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Divorciadas Jajá Jajá

(O más vale solas que mal acompañadas)

- UN SHOW FÁRSICO, CRÍTICO, MÍSTICO, LÉSBICO, MUSICAL –

Espectáculo en un acto escrito por Humberto Robles

Personajes:
Jimena
Sor Simplicia
Xóchitl

Acto único. Música de presentación. Como en la pasarela de las misses, aparecen las tres
mujeres: Jimena, clase media wannabe; Sor Simplicia, monja ostensiblemente bigotona, y
Xóchitl, hippi coyoacanense.

VOZ MASCULINA: Señoras y señores, ladys and gentleman, chiquillos y chiquillas,


personas y personos... Como extraídas de Miss Universo... Más globalizadas que Miss
Mundo... Más bellas que Nuestra Belleza… Ahora ustedes serán testigos de tres mujeres
que llegaron al ¿fracaso? o al ¿triunfo? del divorcio… ¿Será cierto que los hombres son
un mal necesario…? ¿No será que la institución matrimonial está en vías de extinción…?
¿Se puede ser lesbiana sin morir en el intento…? ¿Es libre el amor libre…? ¡Todas estas
dudas y más, serán despejadas ahora…! Con ustedes: el ejemplo de la clase media
wannabe, polanqueña salerosa... ¡Jimena!

JIMENA: Edad: ...ntaitantos... Estado civil: ...rciada... Sexo: ¡Escasísimo! Mi sueño no es


que se acaben la guerra o las hambrunas, ni que suban el salario mínimo de los pobres o
que se terminen las manifestaciones que hacen los ídems... Y si hablamos del
calentamiento de la tierra, yo happy, ¡happy new year!, porque ando en un verano
peligroso bronceada todo el tiempo... Sorry... Pobres siempre ha habido y siempre los
habrá... Lo siento, puede sonar políticamente incorrecto, pero such is life... Yo sólo tengo
un sueño, un solo deseo... conocer a un hombre, un hombre-hombre... ¡y que me atienda!

VOZ MASCULINA: Ella es Miss-ionera... Miss-terio... Miss-a de domingo... Directamente


traída del convento de las Carmelitas descalzas, desnutridas y despeinadas, más jocosa
que Sor Yeyé y más volada que la Novicia Voladora: ¡con ustedes Sor Simplicia...!

SIMPLICIA: En el nombre del padre... del padre Masiel que lo acusan de no sé cuánta
cosa pecaminosa... ¿Edad...? La edad media, es mi favorita... Estado civil... célibe... y a
mucha honra... Sexo... ¿qué es exo...? Novios, amigos cariñosos, amigos con derechos o
marido ¡nunca tuve a dios gracias y a San Antonio al que nunca he puesto de cabeza!
Virgencita de los pies a las orejas... Corrijo: marido sí tengo... Mi matrimonio es con el
altísimo (señala al cielo), con Jesús... Envidiosas, yo sé que más de una quisiera tener
una suegra como la mía...

VOZ MASCULINA: Ella es Miss-teca... Miss-erias... Miss-ántropa, más no miss-ógina...


Directamente desde la bellísima Santa Úrsula Coapa, delegación Coyoacán, egresada de
Filosofía y Letras de la UNAM, Puma de corazón, pacheca por convicción, con ustedes:
¡Xóchitl...!

XOCHITL: ¿Edad...? (señala a sus compañeras) Tres menos que la pequeño burguesa y
dos más que la teóloga de la liberación... ¿Estado civil...? Neo soltera... ¿Sexo...? Oral mi
favorito, anal de vez en cuando y grupal si se da... Swingers claro, ¿por qué no? (a una)
¿Qué... cambiamos de galán? (fuma mota y guarda el tanque) Yo lo que digo es que toda
la culpa la tiene la ultraderecha en el poder... A mí no me echen la culpa, yo voté por
AMLO... Ahora aténganse a las consecuencias... Neto, a una nomás le queda soportar
estoica la crisis... No, no me refiero a Calderón, sino a la crisis matrimonial por la que
estoy atravesando... Yo por mí hubiera seguido en concubinato, pero la familia de él no
soportaba que estuviéramos arrejuntados... Qué mala onda, ¿no? (fuma, guarda el
tanque y ofrece al público) ¿Alguien quiere un jaloncito? Es de la hidropónica... te hidro-
pone… Está buenísima.

Bailan. Cantan “Divorciadas ja-ja, ja-ja....” (Con música de “Despeinada”) al final se


sientan en sendos bancos. Permanecerán en el escenario las tres durante todo el
espectáculo.

JIMENA: Mi marido no es perfecto… pero los hay peores… (a una, haciéndose la


“simpática”) No, no lo digo por ti, honey... Tu peor-es-nada se ve mono... (Prosigue) Beto,
mi esposo, trabaja ocho horas diarias de lunes a viernes... Los jueves de noche se va a
apostar al Yak con sus socios, los sábados juega tenis con su mejor amigo y los domingos
los dedica al hogar... ¿Nice, no...? ¡Naicísimo! Te cuento, vivimos en un condominio
horizontal, me compró mi Van, a los niños los metimos en kínder privado, ¡obvio...! Su
madre es insufrible, lo que se dice insoportable, pero por suerte vive en Guadalajara y
sólo la veo una vez, en navidad, que en realidad para mí es Halloween: Noche de Brujas
pero con regalos... ¿Cool, no...? ¡Coolísimo...! Tuve así de pretendientes, pero de todos
Beto era el mejor candidato: fino, educado, bilingüe, deportista, con una carrera
prometedora, una buena cuenta bancaria, y sobre todo: 1.85, tez blanca, ojo azul, rubio
él... (Confidencial) Es que yo a los nacos no los trago... (A uno, “simpática”) Sorry, no lo
dije por ti... Eres morenito pero te ves con clase... (Prosigue) Mi vida es casi perfecta... el
único prietito en el arroz... (Al que le dijo naco, “simpática”) No, darling, no lo digo por ti...
es una expresión.... (Prosigue) El único defectito que tiene mi esposo es que no es...
¿cómo les diré...? No es muy sexual... Y no es que yo esté todo el día pensando en sexo,
¡para nada...! Pero una vez al mes no estaría mal, ¿no? (pausa) ¡Okay, ponle tú cada dos
meses...! O bueno, exagerando: cada seis... ¡Pero una no puede estar casi un año sin
mantenimiento...! (a una) Dime la verdad, amiga... Sé sincera, por lo poco que me
conoces pero habiendo empatía, ¿crees que soy ninfómana...? Digo, porque si así lo
crees, okay, estás en tu derecho... Yo me voy con mi loquero y busco un tratamiento... (a
otra) Aquí entre nos, ya que estamos en confianza y parece que compartimos el mismo
código postal, ¿tú cada cuánto lo haces...? (a otra) ¿Tú con mucha, poca o mediana
frecuencia...? (a otra) ¿Tú te conformarías con hacerlo una vez al mes? (pausa) ¡¿Lo
ven?, entonces no puedo estar equivocada...! ¡For god sake, ¿qué no es justo hacer el
amor por lo menos, ¡por lo menos! una vez a la semana?!

