Está en la página 1de 9

EDUCACIÓN POPULAR: SU ORIGEN, CONCEPTUALIZACIÓN Y

EXPERIENCIAS

“La educación liberadora no produce, por sı misma, el cambio social


Pero no habrá cambio social sin una Educación Liberadora”
Paulo Freire

Eliana Rocío Hidalgo Cabrales1*


Yorladis Karina Díaz Dussán2**

RESUMEN

El presente artículo hace referencia a la Educación Popular, entendida como el proceso de


emancipación del sujeto en cuanto a la forma de ver el contexto en el cual interactúa. El
escrito se desarrolla en cuatro fases: la primera puntualiza en su concepto y origen, la
segunda es la descripción metodológica usada en la EP, es decir, el método dialectico
(teoría y la práctica), la tercera resalta algunas experiencias desarrolladas en Latinoamérica
y Colombia, las cuáles se han centrado en alfabetización de adultos, derechos humanos y
estrategias de intercambios y finalmente la fase de las conclusiones surgidas a partir del
desarrollo temático del escrito.

PALABRAS CLAVE: Educación popular, dialéctica, teoría, práctica y experiencias

ABSTRACT

This present article refers to the Popular Education, understood as the process of
emancipation of the subject as to how to see the context in which it interacts. The text then
develops presents four phase: the first refers to the concept and origin, the second refers to
the methodology used in the EP, ie the dialectical method (theory and practice), the third
highlights some experiences in Latin America and Colombia, which have focused on adult
1
Ingeniera mecánica. Docente en la Institución Educativa Antonio Ricaurte del municipio de Ricaurte
(Cundinamarca). Esp en Pedagogía, Magister en Educación con énfasis en investigación Universidad del
Tolima. Correo electrónico: motoresymotores@uniweb.net.co
2
Licenciada en Matemáticas. Docente en la Institución Educativa Cristóbal Colón, Sede Villa Café de
Ríonegro Iquira-Huila. Esp en Pedagogia, Magister en Educación con énfasis en investigación Universidad
del Tolima. Correo electrónico: yorkd125@hotmail.com
literacy, human rights and trade strategies and finally the phase of the conclusions from is
from what developed in this article.

KEYWORDS: Popular education, dialectic, theory, practice and experience.

INTRODUCCIÓN

En la actualidad, la Educación Popular (E.P) basada en la pedagogía liberadora de Paulo


Freire es una corriente educativa que se caracteriza por ser un fenómeno sociocultural,
debe entenderse como un proceso continuo y sistemático que implica períodos de reflexión
y estudio sobre la práctica del grupo o de la organización. Lo anterior permite al individuo
tomar su propia realidad como fuente de conocimiento, como punto de partida y de llegada
permanente, recorriendo dialécticamente el camino entre la práctica y su comprensión
sistemática, histórica y global.  

Ahora bien, este escrito profundizará en la conceptualización, el cómo es y ha sido hasta el


momento la relación entre el marco de ideas de la E.P y la praxis, con la puesta en acción
de dicha modalidad en el proceso enseñanza-aprendizaje tanto en las prácticas formales
como en las no formales a nivel Latinoamericano y puntualizando experiencias en
Colombia.

ORIGEN Y CONCEPTUALIZACIÓN TEÓRICA DE LA EDUCACIÓN POPULAR

Para quienes han estudiado el tema educativo, aún no se ha podido establecer cuándo y
dónde exactamente se originó la E.P. Sin embargo, en algunos de los documentos
analizados mencionan que la educación popular ha visto la luz en el cono sur
latinoamericano durante el siglo XX a comienzo de los años 60 y finales de los 80 e incluso
los 90’. Al respecto, Moro (2003) concuerda señalando que se ha ido configurando
“histórica y contextualmente en Latinoamérica”.
Según el texto titulado “Educación Popular”, ésta no es una teorización de conceptos, sino
un proceso, un discurso multivariado para la defensa de la vida y la liberación de los
pueblos marginados. Por tal razón, en cuanto a la naturaleza o conceptualización de la EP,
temática central del artículo, Moro (2003) expresa:

“La E.P se alimenta simultáneamente de varias dimensiones de la realidad: referentes


teóricos previos, imaginarios colectivos, representaciones y valores culturales,
experiencias compartidas, así como de la reflexión sobre las propias prácticas colectivas”.

