Universidad de la Serena

Departamento de Ingeniería Ambiental

Protección Ambiental

CONVENIO DE MINAMATA
Trabajo de Protecció n Ambiental

INTEGRANTE: FELIPE LÓ PEZ CALDERÓ N

JAVIERA ROJAS AREYUNA
DOCENTE: MARIO GAETE MADARIAGA
 Universidad de la Serena
Departamento de Ingeniería Ambiental
Protección Ambiental

Resumen

El convenio de Minamata consta de 35 artículos y 5 anexos los cuales se enfocan en

controlar la extracción directa del mercurio, su exportación e importación, su
almacenamiento seguro y su eliminación una vez sea residuo, con el objetivo de proteger la
salud humana y el medio ambiente de las emisiones y liberaciones antropógenas de
mercurio y compuestos de mercurio. El convenio de Minamata también fue facilitado con
ayuda de otros convenios como el convenio de Basilea, Convenio de Estocolmo y el
Convenio de Rotterdam.

1. Introducción

En el mundo existe un amplio uso de mercurio, ya sea en la fabricación de productos o

en la utilización de diversas disciplinas como la minería artesanal. El plomo es un elemento
altamente tóxico y es liberado a la atmósfera por distintos factores, siendo su uso industrial
y comercial el que ha impactado en la salud de las personas y el medio ambiente.

Son variados los daños que puede presentar el ser humano al estar expuesto al mercurio
por periodos de tiempo prolongado, debido que este material se propaga rápidamente en la
atmósfera, alcanzando lugares remotos y alejados con facilidad, por lo que su control es
complejo y no puede depender de una sola nación para controlar los efectos eficazmente,
por lo que es fundamental lograr una colaboración internacional, para tomar medidas y
poder mitigar los efectos provocados por el mercurio.

En 10 de octubre de 2013, es aprobado el primer convenio mundial sobre medio ambiente

que se concierte por casi de una década, el cual recibe el nombre de Minamata, apodado
así por unos de los desastres que afectó la salud de gran cantidad personas en Japón a
mediados del siglo XX.

El convenio Minamata se centra en proteger la salud de las personas y al medio ambiente

de las emisiones y liberaciones de antropógenas de mercurio y compuestos de mercurio,
reduciendo los productos fabricados con procesos que incluyan este material y limitando el
uso en sectores industriales. De igual forma, el tratado busca controlar la extracción directa
del mercurio, su exportación e importación, su almacenamiento seguro y su eliminación una
vez sea residuo.

El presente informe detalla de forma resumida el convenio Minamata, otorgando detalles

importantes y resaltando los artículos más importantes que lo componen, de tal manera que
se explique claramente lo que abarca, y como otros convenios influyen directamente en el
convenio de Minamata.

