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H.·.

Daniel Fernández Tabárez


Ven.·. M.·. Log.·. "Sol Oriental Nº 11"

Reflexiones de un Compañero

Oriente de Montevideo,
4 de Setiembre de 1994 E.·. V.·.
1
© Daniel Fernández Tabarez Queda prohibida cualquier forma de reproducción, transmisión o
archivo en sistemas recuperables, sea para uso privado o público, grabaciones o cualquier otro,
total o parcial, del presente ejemplar, con o sin finalidad de lucro, sin la autorización expresa.
Primera edición 1994, para circulación interna de la Gran Logia de las Masonería del Uruguay.

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INDICE Pág.

CAPITULO I: El Trabajo en 2º Grado 4

CAPITULO II: El aprendiz Frente a su Colación. 12

CAPITULO III: El Primer Viaje del Comp.·. por el 18


Mundo de los Sentidos.

CAPITULO IV: El Segundo Viaje del Comp.·. por 27


el mundo de las artes liberales.

CAPITULO V: El tercer viaje del Comp.·. por el mundo 37


de los órdenes de la arquitectura.

CAPITULO VI: El cuarto viaje del Comp.·. por el mundo 45


de los sabios.

CAPITULO VII: El quinto viaje del Comp.·. por el mundo 54


del amor.

CAPITULO VIII: La Estrella Flamígera y la letra G. 59

CAPITULO IX: El Signo del Comp.·. 70

CAPITULO X: La Marcha del Comp.·. 78

CAPITULO XI: La Palabra de Paso del Comp.·. 82

CAPITULO XII: La Leyenda de la Escalera de Caracol. 88

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CAPITULO I

EL TRABAJO EN EL 2º GRADO

Hemos sido Colados al grado de Compañero. A partir de este


acontecimiento, nada trivial, un nuevo mundo se abre ante
nosotros.

Nuestra tarea, tendrá ahora nuevos objetivos y para lograrlos, la


Mas.·. nos proveerá de nuevas herramientas. Hemos dado un paso
trascendente, sin retorno. Estamos sobre un puente que solo tiene
una dirección de cruzarlo, nos espera, al final del camino, el
mundo, el cosmos, el gran taller en el cual la humanidad viva y
muere, en el cual la humanidad se esfuerza día a día por encontrar
un camino y se extravía, en el cual la luz que puede proyectar el
M.·. Mas.·. es esperada, ansiada, necesaria.

Esta es la obra mayor a la que el M.·. Mas.·. está llamado y que


el compañero entrevé al final de su camino, al final de su quinto
viaje simbólico.

Este es, por lo tanto, un grado de preparación activa, de trabajo


intenso, ordenado y metódico.

El Tránsito por el primer grado, fue pasivo. Las herramientas


fueron aplicadas a explorar, a hacer aflorar latencias y contenidos
ocultos en nuestro interior. Hemos trabajado para extraer, de la
cantera informe del ser profano, una piedra a cubicar, una piedra
bruta, a la cual ahora le debemos dar forma cubica perfecta a los
efectos de armonizarla con el muro indestructible de la
humanidad consiente.
Pues nuestra piedra no va a ser dispuesta en una construcción
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cualquiera, sino en aquella en la que se eleve un cantico a la
humanidad plena, consciente de si, fraterna y profundamente
igualitaria en la que el hombre, una vez muerto al mundo de la
ilusión, asuma su verdadera condición y se libre definitivamente
de las cadenas que lo sujetan y lo hacen esclavo de si de otros
hombres.

A nada menos que esto tienden los trabajos del compañero. Es así
imprescindible dar sentido a lo aflorado en el primer grado,
buscando comprender el mundo de las causas que se oculta detrás
del Fenoménico. Pues solo es señor y conductor quien conoce el
vehículo y el entorno, quien conoce las leyes de la naturaleza y
del hombre y las domina.

Esta tarea, solo puede resolverse en un sistema armónico y


equilibrado, que no admita fragmentación ni dispersión que tenga
un objetivo claro y preciso: El amor a la humanidad y el
compromiso efectivo con su evolución.

Si no se recorre cabalmente el camino de compañero, la acción el


masón puede convertirse en un mero activismo, en un hacer por
hacer, en un hacer por la actividad misma y sujeta, por lo tanto,
al carecer de objetivos y de técnicas precisas, al error y al desvío.

Pero, ¿cuáles son los objetivos y cuales las técnicas que habrán
de auxiliarnos?

Descubrirlas es el objetivo de los cinco viajes simbólicos que


estamos llamados a realizar.

Nuestros viajes, por los mundos de los sentidos, de las artes, de


las ciencias, de los órdenes de arquitectura y de los benefactores
5
de la humanidad, no son viajes por mundos profanos, sino por los
mundos de nuestra alma, buscando dar un sentido iniciático, un
sentido último a nuestra vida y a la de la humanidad.

¿Cómo expresar lo iniciático en el mundo profano? ¿Qué sutiles


resortes debemos tocar los MMas.·.? para promover el avance de
la conciencia colectiva, cuya esencia es el individuo y no la masa,
a los efectos de posibilitar la liberación efectiva de la humanidad?

Descubrir esto es tarea del compañero, quien, de no hacerlo,


nunca será un verdadero M.·. Mas.·.

Pues debemos ser conscientes, que, si bien los grados simbólicos


se obtienen una vez cumplido el tiempo y el trabajo, este es un
tiempo interior, que no conoce de calendarios y que cada uno
sabrá, en su momento, cuando el tiempo ha llegado.

Mientras tanto, nuestra mayor recompensa, nuestro más justo


salario, será sabernos en el camino, eternos buscadores de la
verdad.

Pero si bien el Apr.·. cobro su salario en especial en grano, vino


y aceite, el Comp.·. lo hace en Metálico, en Oro y en Plata,
acumulando luces de la ciencia iniciática y estímulos del arte real.

Pasa el compañero entonces de la pasividad a la actividad, de ser


receptor a ser actor, a aplicar la fuerza en forma justa y medida,
ya que la fuerza mal aplicada destruye, mientras que la palanca,
aplicada con inteligencia, multiplica el efecto de nuestro esfuerzo.

Cabria preguntarse, ¿Cuál es, entonces, el esoterismo de nuestro


2 º grado?
6
En mi concepto, el esoterismo surge de considerar al hombre
como una unidad armoniosa y equilibrada en la cual lo físico, lo
emotivo y lo mental se integran por la fuerza del espíritu, dando
así, nacimiento al hombre consiente.

Recuperar esta integridad, es ni más ni menos, la tarea que se


propone al compañero.

¿Pero, está el compañero, en condiciones de emprender esta ardua


tarea?

Creemos que sí, ya que, en el primer grado, los símbolos MMas.·.


nos sirvieron de puentes que facilitaron el tránsito a lo
desconocido en nosotros, fueron y son poleas que hay ayudado a
emerger latencias ocultas, olvidadas, de nuestro ser y de la raza.
Y, si el trabajo ha sido fecundo y debe haberlo sido, pues nuestros
Maestros así lo han juzgado al colarnos al 2º grado, ya hay
suficiente material para iniciar la nueva etapa. La tarea propia del
1er. Grado nunca finaliza, pues siempre encontraremos nuevas
resonancias al bucear en el interior de nuestro ser. Pero lo que
decimos es que ya hemos hallado tesoros suficientes para
continuar en el camino.

Nos corresponde ahora dar orden y relación a lo que hemos


aflorado, es hora de desechar y de integrar, de seleccionar y
vincular, es hora de fructificar.
Para lograrlo es preciso actuar de acuerdo a un método utilizando
técnicas iniciáticas que nos permitan llegar con certeza al fin
buscado.

Estas técnicas están claramente especificadas en los cinco viajes


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que realizamos en la ceremonia de colación, cada uno de los
cuales, recorrido en un año simbólico, nos eleva un escalón en las
gradas que conducen desde nuestro templo interior al templo del
universo.

Es a la finalización de estos viajes, que vemos culminada la obra


menor - en sus grandes líneas, pues esta obra no acaba en nuestra
vida – y visualizaremos nuestra cabal realización como seres
humanos al servicio de toda la humanidad, en la obra mayor en la
que estamos inevitablemente comprometidos.

Así el mensaje esotérico que el 2º grado busca comunicarnos lo


descubrimos el fin en la estrella flamígera y en la legra G,
contenida en su centro, pero es inútil adelantarnos, solo
llegaremos a entrever su enorme riqueza, el mensaje personal e
intransferible que encierra, para cada uno de nosotros, si
efectivamente realizamos “de verdad” los cinco viajes. Toda la
simbología del grado viene en nuestra ayuda, reflexionemos, por
ejemplo, obre la posición relativa que la escuadra y el compás,
asumen sobre el ara.

Al estar entrelazadas, vemos como la escuadra, la razón, el juicio,


la ciencia y el compás, el mundo emotivo, los sentimientos, el
arte, buscan complementarse y alumbrarse mutuamente y como
el iniciado que en el primer grado, era víctima de sus emociones,
de sus sentimientos que se apoderaban de su voluntad, busca
llegar ahora al equilibrio haciendo que su cuerpo, corazón y
mente, se complementen y unan en el centro de su ser
produciendo así el génesis – que es quizás uno de los sentidos
vivenciales profundos de la Letra G – es decir el nacimiento del
nuevo ser.

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Podrá de esta forma, el compañero, descubrir su verdadera
esencia, desprendiéndose definitivamente del ego, de la
personalidad, para llegar a su individualidad, todo impulsado por
las artes y las ciencias del alma.

Por esto, el grado de compañero es un grado de arduo trabajo y


esfuerzo, algunos dicen, que el trabajo efectivamente masónico
recién comienza en este grado, pues requiere estudio (no el
libresco), sino el estudio de si, y de canto nos rodea. Requiere
pensamiento y reflexión constante, casi obsesiva, en tanto que
debemos crear un nuevo ámbito interior – de ahí nuestro trabajo
arquitectónico - y requiere, por último, pero lo más importante,
de aplicación, pues el nuestro no es un mero trabajo especulativo
o filosófico, sino que en tanto es labor artística y científica exige
de la prueba de la puesta en práctica e lo descubierto.

Practica que pondrá a prueba la verdad y honestidad de nuestra


búsqueda y que la retroalimentará proveyendo de nuevos
elementos para la construcción.

Un pintor no explica un cuadro, lo pinta. Un matemático no


acepta un teorema, lo demuestra. Un iniciado masón no se oculta
en su templo, irradia su luz en el mundo.

Así es, HH.·. CComp.·., que para cumplir con la demanda que la
orden nos planta en esta etapa, os propongo ordenar nuestra
búsqueda en doce jornadas, la primera de las cuales estamos
cumpliendo esta noche.

Las 11 siguientes, se organizarán según el siguiente plan de


trabajo:

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2ª Jornada: Buscaremos respuesta a: ¿Por qué el aprendiz que
viene en busca del aumento de salario se presenta con una regla
sobre su hombro Izquierdo?

3ª Jornada: ¿Cuál es el sentido iniciático el 1er. Viaje, realizado


por el mundo de los sentidos? ¿Qué sentidos debe desarrollar el
compañero? ¿Qué le ofrece el grado para lograrlo? ¿Por qué porta
en este viaje el mazo y el cincel?

4ª Jornada: ¿Cuál es el sentido iniciático del 2º viaje, realizado


por el mundo de las artes liberales? ¿Qué ciencias y que artes debe
conocer y dominar el compañero? ¿Cómo puede lograrlo? ¿Por
qué porta en este viaje la regla y el compás?

5ª Jornada: ¿Cuál es el sentido iniciático del 3er. Viaje, realizado


por el mundo de los órdenes de la arquitectura? ¿Qué enseñanza
obtiene el compañero en este viaje? ¿Por qué porta en este viaje
la palanca?

6ª Jornada: ¿Cuál es el sentido iniciático del 4º viaje, realizado


por el mundo de los benefactores de la humanidad? ¿Cómo puede
el compañero devenir un benefactor de la humanidad? ¿Por qué
porta en este viaje la escuadra y el nivel?

7ª Jornada: ¿Qué sentido iniciático tiene el 5º viaje, realizado por


el mundo del amor a la humanidad? ¿Por qué este viaje es la
coronación y da sentido a todos los viajes anteriores? ¿Por qué el
compañero o realiza sin herramientas?

8ª Jornada: ¿Qué nos dice, luego de realizados los viajes, la


estrella flamígera y la Letras G?

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9ª Jornada: Significado y contenido simbólico del signo del
Comp.·.

10ª Jornada: ¿Qué sentido tiene la marcha del Comp.·.?

11ª Jornada: La Palabra de Paso del Comp.·.

12ª Jornada: La leyenda de la Escalera de Caracol.

¡Que los HH.·. de la Columna J, tengan un año de fructífero


trabajo! Les esperan 12 jornadas de arduo quehacer, pero de ser
realizadas

a conciencia, los HH.·. encontrarán en cada una de ellas,


estímulos para continuar en el sendero y recibirán, a su
finalización, el justo salario a su esfuerzo.

Pongámonos pues, en marcha.

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CAPITULO II

EL APRENDIZ FRENTE A SU COLACIÓN

El aprendiz ha cumplido un proceso, al menos su 2 º Vig.·. y sus


HH.·. MMaest.·. así lo creen y se presenta ante el templo a
solicitar el aumento de su salario.

Pero el Apr.·. no se presenta ante la cámara de Comp.·. con las


manos vacías, lo hace llevando una regla sobre su hombro
izquierdo.

Nos preguntamos entonces: ¿Cuál es el sentido simbólico que


encierra esa actitud?

Sabemos que nada es gratuito en nuestros rituales, que todo


cuanto en ellos está presente encierra un mensaje, muchas veces
velado, dirigido a promover nuestra evolución personal como
MMas.·.

Siendo así, busquemos desentrañarlo en este símbolo. Dice el


ritual de colación que la regla es un símbolo de que el Mas.·. no
puede permanecer nunca ocioso y que todas sus actividades, debe
dedicarlas al trabajo.

En definitiva, aquí se nos dice muy poco, ya que el Ritual se limita


a sustituir una incógnita por otra, dado que al afirmar que
debemos dedicar todas nuestras actividades al trabajo, nos lleva a
preguntarnos de que se trata ese trabajo, a preguntarnos en
definitiva cuál es ese trabajo que debemos haber realizado como
AApr.·.

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Se nos plantea, de esta manera, un nuevo desafío a los efectos de
desentrañar el mensaje de este símbolo.

Un momento antes el ritual expresaba que el aprendiz que se


presenta ante la cámara de Comp.·. ha cumplido su tiempo como
obrero del taller.

¿Cuál es este tiempo?

¿Qué ha realizado durante este tiempo, que amerita su solicitud


de aumento de salario?

¿Qué es lo que ha realizado y que se simboliza aquí mediante la


regla?

En mi concepto, varios son los logros que el Apr.·. ha debido


obtener a los efectos de aspirar a trabajar con nuevas
herramientas.

En primer lugar, debe haber logrado hacer “oído sordo” a los


ruidos exteriores. La Regla del silencio a que se vio sometido
durante sus primeros tres años simbólicos de trabajo, debe haberla
internalizado, hasta lograr, mediante el dominio del silencio
interior, comenzar a oír su voz interna, prestarle la atención
requerida y descubrir su verdadero ser.

En segundo Lugar, el Apr.·. que ha cumplido su tiempo, debe


haber superado las contradicciones, las actitudes, pensamientos y
emociones antagónicas, el dualismo. Ha de ser dueño de la regla
de la armonía, simbolizada n el número tres del grado, superando
e dualismo, los extremos, tomando por el camino del medio como
síntesis superación de los dualismos. Así, la regla nos habla de
13
este segundo logro, cual es el dominio de la regla de la armonía.

En tercer lugar, debe haber logrado aplacar sus emociones y que


estas no fueran más las conductoras de sus decisiones, dominando
así la regla del equilibrio, según la cual, lo mental y lo emotivo se
complementan sabiamente y hacen la realidad del ser humano
completo, equilibrado.

Así, la regla nos habla de este tercer logro, cual es el dominio de


la regla del equilibrio.

