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Eclesiología

 
 
 
E X T E N S I Ó N C S T A D 
L’ALCÚDIA

A  s  i  g  n  a  t  u  r  a d e T e r c e r    C u r s o    C S T A D 


P r o f e s o r :  O s m a n y    C r u z     F e r r e r 
 
 
 
 

TEO.315

EXTENSIÓN

L’ALCÚDIA

Escatología y Eclesiología
1.Datos de la asignatura
Curso académico Titulación Grado Teología
Código TEO 315 Centro Facultad de Teología A.D.
Materia
Área Teología Departamento Teología
Curso 3º Temporalidad 1 Cuatrimestre
Carácter Básica Créditos ECTS 5
Lenguas en las que se imparte Español
Horas de trabajo presencial 48
Porcentaje de presencialidad
Horas de trabajo no presencial 77
Plataforma Plataforma: NEOLMS
Virtual URL de https://adfacultad.edu20.org
Acceso:

2.Datos del profesorado


Nombre Osmany Cruz Ferrer
Coordinador/a

Departamento Teología

e-mail osmanycstad@gmail.com Teléfono 722115972

Horario de tutoría Lunes de 18:30-19:30


Nombre
Departamento Área
e-mail Teléfono
Horario de tutoría

Nombre
Departamento Área
e-mail Teléfono
Horario de tutoría

3. Datos específicos de la asignatura


Requisitos previos establecidos en el plan de estudios

Recomendaciones

4. Contextualización de la asignatura en el Plan de Estudios


Bloque Formativo al que pertenece la asignatura: Materia básica.
Esta asignatura va a tratar dos aspectos teológicos importantes, la eclesiología y la
escatología. Por ello en primer lugar se va adentrar en las profundidades de la vida de la
iglesia, su origen, su identidad, sus ministerios, su ética, su gobierno y otros aspectos de
relevancia para quienes aspiran a convertirse en ministros de culto. El estudio de esta primera
parte es medular para el desarrollo futuro de un servicio eclesial meritorio.
La segunda parte de la asignatura pretende perfilar una cronología completa de los más
relevantes acontecimientos escatológicos. El estudio de estos eventos futuros y su significado
harán situarse al estudiante en la importancia de la profecía bíblica para comprender mejor el
mundo en que vive y su responsabilidad histórica, social y espiritual en consecuencia con lo
que de antemano aprenderá que ocurrirá. La asignatura al completo abarca un importante
período de tiempo desde el origen de la iglesia y el cierre de la historia mundial para dar paso
al nuevo mundo que Dios hará. La asignatura servirá de base sólida para en cuarto curso
adentrarse en los libros de Daniel y Apocalipsis. Esta asignatura tiene un fuerte valor práctico
para el ejercicio ministerial.

5. Competencias
CG Generales
CG-B Capacidad para aplicar los conocimientos teóricos de la eclesiología a la iglesia local,
al ministerio en cualquiera de sus áreas y a la comunidad de fe, así como a la
sociedad toda. Comprensión de las verdades escatológicas y su aplicación armónica
a la teología en su todo.
CE Específicas
CEC_C. Conocimiento de la cronología escatológica y su significado puntual para una
ortodoxa teología y para defensa de nuestra esperanza. Conocimiento de la
eclesiología como acicate para conducirse mejor en la iglesia, “columna y baluarte de
la verdad”.
CEP- B Capacidad para analizar y ordenar en la mente el plan para la iglesia en la historia
humana. Capacidad para analizar y comprender las etapas futuras de la iglesia
basados en la verdad de las Escrituras.

CEA-A Estima y consideración al estudio de la eclesiología y la escatología para posibilitar la
habilidad de exponer fehacientemente las verdades doctrinarias que ambas
disciplinas teológicas enseñan.

6. Objetivos
Objetivo general
1. Conocer las verdades doctrinales expuestas mediante el estudio de la eclesiología
bíblica.
2. Comprender el significado y trascendencia de los eventos futuros.
Objetivos específicos:
1. Aprender a aplicar los principios contenidos en las enseñanzas eclesiológicas del
Nuevo Testamento.
2. Provocar un hambre por la lectura y el aprendizaje de las enseñanzas eclesiológicas y
escatológicas. Estimular a la fe en las promesas escatológicas de Dios que son objetivo
de estudio en este curso.
3. Incentivar la pasión por el estudio de la eclesiología y la escatología.
4. Poner en práctica las enseñanzas eclesiológicas que me atañen como creyente.
5. Desarrollar un estudio exhaustivo de la eclesiología y la escatología bíblica.
6. Asimilar el orden cronológico de los eventos escatológicos.
7. Motivar al temor de Dios, a la comunión con Dios y al servicio cristiano mediante este
curso.
8. Incentivar un aprecio por la santidad y la separación del pecado.
9. Provocar una renovada expectativa por el pronto retorno de Cristo.
10. Aprender la cronología de los acontecimientos escatológicos.

7. Contenidos
Contenidos teóricos
En este Módulo de estudio abordaremos dos apasionantes temas: La eclesiología y la
escatología. El primero de ellos está vinculado directamente con nuestro pasado histórico
como iglesia. También está relacionado con nuestro presente en relación con la doctrina y la
praxis de la iglesia actual. El segundo tema tiene un sentido futuro, pero no por ello deja de
carecer de relevancia. Todo lo contrario, el estudio de las profecías por cumplirse son un
acicate para vivir una auténtica vida presente con esperanza por lo porvenir, y oración por los
no alcanzados.

ECLESIOLOGÍA: La Ekklesía. Etímología y significado actual. El origen de la iglesia. Las figuras


de la iglesia. Las ordenanzas del Señor para su iglesia. Los líderes de la iglesia. La gran
tribulación. El ministerio de la iglesia. Gobierno de la iglesia. La disciplina en la iglesia. El
destino de la iglesia.

ESCATOLOGÍA: El arrebatamiento de la iglesia. El tribunal de Cristo. Las bodas del Cordero. La


segunda venida de Cristo. Armagedón. Los juicios relacionados con la segunda Venida. Las
resurrecciones. Milenio. La segunda rebelión de Satanás y el juicio de los impíos. La eternidad
con Dios.

Contenidos prácticos
La información contenida en estas disciplinas teológicas tiene una repercusión práctica en la
ortodoxia, en apologética y en la ética cristiana.

8. Metodología y Volumen de trabajo del estudiante


Aclaraciones generales sobre la metodología
Se trabajarán diferentes enfoques: aunque con prioridad al método expositivo, se trabajarán
debates, estudios de casos, conferencias y portafolios. También se trabajará en seminarios y
trabajo individual.
Horas dirigidas por el docente HORAS
Horas de trabajo TOTALES
ACTIVIDADES Grupo Grupo
Individual autónomo
completo mediano
Actividades de 2 2
Evaluación
Análisis de documentos 2 1 3
Consultas bibliográficas 1 1
Debates 3 2 5
Estudio 25 25
Exposición individual 2 2
Exposición grupal 2 2
Lección magistral 30 30
Trabajo individual 20 20
Trabajo en grupos 3 3
Tutorías 1 1
Lectura y recensión de 20 20
textos
Investigación 11 11
Total horas 37 8 3 77 125

9. Material de trabajo para el alumnado


Módulo de estudio de la asignatura.

10. Sistemas de Evaluación y Calificación


Consideraciones Generales
La evaluación de la asignatura consta de dos exámenes parciales, correspondiéndose con cada
una de las partes en las que se divide toda la materia, además de las diferentes tareas que se
demandan en cada una de ellas. La evaluación toma en cuenta todas las propuestas de
evaluación diseñadas, de acuerdo a la ponderación de los porcentajes de calificación
propuestos. Para aprobar la asignatura es condición necesaria, que la nota media de los dos
exámenes parciales, sea como mínimo un aprobado 5. De lo contrario la parte de la
asignatura, representada por el examen que no hubiese sido aprobada, ó la totalidad de la
misma en caso de suspender los dos exámenes, tendrá que ser recuperada en la convocatoria
de septiembre.
Recomendaciones para la evaluación
El estudiante ha de tener bien claros los distintos conceptos que se agrupan en la disciplina
teológica de la eclesiología, así como el orden de los sucesos escatológicos, su significado y su
repercusión en la vida práctica de la iglesia contemporánea.
Claridad en la exposición de los conceptos.
• Apoyo y argumentación bíblica en las respuestas.
• Argumentación teológica en sus afirmaciones.
• Posicionarse en sus respuestas de forma clara y concisa.
Un apoyo importante es la lectura del módulo de estudio y la lectura comprensiva del texto
de referencia de H.E. Dana y J. Dwight Pentecost.
Recomendaciones para la recuperación
Habrá de considerar la generalidad de los objetivos de la asignatura y, de forma específica las
recomendaciones individuales que se le aporten en las tutorías.
Para la 2ª convocatoria de septiembre se tendrán en consideración las evaluaciones parciales,
de forma que, en caso de que la materia se haya suspendido, se podrá recuperar
parcialmente la parte de la asignatura que no se haya aprobado.
Periodo de validez de las calificaciones parciales
El período de validez se corresponde con las convocatorias oficiales del curso académico en su
convocatoria ordinaria sea del 1º o 2º cuatrimestre y en la convocatoria extraordinaria de
septiembre. Posteriormente a estas convocatorias, el/la alumno/a que no haya superado la
asignatura tendrá que superar la evaluación global de toda la materia y no se tendrá en
consideración ninguna calificación parcial obtenida en el curso académico.

Instrumentos
Competencias Exposición Casos Test Examen
Ensayos Recensión Investigaciones
Debate Prácticos Parciales
CG-B X X X X
CEC-B X X X
CEP-B X X X X
CEA-A X X
Ponderación 5% 10% 10% 10% 15% 10% 40%
Puntuación 1 1 1 0,5 1,5 1 4
máxima
Puntuación
mínima -- -- 0,5 -- -- 0,5 2
necesaria

11.- Cronograma/Calendario de la asignatura


Tempora
UNIDAD TAREAS INDIVIDUALES TAREAS GRUPALES
lidad
• Test de la Unidad 1.
• Estudiar el término Ekklesía a • Foro de discusión
1.- Ekklesía. partir de la lectura de al menos sobre el uso de
2 horas

Etimología y tres diccionarios bíblicos y Ekklesía en el


significado.
redacte una definición propia del Antiguo y Nuevo
vocablo indicando sus diversas Testamento.
connotaciones.
• Lectura comprensiva de la unidad • Debate sobre las
2.- El origen de
2 horas

2. diversas posiciones
la iglesia. sobre el origen de
• Test Unidad 2.
la iglesia.

• Grupo de
• Test de completar espacio en discusión: Las
2 horas

3.- Las figuras blanco. metáforas bíblicas,


de la iglesia.
• Lectura de “Las metáforas de la su significado y
iglesia” de Wayne Gruden. alcance.

• Test de verdadero o falso.


• Lectura de “los propósitos de la • Mesa redonda: La
4.- La identidad
2 horas

iglesia” de Wayne Gruden. iglesia y sus


de la iglesia. • Lectura de Anexo 1: Consejos desafíos
prácticos para servidores, de contemporáneos.
Osmany Cruz Ferrer.

• Lectura de “las ordenanzas de la


5.- Las iglesia” de Myer Pearlman. • Debate y
comentario crítico

2 horas
• Lectura de “El bautismo en
ordenanzas de
aguas” de Amaro Rodríguez. sobre la diferencia
la iglesia. entre ordenanza y
• Cuestionario sobre las
ordenanzas de la iglesia. sacramento.

6.- La disciplina • Lectura comprensiva de la unidad


2 horas

6. • Estudio de casos.
en la iglesia
• Test de la Unidad.

• Análisis grupal de
• Test de verdadero y falso de la los diferentes
Unidad. aspectos tratados
7.- Los líderes
2 horas

• Lectura de la posición doctrinaría en la posición


de la iglesia. doctrinaría de la
de la IEPC sobre la Nueva
Reforma Apostólica. IEPC sobre la
Nueva Reforma
Apostólica
• Test sobre el contenido de la • Presentación de
Unidad. diapositivas por
8.- Los • Lectura de: Propuestas equipos sobre las
2 horas

ministerios de doctrinales sobre el ministerio de posiciones


la iglesia. la mujer, Los ministerios dentro existentes
de la iglesia y El servicio en relacionadas a los
equipo, la gran estrategia de Dios. ministerios en la
iglesia.
• Ensayo sobre el tipo de gobierno
eclesial preferido y por qué.
• Test sobre la unidad que consiste • Grupo de
en llenar los espacios en blanco. discusión:
9.- El gobierno
2 horas

• Lectura de los reglamentos FADE Gobierno


de la iglesia. episcopal,
(año 2009).
• Lectura de algunas secciones del congregacional y
libro de Gobierno Eclesiástico de presbiterial.
Octavio Ríos.

• Lectura comprensiva de la
• Debate y
Unidad.
comentario crítico
10.- La misión
2 horas

• Test de la Unidad. sobre el papel de


de la iglesia. • Lectura de Anexo 1. El papel de la la iglesia en un
iglesia en España, por Osmany mundo
Cruz Ferrer. globalizado.

• Lectura y estudio de las 16


11.- Las doctrinas fundamentales. • Mesa redonda
participativa sobre

4 horas
• Test de la Unidad.
doctrinas de la
• Ensayo sobre una de las doctrinas la crisis doctrinal
iglesia. en la iglesia
estudiadas. Usos y abusos de esa
doctrina en cuestión. contemporánea.

• Test de la unidad. • Concurso


12.- El destino
• Lectura de secciones del libro de participativo sobre
de la iglesia.

Pentecost. preguntas
eclesiológicas.
1º EXAMEN PARCIAL
13.- El • Test de la Unidad. • Foro sobre las
3 horas

arrebatamient diversas
• Lectura de: La iglesia de Cristo en
o de la iglesia interpretaciones
el aire, por Ángel Toledo Fuentes. de Daniel 9.
14.- El tribunal
de Cristo • Mini sermón de 5
• Test de la Unidad. minutos sobre una
2 horas

• Lectura comprensiva de la de las


Unidad. recompensas del
tribunal de Cristo.

15.- Las bodas • Test de la Unidad. • Debate sobre pre,


2 horas

del Cordero. • Lectura de secciones del libro de messo y post


Pentecost. milenialismo.

16.- La Gran • Ensayo de opinión sobre la


• Dramatización de
3 horas

Tribulación. postura personal sobre el


lo que será la Gran
arrebatamiento de la iglesia.
Tribulación.
• Test sobre la Unidad.
• Ensayo sobre la confusión entre
17.- La segunda • Comentario por
arrebatamiento y día del Señor. grupos sobre
2 horas

Venida de • Test sobre la Unidad. errores y aciertos


Cristo. de la película:
• Visualización de la película:
dejados atrás. Dejados atrás.
18.- La Batalla
• Reflexiones de un
de Armagedón. minuto sobre las
• Test sobre la Unidad.
2 horas

posibles naciones
• Visualización de la película
implicadas en esta
Armagedón serie de conflictos

escatológicos.

19.- Las • Test sobre la Unidad. • Realizar por grupos


paráfrasis a los

2 horas
resurrecciones • Lectura de algunas secciones de
principales pasajes
Profecías apocalípticas, de
sobre las
Wagoner, H.A. resurrecciones.
20.- Los juicios
relacionados
• Test sobre la Unidad. • Discusión grupal
2 horas

con la segunda • Lectura de algunas secciones de sobre los errores


venida. Apocalipsis hecho fácil, de escatológicos
Brigham, Kay. CLIE, 1998. sobre la eternidad.

21.- Milenio y
• Intervenciones por
segunda • Test sobre la Unidad. grupos sobre
2 horas

rebelión de cronología
• Lectura de algunas secciones de
Satanás. El plan profético de Dios, de escatológica
Beckwith, B. mediante gráficos
en la pizarra.

22.- La
• Test sobre la Unidad.
etrnidad. • Concurso
• Lectura de algunas secciones de:
2 horas

participativo sobre
El futuro glorioso del planeta
preguntas
tierra, de Bloomfield, Arthur.
Escatológicas.


2º EXAMEN PARCIAL

12. Recursos
Material de consulta para el alumnado
BIBLIOGRAFÍA BÁSICA

I. LIBROS DE TEXTO

La Santa Biblia.
Se han de leer los dos libros recomendados de consulta: Manual de eclesiología. H.E. Dana.
Editorial mundo hispano y Eventos del porvenir. J. Dwight Pentecost.

BIBLIOGRAFÍA COMPLEMENTARIA

II. OTRAS LECTURAS COMPLEMENTARIAS

Una iglesia saludable. Dever, Mark. Faro de Gracia.

III. LIBROS DE CONSULTA


ECLESIOLOGÍA
Las 101 mejores ideas para trabajar con grupos pequeños. Davis, Deena. Casa Bautista de
Publicaciones.
La iglesia del nuevo milenio. Deiros, Pablo Alberto. Editorial Certeza.VIDAL MANZANARES,
C. La otra Cara del Paraíso, la verdad sobre las grandes sectas. Edt. Unilit, 1994.
La iglesia para nuestros días. Galloway, Dale. Casa Nazarena de Publicaciones.
Iglesias exitosas. Rainer, Thom. Editorial Vida.
Liderando con imperfecciones. Allendar, Dan. Editorial Vida.
Mapas para la historia futura de la Iglesia. González, Justo L. Ediciones Kairós.
El modelo. Morris, James. Editorial CLIE.
Mujeres en el ministero: Cuatro puntos de vista. Clouse, Robert y Clouse, Bonnidel.
Editorial CLIE.
Partícipes en el pacto. Kuyvenhyoven, Andrew. Libros Desafío.
Las Señales de una iglesia viva. Stott, John R. Ediciones Certeza.
Teología bíblica del avivamiento. Ropero Berzosa, Alfonso. Editorial CLIE.
Una iglesia con propósito. Warren, Rick. Editorial Vida.
Yo planté...pero el crecimiento lo dio el Señor. Fachisthers, Ricardo. Editorial CLIE.
Anderson, S.E. Su bautismo es importante. Casa Bautista
Bartel, Judy. Adoración cristiana. ICI
Dayton, Donald W. Raíces teológicas del pentecostalismo. Desafío, 1999
Dayton W., Donald. Raíces teológica del pentecostalismo. Desafío, 2008
Frost, J.M. La cena conmemorativa de nuestro Señor. Casa Bautista
Getz, Gene A. Edificándoos los unos a los otros. CLIE
Getz, Gene A. La medida de una iglesia. CLIE
Grams, M. David. Poder divino para servir. Vida
Harvey, H. La iglesia: Su forma de gobierno y sus ordenanzas. Casa Bautista
Hodges, Melvin L. Los ministerio y dones espirituales. Vida, 1963
Hollenweger, Walter. El pentecostalismo. La Aurora
Holowaty, José. El bautismo según el Nuevo Testamento. Dime
Horton, Harold. Los dones del Espíritu Santo. Vida, 1979
Hubbard, David A. Iglesias ¿quién las necesita? CLIE
Küen, Alfred. Introducción a la eclesiología. CLIE, 2001
Lacueva, Francisco. La iglesia cuerpo de Cristo. CLIE
Miranda, Jesse. El ministerio de la iglesia. ICI, 1987
Purkiser, W.T. Los dones del Espíritu. Casa Nazarena
Ríos, Asdrúbal. La iglesia frente a la nueva moralidad.
Souto, Eduardo. Fe y bautismo. CLIE
Stedman, Ray C. La iglesia resucita. CLIE
Stott, John. Señales de una iglesia viva. Certeza, 1994
Trueblood, Elton. La iglesia: Un compañerismo incendiario. Casa Bautista
Turner, J.R. La doctrina neotestamentaria de la iglesia. Casa Bautista
Wagner, Pedro. ¡Cuidado! Allí vienen los pentecostales. Vida, 1973
Wagner, Pedro. Teología latinoamericana: ¿Izquierdista o evangélica?. Vida, 1969
Williams, John. Iglesias vivientes. Literatura Bíblica
ESCATOLOGÍA:
Albricht, Katherine y Cintire, Liz. Chips espías. Nelson, 2006.

Anderson, Sir Robert. El príncipe que ha de venir. Portavoz, 1980.


Astakhoff, Saloff. El origen y destino del planeta tierra. CLIE.
Ball, Sunshine. Daniel y Apocalipsis. Vida, 2001.
Barchuk, Ivan. Explicación del libro de Apocalipsis. CLIE.
Barclay, William. El Nuevo Testamento comentado – Apocalipsis, Tomo 16. La Aurora.
Beckwith, B. El plan profético de Dios. Las Américas.
Blackstone, W.E. Jesús viene. CLIE.
Bloomfield, Arthur. Antes de la última batalla. Betania.
Bloomfield, Arthur. El futuro glorioso del planeta tierra. Betania, 1984.
Bock, Darrell; Blaising, Craig; Gentry, Kenneth; y Strimple, Robert. Tres puntos de vista del
milenio y el más allá.
Boettner, Loraine. La inmortalidad. TELL, 1968.
Bonnet y Schroeder, B y S. Comentario del Nuevo Testamento – Hebreos – Apocalipsis,
Tomo 4. Casa Bautista.
Braaten, Carl. Escatología y ética. La Aurora.
Brigham, Kay. Apocalipsis hecho fácil. CLIE, 1998.
Cantelon, Willard. El funeral del dólar. Vida, 1975.
Carballosa, Evis L. Apocalipsis la consumación del plan eterno de Dios. Portavoz, 1997.
Carballosa, Evis L. Cristo en el Milenio. Portavoz, 2007 Carroll, B.H. Daniel y el período
intertestamentario. Casa Bautista.
Carroll y Hale, C y H. El libro de Apocalipsis. Casa Bautista.
Chatham, Doug. El rapto. CLIE.
Clanclini, Arnoldo. Apocalipsis: Visión de triunfo final. Casa Bautista, 1989.
Cohen, Gary. El último suspiro del planeta tierra. CLIE.
Cutting, Jorge. La venida del Señor. Vencedor.
Danyans, Eugenio y Sagan, Antonio. Llamada de alerta ante el Apocalipsis final. CLIE,
2000.
Darby, J.N. Estudio sobre... Apocalipsis. CLIE.
Dayton W., Donald. Raíces teológica del pentecostalismo. Desafío, 2008.
De Almeida, Abraao. Israel Gog y el Anticristo. Vida, 1980.
DeLoach, Charles. Semillas del conflicto. Vida, 1974.
Erdman, C.R. El Apocalipsis. TELL.
Evans, G. El Apocalipsis. Casa Unida.
Fernández, Domingo. Una interpretación del Apocalipsis. Casa Bautista.
Ford, Marvin. En el otro lado. CLIE.
Foulkes, Ricardo. El Apocalipsis de San Juan. Desafío, 1999.
Gaebeien, Armo C. Clave de las visiones y profecías de Daniel. CLIE, 2000.
Gentry, Kenneth; Hamstra, Sam; Pate, C. Marvin; y Thomas, Robert.
Cuatro puntos deCarballosa, Evis L. Daniel y el reino mesiánico. Portavoz Evangélico.
Grau, José. Escatología: Final de los tiempos. CLIE.
Hamilton, Gavin. Las glorias del reino venidero. CLIE.
Hamilton, Gavin. Maranatha. CLIE, 1968.
Hamilton, George. El libro de Daniel. Librería EC.
Hayford, Jack. El gran terremoto. Caribe, 2001.
Hayford, Jack W. Daniel y Apocalipsis hasta el fin de los tiempos. Caribe, 1995.
Hendricksen, W. La Biblia y la vida venidera. TELL.
Hendricksen, W. Mas que vencedores. Desafío, 1998.

Hitchcock, Mark. ¿Vive el Anticristo entre nosotros?. Unilit, 2003.


Hoekema, Antonio A. La Biblia y el futuro. Subcom. Lit. Cristiana, 1984.
Jeffry, G. Aviso final. Unilit, 1998.
Kraak, William. Los últimos tiempos. CLIE.
Ladd, George. Apocalipsis de Juan: Un comentario. Caribe.
Lindsey, Hal. Apocalipsis inminente. Logoi.
Lindsey, Hal. La agonía del gran planeta tierra. Libertador, 1971.
Lindsey, Hal. La década del 80: Cuenta regresiva a Armagedón. Vida.
Lindsey, Hal. La generación final. Portavoz Evangélico.
Lune, David H. El pacto el holocausto y la semana 70. CLIE, 2001.
MacArthur Jr., John F. La segunda venida. Portavoz, 2000.
Maldonado, Luis. La bestia. Libertador.
Marotta, V. La última semana de Daniel. Casa Bautista.
McCall, Thomas y Levett, Zola. El anticristo en el santuario. Moody.
McDowell, Josh. Profecía: Hechos o ficción. Daniel en el foso de los críticos. CLIE, 1988.
Miller, C.L. La ira del Cordero. CLIE.
Morgan, G. Campbell. Las cartas de nuestro Señor. Hebrón.
Morris, León. Apocalipsis. Certeza.
Mounce, Robert H. Comentario del libro del Apocalipsis. CLIE, 2007.
Neal, D.L. Comentario sobre Apocalipsis. Casa Bautista.
Newport, John. El león y el cordero. Casa Bautista, 1989.
Nigh, Kepler. Manual de estudios proféticos. Vida, 1995.
Pentecost, Dwight. Eventos del porvenir. Vida, 1984.
Ross, G.A. Estudios en las Sagradas Escrituras – los profetas. Casa Unida.
Ross, G.A. Introducción a los libro proféticos. Casa Unida.
Ryrie, Charles C. Apocalipsis. Moody.
Ryrie, Charles C. Comentario bíblico EPV – Apocalipsis. Portavoz Evangélico.
Sánchez García, Juan. Comentario histórico y doctrinal del Apocalipsis. CLIE, 1988.
Saravi, Fernando. Profecía de las 70 semanas. CLIE, 2001.
Sauer, Erich. De eternidad a eternidad. Portavoz Evangélico.
Sauer, Erich. La aurora de la redención. Portavoz Evangélico.
Schlink, Basilea. Patmos: Cuando los cielos se abrieron. CLIE.
Scofield, C.I. Traza bien la palabra de verdad. Moody.
Sherrill, Elizabeth. El regreso del futuro. CLIE.
Silva, Kitim. Apocalipsis revelación de Jesucristo. CLIE, 2001.
Summers, R. Digno es el Cordero. Casa Bautista, 1981.
Tejera, Pedro. Grandes eventos futuros. Buena Semilla, 1972.
Tejera, Pedro. Señales de su venida. Buena Semilla.
Turner, D.D. Introducción al Nuevo Testamento. HCJB, 1964.
Turner, Donald. Exposición del Apocalipsis. HCJB.
Veldkamp, Herman. ¿Quién es el Antricristo?. Subcom. Lit. Cristiana, 1983.
Veldkamp, Herman. Daniel. Desafío, 1998.
Vila, Samuel. Cuando El venga. CLIE, 1967.
Wagoner, H. De Babilonia al reino eterno. Alianza.
Wagoner, H.A. Profecías apocalípticas. Alianza.
Walvoord, John. Las grandes profecías de la Biblia. Caribe, 2001.
Walvoord, Juan. Armagedón. Vida, 1975.

Walworth, John. Armagedón, petróleo y terror. Tyndale, 2007.


Westlake, George W. y Duncan, David. Daniel y Apocalipsis. ICI, 1995.
Wilkerson, David. La visión. Vida, 1975.
Wright, G.E. El desafío de la fe de Israel. Methopress.

Otras referencias bibliográficas, electrónicas o cualquier otro tipo de recurso


• http://es.scribd.com

11. Criterios de coordinación


Para esta asignatura no se precisa coordinación docente, al ser únicamente el profesor titular
de la misma.


1. Ekklesía. Etimología y
significado
ECLESIOLOGÍA
Preparado por:
Profesor Osmany
Cruz Ferrer.

“CRISTO QUISO REGALARSE A SÍ MISMO UNA IGLESIA GLORIOSA,


APARTADA DEL MAL Y PERFECTA, COMO SI FUERA UN VESTIDO
QUE NO TIENE UNA SOLA ARRUGA NI UNA SOLA MANCHA, NI
NADA PARECIDO” (EF. 5:27 BLS).

 "Creo en el cristianismo
así como creo que el
sol ha salido. No sólo
porque lo veo, sino
porque gracias a que lo
veo puedo ver todo lo
demás" (C. S. Lewis).
Eclesiología

 Es la disciplina teológica que


estudia la Iglesia en todos sus
aspectos: su origen, naturaleza,
ministerio, misión, ordenanzas,
gobierno, etcétera.

EL TÉRMINO: IGLESIA-EKKLESÍA.

 Nunca la palabra ekklesía fue


usada en el Nuevo Testamento
como una referencia a edificio
alguno.
 La palabra que usaron los
griegos post apostólicos para
referirse al edificio donde se
reunía la iglesia proviene de un
adjetivo, kuriakon, que significa:
perteneciente al Señor.
EL USO CLÁSICO DEL VOCABLO EKKLESIA EN EL GRIEGO

 Ekklesía, en su uso clásico significa


“una asamblea”.
 Esta palabra proviene de del
verbo griego ek kaleo, que
significa: fuera de (ek) y llamar
(kaleo), o sea, llamar hacia afuera.
 De ahí es que al español no
traducimos la palabra ekklesía,
sino que la transliteramos como
iglesia

USO DE LA PALABRA EKKLESIA COMO DERIVACIÓN DE


KAJAL EN EL HEBREO.

 La Septuaginta, o Biblia de los setenta


es una traducción de los textos
hebreos y arameos más antiguos al
griego. En esta traducción se traduce
ekklesia por kajal.
 El término hebreo kajal hace
referencia a una asamblea, una
convocación, o congregación.
 Ekklesía se menciona en la
Septuaginta 96 veces traduciendo a
kajal. Aunque al mirar los pasajes del
Antiguo Testamento donde se usa el
término Kajal se nota por el contexto
que tiene más variantes en su uso que
propiamente la palabra ekklesia.
Podemos distinguir seis
variantes del uso de ekklesía en
el Antiguo Testamento:
 (1) Se usa cinco veces para
indicar simplemente una
agrupación de individuos, sin
hacer referencia a ningún
carácter religioso específico,
como en el Salmo 26:5:

 “He aborrecido la asamblea de


los malhechores” (compárese
también 1 Reyes 19:20).

 (2) Trece veces se refiere a un


grupo congregado para un
propósito especial: “Entonces
Josafat se puso en pie en la
asamblea de Judá y de
Jerusalén, en la casa de Jehová,
delante del atrio nuevo” (2
Crónicas 20:5).
 (3) En veintiséis casos la
referencia se hace a una
asamblea en una localidad
particular para propósitos
religiosos, ordinariamente para
el culto
 Salmo 22:22: “En medio de la
asamblea cantaré alabanza a ti
 Salmo 40:9: “He predicado
justicia en grande asamblea.”

(4) La mención más


frecuente del término es
para denotar una reunión
formal de todo el pueblo de
Israel en la presencia de
Jehová, en cuyo sentido se
usa treinta y seis veces:

“Y me dio Jehová las dos


tablas de piedra escritas
con el dedo de Dios; y en
ellas estaba escrito según
todas las palabras que os
habló Jehová en el monte,
de en medio del fuego, el
día de la asamblea” (Dt.
9:10).
 (5) En siete lugares designa a
Israel en un sentido ideal, como
la posesión peculiar de Jehová.
Deuteronomio 23:3: “No entrará
amonita ni moabita en la
congregación de Jehová.”

 (6) Finalmente, podemos


hacer una alusión aparte de
esas nueve referencias en las
cuales el término se aplica al
remanente de los fieles en
Israel que regresaron del
cautiverio babilónico, como
en Nehemías 8:2: “Y el
sacerdote Esdras trajo la ley
delante de la congregación”
 Significado resultante del vocablo
ekklesía en el Antiguo Testamento
así como en su uso en el griego
clásico
“Una comunidad de individuos que
poseen ciertas cualidades que son
considerados en un sentido único
como un pueblo de Dios,
dedicándose a la promoción de
objetivos religiosos y conduciendo
sus propios asuntos sobre principios
democráticos”.

LA IGLESIA EN LOS ESCRITOS DEL


NUEVO TESTAMENTO
 La palabra ekklesía aparece 114
veces en el Nuevo Testamento.
 En 3 casos no se hace ninguna
referencia clara a la iglesia.
 85 veces la idea local es
positivamente cierta.
 En 26 casos la palabra admite
varias interpretaciones.
 Pasajes que claramente no
contienen ninguna referencia a
la iglesia.
 De éstos, hay solamente tres y
todos se encuentran en el
capítulo diecinueve de
Hechos. Allí Lucas describe la
confusión creada en Éfeso por
Demetrio, un fabricante de
ídolos, cuando la predicación
de Pablo afectó su negocio de
imágenes de Diana.
 En los vv. 32 y 41 significa una
aglomeración no organizada
de gente;
 En el v. 39 significa un cuerpo
congregado en orden legal
para propósitos judiciales.

Pasajes que claramente


significan la idea local.
 La palabra ekklesía aparece
ochenta y cinco veces en el
Nuevo Testamento con un
indudable sentido local.

 “la iglesia que estaba en


Jerusalén” (Hechos 11:22); “la
iglesia que estaba en
Antioquía” (Hechos 13:1); “la
iglesia de Dios que está en
Corinto” (1 Corinitos 1:2).
El Nuevo Testamento no sólo
revela que el concepto primario
de la ekklesía era local; también
señala la naturaleza de esta
ekklesía local.

1. Organización definida. Hay


claras implicaciones de que la
ekklesía estaba estructurada en
una forma de organización más
o menos definida. Esto podemos
deducirlo en tres hechos:

(1) Toda la ekklesía de una


comunidad particular es descrita
como teniendo una
responsabilidad colectiva por la
manera en la cual observa la cena
del Señor (Corinitos 11:17-34).

(2) La ekklesía ocasionalmente se


reunía en un lugar con propósitos
de celebrar el culto (Hechos 11:26 y
1 Corinitos 14:19, 23).

(3) La ekklesía local tenía sus


oficiales regulares y de éstos había
dos clases: ancianos (u obispos) y
diáconos (Filipenses 1:1; Hechos
20:17 y 1 Timoteo 3:1 sig.)

 Estas implicaciones prueban que


las iglesias eran cuerpos integrados
con actividades colectivas.
2. Cuerpo autónomo: La ekklesía local era
un cuerpo autónomo. Sobre este punto
la evidencia es terminante.
 Cuando Pablo recogió una ofrenda
de las iglesias gentiles para los santos
pobres en Palestina, pidió que las
iglesias locales designaran mensajeros
para que lo acompañasen en llevar la
ofrenda a Jerusalén (2 Corinitos 8:19,
23).
 Las iglesias del Nuevo Testamento
determinaban sus propias costumbres
(1 Corinitos 11:16).
 Cada iglesia arreglaba sus propias
problemas sin ninguna interferencia
del exterior, salvo cuando se trataba
de un consejo (1 Corinitos 5:4, 5; 6:4)
 Una iglesia local tenía el derecho de
determinar sus propios planes de
acción (Hechos 15).

 3. Cualidades de ser miembro.


Podemos conocer con
seguridad cuáles eran las
cualidades necesarias para ser
miembro de una iglesia
neotestamentaria.
 Para ser miembro de una de
esas iglesias y estar en buena
relación con la misma, uno
debía ser salvo (Hechos 2:41); y
debía vivir una vida en
conformidad con las normas
cristianas (1 Corinitos 5:1-6;
14:23).
 4. Posesión divina. En un
sentido especial, la ekklesía
local fue considerada como
una posesión divina. Este
concepto se refleja en frases
tan repetidas como “la iglesia
de Dios” o “las iglesias de
Cristo” (compárese
especialmente con 1 Corinitos
3:16, 17).

 Pasajes que admiten que ekklesía es


una asamblea universal.

 La iglesia también es la referencia al


conjunto universal de creyentes que
componen el cuerpo de Cristo en el
mundo:
 “Y él es la cabeza del cuerpo que es
la iglesia, él que es el principio, el
primogénito de entre los muertos, para
que en todo tenga la preeminencia”
(Col. 1:18).
 “Porque el marido es cabeza de la
mujer, así como Cristo es cabeza de la
iglesia, la cual es su cuerpo, y él es su
Salvador” (Ef 5:23).
 “Porque somos miembros de su
cuerpo, de su carne y de sus huesos”
(Ef. 5:30).
CONCLUSIONES
 Siempre que las Escrituras hacen referencia a la
iglesia, lo hace aludiendo a las personas que la
constituyen: “Cada uno de ustedes es parte de la
iglesia, y todos juntos forman el cuerpo de Cristo”
(1 Co. 12:27).
 La alusión a la iglesia como un edificio físico, fue
hecha más adelante en la historia.
 La iglesia es el cuerpo de Cristo. Cada verdadero
cristiano forma parte de este organismo que
toma su vida y dirección de la cabeza que es
Cristo.
IGLESIA. NUEVO DICCIONARIO BÍBLICO ILUSTRADO

Iglesia (gr. Ekklesia, del verbo ek kaleõ, «llamar fuera de»). Uso del término. En los estados
griegos recibía este nombre la asamblea de los ciudadanos, convocada por un heraldo para
tratar y decidir los asuntos públicos (cfr. la asamblea alborotada de Éfeso, Hch. 19:32, 41).
La LXX traduce como ekklesia el término hebreo kãhãl, que designa a la asamblea o
congregación de Israel. Es en este sentido que Esteban habla de «la congregación»
(ekklesia) que estuvo con Moisés en el desierto (Hch. 7:38). El Señor Jesús emplea por
primera vez en el NT el término iglesia, que va a recibir un tratamiento tan corriente en el
NT. Señalemos ya aquí que este término no designa jamás un edificio ni un lugar de culto,
como sucede en la actualidad.

Definición. En esencia, la Iglesia es la comunidad de todos los creyentes del Nuevo


Testamento que han sido unidos por el lazo de la fe y de la acción regeneradora del Espíritu
Santo, de una manera vital, a Jesucristo. Esta Iglesia espiritual es el cuerpo místico del Señor,
del que se llega a ser miembro por el bautismo del Espíritu, y en este sentido sólo es
discernida por los ojos de la fe (1 Co. 12:13). Es universal por cuanto todos los hijos de Dios
de todos los países y procedencias forman parte de ella (Hch. 2:47; 9:31), comprendiendo
también a todos los rescatados ya recogidos en el Señor (He. 12:22–23). Si bien en cierto
sentido es invisible, es al mismo tiempo visible, pues se halla en la tierra manifestada por
medio de miembros vivos y activos, para que el mundo pueda ver su amor fraternal,
constatar sus buenas obras, y comprender su fiel testimonio del Señor (Jn. 17:21; 1 P. 2:12;
Fil. 2:15–16). Asimismo, es también local, ya que en el NT la comunidad cristiana de cada
localidad era considerada como una iglesia, lo que permite emplear asimismo el término
iglesias (Hch. 8:1; 11:26; 13:1; 14:23, 27; 15:41; Ro. 16:4–5; 1 Co. 7:17; 1 Ts. 2:14).

La relación entre Cristo y la Iglesia queda maravillosamente ilustrada en el NT. Cristo es la


Cabeza, el Jefe del Cuerpo de la Iglesia (1 Co. 12:12–13, 27; Ef. 5:23, 30); es el Esposo
celestial, que se ha unido tan íntimamente a ella que los dos ya no son más que una sola
carne (2 Co. 11:2; Ef. 5:31–32). Es la piedra cabecera del ángulo del templo del Señor, cuyas
piedras vivas son los creyentes individuales edificados sobre el fundamento de los apóstoles
y profetas (Ef. 2:19–22; 1 P. 2:4–5; es así como se debe interpretar Mt. 16:18, siendo que
Pedro fue el primero en confesar claramente el nombre del Salvador, siendo en este sentido
la primera piedra individual puesta sobre el fundamento. cfr. Hch. 4:11–12). Cristo es
asimismo el sumo sacerdote que encabeza el regio sacerdocio constituido por todos los
miembros de la Iglesia (1 P. 2:5, 9–10; He. 9:11, 14; Ap. 1:6).

