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1. CONCEPTO
En el Derecho Internacional Privado no nos interesa principalmente determinar el
lugar exacto del domicilio, sino, sobre todo, el Estado dentro del cual se encuentra
este lugar exacto. En efecto, nos interesa determinar las leyes de que Estado
deberán regir el estado y capacidad de una determinada persona, que ley se
considerara como ley de su estatuto personal.
Algunos autores clasifican las legislaciones en dos corrientes:
a) Aquellas que consideran que una persona tiene su domicilio allí donde dicha
persona tiene residencia permanente o habitual; y
b) Aquellas que afirman que una persona tiene su domicilio allí donde tiene su
principal centro de negocios o de sus intereses o su principal establecimiento
En ambos casos se incluye el animus manendi como elemento principal. El conflicto
en este contexto puede nacer del hecho que una persona tenga en un lugar su
residencia habitual y permanente y en otro lugar su principal centro de operaciones,
su principal centro de intereses o negocios, y entonces para una legislación el
domicilio estará en un lugar, y para la otra en otro lugar.
Otros autores clasifican entre legisladores que conciben el domicilio como el asiento
jurídico de la persona, es decir, el lugar donde la ley supone que se le encontrara
siempre para todos los efectos legales; esta definición procede sobre la base de
una presunción, a saber: la de que se le supone siempre presente. Legislaciones
que conciben el domicilio como el lugar donde reside habitualmente una persona
con ánimo de permanencia; esta concepción es más realista porque procede sobre
una base real, es decir, el hecho de la residencia, y el segundo elemento puede
deducirse de las circunstancias; tiempo, actividades, relaciones familiares,
relaciones comerciales, relaciones civiles propiamente dichas, etc.
Frente a la diversidad de problemas que pueden plantearse en el ámbito de Derecho
Internacional Privado, la doctrina y la legislación de los diferentes países ha
introducido una clasificación del domicilio que puede resumirse así:
a) Domicilio de origen: aquel donde la persona nació:
b) Domicilio legal: aquel donde la ley le presume presente, aunque no se
encuentre en el físicamente;
c) Domicilio especial o de elección: aquel que las personas establecen o
señalan para el cumplimiento de una obligación determinada o el ejercicio de
un derecho.
d) Domicilio electoral: aquel donde la persona ejerce sus derechos políticos;
e) Domicilio administrativo fiscal: aquel donde una persona paga o debe sus
impuestos.
Tomando en cuenta esta clasificación el domicilio tendría un elemento voluntario,
porque la persona libremente haría una declaración de voluntad expresa o tácita del
lugar que deberá considerarse su domicilio para el cumplimiento de sus diferentes
obligaciones y la adquisición de sus diferentes derechos. Los conflictos serian casi
nulos, pero la realidad nos muestra que los conflictos existen.
Considerando que estamos en el ámbito del Derecho Internacional Privado, lo
aconsejable es atenerse a la definición que considera el domicilio como el lugar
donde reside habitualmente una persona con el ánimo de permanencia; esto lo
encuadra inmediatamente dentro de un marco legal que determinara su estado y
capacidad, y del mismo se desprenden las diferentes obligaciones y derechos de
dicha persona.
2. PRINCIPIOS:
1. Toda persona debe tener y de hecho tiene un domicilio. La carencia de
domicilio se considera contraria al orden social por razones de orden público
y en el interés de la autoridad y de terceros. Todas las legislaciones atribuyen
a la persona por lo menos su domicilio de origen o domicilio “de derecho”,
equivalente al del lugar de nacimiento. Algunas legislaciones excluyen
específicamente la pluralidad de domicilios.
2. Toda persona puede tener más de un domicilio; en un lugar tener su domicilio
de origen y en otro su domicilio legal o “de hecho”. Esto es una realidad, aun
y cuando algunas legislaciones no lo aceptan explícitamente, y dan lugar a
“conflictos por razón de domicilio”.
3. Toda persona tiene derecho a cambiar su domicilio. Esto es una
consecuencia de la naturaleza cosmopolita del hombre, de la libertad de
movimiento y libre actividad, y no puede ser coartado ni por contrato ni por la
ley especifica. A este respecto existe la frase latina que dice Nihil es
impedimentum quominus quis, ubi velit, habeat domicilium, quod ei
interdictum non sit. Para que se realice el cambio, sin embargo, no basta la
traslación, sino que debe ir acompañada del animus manendi.
4. El domicilio de los menores e incapaces es el de las personas que ejercen a
la patria potestad o la tutoría sobre ellos. Es obvio ya que son los
“encargados” los que “ejercen los derechos civiles de los menores e
incapaces”, de ahí que lo que interesa principalmente es determinara el
“domicilio legal” de los mismos. Podría suceder que el incapaz o menor resida
en un lugar y “el encargado” en otro; en tal caso se atenderá al “domicilio del
encargado” que se reputara “domicilio legal” del incapaz o menor.
3. AMERICA:
En Latinoamérica, de conformidad con lo dispuesto en el código de Derecho
Internacional Privado (artículo 22 al 26), podemos resumir la doctrina en la forma
siguiente:
4. DETERMINACION DEL DOMICILIO:
Se aplicará la “ley territorial” (o lex fori) para determinar: a) el concepto; b) la
adquisición; c) la perdida y d) la recuperación del domicilio. Este principio se aplica
tanto a las personas individuales como colectivas.
4.1 CASOS DE CONFLICTOS DE DOMICILIOS:
Tanto los conflictos positivos (dos domicilios reclamados) como los conflictos
negativos (ningún domicilio) deberán en ultimo termino ser solucionados aplicando
la lex fori, es decir que la lex fori determinara que requisitos se necesitan para que
la residencia constituya domicilio. El caso negativo se rige por el lugar de residencia
o donde se encuentre.
