Está en la página 1de 24

1

RESUMEN:
El presente laboratorio, no se realizó ninguna práctica, por el
contrario se abordó diversos temas relacionados con el agua
como: concepto, calidad, fuentes de contaminación entre
otros; puntos muy importantes debido a que trabajaremos
directamente con el agua, por lo tanto, debemos saber cuáles
son los componentes y agentes podrían afectar nuestros
resultados. Además se presentó como debe hacerse la
correcta toma de muestras, teniendo en cuenta las diferentes
condiciones que podrían presentarse al momento de
realizarlo, y los métodos de muestreo a realizar durante todo
el curso considerando los errores técnicos y humanos;
concluyendo con el análisis de los resultados que se
obtendrán de las diferentes prácticas, estableciendo
comparaciones convenientes con los Límites Máximos
Permisibles (LMP) o los Estándar de Calidad Ambiental (ECA).

INTRODUCCIÓN:
El agua es un recurso esencial para la vida por lo que la
descripción y análisis de la calidad de las aguas es complejo,
motivo por el cual existen diferentes tipos de métodos para
obtener resultados sobre las características del agua, cabe
mencionar que se realizan discusiones de acuerdo a la
eficiencia de estos métodos. Uno de los principales problemas
yace en la misma definición de la calidad del agua, debido a
que se puede interpretar de diferentes maneras. Así, se puede
interpretar desde una perspectiva con respecto a su uso,
como la capacidad intrínseca que tiene el agua para
responder a los usos que se podrían obtener de ella. O desde
un punto de vista ambiental, como la define la propuesta de
Directiva Marco de las Aguas, como aquellas condiciones que
deben darse en el agua para que ésta mantenga un
ecosistema equilibrado y para que cumpla unos determinados
objetivos de calidad (calidad ecológica). También se puede
interpretar como las características físicas, biológicas y
químicas que deberían tener para el uso de un determinado
objetivo, etc. En el siguiente laboratorio se abordará todas las
secciones mencionadas desde una visión global integradora y
concreta.

OBJETIVOS:

 Comprender los diversos temas con respecto al


agua y su importancia.
 Conocer los métodos de toma de muestras.

2
 Comprender el análisis de los resultados con los
LMP o ECA.

MARCO TEÓRICO:
Las aguas naturales muestran en general, las calidades más
características de sus fuentes. Las condiciones
climatológicas, geográficas y geológicas son factores
importantes para determinar la calidad del agua.
Sin embargo, muchos factores producen variaciones en la
calidad de las aguas naturales.
Las fuentes naturales (ver figura I) aprovechables de agua
pueden clasificarse como sigue:
1. Neblina.
2. Lluvia y Nieve.
3. Agua de superficie.

 Corriente de agua.
 Lagunas y lagos naturales.
 Embalses.
 Mares y océanos.
4. Aguas subterráneas

 Manantiales.
 Galerías de infiltración.
 Pozos poco profundos.
 Pozos profundos.
Las aguas naturales forman parte de un ciclo continuo. (Ver
figura II)
En ese ciclo las aguas naturales adsorben:
- Oxigeno. -Dióxido de carbono.
- Gases del aire. -Polvo.
- Humos. -Vapores.
Recogen:
- Bacterias. - Materia Inorgánica
- Esporas. - Limo
- Partículas. - Fertilizantes
- Lodo. - Estiércol
- Materia orgánica. - Minerales solubles

3
CARACTERISTICAS GENERALES
Aspectos microbiológicos:
La garantía de la inocuidad microbiana del abastecimiento de
agua de consumo se basa en la aplicación, desde la cuenca
de captación al consumidor, de barreras múltiples para evitar
la contaminación del agua de consumo o para reducirla a
niveles que no sean perjudiciales para la salud. La seguridad
del agua se mejora mediante la implantación de barreras
múltiples, como la protección de los recursos hídricos, la
selección y aplicación correctas de una serie de operaciones
de tratamiento, y la gestión de los sistemas de distribución
(por tuberías o de otro tipo) para mantener y proteger la
calidad del agua tratada. La estrategia preferida es un
sistema de gestión que hace hincapié en la prevención o
reducción de la entrada de patógenos a los recursos hídricos
y que reduce la dependencia en las operaciones de
tratamiento para la eliminación de patógenos.
En términos generales, los mayores riesgos microbianos son
los derivados del consumo de agua contaminada con
excrementos humanos o animales (incluidos los de las aves).
Los excrementos pueden ser fuente de patógenos, como
bacterias, virus, protozoos y helmintos. Los patógenos fecales
son los que más preocupan a la hora de fijar metas de
protección de la salud relativas a la inocuidad microbiana. Se
producen con frecuencia variaciones acusadas y bruscas de la
calidad microbiológica del agua. Pueden producirse aumentos
repentinos de la concentración de patógenos que pueden
aumentar considerablemente el riesgo de enfermedades y
pueden desencadenar brotes de enfermedades transmitidas
por el agua. Además, pueden exponerse a la enfermedad
numerosas personas antes de que se detecte la contaminación
microbiana. Por estos motivos, para garantizar la inocuidad
microbiana del agua de consumo no puede confiarse
únicamente en la realización de análisis del producto final,
incluso si se realizan con frecuencia.
Además de los patógenos fecales, pueden tener importancia
para la salud pública en determinadas circunstancias otros
peligros microbianos (por ejemplo, el dracúnculo [Dracunculus
medinensis], las cianobacterias tóxicas y las legionelas).
Las formas infecciosas de muchos helmintos, como los
nematodos y platelmintos parásitos, pueden transmitirse a las