SIMPLICIA: La semana santa es la mejor porque oramos mucho y no batimos tanto los
huevos... del rompope... No, a mí no me gusta el doble sentido ni la doble moral, mucho
menos la doble vida... Desde muy jovencita supe cuál era mi verdadera vocación... A mí la
verdad los muchachos nunca me interesaron... Así que, conforme fui creciendo, fue
aumentando mi pánico de tener que intimar con uno... Imaginarme el primer picorete:
guácala... Pensar en los toqueteos, las metidas de mano, los besos de lengua... ¡Qué
insalubre...! ¡Más tarde: coito, cunilingus, felattio, papanicolau, (se persigna y rápida)
gloria a dios en las alturas, santifica mi alma al señor, Domenique, nique nique...! Después
la proeza: impedir a toda costa perder mi virginidad... cuidar el himen como lo que es: lo
más sagrado que tiene una mujer en esta vida terrenal... Yo jamás había visto a un
hombre desnudo, ¡ni lo quería ver! A dios gracias la única desnudez masculina que
conozco hasta el día de hoy es la de Cristo, que tapa lo que debe tapar... Nunca fui muy
agraciada, pero sí muy fervorosa... Así que los muchachos me huían y el servicio me
llamaba... Un día me armé de valor y les dije a mis papás: “Quiero entregarme al servicio
religioso...” Uy, mi papá brincaba del gusto y le decía a mi mamá: (imita a su papá) “¿Lo
ves, vieja, nadie va a llamar a tu hija “solterona”, cuantimenos quedada”...? ¡Le van a
decir sor o hermana...!” Y mi mamá lloraba... pero lloraba de la alegría porque ella quería
que yo fuera doctora, enfermera o aeromoza... y con el hábito le cumplí la ilusión de
verme en uniforme... En otra ocasión oí a unas tías mías, muy intrigosas, cizañozas ellas:
(imita a una tía) “Pobre Simplicia, va a acabar convertida en lesbiana, en mujer policía o
de monja... ¡es que con ese bigote...!” Yo la verdad no entendí de qué hablaban… ni
entonces ni ahora… porque el vello femenino es natural... Hay quienes le llaman “piel de
durazno”... ¡Bigote el de Frida Kahlo y vean hasta a dónde llegó! (prosigue) Así que entré
al convento de las Carmelitas descalzas... que es un decir, porque en realidad usamos
tenis Reebok o Croc... Bueno: algunas... Las más humilditas usan chanclita, sandalia o
huarachito, pero lo que se dice descalzas, descalzas: no... En la vida conventual se
respira pureza y castidad... La madre superiora es beatífica, pero rigurosa; hazte de
cuenta la viva imagen de Sara García... Y de las hermanas hay de todo, como en botica,
pero lo que sea de cada quién, a pesar de estar todas casadas con el mismo señor,
vieran qué bien nos llevamos...
XOCHITL: Como perros y gatos, así nos llevamos... Al principio no, al principio, en el
CCH, él era alivianado y buena onda... Pero nomás nos casamos por el civil y
comenzaron las broncas... (Hace gesto de beber) Él tiene un problemita... (Fuma mota) Y
yo el mío... ¡Pero el alcohol los vuelve agresivos y la marihuana nos pone pacíficos...! Una
vez, ¿con qué crees que me sale el méndigo baboso éste...? ¡No manches!, con que eso
de que la teoría de la evolución de Darwin es un mito del capitalismo, que el hombre no
desciende del mono, que eso es pura propaganda del imperialismo yanqui... ¡Órale,
maextro!, que me enchilo en serio, le doy un guamazo en el estómago y le saco todo el
aire... Y aquél se pone como energúmeno y que me la contesta... Y yo: “¡Órale, güey,
calmado, bájale o no respondo y te arranco tus malditas rastas...!” Y que me encabrito y lo
amenazo con una silla... “¡¿No que muy macho?, a ver de a como nos toca, guerrillero de
bolsillo...!” Y él se pone como oligofrénico, bien loco, bien orate, que agarra la botella de
tequila –vacía, claro- la rompe y me amenaza con la botella rota.... Como vil pleito de
cantina... Y entonces que me enchilo más y le digo: “¡Métete con uno de tu género,
panista de clóset!...” Y que le doy con la silla en la cabeza... ¡Chale...! Ahí estaba él, todo
descalabrado, medio inconsciente en el piso, sobre un charco de sangre... “¡Órale,
Xóchitl, ora sí te la jalaste gacho...!” Así que nos fuimos de volada al Xoco para que lo
atendieran... Yo le iba diciendo en la pesera: “Es que me haces enojar, Masiosare...” (Al
público) Se llama Masiosare... (Prosigue) “Ya, carnal, no sé por qué me provocas si ya
sabes cómo me pongo de alebrestada...” Él dice que es una relación autodestructiva, yo
digo que es Amor Apache... Eso sí, en la cama se nos olvidan los problemas ideológicos y
las diferencias políticas... Y cuando nos aburrimos él de mí o yo de él, nos vamos a las
reuniones de swingers... ¡Órale!, ahí sí te destensas, te relajas... ¡Bien chido, la neta...!
“Te quiero un chorro, Masiosare...” “Y yo a ti, Xóchitl, me pasas un resto...” Y ya volvemos
al depto a discutir sobre los errores voluntarios e involuntarios de AMLO o sobre la caída
del muro de Berlín, o temas así, importantes, que ayudan a la pareja... (Mira al público. se
levanta) ¿Qué onda, cómo ven si nos encueramos todos y hacemos una orgía? ¿Jalan o
se pandean? ¿Qué, no se animan?

