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FREEDBERG, David. El poder de las imágenes. Estudios sobre la historia y la teoría de la respuesta, Madrid: Cátedra. 1992, p. 19
Historia, arte e imágenes
• “El ámbito de la investigación (…) abarca todas las imágenes visuales, so
sólo el arte. Para entender nuestra respuestas al arte ‘elevados’,
necesitamos los testimonios generales y específicos aportados por las
respuestas a las imágenes ‘bajas’. La historia del arte queda, así, incluida en
la historia de las imágenes”
• “Lo que mantenemos es que, si atendemos a nuestras respuestas ante,
digamos, las imágenes publicadas en las revistas de hoy, estaremos en una
situación más propicia para comprender las respuestas de ahora a los
desnudos de Giorgione y de Tiziano (o, para el caso, de Giulio Romano); y
que no podemos empezar a comprender las motivaciones ni la efectividad
de, por ejemplo, las imágenes de los traidores pintadas por Andrea del
Sarto en los muros del Palazzo Vecchio, o los frescos del siglo XIV sobre el
destierro del duque de Atenas, sin recordar antes los carteles elaborados
por la Escuela de Bellas Artes de París en la primavera y en el verano de
1968”
FREEDBERG, David. El poder de las imágenes. Estudios sobre la historia y la teoría de la respuesta, Madrid: Cátedra. 1992, pp. 41, 42
Imagen-objeto activo
El poder de las imágenes
• “Las personas se excitan sexualmente cuando contemplan pinturas y esculturas: las rompen, las mutilan, las besan, lloran ante ellas y emprenden viajes para llegar
hasta donde están; se sienten calmadas por ellas, emocionadas e incitadas a la revuelta. Con ellas expresan agradecimiento, esperan sentirse elevadas y se
transportan hasta los niveles más altos de la empatía y el miedo. Siempre han respondido de estas maneras y aun responden así, en las sociedades que llamamos
primitivas y en las sociedades contemporáneas”
• “El objetivo es tratar de armar las posibles respuestas y luego estudiar por qué las imágenes despiertan, provocan o producen determinadas respuestas y no otras;
la pregunta es por qué la forma muerta despierta conductas que se manifiestan de forma aparentemente tan similares y recurrentes”
FREEDBERG, David. El poder de las imágenes. Estudios sobre la historia y la teoría de la respuesta, Madrid: Cátedra. 1992, p. 19, 39
• “Las preguntas dominantes sobre las imágenes en los trabajos recientes de cultura visual e historia del arte han sido interpretativas y retóricas. Queremos saber
qué significan las imágenes y qué hacen: cómo se comunican en tanto signos y símbolos, qué tipo de poder tienen para afectar las emociones y el comportamiento
humano. Cuando lanzamos la cuestión del deseo, esta se localiza usualmente en los productores y consumidores de imágenes; en la imagen tratada como una
expresión de la voluntad del artista, o bien como un mecanismo que dispara los deseos del espectador. En este artículo me gustaría cambiar la ubicación del deseo
por las imágenes en sí mismas y preguntar qué es lo que las imágenes quieren”
• “Los historiadores del arte pueden ‘saber’ que las imágenes que estudian son solamente objetos materiales que han sido marcados con colores y formas. Pero
frecuentemente hablan y actúan como si las imágenes tuvieran voluntad, conciencia, agencia y deseo”
MITCHELL, W. J. T. ¿Qué quieren realmente las imágenes?, México: COCOM, 2014. Texto original publicado en October, Vol. 77 (Verano 1996), pp. 71-82.
• Cada vez que las imágenes han tratado de ganar influencia indebida dentro de la Iglesia, los teólogos han hecho lo posible por despojarlas de su poder Siempre que
las imágenes conseguían mayor popularidad que las instituciones de la Iglesia y empezaban a actuar directamente en nombre de Dios, se volvían indeseables.