La unidad de la Iglesia es un don de Dios y un milagro conseguido por la obra de la Cruz y


de Pentecostés, reuniendo en uno solo a los hijos de Dios que estaban esparcidos (Jn. 11:52;
Ef. 2:13–16; 1 Co. 12:13). Así se cumple la oración intercesora de Cristo, pidiendo para los
suyos una perfecta unidad de naturaleza, semejante a la del Padre y el Hijo (Jn. 17:11, 20–
23). La base séptuple de esta unidad queda indicada en Ef. 4:4–6; esta unidad existe entre
aquellos que adoran y sirven al Dios uno y trino, que han venido a ser miembros del cuerpo
de Cristo, la Iglesia, por el bautismo del Espíritu, teniendo la sola fe que salva y la esperanza
viva del retorno de Cristo. Fuera de esta base, es ilusoria toda búsqueda de unidad. De todas
maneras, no tenemos que hacer, ni organizar la unidad, que es espiritual, mediante
nuestros esfuerzos, sino guardarla en el vínculo de la paz (vv. 1–3). Esto demanda un
constante esfuerzo de los creyentes, y debe llevarnos a la confesión de que todos hemos
pecado gravemente a este respecto. ¡Se debería prestar más atención a la severa
advertencia de 1 Co. 3:16–17!

Dones y ministerios en el seno de la Iglesia. En el Cuerpo de Cristo cada miembro recibe uno
o varios dones del Espíritu, para capacitarle a actuar en bien del resto de los miembros. Una
enumeración de los dones y ministerios posibles se halla en 1 Co. 12:7–11, 28–30; Ro. 12:4–
8; Ef. 4:11 (véase Carismas). Por cuanto todos los miembros del cuerpo de Cristo son así
dotados y llamados al sacerdocio, no existe jerarquía en la Iglesia, ni división entre clero y
laicos. Lo que sí existe es una armónica distribución de los dones y ministerios, ejercidos en
mutuo amor y sumisión los unos a los otros (1 P. 4:10–11). En la Iglesia del NT los apóstoles
ejercieron un papel que era, en un sentido, irrepetible (Hch. 1:21–22; Ef. 2:20); los obispos
(gr. «supervisores»), llamados también ancianos (Hch. 14:23; 15:22; 20:17, 18), estaban
encargados de velar sobre el rebaño y de asegurar la predicación y la enseñanza (1 Ti. 3:1–
7; 5:17); los diáconos ejercían un ministerio de servicio (Hch. 3:8–13; 6:2–6; cfr. Ro. 16:1–2:
Febe, diaconisa de la iglesia de Cencrea). Éstos eran cargos siempre establecidos por la
irremplazable autoridad de los apóstoles, bien personal, bien delegada expresamente (1 Ti.
3:1–7, 8–13, 14–15; Tit. 1:5), lo cual es evidencia de que no eran establecidos por las iglesias
mismas. Había también profetas, evangelistas, pastores y maestros (Ef. 4:11). Éstos son
constituidos por la autoridad directa del mismo Señor, cabeza de la Iglesia (cfr. Hch. 13:1–
3), ejerciendo sus ministerios en comunión con toda la Iglesia pero no, ciertamente,
comisionados por ella, sino por el mismo Señor para edificación mutua. Es además un
ministerio plural, y no reducido a un solo hombre, como sucede tan frecuentemente hoy
en día. Las actividades y la autoridad quedan así en el seno de la Iglesia, de manera que en
el Concilio de Jerusalén las decisiones son tomadas en nombre de los apóstoles, ancianos,
hermanos y, finalmente, de toda la Iglesia, bajo la dirección del Espíritu Santo (Hch. 15:22–
23, 28). (Véase Concilio de Jerusalén.)

El destino eterno de la Iglesia. En esta tierra, la Iglesia es aún imperfecta, incompleta y


menospreciada; no es del mundo y marcha, como su Señor, por el camino de la cruz (Lc.
12:32; Jn. 15:18, 20; 17:14–18). Su tarea es dar testimonio de Jesucristo y ganar almas para
su nombre (1 P. 2:9–10; Fil. 2:15–16). Tiene que crecer en la santidad (Ef. 4:12–16); es
inminente el momento en que se cumplirá el número de los elegidos (Ro. 11:25) y en que
Cristo hará comparecer ante Sí a su esposa perfecta, gloriosa e irreprensible (Ef. 5:27). Para
ello, su esposa habrá sido arrebatada al cielo al encuentro de su Señor (1 Ts. 4:14–17; cfr.
Mt. 25:1–13), purificada y unida a Él en las Bodas del Cordero (Ap. 19:7–9). Sentada con
Cristo en su trono, reinará con El por los siglos de los siglos (3:21; 22:3–5). Entonces,
aquellos que han sido salvos por la fe del Evangelio, gozarán de su felicidad sin adversidad
alguna, en la presencia del mismo Dios, en aquella ciudad que tiene fundamentos, cuyo
arquitecto y constructor es Dios, gozando de una comunión entrañable con Cristo y con el
Padre, en una unión eterna por el Espíritu (He. 11:10; Jn. 14:1–3; Ap. 21:9–22:5). Las últimas
palabras de la Biblia retumban con la esperanza de la Iglesia alimentada por el Espíritu: «Y
el Espíritu y la Esposa dicen: Ven … El que da testimonio de estas cosas dice: Ciertamente
vengo en breve. Amén; sí, ven, Señor Jesús» (Ap. 22:17, 20).

Bibliografía: Chafer, L. S.: Teología Sistemática, tomo II, vol. IV, Eclesiología (Publicaciones
Españolas, Dalton, Ga., 1974, pp. 3–256); Darby, J. N.: «Considerations on the Nature and
Unity of the Church of Christ»; «The Character of Office in the Present Dispensation»; «On
the Formation of Churches»; «On Ministry: its Nature, Source, Power, and Responsiblity»;
«On Discipline»; «Separation from Evil God’s Principle of Unity»; «Grace, the Power of Unity
and of Gathering»; «On Gifts and Offices in the Church»; «The House of God; the Body of
Christ; and the Baptism of the Holy Ghost»; «The Church—the House and the Body», en The
Collected Writings of J. N. Darby (Ed.: W. Kelly, vols. 1 y 14; Stow Hill Bible and Tract Depot,
Kingston-on-Thames, Surrey, reimp. 1972); Kelly, W.: Lectures on the Church of God (C. E.
Hammond Trust Bible Depot, Londres s/f); Lacueva, F.: La lglesia cuerpo de Cristo (Clíe,
Terrassa, 1973); MacDonald, W.: Cristo amó a la lglesia (Páginas Orientadoras, Tehuacán,
(1961); Morgan, G. C.: Pedro y la lglesia (Clíe, 1984); Nee, W.: La iglesia normal (Clíe,
Terrassa, 1983); La iglesia gloriosa (Clíe, Terrassa, 1983); Patterson, F. G.: Paul’s Doctrine
and other papers (Bible Truth Publishers, Oak Park, Illinois, 1944); Regard, P. F.: Los
ministerios y los dones (Ed. «Las Buenas Nuevas», Los Ángeles s/f); Shaeffer, F. A.: La lglesia
al final del siglo XX (Ediciones Evangélicas Europeas, Barcelona, 1973), The Church Before
the Watching World (Inter-Varsity Press, Londres, 1972).
Celebración eucarística (siglo III d.C.). Fresco de las Catacumbas de S. Calixto en Roma. CLIE.1

1
Ventura, S. V. (1985). En Nuevo diccionario biblico ilustrado (pp. 518–520). TERRASSA
(Barcelona): Editorial CLIE.
IGLESIA. DICCIONARIO HISPANO-AMERICANO DE LA MISIÓN

ECCLESIA. (Del gr. ekklesia, que se usa en el NT para designar a la iglesia). 1. Significa el
pueblo de Dios llamado a ser una comunidad por la predicacion del evangelio de Jesucristo,
el perdón de los pecados, el bautismo y la presencia del Espíritu Santo. Lit. sig. «una
asamblea de personas esp. llamadas o convocadas.» Recibió su sig. religioso cuando los
traductores de la LXX lo adoptaron en orden a expresar en gr. las palabras he. que se
refieren a Israel como el pueblo de Dios y el pueblo frente a Dios (el «verdadero Israel»).
Cuando la comunidad cristiana se aplicó este nombre, se apropió de la pretensión de ser el
«verdadero Israel,» la «nación santa de Dios,» la comunidad mesiánica. El término tiene
varios sig.: (1) la comunidad escatológica que espera la consumación final; (2) la
congregación local en una ciudad determinada; y (3) la totalidad de la iglesia donde quiera
que ésta esté, de la cual las congregaciones locales son tan sólo una manifestación. 2. Según
Ernst Troelsch (1865–1923), es una extensa organización religiosa que comprende a todos
o casi todos los miembros de una sociedad, como en la ICR, la Iglesia Ortodoxa Griega y las
Iglesias Luteranas de Alemania y Escandinavia. El concepto fue modelado sobre la base de
la iglesia medieval europea. La e es conservadora, establecida, y está unida al Estado. (Ver
iglesia, comunidad de fe, congregación, cuerpo de Cristo)2

2
Deiros, P. A. (2006). Prefacio a la Edición Electrónica. En Diccionario Hispano-Americano
de la misión (Nueva edicion revisada). Bellingham, WA: Logos Research Systems.
LOCKWARD, A. DICCIONARIO

IGLESIA El término griego ekklesia, que se traduce como i., significa “asamblea,
congregación, reunión”. Originalmente, se usaba para designar una asamblea de
ciudadanos reunida para tratar asuntos comunales o políticos en una ciudad griega. En
hebreo había una palabra similar, kahal, que se empleaba para referirse a una asamblea
hecha con propósitos religiosos. En el período helenístico de la historia de Israel, la palabra
griega que se buscó como equivalente fue sunagögë, que quiere decir “reunir, juntar”.
Cuando se hizo la traducción de la Biblia hebrea al griego ( •Septuaginta), donde decía kahal
se puso “sinagoga”. Pero también se traducía como ekklesia, en diversos lugares (“… y en
ellas estaba escrito según todas las palabras que os habló Jehová en el monte … el día de la
asamblea [ekklesia]” [Dt. 9:10]; “No entrará amonita ni moabita en la congregación
[ekklesia] de Jehová” [Dt. 23:3]; “¿Quién de todas las tribus de Israel no subió a la reunión
[ekklesia] delante de Jehová?” [Jue. 21:5]; “Por tanto, no habrá quien a suerte reparta
heredades en la congregación [ekklesia] de Jehová” [Mi. 2:5]).
De manera que cuando el Señor Jesús dijo: “… edificaré mi i.” (Mt. 16:18), la palabra era
conocida por los que le escuchaban. La epístola de Santiago, considerada como de los
primeros libros del NT que fueran escritos (entre el 40 y el 60 d.C.), cuando se refiere a una
reunión de cristianos usa la palabra sunagögë (“Porque si en vuestra congregación entra un
hombre…” [Stg. 2:2]). Pero, en general, los autores del NT utilizan el vocablo ekklesia. En sus
orígenes neotestamentarios, este vocablo es paralelo y casi similar a sinagoga. Ekklesia
también se usa para señalar al pueblo de Israel en Sinaí (“Este es aquel Moisés que estuvo
en la congregación [ekklesia] en el desierto con el ángel que le hablaba en el monte Sinaí”
[Hch. 7:38]). O para indicar a una muchedumbre (“Unos, pues, gritaban una cosa, y otros
otra; porque la muchedumbre [ekklesia] estaba confusa” [Hch. 19:32]; “… en legítima
asamblea [ekklesia] se puede decidir” [Hch. 19:39]). Pero muy pronto se restringió el uso de
la palabra para referirse a la reunión, o asamblea, o congregación de los cristianos. El
término así utilizado tiene sólo dos sentidos en el NT: uno que habla del conjunto de los
cristianos de todos los tiempos y otro que designa lo mismo, pero con un sentido local,
aquellos que se reúnen en un sitio. A lo primero se le denomina “i. universal”, y a lo segundo
“i. local”. En ningún lugar del NT se habla de i. como refiriéndose a un local o un edificio.
Este es un uso que se aplicó, por extensión, en períodos posteriores. Tampoco se habla de
una i. en el sentido regional, o nacional, o internacional. Cuando los apóstoles escribían a i.
que estaban diseminadas en una región o provincia, les llamaban “las i.”
Las i. del NT. ¿Cómo eran las i. del NT? ¿Cuáles cosas sucedían en ellas? La primera que
conocemos fue la de Jerusalén. Los apóstoles se reunían en un “aposento alto, donde
moraban…”; “… partiendo el pan en las casas…” (Hch. 1:13; 2:46). Una de esas casas era la
de “María la madre de Juan … donde muchos estaban reunidos orando” (Hch. 12:12) cuando
Pedro estaba preso. Se hacían reuniones en el templo judío (“Y perseverando unánimes
cada día en el templo y partiendo el pan en las casas…” [Hch. 2:46]). La forma del lenguaje
parece indicar que las reuniones eran diarias. Los apóstoles acudían al •templo a orar (Hch.
3:1). En efecto, los cristianos iban a las sinagogas y participaban de sus cultos. Los creyentes
de Jerusalén, cuando oyeron los informes de Pablo acerca de lo que Dios hacía entre los
gentiles, le dijeron: “Ya ves, hermano, cuántos millares de judíos hay que han creído; y todos
son celosos por la ley” (Hch. 21:20). Fue en el año 90 d.C. cuando los judíos decidieron, con
sentido universal, la expulsión de las sinagogas de todo aquel que confesara que Jesús era
el Cristo. Las iglesias de los gentiles también comenzaron reuniéndose en casas. Se
mencionan varios ejemplos, como el de •Priscila y •Aquila (“Saludad también a la iglesia de
su casa” [Ro. 16:5; 1 Co. 16:19]), el de Ninfas (“… la iglesia que está en su casa” [Col. 4:15])
y el de •Filemón (“… la iglesia que está en su casa” [Flm. 2]).
En cuanto al gobierno de las i., es evidente que los apóstoles asumieron la dirección de la
de Jerusalén. Luego, para ciertos trabajos que les distraían de la “oración y … el ministerio
de la palabra” se escogieron siete personas para “servir a las mesas”, surgiendo así lo que
se llamó el oficio de •diácono (Hch. 6:1–6). En su trabajo misionero, los apóstoles se
preocupaban de establecer “ancianos en cada ciudad”, esto es, en las i. (Tit. 1:5). Los
•ancianos, pastores u obispos eran los encargados de dirigir las i. Los que “gobiernan bien”,
decía Pablo, merecían ser sostenidos por la i. (1 Ti. 5:17). Aunque la i. de Jerusalén no
interfería en los asuntos de las demás i., se reconocía su autoridad moral por ser la más
antigua y por la significación histórica de la ciudad y la experiencia de sus líderes.
Conjuntamente con la predicación del evangelio, las i. se preocupaban por los pobres y
marginados sociales. En Jerusalén, “vendían sus propiedades y sus bienes, y los repartían a
todos según la necesidad de cada uno” (Hch. 2:45). Los líderes de la i. de Jerusalén pidieron
a Pablo que se acordase de los pobres (“… lo cual también procuré con diligencia hacer” [Gá.
2:10]). Las i. gentiles se preocuparon por ayudar a los necesitados en Jerusalén (“Porque
Macedonia y Acaya tuvieron a bien hacer una ofrenda para los pobres que hay entre los
santos en Jerusalén” [Ro. 15:26]). También tenían la costumbre de ayudar económicamente
a las viudas de su comunidad (“Sea puesta en la lista sólo la viuda no menor de sesenta
años…” [1 Ti. 5:9]) y se ocupaban de los enfermos (Stg. 5:14–15).
Algunas personas idealizan las i. del NT, pero éste no encubre los grandes problemas,
errores y pecados que existían en aquellas comunidades cristianas. En Jerusalén •Ananías y
•Safira mintieron (Hch. 5:1–11). También “hubo murmuración de los griegos contra los
hebreos, de que las viudas de aquéllos eran desatendidas en la distribución diaria” (Hch.
6:1). En •Antioquía, líderes de la envergadura de •Pedro y •Bernabé tuvieron que sufrir de
Pablo un reproche público como hipócritas, por una “simulación” que hacían frente a
visitantes judíos para que no les vieran comer con gentiles (Gá. 2:11–13). En •Corinto hubo
casos de diversos pecados, incluyendo uno de incesto (1 Co. 5:1). El apóstol Juan menciona
a un tal •Diótrefes, que se convirtió en un cacique exclusivista en una i. No recibía a los
hermanos y expulsaba a los que no estaban de acuerdo con él (3 Jn. 9–10). En la i. de los
•Tesalonicenses había personas que tomaban como excusa la esperanza de la venida del
Señor para comportarse como vagos (2 Ts. 3:10–12). Aparecieron maestros falsos en las i.,
que tenían “apariencia de piedad” pero negaban “la eficacia de ella”, y “mujercillas
cargadas de pecados” (2 Ti. 3:5–7). En la mayoría de las cartas a las iglesias de Asia, a las
cuales Juan se dirige en el Apocalipsis, se detectan defectos y pecados que existían en ellas.
Ante la observación de estos aspectos de la vida de las i., corrientes en toda la historia hasta
el día de hoy, nos asombran las declaraciones apostólicas en cuanto a la i. No “las i., sino
”la i.“ Ella es ”la casa de Dios … la i. del Dios viviente, columna y baluarte de la verdad” (1
Ti. 3:15). Jesucristo es el fundamento de ella (1 Co. 3:11–12). Él es su cabeza y ella es su
cuerpo (Ef. 1:22–23; Col. 1:18). Esta figura se refuerza con otra: la i. es la esposa de Cristo
(Ef. 5:21–33). Pablo explica que el evangelio era un “misterio escondido desde los siglos en
Dios” y que “la multiforme sabiduría de Dios” es “dada a conocer por medio de la i. a los
principados y potestades en los lugares celestiales” (Ef. 3:9–10). El propósito de Cristo es
“santificarla, habiéndola purificado en el lavamiento del agua por la palabra, a fin de
presentársela a sí mismo, una i. gloriosa, que no tuviese mancha ni arruga ni cosa
semejante, sino que fuese santa y sin mancha” (Ef. 5:26–27).3

3
Lockward, A. (1999). En Nuevo diccionario de la Biblia (pp. 505–507). Miami: Editorial
Unilit.
¿QUE ES LA IGLESIA?
Por Charles Ryrie. Tomado de su libro Teología Sistemática.

La importancia de la iglesia difícilmente puede ser sobreestimada. Es la que Dios compró con la sangre
de Su propio Hijo (Hechos 20:28); la que Cristo ama, sustenta, y cuida (Efesios 5:25, 29), y la que un día
El se presentará a sí mismo santa y sin mancha en toda su gloria (v. 27). Edificar Su iglesia constituye la
obra principal de Cristo en el mundo hoy (Mateo 16:18) por Su repartimiento de dones espirituales
(Efesios 4:12). De modo que, el ejercicio de esos dones por parte de los creyentes nos une a lo que Cristo
está haciendo hoy en día.

I. EL SIGNIFICADO DE LA PALABRA “IGLESIA”


A. Las palabras empleadas en inglés y en español
La palabra con que se designa a la iglesia en inglés, “church” (lo mismo que su forma afín “kirk”), se
deriva de la palabra griega kyriakon, que significa “perteneciente al Señor”. Los únicos dos usos de esa
palabra en el Nuevo Testamento ocurren en 1 Corintios 11:20 (refiriéndose a la Cena del Señor) y
Apocalipsis 1:10 (respecto al día del Señor). La palabra llegó a ser usada para referirse a otras cosas como
el lugar, las personas, la denominación, o el país relacionados con el grupo que pertenecía al Señor. En
cuanto a la palabra “iglesia”, que empleamos nosotros, es una adaptación castellana de la griega ekklesía.

B. La palabra hebrea
La palabra hebrea gahal simplemente significa una asamblea y usualmente se traduce ekklesía en la
Septuaginta. Sin embargo, no se refiere necesariamente a una asamblea religiosa (Génesis 28:3; 49:6;
Salmo 26:5), ni aun a una congregación de seres humanos (Salmo 89:5), aunque con mayor frecuencia sí
se refiere a la congregación de Israel.

C. La palabra griega
La palabra griega, ekklesía, significaba una asamblea y se usaba en un sentido político, no religioso. No
se refería a las personas sino a la reunión; en otras palabras, a las personas no se les consideraba una
ekklesía cuando no estaban formalmente reunidas. La palabra se usa en este mismo sentido secular dos
veces en el Nuevo Testamento (Hechos 19:32, 41).
Cuando se usa la misma palabra griega en el Nuevo Testamento, adquiere aspectos más ricos y amplios
que en su sentido básico secular. Por ejemplo, las personas mismas, ya sea que estén reunidas o no, son la
ekklesía. No obstante, la palabra como se emplea en el Nuevo Testamento todavía retiene el significado
básico de una asamblea, y no adquiere un supuesto significado teológico (basado en la división de la
palabra en dos partes, “llamar” y “de fuera”) de un pueblo “llamado hacia fuera”. Si uno se basara en la
etimología para traducir la palabra, entonces la traducción correcta sería “llamados junto” [convocados],
no “llamados fuera” [separados].

II. LOS USOS DE LA PALABRA EN EL NUEVO TESTAMENTO


Si la palabra “iglesia” tiene que ver con un grupo reunido, entonces los diferentes usos del concepto en el
Nuevo Testamento debieran decirnos (a) cuál es el carácter o la naturaleza del grupo reunido, y (b) cuál es
el propósito y las razones para que esta asamblea particular se congregue.
A. Hechos 19:39, 41
Aquí el grupo estaba compuesto de personas paganas cuya razón para congregarse fue la de ejercer un
privilegio político.
Los ciudadanos de esta ciudad libre tenían derecho a reunirse en asamblea legislativa, lo cual hacían tres
veces al mes. Pero en esta ocasión la reunión era ilegal, lo cual Roma no miraría con beneplácito; de allí
la urgencia del escribano de la ciudad en lograr que las personas se dispersasen.
B. Hechos 7:38
Aquí el grupo se componía de israelitas reunidos para recibir la ley de Dios por medio de Moisés. El
carácter de este grupo era mixto en cuanto a lo espiritual—algunos personal e individualmente tenían la
relación correcta con Dios, pero no todos—. Por supuesto, todos estaban relacionados con El en el sentido
de que Dios había escogido a la nación, pero esto de por sí no garantizaba la salvación espiritual de cada
persona. Esta vocación nacional fue la razón para la reunión al pie del monte Sinaí.
C. Efesios 1:22-23
Aquí la asamblea es la iglesia, la cual es el cuerpo de Cristo. El carácter de este grupo es cien por ciento
regenerado, y la razón de su existencia es el ministerio bautismal del Espíritu Santo, que coloca en este
cuerpo de Cristo a los que creen (1 Corintios 12:13). Esta iglesia es universal: incluye a todos los
creyentes, los que se hallan en todo lugar de la tierra y los que están en el cielo (Hebreos 12:23).
Hablando estrictamente, la iglesia no es invisible, porque muchos de sus miembros son bien visibles. Una
designación mejor es la iglesia universal.

D. Romanos 16:5; 1 Corintios 16:19; Colosenses 4:15; Filemón 2


Aquí hay grupos de personas que están bien localizados: iglesias en casas. La naturaleza de las personas
(por lo menos en los tiempos del Nuevo Testamento) sería la de aquellos que profesaban haber aceptado a
Cristo como Salvador. En algunos casos, aquellos que solamente profesaban pero que no poseían la
salvación habrían estado asociados con las iglesias locales (1 Juan 2:19; Apocalipsis 3:20), pero para que
fueran iglesias cristianas, las personas tendrían que haber hecho una profesión de fe en Cristo. ¿Cuáles
eran las características de estas iglesias? Una era geográfica; otra, profesión de fe en Cristo; otra, la
práctica del bautismo y la Cena del Señor; otra, el ejercicio de responsabilidades de grupo, como la
enseñanza.

III. EL CONCEPTO NEOTESTAMENTARIO DE LA


IGLESIA
Se ha hecho costumbre centrar el concepto de la iglesia en la iglesia universal y la local. Algunas veces,
erróneamente a las categorías se les llaman invisible y visible. Pero aun “universal” y “local” no parecen
abarcar todas las facetas del concepto.
Universal sirve bien como clasificación para el cuerpo de Cristo, ya sea en la tierra o en el cielo (Hebreos
12:23). Pero local necesita más definición. ¿Cuánto de local tiene la iglesia local?
Como hemos visto, algunas veces local significa la iglesia en una casa. Esta es una unidad tan local como
se ilustra en el Nuevo Testamento. Pero la iglesia en Corinto (1 Corintios 1:2) tiene que haber incluido
varias iglesias de casa. Sin embargo era “local” en que estaba confinada a la ciudad de Corinto y no
incluía a otras iglesias que había en Grecia, como la iglesia en Tesalónica (1 Tesalonicenses 1:1).
Pero la “iglesia”, en singular, se usa para designar varias iglesias en una región (Hechos 9:31). Aquí “la
iglesia” incluía a grupos por toda Judea, Galilea y Samaria. Cuando Pablo persiguió a la iglesia en los
días previos a su conversión, él no se limitó a una iglesia local (1 Corintios 15:9). Así que, el concepto de
la iglesia local puede incluir un grupo en una sola casa, los varios grupos en una ciudad, o aun los muchos
grupos en una región. Aun con estas categorías, 1 Corintios 10:32 puede que no se aplique a alguna de
ellas. No ser tropiezo a la iglesia de Dios tiene que referirse a grupos visibles, pero no a todos ellos aun en
una región. Tiene que concernir a cualquier aspecto de la iglesia visible con la cual uno esté en contacto.
Es evidente que necesitamos más que la acostumbrada doble categorización de la iglesia—universal y
local—. Existen: (1) la iglesia universal —todos los creyentes en el cielo y en la tierra; (2) la iglesia
visible —iglesias locales en varias áreas, especialmente aquellas que yo conozco; (3) la iglesia local—la
asamblea particular con la que yo tengo mi relación principal y permanente. En realidad, cada creyente
pertenece a estos tres aspectos de la iglesia, y 1 Corintios 10:32 se aplica a cualquiera de ellos con el cual
uno tenga contacto en cualquier tiempo.

IV. OTROS CONCEPTOS DE LA IGLESIA


A. El concepto católico romano
El concepto católico romano de la iglesia es que “es una sociedad divinamente constituida compuesta de
miembros de cada raza y nación, en la que todos mantienen la misma fe, usan los mismos sacramentos
como medios de santidad y salvación, y son gobernados benignamente por el sucesor de San Pedro, el
vicario de Cristo, el papa…” (C.B. Pallen, “Catholic Church,” The New Catholic Dictionary [N.Y.: The
Universal Knowledge Foundation, 1929], pp. 180–1).

B. El concepto anglicano
El concepto anglicano declara que “la iglesia visible de Cristo es una congregación de hombres fieles, en
la cual se predica la Palabra de Dios, y donde los sacramentos se ministran apropiadamente de acuerdo a
la ordenanza de Cristo…” (Artículo XIX de los treinta y nueve artículos de la Iglesia de Inglaterra). La
Iglesia Anglicana está, por supuesto, bajo el liderazgo temporal del rey, o reina, de Inglaterra.

C. El concepto de la Iglesia Reformada


La Confesión de Fe de Westminster afirma: “La iglesia católica o universal, la cual es invisible, se
compone del número total de los elegidos…. La iglesia visible, la cual también es católica o universal
bajo el Evangelio, consta de todos los que por el mundo profesan la religión verdadera, juntos con sus
hijos…” (cap. XXV).
D. El concepto bautista
La confesión de fe bautista de 1646 dice que “la iglesia es una compañía de santos visibles, llamados y
separados del mundo por la Palabra y el Espíritu de Dios, a la profesión visible de la fe del Evangelio;
siendo bautizados en esa fe” (Artículo XXXIII). Algunos bautistas contemporáneos reconocen la realidad
de la iglesia universal y otros no.
2. El origen de la iglesia
EL ORIGEN DE LA IGLESIA.

Preparado por el profesor: Osmany Cruz


Ferrer.

PENSAMIENTO

 “Amad a esta Iglesia,


permaneced en esta Iglesia,
sed vosotros esta
Iglesia” (San Agustín).
EL ORIGEN DE LA IGLESIA.
 Un tema de discusión que
siempre ha ocupado a
estudiosos y a teólogos es el
momento exacto del nacimiento
de la iglesia. Las respuestas han
sido muy diversas. En esta
sección presentaremos los
distintos puntos de vista y
también, las conclusiones más
ortodoxas.

PRIMERA POSICIÓN. LA IGLESIA COMENZÓ


CUANDO ADÁN CREYÓ A LA PROMESA DE
GÉNESIS 3:15.
 Adán y Eva creyeron en la
promesa de redención hecha por
Dios, lo que los constituyó
inmediatamente en la primera
iglesia cristiana.
“Si damos por sentado, como
indudablemente podemos hacerlo,
que Adán y Eva creyeron la promesa
de Dios de que la serpiente heriría a
la simiente de la mujer en el calcañar,
pero que la simiente de la mujer la
heriría la cabeza de la serpiente (…)
entonces se puede afirmar que ellos
constituyeron la primera iglesia
cristiana” (citado por Earl Radmacher
en The nature of the Church, pág.
193, 194).
Refutación
 Jesús llamaría a la iglesia resultante de su obra, “mi iglesia”,
lo que indica conocimiento y relación de esa iglesia con él
y Adán y Eva no tenían una experiencia con Cristo, ellos no
tenían una revelación de Jesús tal cual la tenemos nosotros
ahora.
 La promesa creída no significa que se ha de recibir.
(Hebreos 11).
 Había un tiempo para que se cumpliera la promesa, ese
tiempo abriría el camino a la formación de la iglesia. (Gá.
4:4; Ef. 1:10).

SEGUNDA POSICIÓN. LA IGLESIA TUVO SU


INICIO EN ABRAHAM SEGÚN GÉNESIS 12.

 Esta posición es defendida por


los llamados “teólogos del
pacto”.
 La teología del pacto es
aquella que comprende todos
los planes de Dios, como
consecuencia de pactos
específicos entre él y su pueblo
escogido.
 Israel fue la iglesia del Antiguo
Testamento, así como hoy, la
iglesia es el Israel del Nuevo
Testamento.
Refutación
 Dios hace distinción en sus tratos con relación a Israel y a
la iglesia.
 Israel fue escogido por Dios como un pueblo a través del
cual vendrían el pacto, la ley, las promesas de Dios y el
salvador Jesucristo (Ro. 9:4).
 La iglesia, sin embargo, no proviene de un pueblo
determinado, sino que está compuesta por todos los que
han confesado a Cristo como Señor en cualquier parte
del mundo (Ef. 2:14).
 Escatológicamente Israel no resucitará con la iglesia en el
arrebatamiento, sino después de la gran tribulación. Israel
no comparecerá ante el tribunal de Cristo, sino después,
delante de Cristo en su segunda venida. Ni participará en
las bodas del cordero porque ella no es la esposa, sino la
iglesia.

TERCERA POSICIÓN. LA IGLESIA


COMENZÓ CON JUAN EL BAUTISTA.
 Los que sostienen esta
posición argumentan que la
iglesia comenzó con el
bautismo de Juan (Mt. 3).
 Un bautismo que luego Jesús
indicaría a sus seguidores que
practicaran en nombre del
Padre, del Hijo y del Espíritu
Santo.
Refutación

 El bautismo no te inicia en la vida cristiana, sino la


fe.
 El bautismo es un acto de obediencia que señala
a todos de que eres un cristiano y por tanto, eres
parte de la iglesia.
 La iglesia de Cristo solo puede ser comprendida a
la luz de la obra completa de redención en Cristo
y Juan apenas estaba anunciando que vendría
el Señor (Jn. 1:36).

CUARTA POSICIÓN. LA IGLESIA


COMENZÓ CON EL LLAMAMIENTO DE
LOS DOCE APÓSTOLES.
 Los defensores de esta línea
de pensamiento creen ver el
nacimiento de la iglesia en la
selección de los apóstoles
por parte de Jesús.
 Según esta postura, había un
cuerpo de hombres
organizados y Cristo como
cabeza de ese grupo.
Refutación

 Esta postura toma el término ekklesía, como


asamblea solamente, pero Jesús piensa en su iglesia
con un cometido más profundo y misiológico.
 La iglesia de Cristo debía tener la presencia de Jesús
a través de la morada del Espíritu Santo, y hasta el
cumplimiento de esa promesa no podría existir la
iglesia de Cristo como tal.
 Por eso el Señor insistió en que no se fueran de
Jerusalén hasta recibir la promesa del Padre, la cual
habían oído de su propia boca (Hch. 1:4).

QUINTA POSICIÓN. LA IGLESIA


COMENZÓ CON LA CONFESIÓN DE
PEDRO EN MATEO 16:18.
 La base para los que
defienden esta posición
estriba en que ésta es la
primera vez que se
menciona a la iglesia, lo que
marca su evidente
comienzo.
 Los que opinan así, no se
percatan que Jesús está
hablando en tiempo futuro
(edificaré mi iglesia), el texto
que usan de bastión
teológico es el mismo que
desautoriza su creencia.
Refutación

 Jesús está hablando en tiempo futuro, “edificaré


mi iglesia”, el texto que usan de bastión teológico
es el mismo que desautoriza su creencia: “Y yo
también te digo, que tú eres Pedro, y sobre esta
roca edificaré mi iglesia; y las puertas del Hades
no prevalecerán contra ella” (Mt. 16:18).

SEXTA POSICIÓN. LA IGLESIA COMENZÓ


CON LA ÚLTIMA CENA DE JESÚS CON
SUS DISCÍPULOS.

 Los proponentes de este


enfoque creen ver que, la
institución de la Eucaristía
por parte de Cristo, es la
evidencia del comienzo de
la iglesia.
Refutación

 Jesús no dijo nada acerca de que la cena


tendría esa implicación aunque la explicó
perfectamente. Dijo que la celebraran en
memoria de él, pero no dijo que esta ordenanza
les iniciaba como su iglesia.
 Este enfoque tiene claros visos sacramentales
otorgándole a la cena del Señor poder
soteriológico.
 Esto según Pablo es una de las maneras de
pensar más allá de lo que está escrito (1 Co. 4:6).

SÉPTIMA POSICIÓN. LA IGLESIA


COMENZÓ CON LA MUERTE DE JESÚS.

 La base para defender esta


posición se encuentra en la
frase de Jesús “consumado es”
(Jn. 19:30).
Refutación

 Es cierto que el sacrificio había sido consumado,


pero la resurrección y ascensión de Jesús eran
fundamentales para completar su misión
redentora.
 Pablo escribió que si Cristo no hubiera resucitado,
la fe estaría incompleta y sería vana (1 Co. 15:17).

OCTAVA POSICIÓN. LA IGLESIA SE


INICIÓ CON LA RESURRECCIÓN DE
JESUCRISTO.

 El postulado fundamental
que defienden los voceros de
esta posición, es que sólo
faltaba la resurrección para
completar la obra redentora
de Cristo y la creación de su
iglesia.
 Los que así razonan olvidan
que la exaltación de Jesús a
los cielos era parte vital de su
obra salvífica (He. 7:25).
Refutación

 La exaltación de Jesús a los cielos era parte vital


de su obra salvífica: “por lo cual puede también
salvar perpetuamente a los que por él se
acercan a Dios, viviendo siempre para interceder
por ellos (He. 7:25).
 No puede existir la iglesia si Cristo no asciende
victorioso a los cielos.

NOVENA POSICIÓN. LA IGLESIA TUVO


SU COMIENZO EL DÍA DE PENTECOSTÉS.

 Esta es la posición más favorecida por la mayoría


de los teólogos y el enfoque que reúne y concilia
buena parte de las ideas relacionadas al
nacimiento de la iglesia.
 La iglesia no puede existir
sin la muerte, resurrección y
ascensión de Cristo. Pero
tampoco puede vivir y
sobrevivir sin la morada del
Espíritu Santo a cada
creyente genuino lo
distingue el hecho de ser
habitáculo de la deidad.

 Al tener lugar el
derramamiento del Espíritu en
Pentecostés, la promesa de
Jesús se cumple y cada
persona renacida en Cristo es
templo de Dios:
“¿O ignoráis que vuestro cuerpo
es templo del Espíritu Santo, el
cual está en vosotros, el cual
tenéis de Dios, y que no sois
vuestros?” (1 Co 6:19).
 Es el Espíritu Santo quien
regenera, sella y bautiza al
creyente.
 No se puede concebir el
nacimiento de la iglesia sin
la morada y la continua
obra del Espíritu en el
creyente.

SOMOS LA IGLESIA NADA PUEDE


CONTRA NOSOTROS

FIN
3. Las figuras de la
iglesia
LAS FIGURAS DE
LA IGLESIA.

Preparado por el profesor: Osmany Cruz


Ferrer.

PENSAMIENTO

 La Iglesia es un yunque que


ha gastado todos los
martillos” (Teodoro Beza).
 Para ilustrar la naturaleza y
relevancia de la iglesia, la
Biblia usa coloridas imágenes
retóricas que nos ayudan en la
comprensión de este
organismo vivo, “columna y
baluarte de la verdad” (1 Ti.
3:15). Examinemos algunas de
ellas.

EL CUERPO DE CRISTO.
 Indica que la iglesia no es
una institución humana, sino
que tiene una procedencia
divina.
 Coloca a la iglesia como
obradora, como ente que
responde a la cabeza, que
es Cristo.
 Esta metáfora también
insiste en la unidad e
interdependencia que debe
prevalecer entre los
miembros de este cuerpo.
LA ESPOSA DE CRISTO
 Jesús se refirió así mismo como el
esposo (Mr. 2:20), lo que ilustra su
relación estrecha con la iglesia y
su insondable amor por ella (Ef.
5:25-32).
 La metáfora en sí, exalta la
relación de intimidad que existe
entre la iglesia (la esposa) y Cristo
(el esposo).
 Pablo usa esta figura alentando a
la iglesia a la fidelidad y a la
pureza: “Porque os celo con celo
de Dios; pues os he desposado
con un solo esposo, para
presentaros como una virgen
pura a Cristo” (2 Co. 11:2).

PÁMPANOS.
 La figura de los pámpanos para
referirse a la iglesia, ilustra su
dependencia de la vid, que es
Cristo.
 Los pámpanos deben su existencia
y subsistencia a la vid y no a sí
mismos. Jesús dijo: “Permaneced en
mí, y yo en vosotros. Como el
pámpano no puede llevar fruto por
sí mismo, si no permanece en la vid,
así tampoco vosotros, si no
permanecéis en mí. Yo soy la vid,
vosotros los pámpanos; el que
permanece en mí, y yo en él, éste
lleva mucho fruto; porque
separados de mí nada podéis
hacer” (Jn. 15:4,5).
UN REBAÑO.
 Esta figura es usada por Jesús
frecuentemente y por los
apóstoles en sus referencias al
pueblo de Dios, la iglesia.
 El Señor se llama a sí mismo el
buen pastor de este rebaño
(Jn. 10).
 Todos los que pertenecen a
esta manada, están
debidamente protegidos y
apacentados (Lc. 12:32).
 Dios conoce a cada uno de
ellos por su nombre y cada
oveja del redil conoce
exactamente quién es el
pastor.

No somos el pastor

Somos las ovejas del pastor


NACIÓN SANTA.
 Esta expresión se refiere a la elección por Dios
de un pueblo para sí.
 Un pueblo separado de las demás naciones
por su condición espiritual y moral.
 Una nación sin delimitaciones geográficas,
lingüísticas, culturales o sociales.
 Un pueblo con un alto cometido misiológico.
Pedro así lo reflejó en su primera epístola
universal: “Mas vosotros sois linaje escogido,
real sacerdocio, nación santa, pueblo
adquirido por Dios, para que anunciéis las
virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas
a su luz admirable; vosotros que en otro tiempo
no erais pueblo, pero que ahora sois pueblo de
Dios; que en otro tiempo no habíais alcanzado
misericordia, pero ahora habéis alcanzado
misericordia” (1 P. 2:9,10).