JIMENA: Que me animo y así como me ven, tan chic, tan high-class, me fui a una sex-
shop de la Zona Rosa y compré de todo: películas porno tres equis, poppers, un baby-doll
rojo levanta-pasiones... “Ay, Jimenita, te vas a ver divine, como conejita del PlayBoy...” y
por no dejar, como no queriendo la cosa, que me llevo una muñeca inflable cuyo modelo
era imitación de Shakira... Naquita, cierto, pero latina-hot, y a Beto le encantan sus
videos... Agarro mis compritas, pago con mi American Estres porque yo con cash no
cargo... me subo a la Van, recojo a los niños al kínder; me paso un alto, le grito al
mugriento oficial de tránsito (hace una “l” con la mano) ¡Looser...! El cual me contesta:
(habla como ñera) “¡Vieja tenías que ser...”! Y yo muy lady... (Alza la mano y levanta el
dedo de en medio) ¡Siéntate que te ves cansado…! (Prosigue) Llego a la casa, le digo a
la doméstica que me atienda a los engendros y que me meto al cuarto... Dispongo de
todo para que, cuando regrese Beto, se encienda la pasión... ¡Vas a ver, esta noche va a
ser inolvidable, qué Garganta Profunda ni que Emmanuel 1, 2 y 3, que paso tan chévere!
Pongo las películas en el DiViDi, en pantalla plana se ven de lux... Yo enfundada de baby-
doll rojo, transparente, encaje aquí, encaje allá, dejando muy poco a la imaginación... A la
Shakira de plástico la escondo por si, más adelante, Beto quiere la dupla... Yo convertida
en toda una Jessica Rabbit... Ya instalada en fêmme-fatal, espero horas aburridísima
viendo películas porno... (Bosteza) Bostezo, miro y vuelvo a mirar el rolex... ¡Estúpida,
estúpida de mí! Los jueves Beto va al Yak con sus socios... Dentro de dos o tres horas
regresa... Me pongo la bata, le doy de cenar a los bodoques, les doy su besito de las
buenas noches: “chao, Betito, chao, Jimenita... Mommy loves you...” Mando a la mucama
a ver la tele a su cuarto y le advierto: (dulce) “Mira, Brenda Jacqueline, (siempre
pronunciará la jota y la e final) te me quedas encerrada en tu cuarto... no salgas ¡para
nada, darling! Si oyes gritos, aullidos o ruidos raros, ¡menos...! No creas que entraron
ladrones o nos están vaciando la casa... No salgas por nada de este mundo... (Molesta)
¡No, ni aunque haya un sismo de 8 grados en la escala de Richter! (enfureciendo) Tú
sales de tu cuarto y te corro sin cartas de recomendación, ¿me oíste, Brenda Jacqueline?
¿Te quedó claro? Porque luego, con el pretexto de que hablan lenguas autóctonas, se
hacen las que no entienden... Síguele y te echo de patitas a la calle, maldita
huarachuda... ¡Claro, como Rigoberta Menchú ganó el premio Nóbel, te me rebelas,
¿verdad?! (Pausa, digna) Bueno, ya, te perdono... Sí, sí, estás perdonada... Ahora te me
encierras en el cuarto y hasta no verte Jesús mío... (Truena los dedos) Ándale, movida
que tengo prisa...” Me regreso al cuarto, me quito la bata, me retoco el maquillaje -
hojalatería y pintura-, pongo inciensos, velitas... Miro el reloj... ¡No debe tardar...! (atenta)
¡Un BMW se acerca! ¡El garaje se abre! ¡Ay, papá, ora vas a ver lo que es amar a dios en
tierra de indios...! Yo regia, divina; como dicen los americanos: wonderful, beautiful,
gorgeous... Va llegando Beto... ¿Y qué creen...?

SIMPLICIA: ¿Creen que la vida conventual es el jardín de las delicias...? ¡Ya parece! No
lo comparo con el purgatorio porque el papa Benedicto acaba de abolirlo; dice que ya no
existe y nunca existió... Así que el convento es más bien como el infierno... Checa:
levántate a las 5 de la madrugada... Vete a misa más dormida que despierta, reza no-sé-
cuántos padres nuestros y un titipuchal de aves marías... Báñate con todo y ropa interior
para no verte tus partes íntimas de mujer y así no tengas pensamientos impuros...
Apúrate con el desayuno de las hermanas... pero deja tú las hermanas, la madre
superiora, que es idéntica a Sara García, pero con el carácter de Catalina Creel: ¡mala de
telenovela del canal de las estrellas...! Luego resulta que hay visita de su ilustrísima, el
señor arzobispo ‘primate’ de México... Ay, nanita, agárrate porque monseñor Perverto
anda de un humor de aquellos... Con eso de que dicen que encubre pederastas, anda
que no lo calienta ni su monaguillo consentido... Y yo acá en corto, que agarro y que le
pregunto a la madre superiora: (confidencial) “Oiga, reverenda, dispense la falta de
ignorancia, ¿qué es eso de pedófilos...?” Y la venerable me responde... (Imita a la madre,
beatífica) “Eso que hacía Michael Jackson con los niñitos...” Yo escandalizada: “¿Los
emborrachaba?” (Imita a la madre) “Algo así, sor Simplicia, algo así...” ¡Virgen santísima
de Ecatepec! ¡Alcoh-O-lismo...! ¡Cruz, cruz, que se vaya el diablo y venga Jesús...!
“Madre superiora, ¿así que ni un rompopito le ofrecemos al señor arzobispo?” (Imita a la
madre y deniega paciente) Y ahí nos tienen a todas, echas la cochinilla atendiendo al
prelado y a su comitiva... “Ándenle, muchachas, caminando y meando para no hacer
charco...” Se va su ilustrísima con toda su corte y yo mortificadísima por él... “¿Pedófilo?
Así que le agarró el gusto al vino de consagrar... ¿Irá a doble A...? ¿No se habrá tomado
demasiado en serio eso de ‘dejad que los niños se acerquen a mí’...?” (Se persigna) Si les
cuento esto es para que se den cuenta de que hasta en un recinto donde reina la pureza
y la castidad, el maligno hace de las suyas para ponernos pruebas dificilísimas... No, si
las tentaciones andan a la orden del día... Así como el diablo tentó a Jesús en el desierto,
a mí me puso a prueba en el convento... Porque aún entre las monjitas se encienden las
más bajas pasiones: la envidia, los celos, la gula y los deseos de la carne, el pollo y el
pescado... (Confidencial) Se decía que Sor Restituta era la consentida de la madre
superiora... O sea: que se querían más de lo debido... Como quien dice: eran íntimas... Se
entendían pues... Hasta que el demonio se presentó en nuestra congregación en la forma
voluptuosa y curvilínea de Sor Pafnucia... Rostro angelical, ¡pero cuerpo de tentación...!
(con ambos brazos hace la señal de la cruz) ¡Vade retro, stanás, vade retro!

