripciones y órdenes de tecnologías en
salud no POS presentadas por los profesionales del área de la salud (médicos) y que entre otros
considerandos deben ser tenidas en cuenta para evaluarles, aprobarles o desaprobarles. En todo
caso, es claro que el odontólogo debe presentar la solicitud al CTC a través del formato
institucional en el evento de que se cuente con él o adjuntando a la respectiva orden o
prescripción, debidamente sustentada y por escrito, la epicrisis o resumen de la historia clínica con
el nombre de la tecnología en salud que se requiere y el nombre de la que le reemplaza o
sustituye, equivalentes al o los servicios médicos y prestaciones de salud autorizados; y si es
necesario, la información sobre resultados de ayudas diagnósticas, información bibliográfica,
situaciones clínicas particulares y casuística. La sustentación debe basarse en guías, protocolos,
doctrinas definidas y publicadas para el efecto si las hubiera.
328
trámite dispendioso para el profesional pero que en general terminan con la
aprobación por parte del CTC. En pocos casos se dice que las solicitudes no son
efectivas por las desautorizaciones emitidas por tales cuerpos administrativos; la
cuarta y última situación da cuenta de que los odontólogos, ora por cuenta propia,
ora por directrices institucionales de las EPS-IPS, se abstienen de informar al
paciente de esta posibilidad hasta tanto perciban en el usuario la intención de
interponer una acción de tutela.
"¡Sí!, conozco que es un ente que se creó tendiente a manejar
precisamente todas esas situaciones que se salían del POS; o sea, que
la EPS miraba como respuesta a amenazas a esa imposición de la Corte
de garantizarle la atención integral y adecuada a una persona. Hay un
Comité que se encarga de avalar la pertinencia o no de la realización de
ciertos procedimientos que no estén contemplados en el POS." (6)
"Autoricé uno para X EPS, de una paciente con Síndrome de Down, y
tenía una periodontitis severa. El odontólogo general no está en
capacidad de hacer un buen raspado radicular, cirugía periodontal,
entonces se pidió a través de un CTC... y no fue autorizado."(Entiéndase
diligenciar una solicitud en lugar de autorizar. 9)
"A mí me aterran… es muy dispendioso, y en la EPS, yo tengo que
hacer eso en mi tiempo, o sea yo no tengo tiempo en la consulta para
hacer eso, entonces lo que yo hago es pedirle el favor al especialista: si
es de ortodoncia al ortodoncista, si es de odontopediatría entonces al
odontopediatra; porque yo ya no diligencio esos CTC. Ellos mismos me
los diligencian." (4)
"Allí (en la IPS), la directriz es que si un paciente llega necesitando por
ejemplo una prótesis fija, una corona, entonces le tengo que decir, que
ese procedimiento es no POS, no lo cubre el POS. Cuando el paciente
insiste, ¡Es sólo si el paciente insiste!, ¡No es si uno se lo quiere brindar!,
si el paciente insiste y por tal caso menciona que va aponer una tutela
entonces uno lo detiene y lo llama: ‘venga no, ¿una tutela?, hagamos un
CTC’, entonces se hace el Comité Técnico-Científico y eso se demora
unos días. Eso va a una junta en X lugar donde se reúnen y ellos
aprueban la realización por parte de la EPS, que puede ser totalmente
cubierta por la EPS o una parte: 30% el paciente 70% la EPS."
(Anotación entre paréntesis del investigador. 4)
Bien podría afirmarse que existe en todo esto una especie de juego económico y
doble moral orquestado por las directrices institucionales y por la misma dinámica
mercantil del sistema: los imprecisos conocimientos del deber que le asisten al
profesional para accionar los CTC a favor de los pacientes (para los cuales no
hay capacitaciones porque no es conveniente económicamente), la asimetría de
conocimientos entre usuarios, las limitaciones de tiempo y la complejidad de los
requisitos para justificar los CTC, las directrices impartidas a los odontólogos por
las EPS-IPS para que omitan informar o desestimulen la demanda de tratamientos
no POS, la no reglamentada figura del defensor del usuario, la desidia de los
órganos de vigilancia, inspección y control sobre la implementación real y efectiva
de los derechos de los usuarios son factores que contrarían la teleología
constitucional y legal del SGSSS, y a todas luces contravienen principios ético-
bioéticos como el de no-maleficencia, justicia y beneficencia.
330
6.12 LOS ODONTÓLOGOS FRENTE A LA DIMENSIÓN ÉTICO-BIOÉTICA DE
LA PROFESIÓN
La prestación de servicios de salud por los profesionales no escapa al interés de la
ética-bioética aún al interior de los sistemas sanitarios como el colombiano. Ese
interés ha alcanzado tal magnitud que recientemente principios, valores y virtudes
de la doctrina filosófica han sido positivizados en la Ley 1164 de 2007 716. El
Código Deontológico del odontólogo colombiano o Ley 35 de 1989 y el Decreto
491 de 1990 que le reglamenta –pese a aparecer desueto de cara el SGSSS-
referencia tácitamente a lo largo de su articulado los principios de beneficencia,
no-maleficencia, autonomía y justicia. El que un odontólogo operador jurídico en
el complejo acto de comprensión del derecho a la salud los incorpore en sus
argumentaciones textuales de la historia clínica o en el diligenciamiento de los
formatos de solicitud de tecnologías no POS al CTC, se tornan en herramientas
del lenguaje que posibilitan en el escenario clínico-administrativo de la odontología
coadyuvar con la tutela efectiva del derecho a la salud de las personas, sin
perjuicio de que con tal conducta se pueda probar diligencia profesional, lo que
contribuiría con la defensa del odontólogo frente a eventuales ‘litis’.
Los odontólogos tienen una opinión dividida con respecto a si les es posible
cumplir con toda la preceptiva del código de ética del odontólogo colombiano al
trabajar para una IPS del SGSSS: pocos respondieron categóricamente que sí era
posible, la gran mayoría aludiendo a una disyuntiva o a las particularidades de los
sistemas o dinámicas de trabajo sentenciaron que no es posible cumplir con la
totalidad de la deontología de la Ley 35 de 1989 y/o la ley 1164 de 2007.
"Sí, yo creo que sí, yo creo que esa parte más que de la institución, es
una decisión personal, o sea yo tengo la posibilidad como te decía
ahora, en la institución nunca se me ha limitado, ni se me ha dado una
716 La ley 1164 de 2007, conocida como la Ley del Talento Humano en Salud (THS), dispone en el
artículo 35 como un deber tener y no como una consideración facultativa que “[a]demás de los
principios rectores consagrados en la Constitución Política, son requisitos de quien ejerce una
profesión u ocupación en salud, la veracidad, la igualdad, la autonomía, la beneficencia, el mal
menor, la no maleficencia, la totalidad y la causa de doble efecto.”
331
‘camisa de fuerza’, o sea, se me dan unos lineamientos y se me dan
unas metas.”
"De forma completa, completa: ¡No! Como yo le digo, hay cosas que
serían más justas para el paciente y que no se les dan."(8)
"Se intenta, yo sé que debería decir que sí, pero es que la verdad es
muy difícil, porque empezando por ese tal concepto de que ya no somos
odontólogos sino vendedores, entonces se amplía como el rango para
hacer resinas donde no caben, para hacer blanqueamiento donde no es;
con todo eso se altera el código de ética." (4)
"¡No!, no se cumple. Considero que si alcanzamos un 50% es mucho.
No se cumple, o porque el odontólogo como tal no le interesa, eso
demanda tiempo y en general… es una combinación, es un choque: la
EPS no deja hacer esto, y nosotros no debemos hacer esto, y ¿Qué
queda?. ¡Nada!, ¡No se puede hacer nada!" (3)
En las respuestas concedidas por los sujetos participantes notó una división: i)
entre quienes decían conocer la principialista bioética que fundamenta las
conductas de los profesionales frente a la persona del usuario y aún así
confesaban no recordarlos o planteaban nociones que distaban de su específico
uso en el juego del lenguaje y las dinámicas hermenéuticas aplicables en el acto
odontológico; y ii) entre quienes sin rodeos declararon no conocerlos.
Sucintamente puede afirmarse que hay quienes tienen nociones de la existencia
de los principios bioéticos pero no son conscientes de que sean tangibles
operacionales en el ejercicio profesional, dando la idea de que intuitivamente
presumen que tales principios se hayan incorporados, sin más, en su recto obrar
deontológico.
"Si nos los mencionaron y nos hicieron examen, pero para serte sincera
en este momento no recuerdo...Integralidad, respeto, la integralidad es
de la que más me acuerdo" (3)
"Principios que orientan… específicos no… yo creo que se ven en la
base del respeto, de la atención con humildad, pues como muy en
general."(6)
"No sé si se refiere a lo que creo, por ejemplo, actuar con la ética; no
reconozco los conceptos como tal" (7)
717 Douglas North considera que, desde un marco economicista del desarrollo institucional --como
el propiciado en salud por la Ley 100 de 1993-- un profesional institucionalizado sería aquél que
encuentra extensamente regulado su campo de interacción con otros agentes que conforman la
sociedad por normas legales y culturales. Entiéndase por agentes a pacientes (usuario, cliente),
Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud, Empresas Promotoras de Salud, órganos de
dirección, vigilancia y control del Estado, etc.
334
POS, esa es como la labor diaria, todo el tiempo estar luchando contra el
no POS, contra el no POS." (3)
"De pronto ellos nos dicen: ¡No le creen necesidades al paciente!; pero
no nos han dicho: ¡Niéguele al paciente lo que él necesita!. La verdad
es que no existe la directriz, ni siquiera verbal, a no darle. ¡No¡ Así no;
pero sí, de que no le creen necesidades: ¡Si el paciente no lo pide no se
lo dé! pero si el paciente lo pide no se lo niegue, ¡hágale el CTC! No hay
nada que nos prohíba hacer eso."
El control en algunas IPS se ejerce con regularidad, una de las estrategias más
corrientes son las reuniones entre administradores y clínicos, eventos en los que
aquéllos enrostran a los odontólogos los incrementos en las remisiones de casos
al CTC a su vez que les incitan a la venta de servicios no POS a los pacientes.
Incluso ello lleva a generarse tratos diferenciales entre los usuarios particulares o
que consultan por el POS.
“[S]omeramente puedo decir que ellos (la EPS-IPS), por ejemplo, le
venden a uno la idea de que le diga al paciente --obviamente eso no se
lo van a dar a uno por escrito sino en las reunioncitas que hacen-- le
venden a uno la idea de que es que le tenemos que decir al paciente,
¡No, usted pues un implante tampoco!, usted se puede poner una
prótesis removible ¿Cierto?; Para ellos va a ser más económico hacer
un removible, asumir el costo de una prótesis removible hasta una placa
estética y el valor es un problema”. (Anotación entre paréntesis del
autor. 1)
“Cien por ciento (100%). Hay unas planillas en las que tenemos una
competencia del que más venda. El que más venda es el que más se
queda, así sea un mal odontólogo, el que más venda tiene su trabajo
asegurado… eso es una venta para otros, pero te garantiza la
permanencia en un trabajo estable, en medio de tanta inestabilidad y
tanto desempleo." (3)
"¡Claro! Es que yo no sé por qué estoy ahí todavía. En los grupos
primarios -como se llaman las reuniones que se hacen mensualmente-
siempre está diciéndose: ‘se está viendo que están remitiendo pacientes
para que se les haga CTC… se le están abriendo los ojos a los
pacientes, eso no está permitido’." (4)
“Lo que yo veo, es que para la IPS, lo mejor es que el paciente se haga
el tratamiento particular, y digamos en el caso de XXXXXX, todos esos
servicios particulares se prestaban ahí mismo… por ejemplo hay algo
muy charro, me parece –digamos, un paciente que consulta por el POS
pide la cita y las citas estaban para un mes, 15 días o 20 días; a veces la
oportunidad variaba; pero si era particular, prácticamente conseguía la
cita para el mismo día o para el otro día-- la oportunidad del particular es
335
inmediata, la del paciente que va por el POS, se puede demorar mucho
tiempo."(7)
Otra parte de los odontólogos expresaron no sentirse presionados por las EPS-
IPS con las cuales tienen relaciones contractuales y que por fortuna cuentan con
total autonomía para tratar y/o referir al usuario, o cuando es del caso -sin
restricción alguna- elevar solicitudes de tratamientos no POS al CTC. Eso sí,
deben seguir ciertos lineamientos o directrices.