UN EDIFICIO.
 Pablo usa esta figura en su
Carta a los Efesios para referirse
a la armonía de la iglesia, cuyo
fundamento es Cristo y la
enseñanza de los apóstoles y
profetas:

“Edificados sobre el fundamento


de los apóstoles y profetas, siendo
la principal piedra del ángulo
Jesucristo mismo, en quien todo el
edificio, bien coordinado, va
creciendo para ser un templo
santo en el Señor; en quien vosotros
también sois juntamente edificados
para morada de Dios en el Espíritu”
(Ef. 2:20-22).
SACERDOTES DE CRISTO
 El Antiguo Testamento
concebía el sacerdocio sólo
dentro de un grupo reducido
de personas dentro del
pueblo de Israel, que
oficiaban sacrificios a Dios en
representación de sus
hermanos.
 Cristo, con su obra redentora,
nos hizo a todos los
creyentes sacerdotes para
Dios, su Padre. “Y nos hizo
reyes y sacerdotes para Dios,
su Padre; a él sea gloria e
imperio por los siglos de los
siglos. Amén” (Ap. 1:6).

 1. Un sacerdote era un abridor


de caminos (Josué 3:13).
 “Y cuando las plantas de los
pies de los sacerdotes que
llevan el arca de Jehová, Señor
de toda la tierra, se asienten en
las aguas del Jordán, las aguas
del Jordán se dividirán; porque
las aguas que vienen de arriba
se detendrán en un montón.”
 2. Un sacerdote era la
autoridad espiritual en la
nación (Éxodo 38:21)
 “Estas son las cuentas del
tabernáculo, del
tabernáculo del testimonio,
las que se hicieron por orden
de Moisés por obra de los
levitas bajo la dirección de
Itamar hijo del sacerdote
Aarón.”

 3. Un sacerdote era un maestro de la


Palabra (Nehemías 8:1-3)
 “Y se juntó todo el pueblo como un
solo hombre en la plaza que está
delante de la puerta de las Aguas, y
dijeron a Esdras el escriba que
trajese el libro de la ley de Moisés, la
cual Jehová había dado a Israel. 2Y
el sacerdote Esdras trajo la ley
delante de la congregación, así de
hombres como de mujeres y de
todos los que podían entender, el
primer día del mes séptimo. 3Y leyó
en el libro delante de la plaza que
está delante de la puerta de las
Aguas, desde el alba hasta el
mediodía, en presencia de hombres
y mujeres y de todos los que podían
entender; y los oídos de todo el
pueblo estaban atentos al libro de la
ley.”
 4. Un sacerdote era un
mediador (Joel 2:17)
 “Entre la entrada y el altar
lloren los sacerdotes ministros
de Jehová, y digan:
Perdona, oh Jehová, a tu
pueblo, y no entregues al
oprobio tu heredad, para
que las naciones se
enseñoreen de ella. ¿Por qué
han de decir entre los
pueblos: Dónde está su
Dios?”

EXISTÍAN PREMISAS PARA QUE EL


SACERDOCIO FUERA AUTENTICO.
 1. Un sacerdote se vestía diferente
(Lev. 1:5-9)
 “Y dijo Moisés a la congregación:
Esto es lo que Jehová ha
mandado hacer. 6Entonces Moisés
hizo acercarse a Aarón y a sus
hijos, y los lavó con agua. 7Y puso
sobre él la túnica, y le ciñó con el
cinto; le vistió después el manto, y
puso sobre él el efod, y lo ciñó
con el cinto del efod, y lo ajustó
con él. 8Luego le puso encima el
pectoral, y puso dentro del mismo
los Urim y Tumim. 9Después puso la
mitra sobre su cabeza, y sobre la
mitra, en frente, puso la lámina de
oro, la diadema santa, como
Jehová había mandado a
Moisés.”
 2. Un sacerdote tenía que
identificarse con un carnero para
consagración (Levítico 8:22,24)
 “Después hizo que trajeran el otro
carnero, el carnero de las
consagraciones, y Aarón y sus hijos
pusieron sus manos sobre la cabeza
del carnero. Y lo degolló; y tomó
Moisés de la sangre, y la puso sobre
el lóbulo de la oreja derecha de
Aarón, sobre el dedo pulgar de su
mano derecha, y sobre el dedo
pulgar de su pie derecho. Hizo
acercarse luego los hijos de Aarón,
y puso Moisés de la sangre sobre el
lóbulo de sus orejas derechas,
sobre los pulgares de sus manos
derechas, y sobre los pulgares de
sus pies derechos; y roció Moisés la
sangre sobre el altar alrededor.”

3. Un sacerdote debía ofrecer


un holocausto de adoración
(Levítico 8:18,19)
 “Después hizo que trajeran el
carnero del holocausto, y
Aarón y sus hijos pusieron sus
manos sobre la cabeza del
carnero; y lo degolló; y roció
Moisés la sangre sobre el altar
alrededor.”
 4. Un sacerdote debía tener
un becerro para expiación
(Levítico 8:14,15).
 “Luego hizo traer el becerro
de la expiación, y Aarón y
sus hijos pusieron sus manos
sobre la cabeza del becerro
de la expiación, 15y lo
degolló; y Moisés tomó la
sangre, y puso con su dedo
sobre los cuernos del altar
alrededor, y purificó el altar;
y echó la demás sangre al
pie del altar, y lo santificó
para reconciliar sobre él.

 6. Debía ofrecer panes sin


levadura (Levítico 8:26,27).
 “Y del canastillo de los panes
sin levadura, que estaba
delante de Jehová, tomó una
torta sin levadura, y una torta
de pan de aceite, y una
hojaldre, y las puso con la
grosura y con la espaldilla
derecha. Y lo puso todo en las
manos de Aarón, y en las
manos de sus hijos, e hizo
mecerlo como ofrenda
mecida delante de Jehová.”
UNA FAMILIA
 Jesús nos introduce a la relación familiar,
enseñándonos a orar “Padre nuestro que estás en los
cielos” (Mt. 6:9; Lc. 11:2).
 Pablo lo ratifica en Romanos 8:15 (Abba Padre).
 Jesús es el hermano mayor (Hebreos 2:11,12).
 Como las familias reciben una herencia del padre, así
espera la iglesia la herencia prometida por el Padre
celestial (Rom. 8:17).
 Como las buenas familias observan un cierto modelo
de conducta, así hay una norma de conducta dada
para la familia de Dios (I Ti. 3:15)

LA IGLESIA COMO UN EQUIPO DE


ATLETAS

 “Que estéis firmes en un mismo espíritu, combatiendo


unánimes por la fe del evangelio” (Fil. 1:27).
 La palabra griega traducida “combatiendo unánimes” es
sunathleo, que significa: competir como y junto a otros
atletas.
 Característica de un equipo de atletas:
1. Dedicación.
2. Trabajo en equipo.
3. Cooperación.
4. Negación propia,
5. dominio propio
6. Unidad.
LA IGLESIA COMO EL EJÉRCITO DEL
SEÑOR

 Somos la iglesia militante, que milita, que es parte de un


ejército.
 Ninguno que milita se enreda en los negocios de la vida, a
fin de agradar a aquel que lo tomó por soldado (2 Ti. 2:4).
 Porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino
poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas (2 Co.
10:4).
 Porque no tenemos lucha contra sangre y carne,
sino contra principados, contra potestades, contra los
gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes
espirituales de maldad en las regiones celestes (Ef. 6:12)
LA IGLESIA COMO
ADMINISTRADOR, MAYORDOMO

 Así, pues, téngannos los hombres por servidores


de Cristo, y administradores de los misterios de
Dios (1 Co. 4:1).
Las palabras principales de la vida de la iglesia son
palabras de servidumbre, relacionadas con ser
siervos: “ministrar” o “ministerio” del griego,
diakonos, diakonia que significa “siervo, servicio”,
originalmente significaba “uno que sirve mesas” (Jn.
12:26); “siervo” de doulos, que significa “esclavo”
(Mt. 24:45; 25:14; Gál. 5:13,); “mayordomo” de
oikonomos, que era el “siervo que administraba la
casa” (Lc. 12:42; I Cor. 4:1, 2; Tit. 1:7; I P. 4:10).

LA IGLESIA COMO LA COLUMNA Y


BALUARTE DE VERDAD.

 “Para que si tardo, sepas cómo debes conducirte


en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios
viviente, columna y baluarte de la verdad” (I Ti.
3:15).

 La iglesia debe proteger la sana doctrina y


levantarla en alto por medio de la proclamación
del evangelio y una conducta ejemplar.
LA IGLESIA COMO EL SANTUARIO
DEL SEÑOR.

 (1) El Señor no mora en edificios hechos con


manos, sino en su pueblo como una iglesia (Hch.
17:24; I Cor. 3:16; I R. 8:27; Is. 66:1, 2),
 (2) La iglesia es el santuario del Señor; El mora
donde su pueblo esta congregado en su nombre
(Mt. 18:20)
 (3) el templo era un santuario, un edificio santo
separado, dedicado exclusivamente a la
adoración y el servicio de Dios; asimismo la iglesia
es el templo del Espíritu Santo, el santuario donde
mora el Señor; por eso, los miembros de la iglesia
son llamados “santos” (I Cor. 3:17; Ef. 2:21, 22; I P.
2:4, 5).

FIN
LAS FIGURAS DE LA IGLESIA (Por profesor Osmany Cruz en su libro Escuela Bíblica, Volumen
II, cursos doctrinales).
Para ilustrar la naturaleza y relevancia de la iglesia, la Biblia usa coloridas imágenes retóricas
que nos ayudan en la comprensión de este organismo vivo, “columna y baluarte de la verdad”
(1 Ti. 3:15). Examinemos algunas de ellas.

A. EL CUERPO DE CRISTO. En las Escrituras, la iglesia es llamada “el cuerpo de Cristo” (Col.
1:18). Esta imagen tiene un fuerte significado. Indica que la iglesia no es una institución
humana, sino que tiene una procedencia divina. A la par, coloca a la iglesia como obradora,
como ente que responde a la cabeza, que es Cristo. Siguiendo el significado que encierra la
imagen bíblica, podemos decir que Jesús ha decidido ir, hablar y tocar a la gente mediante la
iglesia que es su cuerpo. Esta figura ilustra la gran oportunidad y la responsabilidad que como
creyente tenemos de representar a Jesucristo. Esta metáfora también insiste en la unidad e
interdependencia que debe prevalecer entre los miembros de este cuerpo: “Así nosotros,
siendo muchos, somos un cuerpo en Cristo, y todos miembros los unos de los otros” (Ro. 12:5).
“Vosotros, pues, sois el cuerpo de Cristo, y miembros cada uno en particular” (1 Co. 12:27). Ver
también, Efesios 4:12; 5:23.

B. LA ESPOSA DE CRISTO. Jesús se refirió así mismo como el esposo (Mr. 2:20), lo que ilustra su
relación estrecha con la iglesia y su insondable amor por ella (Ef. 5:25-32). La metáfora en sí,
exalta la relación de intimidad que existe entre la iglesia (la esposa) y Cristo (el esposo). Pablo
usa esta figura alentando a la iglesia a la fidelidad y a la pureza: “Porque os celo con celo de
Dios; pues os he desposado con un solo esposo, para presentaros como una virgen pura a
Cristo” (2 Co. 11:2). En el libro de Apocalipsis se hace referencia a las bodas del Cordero con su
iglesia, el evento escatológico de celebración más esperado por la cristiandad de todos los
tiempos (Ap. 19:7-9). En este mismo libro, la iglesia es llamada varias veces la desposada, la
esposa del cordero: “Vino entonces a mí uno de los siete ángeles que tenían las siete copas
llenas de las siete plagas postreras, y habló conmigo, diciendo: Ven acá, yo te mostraré la
desposada, la esposa del Cordero” (Ap. 21:9). “Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye,
diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente”
(Ap. 22:17).

C. PÁMPANOS. La figura de los pámpanos para referirse a la iglesia, ilustra su dependencia de


la vid, que es Cristo. Los pámpanos deben su existencia y subsistencia a la vid y no a sí mismos.
Jesús dijo: “Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por
sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí. Yo soy la
vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto;
porque separados de mí nada podéis hacer” (Jn. 15:4,5).

D. UN REBAÑO. Esta figura es usada por Jesús frecuentemente y por los apóstoles en sus
referencias al pueblo de Dios, la iglesia. El Señor se llama a sí mismo el buen pastor de este
rebaño (Jn. 10). Todos los que pertenecen a esta manada, están debidamente protegidos y
apacentados (Lc. 12:32). Dios conoce a cada uno de ellos por su nombre y cada oveja del redil
conoce exactamente quién es el pastor.
E. NACIÓN SANTA. Esta expresión se refiere a la elección por Dios de un pueblo para sí. Un
pueblo separado de las demás naciones por su condición espiritual y moral. Una nación sin
delimitaciones geográficas, lingüísticas, culturales o sociales. Un pueblo con un alto cometido
misiológico. Pedro así lo reflejó en su primera epístola universal: “Mas vosotros sois linaje
escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las
virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable; vosotros que en otro tiempo
no erais pueblo, pero que ahora sois pueblo de Dios; que en otro tiempo no habíais alcanzado
misericordia, pero ahora habéis alcanzado misericordia” (1 P. 2:9,10).

F. SACERDOTES DE CRISTO. El Antiguo Testamento concebía el sacerdocio sólo dentro de un


grupo reducido de personas dentro del pueblo de Israel, que oficiaban sacrificios a Dios en
representación de sus hermanos. Cristo, con su obra redentora, nos hizo a todos los creyentes
sacerdotes para Dios, su Padre. “Y nos hizo reyes y sacerdotes para Dios, su Padre; a él sea
gloria e imperio por los siglos de los siglos. Amén” (Ap. 1:6). Se precisa de todos los que han
sido redimidos, que ejerzan su sacerdocio en completa santidad, separándose del sistema de
cosas de este mundo y de toda actitud que pueda descalificarnos de este glorioso oficio
espiritual. La exhortación bíblica es esta: “Vosotros también, como piedras vivas, sed
edificados como casa espiritual y sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales
aceptables a Dios por medio de Jesucristo” (1 P. 2:5-6).

G. UN EDIFICIO. Pablo usa esta figura en su Carta a los Efesios para referirse a la armonía de la
iglesia, cuyo fundamento es Cristo y la enseñanza de los apóstoles y profetas: “Edificados
sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal piedra del ángulo
Jesucristo mismo, en quien todo el edificio, bien coordinado, va creciendo para ser un templo
santo en el Señor; en quien vosotros también sois juntamente edificados para morada de Dios
en el Espíritu” (Ef. 2:20-22). La iglesia es como una gran construcción armoniosa que se erige
imponente en el mundo, teniendo en su fundamento por piedra principal, a Jesucristo mismo.
Pedro se refiere a cada creyente en particular como piedras vivas en la colosal edificación de
Cristo, que es la iglesia (1 P 2:5). Como edificio alto y consolidado en un fundamento seguro,
debemos dar cabida a todos los que quieran formar parte de esta edificación espiritual. Nos ha
de dominar un espíritu inclusivo y gregario.
METÁFORAS DE LA IGLESIA
Cada metáfora de la iglesia en el NT revela una faceta distinta de su naturaleza. Un repaso
de éstas ampliará la comprensión de su naturaleza. De los escritos de Pablo, Pedro y Juan
surgen casi la totalidad de las metáforas.
Metáforas paulinas. La metáfora predilecta de Pablo, la iglesia como el cuerpo de Cristo
(Ef. 5:23, 30; Col. 1:18, etc.), señalaba a éste como la cabeza y a cada creyente como un
miembro, sometido y obediente a su voluntad, relacionándose unos a otros en armonía.
La expresión esposa de Cristo (Ef. 5:23–32; comp. Apoc. 19:7; 21:2, 9; 22:17) habla de una
relación íntima, amorosa, de fidelidad y obediencia. El término rebaño (Hech. 20:28)
comunica la idea de la dependencia de las ovejas al pastor para su protección y sustento y,
a la vez, su deber de rendirle a él el producto de su vida. Las dos figuras, columna y
fundamento de la verdad (1 Tim. 3:15), expresan el concepto de firmeza y defensa.
Casa de Dios (1 Tim. 3:15), templo de Dios (1 Cor. 3:16) y edificio (Ef. 2:20–22) son
expresiones que hablan de la morada de Dios en medio de su iglesia y el deber de ésta de
edificarse o crecer en la estatura de la plenitud de Cristo (comp. Ef. 4:12–16). El término
familia de Dios (Ef. 2:19) sugiere relación filial, con Dios como el Padre, Jesucristo como
nuestro hermano mayor y todos los creyentes como hermanos y hermanas, unos con
otros.
Metáforas petrinas. Pedro se refiere a la iglesia con una serie de metáforas ricas en su
significado. Dos de éstas se encuentran en 1 Pedro 2:5. Es una casa espiritual, parecida a
la expresión paulina casa de Dios, o familia de Dios, con énfasis en su naturaleza espiritual
y la implicación de que es la morada de Dios. También es un sacerdocio santo, dando
énfasis al ministerio activo de intercesión de parte de los creyentes a favor de otros y su
calidad de “separados” moral y éticamente.
Cinco metáforas más de la iglesia se encuentran en 1 Pedro 2:9, 10. El término linaje
escogido probablemente es una cita del AT (comp. pueblo escogido, Isa. 43:20) y da
énfasis a la acción de Dios de escoger a su pueblo de entre las naciones, no porque lo
merecía, sino, como él mismo dice, para proclamar mi alabanza (Isa. 43:21). Real
sacerdocio amplía el concepto de sacerdocio, relaciónándolo con el Rey y su reino. Los
miembros son funcionarios del Rey (comp. Exo. 19:6). Nación santa apunta a un conjunto
de ciudadanos, unidos y sometidos al mismo gobierno, los cuales se han separado de otras
naciones (comp. Exo. 19:5). Pueblo adquirido, o literalmente “pueblo por adquisición”, se
refiere al precio pagado en la sangre de Jesucristo (comp. 1 Cor. 6:20; Ef. 5:25). Pueblo de
Dios (comp. metáforas paulinas casa de Dios y templo de Dios) es una de las expresiones
más frecuentes en el AT, indicando que la iglesia es propiedad de Dios.
Metáforas juaninas. El Cristo resucitado dice a Juan que las siete iglesias son como siete
candeleros (Apoc. 1:20). La función del candelero es irradiar luz (comp. Mat. 5:14–16).
Otra vez Juan registra las palabras de Jesús cuando llama a sus discípulos ramas (Juan
15:5), Cristo mismo es la vid. Las ramas deben mantener una relación estrecha con la vid a
fin de producir el fruto, cada vez más fruto, que se espera; así la relación de los miembros
de la iglesia con Cristo.1


1
Carro, D., Poe, J. T., Zorzoli, R. O., & Editorial Mundo Hispano (El Paso, T. . (1993–).
Comentario bı́blico mundo hispano Hechos (1. ed., pp. 11–12). El Paso, TX: Editorial Mundo
Hispano.
Tomado del libro: Teología Sistemática de Wayne A. Gruden (páginas 902-904)

Metáforas para la iglesia.


11 Para ayudamos a entender la naturaleza de la iglesia,

la Biblia usa una amplia variedad de metáforas e ilustraciones para describimos


lo que es la iglesia. 12 Hay varias imágenes de familia; por ejemplo, Pablo ve a la iglesia
como una familia cuando le dice a Timoteo que actúe como si todos los miembros
de la iglesia fueran miembros de una familia más amplia: «No reprendas con
dureza al anciano, sino aconséjalo como si fuera tu padre. Trata a los jóvenes
como a hermanos; a las ancianas, como a madres; a las jóvenes, como a hermanas,
con toda pureza» (1 Ti 5:1-2). Dios es nuestro Padre celestial (Ef3:14), y nosotros
somos sus hijos e hijas, porque Dios nos dice: «Yo seré un padre para ustedes, y ustedes
serán mis hijos y mis hijas, dice el Señor Todopoderoso» (2 Ca 6: 18). Por consiguiente
somos hermanos y hermanas unos con otros en la familia de Dios (Mt
12:49-50; Un 3:14-18). Una metáfora de familia algo diferente se ve cuando Pablo
se refiere a la iglesia como la esposa de Cristo. Dice que la relación entre esposo y esposa:
«yo me refiero a Cristo ya la iglesia» (Ef 5:32), y dice que él logró el compromiso
entre Cristo y la iglesia de Corinto y que se parece a un compromiso entre
una novia y su prometido: «los tengo prometidos a un solo esposo, que es Cristo,
para presentárselos como una virgen pura» (2 Ca 11:2); aquí Pablo está mirando
hacia adelante al tiempo del retomo de Cristo como el tiempo cuando la iglesia
será presentada a él como su esposa.

En otras metáforas la Biblia compara a la iglesia a ramas de una vid Gn 15:5), un


olivo (Ro 11:17-24), un campo de cultivo (1 Ca 3:6-9), un edificio (1 Ca 3:9), y una cosecha
CMt 13:1-30; Jn 4:35). A la iglesia también se la ve como un nuevo templo no
construido con piedras literales sino construido con creyentes que son «piedras vivas
» (lP 2:5) edificados sobre la «piedra angular» que es Cristo Jesús (lP 2:4-8). Sin
embargo, la iglesia no sólo es un nuevo templo para adorar a Dios; también es un
nuevo grupo de sacerdotes, un «sacerdocio santo» que puede «ofrecer sacrificios espirituales
que Dios acepta» (lP 2:5). También se nos ve como la casa de Dios: «y esa
casa somos nosotros» (Heb 3:6), conJesús mismo considerado como el «constructor
» de la casa (Heb 3:3). A la iglesia también se la ve como «columna yfundamento
de la verdad» (1 Ti 3:15).

Finalmente, otra metáfora familiar ve a la iglesia como el cuerpo de Cristo


(1 Ca 12:12-27). Debemos reconocer que Pablo de hecho usa dos diferentes metáforas
del cuerpo humano cuando habla de la iglesia. En 1 Corintios 12 se toma a
todo el cuerpo como metáfora para la iglesia, porque Pablo habla del «oído» y del
«ojo» y del «sentido del olfato» (1 Ca 12: 16-17). En esta metáfora, no se ve a Cristo
como la cabeza unida al cuerpo, porque los miembros individuales son ellos mismos
partes individuales de la cabeza. Cristo en esta metáfora es el Señor que «está
fuera» de ese cuerpo que representa la iglesia y es a quien la iglesia sirve y adora.
Pero en Efesios 1:22-23; 4:15-16, yen Colosenses 2:19, Pablo usa una metáfora
diferente del cuerpo para referirse a la iglesia. En estos pasajes Pablo dice que
Cristo es la cabeza y la iglesia que es como el resto del cuerpo, a distinción de la cabeza:
«Más bien, al vivir la verdad con amor, creceremos hasta ser en todo como aquel
que es la cabeza, es decir, Cristo. Por su acción todo el cuerpo crece y se edifica en
amor, sostenido y ajustado por todos los ligamentos, según la actividad propia de
cada miembro» (Ef 4:15-16).13 No debemos confundir estas dos metáforas de
1 Corintios 12 y Efesios 4, sino mantenerlas distintas.
La amplia variedad de metáforas que se usa en el Nuevo Testamento para la
iglesia debe recordamos que no debemos concentrarnos exclusivamente en alguna
de ellas. Por ejemplo, en tanto que es verdad que la iglesia es el cuerpo de
Cristo, debemos recordar que esa es sólo una metáfora entre muchas. Si nos concentramos
exclusivamente en esta metáfora con toda probabilidad nos olvidaremos
de que Cristo es nuestro Señor que reina en el cielo tanto como el que mora
entre nosotros. Por cierto que no debemos concordar con la noción católico romana
de que la iglesia es la «encamación continuada» del Hijo de Dios en la tierra hoy.
La iglesia no es el Hijo de Dios en la carne, porque Cristo resucitó en cuerpo humano,
ascendió en su cuerpo humano al cielo, y ahora reina como el Cristo encamado
en el cielo, que claramente es distinto de la iglesia aquí en la tierra.
Cada una de las metáforas que se usan para la iglesia puede ayudamos a apreciar
más de las riquezas del privilegio que Dios nos ha dado al incorporamos en la
iglesia. El hecho de que la iglesia es como una familia debería aumentar nuestro
amor y compañerismo unos con otros. El pensamiento de que la iglesia es como la
esposa de Cristo debería estimulamos a procurar conseguir una mayor pureza y
santidad, y también mayor amor por Cristo y sumisión a él. La imagen de la iglesia
como ramas en una vid debe hacernos descansar en él más completamente. La idea de un campo de
cultivo debería animarnos a continuar creciendo en la vida
cristiana y obteniendo para nosotros y otros la nutrición espiritual apropiada para
crecer. El cuadro de la iglesia como el nuevo templo de Dios debería aumentar
nuestra consciencia de la misma presencia de Dios en medio nuestro cuando nos
reunimos. El concepto de la iglesia como un sacerdocio debería ayudarnos a ver
más claramente el deleite que Dios tiene en los sacrificios de alabanza y buenas
obras que le ofrecemos (ver Heb 13:15-16). La metáfora de la iglesia como el cuerpo
de Cristo debería aumentar nuestra interdependencia de unos a otros y nuestro
aprecio de la diversidad de dones dentro del cuerpo. Muchas otras aplicaciones se
pueden derivar de estas y otras metáforas para la iglesia que se mencionan en la
Biblia.

Notas al pie:
lOHay una variante textual entre los manuscritos griegos de Hechos 9:31, con algunos manuscritos diciendo
«la iglesia» y otros diciendo «las iglesias». El singular «la iglesia» es mucho más preferible a la variante que tiene el
plural. Ala lectura del singular se le da una probabilidad «B» (la más cerca al más alto grado de probabilidad» en el
texto de las Sociedades Bíblicas Unidas. El singular es representado por muchos textos tempranos y diversos en
tanto que la lectura plural se halla en la tradición bizantina del texto pero no en textos antes del siglo quinto d.C.
(A fin de que la gramática sea consistente, hay que cambiar seis palabras en el texto griego; por consiguiente la variante
es una alteración intencional en una dirección o la otra).
llpara más consideración de este tema ver Edmund P. Clowney, «Interpreting the Biblical Models ofthe
Church», en Bíblícal Interpretatíon and the Church, ed. por D. A. Carson (Thomas Nelson, Nashville, 1985), pp.
64-109.
12La lista de metáforas que se da en esta sección no pretende ser exhaustiva.