Nunca fue fácil controlarlas mediante palabras porque, al igual que los santos, comprometían niveles de experiencia más profundos y satisfacían deseos diferentes
a aquellos que las autoridades vivientes de la Iglesia podían abordar. Por lo tanto, cuando los teólogos comentaban algún asunto concerniente a las imágenes,
invariablemente confirmaban una práctica ya existente. Más que presentar nuevas imágenes, los teólogos estaban excesivamente dispuestos a prohibirlas. Sólo
después de que los fieles resistían tales embates contra sus imágenes favoritas, los teólogos se decidían a establecer condiciones y limitaciones para reglamentar el
acceso a ellas y sólo quedaban satisfechos cuando podían explicarlas .
• “Desde los más remotos tiempos, el papel de las imágenes se ha manifestado por las actuaciones simbólicas realizadas a favor suyo por parte de sus defensores, o
en su contra, por sus detractores. Las imágenes se prestan tanto para ser exhibidas y veneradas, como para ser profanadas y destruidas. Éstas, en tanto que
sustitutos de lo que representan, obran específicamente provocando manifestaciones públicas de lealtad o deslealtad. Las profesiones públicas de fe hacen parte
de la disciplina que cada religión exige a quien la profesa. Los cristianos a menudo atacaban a los judíos, a los herejes herejes y a los no creyentes, acusándolos de
profanar en secreto imágenes sagradas; ante tales profanaciones, las imágenes agredidas , como las llamó Leopold Kretzenbacher, reaccionaban como un ser vivo,
llorando o sangrando. Siempre que los herejes ponían sus manos sobre símbolos materiales de la fe, como la imagen, las reliquias o la Eucaristía, demostraban ser
saboteadores de la unidad de la fe, que, en principio, no tolera ninguna violación. De esta manera, tan pronto empezaba a surgir un culto a cierta imagen, las
minorías debían vivir en medio del temor a ser denunciadas como sus profanadoras. Hay bastantes ejemplos de esto hasta mucho después de la Reforma; Joseph
Roth describió hace poco sucesos de este tipo en Galicia”
BELTING, Hans. “Semejanza y presencia: una introducción a las imágenes antes de ‘la era del arte’”, en Artes La Revista Vol.3, nº5, 2003, p. 4
Ontología
La ontología (del griego οντος 'del ente', genitivo del participio del verbo
εἰμί 'ser, estar'; y λóγος 'ciencia, estudio, teoría') es una rama de la
metafísica que estudia lo que hay. Intenta responder preguntas generales
como: ¿Qué es la materia? ¿Qué es un proceso? ¿Qué es el espacio-
tiempo? ¿Hay propiedades emergentes? ¿Se ajustan todos los eventos a
alguna(s) ley(es)? ¿Hay especies naturales? ¿Qué hace real a un objeto?
¿Hay causas finales? ¿Es real el azar?
Definición de Wikipedia
Frans Hals, Retrato de René Descartes. 1646
Rex Cogitians (Mente) --------------Rex Extensa (Cuerpo, materia)
Modernidad
Sujeto-------Separación-------Objeto
Agente
Ontología
Imagen
Artefacto
Autor--------------------------Obra “de Arte”-----------Receptor
Artista Fiel- Espectador
Intención------------------------------Efectos
Agencia
Creación/Producción----------------------------Destrucción/Descarte
Contemplación/Uso
Extrañamiento/Shock
Interacción (participación)
Conservación
Reciclaje
Reutilización
Obsolescencia
Autonomía del arte
Sujeto y objeto
“…desde cierto punto de vista óntico (…) los
objetos culturales existen porque algo o alguien los
crea. En el caso específico de los objetos artísticos
puede llegarse a pensar que su realizador es, en
algunos casos extremos, un creador. Muy semejante
al Supremo Hacedor, que crea ex-nihilo [‘de la
