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CRÉDITO BIENESTAR DEL PACIENTE:
NECESIDADES DE HIGIENE, REPOSO
03 Y MOVIMIENTO
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1. Necesidad de higiene.........................................................................................................................8
1.1. La piel ........................................................................................................................................................ 9
1.1.1. Anatomía e histología .......................................................................................................................... 9
1.1.1.1. La piel ............................................................................................................................................... 10
1.1.1.2. Los anexos cutáneos ....................................................................................................................... 10
1.1.2. Fisiología de la piel ............................................................................................................................ 11
1.1.3. Enfermedades más frecuentes........................................................................................................... 12
1.1.4. Lesiones elementales ......................................................................................................................... 15
1.2. Las heridas............................................................................................................................................... 18
1.2.1. Tipos de herida según su causa......................................................................................................... 18
1.2.2. Cicatrización....................................................................................................................................... 19
1.2.3. Cura de heridas ................................................................................................................................. 19
1.3. Los apósitos............................................................................................................................................. 20
1.3.1. Apósitos combinados ........................................................................................................................ 21
1.3.2. Apósitos laminares semipermeables adhesivos................................................................................ 21
1.3.3. Apósitos activos ................................................................................................................................ 21
1.4. Los masajes.............................................................................................................................................. 22
1.4.1. Indicaciones y contraindicaciones...................................................................................................... 22
1.4.2. Técnica general del masaje................................................................................................................ 22
1.5. La higiene................................................................................................................................................. 23
1.5.1. Beneficios físicos para el paciente..................................................................................................... 24
1.5.2. Beneficios psicológicos del paciente................................................................................................. 24
1.5.3. Reglas básicas para las técnicas de higiene...................................................................................... 25
1.6. Técnicas de aseo general ....................................................................................................................... 26
1.6.1. Higiene en la ducha o el baño ........................................................................................................... 26
1.6.2. Higiene del paciente encamado ....................................................................................................... 26
1.7. Técnicas de aseo parcial........................................................................................................................... 28
1.7.1. Aseo de pies........................................................................................................................................ 28
1.7.2. Aseo del cabello ................................................................................................................................ 28
1.7.3. Higiene genital................................................................................................................................... 29
1.7.4. Higiene bucodental ........................................................................................................................... 30
1.7.5. Cuidado de las uñas .......................................................................................................................... 31
1.8. La recogida de orina y heces................................................................................................................... 32
Bibliografía / webgrafía........................................................................................................................77
1.
NECESIDAD DE HIGIENE
Tema 1. Necesidad de higiene
La higiene mantiene la piel en buen estado, evitando al paciente complicaciones que, en algunos
casos, pueden llegar a ser mortales. Esta tarea corresponde al equipo de enfermería.
1.1. LA PIEL
Es el mayor órgano del cuerpo. Ocupa aproximadamente 2 m² y pesa entre 3 y 5 kilos. Su espe-
sor varía entre los 0,5 milímetros (en los párpados) y los 4 milímetros (en el talón). Actúa como
barrera protectora que aísla al organismo del medio que lo rodea, protegiéndolo y contribuyen-
do a mantener íntegras sus estructuras, al tiempo que actúa como sistema de comunicación con
el entorno. En los orificios corporales (boca, nariz, genitales femeninos...), se transforma en otra
membrana más fina y rosada, llamada mucosa.
• Piel: aunque a simple vista parece lisa y llana, en realidad presenta pliegues, surcos, arrugas y
poros. Los dermatoglifos son las huellas dactilares, palmares y plantares, que se pueden usar
en estudios de identificación.
• Faneras o anexos cutáneos: son los elementos que acompañan a la piel, como las uñas, los
pelos en cualquiera de sus variantes y las glándulas sebáceas.
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Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
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Tema 1. Necesidad de higiene
-- Apocrinas: están formadas por un gran ta, lo que comúnmente se llama piel de
lóbulo secretor y un conducto excretor gallina.
dérmico que desemboca en el folículo
pilosebáceo. El producto de su secreción • Uñas: se localizan en las regiones distales
es más espeso, oloroso, rico en grasas y de los miembros. Están formadas por célu-
en pigmentos. Se localizan solo en cier- las queratinizadas aplanadas, apiladas las
tas partes del cuerpo (axilas, pubis, pár- unas sobre las otras y procedentes de la
pados…). Su situación es más profunda, matriz de la uña (situada bajo la piel en su
a veces en la hipodermis, y su tamaño es parte inferior). Su crecimiento es tangencial
más voluminoso. Son las encargadas de y, como no se descaman, crecen de forma
la secreción de las feromonas. ininterrumpida, a una velocidad media de
0,1 milímetros/día.
• Folículos pilosebáceos:
-- Pelos: fibra de queratina constituida por 1.1.2. Fisiología de la piel
una raíz y un tallo. Se forman en el folículo
de la dermis en una invaginación llamada
Las funciones básicas de la piel son:
folículo piloso.
-- Consisten en una raíz, que se agranda • Protección: actúa como barrera ante ata-
en su base, ubicada en un folículo piloso ques mecánicos, físicos, químicos o micro-
y en un tallo que se proyecta hacia arri- bianos desde el exterior.
ba por encima de la superficie de la epi-
• Respuesta inmunitaria: hay diferentes
dermis, formado por una queratina muy
tipos de células en la piel que actúan ante
dura, sin núcleo, y gránulos de melanina
una agresión sobre esta. Estas células son
responsables de su color.
los queranocitos, las células de Langerhans,
-- La zona papilar o papila dérmica está los linfocitos T, los melanocitos, los macró-
compuesta de tejido conjuntivo y vasos fagos y los mastocitos.
sanguíneos, que proporcionan al pelo las
• Termorregulación: mediante el aporte san-
sustancias necesarias para su crecimien-
guíneo (vasodilatación y vasoconstricción),
to.
la evaporación del sudor y el aislamiento
-- Se distribuyen por casi toda la piel (excep- (grasa de la hipodermis y vello corporal).
to las palmas de las manos y de los pies,
• Capacidad sensitiva: a través de las termi-
el interior del ombligo y las mucosas) con
naciones nerviosas que perciben presión,
número, longitud y espesor variables.
tacto leve, dolor y temperatura.
-- Glándulas sebáceas: son glándulas exo-
• Equilibrio hídrico: evita pérdidas de agua
crinas alveolares simples, situadas en la
y electrolitos.
dermis media y formadas por células lle-
nas de lípidos que se desarrollan como • Función metabólica: asegura la síntesis de
una gemación epitelial del folículo piloso. vitamina D, que necesita una acción direc-
Aun así, hay glándulas sebáceas en zonas ta del sol sobre la superficie de la piel y es
sin pelo, como los párpados. Sintetizan el esencial para el crecimiento de los huesos.
sebo, sustancia lipídica cuya función es
• Excreción: eliminación de distintas sustan-
lubricar y proteger la superficie de la piel.
cias a través del sudor y la secreción sebá-
-- Músculo erector del pelo u horripila- cea, que también protege a la piel de la
dor: está compuesto por fibras muscula- sequedad y el agrietamiento.
res lisas y recibe inervación del sistema
• Depósito: es un reservorio de múltiples
nervioso simpático. Se inserta en el tra-
sustancias como minerales, sustancias
mo medio del folículo piloso, con una
grasas, sustancias orgánicas, hormonas,
dirección oblicua, y en la capa papilar de
vitaminas…
la dermis. Cuando se contrae (por frío,
miedo…), tensa el pelo y lo pone de pun-
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Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
• Foliculitis
Bacterianas
• Forúnculo
• Candidiasis
Micosis
• Tiña
• Pediculosis
• Sarna
• Nevus
PIEL Benignos
• Lipoma
• Verrugas
Tumores
• Papilomas
• Melanoma
Malignos • Epitelioma
cutáneo
• Psoriasis
• Dermatitis
Otras
• Acné
• Heloma
• Alopecia
PELO
• Hipertricosis
• Onicólisis
• Onicogrifosis
UÑAS
• Onicomicosis
• Onicocriptosis
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Tema 1. Necesidad de higiene
»» Piel
• Foliculitis: inflamación de un folículo piloso.
