Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
EXPERIMENTACIÓN
4.1 Planificación de la construcción del prototipo o diseño del modelo conceptual.
En este trabajo se realiza un diseño del ciclo de comprensión mecánica simple.
Para lo cual utilizaremos nuestras condiciones iniciales o datos de partida donde se sustentará el resto de
nuestros cálculos.
En ello, fijaremos unas temperaturas de trabajos iniciales, en donde se escogerá el refrigerante óptimo
para la aplicación que se busca obtener, basando la decisión en cálculos termodinámicos, psicométricos y
variables ambientales.
Una vez escogido dicho refrigerante, será posible seleccionar las temperaturas definitivas entre un rango
en el cual trabajará el ciclo. Estas temperaturas son decisivas para el rendimiento del ciclo y la cantidad de
agua obtenida. Para ello se deberá a factores como a una menor temperatura en el evaporador permitirá
aumentar el caudal de agua obtenida por unidad de flujo de aire, si bien tomaremos consideración una
mayor distancia entre temperaturas de evaporación y condensación, con una diminución de rendimiento
que esto implica.
Por ultimo si con estas temperaturas mencionas y el refrigerante elegido, el ciclo cumple con los requisitos
iniciales optaremos hacer un diseño a profundidad de dicho dispositivo.
T Evaporacion =0 ° C
4.2 Construcción del prototipo o construcción del modelo.
Cálculo preliminar del ciclo
Hecho esto, junto con el resto de las variables comentadas en requisitos iniciales, se puede simular
el ciclo para distintos refrigerantes
Entre todos los refrigerantes existentes se han preseleccionado cinco, entre los cuales se encuentran
los más utilizados para aplicaciones de este tipo y aquellos diseñados para trabajar en el intervalo
de temperaturas ya explicado.
Los factores que se analizarán para decantarse por uno o por otro serán los siguientes:
Seguridad (toxicidad e inflamabilidad).
Efectos medioambientales: evaluados por el PCA o GWP (potencial de calentamiento
atmosférico) y el PAO u ODP (potencial de agotamiento del ozono ambiental).
Desplazamiento volumétrico: medida del tamaño del compresor. Cuanto menor sea el
desplazamiento volumétrico menor será el tamaño y por tanto el coste del compresor.
a.
Potencia del compresor: Para un caudal de agua dado de 1000 l/día se calculará la
potencia frigorífica necesaria. Esta potencia en el evaporador será mantenida a expensas de
una potencia en el compresor cuyo valor variará entre distintos refrigerantes.
Los indicadores ambientales y de seguridad vienen dados para cada refrigerante, mientras que el
resto de factores se calculan con una simulación. Para ello se ha usado el software de cálculo
Coolpack
Como datos iniciales para las simulaciones se toman:
Temperatura condensación (ºC) 19
Temperatura evaporación (ºC) 0
Sobrecalentamiento (ºC) 5
Subenfriamiento (ºC) 2
Sobrecalentamiento útil (ºC) 1
Rendimiento volumétrico 1
Rendimiento isentrópico 0,7
Agua obtenida (kg/s), 1000 l/día 0,0116
Temperatura ambiente (ºC) 30
Humedad relativa (%) 80
Factor de by-pass en la batería 0,25
Temperatura de la batería (ºC) 1,5
El cálculo de la cantidad de agua se realiza teniendo en cuenta que la temperatura de entrada del
aire y la de salida es conocida (ya que se relacionan por el factor de by pass). Además, el punto
de salida en el diagrama psicrométrico está en la recta que une el punto inicial y el de aire
saturado a temperatura de la batería.
Es interesante mencionar que si dicho punto se encuentra en zona de nieblas el aire a la salida
de la batería, suponiendo que se logra recoger toda el agua líquida en suspensión de la corriente,
corresponderá a aire saturado (HR=100%) a la misma temperatura. Con esto se pude afirmar:
Por tanto:
T 2 −T 2 ´
FB= ⇨T 2=8,6 ° C
T 1 −T 2 ´
kgagua
x 1=0.02191
kgaire seco
kg agua
x 2=0.00714
kg aireseco
Por medio de un balance de energía en el evaporador y un balance de masa a la corriente de
aire, despreciando la entalpía de la corriente de agua líquida al enfriarse (pues su valor es muy
pequeño frente a la del aire y la de condensación:
A continuación se muestran las simulaciones realizadas para los refrigerantes R134a, R404A,
R407C, R410A y R600a.