"No, a mí en la IPS no me ha tocado ese tipo de restricción… lo he oído
mencionar pero de colegas de otras instituciones, pero en XXXXXX no,
en XXXXXX lo que se hace -como te decía- es seguir lineamientos; por
decir algo, puede llegarme un administrador y me dice --vamos a
enfocar la atención en este momento a la población infantil, y los adultos
vamos a controlar-- hay priorización que es distinto a uno decir que no
pueden atender tal población o que si hay que hacer esto ¡No lo pueden
hacer! o que tiene que hacer algo que vaya en contra de los principios
éticos del procedimiento que se debe hacer." (6)
"¡No!, hasta ahora no; por ejemplo, las limitaciones de lo de las resinas
en dientes posteriores si es más como una directriz y no ha sido en
ningún caso como un llamado de atención como que usted no lo puede
hacer, pero si es más como una advertencia -digámoslo así- como:
‘tengan cuidado que esto se hace ¡así, así, así!’; entonces en cierta
manera uno termina haciendo el procedimiento como ellos lo indican."(7)
"Realmente el jefe o el dueño de la IPS es muy abierto y confía en mi
criterio. No está con: ‘lo cubre’, ‘no lo cubre’. Deja totalmente a mi criterio
las cosa que tenga que hacer, las que haya que remitir. No hay presión
de ningún tipo…también por la forma de contratación de la EPS que es
por capitación entonces no está esto lo cubre, esto no; pero
generalmente cuando tengo remitir generalmente lo aceptan…"(8)
336
su derecho a la información en aras de la rentabilidad. ¿Es esto práctica
odontológica?, ¿No será más bien una inducción a la práctica dental718?.
718 Existe una diferencia sustancial entre la práctica odontológica --centrada en la relación
intersubjetiva y el reconocimiento de la dignidad de la persona del paciente- contraria a la práctica
dental limitada a lo técnico-instrumental. Véase a: CORTÉS C. NELSON. El sujeto en la práctica
odontológica. Revista Facultad de Odontología de la Universidad de Antioquia, 2003; 14(2). pp.
70-77
719 Colombia. Constitución Política. Artículo 209.
720 Colombia. Congreso de la República. Ley 100 de 1993. Artículo 185. “Son funciones de las
Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud prestar los servicios en su nivel de atención
correspondiente a los afiliados y beneficiarios dentro de los parámetros y principios señalados en la
presente Ley. Las Instituciones Prestadoras de Servicios deben tener como principios básicos la
calidad y la eficiencia, y tendrán autonomía administrativa, técnica y financiera. Además
propenderán por la libre concurrencia en sus acciones, proveyendo información oportuna,
suficiente y veraz a los usuarios, y evitando el abuso de posición dominante en el sistema. Están
prohibidos todos los acuerdos o convenios entre Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud,
entre asociaciones o sociedades científicas, y de profesionales o auxiliares del sector salud, o al
interior de cualquiera de los anteriores, que tengan por objeto o efecto impedir, restringir o falsear
el juego de la libre competencia dentro del mercado de servicios de salud, o impedir, restringir o
interrumpir la prestación de los servicios de salud.”
337
6.14 LA CONCIENCIA JURÍDICA DEL ODONTÓLOGO COMO OPERADOR
JURÍDICO DEL SGSSS
Parecería lógico suponer que se pueden lograr mayores niveles de concreción de
la tutela del derecho a la salud de los pacientes en el escenario clínico-
administrativo en el que se desenvuelve el odontólogo como operador jurídico del
SGSSS colombiano cuando los niveles de conciencia jurídica de los profesionales
son mayores y los llevan a la práctica. Esa conciencia jurídica implica para
aquéllos reconocerse como quien tiene una relación vinculante con el derecho y
en virtud de esto con los afiliados, las EPS-IPS, los entes administrativos de
dirección, inspección, vigilancia y control, la autoridad judicial. Esa especial forma
de conciencia le permite experimentar, interpretar o resistir ese derecho de la
Seguridad Social en Salud; descubriendo y redescubriendo en esa dinámica los
significados jurídicos que dan un sentido a su práctica profesional cotidiana más
allá de lo científico-técnico y lo técnico-instrumental721.
721Véanse los estudios de conciencia jurídica de SILBEY, 2007; SARAT, 1990; EWICK y SILBEY,
1992; así como la investigación: Dilemas en las decisiones en la atención en salud. Ética,
derechos y deberes constitucionales frente a la rentabilidad financiera llevada a cabo por la
Universidad de Antioquia, Procuraduría General de La Nación. Ed. Instituto de estudios del
Ministerio Público. Bogotá-Colombia. 2009. P. 252.
338
laboral) de la acción de tutela de las personas, pareciera que los tienen a todos
por igual en cuanto al sentido y alcance.
Con respecto a haberse visto implicados en tutelas interpuestas por usuarios
"Sí (y han sido resueltas de manera) favorable para el
paciente."(Anotación entre paréntesis del investigador. 2)
"Gracias a Dios ¡No! Ojalá que no." (8)
Pese a que entre los sujetos participantes existe disparidad conceptual y por ende
variaciones en el dominio del derecho de la seguridad social legislado y
jurisprudencial relacionado con el plan de beneficios, el sistema de referencia y
contrarreferencia de usuarios, la dinámica funcional de los CTC, las nociones
sobre principialista y procedimientos decisionales ético-bioéticos de las decisiones
relacionadas con el acto odontológico y el derecho a la salud de los afiliados; la
mayor parte de los odontólogos afirmó ser consciente de que en el escenario
clínico-administrativo de la IPS en las que se desenvuelven: tutelan; es decir,
protegen el derecho a la salud de los usuarios(pacientes) que atienden, pese a
expresar que este resulta ser un cometido y fin de difícil concreción por la
irracionalidad en el uso de los servicios por muchos pacientes y por las
limitaciones institucionales.
"Si, definitivamente uno se vuelve como promotor de la salud y un
promotor de las leyes, y de las posibilidades que tiene un ciudadano
para ejercer su derecho, y el saber guiar precisamente a ese paciente, a
ese ciudadano, movilizarlo de alguna manera para reclamar ese derecho
en salud y comprometerse también en ese derecho en salud." (7)
"Sí, soy consciente de eso, pero también soy consciente de que los
pacientes a veces utilizan muy mal el servicio, entonces por eso te
hablaba de lo de la educación en todos los sentidos, por lo de la
promoción y la prevención de la salud y en el majeo del sistema de
339
seguridad social, porque la gente piensa, que le hagan todas las ayudas
diagnósticas, todos los exámenes posibles cuando realmente no lo
necesitan, ó sea es educar también al paciente para eso." (1)
"Es que de eso se trata, pero vuelvo y lo repito, eso en una EPS es muy
difícil." (4)
“[Y]o soy consciente de que debo hacer lo posible para que esa persona
pueda obtener el servicio, pero también soy consciente de que no soy el
único responsable…" (5)
340
"Sí, y debe haber más capacitación en esto de los odontólogos que
están saliendo, o sea yo creo que deben salir muy integral en esos tres
aspectos."(10)
“Se deberían integrar desde la formación de uno, digamos desde la
Universidad, y al interior de las EPS, el gobierno me parece que debiera
de tener más vigilancia, de que todas estas normas que se estén
cumpliendo.”(11)
En conclusión, los odontólogos que trabajan para las IPS del SGSSS tienen
conciencia de su responsabilidad social y personal frente a la población de
usuarios que atiende más desde una perspectiva científico-técnica y ético-bioética
que jurídica. Los términos conciencia jurídica u operador jurídico les son ajenos a
los odontólogos; empero, parecería ser que ínsitamente los encuentran imbuidos
en su conciencia general profesional; que en últimas, aducen debe ser más
integral y que demanda de mayor formación para mejor conocer, comprender,
interpretar, integrar, aplicar-crear el derecho de la seguridad social con criterio de
unidad con respecto a las nociones científico-técnicas y ético-bioéticas que
influyen en el ser y quehacer de su profesión en aras de salvaguarda el derecho a
la salud de las personas.
342
Conclusión
En las EPS-IPS del SGSSS es factible encontrar una población de odontólogos
prestando sus servicios con una gran variedad de características de género, edad,
centros universitarios de los cuales egresaron, experiencia profesional como
trabajadores del sector salud, grado de formación académica y modalidades
contractuales. No obstante, existe en todos ellos un profundo sentido del deber,
mismo que resulta confrontado en sus escenarios de práctica por diversas
limitaciones, algunas de las cuales les serían imputables, como la actitud
negligente frente al conocimiento del derecho de la seguridad social en salud y el
relajamiento respecto al rigor teórico-práctico de las directrices ético-bioéticas de
su profesión. Otras obedecen más a fallos en el sistema: fenómenos jurídicos y
extrajurídicos de orden legislativo, reglamentario, interpretativo y concrecional que
pueden llevar a la violación del derecho a la salud de los pacientes.
Los odontólogos son jugadores inexpertos del juego del lenguaje del derecho de la
seguridad social en salud debido a que sus preconceptos son limitados, y su
conciencia ético-bioética real --que dista de un óptimo conocimiento de la
preceptiva deontológica-- le hace más difícil cumplir con la deontología que le
vincula; consecuencialmente también resulta limitada su comprensión y capacidad
de operativización del derecho a la salud a favor de los pacientes. No obstante,
los facultativos de la odonto-estomatología compensan esta situación mediante la
implementación de sus conocimientos científico-técnicos en la práctica cotidiana,
conocimientos frente a los cuales demuestran mayores fortalezas, habilidades y
destrezas.
Es preocupante percibir que los operadores jurídicos dominantes son las propias
EPS-IPS, pese a ser éstas las que presentan mayores conflictos de intereses al
interior del sistema. Estas instituciones terminan impartiendo doctrina e influyendo
sobre la autonomía de los profesionales, desvirtuando en algunos casos el sentido
y alcance del derecho a la salud en detrimento de un acto odontológico orientado
343
a valores: tutelar desde el escenario clínico-administrativo el derecho a la salud de
la persona del usuario. El producto de todo esto es un odontólogo
institucionalizado, irreflexivo, acrítico. Algunos de los odontólogos se resisten a
ello incurriendo incluso en actitudes anómicas frente a la institucionalidad para
poner en el centro el interés superior de la persona y lo hacen de hecho cuando
bien podrían lograr el mismo resultado desde la argumentación jurídica y ético-
bioética del caso, pero que no lo hacen por desconocimiento.
344
7. CONCLUSIONES
345
METODOLÓGICAS
Dado que el enfoque de esta investigación fue cualitativo y su estrategia
predominantemente documental, es dable concluir que el método hermenéutico
dialéctico resultó pertinente en el proceso de comprender al odontólogo como
operador jurídico en el Sistema General de Seguridad Social en Salud (SGSSS)
colombiano a partir de dimensiones científico-técnicas, ético-bioéticas y jurídicas
(derecho legislado y jurisprudencial). Igualmente, posibilitó un proceso de
exploración a las percepciones que tienen los odontólogos sobre el deber ser y
quehacer de su práctica cotidiana como profesionales insertos en las dinámicas
del SGSSS con el objeto de tutelar el derecho a la salud de sus pacientes desde
sus particulares competencias.
SUSTANTIVAS
La presente investigación posibilitó comprender que el odontólogo ciertamente es
un operador jurídico del Sistema General de Seguridad Social en salud y que tiene
el deber de tutelar el derecho fundamental a la salud de la persona del usuario,
prevaliéndose para ello de nociones científico-técnicas, ético-bioéticas y jurídicas
(derecho legislado y jurisprudencial). En ese orden de ideas, el conocimiento que
se presenta a la sociedad fruto de esta investigación se integra por varios
productos hermenéuticos a saber:
Teóricas.
La teoría sobre los juegos del lenguaje permite sostener la idea de que nociones
como: operador jurídico, derecho a la seguridad social en salud, profesión
odontológica, ética-bioética sean constructos humanos prácticos, productos del
El odontólogo operador jurídico del SGSSS, hace parte del complejo campus de la
salud, campus con sus particulares disputas y que a su vez se encuentra
interrelacionado con y es interdependiente de otros campus en los que
convencionalmente se crean ciertos juegos especializados del lenguaje como el
científico-técnico, ético-bioético y jurídico que le posibilitan describir, mejor
comprender y desenvolverse en el mundo de la seguridad social en el Estado
Social de Derecho colombiano.
Los juegos del lenguaje son insumos fundamentales del pensamiento que hacen
posible el acto del comprender. En esta investigación se concluye que el
odontólogo como operador jurídico en el Sistema General de Seguridad Social en
Salud es portador de un bagaje de prejuicios dados por la tradición (la formación
universitaria, las capacitaciones, las experiencias de vida profesional) con
respecto a lo que es la salud, el derecho, el derecho a la salud, el derecho a la
salud en relación con la profesión odontológica, el plan obligatorio de salud (POS)
sus inclusiones y exclusiones, los Comités Técnico Científicos (CTC), La Junta
Técnico-Científica de pares (JTC), la bioética en la seguridad social. Estos
prejuicios hacen parte de los insumos hermenéuticos orientados a comprender la
cosa misma llamada “derecho fundamental a la salud”, comprensión que
robustece sus niveles de conciencia jurídica, permitiéndole la mejor integración de
las nociones bioéticas, científico-técnicas y jurídicas (derecho legislado y
jurisprudencial) con respecto al ejercicio de su profesión en el SGSSS colombiano.
