La inteligencia artificial y su impacto sobre el empleo y la distribución del ingreso

Diana Guzmán Flórez

La inteligencia artificial está cambiando el funcionamiento del mercado laboral y de la

economía. Las cifras de desempleo en Estados Unidos muestran que pese a que hay una

recuperación económica y las empresas están generando utilidades, las contrataciones de personal

son cada vez menores. Lo anterior se debe a que cada día que pasa, los procesos son más

automatizados y la inteligencia artificial está reemplazando muchas tareas que antes eran

desarrolladas por personas. Funcionarios de aerolíneas han sido sustituidos por maquinas que

permiten al usuario hacer check-in, el cobro de parqueaderos, que antes era recaudado por

trabajadores ahora es hecho por una máquina. La caída en el empleo tiene un impacto directo

sobre la distribución del ingreso, toda vez que los empleos que se están sustituyendo son en su

mayoría de la clase baja. Hasta ahora el impacto ha sido mínimo puesto que todavía hay muchas

labores que las maquinas no pueden hacer, pero el avance tecnológico acelerado terminará

reemplazando tareas que antes eran impensables porque requerían habilidades que no se creía que

las maquinas podrían hacer, por ende, en el futuro ¿la inteligencia artificial generará desempleo,

afectando la distribución del ingreso?

De acuerdo con Ford (2013) la inteligencia artificial se puede definir como computadores

y maquinas que están asumiendo tareas intelectuales que anteriormente eran exclusivas del

cerebro humano. Es así como, en los últimos años se han diseñado maquinas capaces de sustituir

miles de empleos, principalmente labores operativas, sin embargo el desarrollo tecnológico en las

últimas décadas ha sido tan acelerado que ya existen maquinas que están sustituyendo labores
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que requieren algún tipo de análisis. Ahora bien, las tareas que ejecutan las maquinas aún distan

de ser perfectas, sin embargo, en algunos años es altamente probable que las maquinas realicen

las labores inclusive mejor que los humanos.

No existen cifras concretas que muestren el impacto de la inteligencia artificial sobre el

empleo, no obstante, McAfee (2012) realizó un análisis sobre el desempleo y la recuperación de

la economía de los Estados Unidos y concluyó que si bien las compañías se están recuperando de

la pasada crisis económica, el desempleo sigue aumentando. Lo anterior se debe a que las

empresas han automatizado los procesos, lo que les permite tener crecimiento y utilidades

mayores, pero contratando cada vez menos trabajadores. No es la primera vez en la historia que

el empleo se ve afectado por los adelantos tecnológicos. La revolución industrial modificó la

estructura laboral de muchos sectores de la compañía y lo que hicieron los trabajadores fue

acoplarse a este nuevo esquema. Sin embargo, la diferencia entre lo sucedido con la Revolución

Industrial y la Revolución que se está generando por la Inteligencia Artificial radica en que en la

primera se generaban nuevos empleos y las personas migraban de un sector a otro, pero el

problema de la Inteligencia Artificial, como mencionó Nilsson (1984) es que “ésta logrará hacer

cualquier labor que los humanos hagan e inclusive si la inteligencia artificial logra crear más

empleos, estos también podrán ser ejecutados por maquinas, por ende no se requerirá a los

humanos”. Por ende, se cumpliría lo indicado por Ford (2013) en cuanto a que los desarrollos

tecnológicos siempre han desplazado los empleos de un sector a otro, sin embargo, en la

actualidad el cambio y el impacto de la inteligencia artificial es tan fuerte, que no va a desplazar a

los trabajadores sino que va a transformar cada sector económico.

En la medida en que la inteligencia artificial continúe avanzando y sustituyendo empleos

se puede generar una crisis en la sociedad por cuanto muchas personas estarán desocupadas.
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Como estableció Ford (2013), “el impacto de la aceleración tecnológica en el mercado laboral

puede terminar representando un cambio dramático y un reto tanto para la economía como para la

sociedad”. También se puede generar una crisis económica dado que el empleo es la principal

fuente de ingreso, en consecuencia, se afectará el consumo lo cual impactará la economía y la

distribución del ingreso. Pese a lo anterior, el impacto de la inteligencia artificial en la

distribución del ingreso puede analizarse desde el punto de vista de las mejoras que el mayor

desarrollo tecnológico puede tener en la calidad de vida de las personas y en la automatización de

procesos. Por ende, no necesariamente el desempleo que se genere por cuenta de la inteligencia

artificial va a tener un impacto directo sobre la distribución del ingreso. Sobre este punto es

fundamental el papel de los Estados para regular los avances tecnológicos y cómo estos deben ser

utilizados y distribuidos en todos los sectores de la sociedad. Al respecto, es válido el

interrogante que se planteó Tunal (2005) sobre ¿cuál es la responsabilidad que tiene cada gerente

y funcionario estatal frente a los cambios que plantea la inteligencia artificial? La respuesta es

alta porque de la regulación estatal dependerá que la inteligencia artificial sea utilizada a favor de

todos y no en contra de la mayoría.