XOCHITL: ¡Va de nuez...! Una noche viene Masiosare con sus mezcales encima y que me
dice: (imita a masiosare) “Ira, Xóchitl, te voy a decir la neta: eso del sobrecalentamiento
del planeta es pura propaganda sionista... Sí, chata, es una confabulación del estado
israelí para apoderarse del mundo... Es una vil treta del judaísmo expansionista...” Y que
le digo: “No manches, Masiosare, ya no chupes alcohol del 95 que se te va a cocinar todo
el cerebro...” Nel, a mí se me hace que inhalar tanto resistol 5000 sí deja secuelas... Y yo
bien relax, bien pacheca, que le doy otro jaloncito a mi chubi... (Fuma y retiene el aire) Y
el desequilibrado mental me mira con rencor y odio por no estar de acuerdo con su teoría
del complot hebraico, y que me sorraja tremendo bofetadón... Hasta allá va a parar el
toque... “¡Óyeme, brother, es la última bacha del guato que compré... era de la
colombiana, inconsciente...! Entonces que me enchilo y que le doy una patada bien dada
en la espinilla... Y el rastas se pone más encabritado y me agarra de los pelos y me
zarandea así, así... yo toda desgreñada... (Zarandeándose) “¡Pérate, Masiosare, el que se
ríe se lleva...!” Y que me sale lo Rodríguez, porque del lado de mi papá son muy violentos,
entonces que me le voy encima a los trancazos: “¡No respondo chipote con sangre, como
veo doy...! ¡Pa’ que veas que no estoy manca, maldito golpeador de mujeres...!” Y que le
araño todo el rostro... Y él, quien sabe cómo, que me hace una quebradora tipo el Santo,
el Cavernario, Blue Demon y el Bull-Dog... Pero yo bien elástica, que me zafo, que junto
harta saliva y que le escupo en plena cara... (Hace como que escupe) Y él me dice: “¡Te
vas a arrepentir de esto, Xóchitl, vas a desear no haber nacido...!” Y yo, con mis ovarios
bien puestos: “¡No te tengo miedo, nazi, fascista, caricatura de Hitler pero en chafa...!” Y
él se pone todo colorado, colorado del coraje, y que me da tremendo empujonzazo...
¡Chale, güey! Allá voy a dar sobre un Árbol de la Vida que habíamos comprado en
Pátzcuaro y queda todo hecho pedazos... ¡”Si no me respetas a mí, por lo menos respeta
las culturas indígenas, hijo de tu madre...!” Y él, ya trabado: “¡Con mi madre no te metas,
que ahí sí te parto tu mandarina en gajos...!” Y sin decir agua va, que me agarra a
guamazos y no sé cómo pero acabo tirada en el suelo... Yo bien furibunda, injertada en
pantera, tirada en el piso, que lo agarro de los “de’stos” y que jalo con todas mis fuerzas...
“¡A ver si ora que seas eunuco sigues siendo tan hombrecito...!” (PAUSA) Entonces él se
queda paralizado... Y dice... (Imita a Masiosare) “Me castrasteS, Xóchitl, me castrasteS...”
Y yo le digo: “No seas ñero, no se dice castrasteS... quítale la S...” Y él me dice: (imita a
Masiosare) “Me castra’teS, Xóchitl, me castra’teS...” “¡Que le quites la S, analfabeta...!” Y
de pronto Masiosare se pone chille y chille... A mí como que me dio lástima... “Ya,
maextro, no es pa’ tanto, ahorita vamos al Xoco a que te cosan el escroto...” Y el otro
sigue llore y llore... “Ya, Masiosare, no seas nena, ponte unos pantalones y vámonos a
Urgencias...” Y ahí va el pobrecito, bien obediente... Y yo con unos remordimientos que no
me los acababa... “¿Y si después de esto se queda estéril? ¡Chale, no manches, Xóchitl,
si no tienes hijos va a ser por tu culpa, ora sí te pasaste de veras...!” Pero pues es que
una es feminista y no va a dejar que cualquier mamífero del sexo masculino pase por
encima de una... No es violencia doméstica, es la batalla eterna de la lucha entre los
sexos... Ya en Urgencias, el nuevo Farinelli que me dice todo serio: (imita a Masiosare)
“Ira, Xóchitl, de seguir así, tú y yo vamos a terminar matándonos... Así que yo creo que
hasta aquí llegamos...”

JIMENA: Aquí llegamos a la escena candente y sensual... Regresa Beto de jugar al Yak,
ve el ambientazo... Yo regia, divine, tendida en la cama como Marylin Manson... ¡Digo!:
Monroe en la foto del calendario... (Alza las cejas, sonriente, a uno) “¿Cómo me ves,
eh...? So hot, so sexy...” (Prosigue) Él, obvio: mudo... boquiabierto... sin dar crédito... Yo
empiezo a contonearme, y él me dice... (Imita a Beto) “Jimena, Jime, Jime...” (Prosigue)
“Ay, Beto, ¿cómo quieres que gima si todavía ni me has tocado? Hazme tuya, y gimo y
gimo...” Yo a esas alturas estaba ardiendo, echando chispas, este pedazo de mujer hecho
un volcán... Y él: demudado... Y yo moviéndome al ritmo del ‘Balero’ de Ravel... -Música
culta, no nacadas- (prosigue) Y él: como el chinito, nomás mirando... Y yo ya moviéndome
como en la danza de los siete velos... Y él: inmóvil... Y yo a esas alturas como toda una
profesional del table-dance, pero sin tubo, casi rayando en lo vulgar y lo corriente... Y él:
impertérrito... Yo ya desesperada, pensando en si debería o no sacar a la Shakira de
plástico para despertar sus más bajos instintos... Y él: ¡nada de nada...! Yo ya
francamente desconcertada, me le acerco y le pregunto: “O sea, hello, Beto... ¿Qué
tienes, what happens with you...? ¿Are you okay, baby...?” Y él finalmente sale de su
estupor... (imita a Beto) “Lo siento, chiquita, es que en la mañana fui con Enrique al club y
me contracturé la espalda; me duele todo. Fui al servicio médico y me recomendaron
reposo absoluto...” Y yo atacada: “¡¿Absoluto, absoluto, lo que se dice absoluto...?!” Él
asintió, medio sonrió y se encerró en el baño... ¡Papelón! ¡Tremendo papelón! Menos mal
que no saqué a la Shakira porque qué ahí sí ‘trágame tierra’... En un dos por tres que me
cambio de ropa, me pongo mi mameluco de Winnie-Poo, apago las velas, los inciensos,
guardo los poppers y el baby-doll, le grito cientos de veces a Brenda Jacqueline y la
roñosa doméstica ni sus luces... “¡¿Dónde se metió esta lángara...?!” Tuve que ir hasta su
cuarto a decirle: (fúrica) “¡Bueno, Brenda Jacqueline, ¿tú estás sorda o qué...?!” (Imita a la
doméstica) “No, señito, ¿pos no me dijo usted que no saliera aunque...?” (Enérgica)
“Cállate la boca y no me levantes falsos, que te corro por mitómana... Vele a preparar la
cena al señor y movidita que no tengo todo tu tiempo, holgazana...” Y allá va la muy ladina
a la cocina y allá va el mujerón a su recámara... Beto sigue en el baño... (Mimosa) “Beto,
Betito, ¿quieres que te haga un masajito...?” (Seco) “No...” (Dulce) “¿Apapacho...?” (Seco)
“No...” (Mimosa) “¿No quieres ver unas películas eróticas que compré...? (seco) “No...”
Pícaramente pongo una en el DiViDi... ¡Y ah bárbara: sexo con animales! Miro la caja, me
doy cuenta de que es pornografía zoofílica... ¡Qué asco; yo con un caballo, ni que
estuviera urgida! Y apago el DiViDi... Sale Beto del baño con su pijama... Voy hacia él
cariñosa, luego más fogosa, con mirada intensa, boquita seductora, el corazoncito
palpitando... Se abre la puerta y entra la minusválida mental de Brenda Jacqueline: (imita
a la mucama) “Señito, aquí está la cena del señor”... “Ay, chula, qué oportuna... Deja todo
ahí y vete a dormir...” Sale la muy mustia, Beto se mete a la cama y dice... “No tengo
hambre, chiquita... Buenas noches, hasta mañana...” ¡Oh, my dog...! Me meto a la cama,
él se da la vuelta y me da la espalda... Me siento un tanto despreciada y le digo: (mimosa)
“Beto, Betito... ¿no crees que deberíamos hablar de esto...?