4
personas por medio del agua de consumo. El agua de
consumo no debe contener larvas maduras ni huevos
fertilizados, ya que un único ejemplar puede ocasionar una
infección. No obstante, el agua es una vía relativamente poco
importante de infección por helmintos, con la excepción del
dracúnculo.
Las legionelas son bacterias ubicuas en el medio ambiente y
pueden proliferar a las temperaturas elevadas existentes en
ocasiones en los sistemas de distribución de agua de consumo
entubada, sobre todo en los sistemas de distribución de agua
caliente y templada.
La exposición a las legionelas presentes en el agua de
consumo se produce mediante inhalación y puede evitarse
mediante la aplicación de medidas básicas de gestión de la
calidad del agua en los edificios y mediante el mantenimiento
de concentraciones residuales de desinfectantes en todo el
sistema de distribución por tuberías.
El peligro para la salud pública de las cianobacterias deriva
de su capacidad de producir diversas toxinas, conocidas como
«cianotoxinas». Al contrario que las bacterias patógenas, las
cianobacterias no se multiplican en el organismo humano tras
su ingestión, sino únicamente en el agua antes de ser
ingerida. Si bien los péptidos tóxicos (por ejemplo, las
microcistinas) se encuentran habitualmente en el interior de
las células y pueden, por consiguiente, eliminarse, en gran
parte, por filtración, se liberan también al agua alcaloides
tóxicos, como la cilindrospermopsina y las neurotoxinas, que
pueden atravesar los sistemas de filtración.
Algunos microorganismos forman biopelículas sobre
superficies que están en contacto con agua. La mayoría de
estos microorganismos, con pocas excepciones, como las
legionelas, no causan enfermedades en las personas sanas,
pero pueden resultar molestos ya que generan sabores y
olores o la coloración del agua de consumo. La proliferación
que se produce después del tratamiento del agua de consumo
se conoce con frecuencia como «reproliferación».
Normalmente, se refleja en un aumento del recuento de
heterótrofos en placa (RHP) en muestras de agua. Los valores
de RHP aumentan sobre todo en partes de los sistemas de
distribución por tuberías donde se produce estancamiento de
agua, en instalaciones de fontanería domésticas, en agua
envasada, en algunos casos, y en dispositivos conectados a
las instalaciones de fontanería, como descalcificadores, filtros
de carbón y máquinas expendedoras automáticas.
Aunque el agua puede ser una fuente muy importante de
microorganismos infecciosos, muchas de las enfermedades

5
que pueden transmitirse por el agua pueden transmitirse
también por otras vías, como el contacto entre personas, las
gotículas y aerosoles, y la ingesta de alimentos.
En la tabla I, se mostrará los agentes patógenos transmitidos
por el agua.

Aspectos Químicos:
Los riesgos para la salud asociados a los componentes
químicos del agua de consumo son distintos de los asociados
a la contaminación microbiana y se deben principalmente a la
capacidad de los componentes químicos de producir efectos
adversos sobre la salud tras periodos de exposición
prolongados. Pocos componentes químicos del agua pueden
ocasionar problemas de salud como resultado de una
exposición única, excepto en el caso de una contaminación
masiva accidental de una fuente de abastecimiento de agua de
consumo. Además, la experiencia demuestra que en muchos
incidentes de este tipo, aunque no en todos, el agua se hace
imbebible, por su gusto, olor o aspecto inaceptables.
En situaciones en las que no es probable que una exposición
de corta duración perjudique la salud, suele ser más eficaz
concentrar los recursos disponibles para medidas correctoras
en la detección y eliminación de la fuente de contaminación
que en instalar un sistema caro de tratamiento del agua de
consumo para la eliminación del componente químico.
Puede haber numerosos productos químicos en el agua de
consumo; sin embargo, sólo unos pocos suponen un peligro
inmediato para la salud en cualquier circunstancia
determinada. La prioridad asignada a las medidas de
monitoreo y de corrección de la contaminación del agua de
consumo debe gestionarse de tal modo que se evite utilizar
innecesariamente recursos escasos para el control de
contaminantes químicos cuya repercusión sobre la salud es
pequeña o nula.
La exposición a concentraciones altas de fluoruro, de origen
natural, puede generar manchas en los dientes y, en casos
graves, fluorosis ósea incapacitante. De modo similar, el agua
de consumo puede contener arsénico de origen natural y una
exposición excesiva al mismo puede ocasionar un riesgo
significativo de cáncer y lesiones cutáneas. Otras sustancias
de origen natural, como el uranio y el selenio, pueden también
ocasionar problemas de salud cuando su concentración es
excesiva.
La presencia de nitratos y nitritos en el agua se ha asociado
con la metahemoglobinemia, sobre todo en lactantes
alimentados con biberón. La presencia de nitratos puede

6
deberse a la aplicación excesiva de fertilizantes o a la
filtración de aguas residuales u otros residuos orgánicos a las
aguas superficiales y subterráneas.

