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social y con hijos adolescentes. View project
All content following this page was uploaded by Carlos Vecina Merchante on 27 July 2015.
ISBN: 978-84-616-3236-7
DL: PM 157-2013
Introducción ............................................................................... 9
Invisibilización de la inmigración.............................................. 10
Algunas consideraciones sobre rendimiento académico ........ 16
El discurso docente, otro factor a considerar .......................... 31
Docentes y representaciones sociales. Cerrando el círculo 36
Categorización del alumnado .............................................. 40
La interacción social asimétrica y el efecto en los alumnos 47
La otra parte de la interacción ............................................. 50
Análisis del discurso docente .............................................. 54
Relación del discurso docente con espacios discursivos más
amplios..................................................................................... 86
Un marco para el debate ......................................................... 93
Referencias bibliográficas...................................................... 105
Introducción
9
La pretensión es aportar al debate argumentos, para continuar avanzando
en la investigación sobre la imagen y el discurso dominante en torno a la
inmigración. Aspectos contextuales de la comunicación que no deben
pasarse por alto, en la continua construcción de un espacio social de
relaciones, como es la escuela y los fines que persigue. Los riesgos son
diversos, tanto para la institución escolar, por tener dificultades para
cumplir con sus fines, para los propios docentes por las dificultades de
ejercer su práctica con ciertas garantías y para los alumnos por poder
acabar siendo conducidos a situaciones de desigualdad social,
diferenciación y dificultades para rentabilizar su paso por la escuela. Un
escenario en el que la autoexclusión se presenta como una amenaza y un
factor a considerar en la reproducción social. No se trata de un
planteamiento radicalmente determinista; más bien se trata de una crítica
constructiva para llamar la atención sobre aspectos susceptibles de
cambio, pudiéndose convertir en potenciales que generen otros
resultados académicos, e incluso extiendan la acción de la escuela más
allá de sus paredes, favoreciendo una educación comunitaria.
Invisibilización de la inmigración
10
informe recopila una amplia gama de datos que definen la percepción del
fenómeno en sus inicios.
1
Presenta tablas de contingencia con los resultados obtenidos de la “Encuesta sobre racismo 1990”.
2
Se hace una exposición y análisis de 10 años de investigación sobre las actitudes hacia los inmigrantes en
España.
11
Los barómetros mostraban las actitudes de la población española,
3
respecto a la inmigración y los inmigrantes , el fenómeno aparecía situado
en una posición de importancia, como uno de los problemas principales
4
de España ; en ese momento, el lugar que ocupa es más o menos
constante, ya que si bien se observan variaciones, éstas no son
consecuencia de un cambio en la percepción de los encuestados, más
bien de la existencia de factores coyunturales, de fuerte impacto entre la
opinión pública, aunque de carácter transitorio; esta condición hace que
cuando se regresa a la normalidad informativa, la inmigración vuelva a
ocupar una posición destacada (que apenas perdió). Cea (2005) realiza
un estudio sobre los barómetros del CIS, dentro del mismo período
analizado aquí, llega a la misma conclusión sobre la variación de la
posición que ocupa la inmigración, en el conjunto de problemas que
preocupan a los españoles, la autora observa cómo ésta ocupa una u otra
posición, en función de situaciones coyunturales que tengan o no que ver
con el fenómeno migratorio; pero que en global se mantiene en una
posición estable en todo el período.
A lo largo de los barómetros de los cuatro primeros años del siglo XXI
(2001-2004) la media del porcentaje de población que considera el
fenómeno de la inmigración como uno de los tres principales problemas
que tiene España, así como el lugar que ocupa en el global de las
encuestas, tendrá cierta importancia relativa. Los datos que aparecen en
la tabla1 para ese período dan muestra de ello.
3
Se ha llevado a cabo un análisis de todos los barómetros realizados por el Centro de Investigaciones
Sociológicas (CIS) comprendidos entre los años 2001-2004. Cuya ficha técnica se expone a continuación:
Ámbito nacional, universo: población española de 18 años y más, tamaño muestral: 2.492 entrevistas
correspondientes a 168 municipios y 48 provincias. Consultado en:
http://www.cis.es/cis/opencms/ES/2_barometros/depositados.jsp.
4
Las medias que presentan los barómetros obligan a tratar los resultados con cautela debido a la falta de
información que se ofrece de la desviación típica y su varianza, y al presentar la media de las opiniones de
comunidades autónomas muy diferentes respecto a la preocupación que puedan tener sobre la inmigración (se
supone que esta será más acusada en aquellas zonas en las que hay más inmigración).
12
Tabla 1: La inmigración como uno de los tres problemas más importantes
5
de España
Año 2001 2002 2003 2004
Uno de tres problemas 15,88% 19,53% 15,61% 16,16%
Posición del problema 4,22 4,1 4,4 4,75
Fuente: elaboración propia a partir de los datos del CIS (2005)
Así pues, tomando como referencia los datos que aporta el barómetro, la
opinión de los españoles respecto a los principales problemas que existen
en España, se mantiene bastante estable a lo largo de estos cuatro
últimos años, situándose alrededor del cuarto lugar.
5
Se trata de un análisis realizado en una situación percibida dentro de la normalidad.
13
• La media aritmética de los cuatro años, respecto al
porcentaje de población que percibe la inmigración como
uno de los principales problemas que afectan a los
españoles de forma individual, se sitúa en torno a 7,22%.
• La media aritmética del mismo período de tiempo, respecto
a la posición en la escala, se sitúa en torno al lugar 6,72.
14
La otra lectura puede no ser tan positiva, pues podría ocurrir que en un
momento como el actual, con una dura situación económica, en la que los
recortes sociales están mermando derechos y reduciendo servicios;
descartando otras alternativas de construcción social más igualitarias
(Navarro, Torres y Garzón, 2011) la sociedad se olvidara de los más
desfavorecidos y entre éstos, se situaría parte de la inmigración
extracomunitaria en situación de vulnerabilidad social. La invisibilidad de
estos colectivos puede traer graves consecuencias sociales y un
detrimento de la cohesión social.
15
Todo esto nos lleva a pensar que la inmigración y su presencia en las
aulas continúa siendo un hecho social pendiente de vehicular (cabe
advertir que el curso 2011-12 ya se empieza a notar un descenso del
número de alumnos, aunque no por eso dejan de tener una presencia
destacada). Los datos sobre rendimiento escolar y sus diferencias por
origen, tanto geográfico como social, indican la falta de buenos
resultados, la desigualdad permanece y se precisan medidas que la
reduzcan. Está por ver la repercusión de las medidas de reajuste
presupuestario sobre la calidad de la enseñanza y los resultados
educativos; los mensajes de la comunidad escolar no son muy
halagüeños, por lo que puede deducirse un empeoramiento de la
situación; a la que se uniría el descontento de parte del colectivo docente,
por sus condiciones laborales y la reducción de recursos humanos,
materiales y económicos. Aunque para ello habrá que esperar como
mínimo a los resultados de Pisa 2012 y ver si ya recogen los cambios en
las políticas, o si las consecuencias sucederán a medio plazo.
