Está en la página 1de 9

La Construcción Social de la Identidad Femenina en el Proyecto de la Regeneración en Colombia:

el Caso de Doña Bárbara Caballero y Alzate


Paola Fernández Luna

La Construcción Social de la
Identidad Femenina en el
Proyecto de la Regeneración en
Colombia: el Caso de Doña *
Bárbara Caballero y Alzate 1

Fecha de recepción: 22 de agosto de 2013


Fecha de aceptación: 10 de diciembre de 2013

Resumen
El objetivo de este artículo es demostrar que Doña Bárbara, per- Paola Fernández Luna
sonaje principal de la novela La Marquesa de Yolombó (1926), es una Universidad Ean, Colombia
apuesta de Tomás Carrasquilla por la construcción de un personaje pfernandezluna@gmail.com
femenino a partir de los principios discordantes de la ideología liberal y
conservadora propios del proyecto de la Regeneración. Bárbara Caba- Docente Investigadora de Literatura
llero y Alzate es una mujer que, a pesar de su liberalismo progresista, Colombiana, adscrita al programa de
su intento de emancipación y su consagración a las letras, no logra Lenguas Modernas de la Universidad
concretar un proyecto autónomo. La novela es escrita en el periodo EAN de Colombia.
del proyecto político regenerador, en el cual se consideraba que el libe-
ralismo ateo había generado una crisis axiológica que debía ser puesta
en orden a través de la reconstrucción social a imagen y semejanza
del orden católico. En consecuencia, se origina una oposición radical
en contra de los fundamentos del liberalismo; la jerarquía conserva-
dora plantea que la conducta del católico debía ser obediente tanto a
la autoridad divina como a la Iglesia. En este orden de ideas, Bárbara
Caballero es una metáfora del “liberalismo conservador”; en ella se
hace patente el conflicto religioso y moral que vivía la sociedad colom-
biana y, en particular, la mujer en el siglo XIX.
Palabras clave: novela en Colombia, la Regeneración, centra-
lismo, federalismo, hegemonía conservadora, la mujer en el siglo XIX.

1* Artículo de reflexión, avance de la investigación: “La mujer en la Literatura colombiana”.


Citar: Fernández Luna, P. (Enero – Junio de 2014). La Construcción Social
de la Identidad Femenina en el Proyecto de la Regeneración en Colombia: el
Caso de Doña Bárbara Caballero y Alzate. La Palabra (24), 25 – 32

25 la palabra No. 24 Tunja, Enero - Junio de 2014, ISSN 0121-8530 pp. 25-32
Social Construction of Feminine Identity in
the Regeneration Project of Colombia: the
Case of Doña Bárbara Caballero y Alzate
Abstract:
The objective of this study is to demonstrate that Doña Bárbara, the main character of the
novel La Marquesa de Yolombó (1926), is the attempt of its author, Tomás Carrasquilla, to create
a paradigm feminine character based on the conflicting principles of the liberal and conserva-
tive ideologies of the Regeneration project. Bárbara Caballero y Alzate is presented as a woman
who fails to materialize an autonomous project, in spite of her progressive liberalism, her effort
towards emancipation and dedication to literature. The novel was written during a period known
as the Regeneration period, in which it was considered that atheist liberalism had caused an axi-
ological crisis, which could only be reestablished by a social reconstruction imperative based on
the Catholic order. In consequence, a radical opposition against the founding principles of liberal-
ism was originated; the conservative hierarchy dictated that appropriate Catholic moral conduct
implied obedience to divine authority and the Church. Based on this context, Bárbara Caballero is
a metaphor of this “conservative liberalism”. In her character, the religious and moral conflicts of
Colombian society, and particularly of women in the XIX century, come to life.

