Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
SISTEMAS OPERATIVOS
Docente: Integrantes:
Monousuario: aquellos que solo pueden atender a un usuario debido a las limitaciones del
hardware, los programas o el tipo de aplicación que se esté ejecutando. Son muy simples, ya
que todos los dispositivos de entrada y salida, y control dependen de la tarea que se está
utilizando.
En este tipo de sistemas operativos, el usuario único que puede utilizar el sistema
informático, tiene disponibles todos los recursos tanto hardware como software. No importa el
número de procesos y procesadores del sistema. Algunos sistemas operativos de este tipo son:
Windows 7, Windows Vista, Windows XP, etc.
Manejo de recursos:
Centralizado: aquellos sistemas operativos que utilizan los recursos de un solo equipo. Es
decir, el equipo informático no comparte ningún recurso ni utiliza recursos de otros ordenadores
por la red. Se utiliza como una máquina aislada que no está en red.
Como sistemas operativos de red pueden trabajar Windows (Windows Xp, Windows
Server 2000, 2003 o 2008, Windows Vista, Windows 7), Linux (Ubuntu, Ubuntu Server, Debian,
Fedora), UNIX (Solaris), Novell Netware, LAN Manager, etc.
1. Clientes: equipos que se conectan y validan el servidor para empezar a trabajar en red.
2. Servidor: equipo configurado en la red que proporciona servicio a sus clientes.
Distribuido: Integra los recursos (memoria, CPU, disco duro, periféricos, etc.) de más de un
ordenador, en una sola máquina virtual a la que el usuario accede de forma transparente.
La red pasa desapercibida para el usuario, de manera que utiliza los recursos de la red
igual que si utilizara los recursos locales de su ordenador.
Los sistemas operativos distribuidos más conocidos son: Sprite, Solaris-MC, Match, Chorus,
Spring, Amoeba, Taos, etc.
Tiempo de respuesta:
Procesamiento por lotes: Los procesos se ejecutan secuencialmente uno tras u otro. El
usuario no obtiene los resultados de forma inmediata y no existe interacción con el usuario. El
tiempo de respuesta en los sistemas operativos que utilizan el procesamiento por lotes, no es
importante, y generalmente suelen tener un alto tiempo de respuesta, por lo que actualmente
no son utilizados, aunque cualquier tarea, sobre todo tareas que no requieran interacción con el
usuario y que requieran un gran tiempo de ejecución, se pueden ejecutar en un sistema
operativo actual siguiendo esta técnica, como por ejemplo copias de seguridad del sistema o
cualquier otra tarea que afecte a un número grande de archivos
Interactivos: Los procesos se ejecutan y pueden pedir información al usuario a través de la
pantalla y recibirla por teclado. El usuario interactúa con el ordenador. En estos tipos de
sistemas operativos lo habitual es que el tiempo de respuesta sea menor al anterior, para ello
se utiliza la técnica que se conoce como “tiempo compartido” (time sharing), en el que el
procesador divide su tiempo entre todos los procesos, de manera que parece que cada proceso
es el único que se ejecuta en ese momento en el sistema.
Los sistemas que utilizan el tiempo compartido son sistemas multiusuarios, pensados
para ser explotados en modo interactivo. En estos tipos de sistemas, la planificación de
procesos emplea el Algoritmo de planificación por rondas (Round Robin) para dividir el tiempo
del procesador entre todos los procesos.
Un sistema operativo interactivo puede trabajar por lotes en tareas que no necesiten de
la intervención del operador o en tareas rutinarias que no tengan prioridad como, por ejemplo,
en copias de seguridad del sistema, pero un sistema operativo por lotes no puede trabajar de
forma interactiva.
Tiempo real: En estos tipos de sistemas operativos, los procesos requieren un tiempo de
respuesta muy bajo, es decir, inmediato. Estos sistemas se utilizan en campos donde un
tiempo de respuesta alto implicaría graves consecuencias, como por ejemplo, en el tráfico
aéreo, en procesos industriales, en sistemas espaciales, en sistemas médicos de
monitorización de pacientes críticos, en sistemas bancarios,… y en general en todos los casos
donde el tiempo de respuesta sea crucial y repercuta en grandes pérdidas económicas o de
vidas humanas.
Número de procesadores:
Monoproceso: solo pueden trabajar con un único procesador, incluso si el sistema informático
sobre el que va montado tiene más de un procesador, aunque esta opción no suele ser muy
frecuente en la actualidad. Tal es el caso de los sistemas operativos basados en DOS.
Cabe señalar que un proceso puede tener, como mínimo, una hebra (thread), o puede
tener más de una para mejorar el rendimiento, pues si el sistema operativo es
multiproceso, se pueden ejecutar las diferentes hebras de un mismo proceso
paralelamente, obteniéndose un mayor tiempo de respuesta.
Sistemas de propósito general: dentro de este tipo se engloban la mayoría de los sistemas
comerciales actuales, recogiendo todos los que sirvan para cualquier tipo de instalación ya sea
monousuario, multiusuario, de tiempo compartido, de tiempo real, etc., siempre y cuando no
exija requerimientos especiales para la ejecución de determinadas aplicaciones.