13Esta segunda metáfora no es ni siquiera una metáfora completa o «propia», porque las partes corporales no
crecen en la cabeza, sino que Pablo está mezclando la idea de Cristo como la cabeza (o autoridad), la idea de la
iglesia como un cuerpo, y la idea de que crecemos a la madurez en Cristo, y las combina en una afirmación compleja.
IX. OTRAS METAFORAS DE LA IGLESIA
A las metáforas de la iglesia como el “cuerpo de Cristo” y como “una nación santa”
tratadas anteriormente, les fue dada consideración especial: Como el cuerpo de Cristo por
razón de su prominencia escritural y aplicación contemporánea; y la iglesia como una
nación santa o “realeza” por razón de diferencias en interpretación de la palabra “reino.”
Sin embargo, las metáforas aplicadas a la iglesia en la escritura son muchas, y con razón,
porque ninguna metáfora sola puede expresar completamente la relación de los creyentes
con Cristo, el uno al otro, y con el mundo. Se tratarán veinticuatro (24) metáforas
adicionales, cada una de las cuales agrega algo al concepto total de la iglesia.
A. La iglesia como la familia del Señor.
Jesús nos introduce a la relación familiar, enseñándonos a orar “Padre nuestro que estás
en los cielos” (Mt. 6:9; Lc. 11:2). Dios, el Padre de nuestro Señor Jesucristo, también es
nuestro Padre. Jesús oró usando la palabra aramea Abba; según Romanos 8:15, el
creyente en el espíritu de adopción clama “Abba, Padre.” Si nosotros juntamente con
nuestro Señor Jesús, llamamos a Dios “Padre”, entonces Jesús es nuestro hermano mayor
en la familia de Dios (Heb. 2:10, 11). El autor de Hebreos declara que los creyentes son
miembros de la familia de Dios: “Pero Cristo como hijo sobre su casa, la cual casa somos
nosotros, si retenemos firme hasta el fin” (Heb. 3:6). Como las familias normalmente están
orgullosas del nombre de la familia, así también la familia de la iglesia se regocija en el
nombre del Padre (Ef. 3:14, 15). Como las familias reciben una herencia del padre, así
espera la iglesia la herencia prometida por el Padre celestial (Rom. 8:17). Como las buenas
familias observan un cierto modelo de conducta, así hay una norma de conducta dada
para la casa de Dios (I Ti. 3:15). En el Antiguo Testamento, el padre de cada hogar era, en
efecto, el sacerdote sobre el hogar (Nm. 7:2); Jesús se ha convertido en el Sumo Sacerdote
sobre la familia eclesiástica de Dios (Heb. 10:21–23; 2:17, 18).
La idea de la iglesia como la familia y casa de Dios se deriva del Antiguo Testamento donde
el pueblo de Dios es la casa (familia) de Israel, una nación crecida de la familia de Jacob,
nutrida mediante cultura familiar. La iglesia es llamada la familia y casa de Dios, “esto
testifica acerca de la importancia básica de la familia como una institución social. En el
Nuevo Testamento, especialmente en hechos, se da grande importancia al efecto del
evangelio sobre familias enteras (Hch. 2:46; 12:12; 16:15, 33, 34; 21:8, 9; I Cor. 1:16;
16:15; II Ti. 4:19).
Aunque en el Antiguo Testamento se habla de Dios como el Padre de la casa entera de
Israel (Is. 5:7; Sal. 98:3), nunca se refiere a Él como el Padre de un individuo.
Aparentemente, llamar a Dios “Padre” es un privilegio reservado para creyentes en
Jesucristo el Hijo.
B. La iglesia como una comunion de creyentes.
La palabra griega para “comunión” es koinonia, que significa “aquellos que tienen algo en
común.” Llegó a ser aplicada a “aquellos que pertenecen a una sociedad.” Koinonia fue
aplicada a la iglesia como aquellos que tenían una salvación común mediante una fe
común en Dios y en su Hijo Cristo Jesús: “Lo que hemos visto y oído, eso os anunciamos,
para que también vosotros tengáis comunión con nosotros; y nuestra comunión
verdaderamente es con el Padre, y con su Hijo Jesucristo” (I Jn. 1:3; vea I Cor. 1:9). Tan
pronto como nació la iglesia, se estableció una gran comunión de fe, alabanza y servicio:
“Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el
partimiento del pan y en las oraciones” (Hch. 2:42). La metáfora de la “familia” enfatiza la
idea de un “Padre” común; la metáfora de “comunión” enfatiza la idea de una misión, un
propósito, una adoración y una acción común.
En los Estados Unidos de América hay una fuerte inclinación hacia la vida privada y el
individualismo, pero el gran sello de los Estados Unidos contiene el lema, E Pluribus-
Unum, que significa “en muchos uno”, una nación indivisible. Solamente un fuerte sentido
de unidad hace a una gran sociedad. La iglesia es la nueva sociedad de Dios, mantenida
junta por la unidad del Espíritu. Lucas dice acerca de la iglesia apostólica: “Todos los que
habían creído estaban juntos, y tenían en común todas las cosas” (gr., koinos) (Hch. 2:44).
El libro de Efesios es la epístola del Nuevo Testamento en la que está más completamente
desarrollada la doctrina de la iglesia. Efesios no usa la palabra koinonia, pero es el único
libro del Nuevo Testamento que usa el término “unidad” (Ef. 4:3–6, 13).
La iglesia como la koinonia de Dios enfatiza la idea de una “sociedad” cuyas principales
características son la unidad y el amor. Una expresión práctica del amor de la iglesia fue
aquella de compartir con los necesitados. Koinonia a veces es traducida “comunicar”, con
el significado de extender ayuda material a los pobres y a aquellos abatidos por la mala
fortuna. (Vea Fil. 4:14; I Ti. 6:18; Heb. 13:16; también Hch. 2:45; II Cor. 8:4; 9:13; Gál. 2:10;
Rom. 12:13.) La koinonia de la iglesia es celebrada en la cena del Señor, que simboliza
nuestra común redención por la muerte expiatoria de Cristo en la cruz (I Cor. 10:16, 17;
11:23–34). Juan R. W. Stott, en un nuevo comentario sobre Efesios, escribió respecto a su
mensaje:
La carta expone lo que Dios hizo a través de la histórica obra de Jesucristo y lo que hace a
través de su Espíritu hoy, a fin de construir una sociedad nueva en medio de la vieja.
Hemos sido levantados de la muerte espiritual, exaltados a los cielos y sentados con El allí.
También hemos sido reconciliados con Dios y el uno con el otro. Como resultado,
mediante Cristo, y en Cristo, somos nada menos que la sociedad de Dios, la singular
humanidad nueva que Él está creando y que incluye a judíos y gentiles en iguales
términos. Somos la familia de Dios el Padre, el cuerpo de Jesucristo su Hijo, el templo y la
morada del Espíritu Santo. Por lo tanto, debemos demostrar clara y visiblemente, a través
de nuestra nueva vida, la realidad de la nueva obra que Dios ha hecho: primero por la
unidad … de nuestra vida común, segundo por la pureza de amor de nuestra conducta
diaria.
C. La iglesia como un equipo de atletas.
Los eventos atléticos eran tan comunes en el mundo griego y romano como lo son hoy.
Pablo, que era un observador sutil, usaba frecuentemente la metáfora “atlética.” (Vea I
Cor. 9:24–26; Gál. 2:2; 5:7; Fil. 2:16; II Ti. 2:5; 4:7; Heb. 12:1; I Ti. 6:12). El pasaje con la
metáfora atlética que mejor se aplica a la iglesia es: “Que estáis firmes en un mismo
espíritu, combatiendo unánimes por la fe del evangelio” (Fil. 1:27). La palabra griega
traducida “combatiendo unánimes” es sunathleo, de athleo (nuestro “atletismo”) que
significa “competir como atleta”, y sun que significa “con” o “juntos.” Pablo quiere oír que
los filipenses están en unidad, “jugando como un equipo.” El avance y crecimiento más
grande de la iglesia no ha sido el resultado de esfuerzos individuales, sino el resultado del
esfuerzo mutuo y del trabajo en equipo de la familia entera de Dios. Si los creyentes
cristianos son como un equipo de atletas, mostrarán características tales como:
dedicación, trabajo en equipo, cooperación, negación propia, dominio propio y unidad.
D. La iglesia como el ejercito del Señor.
La idea de la iglesia como un ejército probablemente no sería muy agradable para
muchos, particularmente para la gente joven. Sin embargo, la Biblia a menudo se refiere a
la batalla contra los poderes de la oscuridad en la que está comprometida la iglesia. Algo
de nuestra aversión a la metáfora militar desaparece cuando nos acordamos que “las
armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de
fortalezas, derribando argumentos … y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia
de Cristo” (II Cor. 10:4, 5). Al creyente se le exhorta de la siguiente manera: “Vestíos de
toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo.
Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra
potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes
espirituales de maldad en las regiones celestes” (Ef. 6:11, 12). La iglesia está
comprometida en una verdadera guerra, pero Cristo es nuestro capitán y estamos
asegurados de la victoria; de hecho, Satanás ya es un enemigo derrotado. (Vea II Ti. 2:3, 4;
I Ti. 1:18; Ef. 6:10–17; I Cor. 9:7; I P. 2:11; Ap. 19:11–21; 20:7). La iglesia sobre la tierra se
llama la iglesia militante; la iglesia en el cielo se llama la iglesia triunfante.
E. La iglesia como el rebaño del Señor.
La metáfora pastoral es muy familiar. El líder espiritual de la iglesia local generalmente se
llama “pastor” y se refiere frecuentemente a la congregación como el “rebaño.” Los
primeros dieciocho versículos del décimo capítulo de Juan hablan de Cristo como el Buen
Pastor y de sus seguidores como las ovejas de su rebaño. Aunque la palabra “pastor”
como el líder espiritual se encuentra solamente una vez en el Nuevo Testamento, tanto
Pablo como Pedro dan ejemplos vívidos de la metáfora pastoral: “Por tanto, mirad por
vosotros, y por todo el rebaño … para apacentar [pastorear] la iglesia del Señor” (Hch.
20:28); “Apacentad [pastoread] la grey de Dios que está entre vosotros … siendo ejemplos
de la grey. Y cuando aparezca el Príncipe de los pastores, vosotros recibiréis la corona
incorruptible de gloria” (I P. 5:2–4). Pedro recordaría bien las palabras de Jesús, habladas
después de la resurrección, que fueron repetidas tres veces: “¿Me amas?”, “Apacienta mis
corderos” y “Pastorea mis ovejas” (Jn. 21:15–17). (Vea Sal. 23:1; 80:1; 100:3; II Sam. 7:7;
Jer. 31:10; Mr. 6:34; Ef. 4:11; Heb. 13:20; Ap. 7:17)
F. La iglesia como la escuela del Señor.
Más de cincuenta (50) veces se le llama o se hace referencia a Jesús como “Maestro” (del
griego didaskalos, del verbo didasko que significa “enseñar”) o “Rabí.” Los evangelios se
refieren a Jesús más como maestro que como predicador. La intención de que la iglesia
local fuera un lugar de enseñanza está claramente explicado por la gran comisión: “Por
tanto id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y
del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he
mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo” (Mt.
28:19, 20). Jesús usó dos palabras diferentes para “enseñar” en su comisión: la primera es
matheteuo (28:19), que significa “hacer discípulos”; y la segunda didasko (28:20), que es
la palabra común para “enseñar.” El término enfático en la comisión es “hacer
discípulos.” “Ir” y “enseñar”, participios subordinados al verbo principal, “hacer
discípulos.” Hacer discípulos involucraba tanto enseñar como predicar; pero más aun,
involucraba traer a los nuevos creyentes a un nivel de discipulado al que habían sido
traídos los maestros anteriormente. La enseñanza y predicación pueden caer sobre oídos
sordos, pero aquel que hace discípulos trae a sus seguidores por palabra y ejemplo, a ser
como él mismo, a su mismo nivel. Sin embargo, no hacemos a los hombres nuestros
discípulos, sino discípulos de Jesús.
El método de discipulado de Jesús está claramente revelado en un pasaje en el Evangelio
de Marcos: “Después subió al monte, y llamó a sí a los que él quiso; y vinieron a él. Y
estableció a doce, para que estuviesen con él, y para enviarlos a predicar, y que tuviesen
autoridad para sanar enfermedades y para echar fuera demonios” (Mr. 3:13–15). Marcos
enumera tres aspectos acerca de hacer discípulos: (1) “para que estuviesen con Él”
(aprender mediante ejemplo); (2) “para enviarlos a predicar” (aprender a comunicar) y (3)
“y que tuviesen autoridad para sanar enfermedades y para echar fuera demonios”
(aprender a ministrar). Ninguno de estos aspectos es aprendido a través de simple
instrucción verbal; el alumno debe llenarse del espíritu de su maestro, como tomó Eliseo
sobre sí el manto de su maestro, Elías. La palabra “discípulo” fue el primer nombre dado a
los cristianos primitivos (Hch. 11:26). La virtud principal que caracteriza a uno como
discípulo de Jesús es amor (Jn. 13:35). (Vea también: Mr. 8:34; Jn. 1:43; 21:19–22; Lc.
5:11, 27, 28; I Tes. 1:6, 7; I P. 2:21; 5:3; I Ti. 1:16; 4:12; Tit. 2:7).
G. La iglesia como siervo o administrador.
Las palabras principales de la vida de la iglesia son palabras de servidumbre, relacionadas
con ser siervos: “ministrar” o “ministerio” del griego, diakonos, diakonia que significa
“siervo, servicio”, originalmente significaba “uno que sirve mesas” (Jn. 12:26); “siervo” de
doulos, que significa “esclavo” (Mt. 24:45; 25:14; Gál. 5:13,); “mayordomo” de
oikonomos, que era el “siervo que administraba la casa” (Lc. 12:42; I Cor. 4:1, 2; Tit. 1:7; I
P. 4:10). Otras dos palabras traducidas “ministrar” son: hyperetes, que originalmente
significaba “siervo que remaba una nave” (Hch. 13:5), y leitougos, que significa “siervo
público” que servía a la comunidad gratuitamente. (Rom. 15:16).
Que todos los oficiales, ministros, trabajadores y líderes cristianos son siervos está
claramente establecido de la siguiente manera:
• El ejemplo que dio Jesús asumiendo el lugar de un siervo (Mr. 10:42–45; Mt. 20:27,
28).
• El espíritu del mundo es señorear sobre otras personas; los ministros del Señor
sirven el uno al otro (I P. 5:3; I Cor. 9:19; Gál. 5:13; Lc. 22:24–28).
• El servicio del creyente es el de un mayordomo de lo cual él dará cuenta (Mt.
25:14–30), y la virtud más grande de un mayordomo es ser hallado fiel (I Cor. 4:1, 2; Mt.
25:21).
• Los creyentes deben estar en sujeción unos a otros, y a aquellos que son colocados
sobre ellos en el Señor; además, el liderazgo y la dirección son en sí ministerios (Ef. 5:21; I
Tes. 5:12; Hch. 20:28; I P. 5:2, 3; Heb. 13:7, 17, 24).
• Pablo, que tenía autoridad apostólica, se llamó a sí mismo un “siervo de Jesucristo”
(Rom. 1:1).
• Más de 300 veces son utilizadas palabras en el Nuevo Testamento que expresan el
oficio del siervo.
• El mandato a todos los creyentes maduros es de ministrar, esto es, servir el uno al
otro (Ef. 4:12).
H. La iglesia como un edificio.
La metáfora de la iglesia como un edificio está sugerida en los siguientes pasajes de la
escritura: I Cor. 3:9–15; Ef. 2:20–22; Mt. 16:18; 21:42; I P. 2:4–7; Lc. 6:46–49; Hch. 4:11;
Rom. 15:20; Sal. 118:22. De estas escrituras se deriva un número de figuras
arquitectónicas:
• “Cristo es el fundamento y la principal piedra angular” de la iglesia; es digno de
notar que el Salmo 118:22, “La piedra que los edificadores desecharon, ha venido a ser la
cabeza del ángulo”, citado por Pedro en I P. 2:7, se encuentra cinco (5) veces en el Nuevo
Testamento: Mt. 21:42; Mr. 12:10, 11; Lc. 20:17; Hch. 4:11. (Vea también Is. 8:14; 28:16;
Dn. 2:34, 35; Rom. 9:32, 33.)
• Los creyentes son los materiales de construcción o las “piedras vivas.”
• Se dice que los ministros son los constructores, Cristo es el maestro constructor y
arquitecto.
• No hay “piedras” aisladas, todas son puestas en el edificio.
• Los creyentes deben prestar atención al tipo de material que son, y cómo
construyen (I Cor. 3:9–15).
I. La iglesia como un misterio.
Uno de los conceptos más fuertes que Pablo usó acerca de la iglesia fue el de la iglesia
como un “misterio.” Debe ser notado que la palabra bíblica “misterio” tiene un significado
distinto al que tiene en el español moderno. En la antigua Grecia, los misterios eran
secretos de las religiones misteriosas, revelados sólo a aquellos que se iniciaban en ella.
Los secretos no eran misterios en el moderno uso del término; eran claramente
entendidos por los iniciados. Los misterios de Dios son verdades que podían ser conocidas
solamente por revelación divina, por ejemplo, los misterios de la redención y de la iglesia;
son claramente revelados a los creyentes en las escrituras. Uno de los misterios es la
iglesia, la cual no fue revelada en el Antiguo Testamento. Los profetas predijeron que Dios
bendeciría a los gentiles, pero no revelaron que los creyentes gentiles compartirían
igualmente con Israel el cuerpo de Cristo. Para ser específico, que los gentiles son
coherederos, y miembros los unos de los otros, hermanos del cuerpo, y co-participantes
de la promesa en Cristo Jesús mediante el evangelio (Ef. 3:4–6; Col. 1:25–27). Pablo
consideraba que Dios le había dado un ministerio especial para declarar la doctrina de la
iglesia como misterio (Ef. 3:3, 4). La gloria de este “misterio” se dice ser la verdad y hecho
de “Cristo en vosotros, la esperanza de gloria” (Col. 1:27).
J. La iglesia como el campo del Señor.
La Biblia frecuentemente emplea la metáfora agrícola. Pablo escribió a la iglesia corintia:
“Vosotros sois labranza [el campo] de Dios” (I Cor. 3:6–9). En el campo de Dios (la iglesia)
hay sembradores, cultivadores y cosechadores, pero es Dios en realidad quien da el
crecimiento. Los obreros no deben pelearse sobre su relativa importancia; Dios llama y
coloca a cada uno en el oficio divinamente determinado. Los trabajadores son
indispensables, pero el “labrador” divino da vida y crecimiento a la vid (Jn. 15:1, 2). El
trabajo diligente en el campo de Dios trae recompensa; Pablo escribió a Timoteo: “El
labrador, para participar de los frutos, debe trabajar primero” (II Ti. 2:6). Las parábolas
agrícolas en el capítulo trece de Mateo hablan de la semilla (la palabra), diferentes
terrenos (oidores de la palabra), y los variados grados de rendimiento: treinta por uno,
sesenta y cien (Mt. 13:3–8, 18–23).
K. La iglesia como un real sacerdocio.
Pedro introduce la metáfora de la iglesia como un real sacerdocio:
Vosotros … sed edificados como casa espiritual y sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios
espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo (I P. 2:5)… Mas vosotros sois linaje
escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las
virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable (I P. 2:9).
La iglesia ya no necesita sacerdotes, en el sentido del Antiguo Testamento, para ofrecer
sacrificios de animales; Cristo Jesús ha hecho, una vez y por todas, el sacrificio expiatorio
perfecto de sí mismo para nuestra redención. La iglesia, sin embargo, ofrece “sacrificios
espirituales” de alabanza, adoración y agradecimiento a Dios (Heb. 13:15). La iglesia
también intercede y ora por gobernantes y por toda la humanidad (I Ti. 2:1–4).
Una de las grandes verdades de la iglesia es aquella del “sacerdocio de todos los
creyentes.” Todo creyente en Cristo tiene acceso al trono de Dios por los méritos de Jesús:
“Porque por medio de él los unos y los otros tenemos entrada por un mismo espíritu al
Padre” (Ef. 2:14–18). (Vea también Heb. 4:14–16.)
Como “sacerdotes” se les ha dado a los creyentes un ministerio de reconciliación: “Dios …
nos dio el ministerio de reconciliación … y nos encargó a nosotros la palabra de
reconciliación. Así que, somos embajadores en nombre de Cristo, como si Dios rogase por
medio de nosotros; os rogamos en nombre de Cristo: Reconciliaos con Dios” (II Cor. 5:18–
20). En consagración, el creyente se ofrece a sí mismo a Dios como un “sacrificio vivo”
santo y agradable (Rom. 12:1). Otros sacrificios que el creyente ofrece a Dios son: “amor
fraternal” (Ef. 5:1, 2), “buenas obras” (Heb. 13:16), “posesiones materiales” para ayudar a
otros (Heb. 13:16), y “ministerio” para otros (Fil. 2:17).
L. La iglesia como la novia de Cristo.
Una de las metáforas más atractivas es aquella de la iglesia como la novia de Cristo. Esta
metáfora es usada por Juan el Bautista, (Jn. 3:29), por el apóstol Pablo (I Cor. 11:2; Ef.
5:21–32); y por el apóstol Juan (Ap. 19:7–9). Hay una fuerte relación entre esta metáfora y
aquella de la iglesia como el cuerpo de Cristo. Las siguientes aplicaciones pueden ser
tomadas de la analogía de la iglesia como la novia de Cristo:
• Provee un modelo para la relación entre maridos y esposas cristianos.
• Las esposas deben estar en sumisión a sus esposos como la iglesia lo está a Cristo,
y los creyentes lo están unos a otros (Ef. 5:21, 22), no porque la esposa sea inferior, menos
digna, o menos capaz; la responsabilidad de liderazgo espiritual debe ser establecida en el
hogar, por eso al esposo le es asignada esa responsabilidad que él lleva con el apoyo
indispensable de la esposa y madre.
• Los maridos deben amar a sus esposas como Cristo ama a la iglesia, tanto como se
aman a sí mismos, y aún lo suficiente como para morir por ella (Ef. 5:25–29); si tanto las
esposas como los maridos cumplen con este modelo, ninguno está en desventaja en la
relación matrimonial.
• Esta figura representa el gran amor que Cristo tiene por su iglesia como su propia
novia, y que la iglesia experimenta mientras espera la venida del Novio.
M. La iglesia como la embajadora del Señor.
Pablo se llama a sí mismo el embajador del Señor, “… soy embajador en cadenas” (Ef.
6:20); también incluye a los creyentes consigo mismo en el oficio de embajador, “Así que,
somos embajadores en nombre de Cristo” (II Cor. 5:20). Pueden hacerse varias
aplicaciones de esta figura: (1) nosotros somos los embajadores de nuestro Rey quien nos
despacha en una misión de paz divina, (2) como un embajador mandado en favor de sus
“condiciones” de paz soberanas (Lc. 14:31, 32), asimismo la iglesia anuncia al mundo las
condiciones de reconciliación con Dios, que son fe en Cristo y rendición a El como Señor.
El Señor ha dado a la iglesia el ministerio de reconciliación (II Cor. 5:18–21).
N. La iglesia como la columna y baluarte de verdad.
La iglesia sostiene la verdad del evangelio y lo levanta en alto. Pablo escribió a Timoteo
respecto a la iglesia: “Para que si tardo, sepas cómo debes conducirte en la casa de Dios,
que es la iglesia del Dios viviente, columna y baluarte de la verdad” (I Ti. 3:15). En el
versículo siguiente, Pablo continuó dando lo que puede haber sido una expresión poética
doctrinal del “misterio de la piedad” que era ampliamente usado en la iglesia primitiva (v
16). La iglesia debe proteger la sana doctrina y levantarla en alto por medio de la
proclamación del evangelio y una conducta ejemplar.
O. La iglesia como el santuario del Señor.
Muchos pasajes de la escritura apoyan la metáfora de la iglesia como un santuario o
templo. De esos pasajes se hacen aplicaciones prácticas: (1) El Señor no mora en edificios
hechos con manos, sino en su pueblo como una iglesia (Hch. 17:24; I Cor. 3:16; I R. 8:27;
Is. 66:1, 2), (2) La iglesia es el santuario del Señor; El mora donde su pueblo esta
congregado en su nombre (Mt. 18:20), (3) el templo era un santuario, un edificio santo
separado, dedicado exclusivamente a la adoración y el servicio de Dios; asimismo la iglesia
es el templo del Espíritu Santo, el santuario donde mora el Señor; por eso, los miembros
de la iglesia son llamados “santos” (I Cor. 3:17; Ef. 2:21, 22; I P. 2:4, 5).
Pedro dice de los creyentes: “Como piedras vivas, sed edificados como casa espiritual” (I P.
2:5). En esta figura, las piedras son parte de un edificio; pero son piedras vivas y por lo
tanto parte de un hogar o familia; no cualquier familia o cualquier edificio, sino un
santuario y una morada para el Señor.
P. La iglesia como peregrina.
Esta metáfora define la relación entre la iglesia y el mundo presente con las siguientes
aplicaciones: (1) los creyentes no están realmente “en casa” en este mundo, ni deben
conformarse “a este siglo”; su verdadera ciudadanía está en el cielo (Fil. 3:20; Rom. 12:2),
(2) se dice que los creyentes están como pasajeros aquí, como peregrinos y extranjeros
(Heb. 11:13), (3) sin embargo, los miembros de la iglesia, aunque peregrinos, están
comisionados a testificar a este mundo para ganar del mundo ciudadanos para el reino de
Cristo (I P. 2:11, 12; Col. 1:12–14; Hch. 1:8), (4) la meta de los creyentes es la “ciudad de
Dios” venidera (Heb. 13:14): “Porque no tenemos ciudad permanente, sino que buscamos
la por venir.”
Q. La iglesia como el camino.
En el libro de Hechos, la vida de la iglesia es llamada el camino, y los creyentes son
llamados “aquellos del camino:” “Y le pidió cartas para las sinagogas de Damasco, a fin de
que si hallase algunos hombres o mujeres de este Camino, los trajese presos a Jerusalén”
(Hch. 9:2). La iglesia como el cuerpo de Cristo es el camino, porque Cristo es el camino, la
verdad, y la vida, nadie viene al Padre si no es por Él (Jn. 14:6). Se declaran las siguientes
cosas acerca del camino de Dios en el libro de Hechos: (1) el camino de Dios es un camino
perseguido (22:4), (2) a menudo se habla mal de él (19:9), (3) es llamado herejía por
algunos (24:14), (4) Pablo confesó gozosamente a Félix que él era de ese camino (24:14),
(5) cuando la iglesia sea poderosa en testimonio y en poder como lo era en Efeso, causará
“un gran disturbio”, porque el camino de Dios será un elemento de disturbio en una
sociedad gobernada por los poderes de las tinieblas: “Hubo por aquel tiempo un disturbio
no pequeño acerca del Camino” (19:23).
R. La iglesia como la herencia del Señor.
En el primer capítulo de Efesios, Pablo hace una declaración notable: “Para que sepáis
cual es … la gloria de su herencia en los santos” (Ef. 1:18). Esto a menudo es interpretado
para referirse a nuestra herencia, pero una lectura cuidadosa muestra que el versículo se
refiere a la herencia del Señor la cual es los santos o la iglesia. En los versículos once y
catorce se halla la misma verdad. Aunque el versículo once dice en nuestra versión: “En Él
asimismo tuvimos herencia” en varias otras versiones dice: “En Él asimismo fuimos hechos
una herencia.” El gran erudito en griego, B. F. Wescott, traduce Efesios 1:11a de la
siguiente manera: “también fuimos hechos la porción de Dios.” La Biblia Viviente o
paráfrasis lo traduce: “gracias a lo que Cristo hizo, somos regalos que Dios recibe con
deleite.” F. F. Bruce, comentando sobre una de las versiones, dice:
“En Él asimismo fuimos hechos una herencia.” Esta es una traducción preferible a, “En Él
asimismo tuvimos herencia.” Ambas declaraciones son verdaderas, pero el apóstol está
pensando aquí en ‘la posesión adquirida’ de Dios (v 14), ‘Su herencia en los santos’ (v 18).
Así que, en los días del Antiguo Testamento, fue revelado que la porción del Señor es su
pueblo; Jacob es la heredad que le tocó (Dt. 32:9). En Cristo, entonces, hemos sido
admitidos en las filas del pueblo escogido, la santa heredad de Dios.
(Vea también I P. 2:9, 10; Ex. 19:5, 6; Dt. 14:2; 32:9; Sal. 72:2; Mal. 3:17).
S. La iglesia como la obra maestra del Señor.
Ya que Efesios es la epístola sobre la iglesia, se encontrarán en ella muchas de las
metáforas de la iglesia. En Efesios el capítulo dos, Pablo declara: “Porque somos hechura
suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras” (Ef. 2:10a). La palabra griega traducida
“hechura” es poiema, que significa una “porción de hechura, una creación”; es la palabra
de la que obtenemos nuestra palabra castellana “poema.” La iglesia es la obra maestra de
la creación de Dios. Cuando la iglesia que es creada para buenas obras sea perfeccionada,
representará a su Hacedor y Creador, Cristo Jesús el Señor. “Cuando él se manifieste,
seremos semejantes a él, porque le veremos tal como él es” (Jn. 3:2).
Debería ser notado que todos los pronombres en Efesios capítulo dos son plurales:
“Somos [nosotros] hechura suya.” La iglesia es la obra maestra de Dios, un mosaico de
todo su pueblo en una obra colectiva diseñada. (Vea también Fil. 1:6; 2:3; Ef. 3:10; Col.
1:28, 29; Heb. 13:21; II Cor. 5:17.)

T. La iglesia como la luz del mundo.
En el sermón del monte, Jesús dijo, “Vosotros sois la luz del mundo, una ciudad asentada
sobre un monte no se puede esconder” (Mt. 5:14–16). La figura de la iglesia como luz
sugiere lo siguiente: (1) los creyentes que son los hijos de luz dan testimonio de Cristo
quien es la verdadera luz del mundo (Jn. 8:12), (2) entonces, la luz del creyente es una luz
reflejada, como la luz de la luna; el creyente refleja la luz de Cristo. Ef. 5:14 dice
literalmente, “Te alumbrará Cristo”, (3) el libro de Apocalipsis llama “candeleros” a las
iglesias locales (Ap. 1:20), (4) no importa de cuánta bendición sea ministrar unos a otros,
los creyentes no deben olvidar que su misión primaria es aquella de iluminar la oscuridad
del mundo (Mt. 5:16), (5) el testimonio del creyente es doble: testimonio por palabras, y
testimonio por obras (I P. 2:12).

U. La iglesia como la sal de la tierra.


¿Qué quiso decir Jesús cuando dijo, “Vosotros sois la sal de la tierra”? Las siguientes
aplicaciones parecen ser indicadas:
• La sal preserva; esto quiere decir que la iglesia preserva y refuerza las cualidades de
bondad, honor, justicia y misericordia en una sociedad que tiende a ser corrupta.
• La sal inhibe la corrupción; la iglesia restringe las influencias corruptas; las buenas
obras de la iglesia reprenden la maldad.
• La sal da sazón y sabor; la iglesia da un sazón y un sabor distinguido a sus
alrededores; sin embargo, no se dice que es el “azúcar de la tierra;” el sabor debe ser
importante a la figura, porque se les advierte a los creyentes que no pierdan su sabor para
que la sal no sea echada fuera y hollada (Mt. 5:13).
• La iglesia no debe solamente “salar” la tierra, debe también mantener su “salinidad”
en sí para restringir la ambición egoísta, las discusiones, las pugnas, etc. (Mr. 9:49, 50; Lc.
14:33).
• Pablo parece interpretar “sal” para querer decir “sabiduría” o “sabor” espiritual en
palabra, palabras que no sean vanas o insípidas (Col. 4:6).
V. La iglesia como pesquera del Señor.
Jesús dijo a sus discípulos, “Venid en pos de mí, y haré que seáis pescadores de hombres”
(Mr. 1:17). Esta figura se deriva del hecho de que los primeros discípulos fueron pescadores;
empleando una metáfora justa, los llamó a ser pescadores de hombres. La iglesia es
comisionada a pescar hombres para el reino de Cristo, pero en un buen sentido; porque en
Lucas 5:10 las palabras “serás pescador de hombres” significan literalmente, “tomarás a
hombres vivos.” Los hombres pescados para Cristo, reciben una nueva calidad de vida. Si la
iglesia no pesca hombres para Cristo, Satanás los tomará cautivos (II Ti. 2:25, 26). La iglesia
meramente nominal, como en la parábola de la red, tiende a pescar a algunos que no son
creyentes verdaderos (Mt. 13:47). (Vea Mt. 4:18–20).
W. La iglesia como un crisol.
La vida de la iglesia es una vida de fe; la fe, para ser genuina, debe ser una fe probada; Dios
deja que nuestra fe sea probada a fin que Él pueda aprobarla. Dios puede bendecir
solamente la fe que haya sido probada como genuina a través de la prueba. En Pedro 1:6,
7, la frase “sometida a prueba vuestra” literalmente es “la aprobación [por prueba] de
vuestra fe.” La palabra griega para “prueba” es dokime (el acto de un ensayador de probar
y aprobar un metal precioso). La prueba y aprobación de la fe del creyente se dice ser más
preciosa que la prueba y aprobación del oro. Como el oro, la fe debe ser puesta en el crisol
para ser probada y purificada por el fuego (I P. 4:12–17; Stg. 1:3).
La misma vida del creyente en la comunión cristiana de la iglesia lo pone a prueba: amar a
todos los hermanos, caminar en fe y obediencia, someterse a Cristo y el uno al otro, y tomar
el ministerio de la palabra en momentos de adversidad (Pr. 17:3; 27:1). Pedro declara que
el juicio comienza por la casa de Dios (I P. 4:17). Las palabras griegas: dokime, dokimazo,
dokimos, dokimion (usadas treinta y nueve veces (39) veces en el Nuevo Testamento), son
palabras del trabajo de un ensayador con su crisol. En la vida de la iglesia, los creyentes
están en el crisol de Dios, siendo probados y aprobados. (Vea I Tes. 2:4; Rom. 16:10; I Cor.
12:9; II Cor. 10:18; Stg. 1:12.)
X. La iglesia como la rama de olivo silvestre.
La iglesia como la rama de olivo silvestre, ha sido injertada en el árbol del propósito
redentor de Dios, reemplazando a la Israel rebelde. Esto no es, sin embargo, un
desplazamiento permanente; cuando la iglesia haya sido completada, Dios todavía cumplirá
sus promesas con el remanente de Israel nacional (Rom. 11:16–24; Jer. 11:16, 17).1


1
Duffield, G. P., & Van Cleave, N. M. (2006). Fundamentos de Teologı́a Pentecostal (pp.
495–496). San Dimas, CA: Foursquare Media.
4. La identidad de la
iglesia
LA IDENTIDAD DE
LA IGLESIA

PREPARADO POR: PROFESOR OSMANY CRUZ


FERRER.

Mateo 5:13-16.
Vosotros sois la sal de la tierra; pero si la sal se
desvaneciere, ¿con qué será salada? No sirve
más para nada, sino para ser echada fuera y
hollada por los hombres.
14Vosotros sois la luz del mundo; una ciudad
asentada sobre un monte no se puede esconder.
15Ni se enciende una luz y se pone debajo de un

almud, sino sobre el candelero, y alumbra a


todos los que están en casa. 16Así alumbre vuestra
luz delante de los hombres, para que vean
vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro
Padre que está en los cielos.
INTRODUCCIÓN

 La sal era un artículo de


mucho valor y de gran
demanda en el tiempo de
Jesús. Cumplía varias
funciones: purificar,
preservar, curar, dar sabor
y despertar sed. La sal se
usaba en todos los
sacrificios israelitas.

 La luz, a su vez, era muy


importante para evitar
tropiezos y hacer expedito a
otros el camino en la
oscuridad.
LA SITUACIÓN REAL DE NUESTRO
MUNDO:

 Población Mundial: 6.7 billones de personas.


 Hay 238 países políticos en el mundo. 193 Países
Independientes.
 Aproximadamente 11% de la población confiesa ser cristianos
nacidos de nuevo.
 Otro 20% asiste a la iglesia, pero puede que no confiesa ser
cristiano.

 Cerca de 36% de la población mundial tiene la


oportunidad de oír el Evangelio, pero
permanecen no-evangelizado a pesar de la
frecuencia de iglesias en su región.
 Eso deja 32% de la población mundial que no
tiene oportunidad de oír el Evangelio.
 680 millones de personas ni siquiera han oído del
nombre de Jesús.
 Cada año 57.9 millones de personas mueren.
 Cada día mueren 158,857 personas y de ellas
aproximadamente 66,000 personas muriendo sin
haber tenido ningún acceso al Evangelio.
 6,619 personas mueren cada hora.
 110 personas mueren cada minuto.
 Aproximadamente 1.64 personas mueren cada
segundo.

 Más de 80 países persiguen el evangelio de forma


moderada o agresiva.
 La persecución agresiva de cristianos ocurre en:
Arabia Saudita, Sudán, Somalia, Yemen, Corea
del Norte, Laos, Vietnam, China, Irán, Marruecos,
Libia, Egipto y Argelia.
 Cada año mueren por causa del evangelios más
de 160,000 creyentes.
 En India hay un pastor para cada siete iglesias.
 En India hay 2334 etnias y de ellas 305 han sido
alcanzadas y 2029 no han sido alcanzadas.
 En Sudán la proporción es un pastor para doce.
 En China hay 501 etnias y de ellas han sido
alcanzadas 88 y 413 no han sido alcanzadas.
 En Pakistán hay 386 etnias y de ellas solo 15 han
sido alcanzadas y 371 no han sido alcanzadas.

 En Bangladesh hay 388 etnias y de ellas 48 han


sido alcanzadas mientras que 340 no han sido
alcanzadas.
 En Nepal hay 315 etnias y de ellas 23 han sido
alcanzadas mientras 292 no han sido alcanzadas.
 Traducción bíblica: "Alrededor del 96% de la
población del mundo tiene Escrituras adecuadas
en su idioma. Sin embargo, terminar con el 4%
restante requerirá posiblemente tres mil nuevos
esfuerzos de traducción."
 Turquía tiene 65 000 000 de personas y en todo el
país solo existen unos 1 500 cristianos. 43 333
inconversos por cada cristiano.
 En España hay un cristiano por cada 500
inconversos.

PARECE IMPOSIBLE, PERO SE


PUEDE
 Pasaron 7 años antes:
 Que William Carey bautizara al primer convertido en la India.
 Que Hudson Taylor ganara el primer convertido en Birmania,
Indochina.
 Que Morrison atrajera al primer convertido a Cristo.
 Que Moffat declarara ver la primera evidencia de la acción
del Espíritu Santo sobre los bechuanas en África.
 Que Henry Richards obtuviera el primer convertido ganado
en Banza manteka.
DIOS NOS LLAMA A DESESTIMAR
LOS IMPOSIBLES:

 Cuando el cristiano protestante, físico y matemático Isaac


Newton anunció sus descubrimientos dijeron de él, que era un
matemático loco.
 Galileo Galilei aseguró que la tierra giraba alrededor del sol y
no a la inversa, le hicieron un proceso por hereje y le hicieron
pasar el resto de su vida en prisión domiciliaria.

 Cuando Pasteur afirmó que la gente podía ser


inmunizada contra ciertas enfermedades,
muchos lo criticaron y un enemigo suyo lo retó a
duelo.
 Cuando Rowland Hill propuso que se usaran sellos
de correos como medio para pagar previamente
la entrega de la correspondencia, su idea fue
llamada un plan estrafalario y visionario.
 Cuando la Asociación Cristiana de Jóvenes de
Nueva York anunció que iba a entrenar a
muchachas para operar maquinas de escribir,
muchos se opusieron diciendo que esto iba más
allá de la capacidad mental de las mujeres.
 Cuando Josué Coppersmith aseguró que había
descubierto el teléfono, las autoridades de N.Y. lo
apresaron por estafador.

 Cuando Nehemías comenzó la reconstrucción


de los muros de Jerusalen, Sambalat y Tobías
dijeron que si una zorra caminaba por encima de
ellos se derrumbarían enseguida. Pero Nehemías
se levantó y dijo: El Dios de los cielos, él nos
prosperará, y nosotros sus siervos nos
levantaremos y edificaremos, porque vosotros no
tenéis parte ni derecho ni memoria en Jerusalén
(Nehemías 2:20).
ESTÁN SOPLANDO NUEVOS TIEMPOS. LA
IGLESIA ESTÁ CREYENDO EN SU IDENTIDAD

 Más de 700 millones de personas en 220 países han visto la


película "Jesús", y de ellas 41,000,000 han indicado un
compromiso serio con Jesucristo y a estudios continuos de la
Biblia.
 Después de 70 años de opresión en la Unión Soviética, los
Cristianos numeran aproximadamente 100 millones - cinco
veces el número del Partido Comunista a la altura de su
popularidad, y el 36% de la población.

 En Asia Central, una iglesia sembrada hace solo


cuatro años en Uzbekistán ha crecido a 3,000
miembros y ha sembrado otras 55
congregaciones.
 Mongolia, que no tenía ninguna iglesia en
absoluto tan recientemente como 1991, ahora
tiene más de 3,000 creyentes en 17
congregaciones. Y los Mongolianos han enviado
a sus primeros misioneros para trabajar con la
Operación Movilización en India.
 En Nepal, el único país Hindú oficial del mundo,
más de 100,000 hindús han conocido al Salvador
en las dos décadas pasadas.
 Cada mes otros 15,000 en India son bautizados
como nuevos creyentes en Jesucristo.

 En China, hay ahora aproximadamente


80,000,000 creyentes evangélicos - creciendo a
un paso de más de 30,000 conversiones por día.
 En 1900, Corea no tenía ninguna Iglesia
Protestante; fue considerada "imposible de
penetrar." Hoy, seis nuevas iglesias se abren cada
día en Corea del Sur, y es el lugar de nueve de
las iglesias más grandes del mundo - algunos con
más de 800,000 miembros. Hoy Corea es 30%
Cristiano con 7,000 iglesias solo en Seúl. Millones
de Budistas han venido a Cristo.
 De más de 400 millones de Latinoamericanos,
más de 50 millones se han hecho Cristianos
evangélicos. Hacia el final de esta década.
 Muy pronto una mayoría de la gente en Brasil,
Guatemala, Honduras, y El Salvador serán
creyentes evangélicos.
 Chile, Costa Rica, y Bolivia son aproximadamente
40% evangélicos que creen en la Biblia .

 Ya la población de México es más del 3.5%


evangélica.
 En África la iglesia arde. Es el primer continente
para hacerse mayormente Cristiana (más del
50%) en un solo siglo. Más de 25,000 nuevos
creyentes por día marcan el crecimiento de la
Iglesia.
 Más musulmanes en Irán han venido a Cristo
desde 1980 que en los previos 1000 años
anteriores. Antes de la revolución de Khomeini en
1979 había aproximadamente 2,000 creyentes
iranís. Después de años de persecución
intensificada, hay ahora más de 15,000.
 Las iglesias de Singapur son unas de las más
activas evangelísticamente en el mundo, con un
misionero enviado por cada 1,000 Cristianos.

 El número de personas que está siendo presentada el


plan de salvación cada día es ahora al menos
260,274.
 Cada día el número añadido al cuerpo de Cristo por
todo el mundo hace un promedio de 174,000
personas y 3,500 nuevas iglesias se abren cada
semana mundialmente.

¡TENEMOS UNA IDENTIDAD


EXTRAORDINARIA!
Identidad de la iglesia
según Dios
 Romanos 5:1, “En consecuencia, ya que hemos sido
justificados mediante la fe, tenemos paz con Dios por
medio de nuestro Señor Jesucristo.” Estoy justificado.
 Romanos 5:8, “Pero Dios demuestra su amor por nosotros
en esto: en que cuando todavía éramos pecadores,
Cristo murió por nosotros.” Aun siendo yo un pecador,
Cristo demostró su amor y murió por mis pecados.
 Romanos 6:6, “Sabemos que nuestra vieja naturaleza fue
crucificada con él para que nuestro cuerpo pecaminoso
perdiera su poder, de modo que ya no siguiéramos
siendo esclavos del pecado;” Estoy librado del poder del
pecado.
 Romanos 8:1, “Por lo tanto, ya no hay ninguna
condenación para los que están unidos a Cristo Jesús,”
Estoy perdonado y no condenado por mi pecado.

 Romanos 8:15, “Y ustedes no recibieron un espíritu


que de nuevo los esclavice al miedo, sino el Espíritu
que los adopta como hijos y les permite clamar: «
¡Abba! ¡Padre!»” Soy un hijo de Dios.
 Romanos 8:38-39, “Pues estoy convencido de que
ni la muerte ni la vida, ni los ángeles ni los
demonios, ni lo presente ni lo por venir, ni los
poderes, ni lo alto ni lo profundo, ni cosa alguna en
toda la creación, podrá apartarnos del amor que
Dios nos ha manifestado en Cristo Jesús nuestro
Señor.” Estoy seguro en el amor de Dios.
 Efesios 1:3, “Alabado sea Dios, Padre de nuestro
Señor Jesucristo, que nos ha bendecido en las
regiones celestiales con toda bendición espiritual
en Cristo.” Estoy bendecido espiritualmente.
Identidad de la iglesia

 Efesios 1:11, “En Cristo también fuimos hechos


herederos, pues fuimos predestinados según el
plan de aquel que hace todas las cosas
conforme al designio de su voluntad,” Soy un
heredero de Dios según Su voluntad.
 Efesios 2:10, “Porque somos hechura de Dios,
creados en Cristo Jesús para buenas obras, las
cuales Dios dispuso de antemano a fin de que las
pongamos en práctica.” Soy una hechura de
Dios.

Identidad de la iglesia

 Somos la sal de la tierra y luz del mundo (Mt 5:13, 14)


 Somos parte de la vid verdadera (Mt. 15:1,5)
 Somos coheredero de Cristo, compartiendo su herencia con
él (Romanos 8:17)
 Somos templo morada de Dios. Su Espíritu mora en nosotros
(3:16, 6:19).
 Somos santos (1:1, 1ª de Corintios 1:2; Filipenses 1:1, Colosenses
1:2)
 Somos hechura de Dios, su obra especial nacido de nuevo en
Cristo para ser su obra (Efesios 2:10)
 Somos miembros del cuerpo de Cristo (12:27, Efesios 5:30).
 Somos ciudadanos del cielo (3:20; Efesios 2:6).
 Soy hijo de Dios; espiritualmente, Dios es mi padre (Gálatas
3:26; 4:6).
 Soy escogido de Dios santo y amado (1 Tesalonicenses 1:4)
Identidad de la iglesia

 Somos amigos de Cristo.


 Soy elegido por Cristo para llevar su fruto.
 Soy siervo de la justicia.
 Soy hecho siervo de Dios.
 Soy una nueva creación.
 Estoy reconciliado con Dios y soy ministro de
reconciliación (5:18 y 19) e hijo de Dios.
 Soy hijo de Dios y uno con Cristo.
 Soy heredero de Dios, pues soy hijo de Dios.
 Soy conciudadano del resto de la familia de Dios.
 Soy prisionero de Cristo.
 Soy justo y santo.

Identidad de la iglesia

 Estoy escondido con Cristo en Dios.


 Soy la expresión de la vida de Cristo porque él es mi vida.
 Soy hijo de Dios y no oscuridad.
 Soy una de las piedras vivas de Dios siendo edificado en
Cristo como una casa espiritual.
 Soy miembro del linaje escogido, un sacerdocio real, una
nación santa, un pueblo adquirido por Dios.
 Soy un extranjero en este mundo en el cual vivo
temporalmente.
 Soy enemigo del diablo.
 Soy nacido de Dios, y el maligno no puede tocarme.
FIN
Los propósitos de la iglesia por Wayne A. Gruden. Sacado del libro Teología Sistemática (páginas 912-
914).

Podemos entender los propósitos de la iglesia en términos de ministerio a Dios,


ministerio a los creyentes, el ministerio al mundo.
1. Ministerio a Dios: Adoración. En relación a Dios el propósito de la iglesia es
adorarle. Pablo dice a la iglesia de Calosas: «Canten salmos, himnos y canciones espirituales
a Dios, con gratitud de corazón» (Col 3:16). Dios nos ha destinado y señalado
en Cristo para que «seamos para alabanza de su gloria» (Ef 1:12). La
adoración en la iglesia no es meramente una preparación para algo más: es en sí
misma cumplir el propósito principal de la iglesia con referencia a su Señor. Por
eso Pablo puede seguir una exhortación de que debemos «aprovecha[r] al máximo
cada momento oportuno» con un mandamiento de ser llenos del Espíritu y
entonces decir: «Canten y alaben al Señor con el corazón» (Ef 5:16-19).

2. Ministerio a los creyentes: Nutrir. Según la Biblia la iglesia tiene una obligación
de nutrir a los que ya son creyentes y edificarlos a la madurez en la fe. Pablo
dijo que su propia meta no era simplemente llevar a las personas a la fe inicial que
salva sino «presentar peifecto en CristoJesús a todo hombre» (Col 1:28, RVR). Le dijo
a la iglesia de Éfeso que Dios dio a la iglesia personas dotadas «a fin de capacitar al
pueblo de Dios para la obra de servicio, para edificar el cuerpo de Cristo. De este
modo, todos llegaremos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a
una humanidad perfecta que se conforme a la plena estatura de Cristo» (Ef4:12-13).
Es claramente contrario al patrón del Nuevo Testamento pensar que nuestra única
meta con las personas es llevarlas a la fe inicial que salva. Nuestra meta como
iglesia debe ser presentar a Dios a todo creyente «perfecto en Cristo» (Col 1:28).

3. Ministerio al mundo: Evangelización y misericordia. Jesús les dijo a sus discípulos:


«hagan discípulos de todas las naciones» (Mt 28: 19). Esta obra evangelizadora
de declarar el evangelio es el ministerio primario de la iglesia hacia el mundo. 3
!

Sin embargo, acompañando a la obra de evangelización también está un ministerio


de misericordia; misericordia que incluye atender en el nombre del Señor a los
pobres y necesitados. Aunque el énfasis del Nuevo Testamento es dar ayuda material
alas que son parte de la iglesia (Hch 11:29; 2 Ca 8:4; 1Jn3:17), con todo hay una
afirmación de que es correcto ayudar a los no creyentes aunque ellos no respondan
con gratitud o aceptación del mensaje del evangelio. Jesús nos dice:
Ustedes, por el contrario, amen a sus enemigos, háganles bien y denles prestado sin
esperar nada a cambio. Así tendrán una gran recompensa y serán hijos del Altísimo,
porque él es bondadoso con los ingratos y malvados. Sean compasivos, así como su Padre
es compasivo (Lc 6:35-36).

El punto de la explicación deJesús es que debemos imitar a Dios al ser bondadosos


por igual con los que son ingratos y egoístas. Es más, tenemos el ejemplo deJesús
que no intentó sanar sólo a los que lo aceptaron como Mesías. Más bien, cuando
grandes multitudes vinieron a él, «él puso las manos sobre cada uno de ellos y los
sanó» (Lc 4:40). Esto debería animarnos a realizar obras de bondad, y orar por sanidad
y otras necesidades, en la vida de los que no son creyentes tanto como de
los creyentes. Tales ministerios de misericordia al mundo también pueden incluir
participación en actividades cívicas o intentar influir en las políticas del gobierno
para hacerlas más consistentes con los principios morales bíblicos. En aspectos en
que hay una injusticia sistemática manifestada en el tratamiento de los pobres o de
minorías étnicas o religiosas, la iglesia también debería orar y, según se presente la
oportunidad, hablar contra tal injusticia. Todos estos son maneras en las que la
iglesia puede suplementar su ministerio evangelizador al mundo y en verdad adornar
el evangelio que profesa. Pero tales ministerios de misericordia al mundo nunca
deben llegar a ser sustituto de una evangelización genuina o de los otros
aspectos de ministerio a Dios y a los creyentes mencionados arriba.
4. Cómo mantener en equilibrio estos propósitos. Una vez que hemos mencionado
estos tres propósitos para la iglesia alguien puede preguntar: ¿cuál es el más
importante? O tal vez algún otro pudiera preguntar: ¿podríamos descuidar alguno
de estos tres como menos importante que los otros?
A eso debemos responder que el Señor ordena en la Biblia todos los tres propósitos
de la iglesia; por consiguiente, los tres son importantes y no se puede descuidar
ninguno. Es más, una iglesia fuerte tendrá ministerios efectivos en todos estos
tres aspectos. Debemos evitar cualquier intento de reducir los propósitos de la
iglesia a sólo uno de estos tres y decir que debería ser nuestro enfoque primario.
En verdad, tales intentos de hacer primario uno de estos propósitos siempre resultarán
en algún descuido de los otros dos. Una iglesia que hace énfasis sólo en la adoración acabará con
enseñanza bíblica inadecuada de los creyentes y sus miembros permanecerán con superficialidad en su
comprensión de las Escrituras e inmaduros en sus vidas cristianas. Si también empieza a descuidar la
evangelización la iglesia dejará de crecer en su influencia a otros, se volverá egocéntrica ya la larga
empezará a marchitarse.
Una iglesia que pone la edificación de los creyentes como el propósito que
toma preferencia sobre los otros dos tenderá a producir creyentes que saben mucha
doctrina bíblica pero que cuyas vidas espirituales son secas porque conocen
muy poco del gozo de adorar a Dios o de hablarles a otros en cuanto a Cristo.
Pero una iglesia que pone en la evangelización tal prioridad que hace que los
otros dos propósitos queden en el descuido también terminará con creyentes inmaduros
que hacen énfasis en el crecimiento en números pero que tienen menos y
menos genuino amor a Dios expresado en su adoración, y menos y menos madurez
doctrinal y santidad personal en sus vidas. Una iglesia saludable debe recalcar
continuamente los tres propósitos.