Sobre todo en zonas con aguas corrosivas o ácidas, la


utilización de cañerías y accesorios o soldaduras de plomo
puede generar concentraciones altas de plomo en el agua de
consumo, que ocasionan efectos neurológicos adversos.
Son pocas las sustancias cuya presencia en el agua de
consumo suponga una contribución importante a la ingesta
general en términos de prevención de enfermedades. Un
ejemplo es el efecto potenciador de la prevención contra la
caries dental del fluoruro del agua de consumo. Las Guías no
pretenden definir concentraciones mínimas deseables de
sustancias químicas en el agua de consumo.
Se han calculado valores de referencia para muchos
componentes químicos del agua de consumo. Un valor de
referencia representa normalmente la concentración de un
componente que no ocasiona ningún riesgo significativo para
la salud cuando se consume durante toda una vida. Algunos
valores de referencia se han fijado con carácter provisional
basándose en la concentración alcanzable mediante
tratamiento y la capacidad de detección analítica. En estos
casos, el valor de referencia es mayor que el calculado
basándose en efectos sobre la salud.
En la tabla II, se indicaran los valores de referencia
correspondientes a sustancias químicas de origen natural
cuya presencia en el agua de consumo puede afectar a la
salud

El Papel del Análisis Químico del Agua:


Cualquier apreciación que se dé al análisis químico en
nuestros días, debe basarse sobre el convencimiento de que
las aguas naturales son de carácter complejo, que contienen
materias en suspensión y gran número de sustancias
disueltas, en concentraciones pequeñas, pero importantes.
Debido a esa complejidad, hasta los análisis químicos más
detallados no pueden revelar la concentración de todos sus
componentes.
Por lo tanto, estos análisis han sido dirigidos hacia fines
específicos, de modo que las pruebas minerales, las
sanitarias y las espectrográficas, dominen la solución

7
empírica de problemas directamente relacionados con
situaciones de tratamiento o de calidad.

Aspectos Radiológicos:
También debe tenerse en cuenta el riesgo para la salud
asociado a la presencia en el agua de consumo de
radionúclidos de origen natural, aunque su contribución a la
exposición total a radionúclidos es muy pequeña en
circunstancias normales.
No se fijan valores de referencia formales para radionúclidos
individuales en agua de consumo, sino que se utiliza un
sistema basado en el análisis de la radiactividad alfa total y
beta total en el agua de consumo. Aunque la detección de
niveles de radiactividad superiores a los umbrales de
selección no indica que exista un riesgo inmediato para la
salud, debe impulsar una investigación adicional para
determinar los radionúclidos.
Los niveles de referencia recomendados en esta publicación
no son aplicables a sistemas de abastecimiento de agua de
consumo contaminados durante situaciones de emergencia
originadas por la liberación accidental de sustancias
radiactivas al medio ambiente. En la figura IV , se indican las
fuentes de exposición a la radiación de la población mundial y
distribución promedio

Aspectos Relativos a la Aceptabilidad:


El agua no debe presentar sabores u olores que pudieran
resultar desagradables para la mayoría de los consumidores.
Los consumidores evalúan la calidad del agua de consumo
basándose principalmente en sus sentidos. Los componentes
microbianos, químicos y físicos del agua pueden afectar a su
aspecto, olor o sabor y el consumidor evaluará su calidad y
aceptabilidad basándose en estos criterios. Aunque es posible
que estas sustancias no produzcan ningún efecto directo
sobre la salud, los consumidores pueden considerar que el
agua muy turbia, con mucho color, o que tiene un sabor u olor
desagradable es insalubre y rechazarla. En casos extremos,
los consumidores pueden evitar consumir agua que es inocua
pero inaceptable desde el punto de vista estético, y consumir
en cambio agua de otras fuentes cuyo aspecto sea más

8
agradable pero que puede ser insalubre. Es, por consiguiente,
sensato conocer las percepciones del consumidor y tener en
cuenta, además de los valores de referencia relacionados con
efectos sobre la salud.
Los cambios en el aspecto, olor y sabor del agua de consumo
de un sistema de abastecimiento con respecto a sus
características organolépticas normales pueden señalar
cambios en la calidad del agua bruta o cruda (sin tratar) de la
fuente o deficiencias en las operaciones de tratamiento, y
deben investigarse.