Grupo
Desplazamient seguridad, Potencia
descarg PCA PAO
o Volumétrico T autoignición compresor
o o
(m3/h) a
(ºC) (kW)
(ºC) GWP ODP
R134a 70,39 35.4 1200 0 743 / A1 4.915
R404A 41,3 33,6 3922 0 728 / A1 5.114
4.995
R407 47,87 39,9 1774 0 704 / A1
C
R410A 29,94 41,9 1890 0 * / A1 5.111
R600a 133,08 30,7 3 0 460 / A3 4.824
En cualquiera de las opciones la temperatura de descarga es muy baja, por lo que este
factor no es decisivo, salvo en el R600a, que ya ha sido descartado.
Con todo esto nos quedan el refrigerante R407C y el R410A. Si bien el R410A presenta un
desplazamiento volumétrico mucho menor, su potencia en el compresor y características
ambientales son peores. Esto último, unido al uso más ampliamente extendido del R407C,
lleva a la selección de este refrigerante.
El R407C es uno de los refrigerantes más adecuados para las aplicaciones en las que antes
se usaba R22. Es además muy utilizado para aplicaciones comerciales y cercanas a
alimentos, como cámaras frigoríficas.
Optimización de temperaturas
Según todo lo anterior se pueden definir las características del ciclo para el diseño y elección de
componentes de los capítulos siguientes. Una de las variables principales, que afectarán de
forma decisiva al resto de parámetros, serán las temperaturas de evaporación y condensación en
el ciclo.
El ciclo de este dispositivo será de compresión mecánica simple, dado que la alta temperatura del
evaporador no requiere un ciclo más complejo. En este apartado, para unas condiciones
ambientales de 20ºC y 90% de humedad relativa, se analizará la cantidad de agua obtenida al
poner el evaporador a distintas temperaturas (todas ellas positivas e inferiores a la de rocío, de
19ºC) así como el consumo eléctrico específico. Este cálculo permitirá decidir la temperatura
óptima del evaporador, y en función de ésta, el control que necesitará el dispositivo.
Antes de comenzar conviene aclarar distintos aspectos:
Es importante tener en cuenta que los datos que se muestran tratan de agua condensada,
que en el ideal de los casos podrá ser recogida totalmente.
Para efectuar los cálculos se ha escrito un código en EES, obteniendo para cada juego de
temperaturas del evaporador y condensador (temperaturas en las baterías), los flujos de aire
(en cada elemento), el agua obtenida y las potencias.
Potencia del compresor: responsable del mayor consumo eléctrico del dispositivo su
influencia en el coste del agua es decisivo.
Potencia en evaporador y condensador: cuanto mayores sean, más grandes tendrán
que ser estos intercambiadores, con la influencia en coste y pérdidas de carga en el
aire que esto implica.
Flujos de aire, pues determinarán la potencia de los ventiladores.
Se muestra a continuación en la Figura 4.4.1 la relación entre las temperaturas en cada uno
de los intercambiadores de calor y la potencia requerida en el compresor. En ella se aprecia
que los puntos más interesantes están en el cuadrante inferior derecho, donde las
temperaturas en evaporador y condensador son más cercanas y por tanto el ciclo más
eficiente.
Para no
excederse en los caudales de aire que atraviesan cada intercambiador, lo anterior debe ser
contrastado con las flujos de aire. Se incluye en la Figura 4.4.2 la relación entre este caudal
másico y las temperaturas en cada batería.
De forma orientativa se pueden estimar las pérdidas de carga del flujo de aire en cada
una de las baterías (condensador y evaporador), para obtener así la potencia
necesaria para accionar ventiladores y compresor. Estos componentes concentrarán la
mayor parte del gasto eléctrico, por lo que minimizar su consumo equivale a reducir el
coste por litro del agua. Se muestra en la Figura 4.3.3 la potencia total del ciclo frente
a las temperaturas de las baterías.
Debe tenerse en cuenta que los resultados de la Figura 4.3.3, que conjugan los de las dos
anteriores, no son definitivos, ya que el consumo de ventiladores se ha calculado
únicamente como producto de las pérdidas de carga y flujo másico.