SIMPLICIA: De esto no podía hablar con nadie, porque las hermanas son de un
chismosas que dan miedo... El caso es que sor Pafnucia y yo comenzamos una bonita
amistad... (Coqueta) “Oye, sor Pafnucia, y tú, ¿estudias o trabajas...? (ríe) ¡Ay, claro, si
somos colegas, qué preguntas hago...! Perdón, es que se me hace como que nos
conocemos desde el Génesis... Además siento que me revolotean ángeles y querubines
en la panza, ¿a ti no...? ¡¿A poco a ti también?! Ay, qué raro, pero qué místico, ¿no...?
Oye, Pafnucia... ¿Te puedo llamar así, por tu nombre de pila...? (pausa) ¡Okay, Duracel...!
Oye, ¿cómo ves si nos tomamos un rompopito... o dos? (intensa) ¿Tu celda... o la mía...?
Tengo el Aleluya de Haendel y el réquiem completo de Mozart... Uy, y te puedo mostrar
una pintura ¡preciosa! de Abraham a punto de matar a su hijo... ¿No quieres verlo...?
Ándale, nomás tantito...” Y ella: (imita a Pafnucia): “Ay, no sé, sor Simplicia, es
que...” (interrupe, intensa) Llámame Simplicia, simplemente Simplicia... (Imita a Pafnucia,
tímida) “De acuerdo... Simplicia... Pero solo un ratito, no vaya a venir la madre superiora y
se enoje porque nos andamos desvelando...” Patitas para qué las quiero, allá fuimos a dar
a mi celda las dos... ¡Qué ambiente más bíblico y espiritual!: rompopito Santa Clara,
lectura del Deuteronomio; todo eso amenizado por cantos gregorianos del siglo XIII...
¡Más romántico imposible...! A mí ya como que me llegaba un olor a azufre y sentía el
fuego de las llamas del infierno... ¡Un calorón! Sudando la gota gorda... Hice un aparte y
oré... (Al cielo) “Diosito, tú que todo lo ves, voltéate para otro lado... Jesusito, no es que te
ande llevando la cuenta, pero ¿hace cuánto que no te apareces ante tu rebaño...? ¿Hace
cuántos siglos que no nos haces ni un triste milagrito como resucitar a un muerto o
multiplicar los panes...? ¡Ora es cuándo, Chuchito lindo...! Ándale, ¿qué te cuesta...?” (Se
persigna) Vuelvo de mi aparte... (Intensa) “Cuéntamelo todo, Pafnu, quiero saber cada
detalle de ti... échame el divino verbo...” Entonces ella me habló de cuando estuvo de
misionera en África y que casi se la come una manada de leones... De que evangelizando
asiáticos, casi se la come una tribu de caníbales... De que en Roma se desmayó cuando
vio a su Santidad en el papa-móvil allá como a 2 kilómetros de distancia... (Suspira) A mí
como que me entra el chamuco y me le acerco bien cerquita a la Pafnucia... (Seductora)
“¿Alguna vez alguna religiosa, hermana o madre te dijo que tienes en el labio superior un
vellito irresistible...?” Y ella que me dice: “Igual que el tuyo, Simpli...” Yo en las nubes
porque me llamara “Simpli”, pero extrañadísima por lo del mostacho... Ya no le pregunté
de qué hablaba para no desviarnos del tema... Y yo ya lo que se dice lanzada: “¿No te
quieres poner más cómoda, Pafnu...? Y tímida, tímida, pero que se quita el hábito... Y yo
ni lenta ni perezosa, también... “¡Otra coincidencia, mira, tenemos los mismos
escapularios...! Oye, Pafnu, ya en serio, ¿no crees que todo esto es providencial, no te
parecen demasiadas señales divinas que nos indican que tú y yo...?” (Calla) No pude
terminar porque inesperadamente, la Pafnucia me plantó un beso en la boca... ¡Jesús,
María y José! ¡Melchor, Gaspar y Baltasar! ¡José, Ortega y Gasset! ¡Esto está mucho
mejor que la venida del Papa...! Andábamos en pleno intercambio de salivas, cuando de
pronto escuchamos como de ultratumba la voz de la madre superiora: (imita a la madre)
“¡Sor Simplicia, sor Pafnucia, que dios las coja confesadas! ¡Habráse visto, qué pecado,
esto es el acabóse, el colmo!”

XOCHITL: El colmo fue cuando fuimos a una fiestecita de ésas que nos encantan al
Masiosare y a mí... Había muchas parejas, pero a él y a mí nos latió una en especial...
Silvia y Alfredo... Los dos súper open, bien alivianados, Pumas como nosotros y también
del PRD... Así que nos fuimos los cuatro a un hotel de Tlalpan... Para no hacerles el
cuento largo, a mitad del trenecito, yo sentí como que los tres me hacían a un lado...
como que no me integraban... ¡Bueno, el insensible de Masiosare salió con su tarugada:
(imita a Masiosare) “Chata, no seas gacha, vete por otras caguamas; acá te esperamos
nosotros tres...!” Yo neto, me sentí desplazada, marginada... Al rato salimos del hotel, nos
despedimos de Alfredo y de Silvia, y ya a solas, en plena calzada de Tlalpan, que me le
enfrento al rastas... “¡Me sacaste de la jugada, Masiosare, y eso sí no se vale...! ¡Si las
matemáticas no fallan, cuarteto es de a cuatro, no de a tres...!” Y que le suelto un
morralazo en la espalda... ¡Chales! Se me olvidó que traía El Capital de Marx, ¡tabicazo...!
Él otro que se enfurece y sin previo aviso me da un puñetazo en plena cara... Cuando voy
viendo la sangre, que me sale de nuevo lo Rodríguez y le grito: “¡Te vas a morir, Pipino
Cuevas de petatiux, te vas a morir...!” Y que me le voy encima, pero él más rápido me
hace una llave, y yo gritando... “¡Macho involucionado, abusando de una mujer indefensa!
¡Te voy a demandar y me canso si no te entamban, Che Guevara frustrado...!” Y eso sí le
llegó en lo más hondo... Me soltó y se le rasaron los ojos de lágrimas... Yo bien gallito:
“¡Te caló lo del Che Guevara, ¿verdad...?! ¡Pa’ mi que eres puñal...!” Y él nomás no
aguantó lo de “puñal”, que me avienta con todas sus fuerzas y que salgo disparada en
plena calzada... Me rozaban los micros y los taxis por aquí y por acá, y los ñeros de los
microbuseros gritándome: (imita a un ñero) “¡Órale, mamacita, súbete a la banqueta...!”
Ora sí que me pongo fúrica, iracunda a más no poder, y que saco de mi morral mi spray
paralizante y se lo echo todo en la cara... “Tsssssss... ¡Pa’ que aprendas a tratar a una
dama, cerdo, puerco, marrano...!” Uy, y luego, luego el otro se puso a aullar del ardor...
retorciéndose en el piso como caracol con sal... Y yo bien arrepentidota porque le había
vaciado todo el spray... “¡Es que tú también, Masiosare, ¿pa’ qué te metes con Sansón a
las patadas?! ¿Eh...?! (Mira alrededor) Ya, Masio, ya no te desgañites que va a venir la
tira y nos va a llevar presos... Ámonos, apúrate... Pícale que ahí viene una patrulla y ahí sí
pa’ qué te cuento... ” Fue así que nos dimos a la fuga y evadimos la ley...