349
El odontólogo que trabaja en el Sistema General de Seguridad Social en Salud
hace parte de un complejo andamiaje normativo e institucional que vincula lo
público y lo privado y por ende una diversidad de intereses, actores, recursos,
funciones; lo que le hace un burócrata garante del derecho a la salud. El
odontólogo es un operador jurídico institucionalizado724 y debería contar con una
robusta conciencia jurídica que, tomada como instrumento o herramienta, posibilite
su mejor desenvolvimiento cotidiano; ya que, a través de su práctica, vive inmerso
en un contexto complejo en el que coexiste el derecho, la interlegalidad y otros
componentes extra jurídicos725 -como los científico-técnicos y ético-bioéticos- en
relación con la persona del usuario, las Entidades Promotoras de Salud, las
Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud (EPS-IPS), los CTC, la JTC, el
Juez constitucional de tutela y consigo mismo.
El concepto de operador jurídico hace parte de las disputas que acaecen entre los
agentes de un campo y los ‘otros’ ajenos a él; en la que los primeros buscan
mantener el dominio hegemónico con mecanismos restrictivos de la participación
en los ritos jurídicos y la sofisticación del lenguaje, pretendiendo de ese modo
excluir o mantener dentro de unos límites tolerables a extraños y a legos.
351
En el campo del SGSSS, son ejemplos de operadores jurídicos:
Internacionalmente, el Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de
la Organización de Naciones Unidas (CDESC-ONU), del orden nacional lo son la
Corte Constitucional, el Congreso de la República, el Ministerio de Salud y
Protección Social, la Superintendencia Nacional de Salud y sus entes delegados;
la Comisión de Regulación en Salud (CRES), las Entidades Promotoras de Salud
(EPS), las Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud (IPS), el talento
humano en salud y los usuarios (afiliados y beneficiarios).
El odontólogo que trabaja al interior del SGSSS está dotado de conciencia jurídica
como actor social influenciado e incluso determinado por el derecho frente al cual
tiene particulares percepciones y formas de interacción, muy especialmente con
respecto al ‘deber ser’ y al ‘quehacer’ como profesional al servicio de la sociedad.
Esa conciencia jurídica contribuye con el objeto de la profesión: la salud bucal de
la población y su contribución con la salud integral y la calidad de vida individual y
colectiva.
729Con respecto a los modos de vida y estilos de vida saludables dentro de la teoría de la
determinación social de la vida y la salud, véase a BREILH. Jaime. Las tres ‘S’ de la determinación
social de la vida. Op. Cit. p. 103-014.
354
esperar que el odontólogo como parte del equipo talentoso en salud conozca y
obre en consecuencia cumpliendo la ley730
Una de las formas de concreción fáctica en el acto odontológico que hace pensar
en el odontólogo como operador jurídico, es cuando éste solicita -en defensa del
derecho a la salud y dignidad de sus pacientes- un medicamento, intervención,
procedimiento o actividad no POS, como por ejemplo: cirugías periodontales,
ortodoncia y/o rehabilitación protésica; es decir que, la conducta del odontólogo al
diligenciar y remitir el formato de solicitud de servicios no POS al CTC de la EPS,
para la posterior revisión por parte de la JTC; pretende la inaplicación de la norma
prescriptiva de las exclusiones del Plan de Beneficios y de este modo tutelar
constitucionalmente --desde el escenario clínico-administrativo-- el derecho
fundamental a la salud de la persona del paciente/usuario.
734 Colombia. Constitución Política. Sentencia T-760 de 2008. M.P. Manuel José Cepeda
Espinosa
735 Los principios generales del POS son: integralidad, territorialidad, complementariedad,
pertinencia demográfica y epidemiológica, costo-efectividad, eficiencia y sostenibilidad financiera,
357
las inclusiones del POS737, iv) las exclusiones del régimen contributivo 738, v) las
inclusiones de ambos regímenes – que en materia de salud bucal se encuentran
unificados739 y que son citadas directamente en el texto del Acuerdo 29 de 2011
como aquéllas enlistadas en sus Anexos 1, 2 y 3; y iv) lo pertinente de las
coberturas especiales para los menores de 18 años740.
Además de las inclusiones, el odontólogo como operador jurídico del SGSSS, por
medio de la hermenéutica –afín a y complementaria de los procedimientos y las
metodologías para la toma de decisiones morales desde el acto odontológico--
debe conocer, interpretar-integrar, aplicar-crear (concretar) el derecho a la salud
de la persona cuando requiere tecnologías en salud que no están incluidas en el
POS.
El odontólogo como operador jurídico del SGSSS, en los casos que plantean
problemas morales y jurídicos de personas que eventualmente podrían requerir
con necesidad de una tecnología en salud, se constituye en la segunda línea de
tutela, debiendo decidir si el paciente requiere con necesidad o no de ese
tratamiento. Será menester para éste aplicar sus conocimientos, habilidades y
destrezas científico técnicas en el acto odontológico para establecer --a partir de la
información colectada con la anamnesis y los exámenes físicos y
estomatognáticos bajo la guía de la semiología médica-- el diagnóstico clínico e
incluso socio-económico de la persona, dando lugar al pronóstico y plan de
tratamiento en el que se establecerá ese requerir de esas tecnologías en salud.
En estas instancias del acto odontológico que tiene lugar en el seno del SGSSS,
se debe continuar con la hermenéutica comprensiva de la cosa en el caso, es
decir, del derecho a la salud en la situación de un paciente para el cual se ha
establecido clínicamente que requiere de una tecnología no POS. Queda por
establecer por parte del clínico la condición de la necesidad o no y para ello el
odontólogo operador jurídico debe interpretar e integrar el derecho legislado y
jurisprudencial permitiendo la reflexión ético-bioética del caso desde la
principialista y el procedimiento de decisión moral que en últimas –de no existir
una contradicción insalvable- podría también ser jurídico. Justo en este momento,
el odontólogo debe acudir a las reglas de interpretación establecidas por la Corte
Constitucional y aplicarlas al caso.
741 Colombia. Corte Constitucional. Sentencia T-343-03. M.P. Marco Gerardo Monroy Cabra.
Pueden consultarse entre otras sentencias -que citan los cuatro requisitos jurisprudenciales de
procedibilidad de la tutela del derecho a la salud por tratamientos No POS- las siguientes: T-500-
94, SU-819-99, T-523-01, T-586-02, T-990-02, T-760-08.
361
principio de no maleficencia, ya que, no orientar debidamente a la persona del
usuario puede eventualmente llegar a comprometer lesivamente su salud,
economía y a la vida de relación; y con el principio de justicia (formal y material),
porque se le ha asignado lo que necesita merced a su capacidad dentro de las
coberturas previstas por el sistema.
Prácticas.
En cuanto a la parte exploratoria de las experiencias cotidianas de los odontólogos
que trabajan en el SGSSS, los aportes más significativos interpretados a la luz del
marco conceptual fueron:
363
La principal vocación del odontólogo es la de contribuir con la salud de los
pacientes y servir a la sociedad. No obstante, las condiciones de trabajo en el
marco de la Ley 100 de 1993 donde la legalidad y las reglas institucionales de las
EPS-IPS limitan la autonomía, hacen que algunos actores expresen sentimientos
encontrados frente a lo que consideraron sería su ejercicio profesional y lo que
éste efectivamente es; máxime cuando el odontólogo es formado bajo los criterios
predominantes de una profesión liberal.
No existe consenso con respecto al concepto salud por parte de los odontólogos;
encontrándose nociones reduccionistas hasta otras de corte ecléctico que
pretenden dar cuenta de la complejidad de la entidad. No obstante, puede
364
aseverarse en acto hermenéutico de integración conceptual que en general los
odontólogos conciben la salud como aquella situación relacionada con el
equilibrio, la integralidad y el bienestar biopsicosocial de las personas. Una
persona saludable es aquella que se puede desenvolver adecuadamente en la
cotidianidad.
Puede concluirse respecto a la noción que tienen los odontólogos del derecho a la
salud, que éste le es inherente a todas las personas (aunque suelen usar
mayoritariamente, merced a su lenguaje biomédico la expresión pacientes), en la
que el Estado funge como el garante –desde la cuna hasta la tumba- del acceso a
los servicios de salud evitando cualquier tipo de obstáculo; y, en general, las
condiciones de vida que hagan posible el bienestar individual y comunitario.
Los odontólogos cuentan con una serie de preconceptos –prejuicios- acerca del
SGSSS introducidos en su tradición formativa en diferentes momentos de la vida
académico-profesional; así, el odontólogo egresado con anterioridad a la Ley 100
de 1993 los aprendieron sobre la marcha de su trabajo institucional en el SGSSS;
los demás lo hicieron en los centros de formación universitaria o en sus
inducciones laborales. Las fuentes de conocimiento han sido predominantemente
secundarias: la voz de los docentes de turno en su formación de pregrado y la de
las EPS-IPS.
365
Pese a que existe una base preconceptual o de prejuicios, falta mayor dominio y
precisión de los juegos del lenguaje jurídico del SGSSS (derecho legislado y
jurisprudencia) y mayor empoderamiento de las herramientas del lenguaje del
derecho a la salud por parte de los odontólogos, lo que restringe sus posibilidades
hermenéuticas en su rol como operador jurídico del SGSSS; tornándose en
obstáculos socio- jurídicos, ético-bioéticos y fácticos en el campus científico-
técnico de la profesión al quebrantarse principios como los de unidad e
integralidad del SGSSS; e incluso la tétrada no-maleficencia, justicia, autonomía y
beneficencia.
Las EPS-IPS suelen manejar otro derecho y favorecer con ello la interlegalidad y
sus intereses particulares, pues en muchos casos sus directrices van
encaminadas a desestimular la consulta de los usuarios, a restringir su derecho a
la información y a desviarles la atención frente al acceso a los servicios de salud,
instrumentalizando para ello al profesional o induciéndolo a la anomia, a la
práctica dental que no a la práctica odontológica.
RECOMENDACIONES Y PROSPECCIONES
A continuación, se darán una serie de recomendaciones y prospecciones
redactadas algunas de ellas deónticamente aludiendo al ‘deber ser’, para
instituciones y para el odontólogo operador jurídico; insinuando hacia el final otros
estudios que bien podrían llevarse a cabo.
369
buscando ampliar los horizontes de sentido de su profesión hacia lo que significa
la medicina social, la importancia de la atención primaria y sobre todo la
fundamentalidad del derecho a la salud que sólo es posible si se comprenden los
otros procesos de determinación que influyen en ella. Ese reto conlleva a que
desde la academia se genere “tradición” formativa en estos aspectos para que se
ejerciten filosóficamente en la hermenéutica y las dimensiones ético-bioéticas; y
socio-jurídicamente, a los facultativos de la odonto-estomatología y en general al
Talento Humano en Salud (THS) como prestadores de servicios a la comunidad
en el contexto del SGSSS. Formación para la acción en sus puestos de trabajo en
realce de su autonomía con el contrapeso de la autorregulación de sus
actuaciones.
El Estado a través del Ministerio de Salud y Protección Social junto con el ICFES
deberán verificar que los planes de estudio de las Facultades de Odontología den
cuenta en sus contenidos con suficiencia y pertinencia de las dimensiones
científico-técnicas, ético-bioéticas y jurídicas (derecho legislado y jurisprudencial)
en aras de una formación más integral y ajustada de los odontólogos a las
necesidades del SGSSS colombiano.
370
El Estado a través de la Procuraduría General de la Nación, el Ministerio de salud
y Protección Social, la Superintendencia Nacional en Salud, las Direcciones
Seccionales de Salud y las Secretarías municipales de salud y de la protección
social deberán establecer mecanismos conjuntos que propendan por la
capacitación en el juego del lenguaje de la seguridad social en función del derecho
fundamental a la salud; establecer mecanismos de vigilancia, inspección y control
– creando canales informativos adecuados y siguiendo el debido proceso– para
velar por el ejercicio autónomo de los odontólogos como operadores jurídicos del
SGSSS, sancionando a las EPS-IPS que incurran en acciones de constreñimiento
del acto odontológico.
Aún cuando recién ha sido expedido el nuevo acuerdo contentivo del POS
(Acuerdo 29 de 2011), la CRES deberá corregir el equívoco en la lista de nuevas
inclusiones del POS por el cual fue excluida la clorhexidina, repitiendo en su lugar
las prótesis totales mucosoportadas. Será necesario efectuar un monitoreo en el
mediano plazo de la manera en que se está interpretando y aplicando la
742Colombia. Corte Constitucional. Sentencias T-760 de 2008, M.P. Manuel José Cepeda
Espinosa y T-857 de 2009, M.P. Nilson Pinilla Pinilla.
743Colombia. Corte Constitucional. Sentencias T-843 de 2004, M.P. Jaime Córdoba Triviño; T-
004 de 2008, M.P. Mauricio González Cuervo y T-198 de 2011, M.P. Jorge Ignacio Pretel Chaljub.
371
mencionada disposición en el escenario clínico-administrativo. Así mismo, las
actualizaciones del POS en odontología deberán adecuarse a las necesidades de
salud informadas por los Estudios Nacionales de Salud Bucal y el Plan Nacional
de Salud Pública.
Las EPS deberán ser consecuentes con el precepto legal: el bienestar del usuario
está en el centro del SGSSS. Ello exige una alta coherencia ética y jurídica que
supere los conflictos de intereses, proscribiendo la anomia, la ilegalidad, las
políticas y métodos de control abusivos que condicionen a los CTS, a las IPS y a
los odontólogos a vulnerar el derecho a la salud de las personas.