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Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
• Dermatitis:
»» Pelo
• Alopecia: pérdida anormal de cabello que puede respon-
Acné
der a múltiples causas. Afecta al cuero cabelludo y otras
zonas con pelo, como la barba, las axilas, la región genital
y las pestañas.
• Hipertricosis: crecimiento excesivo del pelo en cualquier
parte del cuerpo. Puede ser generalizada o localizada. El
pelo puede ser terminal, vello o lanugo.
»» Uñas
• Onicólisis: desprendimiento de la lámina del lecho ungular
Alopecia areata y del hiponiquio por destrucción. La lámina se vuelve más
débil y puede romperse.
• Onicogrifosis: engrosamiento patológico de la uña, que se
acaba curvando. Se da sobre todo en los pies.
• Onicomicosis: infección superficial en las uñas que puede
ser causada por tres tipos de hongos.
• Onicocriptosis: penetración de la uña (generalmente del
pie) en el surco ungueal, producida usualmente por un defec-
to en su corte. Conocido vulgarmente como uña encarnada.
Hongos en uñas de los pies
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Tema 1. Necesidad de higiene
Eritema
Angioma
Telangiectasia
PLANAS Petequia
Superficial Equimosis
Púrpura
Víbice
LESIONES PRIMARIAS
Profunda Hematoma
Pápula
Placa
CONTENIDO
SÓLIDO
Habón
Nódulo
Vesícula
Ampolla
CONTENIDO
LÍQUIDO
Pústula
Quiste
Erosión
Excoriación
PÉRDIDA DE
SUSTANCIA
Fisura
LESIONES SECUNDARIAS
Úlcera
Escama
Costra
Temporales
Escara
MODIFICACIÓN
LESIONES Atrofia
PRIMITIVAS
Esclerosis
Permanentes Cicatriz
Liquenificación
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Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
»» Lesiones primarias
Son aquellas que se forman sobre la piel sana. Las planas presen-
tan cambios de coloración denominados máculas. Su causa más
habitual es de origen vascular.
La vitropresión es una técnica • Púrpura: salida de eritrocitos del torrente sanguíneo que se
donde el médico aprieta una acumulan en la piel y/o en el tejido celular subcutáneo. No
lesión cutánea con una lámina desaparecen con la técnica de la vitropresión o diascopia,
de cristal ligeramente abombada y van cambiando de color (rojo-morado-amarillo verdoso).
para expulsar la sangre de la zona.
Con esto se permite diferenciar las -- Petequia: pequeños derrames vasculares puntiformes,
lesiones vasculares de otro tipo no mayores de dos milímetros.
de lesiones pigmentarias, ya que
estas últimas no se aclaran con la -- Víbice: lesión de forma lineal debida a extravasación de
presión. Es decir, si desaparece sangre.
es un eritema, y si no lo hace, es
púrpura. -- Equimosis o cardenal: es una placa de más de un centí-
metro de diámetro.
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Tema 1. Necesidad de higiene
»» Lesiones secundarias
Se forman a partir de una alteración patológica previa.
• Erosión o abrasión: lesión deprimida debida a pérdida superficial de la epidermis, sin com-
prometer la dermis. Al sanar, no deja cicatriz.
• Úlcera: lesión deprimida por pérdida de epidermis, dermis y tejido celular subcutáneo, con
destrucción profunda de tejido, de modo que al sanar deja una cicatriz. Si afecta a una mucosa,
se llama afta.
• Fisura o rágade: ulceración lineal que afecta a la epidermis y la dermis superficial. Se suele
localizar alrededor de orificios y pliegues naturales.
• Escama: delgada lámina de estrato córneo que forma laminillas visibles a simple vista, como
la caspa del cuero cabelludo.
• Costra: lesión que se produce por desecación de exudados (sanguinolentos o serosos) sobre
la superficie cutánea. Generalmente aparece en las heridas.
• Atrofia: pérdida de piel, caracterizada por la ausencia de vello, transparencia de vasos sanguí-
neos y plegamiento excesivo.
• Esclerosis o induración: aumento del tejido conectivo dérmico, apreciándose piel dura que
no se puede desplazar. Puede ser debida a proliferación colágena, infiltración celular o edema
en dermis o tejido celular subcutáneo.
• Cicatriz: tejido resultante de la sustitución de la dermis por tejido conjuntivo, tras una alte-
ración de la misma (corte o lesión profunda de la piel). Puede ser atrófica o hipertrófica
(queloide).
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Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
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Tema 1. Necesidad de higiene
1.2.2. Cicatrización
»» Fase inflamatoria
Ocurre un proceso de coagulación que detiene la pérdida de
sangre. También se liberan varios factores para atraer células que
fagociten residuos, bacterias y tejido dañado. Herida con laceración
»» Fase proliferativa
Comienza dos o tres días después de producirse la herida. El teji-
do se revasculariza, aumenta el colágeno, la formación de tejido
granular, la epitelialización y la contracción de la herida.
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Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
Un apósito es cualquiera de los diferentes productos sanitarios empleados para cubrir y proteger una
herida. Su función es optimizar el proceso de cicatrización. Deben preservarlos principios fisiológicos
básicos de humedad, calor, oxigenación y circulación sanguínea. Por eso, entre sus características
destacan que son elementos estériles, con capacidad de absorción, baja adherencia a la herida, antia-
lérgicos y que favorezcan un pH ácido que dificulte la colonización bacteriana.
Hay muchos tipos de apósitos, desde la clásica gasa hidrófila a los apósitos especializados para úlce-
ras o quemaduras.
Apósitos
estériles
Adhesivos
no
Adhesivos
Secos
Laminares semipermeables
adhesivos
Combinados
Activos
Impregnados
Alginatos
Hidrogeles
Espuma de
Hidrocoloides
poliuretano
Geles de
poliuretano Colágeno
Hidrofibras
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Tema 1. Necesidad de higiene
De algodón, viscosa, celulosa, fibra acrílica y/o Además de ejercer una acción protectora, crean
nilón. unas condiciones locales óptimas de humedad y
temperatura que favorecen activamente la cica-
• Secos: fundamentalmente para protec- trización. Según su forma, pueden ser laminares
ción y absorción. y no laminares (gránulos, polvos o semisólidos).
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Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
El masaje tiene efectos mecánicos (por la acción directa sobre los tejidos o líquidos corporales), psi-
cológicos (relajación o activación) y reflejos (estimula el sistema nervioso, el sistema endocrino y los
sistemas químicos del organismo). Los efectos fisiológicos dependen en gran medida de las caracte-
rísticas de la lesión, el tipo de masaje, su duración, intensidad y profundidad.
El masaje tiene una especial incidencia en la circulación sanguínea y linfática. El aumento del flujo
sanguíneo al nivel local se consigue por la compresión de los tejidos, que vacía los lechos venosos,
disminuye la presión y aumenta el flujo sanguíneo capilar. Además, el masaje estimula la liberación de
sustancias vasodilatadoras como la histamina.