En cuarto lugar, el Apr.·. que ha cumplido su tiempo, debe haber


logrado hacer aflorar los contenidos ocultos de su fuerza anímica,
debe haber derribado mediante el adecuado uso del mazo y del
cincel, las barreras que el mundo profano había erigido a lo largo
de los años en su mente y en su corazón. Pero esta irrupción en el
plano de la conciencia para ser fructífera, debió ser ordenada y el
Apr.·. aprendió así a dominar la Regla de Orden. En quinto lugar,
el Apr.·. se maneja en un mundo uni-dimensional, la marcha del
grado así lo indica, se desplaza sobre una línea. Haber dominado
ese desplazamiento es simbolizado por la Regla.

Dominar la 1ª dimensión, desplazarse en línea recta en forma


consiente, es haber disciplinado el centro emotivo y así parte
ahora a intentar dominar el centro intelectivo para pasar así a la
2ª dimensión y moverse cómodamente en el plano, que es la tarea
del Compañero. La marca del 2º grado, así lo indica. La
aspiración del Comp.·. será llegar a dominar la 3ª dimensión, al
ascender por la escalera de caracol y dominar el centro espiritual
que será tarea de otro grado, al aspirar a la exaltación del alma.
Por otra parte, la tarea en el Primer Gr.·. ha sido pasiva, pues para
mantenerse en la línea recta la ha alcanzado con el silencio. Esto
14
está indicado por la regla, que la mano izquierda apoya, sobre el
hombro izquierdo, dado que el brazo izquierdo es representativo
de la pasividad en contraposición con el derecho que lo es de la
actividad.

Al Comp.·. le corresponde ahora pasar a una actividad consiente


en la que logre, mediante el dominio de las artes y ciencias
iniciáticas aplicadas en su laboratorio interior, la sabiduría que le
permita aplicar su fuerza, su voluntad, a la construcción de una
sociedad más justa y solidaria.

Decíamos en nuestro ensayo “Reflexiones de un Aprendiz”: “Una


regla sirve para trazar líneas rectas y para medir distancias”.

En la primera acepción, la regla nos está indicando como


debemos recorrer el camino iniciático, es decir, en línea recta.

Trazarnos una línea recta, asimilarnos a ella, es actuar con


rectitud. La rectitud nos dice cómo utilizar el mazo y el cincel,
pues la rectitud en moralidad, nos dará el concepto justo de como
purificar y como rectificar nuestro Mazo (voluntad) y nuestro
cincel (inteligencia).

La línea recta nos indica, además, cual es la forma de llegar por


el camino más corto, a la verdad.

Así, podemos concluir, que la menor distancia entre nuestra


conciencia y nuestro ser interior, es la línea recta de nuestro
proceder masónico.
En el TAO – Te – King, Lao Tsé, nos dice sobre la línea recta:
“saberse fuerte y hacerse el débil, es el fondo de la vida social;
quien o posee no abandona jamás la línea recta, volverá al estado
15
moral del niño. Saberse claro y hacerse el oscuro es la esencia de
la vida social; quien la posee, no pierde jamás la línea recta,
volverá al estado intelectual de universalidad. Saberse grande y
hacerse el pequeño es la naturaleza de la vida social; quien la
posee, progresa siempre en la línea recta, volverá al estado
sentimental de la ingenuidad. La ingenuidad es el velo de la
perfección, el perfecto, obrando así, se hace jefe, organizador,
fuerte y dulce”.

Y agrega en otro párrafo:

“Estar de verdad en línea recta, “no es estar” en línea recta. Así


se están en “su” línea recta Estar casi en línea recta es “no querer
perder” la línea recta, así, se aparte uno de “su” línea recta.

La línea recta verdaderas acción no querida y no voluntad de


acción. La línea recta ordinaria es acción querida y voluntad de
acción. A la luz de los pensamientos de este pensador chino
vemos como cada pensamiento, emoción o acción tiene su línea
recta de manifestación, que está dada por la pureza de su esencia,
así, la regla nos recuerda la purificación necesaria de todas
nuestras manifestaciones.

La regla, nos indica, que cada uno de nosotros tiene su propia


línea recta que recorrer y que nadie lo podrá hacer por nosotros.
Seguir la línea recta es no depender de los ruidos o estímulos del
mundo profano y que pueden desviarnos.

Salirse de la regla, será excederse, propasarse, traspasar los


límites de lo regular o justo. En la segunda acepción, la distancia
que está llamada a medir la regla, no es una distancia espacial,
sino la del transcurrir del trabajo Mas.·.
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Sus veinticuatro pulgadas nos dicen que, desde que el ser profano
ha muerto, lo único que puede animar el camino del iniciado, es
el permanente trabajo Mas.·. , pues no somos MMas.·. solo en el
templo, lo somos las veinticuatro horas del día.

La Regla, nos habla así de la continuidad y regularidad que deben


tener nuestros trabajos.

Sabemos que, en nuestros trabajos, no vale el apresuramiento,


pero tampoco vale el estancamiento, debemos mantener el
compás de nuestros trabajos, sin prisas y sin pausas, en una
evolución permanente, ¡HH.·. CComp.·.!

¡Que la Regla ilumine los caminos que vamos a recorrer! Estamos


a las puertas del templo, cinco arduos viajes nos esperan.

Vivir sus peripecias y hacerlos propios nos elevara del plano de


los fenómenos, de las manifestaciones, al espacio de las causas,
de los origines, solo así comenzaremos a ver.

Las herramientas están allí. La orden las ha dispuesto y nos


esperan.

El ánimo se ha templado y el amor por el trabajo nos impulsa a


iniciar los viajes.

¡Que la Regla del amor, con que hemos llegado a la puerta del
templo de Comp.·. nos de la fuerza necesaria!

La Estrella Flamígera y la Letra G nos esperan.

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CAPITULO III

EL PRIMER VIAJE DEL COMP.·. POR EL MUNDO DE


LOS SENTIDOS

El primer viaje del Comp.·. por el mundo de los sentidos, es el


primer paso en la construcción del nuevo ser, que es tarea
fundamental del Grado.

A efectos de que la construcción sea sólida y perdurable, el


Comp.·. debe comenzar por establecer cimientos firmes para
edificar el plano que los maestros le han entregado. Así, comienza
su camino viajando por el mundo de los sentidos ya que estos son
los instrumentos primarios de todo conocimiento.

A través de los sentidos percibimos el mundo exterior y el


interior, as sucesivas percepciones y su asociación nos llevan a
obtener representaciones del mundo y de nosotros mismos.

La abstracción de un conjunto de características comunes a una


serie de un conjunto de características comunes a una serie de
representaciones nos lleva a formular conceptos y estos se
expresan por medio del lenguaje, del verbo.

Vemos así, en una apretada síntesis, como los sentidos están en la


base de la pirámide que representa al ser humano y como a partir
de ellos se inicia el proceso que concluye en las expresiones más
puras y sublimes del hombre. ¡Pero cuidado! La información que
nos transmiten os sentidos físicos puede ser ilusoria y llevarnos
al error si la tomamos al “pie de la letra” es decir, literalmente y
no nos damos cuenta que, en realidad, los sentidos físicos nos
transmiten símbolos de las cosas símbolos a ser desentrañados e
18
interpretados con el auxilio de capacidades internas que el
Comp.·. está llamado a desarrollar.

¿Cuáles son esas facultades? ¿Cuáles esas capacidades que le


permitirán acceder al mensaje oculto en el símbolo?

Es necesario trascender la ilusión que los sentidos físicos nos


impone. Dice el Ritual, en este viaje: “Los sentidos son los
instrumentos naturales que el hombre trae al nacer y que debe
educar para utilizarlos eficaz y justamente sin caer en ilusiones
engañosas”.

Creemos, que esta educación solo será posible si desarrollamos


los sentidos del alma, esos sentidos latentes que duermen en el
interior de cada ser humano y que el Comp.·. debe despertar,
educar y desarrollar para poder continuar con la tarea de
construcción de su ser iniciático.

Veamos entonces, cual es el sentido de la vista, desde el punto de


vista del iniciado.

Es necesario ver más allá de la ilusión, más allá de los fenómenos,


para llegar al mundo de las causas, que no es apreciable en lo
material.

Es preciso aprende a ver en nosotros mismos que es lo que nos


mueve a hacer tal o cual cosa a pensar y sentir de esta u otra
manera.

Nuestra conciencia percibe al mundo según el marco que nuestro


aparato mental le proporciona, este marco es estrecho, es apenas
una ranura a través de la cual atibamos al mundo.
19
Ampliar el foco de nuestra conciencia, ampliar esa estrecha
ranura por la cual vemos al mundo, es la vista, que debe despertar
el Comp.·. Se nos ha enseñado a ver lo objetivo (el mundo) y lo
subjetivo (nuestro ser) como dos fenómenos diferentes.

La verdadera visión estriba en apreciar que ambos son una misma


cosa y que transformando al mundo nos transformamos a nosotros
mismos y que trabajando sobre nuestro ser interior, trabajamos
sobre el mundo.

Lo objetivo y lo subjetivo son conceptos, abstracciones de la


mente, en realidad son dos aspectos de la misma cosa, superar ese
dualismo es tarea del iniciado y el Comp.·. en su viaje por el
mundo de los sentidos del alma deberá educar su vista a los
efectos de apreciar la unidad, el todo.

Así se logra trascender el mundo aparente y llegar a lo causal,


mirando solamente lo que es invisible.

Reconozco que esto, así expresado, puede resultar paradojal, casi


una burla, si no logramos ver el mensaje simbólico que encierra.

Afortunadamente, poseemos otros sentidos del alma que nos


auxiliaran a conseguir la visión despierta, el pacto es un sentido
que complementa al de la vista.

Desde el punto de vista de los órganos de los sentidos físicos el


tacto logra una aproximación más completa a la forma y a sus
cualidades. La vista solo nos proporciona proyecciones de las
cosas, el tacto nos da mayor información permitiéndonos recorrer
la forma completa y diciéndonos de su textura, su temperatura, su
solidez etc.
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El tacto es además el sentido que pone en contacto nuestro ser
físico con el mundo exterior, es la frontera entre ambos y por lo
tanto un umbral ilusorio si hemos aprendido a ver que adentro y
afuera es la misma cosa.

¿Cuál es, entonces el tacto que debe despertar el Comp.·.? En mi


concepto, el tacto el espíritu, radica en ayudar y colaborar con la
vista, pues si esta debe ver más allá de las apariencias, el tacto le
informa de cómo hacerlo, le suministra la información necesaria
para desentrañar, el sentido, las características, las cualidades de
las diversas manifestaciones y lograr el orden imprescindible que
supere el aparente caos.

El tacto es el sentido del alma que le permite al iniciado ordenar


la tarea, darle forma real y proyectarla, tal como el sentido físico
del tacto le permite al escultor que moldea la arcilla crear las
formas emergentes de su mente.

Así, el tacto, facilita y orienta el uso del mazo y del cincel y


permite apreciar con más detalle las imperfecciones e la piedra a
desbastar.

El tacto junto con la vista, son dos sentidos fundamentales que


debe despertar y desarrollar el Comp.·., pero no son los únicos.

El sentido del oído a ejercitar por el Comp.·. es un sentido sobre


el cual ya ha trabajado como Apr.·., a que en el Pr.·. Gr.·. ha
practicado la regla del silencio como forma de aprender a oír la
voz interna, que le habla desde lo más profundo de su ser.
Pero el silencio del Apr.·. fue un silencio pasivo, que se limitó a
facilitar el descenso a las profundidades del H.·., fue un silencio
21
propicio al olvido de los ruidos del mundo exterior ya que antes
de que el oído pueda oír debe haber perdido su sensibilidad.

La flor del alma se abrirá en el silencio que sigue a la lucha, a la


tormenta interior.

Así, oír la voz del silencio es entender que la única guía verdadera
viene del interior.

Pero el silencio del Comp.·. agrega al silencio conquistado en


Pr.·. Gr.·. una nueva dimensión, ahora activa.

El Comp.·. debe ser capaz de dominar al silencio aun en medio


del diario acontecer.

La vista y el tacto le muestran lo ilusorio de la separación entre lo


objetivo y lo subjetivo, entre él mismo y el mundo. El oído le
permitirá descubrir en el silencio que lo interno y lo externo
poseen la misma cualidad.

El Comp.·. oirá a sus HH.·., oirá a todos los hombres, los llevará
a su interior y allí oirá la voz que le hablará de la igualdad de
todos los seres humanos, HH.·. en una naturaleza común cuya
esencia se encuentra más allá de las formas y del tiempo.

El Comp.·. aprenderá al oírse en os otros, llegar así, guiado por la


libertad conquistada en el Pr.·. Gr.·., a hacer de la igualdad una
verdad interior.

El Comp.·. debe aprender a gustar del trabajo, a mirarlo como una


tarea placentera y no como una obligación o una carga.

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Claro que no hablamos del trabajo profano, sino del iniciático, ese
trabajo que una vez comenzado no puede detenerse, que se
convierte en el este de nuestra existencia y que será alimento
permanente de nuestro espíritu.

Así como el sentido físico del gusto permite seleccionar los


alimentos más acordes a nuestra sensibilidad, el gusto del alma
nos permitirá seleccionar lo que será alimento de nuestro espíritu,
hasta convertirnos, si nos esforzamos lo suficiente, en verdaderos
Gourmets espirituales, capaces de apreciar y diferenciar los más
sutiles contenidos en los pensamientos y emociones propias y
ajenas.

Así el gusto dará alegría y estímulo a nuestro trajo. El Comp.·.


que domine este sentido no podrá dejar de concurrir a las TTen.·.
de su logia y en cada una de ellas encontrará motivos más que
suficientes para elevar y mejorar su gusto por lo espiritual, así
como aprenderá a compartir, con sus HH.·. y con toda la
humanidad, los manjares degustados en estos verdaderos
banquetes del espíritu.

El gusto del alma alimenta, en el Comp.·. , la pasión y el amor


por la obra Mas.·.

Digamos, por último, que el sentido del olfato que está llamado a
desarrollar el Comp.·. es el de la intuición. así el olfato le
permitirá a su ser interno comunicarse en forma directa con el
mundo de las causas, de trascender lo ilusorio y de percibir en
forma instantánea la verdad.

La intuición es una facultad del alma a cultivar y desarrollar y


será un auxiliar inestimable en los viajes que el Comp.·. deberá
23
aun realizar.

Será atajo seguro, camino directo al conocimiento perdido, a


causa de la excesiva confianza que hemos depositado en los
mensajes, que nuestros sentidos físicos nos comunican y del
cerrado racionalismo que también ha ayudado a extraviarnos.

El olfato del Comp.·., su intuición, le permitirá percibir los


mensajes provenientes de su ser interno, incrementando así su
vida espiritual.

La intuición lo conectara con las reservas más puras y auténticas


delo que Jung llamara, el inconsciente colectivo, se inmenso
substratum en el cual se encuentran grabadas todas las
experiencias de la humanidad, sus éxitos, sus fracasos, sus logros,
lo que pude ser, lo que fue y lo que potencialmente puede ser.

Así el olfato del Comp.·. ampliará significativamente el haz de su


conciencia comunicándola con l conciencia de otros seres y en
definitiva con la conciencia colectiva, que es un logro de la raza
humana.

Pero para despertar y desarrollar estos sentidos del alma, el


Comp.·. dispone de dos herramientas que lo acompañan en su
viaje, el mazo y el cincel. Decíamos al referirnos a estas
herramientas en el primer Gr.·.: “El Mazo simboliza la Fuerza de
voluntad puesta al servicio de la realización del trabajo Mas.·. ,
a su vez, el cincel es emblemático de la inteligencia y de la
moralidad con la que la fuerza de voluntad debe ser empleada”.

“La voluntad s una potencia del alma, que nos mueve hacer o no
una cosa. Si tratamos de desentrañar sus componentes, veremos
24
que, en última instancia, la voluntad es la resultante de los
deseos. Así, llamaremos a un hombre como de fuerte voluntad si
sigue una línea definida, sin apartarse de ella y llamaremos
hombre de débil voluntad al que sigue un curso zigzagueante,
desviándose en una u otra dirección bajo el influjo de cada nuevo
deseo”.

“La inteligencia, por otra parte, es decir nuestro cincel, es la


parte activa de la razón, es la facultad que nos permita generar
pensamientos y formular conceptos”

El desarrollo de la razón implica el desarrollo del intelecto, así


como el de las emociones superiores, estéticas, éticas y morales.

En este proceso, el intelecto se impregna de emocionalidad y deja


de ser “frio”, conduciendo a la espiritualidad.

El intelecto se espiritualiza a partir de lo emocional y lo


emocional se espiritualiza a partir del intelecto.