Sin embargo, los individuos son diferentes de la iglesia al poner una prioridad relativa
en uno u otro de los propósitos de la iglesia. Debido a que somos como un
cuerpo con diversos dones espirituales o capacidades, es correcto que pongamos
más de nuestro énfasis en el cumplimiento del propósito de la iglesia que está más
estrechamente relacionado a los dones e intereses que Dios nos ha dado. Ciertamente
no hay obligación que todo creyente intente dar exactamente un tercio de
su tiempo en la iglesia a la oración, otro tercio a cultivar otros creyentes, y un tercio
a la evangelización y obras de misericordia. Alguien con el don de evangelización
debería por supuesto pasar algún tiempo en adoración y cuidando a otros
creyentes, pero puede acabar dedicando la vasta mayoría de su tiempo en obra
evangelizadora. Alguien que es un dirigente talentoso de adoración puede acabar
dedicando el 90 por ciento de su tiempo en la iglesia a la preparación y dirección de
la adoración. Es solamente apropiada respuesta a la diversidad de dones que Dios
nos ha dado.

Notas al pie:

29Una conclusión similar la expresó J. Gresham Machen ya en 1923: «La Iglesia de Roma puede representar
una perversión de la religión cristiana; pero e1liberalismo naturalista no es cristianismo para nada» (Christianity
and Liberalism, [Eerdmans, Grand Rapids, 1923J, p. 52).
30En el próximo capítulo consideraremos la cuestión de la pureza de la iglesia. Aunque los creyentes no se deben
asociar voluntariamente con una iglesia falsa, debemos reconocer que entre las verdaderas iglesias hay iglesias
más puras y menos puras (ver consideración en el capítulo 45, abajo). También es importante notar aquí que
algunas denominaciones protestantes de teología liberal pueden tener muchas iglesias falsas dentro de la denominación
(iglesias en donde no se predica ni se oye el evangelio) y todavía tener algunas congregaciones locales que
predican el evangelio clara y fielmente y son verdaderas iglesias.

31No es mi intención decir que la evangelización es más importante que la adoración o el ministerio al creyente, sino que es nuestro
ministerio principal para con el mundo.
Declaración de Fe
1. Creemos en las Sagradas Escrituras, la Biblia, que como palabra inspirada de Dios mediante
la cual se revela al ser humano, no contiene error en sus originales y constituye la única
regla infalible de fe y conducta.
2. Creemos en un Dios único, existente y revelado en las Escrituras en las personas del Padre,
del Hijo y del Espíritu Santo.
3. Creemos en Jesucristo como único y suficiente Salvador, en su encarnación por obra y
gracia del Espíritu Santo y que su obra redentora, muerte y resurrección es suficiente para la
salvación del ser humano, sin necesidad de obras. En ningún otro hay salvación.
4. Creemos en la salvación integral del ser humano (cuerpo, alma y espíritu), ofrecida
gratuitamente mediante un acto soberano de Dios y obtenida por la fe en Jesucristo.
Creemos que todo ser humano es pecador y que, para ser salvo, en su libre albedrío, debe
aceptar la Gracia de Dios con la indispensable necesidad de arrepentimiento, confiar en la
eficacia del sacrificio expiatorio de Cristo Jesús en la Cruz, quien murió por toda la
humanidad como pago de la deuda contraída por nuestros pecados y, además, permanecer
fiel hasta la muerte cuidando nuestra salvación que es susceptible de perderse por causa de
infidelidad o apostasía.
5.

6. Creemos en la Promesa del Padre, el bautismo en el Espíritu Santo por el que los creyentes
son investidos de poder, para ser testigos de Jesucristo, servir a Dios y vivir en santidad. La
evidencia inicial es hablar en lenguas desconocidas, diferenciando este hecho del don de
lenguas.
7. Creemos en la Iglesia, que es el cuerpo de Cristo, compuesta por todos los creyentes
nacidos de nuevo, con su doble carácter: universal y local, y cuya única cabeza es Jesucristo
mismo.
8. Creemos en el bautismo por inmersión y la cena del Señor como ordenanzas dadas por el
Señor a su iglesia. El bautismo, como testimonio público de conversión al evangelio de
Jesucristo en identificación con su muerte, sepultura y resurrección. La santa cena como
recordatorio de su muerte, señal del Nuevo Pacto, y anuncio de su segunda venida.
9. Creemos en el sacerdocio universal de los creyentes, siendo Jesucristo el único mediador
entre Dios y los hombres. Creemos en la oración en el nombre de Jesús como medio de
comunicación con Dios.
10. Creemos en la vigencia actual de los dones espirituales, manifestaciones sobrenaturales del
poder del Espíritu Santo, dados a la iglesia para su edificación.
11. Creemos en el poder de Dios, capaz de obrar prodigios, milagros y sanidades hoy día.
12. Creemos en el arrebatamiento de la iglesia y la segunda venida de Jesucristo, junto con sus
santos, para establecer su reino sobre la tierra.
13. Creemos en la resurrección de los muertos y el juicio final, unos para vida eterna, otros para
condenación eterna.

Aprobado en la XXXVI Convención


Junio 1999
Modificado Punto 4 en el V Congreso FADE
Febrero 2009
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5. Las ordenanzas de la
iglesia
Por: Pastor Osmany Cruz Ferrer
 Predicar el evangelio de 
Cristo.
“Pues no me envió Cristo a 
bautizar, sino a predicar el 
evangelio; no con sabiduría 
de palabras, para que no se 
haga vana la cruz de 
Cristo” (1 Co 1.17)

 Los términos  
"bautismo", "bautizar", 
vienen del griego 
"baptizo", “baptizein” y 
significan inmersión, 
sumergir, introducir 
dentro del agua. 
 Jesús dejó mandatos específicos 
para los integrantes de su iglesia:
Hacer discípulos, amarse unos a otros 
como él nos amó, perdonar las ofensas, 
orar por los demás, 0cuparse de las 
necesidades de otros, recordar su muerte 
y anunciarla a través de la eucaristía, 
bautizarse en el nombre del Padre del 
Hijo, y del Espíritu santo, etcétera.

El bautismo en aguas tiene una 
importancia singular por todo el 
significado que encierra.
 El Ejemplo del Señor Jesucristo.
Mateo 3: 13; Lucas 3:21.
 El mandato directo del Señor 
Jesús a bautizarse. Mateo 28:19; 
Marcos 16:16.
 La práctica apostólica. Hechos 
2:38; 8:12; 8:36; 9:18; 10:47; 16:15 
y 33; 18:8. 
 La aprobación de Dios Padre.
Mateo 3: 17; Marcos 1:11; Lucas 
3:22; Juan 14:21; Mateo 10:32‐33.

1. Es un testimonio público, la confesión 
visible de una fe verdadera en Cristo 
Jesús.

“Y yendo por el camino, llegaron a cierta 
agua, y dijo el eunuco: Aquí hay agua; ¿qué 
impide que yo sea bautizado? Felipe dijo: Si 
crees de todo corazón, bien puedes. Y 
respondiendo, dijo: Creo que Jesucristo es el 
Hijo de Dios” (Hch 8.36‐38).

El candidato al bautismo debe ser una 
persona que comprende cabalmente el 
sacrificio salvífico de Cristo. Si no es así, 
entonces solo estamos mojando a la gente, 
no bautizándolas. 
2. Es una forma de 
identificación con la muerte 
de Cristo y una proclamación 
pública de la resurrección 
espiritual del converso a una 
vida nueva: 

“Porque somos sepultados 
juntamente con él para muerte 
por el bautismo, a fin de que 
como Cristo resucitó de los 
muertos por la gloria del Padre, 
así también nosotros andemos 
en vida nueva” (Ro. 6:4). 

3. Es una manera visible de 
afirmar nuestra unidad Con 
Cristo y su iglesia. 
4. Es un  símbolo de la 
muerte del "viejo 
hombre" y la 
resurrección del  
"nuevo hombre", para 
andar en una vida 
nueva (Ro. 6:4‐6; Ef. 
4:22‐24).

5. Es una manera visible de 
confirmar nuestra iniciación en 
la iglesia, columna y baluarte de 
la verdad (1 Tim. 3:15).
1. Fe en el Señor 
Jesucristo. 

2. Arrepentimiento.

Bautismo por inmersión: 
“Porque somos sepultados juntamente con él para
muerte por el bautismo, a fin de que como Cristo
resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así
también nosotros andemos en vida nueva” (Ro. 6:4).

 Martín Lutero dijo: "Yo haría  que aquellos que fueran 
bautizados sean  sumergidos completamente como la 
palabra sugiere y el misterio significa." 

 Juan Calvino: "La palabra “bautizar” significa 
sumergir. Ciertamente la inmersión era la práctica de la 
iglesia primitiva." 

 Juan Wesley: "Sepultado con Él, alude a bautizar por 
inmersión según la costumbre de la primera iglesia." 
 Formula trinitaria.
“Por tanto, id, y haced 
discípulos a todas las 
naciones, bautizándolos 
en el nombre del Padre, y 
del Hijo, y del Espíritu 
Santo” (Hch. 28.19).

Al bautizarse en agua, el creyente 
declara al mundo que:

1. Ha aceptado a Cristo como el Señor y 
Salvador de su vida.

2. Que de la manera en que es 
sumergido en el agua y queda cubierto 
por ella, así muere a la vieja vida, la 
cual queda sepultada para siempre en 
las aguas del Bautismo.

3. Que al emerger del agua, ha 
resucitado a la nueva vida y ahora vive 
para el Señor, decidiendo serle fiel por 
el resto de sus días.
 El bautismo en agua es una ordenanza que debemos 
respetar, obedecer y anunciar.
 Enseñemos esta doctrina y estimulemos a su 
obediencia.

 La santa cena, la cena del Señor 
(1 Co. 11:20)
 La mesa del Señor (1 Co. 10:21)
 La comunión (1 Co. 10:16)
 La eucaristía.
Son varios de los nombres para 
referirse a la ordenanza de Jesús 
comprendida en los pasajes de 
Mateo 26:17‐29, Marcos 14:12‐
25, Lucas 22:7‐23, 1 Corintios 
11:23‐26. 
Es un mandamiento de Jesús 
para todos los creyentes (1Co 
11.23‐26)
 Deben participar de esta 
conmemoración sólo aquellos 
creyentes que vivan en armonía 
con las enseñanzas de la 
Palabra de Dios (2 P. 2:12‐21; 1 
Jn. 1:7; Jud. 12‐16), 
 Que hayan sido instruidos en la 
significación y repercusión de 
la participación en la santa 
cena y que tengan la capacidad 
para comprender el alcance de 
este acto. 
 Debido a esto, es aconsejable 
reservar esta práctica a 
creyentes que ya han sido 
bautizados y por tanto, 
debidamente instruidos en las 
verdades del evangelio.

 La santa cena es una ordenanza 
instituida por Jesús para que 
conmemoremos su obra 
redentora. 
 Los elementos que la componen 
son el pan y el vino. El pan es tipo 
del cuerpo de Jesús, entregado 
por nuestras rebeliones a la 
cruenta muerte por crucifixión: 
“Y mientras comían, tomó Jesús el 
pan, y bendijo, y lo partió, y dio a 
sus discípulos, y dijo: Tomad, 
comed; esto es mi cuerpo” (Mt. 
26:26). 
 El vino tipifica la sangre 
derramada en remisión por 
nuestros pecados: “Y tomando 
la copa, y habiendo dado 
gracias, les dio, diciendo: 
Bebed de ella todos; porque 
esto es mi sangre del nuevo 
pacto, que por muchos es 
derramada para remisión de 
los pecados” (Mt. 26:27,28). 

 La santa cena es, por tanto, una conmemoración de la 
obra redentora de Cristo “haced esto en memoria de 
mi”. Se ha de participar de ella con acciones de gracias 
(Mr. 14:23; Lc. 22:19). 
 La santa cena es comunión con Cristo y comunión con 
los miembros de su cuerpo, la iglesia: “La copa de 
bendición que bendecimos, ¿no es la comunión de la 
sangre de Cristo? El pan que partimos, ¿no es la 
comunión del cuerpo de Cristo? Siendo uno solo el 
pan, nosotros, con ser muchos, somos un cuerpo; pues 
todos participamos de aquel mismo pan” (1 Co. 
10:16,17). 

 La santa cena también es un compromiso “hasta que él 
venga” y un recordatorio de su pronto advenimiento.
 La santa cena es un recordatorio 
de las verdades más 
sobresalientes del evangelio:     
 (1) La Salvación, que como este 
pan, es el regalo del amor de 
Dios. 
 (2) Es un recordatorio de la vida 
de Cristo –todo lo que él fue, hizo 
y dijo.  
 (3) Nos recuerda la atroz 
esclavitud del pecado de la que 
fuimos redimidos por Cristo. 

 (4) Enfatiza la obra de expiación, el 
cuerpo de Cristo ‘entregado’ y su 
sangre derramada por nosotros.
 (5) Proclama que sólo en Cristo hay 
perdón y salvación del pecado, la 
primera necesidad del alma. 
 (6) Proclama que Cristo es el 
alimento del alma. 
 (7) Se debe participar de ella por 
medio de la fe, o de lo contrario no 
será de utilidad alguna. 
 (8) Se nos enseña a compartir los 
unos con los otros las bendiciones 
espirituales que Dios nos da. 
 (9) Ella es la más íntima 
comunión con Dios en Cristo.
 (10) Es la comunión de los 
unos con los otros. 
 (11) Es una verdadera fiesta de 
gozo. 
 (12) Es una profecía de la 
segunda venida de Cristo, del 
triunfo perfecto de su reino. 
 (13) Presenta ante el mundo la 
cruz de Cristo. No es una 
reunión egoísta de unos pocos 
santos, sino una proclamación 
del Salvador de todos.

 Debido a la seriedad de la 
ordenanza y a las reales 
consecuencias de tomar la 
cena indignamente, existen 
algunas razones para prohibir 
a ciertas personas participar 
de ella: “Porque el que come y 
bebe indignamente, sin 
discernir el cuerpo del Señor, 
juicio come y bebe para sí.
 Por lo cual hay muchos enfermos y 
debilitados entre vosotros, y muchos 
duermen” (1 Co. 11:29,30). Algunas de estas 
razones son:
 (1) La falta de unidad en la fe y la doctrina 
cristiana (Ro. 8:9; 2 Co. 11:4; Gá. 1:6‐9). 
 (2) Una vida moral disipada e incoherente 
con las normas bíblicas (2 P. 2:12‐21; 1 Jn. 
1:7; Jud. 12‐16).
 (3) La presencia de una actitud cismática y 
divisionista (1 Co 1:10; Tit. 3:10,11). 
 (4) La falta de instrucción (en un recién 
convertido por ejemplo) que impida al 
creyente discernir el significado de lo que 
practica. 
 (5) La falta de amor y la presencia de una 
actitud no perdonadora (Mt. 5:23,24). 

 La frecuencia para la 
observancia de la santa 
cena debe ser regulada, no 
es para todos los días, para 
que no se pierda la 
solemnidad del acto. Por 
tanto, debe celebrarse lo 
bastante cerca una de otra, 
que permita cumplir la 
ordenanza de Jesús y recibir 
sus beneficios y lo 
suficientemente 
distanciada una de otra, 
para que no se pierda la 
seriedad y la reverencia que  
ella demanda
IMPORTANCIA Y TIEMPO DEL BAUTISMO.

El Bautismo en Agua tiene una importancia especial en la vida del creyente.

No solo por su simbolismo y contenido, sino por su significado espiritual. El

mismo Señor Jesucristo ordenó el Bautismo y lo ejemplificó bautizándose al

comienzo de su ministerio público. Esto muestra que el creyente, discípulo de

Cristo, no puede eludir ni descuidar o postergar indefinidamente el Bautismo

en Agua

"Vosotros me llamáis Maestro y Señor, y decís bien porque lo soy.

Ejemplo os he dado, para que como yo hice, vosotros también hagáis”,

Dice Jesús en Juan. 13:13 y 15.

El bautismo en Agua era tan frecuente y normal en la Iglesia primitiva, que,


como afirma el comentarista bíblico F. F. Bruce: "La idea de un cristiano sin
bautizar es sencillamente algo que no se considera siquiera en el Nuevo
Testamento".

Algunos no lo valoran así, subestiman y postergan indefinidamente el Bautismo


en Agua. Esto es una falta de conocimiento e información bíblica y quizá una
actitud negligente, irresponsable y hasta desobediente ante Dios. La
obediencia conscientemente retardada y olvidada, se convierte en
desobediencia y resulta inexcusable. Hay quienes aceptan más fácilmente a
Cristo como Salvador, quien soluciona sus problemas, que como su Señor,
quien tiene toda autoridad sobre su vida. Jesús es el Kyrios de Dios, el único y
verdadero Señor.

Por otra parte algunos creyentes, tal vez basándose en el episodio de Felipe y
el eunuco etíope (Hechos 8:26-40) o exagerando la importancia y urgencia del
Bautismo, consideran que el nuevo convertido debe bautizarse apenas haya
aceptado al Señor, o en una fecha lo más cercana posible a su conversión.

Una actitud y postura intermedia, es más razonable y equilibrada. Postergar


indefinidamente y sin motivo el Bautismo, es irresponsable y hasta inexcusable
ante Dios. Pero a la vez, animar al nuevo convertido a que se bautice
inmediatamente, puede ser precipitado e inoportuno, exponiendo al
interesado a la simple práctica de un rito y privándole de la bendición que
supone la debida preparación.

¿Cuánto tiempo debe pasar entre el momento de la conversión y el Bautismo


en Agua?

Dependerá de las diferentes circunstancias en cada caso, pero siempre


deberá ser el tiempo necesario para asegurar que el nuevo convertido reciba
la instrucción y adecuada preparación que le permita acceder al Bautismo
libre, consciente y responsablemente. En el caso del eunuco, sin duda que
Felipe, guiado por el Espíritu, sabía con certeza que el mismo estaba
suficientemente preparado. En todo caso, el Bautismo en Agua se realiza a
petición del interesado; libre de toda presión y después de haber recibido la
oportuna y conveniente preparación.

SIGNIFICADO DEL BAUTISMO.

¿Cuál es el significado del bautismo? El bautismo ilustra dos verdades:

1. Ilustra la muerte, sepultura y resurrección de Cristo. "Cristo murió por nuestros


pecados. Fue sepultado y resucitó." La Biblia nos enseña que mediante el
bautismo nos identificamos con Cristo en su muerte y resurrección. En nuestra
iglesia bautizamos como lo hacía la iglesia en sus comienzos. La persona es
sumergida totalmente bajo el agua. Es símbolo de un entierro y resurrección.
Así como Jesucristo fue muerto y sepultado en la tierra y entonces resucitó al
tercer día. Lucas 24:46.

2. El bautismo ilustra mi nueva vida como cristiano. 2ª Corintios 5:17 "Cuando


alguien se vuelve un Cristiano, él es una nueva persona interiormente. La vieja
vida ha fallecido y una nueva vida ha empezado." En la Biblia no se concibe la
idea de alguien que diga ser cristiano sin ser bautizado. Lo más natural y lógico
al recibir a Cristo era bautizarse.

"Mediante nuestro bautismo nosotros fuimos sepultados con Él y compartimos


su muerte, para que, así como Cristo resucitó de los muertos, así también
nosotros llevemos una nueva vida”.
Jesús fue quien instituyó la práctica y ordenanza del Bautismo en Agua,
primero con su ejemplo,

“Entonces Jesús vino de Galilea a Juan al Jordán, para ser bautizado por él. Mas
Juan se le oponía, diciendo: Yo necesito ser bautizado por ti, ¿y tú vienes a mí?
Pero Jesús le respondió: Deja ahora, porque así conviene que cumplamos toda
justicia. Entonces le dejó. Y Jesús, después que fue bautizado, subió luego del agua;
y he aquí los cielos le fueron abiertos, y vio al Espíritu de Dios que descendía como
paloma, y venía sobre él.
Y hubo una voz de los cielos, que decía: Este es mi Hijo amado, en quien tengo
complacencia”. Mateo 3:13-17

y luego con su mandato,


“Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el
nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo”. Mateo 28:9.

El Bautismo en Agua significa el paso de obediencia al mandamiento del


Señor, y es la oportunidad en la que el creyente da testimonio público de su fe
y experiencia con Jesucristo.
El Bautismo en Agua representa la identificación del creyente con Jesucristo en
su muerte, sepultura y resurrección. Muerte al pecado, sepultura de la vieja
vida y resurrección a una vida en comunión con el Señor.
De manera que en el Bautismo, el creyente muestra exteriormente y da
testimonio público de lo que experimentó interior y personalmente al aceptar
a Jesucristo, como el Salvador y Señor de su vida. En el creyente se repiten
espiritualmente los acontecimientos reales de la muerte, sepultura y
resurrección en la vida de Jesús. Así que, al bautizarse en agua, el creyente en
forma simbólica y representativa, declara al mundo:

 1. Que ha aceptado a Cristo como el Señor y Salvador de su vida


 2. Que de la manera en que es sumergido en el agua y queda cubierto
por ella, así muere a la vieja vida, la cual queda sepultada para
siempre en las aguas del Bautismo.
 3. Que al emerger del agua, ha resucitado a la nueva vida y ahora vive
para el Señor, decidiendo serle fiel por el resto de sus días.

Los términos "bautismo", "bautizar", vienen del griego "baptizo", “baptizein” y


significan inmersión, sumergir, introducir dentro del agua. En el sentido
espiritual, el Bautismo en Agua ilustra las siguientes verdades:

 Salvación: La muerte, sepultura y resurrección, representan lo


esencial del Evangelio y ponen de manifiesto la naturaleza de la
salvación.
 Regeneración: Se le llama al Bautismo el "lavacro" de la
regeneración “Nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hubiéramos
hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración y por la
renovación en el Espíritu Santo”. Tito 3:5 Como referencia a la limpieza
espiritual; el agua es símbolo, medio y elemento de purificación.
 Testimonio: “Porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo
estáis revestidos”. Gálatas 3:27. El Bautismo en Agua significa que el
convertido, por la fe, se ha vestido de Cristo, y de esta manera,
los hombres pueden reconocer en él la impronta, huella divina y
carácter de Cristo, a través de sus obras.

¿QUIENES SE BAUTIZAN?

Creemos ciertamente que la persona a bautizarse es el verdadero creyente,


nacido de nuevo. Creemos también que el Bautismo en Agua es una
ordenanza y no un sacramento, como veremos a continuación.

Por otra parte, hay quienes consideran que la Iglesia debe bautizar a los niños
pequeños de sus miembros. Quienes defienden el bautismo de niños, se
apoyan en los siguientes argumentos:

1. La sugerencia de que el bautismo de infantes es la contrapartida neo-


testamentaria a la circuncisión del Antiguo Testamento y considerado el rito de
iniciación a la comunidad de creyentes. Pero este curioso paralelo carece de
apoyo bíblico sólido, ya que el bautismo del Nuevo Testamento no sustituye a
la circuncisión. Gálatas 5:2 y 6:12-1 8; Romanos 2:9.

2. La inferencia de que los bautismos realizados "en las casas", Hechos 16:15,33;
1ª Corintios 1:16, significa que al menos en alguna de aquellas casas había
infantes o niños pequeños entre los que fueron bautizados. Pero esto es más
una conjetura que una afirmación seria y fidedigna. Y lo que prueba
demasiado, no prueba nada. Tenemos el mismo derecho a conjeturar y
pensar que los que se bautizaron en esas casas eran solamente los creyentes,
sujetos capaces, libres y moralmente responsables.

3. La creencia de que el niño nace con el pecado original y necesita el


perdón. Aparte de que esto no está de acuerdo con la afirmación de Jesús
mismo, Marcos 10:14, entendemos que el pecado original no lo heredamos
biológica sino representativamente, que el hombre deberá responder a Dios
por los pecados personales y que el bautismo no tiene poder para realizar lo
que sería una especie de regeneración sacramental. El Nuevo Testamento no
registra expresa y directamente ni un solo caso en el que un solo niño fuera
bautizado en agua Pero sí afirma que el bautismo debe ir precedido de la fe.
“El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere,
será condenado” Marcos 16:16.

En consecuencia, el verdadero sujeto del Bautismo es el creyente nacido de


nuevo, en pleno ejercicio de su libertad y facultad de tomar decisiones. De
esta manera, el Bautismo constituye el complemento y confirmación de la
conversión previa o experiencia de salvación, y la evidencia de que el
creyente decide seguir y obedecer a Jesucristo.

Por lo tanto, concluimos que el bautismo de niños es una práctica que no


cuenta con apoyo bíblico. La Biblia dice en Marcos 16:16: "el que creyere",
primero, "y fuere bautizado", después de creer, lo cual supone ser sujeto
moralmente responsable. El niño es incapaz de pecados personales, hasta que
llega al uso de la razón. Mientras tanto no tiene pecados de qué arrepentirse y
no puede ejercitar fe; por lo tanto, debe lógicamente ser excluido del
Bautismo en Agua. Por otra parte, es razonable y consecuente con la
enseñanza bíblica, la práctica y costumbre de la Iglesia cristiana, de presentar
y dedicar los niños al Señor en el culto público.

Mateo 19:13-15; Marcos 10:13-16.

Entonces ¿Quién debe bautizarse? Cada persona que ha creído en Cristo.

"Aquellos que creyeron y aceptaron Su mensaje fueron bautizados." Hechos 8:13

"Pero cuando creyeron a Felipe cuando él predicó las Buenas Nuevas y el nombre de
Cristo Jesús, ellos fueron bautizados, hombres y mujeres." Hechos 8:12,

En nuestra iglesia esperamos hasta que nuestros niños tienen la suficiente edad
para creer y entender el verdadero significado del bautismo, antes de que los
bauticemos. Hay sólo una condición en la Biblia para ser bautizado. Tiene que
creer en Cristo y obviamente ser lo suficiente maduro como para entender el
significado del paso que se está dando.

Tenemos por costumbre dedicar los niños al Señor. No se trata de una


ordenanza establecida por Dios en Las Escrituras. Este acto es un compromiso
entre los padres y Dios en el que se asume la responsabilidad de criar a su niño
en la fe hasta que este sea lo bastante maduro para hacer su propia decisión.
No obstante podemos afirmar que esta práctica está en armonía con la
costumbre que Jesús tenía de tomar los niños en sus brazos y bendecirlos.
Esta costumbre empezó aproximadamente 300 años después que la Biblia se
terminó. No está en la Biblia. Es sólo una tradición. Esto es diferente al
bautismo del que se habló en la Biblia, que era sólo para los que eran
bastante maduros para creer. El propósito es confesar públicamente su
compromiso personal con Cristo.

En nuestra iglesia es necesario estar bautizados para ser miembros. Cada


miembro debe ser bautizado de la manera que Jesús lo hizo. Esto es
independiente de lo que nuestros padres hayan hecho con nosotros cuando
niños.

ORDENANZA O SACRAMENTO.

Existe una diferencia importante en la interpretación de estos dos términos:


ordenanza y sacramento. Algunos los utilizan en forma indistinta e
intercambiable, como si fueran sinónimos. Otros dan a cada uno de estos dos
términos un significado totalmente distinto, lo que ha llegado a originar
diversos grupos dentro del cristianismo.

La mayoría de los grupos Evangélicos están de acuerdo en que el Señor


Jesucristo dejó a la Iglesia únicamente dos ordenanzas, es decir, dos
ceremonias ú observancias que se deben incorporar a la vida cristiana: el
Bautismo en Agua y la Cena del Señor.

Por otra parte, la Iglesia Católico Romana sostiene que Jesucristo instituyó siete
sacramentos: además del Bautismo y la Eucaristía, la Confirmación, Penitencia,
Unción de enfermos, Orden Sacerdotal y Matrimonio. Según esta iglesia, los
sacramentos son signos visibles y eficaces de la gracia. Esto significa que no
solo son canales, sino que producen y otorgan la gracia que significan. Así el
Bautismo en Agua, (que, junto con la Confirmación y Eucaristía, son los
sacramentos de iniciación a la vida cristiana), constituye y otorga el
nacimiento a la nueva vida en Cristo, concede el perdón del pecado original
y de todos los pecados personales y hace que el que se bautiza sea hecho
hijo adoptivo del Padre, miembro de Cristo, templo del Espíritu Santo e
incorporado a la Iglesia ó Cuerpo de Cristo. Pero todo esto contradice la
enseñanza bíblica que afirma que la salvación y el perdón de pecados se
obtienen únicamente por fe. Efesios 2:8-9; Iª Juan 1:7.
La palabra “sacramento” deriva del latín “sacramentum” y originalmente era
un término jurídico. Se refería a la suma de dinero depositada en lugar sagrado
por las partes de un litigio o pleito civil. De acuerdo al fallo del tribunal, se
devolvía el dinero al ganador y se le quitaba al perdedor. Posteriormente se
aplico el término sacramento al juramento de fidelidad del nuevo recluta en el
ejército romano. En el siglo II, los cristianos adoptaron el término para referirse
al voto de obediencia y consagración al Señor. La Vulgata lo usó añadiendo
el concepto de misterio, algo oculto, arcano o sagrado.

El término “ordenanza” deriva del latín “ordo”, orden, disposición. Relacionado


con el Bautismo y Santa Cena, este término sugiere la idea de ceremonias
sagradas instituidas por mandato u orden de Cristo, que tienen un carácter
puramente representativo, simbólico y conmemorativo. En la interpretación
evangélica, el término “ordenanza” de ninguna manera incluye la idea de
poseer un poder místico u otorgar por sí mismo la salvación.

Concluimos en consecuencia que el Bautismo en Agua no es un sacramento


por el que se obtiene la salvación y perdón de pecados. Es una ordenanza
con un simbolismo espiritual, que ilustra adecuadamente la salvación.

FUNDAMENTO BÍBLICO.

¿Cuál es la razón fundamental o motivo del Bautismo en Agua? ¿Por qué debe
bautizarse el nuevo convertido?

La práctica del Bautismo en Agua se fundamenta en los siguientes motivos:

1. El Ejemplo del mismo Señor Jesucristo.


2. El mandato directo del Señor Jesús.
3. La práctica de los apóstoles.
4. El significado del mismo Bautismo.
5. La aprobación de Dios Padre.
El creyente debe bautizarse en primer lugar porque Cristo mismo se bautizó al
comenzar su ministerio público, dando el ejemplo de lo que sus discípulos
deberían hacer. Mateo 3: 13; Lucas 3:21.

En segundo lugar, antes de ascender a los cielos, el mismo Señor ordenó


expresamente bautizarse a todo aquel que había de creer en Él. Mateo 28:19;
Marcos 16:16.

Este mandato, en tercer lugar, está confirmado por la interpretación de los


apóstoles y la práctica de la Iglesia. Hechos 2:38; 8:12; 8:36; 9:18; 10:47; 16:15 y
33; 18:8. Es importante observar la naturalidad y prontitud con que se
bautizaban los creyentes en la Iglesia primitiva.

Por último, el que se bautiza, está siendo objeto de la aprobación y


complacencia divinas, como sucedió con el Señor Jesús, y se hace acreedor a
la protección y defensa del Hijo ante el Padre celestial. Mateo 3: 17;
Marcos 1:11; Lucas 3:22; Juan 14:21; Mateo 10:32-33.

REQUISITOS PARA EL BAUTISMO.

Antes de descender a las aguas del Bautismo el nuevo convertido debe haber
dado los dos pasos previos a la conversión:

 a)Arrepentimiento y
 b) Fe en el Señor Jesucristo.

El arrepentimiento es el resultado de reconocerse pecador, despojado de la


gloria de Dios y merecedor de su justicia divina. Se examina a sí mismo y se
reconoce pecador. Esta actitud le lleva a arrepentirse y sentir dolor por sus
pecados, que son los que le separan de Dios.

Seguidamente dirige su mirada a la cruz, y el Espíritu Santo nos hace entender

que el sacrificio y muerte de Cristo en el Calvario es el único remedio para

poder librarnos del pecado, ya que Cristo murió en nuestro lugar, y obtenemos

así la vida eterna. La conversión y el Bautismo tienen relación entre sí, como si

fueran dos aspectos de una misma realidad, y como se afirma en distintos

pasajes bíblicos. Hechos 2:38; 8:35-38; 17:30. En Juan 3:16-19 e Isaías 53,

encontramos descrita la condición del hombre pecador y su necesidad. Y en

Juan 1:12; 3:16; Romanos 10:10-11 vemos las consecuencias del

arrepentimiento y la conversión.

EFICACIA DEL BAUTISMO.

El Bautismo en Agua no salva. La salvación se obtiene solamente por la fe. El


creyente no se bautiza "para" ser salvo, sino "porque" es salvo. Se supone que
quien se bautiza, ya ha tenido previamente la experiencia de la salvación. De
hecho, si no ha tenido antes la experiencia de la salvación, no puede ni debe
bautizarse. Y si lo hiciera, sería un rito vacío y sin sentido.

Aceptar a Cristo como Salvador y Señor, significa estar dispuesto a


obedecerle. Por tanto, no se podría concebir que alguien que ha entregado
su vida a Jesucristo, no esté dispuesto a obedecerle, rechazando el Bautismo o
postergándole indefinidamente y sin motivo.

Aunque no podemos afirmar que el Bautismo es absolutamente necesario


para la salvación, sí decimos que es necesario si queremos cumplir y obedecer
todo lo que mandó el Señor.

DIFERENTES FORMAS DE BAUTISMO.

A lo largo de la Historia de la Iglesia Cristiana, se han practicado diferentes


formas o métodos para administrar el Bautismo en Agua: la inmersión, el
derramamiento y la aspersión. A partir del significado original de la palabra
bautismo, (inmersión, sumergimiento), y atendiendo a la enseñanza y práctica
bíblicas, afirmamos que la forma ó método correcto es la inmersión.

El bautizado debe ser totalmente sumergido en el agua. En Mateo 3:16; Juan


3:23 y Hechos 8:36-38, se menciona que había suficiente agua, y que el
creyente entraba y salía o subía del agua.

Martín Lutero (Luteranos) dijo: "Yo haría que aquellos que fueran
bautizados sean sumergidos completamente como la palabra
sugiere y el misterio significa."

Juan Calvino (Presbiterianos) "La palabra “bautizar” significa


sumergir. Ciertamente la inmersión era la práctica de la iglesia
primitiva."

Juan Wesley (Metodistas) "Sepultado con Él, alude a bautizar por


inmersión según la costumbre de la primera iglesia."

Ya se ha explicado anteriormente el significado y simbolismo del Bautismo:


muerte, sepultura y resurrección, proceso que identifica al creyente con Cristo.
Y tal simbolismo es representado adecuada y correctamente, únicamente por
el método de inmersión.

FÓRMULA BÍBLICA.

En el momento del Bautismo, el Pastor ó Ministro debe pronunciar la fórmula ó


frase bíblica expresamente ordenada por el Señor Jesucristo en Mateo 28:19...
"en el Nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo”. Esta fórmula trinitaria
describe una experiencia. Los que son bautizados en él Nombre del Dios trino,
testifican que han sido sumergidos en la comunión espiritual de la Trinidad, e
identificados con cada una de las tres personas divinas, participando del amor
de Dios Padre, la gracia del Hijo y la comunión del Espíritu Santo. 2ª Corintios
13:14 de acuerdo al texto original griego, la conjunción "kay”: "y", tiene un
significado ilativo y pone de manifiesto la intervención y necesidad de
pronunciamiento de las tres personas divinas y no de una sola.

El Nombre del Padre, garantiza al que se bautiza el nuevo nacimiento y la


nueva vida, como hijo de su amor. Gálatas 3:26-27; 4:6-7. El Nombre del Hijo le
garantiza su participación en el perdón de los pecados y en la vida
abundante y gloriosa en Cristo. Colosenses 2:12. El Nombre del Espíritu Santo
garantiza su morada en el creyente y la renovación progresiva en la vida del
Espíritu. Tito 3:5-6 Todo creyente que se bautiza, tiene que considerar el
bautismo como su entrada en un pacto con el Dios trino, y como una promesa
y compromiso de que el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo harán por él a su
debido tiempo lo que han prometido.

Todo esto pone de manifiesto la importancia y necesidad del uso de la fórmula


trinitaria, al administrar el Bautismo en Agua. Demuestra a la vez el error de
quienes practican el Bautismo en el nombre de Jesús solo, basándose en los
textos de Hechos 3:8 y 8:16. El contexto de ambas citas bíblicas se refiere a los
judíos y samaritanos; y tanto unos como otros, necesitaban entender y
reconocer el señorío y autoridad divina de Jesús, como el Mesías ó Hijo de
Dios. De ahí que en esos casos concretos se mencione y enfatice el nombre de
Jesús, sin que eso signifique anular la mención de las otras dos personas
divinas, lo que se da por supuesto.

Algunas preguntas prácticas sobre el bautismo.

1. ¿Pueden bautizarse varios miembros de una familia juntos? Si cada


miembro de la familia entiende el significado del bautismo y se está
decidido a seguir a Cristo, no hay inconveniente alguno de hacerlo
juntos
2. ¿Tendrá que decir algo en su bautismo? Pediremos que escribas tu
testimonio y durante los bautismos al tiempo de bajar a las aguas, se
leerá para que todos puedan escuchar y disfrutar del milagro de
Dios en tu vida..
3. ¿Dónde nos situaremos durante el bautismo? Entraremos todo el
grupo juntos siguiendo las indicaciones del ministerio Red de Vida.
4. ¿Qué pasaría si necesito bautizarme en privado? Puede haber una
circunstancia especial que justifica se realice un bautismo privado.
Por ejemplo si tiene alguna fobia relativa al agua. También puede
darse el caso de circunstancias físicas que pueden ser incómodas o
violentas como por ejemplo alguien que ha sido sometido a un
tratamiento de quimioterapia y usan peluca o tupé y tiene miedo
que vaya a caerse, o si ha sido operado o algo que les causaría ser
avergonzados. . Lo único que deberá hacer es comunicarlo al
consolidador o al ministerio de Red de Vida, para realizar un
bautismo privado.
5. ¿Qué vestido debo llevar para el bautismo? Tenemos a disposición
una equipación blanca apropiadas para el bautismo.
Sería muy bueno que invites a amigos y familiares a tu bautismo. Es una
apropiada oportunidad para compartir con ellos lo hermoso de seguir a Cristo.

CONDUCTA POSTERIOR.
En el momento de la conversión, conocido también como el nuevo
nacimiento según la conversación de Jesús con Nicodemo, y desde luego,
después de haberse bautizado en agua, se entiende que el creyente debe
estar caminando en "vida nueva”. En 2ª Corintios 5:17 se explica esta
maravillosa transformación: “De modo que si alguno esta en Cristo, nueva
criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas”. La
Biblia aclara lo que es la regeneración: morir a la vida de pecado y resucitar a
una nueva vida; y lo ilustra con el Bautismo en Agua. Pero además, el Espíritu
Santo despierta este deseo dentro del creyente, y le concede la fortaleza
necesaria.

Por tanto, el nuevo convertido se da cuenta de que hay en él ahora una

Nueva vida, y no simplemente una nueva forma de vivir.

Aún más, en Romanos 8:1-4 se afirma claramente:


“Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo
Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al
Espíritu"...
Y en el versículo. 10 sigue diciendo:
"Pero si Cristo está en vosotros, el cuerpo en verdad está muerto a causa del
pecado, más el espíritu vive a causa de la justicia".

Y todavía en el ver. 16 declara que somos hijos de Dios y afirma la seguridad


de la salvación, por el testimonio directo del Espíritu:

"El mismo Espíritu da testimonio a nuestro espíritu de que somos hijos de


Dios”.

Naturalmente que esta transformación espiritual, este cambio de vida implica

una reforma total del carácter, dejando los malos hábitos y adquiriendo los

buenos al incorporar a la propia vida el fruto del Espíritu. Es un proceso que el

hombre no puede lograr por sí mismo, como resultado de su propio esfuerzo.