»» Golpeteo
El terapeuta utiliza la percusión para calentar partes
del cuerpo. Golpes ligeros a un ritmo rápido. No
debe utilizarse en pacientes graves o con estruc-
turas delicadas. Se usan diversas técnicas como el
palmoteo o la catación (palmas ahuecadas).
»» Fricción
Se aplica de forma rápida y se puede realizar con
la mano, la palma, los nudillos o los dedos pulga-
res. El objetivo es romper las adherencias en los
músculos y los tejidos circundantes. También pro-
mueve la circulación de estas áreas específicas.
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Tema 1. Necesidad de higiene
»» Compresión
No hay desplazamiento de los dedos. Se comprime y presiona la zona o región que se quiere tratar.
Es importante mantener el ritmo y la intensidad uniforme a fin de obtener efectos homogéneos.
»» Vibración
A partir de una presión estática y variando su intensidad rítmicamente, se intentarán producir movi-
mientos de pequeña oscilación sobre la zona en tratamiento.
»» Sacudidas
Se deriva de la vibración. Son efectivas para aliviar la tensión en brazos y piernas, para acelerar la
circulación y restablecer el tono muscular.
»» Pellizco
Tiene su raíz en la percusión. Además de actuar sobre los músculos, se usa sobre cicatrices adheridas
con el fin de flexibilizarlas y despegarlas, y sobre fascias y tendones con fines estimulantes.
»» Torsiones
Tienen como base el amasamiento. Se utiliza en el masaje descontracturante y es importante usar un
medio deslizante.
1.5. LA HIGIENE
La higiene es el conjunto de conocimientos y técnicas que aplican los individuos para el control de los
factores que pueden ejercer efectos nocivos sobre su salud. Se distinguen diversos tipos, entre los
que encontramos:
• Higiene personal: es el concepto básico del aseo, la limpieza y el cuidado del cuerpo humano
para mantener la salud y evitar la enfermedad.
• Higiene postural: adopción de posturas adecuadas para evitar lesiones al realizar cualquier
actividad de la vida diaria.
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Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
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Tema 1. Necesidad de higiene
Antes de realizar cualquier técnica de higiene, es imprescindible tener en cuenta una serie de consi-
deraciones:
-- Tener todo el material preparado antes de empezar para evitar salir durante la realización de
la técnica.
-- Descubrir únicamente la parte del paciente sobre la que estemos actuando, manteniendo el res-
to del cuerpo cubierto con una toalla o sábana para mantener su intimidad y evitar que se enfríe.
• Mantener la temperatura del agua según el gusto del paciente. Si no puede opinar, mantenerla
un o dos grados por encima de la temperatura corporal para que tenga una sensación agra-
dable (salvo que haya indicación terapéutica para subir o bajar la temperatura del paciente).
• Seguir un orden establecido: de limpio a sucio y de arriba hacia abajo, salvo contraindicación.
• Cuidar especialmente las sondas o sueros que pueda tener puestos el paciente para evitar
desconectarlos.
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Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
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Tema 1. Necesidad de higiene
6. Desvestirle, cubriéndolo con la sábana o una toalla para preservar su intimidad. Descubrir
únicamente la zona sobre la que se está actuando.
7. Iniciar el lavado por la cara, sin usar jabón, solo con agua:
- En los ojos, usar para cada uno una gasa húmeda, del borde interno al externo para
evitar contaminar el conducto lagrimal.
- Para los oídos, no emplear bastoncillos de algodón sino también una gasa.
8. Continuar con un orden descendente: cuello, hombros, axilas, brazos, manos, tórax, abdo-
men, piernas, pies, espalda, nalgas y región genital. Ofrecer al paciente la posibilidad de
lavarse él mismo esta última zona si puede hacerlo.
9. Enjabonar (sin excederse), insistiendo en los espacios interdigitales, la zona umbilical, los
pliegues inguinales y en la zona bajo las mamas (si es mujer). Cambiar el agua y la esponja
tantas veces como sea necesario. Escurrir bien para no mojar la cama innecesariamente.
10. Aclarar y secar a fondo, realizando toques suaves con la toalla sin frotarla por la piel.
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Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
5. Introducir el pie más alejado en la palangana y lavar la pierna desde el tobillo hacia la rodi-
lla. Después, el pie, insistiendo en los pliegues interdigitales.
6. Enjuagar y secar.
7. Observar el estado de la piel del pie, sobre todo del talón. Si tiene grietas, lubricarlas. Si
está eritematoso, dar masaje de amasamiento y percusión. Si se observa riesgo de escaras
en el talón o puntas de los dedos, hay que proteger estas zonas con un vendaje protector,
cojines…
8. Cortar las uñas rectas con cuidado. Si estuvieran demasiado duras, se reblandecen sumer-
giéndolas en agua a unos 40 °C durante 10-20 minutos o también con vaselina.
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Tema 1. Necesidad de higiene
Material necesario: guantes de un solo uso, toalla, 4. Si no se ha hecho la higiene gene-
cuña, palangana con agua caliente, empapador, ral, colocar a la paciente en posición
gasas, esponjas de un solo uso y jabón líquido. decúbito lateral y proceder al lavado
y secado de la zona perianal: desde
1. Detallarle al paciente la técnica que la hendidura de la vulva hasta el ano
vamos a realizar y pedir su colabora- y pliegues de los glúteos.
ción.
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Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
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Tema 1. Necesidad de higiene
necesitan oxígeno, ya que este puede producir quemaduras en contacto con sustancias
grasas.
7. Reinstalar al paciente, recoger el equipo, quitarse los guantes, lavarse las manos y anotar
incidencias.
4. Pedir al paciente que se quite la prótesis. Si no puede, la retirará el auxiliar con una gasa
estéril y la colocará en una batea.
6. Aclarar con abundante agua fría (la caliente puede alterar algunos materiales).
7. Proporcionar un vaso con agua o antiséptico al paciente para que se enjuague la boca y
pañuelos desechables para secarse.
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Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
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Tema 1. Necesidad de higiene
4. Pedir al paciente que flexione las piernas y, apoyando los talones en la cama, levante las
caderas. En ese momento, introducir la cuña con el mango mirando hacia los pies hasta
que el ano quede dentro del hueco de la cuña.
2. Flexionar las piernas del paciente y, con un movimiento coordinado entre los dos, levantar-
le la pelvis para poder introducir la cuña. También pueden girar al paciente hacia un lado,
colocar la cuña sobre el empapador, en la cama, y volver al paciente sobre ella.
3. Limpiar con papel higiénico el área genital o realizar la higiene genital según la técnica ya
descrita.
7. Vaciar la cuña en el retrete y limpiarla. Debe desinfectarse con lejía y aclararla bien antes
de su siguiente uso.
33
2.
NECESIDAD DE REPOSO Y MOVIMIENTO
Tema 2. Necesidad de reposo y movimiento
El cuerpo humano se mueve gracias al aparato locomotor, que es el conjunto de estructuras rígidas
(huesos), elementos contráctiles (músculos) y elementos que permiten la movilidad a las estructuras
rígidas (articulaciones).
»» Largos
Son más largos que anchos. El húmero o el fémur son de los más conocidos. Las partes del húmero
son la epífisis (extremos del hueso, llenos de médula ósea roja), la diáfisis o cuerpo (tubo hueco de
hueso compacto y duro), la metáfisis (trozo que une la diáfisis con la epífisis), el cartílago articular
(recubre las epífisis), el periostio (membrana externa que recubre la superficie del hueso) y el endostio
(membrana fibrosa que recubre la cavidad medular).