Pero el hombre nuevo, el Mas.·. Perfecto, no será producto de la


purificación del intelecto, ni de la purificación de las emociones,
ni aun de la rectificación de los deseos.

Estas purificaciones y rectificaciones solo proporcionaran el


terreno fértil en el cual la nueva semilla podrá germinar. Esta
nueva semilla es la que el Apr.·. ha descendido a descubrir en su
interior. Así, la tarea que ha desarrollado en el primer Gr.·. con el
Mazo y el Cincel, ha sido fundamentalmente preparatoria,
propiciatoria, para el paso trascendental de su real iniciación.

Ha preparado la piedra, para que, llegado el momento esta se


25
transforme en piedra espiritual, en la piedra cubica perfecta que
simboliza al Mas.·.

Ahora, el mazo del Comp.·. que sutiliza sus golpes, adquirirán


una nueva cualidad y mayor precisión pues, estará moldeando los
sentidos del alma a que este primer viaje hace referencia. Y, para
lograrlo, la fuerza de voluntad estará movida ahora por deseos e
impulsos superiores.

También la inteligencia del Comp.·. se ha hecho más sutil, en el


despertar de las potencias de su ser, ha aprendido a buscar el
Angulo justo, la perspectiva correcta, el momento oportuno.

Así pertrechado con una inteligencia despierta y con una voluntad


inteligente el Comp.·. está en condiciones de hacer emerger las
cualidades, los sentidos que lo harán dueño y señor de sí mismo
y le permitirán avanzar en sus viajes en la búsqueda de la
maestría.

Tendrá ahora que aplicar lo descubierto, el segundo viaje por el


mundo de las ciencias y las artes iniciáticas le enseñaran como
hacerlo.

Pero esto será tema de nuestra próxima jornada.

26
CAPITULO IV

EL SEGUNDO VIAJE DEL COMP.·. POR EL MUNDO DE


LAS ARTES LIBERALES

Habiendo culminado su viaje por el mundo de los sentidos y


siendo ahora consiente de su infinito potencial, el Comp.·. se
apresta a realizar un segundo viaje, buscando en este encontrar
los cauces que lo conduzcan al dominio de sí. Transitara por el
mundo de la ciencia y del arte en procura del conocimiento cierto
de las cosas por sus principios y sus causas.

Pero no son las ciencias y artes profanos el objeto de su búsqueda,


aunque éstas, como logros auténticos de la humanidad le indiquen
el camino que conduce al nuevo velo a descubrir.

Es oportuno preguntarnos entonces: ¿Cuál ha sido el proceso del


desarrollo científico con el mundo profano?

Quienes se han comprometido verdaderamente en este desarrollo,


han vivido derribando barreras, descubriendo a partir de hechos
conocidos nuevas verdades, proyectando nuevos modelos para a
su vez cuestionarlos y re elaborarlos, liberando al hombre de la
sujeción a lo desconocido.

Haciendo previsible lo imprevisto, permitiendo ver las causas


detrás de lo aparentemente casual.

Así, la ciencia profana ha ido invadiendo terrenos que antes le


estaban vedados y que eran propios de la religión.
Es en esta perspectiva que la ciencia guiada por el espíritu del
libre pensamiento, ha derribado dogmas y ha colocado al hombre
27
en el centro de la cuestión. Ha incursionado en el ámbito de la
mente y de los sentimientos del hombre buscando encontrar allí,
las causas de su peregrinar por el mundo.

La ciencia se ha ido sublimando y al superarse se ha convertido


en arte al expresar la oculta belleza y armonía existente en el
hombre y en el universo.

El científico que vive así su disciplina es un artista y todo


verdadero artista ha sido siempre un científico intuitivo, que ha
sabido percibir la belleza del mundo causal y expresarla.

Así el artista y científico que se atreve a cruzar las barreras e ir


más allá, alcanza una visión mística de la realidad, logrando este
estado extra-ordinario de perfección en el cual alcanza una
comunión e identidad, por medio del amor, con el G.·. A.·. D.·.
U.·.

Es este tipo de científico y artista en el que debe convertirse cada


Comp.·.

El científico trabaja en laboratorios y el artista en su taller, el


iniciado trabaja sobre sí.

Él es, a la vez, laboratorio y taller y desde que la realidad es una


y como adentro es afuera, su laboratorio y taller. Lo es también el
universo.

El conocimiento de las leyes que rigen los fenómenos, libera al


hombre de la esclavitud a la cual estos lo someten.
Así, en lo material, el hombre se libera de la esclavitud respecto
a los diversos cambios del entorno natural, puede proveer
28
alimentación y su sustento y hacer su habitación más confortable.

Pero la ciencia y el arte, no son intrínsecamente buenas, son


herramientas para explorar la realidad. Los resultados de esa
búsqueda, podrán aplicarse a construir, pero también, podrán
aplicarse a destruir, tanto al hombre como a la naturaleza.

De ahí que una ética y una moral humanizantes y liberadoras sean


necesarias para guiar el desarrollo científico y artístico.

Si esto es cierto, en el mundo profano con mucha mayor razón, lo


será en el iniciático, en el cual el Comp.·. deberá aplicar con
esmero las herramientas que le fueron entregadas para realizar
este viaje. El Comp.·. trabaja en el plano de las manifestaciones,
en el mundo del cambio permanente y al remontarse al mundo de
las causas, al buscar descubrí las leyes que lo gobiernan,
incursionara en las ciencias y artes del alma, en un nuevo mundo,
que está más allá del espacio y del tempo, incursionara en otra
dimensión en la cual el tiempo pierde las características
esclavizantes con las cuales, se nos manifiesta en la vida profana
y se torna una línea, de ahí la regla que auxilia al Comp.·. , en la
cual todos los cuentos están simultáneamente presentes.

En esta línea, tan sabiamente trazada por la regla del Comp.·., el


concepto de pasado, presente y futuro, se descubre como una
ilusión.

El Comp.·. aprendiendo a dominar las ciencias y artes el alma,


podrá acceder a ese templo cuyo portal el iniciado aspira a
traspasar para descubrir así su verdadera esencia.

Vemos así, como la regla con la cual el Apr.·. Llego a la puerta


29
del templo a solicitar su aumento de salario, se ha transmutado.

La regla de conducta que el Apr.·. aprendió a dominar en el


Primer Gr.·. Se transforma ahora en la regla de oro del Comp.·.,
representativa de la ley oculta en cada fenómeno o manifestación
y del profundo sentido ético y moral que esa ley conlleva.
Descubre así que la ley del amor lo hace verdaderamente libre y
el Comp.·. no se apartará ya de esa Regla.

La Regla del Comp.·. le permitirá separar la paja del trigo, lo falso


de lo verdadero, le permitirá separar y discernir con técnica
iniciática precisa, los distintos elementos que componen cada
fenómeno, podrán así poner orden en el caos aparente.

Podrá definir que leyes se ponen de manifiesto en cada evento y


como se interrelacionan. Logrará de este modo, modificar los
acontecimientos y lo que es más importante, lograra
transformarse. En este proceso lo ayudará el compás, que le
permitirá medir el alcance de cada manifestación y circunscribir
el ámbito de su acción.

Aprenderá a medir con justicia y equidad los actos humanos y


aprenderá a medirse, a lograr el auto-control que le permita
acallar en forma definitiva todo lo que perturbe su paz interior.
Así pertrechado el Comp.·. inicia con fuerza su viaje por este
nuevo mundo.

Surge entonces la pregunta: ¿Qué encuentra el Comp.·. en su


transitar por el mundo de las artes liberales?

Los antiguos, dividían las artes liberales en siente, las que, a su


vez, agrupaban en dos categorías.
30
A la primera categoría la llamaban Trívium y en ella comprendían
la gramática, la retórica y la lógica.

A la segunda categoría la llamaban Quadrivium y en ella


comprendían la aritmética, la geometría, la astronomía y la
música.

Desde el punto de vista iniciático, esta categorización es


altamente significativa y se manifiesta ampliamente coincidente
con el simbolismo del grado.

El Trívium es representativo del espíritu humano, la gramática, la


retórica y la lógica serán así. Las artes liberales que le permitirán
al Comp.·. convertirse en un ser humano pleno.

La gramática le permitirá al Comp.·. articular su pensamiento, dar


orden y sentido a todo lo emergente de su mundo interior.

Mediante el dominio de la gramática el Comp.·. lograra convertir


sus centros emotivos y mentales en herramientas precisas y claras
al servicio de su destino trascendente.

En el proceso de purificación interior, es decir, en el proceso de


descubrir la esencia, la causa el origen de cada estado o
manifestación de ser, el uso de la correcta gramática juega un
papel esencial.

Los balbuceos iniciales del Apr.·. comienzan a tomar forma y


ordenarse.

El Comp.·. comienza a desarrollar su gramática interior. La


31
retórica a la que accede el Comp.·. es al retorica implícita en los
hechos, pues el Comp.·. comienza a aprender a manifestar y
expresar en actos Mas.·. los resultados de su búsqueda.

No hay retórica más contundente que la el ejemplo, que encierra


la belleza del sentimiento y que es capaz de conmover las fibras
más sensibles del ser. Así, la elocuencia del Comp.·. , es la
elocuencia el trabajo, que comienza a fructificar y que busca
comunicarse.

Por último, la lógica, ciencia cuyo padre es Aristóteles, le ayudara


a exponer las leyes, modos y formas del conocimiento de Sí y del
Mundo.

Kant decía que la lógica es la ciencia de las leyes necesarias del


entendimiento y de la razón en general. Dominar la lógica será
prender a transitar los ocultos caminos que relacionan
acontecimientos en apariencia inconexos.

La lógica iniciática nos pone en contacto con el logos, con la


palabra, con el verbo, dándole la forma final a nuestra gramática
y retórica, al conferirles la ley de articulación secreta que conduce
a la verdad.

Es importante resaltar aquí, que este proceso no puede ser de


ninguna forma realizado en soledad. Se trata de un trabajo en
conjunto, sobre todo si concebimos a la verdad como un gran
cuadro a restaurar, como un cuadro cuyas infinitas partes se han
dispersado y del cual cada iniciado es poseedor de una de ellas.

Solo la conjunción de todas las partes, restituirá la figura original.

32
Ese es en mi concepto el gran objetivo de la Mas.·. Vemos
entonces como el Trívium representa el conjunto de las artes y las
ciencias cuyo dominio le permitirá a nuestro interior emerger en
forma ordenada y manifestarse en la plenitud de su humanidad.

El Cuadrivium, en cambio, es emblemático del mundo exterior,


al cual el Comp.·. deberá aprender y dominar.

Para ello contara con cuatro ciencias invalorables. La aritmética


lo introducirá al mundo de las ideas, le permitirá numerar y
cuantificar. A través de la aritmética descubrirá el poder creador
de la mente.

Aprenderá a sumar, restar, multiplicar y dividir en el mundo de


las causas y conseguir os efectos correspondientes en el mundo
de los fenómenos manifestados.

La geometría lo introducirá en el universo de las formas,


aprenderá a ver que las formas no son independientes de la idea y
de la mente, sino una manifestación e estas. Deberá aprender a
disponer de las formas de su profundo poder evocador y
concentrador.

Las formas concentran la energía mental que las ha creado el


Comp.·. aprenderá a dominar y utilizar esa energía a través de las
formas.
La aritmética, incorporada a la geometría, produce una nueva
ciencia, llamada geometría analítica.

Esta, le permitirá al Comp.·., dar valor numérico a la forma,


expresar mediante delicadas ecuaciones, la relación entre las
formas y la regularidad de las mismas.
33
Podemos afirmar, que el mundo es la expresión geométrica del
G.·. A.·. D.·. U.·., todo en él, tiene un orden, un equilibrio, una
armonía, que se expresa a través del número y la forma.

La astronomía, es el estudio de las formas en movimiento en el


plano cósmico.

El movimiento es el generador el tiempo y el que le permitirá al


Comp.·. acceder a una nueva dimensión de su ser.

La ciencia profana ya ha logrado demostrar lo que, desde siempre,


fue un conocimiento de los iniciados, que el tiempo se genera por
el movimiento.

Albert Einstein, en su magnífico trabajo sobre la relatividad, puso


de manifiesto que el tiempo transcurre en forma diferente, de
acuerdo a la velocidad con la cual se desplaza el sujeto (el
observador).

Así, si un navegante espacial partiera del planeta tierra en una


nave que se desplazar a velocidades cercanas a la de la luz, a su
retorno encontraría que el tiempo en el planeta habría transcurrido
en forma mucho más acelerada que el suyo y que todos sus
contemporáneos habrían muerto hace ya muchos años.

No puede concebirse al tiempo sin el movimiento, en la quietud


absoluta sólo tiene lugar en la eternidad.

Así, el Comp.·. comenzará a recorrer el camino que lo conduzca


a conocer y dominar los movimientos a los cuales él y todo lo
manifestado están sometidos, buscando de esta forma ser dueño
34
del tiempo.

Vislumbrará, de esta forma, que pasado, presente y futuro


coexisten y son uno, y que n la eternidad esta la causa de todo lo
que sucede en el mundo de las manifestaciones.

La música, al fin, como expresión armoniosa de sonidos, le


hablara sobre la armonía que es la ley del macro y micro cosmos.

La música de las esferas, la magna expresión de lo eterno


manifestado, completara su visión del cosmos y lo reconciliara
consigo mismo.

El Comp.·., que en el primer viaje ha descubierto el sentido del


oído, podrá ahora ponerse en sintonía con la magnífica sinfonía
cósmica que es la expresión suprema del G.·. A.·. D.·. U.·.,
sinfonía de la cual el Comp.·. aprende a sentirse parte e interprete.

Logrará el Comp.·., mediante el adecuado dominio del


Cuadrivium, el conocimiento del mundo exterior, de las
manifestaciones, de lo fenoménico y habrá encontrado el camino
que le permita remontarse a sus causas, a los orígenes.

Pero estas dos categorías de ciencias, tienen en el grado del


Comp.·. una relación muy precisa, la que se pone de manifiesto
en el vestido del Comp.·., en su mandil.

En su mandil el Trívium está representado por el triángulo


replegado, y el Cuadrivium por el cuadrado sobre el cual aquel se
repliega.

El Trívium desciende así sobre el Cuadrivium, es decir, el mundo


35
del espíritu se encarna en la materia, dando así nacimiento al
hombre.

El verbo (Trívium) se hace carne (Cuadrivium). Dominando estas


siete artes liberales, el Comp.·. será un hombre pleno y se
encontrará así, preparado para el paso trascendente que representa
su exaltación.

Pero para lograrlo, aun le restan recorrer tres viajes, antes de que
pueda vislumbrarse como estrella de fuego y dueño del poder que
la letra G Simboliza.

¡Esforcemos, Comp.·. en culminar con éxito estos viajes! ¡El


salario se nos abonara en monedas del más puro oro del espíritu!

¡Avancemos con Fuerza!

Unidos, reconstruiremos el cuadro cósmico del cual somos


herederos y artífices.

36
CAPITULO V

EL TERCER VIAJE DEL COMP.·. POR EL MUNDO DE


LOS ÓRDENES DE LA ARQUITECTURA

El Comp.·. ha descubierto el infinito potencial en el existente,


luego de su primer viaje por el mundo de los sentidos iniciáticos
y ha aprendido a despertar y desarrollar sus potencias latentes al
viajar por el mundo de las artes liberales.

Le corresponde ahora, en el tercer viaje, por el mundo de los


órdenes de la Arquitectura, comenzar a darle forma a su nuevo
ser, a buscar la forma iniciática que le permita ser canal
constructivo y edificante, capaz de expresar en su plenitud la
fuerza que radica en el G.·. A.·. D.·. U.·. y convertirse así en el
efectivo eslabón que la cadena Mas requiere para proyectarse
sobre toda la humanidad.

La fuerza radica en el G.·. A.·. D.·. U.·., el ser humano, en la


práctica de su libre albedrio. Puede utilizarla para construir o para
destruir, para el bien o para el mal.

El Comp.·. debe hacer suya esa fuerza y aplicarla


constructivamente, en el plano de su persona y en el social,
lograrlo es el objetivo del 2º Grado.

La Mas.·. es el espíritu de progreso, evolución y perfección del


hombre y de la sociedad, es, por lo tanto, inmaterial ha existido
siempre.