Las EPS se cerciorarán que las IPS con las cuales contraten cumplan de manera
irrestricta la preceptiva del Sistema Obligatorio de Garantía de la Calidad de la
Atención en Salud del Sistema General de Seguridad Social en Salud y den
plenas garantías a la autonomía de los odontólogos como operadores jurídicos del
SGSSS para que en cumplimiento de sus funciones tutelen el derecho a la salud
de los usuarios en el escenario clínico administrativo en el que tiene lugar el acto
odontológico.
Los miembros de los CTC como operadores jurídicos que son deberán conocer,
interpretar-integrar, aplicar-crear el derecho fundamental a la salud, orientado a
valores, frente a las solicitudes de tecnologías en salud elevadas por los
odontólogos a favor de los pacientes que las requieren con necesidad y tutelar de
esta manera el derecho de éstos, evitando que acudan a la tutela judicial.
Las IPS han de favorecer la autonomía profesional del odontólogo como operador
jurídico del SGSSS, a la vez que se abstendrán de realizar acciones tendientes a
constreñirla; por ejemplo, el condicionar la estabilidad laboral o contractual del
profesional a la contingencia de los costos o al eficientismo a expensas de los
derechos del profesional y por sobre todo de los derechos de lo usuarios.
Las EPS-IPS deberán contar con robustos y operantes comités de ética o bioética
que contribuyan con la formación y continuo acompañamiento de los odontólogos
372
para que éstos logren un equilibrio entre la conciencia ético-bioética formal y la
conciencia ético-bioética real; en aras de que los procedimientos y metodologías
para la toma de decisiones morales sean un instrumento connatural a la práctica
cotidiana.
Las EPS-IPS deberán contar con sistemas de información que posibiliten verificar
al odontólogo-operador jurídico y a los CTC los cuatro requisitos establecidos por
la Corte Constitucional con respecto a las tecnologías en Salud no POS.
Las Facultades de Odontología del País propenderán por contratar profesores que
cuenten con el perfil adecuado para favorecer los procesos de aprendizaje de los
juegos del lenguaje relacionadas con las dimensiones: científico-técnica, ético-
bioética y jurídica; y en especial los de permanente uso en el SGSSS.
373
Todas las Facultades de Odontología deberán incorporar a la hermenéutica en sus
contenidos y metodologías -ora como filosofía trascendental, ora como método
filosófico - tendiente a lograr la recta comprensión y concreción del acto
odontológico en las diferentes situaciones que se presenten, contribuyendo con
los procesos intelectuales que lleven al juicio más razonado y a la sólida
capacidad argumentativa del odontólogo-operador jurídico.
El odontólogo como operador jurídico que trabaja al interior del SGSSS, deberá
asumir una actitud diligente con respecto a actualizar sus conocimientos ético-
374
bioéticos y jurídicos (derecho legislado y jurisprudencial) y ponerlos en práctica
junto a las nociones científico-técnicas relacionados con su deber y quehacer, en
aras de contribuir desde el escenario clínico-administrativo con la tutela efectiva
del derecho a la salud de la persona del usuario; lo que de contera contribuirá a
que se disminuyan la interposición de acciones de tutela en sede judicial. Para
ello es menester que estudie de cuenta propia, exija capacitaciones en su lugar de
trabajo y/o asista a eventos académicos sobre la materia; de seguro que elevará
sus niveles de conciencia jurídica y hará valer el principio de confianza legítima, su
autonomía y dignidad profesional.
375
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389
789 de 2002, Ley 812 de 2003, Ley 1098 de 2006, Ley 1122 de 2007, Ley 1123 de
2007, Ley 1145 de 2007, Ley 1149 de 2007, Ley 1151 de 2007, Ley 1164 de 2007,
Ley 1437 de 2011, Ley 1438 de 2011, Ley 1450 de 2011.
CÓDIGOS
Código sustantivo del trabajo, Código Procesal Laboral y de la Seguridad Social,
Código Civil, Código de Procedimiento Civil, Código Penal, Código Contencioso
Administrativo.
DECRETOS
Decreto 196 de 1971, Decretos 770 de 1975, Decreto 1002 de 1978, Decreto 491
de 1990, Decreto 1416 de 1990, Decreto 2591 de 1991, Decreto 306 de 1992,
Decreto 1292 de 1994, Decreto 1757 de 1994, Decreto 1283 de 1996, Decreto
1406 de 1998, Decreto 1804 de 1999, Decreto 047 de 2000, Decreto 783 de 2000,
Decreto 2463 de 2001, Decreto 3616 de 2005, Decreto 1011 de 2006, Decreto 1018
de 2007, Decreto 3039 de 2007, Decreto 3990 de 2007, Decreto 4747 de 2007,
Decreto 425 de 2008, Decreto 019 de 2012.
RESOLUCIONES
Resolución 13437 de 1991, Resolución 5261 de 1994, Resolución 412 de 2000,
Resolución 1895 de 2002, Resolución 3577 de 2006, Resolución 425 de 2008,
Resolución 548 de 2010.
ACUERDOS
De la Comisión de Regulación en Salud (CRES) Acuerdo 004 de 2009, Acuerdo
08 de 2009, Acuerdo 027 de 201, Acuerdo 27 de 2011, Acuerdo 28 de 2011,
Acuerdo 29 de 2011.
Del Consejo Nacional de Seguridad Social en Salud (CNSSS): Acuerdo 260 de
2004, Acuerdo 307 de 2005.
390
CIRCULARES
Circular Única, modificada por las circulares 49, 50, 51 y 52 emitida por la
Superintendencia Nacional de Salud. Circular Externa 054 de 2009 de la
Supersalud. Circular 061 de 2010 de la Superintendencia Nacional de Salud.
DERECHO JURISPRUDENCIAL
Corte Constitucional. Sentencias de Constitucionalidad C- 131 de 1993, M.P.
Alejandro Martínez Caballero; C-355 de 1994. M.P. Antonio Barrera Carbonell; C-
106 de 1997, M.P. Hernando Herrera Vergara; C-251 de 1997, M.P. Alejandro
Martínez Caballero; C-318 de 1998; M.P. Carlos Gaviria Díaz; C-805 de 2000,
M.P. Carlos Gavira Díaz; C-645 de 2000, M.P. Alejandro Martínez Caballero; C-
671 de 2002, M.P. Eduardo Montealegre Lynette; C-623 de 2004, M.P. Rodrigo
Escobar Gil; C-148 de 2005, M.P. Álvaro Tafur Galvis; C-537 de 2005, M.P.
Alfredo Beltrán Sierra; C-1063 de 2008, M.P. Manuel José Cepeda Espinosa; C-
756 de 2008, M.P. Marco Gerardo Monroy Cabra; C-662 de 2009, M.P. Luis
Ernesto Vargas Silva; C-942 DE 2009, M.P. Jorge Ignacio Pretelt Chaljub; C-063
de 2010, M.P. Humberto Antonio Sierra Porto, C-252 de 2010, M.P. Jorge Iván
Palacio Palacio.
Sentencias de Unificación: SU-510 de 1998, M.P. Eduardo Cifuentes Muñoz;
SU-819 de 1999, MP Álvaro Tafur Galvis; SU-062 de 1999, M.P. Vladimiro Naranjo
Mesa; SU-1300 de 2001, M.P. Marco Gerardo Monroy Cabra; T-203 de 1999,
M.P. Vladimiro Naranjo Mesa; T-551 de 1999, M.P. Alejandro Martínez Caballero;
T-692 de 1999, M.P. Carlos Gaviria Díaz; T-715 de 1999, M.P. Alejandro Martínez
Caballero; T-827 de 1999, M.P. Alejandro Martínez Caballero; T-827 de 1999,
M.P. Alejandro Martínez Caballero; T-618 de 2000 M.P. Alejandro Martínez
Caballero; SU-062 de 2010, M.P. Humberto Antonio Sierra Porto.
Sentencias de Tutela: T-406 de 1992, M.P. Ciro Angarita Barón; T-406 de 1992,
MP Ciro Angarita Barón; T-419 de 1992. M.P. Simón Rodríguez Rodríguez; T-571
de 1992, M.P. Jaime Sanín Greiffenstein; T-328 de 1993, M.P. Eduardo Cifuentes
Muñoz; T-597 de 1993, M.P. Eduardo Cifuentes Muñoz; T-597 de 1993, M.P.
Eduardo Cifuentes Muñoz; T-500 de 1994, M.P. Alejandro Martínez Caballero; T-
251 de 1995, M.P. Vladimiro Naranjo Mesa; T-258 de 1997, M.P. Carlos Gaviria
Diaz; T-409 de 1998 M.P. José Gregorio Hernández; T-523 de 2001, M.P. Manuel
José Cepeda Espinosa; T-586 de 2002, M.P. Clara Inés Vargas Hernández; T-676
de 2002, M.P. Jaime Araujo Rentería; T-861 de 2002, M.P. CLara Inés Vargas
Hernández; T-990 de 2002, M.P. Álvaro Tafur Galvis; T- 859 de 2003. M.P.
Eduardo Montealegre Lynett; T-1021 de 2003, M.P. Jaime Córdoba Tribiño; T-
1083 de 2003, M.P. Manuel José Cepeda Espinosa; T-343 de 2003, M.P. Marco
Gerardo Monroy Cabra; T-849 de 2003 M.P. Álvaro Tafur Galvis; T-859 de 2003,
M.P. Eduardo Montealegre Lynett; T-859 de 2003 M.P. Eduardo Montealegre
391
Lynett; T-1008 de 2004, M.P. Jaime Araújo Rentería; T-221 de 2004, M.P.
Eduardo Montealegre Lynett; T-260 de 2004, M.P. Clara Inés Vargas Hernández;
T-538 de 2004, M.P. Clara Inés Vargas Hernández; T-762 de 2004, M.P. Jaime
Araújo Rentería; T-801 de 2004, M.P.Alfredo Beltrán Sierra; T-843 de 2004, M.P.
Jaime Córdoba Triviño; T-005 de 2005, M.P. Manuel José Cepeda Espinosa; T-
1138 de 2005, M.P. Rodrigo Escobar Gil; T-1268 de 2005, M.P. Manuel José
Cepeda Espinosa; T-361 de 2005, M.P. Humberto Antonio Sierra Porto; T-656 de
2005, M.P. Clara Inés Vargas Hernández; T-037 de 2006, M.P. Manuel José
Cepeda Espinosa; T-1041 de 2006, M.P. Humberto Antonio Sierra Porto; T-1052
de 2006, M.P. Jaime Araujo Rentería; T-152 de 2006, M.P.Rodrigo Escobar Gil; T-
662 de 2006, MP Rodrigo Escobar Gil; T-504 de 2006, M.P. Jaime Araújo
Rentería; T-845 de 2006, M.P. Jaime Córdoba Triviño; T-500 de 2007, MP Manuel
José Cepeda Espinosa; T-580 de 2007, M.P. Humberto Antonio Sierra Porto; T-
418 de 2007, M.P. Álvaro Tafur Galvis; T-060 de 2007, M.P. Humberto Sierra
Porto; T-016 de 2007, M.P. Humberto Antonio Sierra Porto; T-005 de 2007, M.P.
Nilson Pinilla Pinilla; T-580 de 2007, M.P. Humberto Antonio Sierra Porto; T-004 de
2008, M.P. Mauricio González Cuervo; T-083 de 2008, M.P. Mauricio González
Cuervo, T-299 de 2008, M.P. Jaime Córdoba Triviño; T-349 de 2008, M.P. Marco
Gerardo Monroy Cabra; T-585 de 2008, M.P. Humberto Antonio Sierra Porto; T-
615 de 2008, M.P. Rodrigo Escobar Gil; T-653 de 2008, M.P. Humberto Antonio
Sierra Porto; T-756 de 2008, M.P. Marco Gerardo Monroy Cabra; T-760 de 2008,
M.P. Manuel José Cepeda Espinosa; T-056 de 2009, M.P. Jaime Araujo
Rentería; T-334 de 2009, M.P. Juan Carlos Henao Pérez; T- 789 de 2009, M.P.
Nilson Pinilla Pinilla; T-402 de 2009, M.P. Jorge Ignacio Pretelt Chaljub; T-452 de
2010, M.P. Humberto Antonio Sierra Porto; T-198 de 2011, M.P. Jorge Ignacio
Pretel Chaljub; T-202 de 2011, M.P. Nilson Pinilla Pinilla.
Consejo de Estado: Sentencia del 23 de abril de 2008. M.P. Ruth Stella Correa
Palacio.
Corte Suprema de Justicia: Sala de casación civil, sentencia 19 de diciembre de
2005. M.P. Pedro Octavio Munar.
392
ANEXO A
Municipio de
5. Hombre U de A 5 Metrosalud
Medellín
Municipio de
6. Hombre U de A 22 Metrosalud
Medellín
7. Mujer U de A 5 ESE ENVISALUD Comfenalco
393
Fuente: Elaboración propia.