Por otra parte Torres (2002), caracteriza la E.P a manera de una pedagogía de la transición
social, alegando que la concientización es su objetivo central. De igual forma Mejía (1990),
considera la E.P más como un conjunto de actividades educativas en torno a la defensa y la
autonomía del mundo popular que como un cuerpo de ideas o doctrinas con un nivel teórico
y preciso. Brito (2008 p.34) referencia que la E.P está ligada a “las obligaciones que asume
cada individuo en su contexto por una convergencia entre sus posibilidades, experiencias
diarias individuales y los eternos simbólicos en que se mueve y respira”. Pero este último
autor no expresa ideas propiamente suyas a cabalidad, puesto que él, ha bebido en las
fuentes o causes de ideas que abriera el educador brasilero Paulo Freire, para quien las
personas de ambos géneros pueden hacerse sujetos libres a través de la acción y reflexión
colectiva de transformación de la realidad.

En la medida en que nos hagamos capaces de transformar el mundo, de poner nombre a


las cosas, de percibir, de entender, de decidir, de escoger, de valorar, en último término,
de eticizar el mundo, nuestro movimiento en él y en la historia envuelve,
necesariamente, los sueños por cuya realización luchamos. (Freire,2001, p. 43)

Conforme a lo anterior la E.P no es una concepción, es un proceso, que requiere una


determinada metodología, que por estar tan ligada a la teoría y la práctica de los
conocimientos adquiridos, requiere ser dialéctica; es decir, debe orientar a un
proceso global de transformación social y no sólo a la práctica educativa. Además, debe
fortalecer la búsqueda de la identidad cultural, lograr la formación, educación y
organización de los pueblos, con el objetivo de elaborar un proyecto acorde a las
necesidades e intereses de los miembros de una determinada comunidad.

Considerando la metodología dialéctica de la E.P, no cabe duda, la importancia de sus dos


dimensiones: educar y organizar; puesto que permite a sectores marginados la apropiación
colectiva de su realidad y encaminar sus acciones en función de sus beneficios y carestías.
Por tal razón, en cuanto a lo organizativo, responde a las necesidades de un sector
determinado, a la acción organizada frente a los problemas y al funcionamiento de su
propia estructura. Frente a lo educativo busca generar y desarrollar consciencia crítica, con
lo que se dinamizan los procesos organizativos  que responden a su acción, necesidades,
problemas y estructura (Núñez, 2002).

Abordando la metodología dialéctica que se maneja en la EP, en el texto “La educación


popular, los enfoques educativos modernos y la metodología CAC” (2011, p. 1), el autor
brasilero Paulo Freire menciona algunos aspectos que caracterizan al tema en cuestión:

• La Crítica y dialéctica: transformar sujetos a partir de un proceso de educación


contextual. Que el oprimido tenga las condiciones para descubrirse y conquistarse
reflexivamente, como sujeto de su propio destino histórico.
• El Contexto: El hombre siempre es en relación a un contexto social.
• El Método: La utilización de los recursos orales fundamentalmente; depende del
marco de referencia que se utilice. La evaluación también será contextual.
• Praxis: Toda teoría de educación popular debe tener consecuencias prácticas.

De lo anterior puede inferirse que la E.P busca la emancipación del sujeto, creando en él
una conciencia crítica para transformar su contexto, con la ayuda de diferentes métodos que
varían de acuerdo al lugar y que deben ser llevados a la práctica; teniendo como punto de
partida sus propias experiencias. Por tanto, la E.P tiene temas que van desde la formación
de sujetos políticos comprometidos con el cambio, pasando por el diseño de metodologías
afines con el proyecto político, hasta hablar de caracterización de problemáticas
económicas, políticas y sociales dentro del corpus estatal en materia de educación y de vida
en general.