nada’], este creador opera desde el no-ser al ser. Es
decir, no componedor, no compositor, no fabricante
(…) Siguiendo esta línea de pensamiento, algunos
teóricos contemporáneos reconocen en el artista a
un sujeto que instaura dentro de la realidad objetos
que antes no existían y por ende se le reconoce
como un creador de la realidad estética existente”
Graciela Dragoski.“El pensamiento estético indígena y la historia del arte”, En: Dina Picotti,
Pensar desde América, Buenos Aires: Cátedra, 1995. Pág. 235
Era del Arte
Giorgio Vasari
Vida de los mejores arquitectos, pintores, escultores italianos,
1550-'68
Coleccionar
• La palabra “coleccionar” está formada con raíces latinas y significa “formar un conjunto
ordenado de cosas”. Sus componentes léxicos son: el prefijo con- (todo, junto), lectus
(escogido), -tio (-ción, sufijo que indica acción y efecto), más el sufijo –ar (terminación usada
para formar verbos)
Recolectar
• El verbo “recolectar” viene de latín recollectare, forma sólo atestiguada en latín medieval, de
un frecuentativo formado a partir del supino recollectum del verbo recolligere (recoger,
reunir, retomar), verbo formado con el prefijo re- (hacia atrás, intensificación) y el verbo
colligere (reunir, recoger), formado a su vez por el prefijo con- (idea de reunión o encuentro,
conjuntamente) y el verbo legere (escoger, recoger, leer).
• El verbo se asocia a una raíz indoeuropea leg- (recoger, colectar, hablar), que también se
vincula en latín al verbo legare (legar, enviar), de donde legar, delegar, legado, clega, etc., a la
palabra lex, legis (ley, que nos da ley, privilegio, legitimo y legal, y vocablo lignum (madera, lo
que se recoge), que nos da leño y leña)
• Kzrisztof Pomian (2003) señala que el término colección implica la agrupación de una cierta cantidad de objetos. No
obstante, se pregunta cuántos son necesarios para formar una colección y cuál sería el criterio para distinguirla de
un simple montón de objetos. Pomian define a la colección –las privadas y las del museo– como un conjunto de
objetos naturales o artificiales, guardados temporal o permanentemente fuera del circuito económico, bajo una
protección especial y puestos en exhibición dentro de espacios cerrados adoptados especialmente para tales
propósitos.
• James Clifford (1995) ubica la práctica de la recolección dentro de la obsesión en Occidente de acumular
posesiones, con respecto a “un ejercicio sobre como apropiarse del mundo”, verbo que se define como “hacer
propio”, del latín proprius: “propio” y “propiedad”. Por su parte, Kzrisztof Pomian establece que los objetos
recolectados cumplen el rol de mediador -como parte significativa de un proceso de intercambio- entre el mundo
visible (los visitantes que tienen un acceso visual) y el invisible (los territorios exóticos y lejanos).
• Crawford B. Macpherson (1970) desarrolla la teoría del individualismo posesivo en Occidente, en la cual se postula
la institución de la propiedad privada de la tierra y los bienes muebles duraderos. Macpherson expresa que la
propiedad, en el sentido burgués, no es únicamente un derecho a disfrutar o usar: es un derecho a disponer,
cambiar, enajenar o alienar. Con la introducción del dinero, emergió el inútil deseo de acaparar algo más de lo que
se puede usar o de lo que es necesario. Materiales no perecederos como el oro y la plata, al no echarse a perder,
pueden ser acumulados, a diferencia de mercancías destinadas al consumo o a la utilidad. En este sentido, la
riqueza consiste en la abundancia de bienes muebles.