ANEXO B
MODELO DE FICHA DE CONTENIDO (TIPO MIXTA). DESTINADA A LA RECOLECCIÓN Y
ALMACENAMIENTO DE INFORMACIÓN DOCUMENTAL CONSULTADA, ASÍ COMO A LA
ANOTACIÓN DE OBSERVACIONES ANALÍTICAS RELACIONADAS CON LA INVESTIGACIÓN:
EL ODONTÓLOGO COMO OPERADOR JURÍDICO DEL SGSSS.
Localización: Clasificación: Libro No. 024
Biblioteca central U de A
Descripción Bibliográfica:
Treves R. Introducción a la sociología del derecho. Madrid: Taurus; 1978.
Referenciando a Weber, Treves señala que el sociólogo del derecho Racionalización Práctica
trata esencialmente de “identificar y describir del modo más preciso jurídica.
posible el proceso de racionalización tal como se manifiesta en el
campo de la teoría y de la práctica jurídica” (p. 78)
“…Weber observa que ‘el proceso de diferenciación recíproca de Weber, derecho racional.
nuestras concepciones fundamentales de varios campos del derecho
se ha caracterizado en amplia medida por factores técnico-jurídicos y
en parte por el tipo de estructura del grupo político’, y propone cuatro
hipótesis relativas a las clases formales de legislación y de
jurisprudencia. Estas hipótesis, añade, indican cuatro tipos ideales
de derecho, y precisamente: el derecho irracional y formal que se
tiene ‘cuando para la ordenación de cuestiones de legislación y
jurisprudencia se emplean medios distintos de los controlables
racionalmente, como el recurso a los oráculos o formas
equivalentes’; el derecho material e irracional que se tiene ‘cuando
las decisiones asumen relevancia valoraciones concretas del caso
singular –sean éstas de naturaleza ética, afectiva o política- y no, en
su lugar, normas generales’; el derecho formal y racional que se tiene
‘cuando sobre el plano jurídico o procesal se toman en consideración
exclusivamente las características unívocas de los casos en
cuestión’; el derecho racional material que se tiene cuando las
decisiones de las cuestiones jurídicas están influidas ‘por
normas de distinta dignidad cualitativa, por generalizaciones
lógicas de interpretaciones abstractas, es decir, por normas
como imperativos éticos o reglas de oportunidad utilitaristas o
de (p. 78) otra especie o máximas políticas que infringen sea el
formalismo de las características exterior, sea el de la
abstracción lógica’” (p. 79) para este tema fue citado Weber y su
obra Economía y Sociedad, cit., vol. II
“A los técnicos especialistas, Weber les atribuye una función no Weber y los juristas prácticos.
menos importante: la de contribuir de manera decisiva a la
realización de ‘un derecho de alguna manera desarrollado
formalmente como un conjunto de máximas de decisiones
394
conocidas’. Los técnicos especialistas pueden subdividirse, según él,
en diversas categorías, a las que les pasa revista tal como se
presentan en épocas sucesivas siguiendo el desarrollo histórico y el
proceso de racionalización. ‘junto a los funcionarios encargados de
la función judicial, los honoratiores – Gesetzessprecher, raimburgos,
escabinos, en algunos casos los sacerdotes- forman la capa de
‘juristas prácticos’ que se ocupan de la aplicación del derecho. Al
aumentar las exigencias de la vida jurídica en lo que respecta a
experiencia y conocimiento especializado del derecho, aparecen, al
lado de aquéllos, los consejeros privados y procuradores
(prolocutores, abogados) de las partes, formando una nueva
categoría de prácticos que a menudo ejercen una honda influencia
en la ‘invención del derecho’ (p. 80)
“…los trabajos sobre derecho y cambio social que han sido Cambio social
realizados por estudiosos interesados en analizar a la luz de
situaciones concretas la alternativa entre el derecho como producto
de la sociedad y del derecho como medio de control y de
transformación social” (p. 97)
“El derecho puede producir un cambio social, bien indirectamente, a Derecho y cambio social
través del sistema educativo, reformas de las instituciones, etc., bien
directamente con la introducción por la autoridad de un sistema
jurídico moderno en una sociedad tradicional y atrasada”. (p. 97)
“L.M. Friedman y J. Ladinsky /véase El derecho como instrumento de
cambio social incremental) … autores consideran ante todo los Cambio social e instrumento
cambios que se verifican en el derecho, y entre éstos distinguen jurídico.
aquellos que acontecen por razones de carácter formal y técnico en
el interior del sistema jurídico y aquellos que acontecen como reflejo
de cambios que provienen del exterior. Se verifican en la sociedad a
través del instrumento jurídico, y entre estos distinguen aquellos que
se verifican como consecuencia de transformaciones de carácter
formal y técnico ocurridas en el interior del derecho como un
instrumento que puede actuar sobre los individuos y sobre los grupos
tanto con la persuasión como con la fuerza, es decir, con el uso de
las sanciones. (p. 98)
Capítulo Undécimo
INVESTIGACIONES SOBRE LOS OPERADORES JURÍDICOS DEL
DERECHO. (p. 174-206)
5. LOS FUNCIONARIOS DE POLICÍA Y OTROS OPERADORES
DEL DERECHO.
“Además de los abogados y de los funcionarios de policía, muchos Operador jurídico en sentido
otros operadores del derecho pueden ser objeto de investigaciones lato o amplio.
sociológico-jurídicas. Pienso en los notarios, en los peritos, en los
testigos, en los mediadores, en los administradores, etc. Pero sobre
estos temas, por lo que me consta, la bibliografía es bastante más
escasa que sobre los precedentes… Torstein Eckhoff, en el que el
autor hace una comparación entre el proceso de decisión del juez por
un lado y los del mediador y el administrador por el otro, y señala con
ello dos temas, dos ‘modelos ideales’ de operadores del derecho que
podrían ser objeto de cuidadosas investigaciones. La función del
mediador, observa nuestro autor, consiste en tratar de resolver los
conflictos (p. 202) y en llegar a un acuerdo influyendo sobre las
partes y apelando a sus recíprocos intereses. Y el mediador, explica,
395
puede alcanzar su fin propio sirviéndose de diversos medios. Puede
por ejemplo operar sobre las ideas de que las partes tienen en torno
a lo que para ellos es más ‘útil’, de manera que les lleve a considerar
sus intereses comunes como más importantes de cuanto antes
suponían y a considerar por el contrario menos esenciales los
intereses en conflicto. Puede también proponer posibles soluciones
no tomadas aún en consideración por las partes, tratando de mostrar
que ambas partes podrían sacar provecho de la aceptación de tal
solución…el mediador ‘puede recurrir también a promesas y a
amenazas…’
El administrador tiene en común con el Juez el hecho de que tiene El administrador figura análoga
poder y autoridad para decidir el conflicto por encima de las partes, a la del mediador.
pero se distingue del juez y se aproxima más bien al mediador por el
hecho de que decide no tanto sobre la base de las normas como en
vista de los intereses de la administración y de la organización a la
que representa. (p. 203)
“Sobre la posición que los juristas y los operadores del derecho Juristas y operadores del
ocupan en la sociedad y sobre las funciones que en ella ejercen, derecho según Dahrendorf.
puede ser oportuno mencionar ante todo las investigaciones
concluidas por Dahrendorf en torno a afirmar que en Alemania
occidental, quienes terminan los estudios jurídicos pueden encontrar
con mayor facilidad el camino para acceder a los niveles de las
clases superiores…”(p. 204)
.. “añade que el operador jurídico tiene una responsabilidad particular Saint Simon y un mundo libre
en comparación con las totalidad de la sociedad, una responsabilidad de hombres de leyes.
que no tienen quienes ejercen las otras profesiones”
La réplica de W. Kaupen en The role of law an the Lawywer in Importancia de los juristas y los
modern society (1966 pp.155-56) es relevante porque anota como la no juristas en la moderna
tesis de Saint Simon sobre cómo la moderna sociedad industrial no sociedad.
debería haber ya lugar para los hombres de leyes, sino solamente
para los productores, para los técnicos, para los industriales. “Según
Kaupeen, en las moderna sociedad industrial los juristas
desempeñan una función de importancia relevante solamente en el
momento en que esta sociedad trata de alcanzar su estabilidad
estructural interna. Pero apenas tal estabilidad se alcanza y la
sociedad se transforma en sociedad del bienestar, se observa que en
los centros de poder los juristas son poco a poco sustituidos por los
técnicos y por los hombres de negocios. Y este fenómeno del paso
del poder de las manos de los juristas a los no juristas es ilustrado
por Kaupen con datos estadísticos y con algunas importantes
consideraciones” (p. 205)
“… concluye Kaupen después de estas observaciones, que en la Kaupen. Las normas sociales y
moderna sociedad industrial se manifiesta un proceso de jurídicas son normas
raciona (p.205) lización por el que tanto las normas sociales instrumentales según los
como las normas jurídicas se transforman en normas modelos medio-fin.
instrumentales según el modelo medio-fin. Proceso que será Agentes de control más
controlado, dice, por informaciones técnicas bastante más que técnicos especialistas y menos
por decisiones autoritarias, y proceso en que los agentes de jueces y juristas.
control serán cada vez más técnicos especialistas y cada vez
menos jueces y juristas ligados a los principios de autonomía y
conformidad a la ley.” Treves R. Introducción a la sociología del
derecho. Madrid: Taurus; 1978. (p. 206)
“La opinión de Kaupen que hemos recogido aquí no ha quedado Bobbio avalando tesis contra los
396
aislada. Ha sido compartida por otros autores. Entre nosotros, legistas de Sant Simon.
Bobbio, en un ensayo posterior en algunos años (Il diritto 269-62)
declara que ‘el derecho no ocupa ya aquel puesto privilegiado en el
sistema global de la sociedad que le había sido asignado durante
una larga tradición’ y recuerda a este propósito ‘la mordaz polémica
de Saint-Saimon contra los legistas y su predicción por el
advenimiento de una sociedad gobernada por científicos e
industriales’. Y Bobbio… pone de relieve que en la moderna sociedad
industrial se está verificando una sensible reducción de la función
específica del derecho como medio de control social y ello por varias
razones: ante todo por el aumento de los medios de comunicación de
masas y por la consiguiente introducción de medios de control de tipo
persuasivo y no coactivo cuya eficacia está confiada al
condicionamiento psicológico; además por la utilización de los
conocimientos cada vez más adecuados que las ciencias sociales
están en condiciones de proporcionar sobre las motivaciones de las
conductas desviadas y sobre las condiciones que las hacen posible,
conocimientos que permiten sustituir por un control anticipado y
preventivo el control represivo propio del derecho.
OBSERVACIONES: Texto fundamental para legitimar el uso del concepto de operador jurídico.
1. Weber y su tesis de derecho racional formal y racional material. El ideal del derecho en el
papel del odontólogo como operador jurídico es el equilibrio entre el derecho racional-material
con el formal.
2. El O.J. un eslabón dentro del proceso de racionalización del derecho. Los operadores
Jurídicos son en Weber los técnicos especialistas.
3. Saint Simon, Kaupen y Bobbio. Controladores del orden social industrial predominantemente
técnicos que juristas.
4. La labor consciente y permanente del operador jurídico puede generar cambio social.
5. Indagar sobre las sanciones a las IPS, EPS e incluso profesionales de la salud que omiten con
su función de prestar los beneficios del POS o que incumplen las preceptivas de la Corte
Constitucional en materia de interpretación y aplicación del derecho de la Seguridad Social en
Salud.
6. La dualidad del odontólogo como operador jurídico y coadministrador con conflicto de
intereses.
7. Visión reduccionista de Dahredorf sobre operador Jurídico.
Tipo de ficha: Mixta Elaborada por: JOSÉ PABLO VELÁSQUEZ E.
Fuente: Basado en el modelo de ficha de Maria Eumelia Galeano M. En: Diseños de proyectos en
la Investigación cualitativa. Medellín : Fondo editorial Universidad EAFIT, 2009. p51.
397
ANEXO C
La entrevista que a continuación se realizará será grabada con un dispositivo electrónico (MP3). El
que usted responda a las preguntas efectuadas por el investigador y firme en la parte final de este
documento se entenderá como el otorgamiento inequívoco de su consentimiento para participar en
el presente estudio. No obstante, si en algún momento de la investigación usted quisiera que la
información suministrada, en forma parcial o total, no sea tenida en cuenta, así lo puede expresar,
con el compromiso del investigador de excluir lo que usted dictamine.
Para resolver cualquier inquietud puede comunicarse con la secretaría del centro de
investigaciones jurídicas 219 58 60 y preguntar por su directora OLGA LOPERA y a la secretaría
de posgrados 219 99 60 con el coordinador JUAN CAMILO MEJÍA WALKNER. Facultad de
Derecho de la U de A.
__________________________ ____________________________
FIRMA DEL ENTREVISTADO FIRMA DEL ENTREVISTADO
FECHA:
398
ANEXO D
Por favor responda de la manera más clara y sincera posible. Agradezco su colaboración.
1. Universidad de egreso: _____________________________________________
2. Año de egreso : ___________________
3. IPS donde trabaja:______________________________________________________
4. Cumplió con el servicio social obligatorio (“rural”): a) Sí___, b) No___.
5. De cuánto tiempo fue su servicio social obligatorio: a)1 año_____, b) 6 meses,
otro_______.
