El estado colombiano con gran preocupación ve como los recursos que
asigna a las diferentes instituciones estatales se pierden o terminan en manos de personas que no que no deberían; es por esto que entre los años de 1989 y 1993 la nación emprende la búsqueda de mecanismos que ayuden de forma directa a controlar y protección del patrimonio estatal, para esto fue necesario recurrir a los resultados de los estudios realizados por otros países que ya habían pasado por esto, Es así como el estado colombiano tomo como base los anteriores modelos mencionados para la creación del Modelo Estándar de Control Interno MECI, con el fin de buscar mayor eficacia e impacto del control interno en las entidades públicas. Y es entonces con a la Ley 87 de 1993, que se le da cuerpo y se reglamenta el control interno; el cual a su vez se define como un conjunto de acciones, mecanismos, instrumentos y procedimientos que relacionados entre sí, se constituyen en un medio que ayudara al cumplimiento de la misión y objetivos de la entidad, contribuyendo con el mejoramiento de la capacidad de respuesta. Su objetivo es establecer acciones, políticas, métodos, modelos de procedimientos de control y mejoramiento continuo, con el objeto de garantizar una función administrativa transparente y eficiente para dar cumplimiento a las normas constitucionales y legales vigentes, dentro de las políticas trazadas por la dirección y en atención a las metas u objetivos previstos. El Modelo Estándar de Control Interno MECI, contempla aspectos como la organización del Estado, el enfoque sistémico, los conceptos de modelo y los sistemas integrados, la gestión por procesos, la gestión de la calidad, el gerenciamiento del talento humano, la identificación, análisis, valoración y administración de riesgos mediante la utilización de los mapas de riesgos, la comunicación pública y el manejo de la información y la tecnología, así como los temas de autoevaluación, evaluación independiente y planes de mejoramiento, entre otros conceptos, no menos importantes. El MECI comprende tres subsistemas (Control Estratégico, Control de Gestión y Control de Evaluación), nueve componentes y veintinueve elementos, todos conceptualmente distintos y armónicamente relacionados que abarcan cada uno de los componentes y elementos de la administración tanto pública como privada; ya que este modelo es, o a sido tan efectivo que las instituciones de carácter privado y mixtas no podían pasarlo por desapercibido. El control interno se rige por los principios de autocontrol el cual hace referencia a la capacidad de cada Servidor Público de considerar el control como inherente e intrínseco a sus responsabilidades, acciones, decisiones, tareas y actuaciones que estén bajo su responsabilidad, la autorregulación define la capacidad institucional para reglamentar los asuntos que son propios a su función, aplicados de manera participativa y la autogestión, precisando la capacidad de la Institución para interrelacionar la Autorregulación y el Autocontrol a fin de establecer la forma más efectiva de ejecutar su función. El control interno como sistema se divide en tres grandes subsistemas los cuales están integrados por:
Subsistema de Control Estratégico el cual permite a la entidad crear un
esquema de organización fundamentado en planes, principios y normas para establecer acuerdos, compromisos o protocolos éticos con el fin de buscar la autorregulación del comportamiento y la transparencia de la gestión pública permitiendo el buen desarrollo del talento humano. Además le permite tener un marco de referencia para la coordinación y ejecución de las actuaciones Institucionales acorde a su Estructura Organizacional determinando la creación de Cargos y asignación de funciones con el fin de relacionar y determinar responsabilidades y niveles de autoridad. Con la administración de los riesgos permite analizar, valorar, identificar y analizar los aspectos externos e internos que implican exposición al riesgo creando medidas que permitan determinar el grado de exposición en que se encuentra la entidad evitando que estos afecten el cumplimiento de los objetivos, establece métodos, procedimientos, actuaciones, acciones, administración de Información y la administración de recursos necesarios para la implementación de lineamientos para la acción y el desempeño estableciendo u orden de las tareas de cada proceso y llevando unos controles que permitan reducir los riegos. La información primaria nos muestra el conjunto fuentes externas con las cuales la institución mantiene contacto y que unido con la información secundaria procesan datos que se originan y se procesan al interior de la institución las cuales provienen del ejercicio de las funciones las cuales requieren del recurso humano y tecnológico para la generación de la información que soporta las operaciones de la institución, estableciendo controles en la comunicación para la orientación e implementación de estrategias y mecanismos para el buen manejo de los medios de comunicación por los cuales se pueden socializar eficientemente la información institucional en forma amplia y transparente hacia la comunidad. El subsistema de evaluación desarrolla mecanismos de evaluación y verificación donde se rinden informes de autoanálisis y acciones de mejoramiento del sistema de control interno del proceso y la institución, así mismo comprueba el nivel de desarrollo y efectividad del cumplimiento de los objetivos. Es entonces con esta herramienta que se ha logrado establecer un control de tipo integral que no solo supervisa, sino que de forma directo y como complemento de su ejecución brinda las soluciones a cada subproceso administrativo de una organización generando confianza y transparencia para los diferente usuarios tanto de empresa como de la información resultante de la actividad ordinaria y/o de su objeto social.