JIMENA: Es de ley que los sábados Beto juegue al tenis con Enrique, su mejor amigo...
Así que fui a deshacerme de mis engendritos. Los dejé con mi mamá para irme a consolar
como toda mujer que se precie: yéndome de shopping... ¡Bendito consumismo que tantas
penas me quita...! Voy en la Van y a mitad del camino se me poncha una llanta... ¡Shit! Le
marco a Beto y nada, el buzón del celular... ¡Shit! Me regreso a la casa en un taxi con un
nacazo que tenía incontinencia verbal y me atomizó... ¡Shit...! Llego a la casa, ¿y dónde
está la desobligada de Brenda Jacqueline? Go you to know... (A uno) ‘Ve tú a saber’...
(Prosigue) Voy hacia mi recámara muy oronda, muy zen... Me paro en seco... Oigo
ruidos... Me acerco a la puerta... Escucho jadeos, gemidos... Me digo: “Jimena, put
attention… ¡Put attention! (atenta, escucha) Y voy oyendo a Beto que dice: (imita a Beto
jadeando) “Sí, sí, así, más, más... Oh, sí, sí, más, más... Ahí, ahí, sí, más, más...” (Pausa)
¡Ooooh, shit y mil veces shit! “¡Cómo no me di cuenta antes: la fámula enredada con mi
esposo...! Con razón el adúltero de Beto no me toca, si se desfoga con María la del
Barrio.... ¡Y yo sin una pistola para acribillarlos en el acto... en el acto sexual...! Inhalo,
exhalo, tipo sicoprofiláctico... Me entra toda la dignidad que cabe en mí, yo muy Lady Di, y
que abro la puerta de un golpe diciendo... “¡Así me los quería encontrar: la Cenicienta y el
príncipe azul...!” Pero cuál va siendo mi sorpresa... (Grita) ¡Oh my goodness!
¡¡¡¿Enrique?!!! ¡¡¿Y Beto...?!! (Al público) No, no era Plaza Sésamo, era algo que no le
deseo ni a mi mejor amiga... ¡Shockeada, estaba shockeada...! Y allá viene Beto en
cueros, como dios lo trajo al mundo, tapándose sus diminutas vergüenzas: (imita a Beto)
“Chiquita, antes que nada, las cosas no son lo que parecen... no creas que viste algo que
no es... Estás confundida, chiquita, eso es todo...” Y yo: impactadérrima, muda de la
impresión, con el ojo cúbico... Por mi mente pasaban de forma cruel y despiadada
imágenes de Origel, Fabiruchis, el genio de Aladino, Liberache, los Teletubis -los cuatro-,
Walter Mercado, Pablito Ruiz... (Imita a Beto) “Mira, chiquita, Quique y yo estábamos
regresando del tenis, ¿sí te acuerdas que hoy es sábado...? Nos íbamos a bañar porque
no sabes cómo me hizo correr éste...” (Incrédula) Uy, sí, me lo imagino... (Imita a Beto) “¡A
correr por las pelotas...!” (Tuerce el labio, indignada) Componle... (Imita a Beto) “¡Las
pelotas de tenis, chiquita, no seas mal-pensada...!” (indignada) ¡Que te crea la tapatía de
tu madre! (imita a Beto, sonríe) “Chiquita, ¿adivina quién ganó el juego...? ¡Hombre, pues
ni más ni menos que tu muñeco de acción, chiquita...!” (Señala el sexo de él) ¡Chiquita
ésa, fíjate…! (pausa) Cuando a mí me regresa el alma al cuerpo y me vuelve la dignidad
clase-media acomodada y pudiente, le digo: “Ahora entiendo porqué hacíamos el amor
sólo el día de San Valentín... y eso nomás por cumplir, por no dejar...” Los miro a los dos
con un desprecio infinito, los barro de arriba abajo, y en correctísimo castellano les digo
como la lady que soy: “¡Par de jotos...! Y no estoy hablando de pókar... “¡Par de jotos...!
Yo creí que eras introvertido, pero me saliste invertido... Del escándalo y de mis abogados
no te escapas, chulito... ¡El divorcio, me canso si no...! ¡Te voy a hundir, te voy a dejar en
la miseria, a los niños te los quito, te voy a sacar hasta la risa y toda Guadalajara se va a
enterar de tus andanzas gays! (hace puchero, llorosa) ¡Qué grosero! ¿Cómo me hiciste
esto, Beto, cómo pudiste...?

SIMPLICIA: Como pude hablé con mi esposo, porque como quiera que sea, yo estaba
casada y le debía una explicación a él... (Se hinca y mira a lo alto) Jesús, no lo tomes a
mal... pero tenemos que hablar de nuestra relación... Lo nuestro no puede continuar... No,
Chucho, no eres tú, soy yo... De veras, créeme, contigo todo bien... La del problema soy
yo... Quizás no sea correcto y vaya contra nuestros preceptos... pero, ¿qué quieres que
haga? La Pafnucia hace que se me suba la bilirrubina... Es dulce, tierna, catequiza de
maravilla, y se sabe unos chistes del papa, buenísimos... (Seria) No de Juan Pablo II, de
éste, de Ratzinger... “En el nombre del padre, del hijo y (hace el saludo nazi) del Tercer
Reich...” (Ríe) No te hagas, ríete, está muy bueno... (Seria) Ultimadamente, entre tú y yo
no puede haber nada más que una amistad... Podemos seguir siendo amigos... ¿Sí me
entiendes, Chuchito? Además, no es reproche, pero la verdad tú tienes muchas mujeres,
lo que se dice un harem... Con tanta monja a tu servicio, ¿qué te da o qué quita que sor
Pafnucia y yo consumemos nuestro amor...?” (Se persigna) Amén... (Prosigue) Así inicié
el trámite de separación... La madre superiora pegó el grito en el cielo... No, no por el ‘qué
dirán’ ni por la reputación de la santa madre iglesia que ya de por sí anda por la calle de la
amargura, sino porque ella le traía ganas a sor Pafnucia... (Imita a la madre) “Ya deja que
sea un pecadote mortal, Sor Simplicia, lo que no entiendo es cómo una criatura angelical
como Sor Pafnucia pudo poner sus ojitos pizpiretos en una mujer que ni siquiera se
depila...” Yo, sumamente extrañada: “¿Depilar? ¿Depilar qué, reverenda... de qué
habla...?” Me acordé de las cizañozas de mis tías, de lo del vello en el labio superior, pero
yo seguía sin comprender a qué se referían... (Imita a la madre) “¡Tú y sor Pafnucia van a
acabar en las llamas del averno...! La excomunión ya vienen en camino... y ustedes van a
terminar consumiéndose con las hetairas...” Perdón que la interrumpa, reverenda, ¿pero
qué es hetaira...? (imita a la madre) “¡No sé, pero abundan...! Ustedes dos van a
condenarse junto a los las madres solteras... las que abortan... las marimachas, los
mujercitos y los homoc-sesuales... Aunque aquí hay algo que encaja... Si en el infierno
van a dar todos los degenerados, se la deben pasar bomba, pachangueando y
cuchiplanchando todo el santo tiempo... No veo dónde está el castigo... (Molesta) ¿Ves,
sor Simplicia, hasta me haces dudar de mi religión? ¡Vete, fuera de aquí, oveja
descarriada, vete de mi vista, calenturienta, pecadora, aberración...!” (Pausa) Vapuleadas
y expulsadas, la Pafnucia y yo, iniciamos el éxodo, abandonamos el convento para buscar
una nueva vida... y un destino en común...

