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Pregunta de examen: Según Antonio Dellepiane, ¿En qué cosiste el proceso reconstructivo y por qué se

asimila la labor del juez a la del historiador? Amplíe su concepto con otra bibliografía.
Nombre: Natalia Carolina Londoño Soto.

Todo proceso que nace a la vida jurídica es resultado de unos antecedentes, unos hechos acaecidos y unas
consecuencias susceptibles de ser probadas, los tres son elementos descriptivos que en primera medida no
resultan de contenido jurídico sino que más bien hunden sus raíces en uno de los saberes más antiguos; la
historia o en estricto sentido la historiografía y al carácter reconstructivo de la misma.

La obra del profesor Antonio Dellepiane, afina la discusión jurídica en una tonalidad que permite al operador
jurídico ver más allá del plano normativo y lo obliga a recurrir a herramientas provistas por otras ciencias para
decidir con justicia, y siguiendo una de las tres máximas de los juristas romanos, dar a cada uno lo suyo, para
así restablecer el equilibrio jurídico turbado.
 
En el presente escrito, con ayuda de otras fuentes bibliográficas se analizarán dos conceptos desarrollados por el
profesor Dellepiane, en qué consiste el proceso reconstructivo, en segundo lugar, la misión del juez en dicho
proceso y la razón por la cual se asemeja a la del historiador.
 
Para analizar el carácter reconstructivo de la prueba y en qué consiste el proceso reconstructivo, es necesario
referirse brevemente a las tres acepciones a las cuales según Dellepiane responde el concepto de prueba: 1.)
medio de prueba, es decir, testimonios, confesiones, peritajes, que hayan ingresado al proceso aportadas por las
partes o a petición del juez (pruebas de oficio), 2.) acción de probar o actor probat actionem, según la cual la
parte que aporta la prueba lo hace con el propósito de demostrar que es legalmente suyo el derecho que ha
motivado su ejercicio de la acción, creando para su contraparte la oportunidad de controvertir lo afirmado3.) la
prueba como certeza, es decir el elemento psicológico de los indicios y huellas que recaudados en el proceso y
debidamente confrontados, acrisolan los acontecimientos, esclarecen los hechos corroborando la entidad de la
prueba, un problema que atiende a la ontología de la misma, dado que la prueba es si confirmar un hecho y no
es si no lo confirma, en palabras de Dellepiane es un estado de espíritu, pues invalida o valida, de ahí el carácter
reconstructivo de la prueba y en este mismo sentido del proceso mismo.

Pero qué es la reconstrucción y por qué se predica del proceso. Parafraseando al filosofo Jean-Marc Ferry, la
reconstrucción es una operación intelectual que permite observar la forma en la que los hechos se contienen
unos a otros en una serie de niveles los cuales crean una estructura que a su vez permite reconstituir el proceso
del cual esta estructura es el resultado, de suerte que se accede a una comprensión propiamente histórica de la
situación dada en el presente1. En este sentido, si Dellepiane leyera a Ferry, la idea del proceso reconstructivo
se podría sintetizar de la siguiente manera 2: el operador jurídico cuenta con cuatro niveles de conocimiento, la
versión de lo acontecido aportada por la parte demandada, la versión aportada por el demandante, los medios de
prueba (plenas pruebas practicadas y controvertidas) y por último el contenido normativo que se ajusta a la litis
en disputa, de estos tres niveles le es posible reflexionar desde el presente, los antecedentes, hechos y
consecuencias, obteniendo la teoría del caso sub iudice, son las inferencias que el juez haga a partir de este
ejercicio los que le permiten aquilatar, valorar, confrontar, reconstruir los hechos3 y decidir así con justicia.

Lo anterior, nos permite continuar con el segundo punto del análisis, la misión del juez en dicho proceso y la
razón por la cual se asemeja a la del historiador. De suerte que tanto la certidumbre jurídica y la certidumbre
histórica se rigen por una lógica similar, pues ambas recurren a la imaginación4, historiador y juez son ambos
artífices de un duplicado de la realidad, valiéndose el primero de los vestigios de épocas pasadas y el segundo
de medios de prueba, pero a fines en tanto son elementos contenidos en documentos, imágenes, testimonios,
1
[ CITATION Jea01 \l 3082 ]
2
Lo anterior entendido desde el prisma del proceso que ha cursado todo el camino previsto para que se emita sentencia, como el
proceso que esta a punto de ser finiquitado y solo espera el fallo del juez para su culminación.
3
[ CITATION Ant09 \l 3082 ]
4
Ídem.
evidencias, crean una ficción, que responde a una necesidad, conocer con la mayor exactitud posible la realidad
tal y como ella existió, porque emplean lo que Dellepiane define como el método reconstructivo, evocando
grandes obras como la del filósofo de la ilustración Immanuel Kant en su Crítica de la Razón Pura cuando
afirma, “La filosofía de la ciencia sin la historia de la ciencia es vacía; la Historia de la ciencia sin la filosofía
de la ciencia es ciega”.

