Cueva de las manos - Argen na

La cueva de las Manos es un si o arqueológico y de pinturas rupestres que se encuentra en el profundo

cañadón del río Pinturas, en el departamento Lago Buenos Aires, al oeste de la Provincia de Santa Cruz, en
Argen na.

Su interés radica en la belleza de las pinturas rupestres, así como en su gran an güedad: hasta el momento,
las inscripciones más an guas están fechadas el año 7350 a. C. Se trata de una de las expresiones ar s cas
más an guas de los pueblos sudamericanos y ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco

El significado de tales representaciones es actualmente hipoté co, aunque se especula que formaría parte
de un ritual. También existen impresiones en posi vo de las manos (es decir, logradas mediante el apoyo en
las paredes de la palma de las manos teñidas con pintura). También es posible que, como parte de una
ceremonia o ritual, pintaron las cuevas con las manos dejando constancia de su presencia en el acto. Es
interesante observar que la mayoría de las manos pintadas o calcadas son manos izquierdas.

Para realizar estas manos, u lizaron pequeñas cánulas hechas con ramas huecas o inclusive u lizando la
cavidad bucal para luego escupir y de esta manera estarcir la pintura sobre la pared de la cueva. Al quitar la
mano, quedaba su forma plasmada sobre la piedra.
 Ac vidad 2 - Arte rupestre

Podrán u lizar sus propias manos u otros objetos que tendrán que dejar plasmados sobre una superficie.
Como base se puede usar una cartulina blanca o de color, un cartón, un papel arrugado o una tela.
Las pinturas a u lizar podrán ser pigmentos naturales (café fuerte) o acrílicos y témperas de colores.
También podrán armar sus propias figuras recortándolas sobre un cartón o calándolas sobre un cartón
como las imágenes de ejemplo.
No es necesario recortar manos o u lizar sus propias manos. Si enen ganas pueden elegir otros mo vos
para plasmar, recortándolos o buscándolos, como por ejemplo hojas de plantas.
Tienen que crear sus propios esténciles o formas a plasmar.
Para estarcir o pulverizar pueden u lizar un peine, un cepillo de dientes viejo o un rociador. Acordarse de
cubrir las mesas con papel o u lizar pintor, guantes de látex, porque, como verán, se pueden manchar los
objetos cercanos.
El acrílico es di cil de sacar de las telas y ropas.
También se puede usar un esponja o
un pincel de punta para marcar la
imagen.