Key words: Colombian novel, Regeneration project, Centralism, Federalism, conservative hege-
mony, woman in the XIX century, liberalism, Catholic moral imperative

La Construction Sociale de L’identité Féminine


Dans le Projet de la Régénération en Colombie:
le Cas de Doña Bárbara Caballero y Alzate
Résumé
L’objectif de cet article est celui de démontrer que Doña Bárbara, personnage central du roman
La Marquise de Yolombó (1962), est un pari de Tomás Carrasquilla pour la construction d’un per-
sonnage féminin à partir des principes discordants de l’idéologie libérale et conservatrice propres
du projet de la régénération. Bárbara Caballero et Alzate est une femme qui, malgré son apparte-
nance au libéralisme progressif, son essai d’émancipation et sa consécration aux lettres, n’arrive pas
à concrétiser un projet d’autonomie. Le roman est écrit dans la période de la régénération dans
laquelle on considérait que le libéralisme athée avait généré une crise axiologique qui devait être
rangée à travers la reconstruction sociale à l’image de l’ordre catholique. Ainsi, on assiste à l’origine
d’une opposition radicale contre les fondements du libéralisme ; la hiérarchie conservatrice déter-
mine que la conduite du catholique devait être obéissante tant envers l’autorité divine, qu’envers
l’église. Dans le même ordre d’idées, Bárbara Caballero est une métaphore du « libéralisme conser-
vateur ». Il est évident chez elle le conflit religieux et moral qui vivait la société colombienne et, en
particulier, la femme au XIXème siècle.
Mots clés: Roman en Colombie, la régénération, Centralisme, fédéralisme, hégémonie conser-
vatrice, la femme au XIXème siècle.

la palabra No. 24 Tunja, Enero - Junio de 2014, ISSN 0121-8530 pp. 25-32 26
La Construcción Social de la Identidad Femenina en el Proyecto de la Regeneración en Colombia:
el Caso de Doña Bárbara Caballero y Alzate
Paola Fernández Luna

Introducción hombre en relación con el piel (p. 71). Dicho sistema le


nivel despreciable de la mujer, otorgó un lugar privilegiado
La novela La Marquesa de doña Bárbara desea casarse; al hombre y relegó a la mujer
Yolombó, escrita en 1926 por un día llega un español, quien de manera absoluta a la invi-
Tomás Carrasquilla, se desa- tras advertir este deseo en sibilidad; además se inició
rrolla en torno a un perso- la mujer soltera, le propone un proceso de blancura cuyo
naje femenino, doña Bárbara matrimonio, se casan y la ella objetivo consistía en ponerle
Caballero y Alzate, hija de vende todo para irse a España. fin a la heterogeneidad racial.
padres aristócratas: don Pedro Este hombre la engaña, una Así mismo, se estructuró en
Caballero, alcalde de Yolombó vez en el puerto deciden des- un orden jerárquico susten-
y propietario de la mina Santa cansar, el español se embarca tado en la posición prelativa