Y esto porque se puede decir que la tesis que articulo Dellepiane en la Nueva Teoría de la Prueba, busca per se
identificar al juez como el historiador del proceso, si la doctrina había dicho en el pasado a viva voz que el
prueba judicial responde a un proceso reconstructivo y tímidamente que ontológicamente era una
reconstrucción de carácter histórico, Dellepiane, centra el foco de la discusión en que es necesario dar al juez
ese reconocimiento, homologo, mutatis mutandis, de su misión como historiador del proceso.

Sin embargo, al joven criterio de quien escribe la misión del juez no se asemeja a un historiador genérico,
entiéndase genérico aquel historiador que es descrito por Dellepiane, citando a Lanson que tiene como objeto el
pasado: un pasado del que solo subsisten indicios o vestigios con ayuda de los cuales se reconstruye su idea , la
misión del juez dentro de proceso se asemeja mas a la de un historiador del tiempo presente.

La historia del tiempo presente es una mirada Marxista de la historia, un acercamiento a esta ciencia como un
proceso no finiquitado y en constante construcción, que se encuentra en formación, parafraseando a Pierre
Nora5, y que se vale de dos elementos para su entidad los recursos historiográficos y la realidad social, propende
por una explicación de lo ya concluido des lo que sigue aconteciendo, recurriendo a todos los elementos que
constantemente las dinámicas del cambio le ofrecen.

El papel del juez de este siglo, el papel del juez colombiano y particularmente desde la proclamación de la
Constitución de 1991, se asemeja a la del historiador del tiempo presente en tanto su tarea reflexiva de
elaboración de la teoría del caso no se vale solamente de los cuatro niveles de conocimiento que se analizaron
en párrafos anteriores, sino que así como el historiador del tiempo presente recurre a la historiografía, es decir al
estudio bibliográfico y crítico acerca de los textos escritos sobre historia y sus fuentes, así como de los autores
que han tratado estas materias6, el juez recurre a la jurisprudencia de la Corte Constitucional, actualiza sus
conocimientos para la elaboración de la teoría del caso alimentándose de los fallos más recientes, ajustándolos a
la constitucionalización sufrida por las leyes que estructuran la rama en la que desempeña su labor, nutriéndose
del análisis hechos por otros de casos de la misma naturaleza al que se presenta en su despacho, con el material
probatorio que tiene delante suyo, no para que se contamine, ni se perturbe la litis, todo lo contrario, para que
al dirimir el pleito se pueda observar que se propendió por la mayor a realización de la justicia como fin del
proceso porque la reconstrucción de los hechos obedeció al dinamismo mismo del derecho actual.

Asimismo, el juez, recurre no a la realidad social, sino a la realidad del proceso judicial, porque es perentorio
que el juez como operador del derecho, actualice sus conocimientos y se preocupe por tener herramientas de
otras ciencias que por la globalización han tenido la suerte de progresar como nunca en otro momento de la
historia, no que el juez caiga en el error de fungir simuladamente como perito, discusión que no nos convoca el
día de hoy, sino que en ese mismo proceso de reconstrucción del caso sub judice, el conocimiento de lo que
ocurre en el presente en la ciencia que atraviesa trasversalmente su área de labor, como por ejemplo en el caso
del derecho minero energético, no sea solo del pasado, sino de lo que acaece en el hoy.

5
[ CITATION Jaq \l 9226 ]
6
Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española
Bibliografia

Dellepiane, A. (2009). Nueva Teoria de la Prueba. Bogotá, Colombia : Editorial Temis S.A.

Ferry, J.-M. (2001). La Ética de la Reconstructiva. Bogotá, Colombia: Biblioteca Francesa de Filosofia.

Nora, J. L. (n.d.). Hacer la Historia . 1984: Editorial Laia .

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