4.2 CASO DE DIPLOMATICOS Y ESTUDIANTES:
Tanto en el caso de los diplomáticos como de los estudiantes y de todas aquellas
personas que por una u otra razón viajan al extranjero por más o menos tiempo, con
la intención de regresar a su país, intención que puede deducirse del hecho de que
en el país, extranjero no trabajan, no pagan impuestos, no ejercen derechos
políticos, no ejercen derechos civiles, etc, se presume que tiene un domicilio legal
en el lugar donde habían establecido su domicilio inmediatamente antes de salir al
extranjero.
4.3 CASO DE LOS HIJOS Y LA MUJER CASADA:
El domicilio de la mujer casada y de los hijos se presume ser el del marido y/o del
padre.
5. GUATEMALA:
Nuestra legislación contiene en los artículos 32 al 41 del Código Civil todas las
disposiciones sustantivas referentes al domicilio.
6. CONVENCION INTERAMERICANA
El 8 de mayo de 1979 se firmó en Montevideo (Uruguay) la Convención
Interamericana sobre el domicilio de las personas físicas en el Derecho
Internacional Privado. Guatemala no ha ratificado la misma. Dicha convención no
se encuentra vigente todavía.
En dicha Convención se establece la forma de determinar el domicilio de una
persona física atendiendo a su residencia habitual, sus negocios, simple residencia
y su lugar actual de ubicación (en ese orden). El domicilio de las personas incapaces
será el de sus representantes legales. El domicilio de los cónyuges será el lugar de
convivencia mutuamente acordada. El domicilio de los diplomáticos será el de la
última residencia en su país. El domicilio de quienes temporalmente residen en el
extranjero será el del gobierno que los designo. El domicilio de la persona que esté
en dos Estados será aquel en que tenga simple residencia o en su caso en donde
se encontrare. La convención establece otras reglas de procedimiento.
LA AUSENCIA
La totalidad de las legislaciones del mundo consideran ausente a aquella persona
que ha desaparecido de su domicilio, no pudiendo por consiguiente hacer uso de
sus derechos legalmente adquiridos ni hacer frente al cumplimiento de sus
obligaciones legales, y cuyo paradero o situación se ignora por completo.
1. IMPORTANCIA
La importancia de la ausencia en el Derecho Internacional Privado está íntimamente
relacionada con los efectos jurídicos que esta produce; efectos jurídicos que
afectan:
a) El patrimonio del ausente;
b) Los derechos de quienes dependen del ausente; y
c) El orden público que se ve perturbado ya que se paraliza su funcionamiento
en relación con las diferentes relaciones jurídicas que exigen solución;
impuestos, propiedades, relaciones de familia, etc.
2. DECLARATORIO
Para que la ausencia produzca efectos jurídicos es necesario “que sea declarada
judicialmente”; las cuestiones a las cuales el Derecho Internacional Privado da
respuesta se refiere a ¿Qué jurisdicción debe o puede declararla? ¿Qué clase de
prueba debe presentarse? ¿Quién puede pedirla?
3. LEY APLICABLE
Siendo la ausencia una cuestión que “se refiere” al ejercicio de la capacidad, la ley
aplicable será aquella que de conformidad con cada Estado rija dicha capacidad:
algunos aplicaran la ley nacional (o de origen), otros aplicaran la ley del domicilio.
Como vimos antes, la ley del domicilio es casi de universal aceptación en la
actualidad; por consiguiente, resumamos las disposiciones así:
a) Es competente para declarar la ausencia el tribunal del domicilio del ausente;
b) Podrán pedir la declaratoria de ausencia aquellas personas que designe la
ley del domicilio del ausente;
c) Los efectos jurídicos de la declaratoria de ausencia se rigen por la ley del
domicilio del ausente, excepto en lo referente a los bienes inmuebles que
aplicara las leyes de su situación.
4. EFECTOS
En cuanto a los efectos de la ausencia, algunos autores sostienen que la
declaratoria crea “estado”, pero creemos que dichos autores confunden “el estado”
con la capacidad; la mayoría de los autores sostienen que la declaratoria de
ausencia “no crea estado” porque el Estado lo protege en sus bienes.
5. DECLARATORIA
En cuanto a la declaratoria misma, la filosofía varia con los Estados; algunos la
declaran “presumiendo la muerte del ausente”; otros la declaran “presumiendo la
muerte del ausente”; otros declaran “presumiendo la vida del ausente”
estableciendo en este caso su tiempo prudencial que haga presumir su muerte, por
ejemplo un número de años que sumados a la edad del ausente, de conformidad
con la esperanza normal de la vida en dicho país, haga imposible su supervivencia,
solamente en este último caso las medidas provisionales se convierten en
definitivas.
6. AMERICA
El código de Derecho Internacional Privado contiene las disposiciones relativas a la
ausencia en los artículos 78 a 83. El código tomando en cuenta las diferentes
tendencias americanas para regir el estado y capacidad de las personas, establece
que la ley aplicable para declarar la ausencia, sus efectos, las personas que la
pueden solicitar, así como la muerte presunta se regirá por “la ley personal” del
ausente de conformidad con las reglas que estudiamos antes.
El código de Derecho Internacional Privado trae sin embargo una disposición de
aplicación bien clara, y es la de que las medidas provisionales son de orden público
internacional y por consiguiente con efecto “extraterritorial”. En caso de bienes
situados en diferentes países el tribunal que declaro la ausencia deberá oficiar a
dichos países, y estos, aplicarán las medidas provisionales dictadas o de
conformidad con su propia legislación dictarán las que procedan.
7. GUATEMALA
Partiendo del artículo 24 de la Ley del Organismo Judicial debemos acudir a las
disposiciones contenidas en el código civil artículos 42 a 77.