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2. Convenio de Minamata

2.1. El Mercurio

El mercurio es un metal pesado altamente tóxico que existe de forma natural. Puede ser
liberado al medio ambiente proveniente de causas naturales como la erosión de rocas que
contienen mercurio, incendios forestales, erupciones volcánicas o actividades geotérmicas,
pero también de las actividades humanas. Solo el 10 por ciento, de las 5.500 y 8.900
toneladas de mercurio liberadas cada año a la atmósfera, proviene de fuentes naturales.
El mercurio se utiliza en diferentes productos y procesos debido a sus propiedades
únicas. En la actualidad se destaca su uso en los procesos industriales que producen cloro
e hidróxido de sodio y cloruro de vinilo monómero para la producción de polivinilo (PVC).
Además, se utiliza para la extracción de oro en la minería artesanal, las baterías y la
amalgama dental contienen mercurio. Se utiliza también en los laboratorios, en cosmética,
productos farmacéuticos, incluido en las vacunas como conservante, en las pinturas y las
joyas. Además, el mercurio se libera involuntariamente de algunos procesos industriales,
como la electricidad a partir de carbón y la generación de calor, la producción de cemento,
la minería y otras actividades metalúrgicas, tales como la producción de metales no
ferrosos, así como de la incineración de muchos tipos de residuos.
Una vez liberado, el mercurio permanece en el medio ambiente y circula entre el aire, el
agua, los sedimentos, el suelo, la flora y la fauna de diversas formas. El mercurio puede
transportarse largas distancias en la atmósfera. Asimismo, los microorganismos lo pueden
incorporar y una vez convertido en metilmercurio puede concentrarse en la cadena
alimentaria. La exposición al mercurio se produce principalmente a través de la ingesta de
peces y otras especies marinas contaminadas con metilmercurio, su variante más tóxica y
bioacumulativa. Las personas también pueden estar expuestas al mercurio elemental o al
mercurio inorgánico a través de la inhalación de vapor de mercurio durante las actividades
laborales, derrames o por contacto directo por el uso de mercurio.
El mercurio supone una amenaza mundial para la salud humana y el medio ambiente.
Junto con sus diferentes compuestos, tiene una serie de efectos graves en la salud, entre
los que se encuentran daños en el sistema nervioso central, tiroides, riñones, pulmones,
sistema inmunológico, ojos, encías y piel. Los afectados pueden sufrir pérdidas de memoria
o deterioro del lenguaje, y estos daños cerebrales son irreversibles. No se conocen niveles
de exposición segura al mercurio elemental en seres humanos y los efectos pueden
observarse incluso a niveles muy bajos. Los fetos, los recién nacidos y los niños se
encuentran entre los más vulnerables y sensibles a los efectos adversos del mercurio. El
mercurio se transporta por todo el mundo a través del medio ambiente. Así, las emisiones y
liberaciones de mercurio pueden afectar a la salud humana y al medio ambiente, incluso en
lugares remotos. No hay país que pueda controlar los efectos transfronterizos de mercurio
solo. La única vía para abordarlo eficazmente es mediante la cooperación internacional.

2.2. Convenio de Minamata

El Convenio de Minamata sobre el Mercurio fue el primer nuevo Convenio mundial sobre
medio ambiente y salud que se concierta en casi una década. Se denomina así en
referencia al lugar en el sur de Japón en donde, a mitad del siglo XX, aguas residuales
industriales contaminadas con mercurio provenientes del vertido de metal que realizó una
empresa petroquímica en la bahía de Minamata, donde envenenaron a miles de personas

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provocando síntomas devastadores que pasaron a conocerse como la enfermedad de

Minamata.

La convención de Minamata tiene como objetivo proteger la salud humana y el medio

