Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
EL DIPTONGO
Diptongo, según Tomás Navarro, es un grupo vocálico formado por las vocales i- u
combinadas entre sí o acompañadas, cada una de ellas, por otra vocal en una misma sílaba.
Según Matluk es la unidad vocálica formada por un elemento nuclear (que puede sostener
una sílaba) y otro no nuclear.
De acuerdo con su abertura se clasifican en diptongos crecientes y decrecientes.
Los crecientes se forman por semiconsonante y vocal. Van de menos a más. Ejemplos:
Los decrecientes son formados por vocal y semivocal. Empiezan abiertos y se van
cerrando. Van de más a menos:
1
Las vocales /e/ y /o/ se articulan relativamente abiertas frente a la semivocal [ ].
EL TRIPTONGO
Grupo vocálico con i-u al principio y al final y un elemento central predominante que
puede ser: “a”, “e”, “o”. (Navarro Tomás)
Un elemento nuclear entre semiconsonante y semivocal. (Matluk)
Ejemplos:
1 [jä ] –[ kamƀjä s] – (cambiáis)
2 [ję ] – [lįmpję s] – (limpiéis)
3 [wä ] – [aƀerigwä s] – (averiguáis)
4 [wę ] – [bwę ] – (buey)
5 [wạṷ] kwạṷtla – (Cuautla)
HIATO
En general, hiato es el encuentro de dos vocales que se pronuncian en sílabas distintas.
Este fenómeno se presenta en los siguientes casos:
1.- Dos vocales medias, o una media y una abierta (también llamadas “fuertes”), que van
juntas dentro de una palabra pero pertenecen a sílabas diferentes por su condición de ser
núcleos vocálicos, por ejemplo: [akre-e-dó-res], [r̄ e-en-kar-nár], [le-ér]
[ro-ér], [pa-sé-o], [to-á-ya], [a-é-re-o] ká-en], [a-o-ga-đo], etc.
2.- Dos vocales iguales o diferentes separadas ortográficamente por “h” intermedia, por
ejemplo: Al-ba-ha-ca [ạl-ba-á-ka], ni-hi-lis-ta [ni-i-lįş-ta], al-co-hol [ạl-ko-ǫl],
[a-í], etc.
SINÉRESIS
TENDENCIAS VULGARES
2
El símbolo de mayor-menor: > en fonética y filología significa “que da”/ “que se convierte en”.
5.- Existe la tendencia vulgar de reducir el hiato [a-o] en la sinéresis [ạo] y luego en [ạṷ],
por ejemplo:
Hiato Sinéresis Sinéresis vulgar
[ba-ka-lá-o] > [ba-ka-lạo] > [ba-ka-lạṷ]
Igualmente la terminación [–ađo] pierde la consonante “d” quedando [ạo] que se
convierte en [ạu]. Por ejemplo:
Hiato Sinéresis Sinéresis vulgar
[ kan-sá-đo] > [kan-sạo] > [kan-sạṷ]
[ ku- n̮á-đo] > [ku- n̮ạo] > [ ku- n̮ạṷ]
La ultracorrección
Este fenómeno lingüístico consiste en deformar una palabra o una construcción
gramatical correctas, por considerarlas incorrectas. Es “corregir” erróneamente lo que
está bien dicho o escrito.
La tendencia a corregir [bakalạo] a [bakaláđo] es incorrecta; éste es un
fenómeno de ultracorrección porque la primera es la forma original. Esa palabra proviene
del neerlandés y así pasó al español.
En el norte del país sucede lo mismo con la palabra [ko- r̄ é -a] que por
ultracorrección se cambia a [ko- r̄ é-ya] pensando que se trata de un fenómeno análogo al
de [bo-té-ya] que por desgaste se pronuncia [bo-té-a].
Es muy frecuente corregir erróneamente “papalote” que viene del náhuatl papalotl
y deformarlo a “papelote” porque nos inventamos una etimología ingenua que nos hace
pensar que es un papel grandote.
