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Control del asma. ¿Cómo lo medimos?


J. de Miguel Díez
Servicio de Neumología. Hospital General Universitario Gregorio Marañón. Madrid

INTRODUCCIÓN miento viene determinado por el grado de control de la enfer-


El objetivo del tratamiento del asma, según se referencia en medad4.
las principales guías clínicas, no es curar la enfermedad, sino lo- Existen tres grandes aspectos que ayudan a conocer si la en-
grar su control en un tiempo mínimo y mantenerlo estable a lo lar- fermedad está o no controlada: datos clínicos (entrevista clínica,
go del tiempo. El término control se aplica y se establece sobre la cuestionarios estandarizados), variables de función pulmonar
base de diversos criterios clínicos, que deben estar presentes a la (FEM, FEV1, hiperrespuesta bronquial inespecífica) y marcado-
hora de evaluar las principales recomendaciones de manejo de res de inflamación (medición del óxido nítrico en el aire exhala-
esta entidad patológica1,2. Es importante tener en cuenta que la do, proporción de eosinófilos en el esputo, estudio de mediadores
gravedad y el control de la enfermedad no son términos inter- de la inflamación en el aire espirado)5. La complejidad del asma
cambiables. La gravedad puede definirse como una estimación de exige la medida de todos ellos para llegar a conseguir obtener una
la intensidad de los procesos patológicos subyacentes (síntomas, panorámica ajustada de la enfermedad.
alteración de la función pulmonar, consumo de la medicación de
rescate). Se trata de una característica categórica de la enferme- CONTROL CLÍNICO DEL ASMA
dad, que se establece antes de iniciar el tratamiento. El control, Para facilitar la evaluación del control clínico del asma
sin embargo, es una estimación a posteriori de la eficacia del tra- de una manera estandarizada, se han propuesto varias medidas.
tamiento. Sus metas se establecen después de considerar la gra- Una de ellas es la aplicación de cuestionarios. En los estu-
vedad del proceso3. dios en los que se ha comparado esta estrategia con otros mé-
En la versión actualizada del documento de consenso GINA, todos de control clínico del asma, se ha observado que el cues-
publicada en noviembre de 2006, se propone cambiar la clasi- tionario discrimina más y tiene mejores propiedades evalua-
ficación clásica basada en la gravedad del asma (leve intermi- doras6.
tente, leve persistente, moderada persistente y severa persis- Se han desarrollado numerosos cuestionarios para valorar
tente) por una más sencilla y práctica que valora el nivel de el control del asma. El más breve es el test de los 30 segun-
control de la enfermedad: asma controlada, parcialmente con- dos. Se compone de cinco preguntas acerca de los síntomas,
trolada y no controlada. El asma controlada se refiere a la pre- el empleo de medicación de rescate, la limitación física y la pér-
sencia de síntomas diurnos menor o igual a dos veces por se- dida de asistencia al trabajo o a la escuela. Si el paciente res-
mana, necesidad de medicación de rescate dos ó menos veces ponde afirmativamente a cualquiera de ellas indica que su asma
por semana, ausencia de síntomas nocturnos, de limitación para no está bien controlada y que debería ponerse en contacto con
las actividades y de exacerbaciones y una función pulmonar su médico7.
normal. El asma parcialmente controlada sería aquella con al Más complejo y usado ampliamente en los ensayos clínicos
menos una de las siguientes características: síntomas diurnos es el cuestionario de control de asma (ACQ), constituido por
más de dos veces por semana, necesidad de medicación de res- siete ítems. Cinco de ellos hacen referencia a los síntomas sufri-
cate más de dos veces por semana, cualquier limitación para la dos durante la última semana, uno interroga sobre empleo de me-
actividad física, cualquier síntoma nocturno, flujo espiratorio dicación de rescate y el último evalúa la función pulmonar8. Exis-
máximo (FEM) o volumen espiratorio forzado en el primer se- ten varias versiones simplificadas de este cuestionario y se ha de-
gundo (FEV1) inferiores al 80% del predicho y una o más exa- mostrado que todas ellas aportan información similar a la del for-
cerbaciones al año. El asma no controlada es aquella que cur- mato original9.
sa con una exacerbación en cualquier semana puntual, o que Más recientemente se ha publicado el test de control del asma
cumple tres o más características del asma parcialmente con- (ACT). Está constituido por cinco preguntas relativas a las cuatro
trolada en una semana puntual. Según este abordaje, el trata- últimas semanas. Tiene en cuenta los síntomas, la repercusión
de la enfermedad, la utilización de medicación de rescate y la va-
Correspondencia: Javier de Miguel Díez. Servicio de Neumología. loración del control por parte del paciente. Este cuestionario, al
Hospital General Universitario Gregorio Marañón. C/ Doctor Esquerdo, igual que los anteriores, ha franqueado las etapas de la validación
46. 28007 Madrid email: jmiguel.hgugm@salud.madrid.org científica. Además, tiene la ventaja de que puede emplearse rápi-