Polonia, y doña Rosalía Alzate, con todas las pertenencias de del hombre y el mérito de su
oriunda de España, quienes la Marquesa. El desenlace de la representación, por el contra-
educaron a su hija menor novela es una imagen de doña rio, la subordinación feme-
para que pudiera satisfacer Bárbara convertida en un alma nina permeó la valoración
a su futuro esposo en todos en pena, una mujer fantasmal, social de la mujer; esta estaba
los caprichos, pero Bárbara sin vida. constreñida de manera exclu-
no recibió instrucción acadé- siva a la norma, por ejemplo,
mica en letras y números por El proyecto civilizador la figura de la mujer constituye
su condición de mujer. Ella en Colombia a el modelo de reproducción,
quiere trabajar en el negocio principios del siglo XIX de la sumisión y devoción al
de su padre, pero solo después hombre dentro de la comu-
de cuatro años de esfuerzo Cristina Rojas, en Civiliza- nidad doméstica. En suma, el
y trabajo le es permitido el ción y violencia, sostiene que el orden se caracterizó por una
arriendo de la cantera para que periodo posterior a la inde- estructura desigual, por una
la administre. pendencia en Colombia (1849- relación dispar entre hombre y
1878) se caracterizó por el mujer en el manejo de la auto-
Luego de estos años de tra- deseo civilizador de la élite ridad, el poder y las decisiones
bajo Bárbara logra un lugar criolla ilustrada. En el siglo a favor de la masculinidad.
privilegiado en la sociedad XIX colombiano este deseo
antioqueña, pues, su dinero le estaba íntimamente relacio- Esta normativización del
permite traer cambios signi- nado con el proyecto que bus- rol femenino obedeció, fun-
ficativos: mejora las minas, caba la desaparición de los damentalmente, a los ideales
levanta iglesias, crea escuelas, viejos sistemas de jerarquía conservadores de la élite
participa en las fiestas, logra la y poder, y el surgimiento de criolla la cual propugnaba por
inclusión de los negros en las nuevas formas cuyo modelo una sociedad idealizada a par-
festividades religiosas, aprende era el de la civilización euro- tir de la exclusión de la mujer
a leer y escribir, recibe clases pea (Rojas, 2001, p. 36). Este del espacio político y cultural.
y, finalmente, se convierte en impulso se materializó en
La Marquesa de Yolombó, título algunas prácticas económicas, Los liberales radicales no
nobiliario dado por su nobleza ideales, educativas y religio- consiguieron unificar la nación
y sus acciones. sas. Predominó la promoción porque su discurso fue clasista,
de una civilización moral cris- promovió la democracia polí-
No obstante, en una época tiana; así mismo, se estableció tica y social, pero su práctica
cuya característica central era un sistema de jerarquía basado social y política fue conser-
la posición privilegiada del en el sexo y en el color de vadora y feudal, dado que
fueron comerciantes urbanos