6. Con respecto a la modalidad contractual o de percepción de ingresos, cuál o cuáles se
ajustan a su caso.
a. Contrato laboral (dependiente) con empleador del sector privado
b. Contrato civil o comercial a favor de un tercero del sector público
c. Contrato civil o comercial a favor de un tercero del sector privado
d. Contrato a través de Cooperativas de trabajo asociado
e. Otra
modalidad:_________________________________________________________
7. Con respecto a su vocación como odontólogo(a) y consecuente ejercicio profesional, qué
tiene que decir frente a esto en los años que lleva de práctica
8. Cree usted que es posible prestar en la IPS para la cual trabaja un adecuado e integral
servicio de salud a sus pacientes? (Explique su respuesta)
9. Considera que la formación científico-técnica recibida en la de pregrado-posgrado en su
respectiva Facultad de Odontología fue suficiente o insuficiente para desarrollar el ejercicio
profesional en el Sistema General de Seguridad Social.
10. ¿Ha tenido la posibilidad de actualizar sus conocimientos científico-técnicos en
odontología? Si es así, con qué frecuencia o intensidad horaria, qué tipo de eventos
académicos y en qué temas o áreas del saber odontológico (estética, Cariología, salud
pública, odontología restaurativa, periodoncia, endodoncia, cirugía, patología, otros).
11. ¿Tiene usted la posibilidad de aplicar las actualizaciones científico-técnicas en la IPS para
la cual trabaja?
12. En su caso, el poder implementar o no las actualizaciones científico-técnicas en la IPS, en
qué grado puede afectar (positiva o negativamente) el servicio de salud de sus pacientes?
13. ¿Cómo se siente usted ejerciendo su profesión (trabajando) en una IPS que presta los
servicios del POS? Explique.
14. En qué piensa usted cuando le menciono la palabra “derecho”
15. ¿Cree usted que su ejercicio profesional está influido por el derecho? (Explique)
16. ¿Cree usted – valga la redundancia- conocer el derecho relacionado con el derecho a la
salud en Colombia (normas y sentencias más relevantes de la Corte Constitucional)?
17. ¿Recibió en el pregrado de odontología formación en derecho relacionado con el Sistema
General de Seguridad Social en Salud (Ley 100 de 1993)?
18. Si su anterior respuesta fue afirmativa, sírvase responder ¿Cómo considera que fue esa
formación? (Suficiente, coherente, pertinente, oportuna) EXPLIQUE.
399
19. ¿Ha tenido la posibilidad de aplicar en la práctica profesional sus conocimientos en
derecho de la Seguridad Social en Salud?
20. Tras haber egresado del pregrado de odontología, ¿Ha recibido capacitación sobre cómo
ejercer su profesión dentro del Sistema General de Seguridad Social en Salud por parte de
agremiaciones de odontólogos, asociaciones, universidades, institutos, de la IPS u otros?
21. Si su anterior respuesta fue sí, por favor explique en qué consistió esa capacitación, quién
la programó, quién la dictó y cómo la evalúa usted.
22. ¿Qué entiende por salud?
23. ¿Qué entiende por derecho a la salud?
24. ¿Cómo relaciona la profesión odontológica con el derecho a la salud?
25. ¿Es consciente de que el odontólogo desde su ejercicio profesional y lugar de trabajo
tutela; es decir, protege el derecho a la salud de los usuarios(pacientes) que atiende?
Explique.
26. ¿Qué tipo de usuarios atiende en la IPS?
a. Pertenecientes al Régimen Contributivo
b. Pertenecientes al Régimen subsidiado
c. Vinculados
d. Pertenecientes al régimen Contributivo y subsidiado
e. Particulares para venta de No Pos
f. Otros
27. ¿Conoce el Plan Obligatorio de Salud de odontología en los distintos niveles de
complejidad en la atención (I, II y III)? (medicamentos, actividades, procedimientos e
intervenciones; Explicar qué conoce y por qué o cómo lo conoce)
28. ¿Cree que es importante conocer todo el POS en odontología? Explique
29. ¿Conoce cuáles son las exclusiones del POS odontológico?, ¿Porqué las conoce?.
30. ¿Ha detectado alguna imprecisión, incoherencia o vacío en las normas que enuncian los
contenidos del POS odontológico? Explique.
31. Si la respuesta anterior fue afirmativa, ¿Esas imprecisiones, incoherencias o vacíos en las
normas que enuncian los contenidos del POS han afectado de alguna manera su ejercicio
profesional?
32. ¿Puede usted citar la norma o normas que se refieren al POS en odontología? (Resolución
5261 de 1994 arts. 18, 88-98, Acuerdo 08 de 2009 18, 54 y Anexos #1 y #2).
33. Considera usted que el POS odontológico es:
a) Suficiente
b) Insuficiente Explique:____________________________________
34. ¿Tiene algún conocimiento sobre la Sentencia de Tutela (T-760 de 2008) proferida por la
Corte Constitucional en la que se da el carácter de fundamental al derecho a la salud? (En
esta parte, si responde que sí, indagar sobre cómo llegó a ese conocimiento y qué tanto
conoce).
35. ¿Sabe usted cuáles son las reglas establecidas por la Corte Constitucional para conceder
a un paciente la tutela al derecho a la salud ordenando tratamientos o medicamentos
odontológicos excluidos del POS?
36. Si su anterior respuesta es afirmativa, ¿Ha hecho uso de esas reglas en su ejercicio
profesional?
37. ¿Puede acceder a un sistema de información en el que se dé cuenta de la capacidad
económica de los pacientes frente a un eventual tratamiento No POS?
400
38. ¿Indaga usted a los pacientes sobre su capacidad de pago respecto a tratamientos NO
POS?
39. ¿Conoce usted los principios bioéticos que orientan el ejercicio profesional del talento
humano en salud?, ¿Por qué los conoce?
40. ¿Tiene conocimiento sobre el principio ‘pro-homine’ aplicado en el Sistema General de
Seguridad Social en Salud?
41. ¿Sabe en qué consiste el principio de confianza legítima en el médico-odontólogo tratante
en el Sistema General de Seguridad Social?
42. ¿Argumenta usted las decisiones odontológicas relacionadas con las necesidades
diagnósticas o terapéuticas del paciente y las restricciones del POS?
43. ¿En esa argumentación tiene presente los criterios científico-técnicos aplicables al
paciente, los preceptos bioéticos y las normas del SGSSS relacionadas con la
odontología? Explique y si es del caso ejemplifique.
44. ¿Cree usted que en el ejercicio de su profesión odontológica en la IPS es posible cumplir
en forma completa con los preceptos del código de ética odontológica? Explique.
45. ¿Sabe usted cuál es el procedimiento por el cual se pueden ordenar medicamentos,
actividades, intervenciones y procedimientos No POS a los pacientes que consultan por
odontología?
46. ¿Conoce usted cómo funciona y para qué sirve el Comité Técnico Científico de la EPS?
47. ¿Ha diligenciado formularios de tratamientos y medicamentos no POS?, ¿Para qué casos
en especial los ha diligenciado (diagnósticos y tratamientos)?
48. ¿Qué opinión le merece diligenciar ese tipo de formatos?
49. ¿Cuáles han sido las respuestas del CTC frente a sus solicitudes de tratamiento No POS a
los pacientes referidos?
50. ¿Existe alguna directriz institucional (verbal o escrita) por la cual le hayan restringido a
usted o a sus compañeros de trabajo la posibilidad de ordenar tratamientos No POS?
51. ¿Cuál es la posición de la IPS en la que usted trabaja frente a los tratamientos No POS en
odontología?
52. ¿Conoce si la EPS o la IPS tienen contratados especialistas en odontología para atender
tratamientos No POS en odontología?
53. ¿Qué especialistas tiene contratados?
54. ¿Existe algún mecanismo de presión por parte de los administradores o coordinadores del
servicio para que los odontólogos se abstengan de ordenar o efectuar tratamientos No
POS?
55. ¿Ha remitido usted pacientes suyos a un II, III o IV nivel de complejidad para evaluación y
manejo odontológico especializado? Si___, No___
56. ¿Qué criterios tiene usted en cuenta para efectuar la referencia o remisión de un paciente
odontológico a un mayor nivel de complejidad técnico-científico?
57. ¿Existen criterios diferenciadores (discriminatorios) para la atención de pacientes de las
diversas EPS-S con las cuales la IPS para la que usted trabaja tiene contratos? Explique.
58. ¿Existen criterios diferenciadores (discriminatorios) para la atención de pacientes de las
diversas EPS-C con las cuales la IPS para la que usted trabaja tiene contratos? Explique.
59. ¿Algún paciente le ha involucrado a usted como odontólogo tratante en una acción de
tutela? Explique.
60. ¿Ha sido demandado durante su ejercicio profesional en una IPS del SGSSS, bien sea
civil, penal o ético-disciplinariamente?
401
61. ¿Considera usted que la bioética, el derecho y los conocimientos científico-técnicos
odontológicos deben integrarse en su ejercicio profesional? Explique.
62. En general ¿Qué piensa usted del derecho (normas y sentencias) que regula el Sistema
General de Seguridad Social?
63. Antes de esta entrevista ¿Era usted consciente de ser un operador jurídico del SGSSS
(alguien que debe conocer, comprender-interpretar, integrar y aplicar el derecho o las
normas que rigen el SGSSS, con las de la ética profesional (talento humano en salud,
código de ética, etc.) en aras de garantizar el derecho a la salud de sus pacientes?
Explique.
64. ¿Quisiera usted agregar algo a esta entrevista?
402
ANEXO E
CUADRO # 3 TECNOLOGÍAS EN SALUD INCLUIDAS EN EL PLAN
OBLIGATORIO DE SALUD/PLAN DE BENEFICIOS ODONTOLÓGICO.
I. ACCIONES DE PROMOCIÓN Y PREVENCIÓN
4329 890115 ATENCION [VISITA] DOMICILIARIA, POR EQUIPO
1
INTERDISCIPLINARIO
4330 890116 ATENCION [VISITA] DOMICILIARIA, POR OTRO PROFESIONAL DE
2
LA SALUD
3 4332 890202 CONSULTA DE PRIMERA VEZ POR MEDICINA ESPECIALIZADA
4334 890204 CONSULTA DE PRIMERA VEZ POR ODONTOLOGIA
4
ESPECIALIZADA
5 4345 890215 CONSULTA DE PRIMERA VEZ POR EQUIPO INTERDISCIPLINARIO
4349 890304 CONSULTA DE CONTROL O DE SEGUIMIENTO POR
6
ODONTOLOGIA
7 4362 890403 INTERCONSULTA POR ODONTOLOGÍA GENERAL
8 4363 890404 INTERCONSULTA POR ODONTOLOGÍA ESPECIALIZADA
9 4376 890604 CUIDADO (MANEJO) INTRAHOSPITALARIO POR ODONTOLOGIA
4389 890704 CONSULTA DE URGENCIAS, POR ODONTOLOGIA
10
ESPECIALIZADA
4421 893100 EXAMEN O RECONOCIMIENTO DE MUCOSA ORAL Y
11
PERIODONTAL
4422 893104 ESTUDIO DE OCLUSION Y ARTICULACION
12
TEMPOROMANDIBULAR
13 3899 870002 PERFILOGRAMA CON CEFALOMETRIA
4423 893108 CONTROL DE CRECIMIENTO Y DESARROLLO DENTO-
14
MAXILOFACIAL
4319 890103 ATENCION [VISITA] DOMICILIARIA, POR ODONTOLOGIA
15
GENERAL
16 4333 890203 CONSULTA DE PRIMERA VEZ POR ODONTOLOGIA GENERAL
4348 890303 CONSULTA DE CONTROL O DE SEGUIMIENTO POR
17
ODONTOLOGIA
18 4388 890703 CONSULTA DE URGENCIAS, POR ODONTOLOGIA GENERAL
19 5519 935400 APLICACION DE FERULA
20 5695 990103 EDUCACION GRUPAL EN SALUD, POR ODONTOLOGIA
21 5703 990112 EDUCACION GRUPAL EN SALUD, POR HIGIENE ORAL
22 5707 990203 EDUCACION INDIVIDUAL EN SALUD, POR ODONTOLOGIA
23 5716 990212 EDUCACION INDIVIDUAL EN SALUD, POR HIGIENE ORAL
24 5768 997310 CONTROL DE PLACA DENTAL NCOC
25 5762 997101 APLICACIÓN DE SELLANTES DE AUTOCURADO
El presente cuadro es una elaboración propia basada en el Acuerdo 29 de 2011. Esta
interpretación personal del POS/PB versa sobre algunas inclusiones del POS en odontología, por
lo que han sido omitidos los medicamentos del POS (Anexo 1) y algunas ayudas diagnósticas de
laboratorio relacionadas con problemas sistémicos que inciden en la terapéutica odontológica
(Anexo 2) debido a que tal labor sistemática requiere de un trabajo interdisciplinario y excede en
buena medida los propósitos de la presente investigación.
