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Un hueco bursátil (o gap) es un salto en la cotización del precio de un activo financiero

como consecuencia de no haberse cruzado operaciones en esos precios.

Para entender de forma más sencilla el concepto de hueco, también conocido como gap, es
preciso recordar qué hace que la cotización de un activo se mueva. Los precios de un activo
están en movimiento continuo. Unas veces se mueven hacia arriba, otras veces hacia abajo
y otras veces apenas se mueven.

Para cada precio existen muchos operadores dispuestos a realizar intercambios. Es decir,
hay una serie de personas dispuestas a comprar y una serie de personas dispuestas a vender
a un precio. Por cada persona dispuesta a comprar a un precio, hay otra persona dispuesta a
vender a ese precio. Y, por supuesto, lo mismo ocurre al contrario.

Así, cuando para un determinado precio compradores y vendedores no se ponen de


acuerdo, es decir, cuando no se cruzan órdenes de ningún tipo se originan los huecos. A
continuación, podemos observar una gráfico de velas japonesas en el que se puede apreciar
un hueco de forma muy fácil:

Aunque se pueden identificar más huecos en el gráfico, hemos señalado el más fácil de ver.
Tras una vela alcista, el precio abre otra vela con un salto hacia arriba. A esos precios, en
ese rango de tiempo, nadie ha realizado ninguna operación.

Hemos de destacar que el hecho de que no se crucen operaciones a unos precios en un


determinado momento del tiempo, no quiere decir que no puedan volver a cruzarse
operaciones. De hecho, es más, existen traders que intentan obtener beneficios buscando el
«cierre de un hueco». Forma de operar que veremos más adelante.

Tipos de huecos
Sobre los huecos y su clasificación existe mucha literatura. Ya que, si bien es verdad que es
algo que suele suceder de forma fortuita, muchos analistas los utilizan para interpretar o
predecir movimientos bursátiles. La operativa e interpretación de los huecos corre a cargo
del análisis técnico y, más concretamente, del análisis chartista. Según el autor cada tipo de
hueco tiene diferentes interpretaciones, sin embargo, el consenso general los clasifica en
cuatro tipos:

 Hueco común

Los hueco comunes son huecos poco útiles y suelen cerrarse. Se producen en movimientos
laterales, en valores poco líquidos (en los que es muy frecuente encontrarse huecos) o
cuando una compañía reparte dividendo. En este último caso, el tamaño del hueco es igual
al dividendo repartido por acción.

 Hueco de ruptura
Los huecos de ruptura son los huecos con más utilidad y no suelen cerrarse a corto plazo.
Cuando ocurren, dan inicio a una tendencia nueva. Para muchos traders, suele ser una
buena oportunidad para posicionarse a favor de la nueva tendencia.

 Hueco de continuación

Los hueco de continuación son huecos útiles de cara al análisis, no tanto para la operativa,
aunque suelen cerrarse. Se producen en medio de una tendencia. Algunos traders
aprovechan para aumentar el tamaño de sus posiciones o para operar a favor del cierre del
hueco.

 Hueco de agotamiento

Los huecos de agotamiento son los huecos más importantes después de los de ruptura.
Suelen darse a final de una tendencia prolongada como señal de euforia. Normalmente, van
acompañados de una noticia muy positiva que lleva el valor a máximos.

Además, otra clasificación, también válida, es la que se hace en función del sentido del
hueco. Es decir, si el hueco se produce en sentido alcista o en sentido bajista.

 Hueco alcista: Un hueco alcista se da cuando el precio da un salto hacia arriba. Un


hueco es alcista cuando el precio de apertura de una vela está por encima del precio
de cierre de la vela anterior.

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