16
esos puntos más subjetivos que también forman parte de los debates
existentes.
17
Presenta tres tipos de resultados: 1) Resultados globales y niveles de
rendimiento en comprensión lectora y en las competencias matemáticas y
científicas. 2) La relación entre los resultados y distintos factores
considerados de relevancia en cuanto a la incidencia sobre éstos. Se trata
de los contextos sociales, económicos y culturales de las familias; así
como circunstancias individuales de los alumnos y de la organización y el
funcionamiento de los centros. 3) Análisis de tendencias que se observan
a lo largo del tiempo.
18
la OCDE, el intermedio indica los que teniendo resultados inferiores a la
media de la OCDE, todavía se sitúan por encima del conjunto del Estado;
por último, en el tramo inferior se encuentran aquellos que presentan
resultados por debajo de la media de España. Estas cifras indican la baja
redistribución de la adquisición de conocimientos formales (del currículum
educativo) que existe entre los diferentes territorios; se constata una
fuerte desigualdad, con mejores posiciones en las zonas situadas
geográficamente del Norte, junto a Cataluña y Madrid; mientras que las
del Sur junto con las islas, Ceuta y Melilla, obtienen los peores resultados,
muy por debajo de la OCDE y de la media española.
19
Parece ser que considerando esta variable de forma aislada, las
diferentes puntuaciones entre alumnos son notables, por ejemplo en el
caso de que los padres tengan o no estudios primarios (llegando a
diferencias en torno a los 50 puntos) también destacan los de estudios
superiores, con puntuaciones respecto al resto superando en 30 puntos.
El informe concluye que entorno al 50% de las desigualdades entre
países pueden deberse a variables del entorno, entre las que se
encuentran las mencionadas de la situación socioeconómica, pero
6
también otras como la inmigración . Lo que sí se tiene claro es que es
muy difícil encontrar razones unicausales en los resultados y sus
diferencias, pues la realidad social es muy compleja y el estudio realizado
no hace más que confirmar este hecho, desde el momento en que se
considera que es una conjugación de diversos factores lo que genera
dichos resultados y sus asimetrías.
6
Cabe advertir que el informe Pisa considera alumno inmigrante aquel cuyos padres hayan nacido en el
extranjero, independientemente de dónde lo haya hecho él. Se cita primera o segunda generación, pero se
incluyen todos en el grupo al tratar el tema de forma general.
20
ésta es muy escasa, es decir tiene repercusión nula, tal es el caso de
Hong-Kong, Canadá, Australia, Jordania o Nueva Zelanda e Israel.
Carabaña (2008, p.39) tras este análisis, se plantea la cuestión sobre qué
parte de las diferencias entre nativos e inmigrantes puede deberse a la
escuela y qué parte a otros factores. Pues bien, parece ser que el factor
de mayor influencia vuelve a ser el índice que aglutina aquellas variables
relacionadas con la situación social, económica y cultural de las familias.
Incluso se comprueba como una vez se neutraliza la influencia de esta
variable, las diferencias entre alumnos inmigrantes y nativos se reducen
considerablemente; siendo además más acusada en aquellos países con
mayor diferencia entre alumnos.
21
En cuanto al tema de la lengua (aspecto que forma parte de ese índice)
no se encuentran demasiadas explicaciones al hecho de hablar en casa
una lengua distinta a la de la escuela. Es cierto que aparecen diferencias,
siendo los alumnos que hablan una lengua distinta en casa los que
obtienen peores resultados, pero éstas dejan de ser claras cuando se
comparan resultados de diferentes países, no parece entonces que ésta
sea una variable única, sino que pueden existir otras perturbadoras que
incidan en los resultados. Se ha barajado también que el factor clave
pueda estar en el origen de los alumnos, pero tampoco genera unas
diferencias similares en todos los países.
22
que tienen recursos para ello. En este sentido, si atendemos a la
efectividad de España, se trata de un sistema de enseñanza
notablemente eficiente, pues con menor inversión que otros países de su
entorno consigue resultados aceptables.
7
La distribución media de alumnado inmigrante en España se situó en el curso 2010/11 en un 82,7%.
Presentando Melilla los valores más altos (95,1%) y el País Vasco los más bajos (67,8%).
23
Autores como Salinas y Santín (2012) plantean alguna hipótesis en
relación a las diferencias entre resultados de centros públicos y
concertados, pues parece que los alumnos con menores recursos
económicos obtienen mejores resultados en los segundos. La primera
hipótesis consistiría en considerar que las escuelas concertadas son más
productivas y eficientes. La segunda consideraría una selección del
alumnado, favoreciendo la presencia de alumnos nativos con mejor nivel
socioeconómico y dificultando la entrada a los inmigrantes, al dar por
hecho su bajo rendimiento.
24
constatar un descenso en los resultados de los alumnos inmigrantes en la
concertada; por ejemplo en el caso de lectura, “El efecto positivo
encontrado en Lectura para los alumnos de primera generación
desaparece cuando la proporción de inmigrantes respecto al total de
alumnos alcanza el 8%.” (p.402)
25
Llegados a este punto, lo que sí parece mostrar Pisa es una relación
importante entre aspectos como la situación socioeconómica (hemos visto
que esta etiqueta implica un índice que reúne variables más concretas);
aunque interesa también qué otros factores se escapan a este análisis; la
idea es partir de que la escuela tiene funciones implícitas con la
comunidad, no se puede ceñir su evaluación a los resultados académicos
de los alumnos en las materias llamemos troncales. Además existen otros
factores pertenecientes al contexto en el que los alumnos, sus familias y
grupos de iguales se relacionan, socializan y ponen en práctica sus
conocimientos de la realidad, es dónde ocurren sus vivencias más
próximas; parece que el contexto también puede ser un punto de mira en
el que evaluar el desarrollo social de los alumnos inmigrantes y otras
8
minorías, tanto étnicas como sociales .
8
Me refiero a colectivos que podrían considerarse un grupo por su similitud en cuanto a situación social e
intereses consecuentes con ésta.
26
negativamente sobre los alumnos, sus expectativas y el ethos de clase.
Favoreciendo en definitiva su autoexclusión de un sistema educativo que
no se correspondería con sus inquietudes, cuya relación con esa
comunidad podría ser incluso negativa.
27
disponer de un lugar adecuado para el estudio hasta llegar a otros en los
que las obligaciones familiares de los niños no les permiten pensar en
estudios, pues en casa deben dedicarse a otras cosas.
28
En educación secundaria: Los niveles de logro educativo se encuentrarían
favorecidos por el gusto hacia la lectura, las expectativas de estudio y la
frecuencia en que la familia pregunta por los resultados se los exámenes.