Nosotros no podemos reformarnos solos pues llevamos dentro nuestro la

inclinación al mal. En la lucha entre la carne y el espíritu, el hombre por sí solo

está condenado al fracaso, nace en pecado y es naturalmente malo. Por

muchos esfuerzos que haga y métodos que pruebe, no puede cambiar o dejar

su naturaleza pecaminosa ni mejorar su conducta ó perfeccionar su carácter.

Salmo 51:3-5; Jeremías 13:23; Mc. 2:17; Romanos 7:15-21; Isaías 64:5-6; Efesios

2:8-9; Gálatas 2:16; Santiago 2: 10.

Romanos 6:1-14, hace referencia al significado y simbolismo del Bautismo. En la


última parte del versículo 4, Pablo afirma que el creyente debe andar en vida
nueva. En Mateo 28:20, el mismo Jesús declaró que los que se bautizaran,
deberían guardar sus mandamientos, pero a la vez les prometió la protección
de su presencia y compañía. Así mismo, Pablo insiste en que después del
Bautismo, el creyente debe andar en novedad de vida Romanos 6:4. El
contraste entre la vieja y la nueva vida y las características y manifestaciones
antes y después de aceptar a Cristo como el Señor y Salvador, se ven
claramente en Gálatas 5:16-21; Colosenses 3:5-9 y 12-15. El creyente debe
"hacer morir lo terrenal", las cosas de la vida de pecado. Colosenses 3:5.
Romanos 8:13 y 26 afirma que el Espíritu Santo nos ayuda en nuestras
debilidades y en el intento de hacer morir los malos deseos; y ello es posible
porque el Espíritu Santo mora en nosotros desde que aceptamos a Jesucristo
como nuestro Salvador personal. Romanos 8:9; Zacarías 4:6; Filipenses 4:13;
Juan 10:10.

La vida cristiana, según enseña la Biblia, es una vida de propósito, de paz y

bienestar, de dicha y felicidad permanente, aún a pesar de las luchas y

problemas propios de la vida. Ser cristiano, hijo de Dios, es en realidad la

experiencia más fascinante y maravillosa que el ser humano puede vivir en

este mundo.

"Luz está sembrada para el justo y alegría para los rectos de corazón",

afirma el Salmo 97:11. Y Pablo en Filipenses 4:1 y 4, dice:

"Por lo demás, hermanos, gozaos en el Señor Regocijaos en el Señor siempre.


Otra vez digo: Regocijaos”.

El creyente, a pesar y en medio de los conflictos, sufrimientos y circunstancias


dolorosas de la vida, vive en victoria porque el Espíritu Santo, Dios de toda
consolación, mora en él y Jesús, Príncipe de paz, intercede a su favor ante El

Padre. Por eso no hay nada que le pueda separar del amor de Dios en Cristo

Jesús ni privar de su compañía y presencia por toda la eternidad. Rom.8:35-39;


Salmos 16:11; 23:6; 91:16.

¿Qué puedo hacer ahora para seguir creciendo en Cristo e integrarme a la


iglesia?

Deseamos que cada persona que se integra a la iglesia se desarrolle al


máximo en el precioso plan de Dios para su vida. Así mismo es nuestro anhelo
crecer como familia a fin de cumplir el llamado de Dios para nosotros y
alcanzar a todo Aragón para Cristo.

Toda la iglesia está a tu disposición para ayudarte a seguir creciendo e


integrándote en esta tu casa y familia espiritual. Hay un futuro hermoso y
desafiante de parte de Dios para tu vida.
Para ello hemos diseñado la Escuela Bíblica que luego de tu bautismo está a
tu disposición para seguir en este precioso camino que has comenzado.
Próximamente tu líder de Grupo pastoral te informará acerca del inicio del
mismo. De todos modos queremos ahora presentarte una información básica
sobre nuestra iglesia y sobre el curso que te ofrecemos para seguir creciendo.

¿Qué Significa Ser Miembro de la iglesia?

La diferencia entre ser un asistente y ser un miembro puede resumirse en una


palabra “el compromiso”. La diferencia entre ser un asistente en una iglesia y
ser un miembro es como la diferencia entre vivir juntos y estar casados. El
matrimonio significa que nos comprometemos con alguien en una unión que
se propone sea fructífera y perdurable. En nuestra iglesia entendemos la
necesidad de una membresía formal que es la expresión de una integración
real a la vida del cuerpo.

Básicamente hay cuatro razones que apoyan esta necesidad.

Una Razón Bíblica. Cristo se compromete con la iglesia. Es nuestro modelo a


seguir. Biblia dice:

"Cristo amó la iglesia y dio Su vida por ella."

De vez en cuando alguien dice, "Me gusta Jesús pero no me gusta la iglesia" o
"Yo me comprometo a Cristo pero no quiero estar comprometido a ninguna
iglesia local" o "Me gusta Cristo; yo no necesito la iglesia."

Quienes dicen esto son creyentes inmaduros y poco conocedores del precioso
regalo que Dios ha preparado para aquellos que formamos parte de su
familia.

Cuanto más maduro es un cristiano, más va a amar la iglesia. La Biblia dice


que la iglesia es la novia de Cristo y el cuerpo de Cristo. Qué pensaría si yo le
dijera, "Me gusta usted, pero me disgusta su cuerpo." Usted se ofendería por
eso. La Biblia dice que la iglesia es la novia de Cristo. Qué pensaría si yo le
dijera, "Me gusta usted, pero me cae mal su esposa." Usted se ofendería.
Cuando usted dice, "Yo amo a Jesús pero no necesito la iglesia." La Biblia dice
que Jesús murió por la iglesia. Él dio Su vida por ella. Cuanto más se asemeja
a Cristo, más voluntad tendrá para dar su vida por la iglesia. No es perfecta;
pero es por lo que Jesús murió. Si vamos a ser como Cristo, estaremos
comprometidos con la iglesia como Él lo está.

Una Razón Cultural. Es un antídoto contra el espíritu individualista de nuestra


sociedad. Vivimos una época donde muy pocas personas quieren estar
comprometidas... al trabajo, al matrimonio, a los amigos, a la iglesia. Esta
actitud ha producido una generación del mercadeo de iglesias, Igle-
negociantes y turistas de iglesias. Por una parte hay iglesias que
lamentablemente se prestan a estas situaciones tristes y por otra hay quienes
van permanentemente de una iglesia a otra con los vicios que ello conlleva.

El compromiso forma parte de los valores del verdadero cristianismo y nos


ayuda a construir un carácter sólido y fructífero.

Una Razón Práctica. Define claramente con quién puede contarse. Cada
equipo debe tener una lista. Cada escuela debe tener una matrícula. Cada
negocio tiene una nómina. Cada ejército tiene una lista de reclutas. Aún
nuestro país realiza un censo para la organización de la nación. El número de
miembros identifica quién está en la familia de Dios, la Iglesia.

Una Razón Personal. El Nuevo Testamento pone énfasis en la necesidad de


cristianos responsables y que contribuyen unos con otros al crecimiento
espiritual. No somos responsables cuando no estamos comprometidos con
ninguna iglesia en concreto.
LAS ORDENANZAS DE LA IGLESIA (Por Myer Pearlman de su libro Teología
Sistemática).

El cristianismo del Nuevo Testamento no es una religión ritualista. En el fondo,


es el contHch.o directo del hombre con Dios por medio del Espíritu. Por lo tanto, no
impone una ley rígida de adoración, sino que deja a la iglesia de toda edad y tierra para
que se ajuste al método mejor adAp.tado para la expresión de su vida. Hay, sin
embargo, dos ceremonias que son esenciales puesto que son divinamente ordenadas,
es decir, el bautismo en agua y la cena del Señor. En virtud de su carácter sacro, se las
describe con el nombre de sacramentos - literalmente, "cosas sagradas," o
"juramentos consagrados por un rito sagrado"; se las refiere también como
ordenanzas, puesto que son ceremonias "ordenadas" por el Señor mismo.
El bautismo en agua es el rito de ingreso en la iglesia cristiana, y simboliza el
comienzo de la vida espiritual; la Cena del Señor es un rito de comunión y significa que
continúa la vida espiritual. El primero representa fe en Cristo, el segundo, comunión
con Cristo. El primero es administrado solamente una vez, puesto que puede haber
solamente un comienzo de la vida espiritual; el segundo es administrado con
frecuencia, enseñándonos que la vida espiritual debe ser nutrida.
1. Bautismo.
a. El modo. El vocablo "bautizo" empleado en la fórmula bautismal significa
literalmente inmersión o el Hch.o de sumergir. Esta interpretación es confirmada por
eruditos en el estudio del idioma griego e historiadores eclesiásticos. Y hasta
estudiosos que pertenecen a iglesias que bautizan mediante el rociamiento admiten
que la inmersión fué la forma más antigua. Además existen buenas razones para creer
que para los judíos de la época Ap.ostólica el mandamiento de ser "bautizado" sugería
inmersión. Estaban relacionados con el bautismo de los prosélitos, que significaba la
conversión de un pagano al judaísmo. El convertido se ponía de pie, con el agua hasta
el cuello, mientras se le leía la ley, después de lo cual él mismo se sumergía debajo del
agua como señal de que estaba limpio de la contaminación del paganismo, y había
comenzado a vivir una nueva vida en calidad de miembro del pueblo escogido de Dios.
¿Cuándo surgió entonces la práctica de la aspersión o rociamiento, e infusión o
derramamiento del agua sobre la cabeza del bautizado? Cuando la iglesia, olvidándose
de la sencillez del Nuevo Testamento fué influenciada por las ideas paganas, asignó
una importancia no bíblica al bautismo en agua, que pasó a considerársele
ampliamente esencial para la reGn.eración. Se lo administraba por lo tanto a los
enfermos y moribundos. Puesto que la inmersión estaba descartada en esos casos, el
bautismo era administrado mediante la aspersión. Posteriormente, debido a la
conveniencia del método, éste se hizo Gn.eral. Asimismo, y debido a la importancia de
la ordenanza, se permitió la infusión cuando no había agua suficiente para la
inmersión. Leamos la cita siguiente relativa a una antigua escritura del siglo segundo:
Ahora bien: con respecto al bautismo, bautiza de la siguiente manera: Habiendo
enseñado todo esto, bautiza en el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo en
agua viva (que corre). Y si no tienes agua que corren, bautiza en alguna otra agua: si no
tienes agua fría, bautiza en tibia. Pero si no tienes ninguna de éstas, derrama agua
sobre la cabeza tres veces en el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo.
Sin embargo, el método original, bíblico, es por la inmersión, que está en
concordancia con el significado simbólico del bautismo, es decir, muerte, sepultura y
resurrección. Rm._6:1-4.
b. La fórmula. "Bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu
Santo." ¿De qué manera podemos reconciliar esto con el mandamiento de Pedro que
dice: "Bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo"? Hch._2:38. Estas
últimas palabras no representan una forma bautismal, sino que eran simplemente una
declaración de que tales personas eran bautizadas al reconocer a Jesús como Señor y
Cristo. Por ejemplo, la Didache, documento cristiano del año 100 d.c., dice que el
bautismo es en el nombre del Señor Jesús, pero cuando procede a describir el rito en
detalle, prescribe la fórmula trinitaria. Cuando Pablo dice que Israel fué bautizado en el
Mr. "en Moisés," no se refiere a una fórmula que fué pronunciada en ese momento;
significa simplemente que en virtud del pasaje milagroso por el Mr. Rojo, los israelitas
aceptaron a Moisés como el guía y maestro enviado de Dios. De igual manera, el ser
bautizado en el nombre de Jesús significa encomendarse por completo y eternamente
a él como el Salvador enviado del cielo, y la aceptación de su gobierno y dirección
implica la aceptación de la fórmula dada por Jesús mismo en Mt._28:19.
La traducción literal de Hch._2:38 es la siguiente: "Bautícese cada uno de
vosotros sobre el nombre de Jesucristo." Esto significa según el léxico de Thayer, que
los judíos debían "fundamentar su confianza y esperanza en la autoridad mesiánica del
Señor."
Nótese que la fórmula trinitaria describe una experiencia. Aquellos que son
bautizados en el nombre del Dios trino y uno testifican por ello que han sido
sumergidos, por así decirlo, en la comunión espiritual de la Trinidad; de manera que se
les pueda decir a ellos: "La gracia del Señor Jesucristo, y el amor de Dios, y la comunión
del Espíritu Santo sea con todos vosotros." 2Co_13:14.
c. El candidato. Todos los que sinceramente se arrepienten de sus pecados y
ejercitan una fe viva en el Señor Jesús son elegibles para el bautismo. En la iglesia
Ap.ostólica el rito venía acompañado de las siguientes manifestaciones externas: (1)
Profesión de fe. Hch._8:37. (2) Oración. Hch._22:16. (3) Voto de consagración.
1Pe_3:21.
Puesto que el bebé no tiene pecado de que arrepentirse, y no puede ejercitar
fe, es excluido lógicamente del bautismo en agua. No le impedimos con ello acudir a
Cristo (Mt._19:13-14) puesto que puede ser dedicado al Señor en un culto público.
d. La eficacia. El bautismo en agua no tiene poder salvador en sí mismo. Se bautiza
a la Gn.te, no para que sea salva, sino porque es salva. Por lo tanto, no podemos decir
que el rito es absolutamente necesario para la salvación. Pero podemos insistir que es
necesario si queremos cumplirlo todo, u obedecer todo. De la misma manera que la
elección de un presidente culmina, podríamos decir, al toMr. posesión del mando, así
también la elección del convertido a la gracia y gloria de Dios es completada al ocupar
su lugar públicamente como miembro de la iglesia de Cristo.
e. El significado. El bautismo ilustra las siguientes ideas: (1) Salvación. El bautismo
en agua es un drama sagrado (si se nos permite la frase) que representa lo cardinal o
esencial del evangelio. El descenso del convertido representa el cumplimiento de la
muerte de Cristo; la inmersión del bautizado significa la ratificación de la muerte, o
sepultura; el ascenso o el Lv.antarse del convertido significa que la muerte ha sido
conquistada, o la resurrección de Cristo. (2) Experiencia. El hecho de que los Hch.os
son realizados con la participación del convertido demuestra que ha sido identificado
espiritualmente con Cristo. La inmersión proclama el mensaje: "Cristo murió por el
pecado, a fin de que este hombre muriera al pecado." El Lv.antarse del convertido
enuncia el siguiente mensaje: "Cristo resucitó de los muertos con el objeto de que este
hombre pudiera vivir una nueva vida de justicia." (3) ReGn.eración. La experiencia del
nuevo nacimiento se ha descrito como "lavacro" (literalmente, "baño," Tit_3:5) porque
por el son lavados los pecados y contaminaciones de la vida antigua. De la misma
manera que el lavado con agua asea el cuerpo, así también Dios, en relación con la
muerte de Cristo y por medio del Espíritu Santo limpia el alma. El bautismo en agua
representa esta limpieza. "Lv.ántate, y bautízate, y lava tus pecados, (es decir, en
calidad de señal de lo que ha sido ya hecho)." Hch._22:16. (4) Testimonio. "Porque
todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis Ap.estidos." Gál._3:27.
El bautismo en agua significa que el convertido, por la fe, se ha vestido de Cristo - del
carácter de Cristo - de manera que los hombre pueden ver a Cristo en él como ven el
uniforme en el soldado. Por medio del rito del bautismo el convertido, en sentido
figurado, se viste públicamente del uniforme del reino de Cristo.
2. La cena del Señor.
La cena del Señor o santa comunión puede ser definida como un rito distintivo
de la adoración cristiana, instituida por el Señor Jesús en la víspera de su muerte
expiatoria. Consiste en la participación religiosa del pan y del vino, los que habiendo
sido presentados al Padre en memoria del inagotable sacrificio de Cristo, se convierten
en medio de gracia por el cual se nos inspira a aumenta la fe y la fidelidad hacia él.
Las siguientes son las carHch.erísticas notables de esta ordenanza:
a. Conmemoración "En memoria de mí." Todo país tiene su fiesta patriótica, en la
que conmemora su independencia. Toda vez que un grupo de creyentes se congrega a
celebrar la cena del Señor, recuerdan en forma especial la muerte expiatoria de Cristo
que nos liberó del pecado.
¿Por qué recordar su muerte por sobre todo otro acontecimiento en su vida?
Porque era el acontecimiento cumbre de su ministerio, y porque somos salvos no
meramente por su vida y enseñanzas, - aunque es innegable que son divinas- sino por
su sacrificio expiatorio.
b. Instrucción. La cena del Señor es una lección objetiva sagrada que enuncia o
expresa las dos verdades cardinales o esenciales del evangelio: (1) La encarnación. Al
toMr. el pan, oímos que Juan el Ap.óstol dice: "Y aquel Verbo fué hecho carne, y habitó
entre nosotros," (Jn._1:14); oímos al Señor mismo que declara: "Porque el pan de Dios
es aquél que descendió del cielo y da vida al mundo." Jn._6:33. (2) La expiación.
Empero las bendiciones incluidas en la encarnación nos son impartidas por medio de la
muerte de Cristo. El pan y el vino constituyen un cuadro de la muerte, la separación
del cuerpo y la vida, la separación de la carne y la sangre. El pan nos dice que el Pan de
la vida debe ser partido o quebrado en la muerte con el objeto de ser distribuido entre
los que tienen hambre espiritual; el vino vertido simboliza que su sangre, que es su
vida, debe ser derramada en la muerte con el objeto de que su poder que limpia y
vivifica sea proporcionado a las almas necesitadas.
c. Inspiración. Los elementos, especialmente el vino, nos recuerdan que por la fe
podemos participar de la naturaleza de Cristo, es decir, podemos disfrutar de la
comunión con él. Al participar del pan y del vino de la comunión se nos recuerda y
asegura que, por la fe, podemos recibir verdaderamente su Espíritu y reflejar su
carácter.
d. Seguridad. "Este vaso es el nuevo pHch.o en mi sangre." En épocas antiguas, la
forma más solemne de acuerdo era el pHch.o de sangre, sellado o firmado con la
sangre del sacrificio. El pHch.o hecho con Israel en el Monte Sinaí fué un pHch.o de
sangre. Después que Dios sentara sus condiciones, y el pueblo las hubiera aceptado,
Moisés tomó una jofaina llena de la sangre del sacrificio y roció la mitad de ella sobre
el altar del sacrificio, significando que Dios se obligaba a cumplir su parte del acuerdo;
luego derramó el resto de la sangre sobre el pueblo, obligándole o compRm.etiéndole
a cumplir su parte del contrato. Ex._24:3-8.
El nuevo pHch.o instituido por Cristo es un pHch.o de sangre, Dios ha aceptado
la sangre de Cristo (Heb_9:14-24) y por ende se ha compRm.etido, por amor de Cristo,
a perdonar y salvar a todos los que vienen a él. La sangre de Cristo es la garantía divina
de que será misericordioso y benigno con el penitente. Nuestra parte del contrato es
creer en la muerte expiatoria de Cristo. Rm._3:25-26. Luego podemos testificar de
haber sido rociados con la sangre del nuevo pHch.o. 1Pe_1:2.
e. Responsabilidad. ¿Quién será admitido o excluido de la mesa del Señor? Pablo
trata el asunto de quien es digno de participar de los sacramentos en 1Co_11:20-34 al
decir: "Porque el que come y bebe indignamente, será culpado (de ofensa o pecado)
del cuerpo y de la sangre del Señor." Luego todos nosotros somos excluidos, puesto
que ¿cuál de los hiJs. del hombre es digno de la más pequeña de las misericordias de
Dios? No, el Ap.óstol no habla de la indignidad de las personas, sino de la indignidad de
las acciones. Y así, aunque parezca extraño, es posible que una persona indigna
participe dignamente. Y en cierto sentido, solo aquellos que sienten sinceramente su
indignidad se hallan en el estado correcto de acercarse a la mesa; los que se creen
justos a sí mismos no son Ap.tos nunca. Además, se ha notado que es la Gn.te
profundamente espiritual la que siente su indignidad en mayor grado. Pablo se
describe a sí mismo como el primero de los pecadores.
El Ap.óstol nos advierte en el sentido de no cometer acciones indignas o
mantener una conducta también indigna al participar de los sacramentos. ¿Cómo
puede una persona participar indignamente? Al hacer cualquier cosa que le impida
Ap.reciar claramente el significado de los elementos, y acercarse de manera solemne,
en Hch.itud reflexiva y Ap.erente. En el caso de los corintios, el obstáculo era grave, es
decir. la ebriedad.
VI. EL CULTO EN LA IGLESIA
Por las epístolas de Pablo, llegamos a la conclusión de que existían dos clases de
cultos de adoración: uno era el de oración, alabanza y predicación; el otro de
adoración, conocido como Fiesta de Amor (AgAp.e). El primero era un culto público; el
segundo un culto privado o particular, al cual se admitía solamente a los creyentes.
1. El culto público.
La reunión o culto público "era lLv.ado a cabo por la Gn.te según el Espíritu la
inspiraba," nos dice Roberto Hastings Nichols, que agrega:
Se ofrecían oraciones y testimonios, y se daba instrucción. Se cantaba salmos y
también himnos cristianos que comenzaron a ser escritos en el siglo primero. Las
Escrituras del Antiguo Testamento fueron leídas y expuestas, y hubo lectura y
repetición de memoria de incidentes con respecto a lo que dijo e hizo Jesús. Cuando
los Ap.óstoles enviaban cartas a las iglesias, tales como las que tenemos en las
epístolas del Nuevo Testamento, éstas también eran leídas.
Este culto sencillo podía ser interrumpido y substituido en cualquier momento
por la manifestación del Espíritu en forma de profecía, lenguas e interpretaciones, o
por alguna percepción inspirada de las Escrituras. Todo estudiante serio de historia
eclesiástica, sin tener en cuenta su denominación religiosa o escuela de pensamiento,
reconoce esta carHch.erística del culto de la iglesia primitiva.
El que esta adoración inspirada del Espíritu Santo era un medio poderoso de
influenciar a los no convertidos se puede deducir del pasaje de 1Co_14:24-25.
2. El culto privado o particular.
Leemos que los primeros creyentes continuaron partiendo el pan. Hch._2:42.
¿Describen estas palabras una comida ordinaria, o la celebración de la cena del Señor?
Quizá ambas. Esto es lo tal vez ocurriera: al principio la comunión de los primeros
discípulos era tan íntima y vital que celebraban o realizaban las comidas en común. Al
congregarse alrededor de la mesa para pedir que Dios bendijera los alimentos, el
recuerdo de la última Pascua de Cristo debe de haber acudido a su memoria, y la
oración pidiendo la bendición de los alimentos se prolongaría espontáneamente para
constituirse en un culto de adoración, de manera que en muchos casos era difícil
determinar si los discípulos celebraban una comida común, o participaban de la santa
cena. ¡La vida y la adoración estaban íntimamente relacionadas en aquellos días!
Empero desde muy temprano los dos Hch.os - el partimiento del pan y la cena
del Señor - se distinguieron entre sí, de manera que el orden del culto era el siguiente:
En un día determinado, los cristianos se reunían para celebrar una comida de sagrada
comunión, conocida con el nombre de fiesta de amor, la cual comida era sagrada, de
gozo, simbolizando el amor fraternal. Todos traían provisiones, y todos, por igual,
debían compartir la comida. En 1Co_11:21-22, Pablo censura el egoísmo de aquéllos
que comían sin compartir los alimentos con los pobres. Al término de la fiesta de amor,
se celebraba la cena del Señor. En la iglesia de Corinto algunos se habían
emborrachados durante el ÁgAp.e, y participado de los sacramentos en forma indigna.
Mas tarde, en las postrimerías del siglo primero, la cena del Señor fué separada
del ÁgAp.e y celebrada el día del Señor, por la mañana.
LAS ORDENANZAS DEL SEÑOR PARA SU IGLESIA
(Por profesor Osmany Cruz en su libro Escuela Bíblica, Volumen II, cursos doctrinales).

Es sabido que Jesús dejó mandatos específicos para los integrantes de su iglesia, como amarse
unos a otros como Él nos amó, perdonar las ofensas, hacer discípulos, etcétera. En un estudio
con límites de espacio como éste, no podemos entrar en los detalles de cada una de estas
enseñanzas y órdenes del Señor. Pero hay dos mandatos de Jesús que, por las interpretaciones
que de ellos se han hecho, merecen atención especial en un estudio referente a la iglesia, ellos
son: el bautismo en agua y la santa cena.

A. EL BAUTISMO EN AGUA.
Jesús enseñó a sus discípulos que fueran por todas las etnias predicando el evangelio y
bautizándolos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo (Mr. 16:15-16). Este es un
mandamiento directo de Jesús a sus seguidores, dado poco antes de su ascensión a los cielos
(Mt. 28:19-20).
En obediencia a esta ordenanza, toda persona nacida de nuevo debiera dar testimonio público
de su fe, bautizándose en aguas mediante el método de inmersión y en nombre del Padre, del
Hijo y del Espíritu Santo (Mt. 28:19). El bautismo en agua es una expresión pública y externa de
una experiencia interna. Es una forma de identificación con la muerte de Cristo y una
proclamación pública de la resurrección espiritual del converso a una vida nueva: “Porque
somos sepultados juntamente con él para muerte por el bautismo, a fin de que como Cristo
resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en vida nueva”
(Ro. 6:4).
Pedro, en su discurso en pentecostés, al ver la respuesta de la multitud les anunció lo que
Jesús ya les había encomendado: “Al oír esto, se compungieron de corazón, y dijeron a Pedro y
a los otros apóstoles: Varones hermanos, ¿qué haremos? Pedro les dijo: “Arrepentíos, y
bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y
recibiréis el don del Espíritu Santo” (Hch. 2:37,39). La iglesia primigenia vio siempre el
bautismo como algo seguido a la conversión. El ejemplo de Cornelio y su familia (Hch.
10:47,48), el Etíope (Hch. 8:37,38) y el carcelero de Filipos (Hch. 16:33,34) dan fe de esto. Sin
embargo, el bautismo en aguas no es un acto de iniciación en la vida cristiana, sino en la iglesia
cristiana local y visible. Es la evidencia pública de la pertenencia de una persona a la
comunidad de creyentes en Jesucristo. El candidato al bautismo debe ser una persona que
comprenda cabalmente el sacrificio salvífico de Cristo, por lo que no se deben bautizar a
personas demasiados jóvenes, que todavía no han alcanzado a comprender estas verdades. La
mayoría de las iglesias evangélicas proponen una edad de bautismo no menor a los 12 años.

La doctrina de la iglesia Betel en el artículo III, Ordenanzas, resume la doctrina del bautismo
observando las siguientes directrices bíblicas: (1) Es un símbolo de la muerte del "viejo
hombre" y la resurrección del "nuevo hombre", para andar en una vida nueva (Ro. 6:4-6; Ef.
4:22-24). (2) Se requiere un testimonio claro y sincero de fe en el Señor Jesucristo por parte
del candidato, para ser bautizado (Hch. 8:26-38; Col. 2:12). (3) La fórmula bautismal aparece
con claridad en Mateo. 28:19. El bautismo en agua se realiza en el nombre del Padre y del Hijo
y del Espíritu Santo. (4) La palabra bautizar en los documentos originales del Nuevo
Testamento escrito en griego, da la idea de "sumergir". El bautismo requiere sumergir al
candidato en agua, para que después emerja (Ro. 6:3,4).

B. LA SANTA CENA.
La santa cena, la cena del Señor (1 Co. 11:20), la mesa del Señor (1 Co. 10:21), la comunión (1
Co. 10:16), la eucaristía, son varios de los nombres para referirse a la ordenanza de Jesús
comprendida en los pasajes de Mateo 26:17-29, Marcos 14:12-25, Lucas 22:7-23, 1 Corintios
11:23-26. Es un mandamiento de Jesús para todos los creyentes (1Co 11.23-26), aunque deben
participar de esta conmemoración sólo aquellos creyentes que vivan en armonía con las
enseñanzas de la Palabra de Dios (2 P. 2:12-21; 1 Jn. 1:7; Jud. 12-16), que hayan sido instruidos
en la significación y repercusión de la participación en la santa cena y que tengan la capacidad
para comprender el alcance de este acto. Debido a esto, es aconsejable reservar esta práctica
a creyentes que ya han sido bautizados y por tanto, debidamente instruidos en las verdades
del evangelio.
La santa cena es una ordenanza instituida por Jesús para que conmemoremos su obra
redentora. Los elementos que la componen son el pan y el vino. El pan es tipo del cuerpo de
Jesús, entregado por nuestras rebeliones a la cruenta muerte por crucifixión: “Y mientras
comían, tomó Jesús el pan, y bendijo, y lo partió, y dio a sus discípulos, y dijo: Tomad, comed;
esto es mi cuerpo” (Mt. 26:26). El vino tipifica la sangre derramada en remisión por nuestros
pecados: “Y tomando la copa, y habiendo dado gracias, les dio, diciendo: Bebed de ella todos;
porque esto es mi sangre del nuevo pacto, que por muchos es derramada para remisión de los
pecados” (Mt. 26:27,28). La santa cena es, por tanto, una conmemoración de la obra
redentora de Cristo “haced esto en memoria de mi”. Se ha de participar de ella con acciones
de gracias (Mr. 14:23; Lc. 22:19). La santa cena es comunión con Cristo y comunión con los
miembros de su cuerpo, la iglesia: “La copa de bendición que bendecimos, ¿no es la comunión
de la sangre de Cristo? El pan que partimos, ¿no es la comunión del cuerpo de Cristo? Siendo
uno solo el pan, nosotros, con ser muchos, somos un cuerpo; pues todos participamos de
aquel mismo pan” (1 Co. 10:16,17). La santa cena también es un compromiso “hasta que él
venga” y un recordatorio de su pronto advenimiento.
La santa cena es un recordatorio de las verdades más sobresalientes del evangelio: (1) La
Salvación, que como este pan, es el regalo del amor de Dios. (2) Es un recordatorio de la vida
de Cristo –todo lo que él fue, hizo y dijo. (3) Nos recuerda la atroz esclavitud del pecado de la
que fuimos redimidos por Cristo. (4) Enfatiza la obra de expiación, el cuerpo de Cristo
‘entregado’ y su sangre derramada por nosotros. (5) Proclama que sólo en Cristo hay perdón y
salvación del pecado, la primera necesidad del alma. (6) Proclama que Cristo es el alimento del
alma. (7) Se debe participar de ella por medio de la fe, o de lo contrario no será de utilidad
alguna. (8) Se nos enseña a compartir los unos con los otros las bendiciones espirituales que
Dios nos da. (9) Ella es la más íntima comunión con Dios en Cristo. (10) Es la comunión de los
unos con los otros. (11) Es una verdadera fiesta de gozo. (12) Es una profecía de la segunda
venida de Cristo, del triunfo perfecto de su reino. (13) Presenta ante el mundo la cruz de
Cristo. No es una reunión egoísta de unos pocos santos, sino una proclamación del Salvador de
todos.1

1
William Smith; revised and edited by F.N. and MA Peloubet, Smith’s Bible dictionary [computer file], electronic ed., Logos Library
System, (Nashville: Thomas Nelson) 1997.
Debido a la seriedad de la ordenanza y a las reales consecuencias de tomar la cena
indignamente, existen algunas razones para prohibir a ciertas personas participar de ella:
“Porque el que come y bebe indignamente, sin discernir el cuerpo del Señor, juicio come y
bebe para sí. Por lo cual hay muchos enfermos y debilitados entre vosotros, y muchos
duermen” (1 Co. 11:29,30). Algunas de estas razones son: (1) La falta de unidad en la fe y la
doctrina cristiana (Ro. 8:9; 2 Co. 11:4; Gá. 1:6-9). (2) Una vida moral disipada e incoherente con
las normas bíblicas (2 P. 2:12-21; 1 Jn. 1:7; Jud. 12-16). (3) La presencia de una actitud
cismática y divisionista (1 Co 1:10; Tit. 3:10,11). (4) La falta de instrucción (en un recién
convertido por ejemplo) que impida al creyente discernir el significado de lo que practica. (5)
La falta de amor y la presencia de una actitud no perdonadora (Mt. 5:23,24).
La frecuencia para la observancia de la santa cena debe ser regulada, no es para todos los días,
para que no se pierda la solemnidad del acto. Por tanto, debe celebrarse lo bastante cerca una
de otra, que permita cumplir la ordenanza de Jesús y recibir sus beneficios y lo
suficientemente distanciada una de otra, para que no se pierda la seriedad y la reverencia que
ella demanda.
6. La disciplina en la
iglesia
 La santidad es una de las altas banderas éticas de la 
iglesia. Para evitar que esa santidad se desvirtúe, la 
Palabra de Dios hace provisión para disciplinar a los 
creyentes que actúan en forma incorrecta. 

 La disciplina en la iglesia está 
enfocada a resultados positivos, y 
motivada por el más sincero 
amor cristiano. Esta disciplina 
tiene por finalidad:
 Corregir la falta (2 Co. 7:8‐10).
 Restaurar a la persona culpable 
(Mt. 6:14,15; Gá. 6:1).
 Evitar que el pecado se disemine 
dentro de la congregación (He. 
12:15).
 Proteger el testimonio de la 
iglesia (1 Ti. 3:7)
 Enviar un mensaje de alerta a 
todos los miembros de la 
comunidad cristiana. 
Deben ser disciplinados 
dentro de la iglesia:
 Los que causen divisiones y 
tropiezos doctrinales (Ro. 
16:17).
 Los que anden en alguna 
inmoralidad (1 Co. 5:1‐5).
 Los que están creando algún 
tipo de desorden (2 Ts. 3:6‐11).
 Los que niegan las grandes 
doctrinas de la Biblia (1 Ti. 
6:3‐11; 2 Ti. 2:16‐18; Tit. 3:10; 2 
Jn. 1:10,11).

 Un creyente puede ser disciplinado en varias formas, 
en consecuencia con la trascendencia de su falta. 
 Ser amonestado en privado (Mt. 18:15,16).
 Ser reprendido en público (Mt. 18:17,18)
 Cesar durante un periodo todos los privilegios y todas las 
actividades que realizaba dentro de la iglesia, hasta 
restaurar su testimonio ante el mundo. 
 Si no se arrepiente de lo que hizo, puede ser cancelada su 
membresía (Tit. 3:10).
 Si persiste en su mala conducta y su asistencia a la iglesia 
fuere motivo de escándalo, se le puede negar la asistencia a 
las actividades de la iglesia (1 Co. 5:3).
LA DISCIPLINA EN LA IGLESIA
(Por profesor Osmany Cruz en su libro Escuela Bíblica, Volumen II, cursos doctrinales).

La santidad es una de las altas banderas éticas de la iglesia. Para evitar que esa santidad se
desvirtúe, la Palabra de Dios hace provisión para disciplinar a los creyentes que actúan en
forma incorrecta. Como está escrito: “Tus testimonios son muy firmes; la santidad conviene a
tu casa, oh Jehová, por los siglos y para siempre” (Sal. 93:5). La exhortación de Pedro es: “Sino,
como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de
vivir” (1 P. 1:15).

A. EL PROPÓSITO DE LA DISCIPLINA.
La disciplina en la iglesia está enfocada a resultados positivos, y motivada por el más sincero
amor cristiano. Esta disciplina tiene por finalidad:
 Corregir la falta (2 Co. 7:8-10).
 Restaurar a la persona culpable (Mt. 6:14,15; Gá. 6:1).
 Evitar que el pecado se disemine dentro de la congregación (He. 12:15).
 Proteger el testimonio de la iglesia (1 Ti. 3:7)
 Enviar un mensaje de alerta a todos los miembros de la comunidad cristiana.

B. LAS CAUSAS PARA LA DISCIPLINA.


Deben ser disciplinados dentro de la iglesia:
 Los que causen divisiones y tropiezos doctrinales (Ro. 16:17).
 Los que anden en alguna inmoralidad (1 Co. 5:1-5).
 Los que están creando algún tipo de desorden (2 Ts. 3:6-11).
 Los que niegan las grandes doctrinas de la Biblia (1 Ti. 6:3-11; 2 Ti. 2:16-18; Tit.
3:10; 2 Jn. 1:10,11).
Es importante resaltar que la disciplina debe ser aplicada, sólo después de que los hechos de
los que se acusa a la persona, sean debidamente comprobados por testigos de fe, o por
admisión de la persona bajo acusación. Además, lo esencial que buscará el Comité de disciplina
es el arrepentimiento del transgresor (Stg. 5:20), luego asignará la disciplina.

C. LAS FORMAS DE DISCIPLINA.


Un creyente puede ser disciplinado en varias formas, en consecuencia con la trascendencia de
su falta.
 Ser amonestado en privado (Mt. 18:15,16).
 Ser reprendido en público (Mt. 18:17,18)
 Cesar durante un periodo todos los privilegios y todas las actividades que
realizaba dentro de la iglesia, hasta restaurar su testimonio ante el mundo.
 Si no se arrepiente de lo que hizo, puede ser cancelada su membresía (Tit.
3:10).
 Si persiste en su mala conducta y su asistencia a la iglesia fuere motivo de
escándalo, se le puede negar la asistencia a las actividades de la iglesia (1 Co. 5:3).
7. Los líderes de la
iglesia
 El Nuevo Testamento menciona 
que la iglesia tenía líderes, 
supervisores que estaban para 
servir a la iglesia local, gobernar 
amorosamente al rebaño del Señor 
y vivir intachablemente como 
ejemplos en conducta y fe. Había 
obispos, ancianos y diáconos. 

Preparado por: Profesor 
Osmany Cruz Ferrer

 “Es verdad que si alguien desea 
dirigir una iglesia, desea un 
buen trabajo. Pero debe ser 
alguien a quien no se le pueda 
acusar de nada malo.” (1 Ti. 3:1 
BLS).

 El vocablo “obispos” usado en 
el Nuevo Testamento era una 
palabra usada por los griegos 
para referirse a magistrados, 
pontífices, incluso a filósofos, 
pero siempre con una 
connotación de supervisor o 
líder. 
La cualificación de los obispos que aparece en la Primera 
Epístola a Timoteo, es la lista más larga de cualidades del 
liderazgo cristiano que aparece en el Nuevo Testamento.

 (1) Ser irreprensibles
 (2) maridos de una sola mujer
 (3) sobrios
 (4) prudentes
 (5) decorosos
 (6) hospedadores
 (7) aptos para enseñar 
 (8) no dados al vino
 (9) no pendencieros

 (10) no codiciosos de 
ganancias deshonestas, 
 (11) amables, 
 (12) apacibles, 
 (13) no avaros,
 (14) que gobierne bien su 
casa, 
 (15) que tenga a sus hijos en 
sujeción con toda honestidad, 
 (16) no neófitos, 
 (17) con buen testimonio de 
los de afuera. 
 La terminología “diácono” 
viene del griego diákonos y 
significa, siervo. 
 Se refiere a alguien que sirve en 
una iglesia local. Pablo 
enumera sus características en 1 
Timoteo  3:8‐13. Los diáconos 
debían ser: 
 (1) honestos, 
 (2) sin doblez, 
 (3) no dados a mucho vino, 
 (4) no codiciosos de ganancias 
deshonestas; 

 (5) que guarden el misterio 
de la fe con limpia 
conciencia,
 (6) sean sometidos a prueba 
primero, y entonces ejerzan 
el diaconado, si son 
irreprensibles 
 (7) sean maridos de una sola 
mujer, 
 (8) que gobiernen bien sus 
hijos y sus casas. 
Texto bíblico: “Considera lo que digo, y el Señor 
te dé entendimiento en todo” (2 Ti. 2:7).

EL MINISTERIO ES EL BLANCO DE LOS MÁS 
DISÍMILES ATAQUES EMOCIONALES, 
PERSONALES Y ESPIRITUALES:
1. Noventa por ciento de los pastores trabaja 
más de cuarenta horas semanales.

2. Ochenta por ciento cree que el ministerio 
pastoral ha afectado la vida de sus familias 
negativamente.
3. Treinta y tres por ciento dice que estar en 
el ministerio es un peligro absoluto para sus 
familias.

4. Setenta y cinco por ciento reporta una 
crisis significante relacionada con el estrés 
al menos una vez en su ministerio.
5. Cincuenta por ciento se siente incapaz de 
cumplir con las necesidades del trabajo.