403
26 5763 997102 APLICACIÓN DE SELLANTES DE FOTOCURADO
27 5764 997103 TOPICACION DE FLUOR EN GEL
28 5765 997104 TOPICACION DE FLUOR EN SOLUCION
29 5766 997105 APLICACIÓN DE RESINA PREVENTIVA
30 5767 997300 DETARTRAJE SUPRAGINGIVAL
404
ANTERIORES
3927 870452 RADIOGRAFIAS INTRAORALES PERIAPICALES DIENTES
58
ANTERIORES
3928 870453 RADIOGRAFIAS INTRAORALES PERIAPICALES ZONA DE
59
CANINOS 1
60 3929 870454 RADIOGRAFIAS INTRAORALES PERIAPICALES PREMOLARES
61 3930 870455 RADIOGRAFIAS INTRAORALES PERIAPICALES MOLARES
3931 870456 RADIOGRAFIAS INTRAORALES PERIAPICALES JUEGO
62
COMPLETO
63 3932 870460 RADIOGRAFIAS INTRAORALES CORONALES
64 3902 870005 RADIOGRAFIA DE MASTOIDES COMPARATIVAS
65 3903 870006 RADIOGRAFIA DE PEÑASCOS
66 3904 870007 RADIOGRAFIA DE CONDUCTO AUDITIVO INTERNO
3914 870114 RADIOGRAFIA PANORAMICA DE MAXILARES, SUPERIOR E
67
INFERIOR
68 3916 870301 POLITOMOGRAFIA DE MASTOIDES (UNILATERALO BILATERAL)
69 3917 870302 POLITOMOGRAFIA DE CONDUCTOS AUDITIVOS INTERNOS
3918 870303 POLITOMOGRAFIA DE ARTICULACIONES
70
TEMPOROMANDIBULARES
71 3919 870305 TOMOGRAFIA LINEAL DE MAXILAR SUPERIOR
72 3920 870306 TOMOGRAFIA LINEAL DE MAXILAR INFERIOR
73 3921 870307 POLITOMOGRAFIA DE RINOFARINGE
74 3922 870308 POLITOMOGRAFIA SEMIAXIAL DE NARIZ
75 3923 870310 TOMOGRAFIA FUNCIONAL DE LARINGE
76 4033 874700 SIALOGRAFIA (CUALQUIER GLANDULA)
4141 879141 TOMOGRAFIA AXIAL COMPUTADA DE MAXILARES [ESTUDIO
77
IMPLANTOLOGIA]
4142 879150 TOMOGRAFIA AXIAL COMPUTADA DE ARTICULACION
78
TEMPOROMANDIBULAR
4276 883105 RESONANCIA NUCLEAR MAGNETICA DE ARTICULACION
79
TEMPOROMANDIBULAR
80 4277 883108 RESONANCIA NUCLEAR MAGNETICA DE PARES CRANEANOS
405
89 842 250203 BIOPSIA ESCISIONAL DE LENGUA
90 843 251000 RESECCION DE LESION SUPERFICIAL EN LA LENGUA SOD
91 867 262101 MARSUPIALIZACIÓN DE LA RÁNULA
92 889 272101 BIOPSIA DE ÚVULA
93 890 272102 BIOPSIA INCISIONAL DE PALADAR
94 891 272103 BIOPSIA ESCISIONAL DE PALADAR
95 892 272300 BIOPSIA DE LABIO
96 893 272301 BIOPSIA INCISIONAL DE LABIO
97 894 272302 BIOPSIA ESCISIONAL DE LABIO
98 895 272400 BIOPSIA DE PARED DE CAVIDAD BUCAL
99 896 272401 BIOPSIA POR ASPIRACION CON AGUJA FINA EN CAVIDAD ORAL
100 803 241100 BIOPSIA DE ENCÍA SOD
101 807 241200 BIOPSIA DE PARED ALVEOLAR SOD
102 864 261100 BIOPSIA CERRADA [PUNCION] [ASPIRACION CON AGUJA FINA] DE
103 865 261200 BIOPSIA ABIERTA DE GLANDULA O CONDUCTO SALIVAL
866 261201 BIOPSIA ESCISIONAL DE GLANDULA SALIVAL MENOR (CON
104
CONDUCTO
105 884 269100 EXPLORACION DE CONDUCTO SALIVAL
106 2636 761101 BIOPSIA DE HUESOS MAXILARES
107 2637 761102 BIOPSIA DE PALADAR OSEO
2638 761201 ARTROCENTESIS DIAGNOSTICA DE ARTICULACION
108
TEMPOROMANDIBULAR
109 2639 761300 ARTROSCOPIA DIAGNOSTICA FACIAL
2640 761301 ARTROSCOPIA DIAGNOSTICA DE ARTICULACION
110
TEMPOROMAN-DIBULAR
111 4030 874510 ARTROGRAFIA DE ARTICULACION TEMPORO MANDIBULAR
112 4397 891503 REFLEJO NEUROLOGICO TRIGEMINO FACIAL
113 4398 891504 PRUEBA DE ESTIMULACION MAXIMA DE NERVIO FACIAL
406
4485 898206 ESTUDIO DE CITOMETRIA DE FLUJO EN ESPECIMEN DE
121
RECONOCI-MIENTO
4486 898207 ESTUDIO DE MICROSCOSPIA ELECTRONICA EN ESPECIMEN DE
122
RECONOCIMIENTO
4488 898221 ESTUDIO DE COLORACION BASICA EN ESPECIMEN CON
123
MULTIPLE MUESTREO
4489 898222 ESTUDIO DE COLORACION HISTOQUIMICA EN ESPECIMEN CON
124
MULTIPLE MUESTREO
4490 898223 ESTUDIO DE COLORACION INMUNOHISTOQUIMICA EN
125 ESPECIMEN CON MULTIPLE MUESTREO
4491 898224 ESTUDIO DE COLORACION INMUNOFLUORESENCIA EN
126 ESPECIMEN CON MULTIPLE MUESTREO
4492 898226 ESTUDIO DE CITOMETRIA DE FLUJO EN ESPECIMEN CON
127
MULTIPLE MUESTREO
4493 898227 ESTUDIO DE MICROSCOPIA ELECTRONICA EN ESPECIMEN CON
128
MULTIPLE MUESTREO
4494 898230 ESTUDIO DE RECEPTORES HORMONALES EN ESPECIMEN CON
129
MULTIPLE MUESTREO
4495 898241 ESTUDIO DE COLORACION BASICA EN ESPECIMEN CON
130
RESECCION DE MARGENES
4496 898242 ESTUDIO DE COLORACION HISTOQUIMICA EN ESPECIMEN CON
131
RESECCION MARGENES
4497 898243 ESTUDIO DE COLORACION INMUNOHISTOQUIMICA EN
132 ESPECIMEN CON RESECCION DE MARGENES
4499 898246 ESTUDIO DE CITOMETRIA DE FLUJO EN ESPECIMEN CON
133
RESECCION DE MARGENES
4500 898247 ESTUDIO DE MICROSCOPIA ELECTRONICA EN ESPECIMEN CON
134 RESECCION DE MARGENES
4501 898250 ESTUDIO DE RECEPTORES HORMONALES EN ESPECIMEN
135
RESECCION DE MARGENES
136 4502 898261 ESTUDIO DE COLORACION BASICA EN ESPECIMEN CON MAPEO
4503 898262 ESTUDIO DE COLORACION HISTOQUIMICA EN ESPECIMEN CON
137
MAPEO
4504 898263 ESTUDIO DE COLORACIÓN INMUNOHISTOQUIMICA EN
138
ESPECIMEN CON MAPEO
139 4505 898266 ESTUDIO DE CITOMETRIA DE FLUJO EN ESPECIMEN CON MAPEO
407
147 773 231200 EXODONCIA QUIRURGICA MULTIRRADICULAR
148 774 231300 EXODONCIA DE DIENTE INCLUIDO SOD
775 231301 EXODONCIA DE INCLUIDO EN POSICION ECTOPICA CON
149
ABORDAJE
776 231302 EXODONCIA DE INCLUIDO EN POSICION ECTOPICA CON
150
ABORDAJE
777 231400 EXODONCIAS MULTIPLES CON ALVEOLOPLASTIA, POR
151
CUADRANTE
152 837 249100 CONTROL DE HEMORRAGIA DENTAL POS QUIRURGICA
409
938 275902 PROFUNDIZACION DE SURCO VESTIBULAR CON INJERTO
216
CUTANEO
217 939 276100 SUTURA DE LACERACION DE PALADAR
218 953 278200 INCISION DE CAVIDAD BUCAL, ESTRUCTURA NO ESPECIFICADA
219 2631 760100 SECUESTRECTOMIA INTRAORAL O EXTRAORAL
2632 760101 SECUESTRECTOMIA INTRAORAL CON FIJACION INTERNA
220
[DISPOSITIVOS DE
2633 760102 SECUESTRECTOMIA EXTRAORAL CON FIJACION INTERNA
221
[DISPOSITIVOS
2641 762101 ENUCLEACION, RESECCION Y CURETAJE DE LESIONES
222 BENIGNAS EN MAXILAR SUPERIOR O INFERIOR, DE MENOS DE TRES CMS,
VIA TRANSMUCOSA
2642 762102 ENUCLEACION, RESECCION Y CURETAJE DE LESIONES
223
BENIGNAS EN
2643 762103 ENUCLEACION, RESECCION Y CURETAJE DE LESIONES
224
BENIGNAS EN
2644 762104 ENUCLEACION, RESECCION Y CURETAJE DE LESIONES
225
BENIGNAS EN
2645 762105 ELIMINACION DE EXOSTOSIS Y/O TUBEROSIDADES FIBROSAS
226
EN MAXILAR
227 2664 765101 MENISCOPEXIA TEMPOROMANDIBULAR, VIA ENDOSCOPICA
228 2677 766401 OSTEOTOMIA SUBAPICAL MANDIBULAR
229 2678 766402 CORTICOTOMIA MANDIBULAR
230 2686 766606 CORTICOTOMIA TIPO LEFORT II
231 2687 766607 CORTICOTOMIA TIPO LEFORT III
2688 766700 GENIOPLASTIA CON FIJACION INTERNA [DISPOSITIVOS DE
232
FIJACION U
2691 766970 LAVADO Y DESBRIDAMIENTO DE FRACTURA ABIERTA DE
233
HUESOS
2724 768110 INJERTO OSEO AUTÓLOGO O HETEROLOGO POR REBORDE
234
ALVEOLAR
235 2726 768302 REDUCCION CERRADA DE LUXACION ARTICULACION TEMPORO
236 2728 768600 INYECCION DE SUSTANCIA TERAPEUTICA EN ARTICULACION
237 2730 768702 RETIRO DE CERCLAJE INTER O INTRA MAXILAR
238 761 226308 MAXILOETMOIDECTOMIA
239 762 226400 ESFENOIDECTOMIA
240 763 226401 ESFENOIDECTOMIA ENDOSCOPICA TRANSNASAL
241 764 227100 CIERRE DE FISTULA DE SENO MAXILAR SOD
242 800 237902 EXPLORACION Y MOVILIZACION DE NERVIO DENTARIO INFERIOR
809 243101 ESCISION DE LESION BENIGNA ENCAPSULADA EN ENCÍA HASTA
243
DE TRES CENTIMETROS
810 243102 ESCISION DE LESION BENIGNA ENCAPSULADA EN ENCÍA DE
244
MAS DE TRES
811 243103 ESCISION DE LESION BENIGNA NO ENCAPSULADA EN ENCÍA
245
HASTA DE
812 243104 ESCISION DE LESION BENIGNA NO ENCAPSULADA EN ENCÍA DE
246
MAS DE
247 813 243105 ESCISION DE LESION MALIGNA DE ENCÍA SIN VACIAMIENTO
410
GANGLIONAR
814 243106 ESCISION DE LESION MALIGNA DE ENCÍA CON VACIAMIENTO
248
GANGLIONAR,
815 243107 ESCISION DE LESION MALIGNA DE ENCÍA CON VACIAMIENTO
249 GANGLIONAR, PISO DE BOCA Y/O LENGUA Y RECONSTRUCCION CON
COLGAJO PEDICULADO
816 243108 ESCISION DE LESION MALIGNA DE ENCÍA CON VACIAMIENTO
250
GANGLIONAR,
817 243109 ESCISION DE LESION MALIGNA DE ENCÍA CON VACIAMIENTO
251
GANGLIONAR,
252 821 243300 ENUCLEACION DE QUISTE EPIDERMOIDE
253 823 243302 ENUCLEACION DE QUISTE EPIDERMOIDE, VIA EXTRAORAL
254 825 243501 CUÑA DISTAL
255 829 244103 RESECCION DE TUMOR BENIGNO O MALIGNO ODONTOGÉNICO
830 244104 RESECCION DE TUMOR BENIGNO O MALIGNO ODONTOGÉNICO Y
256 RECONSTRUCCION INMEDIATA CON INJERTO OSEO LIBRE
831 244105 RESECCION DE TUMOR BENIGNO O MALIGNO ODONTOGÉNICO Y
257 RECONSTRUCCION CON COLGAJO OSEO PEDICULADO
832 244106 RESECCION DE TUMOR BENIGNO O MALIGNO ODONTOGÉNICO Y
258 RECONSTRUCCION CON COLGAJO OSEO LIBRE
259 833 244107 RESECCION DE TUMOR BENIGNO O MALIGNO ODONTOGÉNICO Y