En contraparte, los consejos del maestro, la exigencia de la familia en el
repaso de tareas en primaria, así como la asignación de tareas
especiales, las visitas a la biblioteca escolar y el enojo del maestro en
secundaria, son aspectos que desfavorecen el desempeño escolar.
(Carvallo, Caso y Contreras, 2007: p.10)
29
peso del capital cultural, el conocimiento de la dinámica educativa, los
recursos económicos o las expectativas escolares (…) sino a la idea de
que la gravedad del fracaso (…) se deben a la escasa atención prestada
por las familias a la educación y su poca colaboración con la escuela y los
profesores.” (p.186)
30
del grupo de iguales. La clave está en que estos se encuentran a su vez
en el entorno escolar; paradójicamente “…el único motivo que los
alumnos más proclives al abandono encuentran para permanecer en la
escuela.” (p.186) las actitudes contrarias a la escuela, sin tener en cuenta
aquellos grupos concretos que sí rechazarían a la institución, por lo
general vendrían de la propia escuela y lo que allí acontece. “…al
descuido de la institución se une la dinámica autoalimentada del grupo de
pares…” (p.186)
Van Dijk (2003) concibe el discurso como una de las prácticas sociales
más importantes condicionadas por las ideologías; éstas se expresan en
el discurso y son, muchas de ellas, aprehendidas al interaccionar con
otros miembros del grupo (desde el hecho de escuchar a otros hasta el de
ver la televisión o leer los periódicos); son creencias sociales compartidas,
no se trata de una situación de supremacía, cada uno además de
compartir factores de otras ideologías, no propias del grupo, tiene su
31
experiencia personal que influye, por ejemplo, a la hora de ejercer juicios
de valor, opinar sobre acontecimientos, etc. El mismo grupo,
caracterizado por compartir ciertos rasgos comunes de cierta ideología,
tiene en su seno subgrupos de variantes ideológicas.
32
representaciones sociales sobre los alumnos a partir de propiedades
objetivas que los caracterizan y de su subjetividad, es decir, de sus
predisposiciones y esquemas de percepción, fruto de su experiencia y de
la interacción con los demás. A esto añade el hecho de que los profesores
reciben descripciones y etiquetas de otros docentes; estos factores
constituyen una base importante para la configuración de estas
representaciones.
33
autora de “docente pasivo”, más maleable y permeable a los discursos
que se solidaricen con su concepción de una situación laboral y
profesional poco gratificante, debido a las dificultades percibidas en el
ejercicio de la docencia.
Aunque también puede ocurrir como sostiene Doise (1991) que las
posiciones minoritarias, disidentes, a pesar de ser excluidas del discurso
general, mantenido por la mayoría, no por eso pueden ser totalmente
anuladas, pues tal vez acaban contribuyendo a que se formen nuevos
argumentos, quedando de esta forma involucradas en el discurso
dominante. Liu y Sibley (2006) advierten que las actitudes, mantenidas en
ciertas representaciones sociales, son difíciles de cambiar, cuando se
sustentan por un amplio segmento de la población, pero esto es posible
desde el momento en que se concretan y aíslan, abriendo la posibilidad
de argumentos que mantengan una posición que justifica un cambio de
actitud. Aunque para esto es necesario contrarrestar la fuerza del
consenso del grupo mayoritario, dominante, ya que en sus
representaciones utiliza argumentos más generalistas.
34
problemas comunes, transformado en código, en lenguaje común, éste
sistema servirá para clasificar a los individuos y los acontecimientos, para
construir tipos respecto a los cuales se evaluará o clasificará a los otros...”
(Jodelet, 1988, p:488).
35
autores, viven con temor el hecho de que se rompa la hegemonía cultural
que transmite la escuela.
36
propio desarrollo de la docencia y sus metodologías pedagógicas;
pudiendo pasar inadvertidas en el día a día de la escuela, pero que
encierran fuertes componentes de diferenciación de género, definen
categorías y clasifican a unos y otros poniendo límite a sus conductas y
al desarrollo de sus cualidades personales.
37
se clasifica al alumno. Belloni y Villalobos (2006) identifican a los
profesores que muestran representaciones sociales negativas hacia los
alumnos, relacionadas con las bajas expectativas de éxito académico,
como aquellos que limitan sus perspectivas de logro y tienden a reducir
las oportunidades de proponer desafíos en el aprendizaje de esos
alumnos. Mientras que aquellos con mayor disposición a buscar y aplicar
nuevas herramientas pedagógicas, para mejorar la eficacia de su trabajo,
tienen mayor nivel de exigencia hacia los alumnos.
38
de estudiantes y maestros y la protección de la autoestima del grupo
explican la discordancia en la percepción.
39
de la adolescencia, en cuanto a la forma de ver la vida, de expresarse, de
sentir, etc. y por otra, a la defensa de su propio grupo y la identidad social
a éste adscrita.
40
con él y haya experimentado su resentimiento. Llega a estas conclusiones
y estas conclusiones se transmiten de unos a otros en la sala de
profesorado.” (1995, p.215).
Siguan (1998) frente a estas concepciones, opta por una visión menos
centrada en la figura del docente; tras diversos estudios sobre la vida en
las aulas y la interacción que se produce entre profesores y alumnos,
llega a la conclusión de que no existe un trato directo negativo por parte
de los docentes hacia los alumnos de grupos étnicos minoritarios, sino
que es el propio sistema educativo y la forma en que el profesor organiza
la clase lo que acaba marginando a ciertos alumnos, entre ellos los
inmigrantes caracterizados por una particular vulnerabilidad. El proceso
seguiría la siguiente dinámica (p.105-108):
41
• El profesor examina a los diferentes alumnos y los categoriza en
función de su similitud con el modelo del “buen alumno”. Este
hecho propicia un trato distinto hacia los alumnos, en función de
esa condición, éstos gozan así de un estímulo suplementario frente
al resto, sobre todo aquellos considerados por el docente menos
capaces de seguir el ritmo, de esta forma van quedándose cada
vez más al margen.
• La mayoría de profesores ofrecen unas clases “magistrales”,
acompañadas de preguntas individuales, como forma de mantener
la interacción con el aula y ver si se entienden las explicaciones.
Esta acción vuelve a propiciar la exclusión, ya que las preguntas
suelen dirigirse a ciertos alumnos. “...es aquí donde el maestro
tiende a hacer intervenir a los mejores alumnos que le sirven de
control en el desarrollo de sus explicaciones.” (p.107).
• Los profesores proponen unas actividades a unos alumnos y otras
para aquellos que son objeto de adaptación curricular. El problema
radica en el tiempo y esfuerzo que dedican a estos últimos. Siguan
comenta el caso de un docente que, a pesar de invertir un esfuerzo
considerable, renunciaba a hacer lo mismo con una niña china,
pues consideraba que no rentabilizaría el tiempo perdido, debido a
que iba demasiado atrasada y su conocimiento de la lengua era
escaso.