Diferentes autores han expresado sus teorías acerca de la E.P, tal como se evidencia en
Cuadernos de formación para la práctica democrática, (2002) N°, 3 falta la pagina en la que
se define a la educación popular como:

“transferencia de poder, busca que todos tengamos poder. El medio más importante
para alcanzarlo es la organización popular. Es decir, logramos mayor poder si
estamos organizados, pero además, sólo nos organizamos si algún tipo de poder
hemos ido desarrollando. Tanto el poder como la organización se basan o parten de
la cultura popular, que ilumina, que dice por dónde, que nos enseña cómo somos y
qué podemos y debemos hacer”

CONFRONTACIÓN ENTRE LA PRAXIS Y LAS IDEAS ACERCA DE LA


EDUCACIÓN POPULAR

A lo largo de una breve exposición conceptual acerca de la E.P, resta mostrar de manera
concisa y breve algunas experiencias que tanto en América Latina como en Colombia se
han implementado y puesto en marcha

No sobra declarar que la E.P se ha aplicado en Latinoamérica – con ciertas excepciones


cómo no- a través de las prácticas políticas de no pocos movimientos sociales en el
continente, entre los cuales se destaca la Revolución Cubana, MST (Movimiento de
Trabajadores Rurales Sin Tierra) en Brasil y el Movimiento Zapatista en México, las
Escuelas Secundarias Rebeldes Autónomas, el movimiento de educación de Base y
movimientos populares acentuados en Guatemala y Nicaragua durante el siglo pasado
apropiando postulados de Paulo Freire. Sin embargo, la E.P en Latinoamérica más que
inspirar prácticas de alfabetización, infiltró en los derechos humanos de género e
intercultural. Concretando un poco, Torres (2002) aporta los ejemplos de Chile, Bolivia y
Perú, en el primero la EP, según él, asumió como bandera el restablecimiento de la
democracia, y en los otros dos países, las luchas campesinas e indígenas.

Abarcando el ámbito nacional, es de destacar, entre las experiencias habidas en el país, la


estrategia de intercambios propuesta por la Escuela de Educación Popular del Sur (EEPS),
de las organizaciones de Usme, encaja – no cabe duda- entre una de las tantas dimensiones
de la realidad de la que se alimenta la E.P según Moro (2003): las experiencias compartidas
esperaban fortalecer tres capacidades: la de incidir en la práctica de los demás, la de
reflexionar sobre la propia práctica y la de generar acciones conjuntas. Sin embargo, resultó
una empresa fallida; la EEPS por cuanto acabó no correspondiendo con una de las
propuestas fundamentales de la E.P, la de intercambio de saberes y prácticas.

Algo análogo aconteció con Dimensión Educativa, grupo bogotano constituido en el campo
de acción y reflexión de Lola Cendales. Entre sus experiencias estuvo en trabajar en torno
al interés compartido por una alfabetización y una educación de adultos liberadora que en
palabras de Torres (2002) “concientizar” y en términos del pensamiento de Freire equivale
a un “leer la realidad para escribir su historia” (Freire, 1970, p. 26).

Como recuento minucioso de experiencias nacionales en torno a la E.P entre las últimas
pero no menos significativa, la realizada por la Universidad Surcolombiana, en Neiva
(Huila), consistió en experiencias desarrolladas a través de proyectos de alfabetización de
adultos y formación pedagógica para la resolución de conflictos y la participación
ciudadana; todos ellos, en el sentir de Calderón (2004) comparten no pocos principios
pedagógicos; entre ellos que el hombre es producto de las condiciones sociales de su
contexto, con el potencial de transformar dichas condiciones. Como proceso social debe
prevalecer en la educación el intercambio de saberes, algo no logrado, como se dijo, por la
Escuela de Educación Popular del Sur (EEPS) (p.163-164), organizaciones Usme; por
último, que constituyéndose los conocimientos colectivamente, los actores tienen la
necesidad desarrollar su autonomía y tener participación activa en sociedad
Tal como se ha señalado, las experiencias de los proyectos desarrollados por la USCO no
distan mucho de la caracterizaciones hechas por Moro (2003) sobre E.P o lo que al respecto
expresa Freire, (2001). Citado en Torres, (2002) convencido de que pueden hacerse sujetos
libres a través de la acción y reflexión colectiva de transformación de la realidad. Citando a
Freire, conviene reconocer que varias de las estrategias de trabajo utilizadas por USCO son
parte de la concepción de escuela en la mentalidad del pensador y educador brasilero, como
por ejemplo, la participación comunitaria y el diálogo de saberes, sólo por mencionar dos.

Hechas las consideraciones anteriores, la E.P ha sido adaptada en contextos educativos y


sociales tanto en Latinoamérica como en Colombia, como se dice popularmente, el bosque
no siempre deja ver el paisaje, ni menos hay posibilidad de encontrar una aguja perdida en
un pajar y para el lector que no está acostumbrado a leer entre líneas, la E.P se ha aplicado
a través de prácticas políticas de alfabetización y políticas inspiradas en derechos humanos,
de género e intercultural; pero claro, han sido prácticas sin homogeneidad alguna por
cuanto se ha procurado ajustar las experiencias según el entorno.