XOCHITL: “¡¿En común?! Tú y yo no tenemos nada en común, Masiosare... Lo único que


nos une es la pasión por los Pumas y la vida de swingers, de ahí en fuera párale de
contar... (Fuma mota) Ya es hora de que le llamemos al PAN, PAN y al PRI... PRD...” (Se
cubre para amortiguar el golpe) Después de un comentario así, lo menos que me hubiera
esperado es que Masiosare me arrojara en la cabeza una imitación del Chak-Mool o el
cenicero de cerámica con mis preciadas bachas... Pero nel... Esta vez: nada, nanai...
Masiosare estaba como ido, como ausente, en otro patín... (Lo “mira” y le pasa la mano
por “enfrente”) Órale, mano, ¿sigues aquí o ya de plano te piraste en el viajezazo...?” Y él:
(quedo) “mujum...” Como a mí no me gusta que me ignoren, mucho menos que me den el
avión, empleé la táctica infalible: hablar pestes de Chávez y de Fidel... (ríe) “¡Para mí
Chávez es un chimpancé amaestrado y Fidel está más viejo que Matusalén...!” (ríe.
pausa) Y él: con la mirada perdida.... Seguí con las provocaciones, las que nunca fallan...
Comencé a decir que para lucha de clases la lucha libre... que de lejos Carlos Salinas
había sido el mejor presidente de México, y para cerrar con broche de oro: que la maestra
Elba Esther era más guapa que Angelina Jolie...” Y él: perdido en la lontananza, ni mujum
siquiera, lo que se dice out... ¡De plano que saco mi as bajo la manga y comienzo a cantar
el himno gringo y a decir que como Bush no hay dos...! Observo a Masio... (Pausa) Lo
perdimos, Houston, lo perdimos... El Masisoare que yo amaba, con el que me casé, ya no
existía... Entonces, decido pasar al plano físico... Le doy un pellizquito de monjita... luego
un jalón de orejas... más tarde le arranco un mechón de rastas... Finalmente le hago el
horroroso calzón chino... Y él: nomás no reaccionaba... En su rollo bien clavado... Y yo ya
entre preocupadísima y enchiladísima... “¡A ver, güey, ¿pos qué te traes?! ¿De cuándo
acá tú tan ensimismado? ¿Eh...? ¡Pa’ mí que te gusta el arroz con popote...!” (Pausa) Uta,
la cosa estaba grave, porque eso del “arroz con popote” le habría subido el PH hasta la
mother... Y niguas... Entonces me voy con todas las baterías, agarro vuelo y que le suelto
un cachetadón ‘marca llorarás’... Y él en el piso, pero ni me miraba... Agarro y le doy sus
dos, tres, cuatro patadones en las costillas... Y él: apenas si suspiraba... Que me acuerdo
de las célebres tácticas de la PGR y que me voy echa la mocha a la cocina por un
Tehuacán, sacudo la botella y que se lo meto por las narices... “¡¿Qué te pasa, maldito
comunista, qué se me hace que eres del EZ o del EPR?! ¡Responde o te doy unos toques
en los ‘de’estos’...!” Ya me andaba por hacer en la sala de mi casa el tlatelolcazo a ver si
así reaccionaba... Pero él: cero, nada... A esas alturas yo estaba rete preocupada por la
integridad física y mental de Masiosare... Así que me acuerdo de un método usado por los
judiciales más canijos, me lanzo de nuevo a la cocina y me retacho con una bolsa de
plástico, se la meto en la cabeza y comienzo a simular la asfixia... “¡Ora sí, jijo de tu mal-
dormir, ¿qué chihuahuas te pasa?! ¡Habla o te va a cargar la china Mendoza...! ¿Muy
marxista, no? ¡Te vas a ir mucho a la China comunista...!” Le quito la bolsa y él: morado,
morado... morado es poco, pero sin decir ni pío... (Pausa. Seria) “¡Chale, Xóchitl, ora sí te
cayó el chahuistle...! ¡Vete haciendo a la idea de que Masiosare... ya no te ama! En un
instante, tú vida cambió...”

JIMENA: Cambió para mal, porque después de ese acontecimiento tan espeluznante, fue
casi imposible volver a creer en la masculinidad y hombría de cualquier individuo... Obvio
me divorcié... Los niños viven conmigo... Para ser precisos: de lunes a viernes con Brenda
Jacqueline y los fines de semana con mi mamá... Beto ahora vive con su ‘pareja’...
¡Hazme tú el favor...! No, si hasta andan pensando en unirse en una ley de convivencia...
Desde aquel suceso traumático, yo ingresé a las filas de PROVIDA, donde todo es recto y
moral, aunque a veces haya doble moral... lo cual es mejor, porque entonces es moral
doble... (Confidencial) Ando viendo quién me mete al Yunque porque ésos sí son
conservadores, pero no es nada fácil el ingreso, es sumamente selecto... (Prosigue)
Después de mi divorcio, salí con uno que otro caballero, pero antes de que me intenten
conquistar, que me quieran bajar el cielo, el sol y las estrellas, yo les aplico un
cuestionario que no falla, amigas, ¡no falla...! (a una) Put attention.... (A uno, como si
tuviera una libreta y un lápiz, va tachando en el aire) ¿Te gusta la comedia musical?
¡Tache! (a otro) ¿Lloraste cuando mataron a la mamá de Bambi?! ¡Tache! (a otro) ¿Sí
ubicas quiénes son Madonna, Liza Minelli y Bárbara Straisend? ¡Tachezazo! (a otro)
Cuando ves el futbol, ¿en qué te fijas: en la jugada en sí misma... o en las piernas del
Kikín Fonseca? ¡Tache! (al público) ¡No falla, amigas!, es el gaymómetro más inn del
planeta... Invento mío... (a una) Úsalo, vas a ver que me vas a adorar... (Prosigue) Ya si
los galanes pasan esas pruebas y demuestran una heterosexualidad a prueba de Brad
Pitt, yo les digo sinceramente: “Sonará políticamente incorrecto, pero a mí jamás se te
ocurra llevarme serenata con música de JuanGa... Te lo advierto: odio a Shakespeare...
Leonardo Da Vinci no me interesa... Elton John es de flojera... ¡Y Ricky Martin es para la
naquiza...!” (Al público) ¡Bueno, ¿qué de veras es tan difícil encontrar un hombre que,
bajo la apariencia de metrosexual, no oculte un bisexual en potencia, un hombre con O
mayúscula, un hombre y no una versión pirata de tal?!