42
o el fracaso escolar al que están abocados muchos de ellos. Siguan
intenta buscar nuevas vías de comprensión sobre el acto de la
categorización y sus consecuencias negativas.
43
las diferencias étnicas del alumnado puede establecerse a lo largo de un
continuo que va desde una menor hacia una mayor distancia respecto a lo
que podríamos llamar la imagen del alumno modélico” (p.75). Dentro de
este continuo se pueden incluir las explicaciones que presentan los
profesores a la hora de establecer las razones del fracaso escolar de los
alumnos pertenecientes a minorías étnicas.
9
Datos pertenecientes a un estudio con una muestra de 113 encuestados,
estudiantes de magisterio de la Universidad de Córdoba.
44
cual se reduzca la influencia de estos estereotipos, en su percepción de la
realidad del aula, ya que éstos son más partidarios de metas vinculadas
con su estatus social y su carrera profesional. La propuesta, para
menguar el efecto de las visiones negativas de ciertos grupos, viene por
la vía de la formación permanente y continua de los profesionales, en la
que “la representación sobre los grupos y personas, con los que se
interactúa, debería ocupar una posición preeminente, entre las
dimensiones que componen los programas de educación para la
diversidad”. (2003, p.29).
Sarrate (2003) presenta los resultados sobre un estudio cuyo objetivo era
conocer la situación socioeducativa y los problemas de exclusión /
45
integración social que presentaban los niños de distintas etnias y su
incidencia en las instituciones educativas, se centró en la Comunidad
Autónoma de Madrid. De entre los aspectos que se consideraron
importantes, encontramos el referido a la actitud del profesorado ante la
diversidad cultural, en concreto el que la autora denomina “percepción
general de las culturas”, cuya valoración realiza a través de las preguntas
con respuesta codificada de un panel compuesto por treinta y ocho
adjetivos bipolares relacionados con la actitud hacia la cultura de los
alumnos de minorías étnicas (p.203).
46
responder de forma equilibrada, con sentido de mesura, a veces incluso
de cierta reserva. La experiencia cotidiana ha dotado a estos
profesionales de un talante prudente que se manifiesta en sus
respuestas.” (Sarrate, 2003, p:206).
47
Podemos citar sobre este aspecto el paradigma del pensamiento del
profesor, dado que hace referencia a procesos cognitivos que inciden en
la forma de organización de su práctica docente, sus actitudes y
conductas desarrolladas. Siguiendo a Clark y Peterson (1986) podríamos
concebir tres elementos clave en la relación que se establece entre el
docente, sus acciones y sus efectos: La conducta ejercida por el profesor
en clase, la que muestra el alumno y el rendimiento de éste. Se produce
una relación dinámica y recíproca, entre estas tres variables, formando
parte de un círculo en el que cada una es, o puede ser, causa y
consecuencia de la otra. Bajo esta consideración no se entiende la
relación e influencia profesor – alumno, desde un punto de vista
unidireccional, sino bidireccional y recíproco.
48
incluso, sobrevivir en forma de baja autoestima en el futuro. “El
resentimiento, la amargura y la frustración que sienten los chicos afro
caribeños hacia la escuela –debido a las actitudes de ciertos profesores y
profesoras (...)- lo que los chicos dicen sobre su percepción de su
interacción con el profesorado refleja claramente la típica situación de
‘nosotros y ellos’.” (Wright, 1995, p:217).
Importante es, no cabe duda, la figura del profesor para los alumnos y la
experiencia vivida en el paso por la escuela. Fernández-Enguita (2000)
centrándose en el pueblo gitano, da cuenta de los recuerdos escolares,
calificándolos de experiencias desagradables de rechazo o
descalificación, una vida escolar marcada por toda una serie de normas
ajenas a las interiorizadas por su familia, su cultura y el contexto en el que
se educan, que no hacen más que atentar contra su autoestima: “
…muchos podrían resumir su experiencia escolar diciendo que los
sacaron de su medio social y los llevaron a la escuela para descalificarlos,
para mostrarles y demostrarles que no eran un grupo socialmente distinto,
sino personas individualmente inferiores. Después de todo, lo que la
escuela hace con estos niños no es más que convertir su diferencia
cultural en fracaso" académico o escolar...” (p.71).
49
académicas que les suscitan estos alumnos: “Pues que somos
incapacitados, somos incapaces para seguir el bachillerato, o sea eso me
estaba diciendo, y yo le dije que voy a seguir bachillerato y me dijo, no, te
doy un consejo, es mejor que sigas un curso formativo, porque es que no
te va a resultar tan difícil como el bachillerato….” (p.60).
Nos referimos aquí a la forma en que reciben los alumnos los mensajes
en la comunicación verbal, gestual e intersubjetiva que se genera en la
interacción. Rodríguez (1991) advierte de la existencia de ciertos factores
que influyen en la percepción que tiene el alumno del profesor, como son:
El hecho de un estatus superior, la reputación y el autoconcepto.
Respecto a la autopercepción positiva de los alumnos, está relacionada
con la expectativa y percepción que tenga el profesor sobre ellos; la
inadaptación escolar va seguida de una autopercepción negativa, además
de ser reflejo de la inadaptación social. Presenta cuatro factores de
influencia en la percepción del profesor por parte del alumno:
50
dimensiones: organización, comunicabilidad didáctica y uso de
procedimientos motivacionales.
• La relación afectivo-personal, el bajo grado de afectividad y
expectativas se asocian con la inadecuada capacidad docente y un
alto nivel de exigencia.
• El “entusiasmo profesional”, tendencia docente a la despreocupación
y desorganización, la baja capacidad de motivación, el ser tolerante
en exceso y permisivo.
• Afecto-control, el acercamiento positivo del profesor a través de sus
expectativas, afecto y técnicas motivacionales sobre los alumnos,
ejerciendo a la vez el control y la supervisión en búsqueda del
rendimiento.
51
papel otorgado a la interacción con profesores y pares, ésta se podría
enmarcar dentro de un continuo en el que los extremos estarían ocupados
por los actores en juego. Distingue tres grupos de jóvenes:
52
implicación familiar en la educación de sus hijos, etc.; factores de este tipo
aparecieron cuando se daba cuenta de algunos resultados de Pisa.
Aunque en este caso merece la pena adentrarse en ese otro punto de
debate, las representaciones sociales de los docentes y su configuración
a la hora de hacer valoraciones sobre el alumnado.
53
delante del resto de compañeros. Muchos de los entrevistados
reclamaban un trato de igual a igual, de adulto a adulto, guardándose
ambos el mismo respeto.
10
Una muestra de 2 grupos de discusión por cada centro (total 8 grupos).