27 la palabra No. 24 Tunja, Enero - Junio de 2014, ISSN 0121-8530 pp. 25-32
que devienen terratenientes Los primeros debían pasar de su padre es una negativa,
y hacendados exportadores. por un proceso civilizatorio, es pero ella lo convence. En la
En la misma línea, Rojas decir, que dejaran de ser lo que novela el rol del personaje
señala que los colombianos eran, y en el caso de los segun- femenino no está limitado a
de mediados de siglo XIX no dos, las mujeres continuaron los tradicionales o normativos,
pudieron inventar una nación, viéndose como seres no aptos sino que se convierte en un
porque la sociedad apareció para intervenir en el espacio agente de cambio, de decisión
como fragmentada en térmi- público. y de cumplimiento. En este
nos históricos, geográficos y sentido, la mujer no cumple
étnicos (2001, pp. 286-287). Estas diferencias se pueden la función de instrumento de
El ideal civilizatorio del blan- evidenciar en la novela María ejecución o de representación
queamiento o del mestizaje de Jorge Isaacs a través de los de pasividad absoluta, por
que estas élites reivindicaron ideales cristianos y blancos el contrario trasciende en su
habría impedido la formación que encarnan tanto su perso- poder de decisión. Pero dicha
de una identidad común y las naje central como la familia apuesta de Tomás Carrasquilla
identidades de los indígenas, de Efraín; por el contrario, la ha de costarle el sacrificio del
negros y mujeres habrían sido exclusión y el sometimiento de personaje central femenino,
suprimidas. la mujer, el abuso a los campe- pues ella se enfrentará a la de-
sinos y analfabetas son registra- rrota de su proyecto autónomo
La construcción del dos en Manuela, novela escrita cuando se pliega a la mentali-
proyecto de nación por Eugenio Díaz Castro, el dad que impera en la época y
desde dos perspectivas personaje central es asesinado a los valores tradicionales de
antagónicas: María y el día de la independencia. En la sociedad conservadora y
estas dos novelas se configu- católica de la república. Podría-
Manuela ran dos ideales de nación; en mos considerar la condena del
la primera, los de una élite personaje femenino por parte
El proyecto de nación de patriarcal, ilustrada y católica. del autor como un castigo y
los radicales fue el proyecto En la segunda, coexisten las ejemplificación, pues la mujer
de una élite cuyo ideal civili- diferentes clases en pugna y emancipada representa un
zatorio lo constituyó Europa, tensión, las regiones y creen- obstáculo para la sociedad tra-
al considerar que la “barbarie” cias y, sobre todo, dialogan dicionalista y patriarcal.
nacional era el obstáculo para personajes de la cultura letrada
construir la nación civilizada. con personajes analfabetas de Por otra parte, el modelo
Sin embargo, ese ideal fue asu- la región que no abandonan femenino preponderante de
mido con la idea de unidad su lucha. Su defensa la llevan la Regeneración fue el de la
nacional en la que el horizonte hasta las últimas instancias, el esposa y la madre, el cual,
era acabar con las diferen- caso de Manuela. según Montes, estaba repre-
cias internas de clase, étni- sentado en la pintura por la
cas y regionales, imposible en En el interludio axiológico imagen de la virgen María sos-
cualquier sociedad existente. de estos dos personajes se teniendo a su hijo en los bra-
Para Arias, la definición de la configura Bárbara Caballero zos. A través de este ícono se
nación implica las diferencias y y Alzate, una mujer blanca y conducía a la mujer católica a
las fronteras entre las élites y el aristócrata como María, pero imitar a María como madre y
pueblo. En este sentido en el con un proyecto emancipador como esposa sumisa (2007, p.
proyecto de nación de los radi- como Manuela. Este personaje 81). En 1880 la encíclica Arca-
cales, los negros, los indígenas decide trabajar en la mina a sus num de León XIII reivindica
y las mujeres eran excluidos. 17 años, la primera respuesta la dignidad de la mujer en el