ANALISIS DEL AGUA Y AGUAS SERVIDAS


Importancia de las Medidas Cuantitativas en la
Práctica de la Ingeniería Sanitaria y del Medio
Ambiente:
Las mediciones cuantitativas, son la base de la aplicación de
la ingeniería y de la ciencia en general. La Ingeniería del
Medio Ambiente, es seguramente, la más exigente al respecto,
porque ella no solamente necesita equipos convencionales de
medición aplicados en ingeniería, sino aún más, se deben
aplicar técnicas y metodologías que aplican los químicos,
físicos y biológicos.
Cada problema en ingeniería del medio ambiente debe ser
atacado desde su inicio en forma tal que su solución este
definida.
Ese acercamiento necesita del uso y procedimiento analíticos,
en el campo y en el laboratorio los cuales han sido verificados
y probados por muchas personas y con una amplia variedad
de materiales. Una vez que el problema ha sido definido
cuantitativamente, en ingeniero está usualmente en posición
de diseñar o recomendar una solución satisfactoria.
Después de la construcción de plantas de tratamiento y su
puesta en operación, usualmente se requiere una constante
supervisión empleando procedimientos cuantitativos para
mantener un comportamiento y resultado satisfactorio.
El incremento de la densidad poblacional y nuevas
tecnologías desarrolladas industrialmente están
constantemente intensificando viejos problemas y creando
nuevos.
Los ingenieros están constantemente buscando métodos más
económicos para resolver viejos problemas. Las
investigaciones son continuas para encontrar soluciones a los
nuevos problemas y mejores soluciones a los viejos. Los

9
métodos cuantitativos continuarán sirviendo como base para
todos los estudios.
Métodos y Técnicas de Análisis:
Concurrentemente, con la evolución de la práctica de la
Ingeniería Ambiental, se han desarrollado métodos analíticos
para obtener información de hechos requeridos para resolver
y solucionar problemas.
En muchos casos diferentes métodos han sido propuestos
para la misma determinación, y muchos de ellos han sido
modificados de alguna forma. Como resultado, los datos
obtenidos por los analistas siempre en desacuerdo.
En casos de litigios legales, difícilmente se pueden evaluar
hechos y evidencias en métodos analíticos.
Con el objeto de poner orden al caos, la Asociación
Americana de Salud Pública, designó a un comité, quien, con
la colaboración de muchos laboratorios e investigadores
privados, desarrollaron lo que se denomina Los Métodos
Estándar para análisis de Aguas y Aguas Servidas de la
AWWA, cuya técnicas para los análisis de aguas se aplican en
muchos países del mundo entre ellos el Perú.

FUENTES DE CONTAMINACIÓN
La contaminación de las aguas puede proceder de fuentes
naturales o de actividades humanas. En la actualidad la más
importante, sin duda, es la provocada por el hombre. El
desarrollo y la industrialización implican un mayor uso de
agua, una gran generación de residuos de los cuales muchos
van a parar al agua y el aumento en el uso de medios de
transporte fluvial y marítimo que, en muchas ocasiones, son
causa de contaminación de las aguas.
A continuación se consideran las fuentes naturales y
antropogénicas de contaminación, estudiando dentro de estas
últimas las industriales, los vertidos urbanos, las procedentes
de la navegación y de las actividades agrícolas y ganaderas.

Naturales:
Algunas fuentes de contaminación del agua son naturales. Por
ejemplo, el mercurio que se encuentra naturalmente en la
corteza de la Tierra y en los océanos, contamina la biosfera
mucho más que el procedente de la actividad humana. Algo
similar pasa con los hidrocarburos y con muchos otros
productos. Normalmente las fuentes de contaminación natural
son muy dispersas y no provocan concentraciones altas de
polución, excepto en algunos lugares muy específicos. La
contaminación de origen humano, en cambio, se concentra en

10
zonas concretas y, para la mayor parte de los contaminantes,
es mucho más peligrosa que la natural.

De origen humano:
Hay cuatro focos principales de contaminación antropogénica.
1. Industria. Según el tipo de industria se producen
distintos tipos de residuos. Normalmente en los países
desarrollados muchas industrias poseen eficaces
sistemas de depuración de las aguas, sobre todo las que
producen contaminantes más peligrosos como metales
tóxicos. En algunos países en vías de desarrollo la
contaminación del agua por residuos industriales es muy
importante. (ver Tabla I )
2. Vertidos urbanos. La actividad doméstica produce
principalmente residuos orgánicos, pero el alcantarillado
arrastra además todo tipo de sustancias: emisiones de
los automóviles (hidrocarburos, plomo, otros metales,
etc.), sales, ácidos, etc.
3. Navegación . Produce diferentes tipos de contaminación,
especialmente con hidrocarburos. Los vertidos de
petróleo, accidentales o no, provocan importantes daños
ecológicos.
4. Agricultura y ganadería. Los trabajos agrícolas
producen vertidos de pesticidas, fertilizantes y restos
orgánicos de animales y plantas que contaminan de una
forma difusa pero muy notable las aguas. La mayoría de
los vertidos directos, por ejemplo en España (el 65% de
los 60 000 vertidos directos que hay), son
responsabilidad de la ganadería. Se les llama directos a
los vertidos que no se hacen a través de redes urbanas
de saneamiento, y por tanto son más difíciles de
controlar y depurar.
En la figura III, se puede apreciar las fuentes potenciales de
contaminación.