54
Cuadro 1: Alumnado inmigrante por centro y otras características
Centro Titularidad Enseñanza A. Inmigrante
C1 Pública Infantil y Primaria 46%
C2 Pública Infantil y Primaria 5,5%
C3 Concertado Infantil y Primaria 3,8%
C4 Pública Secundaria 24%
Fuente: Elaboración propia según información de los centros
55
discursivo, puede ser muy útil para centrar posibles debilidades,
amenazas, fortalezas y oportunidades; todo depende del análisis de estos
indicadores y de la implementación de iniciativas que los tengan en
cuenta.
11
El discurso se presenta en ocasiones unificado y en otras con ciertas
variantes, las diferencias más claras se encuentran bajo la premisa de
pertenencia a uno u otro centro, si éste es público o concertado, y si tiene
o no una fuerte presencia de alumnos de origen inmigrante. Bajo esta
particularidad se han podido identificar incluso gradaciones; así, los
docentes se situarían en un continuo que iría desde los centros en los que
la presencia es una realidad, a aquellos en los que no existe ni la
previsión de que eso vaya a ser posible. Veamos por separado cada uno
de estos factores y las áreas discursivas que concentran; la descripción
se inicia con la representación que muestran sobre los centros de
enseñanza, así nos sirve para presentar algunas particularidades de la
muestra.
11
Un discurso unificado en el sentido de que no existen claras diferencias entre unos y otros docentes,
independientemente del centro al que pertenezcan.
56
que se pertenece, considerando esta circunstancia, se articulan una serie
de discursos, diferenciados principalmente por la situación en la que se
encuentran los centros de enseñanza propios, aparecen así diferentes
posiciones de lo que se considera un problema, en esto sí coinciden todos
los sujetos del estudio, aunque unos lo ven más cercano que otros. En los
párrafos siguientes se muestra un análisis de la articulación que aparece
en cada uno de los centros.
Centro 1
57
hacen responsable de su situación, por la alta concentración de
inmigrantes.
Centro 2
58
profesionales. En general, tienen una representación negativa sobre una
posible elevada incorporación de alumnos inmigrantes, ven que el centro
dejará de ser lo que es y esto aparece como un problema que crea
incertidumbre. La Administración aparece como la responsable de este
cambio, pues la concentración y no distribución equitativa del alumnado,
favorece la existencia de los problemas derivados por la falta de
diversidad por origen, tanto social como de nacimiento. De esta forma, no
todos los centros pueden responder en igualdad de condiciones.
Centro 3
59
Centro 4
60
enseñanza en su desarrollo actual y la poca implicación de los padres de
los alumnos inmigrantes, como un factor negativo que viene a incrementar
las dificultades que impiden una influencia positiva de la enseñanza hacia
estos alumnos. Veamos algunas de las intervenciones de este grupo:
“… todo esto hace que tú (…) desde el centro se intenta hacer un trabajo,
pero debido en parte a las familias o al entorno familiar que les ha tocado
vivir queda como parado, yo veo muchas dificultades, a nivel familiar, de
recursos, habilidades sociales, higiene y todo… yo lo veo como un cúmulo
12
de problemas y carencias de difícil intervención.” (3 6 1 13 gc4a) . La
posición enfrentada la podemos observar en este otro fragmento: “El
problema es si aquí, en la escuela, reproducimos los guetos, los guetos
en el mismo centro, aquí está el problema, ésta sería la pregunta:
‘¿Nosotros reproducimos el exterior?” (3 6 1 41 gc4a)
12
Se ha conservado la codificación de las citas que constan en el documento original, por si fuera de interés su
consulta.
61
El centro aparece como una liberación para los alumnos inmigrantes,
parece que esta circunstancia está relacionada, con el hecho de dar por
sentado que estos alumnos tienen escasas posibilidades y que la escuela
se presenta como una oportunidad, independientemente de que estudien
o no. Un lugar de liberación para algunos alumnos de minorías, en el que
tienen un contacto con otra realidad distinta a la que están habitualmente
acostumbrados.
Hay que considerar que cada uno de los centros de enseñanza cuenta
con unas características que los distinguen del resto, en concreto el
mayor peso sobre esta “distinción” Bourdieuiana, en la que el hecho de
ser un centro público o privado (concertado) o de tener mayor o menor
presencia de alumnado inmigrante, es el motivo principal para mantener
una distinción positiva sobre el resto; asociada ésta a la representación de
una calidad en la enseñanza que se trasmite.
Centro 1
62
No aprovechan la comparación con otros centros para proclamar una
identidad positiva frente a éstos, sino todo lo contrario, recurren a la
comparación para autorrepresentarse de forma negativa.
Centro 2
63
Centro 3
Centro 4
Públicos y concertados
64
sobre la cuestión, y cuando lo hacen se basan en argumentos que buscan
13
presentar la realidad dentro de la “normalidad” .
13
Normalidad entendida desde el punto de vista de considerar como algo lógico el reparto de alumnos
inmigrantes de forma desigual y el mantenimiento de ciertos mecanismos ocultos, que favorecen el acceso de
estos alumnos a los centros públicos y dificultan el acceso o la permanencia de éstos en los centros
concertados.
65
En general, los docentes que pertenecen a los centros públicos
mantienen un discurso descontento ante las diferencias entre unos y otros
centros. Se quejan de las posibilidades con las que cuentan los
concertados a la hora de poder seleccionar su alumnado, algo a lo que
ellos no pueden optar, se representan a sí mismos como víctimas de una
situación, a la que se ven abocados, sin contar con la capacidad de influir
sobre su realidad.
66
más bajo de apreciación son de origen magrebí, subsahariano y
colombiano, aunque las referencias al último grupo son menos frecuentes,
parece que se alude menos a estos colectivos por no tener una
importancia numérica en el barrio. En una posición intermedia se
encuentran los procedentes de otros países latinoamericanos, como
ecuatorianos, peruanos, o los procedentes de China, en una posición
superior aparecen argentinos o europeos del Este.
“Es una cosa que preocupa bastante, ha salido esta mezquita fantasma,
que no sabemos muy bien dónde es, y gente que iba a la más moderada,
ahora va esta otra, con un señor que predica, que no es imán ni nada, y
que predica un Islam muy integrista” (2 2 0 6 gc4b). “Es un problema
social (...) es gente que no da importancia a la escuela...” (3 3 0 85 gc2b)
67
hacer? Cambiarlo todo? Si tú te vas a otro sitio, te tienes que adaptar a lo
que hay allí…” (3 3 0 64 gc2a)
“…te das cuenta de que una cosa es la relación que tienen los padres
aquí, en la escuela, y otra cosa es la que mantienen en el barrio, forman
guetos y tienen otro comportamiento mucho más cerrado.” (3 3 0 9 gc1b)
Se puede apreciar como se mantiene una visión más positiva cuando “la
escuela” entra a formar parte del discurso; parece que siempre se tiende
a restar importancia, de alguna forma se intenta “salvaguardar” la imagen
de la escuela, sin embargo la expresión al hablar del barrio, se hace más
negativa, dando paso a la representación de un barrio problemático, en el
que la inmigración mantiene una escasa interacción, formando guetos de
difícil acceso, este último discurso goza del consenso y, por tanto, de
aprobación social para poder ser manifestado con más tranquilidad.