Metáfisis Metáfisis
Médula Médula
ósea amarilla ósea roja
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Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
»» Cortos
Son aquellos que tienen un aspecto cúbico, ya que no predomina ninguna de las tres dimensiones.
Son más bien irregulares. Como ejemplo, los huesos carpianos (mano), los tarsianos (pie) o los de la
muñeca.
»» Planos »» Irregulares
Aquellos en los que dos dimensiones son más o En ellos, las tres dimensiones son diferentes. Son
menos iguales. Por ejemplo, el hueso del esternón. irregulares, por ejemplo, las vértebras.
Los huesos están formados por tejido óseo de que está formado por los huesos del centro. Es
diferentes texturas y aspectos, dependiendo de decir, huesos de la cabeza (cráneo, cara), de la
donde estén localizados. La capa externa del columna (vértebras), del tórax (costillas, esternón)
hueso se denomina tejido óseo denso o compac- e hioides. El esqueleto apendicular es el constitui-
to y forma las diáfisis de los huesos largos. El hue- do por los huesos de las extremidades, superiores
so poroso que está en las epífisis de los huesos (cintura escapular, brazo, antebrazo y mano) e infe-
largos se conoce como esponjoso y puede estar riores (cintura pelviana, muslo, pierna y pie).
relleno de médula. En los huesos cortos e irregu-
lares, que tienen una capa de tejido compacto Además de formar parte del aparato locomotor y
fino, abundan los tejidos óseos esponjosos. En facilitar así la movilidad del cuerpo humano, el sis-
los del cráneo, dos láminas de tejido compacto tema esquelético cumple otras funciones impor-
fino recubren una de tejido esponjoso. tantes como el soporte o sostén del cuerpo, la
protección de los órganos internos, el almacena-
El esqueleto humano se divide en dos: el esque- miento de calcio o la formación de las células san-
leto axial y el esqueleto apendicular. El axial es el guíneas en la médula ósea roja (hematopoyesis).
36
Tema 2. Necesidad de reposo y movimiento
Cráneo
Mandíbula
Escápula Clavícula
Manubrio
Esternón
Húmero
Cresta ilíaca
Pelvis
Radio
Pubis Cúbito
Huesos metacarpianos
Falanges
Isquion
Fémur
Rótula
Peroné Tibia
37
Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
CALAVERA
V. CERVICALES
(C1 a C7)
V. TORÁCICAS
COSTILLAS
(T1 a T12)
V. LUMBARES
Cresta ilíaca
(L1 a L5)
Pelvis
Sacro
Cóccix
Huesos metacarpianos
Falanges
Fémur
Peroné
Tibia
Calcáneo
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Tema 2. Necesidad de reposo y movimiento
Falange proximal
Astrálago
Cuboides
Tercer cuneiforme
Segundo cuneiforme
Primer cuneiforme
Falange media
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Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
La articulación es el punto de contacto de los huesos. Los une, permitiendo además sus movimientos.
Existen tres tipos de articulaciones, según el grado de movimiento que permiten:
• Sinartrosis (sin movimiento): las articulaciones de los huesos del cráneo son un buen ejem-
plo. Se conocen como suturas y cuentan con un tejido conjuntivo fibroso que mantiene los
huesos unidos.
• Anfiartrosis (movimiento ligero o semimóviles): permiten movimiento en un solo eje. Los
huesos están unidos a través de cartílago. Por ejemplo, las costillas con el esternón.
• Diartrosis (movimiento libre): permiten el movimiento en uno, dos o tres ejes. Son
articulaciones de movimiento libre, formadas por cartílago articular, cápsula articular,
ligamentos, cordones o bandas de tejido fibroso, membrana sinovial, cavidad
articular y meniscos y rodetes.
Los músculos están unidos a los huesos gracias a los tendones, tejidos musculares de color
blanco presentes tanto en el origen como en la inserción. Si la zona de inserción no tiene
forma de cordón y es plana y extensa, no se denomina tendón. Se conoce como aponeurosis.
La sangre aporta alimento y oxígeno a los músculos, conectados también al sistema nervioso
a través de ramas sensitivas, que recogen información, y ramas motoras, que controlan la con-
tracción.
40
Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
Dentro de este epígrafe, conoceremos las patologías más frecuentes a nivel óseo, muscular y de las
articulaciones.
»» Patología degenerativa
La osteoporosis es una enfermedad en la que los huesos son mucho más frágiles, como consecuencia
de una disminución de la masa ósea y de los consiguientes cambios estructurales. Puede ser parcial o
de todo el esqueleto y sus principales causas pueden ser un defecto en la osteogénesis o formación
del hueso (por desnutrición o mala alimentación, por situaciones de inmovilidad o por el tratamiento
de pacientes reumáticos o alérgicos) o un aumento de la osteolisis (incremento de la destrucción del
hueso por disminución de hormonas sexuales o por hipertiroidismo).
Aunque puede pasar desapercibida durante algunos años, la osteoporosis tiene unos síntomas caracte-
rísticos: dolores óseos, predisposición a las fracturas y deformidades óseas (especialmente en la espalda).
»» Patología carencial
El raquitismo y la osteomalacia son mani-
festaciones causadas por la falta de
absorción de la vitamina D, que gene-
ra una mala mineralización del hueso.
El raquitismo afecta al desarrollo de los
huesos en niños. La osteomalacia afecta
al hueso que ha concluido su desarrollo
normal en adultos. Estas enfermedades
suelen darse en grupos poblacionales de
bajo nivel socioeconómico por una mala
alimentación. Comparativa entre hueso normal y hueso con raquitismo.
»» Patología infecciosa
La osteomielitis es una infección del hue-
so, muy agresiva y de origen bacteriano.
Puede llegar a través de la sangre o por
una herida, como en los casos de fracturas
abiertas. Se trata con antibióticos intrave-
nosos y locales, y en ocasiones requiere
el raspado quirúrgico de la zona afectada. Radiografía donde se muestra tibia con osteomielitis.
42
Tema 2. Necesidad de reposo y movimiento
»» Patología traumática
Las fracturas se producen por la pérdida de continuidad en los
huesos. Se puede deber a un traumatismo y su síntoma principal
es el dolor y la imposibilidad de efectuar cualquier movimiento.
La zona afectada suele también deformarse, hincharse y contener
una hemorragia interna. En los casos de niños, suelen ser fracturas
incompletas.
Radiografía que muestra un hueso roto.
»» Patología tumoral primaria y secundaria
Los tumores óseos afectan a los huesos y pueden ser benignos
o malignos, que, por desgracia, son mucho más frecuentes. Los
tumores malignos pueden ser primarios o secundarios. Los prima-
rios se dan en pacientes jóvenes, produciendo dolores muy inten-
sos y repentinos. Son extremadamente agresivos, crecen rápido e
invaden los tejidos cercanos. Los secundarios son los causados por
tumores en órganos cercanos al hueso, que se ve invadido, sea por
vía hemática o por vía linfática. Es lo que se conoce por metástasis
y su pronóstico es realmente malo.
43
Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
»» Distrofia muscular
Sin que haya previamente una afectación de la inervación, los músculos padecen una atrofia progresi-
va. Generalmente, es genética y se manifiesta con una primera etapa de contracción (fase espástica) y
luego con una fase de atrofia, en la que se pierde masa y potencia muscular. Puede afectar a músculos
de órganos vitales, como los respiratorios.
»» Miositis
Inflamación del músculo esquelético producida por un conjunto de alteraciones. Los grupos muscula-
res afectados registran dolor y debilidad. Puede verse acompañado de hipersensibilidad cutánea. Es
de origen desconocido, pero suele asociarse a infecciones. Unas veces se cura solo y otras se convier-
te en una patología crónica que puede presentar complicaciones cardíacas o respiratorias.