ANÁLISIS DE MUESTRAS DE AGUA Y DESAGÜE


Los tipos de Análisis principales en muestras de agua y
desagüe son:
a. Gravimétricos (de peso)
b. Volumétricos (de volumen)
c. Colorimétricos (de color)
d. Por instrumentos.

11
Algunos de los análisis que indicaremos posteriormente
requieren de instrumentos para su determinación y serán
explicados en este curso.
Cuando se utilicen métodos por instrumentación, es esencial
que los instrumentos estén cuidadosamente calibrados, que se
comprueben con frecuencia y que los resultados de los
análisis se comparen regularmente con los obtenidos por un
método patrón o con los resultados del análisis simultaneo de
una muestra cuya composición se conoce con exactitud. Si se
ha empleado un método de análisis instrumental se tendrá que
mencionarlo en el informe.
Los análisis físico-químicos que vamos a exponer más
adelante, generalmente siguen los Métodos Normales
recomendados y sirven para determinar la conformidad de
determinada agua a las normas de calidad química o a las
características que deben reunir los desagües industriales;
por lo general para cada uno de los análisis se indicarán uno
o más métodos, aunque en muchos casos existen otros
métodos satisfactorios que pueden encontrarse en diversos
manuales o libros indicados en la bibliografía del curso.
El analista puede sustituir por otras las técnicas que aquí se
describen con tal que garanticen una sensibilidad, una
precisión y una exactitud equivalente.

Las sustancias que se analizan en el agua o desagüe se


pueden clasificar como:
a) Sustancias Químicas Toxicas:
1. Plomo 5. Cianuros
2. Arsénico 6. Bario
3. Selenio 7. Cadmio
4. Cromo Hexavalente

b) Sustancias Químicas que afectan a la Salud.


1. Fluoruros 2. Nitratos

c) Sustancias Químicas que influyen sobre la potabilidad


1. Residuo 8. Manganeso
2. Coloración 9. Cobre

12
3. Turbiedad 10. Zinc
4. Sabor y Color 11. Calcio
5. Hierro 12. Magnesio
6. Sulfatos 13. Cloruros
7. pH 14. Compuestos fenólicos

d) Sustancias Químicas que influyen sobre el Grado de


Contaminación del Agua.
1. Amoniaco
2. Detergentes
3. Aceites y grasas
4. Materia Orgánica Total (Demanda Bioquímica de Oxigeno)
5. Oxígeno Disuelto (Demanda Química de Oxigeno)
6. Nitrógeno Orgánico Total
7. Nitritos
8. Nitratos

RECOLECCIÓN DE MUESTRAS DE AGUA


Cantidad
Para la mayor parte de los análisis físicos y químicos, es
suficiente una muestra de dos litros, aunque para ciertas
determinaciones especiales pueden requerirse mayores
volúmenes. Por ningún concepto debe intentarse usar una
misma muestra para exámenes químicos, bacteriológicos y/o
microscópicos, puesto que difieren los métodos de recolección
y manejo.
Envases
Se recomienda que las muestras se recojan y se almacene en
frascos de cristal resistente de borisilicato, de caucho duro o
ebonita, de polietileno o de otros materiales inertes.
Para los propósitos generales de laboratorio, se recomienda
cristalería de marca Pirex, manufacturada por la Corning

13
Glass Co., y a no ser que se especifique de otro modo, la
designación de “Pirex” indicará cristalería de esta marca o de
su equivalente.
Para el almacenamiento por corto tiempo, o para la
cuantificación de constituyentes que no se afectan por el
almacenamiento en cristales inferiores, como calcio,
magnesio, sulfatos, cloruro, y quizás otros, resulta
satisfactorio el tipo de frascos para ácidos, de 2 ½ litros, con
tapón de campana; este tipo de tapón mantiene un disco de
vidrio adherido a la superficie esmerilada de la boca del
frasco, garantizando una protección adecuada de la muestra.