la palabra No. 24 Tunja, Enero - Junio de 2014, ISSN 0121-8530 pp. 25-32 28
La Construcción Social de la Identidad Femenina en el Proyecto de la Regeneración en Colombia:
el Caso de Doña Bárbara Caballero y Alzate
Paola Fernández Luna

matrimonio, pero bajo la tutela cuando acababa de lograr la En consecuencia, el deber


del mando, allí se plantea que independencia de España, la ser de la moralidad feme-
“el hombre es la cabeza de Iglesia determinaba el deber ser nina estaba legitimado por la
la mujer, como Cristo es la moral de la mujer en la socie- normatividad y esta a su vez
cabeza de la iglesia”, “la esposa dad: salir de casa para ir a misa, se deriva del matrimonio.
debe ser sumisa y obediente enseñar el catecismo de la reli- Montes afirma que la norma
a su marido, no como una gión católica y rezar. De ahí que sobre el matrimonio católico
esclava, sino como una com- las lecturas sugeridas y permiti- no solo rigió en España, sino
pañera, es decir, que la sumi- das para la mujer fueran aque- también en la América Latina,
sión que la esposa le manifiesta llas que adoctrinaran o cum- que a pesar de haber logrado
al hombre sea toda de pudor plieran la función de ejemplo de la independencia del régimen
y de dignidad” (2077, p. 82). ideal de vida y, en especial, las español, su religión, su lengua
Este programa moral y social lecturas de mayor difusión eran y parte de su cultura seguían
explicita la forma cómo la Igle- las que trataban de la vida de siendo de la nación española
sia católica define a la mujer los santos. Todo esto, por una (2007, p. 88). Bárbara Caba-
en relación con el hombre; parte, con el objetivo de educar llero no se distancia de la
la subordinación de la mujer a la mujer para ser una buena norma, sino por el contrario
al esposo. De modo que la esposa y madre; y, por otra, con se pliega a ella. Por ello, este
dimensión moral de la mujer es el ánimo de dar instrucción personaje encarna la contra-
concebida desde el pudor y la para mejorar su desempeño en dicción del proyecto rege-
dignidad. Cualidades morales las labores domésticas. nerador en Colombia, pues
que atienden a la construcción lejos de ser un programa libe-
de lo femenino en el siglo XIX La ideología católica consi- ral, se convirtió en el triunfo
y que serían formas de ejem- dera que es propio de la natu- de la violencia simbólica de
plificar el deber de la mujer en raleza femenina el espacio inte- corte moral: una modernidad
el plano de lo público. rior– cerrado sujeto al cuidado católica heredada de España1.
del hogar, y el de la masculina En tanto que, la hegemonía
impulsada al mundo exterior conservadora le moldeó la
La construcción por la fortaleza y el trabajo personalidad a la nación
ideológica de lo para proveer en la casa. Esta colombiana y ejerció un par-
femenino en América división del espacio público y ticular dominio en la menta-
Latina: Doña Bárbara privado se define por la norma lidad femenina, pues, según
que durante siglos determi- Montes, en el siglo XIX las
Caballero naría el rol social de la mujer: mujeres fueron sometidas por
su desempeño en la sociedad la sociedad patriarcal y por la
En la construcción ideoló- quedaría, entonces, subordi- Iglesia como institución y, en
gica de lo femenino en Amé- nado a la representatividad consecuencia, el matrimonio
rica Latina, la religión católica del hombre, y en este sentido se constituyó en una forma de
ha cumplido un papel prepon- la mujer le deberá la honra al poder que sometía a la volun-
derante en el siglo XIX. En marido y, por ello, habrá de tad femenina (2007, p. 89).
Colombia, particularmente profesarle sumisión.

