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Cómo implementar un buen plan de aprendizaje en

casa

Para que todo salga bien y pueda repercutir de forma positiva en los
estudiantes todos estos esfuerzos deben de orientarse bien. Los adultos deben
de esforzarse para que los jóvenes no caigan en el descontrol y esto afecte
negativamente a su conducta, a sus emociones y a sus relaciones sociales.
Para ello hay que recordar:

1. Si no es un periodo vacacional, no estamos de vacaciones


Si esta situación en la que no podemos salir de casa no se da durante un
periodo vacacional, no podemos tomárnoslo de vacaciones. Esto significa que
es necesario seguir con el plan de estudios y repasar lo ya aprendido.

2. Habilitar un espacio para el estudio


Los estudiantes, sobre todo cuando son pequeños, se distraen con mucha
facilidad. Es recomendable que se habilite un espacio en el que se pueda
estudiar con el mínimo de condiciones posibles: bien iluminado, una mesa, una
silla, etc. Un espacio adecuado que beneficie el estudio y la salud.

Algunas estrategias para conseguirlo serán:

• Cerrar todas las pestañas del navegador, programas y aplicaciones que


no tengan que ver nada con el tema que se está tratando o estudiando.
• Dejar el móvil en silencio y fuera del espacio habilitado.
• Procurar que el ambiente esté libre de ruidos y otras personas que
distraigan.

3. Marcar unas expectativas


Los adultos y los jóvenes tienen que ser claros sobre las expectativas de
participación en línea. Estudiar a distancia es un contexto diferente de los
estudios presenciales. Es importante para tener éxito que los jóvenes conozcan
bien sus fortalezas y sus límites.

También tienen que tener en cuenta que este nuevo modo de proceder es una
manera de no perder el ritmo del curso y no haya un vacío. No es sustitutivo
de la educación presencial.

La importancia de los horarios y las rutinas para los


niños

Continuamos apuntando algunas de las claves que debe tener un buen plan de
aprendizaje desde casa. Es importante destacar la presencia de horarios
marcados y rutinas en el hogar.

4. La rutina y los horarios


Es importante intentar mantener los horarios (sueño, estudio, descanso)
habituales. Pero la realidad es que estar todo el día frente a la pantalla es
demasiado, tanto para los niños como para los profesores.
Por eso, desde los centros educativos una manera de tantas otras formas de
funcionar es la siguiente: suele haber una clase online por la mañana, se
mandan tareas para hacer durante la tarde y al día siguiente se corrigen. Este
tipo de 'horario escolar' permite la flexibilidad para la organización de toda la
familia.

5. Establecer una buena organización familiar


Más allá del horario que se nos establezca para el plan de aprendizaje de
nuestros hijos desde el colegio, se necesario organizarse a nivel familiar. Una
manera de poder planificar las tareas será así:

• Hacer una tabla con los días de la semana en sentido horizontal y los
horarios en sentido vertical.
• Definir las actividades priorizando su importancia, como a qué hora
despertarse, cuándo comer, horas de estudio incluyendo los descansos,
el tiempo libre, etc.
• Definir qué asignatura abordar ese día.
• Fijar el horario en un lugar visible y de preferencia, para que toda la
familia lo pueda consultar.

6. Hacer pausas
Para que sea posible mantener la atención durante el estudio, es necesario que
los niños hagan pausas cada cierto tiempo. Cuando el trabajo depende del
niño, es decir, hacer los deberes o estudiar, es recomendable que se den
pausas cada 50 o 60 minutos para no saturar la capacidad de atención de los
estudiantes.

Para que los estudiantes mantengan un 'foco activo' se recomienda que


después de ese periodo de concentración se hagan pausas para hacer algo
diferente y descansar el cerebro. Las actividades de ocio son beneficiosas,
pero hay que poner limitaciones, al igual que con las tareas de estudio.

Además, es importante alimentarse bien y tomar bastante agua. Las pausas


serán buen momento para volver con más fuerza a los estudios.

7. Un plan de aprendizaje común


Es recomendable que se mantenga la comunicación alumno-docentes-padres y
un plan de estudios común para evitar que cada estudiante estudie por su lado
lo que quiera. Lo ideal es que todos tengan una metodología en común.
Cuando el alumno tenga dudas debe escribir al profesor y consultar todo lo que
necesite así como se hace en la educación presencial.

8. El aprendizaje debe ser atractivo

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