37
La orden Mas.·. es el reflejo material, la expresión manifestada
del espíritu de la Mas.·.

Cuanto más fiel sea la orden a ese espíritu, mayor será su


colaboración en la construcción del hombre y de la sociedad, a
los que busca transformar profundamente, haciéndolos más
solidarios, más justos, más sabios, teniendo como punto omega
de su acción, la fraternidad universal, única forma en la que el
amor se manifestará en toda su dimensión.

Ahora, en el tercer viaje, en mi concepto fundamental en el


camino del Comp.·., debe recorrer los diferentes órdenes de la
arquitectura.

Pero, ¿Qué son los órdenes de Arquitectura?

Dado que la arquitectura a la que estamos llamados es la


arquitectura del alma y del universo, los órdenes en los que estos
se manifiestan, serán el objetivo del viaje del Comp.·.

Si ordenar es poner en concierto y buena disposición los distintos


elementos que integran una manifestación, si ordenar es asignar
a cada elemento el lugar que le corresponde, los órdenes de la
Arquitectura no pueden ser otros que los órdenes en los cuales
todo lo creado, se pone de manifiesto. Hay en nuestro concepto,
cinco ordenes, que expresan los distintos niveles en los que se
ordena y expresa el universo.

Algunos han llamado reinos a estos órdenes y es por estos reinos


que deberá peregrinar el Comp.·. buscando el dominio y señorío
de cada uno de ellos.

38
Creo que lo cinco órdenes que expresan la armonía y el equilibrio
del G.·. A.·. D.·. U.·. manifestado, son:

• El orden mineral.

• El orden vegetal.

• El orden animal.

• El orden humano

• El orden súper-humano, al que algunos han llamado


también, angelical y otros, iniciático.

Difícil viaje, el que inicia en esta tercera oportunidad, el Comp.·.,


pues se le propone buscarse y buscar la fuerza y armonía en cada
orden de manifestación.

En particular, es el quinto orden de la gran Arquitectura, el que el


Mas.·. está llamado a construir. Es el reino del hombre nuevo, el
reino de los iniciados, del cual la Mas.·. es un anuncio. Este orden
e completará el día en el cual la humanidad en su conjunto se haya
transformado, ese día, la Mas podrá retornar sus herramientas al
G.·. A.·. D.·. U.·. Pues su misión se habrá cumplido.

Estos cinco ordenes de la creación están representados en el viaje


del Comp.·. por cinco ordenes de la vieja Arquitectura y que son:
El Toscano, El Dórico, El Jónico, El Corintio y El Compuesto.

Buscando desentrañar el símbolo oculto en cada una de estas


representaciones, nos vimos necesitados a investigar que
39
diferenciaba un estilo Arquitectónico del otro.

Grande fe nuestra sorpresa al descubrir, que dos eran los


elementos que diferenciaban a cada orden del otro: Su valor
numérico y su coronación.

Lo que identifica cada uno de los órdenes de Arquitectura


presentes en la lista que lee el Comp.·. son las columnas que
sostienen la construcción. Estas columnas son en cada estilo de
diferente altura y poseen capiteles diferentes.

El primer orden de la arquitectura que se nos presenta es el


toscano, que se distingue por ser el más sólido y sencillo de todos
y que mide ocho módulos o lo que es lo mismo, cuatro diámetros
iguales al diámetro de la parte inferior de la columna. Su capitel,
es decir, la parte superior de la comuna es sencillo, sin adornos.

Vemos que cuatro es el número del toscano, número que


simboliza lo material, lo objetivo y que en este viaje representa al
orden mineral, al de la materia inanimada.

El Dórico es el segundo orden de la arquitectura que debemos


recorrer, si bien el dórico tiene el mismo valor numérico que el
toscano, se diferencia de este en que su friso se encuentra
adornado por triglifos, rectángulos salientes surcados por tres
canales, es decir, que la manifestación vital se hace presente en la
materia, nos introducimos así en el orden vegetal.

El Tercer orden de la Arquitectura es el Jónico, en él se


incrementa el valor numérico, la altura de la columna llega a
nueve módulos, o sea cuatro diámetros y medio, a su vez, el
capitel se encuentra adornado por grandes volutas, que son
40
adornos en figura de espiral o caracol. Vemos en este orden el
progreso de la manifestación de la vida, el reino animal en toda
su magnificencia.

El cuarto orden de la Arquitectura es el Corintio, en el, la columna


mide diez módulos, o sea cinco diámetros, es por lo tanto la
representación del orden humano, el número cinco es
emblemático del hombre. El capitel se encuentra adornado con
hojas de acanto en representación del dominio que el orden
humano está llamado a ejercer sobre los tres primeros.

Las columnas a la puerta de nuestros templos son el orden


Corintio y representan así el límite que el ser humano deberá
trasponer para lograr su exaltación a otro nivel de conciencia.

El Quinto orden de Arquitectura es el compuesto, que conserva la


altura del Corintio, es decir el número cinco, pero en su capitel
reúne las volutas del Jónico (la espiral) con las hojas de acanto
del Corintio.

Aquí se hace ya presente la espiral, la escalera de Caracol, que el


Comp.·. deberá ascender si aspira a su exaltación. Este orden
simboliza el de la humanidad consiente, el reino del iniciado, del
hombre nuevo señor de todo lo creado.

Habiendo realizado este viaje el Comp.·. descubre el profundo


orden que reina en todo lo creado, descubre que el caos es una
ilusión y que él es la pieza fundamental en la estructuración del
orden cósmico, pues descubriendo el orden será capaz de ordenar,
de aplicar la fuerza conscientemente, será un creador.
Pero este viaje por los órdenes de Arquitectura es realizado por el
Comp.·. llevando en sus manos una palanca.
41
La palanca es una herramienta que permite multiplicar la fuerza
de quien la utiliza, al llevarla en nuestras manos, cabe preguntarse
¿para qué quiere multiplicar su fuerza el Comp.·.? ¿Qué es lo que
la palanca le permitirá mover? ¿Cuál será su punto de apoyo para
lograrlo?

Viajando por los órdenes de la Arquitectura vimos como el


Comp.·. descubre su doble misión: Transformarse y transformar
a toda la humanidad y vaya si se requerirá fuerza para lograr este
Objetivo.

Pero ¿de dónde proviene la fuerza? ¿Cuál es la palanca que el


Comp.·. deberá utilizar para multiplicarla?

La palanca ha sido considerada por algunos HH como


emblemática de la voluntad y por otros como símbolo de la razón
operativa.

Nosotros, en cambio, vemos en la palanca otros avances, otra


dimensión, que permite discernir cual es el verdadero motor de la
historia y del hombre como la maquina más primitiva concebida
por el hombre, la palanca, en nuestro concepto es emblemática
del amor.

Es el amor el que efectivamente multiplica nuestras fuerzas y nos


hace capaces de aspirar y lograr cualquier objetivo.

El amor nos libera de nuestros egoísmos y de nuestra pequeñez.

Por el amor el hombre orienta su voluntad y su razón, sin amor


ningún sentido tendrá todo lo que hagamos.
42
El amor es la esencia de la fuerza que radica en el G.·. A.·. D.·.
U.·., pues el amor armoniza y complementa, da equilibrio y
sentido final a todo lo existente.

Así, en nuestro concepto, es la gran palanca que el Comp.·. debe


aprender a utilizar para lograr su trascendencia.

Al transitar por el mundo de los órdenes de la Arquitectura, es


decir, por los distintos planos de manifestación en los que el G.·.
A.·. D.·. U.·. se expresa, tendrá, si ama, la capacidad de
multiplicar y proyectar al infinito su acción.

Esta dicho en los evangelios que, sin amor, todo carece de sentido
y es inútil.

Así, el amor, será nuestro motor, la llama que haga resplandecer


a nuestro ser interior y será el gran motor del mundo.

Pero decíamos que toda la palanca, para causar un efecto real


debe tener un adecuado punto de apoyo.

¿Cuál es el punto de apoyo en el cual debe el Comp.·. aplicar su


amor para que este cause el efecto deseado?

En el plano individual, el punto de apoyo del amor del Comp.·.


no puede ser otro que cada uno de los centros que hacen a la
constitución y expresión del ser humano.

Reconocemos en el ser humano tres grandes núcleos sobre los que


se apoyan todas sus manifestaciones. Son estos el centro físico, el
emocional y el mental o intelectual.
43
Apoyando el amor en cada uno de ellos, el Comp.·. logrará su
efectiva liberación y podrá aspirar a alcanzar el 5º orden de su
Arquitectura interior, su quinta esencia, su trascendencia
espiritual.

La palanca del amor, le ayudara así a mover su ser interno, que


por inmaterial requiere de herramientas acordes a su esencia, para
ser movilizado.

En el plano social o colectivo, el punto de apoyo del amor del


Comp.·. no puede ser otro que la unión y la hermandad con sus
iguales, logrando así dar a la cadena Mas.·. su verdadera
expresión y a la fraternidad su verdadero sitial.

Así, la fraternidad será el punto de apoyo de la palanca del


Comp.·. y multiplicará al infinito la fuerza de cada H.·. ,
prefigurando de esta forma el quinto orden de expresión de lo
manifestado, el quinto orden del universo consiente, la súper
humanidad de los iniciados.

44
CAPITULO VI

EL CUARTO VIAJE DEL COMP.·. POR EL MUNDO DE


LOS SABIOS

El Comp.·. ha realizado ya tres viajes en los cuales ha ido


profundizando en sí mismo y en el universo que lo rodea.

En el primer viaje el Comp.·. ha buscado el conocimiento de sus


sentidos del alma, en el segundo ha intentado descubrir que artes
y ciencias le permitirán ordenarse y logrando el dominio de si,
llegar al dominio de cuanto lo rodea, siendo un fiel interprete del
arte real, disciplina iniciática en su esencia.

En el tercer viaje ha recorrido los distintos órdenes de


manifestación de todo lo existente y ahora ya sabe cuál es el
quinto orden de la Arquitectura que está llamado a construir.

En este cuarto viaje se prepara para el asalto final, descubrirá que


en sí mismo están todas las potencias y la sabiduría necesaria para
realizar la obra.

Potencias y sabiduría, de las cuales, los distintos sabios han sido


magnifica expresión.

Aprenderá a verse en cada ser humano, descubrirá la esencial


unidad que nos vincula como raza humana, de ahí el nivel que
lleva en su mano. El nivel es también emblemático del equilibrio,
de la relación armoniosa de las partes, de la superación de los
antagonismos, de la elevación que es preciso alcanzar a los
efectos de superar el dualismo.

45
El Comp.·. está llamado a desarrollar todas las potencias de su
espíritu si efectivamente aspira a la iniciación, pues el hombre
nuevo solo lo será en el desarrollo armónico y equilibrado de
todas sus facultades.

Debemos nivelar nuestro ser.

El Comp.·. descubre en este cuarto viaje que el desarrollo


desmedido de alguna de sus facultades con relación a otras puede
resultarle desastroso. El sabio Pitágoras puede auxiliarle ante este
peligro, pues este filósofo griego que estableciera que el número
está en la esencia de todas las cosas, introdujo también el
concepto de medida en el plano moral.

El Comp.·. debe aprender a medir sus avances y todos sus actos


serán medidos y justos si desea alcanzar el equilibrio.

Se plantea en oportunidades un falso antagonismo entre el camino


del corazón y el de la mente.

Trabaje el Comp.·. sobre amigos, armonícelos y compleméntelos


y así, cada uno de estos núcleos de nuestro ser, el afectivo,
emocional y el mental y racional se exaltarán mutuamente.

A este respecto dice el H.·. Oswaldo Wirth: “No se puede


despreciar el intelectualismo; sin embargo, su dominio absoluto
nos condena a una estéril y desesperante especulatividad,
cayendo en el extremo contrario, la iniciación caballeresca
desdeñaba el saber para enaltecer únicamente el amor,
inspirador de las acciones sublimes. Mejor equilibrados, el
hermetismo de la edad media, la escuela Rosacruz y la
Francmasonería moderna, han preconizado el desarrollo
46
simultaneo del intelecto y del sentimiento …
… los mejores masones no son los más eruditos, ni los más
ilustrados, sino los más ardientes y constantes trabajadores,
porque son los más sinceros y los más convencidos … ”

Desarrolle el Comp.·. la palanca de su amor y escuádrela con una


mente clara y profunda, utilice el nivel en todo momento y podrá
asaltar con éxito la fortaleza del espíritu. En ese proceso de
desenvolvimiento, la posibilidad de equivocarse y desviar el
camino es grande, por lo que el Comp.·. deberá poner a prueba
cada logro alcanzado, verificar sus efectos y corregir, si fuera
necesario y por sobre todo no deberá tomar ningún logro como
definido, debe evitar quedar aprisionado por sus conquistas.

Vera al final de cada trabajo que solo ha recorrido una parte del
camino pero que aún tiene mucho más para recorrer.

Detenerse puede resultar nefasto, podría llegar a encontrar muy


cómodo el descanso y ya no desear continuar en el camino.

Así, caminador incansable el Comp.·. ira comprobando todo


cuanto haga en este arduo y trabajoso proceso, Galileo puede
sernos de gran inspiración.

Este físico, astrónomo y matemático italiano es considerado el


creador del método experimental en las ciencias físicas. Método
experimental es decir obra y comprueba y obra nuevamente,
sutilizando en cada paso los resultados obtenidos. Aplicando ese
método experimental el Comp.·., como una verdadera técnica
iniciática, podrá ponerse a cubierto de desvíos, ilusiones y
ficciones, obteniendo a cada paso la prueba del adelanto real en
la obtención de la maestría.
47
En la vida del sabio Galileo, el Comp.·. vera también los riesgos
y peligros que acechan a todo buscador auténtico de la verdad.

Galileo, perseguido por la inquisición al defender el sistema


copernicano y obligado a retractarse ante la tortura y la amenaza
de muerte, nos dejó un legado imperecedero cuando afirmaba:
“Eppur si muove ”! ¡Y sin embargo se mueve!

Es que las ideas y la verdad jamás podrán ser avasalladas por la


fuerza y el despotismo, siempre se moverán, pese a quien pese.

Por último, el Comp.·. que busca la igualdad y la justicia, podrá


asimismo encontrar inspiración en Galileo, quien logro demostrar
que cuerpos de distinto peso, caen libremente atraídos por la
fuerza gravitatoria, a igual velocidad.

Extrapolando esta ley al plano espiritual, podríamos decir que


todos los seres humanos están atraídos con igual fuerza por el G.·.
A.·. D.·. U.·. y que está en cada uno armonizarse con esa fuerza
y hacerla suya.

Todos tenemos una esencia común e iguales posibilidades y más


allá de la personalidad de cada uno y de las características
personales que nos diferencia, la fraternidad nos hace iguales y
nos permite aspirar a la liberación de nuestro poder creador.

Pero esta liberación, nunca la alcanzaremos en la soledad y el


aislamiento, estos pueden ser importantes en momentos de
reflexión y de análisis de nuestro ser, pero el trabajo se hace en
conjunto, estamos irremediablemente unidos, todos estamos
llamados a ocupar un lugar en la construcción, nadie podrá ocupar
48
nuestro lugar.

La perfección de su piedra cúbica, que el Comp.·. verificará con


la escuadra que lleva en este viaje, hará a la perfección de la obra
final toda.

En este aspecto, otro de los sabios, que el Comp.·. consulta en


este viaje, tiene mucho que decirle. Newton, hombre de ciencia
Ingles, que se distinguió en el campo de las matemáticas y que
fue el creador del hoy llamado calculo diferencial, formulo la
teoría de la gravitación universal, que establece que todos los
cuerpos en el universo se encuentran atraídos entre sí por una
fuerza a la que llamo gravitatoria.

Esta fuerza que actúa en el macro-cosmos se pone también de


manifiesto en el micro-cosmos y así un átomo tiene una fuerza de
coherencia interna que hace que los electrones oscilen alrededor
del núcleo y ya sabemos que, cuando esta fuerza se rompe, se
libera una enorme cantidad de energía.

Cada uno de los órdenes de la Arquitectura por los que el Comp.·.


tránsito en el tercer viaje, es decir, el mineral, el vegetal, el
animal, el humano y el supra-humano, tiene su propia fuerza de
coherencia interna, fuerza que le confiere su identidad y hace que,
por ejemplo, una piedra no sea un vegetal, o un vegetal un animal.

