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Dominar la tecnología
Actualmente el desarrollo de aplicaciones y herramientas de
comunicación es muy dinámico y aunque muchas de ellas no han sido
creadas con el propósito específico de usarse académicamente, los
docentes las incluyen cada vez más frecuentemente en sus prácticas
educativas, muchas veces atendiendo a iniciativas de sus estudiantes.
Mantenerse actualizado en el dominio de la tecnología es una
demanda cada vez más difícil de eludir, y aunque este curso no se
enfoca en el desarrollo de competencias tecnológicas, referenciamos
(como sugerencia para estudiarlos en un futuro) algunos
videotutoriales para el manejo de la plataforma LMS Moodle.
En los contenidos de las siguientes dos semanas encontrará los enlaces
para el manejo de herramientas de videoconferencia y de foro.
Promover la Interacción:
La diferencia principal entre moderar actividades presenciales y
virtuales radica en que durante el contacto físico la información que
permite identificar a los estudiantes ingresa en un mismo instante. En
especial, la información percibida por los ojos nos permite establecer
un vínculo inmediato, incluso en grupos numerosos podemos saber
quién está motivado y atento y quién no. De otra parte, el estudiante
al percibir presencialmente al docente, se crea una idea de cómo
interactuar con él, identifica su estilo de enseñanza y ajusta su manera
de proceder académicamente.
En cambio, en los ambientes virtuales, se intercambia otro tipo de
información y no es tan sencillo reconocer a nuestro interlocutor, por
ello es necesario hacer un esfuerzo extra, por ejemplo, para mantener
un registro personalizado de las comunicaciones y saber rápidamente
en qué va cada estudiante y evitar tener que releer todo el historial de
mensajes cada vez que retomamos un caso.
Luego de realizar muchas investigaciones sobre las dinámicas propias
de este tipo de comunicación académica Gilly Salomon (2004),
profesora de la Open University, propone un modelo de cinco etapas
para realizar e-Moderación. En este modelo se hace especial énfasis en
fortalecer los vínculos sociales, pues a partir de esta fortaleza es
posible lograr buenos niveles de participación y aprendizaje.
Lograr una buena implementación de la e-Moderación requiere, al
igual que en la educación presencial, un proceso de tres etapas:
planeación, ejecución y seguimiento o evaluación. Estudiemos
entonces el modelo de Gilly Salomon (2004), como base para saber
cuáles componentes hay que planear, ejecutar y evaluar.
El modelo tiene en cuenta que hay dos factores a atender, el soporte
técnico y la e-Moderación propiamente dicha. El soporte técnico
generalmente es desempeñado por personal especializado, que se
encarga de matricular, contactar y orientar a los estudiantes frente a
Grafica 1 Modelo de e-Moderación G. Salomon (2004)
1. Acceso y motivación: en esta primera etapa el soporte técnico se encarga de dar
de alta a los usuarios en el sistema y enviarles orientaciones para acceder. El
docente se encarga de dar la bienvenida y animar la participación de los
estudiantes. Es muy importante que el estudiante al ingresar al espacio encuentre
de primero el mensaje de bienvenida del docente.
2. Socialización en línea: el soporte técnico provee las herramientas de
comunicación, pero además gestiona la base de datos con la información de
contacto personal de los estudiantes. Este aspecto es fundamental porque hay
que estar atento a quienes no han podido ingresar y resolver rápidamente las
inconsistencias que se presenten. En este punto el docente establece vínculos con
los estudiantes y crea puentes que comuniquen a la comunidad (social y