44
Tema 2. Necesidad de reposo y movimiento
Los ritmos biológicos son la sucesión de fenómenos dentro de un sistema biológico a intervalos más o
menos regulados. Tienen carácter hereditario y, por tanto, están genéticamente determinados. Gran
parte de los ritmos biológicos están sincronizados por factores del entorno (luz-oscuridad), a los que
se denomina sintonizadores. En el cuerpo humano hay muchas funciones biológicas que se desarro-
llan siguiendo un ritmo. Unas de las más conocidas son el sueño y el reposo.
Por su parte, el reposo es un estado en que el ser humano se encuentra en calma, relajado, sin estrés
emocional y libre de ansiedades.
El sueño está condicionado por multitud de factores como la edad (las horas de sueño y su profundi-
dad disminuyen con los años), el ejercicio (favorece el sueño), el estilo de vida (demasiado ejercicio,
alcohol, tabaco, café o chocolate dificultan el sueño), la motivación (el aburrimiento induce a dor-
mir, mientras que lo que distrae mantiene despierto), las enfermedades (las personas con patologías
requieren más horas de sueño para ahorrar energía y aumentar la capacidad de reparación de tejidos),
los medicamentos (los betabloqueantes producen insomnio y pesadillas, por ejemplo), el ambiente o
la dieta.
45
Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
Antes que nada, se debe informar al paciente y a su familia sobre las actividades del procedimiento
que se van a realizar. Así, conviene planificar los periodos de reposo y sueño con el paciente, según
cuáles sean sus necesidades. Es necesario establecer hábitos horarios para conciliar bien el sueño. En
casos de pacientes con dependencia parcial o total, los horarios de acostarse y levantarse se estable-
cen según la dinámica de la unidad y las necesidades del paciente. El periodo mínimo aconsejado de
reposo en cama es de entre seis y ocho horas.
Una vez planificado esto, existen una serie de cuidados que ayu-
dan a favorecer el sueño:
4. Crear un ambiente que haga sentirse al paciente seguro. Por ejemplo, se puede situar la cama
en la posición más baja posible. Se pueden emplear barras laterales si el paciente lo demanda,
dejar a su alcance el timbre y todo lo que pueda necesitar durante la noche (agua, bote de la
orina, etc.) para que no tenga que desplazarse o proporcionar una longitud de tubo (sueros,
drenajes, oxígeno...) suficiente para que el movimiento sea cómodo y seguro.
5. Crear un ambiente relajado, cerrando cortinas o persianas, corriendo la cortina entre pacientes,
apagando la luz de la televisión, cerrando la puerta de la habitación, manteniendo el volumen
de conversación lo más bajo posible...
6. Establecer horarios de siesta después de comer, siempre que esto no afecte al sueño nocturno.
7. Si es posible, el paciente debe hacer algo de ejercicio durante el día para reducir el estrés y
aumentar el cansancio moderado.
46
Tema 2. Necesidad de reposo y movimiento
La mecánica corporal es el conjunto de medidas que se toman para evitar que los sistemas óseos
y musculares sufran lesiones al realizar determinadas actividades profesionales o diarias. Es un uso
correcto del cuerpo en este tipo de situaciones. Así, existen una serie de principios y normas para
evitar estas lesiones y también la fatiga, a corto o largo plazo.
• Colocar bien los pies, que tienen que estar • Si se debe arrastrar la carga, procurar que
apoyados con firmeza al suelo y separa- el trayecto sea liso, regular, tenso y libre
dos ligeramente, adelantando un pie en de obstáculos.
dirección al movimiento. Esto produce
una mejor base de sustentación. Con la carga de pacientes, los principios son
• Para levantar la carga hay que tener en parecidos:
cuenta los siguientes aspectos: • Usar técnicas de levantamiento adecua-
-- Se deben flexionar las piernas mante- das, con la espalda recta y bloqueada con
niendo la espalda recta. Así, se evitan los músculos de la cadera y la espalda. El
lesiones en los discos intervertebrales al esfuerzo se realiza con los músculos de las
ejercer su función de amortiguar. piernas.
-- Hay que procurar utilizar los músculos • Acordar el camino a seguir con el paciente y
más fuertes. Por ejemplo, los muslos liberarlo de cualquier obstáculo. Si es nece-
antes que la espalda. sario, determinar un punto de descanso.
47
Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
Las posiciones de los pacientes encamados son diversas y se clasifican según sean quirúrgicas o no
quirúrgicas. La posición puede responder a un plan de cambios posturales, a una exploración médica,
a facilitar intervenciones quirúrgicas o a pura comodidad.
Aunque puedan usarse también para la aplicación de técnicas quirúrgicas o exploraciones médicas,
estas posiciones se emplean básicamente para una larga estancia en la cama de un paciente, ela-
borando un plan de cambios posturales. Es decir, buscando el mayor confort posible y teniendo en
cuenta un plan de cuidados que evite lesiones por presión en ciertos puntos del cuerpo. Trata de
limitar el tiempo de presión en cada zona del cuerpo para que no se produzcan úlceras o necrosis por
reducción de la circulación sanguínea.
Como máximo, el paciente puede estar dos o tres horas en una misma posición. Este es el tiempo que
se tendrá en cuenta a la hora de elaborar un plan de cambios posturales, que contendrá las siguientes
posiciones:
Así, se puede colocar una almohada debajo del cuello y de los hombros (evita la hiperextensión del
cuello y una presión excesiva en la zona occipital), una almohada pequeña o toalla enrollada en la zona
lumbar (para mantener la curvatura lumbar), una toalla enrollada debajo del borde de las caderas y los
muslos (evita la rotación externa del fémur), una almohada pequeña bajo el hueco poplíteo (disminuye
la tensión en las piernas), otra debajo del tercio inferior de las piernas (evita la presión en los talones)
o un tope en la planta de los pies (los mantiene en posición fisiológica).
48
Tema 2. Necesidad de reposo y movimiento
49
Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
Se colocan almohadas de apoyo y descarga debajo de la cabeza (para alinear el cuello), debajo del
hombro y del brazo superior (para que el tórax no se posicione en prono y el brazo se mantenga
alineado al cuerpo) y debajo de la cadera y de la pierna superior (para que la cadera no descienda a
prono y la pierna superior se mantenga alineada).
Se emplea en:
• Pacientes conscientes, como posición de seguridad.
• La administración de medicamentos vía rectal.
• El sondaje y examen rectal, y como parte de un plan de cambios posturales.
»» Fowler
El paciente está en posición decúbito supino, con los brazos sobre el abdomen o a los lados, enci-
ma de una almohada, y las piernas extendidas y ligeramente flexionadas. La cabecera de la cama se
encuentra elevada a 45° (si se eleva a 90°, la posición se denomina Fowler alta, y si es a 30°, Semi-
fowler).
Las almohadas de apoyo y descarga se colocan debajo de la cabeza (por comodidad), debajo de cada
brazo (un cojín para elevarlos ligeramente reduciendo tensión en los hombros) y debajo de las rodillas
(disminuye la tensión en los músculos de la pierna).
50
Tema 2. Necesidad de reposo y movimiento
Estas posturas se emplean para facilitar el acceso quirúrgico, pero también para exploraciones médi-
cas. Es decir, una vez se ha terminado el proceso exploratorio o quirúrgico, el paciente debe colocarse
en una de las posiciones no quirúrgicas. Son las siguientes:
»» Ginecológica o de litotomía
El paciente parte de un decúbito supino. Si existe una mesa ginecológica, se flexionan las piernas,
separadas, por la cadera y las rodillas, y se sujetan en unos soportes conocidos como estribos con el
fin de mantener la postura. En una cama normal, las piernas se separan y flexionan, apoyando los pies
en la cama.