68
Las representaciones más negativas aparecen al hacer referencia a la
población de origen magrebí, en algún momento no se evita ni el utilizar
ciertos conceptos un tanto despectivos para referirse a este colectivo:
“... ‘moros’ (...) y además no sólo tienen hijos, sino que los tienen en
masa ¡Por qué no veas...! (el comentario provoca algunas risas entre los
asistentes del grupo)” (3 3 0 gc3a). “...la mujer está muy sometida (...)
tanto si son ‘negros’, ‘moros’ o ‘gitanos’...” (3 3 0 gc3a).
“Yo tengo una amiga casada con un magrebí, pero él está muy avanzado,
que no es un caso muy normal...” (3 3 0 187 gc1b). “Tanto los africanos
como los árabes pasean muchos de niños (...) pasean de nueve meses,
de dos y de tres años; acaban de tener uno y vuelven a estar
embarazadas.” (3 3 0 25 – 26 gc1b)
Nosotros – ellos
69
negros, a otra los gitanos, a otra los marroquíes, y esta gente que vivía
hace años por aquí, pues ha vendido el piso y se ha ido...” (3 19 46 gc3a)
Los grupos tendían a mantener una posición similar al tratar de forma más
positiva a ciertos colectivos procedentes de América Latina o países de
Europa del Este y más negativa a los provenientes del Magreb y África
Subsahariana, comparando a éstos inmigrantes con minorías como la
gitana, ésta última utilizada con el fin de buscar el consenso a la hora de
mantener un discurso negativo.
70
“...en el barrio, forman guetos y tienen otro comportamiento, mucho más
cerrado.” (3 19 9 gc1b). “No se relacionan con la gente de aquí. Se
relacionan entre ellos y crean sus guetos y sus "fiestecitas" (3 19 gc3a).
“¡Es que son más racistas ellos que nosotros! En general, son más
racistas los negros que nosotros, que los blancos.” (3 18 gc3b)
“Yo pienso que hay otra dificultad más grave, la peor barrera a superar, o
a intentar atravesar, no es la idiomática, es la cultural ¿Cómo les explicas
determinadas cosas de tipo cultural? Porque tenemos costumbres
diferentes, nos explicamos de manera diferente...” (3 11 18 y 19 gc2a).
“Hay gente a la que es difícil llegar, porque hablamos en otra escala de
valores: Los valores que damos en la escuela...” (3 11 21 gc2a)
71
Las prácticas culturales, como marco de la diferencia, también tienen un
espacio destacado en los discursos, no se citan aspectos comunes
inmigrantes – autóctonos, además se identifica una “cultura autóctona
única”, la que transmite la escuela, dando por sentado que es homogénea
y similar a la que rige en la “sociedad” sin considerar la heterogeneidad de
ésta.
La lengua
72
del contacto entre unos y otros sujetos. Aquí la distinción no es tanto por
el origen geográfico de los sujetos, sino por el dominio de la lengua, a
esta particularidad se le asocian toda una serie de sentimientos de afecto
y pertenencia al endogrupo, que facilita o dificulta la aceptación del “otro”.
“Bien, pero yo creo que es una cosa muy diferente el tema de la adopción,
a ti, en clase, te vendrá un negro, un magrebí, un niño de los países del
Este y hablará catalán, lo sentirás como tuyo, la lengua hace que te
acerques más.” (3 12 226 gc1a). En este fragmento aparece otro
planteamiento de Giménez (2008) cuando analiza las imágenes sociales
de niños de origen inmigrante y de los niños de origen extranjero
adoptados: “La imagen de la adopción es más bien estructuralmente
positiva (…) Por el contrario, la inmigración es un fenómeno constante e
73
intensamente problematizado y manipulable mediática y políticamente.”
(p.110)
“- No es esto, mira, todos conocemos gente que han adoptado niños que
son negros como el carbón y hablan en catalán, y tú los ves normales...
- A pesar de ser de diferente color, los ves como normales, porque son
adoptados, yo no hablo de estos cuando digo que no me gustaría que mi
hija se juntase con un inmigrante.
- ¡Es que compartir la lengua es compartir la cultura...!” (3 12 232-237
gc1a)
74
“Sí, pero tampoco podemos decir que como los hijos ya hablarán catalán
serán diferentes a sus padres...” (3 12 97 gc2a). “Podrán hablar o
entender el catalán, pero mantendrán sus costumbres y no por eso se
juntará un magrebí con un nigeriano” (3 12 32 gc1b). “Salen de aquí
conociendo la legua, el problema es que no quieren integrarse, forman
guetos entre ellos y no se quieren relacionar.” (3 12 10 gc1b)
75
“Lo que no se puede hacer es cargar toda la responsabilidad de la
integración de estos niños sobre la escuela...” (3 18 c1b). “Nosotros
hacemos lo que podemos pero esto no basta...” (3 18 c1b)
“Yo creo que tienen la obligación de integrarse, hay unas normas sociales
y de convivencia que tienen que respetar, cuando uno llega a una
sociedad tiene que respetar estas normas (...) son muy mal educados, y
esto forma parte de sus culturas...” (3 18 27 gc4b). “Ellos no se integran
desde que no quieren aprender la lengua, si no hablan en catalán es muy
difícil...” (3 18 8 gc1a)
76
Conflicto social y la representación como problema
77
La concentración, la configuración de guetos que dificultan la interacción
14
dentro de un contexto normalizado entre alumnos inmigrantes y
autóctonos, es una preocupación importante que además se asocia con
dificultades para mantener un nivel académico aceptable y unas
condiciones óptimas para la práctica docente.
Otro de los temas a los que se alude, tiene que ver con la incorporación a
los centros, el hecho de que algunos lo hagan fuera del período normal de
matriculación, origina desequilibrios en el transcurso de las clases.
La responsabilidad de la Administración
14
Entienden por un “contexto normalizado” aquel en que la mayoría sería de origen autóctono y sólo un
pequeño porcentaje correspondería a alumnos pertenecientes a minorías.
78
centros de enseñanza y altera su normalidad (así aparece representada
por los docentes) se habla de concentración, de falta de recursos, aunque
tampoco se tiene muy claro los que se precisan y si éstos serían o no
efectivos, también se le acusa de ser benevolente con los propios
inmigrantes, dándoles plaza allí donde otros no pueden entrar porque está
el cupo completo, además, los centros públicos acusan a la
Administración de mantener un trato desigual que favorece a los centros
concertados y perjudica a los públicos.
El alumnado inmigrante
79
académicos, hay que buscarlas en el exterior, son situaciones familiares,
sociales, culturales, económicas, etc. las que condenan a estos alumnos y
les niegan las posibilidades de ascenso social. Los docentes en su
discurso generalizan estos factores externos a todo el colectivo y se
dirigen hacia éstos a la hora de establecer argumentos sobre los factores
que inciden negativamente en estos alumnos.