ambiente de las emisiones y liberaciones antropógenas de mercurio y compuestos de
mercurio. Contiene disposiciones relacionadas con el ciclo de vida completo del mercurio,
incluidos los controles y las reducciones dentro de una gama de productos, procesos y
sectores industriales en los que se utiliza, se libera o se emite mercurio. El tratado también
abarca la extracción directa de mercurio, su exportación e importación, su almacenamiento
seguro y su eliminación una vez sea residuo. La determinación de las poblaciones en
riesgo, el aumento de la atención médica y una mejor formación de los profesionales de la
salud en la identificación y tratamiento de los efectos relacionados con el mercurio también
serán el resultado de la aplicación del Convenio.
El Convenio de Minamata fue aprobado el 10 de octubre de 2013 tras haberse
desarrollado 5 sesiones durante un periodo de tres años, y quedó abierto a la firma durante
un año, es decir hasta el 9 de octubre de 2014. Durante este periodo, 127 estados y una
organización regional de integración económica (la Unión Europea) firmaron el Convenio,
pasando en total 128 el número de signatarios del Convenio.
La primera Conferencia de las Partes del Convenio de Minamata se realizó en
Ginebra del 24 al 29 de septiembre de 2017, con la presencia de gobiernos, organizaciones
intergubernamentales y no gubernamentales de todo el mundo. Esta Conferencia fue clave
para el Convenio, ya que consideró y adoptó decisiones relativas a cuestiones técnicas,
administrativas, operativas y financieras del Convenio.
La ratificación del convenio se realizó por parte de Chile con fecha 27 de agosto de 2018,
por lo que entra en vigor para nuestro país el 25 de noviembre del 2018, en conformidad
con lo establecido en el artículo 31 del mismo.
El artículo 31 del Convenio, dice: “Respecto de cada Estado u organización de
integración económica regional que ratifique, acepte o apruebe el presente Convenio o que
se adhiera a él después de haber sido depositado el quincuagésimo instrumento de
ratificación, aceptación, aprobación o adhesión, el Convenio entrará en vigor el nonagésimo
día contado a partir de la fecha en que dicho Estado u organización de integración
económica regional haya depositado su instrumento de ratificación, aceptación, aprobación
o adhesión.”
En relación, a la aprobación interna del Convenio de Minamata por nuestro país, esta se
realizó por la Cámara del Senado con fecha 22 de agosto de 2018 (Boletín N º 12.031-10) y
el 23 de agosto se aprobó en segundo trámite constitucional por la Cámara de Diputados,
según lo dispuesto en el artículo 54 Nº1 de la Constitución Política de la República. Luego
conforme a lo dispuesto en los artículos 30 y 31 del Convenio, una vez ratificado el
Convenio, éste entrará en vigencia internacional respecto de nuestro país, el nonagésimo
día contado a partir de la fecha que se hubiera depositado el respectivo instrumento de
ratificación. Contando con participación en la tramitación los siguientes Ministerios:
Hacienda, Minería, Relaciones Exteriores, Salud, Medio Ambiente y el Ministerio de la
Secretaría General de la Presidencia.
El presidente de la República se pronunció al respecto, lo que destaca: “Es un metal
sumamente nocivo para el entorno y la salud humana, una vez que es liberado al ambiente
existiendo dos grupos especialmente vulnerables a sus efectos. Primero, los fetos, ya que la
exposición intrauterina a metilmercurio, por consumo materno de pescados o mariscos
contaminados, puede dañar el cerebro y el sistema nervioso en pleno crecimiento, con la
consiguiente afectación a las capacidades de desarrollo cognitivo, la memoria, la capacidad
de concentración, el lenguaje y las aptitudes motoras y espacio-visuales finas del feto. El
segundo grupo, es el de las personas expuestas de forma sistemática a niveles elevados de
mercurio, como, por ejemplo, mineros artesanales de oro. Añade que la inhalación de vapor
de mercurio puede tener consecuencias perjudiciales para los sistemas nervioso e

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inmunitario, el aparato digestivo, los pulmones y riñones, con consecuencias a veces

fatales. En cuanto a los impactos al medio ambiente, el Ejecutivo advierte que el mercurio
puede contaminar los suelos y afectar la calidad de las aguas marinas y continentales.
Precisa que, al verter mercurio en las aguas, éste se transforma en metilmercurio, el que
presenta una alta toxicidad y se acumula en los tejidos grasos de los peces, como el atún, la
albacora o el jurel, pudiendo incluso afectar a quienes los consumen.”
El Convenio de Minamata, fue promulgado en el Diario Oficial de Chile, el jueves 18 de
octubre de 2018, edición Nª 42.183, publicándose con esto, copia autorizada de su texto en
el diario oficial.

2.3. Resumen Artículos Clave Operativos

Artículo 1:
El objetivo del presente Convenio es proteger la salud humana y el medio ambiente
de las emisiones y liberaciones antropógenas de mercurio y compuestos de mercurio

Artículo 2:
Este contiene definiciones del mercurio y del compuesto del mercurio. Se define
como la extracción en la que la principal materia que se busca es el mercurio.

Artículo 3: Fuentes de suministro y comercio de mercurio.

En el artículo 3, se centra en el convenio de Minamata, el cual tiene relación con las
fuentes de suministro y comercio de mercurio, las cuales se establecen como medidas para
la extracción primaria de mercurio, las reservas de mercurio o de compuestos del mercurio,
el exceso de mercurio por el desmantelamiento de plantas de cloro-álcali, así como para la
exportación e importación de mercurio.
Su aplicación no permitirá la extracción primaria del mercurio que no se llevará a
cabo al momento de la entrada en vigor del Convenio, si no que se permitirá la extracción
primaria del mercurio que se llevará a cabo en un periodo máximo de 15 años.
Durante este periodo, solo se podrá extraer el mercurio utilizando la fabricación de
productos de mercurio de acuerdo al artículo 4, al igual que deberán utilizarse en los
procesos de fabricación de acuerdo con el artículo 5 y deberá desecharse de manera
ambientalmente racional como dispone el artículo 11, empleando procedimientos que no
lleven a su restablecimiento, reciclaje, recuperación, reutilización directa o usos alternativos.
El mercurio que procese de la extracción primaria no se utilizará con otros
propósitos, sumando la extracción de oro artesanal y a pequeña escala o su procesamiento.