260 844 251100 RESECCION DE LESION PROFUNDA EN LA LENGUA
261 845 252000 RESECCION DE LENGUA EN CUÑA
262 846 252500 HEMIGLOSECTOMIA
263 847 252501 HEMIGLOSECTOMIA CON CIERRE PRIMARIO
264 848 252502 HEMIGLOSECTOMIA CON COLGAJO PEDICULADO
265 849 252503 HEMIGLOSECTOMIA CON COLGAJO LIBRE
850 252505 HEMIGLOSECTOMIA CON RESECCION OSEA, COLOCACION DE
266
PLACA Y
851 253000 GLOSECTOMIA TOTAL SIN RESECCION MANDIBULAR Y
267
RECONSTRUCCION
852 253100 GLOSECTOMIA TOTAL SIN RESECCION MANDIBULAR Y
268
RECONSTRUCCION
853 253200 GLOSECTOMIA TOTAL CON RESECCION MANDIBULAR Y
269
RECONSTRUCCION
270 854 254000 GLOSECTOMIA RADICAL
271 856 255901 GLOSOPLASTIA CON INJERTO CUTÁNEO O MUCOSO
272 860 256301 DRENAJE DE COLECCION EN LENGUA
273 862 260200 EXPLORACIÓN DE GLANDULA SALIVAL
274 871 263101 PAROTIDECTOMIA DEL LOBULO SUPERFICIAL
275 872 263201 PAROTIDECTOMIA TOTAL
873 263202 PAROTIDECTOMIA TOTAL CONSERVADORA DEL VII PAR
276
CRANEAL
277 878 264100 CIERRE O REPARACION SALIVAL
278 879 264200 CIERRE O REPARACION DE FISTULA SALIVAL
279 880 264201 CIERRE O REPARACION DE FISTULA SALIVAL CON INJERTO
411
280 881 264900 SIALOPLASTIA (REPARACION DEL CONDUCTO)
281 882 264901 SIALOPLASTIA (REPARACION DEL CONDUCTO) CON INJERTO
282 883 264902 FISTULIZACION DE GLANDULA SALIVAL
283 899 273200 ESCISION AMPLIA DE LESION EN PALADAR OSEO
284 900 273201 ESCISION DE LESION PROFUNDA DE PALADAR
285 902 273203 PALATECTOMIA PARCIAL NCOC
286 903 273204 PALATECTOMIA TOTAL
287 905 274200 ESCISION DE LESION DE LABIO
288 906 274201 RESECCION PARCIAL DE LABIO POR TUMOR MALIGNO
907 274202 RESECCION PARCIAL DE LABIO POR TUMOR MALIGNO, CON
289
ROTACION DE
290 908 274203 RESECCION TOTAL DE LABIO POR TUMOR MALIGNO
291 909 274300 ESCISION DE LESION EN MUCOSA ORAL SOD
292 912 274303 RESECCION DE TUMOR MALIGNO DE MUCOSA ORAL
913 274304 RESECCION DE TUMOR MALIGNO DE MUCOSA ORAL, CON
293
COLGAJO LOCAL
926 275303 CIERRE DE FISTULA OROSINUSAL U ORONASAL, CON COLGAJO
294
PALATINO,
295 928 275401 CORRECCION PARCIAL DE LABIO FISURADO POR ADHESION
296 929 275402 CORRECCION PRIMARIA DE LABIO FISURADO UNILATERAL
297 930 275403 CORRECCION SECUNDARIA DE LABIO FISURADO UNILATERAL
298 931 275404 CORRECCION DE LABIO FISURADO BILATERAL NCOC
933 275701 INJERTO DE PIEL EN LABIOS CON ADHESION DE COLGAJO
299
PEDICULADO
300 940 276101 PALATORRAFIA EN Z (FURLOW)
301 941 276200 CORRECCION DE PALADAR FISURADO (ESTAFILORRAFIA)
302 942 276201 CORRECCION DE HENDIDURA ALVEOLOPALATINA
303 943 276202 CIERRE DE HENDIDURA ALVEOLAR CON INJERTO
304 944 276203 CIERRE DE HENDIDURA ALVEOLAR SIN INJERTO
305 945 276204 RECONSTRUCCION DE BÓVEDA PALATINA MEDIANTE COLGAJOS
306 946 276205 CORRECCION DE FISURA PALATINA, CON COLGAJO VOMERIANO
307 947 276206 INJERTO OSEO DE PALADAR
308 948 276207 UVULO-PALATO-FARINGOPLASTIA
309 949 276300 REVISION DE REPARACION DE PALADAR FISURADO
2634 760901 OSTEOTOMIA MAXILAR PARA EXTRACCION DE CUERPO
310
EXTRAÑO
311 2635 760902 DECORTICACION O CURETAJE OSEO EN HUESO FACIAL
312 2646 762201 RESECCION DE TUMOR MALIGNO MAXILAR O MANDIBULAR
2647 762202 RESECCION RADICAL DE TUMOR MALIGNO MAXILAR O
313
MANDIBULAR
314 2648 763101 MANDIBULECTOMIA PARCIAL SIMPLE, MARGINAL
315 2649 763102 MANDIBULECTOMIA PARCIAL SIMPLE, SEGMENTARIA
316 2650 763103 HEMIMANDIBULECTOMIA SIN DESARTICULACION
317 2651 763104 HEMIMANDIBULECTOMIA CON DESARTICULACION
412
318 2652 763901 RESECCION PARCIAL MAXILAR SIN RECONSTRUCCION
319 2653 763902 CONDILECTOMIA DE LA MANDIBULA
320 2654 763903 HEMIMAXILECTOMIA
321 2655 764101 MANDIBULECTOMIA TOTAL CON RECONSTRUCCION OSEA
2656 764301 RECONSTRUCCION MANDIBULAR (TOTAL O PARCIAL) CON
322
DISPOSITIVOS
2657 764302 RECONSTRUCCION MANDIBULAR (TOTAL O PARCIAL) CON
323
INJERTO OSEO
2658 764303 RECONSTRUCCION MANDIBULAR (TOTAL O PARCIAL) CON
324
INJERTO LIBRE
2659 764304 RECONSTRUCCION MANDIBULAR (TOTAL O PARCIAL) CON
325
INJERTO OSEO
2660 764305 RECONSTRUCCION MANDIBULAR (TOTAL O PARCIAL) CON
326
INJERTO OSEO
2661 764401 RESECCION PARCIAL MAXILAR CON RECONSTRUCCION
327
SIMULTANEA
2662 764402 RESECCION TOTAL DE MAXILAR CON RECONSTRUCCION
328
SIMULTANEA
329 2663 764601 RETROPOSICION QUIRURGICA DE LA PREMAXILA
330 2665 765105 MENISCOPEXIA TEMPOROMANDIBULAR, VIA EXTERNA
331 2666 765201 MENISECTOMIA TEMPOROMANDIBULAR CON INJERTO
332 2667 765202 MENISECTOMIA TEMPOROMANDIBULAR CON COLGAJO
2668 765301 REEMPLAZO TOTAL DE ARTICULACION TEMPOROMANDIBULAR,
333
CON
2669 765302 REEMPLAZO TOTAL DE ARTICULACION TEMPOROMANDIBULAR
334
CON
2670 766100 OSTEOPLASTIA CERRADA (OSTEOTOMIA) DE RAMA
335
MANDIBULAR
2671 766200 OSTEOTOMIA DE RAMA MANDIBULAR VIA TRANS MUCOSA O
336
VIA
2672 766201 OSTEOTOMIA DE RAMA MANDIBULAR VIA TRANS MUCOSA, CON
337
FIJACION
2673 766202 OSTEOTOMIA RAMA MANDIBULAR VIA TRANSCUTANEA, CON
338
FIJACION
339 2674 766205 CORONOIDECTOMIA
2675 766301 OSTEOTOMIA DE CUERPO MANDIBULAR VIA TRANS MUCOSA,
340
CON
2676 766302 OSTEOTOMIA DE CUERPO MANDIBULAR VIA TRANSCUTANEA,
341
CON
2679 766403 OSTEOTOMIA DE MENTON, CON FIJACION INTERNA
342
[DISPOSITIVOS DE
343 2680 766501 OSTEOTOMIA LEFORT I SEGMENTARIA, CON FIJACION INTERNA
2681 766601 OSTEOTOMIA LEFORT I, CON FIJACION INTERNA [DISPOSITIVOS
344
DE
2682 766602 OSTEOTOMIA SUBAPICAL, CON FIJACION INTERNA
345
[DISPOSITIVOS DE
2683 766603 OSTEOTOMIA LEFORT II, CON FIJACION INTERNA
346
[DISPOSITIVOS DE
2684 766604 OSTEOMIA LEFORT III, CON FIJACION INTERNA [DISPOSITIVOS
347
DE FIJACION
413
348 2685 766605 CORTICOTOMIA TIPO LEFORT I (DISYUNCION PALATINA)
2689 766901 SUSPENSION ESQUELETICA EN FRACTURAS U OSTEOTOMIAS
349
FACIALES
350 2690 766902 OSTEOTOMIA DESLIZANTE (VISERA)
351 2692 767200 REDUCCION ABIERTA DE FRACTURA DE ARCO CIGOMATICO
2693 767201 REDUCCION ABIERTA DE FRACTURA DE ARCO CIGOMATICO
352
CON FIJACION
2694 767203 REDUCCION ABIERTA DE FRACTURA MALAR, CON REDUCCION
353
PISO DE
2695 767301 REDUCCION CERRADA DE FRACTURA HEMI LEFORT I, CON
354
FIJACION
355 2696 767302 REDUCCION CERRADA DE FRACTURA LEFORT I, CON FIJACION
356 2697 767303 REDUCCION CERRADA DE FRACTURA LEFORT II, CON FIJACION
2698 767304 REDUCCION CERRADA DE FRACTURA LEFORT III, CON
357
FIJACION
2699 767401 REDUCCION ABIERTA DE FRACTURA HEMI LEFORT I, CON
358
FIJACION
2700 767402 REDUCCION ABIERTA DE FRACTURA LEFORT I, CON FIJACION
359
INTERNA
2701 767403 REDUCCION ABIERTA DE FRACTURA LEFORT II, CON FIJACION
360
INTERNA
2702 767404 REDUCCION ABIERTA DE FRACTURA LEFORT III, CON FIJACION
361
INTERNA
2704 767502 REDUCCION CERRADA DE FRACTURA SIMPLE DE CUERPO O
362
RAMA
2705 767503 REDUCCION CERRADA DE FRACTURA MULTIPLE DE CUERPO O
363
RAMA
2706 767601 REDUCCION ABIERTA DE FRACTURA DE CONDILO, CON
364
FIJACION INTERNA
2707 767602 REDUCCION ABIERTA DE FRACTURA SIMPLE DE CUERPO O
365
RAMA
2708 767603 REDUCCION ABIERTA DE FRACTURA MULTIPLE DE CUERPO O
366
RAMA
2709 767701 REDUCCION ABIERTA DE FRACTURAS DENTOALVEOLARES,
367
CON FIJACION
2710 767702 REDUCCION ABIERTA DE FRACTURAS DENTOALVEOLARES
368
CON
2711 767703 REDUCCION ABIERTA DE FRACTURAS DENTOALVEOLARES
369
CON
370 2712 767705 REDUCCION Y FIJACION DE LUXACION DENTO ALVEOLAR QUE
371 2713 767706 REDUCCION Y FIJACION DE LUXACION DENTO ALVEOLAR QUE
2715 767802 REDUCCION CERRADA DE FRACTURAS ALVEOLARES, CON
372
REIMPLANTE
373 2716 767901 REDUCCION ABIERTA DE BORDE O PARED ORBITAL
2717 767902 REDUCCION ABIERTA DE FRACTURA DE UNA PARED
374
ORBITARIA CON
2718 767903 REDUCCION ABIERTA DE FRACTURA DE DOS O MAS PAREDES
375
ORBITARIAS
2719 767904 REDUCCION ABIERTA DE FRACTURA DE PISO DE ORBITA Y
376 RECONSTRUCCION CON INJERTO
414
2720 767905 REDUCCION ABIERTA DE FRACTURA DE PARED MEDIAL DE
377
ORBITA Y
2721 767907 REDUCCION ABIERTA DE FRACTURA NASO-ORBITO-ETMOIDAL,
378
CON
2722 767908 REDUCCION ABIERTA DE FRACTURAS MULTIPLES DE HUESOS
379
FACIALES,
380 2723 768100 INJERTO OSEO EN HUESO FACIAL
2727 768401 REDUCCION ABIERTA DE LUXACION TEMPOROMANDIBULAR
381
RECIDI-VANTE
2729 768701 RETIRO DE MATERIAL DE FIJACION INTERNA [DISPOSITIVOS DE
382
FIJACION U
383 2731 768801 ARTRECTOMIA TEMPOROMANDIBULAR
B. TERAPIAS ALTERNATIVAS
384 5772 999100 ACUPUNTURA Y TERAPIA NEURAL
415