PRINCIPIO Y FUNDAMENTO

- ¿Cuáles serían los elementos a enfatizar para que el o la ejercitante vaya

descubriendo su propio principio y fundamento?

De acuerdo a lo leído y escuchado en la charla de la Hna. Jacqueline, creo que es

importante que el ejercitante tome consciencia de sus deseos y de sus vacíos. Respecto a
sus deseos, creo que es importante que sea consciente de lo que le motiva para hacer los
ejercicios, de lo que espera, de lo que anhela. Asimismo, es importante que ubique lo que
le insatisface, lo que duele, lo que no le llena, su vacío. Atento a estos movimientos se
puede invitar al ejercitante a hacer un acto de fe, es decir, a que entienda cuáles son sus
búsquedas, pero más importante aún, que Dios lo está buscando en esas “búsquedas”, es
decir, que Dios quiere hacerse presente en su vida desde lo que al ejercitante le afecta. Me
parece que de esta manera el ejercitante podrá entender que los ejercicios son una
oportunidad para crecer en la amistad con Dios y desde ahí desarrollar la confianza en Él.

Reconocer la iniciativa de Dios es también ayudarle al ejercitante a entender que Dios lo

ama tal como es, desde una doble conciencia:

a) La primera conciencia es la de mi realidad, mis luces y sombras, mi desorden interior,

sin engañarme ni mentirme y con serenidad. Tener disposición para cuestionar mi vida.

b) La segunda conciencia, la realidad de Dios, amor incondicional que me conoce mejor de

lo que yo me conozco y cuya bondad me acepta tal como soy. Al percibir este amor
desproporcionado de Dios se va haciendo camino para la disposición interior, la libertad
que me puede llevar a buscar y desear lo que Él quiere para mí, desarrollando esa
“indiferencia” por la que entiendo que todo es medio para llegar al fin: Dios.

Creo que desde estos movimientos podemos invitar al ejercitante a ampliar su lectura de fe
con la verdad propia del Principio y Fundamento: hemos sido creados por Dios para
alabarlo y servirlo, o como dijo la Hna. Jacqueline, comprender que todo viene de Dios por
la creación y todo se dirige a Él por la salvación.

- ¿Cómo ayudarías al o la ejercitante a reconocer su propio principio y fundamento?

Creo que es bueno confiar en las lecturas bíblicas para ayudar a la persona a nombrar su
principio y fundamento. Como se indicó en el texto de apoyo, creo que la Anunciación a
María es un texto muy pertinente, podemos darnos de cuenta de que Dios toma la iniciativa
y sale al encuentro de nuestra persona en forma concreta como ocurrió con María (sexto
mes, Nazaret, virgen desposada). Podemos invitar al ejercitante a pensar el momento y
lugar concreto en el que reconoce a Dios, para que vaya identificando la llamada única y
personal. Podemos identificarnos también con María, que tiene miedo. Como ella
podemos sentirnos desconcertados si pensamos en porqué Dios nos buscaría, conscientes
de nuestros defectos. Pero también podemos aprender de María, que está más centrada
en Dios que en sus miedos y acepta su proyecto. Y es entonces la invitación para la
confianza.

Los textos sugeridos de Isaías también me parecen valiosos (Is 41, 8-20 / Is 43, 1-7 / Is 49,
1-20). Son textos en los que nos podemos apoyar para experimentar la gracia de que
hemos sido creados para Dios y desde Él toda la vida se ordena.