Sistemas de propósito especial: Serán todos los sistemas construidos específicamente para
una determinada aplicación o aplicaciones. Suelen ser todos aquellos que se desarrollan como
un componente más de un proyecto concreto.
SO para dispositivos de bolsillo: son cada vez más sofisticados debido a que continuamente
incorporan nuevas funcionalidades. Algunos de los sistemas operativos más populares de
estos dispositivos son Android, Blackberry OS, IOS (anteriormente denominado iPhone OS),
Palm WebOS y Windows Mobile.
SO para tarjetas inteligentes: Este tipo de dispositivos permite la ejecución de cierta lógica
programada. Algunas tarjetas sólo contienen una memoria no volátil, en cambio otras tienen
CPU y memoria volátil (RAM). Sirven como medio de identificación, control de acceso, firma
digital, sistema de pago, etc. Estos dispositivos también disponen de sistemas operativos que,
normalmente, se cargan en el proceso de fabricación y no puede ser modificado, aunque
también existen excepciones con algunas tarjetas que permiten incorporar programas al
sistema operativo una vez cargado.
El panorama de los sistemas operativos para Smartphone es más variado que en las PC:
no hay un dominador claro y hay más competencia. En muchos casos, además, la elección de
un sistema está ligada a uno o pocos modelos concretos. El sistema operativo Apple está sólo
en iPhone y lo mismo pasa con Maemo, RIM OS y Palm Web. Por su parte, Android, Symbian y
Windows Mobile se encuentran disponibles para una gama de teléfonos más amplia.
En general, los sistemas operativos actuales proporcionan instrumentos que permiten pasar
más o menos rápidamente de un aparato a otro conservando los datos, siempre que se trate de
aparatos con el mismo sistema operativo.
Maemo: basado en Linux Debian (casi todo en código abierto) y desarrollado por Nokia para
smartphones y tablets.
Palm Web: aprovecha tecnologías web como XHT-ML, Java Script y CCS. Pertenece a HP.
RIM: este sistema operative ha sido pionero en la gestión del correo electrónico y está muy
orientado a un uso profesional.
Microsoft ha sacado muchas versiones del sistema operativo Windows a lo largo del
tiempo, existiendo versiones tanto para escritorio como para servidores y dispositivos móviles.
Actualmente, Windows 10 viene siendo la última versión desarrollada por Microsoft como parte
de la familia de Windows NT, la empresa la dio a conocer en el año 2014 y se lanzó al público
en julio del 2015, lo distinto de esta versión es que Microsoft ofrece gratuitamente este sistema
operativo para aquellos usuarios que cuenten con copias originales de Windows 7 y Windows
8.1 update. La versión Windows 10 es una edición muy completa diseñada para toda la familia
de los productos Microsoft tales como: laptops, tabletas, teléfonos inteligentes, Xbox One, entre
otros. Esto se da gracias a su código casi idéntico que le permite tener tal compatibilidad.
Por otra parte, la principal diferencia entre Windows, Linux y Mac OS (los principales
proveedores de software) es que Linux tiene una filosofía totalmente diferente a la de sus
contendientes: no tiene la finalidad de lucrarse directamente como sí lo hacen Microsoft y
Apple. Linux como sistema operativo fue diseñado para proporcionar a los usuarios una
alternativa libre a muy bajo costo, e incluso, gratuita.
En consecuencia, es preciso tener presente que existe una gran variedad de sistemas
operativos disponibles en el mercado, en constante evolución e innovación, para todo tipo de
sistema informático y dispositivo, y cada uno de ellos tiene sus ventajas y características
propias que lo hacen más atractivo y funcional para cierto tipo de usuario. Es por ello que antes
de elegir un sistema operativo, se deben tener en cuenta los propósitos que se plantea
conseguir el usuario al utilizar un sistema de cómputo e informarse de los factores
indispensables para satisfacer sus expectativas y necesidades. El sistema operativo debe ser
compatible con las aplicaciones que va a requerir ejecutar.
Los sistemas operativos son parte esencial del funcionamiento de los sistemas
informáticos y la pieza de software central en la cadena de procesos, al establecer las
condiciones mínimas para que todo funcione: la administración de los recursos, el método de
comunicación con el usuario y con otros sistemas, y las aplicaciones adicionales.
Hoy en día, estos programas son capaces de cumplir con las tareas más laboriosas y
ejecutar varios procesos a la vez con gran destreza y rapidez en comparación con sus
predecesores. Windows es el sistema operativo número uno por su entorno gráfico y la mayor
gama de aplicaciones disponibles; Linux ofrece un sistema operativo libre, seguro, eficiente y
gratuito pero sin tanta variedad de programas disponibles; y Mac OS, por su parte, ofrece
mayor estabilidad, buen aprovechamiento de recursos y un precio intermedio entre Windows y
Linux, pero sólo apto para ser instalado en productos Apple.