6. Noventa por ciento se siente mal 
preparado para enfrentar las demandas del 
ministerio.

7. Setenta por ciento dice que tiene la 
autoestima más baja que al comenzar el 
ministerio.
8. Cuarenta por ciento reporta un serio 
conflicto con un miembro al menos una vez 
al mes.

9. Treinta y tres por ciento confiesa haber 
estado involucrado en alguna conducta 
sexual inapropiada con alguien de la iglesia.

10. Setenta por ciento no tiene alguien que 
considere un íntimo amigo.
 Los servidores son 
personas bajo ataque 
continuo. 

 La naturaleza de su 
servicio espiritual los 
expone a luchas 
continuas con poderes de 
las tinieblas. 

 Necesitamos el consejo 
bíblico para ganar las 
batallas diarias.

1. Eche mano del gozo de 
ser salvo en su peregrinar. 
Esta es la fuerza 
centrífuga que nos 
impulsa a continuar 
adelante en el servicio 
para el Señor: 

“quien nos salvó y llamó con 
llamamiento santo, no 
conforme a nuestras obras, 
sino según el propósito suyo 
y la gracia que nos fue dada 
en Cristo Jesús antes de los 
tiempos de los siglos” (2 Ti. 
1:9).
2. Encuentre un lugar 
de servicio donde se 
sienta útil y coloque 
todo su empeño en 
hacer que su trabajo 
sea eficiente: 

“Cada uno de ustedes 
ha recibido de Dios 
alguna capacidad 
especial. Úsenla bien en 
el servicio a los demás” 
(1 P. 4:10 BLS). 

3. Sirva a Dios enfocado 
en lo que él es, de esta 
manera nunca perderá el 
rumbo: 

“Servid a Jehová con temor, 
y alegraos con temblor” 
(Sal. 2:11).
4. Trabaje con alegría. 
Disfrute lo que hace 
para que su tarea sea 
más llevadera: 

“Servid a Jehová con 
alegría; venid ante su 
presencia con regocijo” 
(Sal. 100:2).

5. Haga su trabajo lo 
mejor que pueda, 
procure superarse a sí 
mismo para gloria de 
Dios: 

“¿Has visto hombre 
solícito en su trabajo? 
Delante de los reyes 
estará; no estará delante 
de los de baja condición” 
(Pr. 22:29).
6. No compita con ningún 
consiervo. El ministerio no 
es una competencia de 
velocidad, sino una carrera 
de relevo:
“Hermanos, yo mismo no 
pretendo haberlo ya 
alcanzado; pero una cosa 
hago: olvidando ciertamente 
lo que queda atrás, y 
extendiéndome a lo que está 
delante, prosigo a la meta, al 
premio del supremo 
llamamiento de Dios en Cristo 
Jesús” (Fil. 3:13,14).

7. Sujétese a las 
autoridades puestas por 
Dios. Los siervos sujetos 
son el doble de efectivos 
que aquellos que tienen 
problemas con la 
obediencia: 
“Recuérdales que se sujeten 
a los gobernantes y 
autoridades, que obedezcan, 
que estén dispuestos a toda 
buena obra” (Tit. 3:1).
8. Sirva a Dios con 
diligencia, pero no 
olvide llevar a su 
familia con usted: 
“Pero si no quieren servir 
al Señor, elijan hoy a 
quién van a servir: si a los 
dioses a los que sus 
antepasados servían a 
orillas del Éufrates, o a los 
dioses de los amorreos 
que viven en esta tierra. 
Por mi parte, mi familia y 
yo serviremos al Señor” 
(Jos. 24:15 DHH). 

9. Cuide su ética 
como siervo, usted 
representa a Dios 
por donde quiera 
que va: 
“Para que si tardo, 
sepas cómo debes 
conducirte en la casa 
de Dios, que es la 
iglesia del Dios 
viviente, columna y 
baluarte de la verdad” 
(1 Ti. 3:15).
10. Tenga una mentalidad 
de recompensa. Dios no 
paga todos los fines de 
semana, pero cuando lo 
hace, paga muy bien:

“¡Pongan atención! ¡Yo 
vengo pronto! Y traigo el 
premio que le daré a cada 
persona, de acuerdo con lo 
que haya hecho” (Ap. 22:12).

11. Mantenga las 
motivaciones para su 
servicio bajo vigilancia:

“Sobre toda cosa guardada, 
guarda tu corazón; porque 
de él mana la vida” (Pr. 
4:23).
12. Sea íntegro, la santidad es el mejor respaldo para 
una vida de legítimo servicio a Dios: 

“Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie 
verá al Señor” (He. 12:14).

13. Un servidor de Dios 
no hace distinción de 
personas, aléjese de toda 
parcialidad y espíritu de 
segregación: 

“Te encarezco delante de 
Dios y del Señor Jesucristo, 
y de sus ángeles escogidos, 
que guardes estas cosas sin 
prejuicios, no haciendo 
nada con parcialidad” (1 Ti. 
5:21).
14. Sea amable para con 
todos. Las buenas 
relaciones son 
imprescindibles si 
deseamos tener un 
servicio influyente: 

“Porque el siervo del 
Señor no debe ser 
contencioso, sino amable 
para con todos, apto para 
enseñar, sufrido” (2 Ti. 
2.24).

15. No hable mal de otros 
consiervos, mantenga a su 
lengua alejada de 
comentarios inadecuados: 

“Ni murmuréis, como algunos 
de ellos murmuraron, y 
perecieron por el destructor” 
(1 Co. 10:10).
16. Practique una vida 
devocional vivificante y 
renovada: 

“Una cosa he demandado a 
Jehová, ésta buscaré; que esté 
yo en la casa de Jehová todos 
los días de mi vida, para 
contemplar la hermosura de 
Jehová, y para inquirir en su 
templo” (Sal. 27:4).

17. Honre a otros consiervos, los demás también 
necesitan que los amen y reconozcan: 

“Pagad a todos lo que debéis: al que tributo, tributo; al 
que impuesto, impuesto; al que respeto, respeto; al que 
honra, honra” (Ro. 13:7).
18. Haga nuevos amigos en 
el transcurso de su vida y su 
ministerio, pero nunca se 
olvide de los viejos: 

“El hombre que tiene amigos 
ha de mostrarse amigo; Y 
amigo hay más unido que un 
hermano” (Pr. 18:24).

19. Encuentre tiempo 
para la recreación sana. 
Los servidores también 
son seres humanos: 

“Porque para todo lo que 
quisieres hay tiempo y 
juicio” (Ec. 8:6a).
20. Lea la Biblia con 
frecuencia, este es el 
manual legítimo de 
los servidores. En ella 
se encuentra todo lo 
que necesitamos para 
nuestra vida y para 
realizar nuestro 
trabajo: 

“Toda la Escritura es 
inspirada por Dios, y útil 
para enseñar, para 
redargüir, para corregir, 
para instruir en justicia” 
(2 Ti. 3:16).

21. Rinda cuenta a otros 
sobre su vida y 
mayordomía, esto 
mantendrá su cordura a 
flote e impedirá deslices 
fatales: 

“Confesaos vuestras 
ofensas unos a otros, y 
orad unos por otros, para 
que seáis sanados. La 
oración eficaz del justo 
puede mucho” (Stg. 5:16).
22. Sea humilde, el 
mundo se está 
quedando sin ese 
tipo de gente: 

“Porque Jehová es 
excelso, y atiende al 
humilde, mas al altivo 
mira de lejos” (Sal. 
138:6).

23. Tenga prioridades 
en la vida. Nadie ha 
dicho jamás en su 
lecho de muerte que le 
hubiera gustado pasar 
más tiempo 
trabajando: 

“Por nada estéis 
afanosos, sino sean 
conocidas vuestras 
peticiones delante de 
Dios en toda oración y 
ruego, con acción de 
gracias” (Fil. 4:6).
24. Actualícese con la 
tecnología 
contemporánea, 
puede hacer más 
productivo su trabajo:

“El hombre sabio es 
fuerte, y de pujante vigor 
el hombre docto” (Pr. 
24:5). 

25. Cuando alcance algún 
logro personal, ministerial 
o familiar, busque la 
ocasión y la forma para 
celebrarlo. No deje pasar 
de largo los milagros de 
Dios: 

“Y la paz de Dios gobierne en 
vuestros corazones, a la que 
asimismo fuisteis llamados 
en un solo cuerpo; y sed 
agradecidos” (Col 3:15).
26. Los servidores 
altamente eficaces 
entienden la vida como 
un don de Dios, viva 
cada segundo al 
máximo: 

“Este es el día que hizo 
Jehová; nos gozaremos y 
alegraremos en él” (Sal. 
118:24).

27. Sea cauteloso en la 
toma de decisiones. Un 
servidor de Dios afecta a 
muchos a su alrededor 
cuando elige mal en la 
vida: 

“¿Quién es el hombre que 
teme a Jehová? Él le enseñará 
el camino que ha de escoger” 
(Sal 25:12).
28. Sea agradecido con 
Dios, sea agradecido con 
todo el mundo: 

“Así que, recibiendo nosotros 
un reino inconmovible, 
tengamos gratitud, y 
mediante ella sirvamos a Dios 
agradándole con temor y 
reverencia” (He. 12:28).  

29. Procure el 
compañerismo de otros 
cristiano, los ermitaños 
no la pasan bien en el 
ministerio: 

“Unánimes entre vosotros; 
no altivos, sino 
asociándoos con los 
humildes. No seáis sabios 
en vuestra propia opinión” 
(Ro. 12:16).
30. No tome decisiones 
importantes sin previa 
consulta con personas 
sabias, amigos y 
familiares, en la 
multitud de consejeros 
está la sabiduría: 

“Donde no hay dirección 
sabia, caerá el pueblo; mas 
en la multitud de 
consejeros hay seguridad” 
(Pr. 11:14).

31. Alimente su intelecto, 
uno nunca sabe cuándo le 
hará falta ese 
conocimiento para 
ponerlo al servicio del 
Señor: 

“El corazón entendido busca 
la sabiduría; mas la boca de 
los necios se alimenta de 
necedades” (Pr. 15:14).
32. Sirva a los creyentes, 
pero también a los no 
creyentes. El impacto del 
servicio tiene dimensiones 
impresionantes y 
resultados imprevisibles: 

“Y el que de vosotros quiera 
ser el primero, será siervo de 
todos” (Mr. 10:44).

33. Separe de cuando en 
cuando un día para la 
meditación personal, la 
reflexión bíblica y la 
planificación del futuro. 
Se puede lograr más en un 
día así, que en mil horas 
de trabajo desenfocado: 

“Mi corazón ha dicho de ti: 
Buscad mi rostro. Tu rostro 
buscaré, oh Jehová” (Sal. 
27:8).
34. Ayune 
sistemáticamente, hay 
prácticas que aunque son 
viejas siguen funcionando:

“Ministrando éstos al Señor, y 
ayunando, dijo el Espíritu 
Santo: Apartadme a Bernabé 
y a Saulo para la obra a que 
los he llamado” (Hch. 13:2).

35. Lea biografías de otros 
servidores de Dios, encontrará 
inspiración, sabiduría y 
necesarias advertencias que 
luego le ayudarán en el 
ministerio: 

“Por tanto, nosotros también, 
teniendo en derredor nuestro tan 
grande nube de testigos, 
despojémonos de todo peso y del 
pecado que nos asedia, y corramos 
con paciencia la carrera que 
tenemos por delante” (He. 12:1).
36. Administre bien sus 
recursos, hay demasiados 
servidores con la mente 
puesta en sus necesidades 
simplemente porque 
carecen de juicio para 
invertir su dinero: 

“El hombre de bien tiene 
misericordia, y presta; 
gobierna sus asuntos con 
juicio” (Sal. 112:5).

37. Sea autocrítico, le 
ayudará a superar sus 
deficiencias con mejor 
estado de ánimo: 

“Ciertamente no hay hombre 
justo en la tierra, que haga el 
bien y nunca peque” (Ec. 
7:20).
38. Redima el tiempo 
porque solo le tocan 24 
horas al día como a 
todas las demás 
personas: 

“Aprovechando bien el 
tiempo, porque los días 
son malos” (Ef. 5:16).

39. No mida sus logros por el 
resultado de otros, sea 
constante y obediente a Dios. 
Los logros no definen cuán 
exitoso es usted ante los ojos 
de Dios, pero su obediencia y 
su compromiso sí: 

“Y Samuel dijo: ¿Se complace 
Jehová tanto en los holocaustos 
y víctimas, como en que se 
obedezca a las palabras de 
Jehová? Ciertamente el 
obedecer es mejor que los 
sacrificios, y el prestar atención 
que la grosura de los carneros” 
(1 S. 15:22).
40. Sea feliz, disfrute 
mientras camina la senda 
que conduce al cielo: 

“Regocijaos en el Señor 
siempre. Otra vez digo: 
¡Regocijaos!”(Fil 4:4).

 Marchemos en pos del llamado que hemos recibido, el 
resto lo hace Dios. 

 El prometió: “he aquí yo estoy con vosotros todos los 
días, hasta el fin del mundo. Amén” (Mt. 28:20).

 El Dios de los cielos, él nos prosperará, y nosotros sus 
siervos nos levantaremos y edificaremos (Neh 2.20)
CONTENIDO
UN SERVICIO AL ESTILO DE
JESÚS
Introducción:
POR: REV. OSMANY
CRUZ FERRER
La cosmovisión de Jesús sobre el servicio espiritual

El fundamental desafío del creyente como siervo de Cristo

Recomendaciones para imitar el servicio de Jesús

Conclusiones:

LOGO Por: Rev. Osmany Cruz Ferrer

INTRODUCCIÓN EN EL MUNDO DE HOY:

Base Bíblica: Mt 20:28. “El Hijo del Hombre no vino para ser 
servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos.”

Pensamiento: «Siempre que 
puedas, haz todo el bien que   Si una persona se
puedas, por todos los medios  levanta temprano y
que puedas, de todas las  llega tarde a casa
maneras que puedas, en todos  por trabajar, le
los lugares que puedas, en todo  llaman
momento que puedas, a toda la  emprendedor.
gente que puedas». Juan 
Wesley.

Si un
adolescente
Si un joven 
se levanta de duerme poco 
madrugada a por trabajar y 
estudiar, se estudiar al 
le llama mismo tiempo, 
aplicado. se le llama 
industrioso.  
Pero si alguien 
decide asistir a la 
Si alguien aparta 
iglesia tres o cuatro 
tres tardes a la  veces a los cultos y 
semana para ir al  habla de Cristo a sus 
gimnasio y  compañeros en el 
mantenerse en  trabajo o en la 
forma, se le llama  escuela y se 
disciplinado.   preocupa por servir a 
los demás, se le 
llama fanático.

LAS PREMISAS SOBRE EL SERVICIO QUE ENARBOLA LA BIBLIA.

1. Dios conoce lo que hacemos y la intención con que  2. Dios nos llama a ser siervo de todos. Mr. 10:43,44
lo hacemos. Ap. 2.19. “Pero no será así entre vosotros, sino que el que quiera 
“Yo conozco tus obras, y amor, y fe, y servicio, y tu  hacerse grande entre vosotros será vuestro servidor, 
paciencia, y que tus obras postreras son más que las  y el que de vosotros quiera ser el primero, será 
primeras.” siervo de todos.”

I. LA COSMOVISIÓN DE JESÚS SOBRE EL 
SERVICIO ESPIRITUAL:

3. Dios se complace en nuestro trabajo desinteresado.  La cosmovisión del Maestro 
He 6.10. sobre el servicio en Dios está 
“Dios es justo, y nunca olvidará lo que ustedes han  clarificado en sus mismas 
hecho y siguen haciendo para ayudar a su pueblo  palabras y en el contexto de 
elegido.” BLS la interrelación con sus 
discípulos. Para Jesús el 
servicio era:
1. La actitud que resumía su 
misión. Mr. 10:45. Porque el 
Hijo del Hombre no vino para 
ser servido, sino para servir, y 
para dar su vida en rescate 
por muchos.
2. La máxima forma de 
imitar su ejemplo. Mt 
20.27‐28. 
3. Una actitud que no admitía 
“Y el que quiera ser el  dualidad. Mt 6:24
primero entre vosotros 
“Ningún esclavo puede trabajar 
será vuestro siervo; 
para dos amos al mismo 
como el Hijo del 
tiempo, porque siempre 
Hombre no vino para ser 
obedecerá o amará más a uno 
servido, sino para servir, 
que a otro.”
y para dar su vida en 
rescate por muchos.”

4. El servicio espiritual es intrínsecamente mesiánico. Mt 
25.35‐40. Todo servicio es para Jesús.
“Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis 
5. El servicio debe 
de beber; fui forastero, y me recogisteis; estuve desnudo, y me  estar ligado a una 
cubristeis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mí.  vida de santidad. 
Entonces los justos le responderán diciendo: Señor, ¿cuándo te  Juan 12:26ª. 
vimos hambriento, y te sustentamos, o sediento, y te dimos de 
Si alguno me sirve, 
beber? ¿Y cuándo te vimos forastero, y te recogimos, o desnudo, 
y te cubrimos?¿O cuándo te vimos enfermo, o en la cárcel, y  sígame; y donde yo 
vinimos a ti?Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que  estuviere, allí 
en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más  también estará mi 
pequeños, a mí lo hicisteis.” servidor.

UN SALUDO
PARA TODOS
LOS QUE SIRVEN
A DIOS
6. El servicio noble 
es honrado por el 
Padre. Juan 
12:26b. 
Si alguno me 
sirviere, mi Padre 
le honrará.

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Existen cristianos que son como: A Dios gracias hay cristianos todavía que 
son como:
1. Carretillas; no sirven para nada a menos que se les  1. Niños exploradores, siempre listos.
empuje.   2. Rocas, aguantadores y constantes.
2. Canoas; necesitan que se les mueva dándoles con  3. Libros, siempre dispuestos a darse a sí mismos.
los remos. 4. Dinero en el banco: siempre saber que pueden 
3. Papalotes; que si no los atas con un hilo, se van.   contar con ellos.
4. Globos, llenos de aire, y listos para hacer explosión  5. Astros en el cielo, predecibles en su conducta, 
a la menor presión o pinchazo. porque no son guiados por los impulsos, o por la 
5. Vagones de tren; necesitan ser tirados para poder  cultura, o por la sociedad, sino por las leyes 
avanzar. divinas.
6. Luces intermitentes; se encienden y se apagan 
constantemente. ¿Qué clase de cristiano eres tú este día?

II. EL FUNDAMENTAL DESAFÍO DEL CREYENTE 
COMO SIERVO DE CRISTO.
Vivir a la altura del ejemplo de siervo que nos legó el 
SERVICIO POSMODERNISTA SERVICIO CRISTIANO
Señor y no según los patrones postmodernistas.
No servimos a Dios pensando en lo que vamos a  protagonismo Anonimato
perder, sino en lo que vamos a ganar (OCF)
Interés Desinterés

Egoísmo. Altruismo

Por ganancia Amor

III. RECOMENDACIONES PARA IMITAR EL 
SERVICIO DE JESÚS:

2. Haga una agenda 
completa de su día 
de trabajo por 
1. Comience su día 
orden de 
presentándoselo a 
prioridades y con 
Dios en oración (Jn.
la plena certeza de 
1:35) (1 Tes. 5:17).
que va a alcanzar 
lo que se propone 
(Ec. 11:4).
3. Concédale a cada  4.No se deje 
actividad una  entretener 
cantidad de tiempo  por ninguna 
determinado y  causa (Juan 
cúmplalo con  4) (Pr. 18:9). 
rigurosidad (Pr.
22:29).

5. Vea su trabajo 
como una 
responsabilidad  6. Trabaje con alegría (Sal.
ante el Señor y  100:2). 
como una 
bendición de Dios 
para su vida (Ec.
2:24).

7. Entienda que si usted 
trabaja dentro de un  8.Nunca olvide 
equipo y es  que nuestro 
ineficiente no solo se  servicio, sea 
dañará su trabajo  cual sea, es 
sino también el de  como para 
otros, por tanto  Dios y no 
tenga presente a su  para los 
hermano a la hora de  hombres 
cumplir con sus  (Col. 3:23).
tareas.
SIRVAMOS, SÍ, PERO AL ESTILO
DE JESÚS

9. Tenga una mentalidad 
de recompensa. Cada 
cosa que usted haga 
para el Señor recibirá 
remuneración del 
Padre (1 Co. 3:8).

LOGO
LOS LÍDERES DE LA IGLESIA
(Por profesor Osmany Cruz en su libro Escuela Bíblica, Volumen II, cursos doctrinales).

El Nuevo Testamento menciona que la iglesia tenía líderes, supervisores que estaban para
servir a la iglesia local, gobernar amorosamente al rebaño del Señor y vivir intachablemente
como ejemplos en conducta y fe. Había obispos, ancianos y diáconos.

A. REQUISITOS DE LOS OBISPOS (1 Ti. 3:1-7) Y ANCIANOS (Tit. 1:5-9; 3:2-7).


El apóstol Pablo es muy preciso en escribirle a Timoteo que no es suficiente con desear la tarea
de un obispo. “Es verdad que si alguien desea dirigir una iglesia, desea un buen trabajo. Pero
debe ser alguien a quien no se le pueda acusar de nada malo.” (1 Ti. 3:1 BLS). Se necesitan
importantes virtudes espirituales, morales e intelectuales para llegar a cumplir la hermosa
tarea de apacentar la grey de Dios.
El vocablo “obispos” usado en el Nuevo Testamento era una palabra usada por los griegos para
referirse a magistrados, pontífices, incluso a filósofos, pero siempre con una connotación de
supervisor o líder. El cristianismo primitivo no buscó otra nomenclatura para referirse a los
vigilantes espirituales, pero sí trazó otros parámetros para su desempeño. La voz “obispos”
(episkopos) es un término sinónimo e intercambiable con vigilante, superintendente, o
inspector. Esta labor de supervisor era, básicamente, la labor de un obispo. En una iglesia local
podía haber varios obispos o ancianos que dirigían la congregación. Con el tiempo surgiría el
episcopado monárquico, como resultado de la decisión y la reorganización de la iglesia. De
cualquier forma, el Nuevo Testamento no establece un determinado tipo exclusivo de
gobierno, más bien, se ocupa de entregar principios de regencia aplicables a todos los tiempos.
La cualificación de los obispos que aparece en la Primera Epístola a Timoteo, es la lista más
larga de cualidades del liderazgo cristiano que aparece en el Nuevo Testamento. Estas eran: (1)
Ser irreprensibles, (2) maridos de una sola mujer, (3) sobrios, (4) prudentes, (5) decorosos, (6)
hospedadores, (7) aptos para enseñar, (8) no dados al vino, (9) no pendencieros, (10) no
codiciosos de ganancias deshonestas, (11) amables, (12) apacibles, (13) no avaros, (14) que
gobierne bien su casa, (15) que tenga a sus hijos en sujeción con toda honestidad, (16) no
neófitos, (17) con buen testimonio de los de afuera. En el discurso de Pablo en Mileto (Hch.
20:28), el apóstol asegura que el obispado es por designación de Dios. Dios señala y reparte los
ministerios, pero el receptor de esta gracia debe esforzarse por vivir a la altura de su
llamamiento.
En la Epístola a Tito 1:5-9; 3:2-7 Pablo le entrega las características que deben tener los
ancianos y los obispos, por lo que parece que tenían una función muy similar, ya que
esencialmente tenían las mismas demandas; excepto que Pablo no solicita de los ancianos que
necesariamente sean aptos para enseñar, lo cual es verificado por la cita que aparece en
1 Timoteo 5:17: “Los ancianos que gobiernan bien, sean tenidos por dignos de doble honor,
mayormente los que trabajan en predicar y enseñar.”

B. REQUISITOS DE LOS DIÁCONOS (1 Ti. 3:8-13).


La terminología “diácono” viene del griego diákonos y significa, siervo. Se refiere a alguien que
sirve en una iglesia local. Pablo enumera sus características en 1 Timoteo 3:8-13. Los diáconos
debían ser: (1) honestos, (2) sin doblez, (3) no dados a mucho vino, (4) no codiciosos de
ganancias deshonestas; (5) que guarden el misterio de la fe con limpia conciencia, (6) sean
sometidos a prueba primero, y entonces ejerzan el diaconado, si son irreprensibles (7) sean
maridos de una sola mujer, (8) que gobiernen bien sus hijos y sus casas.
El versículo 11 es muy llamativo, pues Pablo se dirige a las mujeres: “Las mujeres asimismo
sean honestas, no calumniadoras, sino sobrias, fieles en todo.” Algunos creen que es un
interludio de Pablo, que no tiene que ver directamente con lo que el apóstol está tratando en
esta sección; otros, sin embargo, opinan que el verso 11 es una referencia a las diaconisas, lo
cual no es para nada inaceptable, teniendo en cuenta Romanos 16:1 donde se presenta a Febe
con este título. Una tercera opción es que estas mujeres, a las que hace referencia Pablo, sean
las esposas de los diáconos.
Curiosamente, en Filipenses 1:1 Pablo menciona a los diáconos junto a los obispos, lo que
coloca esta labor de servicio muy relacionada con el liderazgo de la iglesia. “Pablo y Timoteo,
siervos de Jesucristo, a todos los santos en Cristo Jesús que están en Filipos, con los obispos y
diáconos.” Pablo le da gran importancia a la responsabilidad del diácono, tanto que en 1
Timoteo 3:10 ordena que se les pongan a prueba para comprobar su conducta. Toda la iglesia
debe hacer diaconía, pero hay personas que Dios prepara para este noble servicio (Ro 12:7; 1
P. 4:11; 1 Co 12:28). De ahí que Pablo tome tiempo para dejar por escrito su debida
cualificación.

C. ADECUACIÓN DE LOS TÉRMINOS.


Los títulos que se usan para referirse a los líderes de la iglesia hoy, pueden ser distintos de los
que menciona el Nuevo Testamento. Eso no es lo importante, lo que debe preservarse son las
funciones espirituales y las demandas éticas de los que dirigen. Los líderes de la iglesia hoy
tienen los mismos deberes y demandas de la iglesia primitiva. Son llamados a brillar con el
testimonio de Cristo en este presente siglo malo, a cuidar la grey de Dios y apacentarla con
amor y solicitud. No como señores del rebaño, sino como siervos dedicados (1 P. 5:2,3). A la
par, la iglesia debe honrar a sus líderes, preocuparse por sus necesidades y sujetarse en el
Señor a sus ministerios.
8. Los ministerios dentro
de la iglesia
Preparado por el 
profesor: Osmany Cruz 
Ferrer.

 La iglesia de Jesucristo es 
depositaria de los propósitos 
de Dios en la tierra hasta el 
arrebatamiento, cuando será 
trasladada a los cielos. 

 Mientras ese día llega, la 
iglesia deberá evangelizar al 
mundo, discipular a los 
nuevos creyentes, entrenar y 
enviar a sus obreros, cuidar a 
sus integrantes y ser un 
referente para el mundo entre 
otras muchas tareas.
 Antes de su ascensión a los cielos, 
Jesús les dio a sus discípulos la 
comisión de ir por todo el mundo 
predicando el evangelio (Mr. 16:15). 

 “¿Cómo, pues, invocarán a aquel en 
el cual no han creído? ¿Y cómo 
creerán en aquel de quien no han 
oído? ¿Y cómo oirán sin haber 
quien les predique? ¿Y cómo 
predicarán si no fueren enviados? 
Como está escrito: ¡Cuán hermosos 
son los pies de los que anuncian la 
paz, de los que anuncian buenas 
nuevas!” (Ro. 10:14,15).
La dinámica de la gran comisión:
 Una mandato                                Id.
 Un propósito                                 Predicad.
 Un mensaje                                    El evangelio.
 Un destino                                      cada criatura.
 Dos resultados                              El que cree será salvo, 
el que no cree será condenado.
 Una promesa.  Habrá señales que 
confirmen el mensaje.

 Satanás como fiscal, 
 el Abogado Jesús, 
 Juez Dios, 
 Acusada la humanidad 
 y testigo la iglesia. 

El fiscal Satanás dice culpable a la humanidad sin 
posibilidad de apelación, Jesús el abogado cita de la ley la 
clausula única de perdón que se encuentra en Juan 3:16, la 
iglesia como testigo afirma el poder de esa ley de redención 
en Cristo y Dios el Padre absuelve a todos los que confiesan 
que Jesús es el Señor.
 La palabra profética más 
segura.
 El poder del Espíritu.

 Solo los hombres 
apasionados han logrado 
grandes cosas.
 Larry Bird, leyenda del 
baloncesto, considerado el 
mejor alero que haya existido 
jamás. 
 Demóstenes era tartamudo, 
y su voz era inadecuada para 
la oratoria. Se convirtió en el 
más grande orador del mundo 
antiguo. 
 Ludwig van Beethoven se 
quedó sordo. 

 Homero, ciego. 

 Sir Walter Scott sufría de 
parálisis. 

 Robert Louis Balfour
Stevenson (1850‐1894), 
novelista, ensayista y poeta 
escocés, Padeció de 
tuberculosis una buena parte 
de su vida.

 Dostoiewski era epiléptico y 
después de un ataque podía 
olvidar toda la trama de una 
novela que estuviera 
escribiendo.
 David Livinstong su 
disciplina al llamado de Dios 
lo llevó a pasar toda su vida en 
el África aunque en todo su 
ministerio solo ganó un 
converso que mas tarde se 
apartó.

 William Booth se sintió tan 
trastornado por la visión de 
los borrachos de los barrios 
bajos de Londres que no pudo 
comer o dormir en una 
semana.

 Alexander Borisov. 
Presidente de las SBU de la ex 
Unión Soviética. 

 Juan Bunyan. 

 Juan Wesley.

 Jonathan Goforth.
 Jorge Müller.

 C. S Tudd.
 Spurgeon.

 Hudson Taylor.

 Tenemos que 
proclamar nuestra fe.
 “¿Cómo, pues, invocarán 
a aquel en el cual no han 
creído? ¿Y cómo creerán 
en aquel de quien no 
han oído? ¿Y cómo oirán 
sin haber quien les 
predique?” (Ro. 10:14). 
 La comisión nos ha sido 
dada (1 Co. 9:17).
 El mundo entero quiere 
lo que tenemos (Juan 
4:10). 
Si conocieras el don de 
Dios, y quién es el que te 
dice: Dame de beber; tú le 
pedirías, y él te daría agua 
viva” (Jn. 4:10). 

 Nosotros tenemos el 
privilegio de hacerlo (2 
Corintios 5:20).
Tenemos que trabajar en equipo (Lucas 
10:1)

 “Después de estas cosas, 
designó el Señor también a 
otros setenta, a quienes 
envió de dos en dos delante 
de él a toda ciudad y lugar 
adonde él había de ir” (Lc. 
10:1).

 Tenemos que ser evangelizadores calificados.(2 
Timoteo 2:15). 
 5. No debemos 
desperdiciar ningún 
momento (2 Co. 6:2).
 “Porque dice: En tiempo 
aceptable te he oído, y en 
día de salvación te he 
socorrido. He aquí ahora 
el tiempo aceptable; he 
aquí ahora el día de 
salvación” (2 Co. 6:2).

 Este es el día para hacerlo.(2 Corintios 6:2).
 Con disposición, de 
buena gana, 
voluntariamente
 “Por lo cual, si lo hago de 
buena voluntad, 
recompensa tendré; pero si 
de mala voluntad, la 
comisión me ha sido 
encomendada” (1 Co. 9:17). 

 Debemos evangelizar con 
sencillez.
 “y ni mi palabra ni mi 
predicación fue con palabras 
persuasivas de humana 
sabiduría, sino con 
demostración del Espíritu y 
de poder, para que vuestra fe 
no esté fundada en la 
sabiduría de los hombres, 
sino en el poder de Dios” (1 
Co. 2:4,5).
 Debemos anunciar las 
nuevas del reino de Dios 
con denuedo.

 “Porque no nos ha dado 
Dios espíritu de cobardía, 
sino de poder, de amor y de 
dominio propio” (2 Ti. 1:7). 

 Debemos anunciar el 
evangelio con compasión.
 “Libra a los que son llevados a la 
muerte; salva a los que están en 
peligro de muerte. Porque si 
dijeres: Ciertamente no lo 
supimos, ¿Acaso no lo 
entenderá el que pesa los 
corazones? El que mira por tu 
alma, él lo conocerá, y dará al 
hombre según sus obras” (Pr. 
24:11‐12). 
 Prediquemos las buenas 
noticias con señales 
sobrenaturales.
 “Y les dijo: Id por todo el 
mundo y predicad el 
evangelio a toda criatura. Y 
estas señales seguirán a los 
que creen: En mi nombre 
echarán fuera demonios; 
hablarán nuevas lenguas;
tomarán en las manos 
serpientes, y si bebieren cosa 
mortífera, no les hará daño; 
sobre los enfermos pondrán 
sus manos, y sanarán” (Mr. 
16.17, 18).

 James Hudson Taylor 
dijo: "La gran comisión no 
es una opción para ser 
considerada, sino un 
mandamiento para ser 
obedecido". 
 “Por tanto, id, y haced 
discípulos a todas las 
naciones, bautizándolos en el 
nombre del Padre, y del Hijo, 
y del Espíritu Santo;
enseñándoles que guarden 
todas las cosas que os he 
mandado; y he aquí yo estoy 
con vosotros todos los días, 
hasta el fin del mundo. Amén” 
(Mt. 28:19,20).

 “Podemos guiar a otros sólo 
hasta el punto del camino 
que nosotros mismos 
hayamos llegado. Solo 
señalar el camino no es 
suficiente. Si no estamos 
caminando, entonces nadie 
puede seguirnos, y no 
guiamos a nadie” (Oswald
Sanders).
 (1) Recibir a los débiles en la fe 
(Ro. 14:1).
 (2) Soportar a los menos fuertes 
(Ro. 15:1).
 (3) Amar a los demás (Ro. 
12:10).
 (4) Compartir con otros de lo 
que Dios nos ha dado (Ro. 
12:13).
 (5) Alentarnos (1 Ts. 4:18).
 (6) Sobrellevar las cargas los 
unos a los otros (Gá. 6:2).
 (7) Amonestarnos mutuamente 
cuando fuere necesario (Ro. 
15:14).

 Dios es quien señala a una 
persona para una tarea 
determinada, de eso no hay 
duda, pero la iglesia tiene un 
papel importante 
respaldando aquello que el 
Espíritu ha dicho. 
 En el libro de los Hechos. 
Pablo y Bernabé fueron 
seleccionados por el Espíritu 
para la obra misionera, la 
iglesia, por su parte, dio su 
consentimiento y oró por 
ellos (Hch. 13:2,3). 
 La iglesia como cuerpo de Cristo debe tener un 
impacto espiritual primeramente, pero también tendrá 
un impacto social inexcusable (Mt. 5:13‐16). 
LA CANTIDAD DE MINISTERIOS DESCRITOS EN EL 
EL MINISTERIO DE LA IGLESIA  NUEVO TESTAMENTO

Elementos que subyacen en esta enseñanza

¿DE CUÁNTOS MINISTERIOS PODEMOS HABLAR EN  EL DESMEDIDO ÉNFASIS EN EL DENOMINADO 
LA ACTUALIDAD? MINISTERIO QUÍNTUPLE

LOS MINISTERIOS DE EF 4:11 
¿EXISTE UN ORDEN DE PRIORIDAD DE UN 
MINISTERIO SOBRE OTRO?

¿Deben todos los ministerios 
ser desempeñados como 
“oficios”?

¿QUIÉN OTORGA LOS MINISTERIOS?  ¿En qué forma debe la iglesia reconocer 
¿EN QUÉ MANERA? cada uno de los ministerios?

FIN
EL MINISTERIO DE LA IGLESIA
(Por profesor Osmany Cruz en su libro Escuela Bíblica, Volumen II, cursos doctrinales).

La iglesia de Jesucristo es depositaria de los propósitos de Dios en la tierra hasta el


arrebatamiento, cuando será trasladada a los cielos. Mientras ese día llega, la iglesia deberá
evangelizar al mundo, discipular a los nuevos creyentes, entrenar y enviar a sus obreros, cuidar
a sus integrantes y ser un referente para el mundo entre otras muchas tareas.

A. EVANGELIZAR.
Antes de su ascensión a los cielos, Jesús les dio a sus discípulos la comisión de ir por todo el
mundo predicando el evangelio (Mr. 16:15). Esta imperativa orden, junto a la de hacer
discípulos, constituyen la agenda principal e histórica de la iglesia en la tierra. Pablo Alberto
Deiros define evangelización como la acción de: “Comunicar la buena noticia tocante a Jesús a
todas las personas, una noticia urgente, inmediata y salvadora”.1 Deiros dice además que
evangelismo es “la predicación del evangelio cristiano de salvación a través de Jesús y con el
poder del Espíritu Santo a otras personas inconversas, con el propósito de que puedan
arrepentirse de sus pecados, poner [su] fe en Cristo como Señor y Salvador, y encontrar una
nueva vida en él.”2 Esa es nuestra honrosa responsabilidad; debemos llevarla a cabo porque
“¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo creerán en aquel de quien
no han oído? ¿Y cómo oirán sin haber quien les predique? ¿Y cómo predicarán si no fueren
enviados? Como está escrito: ¡Cuán hermosos son los pies de los que anuncian la paz, de los
que anuncian buenas nuevas!” (Ro. 10:14,15).

B. DISCIPULAR.
La gran comisión no sólo se limita a la evangelización, también incluye la consolidación de los
nuevos creyentes. Una y otra acción van de la mano. Si la iglesia evangeliza y no discipula, su
trabajo se queda a medias y es hasta posible que se pierda del todo. El sacro mandato de Jesús
para su pueblo es: “Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el
nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas
que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo.
Amén” (Mt. 28:19,20). Alguien exageró al decir que “los cristianos son buenos parteros, pero
malos pediatras”. Lo que sí es cierto es que el trabajo de consolidación o discipulado de un
nuevo creyente, exige mucho tiempo y dedicación. Oremos para que Dios nos conceda esa
gracia y esforcémonos por formar en otros el carácter de Cristo.

C. CUIDAR
La iglesia debe cuidar de los suyos. El trabajo no es del liderazgo local solamente. Para que una
congregación de creyentes funcione, según el estándar del Nuevo Testamento, se requiere que
sus integrantes se preocupen los unos por los otros. La Palabra nos manda a: (1) recibir a los
débiles en la fe (Ro. 14:1), (2) a soportar a los menos fuertes (Ro. 15:1), (3) a amar a los demás
(Ro. 12:10), (4) a compartir con otros de lo que Dios nos ha dado (Ro. 12:13), (5) a alentarnos
(1 Ts. 4:18), (6) a sobrellevar las cargas los unos a los otros (Gá. 6:2), (7) a amonestarnos

1
Deiros, Pablo Alberto: Diccionario Hispano-Americano De La Misión. Casilla, Argentina : COMIBAM Internacional,
1997.
2
Ibíd.
mutuamente cuando fuere necesario (Ro. 15:14), etcétera. Los integrantes de la iglesia deben
cuidarse entre sí, en unidad y amor. Esta es su identidad espiritual y si así vive la iglesia, su
testimonio le dirá al mundo que somos hijos de Dios (Jn. 17:21).

D. ENVIAR.
Dios es quien señala a una persona para una tarea determinada, de eso no hay duda, pero la
iglesia tiene un papel importante respaldando aquello que el Espíritu ha dicho. Así lo vemos en
el libro de los Hechos. Pablo y Bernabé fueron seleccionados por el Espíritu para la obra
misionera, la iglesia, por su parte, dio su consentimiento y oró por ellos: “Ministrando éstos al
Señor, y ayunando, dijo el Espíritu Santo: Apartadme a Bernabé y a Saulo para la obra a que los
he llamado. Entonces, habiendo ayunado y orado, les impusieron las manos y los despidieron”
(Hch. 13:2,3). Cuando Dios llama a alguien, le toca a la iglesia respaldarle, enseñarle y enviarle
con bendición. No sólo se refiere a la persona que se va de la congregación para servir en un
determinado lugar, también es referencia a los que cumplen una tarea determinada dentro de
la congregación. Hay que respaldar esa comisión que ha recibido y a su vez, el que es enviado
debe respetar la autoridad que Dios ha puesto, y rendir cuentas para su propio provecho y el
de la obra que realiza (He. 13:17).

