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El siguiente análisis de artículo abre el debate con la siguiente pregunta ¿Psicología de la

liberación o psicología con conciencia? Y es justo con esto que los autores abren cómo esta

afirmación se representa como una exposición meta teórica, sobre unos de los mayores referentes

en Latinoamérica, refiriéndose al psicólogo salvadoreño Martín-Baró. Su inclusión a nivel

epistemológicos y para la ciencia en general, hace que se le dedique este articulo por completo, ya

que el mismo, por su influencia trae cierta polémica con la propuesta frase. Es al mismo tiempo la

razón entonces por la que se expone la obra de Martín-Baró, como "ciencia liberadora".

Y es justamente esta descripción ‘liberación’ la que trae revuelo entre los seguidores de la

ciencia y psicología de Martín-Baró, ya que esta en lugar de traer afinidad, genera al contrario una

confusión entre los mismos. Ahora bien los problemas del termino, se reduce a la incongruencia y

limitación que existe en la misma, con relación a las ciencia estudiada, esto quiere decir, tal y como

y lo dice el artículo un riesgo practico. La explicación de este punto se ve en el desgaste de estar

defendiendo o salvando de forma constante el termino de ‘liberación’ frente a sus detractores. Otro

punto en contra de este termino, es que justamente la libertad es la base del ya conocido modelo

de organización socioeconómico mundial, dicho esto, el conflicto se presenta en la idealización o

los juegos de roll de latente presencia de un opresor, lo cual genera la proyección de buscar siempre

la liberación del mismo, es decir libertad y sumisión, a su vez se fusiona con este sentir digno de

la Revolución Francesa, la interpretación de libertad dada por el sistema democrático, el cual en

forma ambigua sostiene que las mismas leyes que los limitan, son los mismos que les brindan

libertad, lo cual no ha traído un convencimiento total.

Antes de proceder con el desarrollo de este análisis es importante aclara que no se está

menospreciando la libertad, sino la interpretación y acción de la misma, y su accionar justamente

más intencionado en nombre de la libertad.


Desarrollando el cuerpo del análisis, se considera la siguiente irregularidad como una de

las mayores responsables de la crítica a la libertad del autor. La singularidad que se presenta entre

el autor, Martín-Baró y la descripción es que este pertenecía pertenecía a la línea sacerdotisa, el

cual representaba y respaldaba muy bien, ya que este se identificaba de forma explícita con la

iglesia, y movimientos religiosos. Esto generaba, incluso al momento del análisis de esta lectura,

cierto morbo dentro de algunos círculos Latinoamericanos, condicionando que esta fuera la razón

principal de esta postura de la psicología de libertad, sin embargo tal argumento queda a discreción

del analista. Los defensores de Baró postulaban respecto a este punto que este ideal fuera una

motivación, más que la razón extra, también se respaldan en que el autor de este movimiento tenía

suficiente créditos para defenderse por si solo su postura intelectual, tales como postgrados en

Chicago, condiciones sociales latinoamericanas, excepcional capacidad de análisis, su licenciatura

en Colombia etc. Ahora bien, retomando su posición eclesiástica, esta lograría cierta influencia en

los criterios de índole Europeo, en la primera postula de su obra, quienes se des envolvían en una

ciencia agnóstica, provocando así un rechazo en quienes no conocen su obra, y muchos menos le

tomaran en cuenta su obra por su relación tan estrecha con el corte sacerdotal, rebajándolo ( dentro

de la interpretación científica ) a un sacerdote que generaba crítica a la psicología.

Una vez establecido los puntos que retractaban la liberación, se entrará en lo que compete,

¿Qué es entonces la liberación para Martín-Baró?. De primera entrada se pide considerar que la

psicología de la liberación característica esencial en acción, alejada de la motivación exterior, por

lo tanto su obra expone bajo tres formas, la primera, llama a la relación teológica de la liberación,

esto quiere decir, tal y como se aclaró antes, que el autor no tiene problema en re interpretar las

Escrituras, donde se presentan a un Dios opresor, (movimiento democristiano) hacia una transición

de libertad religiosa. El escándalo del mismo se da en la libertad justamente que se otorgaba al ser
humano para construir su destino en contra de los sistemas sociales opresores, o en un contexto

latinoamericano, voluntad de Dios, que muchas veces se asimilaba que debía ser la voluntad del

pueblo. Para Martín-Baró hablar tan abierta y explícitamente sobre la religión no era ningún

inconveniente, al contrario, este sostenía que no existía razones, por lo menos desde la teoría del

conocimiento, para que ciencia y religión estén separadas.

