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HITO: N° 2 GV.EA.P.

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TIPO DE EVIDENCIA: RESUMEN
ASIGNATURA: FILOSOFÍA JURÍDICA
SIGLA: FJU - 211 SEMESTRE: SEGUNDO CARRERA: DERECHO
DOCENTE: DRA.DANIELA MURILLO CASANOVAS
APELLIDOS Y NOMBRES: GARCÍA RAMALLO HODALIZ
CI: 12768941

INICIAL APELLIDO G
FECHA: 18/ SEPTIEMBRE / 2020
PATERNO:

RESUMEN:

LA FILOFIA DEL DERECHO COMO FILOSOFIA PRÁCTICA


AUTOR: JESUS VEGA

El autor tiene una visión de la filosofía compartida con M. Atienza quien sostiene que la
filosofía del derecho necesariamente debe ser concebida como una “totalización racional y
critica del fenómeno jurídico”, esta concepción que proviene del filósofo Gustavo Bueno, y se
fundamenta en la diferenciación entre conceptos e ideas, los conceptos serian propios de las
ciencias; las ideas propias de la filosofía, ambos constituyen totalizaciones racionales, críticas
y que envuelven universalidad.

Pero el tipo de totalización y universalidad de las ideas es diferente a la de las ciencias y no


pueden ser reducidas a la totalización y universalidad que tienen los conceptos ya que las
cuestiones filosóficas no pueden ser resueltas por técnicas científicas, sino que se resuelven
por medio de un formato propio. Aunque la ciencia constituye el exponente del saber más
universal que posee la humanidad en la actualidad el tipo de totalización y universalidad que
pose esta restringida y acotada a dominios conceptuales más o menos cerrados en función
de teorías y leyes objetivas, a estos dominios, Bueno los llama categorías (categoría física,
química, antropológica, etc.) los conceptos científicos entonces son relativamente universales
dentro de cada categoría, sin embargo surgen cuestiones como : las relaciones que hay entre
diversas categorías, su alcance, su validez, entre otras, estas cuestiones ya no pueden ser
resueltas con los conceptos dentro de las categorías mismas porque analizables en sus
propios conceptos científicos, por lo que para agotar todo lo que puede ser dicho
racionalmente respecto de cada categoría y el conjunto de todas ellas es necesario un
diferente tratamiento racional, una totalización de otro orden, también de carácter universalista
y este es EL DISCURSO FILOSÓFICO
Podemos decir que la filosofía es un saber autónomo, diferenciado y sustantivo, no es un
simple saber originario, que es usado por otras ciencia, ni debe ser considerado como algo
metafísico, ni como un simple saber enciclopédico sino que es un análisis y también es el
interés por el mundo que nos rodea. Los problemas o cuestiones filosóficas nacen de las
cuestiones científicas que no pueden ser resueltas dentro de sí mismas y de la reflexión, y el
discurso científico aporta ideas filosóficas como soluciones estas cuestiones, ESTAS IDEAS
TRASCIENDEN A CADA UNA DE LAS CATEGORÍAS ANALIZADAS pero no a todas en
conjunto sino que su universalidad es transversal a las categorías, pero no hay que interpretar
el sentido de la palabra trascendental como algo metafísico tradicional o apriorístico sino en
el sentido histórico-cultural.

Las teorías filosóficas son elaboraciones e interpretaciones mas o menos sistematizadas que
responden a problemas suscitados recurrentemente dentro de los conceptos, estos
problemas se vuelven problemas filosóficos donde se cuestiona peculiarmente toda una
categoría en su conjunto, al ponerla en conexión con otras e indagar acerca de sus
fundamentos y su validez. Los problemas filosóficos no tienen un formato genuinamente
propio, y son resueltos replanteándolas ciencias y técnicas y de ahí su persistencia histórica.
Por ejemplo las cuestiones de tipo epistemológico y ontológico necesitan como solución saber
como las categorías representan o conceptualizan el mudo y como el mundo es representado
y conceptualizado por ellos, y para estas soluciones es necesario un tipo de reflexión
totalizadora que envuelva la crítica analice, compare, clasifique y establezca limites en los
conceptos científicos entre sí, usando ciertas teorías de la ciencia y de lo real.