Coleccionismo de arte
<
Giovanni Pablo Panini La galeria del Cardenal Silvio Valenti Gonzaga, 1749
Johan Zoffany,
La tribuna de los Uffizi, 1772-8
Neoclasicismo
Neoclasicismo
The Microcosm of London (1808), muestra una sala de remate Christie's James Gillray, A Peep at Christies, 1796
Objeto artístico y mercancía
“Los objetos seleccionados para la exhibición son hechos mejor de
materiales durables si ellos están para durar (si ellos están hechos de
materiales preciosos, como marfil u oro, todo lo mejor). Muchas
piezas potenciales de Arte Primitivo. hechas principalmente en climas
tropicales desde los cuales tales piezas están diseñadas y compuestas
de materiales blandos o en una combinación de materiales duros y
blandos: ofrendas tejidas con flores y hojas de palmeras, canastos,
bambú, y tela de corteza. Los aspectos materiales más efímeros de
estas piezas tienden a desaparecer antes de que éstas se conviertan
en arte. Aquellos hechos de una combinación de partes blandas y
duras son propensos a perder la primera, con profundas
consecuencias epistemológicas y estéticas”
Immanuel Kant
Crítica del Juicio
1790
Modernidad
Vandalismo e iconoclasia
“La modernidad (...) es representada como una pérdida irrevocable, un
conmovedor lamento de la totalidad perdida, una completitud
desaparecida (...) Esta figura del artista es presentada como una entidad
total. ´Moderno' en la medida como el puede ser identificado con el mismo
Fuseli, aunque en tipo, él es por comparación con la fragmentada grandeza
del pasado, pérdida”
“...la omnipresencia del fragmento -en una variedad de formas y con una
amplia gama de significados posibles- en la representación visual de 'la
Revolución Francesa fue capturado en la agonía de destruir una civilización
antes de construir una nueva' (...) La noción de 'vandalismo' -destrucción
sin sentido de objetos culturalmente valuables por la voluntad popular
ignorante- surgió casi simultáneamente con la noción de conservación:
sancionada oficialmente para salvar patrimonio cultural de la nación. Poco
a poco, en el nombre de los bienes superiores, la gente fue privada del
derecho para destruir los íconos del feudalismo. Sin embargo, la imaginería
-y la prumulgación- de la destrucción, desmembramiento y fragmentación
permanecieron como poderosos elementos de la ideología revolucionaria
al menos hasta la caída de Robespierre en 1794 e incluso después”
Linda Nochlin. The body in pieces. The fragment as a metaphor of
modernity. New York: Thames and Hudson, 1994. Págs. 7-10 Henry Fuseli, El artista abrumado por la grandeza de la ruinas de la Antigüedad, 1778-'79
Museos “…el museo (…) es un efecto directo de la modernización (…) No es
la conciencia de tradiciones seguras lo que marca los comienzos del
museo, sino su pérdida, combinada con un deseo estratificado de
(re)construcción (…) Al paso que la aceleración de la historia de la
cultura desde el siglo XVIII hacía obsoleto, cada vez más deprisa, un
número cada vez mayor de objetos y fenómenos, incluidos los
movimientos artísticos, surgió el museo como la institución
paradigmática que colecciona, pone a salvo, conserva lo que ha
sucumbido a los estragos de la modernización” Andreas Huyssen.
En busca del futuro perdido. Cultura y memoria en tiempos de
globalización. Buenos Aires: FCE, 2007. Pág. 44
Hubert Robert
Projet d'aménagement de l
a Grande Galerie du Louvre, 1796
"Para la emergencia del museo del arte estuvo relacionada
cercanamente con un amplio abanico de instituciones -museos de
historia y ciencias naturales, diorama y panoramas, exhibiciones
nacionales e internacionales, galería comercial y tiendas- que
sirvieron como sitios enlazados para el desarrollo y circulación de
nuevas disciplinas (historia, biología, arte, historia, antropología,) y
su formación discursiva (el pasado, evolución, estética, hombre) así
Sala egipcia del British como el desarrollo de nuevas tecnologías de visión. Además,
Museum, principios del siglo XIX
mientras estas comprendían una intersección de relaciones
institucionales y disciplinares que puede ser productivamente
analizado como particulares articulaciones de conocimiento y
poder" Tony Bennett. The birth of the museum. History, theory,
politics. NY/Londres: Routledge, 2002. Pág. 59
Hunterian Museum, 1853
La destrucción del arte
“Horst Bredekamp hacía hincapié en el valor que tiene el
estudio de las ‘guerras de imágenes’ porque ponen en tela de
juicio la validez universal del concepto moderno de ‘arte’. Yo
diría que ocuparse de la destrucción de las obras de arte
significa verlas en el contexto, más amplio, de los artefactos,
los objetos, incluso –por rendir homenaje a George Kubler- las
‘cosas’. Tal vez ahora se pueda combatir mejor unos prejuicios.