De la mano de la primera se encuentra la segunda forma de liberación, la cual expone la

utilización de la psicología como herramienta para la liberación de las mayorías populares, en las

perspicacia se encuentra la astucia, y es por esto que el autor de la psicología de libertad, desde

temprano, vio una necedad y tomando conciencia logró usar la psicología social para transformar

la realidad social. Cabe destacar que en este proceso tuvo y fue influenciado por las revolucionarias

ideas de Paulo Freire. A partir de entonces, Martín-Baró comienza a desarrollar una psicología

crítica de sí misma, esta buscaba proyectar el poder consiente que habita en la construcción de la

realidad social, es decir, que con esto Martín-Baró, logró aplicar los principios científicos de la

psicología para ser una puente que trajera conciencia respecto a las opresión que vivían las

minorías populares Latinoamérica, es decir que su fin era traer libertad, o bien ser un instrumento

liberador. Por último, dentro de las manifestaciones de la liberación, se encuentra la postura

teóricas de la psicología, esta trae consigo el deseo de construir una psicología social autóctona,

para ser más exactos una independencia del modelo norteamericano o europeo, es tal el punto de

influencia de Baró, que este fue una pieza clave en la Psicología Social en America Latina para la

liberación de las sombras externas, esta tercer postura de liberación, criticaba la poca química que

existía entre el modelo norteamericano y su aplicación en el contexto latinoamericano, donde las

necesidades sociales no era ni similares ni cercanas a la cultura emergente Latinoamericana. Podría

decirse entonces que la obra de Martín-Baró, la liberación de la psicología, fue a la apertura para
la libertada de critica que afectaba la psicología social desde los años setenta, junto a su ya

mencionada y generalizada crítica de de las ciencias sociales, logrando así una cercanía de la

psicología a la realidad latinoamericana. Dentro de las posturas de Martín-Baró también se

manifestó una clara posición política, en contraposición norteamericana, quienes los consideraba

opresores de la libertad, a la vez que manifestaba un descontento contra el gobierno y los que

tuvieran algo de poder político, denunciando las injusticias sociales a las que estaba sometida el

pueblo. Es justo entonces que la suma de todos estos factores, mas la clara suma de la intención

de Baró por una liberación a nivel psicoscial lo que hacen que Latinoamérica renazca como una

psicología social hija de la crisis, dejando de una vez y por todas la sombra de sus opresores como

lo eran las enseñanzas de los grandes centros académicos de Europa y Estados Unidos.

En síntesis, se podría entender entonces que Martín-Baró logra superar el escollo de las

separaciones entre la ciencia y la religión, mediante una muy clara re lectura de las Escrituras como

de los postulados de la ciencia en una línea metafísica, así queda establecida una fuerza forma de

relación alternativa entre Dios y la ciencia, esto genera que una revolución tal que se toma en

cuenta la religiosidad y espíritu en la definición del ser humano y su conduzca, estos pasas de ser

aspectos desapercibidos a un plano relevante.

Profundizando con el autor, podría decirse entonces que la línea de análisis psicosocial de

Martín-Baró podría entrar dentro de una descripción atípica, esto debido a que su enfoque era

dirigido ‘desde y para la gente’, esto con el fin de usar la psicología como un instrumento de

cambio y transformación. Es decir, la limitante no se ajustaba solo al conocimiento científico, sino

que buscaba actuar sobre la realidad social, este dejaba a sus oyentes, y hacedores de la psicología

de libertad, la espina de que la realidad es injusta y está llena de contradicciones. Martín-Baró, era

un psicólogo comprometido con la gente.