1 A partir del triunfo militar y económico de los conservadores y los liberales independientes sobre los liberales radi-
cales se configuró un régimen que otorgó amplios privilegios a la institución eclesiástica, en especial a la educación,
y como contraparte fortaleció a la corriente más intransigente y antimoderna del catolicismo que venía haciendo
carrera en el país desde 1870. Abiertamente intolerantes frente a los liberales, las doctrinas racionales, los protes-
tantes y las disidencias estructuraron una mentalidad intransigente que comenzó a configurar la cultura política de
la sociedad colombiana.

29 la palabra No. 24 Tunja, Enero - Junio de 2014, ISSN 0121-8530 pp. 25-32
Desde esta perspectiva de vos, de creación, trabajo y se nino sea también la simbolo-
sometimiento, Foucault sos- relacionaban con la virilidad. gía de un lenguaje silenciado
tiene que: Bárbara pretende acceder a un y reprimido: “Pues debajo de
universo simbólico y de poder todo esto están las imágenes
El cuerpo está inmerso en que por su condición feme- de sucesión, de paternidad o
un campo político; las re- nina le estaba vetado. jerarquía” (Gilbert y Gubar,
laciones de poder operan
sobre él.; lo cercan, lo mar-
1998, p. 19). La asociación a la
can, lo doman, lo someten Ahora bien, la pregunta enfermedad, muerte, destierro
a suplicio, lo fuerzan a unos que nos podríamos plantear es y locura es significativa y consi-
trabajos, lo obligan a unas ¿hasta qué punto Carrasquilla dero que puede obedecer a las
ceremonias, exigen de él le permite posibilidades, a este definiciones patriarcales de lo
unos signos. Este cerco po- personaje de extender el uni- femenino. La comprensión y
lítico del cuerpo va unido de
acuerdo con unas relaciones verso femenino? ¿Se le ofrece mirada de la mujer reducida en
complejas. El cuerpo en la posibilidad de salvarse del una sociedad al silenciamiento
buena parte está imbuido destino ineludible al que ha forzado de su voz pública.
en relaciones de poder y de estado condenada la mujer
dominación (1976, p. 33). del siglo XIX en la literatura? La locura y muerte de
Por citar algunos casos, María Bárbara es una renuncia de
El cuerpo se convierte en y Dolores serán personajes la mujer por pertenecer al
algo útil cuando es cuerpo femeninos que en cada caso mundo de lo público que no le
productivo y sometido, en el contraen una enfermedad por ofrece opciones a su ser feme-
caso de Bárbara, se evidencia herencia del padre; Manuela nino, pues ella debe estar en
un sometimiento de orden es asesinada en la iglesia el día casa mientras el hombre sale al
ideológico, pues su lugar en de su matrimonio y Bárbara mundo. Cristina Valcke sugiere
el mundo empieza a estar Caballero y Alzate termina que “el encierro es una condi-
condicionado por la limita- loca y posteriormente muerta. ción que la sociedad patriarcal
ción de sus derechos y liber- Sandra Gilbert y Susan Gubar, asigna a las mujeres” (2005, p.
tades individuales. La religión figura en su estudio titulado 68). En suma, la metáfora del
en este caso era considerada La escritora y la imaginación litera- silenciamiento de Bárbara es
el elemento esencial de orden ria del Siglo XIX, plantean que el registro de la anulación de la
moral fundamentada en el res- la propensión a la enferme- condición femenina que carac-
peto de las leyes. De ahí que el dad que muchas mujeres, en terizó el deseo civilizador en
matrimonio fuese sinónimo de especial escritoras, padecieron Colombia.
orden, porque la mujer en la durante el siglo XIX tiene su
sociedad patriarcal, jerárquica origen en las represiones a las En conclusión, Tomás Ca-
y católica, tiene un lugar y una que estaban sometidas. Valcke rrasquilla enuncia una realidad
función establecidos. Bárbara considera que “la mujer, al ser singular del proceso de moder-
tendría que reconciliarse con entrenada a la renuncia, es casi nidad en América Latina y, par-
su devenir histórico y preservar por necesidad de ser entrenada ticularmente, en Colombia, al
las buenas costumbres antio- para una mala salud”, ya que, en destacar la mentalidad emanci-
queñas; el matrimonio podría palabras de Soledad Acosta de pada de Bárbara durante toda
ser el camino de la vuelta al Samper, el primer y más fuerte la narración y al desintegrarla
orden, dado que este personaje impulso del animal humano es en el desenlace por medio su
ha logrado cierta transgresión su propia supervivencia, pla- deseo enajenado de casarse
en lo que tiene que ver con cer y afirmación (2005, p. 69). que la victimiza y la recluye.
los roles pasivos de la mujer. Quizá esa debilidad e inca- Aspecto que se conecta con
Por el contrario, los roles acti- pacidad de lucha de lo feme- los objetivos tempranos del

la palabra No. 24 Tunja, Enero - Junio de 2014, ISSN 0121-8530 pp. 25-32 30
La Construcción Social de la Identidad Femenina en el Proyecto de la Regeneración en Colombia:
el Caso de Doña Bárbara Caballero y Alzate
Paola Fernández Luna

programa de la Regeneración que Carrasquilla entabla un eran equivalencia de las buenas