Artículo 4: productos con mercurio añadido

El artículo 4 se centra en 2 planteamientos para controlar el mercurio en los
productos, en concreto establecer una fecha de eliminación progresiva para algunos, y
especificar medidas que se tomarán al permitir el uso continuado para otros.

Artículo 5: Procesos de fabricación en los que se emplea mercurio o compuestos del

mercurio.
Establece medidas de eliminación como para las restricciones de procesos de
fabricación existentes en las que se emplea mercurio o compuestos de mercurio, también
prohíbe que las nuevas instalaciones que utilizan procesos de fabricación incluidos en el
anexo b (Procesos de fabricación en donde se utilizan mercurio o compuestos) y rechaza
nuevos procesos de fabricación en lo que se use de manera intencionada el mercurio o
compuestos del mercurio.

Artículo 7: Minería aurífera artesanal y en pequeña escala.

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La minería aurífera artesanal y en pequeña escala en la cual se utiliza mercurio cuya

actividad centenaria posee unas dimensiones sociales, medioambientales y económicas
complejas y es uno de los sectores más grandes en la utilización de mercurio y como fuente
de emisiones al medio ambiente. el artículo 7 establece medida a tomar por las partes
donde se lleve a cabo esta actividad.
Artículo 8: Emisiones
Tiene como objetivo controlar y, reducir las emisiones de mercurio y compuestos del
mercurio a la atmósfera, por medio de medidas para controlar las emisiones desde fuentes
ubicadas que se incluyen en el anexo D (Listado de fuentes puntuales de emisiones de
mercurio y compuestos de mercurio a la atmósfera).

Artículo 9: Liberaciones
Se abordan liberaciones al suelo y al agua desde fuentes puntuales antropógenas
significativas que están tratadas en otras disposiciones del Convenio. Las fuentes de
liberación no están identificadas: es responsabilidad de la Parte identificar las categorías de
fuentes puntuales de liberación pertinentes.

Artículo 10: Almacenamiento provisional ambientalmente racional del mercurio, distinto de

los residuos de mercurio
Trata sobre el almacenamiento provisional de mercurio y de compuestos del
mercurio como aparece definido en el artículo 3 sobre Fuentes de suministro y comercio de
mercurio y no se encuentra en el ámbito de residuos de mercurio.

Artículo 11: Residuos de mercurio

Se refiere a los residuos de mercurio, cuya gestión se enfoca de manera
ambientalmente racional y su transporte a través de fronteras internacionales. al hacerlo,
reconoce la fuerte relación sobre esta cuestión entre convenio de Minamata y el convenio
de Basilea sobre el control de movimiento transfronterizas de los desechos peligrosas y su
eliminación.

Artículo 12: Lugares contaminados

Contiene el cuestionamiento de los lugares contaminados por mercurio o compuestos
del mercurio, ya que, aunque no se requiere la descontaminación de dichos lugares
contaminados, este artículo obliga a adoptar medidas cuando actúen para reducir los
riesgos. También promueve la identificación y evaluación de los lugares mencionados, así
como la cooperación.

2.4. Otros convenios que facilitan el Convenio de Minamata

Chile ha ratificado y mantiene vigentes acuerdos y/o convenios, en el orden
internacional, asociados a la Agenda Química Internacional, que favorecen la gestión
sustentable del Mercurio, estos son: el Convenio de Basilea sobre el control de los
movimientos transfronterizos de los desechos peligrosos y su eliminación, el Convenio de
Rotterdam sobre el procedimiento de consentimiento fundamentado previo aplicable a
ciertos plaguicidas y productos químicos peligrosos objeto de comercio internacional y el
Convenio de Estocolmo sobre los contaminantes orgánicos persistentes que corresponde a
un marco de políticas para fomentar la gestión racional de productos químicos.