EL MATRIMONIO
1. IMPORTANCIA
En el Derecho Internacional Privado, el matrimonio reviste especial importancia:
a) Por ser el origen de la familia en todos los Estados del mundo;
b) Por ser una institución existente en todos los ordenamientos jurídicos del
mundo, aun cuando en algunos Estados se le considere más bajo su aspecto
religioso;
c) Porque los modernos medios de comunicación y transporte, su bajo precio la
proliferación de nuevas fuentes de trabajo que exigen migración masiva, etc.,
favorecen el desplazamiento del ser humano de un Estado a otro y este
hecho favorece los enlaces entre personas de diferentes nacionalidades;
d) Por ser una de las instituciones jurídicas que provoca mayores conflictos.
2. CONCEPTO
Presentar una descripción objetiva del matrimonio, una descripción que respete
todos los ordenamientos jurídicos y religiosos, es bastante difícil. Portalis intento
presentar tal definición, diciendo. ¿Qué es el matrimonio, considerado en sí mismo
e independientemente de todas las leyes civiles y religiosas? Y responde así: “es la
sociedad del hombre y de la mujer que se unen para perpetuar su especie, para
ayudarse a asistirse mutuamente y así sobrellevar el peso de la vida, compartiendo
una misma suerte”. La Dra. Stella Maris Biocca nos presenta una descripción que
pretende respetar los requisitos mínimos de una definición universal jurídica; dice
así; “El matrimonio es un acto jurídico bilateral, constitutivo de Estado.”
A través de la historia del matrimonio ha sido considerado como institución de orden
religioso, institución de orden civil, institución de orden natural, etc. Y según sea su
fundamento así será la legislación, aun hoy en día podemos enfrentarnos a tales
situaciones; solamente pensemos que existen Estados cuyo ordenamiento jurídico
es de naturaleza teocrática, o aquellos Estados con “religión oficial”, etc. Lo anterior
nos ilustra el por qué no existe en el mundo un consenso universal sobre las
condiciones intrínsecas a que está sujeta la validez del matrimonio, sus
formalidades, sus efectos jurídicos, su disolución.
3. REGULACION LEGAL
Dentro de la diversidad de legislaciones, podemos establecer que todas contienen
disposiciones relativas a tres grandes aspectos importantes para nuestro estudio:
a) Las formalidades;
b) La capacidad; y
c) Los efectos.
En nuestra materia, la pregunta fundamental es: ¿Qué ley regula cada uno de los
aspectos antes mencionados?
4. LAS FORMALIDADES
Haciendo aplicación de la regla locus regit actum constatamos que existe consenso
en que las formalidades del matrimonio rigen por la ley del lugar de la celebración
lex loci executionis, ya que se supone que el matrimonio es consumado en el lugar
de su celebración.
Al referirnos a “formalidades” involucramos todos aquellos actos, condiciones y
requisitos que deben llevarse a cabo “antes” de la celebración material del
matrimonio, tales como capitulaciones matrimoniales, contrato matrimonial (donde
asi se le llama), pruebas materiales de soltería, certificados médicos,
consentimiento de los padres para los menores de edad (según la ley local),
esponsales (en donde estos sean un prerrequisito), fiancailles donde se exija
tradicionalmente, la naturaleza de los impedimentos, publicaciones,
manifestaciones de voluntad con relación a la nacionalidad, “permiso oficial”
obtenido en y de oficina pública (como lo es en el caso en la mayoría de los Estados
Unidos de América); asimismo se involucra los requisitos “al momento” de la
celebración como por ejemplo presencia de testigos donde sean necesarios,
manifestación verbal, libre y consciente del consentimiento, razonamiento de los
documentos de identificación, presencia de intérpretes, etc. Y finalmente las
formalidades “posteriores” a la celebración, tales como avisos a los respectivos
registros, avisos a los consulados, extensión de constancias por parte del ministro
civil o religioso o del funcionario o autoridad que autoriza el matrimonio, algunos
Consulados exigen se les envía copia del acta de matrimonio, etc.
En este sentido se pronuncia la Conferencia de la Haya de 1895 que establece lo
siguiente: ARTICULO 4.- Sera reconocido en todas partes como válido, en cuanto
a la forma, el matrimonio celebrado según la ley del país en que ha tenido lugar. Sin
embargo, queda entendido que los países cuya legislación exige una celebración
religiosa podrá no reconocer como válidos los matrimonios contraídos por sus
nacionales en el extranjero sin observar esta prescripción.
Es entendido que las disposiciones de la ley nacional en materia de publicaciones
deberán ser respetadas. Del “acta de matrimonio” se enviará una copia autentica a
las autoridades del país a que los esposos pertenecen. La convención de la Haya
de 1902 dice: ARTICULO 5.- Será reconocido en todas partes como válido en la
forma el matrimonio celebrado según la ley del país donde haya tenido lugar. Es
entendido sin embargo que los países cuya legislación exige la celebración
religiosa, podrán no reconocer como válidos los matrimonios contraídos por sus
nacionales en el extranjero sin que esta prescripción haya sido observada.
ARTICULO 6.- se reconocerá en todas partes como válido en cuanto a la forma el
matrimonio efectuado ante un agente diplomático o consular, de acuerdo a su
legislación, si ninguno de los contrayentes fuere nacional del Estado en que se
celebre o si ese Estado no se opone a él. ARTICULO 8.- El matrimonio nulo en
cuanto a la forma en el país donde se hubiere celebrado, podrá ser reconocido como
válido en los demás países si se ha observado lo prescrito por la ley nacional de
cada una de las partes.
El Código de Derecho Internacional Privado, aplicable en Guatemala, contiene lo
referente a la forma del matrimonio en los artículos 37, 38, 40, 41 y 42.