y el triunfo de una mentalidad diálogo con la historia, ya costumbres y el carácter moral
que visita el pasado para ha-
conservadora y retardataria que de la mujer. Bárbara no podía
blar del presente. La novela,
fortaleció una nación intran- como un género que ex- seguir siendo soltera, pues
sigente y antimoderna. Esto plora los límites de la expe- dicho estado no era, ni es, bien
último hace que el proyecto riencia humana tanto como visto socialmente, porque “se
regenerador sea muy cuestio- los límites de la experiencia podría considerar que la mujer
nado, pues “En ningún lugar lingüística, permite reconsi- pretendía usurpar un campo
derar el valor de la narrativa
del continente se manifestó en para comprender el pasado tradicionalmente de dominio
forma tan abierta la conser- histórico (2000, p. 75). masculino” (Montes, 2007,
vatización del liberalismo lati- p. 42). Así mismo, Gilbert y
noamericano como en Colom- Bárbara negocia su autono- Gubar afirman que en la esté-
bia, en Rafael Núñez -con su mía y tras la ilusión de una tica literaria se ha fortalecido
célebre frase de “regeneración falsa aristocracia renuncia a a la casta mujer en su pasivi-
administrativa, fundamental su proyecto emancipador.
dad, la han convertido preci-
Un aristócrata advenedi-
o catástrofe”- se confirma la zo que “promete llevarla a samente en el objeto de arte
compatibilidad con la iglesia España” la engaña. En este eternamente bello e inanimado
y el catolicismo político, en su sentido, la lucha de Bárbara que la estética patriarcal desea
afán de adelantar una moder- fracasa y su uso pleno de la que sea una mujer (1998, p.
nidad de corte tradicional” razón queda reducido a una 54). Por ello, Carrasquilla cas-
(Cruz, 2010, p. 47). En este imagen abyecta de una mu-
jer que en medio de su locu-
tigará en nombre de la cultura
sentido, la contradicción de ra se desvanece en el pueblo patriarcal los pequeños actos
dicho proyecto se encarna en minero. de desobediencia, sus inten-
la posición del autor a través tos por la redefinición del ser
del personaje central, pues Gilbert y Gubar sostie- femenino en su época y la bús-
este, luego de alcanzar cierta nen que la mujer ideal que los queda de autonomía. Sus actos
mentalidad moderna, se retrae autores masculinos sueñan con reprobadores son condenados,
hacia el fracaso de su propio generar siempre es un ángel, el fin: una mujer loca. Locura
proyecto al someterse al cum- por eso el modelo eterno de que es la metáfora del carácter
plimiento de unos roles especí- pureza femenina fue represen- enfermizo y débil de la mujer:
ficos subordinados al poder tado por un ángel de la casa “es debilitador ser una mujer
masculino. (1998, p. 35), cuya atribución en una sociedad donde se
designa a la mujer al someti- advierte a las mujeres que si no
Coincidimos con la afirma- miento, modestia y abnega- se comportan como ángeles,
ción de Luís Restrepo en su ción. Pues según esta mentali- deben ser monstruos (1998,
estudio titulado Tomás Carras- dad patriarcal “el poder de las p. 67). De ahí que el deseo de
quilla y la resistencia al proyecto mujeres no es para gobernar Bárbara por establecerse obe-
centralista: ni para la batalla, y su intelecto dezca a un imperativo católico.
no es para la invención o la Ella, a pesar de su lucha por
De esta manera vemos que creación, sino para las dulces la inclusión social de la mujer,
al escribir sobre una villa
órdenes” (1998, p. 39). termina aceptando la norma
rural durante la colonia,
Carrasquilla también está de lo femenino y es así como
reflexionando sobre asun- Recordemos que el matri- se regenera el orden estable-
tos contemporáneos. Es en monio, la familia y los hijos cido en la sociedad patriarcal.
este sentido que decimos

31 la palabra No. 24 Tunja, Enero - Junio de 2014, ISSN 0121-8530 pp. 25-32
Referencias
Cruz, E. (2010). La nación en Colombia del radicalismo a la regeneración (1863- 1889). Una interpretación
política. Bogotá: Pensamiento Jurídico.

Foucault, M. (1976). Vigilar y castigar. Madrid: Siglo XXI Editores.

Gilbert, S. y Gubar, S. (1998). La loca del desván. La escritora y la imaginación literaria del siglo XIX.
Madrid: Cátedra.

Montes, P. (2007). Escritoras colombianas del siglo XIX. Cali: Universidad del Valle.

Rojas, C. (2001). Civilización y violencia. Bogotá: Universidad Javeriana.

Valcke, C. (junio, 2005). Dolores, una metáfora de la escritora en el siglo XIX. Poligramas, 22, 61-77.

la palabra No. 24 Tunja, Enero - Junio de 2014, ISSN 0121-8530 pp. 25-32 32
Copyright of Revista la Palabra is the property of Revista la Palabra and its content may not
be copied or emailed to multiple sites or posted to a listserv without the copyright holder's
express written permission. However, users may print, download, or email articles for
individual use.

También podría gustarte