Si en una parte de la muestra se va a cuantificar,


posteriormente, sílice, sodio u otras sustancias que se
afecten por el almacenamiento prolongado en vidrios suaves,
puede transferirse una porción a un frasco de polietileno de
menor calidad, mientras que, el resto de la muestra se
conserva en frasco de vidrio.
Los frascos de muestras deben limpiarse cuidadosamente
antes de cada uso. Los frascos de vidrio pueden limpiarse
con la mezcla limpiadora de ácido crómico (mezcla crómica),
que se prepara agregando lentamente, con agitación, un litro
de ácido sulfúrico concentrado a 35 ml. de una solución
saturada de bicromato de sodio; puede también emplearse la
solución alcalina de permanganato de potasio, seguida de la
solución de ácido oxálico.
Si no hay desarrollo de organismos, basta un tratamiento
menos drástico y el enjuagado con ácido clorhídrico
concentrado es suficiente para eliminar las sustancias
inorgánicas. Para varios propósitos, los nuevos detergentes
son excelentes limpiadores y pueden aplicarse del mismo
modo que el ácido clorhídrico para la limpieza de frascos de
ebonita o de polietileno. Después de la limpieza, los frascos
deben enjuagarse cuidadosamente con agua corriente y,
finalmente con agua destilada.
Para su embarque, los frascos pueden empacarse en cajas de
madera, metal, plástico o cartón corrugado grueso, con un
compartimiento separado para cada uno.
Las cajas pueden revestirse interiormente con cartón
corrugado, fieltro o cualquier material similar, o pueden estar
provistos de resortes para impedir ruptura; en lugar de cajas
puede usarse cestos de mimbre forrados.

14
Las muestra que se tomen en frascos de polietileno no
necesitan protección contra rupturas por impacto o por
congelación.
Para usos generales de laboratorio, los materiales mas
adecuados son los cristales refractarios, como el pirex, pero
se dispone de cristales de características especiales, de alta
resistencia al ataque de los álcalis, de bajo contenido de boro
o que excluyan el paso de la luz.
Debe escogerse con cuidado los tapones que se usen para
cerrar los recipientes. Los tapones de corcho forrado de
papel de estaño son adecuados para muchos casos y, en
cambio los tapones metálicos de rosca son impropios, porque
se corren fácilmente.
Los tapones esmerilados son inadecuados para soluciones
alcalinas concentradas, por mostrar una tendencia a adherirse
firmemente. Los tapones de caucho son excelentes para
soluciones alcalinas, pero se comportan mal con disolventes
orgánicos, en los cuales se distienden o desintegran.
Para el manejo de soluciones muy alcalinas pueden usarse
otros materiales, como porcelana, níquel, fierro, platino, acero
inoxidable y cristal Vycor.

ENVASES PARA LAS MUESTRAS


Es importante seleccionar el tipo de envase para la toma de
la muestra. Los envases de polietileno o de vidrio son los
utilizados más frecuentemente. Los de vidrio tienen la
ventaja de que el estado de su superficie interior es
fácilmente visible. Por otro lado, los de polietileno no son tan
susceptibles a peligro de rotura.
En general, los recipientes para muestras deben ser elegidos
con base en tres consideraciones principales:

 El material del recipiente puede causar contaminación


en las muestras. Por ejemplo, el sodio y sílice pueden
lixiviarse del vidrio y las sustancias orgánicas del
plástico.
 Las sustancias a determinar pueden ser absorbidas por
las paredes del recipiente. Por ejemplo, trazas
metálicas por los procesos de cambio de iones, en
superficies de vidrio.
 Los constituyentes de la muestra pueden reaccionar con
el recipiente. Por ejemplo, el fluoruro puede reaccionar
con el vidrio.
Por regla general deben usarse botellas de vidrio cuando van
a determinarse compuestos orgánicos y de polietileno para las

15
sustancias a determinar que sean constituyentes mayores del
vidrio, como el sodio, potasio y sílice.
La botella de muestra debe ser lavada concienzudamente con
detergente y agua potable, a lo que seguirá un enjuague con
1:1 de ácido nítrico, agua potable, 1:1 de ácido clorhídrico,
agua potable y finalmente agua destilada o desionizada; en
ese orden.

PRESERVACIÓN DE MUESTRAS
Difícilmente se puede conseguir la preservación completa de
una muestra. Las técnicas de preservación pueden solamente
retardar los cambios químicos y biológicos que sobrevienen
inevitablemente al remover la muestra de la fuente original.
Los métodos de preservación son relativamente limitados y se
hallan dirigidos en general a:
- Retardar la acción biológica.
- Retardar la hidrólisis de compuestos.
- Reducir la volatilidad de los constituyentes.
Los métodos se limitan usualmente al control del pH, adición
química, refrigeración y congelación. En la Cuadro I, se
indican cuáles son los principales preservantes para muestras
de agua.

INTERVALO ENTRE EL MUESTREO Y EL ANÁLISIS DE


AGUA:
En general, mientras menos tiempo trascurra entre el
muestreo y el análisis de las aguas, serán más digno de
confianza los resultados analíticos. Para ciertos
constituyentes, así como para ciertas características físicas,
es necesario practicar los análisis “in situ”, debido a que la
composición de la muestra puede cambiar, antes de que
puedan verificarse los análisis en el laboratorio.
Es imposible indicar, de modo inequívoco, el tiempo que debe
permitirse entre la recolección de una muestra y su análisis;
esto depende del carácter de la muestra, del análisis
particular que deba verificarse y de las condiciones del
almacenamiento, pudiendo retardarse aquellos cambios
provocados por los organismos, si la muestra se conserva en
la oscuridad y a baja temperatura hasta que se termine su
análisis. Se consideran razonables los siguientes límites
máximos par muestras de análisis físicos-químicos:
Aguas no poluídas: 72 horas
Aguas ligeramente contaminadas: 48 horas