5. LA CAPACIDAD
La capacidad para contraer matrimonio se regirá por la ley personal de los
contrayentes; esta ley, como la hemos estudiado anteriormente, puede ser la de su
nacionalidad o la de su domicilio, según la escuela que prevalezca en dicho país.
Algunos Estados, como Estados Unidos de América regulan la capacidad por la ley
del lugar de la celebración.
La Ley personal admite la excepción de que la misma no debe ir contra el orden
público y las buenas costumbres del lugar de la celebración. Por ejemplo, si un
musulmán, que por su ley personal es capaz de contraer matrimonio poligámico,
desea contraer un segundo o tercer o cuarto matrimonio en Guatemala sin que los
anteriores hayan sido disueltos, no podrá hacerlo legalmente porque nuestras leyes
no admiten la poligamia; sería algo que va contra las buenas costumbres de nuestro
país.
Las Conferencias y Convencionales de la Haya de 1893, 1900 y 1904, al tratar sobre
el matrimonio especificaron que los derechos a contraer matrimonio especificaron
que el derecho a contraer matrimonio es regido por la ley nacional de cada uno de
los futuros esposos a menos que dicha ley se refiera a la ley del domicilio o la ley
del lugar de la celebración.
El Código de Derecho Internacional Privado adopta las mismas disposiciones en el
artículo 36, con la diferencia que se refiere a la ley personal; artículo 36:” Los
contrayentes estarán sujetos a su ley personal en todo lo que se refiere a la
capacidad para celebrar el matrimonio, al consentimiento o consejo paternos, a los
impedimentos y a su dispensa.”
6. EFECTOS DEL MATRIMONIO
En primer lugar, lo referente a las relaciones personales de los cónyuges en sus
relaciones personales y en las cuales la organización social está íntimamente
interesada. ¿Qué ley rige estas relaciones? La doctrina y la legislación aportan
diferentes respuestas a este respecto:
a) La ley del domicilio
b) La ley nacional del marido
c) La ley de residencia de los cónyuges; y
d) La ley personal común y en su defecto la del marido.
En el continente Europeo se ha llegado a consenso sobre que hoy en día las
relaciones de los esposos se rigen por la ley de nacionalidad de los mismos, pero
el modo de sancionarlos se rige por la ley del Estado en donde se reclama la
sanción. (Convención de la Haya, 1905, artículo 1.)
En el continente americano el Código de Derecho Internacional Privado distingue
así:
a) El deber de protección y obediencia, la obligación de la mujer de seguir a su
marido, se rige por la ley personal de los cónyuges, y si fuere distinta por la
del marido;
b) La obligación de fidelidad, cohabitación y ayuda mutua se rige por la ley
territorial (domicilio) y
c) Los efectos civiles afectados por el bígamo se rigen por la ley local
(domicilio).
Léanse los artículos 43, 45, y 46, del Código de Derecho Internacional Privado.
En segundo lugar, lo relativo al aspecto económico. En general podemos resumir
las legislaciones existentes en dos grandes escuelas:
a) Aquellas que lo regulan en detalle en sus cuerpos legales y lo imponen a
quienes contraen matrimonio: y
b) Aquellas que dejan a los futuros cónyuges adquirir y estipular cualquiera de
los regímenes matrimoniales aceptados en su legislación, y además solo en
caso de elección expresa establece un régimen con carácter “supletorio”.
En algunos Estados el contrato matrimonial celebrado antes del matrimonio estipula
el régimen a adoptarse y dicho contrato es inmutable; algunos Estados exigen
además la publicación de dicho documento.
En el ámbito europeo la Convención de La Haya del 17 de julio de 1905 estipula lo
siguiente: ARTICULO 2.- En ausencia de contrato los efectos del matrimonio sobre
los bienes de los esposos, tanto inmuebles como muebles, son regidos por la ley
nacional del marido en el momento de la celebración del matrimonio. En cambio, de
nacionalidad de los esposos o de uno de ellos no tendrá influencia sobre el régimen
de los bienes. ARTICULO 3.- La capacidad de cada uno de los futuros esposos para
concluir un contrato de matrimonio es determinada por su ley nacional en el
momento de la celebración del matrimonio. ARTICULO 4.- La ley nacional de los
esposos decide si ellos pueden en el curso del matrimonio, sea hacer un contrato
de matrimonio, sea rescindir o modificar sus convenciones matrimoniales. El cambio
que fuese hecho en el régimen de los bienes no puede tener efecto retroactivo en
perjuicio de los terceros. ARTICULO 5.- La validez intrínseca de un contrato de
matrimonio y sus efectos son regidos por la ley nacional del marido en el momento
de la celebración del matrimonio, o, si el ha sido concluido en el curso del
matrimonio, por la ley nacional de los esposos en el momento del contrato. La misma
ley decide si, y en qué medida, los cónyuges tienen la libertad de referirse a una u
otra ley. Cuando se han referido a ella, esta última ley determinada los efectos del
contrato de matrimonio. ARTICULO 6.- El contrato de matrimonio es valido en
cuanto a la forma, si él ha sido concluido sea conforme a la ley del país donde ha
sido hecho, sea conforme a la ley del país donde ha sido hecho, se conforme a la
ley de cada uno de los futuros esposos en el momento de la celebración del
matrimonio, o todavía, si él ha sido concluido en el curso del matrimonio, conforme
a la ley nacional de cada uno de los esposos. Cuando la ley nacional de uno de los
futuros esposos, o si el contrato es concluido en el curso del matrimonio la ley
nacional de uno de los esposos exige como condición de validez que el contrato,
aún si el es concluido en el extranjero, tenga una forma determinada, sus
disposiciones deben ser observadas. ARTICULO 7.- Las disposiciones de la
presente de la convención no son aplicables a los inmuebles colocados por la ley
de su situación bajo un régimen especial. ARTICULO 8.- Cada uno de los Estados
contratantes se reserva: 1) exigir formas especiales para que el régimen de los
bienes pueda ser invocado contra tercero; 2) Aplicar disposiciones que tengan por
fin proteger los terceros en sus relaciones con una mujer casada que ejerce una
profesión sobre el territorio de este Estado. Los Estados contratantes se obligan a
comunicar las disposiciones legales aplicables según el precitado artículo.