Esta fuerza adquiere particulares formas de expresión dentro de


cada orden arquitectónico y genera así la diversidad de
manifestaciones dentro de cada orden.

Alquilen podrá argumentar, que hay hombres que se comportan


como animales y que lo animal prima en ellos, sin embargo, esto
49
puede ser cierto en el plano de la conducta, pero aun ese hombre
seguirá siendo en esencia un hombre, que no ha logrado hacer
aflorar los contenidos de su ser que lo identifican como tal.

Hay una fuerza de coherencia interna en cada plano de


manifestación, que la hace única.

Es como un gran telar cósmico en permanente evolución, en el


que cada ser dentro de su orden y cada orden en el conjunto, es
atraído en forma ascendente por la fuerza que emana del G.·. A.·.
D.·. U.·.

Así, hay seres en cada orden muy cercanos al orden que los
sucede y es posible en el plano de manifestación humano
trascender a su orden de Arquitectura y lograr ascender a un plano
de manifestación superior.

Esto se logra mediante la iniciación, la real iniciación a la que los


Masones aspiramos.

Así, el Comp.·. ve en Newton como todos los seres que


pertenecen a un orden están unidos por una fuerza que los hace
iguales entre sí.

Profundice el Comp.·. en el conocimiento de esa fuerza de


gravedad espiritual, así tendrá la posibilidad de dominarla y
transmutarla, elevando su nivel vibratorio, en una fuerza de orden
superior, más cercana a la fuerza que radica en el G.·. A.·. D.·.
U.·.

No es este el grado para profundizar en el estudio de esa fuerza,


solo diremos que existe y que es tarea del Comp.·. descubrirla en
50
sí mismo y en sus HH.·., pues, como dice el ritual en este viaje:
“este país de los hombres excepcionales está a nuestro alcance si
sabemos utilizar los instrumentos que la naturaleza ha puesto en
nosotros y los que el hombre ha construido.”

“Pues para realizar el sueño de fraternidad, igualdad y justicia,


debemos descubrir la belleza, el bien, el amor al trabajo en
nosotros mismos y en el ejemplo de quienes han alcanzado una
excepcional posición en la ciencia y en la virtud”.

Para poder aspirar a develar estos misterios el Comp.·. debe ser


puro, limpio de mente y corazón. A esta necesaria pureza deberá
complementarla con la imprescindible inmunidad ante la
contaminación espiritual proveniente de los sentimientos y
pensamientos egoístas que aún subsisten e intentan perpetuarse
en el mismo.

Estos sentimientos y pensamientos negativos le son así mismo


proyectados desde el exterior por aquellos que ven en la pureza
del iniciado, un peligro, pues esta pureza pone en tela de juicio la
forma de ser y actuar de los hijos de las tinieblas. Así el tentador,
asumirá mil formas y cual verdadera enfermedad espiritual,
intentará penetrar su fortaleza.

El Comp.·. deberá ponerse a cubierto y protegerse de estos


intentos y ¡que inspiradora le resultará la figura de Pasteur, en este
sentido!

Pasteur, químico y bacteriólogo francés, fue el padre de la


bacteriología y sus descubrimientos iniciaron la época de las
vacunas, entre las que descubrió la antirrábica, su teoría
microbiana es el fundamento de la antisepsia y de la asepsia, es
51
decir, del conjunto de procedimientos necesarios para impedir el
acceso de gérmenes nocivos al organismo.

Explore el Comp.·. los mecanismos que lo pongan a cubierto de


la contaminación producto de los gérmenes nocivos a su espíritu.

Identifique dichos gérmenes, aíslelos y obtenga la


correspondiente vacuna espiritual. El sabio Pasteur será
seguramente fuente de inspiración para lograr este objetivo.

El Comp.·. está culminando su cuarto viaje, pero antes de poder


aspirar a realizar el quinto en que logrará vislumbrar la Estrella
Flamígera y la Letra G, deberá prepararse, deberá profundizar en
su esencia y en la de cuanto lo rodea. Deberá intentar buscar la
propuesta a la pregunta que se hiciera en la cámara de reflexiones,
antes de ser recibido en el templo.

A la eterna pregunta de quién es, de donde viene y a donde se


dirige.

Ante este paso fundamental, el sabio Einstein viene en su ayuda.

Einstein, físico teórico alemán, anuncio la teoría especial y luego


la general de la relatividad y en su teoría del campo unificado,
busco incluir en una sola fórmula matemática las leyes
electromagnéticas y gravitatorias.

Demostró lo relativo de los conceptos comunes sobre tiempo y


espacio y fue un verdadero místico moderno.
En cierta oportunidad, dijo Einstein: “La más hermosa
experiencia que podemos gozar, es la percepción de lo
misterioso. Es esta la emoción fundamental que da origen y vida
52
a la verdadera ciencia. Quien no la conozca, o no pueda sentir
admiración o maravilloso asombro ante lo misterioso, podría
considerarse muerto”.

Exalte el Comp.·. su sentido de lo misterioso y descubra como


dentro de si se encuentran, no simples poderes aislados, sino
fuerzas integradoras de carácter universal, en acción.

¡Unifique sus potencias y vincúlelas con el cosmos!

Dicen los herméticos que como es arriba es abajo, que no hay


adentro y afuera, que lo objetivo y lo subjetivo son, en definitiva,
la misma cosa. Al lograr comunión con el cosmos, el Comp.·.
estará levantado el velo que lo separa de ese misterio inefable que
logrará entrever en su quinto viaje.

Llegará así el Comp.·. a gozar de un particular estado de


conciencia al que los iniciados han llamado “iluminación”. No
cabe duda que esta es la luz que nuestros HH.·. solicitaron para
nosotros el día de nuestra iniciación y que ahora al final de los
viajes del Comp.·. estamos próximos a alcanzar.

El Comp.·. ha concluido su cuarto viaje por el mundo de los


sabios, otros rituales colocan a modo de ejemplo otros nombres,
Solón, Sócrates, Licurgo, etc., consideramos que estas diferencias
no son importantes, pues lo que el Comp.·. ha aprendido a ver en
este viaje, es que todos los hombres son sabios en potencia y que,
en cada uno, aun en el más sencillo o en el más perverso, podrá
encontrar el mensaje que le permita continuar su camino en la
búsqueda de la palabra perdida, en la búsqueda de su verdadero
ser, en la búsqueda de la verdad.

53
CAPITULO VII

EL 5º VIAJE POR EL MUNDO DEL AMOR

Ha recorrido el Comp.·. grandes distancias, ha ascendido cuatro


gradas en el templo, se apresta ahora a realizar el 5º viaje, en el
cual resumirá, en profunda meditación el contenido de los cuatro
viajes anteriores.

Cada viaje realizado es un escalón que ha ascendido en su templo


interior, cada escalón representa una etapa del proceso por el cual,
se ha ido tornando un artesano de su propio destino y así un
artesano del destino de toda la humanidad.

Luego de iniciado, en el grado de Apr.·., su comportamiento fue


pasivo, se limitaba a reflejar las verdades que emanaban de otras
fuentes, el Apr.·. fue así luna y su peregrinar lo condujo por el
mundo de las sombras, buscándose a sí mismo.

Ahora el Comp.·., mediante el estudio sistemático de si, de las


artes y ciencias iniciáticas, de las diferentes órdenes de
manifestación de todo lo existente y del sabio contenido en cada
ser humano, se ha ido transformando el Sol. Ya es capaz de emitir
su propia luz, ya no refleja, crea. Se ha hecho dueño del fuego
sagrado y el nuevo Prometeo se dispone a ponerlo al servicio de
la humanidad.

El más grande es el que mejor sirve y el Comp.·. ha descubierto


que el mejor servicio es el cumplimiento del propio deber, en
armonía y equilibrio con su quinta-esencia ahora entrevista, con
el quinto orden de la Arquitectura que se sabe destinado a
construir. El Comp.·. ve ahora que la base de la igualdad con sus
54
HH.·. se fundamenta en su espíritu de trabajo y en su ánimo
fraterno. Siente el trabajo como una liberación, hasta el momento
trabajaba para subsistir, de ahora en más el sentido más profundo
de su vida estará en el trabajo, pues, como dice el ritual del Gr.·.:
“El trabajo no es rutina, ni estancamiento, ni adaptación pasiva
a la realización de actividades: es progreso, placer del esfuerzo,
facultad creadora del espíritu ”.

Así pues, el Comp.·. inicia su quinto viaje absorto en su nuevo


trabajo, meditando sobre todo lo nuevo que descubre en sí mismo
y en cuanto lo rodea, adaptando su vista y su oído a la
contemplación de la realidad, que en forma de bruma que al
amanecer comienza a elevarse, se va imponiendo al mundo de
ilusión, en el cual hasta este momento había vivido.

Ya no hay reglas externas, estas reglas, que hasta este momento


pudieron serle de utilidad para guiar su comportamiento, se le
muestran ahora como ramas y hojas secas, ya nada le dicen, ahora
su guía es la luz de su interior que resplandece, comienza a
construir su moral de iniciado, se siente un instrumento afinado,
capaz de interpretar con sublime belleza, la sinfonía cósmica de
la cual es vehículo y expresión, se torna un fluido canal por el
cual el verbo se expresa y emana, siendo su mente y su corazón,
los pilares del nuevo templo.

Se descubre ahora Comp.·., es decir, sabe que su suerte no se


juega sola, sino que está indisolublemente unida a la suerte de
todos los hombres.

Hablar de Comp.·. es hablar en plural, es hablar de una categoría


de iguales, la figura del Comp.·. no puede existir aislada.

55
Dice el H.·. Lavagnini: “La piedra cubica, o sea la individualidad
justamente desarrollada en todas sus caras, no es lo que
precisamente se necesita para el edificio social; una piedra de
ese género constituye la excepción y seria condenada al
aislamiento por no poder aprovecharse en unión con las demás”.

Es claro, por lo tanto, que se precisa de muchas piedras cubicas


para poder realizar la construcción del quinto orden de la
Arquitectura. En este viaje, el Comp.·. llega a la clara e inevitable
conclusión de que solo en unión con sus iguales podrá efectivizar
la construcción de la gran obra, la que una sociedad de hombres
libres, justos y fraternos.

Este quinto y último viaje antecede a la exaltación del Comp.·.,


es la antesala de su definitiva transformación en Maestro de su
propio destino, de ahí que abandone las herramientas que lo
habían acompañado en los cuatro viajes anteriores.

Ahora todo depende de sí mismo, en terreno ha sido abonado, la


espiga fructifica, ha vislumbrado el gran orden universal y el
lugar que la humanidad ocupa en este y ha visto por fin, el sitial
que está llamado a ocupar.

Por eso viaja ahora con las manos vacías, pero con el corazón y
la mente, que ahora se entrelazan, rebosantes de amor y ansias de
dar el paso definitivo, de convertirse en Maestro, en el genio
creador, capaz de guiar junto a sus HH.·., a toda la humanidad
hacia la tierra prometida, tierra que presiente y que al culminar
este viaje vera ante sí.

El Comp.·. se convierte así, en este proceso y al culminar su


quinto viaje, en un símbolo vivo. Símbolo de la nueva humanidad,
56
símbolo del amor encarnado, símbolo en definitiva de la
transmutación real y de la sabiduría que alcanzara quien logre
superar la última prueba.

El profano muere el día de su iniciación como masón, pero esta


muerte simbólica prefigura otra muerte hacia la cual el Comp.·.
se encamina en este viaje. Ocho viajes han realizado el neófito,
tres como Apr.·. y cinco como Comp.·., para llegar al número
nueve, al definitivo viaje, que lo conduzca a su exaltación a la
maestría que debe templar su ánimo y estar dispuesto a todo.

Debe estar dispuesto a dar un salto en el vacío, salto luego del


cual ya no hay retorno.

Dar un salto que lo conducirá al abismo y ahora si morir para que


su semilla fecunde el surco y renazca en otro nivel de conciencia,
renaciendo así en él, el espíritu de la masonería.

Para lograrlo, deberá el Comp.·. en este viaje, terminar de quemar


en su interior todo egoísmo, todo vicio, toda mentira.

En los cinco viajes el Comp.·. ha luchado por adquirir


conocimiento iniciático, ha luchado por vencer a la ignorancia,
que hace de los seres humanos esclavos de un destino ciego, ha
luchado por obtener su libertad buscando conocer las causas de
cuanto se manifiesta a su vista y proyectarse a un plano superior
de conciencia que le permita superar el dualismo de lo
fenoménico para lograr así el señorío sobre todo lo creado.

Al culminar este viaje el Comp.·. ya no podrá mentirse a sí


mismo, ya no podrá aceptar ninguna traición a la verdad, la
falsedad será su enemiga irreductible, pues sabe que si flaquea se
57
precipitará sin remedio y retrocederá mucho más atrás del punto
evolutivo en el que se encontraba cuando llego a las puertas del
templo. Solicitando la Luz. Habiendo sacrificado su ego, su única
ambición futura será servir desinteresadamente y sin pausa en la
construcción del gran templo a la que el G.·. A.·. D.·. U.·. nos
convoca.

Sobre todo, esto reflexiona el Comp.·. en este último viaje y lo


hace en el más completo silencio sin auxilios exteriores,
retrocediendo a lo más profundo de su ser, mirándose en su espejo
interior y reconociéndose, quizás por primera vez, en su inmensa
soledad, sin máscaras, rescatando en sí mismo la belleza hace
tanto tiempo perdida. Le asusta el paso trascendente que debe dar,
pero el destino grandioso que presiente lo anima al culminar el
viaje, y ya falta poco, se verá en la estrella flamígera, se convertirá
en ella o nunca podrá aspirar a integrar el quinto orden de los
iniciados.

¡Que inefables misterios se le presentan!

Lo invade una emoción profunda, una emoción superior, estética,


la belleza lo subyuga, la fuerza dominada en los viajes anteriores
lo impulsa a concluir, la sabiduría es su puerto y se siente capaz
de alcanzarla.

El H.·. experto le señala la Estrella Flamígera y la letra G, su viaje


a concluido.

58
CAPITULO VIII

LA ESTRELLA FLAMÍGERA Y LA LETRA G

Al concluir el quinto viaje, el Comp.·. se ve enfrentado al símbolo


por excelencia de su grado: la Estrella Flamígera y la Letra G.

Y así debe ser, pues solo al final de sus viajes está en condiciones
el Comp.·. de penetrar en las profundidades de este símbolo.

Reflexionando sobre cada uno de los viajes que ha realizado el


Comp.·. encontrará el sentido simbólico, el mensaje oculto que el
símbolo busco comunicarle.

En cada viaje, sin saberlo, el Comp.·. ha estado en contacto con


la estrella y la letra G, pero solo al terminarlos le es dado
descubrirlas en toda plenitud.

Así, en el primer viaje por el mundo de los sentidos del alma la


estrella de cinco puntas alude al hombre, en la plenitud de sus
capacidades creadores, desplegadas. El Comp.·. ha trabajado en
este primer viaje buscando despertar y educar las potencias de su
espíritu, así el proceso de purificación interior, objeto de este
viaje, culmina con la generación o génesis del nuevo ser, el
Comp.·. busca germinar, es decir, ser el principio de un nuevo ser
espiritual y la letra G, inscripta en la estrella le está comunicando
ese destino.

En el segundo viaje por el mundo de las artes liberales, el símbolo


asume un nuevo significado. Aquí la estrella flamígera es símbolo
de la luz del conocimiento iniciático que el Comp.·. aspira poseer,
mediante el estudio de las artes y ciencias del alma. Es en este
59
contexto que la Letra G simboliza esta gnosis hacia la cual el
Comp.·. se encamina con paso firme.

Pero para alcanza esta gnosis el Comp.·. debió transitar por el


mundo de las artes liberales y ya vimos que estas se agrupaban en
dos categorías. En la primera de ellas, llamada Trívium había un
arte que se encontraba en la base del desarrollo del espíritu
humano y era la gramática, arte a la cual la Legra G hace
referencia en este viaje, pues la gramática es la que le permite al
Comp.·. ser el Arquitecto de su mundo interior, dando orden y
sentido a todo cuanto ha descubierto dentro de sí.

En la segunda categoría de las artes liberales, llamada


Cuadrivium, había un arte que está en la base del estudio del
mundo fenoménico. Este arte es la geometría, a la cual también
hace referencia la Letra G en este segundo viaje.

