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TUTANKAMON,
el Rey Niño
¿Por qué es tan conocido este antiguo faraón egipcio? ¿Por sus grandes
obras, por su corto reinado o por su juventud? ¿Será su vida lo que le trajo
La verdad histórica es que este joven monarca no destacó en vida, probablemente no era para él- fue descubierta más de tres mil años
ni como gobernante ni en la larga lista de dinastías que tuvo la después y sus tesoros, casi intactos, lo hicieron brillar como el faraón
grandiosa civilización egipcia. Gobernó menos de una década y de los faraones. El mundo moderno no había conocido jamás la
siendo apenas un niño. Subió al trono antes de cumplir los 10 años y riqueza de tan nobles gobernantes.
de ahí en adelante no fue mucho lo que alcanzó a hacer antes de su El descubrimiento fue difícil. Por años, décadas y casi siglos los
muerte. Su extraña muerte. arqueólogos habían buscado la manera de encontrar tesoros
¿Su fama? Tal vez la única manera que encontró Tutankamón de egipcios no saqueados. Y el británico Howard Carter no era la
destacar, fue recién en el mundo de los muertos, ese duat, donde excepción. Tozudo y muy audaz, Carter se negaba a aceptar lo que
el dios Osiris rescataba de la Sala del Juicio sólo a aquellos cuyo todos los especialistas aseguraban en aquella época. Se negaba a
corazón pesara menos que la pluma de un avestruz. creer que ya todo estaba descubierto en el Valle de los Reyes, un
Y fue así. Recién tras encontrar su muerte, Tutankamón saltó lugar con una treintena de tumbas faraónicas ya halladas. Llevaban
finalmente a la fama. Su pequeña tumba –tan pequeña que años peinando esa zona, era noviembre de 1922, y cuando habían
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Museo Egipcio de El Cairo
66 Red Cultural
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misterios
Según los medios de la época, diez años después del descubrimiento,
casi 30 personas relacionadas con los trabajos habían muerto sin
razón aparente. Incluso pasado el tiempo, siguieron los ejemplos.
Como el del Director de Antigüedades de Egipto, quien en la
década del ’60 se negó a firmar la autorización para que algunas
de las piezas del tesoro viajaran a París, por temor a la maldición.
Luego de ser obligado a hacerlo por autoridades superiores, éste
murió atropellado ese mismo día. E incluso su sucesor, quien se
burlaba de los dichos populares, murió sorpresivamente la noche
que supervisaba el embalaje de algunas muestras que viajarían esa
semana a Londres. Y no sólo eso, la tripulación completa que voló
ese avión a la capital inglesa, sufrió algún accidente misterioso.