Ahora en lo que corresponde a la dimensión critica y universal de la filosofía jurídica esta


proviene del hecho que la iusfilosofia reflexiona desde una perspectiva que no está en el
interior de algo, si no que el filósofo del derecho debe y puede cuestionar los marcos
establecidos de ese algo ya que este algo no puede operar el interior de una ciencia, en torno
a esto que surge una dualidad polémica entre que si la filosofía del derecho se debe
practicar por los juristas o por los filósofos, este problema arranca del hecho de que la
tradición del pensamiento filosófico occidental del derecho se desarrolla de forma bifurcada
por : filósofos que llegan al derecho desde sus sistemas omnicomprensivos de ideas para
encajarlo dentro de ellos y por otro lado los juristas que recurren a distintas formas y marcos
filosóficos generales para construir teorías también omnicomprensivas pero que tengan
ALCANCE ENDO-JURIDICO ENFOCADO EN ELABORAR CATEGORÍAS Y CONCEPTOS
JURÍDICOS.

En la edad contemporánea surge la filosofía del derecho como una disciplina nueva, en
sustitución de las ideas anteriores que eran el “derecho natural”, está a sido cultivada casi
exclusivamente por los juristas y no por los filósofos, pero los juristas-filósofos han seguido
tomando ideas de filósofos generales a las que dan giros diferentes impulsados por la
reflexión y el interés en el desarrollo de la práctica jurídica. Entonces la relación entre filosofía
regional jurídica y filosofía general es compleja ya que el positivismo jurídico se establece
como corriente central dominante del pensamiento jurídico contemporáneo y produce un
declive iusnaturalista, acompañado de la tendencia de liquidar la existencia independiente de
la filosofía, lo que bueno llama una “muerte positivista de la filosofía”

Entonces la filosofía del derecho vendría a ser un discurso “de y para juristas” y no “de y para
filósofos” porque es un discurso técnico practico propio de la categoría jurídica, esto por el
positivismo jurídico contemporáneo, y el nombre de “filosofía del derecho” desaparece,
disolviéndose en el más genérico “teoría del derecho”, la teoría del derecho seria entendida
como una disciplina de pretensiones científicas o doctrinales, que serían construidas sobre le
molda de la jurisprudencia general positivista, este discurso categorial-jurídico seria filosófica,
pero no hay principios definidos para saber dónde acaba la ciencia del derecho y empieza la
filosofía jurídica. Es por eso que los filósofos juristas no tendrían que inmiscuirse en la filosofía
jurídica porque los juristas son los que verdaderamente pueden abocarse a estos temas ya
que cuentan con el respaldo de la experiencia y de las indicaciones escritas en los conceptos
jurídicos y porque ellos son los que realmente practican el derecho.

La Iusfilosofia será entonces una filosofía del derecho positivo construido sobre: los problemas
que plantean los estados de derechos contemporáneos y su compleja tecnificación legal
positiva que con el análisis y reflexión de los juristas podían ser resueltos en una progresiva
constitucionalizarían, en vez de una reflexión especulativa o improductiva (metafísica o
dogmática). Los juristas trabajan de manera diferente a los filósofos, su manera de trabajo es
la primaria, la que se encarga de realizar el al análisis sobre la síntesis, análisis elaborado
sobre materiales empíricos, positivos, mientras que el filósofo trabaja de manera apriorística
que son supuestos a la naturaleza del derecho, donde los problemas del fenómeno jurídico no
son analizados desde la experiencia jurídica, sino desde la especulación.

