Jeisson…

¿Quién es Jeisson?; creo que ni él mismo sabe quién es él, pero acaso, ¿yo lo sé?, no sé ni siquiera
quien esta en el fondo de mi ser, como para saber quién es el hermano que tanto tiempo he
ignorado; lo único que se esta noche, es que le pido perdón a ese pequeño niño sonriente, que
buscaba mi afecto y aprobación en los días y noches de juego, que lamento profundamente haber
sangrado mis heridas en las suyas, que no era mi intención hacerle daño, como tampoco creo que
halla sido el caso de nuestros padres, haber errado tanto. Siento honestamente, que cada uno de
nosotros, estuviese errante en el mismo techo, que cada uno de nosotros tuviésemos un enorme
pozo que cada día se hacia más profundo; por otra parte, tanto drama genético, cosas buenas ha
traído consigo, como el trabajo y la búsqueda constante de nuestra conciencia, el hecho que
nuestros errores, y los de quienes nos engendraron no nos define, y que esta telenovela, puede
convertirse en una tragicomedia, pues nuestro panorama no es menos favorable que tantas
realidades que han ocurrido, ocurren y ocurrirán en este mundo, y es así que esta noche,
evadiendo el compromiso y mi responsabilidad de escribir sobre la seguridad vial, miro un poco
más allá de esta casa llamada cuerpo, familia, vida y observo las oportunidades que estamos
creando a pesar de tantas dificultades, conflictos y diferencias, y me siento profundamente
orgullosa de ello, de ser personas que ven más allá de su pasado, de años de maltrato y
patriarcado, que al fin de cuentas nos han hecho daño a la par; y sin embargo acá estamos,
navegando cada uno por sus aguas, que evidentemente no están tan apacibles como quisiéramos;
y es quizá eso, lo que le da un poco de diversión a nuestra “vida compleja”, y que por mi lado hay
que dejar atrás esa rigidez, ser más flexible y comprender el devenir de la vida, y que en lo posible
educar ayuda a crear un mundo mejor; por ello, quiero enseñar a esa mente en la estratosfera de
Jeisson, que vos tenes valor, poder y sabiduría, así como nosotras lo tenemos, que nos une la
sangre y las batallas que hemos enfrentado indirecta y directamente a lo largo de estos años, que
merecemos amor, respeto y compasión, así hallas aprendido a los golpes, ten en cuenta que nada
de ello nos sirvió y que por lo contrario nos mutilo día a día, y que a cada uno de nosotros, nos
hizo un daño manifestado de manera diferente, pero al fin y al cabo nos lastimó; por ello, espero
que en la soledad aprendas a ver más allá de ese mundo interno llamado YO, que comprendas el
origen de donde provenimos, de conocer nuestra historia para no repetirla nuevamente, que
espero estés solo emocionalmente hasta que sanes y le des a la otra persona que decidas amar,
una historia diferente a la que vivieron nuestros padres, donde aprecies a ese ser y le des el lugar y
el amor que merece, como estoy segura tu quieres que te lo den, y por ende aprendas a respetar,
a pedir perdón, a amar de verdad a esa hermana que siempre estuvo contigo como cómplice
(Luisa) y que su carácter agresivo era la respuesta a un comportamiento pasivo agresivo de tú
parte, y que ella también tiene su responsabilidad en los conflictos que entre ustedes hubieron, y
sin embargo también tuvo el intento de buscarte y mejorar esa relación de hermanos.
Concluyendo, es hora de tomar la responsabilidad de nuestras vidas, actos y decisiones, los cuales
nos hicieron encaminar por diferentes drogas (psicoactivos, personas, agresiones, generación de
dolor y culpa), perdonarnos y tener la fuerza y el carácter suficiente de vernos a los ojos, y superar
esta mierda de circunstancias que han sido inconscientes y es hora de afrontar para hacernos la
vida más fácil, porque en nuestras manos esta ese poder.