De cualquier modo, se aprecia que las temperaturas óptimas de trabajo son en torno a
18ºC en el evaporador y 30ºC en el condensador. Sin embargo, y pese al incremento de
potencia que esto implica, se deciden unas temperaturas algo alejadas de este punto.
Esto se debe a que una temperatura inferior en el evaporador permitirá la obtención de
agua en condiciones ambientales no tan favorables, mientras que los anteriores 18ºC
restringen excesivamente las condiciones climáticas de funcionamiento.
Con todo esto se decide que el ciclo trabaje con los siguientes parámetros, detallados en
la Tabla 4.3.1
Las ecuaciones fundamentales que se tendrán en cuenta en este apartado son: (1)
𝑑𝑚𝑣̇ 𝑑𝑥 = −𝐾𝜌 x donde K es el coeficiente de transferencia de masa del vapor de
aire en la mezcla de aire húmedo, ρ es la densidad del aire húmedo e Yv la fracción
másica de vapor.
Esta ecuación expresa la difusión de vapor de agua 𝑚𝑣̇ en el aire, considerando que éste
se encuentra a una humedad tal que la fracción másica de agua sea Yv y en el volumen
de aire inmediatamente pegado a la película de condensado no hay vapor pues se ha
secado al completo.
(2) 𝑑𝑢 𝑑𝑦
= (𝜌𝑙−𝜌𝑔)𝑔 𝜇𝑙
(𝛿 −𝑦)+ 𝜏𝑔 𝜇𝑙
Esta ecuación expresa el perfil de velocidades (u) del agua líquida (con densidad ρl y
viscosidad dinámica μl) en función de la gravedad (g), el espesor de la capa límite (δ) y
la tensión cortante entre el agua líquida y la corriente de aire (ζg).
(3) 𝑑𝑚𝑣̇ 𝑑𝑥
= −[𝜌𝑙(𝜌𝑙−𝜌𝑔)𝑔𝛿2 𝜇𝑙
+ 𝜇𝑙𝜏𝑔𝛿 𝜇𝑙
]𝑑𝛿 𝑑𝑥
Igualando (1) y (3) e integrando podemos calcular el espesor de la capa límite. Sabiendo
además la velocidad del agua en ésta, se puede hallar, por medio de (2) y un sencillo
balance de masa, el caudal de agua obtenido. Esto requiere predefinir las dimensiones
del evaporador, que en primero aproximación serán como las citadas en el apartado 4.1.
Para completar el modelo se debe añadir:
(4) 𝑞′′ = ℎ0(𝑇𝑎 −𝑇𝑓𝑖)
Puesto que para unas dimensiones dadas –lado, alto y ancho- quedan fijadas las
superficies de intercambio de calor debido al diseño del evaporador, se escogerá el
juego de valores que mejor conviene al diseño de conjunto y que cumpla con los
requisitos térmicos comentados.
Es interesante tener en cuenta que la relación entre todas ellas no es meramente
geométrica, pues una variación en el alto o ancho provocará un cambio en el diámetro
hidráulico del lado aire y por tanto en la transferencia de calor, lo que influirá de nuevo
en el área.
Por ello se ha iterado entre valores fijos del alto y ancho del intercambiador (entre 0,5 y
1,5 m), obteniéndose en cada caso un valor del fondo del evaporador para el que las
áreas de intercambio son las necesarias para la transmisión requerida. Con ello se ha
obtenido el mapa de dimensiones mostrado en la Figura 5.3.2.
Como se observa en la gráfica, para cada valor de ancho y fondo del evaporador existe
un alto en el que se
tienen las áreas
necesarias. Entre
todos estos juegos de
valores posibles
serán
preferibles los que
cumplan las
siguientes
características:
Fondo pequeño, para minimizar las pérdidas de carga y por tanto la potencia
requerida por el ventilador. Menor volumen del intercambiador, calculado como el
producto de las tres variables anteriores. Menor número de tubos (y por tanto menor
coste por reducción de material) Menores superficies de intercambio (por el mismo
motivo).
Se comprueba en los datos obtenidos, que los menores valores de área se corresponden
con los de volumen más pequeño. Sin embargo para estos puntos el fondo es muy
grande. Para visualizar mejor esta relación se incluye la Figura 5.3.3.
Se decide una solución que priorice la influencia del fondo, pues aunque su disminución
implique un aumento del coste del dispositivo, su operación será más barata.