En el ámbito americano el Código de Derecho Internacional Privado contiene lo
referente a esta materia en los artículos 44 (disposición y administración de sus
bienes propios para la mujer); y del 187 al (del contrato sobre bienes propios con
ocasión del matrimonio), los cuales deben leerse detenidamente. En lo referente a
Guatemala véase el artículo 130 del Código Civil.
7. ESPONSALES O FIANCAILLES
Los esponsales o fiancailles es el acto por el cual el futuro esposo pide a la futura
esposa a quienes tienen sobre ella la patria potestad o tutoría y se compromete a
casarse con ella. En algunos países este acto reviste caracteres de solemnidad y
crea un verdadero contrato; en otros países este acto no pasa de ser un acto social,
el cual sin embargo crea ciertas obligaciones morales frente a la futura esposa y
frente a la sociedad. Desde el punto de vista legislativo, estas van desde aquellas
que se caracterizan por una regulación detallada, hasta las que simplemente lo
ignoran; de aquellas que no estipulan nada por concepto de daños y perjuicios en
caso de incumplimiento, hasta aquellas que exigen reparación del daño material y
moral.
8. GUATEMALA
En nuestro medio nuestra legislación contiene disposiciones referentes al
matrimonio de extranjeros (ambos cónyuges), de extranjero con guatemalteca o de
extranjera con guatemalteco. El matrimonio celebrado en el extranjero (artículo 86
del Código Civil, articulo 24 y 26 de la Ley del Organismo Judicial) produce efecto
en Guatemala si se observaron los requisitos formales del país en que se celebró;
la única excepción es que haya existido alguno de los impedimentos estipulados en
nuestra legislación como cuestiones de orden público, la moral y buenas
costumbres.
9. REQUISITOS FORMALES
Además de los requisitos normales que nuestra legislación impone al notario al
autorizar cualquier matrimonio de guatemaltecos celebrado en Guatemala, en el
caso de los extranjeros, es necesario cumplir con los siguientes requisitos formales
adicionales:
9.1 ANTES DEL MATRIMONIO
1) Probar fehacientemente la identidad personal con pasaporte o documento
Personal de Identificación y Certificación de la partida de nacimiento
extendida por el Registrador Civil del país del origen;
2) Probar fehacientemente la libertad de estado mediante declaración jurada de
libertad de estado autenticada por las autoridades diplomáticas o consulares
del país de su nacionalidad (artículo 64 de la Ley de Migración y Extranjería).
Dejemos constancia que la simple mención del pasaporte o cedula que el
contrayente es soltero no basta (artículo 96 del Código Civil);
3) Deberá hacerse publicación de edictos sobre la intención de contraer
matrimonio. Estos se publican en el Diario Oficial y en otro de mayor
circulación 3 veces en 15 días. Estas publicaciones tienen efecto durante seis
meses y si el matrimonio no se celebrare dentro de dicho tiempo deberá
entonces hacerse nuevas publicaciones (artículo 96 del código civil);
4) Deberá celebrarse capitulaciones matrimoniales, por lo menos cuando la
mujer sea guatemalteca (artículo 118 del código civil).
EL DIVORCIO
El divorcio y sus fines (separación, nulidad) revisten especial importancia en el
Derecho Internacional Privado. Los conflictos nacen principalmente del hecho que
no todos los países lo admiten en su legislación y entre los que lo admiten no todos
lo hacen de la misma forma; podemos agruparlos en tres grandes categorías:
a) Estados que no admiten el divorcio, solamente admiten la separación de
cuerpos.
b) Estados que no admiten ni el divorcio ni la separación de cuerpos; y
c) Estados que admiten el divorcio y la separación de cuerpos.
Dentro de esas categorías otra fuente de conflictos se refiere a las causales, ya que
no todos admiten las mismas; algunas llegan hasta admitir “el mutuo
consentimiento” tanto para el divorcio como para la separación de cuerpos; algunos
admiten que el divorcio destruye el vínculo conyugal, otros no admiten tal
destrucción; en algunos países las causales son al mismo tiempo “constitutivas de
delito” y demandar el divorcio equivale entonces a acusarse a si mismo” o “acusar
a la otra parte criminalmente”.
1. INTERROGANTES
Las cuestiones que intenta resolver el Derecho Internacional Privado son las
siguientes: ¿Qué ley regula capacidad del extranjero que desea divorciarse? ¿Qué
ley regula las causales que pueden invocar los extranjeros para obtener el divorcio?
¿Qué tribunal es el competente para conocer de las demandas de divorcio de los
extranjeros? ¿Bajo qué principios legales se puede fundamentar la ejecución de una
sentencia de divorcio pronunciada en el extranjero?