Aquí, la geometría le enseña la llave de interpretación de cuanto


se manifiesta a través de las formas y aprendiendo a generar
nuevas formas. El Comp.·. se torna Arquitecto del Universo.
Llega así en el segundo viaje, de la mano de la gramática y de la
geometría a la gnosis iniciática y se apresta a dar un paso
trascendente en su evolución. Para lo cual debe realizar el tercer
viaje, por el mundo de los órdenes de la Arquitectura.

Ha llegado el Comp.·. a dominar el conocimiento de las


relaciones y medidas de sí mismo y de cuanto lo rodea.

Parte ahora en la búsqueda de los orígenes, va en busca del mundo


de las causas para lo cual inicia el estudio del universo y de lo
creado, representado en los órdenes Arquitectónicos.

60
La Estrella Flamígera le recuerda que, dado el proceso de
desarrollo del universo, hasta el último átomo de su cuerpo,
estuvo en un tiempo dentro de una estrella, cada estrella es un
horno nuclear en el cual se introduce la materia liberando un poco
de la energía que heredo de la primera bola de fuego. Por otro
lado, las estrellas han sido y siguen siendo los astros que
posibilitan la vida. En este sentido, los primitivos adoraban al sol,
en el que reconocían a un padre y protector.

Es el movimiento de la tierra alrededor del sol, el que produce las


estaciones y los cambios cíclicos sobre el planeta.

La luz y el calor del sol, produce efectos sorprendentes sobre los


distintos órdenes de Arquitectura. Sobre el orden mineral produce
la temperatura necesaria para que los hielos eternos dejen de
serlo, crea así las aguas, que sin él no existiría, y produce las
condiciones necesarias para la aparición de la vida. En el orden
vegetal, al absorber la clorofila, la luz solar, le proporciona a las
plantas la energía necesaria para elaborar por síntesis, productos
orgánicos indispensables para el desarrollo de sus actividades
vitales, garantizando así la supervivencia del resto de los órdenes
Arquitectónicos.

Pero para profundizar en el simbolismo de la Letra G, en este


tercer viaje, deberá el Comp.·. escudriñar sobre las características
de todo lo creado. La física moderna puede serle de gran ayuda al
comienzo de su camino.

Dice la física que las partículas sub-atómicas y las cuatro fuerzas


que actúan sobre ellas son los responsables de todos los
acontecimientos en el universo.

61
¿Cuáles son estas cuatro fuerzas que gobiernan la manifestación
material?

Son por su orden:

• La fuerza electro-magnética.

• La fuerza nuclear débil.

• La fuerza nuclear fuerte.

• La fuerza de gravedad.

Veamos que gobierna cada una de ellas.

Los sólidos son en su mayor parte espacio vacío, su solidez es una


ilusión creada por el campo de fuerza electro- magnético que
mantiene unidos sus átomos. Infinito en su alcance es el electro-
magnetismo el que nos trae la luz del sol y las estrellas. La fuerza
nuclear débil ayuda a potenciar el sol y preside el fenómeno de la
desintegración nuclear.

En el núcleo de cada átomo se encuentran almacenadas


cantidades enormes de energía. Algunos núcleos son inestables y
no pueden retener su energía eternamente, cuando se desintegran
es la fuerza débil, que portan las partículas llamadas bosones
débiles la que gobierna el proceso.

La tercera fuerza, llamada fuerza nuclear fuerte, es la que une los


Quarks para formar protones y neutrones. Sin ella no habría
átomos y el universo sería una confusión. Esta fuerza une los

62
Quarks en triadas o grupos de tres, para dar nacimiento a un
protón o a un electrón. Vemos aquí como la ley del triángulo está
en la base de la creación de la materia. La fuerza nuclear fuerte es
portada por partículas llamadas gluques y actúan como el
pegamento más perfecto imaginable.

La gravedad, la fuerza de atracción universal de todas las


partículas entre sí, es la más débil de las cuatro fuerzas, tiene un
alcance infinito y siempre atrae, nunca repele. Es esta fuerza la
que mantiene el equilibrio entre los planetas, las estrellas y las
galaxias.

Pero, ¿Por qué hay cuatro fuerzas? ¿Por qué difieren tan
profundamente de la naturaleza?

Einstein intento encontrar respuesta a estas preguntas. El busco lo


que llamo una imagen simplificada y lucida del mundo, un
principio simple que explicara las incomprensibles diferencias
entre las fuerzas y la gran variedad de partículas.

Lo que realmente me interesa, dijo en una oportunidad, es si dios


tuvo alguna alternativa en la creación del universo. Dios es sutil,
pero no malicioso, esa naturaleza común, aunque difícil de
comprender debe ser su raíz, en su fondo, simple y hermosa.
Einstein fracaso en su intento, pero la física continuó su búsqueda
y ha podido establecer que el comportamiento de las cuatro
fuerzas es más uniforme a niveles de energía extremadamente
altos.

Así se pudo demostrar hace algunos años, que el electro-


magnetismo y la fuerza nuclear débil a muy altas temperaturas se
convierten en una sola fuerza, la fuerza electro-débil que es
63
portada por las partículas Z.

Las teorías generales unitarias de la física postulan que a mayores


niveles de anergia tres de las cuatro fuerzas funcionarían como
una sola fuerza.

¿Podrían aun a niveles mayores de energía, las cuatro fuerzas


unificarse en una?

Para responder a esta pregunta, debemos remontarnos a los


orígenes del universo.

Sabemos que el universo está en expansión, Hubble lo descubrió


en 1929 confirmando el pronóstico emanado de la teoría general
de la relatividad publicado en 1915.

El universo comenzó su expansión hace 15.000 millones de años,


a este acontecimiento se lo conoce como el Big-Bang, la gran
explosión. Retrocedamos en el tiempo y veamos cómo se
desarrollaron los acontecimientos.

Cosas muy importantes sucedieron en el primer segundo del


tiempo.

La luz se hizo cuando el universo tenía un millón de años de edad.


En ese momento la densidad del universo había disminuido lo
suficiente como para que los fotones pudieran volar libremente a
través del espacio sin chocar continuamente con otras partículas,
el resultado fue el nacimiento de la luz. Esta fue también la fecha
del nacimiento de los primeros átomos. Libres al fin del acoso de
los fotones, los electrones pudieron entrar en órbita alrededor de
los núcleos atómicos. La creación de los núcleos de helio data de
64
cuando el universo tenía 100 segundos de vida, este fue el primer
momento en el cual las cosas se habían enfriado lo suficiente
como para que los protones y neutrones pudieran unirse para
formar núcleos de átomos que no fueran destruidos
constantemente por el omnipresente calor.

Cuando el universo tenía solo 1 segundo, el calor era tan intenso


que vencía inclusive a la fuerza nuclear fuerte, o sea a la fuerza
que mantiene unidos a los Quarks para formar protones y
electrones. Una centésima de segundo después del inicio de los
tiempos, el universo era tan denso que incluso los neutrinos
(partículas sub-atómicas que pueden atravesar un bloque de
plomo solido de un billón de kits sin tropezar con nada) están
contenidos en un caldo universal de materia y energía.

Unas diez mil millonésimas de segundo después del principio, el


calor era tan intenso como para que la fuerza electro- magnética
y la nuclear débil estuvieran unidas y funcionaran como una
fuerza, la electro-débil.

Cuando el universo tenía 10 -35 segundos de edad, se cree que la


fuerza electro-débil no estaba separada de la fuerza nuclear fuerte,
las partículas X y los Quarks surcaban los mares sub-nucleares.

Así, solo dos fuerzas operaban en el universo más primitivo: la


fuerza de gravedad y la fuerza electro nuclear o fuerza general
unificada.

Cuando el universo tenía 10-43 segundos de edad, estaba


contenido en una simple chispa de rápida expansión, más pequeña
que el núcleo de un átomo y gobernada por una sencilla ley
primordial. Primaba una única fuerza a la que se ha dado en
65
llamar: Gravedad Cuántica, esta fuerza unifica a las cuatro
responsables de cuanto existe en el universo.

Esta fuerza es imposible de alcanzar en el estado actual de


desarrollo del universo, pero entendemos que en este tercer viaje
la letra G la representa y será el estímulo que impulse al Comp.·.
a buscar en su interior la fuerza de gravedad cuántica que le
permita trascender en el mundo de las Arquitecturas manifestadas
para llegar a las alas del espíritu al mundo de las realidades,
logrando así la unificación de su ser, la superación del dualismo,
el elevamiento espiral que lo conduzca a su quinta esencia, a su
quinto orden Arquitectónico, meta que solo podrá alcanzar si
domina la fuerza de gravedad cuántica de su espíritu.

Ahora sí, el Comp.·. está en condiciones de continuar su camino


y emprender el 4º viaje por el mundo de los sabios. Se ha
remontado a los orígenes y ahora la estrella será el símbolo de la
sabiduría y del equilibrio. La ciencia y ano puede retroceder más,
más allá del primer estallido solo existe el silencio y el Comp.·.
se pregunta:

¿Por qué hay algo en lugar de nada?

La letra G viene en su auxilio y enciende su genio, ahora puede


ver más allá y comienza a recibir mensajes provenientes del genio
humano.

Los antiguos chinos concibieron al ser como surgido de su


opuesto, el no ser. La nada, escribieron, produjo el universo y el
espacio y el tiempo. Los mitos pre-históricos pintaron el génesis
en términos biológicos, el dios primitivo se transformó en un
huevo celeste.
66
En la tradición Judeo-cristiana la creación implicaba el orden
surgiendo del caos, la luz de la oscuridad.

“En el principio dios creo el cielo y la tierra y la tierra era


informe y vacía y las tinieblas cubrían la faz del abismo y el
espíritu de dios se movía sobre la faz de las aguas y dijo dios:
Hágase la Luz”

Los masones que en la edad media construyeron las catedrales,


construyeron el equivalente a un gran acelerador de partículas.

Nuestros HH.·. constructores de catedrales las hicieron para


expresar ideas, las ideas pueden atravesar el universo y fundirse
con la idea primigenia que dio origen a todo.

Las catedrales fueron alcanzando impresionantes alturas, los


aceleradores de partículas, nieles de energía sin precedentes.
Ambos encaran la última expresión del genio del Comp.·. siempre
elevándose y conectándose con las fuerzas originales y con el
espíritu creador.

Así, al decir de Timothy Ferris: “El universo comienza en un


estado de perfecta simetría. Al perderse esta simetría, al
expandirse el universo, determina que vivamos en un universo de
simetrías rotas”.

La simetría perfecta puede ser bella, pero también estéril, un


espacio simétricamente perfecto significa la nada, en cuanto se
introduce un objeto en ese espacio, se rompe la simetría, creando
el sentido de ubicación. Hay un lugar donde está el objeto y otro
donde no está y a partir de ahí, se nos revela toda la geometría del
67
espacio tal como la conocemos. Tiempo simétricamente perfecto
significa que nada puede suceder. En el momento en que tenemos
un suceso, se rompe la simetría y el tiempo comienza a fluir en
una dirección determinada.

Vivimos en un universo en el que abundan los objetos y los


sucesos, lo que significa que las simetrías en el universo en que
vivimos están rotas.

Así, le debemos el origen del universo a la rotura de la simetría


absoluta, del vacío absoluto. Reflexionemos si el mito del paraíso
perdido no hace referencia a ese hecho.

El universo comenzó como una única partícula, esta idea no viola


ninguna de las leyes físicas conocidas.

El universo se expandía y enfriaba las tinieblas. Descendían,


entonces nace la luz con la formación de las primeras estrellas.

Gracias a las simetrías rotas, que provocaron las diferencias entre


las partículas y las fuerzas, los átomos pudieron unirse formando
las moléculas y las moléculas se unen para formar la vida y la
vida da paso al pensamiento y este al genio, quinta esencia de la
humanidad. Nuestros pensamientos y sentimientos son parte del
universo, la historia del universo es también nuestra historia.

Así llega el Comp.·. a su quinto y último viaje en el que la estrella


asume el símbolo del ideal espiritual y de amor que dará sentido
último al peregrinar del Comp.·..

Y aquí la legra G no puede sino representar al supremo poder


creador, al logos inefable, a Dios. God para los anglosajones, G.·.
68
A.·. D.·. U.·. para los masones.

Tal como dice el ritual de 1er Gr.·. para algunos será una fuerza
natural o una sustancia, para otros una entidad, pero que viene a
resumir el contenido de todos los viajes anteriores y que se abre
como una interrogante viva en el corazón de cada Comp.·.

Queda así liberada la capacidad de cada H.·. para buscar la


verdad, la estrella flamígera y la Letra G se han instalado en su
mente y corazón, ahora si está dispuesto para dar el último paso.

Esta el Comp.·. a las puertas de la cámara del medio, golpea a ella


en su interior.

Sus HH.·. Maestros lo esperan.

69
CAPITULO IX

EL SIGNO DEL COMP.·.

El signo que realizamos en cada Gr.·. del simbolismo encierra


profundos mensajes vinculados a los trabajos que el obrero está
llamado a ejecutar.

El signo se transforma así en la síntesis y recuerda al iniciado su


promesa o juramento.

En particular, el signo del Gr.·. de Comp.·. es el único signo


compuesto y despierta en nuestro interior resonancias muy ricas
y profundas.

A diferencia del signo del Apr.·. que se carta y descarga con un


solo brazo, el signo del Comp.·. utiliza ambos brazos.

Abordaremos nuestro viaje en la búsqueda del mensaje velado en


este signo, en dos etapas.

La primera intentara desentrañar los mensajes del signo cargado,


es decir, cuando el Comp.·. se pone al orden.

La segunda se referirá a la descarga del signo. Comenzando


nuestra jornada por el mundo de este signo y desde que poseemos
la convicción de que hace referencia a la esencia de lo que ha de
ser el trabajo del Comp.·., arribamos a una primera estación que
nos habla de los logros del Apr.·., del camino realizado por este
y de los desafíos que se apresta a enfrentar.

El Apr.·. ha descendido a lo más profundo de su ser, en este viaje


70
a los infiernos ha buscado hacer aflorar del caos la piedra bruta
de su individualidad y cuanto más haya descendió el Apr.·. en su
búsqueda, más puro será el material del que dispondrá para el
paso siguiente. Como Comp.·. enfrenta la tarea de su auto-
construcción, para culminar con la obra menor y poder abordar
luego el arte real en su magnífica y universal dimensión
culminando en la ejecución de la obra mayor a que como maestro
masón estará llamado cuando llegue su hora.

Respecto a esta etapa cumplida por el Apr.·. y a la nueva tarea


que deberá abordar como Comp.·. nos dice el H.·. O. Wirth: “No
basta profundizar. Triste sabiduría la que consiste en retraerse
en sí mismo y desentenderse del mundo externo. La inmersión en
las tinieblas en donde se desvanecen las apariencias no es en sí
una meta: es tan solo una etapa del itinerario que viene obligado
a seguir el iniciado, si bajamos es para subir otra vez y el nivel
que podemos alcanzar a la subida depende justamente de las
profundidades que supimos sondear. Si fuera posible hundirnos
hasta el mismo fondo del abismo infernal, a buen seguro que
podríamos llegar de rebote hasta el mismo cielo, pues la fuerza
ascensional está en razón directa de la intensidad de la caída del
espíritu superficial, no sabe bajar ni subir: pegado al suelo ha de
seguir sus ondulaciones sin poder llegar a las concepciones
profundas ni abrazar amplios horizontes. Por otra parte, el
infierno no es en iniciación, otra cosa que el camino del cielo.

Quien ha sondeado la nada descubre allí mismo el todo. Cuando


bajando hasta el mismo fondo del abismo de nuestra
personalidad, llegamos a descubrir en ella la personalidad que
actúa en el universo, entonces somos capaces de colocarnos por
encima de todas las contingencias para considerar las cosas
desde un punto de vista diferente.
71
Podemos aspirar a lo sublime y escapar por un momento de los
vínculos de la materia. Pero nuestro campo de acción es la tierra
y a ella debemos volver.