E. SER UN REFERENTE PARA EL MUNDO.


Jesucristo dijo: “Vosotros sois la sal de la tierra; pero si la sal se desvaneciere, ¿con qué será
salada? No sirve más para nada, sino para ser echada fuera y hollada por los hombres.
Vosotros sois la luz del mundo; una ciudad asentada sobre un monte no se puede esconder. Ni
se enciende una luz y se pone debajo de un almud, sino sobre el candelero, y alumbra a todos
los que están en casa. Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras
buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos” (Mt. 5:13-16). La iglesia es
un paradigma, un hito; todos miran a ella necesariamente, pues ella es “columna y baluarte de
la verdad”.
La iglesia como cuerpo de Cristo debe tener un impacto espiritual primeramente, pero
también tendrá un impacto social inexcusable. Los primeros cristianos son descritos como
“teniendo favor con todo el pueblo”: “Y perseverando unánimes cada día en el templo, y
partiendo el pan en las casas, comían juntos con alegría y sencillez de corazón, alabando a
Dios, y teniendo favor con todo el pueblo. Y el Señor añadía cada día a la iglesia los que habían
de ser salvos” (Hch 2:46,47). La misericordia y la generosidad, siempre han sido distintivos de
la iglesia.
EL SERVICIO EN EQUIPO. LA GRAN ESTRATEGIA DE DIOS.

Texto bíblico: “Para que todos sean uno; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que
también ellos sean uno en nosotros; para que el mundo crea que tú me enviaste” (Jn
17.21)

Pensamiento: “Detrás de un hombre talentoso, siempre hay otro hombre talentoso.”


Proverbio chino.

INTRODUCCIÓN:

A. ¿Cuántas personas son necesarias para construir un Lápiz?


 La madera tiene que ser aserrada y venir probablemente de un bosque en
América del Sur.
 El grafito puede que sea extraído de Cumbria, una mina de grafito en Inglaterra
que produce uno de los mejores tipos de grafito del mundo desde 1665.
 Y el borrador, tal vez provenga de una plantación de caucho en la lejana
Malasia.
 Se necesitan miles de personas, en distintas partes del mundo para crear un
lápiz.

B. Tenemos trabajo de equipo.


Población Mundial: 6.7 billones de personas.
Hay 238 países políticos en el mundo. 193 Países Independientes.
Aproximadamente 11% de la población confiesa ser cristianos nacidos de nuevo.
Otro 20% asiste a la iglesia, pero puede que no confiesa ser cristiano.
Cerca de 36% de la población mundial tiene la oportunidad de oír el Evangelio,
pero permanecen no-evangelizado a pesar de la frecuencia de iglesias en su
región.
Eso deja 32% de la población mundial que no tiene oportunidad de oír el
Evangelio.
680 millones de personas ni siquiera han oído del nombre de Jesús.
Cada año 57.9 millones de personas mueren.
Cada día mueren 158,857 personas y de ellas aproximadamente 66,000 personas
muriendo sin haber tenido ningún acceso al Evangelio.
6,619 personas mueren cada hora.
110 personas mueren cada minuto.
Aproximadamente 1.64 personas mueren cada segundo.
Más de 80 países persiguen el evangelio de forma moderada o agresiva.
La persecución agresiva de cristianos ocurre en: Arabia Saudita, Sudán, Somalia,
Yemen, Corea del Norte, Laos, Vietnam, China, Irán, Marruecos, Libia, Egipto y
Argelia.
Cada año mueren por causa del evangelios más de 160,000 creyentes.
En India hay un pastor para cada siete iglesias.
En India hay 2334 etnias y de ellas 305 han sido alcanzadas y 2029 no han sido
alcanzadas.
En Sudán la proporción es un pastor para doce.
En China hay 501 etnias y de ellas han sido alcanzadas 88 y 413 no han sido
alcanzadas.
En Pakistán hay 386 etnias y de ellas solo 15 han sido alcanzadas y 371 no han sido
alcanzadas.
En Bangladesh hay 388 etnias y de ellas 48 han sido alcanzadas mientras que 340
no han sido alcanzadas.
En Nepal hay 315 etnias y de ellas 23 han sido alcanzadas mientras 292 no han
sido alcanzadas.
Traducción bíblica: "Alrededor del 96% de la población del mundo tiene Escrituras
adecuadas en su idioma. Sin embargo, terminar con el 4% restante requerirá
posiblemente tres mil nuevos esfuerzos de traducción."
Turquía tiene 65 000 000 de personas y en todo el país solo existen unos 1 500
cristianos. 43 333 inconversos por cada cristiano.
En España hay un cristiano por cada 500 inconversos.

C. DIOS NOS LLAMA A DESESTIMAR LOS IMPOSIBLES:


Cuando el cristiano protestante, físico y matemático Isaac Newton anunció sus
descubrimientos dijeron de él, que era un matemático loco.
Galileo Galilei aseguró que la tierra giraba alrededor del sol y no a la inversa, le
hicieron un proceso por hereje y le hicieron pasar el resto de su vida en prisión
domiciliaria.
Cuando Pasteur afirmó que la gente podía ser inmunizada contra ciertas
enfermedades, muchos lo criticaron y un enemigo suyo lo retó a duelo.
Cuando Rowland Hill propuso que se usaran sellos de correos como medio para
pagar previamente la entrega de la correspondencia, su idea fue llamada un
plan estrafalario y visionario.
Cuando la Asociación Cristiana de Jóvenes de Nueva York anunció que iba a
entrenar a muchachas para operar maquinas de escribir, muchos se opusieron
diciendo que esto iba más allá de la capacidad mental de las mujeres.
Cuando Josué Coppersmith aseguró que había descubierto el teléfono, las
autoridades de N.Y. lo apresaron por estafador.
Cuando Nehemías comenzó la reconstrucción de los muros de Jerusalen,
Sambalat y Tobías dijeron que si una zorra caminaba por encima de ellos se
derrumbarían enseguida. Pero Nehemías se levantó y dijo: El Dios de los cielos,
él nos prosperará, y nosotros sus siervos nos levantaremos y edificaremos,
porque vosotros no tenéis parte ni derecho ni memoria en Jerusalén (Nehemías
2:20).
IL. Hudson Taylor pensó en el suicidio cuando vio la gran oposición que resultó
de su visión de llevar el evangelio al interior de la China. Demoró siete años en
ganar el primer convertido en Birmania, Indochina.
Que William Carey bautizara al primer convertido en la India.
Que Morrison atrajera al primer convertido a Cristo.
Que Moffat declarara ver la primera evidencia de la acción del Espíritu Santo
sobre los bechuanas en África.
Que Henry Richards obtuviera el primer convertido ganado en Banza manteka.

ESTÁN SOPLANDO NUEVOS TIEMPOS:


Más de 700 millones de personas en 220 países han visto la película "Jesús", y de
ellas 41,000,000 han indicado un compromiso serio con Jesucristo y a estudios
continuos de la Biblia.
Después de 70 años de opresión en la Unión Soviética, los Cristianos numeran
aproximadamente 100 millones - cinco veces el número del Partido Comunista a la
altura de su popularidad, y el 36% de la población.
En Asia Central, una iglesia sembrada hace solo cuatro años en Uzbekistán ha
crecido a 3,000 miembros y ha sembrado otras 55 congregaciones.
Mongolia, que no tenía ninguna iglesia en absoluto tan recientemente como 1991,
ahora tiene más de 3,000 creyentes en 17 congregaciones. Y los Mongolianos han
enviado a sus primeros misioneros para trabajar con la Operación Movilización en
India.
En Nepal, el único país Hindú oficial del mundo, más de 100,000 hindús han
conocido al Salvador en las dos décadas pasadas.
Cada mes otros 15,000 en India son bautizados como nuevos creyentes en
Jesucristo.
En China, hay ahora aproximadamente 80,000,000 creyentes evangélicos -
creciendo a un paso de más de 30,000 conversiones por día.
En 1900, Corea no tenía ninguna Iglesia Protestante; fue considerada "imposible
de penetrar." Hoy, seis nuevas iglesias se abren cada día en Corea del Sur, y es el
lugar de nueve de las iglesias más grandes del mundo - algunos con más de
800,000 miembros. Hoy Corea es 30% Cristiano con 7,000 iglesias solo en Seúl.
Millones de Budistas han venido a Cristo.
De más de 400 millones de Latinoamericanos, más de 50 millones se han hecho
Cristianos evangélicos. Hacia el final de esta década.
Muy pronto una mayoría de la gente en Brasil, Guatemala, Honduras, y El Salvador
serán creyentes evangélicos.
Chile, Costa Rica, y Bolivia son aproximadamente 40% evangélicos que creen en la
Biblia .
Ya la población de México es más del 3.5% evangélica.
En África la iglesia arde. Es el primer continente para hacerse mayormente
Cristiana (más del 50%) en un solo siglo. Más de 25,000 nuevos creyentes por día
marcan el crecimiento de la Iglesia.
Más musulmanes en Irán han venido a Cristo desde 1980 que en los previos 1000
años anteriores. Antes de la revolución de Khomeini en 1979 había
aproximadamente 2,000 creyentes iranís. Después de años de persecución
intensificada, hay ahora más de 15,000.
Las iglesias de Singapur son unas de las más activas evangelísticamente en el
mundo, con un misionero enviado por cada 1,000 Cristianos.
El número de personas que está siendo presentada el plan de salvación cada día es
ahora al menos 260,274.
Cada día el número añadido al cuerpo de Cristo por todo el mundo hace un
promedio de 174,000 personas y 3,500 nuevas iglesias se abren cada semana
mundialmente.

IL. Los directores de orquestas sinfónicas informan que lo más difícil para formar una
agrupación es encontrar quien quiera el puesto de segundo violín. Todos quieren ser el
primero.

IL. Ballenas azules.

I. EL TRABAJO EN EQUIPO ES IMPRESCINDIBLE EN LOS PROPÓSITO DE DIOS:


1. Jesús trabajó en equipo con los apóstoles.
2. Los apóstoles trabajaban juntos y a su vez tenían colaboradores y consiervos
que le apoyaban.
3. Cuando Jesús envió a los doce, hizo que fueran de dos en dos y les entregó su
respaldo para enfrentarse al mundo espiritual: “Después llamó a los doce, y
comenzó a enviarlos de dos en dos; y les dio autoridad sobre los espíritus
inmundos” (Mr. 6:7).
4. En el envío de los setenta ocurrió lo mismo: “Después de estas cosas, designó el
Señor también a otros setenta, a quienes envió de dos en dos delante de él a
toda ciudad y lugar adonde él había de ir” (Lc. 10:1).
5. Pablo, la mente organizativa y teológica más grande que ha dado la iglesia,
entendía que necesitaba de otros para hacer mejor la obra de Dios. Durante su
ministerio trabajó con otros hermanos como: Silas, Sópater, Aristarco,
Segundo, Gayo, Timoteo, Tíquico, Trófimo, Urbano, Epafrodito, Filemón,
Clemente, Tito, Aquila y Priscila (Hch. 15:40; 20:4; Ro. 16:3-4; Gá. 2:1; Fil. 2:25;
4:3; Flm. 1).
A. Las metáforas de la iglesia lo confirman.
 Una familia.
 Un edificio.
 Un cuerpo.

B. Galería de servidores que trabajaron en equipo.


 Charles Finney y Daniel Nash.
 John Wesley y Carlos Wesley.
 Charles Spurgeon y William Williams, su amigo y biógrafo.

IL. Marx Twain. Junte un canario, un perro y un gato juntos, junte un bautista, un
presbiteriano y un anglicano, no quedará nadie vivo.

C. Los factores para el crecimiento sostenido de la iglesia en cualquier parte del


orbe.

El director del Instituto para el Desarrolllo Natural de la Iglesia, Christian A. Schwarz ha


conducido el estudio de iglecrecimiento más abarcador del que se tenga conocimiento
hasta ahora.
Investigó mil iglesias existentes repartidas en los cinco continentes del hemisferio.
Estas iglesias tenían las más disímiles características.
Fueron encuestadas iglesias pentecostales y no pentecostales.
Congregaciones grandes y pequeñas.
Iglesias perseguidas por el gobierno o subvencionadas por él.
Iglesias situadas en lugares de avivamiento y otras que se encontraban en lugares
de poco crecimiento evangélico.
Congregaciones conocidas y otras casi desconocidas.
Schwarz encuestó iglesias en 32 países.
Dicho cuestionario fue respondido por 30 miembros de cada una de las 1000
iglesias encuestadas.
La encuesta fue traducida a 18 idiomas.
Al final de la aplicación de la misma fueron tabuladas 4,2 millones de respuestas.
La investigación fue conducida por Instituto para el Desarrolllo Natural de la Iglesia
Este ministerio contrató los servicios del sociólogo y psicólogo Alemán Christoph
Schalk para la elaboración científica de la encuesta y para que se ajustara a severos
criterios de objetividad, fiabilidad y validez sociológicas.
Los resultados de la investigación fueron resumidos en ocho características
cualitativas presentes invariablemente en las iglesias que están creciendo. Ellas
fueron:

1. Liderazgo capacitador. Según la encuesta, las iglesias que más crecen son aquellas
en las que sus líderes concentran su trabajo en capacitar a otros para el servicio
cristiano.
2. Ministerio según dones. Ubicar a cada cual en el área en que ha sido especialmente
llamado.
3. Espiritualidad ferviente. Las congregaciones que manifiestan más su entusiasmo,
expresan más apasionadamente su fe y son más fervorosas en su devoción obtienen
mayor crecimiento independientemente de si son carismáticas o no.
4. Estructuras funcionales. Esta fue la característica más polémica. Las iglesias que
han implementado mejores estructuras conforme a su contexto han obtenido
mayor crecimiento.
5. Culto inspirador. El culto que resulta en una experiencia inspiradora para los
asistentes debido al trato del Espíritu Santo logra que la gente se quede y que
nuevas personas asistan al servicio espiritual.
6. Células integrales. La implementación de células donde se predique la palabra, se
fomente el compañerismo, se le dé culto a Dios y se permita el servicio está entre
las causas fundamentales de crecimiento de las iglesias que crecen
constantemente.
7. Evangelismo según las necesidades. Las iglesias que buscan ministrar a los
inconversos según sus necesidades han obtenido un mayor crecimiento. Para
hacerlo han tenido que desarrollar como plan eclesial el evangelismo por
relaciones.
8. Relaciones afectivas. Las iglesias más afectivas tienen un mayor crecimiento que las
iglesias que son más moderadas en este aspecto. O sea, las iglesias donde hay
mayor por ciento de invitaciones a cenar entre los feligreses, donde los hermanos
pasan mayor tiempo juntos compartiendo y manifestando el amor cristiano tienen
más celeridad en el crecimiento.

II. EL TRABAJO EN EQUIPO ES IMPRESCINDIBLE EN LA FORMACIÓN PERSONAL.

Pastor Everett, cuidó de la familia al fallecimiento de Moody.


Edward Kimball, lo invita a su Escuela Dominical, su maestro.
Henry Varley lo inspira durante una conferencia en Dublin, Irlanda
C.T Studd le manda todo el dinero que necesitaba para empezar el Instituto Bíblico en
Chicago.
Ira D. Sankey Lo acompañaría durante toda su vida.
R.A. Torrey, el gran predicador, fue su amigo y consejero.
Emma Revell, su esposa, quien lo educó y lo apoyó siempre.
C. H. Spurgeon, su amigo y al único que gustaba de leer.
Horatio Spafford:
Resultado: Moody, el predicador más escuchado del mundo antes de que se inventara
la megafonía (hijo de un albañil y un ama de casa, estudió hasta primaria, le negaron la
membresía en su iglesia, zapatero, negocios medio millón al año, evangelista
tartamudo)
Pastor Everett + Edward Kimball + Henry Varley + C.T Studd + Ira D. Sankey + R.A.
Torrey + Horatio Spafford + Emma Revell

Un hierro con otro hierro se aguza (Proverbios )

III. LOS PROCESOS DE DIOS TE HACEN APTO PARA FORMAR PARTE DE UN EQUIPO.
1. David no dio un curso rápido y se convirtió en rey. Dios lo pasó por etapas que
lo prepararon para este gran fin.
2. Samuel no fue juez y profeta después de un Casting promovido por Elí. Él buscó
a Dios durante años con persistencia.
3. Gedeón no derrotó 135 000 madianitas después de oír a su predicador favorito.
Dios fue aumentando la fe de este agricultor de Manasés mediante un trato
suave y continuado.
4. Ester no logró salvar a su pueblo después de un desfile de pasarela, tuvo que
ayunar y desafiar las propias reglas del rey persa.
5. Josué no sucedió a Moisés porque no había nadie más, el Señor fue
domesticando a aquel líder impetuoso e inexperto.

IV. APASIÓNATE CON LA VISIÓN DE EQUIPO. UN HOMBRE PUEDE LOGRAR AQUELLO


POR LO QUE SE APASIONA.
Larry Bird, leyenda del baloncesto, considerado después de su retiro el mejor
alero que haya existido jamás. Cada mañana antes de irse a la escuela
practicaba 500 tiros libres.
Demóstenes era tartamudo, y su voz era inadecuada para la oratoria; pero
debido a su disciplina se convirtió en el más grande orador del mundo antiguo.
Ludwig van Beethoven se quedó sordo.
Homero, ciego.
El escocés Sir Walter Scott sufría de parálisis. Se mantuvo escribiendo, a pesar
de esto, hasta su muerte. Escribió Ivanhoe, La Novia de Lammermoor, El Señor
de las Islas, etc.
Robert Louis Balfour Stevenson (1850-1894), novelista, ensayista y poeta
escocés, Padeció de tuberculosis una buena parte de su vida, se vio obligado a
viajar buscando mejores climas, y en sus travesías escribió sin claudicar. Es el
autor de “La isla del tesoro”.
Dostoiewski era epiléptico y después de un ataque podía olvidar toda la trama
de una novela que estuviera escribiendo. Escribió “el jugador” en 26 días.
David Livinstong su disciplina al llamado de Dios lo llevó a pasar toda su vida en
el África aunque en todo su ministerio solo ganó un converso que mas tarde se
apartó. William Booth se sintió tan trastornado por la visión de los borrachos
de los barrios bajos de Londres que no pudo comer o dormir en una semana.
Alexander Borisov. Presidente de las SBU de la ex Unión Soviética.
Juan Bunyan era semianalfabeto. Escribió “El Progreso del peregrino” en su
segundo encarcelamiento y se ha publicado hasta hoy en más de 80 idiomas del
mundo.
Bill Bring, vida pública de Jesús.
Jorge Witefield, 18 000 sermones.

PREMISAS DEL TRABAJO EN EQUIPO.

Partamos de que se puede (figuras de triángulo)

I. Somos colaboradores, no competidores (Evite el espíritu de Saúl)

II. Apoye, no sospeche (evite el espíritu de Coré).

III. Concéntrese en la visión, no en usted mismo (evite el espíritu de Juan y Jacobo).

IV. Comprométase con la misión (evite el espíritu de los 10 espías).

V. Viva en las matemáticas de Dios: sume y multiplique, nunca divida ni reste (evite
el espíritu de Coré).
VI. Mantenga una actitud saludable (evite el espíritu de Pedro).

VII. Comprenda las cadenas de mando (evite el espíritu de .

CONCLUSIONES:

Démosle la gloria a Dios.

Uno de los conductores de orquestas sinfónicas más destacados en la primera mitad


del siglo XX fue Arturo Toscanini. Al concluir la ejecución de una de las sinfonías de
Beethoven, la ejecución de la orquesta fue tan brillante que la audiencia se puso de pie
para aplaudirles. Toda la orquesta se puso también de pie para recibir la ovación, pero
el hecho de que los aplausos parecían prolongarse en forma indefinida molestó
profundamente a Toscanini. Dándose vuelta y enfrentando a los músicos les dijo:
“Caballeros, ustedes no son nada... Yo no soy nada... Beethoven es todo!”

Si la melodía que entona nuestro liderazgo despierta el reconocimiento de los demás


recuerden que ustedes no son nada, lo que hacemos no es nada, Cristo lo es todo y
para él la gloria por los siglos de los siglos
9. El gobierno de la
iglesia
GOBIERNO ECLESIÁSTICO

TIPOS DE GOBIERNO MÁS USADOS EN LA


ACTUALIDAD.

EL GOBIERNO EPISCOPAL

 Recibe su nombre de la palabra episkopos,(ejpivskopo),


que se traduce como obispos. Literalmente significa
“supervisor,” (epi, sobre; skopeo, mirar o vigilar), de
donde se deriva el término castellano episcopado.
 Es un gobierno de obispos, ayudados por sacerdotes y
diáconos.
 Toda la autoridad está en los obispos; no se brinda el
derecho a la congregación de participar en la toma de
decisiones.
 También se le llama gobierno absoluto, forma
monárquica o jerárquica.
 Se pretende que este es un modelo bíblico al decir que
el “epískopos” (obispo o sobreveedor) era la más
elevada autoridad.
 Es, sin embargo, evidente en el Nuevo Testamento, un
principio que involucra las esferas inferiores en las
decisiones de asuntos importantes de la iglesia.
 Los que practican el gobierno episcopal reconocen la
autoridad personal de un obispo como la de los
emperadores en los tiempos bíblicos; es una autoridad
sumamente centralizada en una persona.

 Lo usan por excelencia la Iglesia Católica


Romana, la Anglicana, la Metodista y la
Ortodoxa. Las iglesias independientes
suelen tener un gobierno episcopal.
Ventajas:
 Este tipo de gobierno tiene como ventajas el hecho de que bien
aplicado, este sistema permite al obispo, pastor o siervo del Señor
recibir y ejecutar la visión recibida de lo alto.
 Reconoce el hecho de que Dios entrega la visión a ciertos
hombres, visión que a veces no es entendida por todos los
miembros del equipo eclesiástico y puede ser truncada por el
capricho humano.
 El sistema permite que un líder de verdadera responsabilidad
pueda rodearse de personas sabias que compartan la visión; se
evita así la imposición de colaboradores incompetentes o no
gratos.
 Si se hace un paralelismo secular se podría decir que a ningún
gobernante le gustaría que el pueblo le impusiera el gabinete
ministerial. Si tuviera ministros opositores, de seguro sería difícil
gobernar. Este sistema evita las rebeliones internas y pugnas para
posiciones, debido a que solo el obispo tiene la autoridad. Trata
eficientemente con los casos disciplinarios y tiene finalmente más
estabilidad administrativa.

Desventajas

 Fácilmente deviene en una dictadura que


monopoliza el pensamiento de los demás.
 No se acepta consejo, ni opinión contraria a la
del obispo.
 Crea una distinción antibíblica entre los oficiales
y los otros creyentes, con todas las debilidades
espirituales involucradas en esto y carece de un
sustrato bíblico firme sobre el cual pueda
levantarse con aprobación general.
GOBIERNO PRESBITERIANO.
 Recibe su nombre de la palabra presbuteros, que
se traduce como ancianos. Presbuteros
(Presbu;teroz), es un adjetivo, grado comparativo
de presbus, anciano.
 Es un gobierno de ancianos. Consiste
primordialmente en una iglesia gobernada por
presbíteros, (grupo escogido de ancianos),
generalmente elegidos por los miembros de una
congregación o de un grupo de congregaciones.
 Al gobierno presbiteriano también se le llama
forma federal o representativa.

 Los presbiterianos hacen remontar su concepto de


gobierno eclesiástico a la sinagoga del Antiguo
Testamento gobernada y dirigida por un grupo de
ancianos.
 Juan Calvino sostenía que como la iglesia del
Nuevo Testamento empleó una forma análoga de
organización respecto a la sinagoga, esta
constituye el patrón estructural al cual la iglesia
debe ajustarse.
DESVENTAJAS

 el presbiterio es esencialmente un comité. Los


comités tienden a ser lentos e ineficientes.
 Existen expresiones triviales que reflejan eso:
"¿qué criatura tiene muchos pies, no tiene
cabeza y se mueve muy lenta? Respuesta:
“¡un comité!"

 El presbiterianismo no puede tratar rápidamente


con los problemas disciplinarios.
 La lentitud de los procesos judiciales, y el derecho
de apelar a una serie sin fin de comités,
comisiones y cortes tienden a atrasar
interminablemente el proceso de justicia. Al final
se cumple la justicia, pero Satanás sabe
aprovechar las demorar para crear confusión,
pérdida de miembros y rencores.
Gobierno congregacional.

 Recibe su nombre del sentido congregacional


que hay en su gobierno. Bajo este sistema de
organización la iglesia local toma sus propias
decisiones por medio de votaciones, en
asambleas donde puede pronunciarse toda la
feligresía de la iglesia local.

Ventajas

 Esta forma de gobierno tiene como ventaja el hecho


de que se presta para emplear el verdadero
cooperativismo; los miembros se sienten escuchados;
las personas se sienten como un órgano dentro de ese
cuerpo que es su iglesia.
 De más está decir que una medida que se apruebe
con el consenso de la asamblea tiene mucha fuerza.
Desventajas

 El problema es que si la vida espiritual es deficiente,


el sistema puede acabar con la iglesia. No es
posible que un grupo de personas ajenas a los
intereses de Dios administre su obra. Es bueno el
sistema mientras la congregación conserve el nivel
espiritual requerido para soportar los rechazos
producidos por los desacuerdos en la opinión.

 Cuando se hace grande la congregación ésta


maneja con mucha dificultad el gobierno
congregacional. Una congregación numerosa
encuentra muy difícil la tramitación de sus puntos
de vista y proposiciones. Tiene además mucha
mayor tendencia a la rebelión interna. Las
divisiones entre grupos mucho más frecuentes que
en los otros dos tipos de gobierno.
FIN
Modelos de Gobierno eclesial
Históricamente, tres modelos de gobierno han sido puestos en práctica en la Iglesia:
EL GOBIERNO EPISCOPAL
Este gobierno reconoce una autoridad personal, como la de los emperadores de los
tiempos bíblicos, es una autoridad sumamente centralizada en una persona. Este
modelo parece haber sido copiado del gobierno imperial. Este modelo de gobierno
es el usado por la Iglesia Católica-Romana. Aunque se pretende que este es un
modelo bíblico al decir que el “epískopos” (sobreveedor) era la más elevada
autoridad, es evidente en el Nuevo Testamento un principio que involucra las
esferas inferiores en las decisiones de asuntos importantes de la Iglesia. La triple
escala de Obispo (epískopos), sacerdote y diácono es muy posterior a la época
neo-testamentaria.

EL GOBIERNO PRESBITERIANO
Este consiste primordialmente en una Iglesia gobernada por presbíteros,
generalmente elegidos por los miembros de una congregación o de un grupo de
congregaciones. Los presbiterianos hacen remontar su concepto de gobierno
eclesiástico a la sinagoga del AT gobernada y dirigida por un grupo de “ancianos”.
“El supuesto fundamento del presbiterianismo es que el Cristo resucitado es la
única cabeza de la Iglesia. El gobierna a su pueblo mediante Su Palabra y Su
Espíritu, orientando a los creyentes como un todo. No hay entonces la idea de un
grupo selecto que por revelación directa o por la imposición de manos haya
recibido poderes o autoridad extraordinarios. Quienes gobiernan a la Iglesia son
escogidos por todos los miembros de la Iglesia, que reconocen que Dios le ha dado
a aquellos capacidades y dones para enseñar y dirigir a la Iglesia en su vida sobre
esta tierra. La base de la estructura eclesiástica es la sesión de la congregación local,
electa por todos los miembros comulgantes y dirigidas por el ministro o 'anciano
maestro', también reconocido como 'moderador'. Al ministro lo escoge y lo llama la
congregación, pero es instalado en su puesto por el presbiterio, compuesto por el
ministro y el anciano 'representante' de cada congregación dentro de los límites
geográficos del presbiterio. A este cuerpo le corresponde la supervisión, con
amplios poderes, de todas las congregaciones bajo su jurisdicción. A su vez es
responsable ante el sínodo, el cual está integrado por representantes ya nombrados
por un número de presbiterios, o directamente por las diversas sesiones. La
asamblea, que es el más alto tribunal en toda Iglesia presbiteriana, tiene autoridad
definitiva en todo asunto legislativo o judicial; pero en la mayoría de los casos, un
cambio de doctrina, gobierno o culto ha de volver a los presbiterios para su
ratificación por la mayoría de tales tribunales. De este modo, todo cambio
importante debe ser considerado y aprobado en el nivel más general de la Iglesia”.
Este sistema es eminentemente nacional, en contraste con el universalismo del
sistema Episcopal.

EL GOBIERNO CONGREGACIONALISTA
Según Robert Browne quien en 1582 publicó en Holanda su famoso tratado “una
reforma sin demora alguna”, en el cual afirmaba sus principios congregacionalistas.
Afirmaba que “la Iglesia plantada o reunida es un grupo o cantidad de cristianos o
creyentes que por pacto voluntario hecho con su Dios, se encuentran bajo el
gobierno de Dios y de Cristo y observan sus leyes en santa comunión”. Tales
iglesias, afirmaba él, no están sujetas a obispos ni a magistrados. La ordenación no
es otorgada por los “ancianos” sino que es asunto de toda la Iglesia.
“Los funcionarios de una Iglesia congregacionalista generalmente son un ministro,
un diaconado y un secretario tesorero de la Iglesia. La membresía se obtiene por
profesión de fe personal en Cristo como Salvador y Señor, y los nuevos miembros
generalmente reciben la bienvenida al dárseles la diestra en señal de compañerismo
durante un servicio de comunión. La reunión de la Iglesia es la asamblea de los
miembros de ésta, reunidos bajo la dirección del Espíritu Santo para discutir y
decidir sobre asuntos relativos a la vida de la Iglesia. El llamado a un ministro para
que asuma el pastorado de la Iglesia local es hecho por la asamblea de la misma.
Los diáconos son elegidos por la membresía para ayudar al pastor a administrar la
Iglesia y también para participar de sus responsabilidades pastorales”.
“El sistema congregacionalista ha sido frecuentemente descrito por error como
democrático, mientras que una descripción más correcta, aunque algo idealista,
hubiera sido caracterizarlo como cristocéntrico”.
Pese a todo lo que se ha dicho o se pueda decir al respecto, mi opinión personal es
que el gobierno que generalmente emplean las Asambleas de Dios incorpora
aspectos del GOBIERNO PRESBITERIANO así como elementos
CONGREGACIONALISTA.
El presente estudio utiliza como texto, partes del libro “Edificaré mi Iglesia” escrito
por el conocido autor Melvin L. Hodges. Este es el texto de estudio que utilizan los
Institutos Bíblicos de Las Asambleas de Dios en la América Latina; la segunda
parte del estudio contempla las Reglas Parlamentarias, lo cual también forma parte
del programa de los Institutos Bíblicos de la América Latina.
Todo esto lo hacemos con el ruego al Señor de la mies, que estos conocimientos
traigan como resultado un adelanto en Su Obra y una mayor gloria a Su Nombre.

René R. Calvo Cruz


Mayo 1990
Cuestionario de Gobierno Eclesiástico
1. ¿Dónde se ponen de manifiesto los niveles de autoridad según la Biblia?
2. ¿Cuáles son los tres modelos históricos de gobierno eclesial que han existido?
3. ¿Cuáles son las ventajas y desventajas de de cada uno de estos modelos?
4. ¿Cuáles son las dos dimensiones de la iglesia?
5. ¿Diga tres condiciones que tienen que darse para organizar una nueva iglesia?
6. ¿Cuáles son los cuatro libros imprescindibles que tiene que tener una iglesia local?
7. En un párrafo y con sus propias palabras diga cuáles son las facultades de un pastor en
la iglesia local.
8. En un párrafo y con sus propias palabras diga cuáles son los límites de la autoridad de
un pastor en la iglesia local.
9. ¿Cuáles son las cuatro bases de amor que se ponen de manifiesto en la disciplina que
impone la iglesia a uno de sus miembros.
10. Con sus propias palabras exprese por qué usted cree que la iglesia debe participar
activamente en su sostenimiento.
10. El destino de la
iglesia
 El destino de la iglesia es la 
victoria total, cuando ya ni el 
pecado, ni la muerte tendrá 
absolutamente nada que ver 
con el pueblo de Dios. 
 Celebraremos junto al Esposo las bodas del Cordero en 
los cielos (Ap. 19:7,9) y luego reinaremos junto a él 
durante mil años (Ap. 20:4). 

 Finalmente, cuando Satanás y todos sus seguidores 
sean echados en el lago de fuego y azufre (Ap. 20:10),  
viviremos para siempre en la tierra y el cielo nuevos, 
que Dios creará para todos aquellos que se guardaron 
irreprensibles durante su terrenal peregrinaje (Ap. 
21:1,2). 
Anexos de Eclesiología
En Perú las iglesias
cristianas pierden más
miembros de entre los
hijos de los cristianos, de
lo que ganan nuevos
miembros por medio de
todos sus esfuerzos
evangelísticos.

En Estados Unidos, 90% de todos los


pastores y misioneros conocieron al
Señor mientras eran niños, y tenían
Según una publicación una responsabilidad en la iglesia
reciente del "US mientras eran niños.
Center for World
Missions", a nivel
mundial 85% de todas
las personas que se
deciden recibir a
Jesucristo, tienen
entre 4 y 14 años.

Los niños no solo son el


relevo del futuro, sino los
instrumentos de Dios para
hoy Joel 2:28 dice: “Y
después de esto derramaré
mi Espíritu sobre toda
carne, y profetizarán
vuestros hijos y vuestras
hijas; vuestros ancianos
soñarán sueños, y vuestros
jóvenes verán visiones.
2. Esta educación tiene una connotación futura.
Prov.22:6: "Instruye al niño en su camino, y aun
cuando fuere viejo no se apartará de él."

1. Está educación espiritual ha


de ser continua.

Deuteronomio 6:6,9: "Y estas


palabras que yo te mando hoy,
estarán sobre tu corazón; y
las repetirás a tus hijos, y
hablarás de ellas estando en
tu casa, y andando por el
camino, y al acostarte, y
cuando te levantes."

3. Esta educación espiritual tiene el propósito de


constituirse en una herencia generacional (Salmo
78:5-8).
El estableció testimonio en Jacob, Y puso ley en
Israel, La cual mandó a nuestros padres Que la
notificasen a sus hijos; Para que lo sepa la
generación venidera, y los hijos que nacerán; Y los
que se levantarán lo cuenten a sus hijos, A fin de
que pongan en Dios su confianza, Y no se olviden de
las obras de Dios; Que guarden sus mandamientos,
Y no sean como sus padres, Generación contumaz y
rebelde; Generación que no dispuso su corazón, Ni
fue fiel para con Dios su espíritu

1. La historia de Naamán el Sirio no hubiera sido 2. La historia de la nación de


la misma sin la niña que le habló del profeta de Israel no hubiera terminado
Dios (2 Reyes 5:2, 3) de la misma manera sí
Moisés no hubiera sido
instruido por su madre (Ex.
Y de Siria habían salido bandas armadas, y habían
2:8, 9)
llevado cautiva de la tierra de Israel a una
muchacha, la cual servía a la mujer de Naamán. Y la hija de Faraón respondió:
3Esta dijo a su señora: Si rogase mi señor al Ve. Entonces fue la doncella, y
profeta que está en Samaria, él lo sanaría de su llamó a la madre del niño, 9a la
lepra. cual dijo la hija de Faraón:
Lleva a este niño y críamelo, y
yo te lo pagaré. Y la mujer
tomó al niño y lo crió.
3. El reino de Judá no hubiera tenido una reforma 4. Sí Jeremías no hubiera respondido
espiritual sí Josías no hubiera tomado el reinado al llamado de Dios siendo un niño la
con 8 años (2 Crón.34:1-4). nación se hubiera quedado sin
testimonio de Dios en tiempos tan
De ocho años era Josías cuando comenzó a reinar, y difíciles como lo fueron los previos
treinta y un años reinó en Jerusalén. Este hizo lo recto al cautiverio babilónico (Jeremías
ante los ojos de Jehová, y anduvo en los caminos de
David su padre, sin apartarse a la derecha ni a la 1:5-7).
izquierda.A los ocho años de su reinado, siendo aún Antes que te formase en el vientre te
muchacho, comenzó a buscar al Dios de David su conocí, y antes que nacieses te
padre; y a los doce años comenzó a limpiar a Judá y a
Jerusalén de los lugares altos, imágenes de Asera, santifiqué, te di por profeta a las
esculturas, e imágenes fundidas.Y derribaron delante naciones. 6Y yo dije: ¡Ah! ¡ah, Señor
de él los altares de los baales, e hizo pedazos las Jehová! He aquí, no sé hablar, porque
imágenes del sol, que estaban puestas encima; soy niño. 7Y me dijo Jehová: No digas:
despedazó también las imágenes de Asera, las
esculturas y estatuas fundidas, y las desmenuzó, y Soy un niño; porque a todo lo que te
esparció el polvo sobre los sepulcros de los que les envíe irás tú, y dirás todo lo que te
habían ofrecido sacrificios. mande.

5. Sí el niño Daniel no se hubiera 6. Timoteo nunca hubiera llegado a ser el


propuesto junto a sus otros tres presbítero de Éfeso sin la instrucción de su
compañeros no contaminarse con la abuela Loida y su madre Eunice (2 Timoteo
comida del rey la revelación 1:4-5; 3:14,15).
escatológica de Dios se hubiera Deseando verte, al acordarme de tus lágrimas, para
quedado incompleta (Daniel 1:3- llenarme de gozo; trayendo a la memoria la fe no
21). fingida que hay en ti, la cual habitó primero en tu
Y Daniel propuso en su corazón no abuela Loida, y en tu madre Eunice, y estoy seguro
contaminarse con la porción de la que en ti también.
comida del rey, ni con el vino que él
bebía; pidió, por tanto, al jefe de los Pero persiste tú en lo que has aprendido y te
eunucos que no se le obligase a persuadiste, sabiendo de quién has aprendido; y
contaminarse. Y puso Dios a Daniel que desde la niñez has sabido las Sagradas
en gracia y en buena voluntad con el Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para
jefe de los eunucos (vv. 8,9). la salvación por la fe que es en Cristo Jesús.

7. El milagro de la 8. Las hijas de Felipe eran instrumentos de Dios


multiplicación de los panes y conocidas por toda la iglesia primigenia (Hechos
los peces tuvo su origen en la
fe de un niño (Juan 6:8-10).
Al otro día, saliendo Pablo y los que con él
Uno de sus discípulos, Andrés, estábamos, fuimos a Cesarea; y entrando en casa
hermano de Simón Pedro, le de Felipe el evangelista, que era uno de los siete,
dijo: Aquí está un muchacho, posamos con él. Este tenía cuatro hijas doncellas
que tiene cinco panes de cebada que profetizaban.
y dos pececillos; mas ¿qué es
esto para tantos? Entonces
Jesús dijo: Haced recostar la
gente. Y había mucha hierba en
aquel lugar; y se recostaron
como en número de cinco mil
varones.
1. Juan Wesley llegó a ser el líder espiritual que
fue, gracias a la positiva influencia de su
madre Susana quien oraba una hora diaria y
les enseñaba las escrituras.
2. David Livinstong conquistó la inhóspita
geografía del África gracias a la influencia
de sus padres. A los 9 años se sabía el Salmo
119 de memoria.
3. Charles Spurgeon se convirtió en el príncipe
de los predicadores por la influencia positiva
que ejercieron su abuelo y su padre sobre él.
A los 19 años era pastor del tabernáculo
Metropolitano.
4. Frankling Graham ha heredado el manto de su
padre gracias al ejemplo de integridad de sus
padres.

Dios ordena que los niños sean


educados en su temor y reverencia.
Los niños tienen un papel
preponderante en la historia.
Solo mediante una influencia espiritual
apropiada los niños pueden tener
una vida cristiana saludable.

EL SEÑOR NOS ESTÁ LLAMANDO A


CREER EN NUESTROS NIÑOS Y
HA PROCURAR SU DESARROLLO
ESPIRITUAL. ESA ES UNA META
HERMOSA EN LA QUE DEBEMOS
TRABAJAR CADA DÍA. AMÉN.

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