2. CAPACIDAD
¿Qué ley regula la capacidad del extranjero que desea divorciarse? Las respuestas
son abundantes y pueden clasificarse así:
3. LA LEY NACIONAL DE LOS CONYUGES
Seguida por quienes sostienen que el estado y capacidad de las personas se rige
por la ley de su nacionalidad. Se fundamenta en el argumento de que el matrimonio
modifica el estado y capacidad de los cónyuges; por consiguiente, esa misma ley
establece sus efectos y las causales de disolución. Si la atenderse a la nacionalidad
del esposo. Esta escuela presenta numerosas dificultades:
a) ¿Qué sucede si la ley personal, siendo esta la nacional, no admite el
divorcio? En general se ha sostenido la imposibilidad de divorciar.
b) ¿Qué sucede si los cónyuges son apátridas? Podría en este caso adoptarse
la ley del domicilio conyugal, pero no como principal fundamento sino
subsidiariamente.
c) ¿Qué sucede si ambos o uno de los cónyuges tiene doble nacionalidad “de
hecho”?
PATERNIDAD, FILIACION
La facilidad de viajar, el relajamiento de las costumbres, la evolución de la noción
de moralidad, el desplazamiento por razones de trabajo estacionales, hacen que
hoy en día los problemas de paternidad y de filiación no sean una simple
especulación académica; no lo eran antes, pero en la actualidad cobra importancia
por las razones apuntadas.
1. CONCEPTO:
La filiación es la fuente de un estado jurídico que otorga derechos (sucesión,
apellido, alimentos); la paternidad crea obligaciones (patria potestad, alimentos)
ambos tienen su asiento en el seno del matrimonio que la sociedad y la legislación
de diferentes países protegen celosamente al punto de que los hijos nacidos dentro
de dicha institución, las leyes los dotan “naturalmente” de los derechos
anteriormente mencionados a vía de ejemplo; a dichos hijos las leyes los consideran
“legítimos” sin embargo, también a los hijos nacidos fuera de la institución del
matrimonio, siempre y cuando su calidad de hijos haya sido establecida, las leyes
los dotan de ciertos derechos e impone a quienes se establece son sus padres
ciertas obligaciones.
2. LEY APLICABLE:
En general podemos resumirlo asi, según lo mas comúnmente aceptado por los
estados unidos:
A) La capacidad para efectuar o exigir el reconocimiento de la paternidad o de
la filiación, se rige por la ley personal del padre suponiendo que sea la misma
de la del hijo; si fuere diferente entonces se aplica la ley personal del hijo:
B) Las formas y condiciones por la ley del foro donde se realice el
reconocimiento
C) Los efectos del reconocimiento por la ley del lugar donde deban hacerse
efectivos
El Derecho Internacional Privado distingue entre reconocimiento voluntario y
reconocimiento forzoso, haciendo una diferencia entre ambos respecto a la
capacidad; en el primer caso tanto la ley personal del padre como la del hijo deben
concurrir para determinar la capacidad, en caso dicha ley personal fuese diferente;
en el segundo caso, la capacidad será determinada necesariamente por la ley de
quien “intente” el reconocimiento
En el continente americano, de conformidad con lo dispuesto en el Codigo de
Derecho Internacional Privado, artículos 63, 64 y 66 cuyo estudio detenido es
obligatorio en esta materia, rigen los principios siguientes:
a) CAPACIDAD: regirá la ley personal del hijo; el artículo 66 del citado código
hace referencia condiciones involucrando en ello como condición principal
“la capacidad”. Más aun, dicha ley personal puede llegar hasta obligar el
reconocimiento.
b) FORMA: se rige por la ley territorial (lex fori), aquí se incluye también lo
dispuesto en el artículo 63 referente a la “Investigación de paternidad”.
c) EFECTOS: Guatemala, a defecto de disposiciones expresas, aplica las
disposiciones del Código de Derecho Internacional Privado en esta materia
en los artículos 644 y 654.
3. LEGITIMACION:
Legitimar, en lenguaje jurídico, significa encuadrar dentro de las leyes una relación
determinada. En nuestra materia, cuando hablamos de legitimación, entendemos
encuadrar a una persona (hijo o hija) dentro de la relación de filiación legal, con
todos los derechos y obligaciones que ello conlleva.
Algunos países consideran que la filiación normal, con todos sus derechos y
obligaciones desde su origen, se da solamente dentro de la institución que tiene
entre sus objetivos principales el perpetuar la especie. Por consiguiente, una
persona nacida fuera de matrimonio se ha dado en llamarla ilegitima; en dicho
contexto la única vía posible de legitimación del hijo o hija será el matrimonio
posterior del padre y la madre; fue el caso de Francia, Holanda, Bélgica, Portugal,
Argentina, Uruguay y Brasil.
En la actualidad la tendencia de las legitimaciones modernas, en aquellos países
cuyo ordenamiento civil ha sido revisado, tiende a eliminar la concepción jurídica de
hijo legitimo e ilegitimo y a aceptar en su lugar la de hijo nacido dentro del
matrimonio e hijo nacido fuera de matrimonio. Para qiue el nacido fuera de
matrimonio adquiera los derechos de un hijo nacido dentro de matrimonio estas
legislaciones modernas exigen “el reconocimiento”.
LA TUTELA Y LA CURATELA
Se aplicará la ley personal del menor o incapacitado para lo que toque al objeto
de la tutela o curatela, su organización y sus especies.
Artículo 89. Código Derecho Internacional Privado. En cuanto al registro de
tutelas se aplicarán simultáneamente la ley local y las personales del tutor o
curador y del menor o incapacitado.
1. TUTELA:
Se entiende por tutela, la institución legal que tiene por fin proteger en su
persona y en sus bienes a las personas que no estando sujetas a la patria
potestad tienen incapacidad natural o legal para valerse por si mismas. Es
importante notar que esta institución llamada tutela, es creación de la ley y existe
en beneficio de los “menores de edad”
2. CURATELA:
Se entiende por curatela la institución legal que tiene por objeto proteger en su
persona y en sus bienes a las personas que no estando sujetas a la patria
potestad tienen incapacidad natural o legal para valerse por si mismas. Es
importante notar que esta institución es creación de la ley y existe en beneficio
de los mayores de edad, cualesquiera sean las causas de su incapacidad,
generalmente en beneficio de las personas dementes mayores.