Para llegar a ser dueño de sí mismo, es del todo indispensable


apartar la atención del mundo externo, para internarse en la
noche de la personalidad verdadera, luego, después de haberse
encerrado en sí mismo, hay que salir otra vez por medio de la
sublimación iniciática. Además, no estamos destinados a vivir ni
en nuestro fuero interno ni tampoco fuera de nosotros mismos,
una tarea nos espera en este mundo objetivo, del que somos parte
integrante y, por lo tanto, no puede ser cuestión de sumirnos en
una vida meramente interna y, por lo mismo, absolutamente
estéril. Gracias a su descenso, el candidato ha echado raíces en
las profundidades de su ser, su fuerza activa le estimula
poderosamente y le infunde la indomable energía de los ciclopes,
luego, sin romper sus vínculos infernales, sumamente elásticos y
extensibles, emprende la subida y va a arrebatar el fuego del
cielo, capacitándose para poder aplicar al trabajo las
potencialidades tanto superiores como inferiores. En esta unión
interna de los dos extremos estriba su poder de iniciado”.

Descubrir e integrar en un todo el microcosmos (su propio ser


interior) y el macrocosmos (el universo) es la tarea del Comp.·. y
por ello recurre al estudio de las ciencias y las artes iniciáticas.

Arribamos así, a una segunda estación en nuestro viaje, en la que


se nos permite vislumbrar el sentido del signo de Comp.·..

Como Apr.·. ha descubierto que en el mismo están latentes las


fuerzas que habrán de redimirlo, pero como Comp.·. sabe que
72
estas fuerzas se vinculan a todos los hombres y a todo lo
manifestado en el cosmos y que nadie puede salvarse solo.

Su mano izquierda, en escuadra, es un claro símbolo de este


puente que debe tender el Comp.·. para lograr la unidad, puente
que unirá el consiente con el inconsciente. El sujeto con el objeto,
el microcosmos con el macrocosmos.

El símbolo se completa al observar la mano derecha, también en


escuadra, en forma de garra aprisionando el corazón del Comp.·.,
considerando la cámara secreta de nuestra espiritualidad, la
cámara de lo más puro y sublime en el hombre, la cámara del
amor.

El signo se nos presenta así en su prístina pureza, el Comp.·.


ofrece lo más puro de si, y recibe a su vez la fuerza necesaria para
completar la obra.

Dad y Recibiréis, la fuerza radica en ti y en el G.·. A.·. D.·. U.·.,


establece el puente y serás uno, como es arriba es abajo, esto y
mucho más nos dice el magnífico signo del Comp.·..

La forma de garra que asumen las manos del Comp.·. nos habla
del dominio que el Comp.·. ejerce sobre su primer centro
psíquico, asiento de lo intuitivo, lo pasional y lo emocional y del
trabajo que viene realizando sobre su segundo centro psíquico,
asiento de lo conceptual al tender el puente entre ambos centros
psíquicos. El Comp.·. domina el mundo de los conceptos, los que
unidos al mundo de las sensaciones, percepciones y emociones le
proporcionan una cabal conciencia de sí. Es por esto que en el
Gr.·. la Escuadra y el Compas se entrelazan.

73
El Comp.·. agarra, es decir, domina, integra, atrae hacia sí,
asimila. En el lenguaje de los alquimistas diríamos que transmuta,
nada se pierde, todo es aprovechable, pues busca re-unir, busca el
matrimonio de los opuestos.

Respecto al signo nos dice el H.·. O. Wirth: “Después de sufrir


la purificación por el fuego, el Apr.·. asciende a Comp.·.. El fuego
interno diabólico ha atravesado su prisión corporal, que
abandona, para unirse al fuego externo celeste. En este momento
se produce en el corazón del adepto un atractivo vacío, su mano
derecha se crispa sobre su pecho, mientras la izquierda dirige un
llamamiento a las energías que quiere recuperar su gesto es
elocuente y equivale a la más ardiente plegaria; no dejara de ser
atendida si su actitud es verdadera y traduce unas disposiciones
mentales adecuadas y sinceras”. “El buen obrero y perfecto
Comp.·. dispone para su trabajo de una energía que no es tan
solo la suya propia, después de modificar su naturaleza por las
purificaciones sufridas, ha podido acercarse a la Col.·., cuyo
contacto confiere la Fuerza”.

“Ojalá se vaya gradualmente ensanchando el reducido círculo


de los verdaderos iniciados para que la fuerza misteriosa,
acumulada por estos agentes de buena voluntad, tenga por fin
intervención en los asuntos de la humanidad y nos encamine
hacia nuestro ideal Masónico: el templo universal de paz y de
armonía”.

Respecto al signo de Comp.·. hay autores que dan otras


interpretaciones, en particular nos dice el H.·. Dalmonte: “La
parte (del signo) que se da con la mano izquierda se llama de
paso o saludo, y según los textos rituálicos se originó cuando
Josué peleaba las batallas del señor y oraba en esta posición a
74
fin de detener el sol y de esa manera disponer del tiempo
necesario para vencer a los enemigos del reino. El Comp.·. vive
acuciado por la presión del tiempo, porque la tarea es mucha, los
obreros pocos y el tiempo es breve”.

Sin embargo, el tiempo no es breve para el iniciado que ha sabido


descubrir lo relativo del tiempo y el espacio y el Comp.·. ha
dedicado sus viajes justamente a escapar de la ilusión y no vivir
acuciado por la necesidad.

El Comp.·. no necesita detener el tiempo sino más bien


trascenderlo pues solo así alcanzara la Maestría.

También respecto al signo nos dice el H.·. Lavagnini: “La


escuadra y la estrella (símbolos de sus dos últimos viajes) se
hallan aquí perfectamente combinadas: la escuadra hecha con la
mano derecha, ha descendido hasta el corazón, indicando así que
el Comp.·. no se limita a frenar y rectificar sus expresiones
exteriores, sino que su capacidad de dominarse se ha extendido
a los movimientos interiores del alma, en el mismo centro de su
vida, de su ser y de su individualidad. Y la mano Izquierda,
abierta y levantada, forma aquel pentagrama que los ocultistas
consideran como el símbolo del poder, del dominio de la
quintaescencia sobre la tétrada de los elementos, de la
inteligencia sobre los instintos y las tendencias inferiores”.

Dice nuestro ritual que la mano izquierda, cuando el Comp.·. está


al orden, está abierta en garra a la altura de la cabeza, por lo que
interpretar en la garra el símbolo del poder y la estrella es, en
nuestro concepto un exceso o el fruto de un desarrollo
excesivamente intelectual.

75
El dominio de los instintos no proviene del exterior, ya que todo
el trabajo del Apr ha estado encaminado a extraer de sí mismo las
fuerzas del ánimo que lo conviertan en dueño de sí. La
quintaescencia la descubre el Comp.·. en su corazón, no en el
macrocosmos.

Consideramos suficiente el camino recorrido en nuestra primera


etapa, quedara para la reflexión del Comp.·. la internalización y
vivencia del signo.

Culminaremos nuestro viaje, cubriendo su segunda etapa:


Referida a la descarga del signo.

En una primera aproximación, todos los autores que se han


referido a la forma en que se descarga el signo del Comp.·.
coinciden en su carácter penal, es decir, el Comp.·. manifiesta así
estar dispuesto a sufrir la pena en que incurren los CComp.·.
perjuros.

Pero ¿Cuál es esta pena?

En sentido literal no sería otra que permitir que se le arranque el


corazón y algunos agregan: que este corazón sea echado a los
buitres. Sin duda el Comp.·. que traiciona su juramento está
dejando de lado y arrojando a lo más bajo lo más puro de su ser,
se traiciona a sí mismo en el punto justo en el que de persistir en
su esfuerzo alcanzara la Maestría.

Se transforma en un mal Comp.·. y bien sabemos el daño que los


malos CComp.·. pueden ocasionar. Pero nos preguntamos si el
símbolo encerrado en la forma de desarmar el signo es solo penal.
Pensamos que no, que hay otras dimensiones en las que
76
analizarlo.

En primer lugar, el signo se desarma siguiendo un preciso ritual,


conservando los ángulos rectos sin abandonar el Comp.·. la
escuadra.

Es que, por el signo, el Comp.·. se ha reconcentrado en sí mismo


y ha tendido el puente hacia lo desconocido, ha solicitado la
fuerza realizadora, el poder creador, pues al decir del H.·. Wirth:
“La sabiduría que concibe quedaría estéril sin la fuerza que
ejecuta, esta última realiza en acto el ideal hasta ahora en
potencia, para emplear el formulismo acostumbrado de los
hermetistas ”.

Pero una vez que se ha invocado, que se ha llamado, le


corresponde al Comp.·. volver al mundo de la acción, relegar al
olvido su pedido seguro de que este seguirá actuando en otra
dimensión de su conciencia y que oportunamente se manifestará
en obras concretas de amor, paz y armonía.

El masón es un luchador de las causas justas del Hombre, el


Comp.·. al desarmar el signo se pone al orden del combate que le
espera, pues la construcción de la gran obra continua y el Comp.·.
se sabe unido a la cadena universal de todos sus hermanos, los
que, desde el valle o desde el O.·. E.·., vibran en espíritu de amor
y de servicio a la humanidad.

77
CAPITULO X

LA MARCHA DEL COMP.·.

El Comp.·. está en la búsqueda de sí mismo. Ha recorrido un largo


Camino.

Como Apr.·. busco hacer aflorar de la cantera del espíritu, las


reservas más puras de su alma.

Venia del mundo profano, en este no era más que un autómata,


que un esclavo de instintos, emociones y pensamientos sin
control, no era dueño de sí.

Al ser iniciado en el primer grado comenzó su transformación. Su


vida, carente de dimensiones alcanzo la 1ª dimensión, domino la
línea recta y supo medirla. La marcha del Apr.·. así lo indica.

¿Pero, cual es esta primera dimensión que ha dominado? ¿en que


lo diferencia de su anterior estado? La primera dimensión de la
que hablamos, es la primera dimensión de la conciencia.

En esta primera dimensión el Apr.·. descubre que es posible el


orden en el caos aparente. Como en sueños percibe la latencia de
sus potencialidades, de su conciencia de sí.

Habiendo realizado este logro, el Apr.·. es colado a Comp.·. y por


el dominio de las artes y ciencias iniciáticas es llamado a dominar
la segunda dimensión, abandona la línea y domina el plano. La
marcha del Comp.·. así lo indica. Es ahora dueño del espacio Bi-
dimensional de su conciencia.
En esta segunda dimensión aún se mantiene el silencio, pues la
78
palabra, el logos, aun es germinal, la palabra de paso “SH.·. ” así
se lo marca.

Es el momento de redoblar el trabajo y buscar dentro de sí. Ya ha


abandonado los metales, al hombre natural o profano esclavo y
víctima de la ilusión.

Como Comp.·. busca una realidad distinta de la ilusión, y su


conciencia, expandida a la segunda dimensión, le dice:

“Como Apr.·. fuiste iniciado surgiendo de una cámara


mortuoria”

“Como Comp.·. debes prepararte para la muerte ” “la muerte es


el inicio de un nuevo ciclo de vida ”

“La muerte es el inicio de un nuevo ciclo de vida ”

“La muerte no debe sorprenderte ”, “busca más bien en ella a


un aliado ”

“La muerte será tu palanca”.

“La palanca es una herramienta que te permite adquirir la


conciencia de los resultados de tus pensamientos, sentimientos y
acciones”.

Habiendo llegado a este estado, el Comp.·. es capaz de comenzar


su lenta ascensión en el espacio, es capaz de ascender por la
escalera de caracol y dominar la tercera dimensión de la
conciencia.
Habiendo logrado elevarse sobre sí mismo y por el conocimiento,
79
golpea en la cámara del medio, buscando abrir su conciencia a la
tercera dimensión. De aquí en más la evolución ulterior solo
podrá ser consiente.

Pero detengámonos, ya habrá tiempo de trabajar en esta cámara


sublime, ahora debemos afianzar lo conquistado.

Reflexionemos, que cada pensamiento, acontecimiento, sea una


oportunidad de vernos, de descubrirnos, de averiguar quiénes
somos.

De superar, mediante esta alquímica transformación de nuestra


conciencia, al dualismo omnipresente en todas las
manifestaciones del mundo fenoménico.

El dualismo es el principal ídolo del que tenemos que liberarnos


para lograr un estado superior de conciencia, reconocer la unidad
de los opuestos es vencer la ilusión.

Materia y espíritu no son sino manifestaciones de un mismo


principio, el bien y el mal, el odio y el amor no son sino los polos
en los que un mismo principio se manifiesta.

Objeto y sujeto, lo exterior y lo interior participan de la misma


esencia o, mejor dicho, de la misma quinta esencia que la estrella
flamígera simboliza.

Por eso el Comp.·. busca esta quintaesencia por sobre los cuatro
planos de la manifestación y solo la alcanza elevándose en su
interior, luego de haber descendido a los infiernos, a ese bullente
caldero de la personalidad, terreno de permanentes batallas, en
donde no hay silencio ni descanso y habiéndola vencido,
80
habiendo ignorado al ego, reafirma su individualidad la esencia
de su raza. Es uno con todos y son todos en uno, ha realizado la
incorporación intima de la Letra “G ” a su conciencia.

Pero si el Comp.·. cree que ha vencido, está equivocado, la


verdadera lucha recién se avecina, pero ha adquirido el derecho a
librarla y va bien armado pues siendo dueño de la esperanza, está
en magníficas condiciones, con la ayuda fraterna de sus HH.·., de
conquistar el amor.

HH.·. CComp.·., aspiro a que no oigan mi voz, sino que esta,


despierte resonancias internas, de tal forma, que cada uno se oiga
a sí mismo. Esta es la mayor libertad a la que podemos aspirar.

¡Que así sea!

81
CAPITULO XI

LA PALABRA DE PASO DEL COMP.·. , S.·.

Para poder el H.·. Apr.·. aspirar a incorporarse a la cámara de


CComp.·. debe haber cumplido su tiempo, es decir, debe haber
recorrido el camino interior que lo conduce ante un nuevo portal
y llegado ante él debe dar forma y expresión a su nuevo estado.

Esto lo realiza pronunciando la palabra de paso, fiel expresión de


sus logros iniciáticos.

Su espíritu ha sido fecundado, ha alcanzado la madurez de la


espiga, ha crecido, ha superado la infancia, en su ansia por
encontrar la luz se ha erguido, ha vencido la inercia de lo material,
ha seguido el camino que la plomada le indicaba, la fuerza de
gravedad de sus impulsos y pasiones ha sido derrotada.

Los contenidos de su alma han aflorado, desde lo más oculto de


su ser, han surgido con torrentosa abundancia, los símbolos han
sido su herramienta en este proceso y ha aprendido a controlar el
torrente.

Ha cultivado la piedra bruta y la ha honrado pues ha sabido ver


en ella la chispa trascendente del espíritu.

El Apr.·. se sabe ahora un iniciado y esta al orden del G.·. A.·.,


puede pronunciar confiado la palabra de paso.

Pero esta palabra, mas allá de permitirle el paso a un nuevo grado


evolutivo de su ser, representa un compromiso y un desafío, pues
el destino de la espiga es fecundar y para ello el Comp.·. debe
82
continuar su trabajo, debe realizar los viajes simbólicos que le
permitan adquirir una nueva calidad que le permitan fructificar
para así retornar al seno de la madre tierra y fecundarla en nuevos
logros iniciáticos.

Así la espiga le enseñara a educar sus sentidos del alma, a mirar


más allá de lo aparente, a penetrar el mundo de los fenómenos,
logrará así una penetración clarividente y efectivizara el pasaje
místico de una a otra columna.

Es así que la palabra de paso refleja entonces un momento en el


proceso de transformación del neófito en iniciado, es el símbolo
de un logro interior, es la imagen del H.·. que crece, por su propio
esfuerzo y madura en su concepto de la vida, descubriéndose
Comp.·. de todos sus semejantes. Se sabe ahora, fecundo y
servidor, descubre el sendero, el camino que lo conducirá a la
exaltación de su ser.

La palabra de Paso, Shibb.·. según dice el ritual es una voz hebrea


que significa espiga y torrente. La espiga ha sido un símbolo que
aparece con frecuencia en la antigüedad como emblema
civilizador y evolutivo.

Para los griegos Deméter representaba a la tierra fecunda y


cultivada, diosa de los frutos y de los bienes que procura la
agricultura, diosa de los granos se le consagro el trigo y la avena
y favoreció la siembra y las tareas relacionadas con ella.

Tenía también bajo su mando el mundo subterráneo. Colmo a los


humanos con el beneficio de la civilización. Fue llamada la
“Legisladora ”.
Era reconocida como diosa del matrimonio y es que, desde el
83
punto de vista iniciático, representaba las bodas alquímicas entre
la materia y el espíritu. Sus atributos eran el ramo de espigas y
adormideras, en su frente llevaba una corona de espigas y su
cabellera era rubia, como las espigas maduras. Dice la mitología,
que Core, hija de Deméter había sido raptada por Hades, dios de
los infiernos.