Ahora se presenta el siguiente planteamiento:

Si esta proximidad con la experiencia en la categoría del derecho no convierte a la filosofía


jurídica en una disciplina más de pretensiones científicas y doctrinales que no se puede
distinguir de las demás especializaciones esto por la enseñanza especializada profesional,
adosado a la propia jurisprudencia, siendo considerada una parte más de las definiciones
enciclopédicas o en ideologías jurídicas; el riesgo del dogmatismo de la filosofía jurídica
también esta propiciado por la metodología del derecho positivo y no solo por la
institucionalización como disciplina

En la metodología del positivismo jurídico se prioriza el punto de vista doctrinal o interno del
derecho, esto ha provocado una desconexión del derecho con otras categorías, para llegar a
una “pureza” de la teoría del derecho, estudiando descriptivamente y con neutralidad que es el
derecho y no que debe ser el derecho considerando todo perspectiva externa como
impertinente para el jurista. Esto conduce a decir que LA FILOSOFÍA DEL DERECHO ES
AJENA A LAS DEMÁS FILOSOFÍAS ESPECIALIZADAS y donde solo es relevante el discurso
de los juristas y no del filósofo. Pero no cualquier discurso sobre el derecho puede llamarse
filosófico, ni todo discurso filosófico sobre el derecho puede considerarse dogmático. Según
Bobbio no puede existir esta situación de elección ya que si se desvaloraliza la filosofía del
derecho de los filósofos. Esta desvalorización no es a la filosofía general en si sino va dirigida
a algunas filosofías específicas que se estiman dogmáticas o metafísicas desde la perspectiva
o el derecho iuspositivismo, y de igual forma con el pensamiento de filosofía del derecho de
los juristas que no todas estas filosofías son puramente endo-juridicas y con enfoque insular.

Entonces en conclusión no es ninguno de los extremos la filosofía jurídica no es netamente


dogmática ni netamente doctrinal porque solo podrá ser considerara verdaderamente parte
de la filosofía si tiene carácter crítico y esto exige que sea positiva, pero no positivista,
vinculada a la experiencia y conceptos jurídicos, pero no es dogmática, que coexiste con el
discurso jurídico practico pero no solo genuinamente, sino que es una perspectiva inter-
categorial, una totalización conducente a conectar la categoría jurídica con otras categoría,
pero esta totalización solo puede ser tratada en términos de teoría o ideas, porque es la
forma que sigue la filosofía del derecho positivista, esta totalización solo se llevara a cabo
obteniendo las ideas y teorías de alguna concepción de la filosofía genera, lo que significa que
toda iusfilosofia es aplicación de filosofemas y en consecuencia no está claro si la filosofía de
los juristas lleva por delante la filosofía general o atrás .

La filosofía del derecho se remite a la filosofía general para que así esta establezca el hilo
conductor, esta guía proporciona ideas de orden epistemológico y ontológico, de modo que el
mismo método filosófico se usa siempre porque solo hay uno y solo puede consistir en
analizar las cuestiones o problemas con conceptos e ideas para volver a ellos con una
síntesis o recomposición de algún concepto para establecer relaciones intra-categoriales
relevantes en este sentido los conceptos categoriales pueden ser analizados en función de las
relaciones existentes entre cada categoría o conceptualizaciones que cada categoría tiene o
en función de las relaciones que existen entre dichos saberes y las realidades categoriales, la
filosofía jurídica elabora un mapa de los saberes y de las realidades jurídicas.

La filosofía del derecho entonces es un sistema de ideas revolucionarias o emancipadoras


que depende de la realidad jurídica en cada época; el método filosófico como las ideas
objetivas con las que trabaja la filosofía jurídica han adquirido en el derecho como ciencia
significaciones diferentes a lo largo de la evolución jurídica, la filosofía jurídica siempre estará
correlacionada con las diferentes fases del desarrollo histórico de los fenómenos jurídicos así
se puede interpretar las relaciones históricas entre el derecho romano y el derecho común con
el medieval y la filosofía aristotélico-escolástica, o entre la filosofía racionalista e ilustrada y el
proceso histórico del constitución de estado y de positivización del derecho moderno de base
nacional, en ambas encontramos filosofías iusnaturalistas también de juristas y no solo de
filósofos, del mismo modo la filosofía del derecho surge con ese nombre en la época
moderna vinculada con las doctrinas del positivismo jurídico y esto es porque el derecho
positivo cambia y exige nuevas reflexiones teóricas entonces la filosofía jurídica sería una
época jurídica captada en pensamientos, en ideas, comenzando por la propia concepción
general del derecho, entonces el derecho actual no es un concepto sino una idea filosófica.

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