2.4.1. Convenio de Basilea

Este convenio trata de reconocer cuando una sustancia u objeto consta, contiene o
está contaminado con mercurio y, por lo tanto, es un desecho de Mercurio.
El artículo 11 del Convenio de Minamata, dispone que se deberán de aplicar o
utilizar las definiciones relevantes del Convenio de Basilea como directriz para abordar los
desechos comprendidos bajo el Convenio de Minamata. Mientras que, el Convenio de

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Basilea considera en el cuadro 3 punto 2.2., que se refiere a las fuentes, categorías y
ejemplos de los desechos de mercurio, a la extracción y procesamiento inicial de metales
(aluminio, cobre, oro, plomo, manganeso, mercurio, zinc, metal ferroso primario y otros
metales no ferrosos), indicando como ejemplos de tipos de desechos a los relaves, residuos
del
proceso de extracción, etc.

Por lo tanto, surge como exigencias para nuestro país con la ratificación del Convenio de
Minamata:
- Gestionar los residuos de mercurio de modo ecológicamente racional, teniendo en cuenta
las directrices elaboradas en el marco del Convenio de Basilea y de conformidad con los
requisitos que desarrollará la COP.
- Exigir un transporte a través de las fronteras internacionales conforme al Convenio de
Basilea, o si el Convenio de Basilea no es aplicable, que cumpla las normas, reglamentos y
directrices internacionales.

2.4.2. Convenio de Estocolmo

En este Convenio se establecen obligaciones similares al Convenio de Minamata
respecto de prohibiciones, restricciones y de generación de información en el ámbito del
suministro y comercio, una gestión racional de productos y residuos: la reducción de
emisiones: la identificación y gestión de sitios contaminado; y, el intercambio de información
y sensibilización de grupos de interés.

2.4.3. Convenio de Rotterdam

El Convenio de Rotterdam busca promover la responsabilidad compartida y los
esfuerzos conjuntos de las Partes en la esfera del comercio internacional de ciertos
productos químicos peligrosos, a fin de proteger la salud humana y el ambiente.
Este Convenio apoya la implementación del Convenio de Minamata, ya que, no
permite la importación del mercurio sin los respectivos permisos que debe otorgar la
autoridad gubernamental competente.

3. Conclusión

El Convenio de Minamata se establece como una herramienta fundamental para la

protección global de la salud humana y el medio ambiente sobre la contaminación de
mercurio.

En este convenio entre 128 países, se encuentra la prohibición de nuevas minas de

mercurio o minería primaria de mercurio, la reducción del uso del mercurio en una serie de
productos y procesos, la promoción de medidas de control de las emisiones a la atmósfera y
de las liberaciones al agua y al suelo, el almacenamiento provisional ambientalmente
racional de mercurio como mercancía y su eliminación, los sitios contaminados con
mercurio y la determinación de umbrales para considerar un desecho de mercurio.

Es importante que se mantenga y refuerce la cooperación internacional y regional, mediante

acciones de asistencia técnica y financiera, intercambio de información, y que la temática
del mercurio se contemple en las agendas nacionales de ambiente, salud y desarrollo, con
el fin de facilitar la implementación del Convenio de Minamata en los países y alcanzar así
los objetivos perseguidos.

En Chile, se toma conciencia sobre los peligros de la exposición al mercurio, oficialmente el

año 2018, por lo que ratifica el convenio luego de la aprobación del congreso nacional y con

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la participación de los Ministerios de Hacienda, Minería, Relaciones exteriores, Salud, Medio

Ambiente y Secretaría General de la República.

Chile ya contaba con acuerdos sobre la gestión sustentable del Mercurio, por lo que el
Convenio de Minamata es apoyado por los acuerdos anteriores ayudando así a que el
convenio se logre implementar rápidamente algunos artículos de este.

4. Referencias

bcn. (s.f.). Biblioteca del congreso nacional de Chile . Obtenido de

https://www.bcn.cl/leychile/navegar?idNorma=1124341
O.N.U. (s.f.). Convenio de Minamata sobre el mercurio . Obtenido de
http://www.mercuryconvention.org/