La potencia económica de la ciudad de Manta es el sector pesquero, pero se ve

gravemente afectado por efectos que están externos al mercado, como la contaminación
unos de los grandes problemas que perjudica al medio ambiente por la acción del
hombre.
La producción un indicador económico ha sido durante años positivos pero los
indicadores ambientales han resultado cada vez mas negativos mostrando una
contaminación sin fronteras y un cambio climático que degradan los ecosistemas y
amenazan la biodiversidad y la propia supervivencia de la especie humana.
Un caso muy notable son las industrias pesqueras que desechan aguas residuales
que en su mayoría van directamente al océano perjudicando el ecosistema marino,
residuos sólidos y malos olores que afectan gravemente a la salud de la población
mantense ya que según estudios del ministerio de industrias y productividad existe
alrededor de 49.39kg de CO2 por persona y que posteriormente esto también afecta al
sector turístico.
Otro problema que no podemos descartar es la captura excesiva de los peces por
parte de pescadores artesanales e industriales que no toma en cuenta la influencia de su
pesca, en las oportunidades de otros, ni la conservación de stock de peces por lo que se
genera una externalidad, ningún pescador esta incentivado a capturar niveles eficientes,
cualquier pescador intentara obtener un máximo rendimiento en el menor tiempo
posible un caso muy notable es la exportación del atún, desde los años 2011 al 2015 las
capturas en el Ecuador no habían dejado de crecer pero en los últimos años estas
exportaciones han disminuido un 5.23%, debido a que las medidas de conservación de
la especie no han sido eficientes no solo a nivel local sino mundialmente.
Siendo estas cuestiones relevantes que tienen una relación estrecha con la
economía ya que impide un desarrollo económico sostenible, debido a que la actividad
humana altera al medio ambiente y esto provocará problemas económicos a largo plazo,
y de acuerdo con lo expuesto anteriormente no se reconoce los derechos dictado en la
Constitución de la República del Ecuador que reconoce los derechos de la naturaleza;
así como “el derecho de la población a vivir en un ambiente sano y ecológicamente
equilibrado, que garantice la sostenibilidad y el buen vivir , establece la facultad de que
el Estado adopte medidas adecuadas y transversales para la adaptación y mitigación del
cambio climático” .