“...hay que tienen un hablar violento (...) claro, son niños con carencias de
educación, han llegado en unas circunstancias difíciles, son niños que se
encuentran desplazados...” (3 1 61 gc2b). “...están todo el día en la calle y
cogen todo lo que pasa allí y hablan como los de las películas...” (3 1 57
gc2b)
Son alumnos definidos por sus carencias, sobre los que no se tienen
demasiadas esperanzas:
80
“... no es igual un árabe que otros inmigrantes...” (3 1 36 gc2b). “No se
puede considerar en el mismo saco un magrebí con un argentino, por
mucho que quieran considerar a todos iguales (...) ellos ya no dejan que
los consideres así (...) por su comportamiento, por su forma de ser y
actuar...” (3 1 30 gc1b)
“... son de Senegal y vienen en peores condiciones que los que han
venido hasta ahora, estos vienen con lo puesto, es decir, sin nada, peor
que los otros, yo no es que lo sepa por qué lo haya visto, a mí me lo han
contado...” (3 1 33 gc1a)
81
convierte en una dificultad más, a añadir a las que componen la compleja
estructura de circunstancias que rodean a los alumnos inmigrantes.
La práctica docente
82
Aparte de las dificultades mencionadas, el discurso transcurre por una vía
complementaria a la anterior, la presentación de los actores, nuevamente
aparece de forma distinta, en este caso los docentes se presentan a sí
mismos como sujetos pasivos de una realidad que traspasa sus
competencias. Aparecen así como víctimas de una problemática, en la
que además se pone a prueba su valía como docentes, esto se traduce
en una especie de presión social sobre lo que se espera de ellos y su
trabajo.
83
“Claro y con estas situaciones, tú dices: ‘y ahora tengo que ir yo a pinchar
si ha hecho los deberes (...) si tal vez no tiene ni para merendar y además
ha tenido que poner él la lavadora...’ y yo eso sí que lo noto mucho con
los inmigrantes...” (3 8 35 gc4a). “...pero esto no es culpa del profesorado
(refiriéndose a la falta de interacción entre los alumnos, en función de su
origen geográfico) es del alumnado, porque el sistema de valores...” (3 8
42 gc4a). “...con estos problemas de la inmigración los que pagamos los
platos rotos somos los educadores...” (3 8 10 gc4b)
84
el porcentaje de éxito o fracaso, vendrá en relación a la concentración, al
nivel socioeconómico de la familia...” (3 14 75-76,81,83 gc2b)
85
Manifestándose una inconcordancia cultural y de barreras a la
comunicación entre ambos que dificulta la interacción simétrica.
86
cultural, situación de ilegalidad o educación, entre otros, aparecen en las
diferentes representaciones sobre los inmigrantes y la concepción de la
inmigración como problema.
87
siempre reagrupados subjetivamente por su origen geográfico, son
adheridos a unas u otras prácticas bajo esta premisa, así aparecen
diferencias incluso al tratar el tema de la prostitución, si ésta es “callejera”
o de club, si ésta es perjudicial o no, etc.
15
Se da por hecho en ambos discursos, la existencia de una determinada cultura compartida por cada uno de
los inmigrantes, cuya adscripción depende única y expresamente a su origen geográfico.
88
sean adultos o no, cuando se cita el centro y lo que allí ocurre, éste y los
docentes entran a formar parte del juicio que se pueda elaborar, ante esta
circunstancia el discurso si es negativo se refiere, en multitud de
ocasiones, a lo que ocurre en otros centros, y si es en el propio, los
docentes aparecen como sujetos pasivos de una situación, ante la que no
pueden hacer nada, la responsabilidad siempre es del exterior y ellos no
pueden establecer medios para cambiar una realidad que les viene dada.
Las etiquetas, como forma de identificar a los inmigrantes con toda una
serie de connotaciones adheridas a su persona, son utilizadas en multitud
de ocasiones, en la prensa aparecen continuamente concepciones como
“sin papeles, ilegales, invasión” entre otras; en el discurso docente
aparecen las propias de la cercanía a los protagonistas, así pues se
tiende a hablar de “negritos”, “moros” y otras formas lingüísticas similares,
para referirse a determinados inmigrantes, diferenciados por origen.
89
origen geográfico adscrito, por rasgos físicos o culturales, que los sitúa en
una concepción sobre atributos que se les asignan, por el hecho de tener
un origen impuesto, desde la subjetividad de los sujetos con los que han
de interactuar.
1 Estrategia de autoprotección
2 Estrategia de contradicción
90
opinión exterior estigmatizada del barrio, pero al mismo tiempo advierten
que su experiencia en este contexto se contradice con la imagen
preconcebida que tenían sobre éste.
16
Los docentes identifican un discurso, una representación social del barrio, forma parte del imaginario social
que se tiene desde el exterior del barrio.
91
manifestando que es en centros con una población complicada, donde se
demuestra la verdadera calidad como profesionales.
92
Un marco para el debate
Hemos visto como los docentes elaboran una clasificación previa de los
alumnos, según su origen e incluso su pertenencia al barrio. Los docentes
del estudio no presentan un rechazo hacia estos alumnos, ni muchísimo
menos, pero sí parten de una situación basada en la representación de la
diferencia y las dificultades que eso implica en su eficiencia como
educadores, considerando que una de sus funciones principales es la de
difundir esos valores dominantes a los que se refieren. Álvarez (2003)
encuentra entre los peor valorados a “moros y gitanos”; los resultados
obtenidos permiten añadir otros colectivos como el de los subsaharianos y
latinoamericanos (a excepción de argentinos o venezolanos).
93
García (2003) habla incluso de una especie de ambigüedad o dejadez,
por parte de los profesionales de la enseñanza, que acaba por configurar
una situación, en la que existe una brecha insalvable entre la teoría y
práctica. La teoría aparece en el discurso docente bajo el consenso de lo
que el autor califica como acuerdo generalizado, en referencia a la
necesidad de facilitar la inserción social y cultural del alumnado
inmigrante; mientras que en realidad la práctica no considera esta
cuestión, se deja de lado a la hora de elaborar el proyecto educativo o
concretar los programas a trabajar en el aula. “La consecuencia es que el
reconocimiento formal del derecho a la diferencia se traduce en la
aplicación de un enfoque asimilacionista (...) de adaptación de los grupos
minoritarios a la cultura mayoritaria”. (p,259).
94
17
perpetuidad de la “cultura autóctona ”, el acceso a la ciudadanía se
presentaría como una vía hacia la integración, entendida ésta desde un
enfoque asimilacionista.
