Gestión de Procesos

La gestión de procesos es una disciplina compuesta de tecnologías y metodologías

utilizada para mejorar la eficacia y eficiencia, es decir, mejorar el desempeño de una
organización. La gestión de proceso ayuda a optimizar los procesos dentro de una
organización y es una herramienta de gestión adecuada para el momento actual,
constituyéndose con fuerza como una alternativa exitosa para la obtención de
resultados cada vez mejores.

La gestión de procesos busca alinear la estrategia general de la organización y la

satisfacción del cliente. De igual manera es necesario lograr alinear los procesos con
los objetivos de la organización.

La gestión de procesos consta de varios pasos como lo son: compromiso de la

dirección, sensibilización, educar, entrenar, identificar procesos, clasificar, relaciones,
mapa de procesos, alinear la actividad a la estrategia y establecer indicadores para
medir los procesos.

De igual manera, es necesario darle seguimiento y medición a los procesos para darle
una mejora continua, identificando los puntos de mejora.

Para que una actividad llevada a cabo dentro de una organización pueda denominarse
proceso debe contar con lo siguiente:

 La actividad tiene una misión o propósito claro.

 La actividad contiene entradas y salidas, se pueden identificar los clientes,
proveedores y producto final.
 La actividad debe ser susceptible de descomponerse en operaciones o tareas.
 La actividad puede ser estabilizada mediante la aplicación de la metodología de
gestión por procesos (tiempo, recursos, costes).
 Se puede asignar la responsabilidad del proceso a una persona.

Los procesos deben estar enfocados a la estructuración de la empresa, cambios en la

estructuración de la empresa, los directivos deben actuar como supervisores, y se
utiliza la tecnología para eliminar actividades que no añadan valor.