Considerando que la incapacidad natural (demencia, pérdida de memoria,
inconciencia) puede surgir en cualquier lugar, puede suceder que el lugar donde
acaezca no sea el de la nacionalidad o el del domicilio. De ahí la pregunta: ¿Qué
ley rige la tutela y la curatela? ¿Qué ley rige sus efectos? ¿Qué ley rige sus
condiciones?
En general todas las legislaciones del mundo concuerdan en afirmar que:
a) La ley que rige la declaratoria es la ley personal del beneficiario,
entendiéndose por beneficiario la persona bajo tutela, curatela y no el tutor o
curador.
b) Las medidas de urgencia pueden ser dictadas bajo el amparo de la ley del
lugar donde surge la causa, sujeto a la declaración bajo la ley y por el juez
del lugar de su ley personal (nacionalidad o domicilio, según la tendencia);
c) Los tutores o curadores, así como los efectos de la declaratoria deben ser
respetados y reconocidos por los otros estados.
LA ADOPCION:
La capacidad para adoptar y ser adoptado y las condiciones y limitaciones de la
adopción se sujetan a la ley personal de cada uno de los interesados.
Artículo 74. Código derecho internacional Privado. Se regulan por la ley personal
del adoptante sus efectos en cuanto a la sucesión de éste y por la del adoptado
lo que se refiere al apellido y a los derechos y 17 deberes que conserve respecto
de su familia natural, así como a su sucesión respecto del adoptante.
La adopción es una institución muy antigua. Existió en la india, donde se
establece su origen, existió entre los hebreos, Grecia, Egipto y Roma, las
razones fueron de diversa naturaleza; sociales religiosos, políticas,
patrimoniales, de interés filantrópico, más tarde existió entre los germanos donde
adquirió carácter de interés bélico, es decir, asegurar que las familias sin hijos
biológicos pudiesen colaborar al esfuerzo bélico; después paso a Francia,
inserta en el Código de Napoleón que distinguió tres clases de adopción:
voluntaria (la ordinaria conocida hoy en día). La remuneratoria (como premio por
acciones extraordinarias) y la testamentaria.
Guatemala se encontraba entre los países a donde se dirigían múltiples
solicitudes de adopción provenientes del extranjero. Guatemala no tenía una ley
especial referente a la adopción internacional; solamente disposiciones para la
adopción en general, pensando en la adopción general, la parte sustantiva
estaba contenida en los artículos 228 al 251 del Código Civil, el aspecto procesal
se regía por las disposiciones generales de jurisdicción voluntaria del Decreto
54-77 del Congreso de la Republica. El congreso de la república, tuvo su estudio
durante muchos años la adopción en general y su preocupación era legislar para
regular tanto la adopción nacional como la adopción internacional, algunos
proyectos pasaron la primera y segunda lectura, pero murieron en el
procedimiento de adopción y formación de la ley.
Las leyes anteriormente citadas no eran las únicas que deberán tomarse en
cuenta para la legislación de una adopción internacional en Guatemala un
panorama completo de las leyes que debían atenderse en la adopción
internacional en Guatemala era el siguiente:
Constitución política de la Republica: artículos 54 y 55
Código Civil: artículos 190, 228 al 251, 258, 274, 308, 309
Código procesal Civil y Mercantil: 401 al 406
Ley de Tribunales de Familia: artículos 1, 2, 7, 14, 16 y 20
Ley de protección integral de la niñez y adolescencia, Decreto 27-2003
del Congreso de la Republica. Artículos 22, 23 y 24.
De lo anterior se concluye que, si un matrimonio extranjero deseaba adoptar un
niño en Guatemala, debía venir a Guatemala y formalizar aquí dicha adopción,
de conformidad con las disposiciones ordinarias de nuestra ley aplicable a la
adopción nacional. Dicha pareja, siempre y cuando estuviere dispuesta a pasar
en Guatemala el tiempo necesario a dicho proceso, no tenía más obligación de
probar que aquello que nuestra ley exigía para cualquier guatemalteco. El
trasladar al niño adoptado al país de los adoptantes era una cuestión particular
que cada matrimonio debía arreglar con las autoridades de su propio país, debía
ajustarse a ellas y seguramente debía proceder en su país a formalizar
legalmente la adopción.
Ante la ausencia de legislación internacional especifica relativa a la adopción
internacional, cabe preguntar: ¿Qué deberá regir la adopción internacional?
¿será la ley del país recepción del niño adoptado? ¿será la ley del país de origen
adoptado?
La adopción: es una institución jurídica solemne y orden público, por la que se
crean entre dos personas que pueden ser extrañas la una de la otras, vínculos
semejantes a aquellos existen entre el padre o madre unidos legítimamente
matrimonio y sus hijos.
1. ADOPCIÓN: Institución social de protección y de orden público tutelada por
el Estado, por la cual una persona toma como hijo biológico de otra persona.
Hoy en día la adopción se lleva a cabo por razones altruistas de protección a la
infancia abandonada y desamparada ayuda y asistencia social, integración a la
familia entre otras razones, además se trata de un acto en el que necesariamente
interviene el Estado mediante los organismos judiciales respectivos.
2. LA ADOPCION EN EL DERECHO INTERNACIONAL PRIVADO
La adopción adquiere importancia en el Derecho Internacional Privado, debido a
que la mayoría de los Estados del mundo admiten hoy en día lo que se ha dado en
llamar “La adopción Internacional”, es decir, adopciones en las cuales los
adoptantes y el adoptado pertenecen a Estados diferentes.