SIMPLICIA: Tal cual: la Pafnucia y yo, dando catecismo con la Iglesia Universal de Cristo,
Pare de sufrir, y otras sectas similares, juntamos nuestros ahorritos y finalmente logramos
poner nuestro negocio... Sí, un bar de ambiente... de ambiente familiar... LGTB... Lésbico,
gay, transgenérico y bisexual... “Hetero friendly.” para que no digan que discriminamos a
las minorías... Lo que más trabajo nos dio fue el nombre del negocio... “¿El Hábito...?” No,
que ya nos lo ganaron unas compañeras del gremio... ¿El Vicio? Tampoco, lo mismo...
¿Café 22? Menos, dicen que es sólo para travestis... Estaba muy trillado ponerle “Libais”
o el ‘Opus Gay’... Así que no nos quedó más remedio que ponerle a nuestro bar... “La
Santa Cede...” con ce.... (Muestra algo donde se lea “la Santa Cede”)... Estamos en el
circuito de la Condechi... Está muy de moda y con precios muy accesibles... Entre nuestra
clientela frecuente se encuentran la Bogue, la Vives y hasta Chavela Vargas... (Muestra
su hábito) ¿Esto...? No, no es mi hábito de Carmelita Descalza, es el uniforme con el que
atendemos a la clientela... ¿A poco no está muy ad hoc con el local...? ¡Y mi mami está
contentísima porque sigo de uniforme...! Lo único, lo único que sigo sin entender es
cuando mi clientela se despide y, dizque como piropo, me dicen que mi bigote es sexy...
(A una) ¿De qué hablan, tú...? ¡Ni idea, ¿verdad...?! (Prosigue) Después de nuestro
primer fracaso matrimonial con aquél (señala al cielo), la Pafnu y yo decidimos vivir en
unión libre... Más práctico, más cómodo y más lésbico... Y como ya se aprobaron los
matrimonios entre personas del mismo sexo, andamos planeando el casorio… Y aunque
monseñor Perverto Rivera Carroña se oponga, vamos a adoptar… Ahora la Pafnu y yo
somos teólogas de la liberación... ¡de la liberación sexual! (a alguien) ¿Nuestra
especialidad? ¡Hijo mío, el rompope y el vino de consagrar...! ¡Te van a encantar! (grita)
¡Pafnu, primor: mándame otra ronda para los de la mesa de acá!

XOCHITL: Acá me agarró en curva el Masiosare cuando, así sin decir agua va, me
confesó que en realidad estaba enamorado ni más ni menos que... de Silvia y de Alfredo...
¡Tómala, barbón, ¿a que no te la esperabas...?! (Imita a Masiosare) “Entre ellos y yo hay
una química rete chida, va más allá de la piel, es una onda acá bien gruesa; algo kármico,
digo yo... No te bajonees, güey, ya encontrarás a alguien que te quiera por lo que eres y
no por lo que aparentas...” Fue así como me quedé sin pareja y él al fin tuvo su primer
pareja... Viven los tres juntos, tan campantes, risa y risa... ¿Yo? Atónita... y para colmo:
sola... Quedarme sin pareja significaba perder a mi acompañante de swinger, porque a los
solteros nomás no los aceptan... En franca desesperación, revisé mi agenda... Pensé en
mis ex pretensos: ‘el sonrisas’, mi viejo compa el Mosh, Juan Ramón de la Fuente, de la
UNAM... Y que me acuerdo de un compa de Filos y que le marco... (Imita con la mano un
teléfono) “Hola, ¿se encuentra por ahí Aniv. de la Rev....? (“tapa” la bocina) Era él... (Al
teléfono) ¿Qué tranza, Aniv. De la Rev., tantísimos años...? ¿Cómo ves a FECAL...? De la
verch, ¿no...?” (Al público) Él con el choro mareador de qué había sido de su vida, sus
penurias, sus decepciones, y que seguía igual de feo... porque era feo el condenado, lo
que se dice feo, feo con ganas... pero ahora más panzón, totalmente calvo y con el mismo
problema de acné... ¡Pero a mí qué! Yo nomás quería un acompañante para las fiestas de
intercambio de parejas... Y así nos fuimos Aniv. De la Rev. y yo, de orgía en orgía... ¡Bien
chido, bien pachecos...! (fuma, rememora) Una vez, ahí en la marcha del ‘2 de octubre No
se Olvida’ que voy viendo de lejitos a Masiosare... Iba con su pareja, los tres... Uy, no
saben las ganas brutas que me dieron de ir a morderle el labio hasta reventárselo, o darle
un pisotón en la mano, o picarle los ojos con los dedos... (Fuma) Pero nel... Con eso
seguro iba a pensar que yo lo seguía queriendo... Y la neta sí... Mi corazón seguía
latiendo por Masiosare... un extraño enemigo... ¡Ay, ingrato, qué ganas de echarme un
buen round contigo...!

Música y baile final.


XÓCHITL: Por eso nosotras decimos que…
JIMENA: Más vale solas, que engañadas...
SIMPLICIA: Más vale lésbicas, que célibes...
XÓCHITL: Más vale swingers, que solteras...
JIMENA: ¡Yo no quiero un metrosexual… me conformo con un heterosexual!
SIMPLICIA: ¡Yo no quiero ser esposa de Cristo… me acomodo mejor en el amor lésbico!
XÓCHITL: ¡Yo no distingo ni discrimino: hombres, mujeres, perros, quimeras… lo mío lo
mío: es la orgía… pégame pero no me dejes!
JIMENA: ¿Y tú… ya te divorciaste…?
TODAS: ¿Qué esperas?
JIMENA: Por todo esto y mucho más...
SIMPLICIA: Nosotras...
XÓCHITL: Somos...
LAS TRES: ¡Las divorciadas...!
-FIN-
D.R. Humberto Robles

Reservados todos los Derechos ante SOGEM


(Sociedad de Escritores de México)

Para ser montada y representada se debe contar con la autorización,


por escrito, del autor

hrobles@hotmail.com

http://roblesteatro.blogspot.com

Este espectáculo fue estrenado en Montevideo, Uruguay, con Laura Barboza, Fabiana
Charlo y Virginia Rodríguez, restaurante El Lobizón (versión Mercosur)

También ha sido montada en Guadalajara, Saltillo, Tijuana, Monterrey y Paraguay.


CANCIÓN
DIVORCIDADAS JAJÁ JAJÁ
(Con música de “Despeinada”)
Divorciadas jaja jaja
Divorciadas jaja jaja
Divorciadas jaja jaja
Divorciadas jaja jaja

Tú tienes un acta de matrimonio


y tienes una suegrita infernal
tú tienes un matrimonio horroroso
pero tu esposo... es el problema principal

Tú tienes una existencia pavorosa


y vives en un modelo patriarcal
tú tienes unas vivencias espantosas
pero tu esposo... es el problema principal

Tu esposo te engaña y quieres huir


Tu esposo te pega nomás porque sí
Tu esposo te ignora y crees que es así
Este es el momento de ponerle fin

Tú tienes un matrimonio horroroso


Pero tu esposo ¡ay! que cosa tan fatal
jaja jaja jaja jaja jaja
jaja jaja jaja jaja jaja
jaja jaja jaja jaja jaja jaja

Tú tienes un matrimonio horroroso


Pero tu esposo ¡ay! que cosa tan fatal
jaja jaja jaja jaja jaja
jaja jaja jaja jaja jaja
jaja jaja jaja jaja jaja jaja

Divorciadas jaja jaja


Divorciadas jaja jaja
Divorciadas jaja jaja
Divorciadas jaja jaja

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