»» Trendelemburg
El paciente está en decúbito supino, pero con los pies levantados de la cama, quedando en un plano
inclinado con la cabeza en la parte más baja. También puede colocarse al paciente en el extremo
inferior de la cama, con las piernas colgando evitando que se resbale hacia abajo.
Se utiliza:
• En situaciones que requieran una mejor circulación sanguínea en el cerebro, como en los sín-
copes o en las lipotimias.
• Para drenaje de secreciones bronquiales.
• En cirugías de órganos pélvicos y para facilitar el acceso quirúrgico desplazando el paquete
abdominal hacia el tórax.
51
Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
Se emplea:
• Para evitar problemas de reflujo gástrico.
• Como alternativa a la posición Fowler en
pacientes con problemas respiratorios y
en ciertas intervenciones quirúrgicas.
»» Genupectoral o mahometana
El paciente se apoya en sus rodillas con el pecho
sobre la cama y la cabeza ladeada.
»» Roser o proetz
El paciente está en decúbito supino y con la
cabeza colgando del borde superior de la cama. Si hay cabecero y es imposible quitarlo, se hace en
la posición lateral de la cama.
52
Tema 2. Necesidad de reposo y movimiento
• Frenar la cama.
53
Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
Es habitual que un paciente se deslice hacia los pies de la cama. Para volver a colocarlo en una posi-
ción adecuada, hacia el cabecero, hay que seguir el siguiente protocolo:
10. Una vez el paciente está bien coloca- 3. Previa señal, tirar de la entremetida
do, se le pondrá la almohada. hasta colocar al paciente en la posición
adecuada.
11. Acomodar al paciente.
4. Recolocar la almohada.
12. Anotar la técnica de movimiento y sus
posibles incidencias en la pertinente 5. Anotar técnica e incidencias en la hoja
hoja de registro. de registro.
54
Tema 2. Necesidad de reposo y movimiento
El protocolo de esta técnica varía también según si el paciente colabora o no con nosotros. Mover
el paciente hacia el borde de la cama es frecuente y, además, suele ser un movimiento previo a otro:
3. Una pierna del auxiliar debe hacer tope con 2. Pasar los brazos por debajo de las pier-
la cama adelantándola. Evitaría una caída nas, haciendo tracción, hasta el borde
del paciente por un movimiento brusco. de la cama.
4. Pasar los brazos como en la técnica anterior. 3. Pasar los brazos por debajo de la cade-
ra y moverla hacia el borde, alineándo-
5. Pedirle al paciente que apoye los pies la con las piernas.
en la cama.
4. Pasar los brazos por debajo de la
6. A la señal, traer al paciente (con su ayu- espalda, del cuello y de los hombros y
da) hacia nosotros cambiando el peso mover la cabeza y el tórax del paciente
de la pierna adelantada a la de atrás. hacia el borde, alineado.
Hacer el esfuerzo con las piernas, no
con la espalda. Paciente no colaborador y dos auxiliares: es
una técnica de movimiento igual que la anterior,
7. Si hay que separarse del paciente, colocar hacia el cabecero de la cama (con o sin entremeti-
la barandilla de seguridad de la cama. da), pero desplazando al paciente hacia el borde.
El auxiliar hacia el que se mueve el paciente debe
8. Arreglar la cama y anotar técnica e inci- apoyar su rodilla (la de la pierna adelantada) a la
dencias en la hoja de registro. cama, con el fin de evitar cualquier caída.
55
Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
7. Con la espalda recta, adelantar una • Opción B: pegar el brazo inferior al cuerpo
pierna y situar una mano en el hom- para que en la rotación pase por encima.
bro más lejano del paciente y la otra El auxiliar de espaldas al paciente pasa una
detrás de la cadera más lejana. mano bajo su cintura, sujetando el brazo
inferior y tirando en ese momento de él
8. Girar con suavidad el paciente hacia para que quede por detrás. Mientras, el
nosotros, manteniendo nuestra espal- otro auxiliar tira del paciente para hacerlo
da recta y cambiando el peso de la girar, fijándolo en la posición deseada.
pierna próxima a la más alejada.
56
Tema 2. Necesidad de reposo y movimiento
para las piernas del paciente, que 3. Un auxiliar coloca el sillón o silla de
están bajando. ruedas a la altura de la cadera, en el
lado de la cama, mientras el otro vigi-
10. El paciente está sentado en el bor- la al paciente para que no se caiga.
de de la cama, con sus piernas entre El mismo auxiliar levanta el cabecero
las nuestras. Comprobar que no se hasta la posición Fowler.
marea y que se encuentra bien. Si
está mal, hacer el movimiento con- 4. Un auxiliar se sitúa detrás del sillón o
trario para devolverlo a la postura silla de ruedas, sujetando al paciente
anterior. por debajo de las axilas. El otro auxi-
liar, situado en frente, le sujeta por las
11. Ponerle al paciente las zapatillas y la rodillas.
bata.
5. Se pide al paciente que ponga sus
12. Sujetar al paciente por las axilas. Él manos sobre su pecho y los auxiliares
debe agarrarse a nuestros hombros. le bajan, coordinadamente y de for-
ma suave, de la cama al sillón o silla
13. Animarle a ponerse de pie, siempre de ruedas.
con sus piernas dentro de las nuestras.
6. Se arregla la cama, se ponen almoha-
14. Nos giramos hacia la silla con los das en la silla o sillón y se registran
pies, no con el tronco. técnica e incidencias.
16. Cuando el paciente esté alineado con Sea cual sea el grado de colaboración del pacien-
el sillón o la silla de ruedas, pedirle te, deben seguirse los aspectos generales de
que baje lentamente, sin soltarse de las técnicas de movilización y colocar la cama o
nosotros, hasta que se siente. camilla pegada a la del paciente por uno de sus
lados. Se retira la ropa de la cama que cubre al
17. Colocar almohadas para que esté paciente.
cómodo y pueda mantener la
postura. Paciente colaborador: él mismo debe moverse,
con la ayuda de un auxiliar, que se situará al lado
18. Asegurarnos de que el paciente esté de la cama o camilla vacía.
bien.
Paciente no colaborador: se necesitan al menos
19. Arreglar la cama y registrar técnica e dos auxiliares, uno al lado de la cama del pacien-
incidencias en la hoja pertinente. te y otro al de la cama vacía.
Paciente no colaborador: se necesitan como 1. Los dos auxiliares pasan sus brazos
mínimo dos auxiliares, dependiendo del peso y bajo la cadera y los hombros del
el tamaño del paciente. paciente.
57
Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
Para el traslado del paciente a otra unidad del hospital o para la realización de pruebas, este se debe
efectuar en cama, camilla o silla de ruedas. Suele realizarlo el celador, aunque a veces pueda hacerlo
el enfermero o el auxiliar.
Si se traslada al paciente a otra unidad o se le lleva a hacer pruebas, es conveniente tener en cuenta
unas indicaciones generales:
• Comprobar la identidad del paciente y el lugar de destino.
• Verificar la seguridad del paciente (barandillas, sujeciones...).
• Abrigar al paciente.
• Comprobar que los dispositivos eléctricos tengan suficiente batería, que el cartucho de oxíge-
no esté lleno o que haya suficiente suero hasta la vuelta del paciente a la unidad.
• Si se va a hacer una prueba, verificar que se ha hecho la preparación previa del paciente, si así
se requiere.