16
Aguas contaminadas: 12 horas
El tiempo que transcurra entre la recolección y el análisis
debe anotarse en el informe de laboratorio
Si las muestras se preservan por la adición del ácido o de
otros germicidas, los tiempos anteriores pueden prolongarse,
pero no se hacen recomendaciones específicas al respecto.
El informe el laboratorio debe indicar si se ha adicionado
algún preservante.
Francamente, resulta imposible enumerar todos los cambios
que pueden sobrevenir a las muestras como resultado de su
almacenamiento; lo mismo puede decirse con respecto a las
reglas para la prevención de tales cambios.
En las discusiones sobre las determinaciones analíticas
individuales se incluyen algunas recomendaciones al
respecto, y así mismo, los casos que se presentan en los
casos siguientes darán idea más amplia de estos problemas
particulares.
Sin embargo, debe recordarse que, por el almacenamiento de
la muestras, ciertas determinaciones analíticas pueden
afectarse más que otras y también que la confianza que puede
inspirar un análisis, depende en gran parte de la experiencia y
criterio del analista.

 Algunos cationes pueden sufrir pérdidas por adsorción o


por permutación iónica con las paredes de los
recipientes, siendo de mencionarse, entre ellos, fierro,
cobre, aluminio, manganeso, cromo trivalente y zinc; a
su vez, los iones de sodio, silicio y boro pueden
deslavarse de las paredes del recipiente.
 La temperatura cambia muy rápidamente y, asimismo, el
valor del pH puede alterarse notablemente en unos
minutos.
 Los gases disueltos pueden perderse (O2, CO2,H2S,
CH4) o bien pueden absorberse (O2, CO2).
 Las determinaciones de la temperatura, del pH y de los
gases disueltos deben practicarse “in situ”, porque son
casi inevitables los cambios, para cuando la muestra
llegue al laboratorio.
 Además, con las determinaciones en el balance pH-
alcalinidad-bióxido de carbono, es posible que se
precipite el carbonato de calcio y se reduzca los valores
del calcio y de la dureza total.
 El fierro y el manganeso forman compuestos fácilmente
solubles en su estado de reducción y compuestos
relativamente insolubles en su estado de oxidación, por
lo tanto, estos cationes pueden precipitarse con los

17
sedimentos, o disolverse de los mismos, dependiendo dl
potencial de reducción-oxidación de la muestra.
Asimismo, el cromo exavalente puede reducirse al
estado trivalente.
 La actividad microbiana puede ser responsable de
alteraciones en el balance de nitratos-nitritos-amoniaco,
de cambios en el contenido de fenoles, de variaciones
en la DBO y de la reducción de sulfatos a sulfuros.
 Por otra parte, cualquier residual de cloro puede
convertirse en cloruro o bien, los iones sulfuro, sulfito,
fierro, ferroso, yoduro y cianuro pueden perderse por
oxidación.
 El color y la turbiedad pueden aumentar, disminuir o
cambiar en calidad.

Muestras representativas de Agua


Con frecuencia, pueden evitarse muchas dificultades, así
como ahorrarse mucho tiempo, si el analista y la persona que
encarga las pruebas discuten, anticipadamente, los
pormenores sobre las mejores técnicas para la recolección y
análisis de las muestras.

 Antes del llenado, el frasco de muestra debe enjuagarse


dos o tres veces con el agua en estudio.
 Debe tenerse cuidado de obtener una muestra que,
verdaderamente sea representativa de las condiciones
existentes, manejándola en forma tal que no se deteriore
o se contamine antes de llegar al laboratorio.
 En ocasiones, la única forma de obtener muestras
representativas de algunos abastecimientos es con la
preparación de muestras compuestas, formadas con
porciones que se han ido recolectando durante un
periodo determinado o en diferentes estaciones de
muestreo, aunque algunas veces se logra una mejor
información con los análisis de numerosas muestras
separadas, que con el análisis de una muestra
compuesta aislada.
 Los detalles de la recolección varían tanto con las
condiciones locales, que no puede formularse una
recomendación especifica que sea de aplicación
universal. Debe tenerse un cuidado especial para
asegurar que los análisis son representativos de la
composición real de la muestra de agua.
 Entre los factores que afectan los resultados, puede
mencionarse la presencia de la turbiedad, el método
seleccionado para la eliminación de la turbiedad y los
cambios físicos-químicos que se verifiquen por el
almacenamiento y la aireación.

18
 Es imposible formular directivas que abarquen todas las
condiciones que pueden encontrarse, por lo que la
selección de la técnica más adecuada queda al criterio
del analista. En términos generales, cualquier cantidad
importante de sólidos en suspensión debe separarse por
decantación, por centrifugación o por un procedimiento
apropiado de filtración. Con frecuencia, puede tolerarse
una ligera turbiedad, si la experiencia ha demostrado
que no se causan interferencias en los ensayos
gravimétricos o volumétricos, o bien que pueden
compensarse en ensayos colorimétricos en los cuales,
potencialmente, son mayores los riesgos de las
interferencias. Cuando sea pertinente, el analista debe
indicar si la muestra ha sido o no filtrada.