Se incluyen a continuación algunos fragmentos del Fausto Criollo de Estanislao del
Campo3 para ejemplificar la sinéresis vulgar, así como otros fenómenos comunes en el
habla vulgar de Argentina que también se presentan en México, toda Hispanoamérica y
España:
FAUSTO CRIOLLO
3
Estanislao del Campo (1834-1880). Escritor argentino que publicó, en 1866, Fausto. Impresiones del
gaucho Anastasio El Pollo en la representación de la ópera, catalogada como literatura gauchesca.
3.- Allí a juerza de sudar, 10.- Medio cansao y tristón,
y a punta de hombro y de codo, por la pérdida, dentré
hice, amigazo, de modo y una escalera trepé
que al fin me pude arrimar. Con ciento y un escalón.
4
Resbalado. Le habían zafado, jalado o “volado” el puñal.
SINALEFA
Es la unión de la última o últimas vocales de una palabra con la o las del principio de
la siguiente. Dentro de la palabra nunca se juntan más de tres vocales en una sílaba; pero
del enlace de unas palabras con otras resultan frecuentemente grupos vocálicos hasta de
cuatro o cinco elementos. Ejemplos5:
5
Advertencia: En muchas palabras falta marcar la vocal tónica con la tilde del acento, debido a que al escribir
cualquier vocal con signo de abertura, velarización o cerrazón, ya no es posible agregar el acento.
CONCLUSIONES SOBRE LAS VOCALES
Las cinco vocales ordinarias aparecen bajo modalidades distintas: abiertas, cerradas,
medias y relajadas. Creemos que siempre suenan igual, pero si escuchamos con atención,
percibimos esos alófonos, por ejemplo, cuando alguien en vez de pronunciar un [sí] con la
/i/ bien cerrada, por flojera o descuido articula un [sį] con una /i/ abierta que casi suena a
/e/.
Cuando se reúnen varias vocales en una misma sílaba, todas ellas, (con excepción
de la más abierta que es la que constituye el centro del núcleo silábico) se pronuncian con
un rápido movimiento articulatorio, el cual tiende hacia la abertura o hacia la estrechez,
según se trate de la parte creciente o decreciente de dicho núcleo. Ejemplo:
Centro del núcleo silábico
[em-bí-djo͜ a͜ eu-sé-bjo]
[pré-mjo͜ a͜ euxénja]
En general el sistema vocálico del español es estable, por eso, las vocales cerradas y
abiertas no lo son tanto como en otros idiomas. Igualmente las relajadas no llegan sino a un
grado relativamente pequeño de deformación o desvanecimiento, recobrando fácilmente su
carácter de vocales normales. No existen en la pronunciación española vocales anteriores
labializadas o mixtas como la /ü/ y la /ö/ del francés y del alemán. Ejemplo:
Francés: pöintu alemán: tür (puerta), München (Munich) Köln (Colonia) (ü y ö
umlaut).
Ni tan relajadas como en portugués o en inglés. Ejemplo: inglés: go (gou)
Ni tan nasalizadas como en francés o portugués. Ejemplo : francés: lapin, (conejo), lance
(lanza); portugués: canção (canción) solidão (soledad).
Ni largas (que se indican con un guión arriba) y breves (que se indican con un semicírculo
arriba) como en alemán, por ejemplo: Vāter (padre) hāben (tener) hặt (tiene) Māhler (la h
no tiene sonido pero indica que la /a/ se alarga).
Estos hechos han dado base a la divulgación de la errónea creencia de que las
vocales españolas son pura y simplemente los cinco fonemas fundamentales /a/ /e/ /i/ /o/ /u/
con un solo e invariable sonido para cada vocal. Sin embargo, es un hecho que la brevedad,
la claridad y la precisión son los rasgos característicos de las vocales españolas.
Las vocales representan aproximadamente el 50% del material fonético del idioma
español. Las consonantes, aunque forman una serie más numerosa (18) que la de las
vocales (5), no entran en mayor proporción que éstas en la composición de las palabras. El
orden de frecuencia en el que aparecen las cinco vocales dentro del 50% indicado es: /a/ en
un 16%, /e/ un 14%, /o/ un 10.4%, /i/ 6%, /u/ en un 3.6%.