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Ensayo

Nietzsche y la enfermedad

Mary Solano R 1.

En setiembre de 1879, Friedrich confronta la fragilidad de la exis- sus derechos bajo las vestiduras flo-
Nietzsche ya había escrito "Más allá tencia corporal. jas de la civilización occidental ... "
del bien y del mal" y se encuentra (Nietzsche, 1961 :530).
La enfermedad para Nietzsche no
en Saint Moritz de vacaciones '. Su
es un proceso, sino sentencia del La enfermedad se describe como
búsqueda continua de paisajes se
proceso, él no es un enfermo, sino el elemento a partir de cuya supe-
origina en la necesidad de la
más bien un médico, médico de sí ración es posible una nueva salud,
cercanía con la naturaleza para
mismo y del mundo, el cual es el un nuevo territorio de conocimiento
atenuar sus dolores, y a luchar
conjunto de los síntomas, cuya en- valioso en sí mismo, que no per-
siempre contra la enfermedad: ce-
fermedad se confunde con el hom- mite exaltar la debilidad,que signi-
faleas violentas acompañadas de
bre. Significa no sólo una nueva fica precisamente, enfermedad.
náuseas y vómitos, que lo incapaci-
cronología (los días se miden a
tan y producen ceguera temporal,
partir de los pocos en que puede " ... 10 objeción, el aparte, la descon-
crisis maniaco depresivas que le
escribir), sino también una nueva fianza serena, la ironía son signos de
acompañarán siempre, y lo obligan
topografía, una concepción de los salud. Todo lo que es absoluto es del
a buscar afanosamente la salud.
espacios, en virtud de su habilidad dominio de la patología ... "
Nietzsche es considerado el pen- como enfermo que busca la salud. (Nietzsche, 1961 :507).
sador que más ha glorificado la vi-
La enfermedad es la compañera En el pensamiento de Nietzsche, el
da y más ha enfatizado en el ideal
constante del hombre y del escritor cuerpo tradicionalmente objeto del
de una vida exuberante, sana y
y, al mismo tiempo, la enemiga saber, es ahora sujeto de él: " ... el
fuerte, de la alegría infinita de vivir;
que debe ser combatida, el símbo- saber de la corporalidad es el sí
pese a su enfermedad. " ... así
lo de la decadencia europea, el mismo, es decir el cuerpo como
como la vida, también fue para él la
obstáculo contra la voluntad, que construcción de la voluntad de poder.
enfermedad una obsesión, y la
le permite alcanzar, mediante la Aquella persona aséptico del
plasmó en su filosofía: la cultura, la
oposición, la gran salud, que antes cartesianismo, está atravesada por
moral, la religión cristiana, eran
sólo lo rodeaba y ahora penetra en dolores, enfermedades, placeres ... "
cultura y moral de enfermos, signos
su cuerpo. (Cragnolini, 1999: 4).
de la persona decadente ... "
(Urdanoz, 1990:508). Aparece de Menciona Nietzsche: " ... yo salgo Nietzsche caracteriza el placer me-
esta manera, lo que se puede garante del diagnóstico de esta en- diante el aumento de fuerzas, y re-
denominar el mayor paradigma en fermedad europea. La enfermedad laciona el dolor con la disminución
el campo de la salud, la de la voluntad se ha propagado por de dichas fuerzas. Por lo tanto,
enfermedad. toda Europa de una manera desi- exaltar la enfermedad como nuevo
gual; azota con mayor fuerza y bajo territorio de conocimiento valioso
La enfermedad se convierte en un
los aspectos más variados, allí don- en sí mismo, implica exaltar la
momento profundamente irritante,
de la civilización se ha aclimatado debilidad, convertir en nuevo
que pone en duda la identidad y
por más tiempo; tiende a desapare- fundamento lo que es
cer en la medida en que el "bárbaro" precisamente el elemento que
1 consiguió mantener -o reivindicar- debe ser contrarrestado, para
mrsolano@cariari.ucr.ac.cr
lograr la gran salud.

Nietzsche se caracterizaba por sus modales finos y atentos para quienes trataba,era sociable, comu-
nicativo, amaba con pasión la vida y la naturaleza. Se le considera junto a Marx, el pensador más crítico
de la historia.

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Nietzsche asegura: " ... el carácter
de mi dolencia me hace esperar una
1. Casares, Manuel, 2000. Enfermedad del in-
muerte súbita. Yo preferiría morir telecto y voluntad creadora en Friedrkh
lentamente, con la clara inteligencia y Nietzsche. Conferencia en Jornadas Nietzs-
pudiendo hablar con mis amigos, (he 2000, Buenos Aires.
2. Cragnolini, Mónica, 1999. Tiempo de la sa-
aunque el morir así fuera mil veces lud, tiempo de la enfermedad. Rev. Escritos
más doloroso. El pensamiento de de Filosofía, Nros 33-34. Buenos Aires.
que la muerte me pueda sorprender 3. Marietán, Hugo, 2003. Nietzsche y la mala
conciencia. Rev. Dinamarca, Vol.(l) 4
a cada instante me iguala al hombre
4. Navigante, Alfredo,1995. Reflexión desde
más anciano ... " (Navigante, una foto de Nietzsche enfermo a partir de la
1995:5). problemática epistemol6gica de los pa-
cientes terminales. Rev. Perspectivas Nietz-
La posible curación para éste escri- cheanas, No.4

tor, consiste en afrontar la enfer- 5. Nietzsche, Federico. Más allá del bien y del
mal. Editor, Buenos Aires, 1961, Pág. 530
medad como obstáculo de la vo-
6. Nietzsche, Federico. Más allá del bien y del
luntad. En éste sentido la enferme- mal. Editor, Buenos Aires, 1961, Pág. 507
dad elemento básico del pensa- 7. Nietzsche, Friedrich,1997.Mi Vida (sep-
miento nietzscheano, es lo que de- tiembre,1863). Valdemar, Madrid
8. Nietzsche, Friedrich,1997. Mirada retros-
be ser combatido o aquello con lo pectiva a mis dos años en Leipzig. Del 17 de
cual se guarda una relación de octubre de 1865 al 10 de Agosto de 1867,
amor-enemistad, que al ser Valdemar, Madrid
9. Real. Giovanni y Darío Antiseri. Historia de
superada posibilita una nueva pensamiento filosófico y científico. Barce-
salud'. lona: Editorial Herder, 1992.
10. Urdanoz, Teófilo, 1990. Historia de la filoso-
Ante una ética que sostiene un fía. Madrid: Editorial Católica, Pág.508
concepto negativo de la felicidad,
ante una metafísica que apunta a
un estado último, es posible pre-
guntarse si la enfermedad ha inspi-
rado al filósofo, origina estados que
tienden a la reflexión, a la tran-
quilidad, si se quiere. No obstante,
la enfermedad también debe ge-
nerar la movilización de fuerzas
que implican la lucha con lo deca-
dente en la persona.
ENFERMERÍA EN COSTA RICA, Mayo 2005, vol.26(1)

Por lo anterior no salimos "mejora-


dos", de la enfermedad; más bien
nos torna profundos en la medida
que nos presenta la vida como
problema que debe ser resuelto,
más que como solución.

Para este filósofo, el hombre es un ser enfermo y la enfermedad que padece se llama moralidad, cuya
forma histórica es el nihilismo. El tratamiento debe ser la creación del superhombre que relaciona la
enfermedad y la curación. El superhombre como la figura de la curación encarna el poder, ama la vida
como un don supremo y, armoniza sus instintos naturales.

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