No se pretende afirmar con esto que los docentes del estudio tengan
claro ese modelo y pretendan llevarlo a cabo hasta sus últimas
consecuencias; se ha podido constatar, en el transcurso de entrevistas y
conversaciones con éstos, que la integración aparece como un concepto
ambiguo, no se tiene muy claro qué engloba, ni cómo alcanzar el ideal
utópico. Los docentes comparten una idea de responsabilidad inherente a
su posición, tienen configurada una representación de lo que consideran
se corresponde con la cultura autóctona, de la que se ven a sí mismos
como representantes desde el punto de vista escolar y de su transmisión.
17
Acuñada así por la autora, en este caso la definimos dentro de lo que se considera la cultura dominante
difundida por los centros de enseñanza, aunque pueda ser no homogénea, pero que comparte unos puntos
básicos, como son la lengua, costumbres, determinados valores, etc.
95
que encierran factores culturales, de aceptación de valores, normas de
comportamiento e incluso actitudes hacia lo que la escuela, o la “sociedad
18
de acogida” ofrece a esta población. Dentro de esas representaciones
aparecen conceptos clave empleados para definir a los distintos grupos,
esto ocurre en multitud de ocasiones, no es ajeno en otros estudios, como
por ejemplo el de Philogène (2000). La autora pone de manifiesto el grado
diferenciador al que llegan las representaciones sociales de las minorías,
a través de la utilización de una serie de conceptos con diversas
connotaciones disgregadoras. Tales como la distinción entre personas por
el color de su piel y, entre éstas, por su origen geográfico, así se distingue
entre afro americano o negro africano. Además de las distinciones que
encierran estos conceptos, permiten establecer otra basada en la
representación cultural que mantiene un grado de distancia entre unos y
otros.
De igual forma los docentes utilizan términos para referirse a los alumnos
inmigrantes, e incluso a nativos procedentes de otras comunidades. Se
han encontrado diversas formas de identificar al alumnado inmigrante,
como por ejemplo: “negritos”, “moros”, entre otras. Se ha podido observar
que éstos tienden a buscar continuamente apodos o formas verbales
explícitas para referirse a ciertos alumnos (inmigrantes o no) que se alejan
de una representación positiva. Respecto a la consideración de las
expectativas de éxito académico que puedan tener estos alumnos,
mayoritariamente se manifiesta que éstas son inferiores a las que se
pueda esperar de los alumnos autóctonos, en este caso no se cita el
desconocimiento de la lengua, como una barrera infranqueable que
dificulta esa condición, sino que se tiende a exteriorizar las causas que
pueden incidir en esas dificultades para alcanzar el éxito.
18
Entendida bajo lo que definen los docentes en su discurso, éstos implícitamente identifican una “cultura
autóctona” coincidente con la que tienen como objeto transmitir.
96
Sobre el desconocimiento de la lengua y la incidencia sobre el
rendimiento de los alumnos inmigrantes, Siguan (1998) advierte que a
pesar de que en el contexto escolar aprenden bastantes competencias
lingüísticas, que les permiten seguir las enseñanzas, no por eso dejan de
tener ciertas deficiencias, más aún si además existe el bilingüismo, estas
carencias los hace más vulnerables ante el fracaso escolar, esta
circunstancia favorecería que se conviertan en alumnos menos cómodos
para los docentes. Por otra parte, Navarro y Huguet (2006) insisten en las
diferencias de competencia lingüística de los alumnos inmigrantes y las
dificultades que presentan sobre el rendimiento académico.
97
profesores, bajo la afirmación de que los padres se desentienden o
mantienen una distancia, respecto a la enseñanza de sus hijos. “Existe
una fuerte desconfianza de los profesores hacia los padres que va a
condicionar sus relaciones mutuas.” (p. 176)
98
los alumnos son iguales, no se deja espacio para la discriminación
positiva. “...afirman que en sus centros se han ‘integrado perfectamente’,
circunstancia que atribuyen al arraigo de las familias y a su temprano
acceso a la escolarización.” (2007, p: 42).
2 Los de fuera son un problema a paliar, se trata de una representación
del inmigrante carente de currículum educativo, con una cultura menos
civilizada, bajo esta visión, el alumnado es un problema, ante el que el
sistema educativo no puede garantizar la enseñanza, “...demandan una
ingente cantidad de recursos –nunca suficientes- con el sólo fin de que
dicho alumnado acceda a un estadio superior de civilización”. (p.49). Los
partidarios de esta lógica discursiva advierten de que la presencia de
alumnado inmigrante baja la calidad educativa de los centros.
99
operar un importante cambio de perspectiva, comenzando por negar la
supremacía de los valores dominantes (‘la cultura autóctona’)...” (p.71).
100
Por otra parte, Suárez-Orozco y Suárez-Orozco (2003) se refieren a esta
circunstancia cuando comprueban la contradicción, respecto a la realidad,
en la que caen los docentes al afirmar la baja estima que tienen los
inmigrantes hacia la escuela. Cuando los autores han podido comprobar
como los inmigrantes depositan, en esta institución, muchas de sus
esperanzas de cambio. Respecto al valor y confianza de los inmigrantes
en la escuela, Terrén y Carrasco (2007) verifican como éstos depositan
parte de las expectativas sobre sus hijos, en la posibilidad de que
obtengan una mejora social, a través del acceso al capital cultural, con el
paso por el sistema educativo. Se atreven a afirmar que la escuela
constituye uno de los pilares, sobre los que medir el éxito o fracaso del
proceso migratorio, sobre los hijos. “El trabajo de los hijos en la escuela
es el corolario del trabajo de sus padres fuera de ella, y esto es central
(...) el éxito de la educación de sus hijos es (será) el éxito de su proyecto
migratorio.” (p.22)
101
nuestro estudio, con toda una serie de restricciones, influencias,
presiones y formas de actuar que los convierten en marionetas racionales,
ante una realidad desconocida, ante la que deben actuar, poniendo en
cuestión el modelo desde el que llevar a cabo su acción.
102
docente y un rol, bajo el que actuar, a lo que se añade la institución a la
que pertenecen, ejerciendo otra presión, en este caso normativa y
procedimental. Sin duda, la figura de los docentes en los centros de
enseñanza, bajo la consideración de este cambio social, en el que el
fenómeno de la inmigración aparece como una de las figuras visibles, es
un espacio social sobre el que continuar investigando, pues presenta toda
una serie de factores, concentrados en un microcosmos, en el que se
ponen en práctica representaciones que orientan formas de interacción,
condicionadas socialmente, a las que se añaden expresiones discursivas
de notable influencia.
103
entrada y salida tanto de profesionales como de habitantes del barrio, por
lo que no pueden establecerse lazos definitivos en un trabajo conjunto. En
el otro extremo aparece la consideración de una participación integral, es
decir si los agentes ciudadanos participan o no y en que grado de simetría
respecto a la comunidad educativa escolar; la cuestión de las barreras
que subyacen a las dificultades de esa integración pueden ser diversas,
dejamos abierta esta vía para nuevas líneas de investigación que vayan
cerrando el análisis del entramado social y relacional del contexto.
104
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