PARROQUIA MARÍA AUXILIADORA

HERVEO – TOLIMA
CHARLA PARA CATEQUISTAS

LUGARES ECLESIALES PARA LA COMUNIÓN SEGÚN APARECIDA

La Diócesis, lugar privilegiado de la comunión

 La vida en comunidad es esencial a la vocación cristiana. Por eso, la
experiencia de fe se vive siempre en una Iglesia Particular. (Cfr. 164)
 La maduración en el seguimiento de Jesús y la pasión por anunciarlo
requieren que la Iglesia particular se renueve constantemente en su vida y
ardor misionero. (Cfr. 167)
 La Diócesis en todas sus comunidades y estructuras, está llamada a ser
una “comunidad misionera”. (Cfr. 168)
La Parroquia, comunidad de comunidades
 Entre las comunidades eclesiales, en las que viven y se forman los
discípulos misioneros de Jesucristo, sobresalen las Parroquias. Ellas son
las células vivas de la Iglesia y el lugar privilegiado en el que la mayoría de
los fieles tienen una experiencia concreta de Cristo y la comunión eclesial.
(Cfr. 170)
 Todos los miembros de la comunidad parroquial son responsables de la
evangelización de los hombres y mujeres en cada ambiente. (Cfr. 171)
 Siguiendo el ejemplo de la primera comunidad cristiana, la comunidad
parroquial se reúne para partir el pan de la Palabra y de la Eucaristía y
perseverar en la catequesis, en la vida sacramental y la práctica de la
caridad. (Cfr. 175)

DÍSCIPULOS MISIONEROS CON VOCACIONES ESPECÍFICAS

Los fieles laicos y laicas, discípulos y misioneros de Jesús, luz del mundo
 Los fieles laicos son: los cristianos que están incorporados a Cristo por e el
Bautismo, que forman el pueblo de Dios y participan de las funciones de
Cristo: sacerdote, profeta y rey. Ellos realizan, según su condición, la misión
de todo el pueblo cristiano en la Iglesia y en el mundo. (Cfr. 209)
 Los laicos están llamados a participar en la acción pastoral de la Iglesia,
primero con el testimonio de su vida y, en segundo lugar, con acciones en
el campo de la evangelización, la vida litúrgica y otras formas de
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apostolado, según las necesidades locales bajo la guía de sus pastores.

(Cfr. 211)