 Debe llevarse un registro de cada muestra recolectada,


identificándose cada frasco, de preferencia, por una
etiqueta atada o adherida al envase.

- El registro debe incluir todos los informes pertinentes,


que permitan una identificación positiva de la muestra
en cualquier instante, debiendo anotarse el nombre del
muestreador, la fecha y la hora de operación, la
localización exacta de la estación de muestreo, la
temperatura del agua y cualquier otro dato que pudiera
necesitarse en lo futuro para propósitos de correlación,
como las condiciones meteorológicas, el nivel o espejo
de agua, el gasto o caudal de la corriente, etc.
- Las estaciones de muestreo deben identificarse por una
descripción detallada, por mapas o planos y/o con
ayudas de estacas, boyas, balizas terrestres, que
permitan su identificación por otras personas, sin
necesidad de confiar en la memoria o los instintos
personales. Las muestras de agua caliente,
recolectadas bajo presión, deben enfriarse siempre bajo
presión.

 Antes de tomar muestras de los sistemas de


distribución, deben purgarse las líneas por un tiempo
suficiente para asegurarse que la muestra es, realmente
representativa del abastecimiento, para lo cual se
tomará en cuenta el diámetro y longitud del acueducto
que se purga, lo mismo que la velocidad de la descarga
o escurrimiento del líquido.

19
 Las muestras de pozos deben tomarse después de
haberlos bombeado suficientemente, para asegurarse
que la muestra representa a las aguas subterráneas que
alimentan la fuente. Algunas veces puede ser necesario
bombear a un gasto específico para lograr una
extracción característica, sí con esto se determinan los
mantos acuíferos que alimentan al pozo. Es
recomendable conservar notas del gasto de bombeo y de
la extracción, como parte de los registros de la muestra.

- Cuando las muestras se recolectan de un rió o


corrientes, los valores analíticos pueden variar con la
profundidad, escurrimiento y distancia de las márgenes y
aún pueden diferir de una margen a la otra. Si se
dispone de equipo, es mejor tomar una muestra
“integrada”, de la superficie al fondo, a media corriente,
en tal forma que las proporciones que formen la muestra
sean proporcionales al gasto.
- Los lagos y los embalses están sujetos a numerosas
variaciones por la estratificación, según las estaciones
anuales, lo mismo que por las precipitaciones pluviales,
las avenidas y los vientos. La selección de las
estaciones de muestreo, de la profundidad del mismo y
de la frecuencia de la operación depende de las
condiciones locales y del propósito de la investigación.

Estas instrucciones generales no incluyen recomendaciones


para la recolección de las muestras en que se van a
determinar los gases disueltos; en las secciones en que se
describen esas determinaciones, se encontrarán instrucciones
específicas.

Fuentes:

Barba, L. (2002). Conceptos básicos de la contaminación del agua y parámetros


de medición (ponlo en cursiva). (Tesis inédita de maestría). Universidad
del Valle. Santiago de Cali. Extraído de:
http://www.bvsde.paho.org/bvsaar/e/fulltext/gestion/conceptos.pdf

Jimeno, E. (1998). Análisis de muestra de agua y desagüe. En Jimeno, E.


(1998). Análisis de agua y desagüe (pp. 47-49). Lima: Ediciones Banco
de Libros

20
Jimeno, E. (1998). Recolección de muestra de agua. En Jimeno, E. (1998).
Análisis de agua y desagüe (pp. 51-56). Lima: Ediciones Banco de Libros

Jimeno, E. (1998). Técnica de toma de muestras de líquidos clocacales,


efluyentes industriales, aguas contaminadas y sustancias radioactivas. En
Jimeno, E. (1998). Análisis de agua y desagüe (pp. 57-61). Lima:
Ediciones Banco de Libros

Leonard, V. (s/f). Calidad de agua. Pediatric Environmental Health Specialty


Units, pp. 1-27. Extraído de:
https://www.epa.gov/sites/production/files/2015-
10/documents/water_quality_spanish.pdf

Ministerio del Ambiente. (2011). Calidad ambiental. Compendio de la legislación


ambiental peruana (en cursiva), 5, pp. 7-374. Extraído de:
http://www.minam.gob.pe/wp-content/uploads/2013/10/compendio_05_-
_calidad_ambiental_2.pdf

OMS. (2006). Guías para la calidad del agua potable. Organización Mundial de
la Salud, 1(3), pp. 11-16. Extraído de:

http://www.who.int/water_sanitation_health/dwq/gdwq3_es_fulll_lowsres.pdf

ANEX
OS:

FIGURA I

21
FIGURA II

FIGURA III

TABLA I 22
TABLA II

TABLA III

23
FIGURA IV

CUADRO I

24

También podría gustarte