• Comprobar que el estado del paciente es el adecuado para su traslado.
• Comprobar que llevamos la documentación, como volantes o historia clínica.
• No dejar nunca solo al paciente fuera de su habitación sin que alguien se haya hecho cargo de él.
1. La silla se empuja por atrás, en direc- 1. El cabecero de la cama va por delante
ción a la marcha y sujetándola con fir- y el auxiliar se sitúa a los pies, desde
meza por sus asas. donde empuja.
2. Los brazos del paciente deben estar 2. Para hacer un giro, el cabecero debe
en su regazo, por dentro de los bra- quedarse fijo y se mueve el pie de
zos de la silla. la cama hacia la nueva dirección,
alineándose con ella. Una vez se ha
3. Extremar precauciones en las rampas, hecho, se reemprende la marcha.
yendo siempre en la misma dirección.
3. Vigilar en el momento de cruzar las
4. Al bajar una rampa, bajarle de espal- puertas.
das, con nosotros por delante.
4. Tener el camino despejado.
5. No chocar con las puertas al cruzarlas.
5. Al subir al ascensor, pasa primero el
6. Al entrar en un ascensor, el auxiliar auxiliar, tirando del cabecero de la
entra primero, introduciendo la silla cama. Una vez dentro, el auxiliar vuel-
de espaldas. Si el giro en el ascensor ve a los pies, para salir primero y tirar
es posible, salir también primero y de nuevamente de ellos hasta recolocar
espaldas. la cama en la nueva dirección.
58
Tema 2. Necesidad de reposo y movimiento
3. Nuestra mano más alejada de él coge la suya más alejada, pasando ambas por delante.
59
3.
PACIENTES CON NECESIDADES
ESPECIALES. HIGIENE Y MOVIMIENTO
Tema 3. Pacientes con necesidades especiales. Higiene y movimiento
La quemadura es una lesión inflamatoria con muerte celular. La higiene es fundamental para disminuir
el riesgo de complicaciones. Por ello, hay que respetar normas de asepsia como el uso de guantes,
lavarse las manos antes y después, y llevar mascarilla cuando la quemadura está en exposición.
3.1.1. Higiene
Los lavados de las áreas quemadas se realizan mediante ducha de arrastre y nunca por baño de inmer-
sión (que puede favorecer infecciones). La irrigación debe hacerse interponiendo la mano entre el
agua y la lesión para que caiga mansamente. Mantener una temperatura uniforme, evitando cambios
bruscos.
Tras el lavado, se procederá al secado minucioso con toques, sin frotar nunca la zona lesionada para
no dañar los tejidos.
Hay que realizar una correcta higiene general para evitar la autocontaminación por contacto con
zonas sucias como la perianal, impidiendo el contacto de las heces con zonas quemadas.
Una vez epitelizada la quemadura, hay que usar jabones neutros en el aseo personal, hidratar la piel y
usar filtros solares de alto índice de protección.
3.1.2. Movimiento
Los grandes quemados y los pacientes con lesio-
nes medulares tienen contraindicada su movili-
zación. Para ello hay unas grúas especiales que
permiten elevarlos sin tener que cambiarlos de
posición. Eso permite llevar a cabo el aseo en la
parte posterior del cuerpo y cambiar la ropa de
cama.
61
Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
Hay que inspeccionar periódicamente la piel 4. Colocación del arnés: girar al enfermo en
para detectar signos de irritación o inflamación, decúbito lateral, colocar el arnés, girar el
en particular en los puntos de entrada de clavos, paciente hacia el decúbito contrario y aca-
alambres o tornillos, y proporcionar los cuidados bar de estirar el arnés y la entremetida.
de esos elementos según protocolos del hospital. Luego se pasan las bandas por debajo de
ambas piernas y se entrecruzan, la de la
pierna derecha para colgar en el gancho
3.2.2. Movimiento izquierdo y la de la pierna izquierda en el
gancho derecho.
Mantener inmovilidad prescrita y realizar movi-
mientos autorizados, evitando rotura de la Si el paciente presenta fractura de cadera,
reparación quirúrgica, pérdida de alineación de cuando le tumbamos de lado hay que colo-
fracturas, alteración del callo o pérdida del injer- car una almohada doblada entre las pier-
to en fusión espinal. Si la afección está en una nas, para evitar que las junte.
extremidad, hay que mantenerla elevada para
reducir el edema. 5. Abrir las patas de la grúa para aumentar su
radio de estabilidad.
Ayudar al paciente a realizar cambios postu-
rales frecuentes (cada cuatro horas) con movi- 6. Elevar con suavidad, hasta una altura de
mientos y posturas no contraindicados según la separación entre la cama y el enfermo, y
intervención. trasladarlo.
62
Tema 3. Pacientes con necesidades especiales. Higiene y movimiento
Los pacientes en coma presentan un déficit total de autocuidado. Tienen riesgos de deterioro de la
integridad cutánea, de la movilidad física y de trombosis, de ulceración de la córnea (por ausencia de
parpadeo), de infección de los catéteres y sondas…
Hay que prestarles numerosos cuidados de higiene (general, bucal, cambio frecuente de pañales…) y
de movilización para mantener el tono muscular y evitar anquilosis.
• Baño completo diario en la cama: cara, • Dejar subidas las barandillas de la cama
cuello, brazos, tórax, abdomen, piernas y como prevención de caídas.
genitales.
• Cambios de posición frecuentes para evi-
• Poner crema hidratante en los puntos de tar úlceras por presión.
presión.
• Peinado.
63
Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
64
Tema 3. Pacientes con necesidades especiales. Higiene y movimiento
»» Pacientes inmunodeprimidos
Medidas estrictas de higiene: lavado de manos antes y después,
colocación de bata, guantes, gorro, mascarillas y peucos (calzas)
antes de entrar en la habitación, usar material (incluyendo vajilla)
estéril de uno solo uso…
»» Cuidados en postoperatorio
• Trabajar con la mayor asepsia posible para evitar infecciones.
• Al principio, el paciente tiene restringido el movimiento. Por eso, hay que ayudarle en la higie-
ne y el vestido. Observar que los apósitos y vendajes estén limpios, secos y bien fijados.
»» Cuidados paliativos
Su objetivo es proporcionar confort y soporte a los pacientes en las fases finales de una enfermedad
terminal, libres de dolor y con los síntomas bajo control.
Para el auxiliar de enfermería incluyen el aseo, cambios posturales, ropa limpia, facilitar el descanso y
ayudar en todo lo relacionado con el bienestar del paciente.
65
4.
ÚLCERAS POR PRESIÓN
Tema 4. Úlceras por presión
Las úlceras por presión (UPP) son lesiones de pliegues o rozamientos sobre la superficie
la piel y los tejidos blandos producidas cuando de la piel durante un tiempo prolongado
existe una presión mantenida entre dos planos: produce lesiones por el mismo mecanis-
una prominencia ósea y una superficie externa, mo que el exceso de presión (arrugas en
como la cama. Cursan con una degeneración las sábanas o la ropa, restos de comida…).
rápida de los tejidos como resultado de la dismi- También puede producirse por moviliza-
nución de oxígeno y de nutrientes esenciales en ciones inadecuadas del paciente, al arras-
la zona. Una vez que se rompe la piel, se forma trarlo en una cama o silla.
una úlcera que puede ser dolorosa y que cicatriza • Presión + fricción: posiciones como la
con gran lentitud. Estas circunstancias favorecen de Fowler producen que el paciente se
la invasión de microorganismos. Cuando la UPP resbale en la cama.
se infecta, el trastorno también puede afectar al
• Humedad: predispone, junto con el calor
músculo y al hueso.
del propio organismo, a la maceración de
los tejidos. Puede ser consecuencia de un
Los grupos de pacientes con mayor riesgo de
exceso de sudor, la orina o las heces del
sufrir una UPP son los enfermos encamados de
paciente, el secado defectuoso al realizar el
larga duración (comatosos, neurológicos, geriá-
aseo, los fluidos procedentes de drenajes...
tricos…) y los que presentan trastornos del apa-
rato locomotor que precisan tracciones o férulas • Otras causas: agentes farmacológicos
que rozan la piel, al igual que las sondas y los con acción inmunosupresora (corticoides,
catéteres. radioterapia…).