Lo expuesto por Tunal permite plantear que con el fin de contrarrestar el impacto del

desempleo producido por la inteligencia artificial es necesaria la actuación del Estado para

proteger los empleos y la economía. Por otro lado, Ford (2013) planteó que para evitar ser

reemplazados por maquinas, las personas deberán desarrollar habilidades que les permitan

trabajar en labores y en sectores que sean menos propensos a ser sustituidos. No obstante, estas

medidas serán de corto plazo, dado que el avance de la inteligencia artificial será tan grande, que

en el largo plazo la sociedad y la economía sufrirán una transformación radical que

probablemente no podrá ser frenada por ningún Estado y las labores que las maquinas no puedan
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desarrollar serán cada vez menores. En ese sentido, la sociedad deberá adaptarse a los nuevos

cambios y aceptar la participación de la inteligencia artificial en la economía y en el mercado

laboral. Como parte de esta transformación, Mcfee (2012) mencionó que los desarrollos

tecnológicos implicarán que en el futuro las personas tengan mucho tiempo libre que podrá ser

utilizado para que las personas vivan mejor, el autor señala que la nueva sociedad será como la

antigua Grecia, en donde habrá tiempo disponible para filosofar y realizar otras actividades que la

sociedad actual no permite realizar.

De acuerdo con lo expuesto por Mcfee, el desempleo que pueda ocasionar la inteligencia

artificial no necesariamente será un aspecto negativo ya que puede brindar oportunidades de tener

una mejor calidad de vida para las personas. Ahora bien, eso también dependerá de que la

principal fuente de ingreso, que ahora es el empleo, sea reemplazada y por ende, el desempleo no

impacte en la distribución del ingreso. Para esto, es indispensable que los Estados subsidien la

investigación en desarrollos tecnológicos con el fin de que los beneficios que se obtengan de la

inteligencia artificial sean transferidos a todos los sectores de la sociedad. Macfee (2012) afirmó

que la tecnología reducirá pobreza, miseria y desigualdad. Lo expuesto por el autor es altamente

probable, siempre y cuando, la distribución del ingreso sea equitativa y los desarrollos

tecnológicos no beneficien únicamente a empresas multinacionales o algunos Estados que son los

líderes en innovación.

La inteligencia artificial generará desempleo, sin embargo, su efecto sobre la distribución

del ingreso, dependerá de la actuación del Estado, en la medida en la cual a través de la

regulación se logre sustituir el empleo como principal fuente de ingreso y aprovechar los

desarrollos tecnológicos en beneficio de todos los sectores de la sociedad.

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Se puede concluir que la inteligencia artificial generará desempleo y transformará la

forma cómo funciona la sociedad. A través de las políticas y la regulación de los Estados, la

inteligencia artificial permitirá que las personas tengan una mejor calidad de vida, sin embargo,

esto solo será posible si los Estados y las personas se concientizan de la importancia de que los

beneficios y desarrollos tecnológicos deben beneficiar a todos los sectores económicos y de que

un mundo sin empleos puede ser más beneficioso para las personas por cuanto les permitirá

ocupar su tiempo en otro tipo de actividades. Por ende, también es importante la negociación con

las empresas multinacionales que han liderado la innovación tecnológica, lo cual deberá tender a

buscar soluciones que permitan que siga existiendo la investigación tecnológica pero que los

beneficios no sean solo para estas empresas. Es importante que los Estados emitan de inmediato

regulaciones claras sobre los adelantos tecnológicos y con medidas que se puedan aplicar en el

largo plazo. Lo anterior, es uno de los retos más importantes, ya que la sociedad actual es

cortoplacista, por ende hay un riesgo de que si no se realizan los ajustes y si el mundo no se

prepara para el cambio, en el camino pueden haber muchas crisis económicas, políticas y

sociales.
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REFERENCIAS

Tunal S., G (2005). Automatización de los Procesos de Trabajo. Actualidad Contable FACES, 8

(10), 95-104. Recuperado de http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=25701009

Ford, M (2013). ¿Could artificial intelligence create an unemployment crisis?, Communications

of the ACM, 56 (7), 37-39. Recuperado de

http://cacm.acm.org/magazines/2013/7/165475-could-artificial-intelligence-create-an-

unemployment-crisis/fulltext

Nilsson, N (1984). Artificial Intelligence, Employment and Income. AI Magazine, 5 (2).

Recuperado de http://ai.stanford.edu/~nilsson/OnlinePubs-

Nils/General%20Essays/AIMag05-02-002.pdf

McAfee, A. (2012) Race Against the Machine: Andrew at TEDxBoston. Recuperado de

http://www.youtube.com/watch?v=QfMGyCk3XTw