Las legislaciones actuales con muy pocas excepciones, han legislado para la
adopción nacional, aquellas adopciones en las cual tanto el adoptado como los
adoptantes pertenecen a un mismo país, no así las adopciones internacionales.
Dentro de la gama de legislaciones sobre la adopción podemos afirmar que las
disposiciones sustantivas de las mismas no son iguales en cuanto a la capacidad,
formalidades, derechos y deberes engendrados por dicha institución.
3. PROHIBICIONES
La ley prohíbe expresamente
La adopción es una institución social de protección, por lo que se prohíbe:
La obtención de beneficios indebidos, materiales o de otra clase, para las
personas, instituciones y autoridades involucradas en el proceso de
adopción; incluyendo a los familiares dentro de los grados de ley del
adoptante o del adoptado;
A los padres biológicos o representantes legales del niño, disponer
expresamente quién adoptará a su hijo o hija; salvo que se trate del hijo del
cónyuge o conviviente o de la familia sustituta que previamente lo ha
albergado;
A los padres adoptivos disponer de los órganos y tejidos del adoptado para
fines ilícitos;
A las personas que participan en el proceso de adopción tener relación de
cualquier clase con las entidades privadas y organismos acreditados
extranjeros que se dedican al cuidado de niños declarados en estado de
adaptabilidad;
Que el consentimiento para la adopción sea otorgado por una persona menor
de edad, padre o madre, sin autorización judicial;
Que los potenciales padres adoptivos tengan cualquier tipo de contacto con
los padres del niño o con cualquier persona que puedan influenciar en el
consentimiento de la persona, autoridad o institución involucrada en el
proceso de adopción, se exceptúan los casos en que los adoptantes sean
familiares dentro de los grados de ley del adoptado;
Que los padres biológicos otorguen el consentimiento para la adopción antes del
nacimiento del niño y que tal consentimiento sea otorgado antes de las seis
semanas de nacido el niño.
Los expedientes donde se descubra alguna de las prohibiciones anteriores se
suspenderán inmediatamente y no se autorizará la adopción, sin perjuicio de
certificar lo conducente en materia penal si la acción en sí misma es constitutiva de
delito o falta. La autoridad correspondiente deberá iniciar de oficio el proceso de
protección para el niño.
4. SUJETOS DE LA ADOPCION
Sujetos que pueden ser adoptados
El niño, niña o adolescente huérfano o desamparado;
El niño, niña o adolescente que en sentencia firme se le haya declarado vulnerado
su derecho de familia;
Los niños, niñas y adolescentes cuyos padres biológicos hayan perdido en
sentencia firme la patria potestad que sobre ellos ejercían;
El niño, niña o adolescente cuyos padres biológicos hayan expresado
voluntariamente su deseo de darlo en adopción;
El hijo o hija de uno de los cónyuges o convivientes, en cuyo caso ambos padres
biológicos deberán prestar su consentimiento, salvo que uno de ellos haya fallecido
o hubiere perdido la patria potestad;
El mayor de edad, si manifiesta expresamente su consentimiento; en igual forma
podrá ser adoptado el mayor de edad con incapacidad civil, con el expreso
consentimiento de quién ejerza sobre él la patria potestad o la tutela.
Se procurará que los hermanos susceptibles de ser adoptados no sean separados
antes y durante el proceso de adopción y que sean adoptados por la misma familia,
salvo razones justificadas que atiendan a su interés superior determinado por la
Autoridad Central.
5. SUJETOS QUE PUEDEN ADOPTAR.
Podrán adoptar el hombre y la mujer unidos en matrimonio o en unión de hecho
declarada de conformidad con la legislación guatemalteca, siempre que los dos
estén conformes en considerar como hijo al adoptado.
Podrán adoptar las personas solteras cuando así lo exija el interés superior del niño.
Cuando el adoptante sea el tutor del adoptado, únicamente procederá la adopción
cuando hayan sido aprobadas las cuentas de la tutela y siempre que el adoptante
cumpla con los requisitos de idoneidad establecidos en esta ley.
6. IDONEIDAD DEL ADOPTANTE.
Los sujetos que de conformidad con el artículo anterior soliciten adoptar a un niño,
niña o adolescente deberán tener una diferencia de edad con el adoptado no menor
de veinte años; poseer las calidades de ley y cualidades morales y socioculturales;
así como aptitudes que permitan el desarrollo pleno del niño, niña o adolescente.
La idoneidad es la declaratoria por medio de la cual se certifica que los futuros
padres adoptantes son considerados capaces e idóneos para asegurar de un modo
permanente y satisfactorio el cuidado, respeto y desarrollo integral del niño. La
idoneidad se establece mediante un proceso de valoración que incluye un estudio
psicosocial que abarca aspectos legales, económicos, psicológicos, médicos,
sociales y personales para comprobar no solo que la futura familia adoptante es
idónea sino también sus motivaciones y expectativas al desear adoptar.
EXCEPCIONES
No será necesaria la obtención del Certificado de Idoneidad:
Cuando la adopción sea de un mayor de edad.
Cuando la adopción sea del hijo o hija de uno de los cónyuges o unidos de hecho o
de la familia que previamente lo ha albergado.
El Derecho Internacional Privado atiende a regir los actos o relaciones jurídicas que
surjan por típicas interacciones entre las personas. Es por ese motivo que su
evolución radica en apoyarse en una realidad social, con el fin de proveer normas
jurídicas para la resolución de conflictos de leyes.
Los objetivos señalaron que la nacionalidad es el derecho humano fundamental que
establece el vínculo jurídico entre el individuo y el Estado, en virtud del cual una
persona es miembro de la comunidad política; que se constituye de conformidad
con el derecho interno y el derecho internacional.
CUESTIONARIO