Se calcula que el 95% de las UPP son evitables 4.1.2. Factores intrínsecos
con las medidas de prevención adecuadas. Así, la
incidencia de úlceras por presión es un indicador • Causas vasculares: una situación de
muy vinculante a la calidad de los cuidados de shock baja gravemente la presión arterial
enfermería. y el organismo, para mantener el riego
de los órganos vitales, disminuye el flu-
jo sanguíneo de las zonas periféricas. En
4.1. CAUSAS Y FACTORES DE enfermedades como la arterioesclerosis,
PREDISPOSICIÓN el riego se reduce por las resistencias vas-
culares al paso de la sangre.
• Causas nerviosas: los pacientes con
En el siguiente apartado conoceremos las causas
parálisis o problemas en la motilidad tien-
y los factores predisponentes para la aparición
den a permanecer en la misma posición
de úlceras por presión. Existen factores extrínse-
durante tiempos prolongados. Algunas
cos e intrínsecos.
enfermedades neurológicas presentan
espasticidad (músculos permanentemen-
4.1.1. Factores extrínsecos te contraídos), afectando a la posición e
intensificando la presión sobre las articu-
laciones deformadas. La pérdida de sen-
• Exceso de presión: en una situación nor-
sibilidad hace que el paciente tenga una
mal, los capilares sanguíneos soportan
menor percepción del dolor y la presión,
una presión de entre 16 y 33 milímetros
favoreciendo la aparición de una UPP.
de mercurio (mmHg). La piel es capaz de
aguantar hasta 70 mmHg, pero solo duran- • Causas endocrinas o metabólicas: en
te cortos periodos de tiempo. La presión general, retrasan la cicatrización de una
alta reduce el flujo sanguíneo, provocando úlcera. Sobrepeso, deshidratación, defi-
primero inflamación y después, necrosis. ciencias nutricionales, diabetes, anemia,
estados febriles…
• Fricción: es el roce que se produce entre
la piel y la superficie sobre la que se apo- • Otros: edad avanzada, alteraciones cutá-
ya. Cualquier elemento que produzca neas (tirantez, edemas, sequedad…).
67
Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
68
Tema 4. Úlceras por presión
4.3. LOCALIZACIÓN
Las úlceras por presión pueden encontrarse en cualquier lugar del cuerpo, aunque los más frecuentes
son las zonas de apoyo que coinciden con prominencias óseas, tanto en pacientes encamados como
sentados.
• Paciente en decúbito lateral: borde externo de la oreja, acromion (apófisis del omóplato que
se articula con un extremo de la clavícula), costillas, trocánter mayor (parte alta del fémur-cade-
ra), cóndilos (extremo inferior del fémur-rodilla) y maléolos (partes que sobresalen de la tibia y
del peroné en el inicio del pie-tobillo).
• Paciente en decúbito prono: mejilla y oreja, acromion, senos en la mujer, órganos genitales
en el hombre, rodillas y dedos de los pies.
Existen diferentes escalas de valoración de riesgo de úlceras por presión (EVRUPP), que otorgan un índi-
ce o valor numérico a cada factor. Se aplican tanto en el ingreso del paciente como de forma periódica
durante su estancia a todos aquellos que permanecen en reposo durante más de 10 horas al día.
Una vez hecha la valoración, se realiza un plan de cuidados individualizado con las medidas de pre-
vención necesarias para minimizar los riesgos detectados.
69
Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
PUNTUACIÓN
FACTORES
4 3 2 1
DE RIESGO
Con
HUMEDAD Raramente Ocasionalmente Constantemente
frecuencia
Deambula Deambula
ACTIVIDAD En silla Encamado
mucho alguna vez
»» Clasificación de riesgo
• Alto riesgo: ≤ 12
• Riesgo moderado: ≤ 14
• Bajo riesgo: ≤ 16
70
Tema 4. Úlceras por presión
PUNTUACIÓN
FACTORES
4 3 2 1
DE RIESGO
ESTADO FÍSICO
Bueno Mediano Regular Muy malo
GENERAL
Estuporoso/
ESTADO MENTAL Alerta Apático Confuso
comatoso
Camina con
MOVIMIENTO Total Sentado Encamado
ayuda
Unitaria o
INCONTINENCIA Ninguna Ocasional Urinaria y fecal
fecal
»» Clasificación de riesgo
• Muy alto: 5-9
• Alto: 10-12
• Medio: 13-14
71
Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
Es importante incluir a los pacientes y la familia en la ejecución y seguimiento de los cuidados, así
como garantizar la continuidad de los mismos.
• Cambios posturales: cada dos o tres horas siguiendo una rotación individualizada y progra-
mada, según el riesgo y las características del paciente. Durante la noche, cada cuatro horas
como máximo para facilitar el descanso.
No pueden sentarse los pacientes con lesiones en sacro, isquion o glúteos. Los que tienen
riesgo de desarrollar una UPP no deberían estar sentados en una silla más de dos horas en la
misma posición. Es importante que realicen movilizaciones cada 15 minutos. Se desaconseja el
uso de flotadores o similares.
-- Disminuir la presión de las prominencias óseas (talones, codos…) mediante almohadas, coji-
nes u otras superficies blandas.
-- En la cabeza, no utilizar dispositivos tipo anillo (flotadores, rodetes de algodón...), ya que hay
riesgo de edema.
• Atención sobre las superficies de apoyo: usar materiales que reduzcan y/o alivien la presión
sobre los puntos de apoyo (silicona, viscoelástico, látex…). Los pacientes con riesgo muy alto
de desarrollar una UPP deben ser colocados en colchones de aire alternante u otros sistemas
de redistribución de presión.
• Vigilancia de sondas y catéteres: controlar sus puntos de apoyo y movilizarlos con frecuencia.
• Aplicar cremas hidratantes sin fricción ni masaje brusco, procurando su completa absorción.
• No arrastrar al paciente en los cambios posturales. Para ello, usar una entremetida o sábana.
72
Tema 4. Úlceras por presión
En el aseo:
73
Crédito 03: Bienestar del paciente: necesidades de higiene, reposo y movimiento
4.6. TRATAMIENTO
El auxiliar colabora en todo el proceso de la cura con el equipo de enfermería en función del estadio
de la úlcera preparando el material (utensilios de cura, gasas y apósitos, medicación…), facilitándolo
según se necesita, recogiendo al final y acomodando al paciente según el plan de cambios posturales.
4.6.1. Limpieza
• D
esbridamiento enzimático o químico: cuan-
do se trata de una herida sin exudado, se
aplican productos medicamentosos con esta
acción, protegiendo la piel periulceral.
74
Tema 4. Úlceras por presión
Las infecciones paralizan la cicatrización. Si hay sospecha de infección, realizar un cultivo microbiológi-
co. En caso afirmativo (más de 100.000 microorganismos por gramo de tejido), utilizar un tratamiento
antibiótico local o general.
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Ideas Anotaciones
Resumen
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