Por ultimo a fin de responder un cuestionamiento general relacionado con la aplicabilidad


de la E.P sobresale la pregunta ¿para qué han servido las experiencias de la EP en el
continente y el país?. La respuesta es directa: con el fin de formar sujetos comprometidos
con su entorno; formación de líderes; organizaciones comunitarias; programas de
participación ciudadana en ámbitos municipales, regionales o nacionales; escuelas
primarias y secundarias; institutos técnicos y universidades; formación de miembros que
integran juntas de acción comunal, asociaciones de campesinos e indígenas entre otras
agremiaciones con cierto grado de organización.

En otros contextos son visibles los efectos positivos de las experiencias fundamentadas en
E.P, como es el caso de Evo Morales en Bolivia que ha dado bastante acceso al poder
gracias a su formación popular al igual que el caso de Lula en el Brasil, dos significativos
ejemplos de jefes de estado influenciados por E.P.
CONCLUSIONES

De lo expuesto puede afirmarse que no existe un claro consenso entre diversos autores
acerca del origen de la E.P, pero teniendo en cuenta algunos documentos analizados y
autores se coincide en afirmar que esta corriente pedagógica es propia del sur
latinoamericano y constituida después de la segunda mitad del siglo XX.

Los procesos de educación popular construidos en Latinoamérica se han caracterizado por


plantear propuestas acerca de un tipo de educación que permita construir una nueva nación
con capacidad de romper con el orden social dominante (globalización, neoliberalismo), así
mismo formar ciudadanos con capacidad para pensar autónomamente, de cuestionar y
descomponer patrones ideológicos y éticos como el individualismo, la competencia, la
sociedad de consumo y como reguladora de las relaciones humanas.

Así mismo es de resaltar el objetivo principal de la E.P, que consiste en la emancipación del
sujeto, a partir de su concientización crítica y reflexiva, logrando así que él elabore
proyectos en caminados a satisfacer las necesidades e intereses no solo personales sino
también grupales. La E.P requiere de la dialéctica, es decir, deben ir de la mano la teoría y
la práctica, dicha relación garantiza sujetos mejor preparados y capacitados para liderar sus
entornos.

REFERENCIAS

Brito, L. (2008). “Educación Popular, cultura e identidad desde la perspectiva de Paulo


Freire” Buenos Aires, Argentina. CLACSO, Concejo Latinoamericano e Ciencias Sociales.

Cuadernos de Formación para la práctica democrática N°3, (2012). Guatemala, Ed INCEP.

Dussán, M. (2004). “Modelo Pedagógico de las experiencias de educación popular de la


Universidad Surcolombiana. S.L. Universidad Autónoma de Barcelona. Facultad de
Ciencias de la Educación. Departamento de Pedagogía Sistémica y Social.

Freire, P. (1970). Citado por Moro, Wenceslao (2003). Nodo 50. Retrieved from
http//www.nodo.org./pretextos/ed.ucl.htm.
Freire, P. (2001). Citado por Torres, Carrillo, Alfonso (2002). En “La palabra verdadera es
la que transforma el mundo Paulo Freire y las pedagogías críticas. Recuperado en
www.centroconviven.org.ar.

Kolmans, E. (2011). “La educación popular, los enfoques educativos modernos y la


metodología CAC.

Mejía M. (1990). Citado por Torres Carrillo Alfonso. En “La Educción Popular: evolución
reciente y desafíos”. Universidad Pedagógica Nacional. Digitalizado por Red académica.

Moro, W. (2003). Nodo 50. Retrieved from http//www.nodo.org./pretextos/ed.ucl.htm.

Núñez, C. (2002). Educar para transformar, Transformar para Educar”. San Salvador,

Torres, C. (2002). Citado por Brito, Lorenzo Zaylín. En “Educación Popular, cultura e
identidad desde la perspectiva de Paulo Freire” Buenos Aires, Argentina. CLACSO,
Concejo Latinoamericano e Ciencias Sociales.

Moro, Q. (2011). “El camino de los encuentros: la estrategia de intercambios de la Escuela


de Educación Popular del Sur. Usme, Colombia. Observatorio Local de Derechos humanos.

También podría gustarte