En primer lugar, la oposición binaria entre creación y
destrucción. Desafortunadamente, la palabra misma
‘destrucción’ que tengo que utilizar, no obstante su carácter
simplificador, contribuye a esta simetría y suele evocar la idea
de que el maltrato que denota es –después de la ‘creación’ y
‘producción’- tal que todo objeto ha sido sometido, a menos
que el objeto siga existiendo. Desde este punto de vista,
resumiendo, un objeto es hecho, existe y en última instancia
puede ser destruido”
Darío Gamboni. La destrucción del arte: iconoclasia y vandalismo desde la Revolución Francesa. Cátedra: Madrid, 2014. Pág. 37
Vandalismo e iconoclasia
Francisco de Goya,
No sabe lo que hace, 1814-´17
Lafosse, La demolición de dos orgullosas fachadas de la Place de Bellecour de Lyon, 26 de octubre de 1793. Grabado que muestra lo
que ocurrió tras la fracasada resistencia de 1793. Debajo de la A de la columna izquierda se ve al representante del pueblo Georges
Couthon dando el simbólico primer golpe al edificio con un martillo de plata y diciendo “Os condeno a ser demolidos en nombre de
la ley”
Iconoclasia en el siglo XVI
Dirck van Delen. Iconoclasia en una iglesia, 1630 Jacobus Buys, De Beeldenstorm (La iconoclasia), 1566 - 1784-'86
Alexandre Lenoir
fundador del Musee des Monuments Francais
Alexandre Lenoir (1761-1839) oponiéndose a la destrucción de las tumbas reales de la Alexandre Lenoir defendiendo los monumentos de la Abadía de Saint Denis.
monarquía francesa en la Iglesia de Saint-Denis..
Jorge Luis Borges
Musee des Monuments Francais
C-M. Bouton, Musée des Monuments Français, Sala del siglo XIV , S/D
• Patrimonio
• Jacques Revel (2014) afirma que, en el ámbito del derecho romano, el
término patrimonio designaba al conjunto de bienes privados susceptibles de
transmitirse en un linaje. En la actualidad es usado para calificar una especie
de propiedad colectiva. Según Revel la realidad patrimonial se constituye en
tanto exista una realidad amenazada, sea por su perdida, su destrucción
deliberada o su abandono. El acontecimiento que signó esta realidad fue la
Revolución Francesa de 1789.
“Si bien sus laudables propósitos [referido a los espíritus selectos] fueron altamente premiados en
vida por la liberalidad de los príncipes y la generosidad de las repúblicas, y después de la muerte de
los artistas, se honró y perpetuó su memoria mediante el testimonio de estatuas, sepulturas y
medallas, el tiempo consumó su obra destructora, porque no sólo mermó la cantidad de obras que
las legaron, sino que borró el recuerdo y el nombre de sus autores, lo único que resta de ellos es lo
que ha consignado la pluma gentil de la escritura (…) Para no permitir esta segunda muerte, en
verdad definitiva, he tratado de defenderlos en lo posible y juzgue conveniente, y casi diría mi deber,
emplear mis modestos conocimientos y mi capacidad, para consignar todos estos datos en el
presente libro”
Giorgio Vasari, Vidas de pintores, escultores y arquitectos (1562), Buenos Aires, El Ateneo, 1945
Marcel Duchamp
Portrait of Chess Players (Retrato de jugadores de ajedrez), 1911 Monte Carlo, Bond (Obligaciones para la ruleta de Montecarlo), 1924.
Julian Wasser, Marcel Duchamp jugando al ajedrez en el Pasadena Art Museum, 1963
Sala de Marcel Duchamp en el Philadelphia Museum of Art