Saliendo Deméter a su busca por el mundo, llego a la ciudad de


Eleusis y se puso al servicio de Céleo, rey del país y crio al hijo
del rey Demafonte.

Dice la mitología que Deméter busco convertir a Demafonte en


un dios, para lo cual seguía el siguiente proceso: soplaba
ligeramente sobre él, lo untaba con ambrosía y lo enterraba dentro
de la ceniza ardiente como un tizón, para destruir cuanto pudiera
haber en el de mortal.

Reconozca aquí el Apr.·. sus tres viajes, por el aire, por el agua y
por el fuego y continúe su camino de las manos de Deméter.

Pero al no recobrar a su hija determino Deméter que en la tierra


no germinara ninguna semilla, ante esto, cede Zeus y hace que
Hades devuelva a Core a su madre.

Pero Hades hace que Core, antes de abandonarlo, coma unos


granos de una granada, símbolo del matrimonio, lo que hace
indisoluble la unión de los esposos.

Vemos aquí, nuevamente representada la unión de los opuestos,


el dualismo reconciliado y la unidad de la naturaleza triunfante.

El Comp.·. domina así el número tres y por la ley del triángulo se


84
eleva al cuaternario y al quinario, donde será dueño de las
realizaciones en el mundo material y alcanzará su plenitud como
ser humano.

Ante este matrimonio del cielo con la tierra Zeus determina que
Core viva un tercio del año con su esposo Hades y dos tercios con
su madre Deméter, así, recobra el suelo la fertilidad perdida.

Por eso cada año, al llegar los fríos, la tierra se viste de luto y
entristece. Desapareció el verdor, las flores están mustias, los
árboles se quedan sin hojas.

Las semillas duermen ahora su sueño invernal en las entrañas del


suelo. Es el momento en que Core (también conocida como
Perséfone) baja a los infiernos a reunirse con su esposo.

Es el momento en que el iniciado retorna a su interior buscando


el matrimonio con su verdadero ser.

Pero cuando llega la primavera, la tierra vuelve a adornarse con


mil flores para celebrar el retorno de Core, que surge radiante de
belleza como un maravilloso espectáculo para dioses y humanos.

Sale de su templo interior el espíritu del Comp.·. fortalecido,


maduro, pronto para fecundar, una vez cumplido su tiempo a la
tierra que le dio la vida.

Año a año se celebraban en Grecia, los misterios Eleusinos, en


conmemoración de Deméter y Core. En estas celebraciones solo
participaban los iniciados. La iniciación comprendía dos etapas,
para entrar en la segunda, llamada epoptia, se requería un año de
residencia en el círculo de los iniciados, la espiga era el distintivo
85
de los epoptes, la ceremonia de pasaje al grado de epopte se
relacionaba con la vid futura, cuya relación esperaban recibir de
Deméter, los iniciados.

Reflexione el Comp.·. si no hay en estos antecedentes ricos


elementos para su trabajo. Pero a poco de ahondar en los mitos
antiguos descubrimos que Deméter es la identificación griega de
Isis, divinidad egipcia, esposa y hermana de Osiris. Al igual que
Deméter, Isis desempeño una tarea civilizadora enseñando a las
mujeres a moler el grano, hilar el lino y tejer telas, instituyo
asimismo el matrimonio.

Dice la mitología, que habiendo sido Osiris asesinado por su


hermano Set y encerrado en un cofre, fue arrojado al Nilo. Este
cofre llego a las costas de Fenicia y se estaciono a los pies de un
tamarindo, este árbol creció y escondió al cofre en su interior.

Malcandro, rey de Biblos, mando aserrar el árbol con el fin de


apuntalar con él, el techo de su palacio, al hacerlo el árbol
comenzó a despedir un aroma extraordinario.

Enterada Isis, le fue entregada la milagrosa columna de la cual


extrajo el cofre que contenía el cuerpo de Osiris.

Reflexiones así el Comp.·. que en su interior de la columna J.·.


encontrará las herramientas y la fuerza necesaria para fructificar.

En el mito Osirio, Isis representa el suelo fértil de Egipto,


fecundado anualmente por la inundación del Nilo (Osiris), de
quien está separada por Set, el desierto árido.
Busque el Comp.·. las aguas vivificantes de Osiris para
convertirse en espiga madura, lo que le permitirá retornar al surco
86
y recomenzar así el ciclo de vida, en un estado superior de
conciencia, habiendo ascendido en la espiral de la existencia, sin
escalón, aspirando ahora a la maestría.

La palabra de paso es una llave para ingresar a una nueva cámara.


Pero no es una llave material, está construida por delicadas
virtudes del espíritu y surge espontánea y natural cuando el
necesario proceso interior se ha cumplido, cuando el iniciado es,
cuando ha alcanzado el estado evolutivo Justo.

Así, el Apr.·. solicita su aumento de salario y este le es concedido


pues su tiempo ha llegado, pero en la ceremonia de Col.·. el Apr.·.
no llega a Comp.·., apenas comienza su camino.

Luego de que haya cumplido en su interior los cinco viajes habrá


llegado a ser y conocer a S.·. . será espiga y torrente, madurez y
fuerza, plenitud y piedra pulida, estará en condiciones de solicitar
de nuevo aumento de salario y aspirar a formar parte de la cámara
del medio.

87
CAPITULO XII

LA LEYENDA DE LA ESCALERA DE CARACOL

La única leyenda hitica relacionada con el grado de Comp.·.


Mas.·. es la que se refiere al ascenso alegórico del Comp.·. por
una escalera de caracol, para llegar a la cámara del medio a los
efectos de recibir el pago del justo salario.

Su origen bíblico está vinculado a la construcción del templo de


Salomón, pues, según dice el primer libro de Reyes Cap. VI
versículo 8: “La puerta del piso inferior estaba al lado derecho
del edificio y por una escalera de caracol se subía al piso
intermedio y de este al tercer piso ”.

Consideramos al simbolismo de la escalera de caracol de una


importancia fundamental en el grado de Comp.·. y aun en los tres
grados simbólicos de la Mas.·..

Intentaremos una progresiva aproximación a este símbolo, que,


por su fuerza, sus significados velados y su sugerencia nos
impone más que otros una profunda actitud de humildad y
respeto.

En su libro “Simbolismo Francmasónico ” nos dice el H.·. A.


Mackey: “La Mas.·. es Evolución permanente, se avanza de lo
inferior a lo superior, de las tinieblas a la luz, del error a la
verdad. El candidato asciende continuamente, nunca se
estaciona ni retrocede, pues cada paso que da, le produce nueva
iluminación mental, el conocimiento de una doctrina más
elevada”.

88
Descubrimos de esta forma una de las leyes que gobiernan al
universo, todo está en permanente evolución y progreso.

Así, la escalera de caracol viene a ser símbolo de esa evolución


ascendente.

Pero el ser humano está dotado de conciencia, es decir, que es


capaz de reflexionar sobre sí y sobre cuanto lo rodea. Su
conciencia como un foco de luz ilumina una porción del mundo.

El progreso y evolución de la conciencia del ser humano hace que


el foco proyectado se amplíe y que la luz vaya penetrando en el
mundo de las causas que originan cuanto se manifiesta a sus
sentidos.

El mundo causal es siempre el mismo, pero lo que va


evolucionando es nuestra conciencia débil. Esto esta
magníficamente representado en la espiral ascendente, en la que,
al cumplir un ciclo completo nos encontramos frente al mismo
mundo, pero al cual ahora vemos en forma diferente pues nuestra
conciencia se ha elevado.

Dícese que la escalera de caracol comenzaba en el pórtico del


templo y los cuadros del grado así lo representan. Esto hace
referencia a que, cuando el profano traspasa el pórtico del templo
y nace a la luz Mas.·. abandonando sus metales, entra en una etapa
de preparación, se torna Apr.·. y comienza a hacer emerger de su
interior los más puros contenidos de su alma. Pero el verdadero
trabajo Mas.·. da comienzo en el Seg.·. Gr.·., en el cual el Comp.·.
pule la piedra, buscando ascender en su evolución personal y
adquirir una nueva conciencia de sí y de cuanto lo rodea teniendo
como meta el perfeccionamiento de su ser y la obtención de la
89
sabiduría.

Dice la primera instrucción del Gr.·. de Comp.·.: “Después de


que nuestros HH.·. dieran las pruebas que se les exigían por el
Pr.·. Vig.·., este les daba el paso, entonces subían la escalera de
caracol constituida por 3, 5 y 7 o más escalones, porque tres
gobiernan la logia, cinco la constituyen y los tres que la
gobiernan más dos CComp.·. y siete la hacen perfecta, los siete
que la hacen perfecta son dos AApr.·. adicionados a los cinco que
la constituyen.

Tres gobiernan una logia porque tres fueron los grandes


MMaes.·. que presidieron la construcción del primer templo de
Jerusalén: Salomón, rey de Israel, Hiram, red de Tiro, y H.·. A.·.,
cinco constituyen la logia en consideración a los cinco ordenes
de la Arquitectura y siete o más la tornan perfecta, porque
Salomón empleo más de siete años en la construcción,
terminación y consagración del templo. Hay también en este
número una alusión a las siete artes liberales, el Trívium y el
Cuadrivium a las que se hace referencia en el segundo viaje del
Comp.·..

Después de Haber alcanzado la cima de la escalera, nuestros


antiguos HH.·. se paraban en la puerta de la cámara del medio
en donde eran, retejados por el H.·. Seg.·. Vig.·..

Al ingresar a la cámara del medio, veían un triángulo equilátero,


teniendo en su centro la letra G (God), inicial del gran geómetra
del universo.

Como herencia de nuestros antecesores, trabajadores de la


piedra, la geometría quedo siendo el estudio más perfeccionado
90
que debe hacer un Comp.·., del mismo modo en que nuestros
antiguos HH.·. rescataban de la naturaleza la inspiración, que os
aconseja estudiar ese gran libro, indagando en lo más profundo
y oculto, esforzándonos en revelar los Misterios, hasta que,
ayudados por la luz de la razón y de la ciencia, podáis vencer las
innumerables dificultades encontradas en vuestro camino.”

Dice en este sentido, el H.·. Mackey:

“Hasta aquí podemos penetrar en el verdadero simbolismo de la


escalera de caracol, que representa el progreso de la mente
investigadora en el cultivo del intelecto y del estudio de la
adquisición previa de toda ciencia humana, como paso
preliminar para poder alcanzar la verdad.

Pero se recordará que se prometía una recompensa a quien


lograba subir la escalera de caracol. Ahora bien, ¿Cuál era el
salario de los francmasones? No les daban moneda, ni trigo, ni
vino, ni aceite, pues todos estos objetos no son más que símbolos.
Su salario era la verdad, o una aproximación a ella, apropiada
al grado en que se los había iniciado.

La doctrina que los MMas.·. han de buscar siempre la verdad, sin


lograr encontrarla jamás, es una de las más bellas del
simbolismo Mas.·..

Esta verdad, objeto de todos sus esfuerzos, se simboliza por


medio de la palabra. En esto consiste la recompensa del Comp.·.,
se le pone en el camino de la verdad, pero debe viajar y ascender
hasta lograr alcanzarla”.

Pero el simbolismo de la escalera de caracol encierra, en mi


91
concepto, otros mensajes que intentare descifrar.

La escalera de caracol se encuentra presente en lo más profundo


de nuestro micro-cosmos y es la base de nuestra constitución
física. Para aclarar este concepto debemos recurrir a la biología.

Sabemos que la información genética es transferida por


moléculas de ácido nucleico.

Existen dos tipos de ácido nucleico:

El D.N.A. o Acido desoxirribonucleico y el R.N.A. o ácido


ribonucleico.

Los genes, determinantes de la herencia, se componen de D.N.A.

Cada Gen contiene información codificada dentro de su molécula


de D.N.A.

La unidad de información genética es un grupo de tres


nucleótidos.

Hasta aquí poco vemos que tenga relación con nuestro símbolo,
pero se ha podido determinar sin lugar a dudas que la molécula
de D.N.A. consta de dos cadenas de poli nucleótidos arrolladas
entre sí en una espiral regular, formando una verdadera escalera
de caracol.

La molécula de D.N.A. se duplica cuando las dos tiras de la


espiral se separan y cada una activa como un modelo para la
formación de una nueva tira complementaria.

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Cada par de tiras, una antigua y una nueva se arrolla a la otra
formando dos espirales hijas.

El ser humano posee en su D.N.A. más de 3.500 millones de


nucleótidos, por esto, cada individuo de la especie humana cuenta
con una composición biológica prácticamente irrepetible, dado
que la posibilidad de que aparezcan dos personas con un mismo
patrón genético es uno entre miles de millones.

Es esta escalera de caracol genética la que determina nuestra


individualidad psicofísica. La escalera de Caracol estaría así
representando la individualidad de nuestro vehículo físico y a la
vez la enorme diversidad de posibilidades que esta geometría
genética encierra.

La ingeniería genética vislumbra la posibilidad de alterar el


código genético y prever enfermedades. Es este un terreno en el
cual solo se puede transitar siendo conducido s por una ética
superior, pues también son muchas las monstruosidades que se
podrían cometer.

El tránsito por nuestra escalera de caracol deberá ser muy


cuidadoso, esta es una lección que el Comp.·. deberá reflexionar
profundamente. Pero, así como la espiral está presente en nuestro
microcosmos, también lo está en el macrocosmos.

Las nebulosas espirales representan más del 80% de las nebulosas


extra-galácticas catalogadas.

Nuestra galaxia en particular tiene la forma de una espiral. El sol


ocupa una posición excéntrica, ubicándose en uno de los brazos
de la espiral. El centro de esta espiral está muy lejano del sol, en
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dirección a Sagitario.

El astrónomo norteamericano Morgan, hallo en 1951 dos espiras


de nuestra Galaxia. La primera espira dista de nosotros unos
3.000 años luz, en las constelaciones de Unicornio y Cisne y se
acerca de modo que en el Toro y Perseo casi envuelve al Sol. La
segunda espira, paralela a la anterior, dista de 5.000 a 6.000 años
luz.

Actualmente se conoce que el sol se encuentra en una espira


exterior de nuestra espiral galáctica, esta espira procede de la
quilla y se prolonga, más allá de sol, en dirección al Cisne, es
decir, formando Angulo recto con el centro galáctico.

El desarrollo del cosmos se produce en innumerables galaxias,


también llamadas universos islas, las cuales adoptan la forma de
escaleras de caracol cósmicas.

Dice el aforismo iniciático: como es arriba es abajo, nada más


claro que la escalera de caracol para demostrarlo, lo cual viene a
explicar nuestro sentimiento frente a un símbolo que encierra
tanta fuerza y misterios. Pero a poco de abrir la puerta del espíritu
a nuestra escalera, siguen afluyendo, nuevos contenidos, y vemos
como en la mitología griega, Esculapio, considerado el dios de la
medicina, es simbolizado por un griego vigoroso apoyado en un
cayado en el cual se enrosca una serpiente en espiral la cual se
suponía que succionaba el mal del paciente.

Imagen que nos transporta el pensamiento místico oriental, el cual


expresa que las fuerzas que dan origen al hombre nuevo, yacen
latentes en la base de la comuna vertebral y que al ser despertadas
ascienden describiendo una espiral, dese el centro epigástrico de
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la anatomía del hombre, pasando por el corazón, por la garganta,
por el centro de la cabeza del hombre y culminando en un punto
detrás de los ojos. En este punto se despierta la energía que los
indios llaman Shushumma que da origen al nuevo ser.

Todos estos contenidos que afloran en nuestra mente nos


muestran la razón por la cual nuestros antecesores encerraron en
la escalera de caracol el símbolo de ascensión, progreso,
evolución, desarrollo y realización del ser humano.

Este símbolo es una interrogante viva, al cual el Comp.·. deberá


recurrir periódicamente como forma de retroalimentar su
búsqueda de la verdad.

Ciertamente, que cada escalón que sea capaz de ascender en la


escalera de caracol, lo acercara al encuentro consigo mismo y con
todos sus HH.·.

¡Que la luz del G.·. A.·. D.·. U.·. dirija sus pasos y le de las
fuerzas necesarias para llegar a la cámara del medio!

Que así sea.

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