Para concluir, como psicólogo social Martín-Baró mantenían un trasfondo de la realidad

salvadoreña, en el que exponía los problemas sociales que atravesaba la realidad salvadoreña, con

el fin de abordar posibles soluciones. El mismo exponía que la psicología y la instituciones

universitarias, estaban para servir al pueblo por ende generar soluciones a estos problemas, por lo

tanto, cuando estuvo a cargo de la Universidad Centroamericana de Psicología desde el puesto de

vicepresidente, dirigió sus esfuerzos para la universidad generara soluciones a los problemas del

pueblo salvadoreño, por eso impulsaba a los profesionales de la salud a cuidar al pueblo.

Es notable también el aspecto en el plano de la psicología social, como la guerra dejó

huellas en el país y la población, lo cual por eso, este era enfático en concientizar la realidad de

dar terapia a las víctimas, así mismo consideró que las consecuencias de la guerra tuvieron claras

repercusiones en los niños, la apertura al entendimiento de la psicología de la guerra, y cómo está

tuvo repercusiones en toda América Latina, este expone como la guerra es un fenómeno que afecta

todos los procesos de la sociedad y a todos sus miembros, descartando potencialmente que exista

un enfoque individualista de la enfermedad mental, al contrario, afirmó que este afectaba el

contexto familiar y los vínculos sociales de las personas, por lo tanto, la guerra no excluye a nadie,

ni el opresor ni el oprimido. Por último, como se ha visto a lo largo de la lectura, Martín-Baró fue

un firme opositor de los modelo externos, por eso sostenía que la realidad salvadoreña y

centroamericana se podía construir bajos modelos de más apropio cultural, dejando a un lado los

modelo universales que por semejanza a la realidad social se consideraba útiles para brindar

solución y apoyo a la mismas. Es decir, la psicología aunque tenga un principio universal, debería

debía de adaptarse al contexto de cada región, generando así un interés por hacer una psicología

diferente para América Latina, de igual forma dentro de su metodología siempre estaba apuntada

a una dirección, dar la voz al pueblo.


Queda claro entonces que la obra de Martín-Baró constituyó una base incuestionable para

el enfoque critico y desarrollo de la Psicología Social, este indudablemente asentó las bases para

que incluso hoy día día fueran validad para la discusión de los enfoques de índole psico social.

Dentro de las singularidades meta teóricas es notable que las teorías que se proponen desde la

espiritualidad son compatibles con los principios de la investigación psicosocial, siendo así como

se complementa con la realidad crítica, y esta misma defina que teorías o propuestas se adjuntan

mejor a lo vivido.

Por otro lado es importante reconocer la posibilidad que se gestó para que la Psicología

Social, tomara un criterio orientador en el desarrollo de una cultura real, basado en el complemento

con los derechos humanos, lo verificas de esto se encuentra en la época que fue desarrollado esta

ideología de la liberación de la psicología, un momento histórico cuando el país y se podría decir

que Centroamérica enfrentaba momentos de guerra, el valor y al mismo tiempo visión que tuvo el

autor para hablar en pos de la libertad fue realmente admirable y considerable, exponiendo en gran

medida su propia vida a raíz de lo que creía, y aún mas noble en razón del y para el pueblo. Su

camino estuvo establecido en gran medida por poner en escena el valor real de los derechos

humanos, se puede decir que justamente está línea fue la que le dio valor y propósito a la vida del

psicólogo Ignacio Martín-Baro, tal vez y posiblemente este no tenia idea del camino que estaba

trazando y de las opiniones unitarias y divididas que estaba generando en su generación y en las

nuevas generaciones.

Al final los retos que deja para toda una generación se enfocan en el compromiso de trabajar

y modelar una ciencia comprometida con los excluidos, ver donde nadie ve y apuntar la ciencia

hacia ellos, encaminado en la siempre y reiterada conquista hacia la liberación, un trayecto que

solo pude hacerse día con día, paso a paso, en los pies de cada sujeto que conforma la sociedad.
Bibliografía

Soto Martínez, R. (2004). Una reflexión sobre el metasentido de la praxis científica: la propuesta de
Ignacio Martín-Baró desde la psicología social (Doctoral dissertation, Universidad Complutense de
Madrid, Servicio de Publicaciones).

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