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damente, es fácil de realizar y puede detectar cambios evolutivos número de eosinófilos en el esputo fue un 63% más bajo a los 12
y aceptables para el paciente y su médico10. Aunque la correlación meses en el grupo manejado por el esputo. Estos pacientes tu-
entre el ACT y el ACQ es buena, el ACT tiene más fuerza, por- vieron, además, un menor número de exacerbaciones graves y de
que se refiere a la evolución durante las últimas cuatro semanas, ingresos hospitalarios. Sin embargo, las dosis medias de esteroi-
frente a una semana para el ACQ. des, orales o inhalados, no difirieron significativamente entre am-
Como se ha podido comprobar, todos los cuestionarios des- bos grupos12.
critos hacen referencia a los síntomas diurnos y nocturnos, al em- Por lo que respecta al ONe, diversos estudios indican, igual-
pleo de medicación de rescate y a la repercusión sobre las acti- mente, que la medición de este parámetro facilita el manejo del
vidades de la vida diaria. Sólo el ACQ recoge la medida de la fun- paciente con asma y puede llegar a predecir la pérdida de con-
ción pulmonar. Sin embargo, ninguno de estos cuestionarios va- trol. En este sentido, Jones et al. evaluaron la utilidad del óxido
lora apropiadamente las exacerbaciones, acontecimientos impor- nítrico para diagnosticar y predecir la pérdida de control del asma
tantes en el control del asma. después de la retirada del tratamiento esteroideo. Dichos autores
demostraron que la medida de este parámetro es tan útil como el
CONTROL FUNCIONAL DEL ASMA análisis del esputo inducido y la evaluación de la hiperreactivi-
Desde el punto de vista funcional pueden emplearse, como dad bronquial inespecífica, con la ventaja de que es muy fácil de
marcadores de control del asma, la monitorización del FEM, la realizar13. En estudios posteriores se ha comparado la utilidad
realización de espirometrías seriadas o la evaluación de la hipe- pronóstica del ONe con otros métodos de medida de la infla-
rrespuesta bronquial inespecífica. El plazo de normalización de mación de la vía aérea. En ellos se ha comprobado que, tanto la
estas medidas varía, con un tratamiento apropiado, desde unos determinación del ONe como el análisis del esputo inducido, son
días para el FEM y la espirometría, a unos meses para la hipe- superiores a las aproximaciones convencionales, siendo el ONe
rreactividad bronquial. el método más ventajoso, debido a la rapidez y facilidad de su
En diversos estudios se ha valorado la estrategia basada en ejecución14.
la evaluación de la hiperrespuesta bronquial inespecífica, ha-
biéndose obtenido resultados interesantes. Sont et al. demostra- CONTROL CLÍNICO, FUNCIONAL Y DE LA
ron que, el nivel de control alcanzado en los pacientes asmáti- INFLAMACIÓN BRONQUIAL
cos, era significativamente mejor si el seguimiento convencio- Algunos autores han intentado evaluar el grado de control del
nal y los ajustes en la dosis de esteroides inhalados se comple- asma mediante la medición conjunta de las tres dimensiones: sín-
mentaban, teniendo en cuenta las variaciones en la PC20. Así, tomas, función pulmonar e inflamación. En esta línea de traba-
los pacientes tratados con la estrategia basada en la medida de jo, Boulet et al. han propuesto evaluar las tres variables (sínto-
la hiperrespuesta bronquial presentaron un riesgo significati- mas, grado de obstrucción, eosinofilia en el esputo) de una for-
vamente menor de padecer exacerbaciones a lo largo de los 24 ma ponderada, para obtener finalmente una puntuación que os-
meses de seguimiento del estudio, en comparación con los en- cila entre 0 y 100, donde 0 indica la ausencia absoluta de control
fermos tratados según las guías habituales. También se apreció y 100 representa el máximo control15. Se trata de un gran paso en
una mejoría significativa en el FEV1 y en el grosor de la capa re- el enfoque del paciente asmático. Aún no está claro si este indi-
ticular subepitelial en el primer grupo de pacientes. Estos re- cador será el que se emplee en el futuro. Lo que sí es evidente es
sultados permiten concluir que la estrategia de la hiperreactivi- que la adición de un marcador de inflamación al enfoque actual
dad bronquial, en conjunción con la optimización de los sínto- propuesto por la GINA, proporcionaría una información adicio-
mas y de las pruebas de función pulmonar, lleva a un control nal muy valiosa.
más efectivo del asma11.
BIBLIOGRAFÍA
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Sociedad Española de Neumología Pediátrica (SENP), Sociedad Es-
zar y proporcionan una información adicional muy valiosa. Se
pañola de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR). www.gemas-
correlacionan más con el grado de control que con el nivel de ma.com.
gravedad de la enfermedad. Sin embargo, el problema principal
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luaron 74 pacientes con asma moderada-grave que fueron ran- Primera reunión oficial conjunta SEPAR & ATS. Valencia 2005. Bar-
domizados para ser manejados según las guías habituales (en este celona: Medical Trends SL; 2005. p. 9-20.
caso las de la Sociedad Británica) o por una estrategia basada en 6. Juniper EF, O´Byrne PM, Ferrie PJ, King DR, Roberts JN. Measu-
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168 REVISTA DE PATOLOGÍA RESPIRATORIA VOL. 10 Nº 3 - JULIO-SEPTIEMBRE 2007


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8. Juniper EF, O’Byrne PM, Guyatt GH, Ferrie PJ, King DR. Deve- 12. Green RH, Brightling CE, Mckenna S, Hargadon B, Parker D,
lopment and validation of a questionnaire to measure asthma con- Bradding P et al. Asthma exacerbations and sputum eosinophil
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9. Juniper EF, Svensson K, Mörk AC, Stähl E. Measurement proper- 21.
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