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Austin y Aristóteles

Ética nicomaquea libro I y Alegato en pro de las excusas


Raúl Villaseñor Hernández

Las ciencias y las filosofías necesitan hacer uso de una instrumentación lógica precisa, sin
este uso no queda otro resultado que la inconsistencia, la contradicción y la imprecisión,
sobre todo porque las ciencias y las filosofías requieren para su propio quehacer unas
herramientas que delimiten y ayuden a precisar los significados y de esta manera construir
un edificio de información y conocimiento según sea el caso.

Sucede con frecuencia que en los textos filosóficos se encuentran el uso de fórmulas que
pueden abarcar infinidad de casos, que han sido elaboradas en la generalidad y de esta
manera se vuelvan una especie de axiomas con los que el filósofo pudiera casarse si se
considerara de “tal corriente” a las cuales no hay que contradecir y además son colocadas
como columna vertebral que soportan el edificio de la propuesta filosófica.

Así, Austin y Aristóteles se parecen en que ambos intentan establecer conceptos


específicos que delimiten y clarifiquen. Decir que y que incluye es algo muy específico en
Austin aunque, Aristóteles diserta precisamente de esta manera cuando va presentando
que entra y que no entra en tal o cual idea y cuales son los inconvenientes para asumir
que tal o cual idea no sólo es la mejor como definida desde un ideal, sino cual puede
contener a la otra de tal forma que pudiera concebirse como un todo orgánico y sistémico,
complementario en sí mismo como sistema.

Las excusas están siempre asociadas a acciones, están en la forma de interpretar, tienen
un lugar en el aparato lógico del discurso, sin embargo, las excusas pueden tener
inconsistencias lógicas, pueden encerrar creencias, y prejuicios, pero, ¿hay alguien que no
tenga?, precisamente es aquí donde es estudio de las excusas puede ayudarnos a
entender como se realiza la interpretación del hecho y la forma en que se estudia, se
determina o simplemente se comprende.

Un ejemplo de esto se da en la psicología y el derecho refieren campos muy específicos


dentro del ámbito de la posibilidad de las excusas. En la psicología lo que interesa es
conocer el funcionamiento externo (conductual) en interacción con el ambiente y también
hallar formas de acceder de la manera más clara posible a la experiencia del sujeto-objeto
de estudio; en cambio, en el derecho el objetivo es determinar en función del discurso y
de los elementos de verificación determinar la culpabilidad o no del acusado por lo que las
excusas prácticamente intervienen directamente en los resultados.

De esta forma, el significado preciso de los adverbios, preposiciones, además de


sustantivos, verbos y adjetivos en su estudio lógico lleva a encontrar las excusas y con ello
encontrar nuevos derroteros en la investigación filosófica, encontrar nuevos caminos sobre

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los cuales encontrar aspectos nuevos, condiciones nuevas que lleven a avanzar sobre
puntos específicos en algún área específica.

Algo que me parece aplicable a muchos ámbitos del vivir humano está en lo que Austin
denomina la ley de que no hay modificación sin aberración en la cual se ven los usos
generales de aplicación de los modificadores que a su vez carece de sentido aplicarlos
porque hasta en el caso que él presenta en cuantos si el asesinato fue voluntario o
involuntario, lo primero que habría de distinguirse antes de preguntarse por la
voluntariedad o no, es averiguar si cometió el asesinato o no y una vez determinado esto,
entonces ya tendría sentido preguntarse por ese modificador ¿voluntario o involuntario? y
dedicarse ya a determinar esa característica.

Por otro lado, Aristóteles en su disertación sobre ¿cuál será el bien mayor al que los
humanos aspiramos?, considera que en una idea solo hay un saber, el está convencido de
que hay que hallar algo tan amplio que abarque todo lo demás, algo que subsuma todo lo
demás a sí misma. Va de lo particular a lo general y de lo general a lo particular buscando
aquello que no necesite algo más para ser valioso y deseable como un bien inamovible
que no pueda ser cambiado por otro bien y en medio de ello, criticando a las distintas
posturas filosóficas en torno al tema encuentra que es la felicidad.

¿Se parecen Austin y Aristóteles en estos textos?, difícilmente es posible encontrar algún
parecido, Aristóteles no busca las excusas en los discursos, sino sólo la coherencia en
términos de encontrar objeciones a las proposiciones de los filósofos. Estas objeciones
pueden ser puramente lógicas en la construcción de su proposición, o también puede ser
que encuentre incongruencias en cuanto que haya un fenómeno que no explique la
propuesta o refutando por incoherencia con el sistema total al que pertenece.

Por ejemplo, Austin plantea que los actos modificados por los adverbios representan
géneros distintos de acciones con lo cual se puede diferenciar que los actos no deben ser
tratados dicotómicamente ya que esto es establecer relaciones probablemente inexistentes
y arbitrarias (como las interpretaciones antropomórficas), sin embargo, Aristóteles sí
concibe el mundo de manera dicotómica al punto de que busca un bien que a su vez sea
mutuamente excluyente de un mal.

También Aristóteles me parece dicotómico en la forma en que presenta sus 3 formas de


bien que el hombre libre elige, los placeres voluptuosos, la política y la contemplación que,
así como las plantea son mutuamente excluyentes, parece ser que el que le entra a una
tendría que alejarse de las otras tanto así que los que se dedican a la contemplación son
seres selectos, sublimes lo cual es completamente inespecífico, arbitrario y relativísimo.

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Por otro lado, Aristóteles es el ejemplo para su época de un trabajo exhaustivo, metódico
y detallado, el es muestra para todos los filósofos futuros de la minuciosidad de un trabajo
filosófico que por su calidad y profundidad establece categorías que se imponen como
modelos del entendimiento y creación de trabajos ulteriores.

Cuando Austin plantea que no hay palabras para describir los fenómenos ajenos a la
experiencia y que no se comparten con otros, me pregunto sobre ¿cuáles serán las
diferencias entre lo que escribió Aristóteles y lo que se traduce a los distintos idiomas?.
Esta pregunta reconoce que los griegos de su época vivían en un contexto que nos es
bastante desconocido a pesar de la información que se tiene; ¿qué será lo que Aristóteles
da por hecho cuando escribe para ser leído por sus contemporáneos que no explica y que
nosotros ignoramos?, no lo sé, nuestra experiencia del texto, ¿en qué medida podríamos
distinguir el tipo de experiencia que transmite, los humanos de hoy?

Austin ya no pertenece a un momento filosófico en donde la entidad alma sea algo


opuesto al cuerpo, donde la razón pertenezca a las facultades del alma y haya que
controlar a la carne con la razón para no distraerse de la vita contemplativa del filósofo.

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