Está en la página 1de 4

Evolución multilineal o ecología cultural

La cultura es una característica inherente al ser humano que influye en su


comportamiento, manera de pensar y cosmovisión. A partir de este postulado, la
antropología ha pretendido explicar cómo se ha desarrollado la cultura a lo largo de la
historia. Extensa es la lista de autores, así como de postulados teóricos, organizados
alrededor de esta temática. Entre las teorías destacan el materialismo cultural y la
ecología cultural, ambos confluyen en la hipótesis de que las prácticas ejecutadas por
una comunidad afectan a su cultura; sin embargo, discrepan en la concepción de un
entorno, la primera destaca una infraestructura productiva, la otra un ambiente natural.
En ese caso la aplicación de cada una debería considerar las épocas históricas de la
humanidad, siendo excepcionalmente funcional la ecología cultural en las épocas
primitivas de las comunidades y el materialismo cultural en las épocas modernas y
complejas.

Ecología cultural

Inicialmente desarrollada por Julian Steward, esta metodología de estudio y


análisis, pretende comprobar que el entorno ecológico propicia la adaptación y
modificación cultural de una comunidad. Determinando que la cultura surge por
interacciones complejas y contactos externos.

A pesar de que en este postulado existe en parte la influencia del determinismo,


sus autores hacen énfasis en los procesos de adaptación-evolución, dando importancia a
los hechos concretos ejercidos por el hombre, de manera tal que, en el vínculo que se
establece entre las sociedades y su entorno, se desarrollan niveles de organización más o
menos estructurados, yendo desde las bandas, pasando por las tribus y llegando a los
estados. Los primeros estadios son considerados formas defectuosas, deficientes o
subdesarrolladas.

La evolución de los rasgos culturales se basa en la interacción entre sistemas


simbólicos, tecnológicos y biodemográficos. Los procesos ecológicos actúan en
conjunto con la adaptación al medio cultural y natural.

El historial cultural es comprendido como un conjunto de regularidades


transculturales funcionales y sincrónicas. Las características culturales con funcionales
debido a que se han originado gracias a que existió un ambiente que demando prácticas
específicas para que las sociedades puedan integrarse a él de forma práctica,
operándolo. A medida que se producen cambios en el entorno, la complejidad cultural
incrementa y se producen innovaciones.

El postulado básico de esta metodología es: “A similares tecnologías aplicadas a


medios ambientes similares, se produce una organización de trabajo similar en
producción y distribución lo que produce agrupamientos sociales similares que
justifican y coordinan sus actividades, recurriendo a sistemas similares de valoración y
creencias.”

Con la finalidad de generar innovación cultural, es necesario que se produzcan


ciertas condiciones específicas que promuevan la acción, dinamismo y proactividad de
las comunidades. Una condición imprescindible es un cambio ambiental que afecte a su
supervivencia y amenace sus necesidades fundamentales. Un ejemplo claro de esta
innovación es el cambio de la recolección de vegetales a la agricultura, donde se
produjo una reducción de masa biótica de los miembros de la comunidad, disminución
de la cantidad de alimento disponible; de manera tal que fue necesaria la domesticación
de especies vegetales para incrementar la capacidad de mantenimiento comunitario,
preservando el bienestar.

Materialismo cultural

El materialismo cultural es un método de investigación cultural propuesto por


Marvin Harris en 1968, mismo que se interesa por comprender causalmente las
relaciones entre los sistemas que componen una sociedad, que causan diferencias y
semejanzas sociales y culturales. Parte del axioma de que la vida social humana es una
reacción frente a los problemas prácticos de la vida terrenal.

Esta metodología considera que una sociedad existe en la medida en que sus
participantes se consideran miembros de grupos sociales y tienen valores y propósitos
en común. Destaca la acción social, da relevante importancia al conductismo y al
determinismo social.

Los principios del materialismo cultural son el tecno-ecológico y el tecno-


económico. La acepción de la palabra tecno se orienta a los conocimientos e
instrumentos, da manera tal que la materia condiciona la generación de ideas y, por
consiguiente, su puesta en práctica a través de la conducta. Tres son los componentes
principales que rigen al materialismo conductual: a) infraestructura, prácticas de
producción y reproducción relacionadas con la supervivencia y bienestar humano; b)
estructura: características organizativas con las relaciones familiares y prácticas
políticas y económicas; y c) superestructura, componentes basados en las doctrinas y el
simbolismo, como la religión.

Los componentes culturales están íntimamente relacionados, de hecho, entre


ellos se determinan. Por ejemplo, la superestructura, comprendida como la ideología,
limita a los integrantes de la comunidad, promoviendo y regulando su accionar en las
prácticas de producción y reproducción.

Para que los ciclos culturales, que promueve el materialismo, sean funcionales,
se precisa de una serie de condiciones como la comunicación, la asignación de roles, la
regulación normativa de los medios, el control de conductas desviadas, una orientación
cognitiva compartida, la regulación de la expresión afectiva y la relación con el entorno
y reclutamiento sexual. Estos factores permiten que los miembros de la comunidad,
dentro de sus propios grupos, articulen su trabajo, se vinculen y sean productivos,
retroalimentando los valores del sistema y fortaleciendo su funcionalidad.

No siempre los grupos que se establecen entro de la sociedad comparten


intereses y están en equilibrio, en ocasiones se necesita realizar innovaciones para
mantener vivos a los sistemas, mismas que comúnmente inician por integrarse a la
superestructura. En la creación de innovaciones se toman en cuenta los costos, las
ventajas y los beneficios que traen estas a la salud y bienestar de la comunidad. Cuando
estas difieren de un grupo a otro, aquel con mayor poder es el que impone su propuesta.

Autores consultados: Gómez y Barragán (2014); Gil (2010); Granados (2010); Harris
(1994); Ceballos y Cabeza (2013)

Bibliografía

Ceballos, R. y Cabeza, Ó. (2013). El Principio Del Determinismo En El Materialismo


Cultural. Revista Temas, 0(7). https://doi.org/10.15332/rt.v0i7.587

Gil, G. J. (2010). Neoevolucionismo y ecología cultural. La obra de Julian Steward y la


renovación de la enseñanza de la antropología en la Argentina. Revista del Museo
de Antropologia, 3(1), 225-238. https://doi.org/10.31048/1852.4826.v3.n1.5464

Gómez, M. y Barragán, Á. (2014). Apuntes biográficos para Teoría Antropológica.


México, D. F: Escuela Nacional de Antropología e Historia.

Granados, L. (2010). Ecología cultural: metamorfosis de un concepto holometábolo.


Relaciones. Estudios de historia y sociedad, 31(123), 183-217.

Harris, M. (1994). El materialismo cultural. Madrid, España: Alianza Universidad.

También podría gustarte